Flor de Loto

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Flor de loto

Características presentes en la flor de loto


Sus hojas tienen una particularidad y es que son petadas, esto es que el peciolo no se junta
a la hoja de manera frontal, sino por el envés de la misma, lo que le da esa forma particular
de sombrilla que le permite flotar tranquilamente por el agua.
De igual forma, son de color verde claro teniendo una forma circular, pudiendo medir
entre los 30 y 100 centímetros de diámetro. Su superficie es lisa y brillante sin presentar
ningún tipo de vello; además, en su borde tiene una forma ondulada.
Su peciolo presenta numerosos acúleos o espinas, muy parecidas a las que tienen
las rosas en su tallo. Estos miden entre 1 y 2 milímetros de largo, siendo a veces un poco
más largo generalmente hueco en la parte interior.
Las plantas se generan de un rizoma que puede llegar a medir hasta 20 metros de
largo; este es grueso, ramificado y con muchos catafilos que se enraízan profundamente
en el fondo.
Las flores por su lado pueden medir aproximadamente entre 16 y 23 centímetros de
diámetro presentando diferentes colores como rosa vivo, rosa pálido o blanco. Sueles ser
muy aromáticas con pétalos de forma cóncava, pudiendo medir cada uno entre 5 y 10
centímetros de largo por 3 a 5 centímetros de ancho.
Los frutos se forman por un receptáculo elipsoidal que mide entre 5 y 10 centímetros
de diámetro, con unos lados entre rugosos a débilmente estriados teniendo un ápice
truncado y plano.

Efecto loto
Hace ta tiempo que se conocía que las hojas de loto no se mojan. Como consecuencia de
ello, el agua de lluvia adopta la forma de gotas esféricas al entrar en contacto con la
superficie de sus hojas, lo cual le permite deslizarse libremente llevándose consigo toda la
suciedad y manteniendo la hoja limpia y seca, como así también libre de colonias
bacterianas, a pesar de vivir en aguas contaminadas. Este efecto de “autolimpieza” fue
denominado efecto loto por los científicos.

Aplicación tecnológica del efecto loto


Para explicar el comportamiento superhidrofóbico de las hojas de loto, los biólogos tuvieron
que estudiar la composición química y la topografía de éstas. Básicamente, encontraron
que las hojas tenían dos niveles de estructuras que explicaban este comportamiento: un
nivel microestructurado consistente en bultos superficiales y un nivel nanoestructurado
formado por pequeños pelos. Ambos sistemas se hallan constituidos por un revestimiento
cerosos, lo que en conjunto hace que la superficie de una hoja de loto repela el agua y no
llegue a mojarse.
La importancia del efecto Loto para crear materiales autolimpiantes resulta claro,
tanto es así que los biólogos Neinhaus y Barthlott patentaron la idea bajo la denominación
"Lotus effect".
Desde entonces, el efecto loto ha sido estudiado por multitud de botánicos y físicos
para conocer mejor el fenómeno y encontrar posibles aplicaciones tecnológicas. A
diferencia de la hidrofobicidad (repulsión al agua), que es una propiedad química, la
superhidrofobicidad es una propiedad fundamentalmente física. La diferencia entre ambas
propiedades depende fuertemente del ángulo de contacto entre la superficie y el agua, de
modo que, si el ángulo de contacto oscila entre 90 y 150 grados, obtenemos propiedades
hidrofóbicas. En cambio, con un ángulo de contacto superior a 150 grados, se amplifica
este efecto y se convierte en una superficie imposible de mojar, obteniendo así
características superhidrofóbicas.
Dado que las superficies superhidrofóbicas no se mojan, otra aplicación interesante
podría ser el desarrollo de pinturas que eviten la corrosión de los materiales metálicos,
además de utilizarse como aislantes perfectos para prevenir daños en equipos eléctricos o
electrónicos por el contacto accidental con agua, pinturas para proteger las paredes y el
mobiliario urbano de los espacios públicos contra el vandalismo, como también el desarrollo
de superficies antibacterianas. Otras aplicaciones se podrían orientar a evitar la
condensación del agua y la formación de hielo en climas extremos sobre la superficie de
autos, barcos y aviones. Estos son algunos de los ejemplos de las posibles aplicaciones
directas del efecto loto, pero su aplicación sobre tejidos podría revolucionar la industria textil
mediante la fabricación de ropa para la lluvia, vestimentas menos contaminantes para el
área de salud, prendas imposibles de manchar y, por lo tanto, de menor mantenimiento.

Referencias
 S.A. (2015). Flor de loto: Historia, características, cuidados, semillas y más. Sitio
web: http://hablemosdeflores.com/flor-de-loto/#Caracteristicas_de_la_flor_de_loto
Fecha de consulta: 2 de septiembre de 2019.
 Taborda, M. (2013). El efecto loto. Sitio web:
https://tecnonacional.blogspot.com/2013/06/el-efecto-loto.html Fecha de consulta:
2 de septiembre de 2019.

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