Tesis Mamposteria
Tesis Mamposteria
Tesis Mamposteria
DE MÉXICO
EN INGENIERÍA
T E S I S
QUE PARA OPTAR POR EL GRADO DE
MAESTRO EN INGENIERÍA
P R E S E N T A:
TUTOR:
TUTOR DE TESIS:
--------------------------------------------------
FIRMA
ii
Agradecimientos
iii
Contenido
Agradecimientos .......................................................................................................................... iii
Resumen ........................................................................................................................................ 1
1. Introducción .......................................................................................................................... 2
1.1 Antecedentes ................................................................................................................ 5
1.2 Objetivos y alcances del estudio ................................................................................... 8
2. Teoría del campo de compresión modificado (TCCM) .......................................................... 9
2.1 Definición del problema .............................................................................................. 11
2.2 Condiciones de compatibilidad ................................................................................... 13
2.3 Condiciones de equilibrio ............................................................................................ 15
2.4 Relaciones constitutivas .............................................................................................. 18
2.4.1 Relación constitutiva de la mampostería a compresión ..................................... 18
2.4.2 Relación constitutiva de la mampostería a tensión ............................................ 20
2.4.3 Relación constitutiva para el concreto a compresión ......................................... 21
2.4.4 Relación constitutiva para el concreto a tensión ................................................ 22
2.4.5 Transferencia de cortante en las grietas ............................................................. 23
2.4.6 Relaciones constitutivas para el acero ................................................................ 27
3. Modelo de múltiples elementos verticales ......................................................................... 28
4. Estrategia de solución ......................................................................................................... 37
5 Casos analizados.................................................................................................................. 46
6 Resultados ........................................................................................................................... 56
6.1 Influencia del esfuerzo principal a tensión de la mampostería .................................. 59
6.2 Influencia del esfuerzo principal a compresión de la mampostería ........................... 63
6.3 Conclusiones de los análisis ........................................................................................ 68
7 Conclusiones ....................................................................................................................... 69
8 Referencias .......................................................................................................................... 71
Anexos ......................................................................................................................................... 74
Anexo 1.................................................................................................................................... 74
Anexo 2.................................................................................................................................... 76
Anexo 3.................................................................................................................................... 79
Anexo 4.................................................................................................................................... 85
Anexo 5.................................................................................................................................... 91
Resumen
Las cargas máximas de la respuesta del muro (curva carga lateral-desplazamiento) obtenidas en
el modelo analítico, tienen un valor similar al registrado en los ensayos experimentales, con un
porcentaje de error aceptable menor al 14%.
1
1. Introducción
Antiguamente eran habituales los muros utilizados para resistir únicamente las solicitaciones de
cargas verticales, y se ignoraban las cargas laterales que por lo general se asocian a cargas
sísmicas. Reconociendo estas cargas, se empezó una serie de investigaciones en torno a este
tema a fin de implementar cambios en el método de análisis y constructivo a modo de que los
muros resistieran simultáneamente las cargas verticales y las cargas horizontales simulando así
un comportamiento más realista.
Las limitaciones del uso de suelo, la arquitectura y las condiciones socioeconómicas han forzado
que las estructuras a base de muros se conciban optimizando el área transversal de estos.
Debido a estas limitantes, los muros de mampostería simple tienen desventajas importantes
como la limitación para resistir fuerzas laterales por la poca o nula resistencia a tensión y un
comportamiento frágil una vez que llega a la carga de agrietamiento. Para contrarrestar estas
desventajas se han desarrollado distintas alternativas de construcción con el objetivo de mejorar
la resistencia y la capacidad de deformación de la mampostería simple. Este estudio centra su
atención en los muros de mampostería rodeados de elementos de concreto reforzado
(confinamiento) y que poseen refuerzo horizontal en las juntas horizontales de las piezas.
Los muros confinados se componen de paneles hechos con piezas de mampostería pegadas con
mortero rodeados en el sentido vertical por pequeñas columnas de concreto llamadas castillos
y en sentido horizontal por trabes llamadas dalas. Asimismo, la introducción de acero de
refuerzo en la mampostería confinada le dio una adecuada resistencia lateral y ductilidad ante
cargas laterales.
Dentro de las investigaciones para muros de mampostería confinada con acero de refuerzo en
las juntas de mortero se pueden mencionar:
2
Hernández y Meli (1976) evaluaron las distintas maneras de reforzar muros de
mampostería con el objeto de incrementar su resistencia y ductilidad ante cargas
laterales alternadas. También se evaluó el comportamiento de muros formados por
bloques de concreto colocados con juntas secas, con refuerzo interior y un aplanado de
mortero de alta adherencia que está compuesto de cemento, arena fina, aditivos
especiales y un refuerzo a base de fibra de vidrio que le da resistencia al muro. El análisis
cualitativo del comportamiento de los muros llevo a las siguientes conclusiones y
recomendaciones para el detallado de muros de mampostería confinada con acero de
refuerzo:
a) Se observa un mejor comportamiento en términos de capacidad de absorción de
energía, nivel de deterioro y reserva de resistencia después del agrietamiento con
la colocación de refuerzo horizontal adicional, en comparación de los muros no
reforzados.
b) El refuerzo horizontal resulta efectivo si está completamente recto y anclado en los
extremos del muro. La adherencia no representa una variable importante en este
sentido.
c) Se deben de realizar estudios adicionales para determinar un valor más adecuado
de la cuantía mínima de acero horizontal.
Meli (1979) se estudiaron la variabilidad de los materiales que forman a la mampostería
para la determinación de las propiedades básicas de estos mediante ensayos de
pequeños especímenes y del comportamiento de la mampostería ante cargas
reversibles en una sola dirección, en donde concluyó que:
a) Los coeficientes de variación para las propiedades de los materiales involucrados
para la construcción de muros de mampostería confinada con acero de refuerzo son
muy altos.
b) El comportamiento fue aproximadamente lineal hasta el primer agrietamiento, que
se presenta por flexión o tensión diagonal. En el primer caso la falla es dúctil, y en
el segundo depende del tipo y cantidad de refuerzo interior y de las características
de los elementos confinantes.
c) La reserva de resistencia después del agrietamiento depende del tamaño de los
castillos del confinamiento y de la cuantía de refuerzo interior.
d) La carga vertical provoca un incremento en la resistencia y en la rigidez, reduciendo
la ductilidad del muro.
Tomazevic y Velchovsky (1992) del Institute of Testing and Research in Materials and
Structures es uno de los trabajos más amplios y reconocidos a nivel mundial que ha
estudiado el comportamiento de la mampostería ante cargas sísmicas, estudiando el
efecto del refuerzo horizontal en la resistencia lateral y la ductilidad de muros de
mampostería utilizando en algunos experimentos mortero de alta resistencia para
mejorar la adherencia y el anclaje del refuerzo horizontal. A través de su amplia gama
de ensayos, los autores pudieron concluir que:
a) Se puede esperar una mejora en el comportamiento sísmico de los muros de
mampostería si se coloca refuerzo horizontal y vertical
b) El refuerzo horizontal tienen una influencia mayor, ya que aumenta la capacidad de
corte y la ductilidad, lo que posteriormente conduce a la fluencia del acero vertical
y a un desarrollo completo de la capacidad a flexión de la sección.
c) La resistencia al corte de los muros de mampostería está regida por los elementos
que se encuentran en tensión dentro del muro, por lo que solo depende de las
propiedades de las piezas y, en muy poca medida, de la resistencia del mortero.
3
d) La eficacia del refuerzo horizontal depende en gran parte de las condiciones de
adherencia y anclaje de este. Se incrementa la resistencia del mortero y disminuye
con el aumento de la cuantía del refuerzo.
e) La colocación de una cuantía mínima de refuerzo horizontal, resulta suficiente para
observar un aumento en la ductilidad del muro. Cuantías elevadas de refuerzo son
antieconómicas ya que la eficacia se reduce.
Aguilar y Alcocer (2001) presentan los resultados de los ensayes ante cargas laterales de
cuatro muros de mampostería confinada con acero de refuerzo horizontal con
diferentes cuantías. Se llegó a recomendaciones para el análisis, diseño y construcción
para las Normas Técnicas Complementarias para el Diseño y Construcción de Estructuras
de Mampostería (NTCM) integradas en el Reglamento de Construcciones para el Distrito
Federal (RCDF) en relación con la cuantía mínima de refuerzo horizontal. Los autores
concluyeron que:
a) La presencia de refuerzo horizontal en muros de mampostería de tabique recocido
favorece una distribución más uniforme del daño y aumenta significativamente la
capacidad de deformación y la resistencia a cargas laterales
b) Los valores del cortante de agrietamiento y la distorsión a la que se presentan son
similares en todos los casos analizados
c) Existe una relación directa entre la cantidad de acero de refuerzo horizontal y la
distorsión a la que se registra el cortante máximo
d) La rigidez inicial de los modelos no se modifica por la presencia de refuerzo
horizontal
Pineda y Alcocer (2004) presentan los resultados de ensayes de muros cuadrados
reforzados con encamisado de malla de alambre electrosoldada y aplanados con
mortero sometidos a cargas cíclicas alternadas y con esfuerzo vertical constante en los
muros. Se concluyó que el refuerzo horizontal y vertical dado por la malla electrosoldada
con mortero, aumenta la resistencia ante cargas laterales y la capacidad de
deformación.
Cruz (2015) presenta muros confinados con castillos exteriores hechos con bloque liso
multiperforado de concreto en donde la variable estudiada es la cuantía de refuerzo
horizontal colocada entre las juntas de mortero buscando evaluar y en su caso
replantear la fórmula de eficiencia para el refuerzo horizontal plasmada en las NTCM
para mamposterías consideradas de alta resistencia.
Como se puede ver en el resumen anterior, desde las décadas de 1970 y 1980 ha habido un gran
desarrollo tanto experimental como analítico para la predicción del comportamiento tanto del
comportamiento lineal como del no lineal de estructuras a base de elementos de mampostería
confinada. Las expresiones utilizadas en México derivadas de pruebas experimentales que están
plasmadas en el Reglamento de Construcciones del Distrito Federal (RCDF) se basan en la
suposición que el patrón de agrietamiento sucede a 45° y en la analogía de la armadura
(Hernández, 1976), en donde la resistencia a cortante es expresada algebraicamente en
términos de la resistencia de la mampostería, la carga axial y el cortante del acero de refuerzo.
En contraste la teoría del campo de compresión modificado (TCCM), la cual ha sido adoptada
para diseñar elementos estructurales de concreto reforzado, ha demostrado que la hipótesis del
ángulo de agrietamiento igual a 45° puede ser demasiado conservadora (Vecchio, 1986).
4
1.1 Antecedentes
El mecanismo de fractura de los muros de mampostería depende de distintos factores como: la
carga vertical, los castillos, la adherencia entre las piezas y el mortero, los miembros de
confinamiento, la resistencia y la cuantía del acero horizontal, entre otras. Los mecanismos se
pueden sintetizar en los siguientes modos para la mampostería confinada, sabiendo de
antemano que el colapso se puede presentar con una combinación de varias fallas (Aguilar y
Alcocer, 2001).
1. Falla por flexión: Tiende a presentarse en muros esbeltos cuando se generan tensiones
importantes en los castillos, el acero con más solicitación de esfuerzo es el que se
encuentra longitudinalmente en la sección que por lo general está ubicado en los
castillos. Se produce la fluencia del acero longitudinal y una falla a compresión por
flexión en el talón comprimido del muro (Figura 1.1a). El agrietamiento se presenta en
forma vertical en las esquinas y en el centro del muro.
2. Falla por cortante por adherencia: se produce por un deslizamiento horizontal a lo largo
de la junta de mortero, en donde se presenta una falla por adherencia en la junta (Figura
1.1b)
3. Carga vertical: Se produce por una carga axial muy elevada con el aplastamiento de la
mampostería (Figura 1.1c)
4. Contracciones: Se debe a los cambios de temperatura o al fraguado (Figura 1.1d)
5. Cortante: Se caracteriza por un agrietamiento inclinado, que pasa a través de las piezas
siguiendo las juntas tanto horizontales como verticales (Figura 1.1e)
6. Tensión diagonal: Se producen agrietamientos inclinados pero a diferencia de la falla
por cortante, las grietas pasan uniformemente por toda la sección (Figura 1.1f).
Este tipo de falla puede generar la situación donde se presentan grandes esfuerzos de
compresión en las esquinas inferiores del muro, las cuales pueden provocar la falla por
aplastamiento cuando las piezas de mampostería son de baja calidad.
5
En los casos de los muros de mampostería confinada con acero de refuerzo, además de los
modos de falla anteriormente mencionados, se puede presentar una falla de compresión
cuando la cuantía del acero es elevada y la mampostería no tiene la capacidad de transmitir los
esfuerzos del mismo a la base del muro, esta falla se caracteriza por un mecanismo cortante-
compresión en donde se puede observar un aplastamiento de la mampostería en la base de los
muros.
Debido al gran uso de recursos computacionales, así como la complejidad de implementar los
resultados derivados de los análisis con los modelos de elemento finito, se han desarrollado los
macromodelos que tratan de predecir el comportamiento de los muros de mampostería de
forma global y simplificada, dando resultados razonablemente acertados. Dentro de estos
modelos se pueden mencionar los más comunes: columna ancha (Zúñiga y Terán, 2008),
diagonal equivalente (Bazán, 1980) y el Modelo de múltiples elementos verticales (MMEV) o
mejor referido por sus siglas en ingles MVLEM (multiple-vertical-line-element-model) propuesto
por Vulcano en 1988.
6
Figura 1.2 Elemento viga-columna (Orakcal, 2004)
La desventaja principal de los modelos comunes de viga-columna es que al estar modeladas las
propiedades del muro con una columna equivalente y unido en los extremos por vigas rígidas,
las rotaciones de un elemento viga columna ocurren alrededor del eje centroidal de la pared;
por lo tanto, la migración del eje neutro de la sección transversal a lo largo de la pared durante
la carga y descarga no se toma en cuenta (Figura 1.3).
7
tiene una simplicidad y exactitud superior a las teorías desarrolladas en el pasado, contando
además con una serie de experimentos que la respaldan (Vecchio y Collins, 1986).
En este estudio se implementa la teoría del campo de compresión modificado para evaluar la
resistencia de muros de mampostería sujetos a fuerzas laterales a partir de un modelo analítico
simple, capaz de reproducir de forma sencilla el comportamiento de los muros de mampostería
confinada con acero de refuerzo. En las siguientes secciones se explica la teoría del campo de
compresión modificado, desarrollado para elementos de concreto reforzado, asimismo se da a
conocer la justificación de la implementación de la teoría para elementos de mampostería
confinada con acero de refuerzo.
La calibración, comprobación y eficacia del modelo seleccionado para implementar las hipótesis
de la TCCM, se evaluará con la comparación de la respuesta global carga lateral-desplazamiento
(envolvente) obtenida de muros ensayados en el CENAPRED (Cruz, 2015), en donde gracias a los
elementos confinantes y el acero de refuerzo, se logró un patrón de agrietamiento uniforme a
lo largo de los muros ensayados en cantiléver bajo cargas verticales y laterales.
La adecuación del modelo de múltiples elementos verticales (MMEV), así como la teoría del
campo de compresión modificado (TCCM) son adecuadas para reproducir de forma analítica el
comportamiento de los muros mencionados. Sin embargo es necesario estudiar otros casos de
los que se pueden mencionar: los muros con diferentes relaciones de aspectos (muros alargados
y esbeltos), muros con aperturas (como puertas y ventanas) y muros en donde exista diferente
distribución de curvatura a lo largo del muro.
8
2. Teoría del campo de compresión modificado (TCCM)
Para el desarrollo de un modelo analítico que prediga con precisión la resistencia de fuerza
cortante de muros de mampostería confinada con acero de refuerzo, es necesario tomar en
cuenta las propiedades ortotrópicas de la mampostería cuando está sujeta a estados de
esfuerzos biaxiales con diferentes orientaciones de carga con respecto a las juntas horizontales
de mortero, pues es ampliamente reconocida la formación de planos de debilidad que ocurren
entre las piezas de mampostería donde se encuentra el mortero. También es necesario ir más
allá de la hipótesis de un ángulo de fisura fija de 45° y aplicar una metodología racional para
estimar la separación de grietas y la transferencia de cortante en las grietas, tomando en cuenta
las condiciones locales en las grietas de cortante que contribuyen significativamente a la
resistencia ante fuerzas laterales de la mampostería confinada con acero de refuerzo. Además
el modelo aplicado debe tomar en cuenta tanto el nivel de momento aplicado y la contribución
de la fuerza axial.
La teoría del campo de compresión modificado, que se desarrolló para elementos estructurales
de concreto reforzado (RC) establece que los elementos estructurales puedan ser visualizados
como un ensamble de elementos simples llamados paneles (Figura 2.1b). Teóricamente si se
conoce el comportamiento de estos paneles, el comportamiento de la estructura completa se
puede estimar de una forma precisa.
9
Figura 2.1 Comportamiento de la mampostería reforzada sujeta a fuerzas combinadas: a)
muro típico de mampostería confinada y reforzada interiormente sujeto a fuerzas axiales y
laterales; b) panel representativo c) esfuerzos principales en el panel
Predecir la respuesta de estos paneles después del agrietamiento no es una tarea fácil, debido
a que bajo un estado particular de carga, se puede formar nuevas grietas teniendo en cuenta
que las grietas preexistentes pueden ser que se propaguen o que se cierren. La teoría del campo
de compresión ha sido desarrollada para elementos sujetos a fuerza cortante, en donde el
concreto agrietado es tratado como un nuevo material con sus propias características de
esfuerzo-deformación. Equilibrio, compatibilidad y las relaciones de esfuerzo-deformación son
formulados en términos de deformaciones promedio en donde se consideran áreas y distancias
lo suficientemente grandes para abarcar muchas grietas (Figura 2.3).
10
2.1 Definición del problema
El panel mostrado en la Figura 2.2 representa a una porción pequeña de una estructura de
concreto reforzado completa en donde los esfuerzos actuando sobre ella, se pueden considerar
uniformes. El acero longitudinal y transversal son ortogonales entre sí y paralelos a los ejes 𝑥 y
𝑦, las cargas aplicadas al elemento en cada uno de sus planos son consideradas uniformes y
consisten en esfuerzos axiales 𝜎𝑥 y 𝜎𝑦 y un esfuerzo uniforme cortante 𝜏𝑥𝑦 . Las deformaciones
del elemento se asumen de tal manera que los bordes permanecen rectos y paralelos. La
configuración deformada está definida por dos deformaciones normales 𝜀𝑥 , 𝜀𝑦 y una
deformación a cortante 𝛾𝑥𝑦 .
El problema en cuestión es determinar la relación que existe entre los tres esfuerzos 𝜎𝑥 , 𝜎𝑦 y
𝜏𝑥𝑦 y las deformaciones 𝜀𝑥 , 𝜀𝑦 y 𝛾𝑥𝑦 . Para solucionar el problema se asumen las siguientes
hipótesis.
11
2. Los esfuerzos y deformaciones son considerados en términos de valores promedios en
donde se toman áreas y distancias lo suficientemente grandes para incluir varias grietas
(Figura 2.3). Sin embargo se incluye la influencia de los efectos locales en las grietas en
los muros donde se espera que las fallas locales gobiernen la resistencia del sistema.
3. El concreto y el acero de refuerzo están perfectamente unidos entre sí.
4. El refuerzo longitudinal está uniformemente distribuido en todo el elemento.
5. El esfuerzo principal a compresión es paralelo a las grietas y coincide con la dirección de
la deformación principal a compresión (Figura 2.2).
Los esfuerzos y deformaciones a tensión son tratados como cantidades positivas mientras que
los esfuerzos y deformaciones a compresión son tomados como negativos.
La principal suposición de la teoría del campo de compresión modificado es que la dirección del
esfuerzo principal a compresión (paralelo a las grietas) coincide con la dirección de la
deformación principal a compresión (Figura 2.2).
12
2. Los muros de mampostería están compuestos de muchos materiales (piezas de
mampostería, mortero, acero de refuerzo, castillos y dalas). La interacción entre estos
materiales cuando se someten a diferentes tipos de condiciones de carga (por ejemplo
compresión pura contra cortante puro) provoca un cambio significativo en el
comportamiento de muros de mampostería confinada reforzada comparado con muros
de concreto reforzado. Como resultado, los paneles de mampostería tienen diferentes
relaciones constitutivas que son altamente dependientes del ángulo de los esfuerzos
principales en relación con las juntas donde se encuentra ubicado el mortero.
3. Los muros de mampostería confinada y reforzada también difieren en los detalles de
construcción limitados por la misma composición ortotrópica de la mampostería en
comparación de sus contrapartes muros de concreto reforzado. Esta situación provoca
varias diferencias en el detallado y prácticas del armado incluyendo la separación y
arreglos del acero de refuerzo.
Sin embargo las observaciones de Aguilar y Alcocer (2001), Pineda y Alcocer (2004), han
demostrado mediantes pruebas experimentales que el comportamiento de muros de
mampostería confinada con acero de refuerzo tienen un comportamiento parecido a los muros
de concreto reforzado, siguiendo un patrón de agrietamiento uniforme a lo largo del muro
(Figura 2.4).
Figura 2.4 Estado final de los especímenes ensayados por Aguilar y Alcocer (Aguilar, 2001)
13
Figura 2.5 Círculo de Mohr para deformaciones
𝜀𝑥 + 𝜀𝑦
𝐶𝑒 = 2.1
2
𝛾𝑥𝑦 2
𝑅 = √( ) + (𝐶𝑒 − 𝜀𝑦 )2 2.2
2
𝜀1 = 𝐶𝑒 + 𝑅 2.3
𝜀2 = 𝐶𝑒 − 𝑅 2.4
𝛾𝑥𝑦
tan(2𝜃) = 2.5
𝜀𝑦 − 𝜀𝑥
Donde
14
2.3 Condiciones de equilibrio
De acuerdo con la TCCM el panel del muro esta descrito en términos de un material equivalente
homogéneo y ortotrópico, cuyas propiedades como la resistencia a compresión y a tensión
fueron obtenidas a partir de pruebas experimentales. Una vez que se forman las grietas, el panel
del muro puede ser visto como un conjunto de elementos uniaxiales: puntales de compresión y
tensión, paralelos y perpendiculares a las grietas respectivamente, que simulan el
comportamiento promedio de la mampostería.
Se plantean condiciones de equilibrio para que las acciones aplicadas sobre el panel de
mampostería confinada con acero de refuerzo (Figura 2.6a) se encuentren balanceadas entre
las reacciones en la mampostería (Figura 2.6b) y del acero de refuerzo (Figura 2.6c). Se asume
que las barras de acero solo pueden resistir esfuerzos axiales y que el campo de esfuerzos en la
mampostería se puede definir en términos de esfuerzos normales, las condiciones de equilibrio
pueden ser expresadas por las ecuaciones 2.6 a 2.8. Que serán de utilidad para el cálculo de los
esfuerzos en el sistema de coordenadas 𝑥-𝑦 a partir de los esfuerzos principales a compresión y
tensión. En el anexo 1 se muestra el procedimiento desarrollado para la obtención de dichas
ecuaciones.
Donde:
15
Figura 2.6 a) Panel de mampostería, b) Esfuerzos principales, c) Esfuerzos en el acero
Las condiciones que se muestran en la Figura 2.6 (repetidos en la Figura 2.7b) representan los
esfuerzos promedios del panel. Sin embargo se puede prever que en la zona de grietas (Figura
2.7c), habrá variaciones de esfuerzos diferentes a los esfuerzos promedios, ya que en los puntos
cercanos a la grieta, el acero de refuerzo está sujeto a un esfuerzo más grande que el que esta
embebido en la mampostería debido a la reducción de área que contribuye a la resistencia a
corte (es decir que las tensiones en las zonas de grietas no son tomadas por la mampostería
agrietada). El incremento de esfuerzo en el acero de refuerzo es representado por el esfuerzo
local 𝜎𝑠𝑦 y 𝜎𝑠𝑥 𝑐𝑟 (Figura 2.7c). Aunque los esfuerzos principales a tensión no pueden ser
𝑐𝑟
transferidos por la mampostería, existe la posibilidad de que los esfuerzos de cortante sean
transmitidos a través de los agregados del mortero y las piezas de mampostería que existen a lo
largo de la grieta. Este esfuerzo cortante local es definido por 𝜈𝑚𝑖 , por otra parte se identifica
un esfuerzo normal 𝜎𝑚𝑖 . Para conservar el equilibrio del elemento, los esfuerzos promedios que
se encuentran en la zona no agrietada, deben de ser iguales con los esfuerzos en la zona
agrietada, dando como resultado el equilibrio planteado a continuación (ecuación 2.9 a 2.10).En
el Anexo 2 se presenta el desarrollo para la obtención de las ecuaciones 2.9 y 2.10
𝜎𝑠𝑥 𝜌𝑥 sin(𝜃) + 𝜎1 sin(𝜃) = 𝜎𝑠𝑥 𝑐𝑟 𝜌𝑥 sin(𝜃) − 𝜎𝑚𝑖 sin(𝜃) − 𝜈𝑚𝑖 cos(𝜃) 2.9
𝜎𝑠𝑦 𝜌𝑦 cos(𝜃) + 𝜎1 cos(𝜃) = 𝜎𝑠𝑦 𝜌𝑦 cos(𝜃) − 𝜎𝑚𝑖 cos(𝜃) + 𝜈𝑚𝑖 sin(𝜃) 2.10
𝑐𝑟
16
a)
b)
c)
17
2.4 Relaciones constitutivas
Las relaciones constitutivas que se ocupan en esté trabajo sirven para relacionar los esfuerzos
principales con las deformaciones principales. En la siguiente sección se plasman las relaciones
constitutivas utilizadas en el presente estudio tanto de mampostería que servirán para modelar
la parte interior del muro, como las del concreto que servirán para modelar los castillos de la
mampostería confinada.
𝑓𝑚 (𝜃)
= 4.403 ∗ 10−4 𝜃 2 + (−4.944 ∗ 10−2 )𝜃 + 1.88 𝑠𝑖 𝜃 > 45° 2.11
𝑓𝑚 (90°)
Figura 2.8 a) Prueba estándar de pilas, b) Pilas ensayadas por Lizárraga (2013) variando la
inclinación de las juntas de mortero
18
Adicionalmente a la ecuación 2.11, se ha observado (Tikalsky, 1995) que la resistencia a
compresión de la mampostería de una pila (compresión pura) es distinta a la que se puede
observar en los paneles que están sujetos a esfuerzos de tensión adicionales a los de
compresión. Estos esfuerzos a tensión provocan una reducción de la capacidad a compresión de
la mampostería. Por lo que, para considerar el comportamiento complejo de la reducción de
resistencia a compresión por la inclinación de la junta de mortero y por los esfuerzos a tensión
que rigen al panel, se adopta una ecuación propuesta por Vecchio y Collins (ecuación 2.12), en
donde se introduce el parámetro 𝛽 (ecuación 2.12) que considera la deformación principal a
tensión y adicionalmente se incluye el parámetro 𝑓 𝑚 (𝜃) que considera la inclinación del ángulo
𝜃 en la resistencia a compresión de la mampostería. La ecuación 2.12 nos da la resistencia
máxima alcanzada por la mampostería como un producto del parámetro 𝛽 y 𝑓𝑚 (𝜃).
2𝜀2 𝜀2 2
𝜎2 = 𝛽𝑓𝑚 (𝜃) [ −( ) ] 2.12
𝜀𝑐𝑜 𝜀𝑐𝑜
Donde
1
𝛽= 𝜀1 ≤ 1 2.13
0.8 − 0.34
𝜀 𝑐𝑜
19
Influencia del parametro β
σ2/fm(θ)
beta=1
beta=0.9
beta=0.7
beta=0.5
Variación de β
1.2
0.8
β
0.6
0.4
0.2
0
0 -1 -2 -3 -4 -5 -6 -7
ε1/ε´c
20
Figura 2.11 Comportamiento de la mampostería a tensión
𝜎1 = 𝐸𝑚 𝜀1 0 ≤ 𝜀1 ≤ 𝜀𝑐𝑟 2.14
Donde
21
reblandecimiento del concreto debido a las deformaciones de tensión 𝜀1 que son
perpendiculares a la dirección principal de compresión.
2𝜀2 𝜀2 2
𝜎2 = 𝛽𝑐 𝑓𝑐 [ −( ) ] 2.16
𝜀𝑐𝑜𝑐 𝜀𝑐𝑜𝑐
Donde
1
𝛽𝑐 = 𝜀1 ≤ 1 2.17
0.8 − 0.34
𝜀 𝑐𝑜𝑐
2.18
𝜎1 = 𝐸𝑐 𝜀1 0 ≤ 𝜀1 ≤ 𝜀𝑐𝑟𝑐
𝑓𝑐𝑟
𝜎1 = 𝜀1 > 𝜀𝑐𝑟𝑐 2.19
1 + √200𝜀1
22
Donde
23
Figura 2.13 Transferencia de cortante debido a la trabazón de los agregados
Este fenómeno es dependiente del nivel de esfuerzo normal que actúa contra la apertura de las
grietas. Si el ancho de grietas promedio (𝑤) supera el tamaño de los agregados que sobresalen
a lo largo de la superficie de grieta (causantes de la fricción), se evita el contacto entre los
agregados y por lo tanto, no hay fricción. Se hace notar que la contribución total de la trabazón
de los agregados del mortero a lo largo de la superficie de grieta que están compuesto por
agregados muy finos, será dominada por la contribución de las piezas de mampostería que están
compuestos con tamaño de agregados mayores cuando la grieta penetre indiscriminadamente
tanto en las piezas de mampostería como en el mortero.
Sin embargo es nula la información experimental que se tiene acerca del cortante transferido
en las grietas y la fricción provocada por la trabazón de diferentes tamaños de agregado
(bloques de mampostería, mortero). No obstante Veccio y Collins (1986) dentro de la TCCM
utilizaron el trabajo experimental de Walraven (1981) para determinar un límite superior
(𝜈𝑐 ,𝑚𝑎𝑥 ) para el máximo cortante que puede ser transmitido a través de una grieta abierta de
concreto reforzado (𝜈𝑐𝑖 ) basado en el tamaño máximo de agregado (𝑎𝑔 ), el ancho de grieta (𝑤)
y la resistencia a compresión del concreto (𝑓´𝑐). La expresión dada por la ecuación 2.20
conservadoramente desprecia la contribución del esfuerzo a compresión normal en la grieta
(𝑓𝑚𝑖 ).
0.18√𝑓´𝑐
𝜈𝑐𝑖 ≤ 𝜈𝑐 ,𝑚𝑎𝑥 = 2.20
24𝑤
0.31 +
𝑎𝑔 + 16
Para adaptar la ecuación 2.20 en la composición natural de los materiales de los muros de
mampostería, se debe considerar la interacción que existe entre las piezas de mampostería y las
juntas del mortero. Consecuentemente 𝑎𝑔 puede ser tomado como un promedio grueso de los
tamaños de los agregados (𝑎𝑔 ,𝑚𝑜 = 2.5𝑚𝑚 para mortero y 𝑎𝑔 ,𝑏𝑙 = 5.0𝑚𝑚 para las piezas de
mampostería). La contribución de cada tipo de materiales en la resistencia a cortante, varia con
24
el tipo de pieza de mampostería seleccionada, el tipo de mortero, el ángulo de inclinación de la
grieta con respecto a las juntas horizontales y que cantidad de material pasa a lo largo de la
grieta. Por simplicidad se hace uso de un volumen representativo de mampostería para calcular
un tamaño de agregado promedio (𝑎𝑔 ,𝑎𝑣 ) dado por la ecuación 2.21
Donde
𝑉𝑚𝑜 = Volumen del mortero a lo largo de las juntas tanto horizontales como verticales
Donde
𝑉𝑚𝑜 = Volumen del mortero a lo largo de las juntas tanto horizontales como verticales
25
𝑉𝑏𝑙 = Volumen solido de las piezas de mampostería
Remplazando 𝑎𝑔 ,𝑎𝑣 y 𝑓𝑎𝑣 de las ecuaciones 2.21 y 2.22 por 𝑎𝑔 y 𝑓´𝑐 ´ de la ecuación 2.20 se
puede obtener una ecuación que exprese un límite superior del cortante que se puede transmitir
a través de la trabazón de los agregados (ecuación 2.23).
0.18√𝑓𝑎𝑣
𝜈𝑚𝑖 ≤ 𝜈𝑚 ,𝑚𝑎𝑥 = 2.23
24𝑤
0.31 +
𝑎𝑔,𝑎𝑣 + 16
El termino final que se requiere para la determinación del cortante por la trabazón de los
agregados es el ancho de grieta (𝑤 = 𝑠𝜃 ∗ 𝜀1 ). El espacio promedio entre grietas está definido
por 𝑠𝜃 puede ser estimado con la ecuación 2.24 respaldan Vecchio y Collins (1986).
1
𝑠𝜃 =
sin(𝜃) cos(𝜃) 2.24
+
𝑠𝑦𝑐 𝑠𝑥𝑐
Donde
26
2.4.6 Relaciones constitutivas para el acero
El acero es un material que, ensayado de forma aislada, responde de forma muy semejante a
tensión y a compresión. Aunque el comportamiento real en ensayo uniaxial es más complejo,
para representar el comportamiento del acero de refuerzo, se asume un modelo bilineal común
utilizado en las formulaciones de la TCCM (Figura 2.14). Sin embargo, debido a que el acero de
refuerzo está orientado de manera paralela al eje coordenado propuesto, la relación del
esfuerzo y deformación del comportamiento del acero se relaciona con las deformaciones en
𝑥 y en 𝑦 (Figura 2.2).
Donde
Figura 2.14 Comportamiento del acero tanto en compresión como en tensión axial
27
3. Modelo de múltiples elementos verticales
Cada ensamble genérico de MVLEM (Figura 3.2) está compuesto de una serie de elementos
unidimensionales verticales que en conjunto simulan la respuesta a flexión y axial del modelo,
estos elementos están conectado a vigas rígidas tanto en la parte superior como en la inferior:
los dos elementos axiales que se encuentran en los extremos (𝑘𝑦1 , 𝑘𝑦𝑛 ) representan la rigidez
axial y a flexión de los castillos que confinan a la mampostería, mientras que los elementos
intermedios (𝑘𝑦2 , … , 𝑘𝑦𝑛−1 ) representan la rigidez axial y a flexión de la mampostería, que se
encuentra en el panel central. El número de elementos axiales puede ser incrementado para
una descripción más detallada de la sección del muro analizada.
28
Figura 3.2 Modelo de múltiples elementos verticales (MVLEM)
Para considerar la rigidez axial en dirección horizontal, al modelo antes mencionado (Figura 3.2)
se le agrega un elemento con rigidez 𝐾𝑥𝑖 unido de igual manera a vigas rígidas discretizando el
muro como se muestra en la Figura 3.3. Un solo ensamble de MVLEM contiene seis grados de
libertad (𝐺𝐷𝐿) correspondientes a dos de traslación y uno de rotación. En los casos en donde se
modele el muro con un solo ensamble de MVLEM (𝑚 = 1) se tendrían tres grados de libertad
para considerar las deformaciones axiales verticales (𝑣), las deformaciones axiales horizontales
(𝑢) y las rotaciones en la parte superior del elemento (𝜙). Así mismo si se consideran más
ensambles de MVLEM el número de 𝐺𝐷𝐿 del modelo se incrementa, del modo que para muros
empotrados en la base con 𝑚 = 2 existen 6 𝐺𝐷𝐿, con 𝑚=4 corresponden 12 𝐺𝐷𝐿. Para centrar
la atención en la aplicabilidad de la TCCM se utiliza solo un ensamble de elementos (𝑚 = 1)
obteniendo un sistema con 3 𝐺𝐷𝐿
29
Figura 3.3 Modelo utilizado en el estudio
Cada uno de los elementos verticales es analizado individualmente, aunque las condiciones de
compatibilidad y equilibrio se deben de cumplir en el muro completo.
La rotación relativa entre la parte superior y la inferior del muro ocurre alrededor de un punto
localizado en el eje centroidal del elemento a una altura 𝑐 ∗ ℎ. Las rotaciones y los
desplazamientos transversales causados por flexión son calculados con base en la curvatura del
muro, derivada del momento flexionante y de las propiedades de los materiales (Figura 3.5).
Los desplazamientos causados por cortante no dependen del valor de 𝑐.
30
desplazamientos laterales tanto en el rango elástico como en el inelástico (Vulcano, 1988). En
el caso de distribuciones triangulares de momento flexionante, el valor de 𝑐 = 0.5 sigue dando
buenas aproximaciones en el rango lineal, pero subestima los desplazamientos en el
comportamiento no lineal. Este problema puede ser resuelto “apilando” más elementos (𝑚) que
conlleva a un menor gradiente de momento (Fischinger, 1992) especialmente en las regiones en
donde se espera deformaciones no lineales. En el rango inelástico el problema es aún más crítico
debido a que incluso pequeños gradientes de momento pueden causar grandes distribuciones
de curvatura. Consecuentemente se deben de utilizar valores pequeños de 𝑐 (Vulcano, 1988)
para tomar en cuenta la distribución no lineal de curvatura a lo largo de la altura del muro. El
aumento del número (𝑚) de MVLEM en las zonas en zonas en donde se tenga una distribución
de momentos triangular y se esperen deformaciones no lineales (por ejemplo, los muros del
primer nivel en estructuras a base de muros) resulta en reducir la variación del momento y la
curvatura a lo largo del muro restándole influencia al parámetro 𝑐 en la respuesta del muro.
ℎ 0 ℎ ℎ 3.1
Δ𝛿𝑓𝑙 = ∫ 𝜔𝑥´𝑑𝑥´ = − ∫ 𝜔(ℎ − 𝑥)𝑑𝑥 = ℎ ∫ 𝜔𝑑𝑥 − ∫ 𝜔𝑥𝑑𝑥
0 ℎ 0 0
ℎ 3.2
Δϕ = ∫ 𝜔𝑑𝑥
0
31
Figura 3.6 Centro de rotación
𝑀𝑏
Donde 𝑎 = con 𝑀𝑏 y 𝑀𝑡 , momento en la base y el momento en la cara superior
𝑀𝑡
respectivamente. Para muros con rotación libre en la parte superior, el valor de 𝑐 derivado de la
ecuación 3.1 se toma como límite superior, mientras que el valor de 𝑐 = 0 puede ser tomado
como límite inferior en el caso donde se considera que la articulación plástica ocurre en la base
del muro. Al contrario, para muros en donde se tienen restricciones al giro en su parte superior,
la ecuación 3.1 no es válida y se recomienda modelar al muro con más elementos (𝑚) apilados
uno arriba de otro (Fischinger, 1992) para restarle influencia al parámetro 𝑐 o para
aproximaciones menos precisas se puede considerar 𝑐 = 1 para despreciar el desplazamiento a
flexión Figura 3.7a y que solo el desplazamiento debido a cortante contribuya con el
desplazamiento total del muro.
Para especímenes en donde el momento en la parte superior del muro es cero se usa un valor
de 𝑐 = 1/3 basado en la respuesta de modelos experimentales (Vulcano, 1988).
Asimismo se estima el desplazamiento total del muro (δ) como la suma del desplazamiento
provocado por la flexión (𝛿𝑓𝑙 ), más el desplazamiento provocado por el cortante (𝛿𝑠ℎ ) derivando
en la siguiente relación (ecuación 3.2):
32
𝛿 = 𝛿𝑓𝑙 + 𝛿𝑠ℎ = 𝜙(1 − 𝑐)ℎ + 𝛾𝑥𝑦 ℎ 3.2
Donde:
𝜙 = Rotación a flexión
33
Desde el punto de vista mecánico, cada uno de los subelementos de modelo de múltiples
elementos verticales se puede representar como:
a) Una serie de elementos axiales, cada uno con rigidez axial 𝐾𝑦,𝑖 y un resorte horizontal
posicionado a una altura 𝑐 ∗ ℎ (Figura 3.8), con rigidez 𝐾𝐻 . Los elementos verticales
describen globalmente la rigidez axial y a flexión del elemento en la dirección vertical,
mientras que el resorte horizontal describe la rigidez a cortante.
b) Un elemento horizontal, con rigidez 𝐾𝑥 , el cual describe a la rigidez axial del muro en
dirección horizontal (Figura 3.8).
1 3.3
𝜀𝑦,𝑖 = (𝜈 − 𝜙𝑥𝑖 )
ℎ
𝑢 3.4
𝜀𝑥 =
𝑙
𝛿 3.5
𝛾𝑥𝑦 = − 𝜙(1 − 𝑐)
ℎ
𝛾𝑥𝑦
tan(2𝜃) = 3.6
𝜀𝑦,𝑖 − 𝜀𝑥
34
Figura 3.9 Componentes de desplazamiento
A partir de las deformaciones promedias de cada uno de los elementos verticales y horizontales,
se estiman las deformaciones principales 𝜀1 y 𝜀2 y los esfuerzos principales 𝜎1 y 𝜎2 de acuerdo
con las formulaciones descritas anteriormente en la TCCM. Finalmente se evalúan los esfuerzos
𝜎𝑥,𝑖 y 𝜎𝑦,𝑖 en el sistema coordenado 𝑥, 𝑦 y se comprueba el equilibrio general del muro con las
siguientes condiciones de equilibrio (ecuaciones 3.7-3.10):
∑ 𝐾𝑦 ,𝑖 ∗ ℎ ∗ 𝜀𝑦 ,𝑖 = 𝑁 3.7
𝑖=1
𝑛
𝐾𝐻 ∗ (ℎ ∗ 𝛾𝑥𝑦 ) ∗ (1 − 𝑐) ∗ ℎ − ∑ 𝐾𝑦 ,𝑖 ∗ ℎ ∗ 𝜀𝑦 ,𝑖 ∗ 𝑥𝑖 = 𝑀 3.8
𝑖=1
𝑛
∑ 𝐾𝑥 ,𝑖 ∗ 𝑙 ∗ 𝜀𝑥 = 0 3.9
𝑖=1
𝐾𝐻 ∗ ℎ ∗ 𝛾𝑥𝑦 = 𝑉 3.10
35
En donde
1 𝐴𝑥 ,𝑖 𝜎𝑥 𝑖 3.12
𝐾𝑥 ,𝑖 = ∗
𝑙 𝜀𝑥
1 𝐴𝑦 ,𝑖 ∗ 𝜎𝑦 ,𝑖 3.13
𝐾𝑦 ,𝑖 = ∗
ℎ 𝜀𝑦 ,𝑖
En donde
∑ 𝐴𝑦 ,𝑖 ∗ 𝜎𝑦 ,𝑖 = 𝑁 3.14
𝑖=𝑖
𝑛
∑ 𝜒 ∗ 𝐴𝑦 ,𝑖 ∗ 𝜏𝑥𝑦 ,𝑖 = 𝑉 3.16
𝑖=1
36
4. Estrategia de solución
Para el análisis de los muros de mampostería confinada con acero de refuerzo se siguieron dos
analogías. En la primera se consideraron únicamente esfuerzos y deformaciones promedios
(áreas y distancias lo suficientemente grandes para abarcar varias grietas) despreciando los
efectos locales que se presentan en las grietas. Este procedimiento fue utilizado para analizar
muros que presentaron una falla dominada por el mecanismo de tensión diagonal con un patrón
de fallas distribuidas uniformemente (falla deseada). Por otro lado, la segunda analogía se utiliza
para poder considerar la reducción en la resistencia de los muros que tienen una cuantía elevada
(generalmente mayores al 0.2%), que aunque tienen más acero distribuido horizontalmente en
las juntas de las piezas de mampostería, se ha observado que la resistencia máxima alcanzada
por los muros con esta característica es menor a los muros que tienen las mismas condiciones
de geometría, carga y propiedades mecánicas pero menos cuantía de acero horizontal
(Cruz,2015).
Para los dos procedimientos, basándose en la teoría del campo de compresión modificado, los
esfuerzos de compresión que son tomados por la mampostería y por los castillos (𝜎2 ) son
determinados por las ecuaciones (2.12 y 2.16).
Para el primer caso en donde se desprecian los efectos locales a lo largo de las superficies de las
grietas, el esfuerzo principal a tensión (𝜎1 ) se calcula con las ecuaciones 2.14 y 2.15, y para el
segundo procedimiento se anexaron las siguientes consideraciones que toman en cuenta el
cortante y la trabazón de los agregados a lo largo de la superficie de las grietas:
𝜈𝑚𝑖 4.1
𝜎1 ≤ (𝐹𝑥 − 𝜎𝑠𝑥 )𝜌𝑥 −
tan(𝜃)
37
Alternativamente si el ancho de grieta 𝑤, es muy pequeño; el valor de 𝜈𝑚𝑖 es muy grande pero
existe una capacidad de reserva reducida. Si se sustituye la ecuación 4.2 en la ecuación 4.1
también se tiene el límite siguiente (ecuación 4.3):
𝜎1 ≤ (𝐹𝑥 − 𝜎𝑠𝑥 )𝜌𝑥 sin2 (𝜃) + (𝐹𝑦 − 𝜎𝑠𝑦 )𝜌𝑦 cos 2 (𝜃) 4.3
Finalmente se necesita para la obtención del equilibrio el cortante transferido por la trabazón
de los agregados que se puede determinar sustituyendo la ecuación 4.1 en la ecuación 4.2 y
resolviendo para 𝜈𝑚𝑖 sujeto al límite 𝜈𝑚 ,𝑚𝑎𝑥 (ecuación 2.23).
Por otro lado, para poder tomar en cuenta los efectos locales (ecuación 2.23) se necesita el
espaciamiento promedio vertical y horizontal de las grietas (𝑠𝑦𝑐 , 𝑠𝑥𝑐 ) del macroelemento, los
cuales pueden reflejar de forma anticipada el comportamiento global del muro. No obstante,
se tiene que hacer una distinción entre los muros en los que predominan las deformaciones a
flexión contra los muros en donde predominan las deformaciones a corte.
En cuanto al parámetro de separación de grieta horizontal (𝑠𝑥𝑐 ), se hace una distinción similar
de acuerdo con el tipo de comportamiento esperado del muro. Los muros en cantiléver que se
esperan tengan un comportamiento predominante a flexión (es decir ℎ𝑒𝑓𝑓 /𝐿 > 1) se les asigna
un parámetro de espaciamiento de grieta horizontal igual a la separación del acero de refuerzo
horizontal tal que 𝑠𝑥𝑐 = 𝑠𝑥 . Del mismo modo en muros en cantiléver cuadrados (ℎ𝑒𝑓𝑓 /𝐿 ≤ 1),
así como los muros sujetos a doble curvatura, se les asigna igual un parámetro de espaciamiento
horizontal promedio igual a 𝑠𝑥𝑐 = 𝑠𝑥 .
38
Para efecto del estudio de ambos procedimientos se considera en el modelo únicamente las
deformaciones dentro del muro a partir de los 3 grados de libertad (𝑢, 𝑣, 𝜙), es decir que solo se
considera un ensamble de MVLEM (𝑚 = 1) empotrado en su parte inferior (Figura 3.8).
Suponiendo que la deformación por esfuerzo cortante es uniforme a lo largo de la sección y que
las secciones planas permanecen planas, la deformación axial (𝜀𝑦 ) se calcula para cada elemento
vertical y la distorsión por cortante se calcula para el muro completo (𝛾𝑥𝑦 ) basándose en los
grados de libertad prescritos en la etapa de análisis actual.
1. Seleccionar un valor de δ
2. Estimar los desplazamientos 𝑢, 𝑣, 𝜙
3. Se calculan los valores promedio de deformación 𝜀𝑥 , 𝜀𝑦 , 𝛾𝑥𝑦 con las ecuaciones 3.3,3.4
y 3.5
4. Se calcula en ángulo de inclinación 𝜃 con la ecuación 3.6
5. Se calculan las deformaciones principales a tensión y a compresión 𝜀1 , 𝜀2 con las
ecuaciones 2.1-2.4
6. Se calcula los esfuerzos en el acero 𝜎𝑠𝑥 , 𝜎𝑠𝑦 con las ecuaciones 2.25 o 2.26
7. Se calcula el esfuerzo principal a compresión ya sea del concreto de los castillos o de la
mampostería 𝜎2 con las ecuaciones 2.12 o 2.16
8. Se calcula el esfuerzo principal a tensión ya sea del concreto de los castillos o de la
mampostería 𝜎1 con las ecuaciones 2.18-2.19 para los castillos, con las ecuaciones 2.14
y 2.15 para el procedimiento en donde no se consideran las fallas locales o el mínimo
valor de las ecuaciones2.14,2.15 y 4.1-4.3 para donde se deben de considerar los efectos
locales en la mampostería.
9. Se comprueba el equilibrio con las ecuaciones 3.14-3.16
10. Si no se cumple el equilibrio se varían los desplazamientos 𝑢, 𝑣, 𝜙 y se regresa al paso 3
11. Se calcula el valor de la fuerza cortante resultante 𝑉 con la ecuación 3.16
12. Se selecciona el siguiente valor de δ y se repiten los pasos 2-11
𝑠 𝑗+1 = 𝑠 𝑗 − 𝑊 ∗ 𝑟 𝑗 4.5
En donde 𝑗 está referido al número de ciclo en donde se encuentra la iteración, 𝑠 = [𝑢, 𝑣, ϕ]𝑇
es el vector de desplazamientos que se varía y el vector 𝑟 es el vector residual de fuerzas que
está definido como:
39
𝑛
∑ 𝐴𝑦,𝑖 𝜎𝑦,𝑖 − 𝑁
𝑖=1
𝑟1 𝑛
4.6
𝑟 = (𝑟2 ) = ∑ 𝐴𝑦,𝑖 [𝜒𝜏𝑥𝑦 (1 − 𝑐)ℎ − 𝑥𝑖 𝜎𝑦,𝑖 ] − 𝑀
𝑟3 𝑖=1
𝑛
∑ 𝐴𝑥,𝑖 𝜎𝑥,𝑖
[ 𝑖=1 ]
Y 𝑊 está definido por el Jacobiano del vector 𝑟:
𝜕𝑟1 𝜕𝑟1 𝜕𝑟1
𝜕𝑢 𝜕𝜈 𝜕𝜙
𝜕𝑟2 𝜕𝑟2 𝜕𝑟2 4.7
𝑊=
𝜕𝑢 𝜕𝜈 𝜕𝜙
𝜕𝑟3 𝜕𝑟3 𝜕𝑟3
[ 𝜕𝑢 𝜕𝜈 𝜕𝜙 ]
El proceso iterativo se detiene hasta que el vector de fuerzas residual 𝑟 sea tan pequeño como
una tolerancia especificada (1𝑥10−4 ), por lo general, se requieren del orden de dos iteraciones
para la convergencia a ceros del vector residual. En la Figura 4.1 se muestra de manera
ilustrativa el procedimiento por cada elemento vertical a seguir en ambas analogías para la
obtención del equilibrio interno del modelo, en donde se tiene en primera instancia el panel del
muro deformado en función de sus componentes 𝜀𝑥 , 𝜀𝑦 y 𝛾𝑥𝑦 las cuales se calcularon con las
ecuaciones 3.3, 3.4 y 3.5, a partir de estos componentes de deformación, se calculan las
deformaciones principales del panel 𝜀1 y 𝜀2 así como el ángulo 𝜃, una vez que se obtiene el
ángulo de inclinación, se pueden relacionar los componentes de deformaciones principales con
los de esfuerzos principales 𝜎1 y 𝜎2 haciendo uso de las propiedades constitutivas de los
materiales, ya que se tienen los esfuerzos principales, se estima el equilibrio del panel en el eje
coordenado 𝑥, 𝑦 y se le suman las componentes de esfuerzo del acero por compatibilidad de
deformaciones.
40
Figura 4.1 Procedimiento a seguir para el equilibrio interno del muro en ambas analogías
41
Se expone a continuación el diagrama de flujo para los muros en donde no se considera la falla
local (Figura 4.2) y el diagrama de flujo para los muros en donde si se consideran los efectos
locales (Figura 4.3), para la solución numérica a detalle de los muros de mampostería con acero
de refuerzo. Dichos diagramas son la base para la programación del algoritmo en cualquier
paquete de programación.
En el primer paso de los algoritmos, se escoge un desplazamiento total 𝛿 con el cual se inicia el
proceso iterativo, en todos los muros se parte de un desplazamiento de 𝛿 = 0.1 𝑚𝑚 y se va
aumentando con una tasa de aumento igual a Δ𝛿 = 0.005 hasta llegar al desplazamiento
deseado para cada muro. Para la primera estimación de los desplazamientos 𝑢, 𝑣, 𝜙 se eligen
dos puntos que estén muy cercanos entre si y cercanos a cero (ej. 𝑠𝑗 = [0.001, −0.1,1 ∗ 10−6 ]
y 𝑠𝑘 = [0.0009, −0.9,0.9 ∗ 10−6 ]), luego se sigue el procedimiento plasmado en la sección
anterior o en los diagramas de flujo hasta llegar al equilibrio del muro (paso 9), si el equilibrio
no se cumple se varia el vector 𝑠 con ayuda del Jacobiano. Para el cálculo del Jacobiano se debe
de calcular las derivadas parciales del vector 𝑟 (ecuación 4.6) para lo cual se tiene que repetir
todo el procedimiento (desde el paso 2) tomando en cuenta cuanto varia el vector 𝑟 con
respecto a los componentes del vector 𝑠 (es decir 𝑢, 𝑣, 𝜙), por ejemplo, para la obtención de la
variación con respecto a los desplazamientos se tomara como la diferencia que existe entre los
dos puntos propuestos (Δs = [0.001, −0.1,1 ∗ 10−6 ] − [0.0009, −0.09,0.9 ∗ 10−6 ]). Si se
𝜕𝑟1 𝜕𝑟2 𝜕𝑟3
quiere obtener , , se tendrá que repetir los pasos 3 al 9 con la variación del
𝜕𝑢 𝜕𝑢 𝜕𝑢
componente de desplazamiento 𝑢 con respecto a 𝑟 (Δu = 0.001 − 0.0009) traducido en un
incremento del componente 𝑢, es decir 𝑢2 = 𝑢 + Δ𝑢 dejando fijos 𝑣 y 𝜙 (−0.1,1 ∗ 10−6 ). De
𝜕𝑟1 𝜕𝑟2 𝜕𝑟3
igual manera para los componentes , , se repiten los pasos 3 al 9 dejando fijos los
𝜕𝑣 𝜕𝑣 𝜕𝑣
−6
desplazamientos 𝑢 y 𝜙 (0.001,1 ∗ 10 ) y el desplazamiento 𝑣 tomará el valor de 𝑣2 = Δ𝑣 + 𝑣
𝜕𝑟1 𝜕𝑟2 𝜕𝑟3
donde Δ𝑣 = (−0.1 − (−0.09)). Lo mismo sucede con , , dejando fijo los valores de 𝑢
𝜕𝜙 𝜕𝜙 𝜕𝜙
y 𝑣 (0.001, −0.1) y realizando los pasos 3 al 9 sumándole a 𝜙 el incremento respectivo de Δ𝜙 =
1 ∗ 10−6 − 0.9 ∗ 10−6 .
42
Inicio Si i=1 o i=n
𝑓𝑚 (𝜃)
2𝜀2 𝜀2 2
= 2.66 ∗ 10−4 𝜃 2 + (−3.04 ∗ 10−2 )𝜃 + 1.58 𝑠𝑖 𝜃 > 45° 𝜎2 = 𝛽𝑐 𝑓𝑐 [ −( ) ]
Para δ de 𝑓𝑚 (90°) 𝜀𝑐𝑜𝑐 𝜀𝑐𝑜𝑐
0.01 has ta DD
2𝜀2 𝜀2 2
𝜎2 = 𝛽𝑓𝑚 (𝜃) [ −( ) ]
𝜀𝑐𝑜 𝜀𝑐𝑜 𝜎1 = 𝐸𝑐 𝜀1 0 ≤ 𝜀1 ≤ 𝜀𝑐𝑟
𝑓𝑐𝑟
𝜎1 = 𝜀1 > 𝜀𝑐𝑟
1 + √200𝜀1
𝜎1 = 𝐸𝑚 𝜀1 0 ≤ 𝜀1 ≤ 𝜀𝑐𝑟
𝑢, 𝑣, 𝜙
𝜎1 = 𝑓𝑡 𝑒 −𝐶(𝜀 1 −𝜀 𝑐𝑟 ) 𝜀1 > 𝜀𝑐𝑟
Para i de 1
has ta n
𝜎𝑠 = 𝜀𝑠 𝐸𝑠 𝜀𝑠 ≤ 𝜀𝑠𝑜
1
𝜀𝑦,𝑖 = (𝜈 − 𝜙𝑥𝑖 ) 𝜎𝑠 = 𝐹𝑦 𝜀𝑠 ≤ 𝜀𝑠𝑜 ≤ 𝜀𝑠𝑢
ℎ
𝑢
𝜀𝑥 =
𝑙
𝛿
𝛾𝑥𝑦 = − 𝜙(1 − 𝑐)
ℎ
𝛾𝑥𝑦
tan(2𝜃) = 𝑛
𝜀𝑦 ,𝑖 − 𝜀𝑥
∑ 𝐴𝑦 ,𝑖 𝜎𝑦 ,𝑖 − 𝑁
𝑖=1
𝑟1 𝑛
𝛾𝑥𝑦 2
𝑅 = √( ) + (𝐶𝑒 − 𝜀𝑦 )2
2
𝜀1 = 𝐶𝑒 + 𝑅
𝜕𝑟1 𝜕𝑟1 𝜕𝑟1
𝜀2 = 𝐶𝑒 − 𝑅 no si 𝜕𝑢 𝜕𝜈 𝜕𝜙
𝛾𝑥𝑦 Si r ˃tolerancia
tan(2𝜃) =
𝜀𝑦 − 𝜀𝑥
𝜕𝑟2 𝜕𝑟2 𝜕𝑟2
𝑊=
𝜕𝑢 𝜕𝜈 𝜕𝜙
𝜕𝑟3 𝜕𝑟3 𝜕𝑟3
[ 𝜕𝑢 𝜕𝜈 𝜕𝜙 ]
𝑠 𝑗 +1 = 𝑠 𝑗 − 𝑊 ∗ 𝑟 𝑗
Fin
Figura 4.2 Diagrama de flujo para la solución numérica sin considerar efectos locales
43
Inicio Si i=1 o i=n
2𝜀2 𝜀2 2
𝑓𝑚 (𝜃) 𝜎2 = 𝛽𝑐 𝑓𝑐 [ −( ) ]
= 2.66 ∗ 10−4 𝜃 2 + (−3.04 ∗ 10−2 )𝜃 + 1.58 𝑠𝑖 𝜃 > 45° 𝜀𝑐𝑜𝑐 𝜀𝑐𝑜𝑐
Para δ de 𝑓𝑚 (90°)
0.01 has ta DD
2𝜀2 𝜀2 2
𝜎2 = 𝛽𝑓𝑚 (𝜃) [ −( ) ]
𝜀𝑐𝑜 𝜀𝑐𝑜 𝐸𝑐 𝜀1 0 ≤ 𝜀1 ≤ 𝜀𝑐𝑟
𝑓𝑐𝑟
𝐸𝑚 𝜀1 0 ≤ 𝜀1 ≤ 𝜀𝑐𝑟 𝜎1 = 𝜀1 > 𝜀𝑐𝑟𝑐
1 + √200𝜀1
𝑢, 𝑣, 𝜙 𝜎1 = 𝑓𝑡 𝑒 −𝐶(𝜀 1 −𝜀𝑐𝑟 ) 𝜀1 > 𝜀𝑐𝑟 𝜎1 = 𝑚𝑖𝑛 𝜈𝑐𝑖
𝜈𝑚𝑖 (𝐹𝑥 − 𝜎𝑠𝑥 )𝜌𝑥 −
𝜎1 = 𝑚𝑖𝑛 (𝐹𝑥 − 𝜎𝑠𝑥 )𝜌𝑥 − tan(𝜃)
tan(𝜃)
(𝐹𝑦 − 𝜎𝑠𝑦 )𝜌𝑦 + 𝜈𝑐𝑖 tan(𝜃)
(𝐹𝑦 − 𝜎𝑠𝑦 )𝜌𝑦 + 𝜈𝑚𝑖 tan (𝜃)
(𝐹𝑥 − 𝜎𝑠𝑥 )𝜌𝑥 sin2 (𝜃) + (𝐹𝑦 − 𝜎𝑠𝑦 )𝜌𝑦 cos2 (𝜃)
(𝐹𝑥 − 𝜎𝑠𝑥 )𝜌𝑥 sin2 (𝜃) + (𝐹𝑦 − 𝜎𝑠𝑦 )𝜌𝑦 cos2 (𝜃)
Para i de 1
has ta n
1
𝜀𝑦,𝑖 = (𝜈 − 𝜙𝑥𝑖 )
ℎ
𝑢
𝜀𝑥 =
𝑙
𝛿
𝛾𝑥𝑦 = − 𝜙(1 − 𝑐)
ℎ
𝛾𝑥𝑦
tan(2𝜃) = 𝑛
𝜀𝑦 ,𝑖 − 𝜀𝑥
∑ 𝐴𝑦 ,𝑖 𝜎𝑦 ,𝑖 − 𝑁
𝑖=1
𝑟1 𝑛
𝛾𝑥𝑦 2
𝑅 = √( ) + (𝐶𝑒 − 𝜀𝑦 )2
2
𝜀1 = 𝐶𝑒 + 𝑅
𝜕𝑟1 𝜕𝑟1 𝜕𝑟1
𝜀2 = 𝐶𝑒 − 𝑅 no si 𝜕𝑢 𝜕𝜈 𝜕𝜙
𝛾𝑥𝑦 Si r ˃tolerancia
tan(2𝜃) =
𝜀𝑦 − 𝜀𝑥
𝜕𝑟2 𝜕𝑟2 𝜕𝑟2
𝑊=
𝜕𝑢 𝜕𝜈 𝜕𝜙
𝜎𝑠 = 𝜀𝑠 𝐸𝑠 𝜀𝑠 ≤ 𝜀𝑠𝑜
𝜕𝑟3 𝜕𝑟3 𝜕𝑟3
[ 𝜕𝑢 𝜕𝜈 𝜕𝜙 ]
𝜎𝑠 = 𝐹𝑦 𝜀𝑠 ≤ 𝜀𝑠𝑜 ≤ 𝜀𝑠𝑢
𝑠 𝑗 +1 = 𝑠 𝑗 − 𝑊 ∗ 𝑟 𝑗
Fin
Figura 4.3 Diagrama de flujo para la solución numérica considerando efectos locales
44
Una vez que se tiene el Jacobiano, se obtiene el nuevo vector de desplazamientos 𝑠 utilizando
el esquema iterativo de Newton-Raphson 𝑠 𝑗+1 = 𝑠 𝑗 − 𝑊 ∗ 𝑟 𝑗 y se repite el proceso ahora
tomando el vector 𝑠𝑗 al nuevo vector procedente de la ecuación 4.5 y al vector 𝑠𝑘 al antiguo
vector 𝑠𝑗 , repitiendo todos los pasos hasta que se cumpla el equilibrio reflejado en el vector 𝑟.
En conclusión, para cada iteración se realiza 4 veces el proceso del diagrama de flujo para la
obtención de todos los parámetros necesarios para el esquema de iteración como se muestra
en la Tabla 4.1.
𝑟1
1 𝑢, 𝑣, 𝜙 𝑟
𝑟 = ( 2)
𝑟3
𝜕𝑟1
𝜕𝑢
𝜕𝑟 𝜕𝑟2
2 𝑢 = 𝑢 + Δ𝑢 , 𝑣, 𝜙 =
𝜕𝑢 𝜕𝑢
𝜕𝑟3
( 𝜕𝑢 )
𝜕𝑟1
𝜕𝑣
𝜕𝑟 𝜕𝑟2
3 𝑢, 𝑣 = 𝑣 + Δ𝑣 , 𝜙 =
𝜕𝑣 𝜕𝑣
𝜕𝑟3
( 𝜕𝑣 )
𝜕𝑟1
𝜕𝜙
𝜕𝑟 𝜕𝑟2
4 𝑢, 𝑣, 𝜙 = 𝜙 + Δ𝜙 =
𝜕𝜙 𝜕𝜙
𝜕𝑟3
( 𝜕𝜙 )
Cuando se cumpla el equilibrio o que el vector 𝑟 sea menor a una tolerancia especifica (0.001)
para el desplazamiento total elegido (𝛿), se pasa al siguiente desplazamiento cercano (𝛿2 ) y se
repite todo el proceso hasta llegar nuevamente al equilibrio. Este procedimiento se repite hasta
llegar al desplazamiento deseado (𝛿𝑛 ).
45
5 Casos analizados
Para ilustrar la aplicabilidad y comprobar la fiabilidad del modelo adoptado para muros de
mampostería confinada con acero de refuerzo, se analizaron distintos muros (Cruz, 2015)
probados en el Centro Nacional de Prevención de Desastres en el Distrito Federal. El estudio
experimental constó de 5 muros de mampostería confinada con piezas industrializadas de block
de concreto que fueron probados en el laboratorio de Estructuras Grandes del CENAPRED ante
cargas cíclicas laterales, donde la principal variable analizada fue la cuantía de acero de refuerzo
horizontal ubicado en las juntas horizontales de los muros y con cuantía vertical nula en la
mampostería. El objetivo principal de ese estudio fue conocer el comportamiento del refuerzo
horizontal y su eficiencia ante cargas laterales en muros de mampostería confinada.
Los muros tienen una relación de aspecto igual a 1 con medidas de 2.5 𝑥 2.5 metros con 12
centímetros de espesor. Para las piezas de mampostería se utilizaron piezas liso multiperforada
de concreto con 12 celdas (Figura 5.1) con dimensiones nominales de 11.9 𝑥 11.9 𝑥 24
centímetros. Las dimensiones de los castillos fueron de 15 𝑥 12 y de la dala 25 𝑥 12 centímetros.
El mortero en las juntas se utilizó una relación cemento: cal: arena de 1:1/4:4 para que sea
considerado como un mortero tipo I según el reglamento de construcciones para el Distrito
Federal 2004. El concreto que se utilizó en los catillos y la dala tiene una resistencia de diseño a
compresión de 𝑓´𝑐 = 350𝑘𝑔/𝑐𝑚2 , limitando la aparición del mecanismo de falla debido a la
flexión.
46
Figura 5.2 Dimensiones de los muros analizados
Para el refuerzo de los castillos se utilizaron 4 barras del #6 y como refuerzo transversal, estribos
del #2 cada 7 cm en los extremos y a cada 18 en la parte interna de la sección de los castillos con
límite de fluencia 𝐹𝑦 = 4200 𝑘𝑔/𝑐𝑚2 . El refuerzo horizontal que se ocupó en cada muro se
muestra en la Tabla 5.1, y los muros no cuentan con acero en dirección vertical en su interior
(𝜌𝑦 = 0).
Separación
Modelo 𝝆𝒉 𝝆𝒉 𝑭 𝒚 Varillas
hiladas cm
0.0385%
MB-1 2.31 1 x 5/32" (0.12 cm) 2 26
0.1026%
MB-2 6.15 1/4" (0.32 cm) 2 26
0.1538%
MB-3 7.88 2 x 3/16"+ 5/32" (0.48 cm) 2 26
0.2628%
MB-5 12.31 2 x 1/4" + 3/16" (0.82 cm) 2 26
Tabla 5.1 Características del refuerzo horizontal de los muros analizados
Los muros fueron ensayados en voladizo, con un esfuerzo constante en la parte superior del
muro de 4.7 𝑘𝑔/𝑐𝑚2 que simulaba la carga axial.
47
tanto del concreto como de la mampostería a tensión y a compresión (𝜀𝑐𝑟 , 𝜀𝑐𝑟𝑐 ), la deformación
unitaria donde se aprecia la carga máxima en compresión tanto de la mampostería como del
concreto (𝜀𝑐𝑜 , 𝜀𝑐𝑜𝑐 ), la resistencia promedio de los agregados de la mampostería (𝑓𝑏𝑙 , 𝑓𝑚𝑜 ), así
como los detalles de las propiedades del acero de refuerzo que se utiliza en los castillos y la dala
como en el interior de la mampostería (𝐹𝑦𝑦 , 𝐹𝑦𝑥 , 𝐸𝑠 ).
Propiedades
𝒇𝒎(𝟗𝟎) =11.2 𝑀𝑃𝑎
𝒇´𝒄 =35 𝑀𝑃𝑎
𝒇𝒃𝒍 =25.536 𝑀𝑃𝑎
𝒇𝒎𝒐 =20.496 𝑀𝑃𝑎
𝑭𝒚 (castillos y dala) =411 𝑀𝑃𝑎
𝑭𝒙 (Refuerzo de la
=588.42 𝑀𝑃𝑎
mampostería)
𝑬𝒎 =6700 𝑀𝑃𝑎
𝑬𝒄 =25000 𝑀𝑃𝑎
𝑬𝒔 =200000 𝑀𝑃𝑎
𝜺𝒄𝒐 =0.002
𝜺𝒄𝒐𝒄 =0.003
𝒂𝒈 =9.525 𝑚𝑚
𝒂𝒈 ,𝒎𝒐 =2.5 𝑚𝑚
𝒂𝒈 ,𝒃𝒍 =5 𝑚𝑚
𝒔𝒙𝒄 =240 𝑚𝑚
𝒔𝒚𝒄 =260 𝑚𝑚
𝑪 =150
𝝌 =7/8
𝒄 =1/3
Tabla 5.2 Propiedades utilizadas (Cruz, 2015)
Los especímenes fueron sometidos ante cargas laterales cíclicas alternadas para conocer la
participación del acero de refuerzo horizontal en la resistencia y capacidad de deformación
inelástica de los mismos.
Todos los muros eran confinados con castillos exteriores, con la misma pieza, configuración
geométrica, relación de aspecto, resistencia en el mortero y concreto de elementos confinantes,
refuerzo longitudinal y transversal de los elementos confinantes, cargas verticales e historia de
cargas laterales cíclicas reversibles, sólo variando la cuantía de acero de refuerzo horizontal en
la mampostería.
Como resultados de los muros probados ante cargas cíclicas reversibles se obtuvieron las
siguientes curvas (envolventes). En el eje de las abscisas se encuentra el desplazamiento lateral
total del muro en milímetros y en el eje de las ordenadas esta la carga lateral en kilo Newton,
en el título de las curvas (Figura 5.3 a Figura 5.9) se pone la cuantía de acero horizontal utilizada
en cada muro. En las Figura 5.4, Figura 5.6, Figura 5.8 y Figura 5.10 se ilustra el estado final de
los muros de mampostería confinada con acero de refuerzo (Cruz, 2015)
48
MURO MB-1 [Ρ=0.0385%]
350
300
CARGA LATERAL [KN]
250
200
150
100
50
0
0 2 4 6 8 10 12 14 16
DESPLAZAMIENTO [mm]
49
MURO MB-2 [Ρ=0.1026%]
400
350
300
CARGA LATERAL [KN]
250
200
150
100
50
0
0 5 10 15 20 25 30 35 40 45
DESPLAZAMIENTO [mm]
50
MURO MB-3 [Ρ=0.1538%]
450
400
350
CARGA LATERAL [KN]
300
250
200
150
100
50
0
0 5 10 15 20 25 30 35 40 45
-50
DESPLAZAMIENTO [mm]
51
MURO MB-5 [Ρ=0.2628%]
450
400
350
300
CARGA LATERAL [KN]
250
200
150
100
50
0
0 5 10 15 20 25 30 35 40 45 50
-50
DESPLAZAMIENTO [mm]
52
RESUMEN
Muro1 Muro 2 Muro 3 Muro5
450
400
350
CARGA LATERAL [KN]
300
250
200
150
100
50
0
0 5 10 15 20 25 30 35 40 45 50
-50
DESPLAZAMIENTO [mm]
RESUMEN
Muro1 Muro 2 Muro 3 Muro5
450
400
350
CARGA LATERAL [KN]
300
250
200
150
100
50
0
-5 0 5 10 15 20 25 30 35 40 45 50
-50
DESPLAZAMIENTO [mm]
53
Los muros varían su cuantía de acero horizontal de menor a mayor siendo el MB-1 el que tiene
menor cuantía y el MB-5 el que tiene la mayor cuantía. En la Figura 5.11 se muestra el resumen
de todos los muros considerados, en donde se puede observar que la resistencia ante cargas
laterales aumenta a medida de que aumenta la cuantía de acero horizontal exceptuando al muro
MB-5 que tiene una cuantía notablemente mayor en comparación de los otros tres muros. Este
fenómeno está gobernado principalmente a la resistencia a compresión y a tensión de la
mampostería, es decir, la capacidad que tiene la mampostería para transferir las cargas
(considerada como una falla local), ya que al ir aumentando el acero de refuerzo horizontal, se
llegará a un punto en donde la falla del muro se regirá por el aplastamiento de la mampostería
en la zona a compresión y no por la resistencia última del acero de refuerzo.
Dentro del trabajo de Cruz (2015) se presentó una evaluación detallada de la evolución del daño
de cada uno de los especímenes, resumiendo el comportamiento en tres puntos principales que
son: el primer agrietamiento diagonal, la resistencia máxima y la resistencia última.
Los muros probados arrojaron los siguientes valores para sus tres puntos característicos (Tabla
5.3)
𝑽𝒇𝒂𝒍𝒍𝒂
𝒑𝒉 𝒑𝒉 𝒇𝒚𝒉 𝑽𝒂𝒈𝒓 𝑽𝒂𝒈𝒓 𝑽𝒎á𝒙 𝑽𝒎á𝒙 𝑽𝒖 𝑽𝒎á𝒙 𝑽𝒇𝒂𝒍𝒍𝒂
Muro (𝟎. 𝟖𝑽𝒎á𝒙 )
[%] [kg/cm ] 2 [t] [kN] [t] [kN] [t] 𝑽𝒂𝒈𝒓 𝑽𝒂𝒈𝒓
[t]
MB-1 0.0385 2.3 17.6 172.66 32.15 315.39 32.15 32.15 1.83 1.83
MB-2 0.1026 6.2 20.15 197.67 37.7 369.84 30.16 25.8 1.87 1.50
MB-3 0.1538 9.2 24.25 237.89 42.95 421.34 34.36 29.35 1.77 1.42
MB-5 0.2628 15.8 23.7 232.5 39.6 388.48 31.68 23.35 1.67 1.34
Tabla 5.3 valores de cortante de los muros estudiados
En el trabajo, Cruz pudo concluir lo siguiente acerca del comportamiento de los especímenes:
Con la cuantía de refuerzo horizontal hay una distribución menos concentrada y más
dispersa en el área del muro con grietas de menor espesor y se aumenta la carga de
agrietamiento diagonal.
54
La carga máxima resistida de los especímenes aumento con el refuerzo horizontal hasta
el muro MB-3, en cuantías más elevadas no se logró un aumento en la carga máxima
resistida.
A partir del muro MB-2, los especímenes presentaron una falla en la unión de la losa con
la dala, y para distorsiones arriba de 0.8% la dala se dañó severamente en los extremos,
indicando que para muros con refuerzo horizontal, es necesario un diseño más
elaborado del refuerzo en las dalas y la losa.
En los muros con elevadas cuantías de refuerzo (MB-5) se presentaron grietas
horizontales en los muros, que se deben a efectos de deslizamiento.
El muro MB-1 presento una falla frágil, al romperse todas las varillas en los puntos que
coincidían con las grietas principales. Se observó en algunas varillas dos rupturas,
indicando la posibilidad de fuerzas de adherencia entre el mortero y la varilla.
En el muro MB-3 y en el MB-5 se presentó daño severo en las piezas debido a la
concurrencia y movimiento de las grietas por causa de las cargas cíclicas reversibles
Las curvas histeréticas fueron casi simétricas para ciclos positivos y negativos en los
modelos que contaron con refuerzo horizontal con lazos estables en los ciclos de
incremento y repetición.
55
6 Resultados
Para el análisis de los muros MB-1, MB-2 y MB-3 se utilizó la primera analogía expuesta en el
capítulo 4 en donde se consideran esfuerzos y deformaciones promedio sin tomar en cuenta los
efectos locales (Figura 4.2) en las grietas. Para el muro MB-5 se utiliza la segunda analogía
considerando los efectos locales en el interfaz de las grietas (Figura 4.3). En el Anexo 4 se
presenta el desarrollo a seguir para la obtención del equilibrio del muro para un desplazamiento
total dado (𝛿).
MURO 1 [ρ=0.0385%]
350
300
250
CARGA LATERAL [KN]
200
150
Analítico
Experimental
100
50
0
0 5 10 15
DESPLAZAMIENTO [mm]
56
MURO 2 [ρ=0.1026%]
450
400
350
CARGA LATERAL [KN]
300
250
200 Analítico
150 Experimental
100
50
0
0 5 10 15 20 25 30 35 40
DESPLAZAMIENTO [mm]
MURO 3 [ρ=0.1538%]
450
400
350
CARGA LATERAL [KN]
300
250
200 Analítico
150 Experimental
100
50
0
0 10 20 30 40
DESPLAZAMIENTO [mm]
57
MURO 5 [ρ=0.2628%]
500
450
400
350
CARGA LATERAL [KN]
300
250
Analítico
200
Experimental
150
100
50
0
0 10 20 30 40
-50
DESPLAZAMIENTO [mm]
Las cargas máximas obtenidas a partir del modelo propuesto, así como la comparación contra
las observadas experimentalmente se muestran en la Tabla 6.1, el porcentaje error se calcula
con la ecuación 6.1:
|𝐶𝑀𝐶 − 𝐶𝑀𝑂|
%𝑒𝑟𝑟𝑜𝑟 = ∗ 100 6.1
𝐶𝑀𝑂
Donde:
En las Figura 6.1 a Figura 6.4 se muestran los resultados experimentales y analíticos en función
de la fuerza lateral contra el desplazamiento total que experimentan los muros. Las curvas de
color naranja muestran la envolvente de carga-deformación de la respuesta cíclica de cada muro
obtenida de las pruebas experimentales (Cruz, 2015) y la línea azul es el resultado del modelo
analítico adoptado en este estudio bajo incrementos monotónicos de desplazamientos (𝛿). De
estas figuras y de los resultados mostrados en la Tabla 6.1 se puede observar que la
implementación de la TCCM dentro de un modelo de múltiples elementos verticales describe el
comportamiento lineal y no lineal de los muros con una precisión aceptable ya que el porcentaje
58
de error calculado para la carga máxima de cada muro es relativamente bajo si se considera la
facilidad de implementación y desarrollo del modelo en comparación los modelos basados en
elemento finito. Las diferencias entre las curvas analíticas y las experimentales pueden
atribuirse principalmente a los efectos de degradación de rigidez que tienen los muros bajo
cargas cíclicas reversibles y a que no se cuenta con una relación establecida de cómo afecta la
cuantía de acero a la resistencia a compresión a la mampostería en los casos donde las fallas
locales gobiernan el comportamiento de los muros. En el anexo 6 se hace un análisis detallado
del MB-3 para comparar las distorsiones y el comportamiento interno del modelo, contra las
observaciones experimentales.
0.25
0.2
0.15
0.1
0.05
0
0 0.005 0.01 0.015 0.02 0.025
59
Carga máxima del
Carga máxima
Valor de 𝑪 modelo propuesto % error
observada [𝒌𝑵]
[𝒌𝑵]
450
400
CARGA LATERAL [KN]
350
300
250
200
150
100
50
0
0 5 10 15 20 25 30 35 40 45
DESPLAZAMIENTO [mm]
Con respecto al muro MB-5, que se analizó con la segunda analogía (considerando efectos
locales), las limitaciones impuestas (4.1, 4.2 y 4.3) en el análisis del esfuerzo principal a tensión
(𝜎1 ) dan como resultado una reducción en la resistencia del muro. En la Figura 6.7 se muestra
60
una comparación del análisis del muro MB-5 sin considerar la falla local (línea anaranjada) contra
el análisis considerando falla local (línea azul), teniendo como carga máxima 497.49[𝑘𝑁] y
442.73[𝑘𝑁] respectivamente, obteniendo un error de 28.06% y de 13.966% con respecto a la
carga máxima obtenida en las pruebas experimentales de 388.476 [𝑘𝑁]. Asimismo se muestra
en la Figura 6.8 como afectan las limitaciones impuestas al esfuerzo principal a tensión de la
mampostería (𝜎1 ) dentro del modelo analítico.
MURO 5 [ρ=0.2628%]
600
500
CARGA LATERAL [KN]
400
300
200
100
0
0 5 10 15 20 25 30 35 40 45 50
-100
DEFORMACIÓN [mm]
0.5
0.4
0.3
𝜎1
0.2
0.1
0
0 0.005 0.01 0.015 0.02 0.025
-0.1
Figura 6.8 Comparación del esfuerzo principal a tensión sin considerar falla local y
considerando falla local
61
Dentro de las limitaciones que se impusieron en el caso del muro MB-5, un parámetro que
podría parecer importante es el espaciamiento promedio vertical y horizontal de las grietas
(𝑠𝑦𝑐 ,𝑠𝑥𝑐 ). Sin embargo, se observó que variando este parámetro se reducía de manera
insignificante la carga máxima observada en el análisis. En la Figura 6.9 se muestran distintos
análisis del muro MB-5 variando el espaciamiento promedio de las grietas.
350
300
250
200
150
100
50
0
-50 0 10 20 30 40
DESPLAZAMIENTO [mm]
Figura 6.9 Muro MB-5 con distintas separaciones promedias 𝑠𝑦𝑐 , 𝑠𝑥𝑐
62
6.2 Influencia del esfuerzo principal a compresión de la mampostería
Aunque se observó que el parámetro del esfuerzo principal a compresión (𝜎2 ) tiene una menor
influencia sobre la respuesta final del muro que el esfuerzo principal a tensión (𝜎1 ), es
interesante resaltar el esfuerzo principal a compresión máximo tomado por la mampostería, así
como la resistencia a compresión máxima considerada para los cálculos internos del programa
desarrollado. El esfuerzo principal a compresión, se ve afectado por dos factores que son claves
en la respuesta final de los muros de mampostería confinada con acero de refuerzo. Por un lado
está la reducción en la resistencia a compresión de la mampostería cuando se toma en cuenta
el ángulo de inclinación del esfuerzo principal a compresión que fue considerado por la ecuación
2.11, donde siguiendo las hipótesis planteadas por la teoría del campo de compresión
modificado (TCCM), se considera que el esfuerzo principal a compresión es paralelo al ángulo de
inclinación de las grietas , por lo que se hace una reducción a la resistencia máxima a compresión
de la mampostería que se obtiene de ensayes de pilas (𝑓𝑚 (90°)) en función del ángulo de
inclinación del esfuerzo principal a compresión con respecto a las juntas horizontales de mortero
y el acero horizontal, y por otro lado se reduce por el factor 𝛽 que toma en cuenta los efectos
de la deformación principal a tensión en la resistencia a compresión de la mampostería.
Para ejemplificar estos factores se tomará como base nuevamente el muro MB-3. En la Figura
6.10 se presenta la variación del factor de degradación de la resistencia a compresión de la
mampostería con respecto al ángulo de inclinación del esfuerzo principal a compresión (𝜃), en
donde se puede observar que los casos críticos son cuando el ángulo esta entre un rango de 50°
y 60°.
63
Figura 6.11 División del muro en elementos verticales
Elemento 𝜽 𝒇𝒎(𝜽)[𝑴𝑷𝒂]
1 52.11 -5.58
2 52.93 -5.55
3 54.08 -5.52
4 55.20 -5.50
5 56.297 -5.50
6 57.35 -5.50
7 58.378 -5.52
8 59.07 -5.54
Promedio 55.67 -5.53
Tabla 6.3 Ángulos calculados y reducción de resistencia a compresión
Como se puede ver en la Tabla 6.3, la reducción en la resistencia a compresión que se obtiene
considerando el ángulo de inclinación 𝜃 es notable en comparación con la resistencia que se
obtiene en ensayes de pilas normales, que en el caso de los muros analizados fue de 𝑓𝑚 (90°) =
−11.2[𝑀𝑃𝑎]. Para el caso del muro MB-3 se obtuvo una reducción promedio de la resistencia
a compresión de la mampostería del orden del 52% al considerar el ángulo de inclinación 𝜃 con
respecto a la resistencia para 𝜃 = 90°, la cual se traduce en una reducción de resistencia ante
cargas laterales del muro como se puede ver en la Figura 6.12 en donde se observa en la curva
color azul, el análisis del muro MB-3 sin considerar la reducción de resistencia a compresión, en
la curva color naranja al análisis considerando las reducciones mostradas en la Tabla 6.3 y en
color gris a los valores reportados en la prueba experimental, dando como resultados las cargas
máximas mostradas en la Tabla 6.4 en donde se puede observar que la carga máxima del análisis
en donde se toma en cuenta la resistencia a compresión de 𝑓𝑚 (90°) arroja un error del 15.09%
muy por arriba del error de 0.448% que se obtiene con el análisis con los valores de 𝑓𝑚 (𝜃).
64
REDUCCIÓN DE RESISTENCIA POR EL ÁNGULO DE
INCLINACIÓN
600
500
400
CARGA LATERAL [KN]
300
200
100
0
0 5 10 15 20 25 30 35 40 45
-100
DESPLAZAMIENTO [mm]
Por otro lado, el esfuerzo principal a compresión de la mampostería se afecta por el factor 𝛽 que
está en función de la variación de la deformación principal a tensión de cada elemento vertical
dentro del muro y que simula la reducción en la resistencia de la mampostería por la presencia
de esfuerzos biaxiales (a tensión y a compresión). En la Figura 6.13 se presenta la variación que
existe del esfuerzo principal a tensión para los ocho elementos verticales que componen al muro
MB-3, en donde en el eje horizontal está el desplazamiento total del muro en milímetros (𝛿) y
en el eje vertical el esfuerzo principal a tensión (𝜎1 ) en mega pascales, observando que la
variación es casi lineal con respecto al desplazamiento total del muro. Con los valores de la
deformación principal a tensión se obtiene el parámetro 𝛽 que influye directamente en el
cálculo del esfuerzo principal a compresión de la mampostería (Figura 6.14).
65
VARIACIÓN DE σ1
0.016
0.014
ESFUERZO A TENSIÓN
0.012
0.01
0.008
0.006
0.004
0.002
0
0 5 10 15 20 25 30 35 40 45
DESPLAZAMIENTO [mm]
Figura 6.13 Variación del esfuerzo principal a tensión por cada elemento vertical
VARIACIÓN DE β
1.2
0.8
0.6
β
0.4
0.2
0
0 5 10 15 20 25 30 35 40 45
DESPLAZAMIENTO [mm]
66
En el caso del muro MB-3 la carga máxima del modelo analítico se presentó en un
desplazamiento de 𝛿 = 15.81𝑚𝑚, para la cual se calculó tanto la deformación principal a
tensión como el parámetro 𝛽 mostrado en la Tabla 6.5. El parámetro 𝛽 se sustituye en las
ecuaciones 2.13 y 2.16 para obtener el esfuerzo principal a compresión de la mampostería y del
concreto.
𝒇𝒎 (𝜽) 𝜷 ∗ 𝒇𝒎 (𝜽)
Elemento 𝜺𝟏 𝜷
[𝑴𝑷𝒂] [𝑴𝑷𝒂]
1 0.0051 0.567 - -
2 0.0050 0.571 -5.55 -3.17
3 0.0050 0.575 -5.52 -3.18
4 0.0049 0.580 -5.51 -3.20
5 0.0048 0.585 -5.50 -3.22
6 0.0047 0.589 -5.51 -3.25
7 0.0047 0.593 -5.53 -3.28
8 0.0046 0.596 - -
Promedio 0.0049 0.582 -5.53 -3.22
Tabla 6.5 Valores de los esfuerzos principales a tensión y del parámetro 𝛽 para cada elemento
vertical, correspondientes a la carga máxima calculada para el muro MB-3
67
ESFUERZO PRINCIPAL A COMPRESIÓN
0
-0.004 -0.003 -0.002 -0.001 0
-2
-4
σ2 [MPA]
-6
-8
-10
-12
ε2
68
7 Conclusiones
Los objetivos del trabajo fueron alcanzados exitosamente ya que se pudo adaptar la TCCM para
desarrollar un modelo analítico simple capaz de reproducir con relativa exactitud muros de
mampostería confinada con acero de refuerzo para materiales usados comúnmente en México.
Asimismo se analizó la importancia del esfuerzo principal a tensión dentro del modelo analítico
y la efectividad de las hipótesis y desarrollo de la teoría del campo de compresión modificado.
En este estudio se presentaron las hipótesis y el desarrollo de la teoría del campo de compresión
modificado (TCCM), que se adaptaron dentro de un modelo analítico simple de múltiples
elementos verticales (MVLEM), capaz de predecir de forma precisa el comportamiento elástico
e inelástico de muros de mampostería confinada con acero de refuerzo sujeto a cargas verticales
y laterales. El paso clave para desarrollar un modelo con un grado de precisión aceptable, es la
obtención de las relaciones constitutivas adecuadas que reflejen el comportamiento promedio
de la mampostería, pero a diferencia de las pruebas estándar, es necesario que estas relaciones
esfuerzo-deformación (𝜎 − 𝜀) se determinen bajo estado de esfuerzo biaxiales, donde actúen
simultáneamente los esfuerzos de compresión y tensión.
69
Debido a las condiciones ortotrópicas de los muros de mampostería, se debe tomar en
cuenta la degradación de la resistencia a compresión con respecto al ángulo de
inclinación de aplicación de la carga.
Los parámetros de entrada del modelo son las propiedades mecánicas de los materiales
del muro de mampostería. El comportamiento compuesto de los muros de mampostería
sujetos a esfuerzos principales a tensión y a compresión con una inclinación 𝜃 con
respecto a las juntas horizontales es mejor representado por medio de paneles de
mamposterías (elementos macro), en lugar de ensambles a pequeña escala (pilas).
Cuando el ángulo de inclinación de la carga en el ensamble de mampostería se desvía
de la dirección normal, las características ortotrópicas de la mampostería provocan una
reducción en la capacidad a compresión.
La aplicabilidad de la teoría del campo de compresión modificado (TCCM) depende del
patrón de agrietamiento del muro, en casos donde no se tenga un agrietamiento
uniforme a lo largo del muro, la teoría queda invalidada.
La variable 𝜎𝑚𝑖 correspondiente al esfuerzo a compresión que se presenta en la grieta,
se despreció en el estudio conservadoramente, sin embargo es necesario tomarlo en
cuenta para tener una mejor aproximación del comportamiento de los muros con altas
cuantías de acero ya que la mampostería al estar confinada por los castillos y las dalas
se puede dar el caso en donde este valor sea importante para cumplir el equilibrio
interno del muro.
En los casos de los muros con cuantías elevadas de acero en donde se presente una falla
por cortante-compresión, es necesario incluir este tipo de mecanismo de falla en el
modelo a través de relaciones constitutivas.
El modelo propuesto, así como la teoría del campo de compresión modificado son apropiados
para los casos en donde el comportamiento de los muros de mampostería está gobernado por
un número de grietas distribuidas de manera uniforme, como es el caso donde los muros tienen
una cuantía de refuerzo adecuada. Para los casos en donde no se obtenga este tipo de
comportamiento se recomienda el uso de modelos más detallados que puedan integrar el
mecanismo de fallas locales dentro de sus parámetros.
70
8 Referencias
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muros de mampostería confinada ante cargas laterales”. Sistema Nacional de Protección Civil,
Centro Nacional de Prevención de Desastres.
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structural concrete” ,Journal of Structural Engineering, Vol.124, No.12.
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Bazán, E. (1980), “Muros de mamposteria ante cargas laterales, estudios analíticos”. Tesis
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Collins, M.P. (1998), “Towards a rational theory for RC members in shear”, Journal of the
Structural Division, ASCE, 104(4): pp. 649-666.
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73
1. Anexos
Anexo 1
Las ecuaciones 2.6 a 2.8 se derivan geométricamente del círculo de Mohr correspondiente a los
esfuerzos promedios (Figura 1.1). De donde se pueden determinar por geometría las siguientes
relaciones:
𝜎1 − 𝜎2
𝜏𝑥𝑦 = − 𝑠𝑒𝑛(2𝜃)
2 1.1
σ1 + σ2 σ1 − σ2
σx = − cos(2θ) 1.2
2 2
σ1 + σ2 σ1 − σ2 1.3
σy = + cos(2θ)
2 2
74
Asimismo se utilizan las identidades trigonométricas del ángulo doble para el coseno y el seno
(ecuaciones 1.4 y 1.5)
Se sustituye las ecuaciones 1.4 y 1.5 en las ecuaciones 1.1, 1.2 y 1.3, haciendo las sustituciones
y reducciones algebraicas simples correspondientes y se obtienen las ecuaciones 2.6, 2.7 y 2.8
75
Anexo 2
Para la obtención de las ecuaciones 2.9 y 2.10 se parte del elemento deformado y agrietado
como se muestra en la Figura 1.1.2, en donde se aprecia el macroelemento de mampostería
sujeto a esfuerzos normales (𝜎𝑥 , 𝜎𝑦 ) y esfuerzos cortantes (𝜏𝑥𝑦 ). En el macroelemento
deformado y agrietado, la mampostería se puede subdividir en puntales de compresión
idénticos, inclinados según el ángulo de inclinación de las grietas ( 𝜃) y separados un espacio
promedio de 𝑠𝜃 .
En la Figura 1.3 se presenta el corte A de la Figura 1.1.2 en donde se observa que los puntales
de compresión del macroelemento están sujetos en la zona fuera de la superficie de la grieta a
los esfuerzos principales a tensión y a compresión (𝜎1 y 𝜎2 ) perpendicular y paralelo
respectivamente a la dirección de las grietas.
76
La condición dada en la Figura 1.3 representa el estado de esfuerzos promedio del
macroelemento. Sin embargo las ecuaciones 2.9 y 2.10 representan el estado de esfuerzos que
se encuentran en la superficie a lo largo de la grieta, en la Figura 1.4 se muestra el corte B de la
Figura 1.1.2 . El incremento de esfuerzo en el acero de refuerzo es representado por el esfuerzo
local 𝜎𝑠𝑦 y 𝜎𝑠𝑥 𝑐𝑟 . Y aunque los esfuerzos principales a tensión no pueden ser transferidos por
𝑐𝑟
la mampostería, existe la posibilidad de que los esfuerzos de cortante sean transmitidos a través
de los agregados que existen en la mampostería a lo largo de la grieta. Este esfuerzo cortante
local es definido por 𝜈𝑚𝑖 , además de que se identifica un esfuerzo normal 𝜎𝑚𝑖 .
Los esfuerzos aplicados 𝜎𝑥 , 𝜎𝑦 y 𝜏𝑥𝑦 están fijos, y los esfuerzos mostrados en la Figura 1.3 y
Figura 1.4 deben ser estáticamente equivalentes. Se asume un área unitaria tanto en el corte
A y como en el corte B para el cálculo de las fuerzas en dirección 𝑥 y 𝑦 del elemento resultando
el siguiente equilibrio:
77
𝜎𝑠𝑥 𝜌𝑥 sin(𝜃) csc(𝜃) 𝐴0 + 𝜎1 sin(𝜃) csc(𝜃) 𝐴0
1.6
= 𝜎𝑠𝑥 𝑐𝑟 𝜌𝑥 sin(𝜃) csc(𝜃) 𝐴0 − 𝜎𝑚𝑖 sin(𝜃) csc(𝜃) 𝐴0
− 𝜈𝑚𝑖 cos(𝜃) csc(𝜃) 𝐴0
𝜎𝑠𝑦 𝜌𝑦 cos(𝜃) csc(𝜃) 𝐴0 + 𝜎1 cos(𝜃) csc(𝜃) 𝐴0
= 𝜎𝑠𝑦 𝜌𝑦 cos(𝜃) csc(𝜃) 𝐴0 − 𝜎𝑚𝑖 cos(𝜃) csc(𝜃) 𝐴0 1.7
𝑐𝑟
+ 𝜈𝑚𝑖 sin(𝜃) csc(𝜃) 𝐴0
78
Anexo 3
Para ejemplificar la metodología utilizada en el presente estudio, se presenta a continuación un
ejemplo del procedimiento utilizado para obtener la carga lateral del muro MB-3, tomando
como desplazamiento total el valor de 𝛿 = 0.1𝑚𝑚, no obstante, se escoge como punto de
partida al vector 𝑠 = [−2.53406 ∗ 10−6 , −0.126843948, 3.236 ∗ 10−6 ] producto del método
de iteración utilizando el Jacobiano como se explicó en la sección anterior. El ejemplo numérico
se desarrolló en MATHCAD y solo muestra el ciclo en donde el vector 𝑟 cumple el equilibrio, cabe
mencionar que para llegar al vector 𝑠 con el que se parte en el ejemplo, primeramente se tuvo
que hacer una serie de iteraciones tomando como partida los dos puntos mencionados en la
sección 5.1.
79
80
81
1
:=
151
1
0.8 - 0.34
142 348.476 co
99.324
143 1
98.282
144 97.261
1
= Pa 1
1 := 1 := for i 1 .. n tot
96.26
145 1
1 i 1 if i
>1 1=
95.278 1
146
94.314
1 i i otherwise 1
147 326.154 1
1
158 1
1
1 1
c := 2 := for i 1 .. n tot
1 1
0.8 - 0.34
2 i 1 if ci > 1
coc
=
1
2
1
2 i ci otherwise
1
2 1
1
-2.822 10
5
5
-2.828 10
5
-2.842 10
5
for i 1 .. n tot
-2.862 10 Pa
21 := =
5
2 2 -2.888 10
2 i 2i
5
21i ( 1.067 1 ) i m2 i
f -
-2.919
10
co co 5
-2.955 10
21 5
-2.983 10
221
-1.112 106 6
-1.1117 10
6 212 5
-1.119 10 -2.8281 10
6 213 5
-1.13 10 -2.8419 10
6 214 -2.8618 5
for i 1 .. n tot
-1.141 10 Pa = 10 Pa
22 := =
2 :=
6 215
5
2 2 -1.152 10 -2.8875 10
2 i 2i
6
-1.163 10
216 -2.9187 10
5
22i 2 i fc -
coc coc 6 5
-1.174 10 217 -2.9551 10
22 6 6
-1.182 10 228 -1.1822 10
82
83
84
Anexo 4
%Comportamiento de muros de mamposteria reforzada%
%utilizando la Teoria de Campo de compresión%
%Adolfo Iván Jiménez Palacios%
clear;clc;
disp('....COMPORTAMIENTO DE MUROS DE MAMPOSTERIA REFORZADA...');
disp('_________________________________________________');
NOMBRE='Datos3bien.xlsx';
u=xlsread(NOMBRE, 'A2:A2'); %Se proponen valores para la primera interaccion%
v=xlsread(NOMBRE, 'B2:B2');
f=xlsread(NOMBRE, 'C2:C2');
H=xlsread(NOMBRE, 'A5:A5');
L=xlsread(NOMBRE, 'B5:B5');
n=xlsread(NOMBRE, 'C5:C5');
c=xlsread(NOMBRE, 'A8:A8');
dist=xlsread(NOMBRE, 'F:F');
desp=xlsread(NOMBRE, 'I2:I2');
Em=xlsread(NOMBRE, 'A12:A12');
Es=xlsread(NOMBRE, 'A18:A18');
Fy=xlsread(NOMBRE, 'B18:B18');
Fyy=xlsread(NOMBRE, 'D20:D20');
ro=xlsread(NOMBRE, 'C18:C18');
roy=xlsread(NOMBRE, 'D18:D18');
esox=xlsread(NOMBRE, 'A20:A20');
esoy=xlsread(NOMBRE, 'B22:B22');
Fu=xlsread(NOMBRE, 'B20:B20');
eco=xlsread(NOMBRE, 'B12:B12');
ecoi=xlsread(NOMBRE, 'C12:C12');
ecu=xlsread(NOMBRE, 'A14:A14');
fm=xlsread(NOMBRE, 'B14:B14');
esu=xlsread(NOMBRE, 'C20:C20');
ecr=xlsread(NOMBRE, 'A25:A25');
ft=xlsread(NOMBRE, 'B25:B25');
CC=xlsread(NOMBRE, 'C25:C25');
Area=xlsread(NOMBRE, 'G:G');
Areax=xlsread(NOMBRE, 'Q:Q');
chi=xlsread(NOMBRE, 'A30:A30');
Nap=xlsread(NOMBRE, 'K3:K3');
Map=xlsread(NOMBRE, 'L3:L3');
Vap=xlsread(NOMBRE, 'M3:M3');
ecl=xlsread(NOMBRE, 'C14:C14');
pp=xlsread(NOMBRE, 'A22:A22');
85
Aux=[];
u1=0.0009;
u2=-0.9;
u3=-0.0000009;
ui=[u1,u2,u3];
tam=size(dist);
ntot=tam(1,1);
format longg
valorparatolerancia=0.001;
tolerancia=20;
contador3=0;
for desp=0.01:0.05:40
contador2=0;
contador=0;
uj=[u,v,f]
Val=[ui',uj']
tolerancia=10;
Aux=[zeros];
Aux2=[zeros];
while tolerancia>valorparatolerancia
contador2=contador2+1;
Val=[ui',uj'];
deltaS=((uj)-(ui))
deltau=deltaS(1,1);
deltav=deltaS(1,2);
deltaf=deltaS(1,3);
for z=1:4
if z==2
u=(u+deltau);
end
if z==3
u=Val(1,2);
v=v+deltav;
end
if z==4
u=Val(1,2);
v=Val(2,2);
f=f+deltaf;
end
for i=1:ntot
86
end
if abs(ey(i,z))<=esoyc
sigsy(i,z)=Esc*ey(i,z);
elseif abs(ey(i,z))<=esuc
if ey(i,z)<0
sigsy(i,z)=-Fyyc;
else
sigsy(i,z)=Fyyc;
end
else
sigsy(i,z)=0;
end
rrc=(0.8-0.34*e1(i,z)/eccoi);
betac=1/rrc;
if betac>1
betac=1;
end
if e2(i,z)<0
sigma2(i,z)=betac*fc*((2*e2(i,z)/eccoi)-(e2(i,z)/eccoi)^2);
sigma2(i,z)=Ec*e2(i,z);
elseif e2(i,z)>eccr
sigma2(i,z)= ftc/(1+sqrt(200*e2(i,z)));
end
if e1(i,z)<0
sigma1(i,z)=betac*fc*((2*e1(i,z)/eccoi)-(e1(i,z)/eccoi)^2);
sigma1(i,z)=Ec*e1(i,z);
elseif e1(i,z)>eccr
sigma1(i,z)= ftc/(1+sqrt(200*e1(i,z)));
end
else
%esfuerzo en el acero de la mamposteria
if abs(ex(i,z))<=esox
sigs(i,z)=Es*ex(i,z);
elseif abs(ex(i,z))<=esu
if ex(i,z)<0
sigs(i,z)=-(Fy);
else
sigs(i,z)=Fy;
end
else
sigs(i,z)=0;
end
if abs(ey(i,z))<=esoy
sigsy(i,z)=Es*ey(i,z);
elseif abs(ey(i,z))<=esu
if ey(i,z)<0
sigsy(i,z)=-(Fyy);
else
sigsy(i,z)=Fyy;
end
else
sigsy(i,z)=0;
end
ecr=ft2(i,1)/Em;
87
rr=(0.8-0.34*e1(i,z)/ecoi);
beta=1/rr;
if beta>1
beta=1;
end
if e2(i,z)<0
sigma2(i,z)=beta*fm2(i,1)*((2*e2(i,z)/ecoi)-(e2(i,z)/ecoi)^2);
elseif abs(e2(i,z))>abs(ecu)
sigma2(i,z)=0;
sigma2(i,z)=Em*e2(i,z);
elseif e2(i,z)>ecr
st1= ft2(i,1)*exp(-CC*(e2(i,z)-ecr));
sigma2(i,z)=st1;
end
if e1(i,z)<0
sigma1(i,z)=beta*fm2(i,1)*((2*e1(i,z)/ecoi)-(e1(i,z)/ecoi)^2);
sigma1(i,z)=Em*e1(i,z);
elseif e1(i,z)>ecr
st5= ft2(i,1)*exp(-CC*(e1(i,z)-ecr));
sigma1(i,z)=st5;
end
end
sigmax(i,z)=sigma1(i,z)*sin(alfa(i,z))^2+sigma2(i,z)*cos(alfa(i,z))^2+(ro+roxc)*sigs(i,z);
sigmay(i,z)=sigma1(i,z)*cos(alfa(i,z))^2+sigma2(i,z)*sin(alfa(i,z))^2+(roy+royc(i,1))*sigsy(i,z);
taoxy(i,z)=-(sigma1(i,z)-sigma2(i,z))*sin(alfa(i,z))*cos(alfa(i,z));
N(i,z)=Area(i,1)*sigmay(i,z);
M(i,z)=Area(i,1)*(chi*taoxy(i,z)*(1-c)*H-dist(i,1)*sigmay(i,z));
Cer(i,z)=Areax(i,1)*sigmax(i,z);
V(i,z)=chi*Area(i,1)*taoxy(i,z);
end
NN(1,z)=sum(N(:,z));
MM(1,z)=sum(M(:,z));
CCer(1,z)=sum(Cer(:,z));
FL(1,z)=sum(V(:,z));
end
f=Val(3,2);
rp=[NN(1,1)-Nap;MM(1,1)-Map;CCer(1,1)];
ru=[NN(1,2)-Nap;MM(1,2)-Map;CCer(1,2)];
rv=[NN(1,3)-Nap;MM(1,3)-Map;CCer(1,3)];
rf=[NN(1,4)-Nap;MM(1,4)-Map;CCer(1,4)];
ruton=[ru(1,1)/(1000*9.81);ru(2,1)/((10^6)*9.81);ru(3,1)/(1000*9.81)];
rvton=[rv(1,1)/(1000*9.81);rv(2,1)/((10^6)*9.81);rv(3,1)/(1000*9.81)];
rfton=[rf(1,1)/(1000*9.81);rf(2,1)/((10^6)*9.81);rf(3,1)/(1000*9.81)];
rpton=[rp(1,1)/(1000*9.81);rp(2,1)/((10^6)*9.81);rp(3,1)/(1000*9.81)]
tolerancia=(sum(abs(rpton)))
Aux2(contador2,1)=u;
88
Aux2(contador2,2)=v;
Aux2(contador2,3)=f;
Aux(contador2,1)=tolerancia
deltaru=(ru-rp)/(deltau);
deltarv=(rv-rp)/(deltav);
deltarf=(rf-rp)/(deltaf);
[minimo,indice]=min(Aux)
if contador==100
u=Aux2(indice,1);
v=Aux2(indice,2);
f=Aux2(indice,3);
uj=[u v f];
Aux(indice,:)=[];
Aux2(indice,:)=[];
[minimo2,indice2]=min(Aux)
ui=[Aux2(indice2,1) Aux2(indice2,2) Aux2(indice2,3)]
Val=[ui',uj'];
tolerancia=valorparatolerancia;
contador3=contador3+1;
respuesta(contador3,2)=uj(1,1);
respuesta(contador3,3)=uj(1,2);
respuesta(contador3,4)=uj(1,3);
respuesta(contador3,5)=tolerancia;
respuesta(contador3,1)=desp;
respuesta(contador3,6)=FL(1,1);
Aux3(contador3,:)=e1(:,1)';
Aux4(contador3,:)=e2(:,1)';
Aux5(contador3,:)=sigs(:,1)';
Aux6(contador3,:)=sigsy(:,1)';
Aux7(contador3,:)=sigma2(:,1)';
Aux8(contador3,:)=sigma1(:,1)';
Aux9(contador3,:)=alfa(:,1)';
Aux10(contador3,:)=sigmax(:,1)';
Aux11(contador3,:)=sigmay(:,1)';
Aux12(contador3,:)=taoxy(:,1)';
Aux13(contador3,:)=N(:,1)';
else
if tolerancia>valorparatolerancia
W=[deltaru,deltarv,deltarf];
sj=uj'-W^-1*rp
ui=uj;
ui2=uj;
uj=sj';
ul=sj';
u=(uj(1,1));
v=uj(1,2);
f=uj(1,3);
uj=[u v f]
Val=[ui',uj']
else
contador3=contador3+1;
respuesta(contador3,2)=uj(1,1);
respuesta(contador3,3)=uj(1,2);
respuesta(contador3,4)=uj(1,3);
respuesta(contador3,5)=tolerancia;
respuesta(contador3,1)=desp;
respuesta(contador3,6)=FL(1,1);
Aux3(contador3,:)=e1(:,1)';
Aux4(contador3,:)=e2(:,1)';
Aux5(contador3,:)=sigs(:,1)';
Aux6(contador3,:)=sigsy(:,1)';
Aux7(contador3,:)=sigma2(:,1)';
Aux8(contador3,:)=sigma1(:,1)';
Aux9(contador3,:)=alfa(:,1)';
Aux10(contador3,:)=sigmax(:,1)';
Aux11(contador3,:)=sigmay(:,1)';
Aux12(contador3,:)=taoxy(:,1)';
Aux13(contador3,:)=N(:,1)';
end
89
end
contador=contador+1;
end
end
[maxcar,renglonv]=max(abs(respuesta(:,6)));
tetamax=Aux9(renglonv,:);
tetamax=tetamax*180/pi();
for ij=1:ntot
if tetamax(1,ij)<=45
fmteta=4.74*10^-4*tetamax(1,ij)^2+(-2.43*10^-2)*tetamax(1,ij)+0.883;
if fmteta>1
fmteta=1;
end
fm2(ij,1)=fm*fmteta;
else
fmteta=4.403*10^-4*tetamax(1,ij)^2+(-4.944*10^-2)*tetamax(1,ij)+1.88;
if fmteta>1
fmteta=1;
end
fm2(ij,1)=fm*fmteta;
end
end
Texto='Muro3';
xlswrite(Texto,fm2,'Hoja17','A2');
xlswrite(Texto,ft2,'Hoja18','A2');
xlswrite(Texto,Aux3,'Hoja2','A2');
xlswrite(Texto,Aux4,'Hoja3','A2');
xlswrite(Texto,Aux5,'Hoja4','A2');
xlswrite(Texto,Aux6,'Hoja5','A2');
xlswrite(Texto,Aux7,'Hoja6','A2');
xlswrite(Texto,Aux8,'Hoja7','A2');
xlswrite(Texto,Aux10,'Hoja13','A2');
xlswrite(Texto,Aux11,'Hoja14','A2');
xlswrite(Texto,Aux12,'Hoja15','A2');
xlswrite(Texto,Aux13,'Hoja16','A2');
xlswrite(Texto,Aux9,'Hoja12','A2');
xlswrite(Texto,respuesta,1,'A2');
diary('off')
90
Anexo 5
%Comportamiento de muros de mamposteria reforzada%
%utilizando la Teoria de Campo de compresión%
%Adolfo Iván Jiménez Palacios%
clear;clc;
disp('....COMPORTAMIENTO DE MUROS DE MAMPOSTERIA REFORZADA...');
disp('_________________________________________________');
NOMBRE='Datos5.xlsx';
u=xlsread(NOMBRE, 'A2:A2'); %Se proponen valores para la primera interaccion%
v=xlsread(NOMBRE, 'B2:B2');
f=xlsread(NOMBRE, 'C2:C2');
H=xlsread(NOMBRE, 'A5:A5');
L=xlsread(NOMBRE, 'B5:B5');
n=xlsread(NOMBRE, 'C5:C5');
c=xlsread(NOMBRE, 'A8:A8');
dist=xlsread(NOMBRE, 'F:F');
desp=xlsread(NOMBRE, 'I2:I2');
Em=xlsread(NOMBRE, 'A12:A12');
Es=xlsread(NOMBRE, 'A18:A18');
Fy=xlsread(NOMBRE, 'B18:B18');
Fyy=xlsread(NOMBRE, 'D20:D20');
ro=xlsread(NOMBRE, 'C18:C18');
roy=xlsread(NOMBRE, 'D18:D18');
esox=xlsread(NOMBRE, 'A20:A20');
esoy=xlsread(NOMBRE, 'B22:B22');
Fu=xlsread(NOMBRE, 'B20:B20');
eco=xlsread(NOMBRE, 'B12:B12');
ecoi=xlsread(NOMBRE, 'C12:C12');
ecu=xlsread(NOMBRE, 'A14:A14');
fm=xlsread(NOMBRE, 'B14:B14');
esu=xlsread(NOMBRE, 'C20:C20');
ecr=xlsread(NOMBRE, 'A25:A25');
ft=xlsread(NOMBRE, 'B25:B25');
CC=xlsread(NOMBRE, 'C25:C25');
Area=xlsread(NOMBRE, 'G:G');
Areax=xlsread(NOMBRE, 'Q:Q');
chi=xlsread(NOMBRE, 'A30:A30');
Nap=xlsread(NOMBRE, 'K3:K3');
Map=xlsread(NOMBRE, 'L3:L3');
Vap=xlsread(NOMBRE, 'M3:M3');
ecl=xlsread(NOMBRE, 'C14:C14');
pp=xlsread(NOMBRE, 'A22:A22');
91
diary('variables3')
Aux=[];
u1=0.0009;
u2=-0.9;
u3=-0.0000009;
ui=[u1,u2,u3];
tam=size(dist);
ntot=tam(1,1);
format longg
valorparatolerancia=0.001;
tolerancia=20;
contador3=0;
for desp=0.01:0.05:40
contador2=0;
contador=0;
uj=[u,v,f]
Val=[ui',uj']
tolerancia=10;
Aux=[zeros];
Aux2=[zeros];
while tolerancia>valorparatolerancia
contador2=contador2+1;
Val=[ui',uj'];
deltaS=((uj)-(ui))
deltau=deltaS(1,1);
deltav=deltaS(1,2);
deltaf=deltaS(1,3);
for z=1:4
if z==2
u=(u+deltau);
end
if z==3
u=Val(1,2);
v=v+deltav;
end
if z==4
u=Val(1,2);
v=Val(2,2);
f=f+deltaf;
end
for i=1:ntot
92
else
sigs(i,z)=0;
end
if abs(ey(i,z))<=esoyc
sigsy(i,z)=Esc*ey(i,z);
elseif abs(ey(i,z))<=esuc
if ey(i,z)<0
sigsy(i,z)=-Fyyc;
else
sigsy(i,z)=Fyyc;
end
else
sigsy(i,z)=0;
end
vmi(i,z)=abs((Fy-sigs(i,z))*ro-(Fyyc-sigsy(i,z))*royc(i,1))/(tan(alfa(i,z))+(1/(tan(alfa(i,z)))))
steta=1/(sin(alfa(i,z))/syc+cos(alfa(i,z))/sxc)
wi=steta*e1(i,z)
vmmaxc=0.18*sqrt(abs(fc))/(0.31+24*wi/(9.525+16))
rrc=(0.8-0.34*e1(i,z)/eccoi);
betac=1/rrc;
if vmi(i,z)>vmmaxc
vmi(i,z)=vmmaxc
end
if betac>1
betac=1;
end
if e2(i,z)<0
sigma2(i,z)=betac*fc*((2*e2(i,z)/eccoi)-(e2(i,z)/eccoi)^2);
sigma2(i,z)=Ec*e2(i,z);
elseif e2(i,z)>eccr
st1= ftc/(1+sqrt(200*e2(i,z)));
st2=(Fy-sigs(i,z))*ro+vmi(i,z)/tan(alfa(i,z));
st3=(Fyyc-sigsy(i,z))*royc(i,1)+vmi(i,z)*tan(alfa(i,z));
st4=(Fy-sigs(i,z))*ro*sin(alfa(i,z))^2+(Fyyc-sigsy(i,z))*royc(i,1)*cos(alfa(i,z))^2;
stg=[st1 st2 st3 st4]
sigma2(i,z)=min(abs(stg))
end
if e1(i,z)<0
sigma1(i,z)=betac*fc*((2*e1(i,z)/eccoi)-(e1(i,z)/eccoi)^2);
sigma1(i,z)=Ec*e1(i,z);
elseif e1(i,z)>eccr
st5= ftc/(1+sqrt(200*e1(i,z)))
st6=(Fy-sigs(i,z))*ro+vmi(i,z)/tan(alfa(i,z))
st7=(Fyyc-sigsy(i,z))*royc(i,1)+vmi(i,z)*tan(alfa(i,z))
st8=(Fy-sigs(i,z))*ro*sin(alfa(i,z))^2+(Fyyc-sigsy(i,z))*royc(i,1)*cos(alfa(i,z))^2
stg2=[st5 st6 st7 st8]
bb=find(stg2<0)
stg2(:,bb)=[]
sigma1(i,z)=min((stg2))
end
else
%esfuerzo en el acero de la mamposteria
if abs(ex(i,z))<=esox
sigs(i,z)=Es*ex(i,z);
93
elseif abs(ex(i,z))<=esu
if ex(i,z)<0
sigs(i,z)=-(Fy);
else
sigs(i,z)=Fy;
end
else
sigs(i,z)=0;
end
if abs(ey(i,z))<=esoy
sigsy(i,z)=Es*ey(i,z);
elseif abs(ey(i,z))<=esu
if ey(i,z)<0
sigsy(i,z)=-(Fyy);
else
sigsy(i,z)=Fyy;
end
else
sigsy(i,z)=0;
end
ecr=ft2(i,1)/Em;
vmi(i,z)=abs((Fy-sigs(i,z))*ro-(Fyy-sigsy(i,z))*roy)/(tan(alfa(i,z))+(1/(tan(alfa(i,z)))));
steta=1/(sin(alfa(i,z))/syc+cos(alfa(i,z))/sxc);
wi=steta*e1(i,z);
vmmax=0.18*sqrt(18.4)/(0.31+24*wi/(7+16));
if vmi(i,z)>vmmax
vmi(i,z)=vmmax
end
rr=(0.8-0.34*e1(i,z)/ecoi);
beta=1/rr;
if beta>1
beta=1;
end
if e2(i,z)<0
sigma2(i,z)=beta*fm2(i,1)*((2*e2(i,z)/ecoi)-(e2(i,z)/ecoi)^2);
elseif abs(e2(i,z))>abs(ecu)
sigma2(i,z)=0;
sigma2(i,z)=Em*e2(i,z);
elseif e2(i,z)>ecr
st1= ft2(i,1)*exp(-CC*(e2(i,z)-ecr));
st2=(Fy-sigs(i,z))*ro+vmi(i,z)/tan(alfa(i,z));
st3=(Fyy-sigsy(i,z))*roy+vmi(i,z)*tan(alfa(i,z));
st4=(Fy-sigs(i,z))*ro*sin(alfa(i,z))^2+(Fyy-sigsy(i,z))*roy*cos(alfa(i,z))^2;
sigma2(i,z)=min(stg);
end
if e1(i,z)<0
sigma1(i,z)=1.067*beta*fm2(i,1)*((2*e1(i,z)/ecoi)-(e1(i,z)/ecoi)^2);
94
sigma1(i,z)=Em*e1(i,z);
elseif e1(i,z)>ecr
st5= ft2(i,1)*exp(-CC*(e1(i,z)-ecr));
st6=(Fy-sigs(i,z))*ro+vmi(i,z)/tan(alfa(i,z));
st7=(Fyy-sigsy(i,z))*roy+vmi(i,z)*tan(alfa(i,z));
st8=(Fy-sigs(i,z))*ro*sin(alfa(i,z))^2+(Fyy-sigsy(i,z))*roy*cos(alfa(i,z))^2;
stg2=[st5 st6 st7 st8];
%stg2=[st5 st6 st8];
%stg2=[st5 st6];
sigma1(i,z)=min(stg2)
end
end
sigmax(i,z)=sigma1(i,z)*sin(alfa(i,z))^2+sigma2(i,z)*cos(alfa(i,z))^2+(ro+roxc)*sigs(i,z);
sigmay(i,z)=sigma1(i,z)*cos(alfa(i,z))^2+sigma2(i,z)*sin(alfa(i,z))^2+(roy+royc(i,1))*sigsy(i,z);
taoxy(i,z)=-(sigma1(i,z)-sigma2(i,z))*sin(alfa(i,z))*cos(alfa(i,z));
N(i,z)=Area(i,1)*sigmay(i,z);
M(i,z)=Area(i,1)*(chi*taoxy(i,z)*(1-c)*H-dist(i,1)*sigmay(i,z));
Cer(i,z)=Areax(i,1)*sigmax(i,z);
V(i,z)=chi*Area(i,1)*taoxy(i,z);
end
NN(1,z)=sum(N(:,z));
MM(1,z)=sum(M(:,z));
CCer(1,z)=sum(Cer(:,z));
FL(1,z)=sum(V(:,z));
end
f=Val(3,2);
rp=[NN(1,1)-Nap;MM(1,1)-Map;CCer(1,1)];
ru=[NN(1,2)-Nap;MM(1,2)-Map;CCer(1,2)];
rv=[NN(1,3)-Nap;MM(1,3)-Map;CCer(1,3)];
rf=[NN(1,4)-Nap;MM(1,4)-Map;CCer(1,4)];
ruton=[ru(1,1)/(1000*9.81);ru(2,1)/((10^6)*9.81);ru(3,1)/(1000*9.81)];
rvton=[rv(1,1)/(1000*9.81);rv(2,1)/((10^6)*9.81);rv(3,1)/(1000*9.81)];
rfton=[rf(1,1)/(1000*9.81);rf(2,1)/((10^6)*9.81);rf(3,1)/(1000*9.81)];
rpton=[rp(1,1)/(1000*9.81);rp(2,1)/((10^6)*9.81);rp(3,1)/(1000*9.81)]
tolerancia=(sum(abs(rpton)))
Aux2(contador2,1)=u;
Aux2(contador2,2)=v;
Aux2(contador2,3)=f;
Aux(contador2,1)=tolerancia
Aux2
deltaru=(ru-rp)/(deltau);
deltarv=(rv-rp)/(deltav);
deltarf=(rf-rp)/(deltaf);
[minimo,indice]=min(Aux)
if contador==100
u=Aux2(indice,1);
v=Aux2(indice,2);
f=Aux2(indice,3);
uj=[u v f];
Aux(indice,:)=[];
Aux2(indice,:)=[];
[minimo2,indice2]=min(Aux)
ui=[Aux2(indice2,1) Aux2(indice2,2) Aux2(indice2,3)]
Val=[ui',uj'];
tolerancia=valorparatolerancia;
contador3=contador3+1;
respuesta(contador3,2)=uj(1,1);
respuesta(contador3,3)=uj(1,2);
respuesta(contador3,4)=uj(1,3);
respuesta(contador3,5)=tolerancia;
95
respuesta(contador3,1)=desp;
respuesta(contador3,6)=FL(1,1);
Aux3(contador3,:)=e1(:,1)';
Aux4(contador3,:)=e2(:,1)';
Aux5(contador3,:)=sigs(:,1)';
Aux6(contador3,:)=sigsy(:,1)';
Aux7(contador3,:)=sigma2(:,1)';
Aux8(contador3,:)=sigma1(:,1)';
Aux9(contador3,:)=alfa(:,1)';
Aux10(contador3,:)=vmi(:,1)';
else
if tolerancia>valorparatolerancia
W=[deltaru,deltarv,deltarf];
sj=uj'-W^-1*rp
ui=uj;
ui2=uj;
uj=sj';
ul=sj';
u=(uj(1,1));
v=uj(1,2);
f=uj(1,3);
uj=[u v f]
Val=[ui',uj']
else
contador3=contador3+1;
respuesta(contador3,2)=uj(1,1);
respuesta(contador3,3)=uj(1,2);
respuesta(contador3,4)=uj(1,3);
respuesta(contador3,5)=tolerancia;
respuesta(contador3,1)=desp;
respuesta(contador3,6)=FL(1,1);
Aux3(contador3,:)=e1(:,1)';
Aux4(contador3,:)=e2(:,1)';
Aux5(contador3,:)=sigs(:,1)';
Aux6(contador3,:)=sigsy(:,1)';
Aux7(contador3,:)=sigma2(:,1)';
Aux8(contador3,:)=sigma1(:,1)';
Aux9(contador3,:)=alfa(:,1)';
Aux10(contador3,:)=vmi(:,1)';
end
end
contador=contador+1;
end
end
[maxcar,renglonv]=max(abs(respuesta(:,6)));
tetamax=Aux9(renglonv,:);
tetamax=tetamax*180/pi();
for ij=1:ntot
if tetamax(1,ij)<=45
fmteta=4.74*10^-4*tetamax(1,ij)^2+(-2.43*10^-2)*tetamax(1,ij)+0.883;
if fmteta>1
fmteta=1;
end
fm2(ij,1)=fm*fmteta;
else
fmteta=4.403*10^-4*tetamax(1,ij)^2+(-4.944*10^-2)*tetamax(1,ij)+1.88;
if fmteta>1
fmteta=1;
end
fm2(ij,1)=fm*fmteta;
end
96
fcr=-3.93*10^-5*tetamax(1,ij)^2+(3.49*10^-3)*tetamax(1,ij)+0.212;
ft2(ij,1)=fcr*sqrt(-fm);
end
Texto='Muro5';
xlswrite(Texto,fm2,'Hoja13','A2');
xlswrite(Texto,ft2,'Hoja14','A2');
xlswrite(Texto,Aux10,'Hoja15','A2');
xlswrite(Texto,Aux3,'Hoja2','A2');
xlswrite(Texto,Aux4,'Hoja3','A2');
xlswrite(Texto,Aux5,'Hoja4','A2');
xlswrite(Texto,Aux6,'Hoja5','A2');
xlswrite(Texto,Aux7,'Hoja6','A2');
xlswrite(Texto,Aux8,'Hoja7','A2');
xlswrite(Texto,Aux9,'Hoja12','A2');
xlswrite(Texto,respuesta,1,'A2');
diary('off')
97
Anexo 6
Para comparar las distorsiones de los muros examinados, así como la comparación del
comportamiento interno del modelo con lo observado en los ensayes experimentales, se
presenta a continuación una evaluación del modelo realizado para el muro MB-3, el cual tenía
una cuantía de refuerzo horizontal 𝜌ℎ = 0.15%. En las pruebas realizadas, se presentó el primer
agrietamiento 𝑉𝑎𝑔𝑟 = 238𝑘𝑁 a una distorsión de 0.11% (2.81𝑚𝑚), la carga máxima 𝑉𝑚á𝑥 que
resistió fue de 421𝑘𝑁 en el ciclo de incremento positivo a un desplazamiento 𝛾𝑉 de
𝑚á𝑥
0.81% (20.7𝑚𝑚) La carga de falla 𝑉𝑓𝑎𝑙𝑙𝑎 que se calculó resultó ser de 337 𝑘𝑁 a una distorsión
𝛾𝑓𝑎𝑙𝑙𝑎 de 1.48% (37.8𝑚𝑚).
Figura 1.6 Fotografías de estados de daño del muro MB-3 en distintas etapas de la prueba
(Cruz,2015)
El primer agrietamiento se presentó en la esquina inferior izquierda del muro y la primera grieta
diagonal fue de esquina a esquina del panel a través de las piezas del muro, con otras grietas
paralelas en la parte inferior sobre las juntas de mortero. Según lo observado, las grietas se
presentaron en los ciclos de incremento de desplazamiento, abriéndose hasta 0.8mm en los
ciclos de repetición.
El daño se fue presentando con espaciamiento constante entre grietas paralelas que
atravesaron las piezas, aunque se concentraba en los extremos inferiores del panel. Para la carga
máxima se presentó un espesor de grieta de 3mm en el ciclo positivo y de 10mm en el ciclo
98
negativo. Al final de la prueba, el muro presentó aplastamiento de piezas en las zonas donde la
trayectoria de las grietas coincidía por el mismo lugar.
Tomando en cuanto todas las observaciones presentadas en el trabajo de Cruz (2015), se plantea
a continuación una comparación entre los tres puntos principales (primer agrietamiento,
cortante máximo y falla ultima) que se observaron en el experimento, contra sus
correspondientes puntos en la curva esfuerzo deformación de los resultados del modelo
estudiado. Observando internamente que pasa con las curvas 𝜀1 − 𝜎1 y 𝜀2 − 𝜎2 en cada
elemento vertical del modelo analítico en cada uno de los tres puntos mencionados.
En la Figura 1.7 se puede observar que el punto de agrietamiento para el modelo analítico se
produce alrededor del desplazamiento 1.61 [𝑚𝑚] en comparación del 2.81 [mm] reportado
experimentalmente, el valor de 1.61 [mm] corresponde al 0.06% contra el 0.11% reportado. El
punto de carga máxima se presentó a un desplazamiento de 15.76 [mm] en el modelo analítico
y a 20.7 [mm] para las pruebas experimentales, dando una distorsión de 0.61% y 0.81%
respectivamente, el punto de carga último se consideró a una distorsión de 1.54% para el
modelo analítico y 1.6% para el modelo experimental con 39.26 [𝑚𝑚] y 40.96 [𝑚𝑚]
respectivamente. En la Figura 1.8, Figura 1.9 se muestra las curvas esfuerzo-deformación para
las direcciones principales de la mampostería para los puntos de desplazamiento principales, y
en la Figura 1.10 el esfuerzo en el acero en los tres puntos estudiados.
99
Figura 1.8 curva esfuerzo deformación principal a tensión de la mampostería en los tres
puntos principales
100
Figura 1.9 curva esfuerzo deformación principal a compresión de la mampostería en
los tres puntos principales
101
Esfuerzo en el acero
700
600
500
400
300
200
100
0
-100 0 10 20 30 40 50
102