Curso Gratis de Coaching
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Qué es el coaching
La palabra "coaching" nace del término inglés "coach", que significa "entrenar". El
coaching es una forma de entrenar a una persona o a un grupo de personas con el
fin de que consigan sus metas de forma efectiva.
Analizar la situación desde diferentes puntos de vista para que sea más fácil
encontrar una solución y así se pueda elegir entre diferentes opciones para
alcanzar los objetivos.
Tener conciencia de la capacidad de elección, de las consecuencias que traen las
elecciones tomadas, otorgando al coachee herramientas para elegir a conciencia y
de forma efectiva.
Establecer objetivos que estén definidos de forma clara y que ayuden a tomar
decisiones y llevar a cabo las acciones.
Llevarlo a la práctica y actuar, ayudando a superar las dificultades.
Medir para comprobar si nos acercamos o nos alejamos del objetivo y, así, tomar
acciones correctivas si fueran necesarias.
Tipos de coaching
En los últimos años el coaching se ha convertido en una profesión y se ha
especializado para muchas áreas. De hecho existen muchos tipos de coaching,
algunos de ellos son:
Favorece que las personas y los equipos mejoren el desempeño de las tareas
que realizan y la productividad.
Hace que las personas logren desarrollar su talento y aprendan a retenerlo,
además de ampliar conocimientos a través de cursos, talleres y seminarios.
Favorece el aprendizaje.
Mejora las relaciones, ya que se tiene la intención de ayudar a crecer y
mejorar.
Ayuda a que el individuo tenga una mejor calidad de vida en el trabajo, se
transmite humildad, responsabilidad, colaboración y confianza, que hace
que las personas experimenten bienestar cuando están encaminados a
conseguir sus objetivos de trabajo.
Fomenta la creatividad, el aprendizaje y el diálogo, y esto hace que la
persona sea más efectiva.
Hace que se consiga un mejor uso de las habilidades y recursos.
Fomenta la iniciativa, se valora la capacidad de aprendizaje, por tanto hace
que las personas respondan rápidamente y de forma efectiva ante
situaciones imprevistas o de emergencia.
Se consigue mayor adaptabilidad, mejor gestión del cambio y flexibilidad.
Los mitos del coaching
Se han creado muchos mitos alrededor del coaching pero vamos a ver qué es
verdadero y qué es falso.
Para aprender hay que tener experiencias, y las experiencias están para equivocarse
y rectificar. Todo el que ha tenido éxito es porque previamente ha fracasado. El
fracaso implica madurar y fortalecernos. Cuando alguien fracasa en algo ya sabe
qué es lo que tiene que cambiar, y ese es el primer paso para el éxito.
Pero no todo es tan fácil, hay que saber gestionar el fracaso, no tenerle miedo
porque si tenemos miedo al fracaso nos paralizamos. Esta paralización nos lleva a
que no actuemos, a que seamos incapaces de continuar nuestro camino y a que
nos aparezcan nuevos miedos, cosa que nos limita bastante porque acabamos sin
creer en nosotros mismos y olvidamos nuestra lucha por superarnos y mejorar. Así
que la única forma de romper esa barrera es lanzándonos.
Hay que tener claro la diferencia entre metas y objetivos, un objetivo concreto
ayuda a que consigamos una meta final. Si lo logramos, tendremos más control
sobre nuestra propia vida y mayor satisfacción y bienestar. Lo que es esencial para
avanzar en la vida es pensar, planificar, decidir y actuar.
Motivación
La motivación es especialmente importante en el proceso de coaching, y la
principal dificultad que se puede presentar está siempre en las propias personas.
Como ya sabemos, el coach no le dice al coachee lo que debe hacer sino que le
ayuda a que él mismo encuentre el camino que tiene que seguir con el apoyo de
diferentes herramientas.
Si falta un motivo y una acción no puede haber coaching, es decir, para que haya
un proceso de coaching tiene que haber motivación.
Autoestima
Según la Real Academia Española, autoestima es una "valoración generalmente
positiva de sí mismo". Nosotros valoramos nuestras propias cualidades, como la
capacidad de relacionarnos con las personas, nuestro físico, nuestro carácter, las
cosas que hemos conseguido y las cosas que tenemos. Es el amor que nos
tenemos hacia nosotros mismos y a los demás, respetar a uno mismo y a los
demás.
Todos debemos buscar una autoestima positiva para tener una vida plena, pero
para ello tenemos que cumplir una serie de factores:
La persona que tenga una alta autoestima sentirá que vale para todo lo que le pase
en la vida, mientras que quien tenga una baja autoestima se sentirá inútil por su
forma de afrontar la vida.
Además, la personas con alta autoestima se respetan a sí mismas y a los demás, las
relaciones personales serán más positivas, y serán más creativas. En general,
tendrán una vida más plena.
Autoconfianza
Adquirir confianza en uno mismo no es algo fácil de lograr, y no se podrá fomentar
hasta que no se ponga en práctica. Es algo que lleva su tiempo y que mientras
construyas esa autoconfianza irás cometiendo errores que serán los que te hagan
aprender.
Existen algunos principios clave sobre la autoconfianza que son de utilidad para
quienes quieren fomentarla:
Creatividad
La creatividad es la facultad de crear, producir, idear, construir e
inventar; y es algo que todos tenemos en mayor o menor medida y que
podemos entrenar y desarrollar. Si nos lo proponemos, podemos ser
creativos en todos los aspectos de la vida, y eso nos dará la oportunidad
de reinventarla.
Para desarrollar la creatividad hay que creer uno mismo, hacer frente a
las dificultades de forma diferente a lo que estamos acostumbrados. Hay
que hacer frente también a los miedos, esto solo frena la creatividad, el
miedo al fracaso, al ridículo, al rechazo, a ser juzgados, etc. solo hacen
que no avancemos en la creatividad.
Vivir de forma creativa hará que veamos las cosas de forma diferente,
cambiemos nuestra actitud, nuestra forma de pensar, nuestros valores y
tendremos nuevos sentimientos, en resumen, vivir de forma creativa
nos renueva y nos reinventa.
Duelo y cambio
Muchas veces se nos presentan cambios en la vida que no elegimos, y muchos de ellos los
tomamos como negativos, como problemas de salud, perder a una ser querido, perder un
puesto de trabajo, una casa, etc. Estas situaciones, en mayor o menor medida, nos provocan
un periodo de duelo, que tiene una serie de fases según la psiquiatra Elizabeth Kübler-Ross:
Hay que destacar que, Según Kübler-Ross, no todas las personas experimentan todas estas
fases, pueden suceder en diferente orden y pasar por la misma fase varias veces.
Temario
derazgo
Según la Real Academia Española, un líder se define como la "persona a la que un
grupo sigue, reconociéndola como jefe u orientadora". El coaching es un estilo de
liderazgo, donde el líder, que es el coach, es quien tiene el deber de transformar a
las personas y poder incorporar un nuevo sistema de aprendizaje a través de un
feedback directo y constante.
En este enlace se pueden ver las normas del código deontológico de ICF: Código
Deontológico ICF
Las normas que forman parte del código deontológico han sido acordadas por un
grupo de profesionales que las consideran como básicas para practicar
correctamente la profesión de coach, siendo éste competente para tomar
decisiones éticas.
Este código ético es independiente del tipo de coaching que se realice (ejecutivo,
personal, empresarial, etc) y de las escuela a la que pertenezca el coach
(ontológico, sistémico, etc).
Coaching y aprendizaje
A veces, en el terreno personal y en el laboral nos encontramos con obstáculos que nos
impiden avanzar y que hacen que no podamos realizar las actividades que queremos llevar
a cabo. A veces, estas barreras son invisibles, es decir, no logramos ver qué es lo que nos
impide avanzar, pero lo que sabemos es que nos está entorpeciendo en el camino. Cuando
nos pasa esto, intentamos evitar esta barrera, pero muchas veces no obtenemos el resultado
esperado y no sabemos qué hacer para conseguir avanzar.
En este caso, una alternativa para seguir avanzando en el camino es pedir ayuda, y aquí
entra en acción la figura del coach, la más indicada para el aprendizaje y cambio del
individuo.
El coach descubre las áreas de dificultad y esos obstáculos que impiden crecer, facilita el
desarrollo de los potenciales del individuo y ayuda a superar esos obstáculos.
El coaching facilita el aprendizaje, promueve el cambio para conseguir las metas
propuestas y facilita el desarrollo de las personas en cuanto a la evolución profesional, la
carrera laboral, la consecución de objetivos, romper las barreras que impiden el crecimiento
personal y tratar de mejorar el nivel de rendimiento.
El coaching no enseña, sino que ayuda a aprender. El coach no dice al coachee lo que tiene
que hacer ni da consejos ni impone sus ideas, sino que hace que el coachee analice el
problema, hace que reflexiona, los estimula a que recapaciten, a que pongan en cuestión las
creencias y a que reflexionen sobre las distintas situaciones buscando nuevos puntos de
vista.
El coaching se basa en que sea la persona la que asuma su responsabilidad por sus acciones
y por los resultados alcanzados. Hay casos en los que conviene romper con el problema en
lugar de resolver el problema, y si además tratamos de ver las cosas desde otro punto de
vista esto hará que desaparezca el problema.
Niveles de aprendizaje
Hemos visto en el capítulo anterior que el coaching es un proceso de aprendizaje,
pero este proceso de aprendizaje tiene tres niveles y unos resultados diferentes
según el nivel.
Por tanto, visto desde esta perspectiva, las herramientas hacen que se alcance la
meta final, ya que el proceso de coaching termina cuando se consigue el objetivo.
Estas herramientas son, por ejemplo, el análisis DAFO, la psicología positiva, la
ontología del lenguaje, las terapias de movimiento corporal y las técnicas de
respiración, entre otras.
Para alcanzar un objetivo es necesaria una voluntad distinta según la fase del proceso,
porque en cada momento se requiere una voluntad diferente y el papel del coach también es
distinto:
Voluntad inicial: tener voluntad cuando se empieza algo, romper con la inercia y la
rutina. Ponerse en marcha hacia nuestro objetivo tomando consciencia de lo que
queremos. Esta voluntad inicial se refuerza con la ayuda del coach, que ayuda a que
el coachee decida si quiere actuar de forma proactiva en la toma de sus decisiones o
si quiere dejar la responsabilidad en una tercera persona.
Voluntad perseverante: cuando se quiere mantener para lograr el objetivo. Se
necesita constancia, empeño y firmeza para conseguir el objetivo y la voluntad se va
fortaleciendo a medida que se repite el esfuerzo para conseguirlo. El coach ayuda a
fortalecer esta voluntad solo con su presencia o con el seguimiento de los planes de
acción en el proceso de coaching.
Voluntad para superar inconvenientes: en el camino pueden surgir inconvenientes y
obstáculos que dificulten el avance y la consecución de nuestro objetivo. Es difícil
seguir cuando nos encontramos con este problema y a veces tiramos la toalla. El
coach ayuda a que estemos más motivados porque hace que veamos los objetivos de
forma más clara.
Voluntad para superar frustraciones: gracias al coach, el coachee elige cómo hacer
frente a las circunstancias y puede desarrollar las ganas de superación y reforzar su
resiliencia.
Voluntad para terminar bien la tarea: terminar lo que se empezó. La voluntad de
logro requiere constancia y trabajo continuo. El papel del coach consiste en aportar
exigencia, eficacia y eficiencia para que el coachee reconozca sus criterios de
acción y la utilidad que tienen.
Para evitar que esto ocurra el coach tiene que comunicar claramente al coachee
el camino que tiene que recorrer en la evolución y el proceso de mejora, que
consta de las siguientes fases:
Confianza: entre coach y coachee debe existir confianza mutua para que
haya progreso y desarrollo.
Compromiso: a la hora de fijar objetivos cada vez más altos hay que
comprometerse con el proceso, y no quedarse solo en una simple relación.
Sinceridad: la sinceridad es la base para una relación madura basada en la
confidencialidad
Escucha activa
La escucha activa es la habilidad para centrarse totalmente en lo que el cliente dice
y entender lo que desea, de forma que escucha sin prejuicios, asegurándose de
que entiende todo lo que le dice.
Mantener una conversación es fácil, a veces interrumpimos una conversación, nos
fijamos en otras cosas a la vez, pero lo difícil es estar escuchando totalmente y
demostrando que estamos escuchando. Esta es la competencia que tiene que tener
un buen coach.
Empatía
La empatía es la habilidad para entender los sentimientos, actitudes y
comportamientos de los demás y comprender qué circunstancias les afectan en
determinadas situaciones. Esto nos permite tener vínculos más fuertes con los
demás.
Todos tenemos nuestra propia visión de las cosas y, a veces, interpretamos las
actuaciones de los demás desde nuestro punto de vista sin pararnos a pensar qué
es lo que motiva a alguien a actuar de esa forma, sacamos conclusiones de forma
precipitada y poco objetiva. Aquí tiene importancia la empatía, que supone pensar
en los demás, prestar más atención a los detalles que aparentemente no tienen
importancia pero puede ser importantes para una persona. Conforme se va
conociendo más a alguien será más fácil identificar sus estados de ánimo y
entender por qué están así y por qué reaccionan así antes determinadas
situaciones.
En el ámbito personal, la empatía influye positivamente en cualquier tipo de
relación favoreciendo el respeto, la sensibilidad, el compromiso y el afecto entre las
personas. en el ámbito profesional, ocurre lo mismo, también favorece el respeto,
el clima laboral, la motivación y el rendimiento en el trabajo. Y es muy importante
para las personas que tienen el rol de líder o que trabajan en equipo.
Para entender a los demás no solo basta con fijarnos en lo que dicen, también
tenemos que fijarnos en el lenguaje corporal. El cuerpo, la postura, la mirada, los
gestos, etc, transmiten mucho más que las palabras.
Pero tener empatía no significa que estemos de acuerdo siempre con la otra
persona en todo lo que hace y lo que dice, sino entenderlos y respetarlos sin
juzgarlos, aunque no estemos de acuerdo con sus actuaciones.
¿Cómo conseguir ser empático? Para mostrarnos empáticos debemos seguir una
serie de reglas como:
Mayéutica y coaching
Existe cierta similitud entre la Mayéutica de Sócrates y el Coaching.
Otro elemento fundamental para lograr una evolución interna que haga que
logremos nuestros objetivos personales y profesionales es la humildad. La vida es
un aprendizaje continuo, y sin humildad no hay aprendizaje.
Desde el punto de vista de los negocios, hay que destacar que las partes
implicadas tienen que tener una relación bilateral aportando lo mejor de cada uno,
y deben cumplir ciertos requisitos indispensables:
Necesidad de la evaluación
La evaluación es la última fase en un proceso de coaching, donde se comprueba el
resultado obtenido y constituye una herramienta para cualquier profesional, ya que es al
final de esta etapa de evaluación cuando podremos señalar los resultados alcanzados.
En las primeras fases se desarrolla un sistema de evaluación para medir logros y crear
estrategias que garanticen el progreso del coachee. Durante cada sesión se motiva al
coachee para que se establezca metas que le ayuden a conseguir los resultados que pretende
alcanzar y, al final de cada sesión, hay que ver si se está satisfecho respecto a la
consecución del objetivo marcado.
Las sesiones de seguimiento no solo garantizan el progreso del coachee sino que
también aportan un sentido de cierre continuo de la relación, y se pueden prolongar durante
un tiempo según las necesidades del coachee hasta que los contenidos queden interiorizados
y adquiera nuevos hábitos que garanticen el mantenimiento de los logros alcanzados.
La evaluación consta, por un lado, de evaluar los cambios y las conductas del
coachee y, por otro, los resultados que llevan a mejorar las habilidades y
competencias para añadir valor.
Hay muchas herramientas que sirven para medir los resultados en el proceso de
coaching pero nos vamos a centrar en el Modelo de Kirkpatrick, que es un
modelo que ha sido aceptado y probado en muchas empresas con bastante éxito,
es un modelo orientado al coaching de empresas.
Un buen coach tiene que reunir una serie de requisitos, tiene que ser comunicativo,
empático, paciente, discreto, respetuoso, que sepa apoyar, en el que se pueda
confiar y que tenga una visión compartida.
Entre las funciones del coach, las más importantes son las de dar feedback de
apoyo, motivar y guiar al cliente en el camino hacia la consecución de sus
objetivos, inspirar liderazgo en el cliente, gestionar el trabajo en equipo y poner en
funcionamiento estrategias innovadoras.
Intentar dirigir: el coach no tiene que decidir el objetivo del coachee, solo debe
guiar, orientar y sugerir pero no determinar. No tiene que decirle al coachee lo que
tiene que hacer.
Comparar a los coachees: la base del coaching es que cada cliente es diferente y se
tiene que tratar a cada uno de forma individual. El hecho de que un modelo haya
tenido éxito para un cliente no quiere decir que para otro también lo tenga.
Ser un juez: el coach no debe reñir ni hacer juicios al cliente porque provocaría
desconfianza y rechazo del lado del coachee.
Interrumpir a menudo: una vez que el coachee termine de hablar y de expresar todo
lo que quería decir es turno de que el coach haga sus preguntas, porque la
interrupción puede impedir que el coachee nos cuente algo importante.
Ser impaciente: el coach debe saber cuándo es el momento adecuado para resolver
problemas y ser paciente a la hora de conseguir los resultados.
Ser indiscreto: el coach no debe revelar nunca la información que tratan en las
sesiones con sus clientes, se trata del secreto profesional y la confidencialidad.
Crear dependencia: la relación entre coach y coachee debe ser estrictamente
profesional y el proceso de coaching debe hacerse durante un tiempo concreto para
un objetivo concreto.
Ser arrogante: el coach tiene que ser honesto si quiere que el proceso tenga éxito.
No reconocer los errores: el coach debe ser humilde y reconocer que puede
equivocarse.
El coachee acude al cocach por voluntad propia porque ha identificado algunos ámbitos en
su vida que quiere mejorar. Cada coachee tiene su personalidad y sus circunstancias,
diferentes a las del resto de clientes, por eso mismo no hay un modelo de comportamiento
concreto a seguir.
En un proceso de coaching los condicionantes sociales son muy importantes, es decir, las
relaciones con la familia, amigos y trabajo. La familia es el principal apoyo y quien más
influye en el bienestar del cliente. Las relaciones con amigos mejoran el desarrollo de
hábitos sociales y estimula la mente. Y, por último, el trabajo da significado a lo que es uno
para sí mismo y para los demás.
Los aspectos cognitivos también juegan un papel importante porque determinan cómo la
persona hace frente a las circunstancias que le rodean a través de la formación de esquemas
mentales y expectativas, que hacen que interpreten de una forma u otra las situaciones de su
vida.
Las características básicas del coachee las podemos resumir en cinco puntos:
Un buen coachee tiene que ser consciente de que tiene algo que tiene que mejorar,
pero no solo basta con eso, sino que además tiene que querer mejorar.
Tiene que tener una mente abierta, ser flexible. Cuanto menos flexible sea en cuanto
a pensamientos más difícil será llevar a cabo los cambios tanto en él mismo como
en el entorno.
Tiene que crear una relación de confianza y sinceridad con su coach que ayudará a
lograr un clima de sintonía que favorezca la generación de cambios y mejoras en el
coachee.
Tiene que tener ilusión con los cambios que están por llegar.
Tiene que ser responsable a la hora del cambio. No vale decir que sí y decir que se
compromete si finalmente no cumple con lo propuesto.
Así que, resumiendo, el buen coachee que esté dispuesto a realizar mejoras y a cumplir con
la consecución de las mismas tiene que tener consciencia, mente abierta, confianza, ilusión
y responsabilidad.
Ejercicios
En este apartado vamos a proponer una serie de ejercicios de autocoching.
Para saber gestionar los cambios de manera efectiva hay algunos puntos
importantes:
Haz esto con varias situaciones y finalmente podrás enumerar los valores que te
han guiado en cada situación.
Puedes hacer lo mismo pero con situaciones negativas y angustiosas. En este caso
te tienes que preguntar:
4. La rueda de la vida
Cada sector se puntúa de cero a diez valorando el grado de felicidad a día de hoy y
es una valoración personal. Lo que te tienes que preguntar a la hora de valorar
cada aspecto es:
Dinero: ¿estás de acuerdo con tus ingresos? ¿te permiten el nivel de vida
que quieres?
Ocio: ¿disfrutas de tu tiempo libre?
Salud: ¿te sientes bien psicológica y físicamente?
Trabajo: ¿vas contento cada mañana al trabajo? ¿estás motivado y satisfecho
en tu puesto de trabajo? ¿Tienes buenas relaciones laborales? ¿La relación
con tu jefe es buena? ¿estás desempleado?
Amor: ¿la relación conyugal funciona bien? ¿no tienes pareja y estás
buscándola?
Hogar y entorno vital: ¿te sientes bien donde vives? ¿te gusta la casa, el
barrio, la ciudad, el país?
Familia y amigos: ¿te llevas bien con ellos? ¿hablas a menudo con ellos
aunque no os veáis mucho? ¿sales a menudo con tus amigos? ¿tienes pocos
amigos pero buenos y para toda la vida, o una larga lista de conocidos?
Crecimiento personal: ¿te sientes realizado por hacer lo que siempre quisiste
hacer?
Una vez medidos el grado de satisfacción de cada área consigues una visión global
de tu vida y verás las cosas de otra forma. Una vez con todas las puntuaciones, hay
que dividir cada sector en diez segmentos y representar todas las puntuaciones
anotadas. Este es un ejemplo de cómo te quedará:
Igualmente, se puede hacer una rueda específicamente de un solo aspecto de la
vida, por ejemplo, el trabajo, el amor...
El miedo nos paraliza, hace que no avancemos hacia aquello que queremos lograr.
Todos hemos experimentado miedo alguna vez, pero es algo que se puede
gestionar si lo trabajamos de forma constante.
Este vídeo nos da algunas pistas de qué ejercicios hacer para conseguir gestionar
adecuadamente nuestros miedos:
En la lección número 17 explicábamos qué hacer para ser más creativos y qué nos
aporta la creatividad. Vamos a ver un vídeo que nos da algunas pistas para
entrenar la creatividad:
Cuestionario
Responda al siguiente cuestionario, sólo hay una respuesta correcta:
1. El tipo de coaching que trata de entrenar a la persona para que cambie su actitud y logre
adquirir la capacidad de conseguir cosas extraordinarias o desarrollar la conciencia es:
Transformacional
Cognitivo
Coercitivo
el tiempo
las herramientas
las personas
4. Cuando la persona actúa porque está estimulada por un objetivo se trata de motivación:
extrínseca
intrínseca
positiva
Miedo al fracaso
Creer en uno mismo
Miedo al rechazo
7. En cuanto a las fases del periodo de duelo, qué fase se corresponde con la siguiente
definición: "Intentamos hacer algo para que la situación cambie. Sentimos incertidumbre y
dudas"
10. En cuanto a los niveles de aprendizaje, ¿qué nivel está basado en el plano de la acción?
Primer nivel
Segundo nivel
Tercer nivel
Herramienta y proceso
Herramienta
Proceso
14. La fase del proceso de coaching donde coach y coachee se comunican de forma
transparente sobre cómo evoluciona el proceso y cómo se sienten es:
Situación actual
Retroalimentación o feedback
Seguimiento
15. En cuanto al modelo de Kirkpatrik para medir la evaluación, ¿cuál es el nivel que mide
la satisfacción de los que han participado en el proceso?
Reacción
Comportamiento
Resultados
Temario