Cadena de Valor
Cadena de Valor
Cadena de Valor
CADENA DE VALOR
SEMESTRE : 2019- l
CUSCO – PERÚ
CADENA DE VALOR
La cadena de valor de una empresa implica analizar ésta sobre la base de las distintas
actividades de la misma, valorando el input, o aumento de valor, y el coste, que cada una
de ellas supone, respecto al producto o servicio que constituye el resultado de la actividad
de la empresa. Por ello, también puede hacerse referencia a la cadena de valor de un
producto. Se trata de un concepto acuñado por Michael Porter que considera a las
principales actividades de una empresa como los eslabones de una cadena de actividades
que van añadiendo valor al producto a medida que éste pasa por cada una de ellas.
(Emprende, 2009).
La cadena de valor despliega el valor total, y consiste en las actividades de valor y del
margen.
Las actividades de valor son los tabiques discretos de la ventaja competitiva. Como cada
actividad es desempeñada en combinación con su economía, determinará si una empresa
tiene un costo alto o bajo en relación con sus competidores. Cómo se desempeña cada
actividad de valor también determinará la contribución a las necesidades del comprador
y por lo mismo, a la diferenciación. El comparar las cadenas de valor de los competidores
expone diferencias que determinan la ventaja competitiva. La cadena de valor en
términos estratégicos es una poderosa herramienta que debe ser usada por cualquier
estratega.
Para identificar y entender la cadena de valor en la empresa, se debe seguir los siguientes
pasos:
Para cada actividad principal, determinar cuáles son las subactividades específicas crean
valor. Hay tres tipos diferentes de subactividades:
Actividades directas: Crean valor por sí mismas. Por ejemplo, en el marketing y las
ventas de la actividad de una editorial, las subactividades directas incluyen hacer llamadas
de ventas a librerías, la publicidad y la venta en línea.
Actividades indirectas: Permiten que las actividades directas que se ejecuten sin
problemas. Para ventas y marketing del ejemplo de la editorial, las subactividades
indirectas incluyen la gestión de la fuerza de ventas y mantener los registros de clientes.
Para cada una de las actividades de apoyo como la gestión de Recursos Humanos,
Desarrollo Tecnológico y Adquisiciones, hay que determinar las subactividades que crean
valor dentro de cada actividad principal. Por ejemplo, considere cómo la gestión de
recursos humanos agrega valor a la logística de entrada, operaciones, logística de salida,
y así sucesivamente. Como en el paso 1, busque las subactividades directas, indirectas y
de aseguramiento de la calidad.
Encuentra las conexiones entre todas las actividades de valor que ha identificado. Esto
tomará tiempo, pero los vínculos son clave para aumentar la ventaja competitiva en el
marco de la cadena de valor. Por ejemplo, hay un vínculo entre el desarrollo de la fuerza
de ventas (una inversión de recursos humanos) y los volúmenes de ventas. Hay otro
vínculo entre los tiempos de respuesta, y para las llamadas de teléfono de servicio de los
clientes frustrados esperando las entregas.
Revise cada una de las subactividades y enlaces que te ha identificado, y piense en cómo
se puede cambiar o mejorar para maximizar el valor que ofrece a los clientes (Riquelme,
2009).
CONCLUSIONES