Gran Diosa
Gran Diosa
Gran Diosa
Éste es el dossier que vamos a utilizar para trabajar este mes. Verás que se divide en
varios temas. Puedes leerlos a tu ritmo, y tienes los audios para acompañar.
Recuerda que dispones de una tutoría vía Skype, concertando cita previa en
[email protected] , y también estoy disponible en esa misma dirección
mail para tus dudas.
Hécate es una diosa con origen arcaico y muy compleja y misteriosa puesto que sus
atributos fueron cambiando con el tiempo, siendo asimilada con otras diosas.
Con el tiempo, la anterior Hécate se difumina y aparece una Hécate oscura e inquietante
vinculada al mundo de las sombras. A diferencia de Artemis, que representaba la luz lunar
y el esplendor de la noche, Hécate representaba su oscuridad y sus terrores.
También se ponían figuras de Hécate en los hogares griegos y romanos mirando hacia la
puerta para proteger la casa.
Asimilada a Artemisa, se la representa como una joven con peplo y llevando sobre la
frente el creciente lunar (o la diadema cilíndrica denominada polos) y una o dos antorchas
en las manos. La serpiente, la espada y las llaves son también símbolos asignados a
Hécate.
El arte representa también a Hécate a menudo con tres cuerpos o tres cabezas y con
serpientes entrelazadas alrededor de su cuello ya que es una divinidad triforme: lunar,
infernal y marina.
La mitología también nos habla a veces de Hécate como una de las diosas menos
conocidas, hija menor de Zeus, que había sido diosa de la Luna. En el Hades gozaba de
gran autoridad, porque era conocida como la reina invencible y presidía las ceremonias de
expiación y purificación de las sombras a las que se les permitía reparar las malas
acciones de su vida pasada. Ferea era un sobrenombre de Hécate.
Tuvo su importancia en el mito de Perséfone, pues se dice que acompañó a Deméter por
el Inframundo con su antorcha para buscarla.
Hécate ha sido descrita como la consorte de Hermes en los cultos antiguos. Ambos eran
los líderes de las sombras de la muerte, y se asociaban con el retorno oficial de la
primavera a través del mito de Perséfone (que vimos en octubre).
Trabajando los sueños con Hécate:
Lleva durante todo el mes (como mínimo, luego puedes seguir con el ejercicio) una libreta
de sueños.
En ella apuntarás todos los sueños que tengas. Cada vez que sueñes, escribe la fecha, la
fase lunar y en qué fase menstrual estás, si tienes el período. Si no, solamente la fase
lunar.
Hécate es una Diosa que “trabaja” mucho en los sueños. Antiguamente, y también con
otros dioses, las personas podían pedir un sueño e incluso quedarse a dormir en el templo
junto a la estatua o imagen del Dios/Diosa a quien se lo pedían.
Busca el simbolismo de lo que has soñado, no te quedes en lo típico que te dicen los libros
tipo “El significado de los sueños”. Es decir, si sueñas con un limón, busca qué simbología
tiene y apunta en el libro si ello tiene que ver con tu situación actual. O bien cuando pase
el tiempo puedes repasar tu libreta de sueños y ver qué tiene que ver con el transcurrir de
tu vida.
Soñar forma parte de trabajar la intuición, que es lo que vamos a ver durante este mes de
Hécate.
2. Las Diosas oscuras. Nuestra propia oscuridad.
La luz y la oscuridad son las dos partes de un todo. Sin oscuridad, no podrías
percatarte de que existe la luz.
¿Cómo notas lo cálido si solo conoces lo frío?
¿Cómo percibes el silencio si tan solo conoces el sonido?
Ambas partes son igual de importantes, sin una de ellas se perdería el equilibrio.
La mujer que está en paz y armonía con su Diosa Oscura, se acepta tal cual es. Al
enfrentar todos tus miedos, demonios y fantasmas, sabes internamente que saldrás
fortalecida, que después de ganar esta batalla ya nada podrá derrotarte. Recuerda el
trabajo con Perséfone, ella supo enfrentar luz y oscuridad, aceptando e integrando las
dos, acabando por reinar en su propia vida.
Cuando aprendes a decir “no”, cuando sueltas cosas, situaciones o personas que ya
no necesitas o que son un lastre para ti, aunque ellos intenten “atraparte” porque creen
que te necesitan (ahí el problema ya es de otro, no tuyo), y sin sentirte culpable, estás
trabajando tu diosa oscura. Recuerda siempre que tu decisión no es malvada, sino
que justa y llena de respeto hacia ti misma.
Atrévete a transmutar tu tristeza. Permítele salir de tu interior, deja que fluya como un
río. Es una emoción tan válida e importante como todas las demás, ¿por qué habrías
de opacarla? Dejemos de “esconder” las emociones catalogadas como “negativas”,
simplemente porque nos han educado para estar siempre bien de cara a los demás.
Así, percibirás las ventajas de ser una mujer autosuficiente y llena de fortaleza, sin
sentir miedo ni vergüenza por mostrar nuestra inteligencia y poder interno.
“Cuando una mujer decide trabajar con sus Diosas Oscuras está efectuando un acto
de Poder, Belleza y Coraje.
Realiza un acto de Poder porque confía en sí misma y sabe que enfrentar sus miedos
y convertir sus monstruos en aliados le devolverá una gran cantidad de energía.
Crea un acto de Belleza porque una mujer poderosa es naturalmente bella y jamás se
avergüenza de sí misma.
Concreta un acto de coraje porque sabe que, una vez despiertas, las Diosas Oscuras
le exigirán que llegue hasta el fondo, que se zambulla hacia la raíz misma de sus
problemas y limitaciones, para sanarlas y convertirlas en las semillas de su propio
poder.
Trabajar la diosa oscura es prepararnos para la muerte de nuestras viejas formas, sin
autocompasiones y prejuicios, de modo que este viaje te lleve nuevamente al
renacimiento, a nuestra propia curación, hay que recordar que al fin y al cabo somos
uno con la misma sombra a la que tememos, he de aquí los prejuicios relacionados
con esta cara de la diosa…..
Autor/a desconocido/a
3. Arquetipo de la Bruja/Anciana Sabia. Concepto.
Si está positiva, sabe escuchar, incluso el silencio, y vive en paz, con ella y con los
demás. Normalmente, ya no hay aquella inquietud del "qué quiero hacer en la vida".
Muchas se dedican entonces al voluntariado, trabajando estos aspectos de la
escucha, y compartir lo que ellas ya saben. Muchas mujeres que conozco en esta
etapa, también se dedican a cosas muy creativas.
En el aspecto negativo, pueden sentirse que como han envejecido, ya no sirven para
nada, se secan, creen que ya no tienen nada más que hacer en la vida. Si está
positivo este arquetipo, acepta que es el ciclo, que esto es así y no tiene problemas en
fluir. Hay mujeres que no aceptan, y hacen mil y una cosas para no envejecer, según
ellas, lo cual les crea ansiedad y desarmonía.
En otras etapas vitales, una mujer puede sentir este arquetipo en los momentos en que se
siente contemplativa, trabajando su espiritualidad y sabiduría.
En negativo, puede que haya tenido una pérdida (de la pareja, de un hijo...) y se deje
secar, no se sienta con fuerzas de salir adelante, por ejemplo.
También una mujer utiliza este arquetipo en los momentos en que necesita y está
utilizando su sabiduría interior para tomar decisiones, o simplemente para conocerse y
estar mejor con ella misma. Para ello previamente deberá haber aprendido a apreciar el
silencio, que también es una característica de este arquetipo.
4. El 6º Chackra. Viendo más allá.
El sexto chakra, tiene su ubicación entre los ojos, por encima de la raíz de la nariz. La
intuición, la comprensión de nuestros sueños y el reconocimiento de nuestros temas
vitales, así como las visiones de la vida, son aspectos de este chakra.
Asimismo, a este chakra se le asignan las vivencias que superan la percepción física y
la unión con el mundo espiritual. Si nos abrimos a la experiencia de la meditación, los
elementos del sexto chakra pueden adquirir mayor importancia a nuestra vida.
También se le llama “el tercer ojo” por su relación con la cualidad de la intuición.
Gobierna la glándula pituitaria, que también se asocia a la intuición, ya que es el nexo
entre mente y cuerpo. El aspecto más significativo de la intuición es la capacidad de
ver desde el alma, en lugar de ver desde el yo, de ahí lo de “ver más allá”.
Esto nos permite tomar el camino del alma, en vez de el del yo, basado en estrechas
preocupaciones, supervivencia básica y la posición. Tomamos entonces decisiones
que te permiten estar en paz. Además, disminuye la distancia entre el “yo” y nuestra
parte divina ¿no te has sentido a veces que tu parte espiritual (sea cual sea) y tu parte
material no están en paz?
Cuando el sexto chackra se abre, vemos ante nosotras caminos que antes
permanecían ocultos, se desplega la mente intuitiva, vemos más allá de lo obvio. Y
con esta nueva visión, podemos hacer nuevas elecciones, y así, crear nuestra nueva
propia realidad.
Puedes ir escribiendo durante éste mes tus experiencias con la intuición, porque así
podrás ver cómo va funcionando. Y recuerda…es cuestión de práctica!
5. Los cruces de caminos y nuestra intuición para guiarnos.
Cómo nos ayuda Hécate en este sentido.
Es una maestra que anuncia los inevitables cambios. Estos giros en nuestra vida nos
dan la oportunidad para ser más conscientes de nuestra Divinidad.”
En los nuevos cruces de caminos que se nos van a presentar, y después de haber
trabajado (o estar trabajando) nuestra intuición, también debemos tener en cuenta
otros factores.
Piensa que en tu interior, hay una minúscula semilla del “tú” que debías ser.
Desgraciadamente, puede que esa semilla esté enterrada, debida a la educación, a
tus miedos, a tus experiencias de vida…
Puede que acabaras perdiendo el contacto con las necesidades de tu cuerpo, corazón
y alma y quedaras bloqueada, y ahora haces un montón de cosas que no quieres
hacer, pero que gusta a otra gente (recuerda que tu diosa oscura te pide que seas tú
misma). Ahora es el momento en que debes permitir que tu Hécate te guíe con su
antorcha hacia donde quieres ir.
No tener claro lo que quieres y dar mayor importancia a las necesidades y deseos de
los demás es simplemente un hábito. Puedes romperlo practicando el hábito opuesto.
Comenzaremos poco a poco. Durante este mes, reconoce tus preferencias en cada
situación, por grandes o pequeñas que sean. Cuando salga cualquier situación en la
que debas decidir, no digas “lo que prefieras” o elijas algo pensando en los demás.
Imagínate que es una decisión a vida o muerte. No hay decisiones acertadas o no,
sino que decides lo que tú quieras. Tanto da que sea elegir qué película ir a ver al cine
como decir sí o no a una oferta de trabajo. Esto te dará práctica para ejercer tus
propias decisiones y además podrás comprobar que cuando eliges algo prescindiendo
de la preferencia de los demás, no es para tanto la reacción del resto. Te estarás
mostrando respeto a ti misma y te sentirás empoderada.