SUPERA TUS MIEDOS ¡YA!

9 HISTORIAS INSPIRADORAS PARA SUPERAR NUESTROS MIEDOS

AUTORES

Yudis Lonzoy Miguel Wüst

Edwar Javier Moisés Padilla
Freddy Ortíz Alfonso López Roldán
Jesús Sanguino Diego Ramírez
Indira Vera
ÍNDICE

Índice

Dedicatoria

Introducción

Capítulo 1: Miedo hablar en publico

Capítulo 2: Miedo a vender algo

Capítulo 3: Miedo al fracaso

Capítulo 4: Miedo al éxito

Capítulo 5: El miedo Al Emprendimiento

Capítulo 6: Miedo al aprendizaje

Capítulo 7: Miedo a la disciplina constante

Capítulo 8: Miedo a ser diferente

Capítulo 9: Miedo a expresar tus emociones

 Dedicatoria
Para toda persona que mantiene esos sueños de superación dando vueltas en
la mente, pero, sobre todo, para aquellos que deciden dar el salto hacia lo
desconocido, aman emprender y luchan incansablemente por materializar sus
sueños.
 Introducción

Cada uno de nosotros en algún momento, en circunstancias de nuestra vida

diaria, nos hemos quedado paralizados por un sentimiento tan grande y fuerte
como el deseo de comer y dormir, llamado MIEDO.
El miedo, así como otros sentimientos, es parte de nosotros, está en nuestros
genes, nos enseñan a tener miedo, ya nacemos con eso, sin embargo,
podemos aprender a controlarlos e incluso a dejar de tenerlos. Los miedos
han ido evolucionando así como el hombre mismo. Los miedos de los
primeros seres humanos no son los mismo a los miedos de los seres humanos
de hoy.
“Supera tus miedos ya!!!” es una guía práctica, de historias reales de 9
autores y sus propios miedos, te aseguro que quedarás enganchado de
principio a fin con cada uno de las historias contadas en este libro.
¿Cómo reconozco un miedo? ¿cómo afrontó un miedo?, en este libro,
conocerás 9 historias de personas como tú y como yo, 9 historias inspiradoras
de los miedos más comunes que nos aquejan día a día en la actualidad,
conocerás a 9 personas que reconocieron su miedo, y a su vez cómo lo
enfrentaron y salieron adelante, 9 experiencias que te van a ayudar e inspirar
a enfrentar eso que no te atreves a hacer.

¡Supera tus miedos ya!!!

 Capítulo 1
Miedo hablar en publico
Por: Yudis Lonzoy

Hablar en público para muchos es algo más que una situación estresante, es
un miedo muy común que puede provocar una experiencia paralizante.

Durante muchos años de mi vida fui una persona tímida, tenía miedo hablar
en público ya que no salía en las exposiciones del colegio ni de la
universidad, y como resultado perdí muchas oportunidades laborables, así
como también mucho dinero debido a no contar con habilidades
comunicativas, no me gustaba aquello hasta que un día decidí cambiar y
comencé a entrenarme de manera privada frente al espejo, la verdad al
comienzo fue muy difícil pero insiste y persiste y nunca me detuve.

Así comencé a superar mi miedo hablar en público, también aprovechaba las

ocasiones donde habida reuniones sociales para hablar y mejorar mi
confianza.
Luego decidí entrar a un curso de oratoria donde descubrir estrategias y
técnicas para hablar en público con seguridad, confianza y poder. Y así
supere mi miedo de hablar en público, y decidí convertirme en un experto
hablando en público y en una persona con una fluidez verbal total. De
repente mi realidad cambió, comencé a tener más amigos, más oportunidades,
mis ingresos aumentaron, emprendí mi empresa, comencé a viajar por
diferentes lugares dictando conferencias, y hasta llegué a ser entrevistado en
diferentes medios de comunicación. Fue un cambio totalmente maravilloso
en mi vida y todo ello por aprender a hablar en público de manera
profesional.

Actualmente soy Conferencista y Orador profesional, desarrollo

entrenamientos vivenciales en Oratoria profesional y ayudo a muchas
personas a superar este miedo y mejorar su comunicación en público.

1.1 Consejos para superar el miedo hablar en público

ü Práctica frente a un espejo

ü Escucha audios positivos y temas de hablar en público
ü Cierra tus ojos y repite la frase “soy totalmente imparable durante
90 segundos” antes de hablar en público.
ü Lee libros y conoce muy bien el tema hablar
ü Matricúlate a un curso de oratoria y liderazgo
ü Práctica una y otra vez

1.2 Estrategias para hablar en Público como todo un Profesional

Captar la atención de nuestro público se ha vuelto todo un desafío debido a la

gran cantidad de distractores que se presentan en nuestro entorno, sin
embargo, eso no impide que consigamos nuestro objetivo siempre y cuando
usemos formas correctas de iniciar un discurso que nos permitan atraer la
atención del público desde un inicio.

1.2.1 Utiliza preguntas al empezar.

La forma más rápida y corta para captar la atención del público son las
preguntas

Ejemplo: ¿Qué harías si te ganas un millón de dólares?

1.2.2 Utiliza historias

Las historias son la manera más seductora de influenciar en público y hacer

que te escuchen con muchas atenciones. Los grandes oradores son grandes
contadores de historias.

Ejemplo: Quiero empezar contándote una historia que tiene que ver mucho
con este primer acuerdo: Cierto día por la tarde habían tres amigos que
estaban caminando por el bosque y de un momento a otro se encontraron una
lámpara y no era una lámpara cualquier, era la lámpara de Aladino, en
seguida flotaron la lámpara y salió el genio; el cual te cumple 3 deseos. Al
salir el genio de la lámpara dijo: “Soy el genio y estoy aquí para cumplir sus
deseos, como son los tres que
flotaron la lámpara les cumpliré un deseo a cada uno, ¿pues bien cuáles son
sus deseos?”

Uno de los amigos dijo: “yo quiero ser el alumno más sabio del mundo”; y el
genio le concedió su deseo, y se volvió el hombre más sabio del mundo. El
segundo amigo para no quedarse atrás dijo: “yo deseo ser cien veces más
sabio que el primero”. Al escuchar este deseo el genio no se sorprendió
porque sabía que los hombres por naturaleza querían ser mejores que el otro,
entonces le concedió el deseo y se volvió cien veces más sabio que el
primero, sin embargo faltaba el tercero.

Quiero preguntarte a ti, si tú fueras el tercero, ¿cuál sería tu deseo? - el genio

se dirigió al último amigo y le dijo: “No me digas que tú quieres ser mil
veces más sabio que ellos dos, en eso el tercer amigo dijo: “No”; el genio
sorprendido le responde: “¿entonces cuál es tu deseo? Y él respondió con voz
firme y muy seguro de su deseo: yo solo quiero que me cumplas el siguiente
deseo, yo deseo ser alumnos de ellos dos… si yo deseo ser alumno de ellos
dos. ¿A dónde nos invita esta historia? A que tú y yo somos alumnos del
mundo. “nunca dejes de aprender así nunca dejares de crecer y avanzar”.

El primer acuerdo es el más importante y también el más difícil de aplicarlo,

muchos de nosotros creemos saberlo todo en el mundo, creemos que no hay
nadie quien nos pueda enseñar o que nosotros no tenemos nada que aprender
de alguien, este acuerdo te permitirá a ti a ser el mejor en todos los aspectos,
“Sé un alumno del mundo, déjate enseñar”.

Los hombres más exitosos del mundo siempre están en constante aprendizaje,
innovando, aprendiendo, y sobre todo compartiendo sus aprendizajes a
aquellas personas que quieren tener éxito en su vida, que quieran obtener
libertad financiera en su vida.

1.2.3 Utiliza objetos

Los objetos nos permiten captar la atención del público de manera inmediata
ya que se utiliza para hacer una comparación con el tema que vamos a
presentar. Desde que sacas un objeto, te distingues del resto de expositores.
El proceso es el siguiente: sales mostrando un objeto, empiezas a hablar del
objeto haciendo una analogía que te permita vincular con tu presentación.

Ejemplo: (con un celular) “Buenos días, Ustedes se preguntarán qué hago con
este celular en mi mano, este celular nos acerca de las personas que tenemos
tan lejos, pero a la vez nos aleja de las personas que tenemos tan cerca, hoy
quiero hablarte acerca de la comunicación”

1.2.4 Utiliza una cita o frase

Utilizar frases o citas hace tu presentación sea más interesante y elegante

Ejemplo:
ü Para empezar quiero citar al gran Dale Carnegie que dijo
“Usted puede ganar más amigos en dos meses interesándose de verdad
por los demás que los que se pueden ganar en dos años cuando se trata
de interesar a los demás por uno mismo”

ü Para iniciar quiero compartir una cita con ustedes

Existen dos formas de ver la vida: una es creyendo que no existen los
milagros, la otra es creyendo que todo es un milagro

ü Antes de iniciar quiero compartir una frase con todos ustedes

Somos arquitectos de nuestro propio destino

1.2.5 Haz participaciones físicas

La gente aprende y capta mejor tu mensaje cuando está en movimiento,

utiliza prácticas grupales para que interesante y tu mensaje y presencia sea
más persuasiva

Ejemplo

En este momento levante la mano todas las personas que deseen aprender a
ganar más dinero

ü A la personas que está a tu costado dile tu eres un ganador

ü Les invito a que te presentes con 3 personas en menos de 2
minutos

1.2.6 Ponle números a tu discurso

Un discurso sin número es como un partido de futbol sin goles

Ejemplo:

Este año tiene 365 días, hagamos entonces que se conviertan en 365
oportunidades

Y que cada día sea 24 motivos, 24 ratones para crecer y avanzar.

CAPITULO 2
MIEDO A VENDER ALGO
Por: Miguel Wüst

Generalmente todo ser humano tiene miedo o rechazo a vender algo durante
su vida. ¿Pero por qué se genera este miedo o temor?

Considero la razón principal al rechazo o a recibir un NO en su vida, y por

eso seguimos con ese paradigma de ver a las ventas como un proceso menor
o de baja calidad dentro de las carreras que existen. Sin embargo, la mayoría
de las personas no se dan cuenta, que depende de que parte del proceso de
Ventas te debes encontrar, ¿cómo Empleado de Ventas? o como Dueño de la
Empresa que vende algo?

Para la gran mayoría de las personas “vender” es una actividad que genera
temor. Aunque es cierto que hay vendedores natos, también es cierto que se
puede llegar a ser un vendedor exitoso si se empieza a ver esta actividad
como es realmente: una actividad entretenida, profesional y muy gratificante
(económicamente y emocionalmente).

Te sorprenderías al saber cuántas personas en el mundo han amasado fortunas

siendo vendedores. Miles de vendedores en el planeta viven bien,
desahogados de deudas y con ciertos lujos, gracias a las ventas.

Para lograrlo tuvieron que vencer el miedo al rechazo -principal obstáculo

para las ventas-, se profesionalizaron y también aprendieron a ver su trabajo
con pasión y no como una alternativa de ingresos temporal o para salir del
paso.

Un vendedor no debe tomarse como personal el rechazo de los compradores,

de lo contrario un “no” puede sepultar tu carrera como vendedor y también
puede terminar con tu confianza como persona. Lo curioso es que todos
sabemos que la mayoría de las personas van a decir “no, gracias”, pero
también sabemos que a todas las personas les gusta comprar. Entonces, si
sabemos que es normal que nos digan no y que a todo mundo le causa placer
el comprar ¿por qué temer? Cifras estadísticas indican que de cada 10
intentos de venta, nueve serán no y una será sí; se trata de algo normal en el
comportamiento de las personas, no hay nada que temer.

Una vez que asimiles que una negativa no representa nada grave en este
trabajo, entonces verás que empezarás a vender con mayor ánimo, confianza
y con mayor efectividad. Este paso te permitirá ejercitar tu confianza. Como
cualquier capacidad de los seres humanos (física, intelectual o emocional) la
confianza se hace más fuerte cuando la pones en práctica constante. Para
lograrlo es importante prepararse, es decir, profesionalizarse. Y en realidad,
todo el mundo vende, lo que pasa es que no nos damos cuenta de ello. Por
ejemplo, cuando postulamos a un empleo, ¿acaso no nos vendemos como el
mejor futuro empleado que pueda tener esa empresa? Cuando enamoramos a
alguien, ¿acaso no nos vendemos como la mejor persona que la otra persona
pueda encontrar en este mundo? Y así podríamos enumerar diferentes casos y
escenarios de la vida cotidiana donde constantemente estamos vendiendo
algo o nos estamos vendiendo a nosotros mismos.

Por ejemplo, en mi caso, antes del año 2003, yo venía del ambiente
corporativo, de profesión Ingeniero Industrial en Perú y 2 años de estudios de
Contabilidad en New York, USA, y estaba acostumbrado al ambiente de
oficina. Y cuando comencé a desarrollar un Multinivel de productos de
Nutrición en USA fue un cambio totalmente distinto al que estaba
acostumbrado y me costó mucho salir de zona de confort. Pero luego de
muchos entrenamientos en ese multinivel me di cuenta que la “carrera de
ratas” que había seguido en mi vida y mi círculo social, tal vez no era el más
adecuado para conseguir la Libertad Financiera que ya deseaba en esos
momentos y que antes no deseaba o no me había dado cuenta de eso. Luego
en el 2009 tome algunos cursos de Desarrollo Personal en New York y todo
este curso afianzaron mi deseo de ser Financieramente Libre en mi vida.

Y luego de todos estos entrenamientos, me libere mucho del miedo de vender

cosas en mi vida. Por ejemplo, ahora no tengo ningún temor de ofrecerle algo
a otro ser humano porque entiendo que, en el peor de los casos, lo peor que
pueda pasar es recibir unas NO gracias y también entendí que después de
cierto número de Nos viene un Si y que también no pasa nada malo en recibir
un NO, y que todo lo contrario a lo que la mayoría de las personas piensan, el
recibir un NO te fortalece y te deja un aprendizaje de mejorar y esforzarte en
concretar la venta la próxima vez que lo intentes.

Y, asimismo, entendí que la única forma de hacerte rico en esta vida es

vendiendo justamente algo. Repito nuevamente, todo depende de que parte de
la venta, te encuentres.

Luego de analizar los paradigmas sobre el acto de Vender y su supuesto

Dolor, te aconsejo 3 posibles Consejos o Soluciones para superar esos
paradigmas.
1. Es importante tomar muy en serio los cursos, talleres y capacitaciones de
Ventas. Sin duda te darán muchas herramientas para ser un vendedor
exitoso e incluso te brindarán la posibilidad de conseguir un mejor puesto
o, incluso, lograr un empleo en otra empresa con mayores beneficios o ser
futuro dueño de tu propia empresa.

Entre mayor sea tu profesionalización mayor será tu confianza para

atender a un cliente y para cerrar la venta.

Algunos vendedores llegan a niveles que no te imaginas. Existen muchos

profesionales de las ventas que literalmente trabajan pocas horas al día e
incluso minutos. Hablo de los que han sido capaces de tejer redes de clientes
importantes para sus empresas o marcas. Una vez que amarran a esos
grandes clientes, simplemente se dedican a estar pendientes de sus pedidos y
a administrar sus jugosas comisiones.

Para un vendedor es vital conocer a profundad el producto que se ofrece. No

debes dejar pasar por alto ningún detalle, ya que a muchas personas les
desagrada no saber si un producto o servicio va a satisfacer sus necesidades.
Entre más conozcas tu producto y el de la competencia entonces tendrás más
argumentos para cerrar la venta. Así que no dudes en leer manuales,
instructivos, críticas, estudios de mercado, cometarios y todo lo que tenga
que ver con el producto o servicio a ofrecer.

Como ves, no hay nada que temer en las ventas. Depender de las comisiones
es una oportunidad de ganar más dinero del que puede ganar una persona que
tiene un sueldo fijo.

2. Entiende que, si deseas tener Libertad Financiera, debes estar del lado de
las Ventas como Dueño de la Empresa y no como Empleado de Ventas
solamente. Ojo, no hay ningún problema con ser empleado, el asunto es
que te quedes como tal por el resto de tu vida con solamente un sueldo fijo
cuando hay mejores opciones en esta vida.

3. Debes entender que NO pasa nada malo al recibir un NO en cualquier

proceso de Ventas que desarrolles en tu vida. Solo atrévete a hacerlo y
 te darás cuenta que lo fabuloso de todo es que tu estas dispuesto a
pagar precios que muchas personas no están dispuestas a pagarlo, y
que, por lo tanto, el vencer este miedo, ya te hace muy diferente a
mucha gente, y que en realidad te estas venciendo a ti mismo.

Espero que estos tres consejos te ayuden a superar todos estos paradigmas
sobre el proceso de ventas. Y recuerda siempre, que Vender es un Arte que
no cualquiera está dispuesto a pagar los precios necesarios y que es la única
forma de ser algún día rico y disfrutar la tan ansiada Libertad Financiera. Te
deseo muchas bendiciones y suerte en todos tus procesos de ventas que
realices en tu vida.
 Capítulo 3
Miedo al fracaso
Por: Edwar Javier

Así como gozar del éxito puede ser un miedo interno que nos bloquea de
conquistar la vida que soñamos vivir, existe también el miedo al fracaso.

Hablamos de un paralelo entre “vivir una vida exitosa y perderlo todo” a

“vivir dominados por el temor de fracasar y no intentarlo siquiera”.

Si no superas este temor, estás aceptando vivir siempre en las mismas

condiciones y estás privando a la persona más importante de tu vida (tú) del
éxito.

Necesitamos ser libres de estos temores y encontrar un punto medio para

seguir adelante. Un emprendedor exitoso tiene que saber lidiar con cualquier
temor que se levante en el camino.

Recuerdo que una vez vi un video viral en Facebook que me llamó mucho la
atención. Era una manada de búfalos africanos pasando muy cerca de una
leona que los observada pasar, uno se da cuenta rápidamente que la leona
estaba esperando el momento perfecto para saltar sobre su próxima víctima,
pero no… Algo la detenía. Cuando uno empieza a preguntarse ¿en qué
momento saltará? Entra en escena un león con una determinación, de un solo
salto se hace con una presa.

Aun así, la leona se quedó inmovilizada.

Muchas personas quedan del mismo modo al momento de querer emprender

algo nuevo; paralizados por temor a lo que podría resultar mal.

Yo estuve en esa posición hace algunos años. Simplemente había dejado que
el miedo al fracaso me detuviera y me estancara una vida común y corriente,
sin intentar nada de nada para siquiera destacar.

En base a mi esfuerzo y habilidades había logrado una “buena” carrera en una

multinacional, a pesar de haberlo celebrado y disfrutado al inicio, de pronto
empecé a sentirme vacío. Sentía que no había nacido para eso.

Sabía que había llegado un momento clave para decidir sobre mi futuro…

Desde niño recuerdo imaginarme a mí mismo viviendo una vida plena y

abundante. Viajes, casa, etc. Pero me vi atrapado en un sistema que ya no me
hacía feliz.

Empecé a leer libros sobre el éxito y la mentalidad emprendedora. Debía

emprender, pero siempre me quedaba paralizado, sin hacer nada por temor a
fracasar en el intento.

Empecé a entrenar mi mente con más libros y talleres presenciales de

motivación, pero eso no duraba mucho. De pronto estaba súper animado,
pero el temor pinchaba ese deseo y otra vez paralizado.

Finalmente alguien me dio el empujón que hacía falta. Un familiar me

compartió su experiencia en el mundo empresarial.

Para mi sorpresa, él también había tenido miedo al fracaso antes de

emprender, pero fue más resuelto… No hizo caso a esas vocecitas que le
decían que acabaría mal.

¡Actuó a pesar el miedo!

Me dijo, aún hoy a veces salta ese miedo Edward, pero la clave es dominar el
miedo y actuar a pesar de no ver todo el camino.

8 años después de haberme lanzado a la piscina sin saber nadar bien, puedo
decir con certeza que muchas veces, ese temor va a querer paralizarme
todavía.
Recuerdo mi primer emprendimiento que según yo, me haría millonario.
Estaba tan convencido de eso que no dudé en absoluto de renunciar a mi
empleo.

Mi mundo se vino abajo, cuando di la cara a mi primer fracaso. Había

acabado con CERO dólares en la cuenta de mis pocos ahorros y con deudas
en dos bancos.

Reconozco que al inicio tomé decisiones muy precipitadas, pero que a la

larga, de no ser así, tal vez hubiera vuelto a mi zona de comodidad.

Estar sin nada y re-usarme a buscar en empleo bien remunerado me ha dado

el valor para salir de esa situación de maneras creativas.

Personas exitosas coincidirán conmigo al afirmar que el fracaso al final de

cuentas es lo que te hace un hombre más exitoso.

Probablemente escuchaste la frase que dice “ningún marinero se hizo experto

en aguas tranquilas” y realmente tiene mucho sentido.

Aquello que saca tu mejor versión como persona que va tras sus sueños es
aquel que ha dado la cara al fracaso en numerosas oportunidades.

Si eres un hombre apasionado por sus sueños, pasará muchas veces que te
veas en momento duros ante un fracaso y otro.

Lo que debes saber del fracaso es que puede ser tu mejor maestro para hacer
de ti una persona exitosa en lo que sea que decidas emprender. Actuar a pesar
del temor te libera y saca lo mejor de ti.

Siempre existe la posibilidad de evitar el fracaso sorteando caminos, pero eso

no te enseña nada bueno.

Si llegas a la cima del éxito habiendo evitado todos los fracasos posibles y de
pronto enfrentas al SEÑOR FRACASO y pierdes todo lo que habías
conseguido… Se te hará mucho más complicado levantarte y llegar más lejos
que eso.
Quiero que comprendas bien esta parte…

Estar en la cima del éxito y fracasar una vez y levantarse es más difícil que
estar en la cima y haber fracasado varias veces y reponerse. Pues el segundo
sabrá lidiar mejor con cualquier obstáculo que se presente porque ya pasó por
varias situaciones y está preparado para lo que venga.

Los errores al final de cuentas se traducen en experiencias. De esa manera

tienes más oportunidades de aprender y mejorar. Después de todo, si no has
experimentado ningún tipo de fracaso, entonces no tendrías forma alguna de
cambiar para mejorar

De pronto dirás ¿me estás diciendo que me aviente a coleccionar fracasos?

Sí y no, te explico.

Simplemente quiero compartirte desde mi experiencia lo que fue para mí y lo

que sé acerca del fracaso.

Y respondiendo a la pregunta, no quiero decir que vayas a la ligera y que

emprendas para fracasar. Si juegas a un juego con la mentalidad de perder, ya
perdiste.

Lo que quiero que saques de este capítulo es simple, convertir el fracaso en tu

mejor maestro y decidas emprender a pesar del temor y la incertidumbre de
que si saldrá bien.

Para comenzar algo, no debes haber visto todo el camino y tener de memoria
dónde viene la siguiente curva o el siguiente obstáculo. Simplemente damos
el primer paso y vamos avanzando y conforme se vayan presentando las
cosas, tomamos decisiones que nos lleven al éxito, pero eventualmente
alguna decisión pueda que nos lleve hacia el fracaso.

Un emprendedor con mentalidad de éxito busca en cada fracaso alguna

experiencia que pueda servir a futuro.

Personalmente, aprendo siempre algo, jamás pierdo.

La realidad es que aprendí algo que cambió mi manera de pensar en este
aspecto. Vivimos en un mundo donde hay leyes y una de ellas es la ley de la
polaridad. Esta ley dice que hay un opuesto en todo.

Si estás en medio de una situación trágica, debes saber que hay algo bueno en
medio de eso. Por esta ley decimos que toda oportunidad tiene una crisis y
toda crisis tiene una oportunidad. Simplemente debemos aprender a
identificarlas.

Un emprendedor con mentalidad de éxito también sabe que el fracaso es

temporal.
Si fracasas, toma aquellas cosas puntuales que puedan ayudarte a intentarlo
con más fuerza.

Con el tiempo te das cuenta que debes planificar tu éxito, de no hacerlo, estás
planificando de forma indirecta tu fracaso.

Observa la vida de un Thomas Alva Edison, que no paró sus intentos de hacer
funcionar la bombilla eléctrica sin importar que tuviera que hacer más de 5
mil intentos para lograrlo. Más tarde cuando se le preguntó sobre los intentos
fallidos, él simplemente afirmó que encontró miles de formas de no hacer que
la bombilla funcione.

Mira la vida del viejo Coronel Sanders que fue de restaurante en restaurante
ofreciendo su receta de pollo frito y no se rindió a pesar de los NO que
recibía y hoy es una cadena de comida rápida por todo el mundo.

Quiero animarte a no rendirte ante cualquier obstáculo o fracaso. A que le

pierdas el miedo o lo mantengas controlado y actúes.

El miedo no hace más que paralizarnos, produce en nosotros sentimientos y

pensamientos negativos que reducen todo nuestro potencial. Te hace creer
que no puedes lograr algo.

Pero recuerda, ¡a pesar de eso… ACTÚA!

Puede venir a tu mente pensamientos que te hagan creer que es mejor ni
intentarlo que arriesgar tu futuro, ¡pero… ACTÚA y vivirás un futuro mejor!

Si te pones a pensar en el peor escenario ante un fracaso, verás que tu mente

encontrará la manera de sacarte de ahí. Siempre hay oportunidad en la crisis,
recuérdalo.

Para terminar con este aporte, quiero dejarte algunas recomendaciones para
vencer el temor al fracaso:
Tus pensamientos se materializan. Si piensas que puedes y lo
interiorizas, al enfrentar cualquier circunstancia, estarás seguro de que
sí puedes. La afirmación “PUEDO HACERLO”, anula el pensamiento
del “NO PUEDO”.
Haz lo que tienes que hacer… enfrenta ese temor, sal a su paso,
considerándolo como un desafío y en lugar de retroceder ante el miedo,
ponle la cara, por nada del mundo evites la situación.
Toma decisiones y planifica tu éxito considerando que es imposible
fallar.
Actúa a pesar del temor, como si no lo tuvieras, aunque en tu interior lo
sientas.
Hazte las preguntas: ¿qué es lo peor que me puede pasar si sigo
adelante? ¿Qué me puede ocurrir si tengo éxito? Te darás cuenta que
los riesgos son muy pequeños frente a todo lo que podrías lograr.
 Capítulo 4
Miedo al éxito
Por: Moisés Padilla

A diferencia de lo nosotros esperamos, existen personas con miedo a tener

éxito, a ser reconocidos, a tener dinero, a ser millonarios. tal vez nosotros
podemos cuestionar sus creencias y decirnos nosotros mismo: “cómo es
posible tener miedo a ganar, a ser alguien prospero, a ser alguien exitoso”;
pues bien, este miedo es más común de lo que parece, e igual de peligroso
para todos. Ponerse en el lugar de la otra persona nos ayudará a entender
porque su miedo, porque ese temor... y a cómo ayudarlos a enfrentarlo.
Cuando era niño, yo recuerdo que era el típico niño hiperactivo,
curioso y travieso, el más rebelde de todos mis hermanos, siempre
buscando algo que hacer y muchas veces terminaba en tragedia, o
como decía mi madre, en una “diablada” de mi parte. una grata
experiencia que recuerdo como si fuera ayer es, cuando yo tenía 5 años
de edad, me rompí el brazo izquierdo por un tropiezo, y para
recuperarme de esa lesión, me pusieron un yeso.

En ese entonces pues no me sentía nada cómodo, no podía jugar con

mis amigos, no podía escribir ni comer con facilidad, y eso me aburría
y estresaba. Un día, a mi familia se le ocurrió salir de viaje a visitar a
unos familiares en la selva, y ellos vivían cerca a un rio, y pues yo veía
que mis hermanos y mis primos iban a ese río a divertirse, a jugar, a
bañarse, y yo solo me resignaba a mirar porque no podía divertirme
con ellos.

Un día me arme de valor, me escape de la casa de mis tíos, y siguiendo

mis instintos de hiperactividad, me lancé al río con todo y yeso, ¡y
PUM!!!, mágicamente, el yeso comenzó a romperse, y por fin ya podía
mover mi brazo, ERA EL MÁS FELIZ DE TODO EL MUNDO!!!
vencí al yeso, y me sentía libre, fue en ese instante y en adelante
cuando mis padres comenzaron a ponerme los primeros temores al
éxito.

Cuando volví a casa de mis tíos, mi madre y mi padre, dieron un grito

al cielo, el yeso se había roto, pero mi brazo no estaba aún recuperado
al 100 %. De inmediato, me llevaron al hospital y nuevamente, el
bendito yeso en mi brazo, por mi travesura ahora, lo iba a llevar por
más tiempo, desde entonces muchas cosas cambiaron, empezaron a
querer cortar de raíz mi espíritu emprendedor, comenzaron a
sobreprotegerme, pues yo también era muy enfermizo de niño.

Yo no fui un niño con notas sobresalientes en la escuela, me

encontraba dentro del promedio, un poco más abajo, y mis hermanos,
la mayor y el menor siempre, tenían reconocimientos por su excelencia
académica.

Comenzaron las comparaciones, “Porque no eres como tu hermano, o

como tu hermana…”, y es muy curioso, pues mientras mis hermanos
eran halagados por mis padres y personas mayores, mis
contemporáneos les tenían envidia. Muchos no saben, pero los niños a
veces pueden ser muy crueles con sus palabras, empecé a tener miedo a
sobresalir.

Por un lado, mis padres, no estaban felices o plenos con mi

rendimiento en general, por otro lado, mis amistades, o las amistades
de mis hermanos, que no vean con buenos ojos que ellos sobre salieran,
estaba muy confundido, allí comenzó mi miedo al tener éxito.
luego de ser niño como todos, pase a la etapa de la secundaria, allí todo
“empeoro”, de estudiar en escuelas particulares, pase a una escuela
estatal, un choque de 2 mundos; misma ciudad, 2 realidades totalmente
distintas.

Estudie en un colegio técnico experimental, ¿qué quiere decir eso?,

pues un colegio que aparte de la currícula normal de estudios, te
enseñar a trabajar para otros, en pocas palabras, a ser un empleado más
en la sociedad. o sea, cero emprendimientos. En esta etapa de mi vida,
tampoco me encontraba entre los más sobresalientes de mi clase,

Los más inteligentes de salón eran los más castigados por mis
compañeros más “vivos”, hostigamiento total, desprecio, etc. siguieron
alimentando mi miedo al éxito. recuerdo una vez, que un amigo mío
hasta lo llevaron a un hospital, por los golpes que recibió por el simple
hecho de haber sido el único que aprobó un examen que nadie más
aprobó.
A pesar del miedo que podía sentir por sobresalir, nunca estuve
conforme, quería hacerlo, pero tenía miedo, estaba paralizado; sin
saber cómo actuar ante todo esto, acabo mi etapa de la secundaria.
¿porque puse entre comillas “empeoró?” pues a pesar que la situación
empeoró, fue allí cuando me di cuenta cuales eran mis 2 únicas
opciones: o me paralizaba y me conformaba con lo que la “sociedad”
me ofrecía o… comenzaba a enfrentar el miedo a tener éxito y salía
adelante.
Salí del colegio dentro del promedio, un poco más arriba, pues a pesar
de toda la situación que viví allí, descubrí mi vocación para la vida, la
música. Y así fue, que decidí estudiar música, en un país donde no es
valorado y en total desacuerdo de mis padres.

En la universidad tenía la expectativa fuerte de que allí si podía salir

adelante y emprender, sobresalir … postulé e ingresé al primer intento,
un logro significativo que solo yo celebre, pues en casa, solo mis
hermanos me apoyaron en la decisión de ser músico.

Al final mis padres, al ver mi perseverancia en mi decisión, empezaron

a apoyarme, y así pude estudiar “tranquilamente” 3 años de mi carrera.
en ese transcurso descubrí libros y personas que cambiaron mi vida
definitivamente.
Los primeros ciclos de mi carrera nos fueron sencillos, aun así, llegue a
tener algunos reconocimientos, alcance el tercio superior; lo que no
pude lograr en mi etapa escolar por miedo, lo comencé a lograr en la
universidad, empecé a vencer mi miedo al éxito, pero solo fue el
primer paso de este gran camino que ya he recorrido.
En este transcurso de mi etapa universitaria me di cuenta de algo muy
interesante, que creía que ya había dejado de lado en el colegio y pues
no, estaba siendo educado para ser un empleado más del sistema. Un
día me senté a meditar y encontré que, efectivamente sólo había
cambiado de lugar, más no de situación, me di de golpe nuevamente
ante la realidad.

Debido a problemas económicos, tuve que dejar de estudiar por un

tiempo, allí comenzó mi verdadera batalla de encontrar mi esencia y
saber quién soy.
Siempre tuve una cualidad muy particular, era bastante sociable,
conectaba rápido con las personas, y eso me ayudó a conseguir
rápidamente mi primer trabajo relacionado a mi carrera, como sonidista
y productor musical de un estudio de grabación, el sueño de cualquier
principiante en mi carrera.

A veces cuando uno es muy bueno o noble, las personas se aprovechan.

Esta primera experiencia laboral fue la peor que pude haber tenido,
marcó un antes y después en todo, pues incluso llegue a hostigarme de
mi pasión por la música, no me cabía en la cabeza porque sacar la
basura y pasear al perro de mi jefe iba a contribuir a mi desarrollo
como profesional en mi carrera, allí decidí completamente que nunca
más iba a tener un jefe, allí volvió a renacer en mi espíritu
emprendedor , ese que tenía de niño y que mis padres quisieron
arrancar, ese espíritu que por miedo durante mi adolescencia no pudo
desarrollarse.
Como era de esperarse, deje ese trabajo, me encontraba en esta
situación: no había acabado la universidad, estaba sin trabajo
relacionado a mi carrera… ¿qué hago ahora? … Fácil, y pues no tenia
de otra… decidí emprender. Ya estaba familiarizado con libros de
desarrollo personal y emprendimiento, y ese fue mis primeros
mentores, pues comencé a aplicar los conocimientos adquiridos en
estos libros.

Antes las miradas raras de mi familia, pues como ya saben, en un

 comienzo a los emprendedores nadie los entiende, sabía que estaba
comenzando por buen camino, estaba haciendo algo distinto, pisando
terreno inexplorado, y más que miedo en mi interior, era curiosidad por
saber que había allí que podía ayudarme a tener éxito.
Comencé a fallar, y a fallar mucho, y nadie me dijo que eso era parte
del éxito, varios de mis emprendimientos no funcionaron, me puse a
prueba varias veces, sin embargo, siempre decidí empezar todo
nuevamente y falle… y ver como algo que empezaste con mucho
esfuerzo y pasión falle…duele y duele muchísimo. seguí adelante, así
sucesivamente, hasta entender que esos fracasos, y esas fallas son las
previas para lo que realmente te dará la satisfacción, no solo financiera,
sino emocional y mental.
Hoy, gracias al apoyo de muchas personas que conocí en este camino
es que estoy empezando a conocer el éxito, ¡y resultó ser que el éxito
es genial!!! no es malo!!!, es lo mejor uno como ser humano que quiere
ser próspero debe lograr. Muchas veces es un miedo infundado, que
solo está en la mente, pero la mente es tan poderosa que domina, y
domina todo, por ello debes desarrollar para que domine todo lo
positivo.
Ahora me dedico a ayudar a las personas a que den ese primer paso
para la libertad y prosperidad, que pierdan el miedo al éxito, el miedo a
ganar, el miedo a sobresalir.
Mi primer emprendimiento lo comencé a los 18 años. Hoy, 5 años más
tarde, y mi sexto emprendimiento, entendí que lo único lo q me estaba
limitando era mi miedo a ser exitoso, pues quería mantener perfil bajo,
en un mundo que es tan competitivo, donde rápidamente puedes pasar
desapercibido y no lograr eso, esa pasión que te motiva y te levanta
cada mañana, esa pasión que te quita el sueño o te mantiene despierto
hasta altas horas de la noche, y digan lo que digan los demás, lo quieres
hacer sin importar.
Hace un tiempo atrás, un amigo mío me dijo: ¿oye tu estudiaste música
verdad?... ¿porque no ejerces tu carrera?; estas en todas y nada te funciona...
yo tengo mi trabajo y me funciona bien y así estoy tranquilo, ¿porque no
buscas eso?
A lo que yo le respondí: pues sí, estoy en todas, porque yo no me conformo
con un solo ingreso, estoy en todas hasta que me funcione, porque si una
fuente de ingreso me falla, no me desespero porque tengo otras fuentes que
siguen trabajando para mí, amigo mío, de todo corazón, espero que no te
quiten tu única fuente de ingreso… o a lo mejor sí… para que puedas
entender lo que realmente es el significado de emprender, porque yo prefiero
trabajar de lunes a domingo 16 horas al día por 5 años , que trabajar de lunes
a viernes por 8 horas por los próximos 40 años.

Soluciones para vencer tu miedo al éxito

1. Personalmente lo básico y esencial para todos los miedos, fortalecer la
mente. Allá afuera hay muchas personas que tienen miedo, y quieren
contagiarte de su miedo para que tu sigas en tu zona de confort, tienen
miedo a superarse, quieren las cosas distintas pero no hacen nada para
cambiarlo y quieren llevarte a ese círculo, no caigas. Leer libros de
desarrollo personal ayuda muchísimo si quieres empezar a dejar tu
miedo al éxito.
2. Si las personas que te rodean no se encuentran en sintonía para tu
emprendimiento o simplemente no te suman en tu vida, evitarlas.
Suena fuerte y es difícil en un comienzo, porque muchas veces son
familiares, amigos de toda la vida. Ahora te pido que seas egoísta y
pienses primero en ti, que el cambio comience en ti, júntate con
personas que hayan logrado lo que tú quieras lograr, y pregúntales
como lo hicieron, ellos siempre serán los mejores mentores.

Una vez que tu hayas logrado un cambio, las personas que en un

comienzo no creyeron en ti, comenzarán a verte de manera distinta,
con admiración, con intriga. transmite tu esencia, lo que realmente
eres, no lo que los demás esperan de ti, y atraerás eso: personas
auténticas, reales y fieles a sus ideas.
3. Se congruente: de nada sirve la teoría si no lo llevas a la práctica, todo
lo que aprendas, aplícalo. Es difícil, lo sé, y no lo lograras de la noche
a la mañana, el camino al éxito se traza y se escribe todos los días, es
un trabajo de constancia.
 4. Cree en ti, y nunca dudes de eso: básico, si tu no crees en ti, nadie más
lo hará, así de sencillo.

Espero de todo corazón haberte ayudado, es parte de mi vida hacerlo.

¡Gracias!!!
 Capítulo 5
El miedo Al Emprendimiento.
-De Empleado a Emprendedor-

Por: Freddy Ortiz

El miedo ha sido siempre el enemigo del hombre. Retrasa el progreso. Ese

miedo a lo que ha sucedido en el pasado, ese miedo al fututo, a lo
desconocido evita que vayamos hacia adelante

Lo siguiente que relataré es lo que he aprendido de esas experiencias que me

han llevado de ser un empleado a un emprendedor por Internet.

Un buen día decidí dejar de ser un empleado y emprender, es decir ser mi

propio jefe, quizás llevado por la emoción del momento, y decidí mudarme al
mundo del internet, hacer negocios por internet; pero a pesar de toda mi
experiencia aún no me había dado cuenta de lo que estaba haciendo.

Así que empezamos a cometer errores, en primer lugar, tenemos que decir
que si no corregimos nuestros errores estamos condenados al fracaso. No
deseo ser pesimista aquí, sino todo lo contrario, pero hay que entender que la
mayoría de las personas que tratan de hacer dinero en línea cometerán
errores, y no sólo eso probablemente inviertan miles de dólares en diversos
programas en su búsqueda del éxito.

En ese camino fui descubriendo conmigo mismo, las principales razones por
las que fracasan los emprendedores digitales y vamos hablar directamente, y
probablemente no te guste algo que vas a leer aquí, pero ese es el objetivo.

Espero que esto te ayude a evitar estos escollos que enfrentan la mayoría de
las personas y esperamos que puedas aprender lo que se necesita para tener
éxito en Internet.
Ingrese al mundo de internet en el año 2013, como decía líneas arriba,
llevado por la emoción del momento, venía del mundo empresarial y quería
ser mi propio jefe, lo primero fue entender que tenía que cambiar mi
mentalidad, una tarea nada fácil, yo tenía una mentalidad de empleado,
formado a través de años de trabajo con ese miedo al fracaso, ese apego a la
perfección.

Pero en el mundo que me metía el fracaso es común, los errores se van a

presentar, y ese miedo al fracaso te paraliza y te causa dolor, y no te permite
avanzar.

5.1 Lo Primero Tu Misión De Vida

En la vida hay muchas cosas que podemos hacer llevados por la emoción del
momento, pero todo lo que nos emociona tiene algo más en su esencia, tiene
algo más que nos atrae y hay que descubrirlo, para que tengamos una
motivación que supere a los miedos que se nos van a presentar en el camino
que hemos elegido seguir.

Entonces tenemos que descubrir nuestro ¿Para qué? ¿Para quienes hacerlo?
Dar respuesta a esta pregunta es fundamental, puedes buscar un Coach o un
Terapeuta que te ayude a descubrirlo, o simplemente Tú en tu soledad
puedes encontrar la respuesta.

A eso se le llama encontrar el sentido de vida, descubrir para que naciste,

para qué fuiste puesto en este mundo, una vez descubierto Tu “Para Que”,
tendrás la energía y la valentía para seguir adelante.

Recuerda que como seres humanos nuestro legado a este mudo se verá
reflejado en el trabajo que hagas para transformar este mundo, en el hecho
que cuando tengamos que partir nuestro paso por esta vida haya servido para
algo.
Podemos pasar un sinnúmero de vicisitudes, se nos puede arrebatar todo, pero
no nos pueden arrebatar la última de las libertades humanas, la elección de
nuestra actitud personal ante las circunstancias que nos presente en el camino.

5.2 La Mentalidad y la Fe
No es un secreto que la mente es el mayor poder que poseemos, y a través de
nuestra fe utilizamos el poder de nuestra mente. Creer o tener fe en la salud,
en el éxito y en la vida misma es utilizar el poder de la mente para su propio
bien.

De acuerdo a nuestra fe la vida nos responde sea esta una fe positiva o

negativa.
Para vencer el temor y los resultados del temor, es necesario tener una fe
positiva. Siempre vamos a tener una fe, ya que siempre utilizamos la mente,
no podemos apartarnos de nuestra fe

Pero si podemos transformar nuestra fe, si estamos pasando por momentos

infelices podemos conducir nuestra fe en una dirección diferente, si estamos
pasando por una situación poco placentera podemos cambia la experiencia
enfocándonos en el bien o lo positivo que hay en ella, porque el bien siempre
estará presente, cuando se hace esto a la ley de la creación comenzara a
funcionar, y aportara un nuevo tipo de experiencia, entonces ¿por qué tener
miedo? Simplemente es decidir lo que debemos creer. Entonces no debemos
de olvidar tener fe en la vida inmensa e infinita que nos rodea.

Si estamos vio hay que tener fe y confianza en uno mismo, hay que tener fe
en las personas, cuando se quiere y se coopera, esta le amaran y cooperaran
contigo
Entonces entenderemos que en éste mundo todos somos socios.

5.3 Consejos para dejar el Miedo y Ser exitoso como Emprendedor

Aquí te comparte algunas recomendaciones que debes de tener en cuenta para

sobrepasar esos miedos que se te presentarán en el camino hacía el éxito de tu
emprendimiento por Internet

5.3.1 Nunca tendrás éxito en Internet si no tienes la Mentalidad

Correcta!

Si tienes la mentalidad equivocada estás condenado al fracaso desde el

principio. La verdad es que todos los vendedores más exitosos tienen una
cosa en común, tienen la mentalidad correcta. Ellos realmente creen que van
a tener éxito en el tiempo, no importa el tiempo que haga falta.

Si has llegado al mundo online lleno de negatividad, dudas y MUY POCA

CONFIANZA EN TI MISMO, es inevitable que el fracaso llegará fácil. Así
que desde el inicio lo primero es CREER EN TI MISMO, y seguir creyendo
en ti mismo sin importar el tiempo que se necesite para convertirte en un
éxito, si se trata de semanas, meses o incluso años. Cree en ti mismo, se
positivo y lo vas a conseguir.

5.3.2 Nunca Tendrás Éxito en Internet si te Rindes Ante El Primer

Obstáculo

Si te encuentras con un problema y te das por vencido vas a fracasar. Si te

rindes cada vez que encuentras un obstáculo, no vas a completar tus tareas,
tus productos no se terminarán y no llegarán al mercado y todo tu tiempo y
esfuerzo serán en vano.

Déjame decirte, que diariamente encuentro obstáculos. Yo lidio con ellos y

sigo adelante, esto es lo que significa ser un emprendedor. Si quieres que sea
fácil es mejor que te consigas un trabajo ...

5.3.3 Nunca Tendrás Éxito en Internet Si Tienes Miedo Fallar

Fallar, cometer errores forma parte del camino hacia el éxito.; Luché para
aprender y descubrir el cómo se hacen las cosas, por años, antes de empezar a
ver resultados…Asusta verdad.

Cuando miro hacia atrás, supongo que así era, y era el precio que se tenía que
pagar, pero no me detuve. Es un hecho que no todo lo que vas a intentar en
Internet tendrá éxito. Pueden pasar meses, incluso años de fracasos antes de
tener éxito, pero por favor no te dejes asustar por el fracaso o te desanimes,
ya que es parte de camino hacia el éxito.

Fallar y volver a empezar, las personas de éxito han tenido que lidiar con los
errores y fracasos una y otra vez, pero no permitas que el fracaso te asuste ya
que finalmente llegará el éxito.
5.3.4 Nunca tendrás éxito en Internet Si Siempre Andas Quejándose De
Tu Situación Actual

Si odia su trabajo, o incluso peor ha perdido su trabajo, o tal vez su pareja lo

dejó, o está lleno de deudas, o en alguna otra situación similar. Solo tiene
dos alternativas, puede seguir quejándose de su situación o ponerse manos a
la obra.

Yo perdí mi trabajo y no pensaba regresar a otro trabajo que no me gustará, y

solo tenía para vivir con las justas mes a mes. ¿Adivina lo que hice? Bueno,
para empezar no me queje de mi situación.

Me puse a trabajar, a buscar otras alternativas. Claro que me tomó un par de

años para empezar a ver ingresos respetables pero nunca me rendí
(Mentalidad Correcta) y me quedé en este negocio. Esto es lo que hay que
hacer si te encuentras en una situación que no te gusta.

De hecho, muchos emprendedores exitosos generalmente recibieron un buen

golpe y hasta estuvieron quebrados antes de que realmente se pusieran a
trabajar. Algo sucedió en sus vidas que los hizo sentir tan enojado que
cambiaron su forma de pensar y decidieron tener éxito, ya que no había otro
camino.

5.3.5 Nunca Tendrás Éxito en Internet si crees que el Mundo Te debe

algo

Algunas personas piensan o culpan a alguien más por encontrarse en su

situación actual. Es común que constantemente se quejen de tener que ir a un
trabajo que odian y culpan a otros de su situación.

Basta con conversar con tus conocidos y escucharas a la gente quejarse de sus
gobiernos por falta de trabajo o bajos sueldo, cuando son perfectamente
capaces de crear su propia riqueza.

Déjame decirte algo, el mundo no te debe nada. De hecho, sólo hay una
persona que puede cambiar tu situación, …. ERES TU MISMO... Nunca
olvides eso.

5.3.4 Nunca Tendrá Éxito en Internet Si Piensas Que No Tienes Tiempo

"NO puedo iniciar un negocio, porque tengo que ir a mi trabajo allí estoy 12
horas al día, tengo que ir a mi casa, ver a los niños, tengo que hacer las
compras, lavar, planchar, limpiar el auto, arreglar mi jardín…etc..etc. "
Visualizas esta imagen, ¿verdad?

¿Así que realmente no tienes tiempo? Déjame preguntarte ¿tienes una TV o

una consola de video juegos, o matas tu tiempo en sitios como Twitter o
Facebook, o estás constantemente navegando por internet? Bueno, te das
cuenta que puedes tomarte una hora al día para trabajar en la construcción de
tu negocio en lugar de perder el tiempo. Apaga el televisor, deja de perder tu
tiempo en Facebook y haz algo de trabajo real.

Me molesta cuando la gente dice que no tiene tiempo y luego veo que se la
pasa todo el día posteando en Facebook. O pasan la mitad de su vida jugando
el juego de moda. Todos tenemos 24 horas al día, ¿qué es lo que haces con
tus horas libres?
 Capítulo 6
Miedo al aprendizaje
Por: Alfonso López Roldán

El miedo al aprendizaje es un miedo inconsciente que limita seriamente tu

capacidad de aprender.

Esto se puede tornar en algo muy grave, pues esta capacidad es

imprescindible para el aprendizaje, siendo uno de los elementos esenciales
para alcanzar nuestros propósitos. Estos miedos se tornan en enemigos de
nuestro aprendizaje bloqueando nuestra capacidad de aprender.

Estos enemigos pueden ser múltiples, no siendo raro que caigamos en ellos.
Esto ocurre porque aprender algo nuevo siempre es un reto para cualquier
emprendedor y para cualquier persona. Lo nuevo y lo desconocido te pueden
generar un dilema entre atracción y rechazo.

Lo nuevo te puede parecer irresistible, pero también te puede causar miedo y

rechazo. Lo quieres, pero desconfías, aferrándote a lo que ya sabes. Lo nuevo
te puede dar miedo pues pone a prueba tu audacia innovadora contra tus
hábitos conservadores, que te aferran a tu zona de comodidad.

En la vida, nuestro aprendizaje pasa por cuatro fases: (i) Fase de Ignorancia
(Inconscientemente incompetentes), donde simplemente no somos
conscientes de nuestra ignorancia, siendo incompetentes en aquello que ni
siquiera sabemos que no sabemos; (ii) Fase de Información (Conscientemente
incompetentes), que ocurre cuando nos volvemos conscientes de que no
sabemos; (iii) Fase de Conocimiento (Conscientemente competentes), donde
al aprender a plenitud aquel conocimiento que no sabemos -que no es saberlo
todo, sino sencillamente saber bien lo que se sabe- estamos aptos para pasar a
la cuarta y última fase del aprendizaje; (iv) Fase de Sabiduría
(Inconscientemente competentes), donde
nuestra mente consigue asimilar el conocimiento de modo tal que se
convierte en parte de nosotros, de nuestra estructura mental, integrándose
total y coherentemente a nuestro ser, al igual que nuestro cuerpo y nuestras
emociones.

Es así como el proceso de aprendizaje fluye. En la primera fase somos

inconscientemente incompetentes; en la segunda fase somos conscientemente
incompetentes; en la tercera fase somos conscientemente competentes; y en la
cuarta fase nos convertimos en inconscientemente competentes.

La acumulación de conocimientos (memorización) no es lo mismo que el

aprendizaje, por lo que no hay que confundir el conocimiento con el saber
(aprendizaje). Es por eso que es necesario aprender a aprender, es decir
desarrollar nuestro aprendizaje transformacional, que es aquel aprendizaje
que nos permite hacer cosas nuevas, actuar de modo diferente y transformar
nuestras vidas. Debiendo estar alerta para enfrentar y superar los miedos que
bloquean nuestro aprendizaje.

En este contexto, existen diversos tipos de miedo al aprendizaje, los cuales se

pueden clasificar en tres grupos: (i) Miedos por inseguridad; (ii) Miedos por
ego; (iii) Miedos por confusión.

6.1 Miedos al aprendizaje por inseguridad

6.1.1 Miedos por incapacidad de admitir que no sabemos

Existen personas a las cuales se les hace muy difícil aceptar que no saben.
Tienen miedo al qué dirán. No les es posible admitir tranquilamente que no
saben. Simplemente no pueden decir “No sé”. ¿Te ha pasado?

Sin embargo, sólo comprendiendo que no sabemos es que nos podemos abrir
a las posibilidades de aprender. Creemos equivocadamente que todo el
tiempo tenemos que demostrar que sabemos todo y nos preocupa “lo que
otros puedan pensar de mí”, que “vean que no sé tanto como pensaban”.

No eres capaz de decir “No sé”, creyendo que deberías saberlo. Escuchamos
cosas que desconocemos, pero las dejamos pasar porque no queremos que se
den cuenta que no lo sabemos. Decimos “Ya sé” y dejamos de escuchar lo
que el otro está diciendo, cerrándonos al conocimiento o a cosas nuevas. Esto
limita tu aprendizaje.

Solución: ¡Admite -con tranquilidad- que no sabes y aprende!

La solución llega cuando aceptamos que no sabemos, y es a partir de allí que

podemos aprenderlo. Tenemos que liberarnos de este enemigo. Recuerda la
frase de Sócrates: “Sólo sé que nada sé”. ¡Admite -con tranquilidad- que no
sabes y aprende!

6.1.2 Miedo de no sentirte capaz de aprender

Es el miedo que surge cuando las personas no se sientan capaces de aprender

algo. Antes de comenzar se auto descalifican, pues no creen ser capaces de
aprender.

Un ejemplo de esto ocurre con personas mayores que piensan que jamás
podrán aprender a usar internet, que jamás podrán tener la habilidad que
tienen los jóvenes. O cuando estaban en el colegio decían que nunca podrían
aprender literatura, física, matemáticas, o cualquier otra materia. Igualmente,
en el caso de desarrollar relaciones -personales o de negocios- diciéndose que
no son capaces o que son introvertidos o que no son extrovertidos, etc.

Este miedo te genera un enemigo del aprendizaje que hace que las personas
se anulen a sí mismas o se fijen límites muy restrictivos respecto a lo que son
capaces de aprender. Se dicen “Por ser como soy, no puedo aprender esto”,
“Yo no soy buen@ para eso”, “Yo no soy buen@ para las matemáticas”, “Yo
no soy buen@ para la lectura”, “Yo no soy buen@ para los deportes”, “Yo no
soy buen@ para eso de internet”, “Yo no soy buen@ para hablar en público”,
“Yo no soy buen@ escribiendo”, “Yo no soy buen@ para dirigir a nadie”,
“Yo no soy buen@ para administrar nada”, “Yo no soy buen@ para los
ejercicios”, “Yo no soy buen@ organizando”, “Soy demasiad@ joven para
aprender eso “Soy demasiad@ viejo para aprender eso”, etc. etc.

Solución: ¡Cree en ti mismo@!

¡Basta! ¡No te destruyas! Decir “Por ser como soy no puedo aprender eso”,
es aceptar un enemigo terrible para tu aprendizaje. No lo hagas. Si tú por
miedo te autodefines como una persona que no puede “tal cosa”, te estás
cerrando al aprendizaje y te estás condenado a quedarte dentro de los límites
que tú mismo te estás autoimponiendo. Libérate de eso. ¡Cree en ti mismo@!

6.1.3 Miedo por incapacidad para desaprender

Este miedo enemigo del aprendizaje se esconde detrás de nuestros hábitos.

Estamos acostumbrados a procesos acciones y procedimientos que ya hemos
aprendido. Son rutinas enraizadas que hacen que cuando nos enfrentamos a
algo nuevo que implica un cambio, inmediatamente surge un miedo y una
resistencia a desaprenderlas para dar paso al aprender algo nuevo. No
estamos dispuestos a desaprender, pues es algo que ya dominamos y lo
hemos convertido en hábito y costumbre.

En la práctica me aferro a lo que tengo, -a lo que antes aprendí-, y no dejo

posibilidad de aprender lo nuevo. Me rehúso a dejar atrás algo antes me fue
útil y sé hacer, para reemplazarlo por algo nuevo.

Solución: Toma conciencia y ¡Ábrete a nuevos procesos!

El tomar conciencia de este comportamiento limitante nos abre a la

oportunidad de comenzar nuevos procesos de aprendizaje. ¡Ábrete a nuevos
procesos!

6.2 Miedos por ver en peligro tu ego

6.2.1 Pensar que sabes más que quien te enseña (ceguera cognitiva)

Esto ocurre cuando la persona no ve que no sabe. Esto se llama “Ceguera

cognitiva”. Es una ceguera distinta a la incapacidad de admitir que no
sabemos, porque en este caso la persona ni siquiera sabe que no sabe. Su ego
no le permite tomar conciencia de eso.

Este es el caso de las personas intelectualmente arrogantes que asumen que lo

saben todo, donde su arrogancia intelectual los ciega y no saben que no
saben. Creen que dominan todo, cree tener respuesta para todo, no se da
cuenta que hay cosas que no sabe y que podría aprender. El creer que sabe
más que quien le enseña bloquea sus posibilidades de aprendizaje.

Solución: ¡Abre los ojos!

No dejes que te domine tu ego. ¡Abre los ojos!

6.2.2 Miedo a sentirte inferior: No dar autoridad a otros para que nos
enseñen

A veces existen ciertos miedos y prejuicios que tenemos arraigados no nos

permiten dar autoridad a otro para que nos enseñe. Estos prejuicios se pueden
generar por autosuficiencia y/o por discriminación ya sea racial, por edad,
sexo, condición social, etc.

Esto genera expresiones como: ¿Qué me puede enseñar una persona como
esa? ¿Cómo se te ocurre que me va enseñar esa persona a mí? ¿Cómo me va
a enseñar si es muy joven? (yo soy mayor) ¿Cómo siendo mujer/hombre me
va a enseñar a mí este tema? ¿Cómo me va a enseñar, si proviene de donde
proviene? ¿Cómo me va a enseñar, si yo tengo más estudios que esa persona?

Estos prejuicios al final lo único que logran es limitar nuestras oportunidades

aprendizaje, produciendo un bloqueo que solo nos perjudica a nosotros
mismos.

Solución: ¡Evita discriminar y da autoridad a otro para que te enseñe!

Domina tu ego. Busca de aprender de quien te enseña y dale autoridad. No

discrimines a nadie.

6.2.3 Confundir saber con tener opinión

Este enemigo consiste en creer que, por tener derecho a opinar, ya sabemos.
Es decir que se confunde el “saber” con “tener opinión”.

Imagínate que tienes un mal en el corazón que amerita una intervención

quirúrgica. En una de tus consultas médicas te encuentras con un cardiólogo
que no es cirujano pero que interactúa con muchos cirujanos cardiólogos y ha
compartido y escuchado muchas opiniones con ellos sobre las ventajas y
desventajas de los diferentes procedimientos quirúrgicos y tipos de
operaciones al corazón; e incluso ha escrito muy buenos artículos médicos al
respecto.

¿Te dejarías operar con él sabiendo que es cardiólogo, pero no cirujano?

Indudablemente él tiene su opinión -seguramente muy respetable-, pero eso
no lo convierte en cirujano ni hace que sepa hacer una cirugía al corazón. Es
decir, el hecho de tener una opinión no significa que sepa.

Solución: ¡Estate alerta y no confundas tu opinión con tu saber!

Es a eso a lo que se refiere este enemigo del aprendizaje, que puede

confundirnos y llevarnos a creer que, por tener una opinión, ya sabemos.
¡Estate alerta y no confundas tu opinión con tu saber!

6.3 Miedos por confusión y no tener claridad de objetivos

6.3.1 Querer tener todo claro todo el tiempo

El miedo al riesgo y a equivocarse hace que existan personas que siempre

quieren tener el 100% del control todo el tiempo y tienen dificultades cuando
en el proceso de aprendizaje se encuentran en una situación en la cual no
tienen absoluta claridad. Se sienten incomodos cuando están aprendiendo y
no tienen todas las respuestas, cuando no controlan todo, cuando no tienen
todo el dominio. Están convencidos que no es ser inteligente el estar
confundido.

Indudablemente que, al pasar por esa transición de la ignorancia al saber,

probablemente se darán momentos poco gratos o incómodos; sin embargo, al
confiar en el aprendizaje que se tendrá, éste nos va a ayudar y nos va a
permitir realizar nuevas acciones.

Solución: Enfrenta tus miedos ¡Así no tengas todo claro, avanza!

Ese momento, es un momento muy importante del aprendizaje; un momento
crucial para entender y asumir -enfrentar- el desafío del aprendizaje, así no
tengas claridad al 100%. Enfrenta tus miedos ¡Así no tengas todo claro,
avanza!

6.3.2 Miedo a afrontar las cosas postergando todo: “No tengo tiempo”

Este miedo no solo afecta tu aprendizaje sino a todas las áreas de tu vida,
pues decir permanentemente “No tengo tiempo” es la disculpa para la
postergación o procrastinación, usándola en este caso como una excusa para
no aprender.

El procrastinar o postergar acarrea una serie de consecuencias negativas en

nuestra vida cotidiana (corto plazo), a mediano y a largo plazo; y también en
nuestro aprendizaje.

Aquí no se trata de que no se estén priorizando las cosas, sino del predominio
del hábito de postergar para evadirse de la realidad.

En este caso el procrastinador tiene plena conciencia de su realidad, de su

entorno y sus obligaciones, pero busca de una manera más o menos
consciente de escaparse de esa realidad refugiándose en el autoengaño.

Entonces recurre a la postergación -aparentemente inofensiva- de sus

obligaciones y tareas, rehusándose a hacer hacerlas, bloqueando su mente
para no ver claramente los daños por no realizarlas o los beneficios por
hacerla, saliéndose de su realidad y de las obligaciones consigo mismo.

Solución: ¡Asume tus responsabilidades y tu realidad!

¡Asume tus responsabilidades y tu realidad! ¡No postergues tu aprendizaje

transformacional!

6.3.3 Miedo a la responsabilidad, asumiendo un comportamiento trivial

La trivialidad predomina en aquellas personas que no asumen nada en serio y

todo lo toman a la broma o a la burla. Cuando escuchan algo importante o
serio, estas personas lo banalizan y lo toman a la ligera. No se puede
establecer una comunicación responsable ni planteamientos serios con este
tipo de personas.

En un ambiente generado por este tipo de personas no es posible el

aprendizaje y se bloquean las posibilidades de generar suficiente confianza
para generar un aprendizaje -mucho menos el transformacional-, que requiere
atención y un esfuerzo especial por aprender. ¿Conoces personas así?

Solución: Sé responsable ¡Evita ser trivial y a su vez evita la trivialidad

de otros!

Definitivamente, la trivialidad es un enemigo del aprendizaje que perjudica

nuestro crecimiento. ¡Evita ser trivial y a su vez evita la trivialidad de otros!
 Capítulo 7
Miedo a la disciplina constante
Por: Jesús Sanguino

Tal vez se preguntaran si existe un miedo a la disciplina y más cuestionable

aun a la disciplina constante, ya que básicamente la vida es una acumulación
del conocimiento que en nuestro tiempo debe ser disciplinado, para que
podamos acrecentar nuestra autoestima y vencer el ego, se necesita disciplina
para tener firmeza de realizar nuestras metas personales que son dejadas en la
espera no por falta de conocimientos en la mayoría de los casos, sino por falta
de disciplina constante, que podría llegar hacer uno de los miedos más
inconscientes que adquiramos sin darnos cuenta a la hora de exigirnos en
comenzar a trabajar por nuestras metas que vemos lejos de conseguir, ya que
sin este valor, nuestra vida se verá reducida a inconformidades y deseos
intermitentes donde los resultados serán inconstantes y sin exagerar, en un
futuro solo lleno de “porque no luche”. Por eso esta historia comienza así.

- “Buenos días mamá”, conteste a la llama telefónica de mi madre, a

las 11 de la mañana, aun entre mis sabanas que enrollaban mi cuerpo como
oruga dentro de un capullo sin señales aun de salir de allí.

- Buenos días hijo, ¿cómo amaneciste hoy?, si es que aun amaneces,

Porque me he percatado que recién te estas levantando y ya en vez del
desayuno, será almuerzo lo que vas a tomar.

- Ay mamá, ando de vacaciones, no molestes, que luego vuelvo a

recuperar el horario de las comidas y mis 8 horas correspondiste de dormir.
Además solo llevo una semana haciendo esto, hablamos más tarde.

Pasaron los días, exactamente 21 días desde que decidí que aprovecharía el
tiempo para “descansar” del trabajo que quería dejar en algún momento y en
mis horas “extras” de descanso vacacional, planificar el proyecto de la
empresa que deseaba tener para encaminar mi vida fuera de las oficinas y
almacenes de una compañía que solo cumplía el sueño de otra persona,
mientras que enterraba los míos en esos depósitos llenos de medicamentos
que debía estar supervisando como el “jefe de almacén” que era. Pero cada
día que pasaba sentía que mi tiempo estaba siendo robado por aquello a lo
que me sentía obligado hacer y cuyas exigencias incesantes eran más fuertes
que las mías, es decir que mis ganas de superar, estaban siendo truncadas por
la apatía y quejas constantes que se manifestaban como otro “yo” en mi
cabeza hablándome de forma negativa del entorno laboral en el que me
encontraba, tornándome en un ser que comenzó a caer en inconsistencias por
la queja de ser y de hacer algo más que un simple empleado

A la mañana siguiente mi padre llego de visita a mi mini departamento, llego

como siempre, dispuesto con una sonrisa a hacer el rico desayuno con pan
canilla (que es un pan alargado de unos 20cm, con orégano por encima) que
calentaba a la plancha y rellenaba con un omelet de huevo y salsas de sabores
dulces y ácidos de parchita y miel con mostaza y un poco de mayonesa y
rodajas de queso y jamón de pavo, que adquirían un sabor que solo a mi papá
le salía.

- Cuéntame hijo, como va tu proyecto de la empresa de marketing

digital que quieres montar junto con tu amigo , ya tu título
saldrá pronto también y estarás más cómodo para concretar este tema.
- Bueno papa, en realidad se lo que debo hacer, pero desde hace unas
semanas siento que el desánimo me gana, planifico, pero luego
simplemente dejo botado el plan y me dedico al trabajo en el almacén
del laboratorio que me está consumiendo tiempo.

En este punto mi padre me dice, “hijo, mira a tu alrededor y observa los

pequeños detalles de tu espacio, no pienses que te estoy reclamando algo,
solo mira y observa tu cama, tus zapatos, tu cocina”

- Si viejo, sé que estoy algo desordenado, ya lo arreglo

- Mi padre sonrió, hijo, una vez leí esto “la disciplina tiene que ser
diaria y constante para tener credibilidad en nuestras vidas”, tus
desánimos en realidad son apatías que sin darte cuenta has estado
alimentando siendo inconstante en cada pequeña cosa que deberías
realizar como simplemente tender la cama o recoger tus zapatos,
porque lo que haces para mantener bien las cosas pequeñas, son las
mismas habilidades que necesitaras para las cosas grandes, sin importar
que tiempo te lleve.
Conmociones

Después de este pequeño “sermón”, caí en un autoanálisis y mirando mi

entorno y el pequeño desorden, y ver el descuido que se había aferrado como
garrapata y lleno de excusas para cada inconsistencia grandes o pequeñas,
recordé la enseñanzas del libro “Disciplina para el éxito” donde se expresa
que cada acto debe estar acompañado siempre de congruencias, es decir, si
soy impaciente con mis padre, pero pacientes con mis clientes, es falta de
disciplina constante, porque sin esto, no se podrán realizar acciones
constantes que den resultado.

Al darme cuenta del error que estaba cometiendo me embargo el “miedo a la

disciplina constante” o mejor dicho el miedo a no tenerla. Ya que la
verdadera disciplina no es fácil obtener, es mucho más fácil

1) Dormir hasta tarde

2) No tender la cama
3) Llegar tarde
4) No leer
5) No pagar cuentas a tiempo y pare usted de contar más inconsistencia

Por ende, el precio a la indisciplina desde las pequeñas cosas será el PESAR.
Porque la disciplina es algo de tiempo completo

1) Dormir temprano
2) Tender la cama
3) Llegar temprano
4) Leer
5) Pagar a tiempo

Porque cada esfuerzo disciplinado tendrá una recompensa múltiple.

Así que tengamos cuidado, no podemos ordenar nuestra propia compañía, si
no somos capaces de mantener el orden de nuestros propios cuartos

Soluciones
Las soluciones parecen sencillas, pero cuando no somos capaces de valorar
nuestras vidas y vivimos con autocompasiones y pensando que “los ricos ya
están contados” y que algunos son “estrellas y otros estrellados” y nuestras
ideas y fundamentos no van acompañados de actitudes correctas y constantes,
solo quedaran en estos términos de ideas y discernimientos de poco valor
practico.
Si concretamos y decidimos tomar la opción del ahora, de tomar riendas y
trabajar intensamente en construir lo que deseamos, será lo único que nos
quitará la falta de interés, la propia disciplina será nuestra arma para vencer,
influenciar y liderar nuestras vidas a plenitud. La pregunta es ¿Cuándo?, si
tenemos la capacidad, la habilidad, el conocimiento. Nosotros tenemos el
poder de cambiarnos a nosotros mismo, porque los elementos están a la vista
y la opción es nuestra ¿Por qué? Si no es ¿Cuándo Estarás dispuesto?
 Capítulo 8
Miedo a ser diferente
Por: Diego Ramírez

¿Qué sería de la vida, si no tuviéramos el valor de intentar algo nuevo?

Cuando eliges una carrera o profesión te enfocas en perfeccionarte en un área

determinada. Cuando ingresé a la universidad a estudiar Odontología, pensé
que al terminar la carrera la vida iba a ser fácil, no tenía metas claras, pero
sabía que tenía que aprender mucho, sacar buenas calificaciones y graduarme
con todos los honores. Al terminar esos 5 años y sacar el título decidí que
debía seguir perfeccionándome. Elegí iniciar mis estudios de postgrado.

Creía que con todos esos títulos tendría trabajo seguro, muchos pacientes y
mucho dinero. La realidad me decía que ganaba bien, pero tenía que estar
todo el día trabajando, pensaba que para ganar más debía trabajar más, pero
terminaba agotado todos los días. Y fue cuando haciendo deporte me lesioné
la muñeca y me impidió trabajar por varias semanas, que me di cuenta que, a
pesar de generar buenas ganancias, no tenía dinero en el banco, que nunca
había invertido mi dinero para que crezca, no tenía un seguro de vida, y que
si esa lesión hubiese sido más grave no podría darme el lujo de mantener mi
estilo de vida por mucho tiempo.

Es así que decidí buscar otras fuentes para generar dinero, diferentes a mi
profesión, pero no encontraba ninguna, en realidad no iba a poder ver alguna
porque mi mente aún no estaba preparada para crear oportunidades. Más de 5
años de preparación y estudio son “buenos" para desarrollarte en tu ámbito
profesional, pero lamentablemente cerramos los ojos a varias oportunidades y
nos adaptamos a un estilo de vida.

Cuando vemos a alguien hacer algo "diferente”, como vestirse, hablar,

caminar, realizar un trabajo específico, lo tildamos de raro o anormal, pues no
tiene una vida como todos los demás la tienen. Le criticamos la manera como
lo está haciendo con la justificación que así no se hace, que nadie lo ha hecho
y que ya existe una manera común de hacerlo; aunque tal vez antes a nosotros
se nos pasó por la mente hacerlo de igual manera, pero nunca lo hicimos por
miedo al qué dirán, por el miedo a crear una tendencia, por el miedo a ser
diferente. A esta sociedad no le gustan los raros, los distintos.

Esta sociedad prefiere la uniformidad, prefiere personas que no destaquen,

fomenta que seamos todos mediocres, pues es más fácil gestionar una
sociedad de iguales.

No hay una buena razón para no hacer casi nada de lo que no hacemos. Casi
todo lo que no hacemos es el resultado del miedo, la inercia o una falta
enorme de alguien que se pregunta “¿por qué no?”. Es así que cierto día
cuando revisaba algunos vídeos en YouTube, encontré al colombiano Juan
Diego Gómez, experto en finanzas personales, que con su imponente actitud
fuera de lo común, me dejó muy clarito cómo tenía que ser la mía, frente al
mundo. Dejar de ser una puta vaca blanca más y convertirme en una púrpura.

¿Cuándo fue la última vez que usted se fijó en una vaca? La vio a un lado de
la carretera, detuvo el automóvil y se la quedó viendo pasmado, difícil
¿cierto? Después de todo, las vacas son aburridas. Pueden ser de buena raza,
mejoradas genéticamente o estar bajo la luz adecuada; pero, siguen siendo
aburridas Las vacas parecen todas iguales, pero una Vaca Púrpura es algo que
llama la atención, que nos obliga a pararnos, a mirar e incluso a
maravillarnos.

Es algo increíble, emocionante, diferente, algo que nunca se olvida. Ese

término de vaca púrpura me obligó a buscar más información y encontré que
Seth Godin, el gurú del marketing, fue el creador de este concepto en su
libro: La Vaca Púrpura un nuevo punto de vista sobre los productos y
planteamientos de mercado que deberían dejar de ser “perfectos” para
convertirse en diferentes y transformadores.

Lo fundamental de la Vaca Púrpura es que es extraordinaria. Algo

extraordinario es un asunto del que merece la pena hablar. Es excepcional,
nuevo, interesante. Es una Vaca Púrpura. Las cosas aburridas son invisibles,
son una vaca marrón. Como diría Juan Diego Gómez: “lo normal aburre, lo
normal no da plata, lo normal termina apostando”.

Me demostré que es posible generar ingresos pasivos en un año

incrementando mis habilidades financieras. Muchas colegas simplemente no
pueden comprender que se pueden generar otros tipos de ingresos
paralelamente a nuestra labor profesional. Están atrapados en sus fuertes
paradigmas de limitación que actúan como grilletes mentales. Para ellos, más
ingresos significan más horas de trabajo, más pacientes que atender en sus
consultorios. Y como no es posible tener un día con horas ilimitadas, no
pueden imaginar conseguir ingresos ilimitados.

No son las ideas extraordinarias lo que falta, sino la voluntad de llevarlas a

cabo, he ahí donde rompemos el miedo a ser diferentes. Es más seguro
arriesgarse, reforzar el deseo de hacer cosas realmente increíbles. Una vez
visto que los viejos métodos no van a ninguna parte, se hace más necesario
crear cosas de las que valga la pena hablar. Si tenemos la voluntad,
encontraremos el método.

A medida que la habilidad para ser extraordinario sigue demostrando su

enorme valor en el mercado, los beneficios de ser la Vaca Púrpura aumentan.
Tanto si creamos una nueva manera de cocinar, grabamos un álbum
superventas o escribimos un bestseller, el dinero, el prestigio, el poder y la
satisfacción consecuentes son inigualables. A cambio de correr el riesgo del
fracaso, del ridículo o de los sueños no cumplidos, el creador de la Vaca
obtiene una gran recompensa cuando acierta.

Las ideas extraordinarias tienen más probabilidades de difusión que las que
no lo son. Poca gente posee la valentía de hacer cosas extraordinarias por
miedo a terminar en lo “malo”, “mediocre” o “mal hecho”. Por eso, si hacen
algo muy bueno, creen que han creado un virus. Sin embargo, esto no es lo
que la auténtica calidad debería ser.

Es así que nuestra vida trascienda sobre miles de personas, debemos hacerla
extraordinaria. Y nada más extraordinario que una vaca púrpura. Crea tu
moda, crea tendencia, no seas una puta vaca blanca más, vive una vida
Púrpura
El ser diferente, el innovar, el buscar una manera diferente de hacer algo, ha
logrado miles de productos y servicios que han mejorado la calidad de vida
de las personas. Si los hermanos Wright hubieran tenido miedo de ser no
convencionales no podríamos viajar en aviones, si Henry Ford, hubiera
permanecido con el miedo a ser diferente y aun seguiríamos viajando a
carruajes o carretas. El miedo a ser diferente impide que muchas personas
busquen nuevas formas de resolver sus problemas, que al final también son
nuestros.

Todos tenemos valores y cualidades que nos hacen especiales, irrepetibles, y

todos tenemos cosas para dar a los demás que sólo nosotros podemos dar.

Así como yo, tú también tienes la posibilidad de redescubrirte, de encontrar

tu propio ritmo, tu lugar en este mundo. De sentir que vives en sintonía
contigo mismo y con la actividad que desarrolles. De saber realmente, que
realmente, estás viviendo la vida que quieres vivir.

Para eso, hay que tener cuidado de no ahogar tu voz interior, esa que te indica
el camino a seguir, con todo el ruido exterior, con las opiniones y voces de
otros o con tus propios temores. De no tener miedo a ser diferente. Porque el
camino hacia la felicidad pasa por ser tú mismo. No existen desvíos ni atajos.
Y sólo tú puedes recorrerlo.

Para vencerlos puede seguir estos 4 tips:

1. Escríbele una carta a tu miedo algo así como una declaración de que el
miedo ya no tiene poder sobre ti y léela todos los días al levantarte y antes
de dormir.
2. Cuéntale tu miedo a los demás, pues así estarás creando compromiso,
como ya lo dijiste, ahora lo tendrás que hacer realidad.
3. Enfrentar tu miedo es la más drástica y también la más rápida. Para
hacerlo, primero visualízalo, una vez que lo tengas claro en tu mente será
más fácil que lo lleves a la acción.
4. Crea y cuéntate a ti mismo historias de tu poderosa, saludable, feliz y
maravillosa vida.
No soy fanático del rock, pero Kurt Cobain, líder de Nirvana, decía: “Ellos se
ríen de mí por ser diferente, yo me río de todos por ser iguales “.
 Capítulo 9:
Miedo a expresar tus emociones
Por: Indira Vera

No sé cómo empezar a escribir esto, lo que si se y estoy segura es que

muchos de nosotros hemos pasado por momentos en los que queríamos tirar
la toalla, renunciar a todo por no saber cómo decir lo que pensamos o lo que
sentimos.

Cuando éramos pequeños no nos preocupábamos mucho en callar lo que

sentíamos o que lo que pasaba por nuestras mentes, pero conforme pasaron
los años eso fue cambiando una muestra de ello es el colegio por querer
encajar con los demás no expresamos lo que en verdad queríamos decir y
muchas veces al llegar a casa nos desquitamos con nuestras familias.

Cuando callamos somos como un globo que se va inflando poco a poco de

pensamientos y emociones y cuando llegamos al límite reventamos y no nos
damos cuenta que podemos terminan lastimando a personas que nos quieren
y a la que queremos, aunque no siempre hieres o dañas a los demás sino
terminas dañándote a ti mismo tanto física y psicológicamente. Por eso hoy
quiero contarte lo que me paso a mí.

Hay dos momentos muy fuertes que a mí me marcaron más por decirlo de
una manera más sencilla, la primera fue la muerte de uno de mis tíos
maternos esto ocurrió hace poco más de un año (agosto-2015) fue algo que
no olvidas fácilmente y la segunda es la pérdida de mi bebé.

Si te preguntas porqué estos hechos me marcaron, acá te explico.

Mi tío era una persona muy amable, bueno, trabajador y nunca se negaba a
ayudar en pocas palabras era alguien a quien yo admiro y quiero muchísimo
como quien dice una persona como de los que ya no hay muchos, bueno mi
tío tenía una hernia grande y aun así él iba a trabajar con todo ese dolor y el
fastidio que uno pueda sentir, él tuvo una primera operación en el 2011
después de eso llevo quimioterapia hasta que de apariencia todo estaba bien,
nunca dijo “ya no quiero ir” o “me duele” siguió con todo el proceso para
curarse hasta que ya no fue al hospital estuvo bien un tiempo hasta que
comenzó de nuevo a sentirse mal lo internaron y de nuevo fue sometido a
otra operación pero él ya no era el mismo es como si hubiese presagiado que
su tiempo era limitado dos días antes de fallecer llamo diciendo “tienen que
portarse bien y cuidar a la negrita (es como él le decía a mi madre)” y mi
hermano y yo solo atinamos a decirle que íbamos a ir a visitarlo antes de que
saliera del hospital y él solo se despidió de nosotros pero se sentía a que era
un despedida para siempre, el día sábado que íbamos a ir a visitarlo me llama
mi papá diciendo “se fue” y esas dos palabras me cayeron como un balde
agua helada mi tío había fallecido en ese momento quería llorar pero no podía
porque tenía que mantener calnado a mi hermano porque aparte de ser
nuestro tío era nuestro segundo padre y es ahí en donde venía la parte más
fuerte teníamos que ir al hospital para ver cómo estaba mi mamá porque ella
estuvo acompañando a mi tío en todo este largo proceso desde la primera
operación hasta la organizar los papeles y demás cosas que son necesarios.

Después de el velorio y entierro vino la parte más difícil de todas que era que
mi madre no guardara lo que sentía, aunque parezca mentira guardar todo ese
dolor y lágrimas si pueden hacer daño y es ahí en donde me empiezo a
preocupar más por ella y fui haciéndola llorar de a pocos hasta que un día
hablando simplemente soltó a llorar todo ese dolor que no pudo sacar antes,
lloramos juntas porque era necesario. Ahora todo está más tranquilo cuando
hablamos de él es con una sonrisa no hay anécdotas tristes sino felices y
siempre es risas al recordarlo.

Bueno ahora el segundo hecho que me marco fue como dije antes perder a mi
bebé.

Es una etapa muy hermosa y llena de temores, te preguntas ¿cómo será? ¿A

quién se parecerá? Hace unos cuantos meses me entere que estaba
embarazada y me quede helada porque era algo que no me esperaba por lo
menos no tan pronto después del shock de no poder creerlo me puse feliz, la
reacción de mi novio cuando se lo dije fue llorar en un principio pensé que él
no lo quería hasta que me cargo en brazos y empezó a gritar la típica frase
“voy a ser papá” me sentí tranquila.

Fui al primer control todo estaba bien me recetaron los suplementos que tenía
que tomar y todo los demás cuidados que se requerían así pasaron algunos
meses hasta inicios de junio empecé a sentir demasiado dolor en el vientre le
dije a mi mama que me dolía y me llevo de emergencia al hospital me
mandaron a hacer una ecografía y es ahí en donde me dicen que no se podía
hacer nada por el bebé pues ya lo latía su pequeño corazón fue un shock
terrible solo atine a llorar y pensar en cómo decirle a mi novio después de
esto me interne a la mañana siguiente, no podía decirle a mi mama tengo
miedo o que me vean mal porque eso los hubiera preocupado más. Me dieron
el alta ya en casa no me dejaban sola por temor a que haga alguna tontería.

No voy a mentir aun duele pensar y recordar, pero es algo con lo que
aprendes a vivir.

Las dos situaciones tienen algo en común la pérdida de un ser al que amamos
y el hecho de guardar y callar lo que sientes.

Las razones para no demostrar o callar lo que pensamos o sentimos son

muchas una de ellas es el rechazo de los demás sale una frase que es muy
usada “van a pensar que soy débil” no eres débil por expresar tus
sentimientos ni tu por expresar tu miedo al contario eso te hace más fuerte
porque eres consciente de tus emociones y es mucho mejor exteriorizar todo
aquello que te hace sentir bien o mal para estar tranquilo contigo mismo.

Otra de esas razones es el perfeccionismo cuando quieres hacer creer a todos

que estas tranquilo, relajado, pero sabemos que por dentro este hecho un caos
eso tampoco es correcto si siempre estuvieras tranquilo serias una estatua o
un maniquí somos humanos y tenemos pensamientos, sentimientos, miedos y
demás somos imperfectos no hay nadie perfecto solo es una fachada que
damos a los demás.

La dependencia emocional y esto no aplica solo en parejas, esto nos hacer

actuar y pensar en complacer a los demás haciendo o diciendo cosas que
creemos los demás quieren oír asumimos en algunas ocasiones cosas que no
son, no decimos nada que pueda causar algún conflicto entre los demás y el
resultado nunca es totalmente satisfactorio esto deriva en una autoestima baja
y en algunos casos que tus ideas no son tomadas en cuenta.

Crecer que los demás saben cómo te sientes sin que lo digas esto se ve más
en el círculo familiar, por más que una persona te quiera quiere decir que
tiene el poder de leerte la mente y saber qué piensas o que sientes porque no
es así, si quieres que los demás lo sepan tienes que decirlo no suponer que ya
lo saben.

Los pensamientos negativos también influyen y no ayudan a exteriorizar tus

emociones.

La baja autoestima es un factor fuerte porque al no sentir confianza en ti

mismo crees que no vale la pena que los demás expresarte. Decir algo “sin
anestesia” no siempre significa ser sincero para ser sinceros nos es necesario
a herir al otro tomate un tiempo para pensar antes de decir algo recuerda que
esa “sinceridad” no puede ser bien recibida por otro y también salgas herido.

El orgullo no es un buen amigo a la hora de exteriorizar emociones, el admitir

que algo te hace enojar no te hace menos. Si eres de los que reprimen
constantemente lo que sienten, bien sea por vergüenza, por timidez o por
miedo, acabas enfermando.

Existen algunas enfermedades directamente relacionas con la incapacidad de

expresar y sentimientos: los dolores de estómago, las úlceras, los infartos, la
hipertensión y el síndrome del colon irritable son algunos ejemplos.

Pero además de lo que nos puede ocasionar a nivel físico, vivir guardando
nuestros sentimientos puede llegar a deteriorar seriamente las relaciones con
las personas que queremos.

Si realmente quieres a esa persona, ¡díselo! No esperes una ocasión especial:

busca cualquier excusa para decir lo que sientes. Puede que te parezca una
tontería, pero eso hará que siempre lo tenga presente, que no tenga que
imaginarlo, y ayudará a mantener vivo ese sentimiento.
Los sentimientos se pueden expresar de forma verbal (hablando de ellos) o de
forma no verbal (demostrando o actuando en base a ellos). Decir lo que se
siente es la forma más directa pero no siempre la más creíble.

Para expresar tus emociones hay algunas cosas que debes de tener en cuenta

1. Acepta tus emociones: Antes de hacer algo más, debes reconocer y aceptar
que tienes sentimientos y no hay nada malo en eso.

2.- Reconoce la forma en que tu cuerpo reacciona ante tus sentimientos: Las
emociones, que son controladas por el cerebro, manejan los sentimientos.
Date cuenta de tus respuestas fisiológicas cuando sientes algo, por ejemplo,
cuando sientes vergüenza tu rostro se pone rojo.

3.- Aprende el vocabulario de los sentimientos: Puede ser difícil expresar lo

que sientes cuando no sabes qué decir, por ejemplo, en vez de decir “bien”,
que es muy general, usa palabras como “feliz”, “afortunado”, “agradecido” o
“entusiasmado”. En cambio, en vez de decir que te sientes “mal”, di que te
sientes “irritado”, “indeciso” o “desanimado”.

4.- Pregúntate por qué te sientes así: Hazte una serie de preguntas sobre “por
qué” pasa esto o lo otro para llegar a la raíz de lo que sientes.

5.- Descompón las emociones complicadas: Es importante desenredar estas

emociones para que puedas procesar cada una por sí sola.

6.- Utiliza enunciados en primera persona: Cuando le expreses tus

sentimientos a alguien más, los enunciados en primera persona son poderosos
debido a que causan que exista una conexión y no que la otra persona se
sienta culpable.

7.- Conversa sobre tus sentimientos con otras personas: Decidir cómo
empezar una conversación sobre tus sentimientos con otras personas puede
ser una tarea intimidante. Si decides hablar con alguien sobre ellos, empieza
siempre con positivismo al decir cosas buenas sobre esa persona y la relación
que tienen.
8.- Comunícate con los demás con claridad: La comunicación tiene una
importancia fundamental en poder expresar nuestros sentimientos.

9.- Escucha a los demás cuando te estén hablando: La comunicación es una

vía de dos sentidos y debes aprender a escuchar mientras los demás te hablen
para poder comunicarse de forma efectiva.

10.- Respira profundamente: Antes de reaccionar ante una situación de forma

emocional, respira profundamente.

11.- Rodéate de personas que sean confiables y positivas: Como seres

humanos que somos, solemos acoplarnos a la situación.

12.- Busca la ayuda de un profesional si te cuesta demasiado expresar tus

emociones, no hay nada malo contigo si te cuesta demasiado hacerlo.

13.- Medita, la meditación es una herramienta poderosa que puede ayudarte a

enfocar tu energía, y a calmarte tú mismo cuando te sientas estresado o
ansioso.

14.- Dedícate a hacer ejercicio, sebes encontrar una forma para liberar tus
sentimientos en los días en que todo parezca insoportable y sientas demasiado
enojo, estrés y ansiedad.

15.- Consiéntete, cuando tengas sentimientos positivos como entusiasmo,

felicidad, satisfacción y alegría, haz que esa situación dure y consiéntete a ti
mismo al ir de compras, comer un postre o salir con tus amigos.

16.- Visualiza las diferentes opciones que hay para expresar tus sentimientos
en determinadas situaciones: La forma en que expresas tus sentimientos es
una elección que solo tú puedes realizar. Puedes responder de forma positiva
o negativa ante cada situación que se te presente.