Sociedades Mercantiles
Sociedades Mercantiles
Sociedades Mercantiles
Características)
La palabra sociedad es utilizada con diferentes sentidos, como contrato y como persona
jurídica. Como contrato hace mención al acuerdo que es celebrado entre los socios y como
persona jurídica se refiere a la agrupación que surge de dicho contrato, entiéndase como
la persona jurídica diferente de la persona de los miembros que la integran.
Para la creación cualquier sociedad es necesario que se dé lugar a la unión entre personas
que han decidido unirse con el fin de realizar actividades comerciales y obtener ciertos
objetivos y beneficios económicos.
Algunas sociedades de comercio tienen un único fin, que al ser logrado automáticamente
queda disuelta la sociedad, otras son establecidas con diversos fines y su duración es
indeterminada.
Las Sociedades Mercantiles son reguladas por el Código de Comercio y se caracterizan por
perseguir un fin económico con la ejecución de actividades de comercio o mercantiles.
De igual manera este tipo de sociedades puede disolverse, cuando sus socios resuelven
finalizar la actividad, es decir, dar por finalizada la sociedad por motivos claramente
establecidos en la ley o en los estatutos, acto seguido de esto, se debe hacer la liquidación
transformando en dinero todos los bienes de la empresa, con el fin de cancelar los pasivos
y repartir el restante entre los socios conforme el número de sus acciones.
Cabe destacar que cada país posee reglamentos jurídicos que regulan las diferentes
sociedades mercantiles, como por ejemplo en México la Ley General de Sociedades Mercantiles,
en Argentina la Ley de Sociedades Comerciales, en España Ley de Sociedades de Capital, en
Uruguay la Ley 16 060 de Sociedades Comerciales, etc.
Elemento personal: Constituido por los socios, personas que aportan y reúnen sus
esfuerzos.
Elemento patrimonial: Conformado por el conjunto de bienes totales aportados por
todos y cada uno de los socios, para formar el capital social, los bienes y trabajo.
Elemento formal: Conjunto de reglas relativas a la solemnidad de que debe revestir
el contrato que da comienzo a la sociedad como un individuo de derecho.