Etica Del Profesional PDF

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UNIVERSIDAD NACIONAL DEL CALLAO

FACULTAD INGENIERIA INDUSTRIAL Y SISTEMAS


ESCUELA PROFESIONAL DE INGENIERIA INDUSTRIAL

EVALUCION DEL COMPORTAMIENTO ÉTICO DE UN PROFESIONAL

DOCENTE: Mg. CPC Bermeo Noriega, Manuel Francisco


CURSO: Filosofía y Ética
HORARIO: Lunes de 17:10 pm – 20:30 pm
INTEGRANTES:
 Arias Olazabal Priscila

 Rivadeneyra Gutiérrez Kevin

 Rodríguez Flores Richard

 Rodríguez Vicente Sergio Paul

 Zegarra Soto Miguel

 Huallamares Lifonso Omar

LIMA- PERÚ
2018
Introducción
El ser humano no es solo el yo individual, sino también es el yo social. El yo individual
le permite la libertad de elección, el yo social le indica que situación tiene consecuencias
que transcienden la individualidad, es de esta forma que: el acto del ser humano es un
acto consciente, libre y voluntario que en automático se convierte en un acto moral, el
cual nos remite a la responsabilidad, la que nos obliga a responder por lo actuado o no
actuado. De esta manera, se puede responsabilizar a cualquier persona por algún hecho,
ya sea por la mala aplicación de sus conocimientos o por realizar una mala evaluación,
por ausencia, abuso de poder, mala práctica y por dar informaciones tergiversadas. Actuar
éticamente implica, entonces actuar acorde con las normas y reglas de comportamientos
impuestas por la sociedad que nos rodea, por eso la ética vive en cada ser humano sea
cual sea su profesión y su entorno.

La ética profesional, por ende, nace de un trabajo al servicio de los demás. Esta se debe
vivir en cada una de las situaciones afrontadas en nuestra vida (social o laboral),
permitiendo así la búsqueda de la excelencia profesional a través de la honestidad y
responsabilidad. De esta forma entiendo que la ética profesional es parte de la conciencia
individual, que se manifiesta en un comportamiento social responsables acerca de los
deberes de una profesión, después de haber asumido un código de ética conocido o
escrito, mediante un proceso de socialización manteniendo el equilibrio entre lo personal
y social que permita estudiar, aplicar y resolver problemas profesionales con la mayor
competencia y honestidad posibles.

Por eso no está de más hablar de la importancia de la responsabilidad y honestidad que


deben tener todas las personas, especialmente las profesionales, que con su conocimiento
tienen mayor acceso al poder y, por lo tanto, mayor responsabilidad, porque a mayor
conocimientos a mayor responsabilidad y de esto se requiere una sensibilidad de
conciencia profesional y de apego a la verdad, a la honestidad y a la responsabilidad,
porque tienen entre sus manos la tarea enorme de informar y orientar a la sociedad. “El
fin de la ética es indicarnos el camino del bien. Y el bien, es el objeto al que dirigimos
todas nuestras actividades”.

La ética profesional
La ética tiene que ver con el compromiso de ser una buena persona, la cual pasa por la
realización del bien común, es la rama del saber que se ocupa del estudio de las acciones
morales de los individuos y de los grupos así como de las reglas y normas que rigen ese
comportamiento en una sociedad determinada.
Los seres humanos a pesar de nuestros condicionamientos, hacemos opciones
fundamentales, tiene que ver con el bien personal, la auto realización o felicidad para lo
cual participamos una actividad comunitaria que permitió a la revalorización de nuevas
actividades humanas. De lo contrario, nuestra existencia social se pone en peligro, porque
el bien común abarca la realización de las necesidades indispensables para vivir humana
y dignamente (Ruiz, 2010).

Es un fin noble, es decir, el servicio de los demás: el curar, enseñar, informar, la


convivencia justa, cuando el hombre siga o no tales normas al evaluar sus propios actos,
que por ser humano son libres, implica que la ética tiene más relación con la voluntad del
hombre que con la moral.

Un conjunto de conocimientos sistemáticos, metódicos y racionales basados en la


experiencia y fundados en principios, la profesionalidad será una virtud pública en la
medida en que sirva a los intereses comunes de la sociedad y será una virtud privada en
la medida en que ayude al individuo a serlo realmente, a ser autónomo y no esclavo de
sus actividades. No son dos cosas distintas, alguien es buen profesional cuando realiza
con destreza y responsabilidad la finalidad de su actividad (González, 2.012).

La ética en la conciencia moral de todo ser humano les sirve de motor, freno o de dirección
según los casos al momento de actuar, le permite no incurrir en conductas equivocadas
en su comportamiento profesional, ya que la ética no solo regula lo que debe hacer o no,
sino también el cómo debe hacer. El proceder bajo las normas éticas permite resolver
tales situaciones sin choques de conciencias (González, 2.012).

Debido a la evolución que ha sufrido la palabra ética se ha llegado a confundir con la


moral, concepto que deriva del latín y que también significa costumbre. La gran diferencia
radica en que la moral es “la ciencia que enseña la reglas que deben seguirse para hacer
el bien y evitar el mal” o también “el conjunto de normas y hechos que conducen al
hombre hacia la práctica de las buenas costumbre, la honestidad y el cumplimiento del
deber”, en cambio la ética es “aquella parte de la filosofía que trata de la moral y de las
obligaciones del hombre”.

En el contexto actual requiere con urgencia que los profesionales de las empresas y
organizaciones practiquen la responsabilidad social y sean éticos, necesitamos que los
actores de la innovación institucional sea competente, creativos, contextuales,
conceptuales y que comprendan que la solidaridad es la clave para lograr la sostenibilidad.

A partir de esta definición podemos darnos cuenta del sentido de una profesión. En primer
lugar, una profesión busca realizar un bien o finalidad, que es indispensables para la vida
social. Pero su realización exige el cultivo de hábitos o excelencias por parte del sujeto y
de la acción que realiza. Finalmente, la actividad profesional no es una actividad aislada
sino comunitaria, la cual le da una identidad profesional. El logro de dicha finalidad es lo
que le da sentido y legitimidad social a la profesión (Pedrini.2017).

La ética profesional establece cómo deberían ser las condiciones en las que un ser humano
se relacione con su entorno. Es importante que un profesional ofrezca un servicio justo y
que realice una buena labor, es lo que corresponde y que resulta bien para los clientes. La
ética empresarial tiene tres ramas: economicismo limitado (tiene como objetivo
maximizar los beneficios, pero respetando las normas legales), dualismo racionalista
(busca los beneficios pero respetando los principios que establece alguna teoría ética
racionalista) y en tercer lugar está el realismo moderado (entiende que el ser humano
puede identificar las necesidades de su entorno y establecer una relación equitativa con
este medio).

La ética no implica coacción, es decir, que está libre castigo físico, sanciones o multas
como los de la sociedad, por ejemplo el que tendría robar un auto. Lo que si implica los
actos ética y moralmente incorrectos es la responsabilidad. Las personas deben ser
responsables sobre sus propios actos, dado que cada uno de nosotros siempre actúa con
libertad, voluntad e inteligencia, no de manera forzada. También tienen que ver la libertad
y la voluntad con la elección de una carrera, por lo tanto la persona humana debe ser
respetuosa de las obligaciones y derechos que esa profesión conlleva (Ruiz, 2010).

Asimismo, los derechos también son importantes en la ética profesional, ya que si un


profesional sostiene que hay algo que no responde a lo que él considera correcto en su
pensamiento ético, no debería estar bajo ninguna circunstancia obligado a hacerlo.

Un individuo podrá establecer su ética profesional mediante dos puntos fundamentales,


como primer punto valores individuales; los valores individuales son todos aquellos que
poseen una persona a través de sus vivencias, experiencias y su propia voluntad y como
segundo punto código oficial de ética; este tipo de código rige el comportamiento ético
de un profesional.

También podemos hablar de ética empresarial que hace referencia a como una compañía
integra el conjunto de valores (honestidad, respeto, justicia y otros) en sus propias
políticas, prácticas y en la toma de decisión en todos los ámbitos de la empresa.

Se ocupa del estudio de las cuestiones normativas de naturaleza moral que se plantean en
el mundo de los negocios, la gestión empresarial, la organización de una corporación las
conductas en el mercado, las decisiones comerciales, etc. (Vargas, s.f).

Como principios de la ética empresarial podemos mencionar los siguientes puntos:

Conciencien moral; los principios morales de todos ser humano, el bien y el mal, el
sentido de la justicia.
La moral social; viene marcada por el entorno social donde se realice actividades.
Influyen factores como; la religión, la estructura familiar, la cultura, la educación, etc.

Leyes del estado; reglamentos impuestos por un gobierno y basados en la moral de la


nación.

Además la ética empresarial se puede utilizar como una ventaja competitiva; porque
mejora el desempeño financiero, según recientes estudios aquellas empresas que se
estrechan a un código ético logran ser más valoradas, - beneficias a las ventas, a la imagen
y la reputación de la empresa mediante la imagen ética se fortalece la capacidad que tiene
la empresa para atraer a los clientes, a los mejores profesionales, inversionistas de capital
y permite obtener buenos beneficios, - fortalece la lealtad y el compromiso de los
trabajadores con la empresa, los trabajadores que realizan sus actividades en un ambiente
más ético son seis veces más leales, - disminuye la vulnerabilidad hacia grupos de presión,
la asimilación de la ética en sus valores, puede ayudar a una empresa en momento de
crisis para no sufrir gran daño en su credibilidad y reputación, - evita acciones
administrativas y judiciales, una conducta anti ética puede incrementar multas, acciones
judiciales, etc., - evita perdida de negocios, las relaciones comerciales con los clientes o
proveedores que no mantienen una conducta ética pueden perjudicar al negocio, - reduce
conflictos entre los miembros de la organización y supone un componente esencial de la
calidad total (Ruiz, 2010).

Para culminar podemos decir que la ética empresarial es el conjunto de valores, normas
y principios reflejados en la cultura empresarial para alcanzar una mayor sintonía con la
sociedad y permitir una mejor adaptación a todos los entornos en condiciones que supone
respetar los derechos reconocidos por la sociedad.

Principios éticos adoptados por algunas empresas hoy en día; responsabilidad hacia el
ambiente – Intolerancia hacia la discriminación por; raza, color, religión, sexo, edad,
impedimento físico, respetar las necesidades y derechos de los empleados, mantener un
ambiente seguro y saludable, mantener una política contra el hostigamiento sexual
(Angulo, 2017).

Normas de conducta ética para contadores – administradores


Norma es una regla, una guía, un precepto, una ley, un modelo, un principio o un
reglamento; esto es, todo lo que orienta, que direcciona o que da sentido. Toda regla que
postula deberes en orden con nuestra vida de relación social.
El contador público deberá realizar su trabajo cumpliendo eficazmente las disposiciones
profesionales promulgadas por el estado y por el consejo técnico de la contaduría pública
aplicando los procedimientos adecuados debidamente establecidos. Debe tener siempre
presente que la sinceridad, la buena fe y la lealtad para con sus colega son condiciones
básicas para el ejercicio libre y honesto de la profesión y para la convivencia pacífica,
amistosa y cordial de su miembros (Vargas, s.f).

Tiene la obligación de respetar la confidencialidad de la información sobre las actividades


de sus clientes o de quienes le emplean laboralmente, adquirida en la ejecución de sus
servicios profesionales. El deber de guardar el secreto profesional continúa incluso
después de la finalización de sus relaciones con el cliente. El contador público tiene la
obligación de asegurar que el profesional que actúan bajo su control, así como las
personas de la que recaban asesoramiento o asistencia, respetan el secreto profesional.

El contador público deberá cimentar su reputación en la honradez, laboriosidad y


capacidad profesional, observando en sus actos las reglas de éticas más elevadas y
evitando toda publicidad con fines de lucro o auto elogio. No deberá anunciarse o solicitar
trabajo utilizando medios masivos de comunicación u otros que menoscaben la dignidad
del contador público o de la profesión general. No obstante, el profesional no debe utilizar
estas circunstancias para obtener ningún tipo de ventaja profesional (Ruiz, 2010).

El administrador debe evitar cualquier tipo de discusiones personales en el ambiente


laboral, creando las condiciones óptimas dentro del clima organizacional. También tiene
derecho y el deber de protestar en caso de que considere que sus superiores han tomado
una decisión errónea que vaya a perjudicar el funcionamiento de la empresa. Como ente
moderador entre las partes de la empresa no puede tomar actitudes que lo lleven a
parcializarse con algunas de las partes (amistad, relaciones externas).

En caso del manejo financiero, el administrador tiene la obligación tanto moral como
legal de no hacer uso indebido de los fondos de la empresa, así también debe exhibir una
conducta ejemplar, tanto frente a sus subalternos como a sus superiores, dentro y fuera de
la empresa. También existen códigos que están considerados dentro de un marco ético:
La lealtad, legalidad, diligencia y honestidad (González, 2.012).

Del mismo modo el administrador no puede apropiarse de acciones o ideas de sus colegas
o subalternos y darle el crédito que se merece el responsables de las mismas. Al dar un
servicio u ofrecer un producto debe garantizar la satisfacción del cliente.
Comportamiento profesional
El principio de comportamiento profesional impone una obligación a todos los contadores
públicos de cumplir con las leyes y reglamentos relevantes, y evitar cualquier acción que
el contador público conozca o deba conocer, que pueda desacreditar a la profesión. Esto
incluye acciones sobre las que un terceros razonables y bien informado, ponderando todos
los hechos y circunstancias específicas conocidos por el contador público en el momento,
concluyera que afectan de manera adversa la buena reputación de la profesión.

Confiabilidad u confidencialidad
La relación contador usuario es el elemento primordial en la práctica profesional. Esta
relación se basa en la confianza mutua, cuya plataforma fundamental está en una estricta
reserva profesional. Esta reserva implica el compromiso de no revelar ninguna
información confidencial obtenida durante un desempeño profesional, excepto cuando el
cliente lo permita en los siguientes casos; para cumplimiento de una situación ante jueces
de la república, para dar información a la auditoria externa y para la solicitud de
información de una entidad estatal de supervigilancia, junta central de contadores o en los
eventos que la reserva sea levantada por la ley.

Por ende, los contadores profesionales tienen la obligación de respetar la confidencialidad


de las informaciones relacionadas o con los negocios de los clientes o empleadores, dentro
de un marco de servicio profesionales prestados. El deber de confidencialidad permanece
aún después determinada la relación entre el contador profesional, el cliente o el
empleador.

Además, los contadores profesionales tienen la obligación de asegurar que el personal


bajo su control y las personas de quienes se obtiene consejos de asistencias respeten el
principio de confidencialidad (González, 2.012).

Competencia
Exige que la persona tenga los conocimientos, destrezas y actitudes requeridos para
prestar un servicio. En la competencia radica la autoridad del profesional y su valor social
(aptitud acreditada en su quehacer). La competencia expresa la síntesis de saber y hacer;
de doctrina y capacidad; de conocimiento y acción eficiente. No solo se refiere aún saber
teórico, sino aún saber práctico, o a la acción racional práctica; no es tanto un saber
objetivo, sino la realización de ese saber teórico en una subjetividad, desde la experiencia
y con un conocimiento suficiente, distinto y actualizado de la finalidad, describe a la
habilidad o capacidad para resolver los problemas propios del trabajo.
El servicio profesional competente requiere el ejercicio de un juicio sólido al aplicar el
conocimiento y habilidad profesionales en el desempeño de dicho servicio. La
competencia profesional puede dividirse en dos fases:

El mantenimiento de la competencia profesional requiere atención continua y el


conocimiento de los avances técnicos, profesionales y de negocios. El desarrollo
profesional continuo le permite al contador público desarrollar y mantener sus
capacidades para desempeñarse de manera competente dentro del entorno profesional
(Angulo, 2017).

Competencia Física
Muchas veces, algunos profesionales fracasan en sus respectivas profesiones porque son
físicamente incapaces, no tienen la aptitud necesaria para llevar sus labores profesionales
aún feliz término. El principio de la competencia física es la higiene mental y física. La
higiene mental se referirá al conjunto de disposiciones necesarias para aceptar el propio
trabajo y gozar del mismo, mientras que la higiene física se refiere al mantenimiento de
la incapacidad física para desempeñar a cabalidad un trabajo.

Competencia moral
La competencia moral se refiere a la necesidad que el profesional tiene de referirse a un
bien, al bien; esa necesidad se refleja en la vida según la virtud, en la vida virtuosa, la
cual se manifiesta en el sentimiento de rechazo a todo lo que aparezca como oscuro,
injusto o dudoso, a la vez que en la conciencia de la dignidad de la profesión. Se distingue
dos virtudes profesionales: la justicia y la caridad. La primera se vuelve un imperativo
para el profesional en la medida en que es depositado de un bien social (de cultura) del
que debe dar cuenta a la sociedad en que vive. La segunda, se refiere a la necesidad de
que el profesional se dedique a un servicio desinteresado de todos los demás miembros
de su sociedad, aunque, en un sentido de justicia no esté obligado a ello (Angulo, 2017).

Integridad
La integridad implica no solamente honestidad sino también relacionarse justa y
verazmente. El principio de objetividad impone a todos los contadores profesionales la
obligación de ser veraces, intelectualmente honestos y libres de conflictos de interés.

El contador público deberá mantener incólume su integridad moral cualquiera que sea
el campo de su integridad profesional por lo tanto se espera de él rectitud, probidad,
honestidad, dignidad y sinceridad en cualquier circunstancia y otros principios como
veracidad, lealtad, justicia y equidad.

La integridad que debe mantener el contador público en todas actuaciones y de manera


especial cuando ejerce la auditoria, se refiere al elemento de su carácter, que se plasma
en la firma de sus principios morales, su rectitud y honradez. En el mismo principio de
integridad no se hace diferencia el campo de acción en el cual se desempeña, es más la
integridad no solo debe estar circunscrita al ejercicio profesional, sino a su vida personal.

Objetividad
Es la imparcialidad y actuación sin perjuicio. Este principio se aplica especialmente
cuando se trata de certificar, dictaminar u opinar sobre los estados financieros de
cualquier entidad y está ligado íntimamente con el principio de independencia. La
objetividad representa para los auditores, la capacidad esta para mantener una actitud
imparcial, libre de todo sesgo, para tratar todo los asuntos que queden bajo su análisis y
estudios. Este principio ético implica que el auditor en manera alguna subordinara su
criterio a la opinión de sus clientes.

Los contadores profesionales están expuestos a situaciones que envuelven la posibilidad


de que sobre ellos se ejerzan presiones. Esas presiones pueden menoscabar la objetividad.

Es impracticable definir y prescribir todas esas situaciones en las que pueden existir esas
presiones posibles. Debe prevalecer la razonabilidad en el establecimiento de estándares
para identificar las relaciones que probablemente, o puedan parecerlo, lesionen la
objetividad de un contador profesional.

Deben evitarse las relaciones que generen prejuicio, sesgo o influencia de otros para
menoscabar la objetividad. Los contadores profesionales tiene la obligación de asegurar
que el personal o los servicios profesionales contratados se adhieren al principio de
objetividad.

Independencia
En el ejercicio profesional, el contador público deberá tener y demostrar absoluta
independencia mental y de criterio con respecto a cualquier interés que pudiere
considerarse incompatible con los principios de integridad y objetividad, con respecto a
los cuales la independencia, por la característica peculiar de la profesión contable, debe
considerarse esencial y concomitante.
Ejemplo; el contador público no podrá realizar auditorías en empresas o entidades en la
que haya trabajado como contador o ejecutivo con influencias sobre contabilidad, hasta
después de dos años de su retiro de las mismas.

Responsabilidad
Sin perjuicio de reconocer que la responsabilidad, como principio de la ética profesional,
se encuentra implícitamente comprendida en todas y cada una de las normas de ética y
regla de conducta del contador público, es conveniente y justificada su mención expresa
como principio para todos los niveles de la actividad contables.

En efecto, de ella fluye la necesidad de la sanción, cuyo reconocimiento en normas de


ética, promueve la confianza de los usuarios de los servicios del contador público,
compromete indiscutiblemente la capacidad calificada, requerida por el bien común de la
profesión.

El sentimiento de responsabilidad es un sentimiento personal que compromete a cada


persona y le hace comprender que no puede simplemente abandonarse a sus
conveniencias individuales. Todo individuo o persona lleva una responsabilidad sea
personal o para otra, pero esta la lleva a cabo dependiendo de sus criterios (Ruiz, 2010).

Respeto entre colegas


El contador público deberá tener siempre presente que la sinceridad la buena fe y la lealtad
para con sus colegas son condiciones básicas para el ejercicio libre y honesto de la
profesión y para convivencia pacífica, amistosa y cordial de sus miembros.

Solidaridad
La relaciones de respeto y colaboración que se establecen entre los miembros de la misma
profesión, con el fin de ayudarse y evitar perjudicarse unos a otros.

La solidaridad es uno de los valores éticos, se define como la capacidad del ser humano
para sentir empatía por otra persona y ayudarla en los momentos difíciles, es un
sentimiento de unidad en el que se buscan metas e intereses comunes.

En las sociedades modernas, cada persona se desarrolla de manera personal, pero para
sobrevivir en sociedad se necesita de otras personas, y es ahí donde la solidaridad hace su
trabajo, permitiendo que el colectivo una fuerzas en pro de un bien común (González,
2.012).

Observancia de las disposiciones normativas


El contador público deberá realizar su trabajo cumpliendo eficazmente las disposiciones
profesionales promulgadas por el estado o por el consejo técnico de la contaduría pública
aplicando los procedimientos adecuados debidamente establecidos. Además deberá
observar las recomendaciones recibidas de sus clientes o de los funcionarios competentes
del ente que requiere sus servicio, siempre que éstos sean compatibles con los principios
de integridad, objetividad e independencia, así como con los demás principios y normas
de éticas y reglas formales de conducta y actuación aplicables en las circunstancias.

Conflicto ético
En circunstancia donde el contador público en la empresa crea que el comportamiento
poco ético o las acciones de terceros podrían continuar ocurriendo dentro de la
organización empleadora, el contador público en la empresa debe considerar la necesidad
de solicitar consejo legal. En esas situaciones extremas, donde todas las salvaguardas
disponibles han sido agotadas y no es posible reducir las amenazas a un nivel aceptables,
un contador público en la empresa podría llegar a la conclusión de que sería apropiado
renunciar a la organización empleadora.

El contador público de una empresa tiene la obligación profesional de obedecer los


principios fundamentales. Sin embargo, a veces puede ocurrir que sus responsabilidades
con la organización empleadora y las obligaciones profesionales de obedecer los
principios fundamentales estén en conflicto.

Normalmente, un contador público en la empresa debe respaldar los objetivos legítimos


y éticos establecidos por el empleador, y las reglas y procedimientos a favor de esos
objetivos. Sin embargo, cuando el acatamiento de los principios fundamentales sea
amenazado, el contador público en la empresa debe considerar una respuesta a tales
circunstancias. Los contadores públicos en las empresas podrían tener interés financieros
de miembros familiares cercanos, que podrían, en ciertas circunstancias, aumentar las
amenazas al cumplimiento de los principios fundamentales. Por ejemplo, amenaza de
interés personal a la objetividad o a la confidencialidad que podrían crearse a través de la
existencia de un motivo y oportunidad para manipular información sobre los precios para
obtener ganancias financieras.
En cualquier profesión que merezca ese nombre hay dos polos complementarios: lo que
mueve al profesional y lo que legítimamente demanda la comunidad a los profesionales.
La ética de la profesión orienta los comportamientos de la personas en ambos aspectos,
pero no ha de ser moralina ni adorno, sino más bien la entraña misma de la actividad
profesional como compromiso de la persona con su propio proyecto vital y como la base
de la confianza que la sociedad deposita en el trabajo de quienes son considerados
profesionales, esto es, ciudadanos con una especial responsabilidad en la
comunidad (Vargas, s.f).

Conclusión
Para concluir, queremos mencionar la importancia de la ética profesional; tanto teórica
como práctica, la ética profesional analiza los principios fundamentales de la moral y de
los deberes de la profesión. Los conocimientos morales e intelectuales que nos provee la
ética como dogma de comportamiento, es la clave que nos llevará al éxito. Entendemos
que la ética se ocupa de las normas de la conducta humana, si aplicamos esta definición
al término "ética profesional” nos daremos cuenta de que se refiere al conjunto de normas
que rigen a quienes se consideran ser profesionales, aunque no siempre sean cumplidas
por éstos.

Se deben poner en práctica los principios éticos que establezcan los parámetros y reglas
que describan el comportamiento que una persona puede o no exhibir en determinado
momento. No es difícil poner estos principios en práctica, pero el omitirlo redundará en
perjuicio propio y en el de las personas con quienes se interviene o se interactúa.

Conocimos que algunos de los deberes del profesional son la solidaridad, estar de acuerdo
con la moral establecida, el secreto profesional, (este le dice al profesional que no tiene
derecho de divulgar información que le fue confiada para poder llevar a cabo su labor),
etc. También algunos de sus derechos; tales como: la elección de la profesión es
completamente libre, el beneficio propio, la capacitación, etc.

Honestidad; aprender a conocer sus debilidades y limitaciones y dedicarse a tratar de


superarlas, solicitando el consejo de sus compañeros de mayor experiencias.

Integridad; defender sus creencias y valores, rechazando la hipocresía u la


inescrupulosidad y no adoptar ni defender la filosofía de que el fin justifica los medios,
echando a un lado sus principios.

Por último el ser humano es responsable de actuar inteligente y libremente y es el único


que puede responder por la bondad o malicias de sus actos ante su propia conciencia.
Referencias
Angulo Parra, Y. (2018). Filosofía Ética y Valores. Recuperado
de http://www.tabiblion.com/liber/Filosofia/Eticayvalores.pdf : http://www.tabiblion.co
m
Pedrini, M.C (2012). Ética Profesional y Conflictos. Recuperado
de https://es.slideshare.net/MaraCristinaPedrini/etica-profesional-y-conflictos-2-power:
https://es.slideshare.net/
Prezi (2013). Ética Confiabilidad. Recuperado de https://prezi.com/b2hfsn91lnyx/etica-
confiabilidad/ : https://prezi.com
Ruiz V, J.W. (2010). Módulo de ética profesional. Recuperado
de http://www.fcevir.ueb.edu.ec/fce/documentacion/modulos/ue/MODULO_DE_ETIC
A_PROFESIONAL.pdf
Vargas, G. (s.f). El contribuyente, ética para contadores y sus amenazas. Recuperado
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