Acuíferos Que Son y Porque Debemos Protegerlos
Acuíferos Que Son y Porque Debemos Protegerlos
Acuíferos Que Son y Porque Debemos Protegerlos
Las aguas subterráneas se forman a partir del agua que desde la superficie de la
tierra se va filtrando a través de materiales porosos y permeables. Empujada por la
fuerza de la gravedad fluye hacia abajo hasta que se topa con una zona impermeable,
entonces o bien fluye en otra dirección o se acumula allí.
Por otro lado, el responsable del CEHIUMA -que colabora con el Instituto
Geológico y Minero de España en el marco de la unidad asociada "Estudios
Hidrogeológicos Avanzados"- ha alertado de un aprovechamiento excesivo de
los acuíferos costeros.
"Si se produce una explotación excesiva de los acuíferos en áreas del litoral
malagueño, retornaremos a condiciones de intrusión marina registradas hace
décadas", ha insistido Andreo, quien ha manifestado que, tradicionalmente,
este fenómeno ha afectado a los acuíferos detríticos costeros de Marbella y
Río Vélez, entre otros.
Solo en cinco años, entre 2013 y 2017, la extracción ilegal de agua ha supuesto unos 77
millones de euros en daños al patrimonio hidráulico, según la investigación realizada
por Greenpeace, que, ante la escasa información pública sobre este tema, se ha
dedicado durante más de un año a solicitar y analizar datos de las distintas
confederaciones hidrográficas.
Más de una década después, en 2017, “una filtración del Ministerio de Medio
Ambiente reconoció que el número de pozos ilegales podría ascender a más de un
millón”, apunta Barea. Y lamenta la absoluta desidia que existe respecto al control de
los pozos ilegales, a pesar de que “estamos jugando con al go imprescindible para la
humanidad”.
Autorización
Aunque los acuíferos son bienes de dominio público, es necesario pedir autorización
administrativa cuando el volumen total anual extraído supere los 7.000 metros cúbicos
o cuando los acuíferos hayan sido declarados como sobreexplotados o en riesgo de
estarlo. Esto no suele ocurrir. Lejos de estar protegida, el 44% de la masa de aguas
subterráneas se encuentra en mal estado por contaminación o por sobreexplotación
para regadíos y desarrollo urbanístico, señala Greenpeace.
Cristina Noguera, profesora de EAE Business School, considera que los pozos ilegales
ponen en riesgo tanto la seguridad de las personas, por razones evidentes, como los
recursos hídricos del país.
“Existe una ley de aguas que sanciona su apertura, pero la multa es muy baja, puede
rondar los 5.000 euros. Además, la realidad es que hay una trampa en la ley. En muchas
ocasiones, se inicia el expediente pero se deja la gestión inacabada y se empieza la
obra. Después, si alguien denuncia y lo pone en conocimiento de las autoridades, se
justifica diciendo que se está tramitando el permiso, de manera que así se evita la
multa”, explica Noguera.
La extracción ilegal de agua se produce en toda España, pero las Tablas de Daimiel y
Doñana, los humedales más importantes del país, y también de Europa, ambos Reserva
de la Biosfera, representan la cara más conocida y emblemática de este preocupante
problema medioambiental.
Felipe Fuentelsaz, coordinador de Agricultura de WWF España, apunta que desde los
años noventa del siglo pasado, “los expertos vienen alertando de la grave y caótica
situación de Doñana debido a que la extracción de agua supera la capacidad del
acuífero. Hay datos contrastados desde entonces, pero no hemos sido capaces de frenar
el incremento de superficie de regadío en la zona”.
Control
Desde hace más de una década, WWF vigila de manera constante la situación de los
regadíos alrededor del parque de Doñana con inspecciones sobre el terreno y
seguimiento de imágenes por satélite (teledetección) para controlar y denunciar el
aumento de los terrenos dedicados a la agricultura. En las campañas 2015 -2016 y
2016-2017 detectó 251,9 nuevas hectáreas de cultivos de regadío, la gran mayoría
presuntamente ilegales.
Estos nuevos cultivos se suman a las 1.680 hectáreas aparecidas desde 2004, año en el
que se puso fin, sobre el papel, al crecimiento descontrolado de la agricultura en este
espacio natural Patrimonio de la Humanidad, que los técnicos de la Unesco han
considerado incluir en la lista negra de patrimonio natural en peligro.
DENUNCIA DE BRUSELAS
Medidas. Ante el reciente anuncio de la Comisión Europea de llevar a España ante el Tribunal
de Justicia europeo por no haber tomado medidas para proteger los acuíferos que alimentan el
humedal de Doñana, el Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco) estudia, entre otras
actuaciones, la declaración de las masas de agua subterránea del entorno de Doñana “en riesgo
de no alcanzar el buen estado cuantitativo”. Esta declaración permitirá, según el Miteco, un
mayor control de la gestión del agua subterránea. En 2018 se realizaron cerca de 1.000
inspecciones para detectar extracciones ilegales y se levantaron 328 actas de denuncia. La
identificación de pozos ilegales en Doñana es una tarea compleja, reconoce el ministerio, ya que
el terreno arenoso permite que puedan abrirse, explotarse y abandonarse una vez se secan, en
apenas unos meses.
Consumo. Los principales supermercados europeos que se abastecen de frutos rojos de Huelva,
agrupados en torno a la plataforma Iniciativa para una Agricultura Sostenible (SAI, por sus
siglas en inglés), han pedido una agricultura legal y responsable en el entorno de Doñana,
advierten desde WWF España.
Según datos oficiales del Ministerio para la Transición Ecológica, el cómputo global
del agua que se extrae de los acuíferos de la comarca, a un ritmo de 80
hectómetros cúbicos por año, es tres veces mayor que el agua que recogen. El
presidente de la Confederación hidrográfica del Segura, Mario Urrea, se reunió con
distintos miembros de la Corporación Municipal, representantes de Salvemos el
Arabí y Comarca, y del CRDOP para recoger las demandas que la sociedad
yeclana tiene a este respecto. El estado de los acuíferos, el volumen de agua que
consumen los cultivos intensivos, cada vez más asentados en el término municipal,
y la búsqueda de soluciones al déficit hídrico fueron los tres temas sobre los que
trató la reunión
El consumo mundial de agua ha crecido durante el último siglo a un ritmo dos veces
superior al de la población.
La escasez de agua afecta a todos los continentes y a más del 40 por ciento de la
población de nuestro planeta. Para 2025, 1 800 millones de personas vivirán en países o
regiones con una drástica falta de agua, y dos tercios de la población mundial podría
encontrarse en condiciones de escasez del líquido elemento.
Para poder entender realmente la gravedad del problema, primero hay que darse cuenta
de la enorme importancia que tiene el agua en nuestra vida diaria y nuestra capacidad de
planificar un futuro mejor.
El problema de escasez de agua está siendo agravado por el cambio climático, sobre todo
en las regiones más áridas del mundo, en las que viven en la actualidad más de 2 000
millones de personas, y la mitad del total de la población pobre. Es necesario abordar el
impacto del hombre en el medio ambiente y el clima terrestre para proteger los recursos
hídricos a nivel mundial. Pero hay otros factores que intervienen, como el incremento de
la cantidad de agua necesaria para producir más alimentos para una población que
aumenta sin cesar. La agricultura es el principal consumidor de agua dulce en el mundo.
También hay que señalar la creciente urbanización y el cada vez mayor consumo a nivel
doméstico e industrial de las personas que vive en zonas más desarrolladas del planeta.
¿La voluntad política y las inversiones pueden lograr que desaparezca el desierto
del Sáhara?
Desde luego que no, pero la voluntad política, la cooperación internacional y las
inversiones pueden ayudar a contener la pérdida de agua de las grandes cuencas
hidrográficas como las del Nilo y el Lago Chad. Son temas en los que la FAO y otros
organismos de la ONU están trabajando en estos momentos. La voluntad política y las
inversiones pueden ayudar a proporcionar agua a millones de pequeños campesinos de
todo el mundo que luchan para obtener alimentos suficientes para comer, apoyando
iniciativas locales que involucran directamente a estos campesinos y sus comunidades
para conservar el agua de lluvia, utilizando el agua de una forma más eficaz y protegiendo
los recursos hídricos. La política -y la moral-, nos ayudará a llevar agua a los 1 100
millones de personas que no tienen acceso a un mínimo de 20-50 litros diarios necesarios
para cubrir sus necesidades básicas, y los 2 600 millones de personas que carecen de
agua suficiente para tener sistemas de saneamiento adecuados.
En primer lugar, no existe una varita mágica, un interruptor que al girarlo pueda eliminar
de repente la escasez de agua. Hay iniciativas concretas para cambiar la situación de la
falta de agua. En la FAO admitimos que el sector agrícola debe tomar las riendas para
afrontar la escasez de agua, encontrando maneras más efectivas para conservar el agua
de lluvia y regar las tierras agrícolas.
Nadie pone en duda que producir alimentos suficientes es fundamental en la lucha contra
el hambre y para mejorar las condiciones de vida en todos los continentes. Pero la
agricultura abarca cerca del 70 por ciento de todo el consumo de agua dulce y hasta un
95 por ciento en algunos países en desarrollo. Para hacer frente a la escasez, incluso
cuando aumenta la demanda de alimentos, tenemos que apoyar iniciativas para producir
más comida con proporcionalmente menos agua. De nuevo, esto significa proteger
nuestros cursos de agua, conservar la salud de nuestros bosques y mejorar la forma en
que regamos los cultivos y criamos el ganado.
Ello requiere cambios en las políticas y cooperación a gran escala. Supone mejorar la
gestión de los recursos y trabajar más allá de las fronteras nacionales para desarrollar y
proteger las cuencas hídricas.
El pasado otoño Vd. afirmó que el mundo está ya fuera de plazo para alcanzar el
Objetivo de Desarrollo del Milenio de reducir el hambre a la mitad en 2015.
¿Cómo podemos estar seguros que será diferente con el objetivo de mejorar el
acceso al agua?
Los dos objetivos van de la mano. El acceso al agua está estrechamente ligado al
cumplimiento de la mayoría de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, que incluyen
dentro del mismo plazo la reducción a la mitad de la pobreza extrema y el hambre para
2015, detener la expansión del VIH/SIDA y garantizar la educación primaria para todos
los niños. Ello explica porqué no podemos lograr un progreso real en el desarrollo a nivel
mundial sin solucionar el tema de la escasez de agua.
Afrontar la escasez de agua requiere solucionar una serie de cuestiones, no todas ellas
directamente relacionados con la agricultura. Van desde la protección del medio ambiente
y el calentamiento global hasta establecer precios justos para los recursos hídricos y un
reparto equitativo del agua para el riego, la industria y el consumo doméstico. Ello
significa que no solamente el sector agrícola, si no todo el mundo –organismos
internacionales, gobiernos, comunidades locales- deben compartir la responsabilidad.
22 de marzo de 2007
¿Qué es la crisis del agua potable?
Aunque en gran medida también por los desechos que arrojamos desde
los desagües de nuestras casas.
No sólo los residuos industriales afectan nuestras, aguas, cabe mencionar
que los residuos agrícolas también afecta, como en el caso de
los pesticidas.
Lo anterior hace ver que las cantidades de agua potable o apta para el
consumo humano en sus diferentes posibilidades, se reducen.
SOLUCIONES GUBERNAMENTALES
Los gobiernos deben encaminar sus políticas ambientales y económicas a
una mejor gestión del agua.
Veamos algunos ejemplos de acciones gubernamentales para
disminuir esta crisis:
LAS MINAS, TIERRAS, BOSQUES, AGUAS Y EN GENERAL TODAS LAS FUENTES NATURALES DE
RIQUEZA PERTENECEN AL ESTADO”.
° DECLARA EN FORMA ENFATICA QUE EL ESTADO ES PROPIETARIO DE TODAS LAS AGUAS, SIN
EXCEPCION ALGUNA, SU DOMINIO ES INALIENABLE E IMPRESCRIPTIBLE. NO HAY PROPIEDAD
PRIVADA, NI DERECHOS OTORGADOS. EL USO JUSTIFICADO Y RACIONAL, SE OTORGA EN
ARMONIA CON EL INTERES SOCIAL Y DESARROLLO DEL PAIS.
ESTABLECE AUTORIDAD ÚNICA (ANA) PARA TODOS LOS USOS Y PROMUEVE LA GESTION
INTEGRADA DE LOS RECURSOS HÍDRICOS, TENIENDO COMO TERRITORIO A LA CUENCA.
INCENTIVA EL DESARROLLO DE UNA CULTURA DE USO EFICIENTE ENTRE LOS USUARIOS Y
OPERADORES. PROMUEVE LA PARTICIPACIÓN ORGANIZADA DE LA POBLACIÓN EN LA GIRH.
ESTABLECE PRINCIPIOS ENTRE ELLOS: EL AGUA TIENE VALOR SOCIOCULTURAL, ECONÓMICO Y
AMBIENTAL; HAY RESPECTO AL USO ANCESTRAL DEL AGUA EN LAS COMUNIDADES
CAMPESINAS Y NATIVAS.