Este documento describe la liturgia del segundo domingo de Adviento en la Iglesia católica. Se destaca que este día se enfoca en prepararse para la venida de Jesús y anunciar su mensaje de salvación para los pobres a través de las lecturas de Isaías y Juan el Bautista. La misa también enseña que Jesús es el Mesías prometido y que traerá la salvación para judíos y gentiles por igual.
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Este documento describe la liturgia del segundo domingo de Adviento en la Iglesia católica. Se destaca que este día se enfoca en prepararse para la venida de Jesús y anunciar su mensaje de salvación para los pobres a través de las lecturas de Isaías y Juan el Bautista. La misa también enseña que Jesús es el Mesías prometido y que traerá la salvación para judíos y gentiles por igual.
Descripción original:
Preparado por Iglesia del Salvador de Toledo (ESPAÑA)
Forma Extraordinaria del RIto Romano
Título original
II Domingo de Adviento. Forma extraordinaria del Rito Romano
Este documento describe la liturgia del segundo domingo de Adviento en la Iglesia católica. Se destaca que este día se enfoca en prepararse para la venida de Jesús y anunciar su mensaje de salvación para los pobres a través de las lecturas de Isaías y Juan el Bautista. La misa también enseña que Jesús es el Mesías prometido y que traerá la salvación para judíos y gentiles por igual.
Este documento describe la liturgia del segundo domingo de Adviento en la Iglesia católica. Se destaca que este día se enfoca en prepararse para la venida de Jesús y anunciar su mensaje de salvación para los pobres a través de las lecturas de Isaías y Juan el Bautista. La misa también enseña que Jesús es el Mesías prometido y que traerá la salvación para judíos y gentiles por igual.
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II DOMINGO DE ADVIENTO
ESTACIÓN EN SANTA CRUZ DE JERUSALÉN
I clase, morado Se omite el Gloria. Credo y Prefacio de Adviento o de la Santísima Trinidad Estamos ya en pleno adviento, o por mejor decir, en franca expectativa de la venida del Salvador del mundo. La Iglesia quiere hoy elevarnos, para que alcancemos a ver al que avanza hacia nosotros con dulce y suave majestad. La ausencia de pecado y un deseo cada vez más ardiente de llegar a Belén, acompañando a José y a María que viajan escoltados de ángeles hacia Jerusalén, será nuestra mejor disposición para este domingo y para la semana que con él empezamos. Además del Mesías, a quien anuncian, dos grandes profetas iluminan la liturgia de este domingo: Isaías y Juan Bautista. Isaías es el profeta por excelencia del advenimiento mesiánico. La Iglesia nos hace oír su voz en el introito; voz que resuena en la epístola y el evangelio, en que Cristo y san Pablo se refieren a lo que él había dicho. El propio san Juan Bautista, el último de los profetas y el inmediato precursor de Cristo, alegaba la palabra de Isaías. Su lugar en la liturgia del Adviento desborda ampliamente este segundo domingo. No hay día en que no nos haga leer la Iglesia en maitines algún pasaje de sus profecías; de él se toman las lecturas de los tres días de Témporas, y en la noche de Navidad son sus palabras las que cantarán, en el Emmanuel nacido de la Virgen, las grandezas divinas del Príncipe de la Paz. Dos enseñanzas principales nos pro porciona la misa de hoy: Jesús es el Mesías de los «pobres», de todos aquéllos que, conscientes de su miseria, recurren a él (evangelio). Es también el Salvador, tanto de los paganos como de los judíos; en adelante, el pueblo de Sión será la Iglesia abierta de par en par a todas las naciones de la tierra (epístola). INTROITO Isaías 30, 30. Salmo 79, 2. PÓPULUS SION, ecce Dóminus PUEBLO DE SIÓN, he ahí que viene el vénit ad salvándas gentes: et Señor a salvar a las naciones; el Señor audítam fáciet Dóminus glóriam hará brillar la majestad de su voz para vocis suæ in lætítia cordis vestri. V/. alegría de vuestro corazón. V/. Tú que Qui regis Israël, inténde qui dedúcis gobiernas a Israel, atiende; tú que guías velut ovem, Joseph. V/. Glória a José como a una oveja. V/. Gloria al Patri et Filio et Spiritui Sancto. Sicut Padre y al Hijo y al Espíritu Santo. erat in principio et nunc et semper, Como era en el principio, ahora y et in saecula saeculorum. Amén. siempre, por los siglos de los siglos. Amén. No se dice Gloria. COLECTA EXCITA, Dómine, corda nostra ad MUEVE, Señor, nuestros corazones para præparándas Unigéniti tui vias: ut preparar los caminos de tu Unigénito; a per ejus advéntum, purificátis tibi fin de que, por su venida, merezcamos méntibus servíre mereámur. Qui servirte con almas purificadas. Él, que tecum vivit et regnat, in unitate vive y reina contigo en la unidad del Spíritus Sancti Deus, per omnia Espíritu Santo y es Dios por los siglos de saecula saeculorum. Amen. los siglos. Amén. EPÍSTOLA Romanos 15, 4-13 Vengan de donde vinieren y cualquiera que sea el medio a que pertenezcan, el llamamiento de Dios se dirige a todos los hombres, sin distinción de méritos o privilegios. Al recordárselo san Pablo a los fieles, llegados tanto del paganismo como del judaísmo, da gracias a Dios, citando las Escrituras, por esta vocación universal, fundamento de la esperanza cristiana. LÉCTIO EPISTOLÆ BÉATI PAULI LECTURA DEL APÓSTOL SAN PABLO APÓSTOLI AD ROMÁNOS: A LOS ROMANOS. Fratres: Quæcúmque enim scripta Hermanos: Todas las cosas que han sido sunt ad nostram doctrínam scripta escritas, para nuestra enseñanza están sunt: ut per patiéntiam, et escritas, para que, por la perseverancia y consolatiónem Scripturárum, spem consolación que dan las Escrituras, habeámus. Deus autem patiéntiæ, et tengamos esperanza. El Dios de la solacii, det vobis id ipsum sápere in perseverancia y del consuelo os dé a alterutrum secundum Jesum sentir una misma cosa entre vosotros Christum: ut unánimes, uno ore conforme a Jesucristo; para que honorificétis Deum et Patrem unánimes, a una, glorifiquéis a Dios, Dómini nostri Jesu Christi. Propter Padre de nuestro Señor Jesucristo. Por quod suscipite invicem, sicut et tanto, recibíos los unos a los otros como Christus suscepit vos in honorem Cristo os recibió, para gloria de Dios. Yo Dei. Dico enim Christum Jesum os digo que Jesucristo fue el ministro de ministrum fuisse circumcisionis la circuncisión, por la veracidad de Dios, propter veritatem Dei, ad cumpliendo lo prometido a los padres. confirmandas promissiones patrum: Mas también los gentiles deben gentes autem super misericordiam glorificar a Dios por su misericordia, honorare Deum, sicut scriptum est: según está escrito: Por esto te alabaré, Proptérea confitébor tibi in Señor, entre las naciones, y cantaré a tu gentibus, Dómine, et nomini tuo nombre. Y en otro lugar: Alegraos, cantabo. Et iterum dicit: Lætámini, gentiles, con su pueblo. Y otra vez: gentes, cum plebe eius. Et iterum: Alabad al Señor todas las gentes, y Laudáte omnes gentes Dóminum: et ensalzadle todos los pueblos. Y magnificate eum omnes populi. Et asimismo Isaías dice: Brotará el vástago rursus Isaias ait: Erit radix Jesse, et de Jesé, y el que se levanta para qui exsúrget regere gentes, in eo gobernar a las naciones: en él esperarán gentes sperabunt. Deus autem spei las gentes. El Dios de la esperanza os repleat vos omni gaudio, et pace in colme de todo gozo y de paz en el creer; credendo: ut abundetis in spe, in para que abundéis en la esperanza por la virtute Spiritus Sancti. virtud del Espíritu Santo.
GRADUAL Salmo 49, 2-3. 5
EX SION spécies decóris ejus: Deus DE SIÓN, hermosura perfecta, Dios va maniféste vénit. V/. Congregáte illi a manifestarse. V/. Congregad en su sanctos ejus, qui ordinavérunt derredor a los fieles, que concertaron testaméntum ejus super sacrifícia. alianza con él por sus sacrificios. ALELUYA Salmo 121, 1 ALLELÚJA, ALLELÚJA. V/. Lætátus ALELUYA, ALELUYA. V/. Me he sum in his, quæ dicta sunt mihi: in alegrado en lo que se me ha dicho: domum Dómini ibimus. Allelúja. Vamos a la casa del Señor. Aleluya.
EVANGELIO Mateo 11, 2-10
Jesús se declara Mesías al referirse a Isaías 61, 1-3: «... para los pobres es la buena nueva». Y afirma a continuación: «Bienaventurados los que no encuentren en mí ocasión de escándalo.» No nos hagamos un Mesías, ni una religión según nuestras propias concepciones. SEQUÉNTIA SANCTI EVANGÉLII LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SECÚNDUM MATTHǼUM. SEGÚN SAN MATEO. In illo témpore: Cum audisset En aquel tiempo, Juan, que había oído Joánnes in vinculis ópera Christi, en la cárcel las obras del Mesías, mittens duos de discipulis suis, ait mandó a sus discípulos a preguntarle: illi: «Tu es qui venturus es, an alium «¿Eres tú el que ha de venir o tenemos expectamus?» Et respondens Jesus, que esperar a otro?». Jesús les ait illis: «Euntes renuntiate Joánni, respondió: «Id a anunciar a Juan lo quæ audistis, et vidistis. Cæci vident, que estáis viendo y oyendo: los ciegos claudi ambulant, leprosi mundantur, ven y los cojos andan; los leprosos surdi audiunt, mortui resurgunt, quedan limpios y los sordos oyen; los pauperes evangelizantur: et beatus muertos resucitan y los pobres son est, qui non fuerit scandalizatus in evangelizados. ¡Y bienaventurado el me.» Illis autem abeuntibus, cœpit que no se escandalice de mí!». Al irse Jesus dicere ad turbas de Joánne: ellos, Jesús se puso a hablar a la gente «Quid existis in desertum videre? sobre Juan: «¿Qué salisteis a arúndinem vento agitátam? Sed quid contemplar en el desierto, una caña existis videre? hominem mollibus sacudida por el viento? ¿O qué salisteis vestitum? Ecce qui móllibus a ver, un hombre vestido con lujo? vestiúntur, in domibus regum sunt. Mirad, los que visten con lujo habitan Sed quid existis videre? prophetam? en los palacios. Entonces, ¿a qué Etiam dico vobis, et plus quam salisteis?, ¿a ver a un profeta? Sí, os prophetam. Hic est enim, de quo digo, y más que profeta. Este es de scriptum est: Ecce ego mitto quien está escrito: “Yo envío a mi Angelum meum ante fáciem tuam qui mensajero delante de ti, el cual præparábit viam tuam ante te.» preparará tu camino ante ti”. Se dice Credo OFERTORIO Salmo 87, 7-8 Se reconocerá en este canto del ofertorio los llamamientos a la salvación y misericordia de Dios, que repite la Iglesia todos los días al terminar las oraciones al pie del altar, cuando comienza la misa. DEUS, tu convérsus vivificábis nos, et OH DIOS, si te vuelves a nosotros, nos plebs tua lætábitur in te: osténde darás vida, y tu pueblo se alegrará en ti; nobis, Dómine, misericórdiam tuam, muéstranos, Señor, tu misericordia, y et salutáre tuum da nobis. danos tu Salvador. SECRETA PLACÁRE, QUǼSUMUS, Dómine, TE ROGAMOS, SEÑOR, te aplaques con humilitátis nostræ précibus et hóstiis: nuestras humildes oraciones y ofrendas; et ubi nulla súppetunt suffrágia y como no podemos alegar méritos de meritórum, tuis nobis succúrre ningún valor, socórrenos con tu auxilio. præsídiis. Per Dóminum nostrum Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, Iesum Christum, qui tecum vivit et que contigo vive y reina en la unidad del regnat in unitate Spiritus Sancti Deus. Espíritu Santo y es Dios. PREFACIO DE ADVIENTO VERE DIGNUM et iustum est, Verdaderamente es digno y justo, aequum et salutare, nos tibi semper equitativo y saludable, que te demos et ubique gratias agere: Domine, gracias en todo tiempo y lugar, Señor sancte Pater, omnipotens aeterne Santo, Padre todopoderoso y eterno Dios, Deus: per Christum Dominum por Jesucristo nuestro Señor; él es, Dios nostrum; Quem perdito hominum misericordioso y fiel, el Salvador que generi Salvatorem misericors et habías prometido al género humano fidelis promisisti: cuius veritas perdido por el pecado, para que la instrueret inscios, sanctitas Verdad instruyese a los ignorantes, la iustificaret impios, virtus adiuvaret Santidad justificara a los impíos, la infirmos. Dum ergo prope est ut Fortaleza ayudase a los débiles. Mientras veniat quem missurus es, et dies está cerca aquel a quién tú nos envías, -ya affulget liberationis nostrae, in hac viene-, y el día de nuestra liberación ya promissionum tuarum fide, piis brilla, llenos de confianza en tus gaudiis exultamus. Et ideo cum promesas, nos llenamos de piadosos Angelis et Archangelis, cum Thronis gozos. Y por eso, con los Ángeles y los et Dominationibus, cumque omni Arcángeles, con los Tronos y las militia caelestis exercitus, hymnum Dominaciones, y con toda la milicia del gloriae tuae canimus, sine fine ejército celestial, entonamos a tu gloria dicentes: un himno, diciendo sin cesar: O en su defecto, Prefacio de la Santísima Trinidad COMUNIÓN Baruc 5, 5. 4, 36 JERÚSALEM SURGE, et sta in LEVÁNTATE, JERUSALÉN, ponte en excélso, et vide jucunditátem, quæ lo alto, y mira el regocijo que te viene vénit tibi a Deo tuo de tu Dios. POSCOMUNIÓN REPLÉTI CIBO spirituális alimóniæ, SACIADOS ya con el manjar espiritual, súpplices te, Dómine, deprecamur: ut te suplicamos, Señor, que por la hujus participatióne mystérii, dóceas participación de este misterio nos nos terréna despicere et amare enseñes a despreciar lo terreno, y amar cælestia. Per Dóminum nostrum lo celestial. Por nuestro Señor Iesum Christum, qui tecum vivit et Jesucristo, tu Hijo, que contigo vive y regnat in unitate Spiritus Sancti Deus, reina en la unidad del Espíritu Santo y es per omnia saecula saeculorum. Amen. Dios por los siglos de los siglos. Amén. Iglesia del Salvador de Toledo (ESPAÑA) Forma Extraordinaria del Rito Romano