Crozier, Michel. “El estado y las regulaciones de la economía”, “El estado y las reguntalciones de lo social”.
Contenido “Estado moderno, estado modesto. Estrategia para el cambio”. Fondo de cultura Económica.
México. 1997. (PP.107-149)
Se ocupa del Capitulo V. El Estado y las regulaciones dela economía, Capitulo VI. El estado y las
regulaciones de lo social, Capitulo VII. El problema de la calidad, Capitulo IX. Otro sistema de evaluación y
Para una política modesta.
Si se quiere lograr la modernización de la sociedad, o mejor dicho su adaptación al mundo en gestación, es
esencial que para empezar logremos transformar de un modo radical esas lógicas.
El estado es un Estado que actúa no para imponer los criterios a priori de sus tecnócratas mediante la orden o
la reglamentación, sino para ayudar a la transformación de las regulaciones profundas de los sistemas
humanos reales.
La clave del desarrollo de largo plazo de una economía reside actualmente mucho más en la respuesta a las
necesidades colectivas que podríamos llamar “inmateriales” por oposición al as infraestructuras materiales:
educación general, educación profesional, investigación y desarrollo y difusión de los conocimientos, sistemas
de financiamiento, sistemas de arreglo de los conflictos.
Liberales y tecnócratas quieran introducir mecanismo de mercado con el fin de evitar los gastos inflacionarios
de lo social. Pero en sistemas sociales dominados por regulaciones de naturaleza muy distinta, esos
mecanismos sólo pueden intervenir muy parcialmente. Si se desea encontrar a un mismo tiempo límites
económicos y equilibrios humanos satisfactorios, es conveniente tratar de corregir y de transformar
regulaciones. Desde ese momento, las soluciones hacía las cuales es posible intentar orientarse no serían de
mercado, sino modelos de autorregulación de las actividades sociales, gracias a los cuales las demandas
cualitativas de los individuos podrían sustituir en parte las reivindicaciones categoriales y reducir las presiones
inflacionarias.
La calidad que hoy buscamos es la calidad para todos, que no descansa ya en la idea de exclusividad y de
barrera sino en la excelencia del servicio, que se medirá por el propio éxito del cliente en el uso que le dé. La
calidad, como motor de la sociedad posindustrial, es tanto la búsqueda de la excelencia del producto técnico
como el desarrollo de una relación más productiva con el cliente.
La conquista de la modernidad que será el paso al Estado modesto sólo podrá lograrse si paralelamente
podemos reducir la propia política a la modestia. Un Estado modesto, respetuoso de los ciudadanos al
servicio de los cuales acepta obrar, presupone en efecto una política modesta que no pretenda ni cambiar la
vida ni tampoco fundar de nuevo la sociedad.
La búsqueda y la aplicación de un ideal absoluto, así fuera el de la justicia, por necesidad implican una
intervención activa en consecuencia una presión jerárquica y la tranquilidad de conciencia de los actores
dominantes.
El Estado sólo es parcialmente responsable de acciones tales como: restaurar el prestigio de la mecánica en
las escuelas, reactivar las sociedades, desarrollar un mercado internacional en las tecnologías. El estado
posee medios de influencia mucho más eficaces por ser mejor aceptados y menos costosos que sus
intervenciones financieras y reglamentarias habituales.
Se ha superado la separación entre lo económico y lo social. Pero para que lo social pueda ser más racional
es preciso que sus regulaciones también sean mejor comprendidas.
José Isaac Garzón Osorio