Agustín Cuzzani Periodización

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Agustín Cuzzani nació en Buenos Aires el 28 de agosto de 1924.

A los 17 años escribió su primer libro de cuentos MUNDOS ABSURDOS (1941), luego escribió
las novelas LLUVIA PARA YOSIA (1950) Y LAS PUERTAS DEL VERANO (1956).

A los 20 años se recibió de abogado en la Universidad de Buenos Aires.

A principios de la década de los cincuenta en Argentina comienza a tener estrecha vinculación


con la actividad teatral. Realizó estudios de dramaturgia y se unió a los llamados TEATROS
INDEPENDIENTES: Fray Mocho, Los Independientes y La Máscara. También dio cursos sobre
diversos aspectos de la teoría y el quehacer teatral para sus compañeros de escena y, años más
tarde fue Profesor de Estética en la Fundación Díaz Colodrero y en el Instituto Argentino de
Ciencias.

En 1952 escribió la tragedia DALILAH, que nunca llegó a escena. Pero en 194 estrenó
exitosamente UNA LIBRA DE CARNE. Con esta obra inauguró un género de creación propia: la
farsátira, combinación de farsa y sátira. Quiere, sobre todo, ridiculizar a los poderosos de este
planeta, de hecho la mayoría de sus obras están entrelazadas por un hilo humorístico que él
mismo define como “ánimo burlón”.

Por el otro lado, la temática de su obra gira alrededor de su preocupación por el


mantenimiento de la libertad individual y personal así como por la justicia social en un sistema
que se distingue por su desmesurada injusticia y desigualdad. Cuzzani es de la opinión de que
pocos dramaturgos modernos han tratado en sus obras los problemas sociales mediante el
recurso del humor.

En la estructura de sus farsátiras se aprecian dos componentes opuestos: una situación


exagerada y casi siempre absurda en la que se halla el protagonista se contrapone a una
situación real y verosímil de su entorno. De este antagonismo deriva humor y tensión.

Otras obras del autor son EL CENTROFOWARD MURIÓ AL AMANECER (1955), LOS INDIOS
ESTABAN CABREROS (1958) y SEMPRONIO, EL PELUQUERO Y LOS HOMBRECITOS (1962).

En 1984 recibió el Diploma al Mérito en la categoría Literatura de Humor, otorgado por la


Fundación Konex.

Murió el 25 de diciembre de 1987 en Los Cocos, provincia de Córdoba.

En Una libra de carne (1954) Cuzzani traslada de forma satírica a la realidad argentina el tema
shakespeariano del mercader inflexible, quien exige una libra de carne de su deudor si éste no
paga en el plazo acordado. La víctima Elías Belúver es un trabajador que subsiste viviendo bajo
el mínimo de existencia; sus diversos patrones lo explotan sin escrúpulos y su esposa le hace
responsable de la miseria en la que viven; finalmente topa con un usurero (Thomas Shylock
García) quien cobra intereses exagerados cómo y dónde puede y quien no repara en reclamar
la carne de su deudor por vía judicial.

La farsa representada en un pleito es el tema de esta sátira en un acto. El acusado Belúver es


llevado a la sala judicial en una jaula, lo que realza la intención bufonesca de la pieza. El final
tiene un acento melodramático: El Hombre, que es el único ser humano de entre los restantes
personajes, acusa a la sociedad de haber juzgado a Belúver y de haberle extirpado una libra de
carne de su cuerpo la cual carece de sangre, por lo que el acreedor se libra de una sanción. Se
chupó de la víctima durante toda su vida y éste acude desfallecido -en su sentido metafórico-
ante los tribunales.

Con esta farsa, Cuzzani critica el sistema judicial argentino y su inflexibilidad. Ninguno de los
participantes en el pleito se libra; ya sean los ujieres prepotentes, el juez arrogante, los
miembros del jurado, quienes juzgan según su posición social y quienes son incapaces de
comprender los argumentos de apuro y desesperación del acusado; o el defensor quien se
revela como un oportunista cuando fraterniza con el acusador al margen del pleito y quien
admite abiertamente la culpabilidad de su cliente. Tampoco el público quien aguarda
impacientemente el veredicto severo queda impune. A Belúver se le reprocha de llevar una
vida de molicie, de ser cómodo, o sea, de no trabajar lo suficiente para ganar el sueldo
miserable (de hambre) que cobra.

TEATRO INDEPENDIENTE

Tras el golpe militar de 1930 asoman en la narrativa anticonvencional, la confusión y el


desaliento que se padecen en esta década.
La crisis que sufre el teatro desde la década del ´20 se agudiza, en cuanto a aspectos referentes
a la comercialización desaforada que padece, pero no en cuanto al arte teatral. El teatro
profesional o comercial llegaron a ser lo mismo; partía de un empresario que ponía el dinero
especulando el rendimiento económico de la obra.
El cambio surge con los escritores que conformaban el grupo de Boedo; allí se manifiesta una
fuerte atracción e interés por el teatro, ya que se trata de un arte popular.
El movimiento de teatro independiente se inicia en 1931 con el TEATRO DEL PUEBLO, con
antecedentes de la vanguardia europea. El grupo de Boedo hace su primer intento con TEATRO
LIBRE, allí aspiraban a crear un teatro de arte, a reflejar un movimiento de avanzada y que
también fuera una expresión artística.
El TEATRO DEL PUEBLO fue una agrupación al servicio del arte que se proponía avanzar como la
estrella, buscaban realizar experiencias de teatro moderno para salvar al arte teatral y llevar a
las masas el arte en general para elevar el espíritu. Leónidas Barletta, Amelia Díaz de Korn,
Joaquín Pérez Fernández fueron sus promotores. Se destaca al escritor Roberto Arlt, como uno
de los autores exponentes de esta renovación dramática. El Teatro del Pueblo se
convirtió en una auténtica casa de artes y de cultura.
Entre 1944- 1960 se desarrolla una primera etapa en la que predomina la crítica social y se
idealiza la lucha por la libertad y la justicia.
En forma esporádica, aparecían cooperativas que brindaban espectáculos que no lograban
estabilidad económica. También existían el grupo de los filodramáticos, grupo de aficionados al
teatro que en un club o en una asociación representaban obras de la escena nacional.
Se desarrollan los teatros “vocacionales”, ajenos al profesionalismo, eran teatros
independientes experimentales, aficionados, artistas por vocación. Se ponen en juego y en
funcionamiento las escuelas de teatro dentro de los distintos grupos.
El TEATRO PROLETARIO propone una militancia ideológica definida y muy radicalizada desde el
punto de vista político.
El TEATRO JUAN B. JUSTO era un núcleo coral ligado al socialismo, rinde homenaje a uno de los
fundadores y líderes más destacados del socialismo argentino. Buscaba ofrecer espectáculos
de buena calidad artística que elevaran el nivel popular.
El TEATRO LA MÁSCARA completa la Primer etapa de Teatros Independientes que se cerraría
en 1943. Ricardo Passano los dirige, se quema, se desbandan pero consideraban que el teatro
no era un templo sino un taller.
En 1943 se produce el primer corte de los teatros independientes y con el cierre de la primera
etapa. Hay un auge del fascismo, que no permite el avance del socialismo. La escena
independiente una posición y una conducta frente al teatro, en algunos casos una militancia
espontánea de rebeldía artístico social.
Este movimiento se va gestando y toma sentido sin un plan previo, que no es necesario porque
todos los que conducen o integran el conjunto piensan, sienten y reaccionan de la misma
manera.
Los grupos más combativos embisten contra todo lo que sea profesional. Error que luego se
revierte cuando la experiencia de actores formados sólidamente ayuda a organizar estos
elencos. El propósito es reintegrar a la escena nacional el nivel y respeto que le habían hecho
perder la comercialización y el bastardeo.
Una segunda etapa abarca desde 1949 a 1960. El contexto de este tiempo abarca en el
exterior a la Segunda guerra Mundial, se produce la invasión de Europa por los aliados (EEUU).
Hiroshima y Nagasaki rubrican la derrota del nazismo- fascismo.
En la Argentina el 17 de octubre de 1945 consagra a Perón como líder popular indiscutido; en
1955 se produce el golpe militar que lo derroca y en 1958 se recupera la democracia con
Frondizi. A pesar de la prosperidad, persiste el porcentaje alto de pobreza.
En esta etapa de este teatro predomina:
 La crítica social donde se idealiza la lucha por la libertad y la justicia.
 Se hace la burla hasta llegar a la sátira a través de personajes y situaciones grotescas.
 Hay actores que recurren y rescatan héroes y actitudes relevantes propias de las etapas
de liberación de nuestra propia historia, o del continente y recurren a testimonios de
épocas clásicas para dramatizarlos como hechos aleccionadores.
 Se caracterizan por el empeño en la capacitación que permiten la profundización y
afirmación de la escena libre. Se ponen en práctica orgánicamente las escuelas de
teatro.
Una Tercera etapa abarca entre 1960-1970. Aquí se presenta un repertorio universal, clásico y
moderno. Siguen la premisa inicial de los teatros independientes: la difusión de un teatro
popular de elevado nivel artístico, con el fin de dignificar la escena.
Sigue el conocimiento de las experiencias de los grupos europeos de vanguardia.
A partir de la década del 70 surge una etapa de convulsión político- social que repercute tanto
a nivel mundial como a nivel el país:
Frondizi cae 1958-1962 golpe militar para que no volviera el peronismo.
Illia 1963-1966. Se cancela la autonomía universitaria, aumenta la crisis económica, evaluación
de la moneda en un 40%, movimientos de guerrilla. En 1970 el secuestro de Aramburu da
comienzo a una etapa convulsa y violenta que llevará a las elecciones y triunfo del Justicialismo
en 1973.
El teatro a pesar de la crisis económica sigue una línea de profesionalización y
perfeccionamiento.
Se incorpora a La Máscara la actriz austriaca Hedy Crilla como actriz y directora. Influye
mucho en varios intérpretes y directores jóvenes Augusto Fernández, Carlos Gandolfo, Agustín
Arezzo. Gracias a ella el método de Stanislawsky deja de hablarse para ser practicado y
experimentado con aportes personales que responden a nuevos requerimientos y no
traicionan ni perturban las proposiciones de una didáctica, no configuran una enseñanza
cerrada herméticamente.
El GROTESCO según W. káiser sirve para designar ciertos adornos, que a fines del siglo XV se
descubren al realizarse excavaciones en distintas partes de Italia. Lo grotesco es algo ridículo,
extravagante, estrafalario, risible y bufonesco. En cuanto al GROTESCO CRIOLLO el pueblo tiene
sus ansias de risa.
El grotesco estremece porque pone a prueba la propia seguridad y expresa la angustia ante la
vida. Por un lado, acentúa rasgos para llegar a lo caricaturesco, y por el otro enfatiza el
temperamento dramático que define a una de las líneas del sainete criollo.
Es una pieza breve de un espacio urbano, que a través de diversas situaciones desnuda una
realidad trágica.
De un mundo ordenado y claro, surge un mundo oscuro y siniestro.
El sentido grotesco de las obras de este primer grupo radica en mostrar la creciente
deshumanización de la sociedad, la preocupación por la identidad personal, las tensiones
psicológicas, la distorsión que alcanzan ciertos fenómenos sociales.
Así, los mitos y valores se convierten en meras parodias en las que las características más
notorias serán lo grotesco y los aspectos rituales que crean una pesadilla.

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