Mango (fruta)
l mango es el nombre de las frutas de varias especies de árboles del género
Mangifera, especialmente Mangifera indica y sus numerosos cultivares.
Crece en la Zona Intertropical y es de pulpa carnosa y dulce. Destaca entre
sus principales características su buen sabor.
Dicha pulpa puede ser o no fibrosa, siendo la variedad llamada mango de
hilacha la que mayor cantidad de fibra contiene. Es una fruta normalmente
de color verde en un principio, y amarillo, naranja e incluso rojo-granate
cuando está madura, de sabor medianamente ácido cuando no ha madurado
completamente. De origen asiático, India y Birmania, comprende numerosas
variedades, muchas de ellas obtenidas por injerto. El mango es la fruta
nacional de algunos países como India, Pakistán y Filipinas.
El mango que crece espontáneamente en la zona intertropical americana
(introducido en el siglo XVII a México desde Filipínas y a Brasil en el siglo XIX
por los portugueses), es de color amarillo, más pequeño que las variedades
de injerto, de sabor exquisito y muy dulce, tanto el mango bocao como el de
hilacha. Su época de cosecha presenta un pico o máximo en el mes de mayo
en las latitudes subecuatoriales del hemisferio norte, lo cual resulta
paradójico, ya que en este mes es cuando se inician las lluvias en estas
latitudes, por lo que toda la maduración de los frutos se produce en los
meses de mayor sequía, tal como se indica en el artículo sobre el índice
xerotérmico de Gaussen. También el sabor es muy diferente entre una
variedad y otra. Por ejemplo, una variedad de mango de gran tamaño tiene
un sabor y olor similares al del melocotón en almíbar, aunque con una
textura menos hidratada (mango melocotón).
Parte del origen
El mango está reconocido en la actualidad como uno de los 3 o 4 frutos
tropicales más finos. Ha estado bajo cultivo desde los tiempos prehistóricos.
El árbol de mango ha sido objeto de gran veneración en la India y sus frutos
constituyen un artículo estimado como comestibles a través de los tiempos.
Aparentemente es originario del noroeste de la India y el norte de Burma en
las laderas del Himalaya y posiblemente también de Ceilán. El mango está
distribuido por todo el sureste de Asia y el archipiélago Malayo desde épocas
antiguas. Se le ha descrito en la literatura china del siglo VII como un cultivo
frutal bien conocido en las partes más cálidas de China e Indochina. La
temprana prominencia del mango en su tierra nativa sale a la luz por el hecho
de que Akbar, el gran Moguel de la India del siglo XVI, tenía un huerto
conteniendo 100.000 árboles de mango.
El mundo occidental se relacionó con el mango e inició su actual distribución
mundial con la apertura, por los portugueses, de las rutas marítimas hacia el
Lejano Oriente, al principio del siglo XVI. También se le llevó de Indochina a la
isla de Mindanao y a Sulus por el siglo XIII, no siendo sino hasta fines del siglo
XIV y principio del siglo XV que los viajeros españoles llevaron la fruta desde
la India hasta Manila, en Luzón. Mientras tanto, los portugueses en Goa,
cerca de Bombay, transportaron fruta de mango al sur de África, de ahí hacia
Brasil, alrededor del siglo XVI y unos 40 años después a la Isla de Barbados.
Del mismo modo, los españoles introdujeron este cultivo a sus colonias
tropicales del Continente Americano, por medio del tráfico entre las Filipinas
y la costa oeste de México por los siglos XV y XVI. Jamaica importó sus
primeros mangos de Barbados hacia 1782 y las otras islas de las Indias
Occidentales, al principio del siglo XVII. Los mangos fueron llevados de
México a Hawai, en 1809, y a California, alrededor de 1880, mientras que la
primera plantación permanente en Florida data de 1861.
Explotación económica
Como casi todas las plantas de interés económico cultivadas en la zona
intertropical, donde se adaptan muy bien plantas de cultivo de las latitudes
templadas además de las plantas autóctonas de la misma, puede llegarse
muy fácilmente a la superproducción. De hecho, gran cantidad de mangos se
pierde durante los meses de mayo a julio por falta de mano de obra y, sobre
todo, de mercado. Esta idea no se aplica tanto a los mangos injertos, que
pueden cultivarse en ambientes de riego controlado y comercializarse casi
durante todo el año, por lo que comercialmente tienen siempre un valor
superior al del mango silvestre o "criollo". El mango injerto tiene además la
ventaja de su mayor duración: es un fruto climatérico y puede cosecharse
bastante verde y esperar su maduración durante unos días hasta que
adquiera un color amarillo o rojizo y un delicioso sabor. En cualquier caso, el
problema principal de la producción y comercialización de esta fruta se debe
a que es perecedera, por lo que su consumo no debería distanciarse
demasiado del lugar donde se cosecha. Afortunadamente, su pulpa puede
guardarse congelada bastante tiempo y también sirve para la producción de
zumos.
CLASIFICACIÓN BOTÁNICA.
Mangifera indica L, es el miembro más importante de los Anacardiaceae o
familia del marañón. Tiene algunos parientes bien conocidos, tales como el
marañón (Anacardium occidentale L.), el pistachero (Pistacia vera L), los
mombins (Spondias spp.), y la familiar hiedra venenosa o roble venenoso de
Norteamérica (Rhus toxicodendron L, o R.radicans L.), entre otros.
La mayoría de todas las especies de la familia se caracterizan por los canales
de resina y muchos son famosos por su savia irritante y venenosa, que puede
ocasionar dermatitis severa. El género Mangifera comprende más o menos
50 especies nativas del sureste de Asia o las islas circundantes, excepto una,
M. africana que se encuentra en África. Sólo 3 ó 4 especies del grupo
producen frutas comestibles; sin embargo, muchas de las otras especies
pueden ser de un valor potencial para fines de mejoramiento, puesto que
ellas poseen flores con 5 estambres fértiles.
Tipos y variedades de Mangos
Mango, Magnifera indica / Anacardiaceae
Los cultivares de mango pueden agruparse en 3 grupos principales:
- Cultivares Indios: Tienen un marcado sabor a trementina. La longitud de las
fibras y el color de la piel son muy variables, teniendo algunos la piel muy
roja. La mayoría son dulces con un contenido bajo en ácidos.
- Cultivares Indochinos y Filipinos: Son muy dulces, sin fibra ni sabor a
trementina. La epidermis es verde amarillenta. Carabao es el cultivar más
importante de Filipinas, exportándose en cantidades considerables a Japón.
Bajo el sinónimo de Manila es uno de los más importantes de México.
- Cultivares de Florida: El Haden se desarrolló en Florida como planta de
semilla proveniente de Mulgoba en 1910. Las siguientes características lo han
hecho muy popular en el comercio internacional: color rojo atractivo de la
piel, alta resistencia de la piel, lo cual es muy importante para el transporte a
larga distancia, y un contenido en ácidos relativamente alto. Desde 1940 se
han desarrollado en Florida un grupo de cultivares con unas características
similares al Haden. Algunos ejemplos son "Tommy Atkins", "Zill","Torbet",
"Kensington", "Irwi", "Haden Glen", "Lippens", "Van Dyke". "Sensation",
"Osteen", "Keitt". El orden de maduración en Florida es prácticamente el
mismo en diferentes zonas de cultivo. Dentro de una zona, el periodo de
maduración para la totalidad de los cultivares de mango es
aproximadamente de 3 meses. A continuación se describen algunos de estos
cultivares:
"Haden Glen": Originada de la variedad hindú "Mulgoba", por cruzamiento
natural en Florida. Fruto de tamaño medio a grande, hasta 14 cm de largo y
680 g de peso. Su forma ovalada o redondeada, presenta color amarillo vivo
con manchas púrpuras, con numerosas lenticelas blancas. Base redondeada,
con pedúnculo inserto en la región central, ápice redondeado, con pico
comprimido, cáscara gruesa, lisa, firme, separándose fácilmente de la pulpa.
Pulpa firme, con pocas fibras, finas, principalmente alrededor del hueso de
color amarillo naranja. Hueso oblongo, con muchas fibras y 7 venas salientes
en posición transversal al eje. Semilla monoembriónica.
"Irwin": Originada de una semilla de la variedad "Lippens" plantada en Miami
en 1939. Fruto de forma ovoide, ligeramente comprimido lateralmente.
Tamaño mediano a pequeño, su peso oscila entre los 225 g y 340 g pudiendo
alcanzar los 450 g. Su color básico es rojo claro con manchas rojas más
oscuras. Las lenticelas son pequeñas y blancas. La pulpa tiene poca fibra, con
sabor suave y dulce, medianamente aromático, de excelente calidad.
"Tommy Atkins": Originada de una semilla de progenitores desconocidos en
Florida (USA) en 1922. Fruto de mediano a grande, de 450 a 710 g, ovoide
pero ligeramente oblongo, base redondeada, pedúnculo inserto
oblicuamente en una estrecha cavidad, pequeño pico lateral, punta grande y
redondeada. Color amarillo-anaranjado con manchas que pueden ser rojo
claro a oscuro, con una mancha marrón púrpura sobre el lado expuesto al
sol. Semilla larga y ligeramente curva con fibras largas y finas. Árbol muy alto
y ramas fuertes. Frutos agrupados en forma abundante.
"Zill": Originada de una planta proveniente de una semilla de "Haden",
plantada en Florida en 1922. Fruto de forma acorazonada, algo comprimida
lateralmente, pequeño, de un peso de 250-300 g, color rosado rojizo sobre
un fondo amarillo. Base redondeada, pedúnculo insertado en forma
ligeramente oblicua, la cáscara no se separa fácilmente de la pulpa amarilla
clara, firme, sin fibras, presenta un ligero sabor a trementina. La semilla es
pequeña, presentando una pequeña franja de fibras pequeñas y finas en la
región ventral. Árbol vigoroso de copa abierta.
"Keitt": Originada en Miami en 1939 de una semilla de "Brooks". Frutos de
forma ovalada de medianos a grandes, con pesos que oscilan los 450 y 650 g,
de unos 112 a 118 mm de largo, base redondeada, pedúnculo inserto en
forma ligeramente oblicua, color amarillo con mancha roja, muy atractivo, la
cáscara no se separa fácilmente de la pulpa, que es de color amarillo. Sin
fibras, excepto en la parte cercana a la semilla. Semilla pequeña,
monoembriónica.
"Sensation": Originada de una semilla de procedencia desconocida y plantada
en Miami. Frutos de tamaño mediano a pequeño, de unos 105 mm de largo,
peso de 280 g a 340 g, aunque ciertos frutos pueden pesar 500 g. Forma
ovalada, color amarillo fuerte con manchas rojizas, numerosas lenticelas
pequeñas y amarillas. Semilla pequeña, monoembriónica.
"Lippens": Originada de una semilla de "Haden" en 1931 en Florida. Fruto de
tamaño medio a grande, de 11-12 cm de largo y de 340 a 550 g de peso. Sin
fibra, de forma ovalada, levemente achatada, de color amarillo intenso, con
un lado rojizo brillante, pocas lenticelas amarillas.
"Van Dyke": Seleccionada en 1940 en Florida de buena productividad,
moderada resistencia a la antracnosis. Fruto muy rojo y atractivo, pulpa de
óptima calidad, sin fibra, presentando el defecto del pequeño tamaño del
fruto que oscila los 280 y 400 g.
Actualmente, se continúa investigando para el desarrollo de nuevas
variedades de mango como "Nomi", "Tango", "Shelly", etc. cultivares éstos
mejor adaptados a las condiciones de cada área reproductiva donde se han
desarrollado.
Como variedades más importantes a partir de las cuales se han desarrollado
los cultivares más importantes se citan las siguientes:
"Mulgoba": Fruto de tamaño mediano, de forma óvalo-globosa, de 9-12 cm
de longitud y 7-9 cm de anchura. De color amarillo fuerte, a veces rojo en el
ápice y junto al pedúnculo, con lunares superficiales de pequeño tamaño y
color amarillo pálido. La cáscara es gruesa, fuerte y tenaz. La carne, de color
amarillo naranja, es suave, sin fibras, de aroma y sabor agradables, pero un
poco picante. Semillas largas. Es excelente en climas secos; se cultiva en
Florida, y también se ha ensayado en Israel e Islas Canarias.
"Amini": De pequeño tamaño y forma arriñonada. Su peso se halla
comprendido entre 170-200 g, y sus dimensiones oscilan entre 7-9 cm de
largo y 7-8 cm de ancho. De color verde amarillento, escarlata en la base y
con lunares de color amarillo pálido; la cáscara es gruesa y de superficie lisa.
La pulpa es de excelente calidad, sin fibras, color rojizo pálido y muy jugosa.
Semilla delgada u oval. También se cultiva en las Islas Canarias.
"Pairi": De tamaño regular, forma ovalada, de 200-300 g de peso; 7-9 cm de
largo y 7-8 cm de ancho. Color verde-amarillento, escarlata en la base y
lunares pequeños de color amarillo blancuzco. Cáscara de grosor medio.
Pulpa amarillo naranja, compacta, jugosa, sin fibras, dulce y de perfume
pronunciado. Semilla gruesa. Originario de Florida, se cultiva en Canarias,
Israel y Hawai.
"Camboyana": Tamaño regular, forma alargada, de 10-12 cm de largo y 6-7
cm de ancho. Color verde amarillo con muy pocos lunares. Cáscara blanda y
delgada. Pulpa de buena calidad, sin fibras, de color amarillo intenso, muy
jugosa; sabor aromático, ligeramente ácido. Está muy cultivada en Camboya,
de donde es originaria.
"Sansersha": De gran tamaño, entre 500 g y un kilo, de forma de pera, de 17-
22 cm de longitud y de 9-11 cm de anchura. Color amarillo fuerte, algo rojizo,
con numerosos lunares pequeños de color amarillo grisáceo. Es excelente
fruta para conserva y no tanto para consumir en fresco; su pulpa es carnosa,
regularmente jugosa, sin fibras y algo ácida. La semilla es algo curva y
delgada.
Propiedades nutritivas
El mango es una fruta pulposa y jugosa que es muy rica en magnesio y en
provitaminas A y C. Asimismo, cuenta con altas concentraciones de hidratos
de carbono lo que hace que tenga un valor calórico elevado. Las
proporciones de los nutrientes del mango pueden variar según el tipo y la
cantidad de la fruta, además de otros factores que puedan intervenir en la
modificación de sus nutrientes. La mejor manera de disfrutar del mango y de
sus propiedades nutricionales es comerlo al natural, con unas gotas de lima
para acentuar su sabor. Es importante que escojas los que desprenden buen
olor, se sienten flexibles al tacto, pero que no se hunden con la presión.
Descarta los que tienen zonas negras, muchas manchas o están muy
arrugados. Otro aspecto a tener en cuenta es que las proporciones de los
nutrientes del mango pueden variar según el tipo y la cantidad de la fruta,
además de otros factores que puedan intervenir en la modificación de sus
nutrientes, y según la preparación del mango, puede variar también sus
propiedades y características nutricionales.
Entre las propiedades del mango cabe destacar que tiene los siguientes
nutrientes:
- 0,40 mg. de hierro
- 0,63 g. de proteínas
- 12 mg. de calcio
- 1,70 g. de fibra
- 170 mg. de potasio
- 1,60 mg. de yodo
- 0,12 mg. de zinc
- 12,80 g. de carbohidratos
- 18 mg. de magnesio
- 5 mg. de sodio
- 207,17 ug. de vitamina A
- 0,05 mg. de vitamina B1
- 0,05 mg. de vitamina B2
- 0,66 mg. de vitamina B3
- 0,16 ug. de vitamina B5
- 0,13 mg. de vitamina B6
- 36 ug. de vitamina B9
- 37 mg. de vitamina C
- 1 mg. de vitamina E
- 0,70 ug. de vitamina K
- 13 mg. de fósforo
- 61,13 kcal. de calorías
- 0,45 g. de grasa
- 12,50 g. de azúcar.
Es antioxidante y anticancerígeno. Se trata de un fruto rico en ácidos como el
málico y mirístico, vitamina A y vitamina C, que dotan al organismo, para
luchar contra los radicales libres y posee una efectiva lucha anticancerígena,
gracias a estas vitaminas y a los flavonoides como la quercitina.
Los beneficios del mango para la salud
Degeneración macular asociada a la edad: El antioxidante Zeaxantina que se
encuentra en el mango, filtra los rayos de luz azul dañina, y se cree que
desempeña un papel protector en la salud de los ojos. Diversos estudios han
demostrado que una mayor ingesta de todas las frutas en general, 3 o más
porciones al día, disminuye el riesgo de la degeneración macular asociada a la
edad.
Prevención del asma: Los riesgos para el desarrollo de asma son más bajos
en las personas que consumen una gran cantidad de ciertos nutrientes. Uno
de estos nutrientes es el beta-caroteno, que se encuentra en el mango, la
papaya, los albaricoques, o el brócoli.
Cáncer: Las dietas ricas en beta-caroteno también puede desempeñar un
papel protector contra el cáncer de próstata, según un estudio realizado por
la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard (EEUU) y se ha
demostrado que tiene una relación inversa con el desarrollo de cáncer de
colon.
Salud ósea: Un bajo consumo de vitamina K ha sido asociado con un mayor
riesgo de fractura ósea. Por tanto, el consumo adecuado de vitamina K,
presente también en el mango, es importante para mejorar la absorción de
calcio esencial para nuestros huesos.
Diabetes: Diversos estudios han demostrado que las personas con diabetes
tipo 1 que siguen una dieta alta en fibra tienen niveles de glucosa más bajos,
y las personas con diabetes tipo 2 mejoran sus niveles de azúcar en la sangre,
los lípidos y los niveles de insulina.
Digestión: Debido a su contenido en fibra y agua, el mango ayuda a prevenir
el estreñimiento y a promover la regularidad.
Enfermedades del corazón: La fibra, el potasio y el contenido de vitaminas
que contienen los mangos, ayudan a prevenir enfermedades
cardiovasculares. Muchos estudios han demostrado que un aumento en la
ingesta de potasio y una disminución del sodio son es la combinación
perfecta para reducir el riesgo de enfermedades relacionadas con el corazón.
Piel y pelo: Los mangos también son grandes aliados para el cabello, ya que
contienen vitamina A, un nutriente necesario para la producción del sebo que
mantiene el cabello hidratado. La vitamina A también es necesaria para el
crecimiento de todos los tejidos corporales, incluyendo la piel y el cabello.
¿Cómo se recomienda consumirlo?
Como cualquier fruta, fresco y entero (es decir, no en jugos ni procesado).Si
bien su contenido en azúcares naturales puede llegar a ser superior al de
otras frutas, si se consume en una cantidad moderada es adecuado incluso
para una persona con diabetes. La recomendación, en este caso, es no
consumir más de una pieza en un mismo momento y buscar consumir más
verduras que frutas. Por ejemplo, se recomienda consumir como mínimo,
tres porciones de verdura y dos de fruta al día. Una pieza de mango cuenta
como una porción. Lo que sí se recomienda evitar es combinar el mango con
otras fuentes de azúcar como leche condensada o azúcar, o el mango en
almíbar.
Selección y almacenamiento del mango
Hay que tener presente que variedad de mango estamos adquiriendo porque
los hay rojos, amarillos, verdes, etc. Además, son de diferentes formas y
tamaños, lo que hace más difícil adivinar su estado de maduración.
Generalmente seguiremos estás dos reglas básicas y sencillas para saber la
madurez de la fruta que estamos comprando: Primero observaremos el
aspecto del mango, no debe presentar
CONSERVACIÓN.
La conservación de la fruta después de la recogida en el árbol es aceptable. Si
se coge madura mantiene sus buenas condiciones durante cinco días a
temperatura ambiente (20 ºC-25ºC); cogida en las mismas circunstancias,
aguanta diez días sin estropearse a temperaturas de 8ºC. pero si se recoge en
el momento oportuno, que es cuando aún está verde, pero tienen ya el
tamaño adecuado, con un peso aproximado de 175 a 250 gramos, se
mantienen las buenas cualidades de la fruta hasta veintisiete días, si se
somete a temperaturas de 8 ºC.
La conservación se mejora si los frutos son sometidos a un pre-tratamiento
por calor, a 38ºC, antes de su almacenamiento a bajas temperaturas (5ºC). En
caso contrario desarrollan daños por bajas temperaturas mucho más
rápidamente (Mccollum et al, 1993).
Las técnicas actuales sobre conservación post cosecha de los frutos de mango
tienden al control conjunto de la humedad (>95%), aire caliente (Tª entre 47-
49º C) y tratamientos fungicidas en momentos puntuales para minimizar los
daños causados por plagas y enfermedades (Coates et al, 1993). Algunos
ensayos para controlar los ataques de insectos sobre mangos almacenados
indican que la utilización de insecticidas en atmósferas con bajos niveles de
oxígeno controlan muy bien estas plagas sin modificar las características
organolépticas de los frutos (Yahia and Hernández, 1993), y la aplicación de
sustancias orgánicas sobre los mismos.
Colletotrichum gloeosporioides es el patógeno post cosecha más importante
en el mango. Algunos de los estudios sobre el cultivo del mango se destinan a
minimizar los daños post cosecha causados por este hongo. A este respecto
cabe señalar la utilización del control biológico del patógeno con otros
microorganismos (Pseudomonas fluorescens) (Koomen and Jeffries, 1993).
PARÁMETROS DE CALIDAD DEL FRUTO.
En los últimos años, grandes superficies están siendo plantadas con mango,
sobre todo en Latinoamérica, con vista a abastecer los crecientes mercados
de Europa y Norteamérica. Los aumentos futuros de las producciones
conducirán sin duda a una demanda específica para fruta de alta calidad. La
calidad es el resultado de muchos factores, algunos de los cuales se discuten
a continuación.
Calidad de la pulpa.
Los cultivares de Indochina, Filipinas y la India son generalmente muy dulces
y son consumidos principalmente en países tropicales. Pero es importante
subrayar que entre los cultivares de mejor calidad de pulpa, los hay
tempranos, de media estación y tardíos y algunos de ellos (Irwin, Lippens,
Osteen, Keitt) tienen además buenos resultados de productividad, estabilidad
y no presentan problemáticas limitantes graves.
El fuerte sabor a trementina de casi todos los cultivares de la India desagrada
a algunas personas. En Europa y Norteamérica los cultivares subácidos de
Florida son generalmente preferidos.
El contenido en fibras es muy variable, incluso dentro del mismo grupo de
cultivares de los dos más populares de Florida, Tommy Atkins es muy fibroso
siéndolo Keitt mucho menos. Se trata de una característica comercial
importante, pues el consumidor europeo no gusta de la fibra en los frutos de
mango.
En general se está de acuerdo en que los cultivares con contenido medio en
fibras, como Tommy Atkins, son aceptables. Las tendencias modernas hacia
alimentos fibrosos mantendrán probablemente esta situación, aunque los
cultivares con mucho menos contenido en fibras como Peach, no son
considerados aceptables en el comercio internacional.
El contenido en azúcar es muy importante, pues existe una cierta
relación con la "valoración de la calidad de la pulpa". Sin embargo, no es
determinante de una preferencia por parte del consumidor, pues hay otros
aspectos en la pulpa asimismo de gran importancia como su consistencia, la
intensidad del sabor terpénico, carácter subácido en el sabor de fondo de la
pulpa; así hay cultivares que sin estar entre los más azucarados son muy
apreciados y valorados por el consumidor, tal ocurre con el Osteen y algo
similar ocurre con la pulpa de la variedad mejicana Manzanillo Nuñez.
La mejor relación media peso/pulpa del fruto la ofrece el
cultivar Osteen (88.22%) seguido del Irwin (86.0%). La peor el Keitt (72.63%),
el Sensation (78.14) y el Van Dyke (78.96). En general todos los cultivares
presentan una gran uniformidad en esta medida, con coeficientes de
variación menores del 5%.
La relación volumétrica entre hueso y fruto es una característica
muy importante desde el punto de vista del consumidor, pues la menor
relación volumétrica determina mayor cantidad de pulpa en el conjunto del
fruto. El cultivar Osteen es quien presenta una relación volumétrica más
favorable, junto a Lippens y al Tolbert. La peor relación desde el punto de
vista del mercado la presenta el Sensation y el Van Dyke.
Algunas características de la piel como la textura, presencia de
lenticelas o de pruína, no parecen relevantes para la elección del
consumidor. Ya que los consumidores muestran su preferencia tanto por
frutos de piel rugosa (Osteen) como de piel mayormente lisa (Lippens,
Irwin).Jelly seed, soft nose, spongy tissue, internal fruti breakdown y black
tip, son nombres que se dan al mismo o diferentes trastornos que afectan a
la pulpa del mango. La fruta se sobremadura en el extremo penducular o en
su opuesto. Sólo en casos severos aparecen síntomas externos. Las causas de
estos desórdenes fisiológicos son aún desconocidas. El desequilibrio entre el
calcio, potasio, magnesio y nitrógeno podría ser la causa principal
(Wainwright et al, 1989). Los trastornos no aparecen en frutos cogidos antes
de la etapa maduro verdosa. Desafortunadamente, el sabor también se ve
afectado negativamente por la recogida temprana.
El científico, la patente y los mangos: Cómo se triplicó la producción de
mango en Filipinas
Antecedentes
El mango es una de las frutas tropicales más apreciadas del mundo. Esta fruta
originaria del subcontinente indio se cultiva hoy en día en muchas regiones
tropicales y subtropicales. Su sabor peculiar y su elevado contenido de
vitaminas y minerales hacen que sea muy popular entre los consumidores de
todo el mundo.
Sin embargo, la fructificación del mango es muy irregular, lo que hace que su
cultivo sea todo un desafío: es muy estacional y solo da frutos durante un
mes al año. Además, a veces los mangos son muy generosos un año, y al
siguiente no dan ningún fruto. A principios de los 70, el horticultor filipino Dr.
Ramón Barba se propuso superar estos obstáculos y conseguir que el cultivo
del mango fuera más viable desde el punto de vista comercial y comenzó a
investigar a fin de desarrollar una solución química para inducir la floración
temprana de los mangos.
Investigación y desarrollo
Estructura del nitrato de potasio (KNO3)
El Dr. Barba, que es licenciado en multiplicación vegetal y en horticultura,
mostraba mucho interés por los problemas propios del cultivo del mango
desde su época de estudiante universitario, y recuerda que “en Filipinas ya
teníamos una práctica propia del archipiélago que consistía en utilizar el
humo para provocar la floración. Pero era una técnica muy laboriosa, además
de cara. Por eso, en nuestra época de estudiantes todos nos preguntábamos:
¿cómo podemos hacer que florezca el mango?”.
La investigación llevada a cabo en la Universidad de Filipinas le llevó a la
conclusión de que era el etileno del humo lo que provocaba la floración.
Pero, tal como señala el Dr. Barba, “no se puede utilizar etileno sin más; es
un gas, y hubiera sido necesario cubrir el árbol”. Esto le llevó a experimentar
con otros productos químicos. “El nitrato de potasio era una de las últimas
opciones, pero lo incluí porque conocía su relación con el etileno gracias a
otros estudios”, afirma.
Pero su empleo funcionó y los resultados sorprendieron al Dr. Barba. “El
procedimiento es muy sencillo. Basta con tomar un kilo de nitrato de potasio,
diluirlo en 100 litros de agua y rociarlo una vez sobre la planta. En una
semana comienzan a aparecer las yemas. A las dos semanas, éstas ya se
transforman en flores. Es algo... insólito. Jamás había visto una reacción tan
espectacular”. Al rociar los mangos con este líquido, la producción se duplica
o se triplica y además se consigue que den frutos en distintas épocas del año.
El Dr. Barba analizó posteriormente las repercusiones que podía tener en los
mangos este procedimiento mediante el cual se fuerza a los árboles a dar
más frutos de los que producen de forma natural y descubrió que “tras ocho
años de floración inducida, estos árboles son un 15% más pequeños que los
árboles que no han sido tratados. Pero no se producen efectos nocivos y los
mangos no sufren daños. Los árboles que han sido rociados con nitrato de
potasio durante más de 30 años siguen dando frutos”, señala.
Patentes
El Dr. Ramón Barba fue elegido miembro de la Academia Nacional de Ciencia
y Tecnología de Filipinas en 2004.
El entusiasmo que le produjo esta invención revolucionaria que podía ser
utilizada por cualquier agricultor hizo que el Dr. Barba se olvidase de
protegerla. “Olvidé por completo todo lo relativo a la patente; hasta que leí
en el periódico que alguien había patentado el nitrato de potasio para inducir
la floración. Me dije: “¿cómo es posible? Creo haber sido yo quien lo
descubrió; toda la comunidad científica cree que lo descubrí yo. ¡Y ahora va
alguien y lo patenta!”.
Se puso en contacto inmediatamente con la Oficina de Patentes de Filipinas,
en donde le confirmaron que habían recibido una solicitud, pero que la
patente no se había concedido aún. Con la ayuda de un abogado, solicitó una
patente e impugnó la otra solicitud. “Afortunadamente, disponía de
documentación que demostraba que la invención era mía. De modo que
iniciamos el proceso y la Oficina me concedió la patente”, recuerda.
No obstante, es plenamente consciente del riesgo al que se expuso por no
proteger su invención de inmediato y explica que “si se hubiera llegado a
conceder la patente, el titular de mi invención sería otra persona. Yo no sería
reconocido como el inventor, por lo que perdería el mérito desde el punto de
vista científico y toda posibilidad de obtener un rendimiento económico”.
Esa situación le permitió darse cuenta de que las patentes sirven para
muchas cosas. “Al patentar, uno protege sus derechos y al mismo tiempo
contribuye a poner a disposición de los demás los beneficios de su invención.
Las patentes fomentan la inspiración, porque aseguran la recompensa y el
reconocimiento. En Filipinas hace falta más información y formación sobre
ese tema. Sería muy positivo que se introdujera una asignatura en las clases
de las facultades de ciencias en la que se abordaran estos aspectos.
Resultados empresariales
El empleo del nitrato de potasio para inducir la floración de los mangos en
Filipinas ha revolucionado el sector. “Se ha dicho que ningún producto
vegetal se ha beneficiado tanto de una única tecnología como el mango de la
introducción del nitrato de potasio. En 1974 era un cultivo prácticamente
desaprovechado, pero ahora es el cultivo principal del país”, explica el Dr.
Barba. “Los efectos se dejan sentir en todos los ámbitos de la producción.
Todo el mundo se ha beneficiado: desde las empresas que venden pesticidas
hasta las personas que recogen la cosecha, pasando por las personas que se
dedican a embalar los mangos, las que llevan la fruta al mercado y las que
elaboran cestas para mangos”, añade.
Hoy en día Filipinas es uno de los diez principales productores de mango a
nivel mundial con una producción aproximada de 900.000 toneladas que
hacen de este cultivo uno de los artículos de exportación más importantes
del país.
El método para inducir la floración del mango ideado por el Dr. Barba se
utiliza ya en muchos países. El trabajo de investigación llevado a cabo por
este científico le ha hecho acreedor a la obtención de numerosos premios de
reconocido prestigio, como por ejemplo el premio IBM-DOST en 1989, el DA-
Khush Achievement Award en 1995, el Best Paper Award de la Crop Science
Society de Filipinas en 1974 y 1981, y el Gamma Sigma Delta Achievement
Award en 1995. Pero lo que más le satisface es ver la incidencia que ha
tenido su invención: “Estoy muy orgulloso de haber inventado la tecnología
del nitrato de potasio. Como científico, creo que una tecnología que tiene
una repercusión positiva en la agricultura justifica toda una vida de
investigación”, afirma.
Una idea creativa, una patente, muchos efectos positivos
La patente ayudó al Dr. Barba a divulgar su invención, ya que la seguridad
que le aportó saber que tenía todos los derechos sobre ella le permitió
compartir su tecnología con la máxima cantidad de personas, pues decidió no
hacer valer la patente. Su ingenio ha contribuido a mejorar la seguridad
alimentaria y ha beneficiado a una gran cantidad de comunidades que viven
del cultivo del mango, sobre todo en los países en desarrollo, que es de
donde provienen la mayoría de los mangos.