El ABC Del Trauma. Atencin Del Paciente TraumatizadoDocumento Nuevo
El ABC Del Trauma. Atencin Del Paciente TraumatizadoDocumento Nuevo
El ABC Del Trauma. Atencin Del Paciente TraumatizadoDocumento Nuevo
net/publication/320237954
CITATIONS READS
0 916
1 author:
Juliana Buitrago-Jaramillo
Colombiana de Trasplantes
51 PUBLICATIONS 28 CITATIONS
SEE PROFILE
Some of the authors of this publication are also working on these related projects:
All content following this page was uploaded by Juliana Buitrago-Jaramillo on 05 October 2017.
1. EL ESCENARIO PREHOSPITALARIO
1a. INTRODUCCIÓN
La primera persona en describir este concepto fue Adams Cowley, quien se desempeñó
como cirujano militar y posteriormente como jefe del centro de trauma de Maryland en
Estados Unidos (Lerner & Moscati, 2001). El concepto no surgió de la evidencia
3
científica; fue más bien un concepto empírico; estudios recientes no han encontrado
evidencia que asocie la tasa de mortalidad y el tiempo de cirugía después del trauma
(Bledsoe, 2002; Lerner et al., 2003); sin embargo, el concepto permanece debido a la
importancia que tiene la minimización del tiempo en la escena del trauma y el rápido
transporte como lo demostró una revisión basada en la evidencia que realizó
recientemente un grupo selecto multidisciplinario panEuropeo de expertos con
especialidades en cirugía, anestesia, medicina de emergencia, cuidado intensivo y
hematología (Spahn et al., 2007). Este concepto es particularmente aplicable a sujetos
con urgente necesidad de control quirúrgico de la hemorragia (nivel de evidencia: 1A).
Figura 1. La hora de oro del paciente que ha sufrido un traumatismo quiere significar que las acciones inmediatas en
trauma son definitivas en el resultado; en trauma, el tiempo es vida!, se debe actuar rápidamente.
El único factor que puede demorar el tiempo en la escena del trauma es el control
de la vía aérea. Todas las acciones en el escenario prehospitalario deben enfocarse en
promover la oxigenación, transportar rápidamente al paciente al centro de trauma y
preservar la coagulación. Si un paciente esta en condiciones críticas, insistir en la
escena en estabilizarlo, en canalizarle una vena y en controlar todos sus parámetros
hemodinámicas atenta contra la probabilidad de supervivencia del lesionado,
especialmente si el tiempo prehospitalario es menor de 30 minutos (Pohs et al., 1984;
Dalton, 1995). En otras palabras, si canalizar una vena en la escena va a demorar el
transporte hacia el centro en donde se pueda brindar atención definitiva, es preferible
transportar al paciente sin vena, que hacer uso de este tiempo que se convierte en la
perpetuación de la hemorragia sin control. De que sirve entonces, continuar reanimando
4
Para un médico puede ser muy difícil proveer atención adecuada a un paciente en el
escenario prehospitalario. La gran mayoría de los médicos colombianos se capacitan
para brindar atención en los servicios de urgencias de los diferentes niveles de atención
en salud, pero en términos generales, reciben poco entrenamiento acerca de la fase
prehospitalaria.
prehospitalaria tiene unos elementos bien definidos, la intervención sobre cada paciente
puede ser diferente y los escenarios tienden a ser diferentes también.
Para el rápido acceso debe existir un sistema de comunicación disponible y una rápida
respuesta de los equipos de socorro o de atención prehospitalaria. Camino a la escena
el equipo debe ir asignando labores y determinando un esquema de acción.
El traslado debe realizarse en vehículos adecuados para ello. Trasladar pacientes con
trauma en vehículos sin dotación mínima ofrece riesgos importantes de morbilidad y
mortalidad aun si se trata de cortas distancias. El paciente crítico no debe ser
6
trasladado al hospital más cercano; debe ser llevado al hospital apropiado más
cercano. Si el paciente es llevado a la institución más cercana y esta no cuenta
con los recursos apropiados, la pérdida de tiempo puede significar la muerte del
paciente!
Tabla 2. Clasificación de varias víctimas de acuerdo con la probabilidad de vivir y la necesidad de atención en el
tiempo en 5 categorías. Criterios del TRIAGE START.
El propósito del triage es “salvar el mayor número posible de víctimas dadas las
circunstancias y recursos disponibles”. Para ello se debe clasificar a las víctimas en 5
categorías de acuerdo con el chance de supervivencia y el requerimiento temporal de la
atención en: Inmediata, Retardada, Expectante, Mínima y Muerto (ver tabla 2)
(PHTLS, 2003). Esta clasificación puede realizarse en 60 segundos o menos si la
persona ha sido capacitada para tal fin (START TRIAGE, 2007).
Cuando las víctimas en escena son numerosas la atención debe enfocarse de acuerdo
con la siguiente clasificación: Víctimas múltiples, víctimas en masa y desastre médico
(ver tabla 3). (ATLS, 2005).
primero a los pacientes con problemas que ponen en peligro inmediato la vida y a los
que tienen lesiones múltiples.
Víctimas Múltiples
Priorizar a las víctimas con lesiones que
amenazan la vida en forma inmediata o
con lesiones múltiples
Ejemplo….un accidente de tránsito de
medios de transporte masivo
Tabla 3. Prioridad en la atención de las víctimas cuando son varias. Debe procederse de acuerdo con el número de
víctimas, la capacidad de respuesta y los recursos disponibles. La prioridad en la atención varía dependiendo de ello
como queda claro en la tabla.
75
50
25
0
Hospital Centro de
más cercano Trauma
Figura 2. Tiempo invertido entre la ocurrencia del trauma y el cuidado definitivo de la víctima. Obsérvese el
tiempo extra que se gasta si se lleva a la víctima que tiene indicación de ser remitida a un centro de
trauma, a un centro hospitalario diferente, solamente porque es el más cercano. En este centro, como es
lógico no se podrá prestar una adecuada atención al paciente y tendrá que ser remitido a un centro de
trauma con el consecuente retardo en el tratamiento definitivo de sus lesiones, lo cual puede ser deletéreo
para la vida del paciente. Recuerde....no es llevar a todas las víctimas del trauma a un centro de trauma, ni
al hospital más cercano; es llevar a las víctimas del trauma a un centro de trauma cuando estas por las
características de sus lesiones, tengan indicación de ser llevadas directamente a un centro de trauma.
Revísese triage intrahospitalario (Modificado de PHTLS, 2003).
10
20%
15.7 %
15%
10.6 %
10%
5%
Figura 3. Comparación de las tasas de mortalidad global por trauma en Trinidad y Tobago, antes y
después de que los técnicos prehospitalarios o paramédicos recibieran el curso de trauma. Adaptado de:
Ali et al, 1997.
11
ACCIONES MÉDICAS EN LA
TRIAGE!!! ESCENA DEL TRAUMA
Evalúe la seguridad de la escena
y su propia seguridad
Asegúrese de que ya solicitaron
ayuda o solicítela usted mismo
Realice triage START, retire los
verdes, identifique los rojos,
termine el triage
Proceda a suministrar atención
individual a los rojos primero
retirando a la víctima del peligro y
luego con la nemotecnia
A,B,C,D y E
Tabla 4. Guía para las acciones médicas frente a una escena de trauma en el sitio del trauma. Clasificación de las
víctimas de acuerdo con el “Simple triage and rapid treatment” (START triage).
Para la atención de la víctima individual, usted debe seguir una secuencia de manejo
No debe retrasarse el traslado por canalizar una vena; D es para detectar problemas
neurológicos e informar al hospital de destino y E, para prevenir la hipotermia.
Tabla 5. Orden de prioridades a desarrollar en todo paciente que ingresa a sala de trauma para valoración,
independiente de si la lesión es mayor o parece menor. Estas prioridades disminuyen la probabilidad de lesiones
inadvertidas y a la vez determinan la conducta a seguir tanto en forma inmediata para prevenir la muerte, como con
la conducta definitiva en relación a si remitir al paciente a un centro de trauma u hospitalizarlo si ya se está
atendiendo al paciente en uno. La adherencia a estas prioridades previene dar de alta equivocadamente a pacientes
que ameritan manejo especializado o que tienen lesiones de difícil detección inicialmente.
Seguir al pie de la letra estas dos premisas cuando se atiende pacientes traumatizados
puede garantizarle la detección de todas las lesiones significativas. Estudios han
14
Una revisión de la literatura identificó que la tasa de lesiones inadvertidas varía de 0.4 a
65% con las implicaciones que esto tiene para el paciente y para el médico desde el
punto de vista ético, legal, moral y social (Lee & Bleetman, 2004). En general, se sabe
que es más probable no detectar lesiones en el trauma contuso que en el penetrante y
que las lesiones más frecuentemente inadvertidas son las del sistema músculo-
esquelético; sin embargo, se han descrito lesiones inadvertidas que amenazan la vida
tales como neumotórax, hemotórax, trauma hepático, trauma esplénico, lesiones
diafragmáticas, hematomas subdurales, lesiones pericárdicas y transecciones aórticas
(Robertson et al., 1996); el problema puede ser tan prevalente que algunos han llegado
a proponer una valoración terciaria (Brooks et al., 2003; Senthil et al., 2006). Esto es
cierto no solo para los pacientes severamente traumatizados sino también para los
pacientes con lesiones que inicialmente parecen banales, pero que a una exploración
minuciosa revelan lesiones significativas e incluso que puedan comprometer la vida
posteriormente. Tal es el caso de una lesión contundente en cráneo que ocasiona
herida en cuero cabelludo y simplemente se sutura la piel y se da de alta como una
lesión menor sin considerar el mecanismo de producción del trauma y las posibles
lesiones internas que puedan presentarse como consecuencia de la energía cinética
que se le imprimió a la víctima durante la agresión. Este traumatismo pudo haber
generado un TEC severo que amerite manejo especializado no detectable en los
primeros minutos del trauma.
dar de alta a un paciente que ameritaba un período de observación o peor aun, que sí
tenia una lesión significativa y ameritaba atención especializada.
Para poder desarrollar los anteriores conceptos es preciso que una vez ingrese el
paciente a la sala de trauma la primera reacción sea indagar sobre lo que ocurrió, a
menudo con la pregunta…… ¿Qué le pasó? Si el paciente ingresa en condición crítica
esta pregunta se desarrolla en forma simultánea a la atención inmediata del paciente.
Puede ser también el caso que el paciente presente un traumatismo menor que solo
requiere una simple sutura y manejo ambulatorio. Las decisiones con relación a si el
manejo puede ser ambulatorio o debe ser hospitalario, y si el paciente puede ser
manejado en un nivel de atención I o II, o debe ser remitido, deben tomarse con base
en el TRIAGE INTRAHOSPITALARIO, con la finalidad de evitar lesiones inadvertidas
que pongan en peligro la vida de los pacientes y el futuro del médico.
16
(1) En el sitio del accidente, para seleccionar a que centro de atención se trasladará al
paciente. Si el paciente cumple con uno solo de los criterios enunciados en el esquema
de triage, entonces debe ser trasportado a un centro de trauma o tercer nivel de
atención en salud, aunque exista un centro de atención de primer o segundo nivel más
cerca al lugar del accidente.
fue diseñado por el Comité de Trauma del Colegio Americano de Cirujanos, Recursos
para la atención óptima del paciente traumatizado (ATLS, 2005).
Figura 4. Esquema de decisión de triage intrahospitalario para definir traslado de las víctimas de trauma a un centro
de trauma o tercer nivel de atención en salud. Se aplica para tomar decisiones en el lugar del accidente, en un centro
de atención en salud de I o II nivel y para definir necesidad de hospitalización en un centro de trauma.
El esquema tiene en cuenta criterios acerca del estado fisiológico del paciente, las
lesiones anatómicas evidentes. el mecanismo de la lesión y los factores que pueden
modificar el pronóstico del paciente. A continuación se especifican los criterios en cada
uno de los cuatro pasos del Triage Intrahospitalario.
PASO 1
CRITERIOS FISIOLÓGICOS
Figura 5. Índice Revisado de Trauma con sus tres componentes: Escala de coma de Glasgow, presión arterial
sistólica y frecuencia respiratoria. Cada componente tiene un puntaje máximo de 4 y la sumatoria de los tres
componentes da el índice. Si el RTS es menor de 12, entonces el paciente debe ser llevado a un centro de trauma
inmediatamente. Para la escala de Glasgow favor ver anexo 2.
Los estudios han demostrado que se correlaciona bien con la probabilidad de sobrevivir
(Figura 6).
Probabilidad
de Sobrevivir
Figura 6. Probabilidad de sobrevida en los pacientes traumatizados de acuerdo con el Índice Revisado de Trauma.
Obsérvese la exacta correlación entre estas dos variables. Mientras más bajo es el índice, mayor la probabilidad de
morir.
19
PASO 2
CRITERIOS ANATÓMICOS
* Fractura de pelvis
* Tórax inestable
* 1 o más fracturas de huesos largos proximales
* Trauma + Quemadura del 10%
* Lesiones por inhalación
* Todas las lesiones penetrantes de cabeza, cuello, tórax, abdomen y
extremidades proximales a codo y rodilla
* Parálisis de extremidades
* Amputación proximal de muñeca o tobillo
* Fractura de cráneo expuesta y deprimida
Tabla 6. Listado con los criterios anatómicos del paso dos del triage intrahospìtalario. Cada uno de estos criterios
esta determinando que el paciente requiere atención en un centro de trauma. Uno solo de estos criterios presentes
en la víctima y esta deberá ser trasportada y tratada en un centro de trauma.
PASO 3
CINEMÁTICA DEL TRAUMA
Condiciones en que por la cinemática del trauma se estima hubo una gran energía
cinética con transferencia de esa energía a la víctima y la probabilidad de que esta
tenga lesiones internas aunque aparentemente se vea bien, es alta (Tabla 7).
Los mecanismos de las lesiones pueden ser cerrados, penetrantes, térmicos y por onda
expansiva o explosión. En todos los casos hay una transferencia de energía hacia el
tejido, o en el caso del congelamiento, una transferencia de energía desde el tejido.
20
Tabla 7. Listado con los criterios que por cinemática del trauma sugieren una alta energía cinética con muy probable
lesión de órganos internos. Un solo criterio presente en el mecanismo de producción del trauma y la víctima debe ser
llevada a un centro de trauma para atención especializada.
PASO 4
EDAD Y COMORBILIDAD
En Colombia, los accidentes de tránsito, el ahogamiento y los homicidios son las causas
más frecuentes de muerte entre los niños de 5 a 14 años de edad. Las caídas son una
causa frecuente de consulta pero es poco frecuente que ocasione la muerte en un niño.
En el niño, el trauma cerrado, por las características anatomofisiológicas del niño, da
como consecuencia lesiones multisistémicas más como regla que como excepción. Por
tanto, un niño debe ser considerado con lesiones en todos los sistemas orgánicos hasta
que no se demuestre lo contrario. Ya que pueden deteriorarse rápidamente y desarrollar
complicaciones serias, deben ser trasladados a centros de trauma rápidamente.
Tabla 8. Listado de condiciones fisiológicas de la víctima o comorbilidades presentes en el momento del trauma
que hacen que deba ser atendida en un centro de trauma.
22
Una vez tenemos información acerca del mecanismo de producción del trauma
procedemos a atender a la víctima. Esta atención se realiza simultánea a los pasos
anteriores si el paciente esta gravemente lesionado, inconciente o en estado crítico.
Para evitar dejar pasar lesiones inadvertidas, cometer errores graves en el manejo con
consecuencias fatales o secuelas innecesarias, se propone un abordaje en TRES
ACCIONES: ACCIÓN 1, ACCIÓN 2, ACCIÓN 3.
En la ACCIÓN 1 nos dedicamos a identificar y tratar las lesiones que amenazan la vida
en forma inmediata con la nemotecnia A, B, C, D y E (Figura 7).
En la ACCIÓN 2 nos ocupamos de identificar cuales fueron las lesiones que sufrió el
paciente y ubicar su localización, lo cual denominamos el DIAGNÓSTICO
TOPOGRÁFICO (Figura 8).
23
En la ACCIÓN 3 tratamos de averiguar el daño real ocasionado por las lesiones que
sufrió el paciente y muy especialmente, si hay lesión de órganos internos o si hay
estructuras importantes comprometidas más allá de lo que visualizamos a la
observación. En este paso decimos que vamos a determinar si la lesión es
PENETRANTE o PERFORANTE en el caso de las cavidades, TRASFIXIANTE en el
caso de las lesiones en tórax para significar que son transmediastinales ó si LESIONÓ
ESTRUCTURAS IMPORTANTES en el caso de las extremidades (Figura 9).
Requiere RX? Asesinos del tórax? Control quirúrgico? Severidad del TEC? Coagulopatía/Control
Control vía aérea? Toracostomía/ tomía Clasifique choque Descompresión qxca? de daño?
Figura 7. Representación esquemática de la ACCIÓN 1 de la valoración primaria del paciente traumatizado. Los
pasos deben realizarse de acuerdo con la nemotecnia A,B,C,D y E. Este ejercicio permite identificar las lesiones que
amenazan la vida en forma inmediata y asimismo, si se hallan alteraciones en alguno de los pasos, estas deben ser
solucionadas inmediatamente sin continuar el esquema.
24
Una vez nos hayamos cerciorado de que el paciente no tiene ninguna lesión
potencialmente mortal a muy corto plazo, o la hayamos solucionado, pasamos a evaluar
la lesión o la región o regiones comprometidas por el traumatismo.
Una vez ubicada la lesión y hecho el diagnóstico con relación al área, el paso siguiente
es determinar las lesiones internas que ocasionaron esa herida o traumatismo.
Básicamente, queremos averiguar si hubo compromiso de órganos o estructuras
importantes. Para ello definimos si penetró a cavidad en caso de cuello, tórax,
abdomen; y si además de penetrar, lesionó algún órgano importante (perforante) o que
estructuras comprometió. En el caso del tórax es importante definir si la lesión fue
trasfixiante, es decir, transmediastinal, caso en el cual se indica la búsqueda de lesión
en los órganos mediastinales además de evaluar los órganos intratorácicos o el
compromiso de la cavidad pleural (Figura 9).
Para una mejor compresión de las zonas y su delimitación consulte los capítulos
específicos del trauma por áreas.
25
Una vez completados los tres pasos, entonces procedemos a la valoración secundaria.
En este punto es importante resaltar que en muchas oportunidades no es posible
completar la valoración primaria ya que la situación del paciente es crítica y tuvo que
ser llevado de inmediato al quirófano. No obstante, esta evaluación debe completarse
en el posoperatorio, en cuanto las condiciones del paciente lo permitan, pero en ningún
caso debe obviarse por completo asumiendo que como el paciente ya fue intervenido
quirúrgicamente, entonces ya no requiere ser examinado y todo ha sido resuelto.
La valoración secundaria consiste en una revisión de cabeza a pies, que incluye una
historia completa y examen físico. Para complementar la información sobre el paciente,
en esta etapa, puede recurrirse a la historia clínica antigua si esta sistematizado el
centro de atención, o interrogarse a la familia. La nemotecnia AMPLIA ayuda a realizar
el propósito de ampliar la información como se observa en la tabla 9.
Tabla 9. Uso de la nemotecnia AMPLIA, para complementar la historia clínica del paciente traumatizado durante la
valoración secundaria.
27
Finalmente, hay que recordar que se requiere un alto índice de sospecha para facilitar
el diagnóstico y tratamiento oportuno de los pacientes.
BIBLIOGRAFÍA
Ali J, Adam RU, Gana TJ, et al. (1997). Trauma patient outcome after the prehospital
trauma life support program. J Trauma 42:1018.
ATLS (2005). Programa avanzado de apoyo vital en trauma para médicos. Comité de
Trauma del Colegio Americano de Cirujanos. Séptima Edición. 2004.
Bledsoe, B (2002). “The golden hour: Fact or Fiction”. Emergency Medical Services
6(31):105.
28
Brooks A, Holroyd B, Riley B (2003). Missed injury in a major trauma patients. Injury
35(4):407-410.
Lee C. & Bleetman A. (2004). Commonly missed injuries in the accident and
emergency department. Trauma 6(1):41-51.
Lerner, EB. & Moscati (2001). “The golden hour: Scientific Fact or Medical “Urban
Legend?””. Academic Emergency Medicine 8(7):758-760.
PHTLS (2003). Basic and Advanced Prehospital Trauma Life Support. Prehospital
Trauma Life Support Committee of The National Association of Emergency Medical
Technicians in Cooperation with The Committee on Trauma of The American College of
Surgeons. Fifth Edition. Mosby, St. Louis, Missouri, 2003.
Senthil K, Gul A, Sen R, Nagi ON (2006). A missed injury in multiple trauma patient-is
it avoidable? European Journal of Orthopaedic Surgery&Traumatology 16(2):181-184.
Stephan P, McCarley MC, O’Keefe GE, Minei J (2002). 23-Hour observation solely for
identification of missed injuries after trauma: Is it justified? J of Trauma 53(5):895-900.
Lerner EB, Billittier AJ, Dorn JM, Wu YW (2003). Is total out-of-hospital time a
significant predictor of trauma patient mortality? Acad Emerg Med 2003, 10()):949-54.