Renato Benazic Analisis Real 1
Renato Benazic Analisis Real 1
Renato Benazic Analisis Real 1
Renato Benazic
July 8, 2005
Prefacio
Renato Benazic
Introducción
Contenido
1 Topologı́a en Rn 0
1.1 El Espacio Rn . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 0
1.2 Sucesiones en Rn . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 8
1.3 Conjuntos Abiertos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13
1.4 Conjuntos Cerrados . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 16
1.5 Conjuntos Conexos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 21
1.6 Conjuntos Compactos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 24
1.7 Distancia Entre Conjuntos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 27
1.8 Ejercicios . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 33
3 Caminos en Rn 60
3.1 Caminos Diferenciables . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 60
3.2 Derivadas de orden superior . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 67
3.3 La integral de un camino . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 69
3.4 Conjuntos conexos por caminos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 76
3.5 Caminos rectificables y longitud de arco . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 80
3.6 Reparametrización de caminos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 88
3.7 Introducción a la geometrı́a diferencial de curvas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 93
3
3.8 Ejercicios . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 98
Topologı́a en Rn
1.1 El Espacio Rn
Definición 1.1.1 Sea n ∈ N, el conjunto Rn es definido como la colección de todas las n-uplas x =
(x1 , x2 , . . . , xn ) de números reales, es decir:
Rn = {x = (x1 , x2 , . . . , xn ) : xi ∈ R, 1 ≤ i ≤ n} .
Observaciones:
Ahora que conocemos el conjunto Rn , vamos a establecer cuando dos de sus elementos son iguales:
A continuación, dotaremos al conjunto Rn de una estructura algebraica adecuada que nos permita
generalizar a dimensión cualquiera, las propiedades geométricas del plano y el espacio.
0
Análisis Real I 1
x+y = (x1 + y1 , x2 + y2 , . . . , xn + yn )
αx = (αx1 , αx2 , . . . , αxn )
Teorema 1.1.1 Con las operaciones de suma de vectores y producto de un escalar por un vector, el
conjunto Rn tiene estructura de R-espacio vectorial de dimensión n.
No daremos aquı́ la demostración del Teorema anterior. El lector interesado puede encontrarla en
cualquier libro de Algebra Lineal.
Observaciones:
En el caso particular que n = 3, existe una operación entre vectores que tiene muchas aplicaciones en
geometrı́a y fı́sica.
1. x × y = −y × x.
2. (αx) × y = x × (αy) = α(x × y).
3. x × (y + z) = x × y + x × z.
Análisis Real I 2
Prueba. ¡Ejercicio!
Muchos conceptos geométricos que aparecen en el plano y el espacio (tales como proyección, perpen-
dicularidad, ángulo, etc.), pueden ser generalizados a dimensiones mayores. El concepto de producto
interno es fundamental para este objetivo.
El concepto que acabamos de definir, no solamente es importante para el geómetra, sino que también
es útil en otras ramas de la ciencia, por ejemplo, el concepto fı́sico de trabajo es definido a partir del
producto interno.
Las principales propiedades del producto interno, son resumidas en la siguiente:
Prueba. Probaremos solamente una de las propiedades anteriores, por ejemplo la número 2, las demás
son dejadas como ejercicios para el lector.
Sea x = (x1 , x2 , . . . , xn ), usando propiedades elementales de los números reales, tenemos:
n
X
hx, xi = 0 ⇔ x2i = 0
i=1
⇔ x2i = 0, ∀ 1 ≤ i ≤ n
⇔ xi = 0, ∀ 1 ≤ i ≤ n
⇔ x = θ.
Observaciones:
Luego, del Teorema 1.1.3, deducimos que la función Φ : Rn × Rn → R definida por Φ(x, y) = hx, yi
es una forma bilineal, simétrica, no negativa en Rn .
a1,1 a1,2 . . . a1,n
a2,1 a2,2 . . . a2,n
2. Sea A = . .. .. = (aij ) una matriz real con n filas y n columnas. El conjunto
. . . .
an,1 an,2 . . . an,n
de tales matrices será denotado por Rn×n .
Si A = (aij ) ∈ Rn×n una matriz simétrica (es decir, (aij ) = (aji )) y no negativa (es decir,
Pn
aij xi xj > 0, para todo x ∈ Rn − {θ}) entonces la función ΦA : Rn × Rn → R definida por
i,j=1
n
X
ΦA (x, y) = aij xi xj ,
i,j=1
Observaciones:
1. ei ⊥ ej , ∀ i, j = 1, 2, . . . , n, i 6= j.
2. θ ⊥ x, ∀ x ∈ Rn .
Prueba. Primeramente, observe que hx − αy, yi = 0 si y solamente si hx, yi = α hy, yi. Desde que y 6= θ,
hx, yi
tenemos que hy, yi =
6 0, luego podemos considerar α = ∈ R. Claramente, para esta elección de α,
hy, yi
tenemos que hx − αy, yi = 0.
Observaciones:
hx, yi
1. El vector αy = y es llamado Proyección Ortogonal de x sobre y, y es denotado por Proyy x,
hy, yi
es decir
hx, yi
Proyy x = y.
hy, yi
hx, yi
2. El número real α = es llamado Componente de x sobre y, y es denotado por Compy x, es
hy, yi
decir
hx, yi
Compy x = .
hy, yi
El número real hx, xi ha aparecido varias veces en nuestro estudio, es por esta razón que recibe un
nombre especial.
Observación: La norma del vector x se interpreta geométricamente como la distancia del punto x al
punto θ (el origen de coordenadas). Esta norma es llamada norma euclidiana.
El siguiente resultado es fundamental en nuestro estudio:
1. | hx, yi | ≤ kxkkyk, ∀ x, y ∈ Rn .
2. | hx, yi | = kxkkyk si y sólo si existe α ∈ R tal que x = αy.
Prueba.
1.) Si y = θ entonces la desigualdad se cumple trivialmente. Consideremos entonces y 6= θ, por la
hx, yi
Proposición 1.1.4, existe un α = ∈ R tal que x − αy ⊥ y. Denotando z = x − αy, tenemos
hy, yi
kxk2 = hx, xi
= hz + αy, z + αyi
= hz, zi + α hz, yi + α hy, zi + α2 hy, yi
= kzk2 + α2 kyk2
Análisis Real I 5
luego
2
hx, yi
kxk2 ≥ α2 kyk2 = kyk2
kyk4
2
simplificando, tenemos que hx, yi ≤ kxk2 kyk2 , por lo tanto
hx, yi2
kxk2 = kzk2 + kyk2
kyk4
2
hx, yi
= kzk2 +
kyk2
= kzk2 kxk2
1. kxk ≥ 0, ∀ x ∈ Rn .
2. kxk = 0 si y solo si x = θ.
3. kx + yk ≤ kxk + kyk, ∀ x, y ∈ Rn (Desigualdad triangular).
4. kαxk = |α|kxk, ∀ x ∈ Rn , ∀ α ∈ R.
Prueba. Probaremos sólo la desigualdad triangular, las demás quedan como ejercicio para el lector.
luego:
Definición 1.1.8 Sean x, y ∈ Rn . La distancia entre x e y, denotada por d(x, y) es definida como:
d(x, y) = kx − yk.
1. d(x, y) ≥ 0, ∀ x, y ∈ Rn .
2. d(x, y) = 0 ⇔ x = y.
3. d(x, y) = d(y, x), ∀ x, y ∈ Rn (Simetrı́a).
4. d(x, y) ≤ d(x, z) + d(z, y), ∀ x, y, z ∈ Rn (Desigualdad Triangular).
Prueba. Probaremos solamente la desigualdad triangular, la demostración de las otras tres propiedades
son similares y la dejaremos como ejercicio para el lector. Sean x, y, z ∈ Rn , tenemos:
El concepto de distancia puede ser generalizado a cualquier conjunto no vacı́o. En efecto, sea X 6= ∅,
(no necesariamente un espacio vectorial) una distancia en X es una función d(·, ·) : X × X → R que
satisface las propiedades 1 al 4 del Teorema 1.1.8. En tal caso, decimos que el par (X, d(·, ·)) es un Espacio
Métrico. En particular (Rn , d(·, ·)), donde d(·, ·) es la distancia euclidiana de la Definición 1.1.8, es un
espacio métrico. Observe que si (V, k · k) es un espacio vectorial normado, entonces la norma k · k define
una métrica en V , en efecto, basta definir d(x, y) = kx − yk, luego todo espacio vectorial normado es un
espacio métrico. El recı́proco es falso, puesto que un espacio métrico no necesariamente es un espacio
vectorial.
Los espacios con producto interno, espacios normados y los espacios métricos son estudiados en una
rama de la matemática llamada Análisis Funcional.
Sea x = (x1 , x2 , . . . , xn ) ∈ Rn , sabemos que cada xi es un número real llamado i-ésima coordenada de
x, luego a cada n-upla de números reales le podemos asociar n números reales que son sus coordenadas.
Las funciones definidas por esta asociación son llamadas proyecciones.
n
X
Observación: x = (π1 (x), π2 (x), . . . , πn (x)) = πi (x)ei , ∀ x ∈ Rn .
i=1
Las principales propiedades de las proyecciones canónicas son resumidas en la siguiente proposición.
1. πi (x + y) = πi (x) + πi (y), ∀ x, y ∈ Rn , ∀ i = 1, 2, . . . , n.
2. πi (αx) = απi (x), ∀ x ∈ Rn , ∀ α ∈ R, ∀ i = 1, 2, . . . , n.
3. |πi (x)| ≤ kxk, ∀ x ∈ Rn , ∀ i = 1, 2, . . . , n.
Análisis Real I 8
Prueba. Probaremos solo una de ellas, las otras dos son dejadas como ejercicio al lector.
Para x = (x1 , x2 , . . . , xn ) ∈ Rn , tenemos:
πi (x)2 ≤ x21 + x22 + . . . + x2n = kxk2 , luego |πi (x)| ≤ kxk.
Observaciones:
1. Las propiedades 1) y 2) de la Proposición anterior nos dice que las proyecciones πi son transforma-
ciones lineales.
2. πi (x) = Compei x ∀ x ∈ Rn , ∀ i = 1, 2, . . . , n.
1.2 Sucesiones en Rn
La norma en Rn definida en la sección anterior, nos permite definir algunas nociones geométricas funda-
mentales
Br (a) = {x ∈ Rn : kx − ak < r}
Br [a] = {x ∈ Rn : kx − ak ≤ r}
Sr [a] = {x ∈ Rn : kx − ak = r}
Observaciones:
Definición 1.2.2 Sean x, y ∈ Rn , el segmento de recta que une los puntos x e y, denotado [x, y] es
definido como
[x, y] = z = (1 − t)x + ty : t ∈ [0, 1]
Definición 1.2.3 Sea X ⊂ Rn . Decimos que X es un Conjunto Convexo si y sólo si para todo par de
puntos x, y ∈ X, se tiene que [x, y] ⊂ X.
Análisis Real I 9
Ejemplos:
Prueba. Sean x, y ∈ Br (a) y z ∈ [x, y], luego existe t ∈ [0, 1] tal que z = (1 − t)x + ty, por lo tanto
luego z ∈ Br (a), lo que prueba la convexidad de la bola abierta. De manera análoga se prueba que la
bola cerrada Br [a] es convexa.
Una sucesión de vectores n-dimensionales es una función cuyo dominio es N y su contradominio es Rn
Definición 1.2.4 Una sucesión en Rn es una función x : N → Rn que a cada número natural m le asocia
el vector x(m) = xm ∈ Rn llamado m-ésimo término de la sucesión.
Notación: Las sucesiones serán denotadas por {x1 , x2 , . . . , xm , . . .} o simplemente por (xm ) ⊆ Rn
Definición 1.2.5 Sea (xm ) ⊆ Rn , decimos que a ∈ Rn es el lı́mite de la sucesión (xm ) cuando m tiende
al infinito, lo que denotaremos por lim xm = a si y sólo si ∀ ǫ > 0, ∃ m0 ∈ N tal que m ≥ m0 ⇒ kx − ak
m→∞
< ǫ.
lo cual es equivalente a:
lim xm 6= a si y sólo si ∃ ǫ0 > 0 tal que ∀ m ∈ N, ∃ km ≥ m con kx − ak ≥ ǫ0 .
m→∞
La negación del concepto de lı́mite, será utilizada posteriormente.
Análisis Real I 10
Proposición 1.2.2 (Unicidad del lı́mite) El lı́mite de una sucesión convergente de vectores, es único.
Prueba: Sea (xm ) ⊆ Rn convergente. Procediendo por contradicción, supongamos que existen a, b ∈ Rn ,
a 6= b tales que lim xm = a y lim xm = b (Hipótesis Auxiliar). Como ka − bk > 0, de la definición de
m→∞ m→∞
lı́mite de sucesiones tenemos que
ka−bk
∃ m1 ∈ N tal que si m ≥ m1 entonces kxm − ak < 2
ka−bk
∃ m2 ∈ N tal que si m ≥ m2 entonces kxm − bk < 2
Para m0 = max{m1 , m2 }, tenemos que
1. lim xm = a.
m→∞
Prueba. (1 ⇒ 2) Sea ǫ > 0, por hipótesis existe un m0 ∈ N tal que si m ≥ m0 entonces kxm − ak ǫ.
Dado i ∈ {1, 2, . . . , n}, tenemos
luego, lim xm = a.
m→∞
Análisis Real I 11
Como aplicación inmediata del teorema anterior, tenemos el siguiente resultado sobre el álgebra de
lı́mites de sucesiones de vectores:
Corolario. Si (xm ), (ym ) ⊆ Rn y (αm ) ⊆ Rn son sucesiones convergentes, entonces (xm +ym ), (xm −ym ),
(αm xm ) ⊆ Rn , (hxm , ym i), (kxm k), (d(xm , ym )) ⊆ R son sucesiones convergentes y
Prueba. Probaremos sólo una de ellas, las demás son dejadas como ejercicio al lector.
Sea lim xm = a y lim ym = b. Por el Teorema 1.2.3, lim πi (xm ) = πi (a) y lim πi (ym ) = πi (b),
m→∞ m→∞ m→∞ m→∞
para todo i = 1, 2, . . . , n. Por la linealidad de πi y propiedades de los lı́mites de sucesiones reales, se tiene
que:
lim πi (xm + ym ) = lim πi (xm ) + lim πi (ym ) = πi (a) + πi (b) = πi (a + b)
m→∞ m→∞ m→∞
Definición 1.2.7 Sea (xm ) ⊆ Rn . Decimos que (xm ) es una sucesión acotada si y sólo existe una
constante positiva C tal que kxm k < C, para todo m ∈ N.
Prueba. Por hipótesis, ∃ a ∈ Rn tal que lim xm = a, luego ∃ m0 ∈ N tal que m ≥ m0 implica kxm − ak
m→∞
< 1, luego kxm k < 1 + kak, siempre que m ≥ m0 .
Denotando C = max {kx1 k, . . . , kxm−1 k, 1 + kak}, tenemos kxm k < C, ∀ m ∈ N.
Notación: De ahora en adelante, (xkm ) ⊆ (xm ) significará “(xkm ) es una subsucesión de (xm )”.
El siguiente resultado establece que cualquier subsucesión de una sucesión convergente es convergente.
Proposición 1.2.5 Sea (xm ) ⊆ Rn . Si lim xm = a entonces toda subsucesión de (xm ) converge hacia
m→∞
a.
Análisis Real I 12
Prueba. Sea ǫ > 0, por hipótesis ∃ m0 ∈ N tal que m ≥ m0 implica kxm − ak < ǫ. Dada (xkm ) ⊆ (xm ),
se tiene que si m ≥ m0 entonces km ≥ km0 ≥ m0 , luego kxkm − ak < ǫ.
Uno de las propiedades fundamentales del Análisis Real es el Teorema de Bolzano-Weierstrass para
sucesiones reales: “Toda sucesión acotada de números reales posee una subsucesión convergente”. A
continuación, vamos a generalizar este resultado a Rn .
Teorema 1.2.6 (Bolzano-Wierstrass) Toda sucesión acotada en Rn posee una subsucesión conver-
gente.
Prueba. Por simplicidad en la notación, haremos la demostración para el caso n = 2. Sea (xm ) ⊆ R2
una sucesión acotada, luego (π1 (xm )) y (π2 (xm )) ⊆ R son sucesiones acotadas.
Como (π1 (xm )) ⊆ R es acotada, por el Teorema de Bolzano-Weierstrass para sucesiones reales, ten-
emos que existe (π1 (xkm )) ⊆ (π1 (xm )) tal que lim π1 (xkm ) = x1 .
m→∞
Consideremos ahora la sucesión (π2 (xkm )) ⊆ R, la cual es acotada; usando nuevamente el Teo-
rema de Bolzano-Weierstrass para sucesiones reales, tenemos que existe (π2 (xjkm )) ⊆ (π2 (xkm )) tal
que lim π2 (xjkm ) = x2 .
m→∞
Observe que (π1 (xjkm )) ⊆ (π1 (xkm )), por la Proposición 1.2.5, tenemos que lim π1 (xjkm ) = x1 . Si
m→∞
definimos x = (x1 , x2 ) ∈ R2 , entonces lim πi (xjkm ) = xi (i = 1, 2), es decir lim xjkm = x. De esta
m→∞ m→∞
manera, hemos construido (xjkm ) ⊆ (xkm ) subsucesión convergente.
Recordemos que toda sucesión convergente de vectores es acotada (ver Proposición 1.2.4), el recı́proco
de este resultado es falso, existen sucesiones acotadas de vectores (e inclusive de números reales) que no
son convergentes, quizás el ejemplo más conocido es la sucesión alternante {1, −1, 1, −1, 1, −1, . . .}. Una
pregunta interesante es: Dada una sucesión acotada de vectores, ¿Podemos añadirle alguna condición
para hacerla convergente? La respuesta a esta interrogante es afirmativa, pero antes necesitamos definir
el concepto de valor adherente:
Observación: Sea (xm ) ⊆ Rn acotada, por Bolzano-Weierstrass, el conjunto de los valores adherentes a
la sucesión (xm ) es no vacı́o.
El Teorema siguiente responde a la pregunta planteada lı́neas arriba:
1. (xm ) es convergente.
2. (xm ) es acotada y posee un único valor adherente.
Prueba. (1 ⇒ 2) Por hipótesis, existe a ∈ Rn tal que lim xm = a. Por la Proposición 1.2.4, (xm ) es
m→∞
acotada. Sea b ∈ Rn un valor adherente a (xm ), luego existe (xkm ) ⊆ (xm ) tal que lim xkm = b. Pero
m→∞
Análisis Real I 13
desde que (xkm ) ⊆ (xm ) y lim xm = a, la Proposición 1.2.5 implica que b = lim xkm = a, es decir a
m→∞ m→∞
es el único valor adherente de (xm ).
(2 ⇒ 1) Sea a ∈ Rm el único valor adherente a la sucesión (xm ). Procediendo por contradicción,
supongamos que (xm ) no es convergente (Hipótesis Auxiliar), luego lim xm 6= a. Por la negación del
m→∞
concepto de lı́mite (ver sección anterior), existe ǫ0 > 0 que satisface:
Procediendo inductivamente, se construye una subsucesión (xkm ) ⊆ (xm ) tal que kxkm − ak ≥ ǫ0 , para
todo m ∈ N.
Por hipótesis (xkm ) es acotada, luego por Bolzano-Weierstrass, existe (xjkm ) ⊆ (xkm ) subsucesión
convergente, por lo tanto lim xjkm = a, puesto que a es el único valor adherente de (xm ). Pero
m→∞
kxjkm − ak ≥ ǫ0 , para todo m ∈ N, luego lim kxjkm − ak ≥ ǫ0 , es decir 0 ≥ ǫ0 , lo cual es una
m→∞
contradicción.
Observación: Para la demostración de la parte (2 ⇒ 1) del teorema anterior, es necesaria la hipótesis de
que (xm ) sea acotada. En efecto, si consideramos la sucesión de números reales {1, 2, 1, 4, 1, 6, 1, 8, . . .},
entonces es fácil ver que 1 es el único valor adherente de la sucesión dada, sin embargo ella es divergente.
Definición 1.2.10 Decimos que (xm ) ⊆ Rn es una sucesión de Cauchy si y sólo si ∀ ǫ > 0, ∃ m0 ∈ N
tal que m, m′ ≥ m0 ⇒ kxm − xm′ k < ǫ.
Un resultado básico del Análisis Real es la completitud de R, es decir, toda sucesión de Cauchy de
números reales es convergente. Este resultado es generalizado a Rn
Teorema 1.2.8 Sea (xm ) ⊆ Rn . (xm ) es una sucesión de Cauchy si y sólo si (xm ) es convergente.
Prueba. (⇐) Sea lim xm = a. Dado ǫ > 0, ∃ m0 ∈ N tal que si m ≥ m0 entonces kxm − ak < 2ǫ . Sean
m→∞
m, m′ ≥ m0 , luego kxm − xm′ k ≤ kxm − ak + ka − xm′ k < 2ǫ + 2ǫ = ǫ. Concluimos que (xm ) es de Cauchy.
(⇒) Sea (xm ) ⊆ Rn sucesión de Cauchy. Dado ǫ > 0, ∃ m0 ∈ N tal que m, m′ ≥ m0 ⇒ kxm − xm′ k < ǫ,
luego
|πi (xm ) − πi (xm′ )| = |πi (xm − xm′ )| ≤ kxm − xm′ k < ǫ,
siempre que m, m′ ≥ m0 , para todo i = 1, 2, . . . , n.
Por lo tanto (πi (xm )) ⊆ R es una sucesión de Cauchy, luego es convergente, es decir, existe ai ∈ R
tal que lim πi (xm ) = ai . Si definimos a = (a1 , a2 , . . . , an ), entonces lim πi (xm ) = πi (a), para todo
m→∞ m→∞
i = 1, 2, . . . , n, luego lim xm = a, es decir, (xm ) es convergente.
m→∞
1. Decimos que a ∈ Rn es un punto interior de X si y sólo si existe ǫ > 0 tal que Bǫ (a) ⊂ X.
2. El conjunto de todos los puntos interiores de X es llamado interior de X y será denotado por
int(X).
3. Decimos que Y ⊂ Rn es un entorno o vecindad de a si y sólo si a ∈ int(Y ).
4. Decimos que X es un conjunto abierto si y sólo si X = int(X).
Prueba. Sea x ∈ Br (a), luego kx − ak < r. Sea 0 < ǫ < r − kx − ak. Afirmo que Bǫ (a) ⊂ Br (a). En
efecto, si y ∈ Bǫ (a), entonces:
ky − ak ≤ ky − xk + kx − ak < ǫ + kx − ak < r
luego y ∈ Br (a), lo cual prueba la afirmación. Ası́, x ∈ int (Br (a)), y por lo tanto Br (a) es abierto. La
demostración de que Rn − Br [a] es dejada como ejercicio al lector.
Algunas propiedades del interior de un conjunto, son dadas en la siguiente Proposición, otras son
dadas en la lista de ejercicios al final del capı́tulo.
1. X ⊆ Y ⇒ int(X) ⊆ int(Y ).
2. int int(X) = int(X).
Prueba. 1) Sea x ∈ int(X), por definición existe un ǫ > 0 tal que Bǫ (a) ⊂ X. Por hipótesis existe un
ǫ > 0 tal que Bǫ (a) ⊂ Y , es decir x ∈ int(Y ) luego int(X) ⊆ int(Y ).
2) Sabemos que int(X) ⊆ int int(X) . Sea x ∈ int(X), por definiciónexiste un ǫ > 0 tal que Bǫ (a) ⊂ X.
Por la parte 1) tenemos que existe un ǫ > 0 tal que Bǫ (a) = int Bǫ (a) ⊂ int(X), luego x ∈ int int(X) .
Es decir int (int(X)) ⊆ int(X).
Las principales propiedades de los conjuntos abiertos, son dadas en el siguiente:
S
3. Si {Aλ }λ∈Λ es una colección arbitraria de conjuntos abiertos, entonces Aλ es un conjunto
λ∈Λ
abierto.
Prueba. 1) Supongamos que x ∈ ∅ (Hipótesis Auxiliar), por definición, debe existir un ǫ > 0 tal que
Bǫ (a) ⊂ ∅ lo cual es una contradicción, luego int(∅) = ∅ y, por lo tanto, ∅ es abierto. Es evidente que Rn
es abierto.
T
2) Si x ∈ A1 A2 entonces x ∈ A1 y x ∈ A2 , luego existen ǫ1 > T 0 y ǫ2 > 0 tales que BǫT ⊂ A1 y
1 (x)
Bǫ2T(x) ⊂ A2 . Tomando ǫ = min{ǫ1 , ǫ2 }, se tiene que Bǫ (x) ⊂ A1 A2 , es decir x ∈ int A1 A2 , luego
A1 A2 es abierto.
S
3) Si x ∈ Aλ entonces existe un λ0 ∈ Λ tal que x ∈ Aλ0 y desde que Aλ0 es abierto, existe un ǫ > 0
λ∈Λ
S S S
tal que Bǫ (a) ⊂ Aλ0 ⊂ Aλ , es decir x ∈ Aλ y, por lo tanto, Aλ es abierto.
λ∈Λ λ∈Λ λ∈Λ
m
T
Corolario. Si A1 , A2 , . . . , Am ⊂ Rn son conjuntos abiertos, entonces Ai es un conjunto abierto.
i=1
Sabemos que cualquier bola abierta Br (a) es disjunta con el cı́rculo Sr [a] el cual es su frontera. Este
resultado es válido para cualquier subconjunto abierto.
Prueba. (⇒) Si x ∈ X, por hipótesis, existe un ǫ > 0 tal que Bǫ (a) ⊂ X, luego Bǫ (a) ∩ (Rn − X) = ∅,
es decir x 6∈ ∂X y, por lo tanto, X ⊂ Rn − ∂X.
(⇐) Si x ∈ X entonces x ∈ Rn − ∂X, luego existe un ǫ > 0 tal que Bǫ (a) ∩ X = ∅ ó Bǫ (a) ∩ (Rn − X) = ∅.
Observe que la primera alternativa no se cumple, concluimos que existe un ǫ > 0 tal que Bǫ (a)∩(Rn −X) =
∅, es decir Bǫ (a) ⊂ X, luego x ∈ int(X).
En secciones posteriores estudiaremos otras propiedades de la frontera de un conjunto. A continuación
definiremos el importante concepto de conjunto abierto relativo a un conjunto dado.
1. A es abierto en X.
1. Decimos que a ∈ Rn es un punto adherente de X si y sólo si existe (xm ) ⊆ X tal que lim xm = x.
m→∞
Las primeras propiedades de la cerradura de un conjunto, son dadas en la siguiente Proposición, otras
son dadas en la lista de ejercicios al final del capı́tulo.
1. X ⊆ X, para todo X ∈ Rn .
2. X ⊆ Y ⇒ X ⊆ Y .
Observación: Desde que X ⊆ X, para cualquier X ⊂ Rn ; para probar que un conjunto es cerrado, es
suficiente probar que X ⊆ X.
Existe una manera equivalente de definir punto adherente a un conjunto, usando el concepto de bola
abierta.
1. a ∈ X.
2. Bǫ (a) ∩ X 6= ∅, ∀ ǫ > 0.
Prueba. (1 ⇒ 2) Sea a ∈ X, por definición existe (xm ) ⊆ X tal que lim xm = a. Dado ǫ > 0, existe
m→∞
m0 ∈ N tal que si m ≥ m0 , entonces kxm − ak < ǫ, luego xm0 ∈ Bǫ (a) ∩ X. De esta manera, hemos
probado que Bǫ (a) ∩ X 6= ∅, ∀ ǫ > 0.
(2 ⇒ 1) Por hipótesis, dado m ∈ N tenemos B m1 (a) ∩ X 6= ∅. Tomemos xm ∈ B m1 (a) ∩ X, de esta
1
manera, hemos construido (xm ) ⊆ X tal que kxm − ak < m , ∀ m ∈ N, luego lim kxm − ak = 0, es
m→∞
decir lim xm = a y, por lo tanto, a ∈ X.
m→∞
Es importante resaltar que si un conjunto no es cerrado entonces no necesariamente debe ser abierto,
existen conjuntos que no son cerrados ni abiertos, por ejemplo el intervalo [0, 1[. La relación correcta
entre conjuntos abiertos y cerrados, es dada por el siguiente:
Prueba. Es consecuencia de los Teoremas 1.3.3 y 1.4.3. Probemos, por ejemplo, la propiedad 2: F1 y F2
son conjuntos cerrados, entonces Rn −F1 y Rn −F2 son conjuntos abiertos, luego (Rn − F1 )∩(Rn − F2 ) =
Rn − (F1 ∪ F2 ), es un conjunto abierto y, por lo tanto, F1 ∪ F2 es cerrado.
El siguiente resultado nos proporciona una manera equivalente de definir frontera de un conjunto,
usando el concepto de clausura:
Teorema 1.4.5 ∂X = X ∩ Rn − X.
Observaciones:
Existe un resultado análogo al Teorema 1.4.3 que relaciona el concepto de conjunto abierto relativo
con el de conjunto cerrado relativo:
Prueba.(⇒) Por hipótesis Y ∩ X = X. Dados x ∈ X y ǫ > 0, tenemos que x ∈ Y ,y, por lo tanto
Bǫ (x) ∩ Y 6= ∅.
(⇐) Claramente Y ∩ X ⊆ X. Sea x ∈ X, por hipótesis se tiene que Bǫ (x) ∩ Y 6= ∅, ∀ ǫ > 0, luego x ∈ Y .
Concluimos que X ⊆ Y ∩ X.
Ejemplo: Qn = Q × Q × . . . × Q es denso en Rn .
| {z }
n veces
como BX es numerable, podemos escribir B = {Bi }i∈N . Dado i ∈ N, por definición de la familia BX ,
debe existir xi ∈ Bi ∩ X. Considero Y = {xi }i∈N ⊆ X. Afirmo que Y es denso en X. En efecto, tomemos
x ∈ X y ǫ > 0, por densidad de los racionales en los reales, existe r0 ∈ Q+ tal que 0 < r0 < ǫ. Por
otro lado, desde que Qn es denso en Rn y x ∈ X, debe existir un q0 ∈ Qn tal que kx − q0 k < r20 , luego
x ∈ B r20 (q0 ), concluimos que B r20 (q0 ) ∩ X 6= ∅, es decir B r20 (q0 ) ∈ BX , luego debe existir un i0 ∈ N tal
que Bi0 = B r20 (q0 ). Como xi0 ∈ Bi0 ∩ X, tenemos:
r0 r0
kxi0 − xk ≤ kxi0 − q0 k + kq0 − xk < + = r0 < ǫ
2 2
luego xi0 ∈ Bǫ (x). De esta manera, hemos probado que Bǫ (x) ∩ Y 6= ∅, ∀ x ∈ X y ∀ ǫ > 0, lo que prueba
la afirmación y el teorema.
Un concepto muy relacionado con el de punto adherente es el de punto de acumulación.
Ejemplos:
′
1. (Br (a)) = Br [a]
′
2. (Br [a]) = Br [a]
′
3. (Sr [a]) = Sr [a]
La relación que existe entre el concepto de punto adherente y el de punto de acumulación, es dada
por la siguiente:
Proposición 1.4.9 Sea X ⊆ Rn . a ∈ X ′ si y sólo si a ∈ X − {a}.
Prueba. a ∈ X ′ si y sólo si Bǫ (x) ∩ X − {a} , ∀ ǫ > 0 si y sólo si a ∈ X − {a}.
Teorema 1.4.10 Sea X ⊆ Rn y a ∈ Rn . Las siguientes afirmaciones son equivalentes:
1. a ∈ X ′ .
2. Existe (xm ) ⊆ X − {a} tal que lim xm = a.
m→∞
Prueba. (1 ⇒ 2) Si a ∈ X ′ entonces a ∈ X − {a}, luego existe (xm ) ⊆ X − {a} tal que lim xm = a.
m→∞
(2 ⇒ 3) Dado ǫ > 0, existe m0 ∈ N tal que si m ≥ m0 entonces kxm − ak < ǫ, luego xm ∈ Bǫ (a),
∀ m ≥ m0 , es decir xm : m ≥ m0 ⊆ Bǫ (a) ∩ X. Si xm : m ≥ m0 es finito (Hipótesis Auxiliar),
entonces existe (xkm ) ⊆ (xm ) tal que xk1 = xk2 = xk3 = . . ., luego a = lim xkm = xk1 , lo que es una
m→∞
contradicción. Luego Bǫ (a) ∩ X es infinito.
(3 ⇒ 1) ¡ Trivial !
Corolario. Sea X ⊆ Rn . Si X ′ 6= ∅ entonces X es infinito.
Observación: El recı́proco del corolario anterior es falso, por ejemplo Z es infinito, pero Z′ = ∅. Sin
embargo, aumentando la hipótesis “X es acotado”, obtenemos el recı́proco, eso es lo que dice el siguiente
resultado.
Teorema 1.4.11 (Weierstrass) Si X ⊆ Rn es infinito y acotado entonces X ′ 6= ∅.
Prueba. Desde que X es infinito, existe x : N → X función inyectiva, luego (xm ) ⊆ X es una sucesión
tal que xm 6= xm′ , siempre que m 6= m′ . Como X es acotado, (xm ) es una sucesión acotada, por Bolzano-
Weierstrass, existe (xkm ) ⊆ (xm ) tal que lim xkm = a, luego a ∈ X − {a}, es decir a ∈ X ′ . Concluimos
m→∞
que X ′ 6= ∅.
Análisis Real I 21
Definición 1.5.1 Sea X ⊂ Rn , decimos que los subconjuntos A, B ⊆ X forman una escisión de X si y
sólo si satisfacen las siguientes condiciones:
1. X = A ∪ B.
2. A ∩ B = ∅.
3. A ∩ B = ∅.
Definición 1.5.2 Decimos que X ⊂ Rn es un conjunto conexo si y solo si X sólo admite escisiones
triviales. Un conjunto que no es conexo, es llamado disconexo.
Ejemplos:
Intuitivamente, un conjunto es conexo si y sólo si está “hecho de una sola pieza”. El que un conjunto
admita una escisión no trivial, significa intuitivamente que, por lo menos, está “hecho de dos piezas”.
Existe una manera equivalente de definir el concepto de escisión, la cual nos será de mucha utilidad.
1. X = A ∪ B.
2. A ∩ B = ∅.
3. A y B son abiertos en X.
[
Prueba. Denotemos X = Xλ y tomemos A y B escisión de X, luego X = A ∪ B, A ∩ B = ∅ y A, B
λ∈Λ
son abiertos
\ en X.
Sea a ∈ Xλ , entonces a ∈ X = A ∪ B. Sin pérdida de generalidad, podemos suponer que a ∈ A.
λ∈Λ
Para λ ∈ Λ (fijo, arbitrario), tenemos:
X ∩ A = ∅ ó X ∩ B = ∅. (1.5)
Análisis Real I 23
Existe una manera equivalente de definir componentes conexas, la cual nos será muy útil.
En lo que resta de esta sección, denotaremos por Fx a la familia de todos los conjuntos conexos que
contienen a x.
Prueba. Si Cx ∩ Cy = ∅, entonces no hay nada que probar, supongamos que z ∈ Cx ∩ Cy . Desde que
z ∈ Cx , tenemos Cx ∈ Fz , luego Cx ⊆ Cz . Por otro lado x ∈ Cx ⊆ Cz , luego Cz ∈ Fx , es decir Cz ⊆ Cx .
Concluimos que Cx = Cz . Análogamente se prueba que Cy = Cz , por lo tanto Cx = Cy .
Observación: Sea X ⊂ Rn , en X definimos la siguiente relación:
x ≡ y ⇐⇒ Cx = Cy .
Es fácil probar que “≡” es una relación de equivalencia y X/ ≡ = Cx : x ∈ X}. De esta manera, hemos
probado que todo subconjunto de Rn es descompuesto en sus componentes conexas.
Prueba. Observe que Cx ⊆ C x ∩ X ⊆ C x . Como Cx es conexo, por el teorema 5.1.4, tenemos que
C x ∩ X es conexo, además x ∈ C x ∩ X ⊆ X, luego C x ∩ X ∈ Fx , es decir C x ∩ X ⊆ Cx . Concluimos que
Cx = C x ∩ X y, por lo tanto, Cx es cerrado en X.
Ejemplos:
1. K es compacto.
2. ∀ (xm ) ⊆ K, ∃ (xkm ) ⊆ (xm ) tal que lim xkm = a y a ∈ K.
m→∞
Prueba.(⇒) Sea (xm ) ⊆ K. Como K es acotado, se sigue que (xm ) es acotada, por Bolzano-Wierstrass
∃ (xkm ) ⊆ (xm ) convergente, luego existe a ∈ Rn tal que lim xkm = a. Además a ∈ K = K.
m→∞
(⇐) Si x ∈ K, entonces existe (xm ) ⊆ K tal que lim xm = a, por hipótesis se sigue que a ∈ K, es decir
m→∞
K es cerrado.
Supongamos que K no es acotado (Hipótesis Auxiliar), luego para todo m ∈ N, existe un xm ∈ K tal
que kxm k > m. Por otro lado, desde que (xm ) ⊆ K, por hipótesis, debe existir (xkm ) ⊆ (xm ) tal que
lim xkm = a, luego (xkm ) es una sucesión acotada, es decir, existe una constante positiva C tal que
m→∞
kxkm k ≤ C, para todo m ∈ N. Se sigue que
m ≤ km ≤ kxkm k ≤ C,
para todo m ∈ N, lo cual es una contradicción. Luego K debe ser un conjunto acotado.
Análisis Real I 25
Teorema 1.6.2 (Cantor) Sea {Km }m∈N una colección numerable de subconjuntos compactos no vacı́os
de Rn , tales que
K1 ⊇ K2 ⊇ K3 ⊇ . . . (Colección Encajante).
∞
\
Entonces Km es un conjunto compacto no vacı́o.
m=1
∞
\
Prueba. Claramente Km es compacto, vamos a probar que es no vacı́o. Como Km 6= ∅, entonces
m=1
existe xm ∈ Km , para todo m ∈ N. Podemos considerar (xm ) ⊆ K1 y como K1 es compacto, existe
(xkm ) ⊆ (xm ) tal que lim xkm = a y a ∈ K1 . Afirmo que a ∈ Km , para todo m ∈ N. En efecto, sea
m→∞
m′ ∈ N (fijo, arbitrario), como la colección es encajante, podemos considerar (xkm )m≥m′ ⊆ Km′ , luego
lim xkm = a, lo que implica a ∈ Km′ = Km′ . Esto prueba la afirmación.
m→∞
∞
\
De esta manera a ∈ Km .
m=1
A continuación, daremos una definición equivalente del concepto de conjunto compacto, usando la
noción de cubrimiento de un conjunto.
2. Sea {Aλ }λ∈Λ un cubrimiento de X. Decimos que la subcolección {Aλ }λ∈Λ′ es un subcubrimiento
de {Aλ }λ∈Λ si y sólo si Λ′ ⊆ Λ y {Aλ }λ∈Λ′ es un cubrimiento de X.
3. Decimos que {Aλ }λ∈Λ es un cubrimiento abierto de X si y sólo si {Aλ }λ∈Λ es un cubrimiento de
X y Aλ es abierto, para todo λ ∈ Λ.
Prueba. Sea X ⊆ Rn y {Aλ }λ∈Λ un cubrimiento abierto de X, por el teorema 4.3.2, existe Y subconjunto
numerable denso en X. Denotemos Y = {xi }i∈N ⊆ X. Defino la colección
B = Br (xi ) : r ∈ Q+ , i ∈ N
Prueba. Sea K ⊆ Rn un conjunto compacto y {Aλ }λ∈Λ un cubrimiento abierto de K. Por Lindelöf,
existe {Aλj }j∈N subcubrimiento numerable. Defino
m
[ m
[
Km = K − Aλj = K ∩ Rn − Aλj .
j=1 j=1
Teorema 1.6.5 Sea K ⊆ Rn tal que todo cubrimiento abierto de K admite un subcubrimiento finito.
Entonces K es compacto.
Prueba. Consideremos la familia {B1 (x)}x∈K , claramente esta familia es un cubrimiento abierto de K.
m
S
Por hipótesis, deben existir x1 , x2 , . . . , xm ∈ K tales que K ⊆ B1 (xj ), de aquı́ se deduce fácilmente
j=1
que K es acotado.
Análisis Real I 27
Teorema 1.6.6 Sea {Km }m∈N una colección numerable de subconjuntos compactos no vacı́os de Rn ,
tales que
K1 ⊇ K2 ⊇ K3 ⊇ . . .
∞
T
y sea U ⊆ Rn abierto, tal que Km ⊆ U . Entonces existe m0 ∈ N tal que Km0 ⊆ U .
m=1
∞
Prueba.- Definimos Am = Rn −Km , para todo m ∈ N y A0 = U , afirmo que Am m=0 es un cubrimiento
abierto de Rn . En efecto:
∞
\ ∞
[ ∞
[
Rn − U ⊆ Rn − Km = Rn − K m = Am ,
m=1 m=1 m=1
∞
[ ∞
luego Rn ⊆ Am , lo que prueba la afirmación. En particular Am m=0 es un cubrimiento abierto de
m=0
K1 que por hipótesis, es compacto, luego
Prueba. Es una simple consecuencia de la definición de distancia entre conjuntos. Probaremos 3), las
otras dos son dejadas como ejercicio para el lector: Si a ∈ A1 y b ∈ B1 entonces ka − bk ≥ d(A2 ; B2 ),
luego
inf {ka − bk : a ∈ A1 , b ∈ B1 } ≥ d(A2 ; B2 ),
es decir d(A1 ; B1 ) ≥ d(A2 ; B2 )
Corolario. Se cumplen las siguientes propiedades:
1. Si x ∈ B, entonces d(x; B) = 0.
2. Si B1 ⊆ B2 , entonces d(x; B2 ) ≤ d(x; B1 ).
Prueba. (⇒) Si d(x; B) = 0, entonces inf {kx − bk : b ∈ B} = 0. Dado m ∈ N, existe un bm ∈ B tal que
1
kx − bm k < . De esta manera, hemos construido una sucesión (bm ) ⊆ B tal que lim bm = x, es decir
m m→∞
x ∈ B.
(⇐) Procediendo por contradicción, supongamos que d(x; B) > 0 (Hipótesis Auxiliar). Como x ∈ B,
existe (bm ) ⊆ B tal que lim bm = x, luego existe m1 ∈ N tal que si m ≥ m1 , entonces kx−bm k < d(x; B).
m→∞
Por otro lado, desde que bm1 ∈ B, entonces kx − bm k ≥ d(x; B), lo cual es una contradicción. Por lo
tanto, se debe cumplir que d(x; B) = 0.
Corolario 1. Sea F ⊂ Rn conjunto cerrado, se cumple: d(x; F ) = 0 si y sólo si x ∈ F .
Corolario 2. Sea X ⊂ Rn , x ∈ ∂X si y sólo si d(x; X) = 0 y d(x; Rn − X) = 0.
Prueba. Sabemos que ∂X = X ∩ Rn − X, luego:
x ∈ ∂X ⇔ x ∈ X y x ∈ Rn − X ⇔ d(x; X) = 0 y d(x; Rn − X) = 0.
1
Prueba. Dado m ∈ N, existen xm ∈ K e ym ∈ F tales que d(K; F ) ≤ kxm − ym k < d(K; F ) + , luego
m
hemos construido sucesiones (xm ) ⊆ K e (ym ) ⊆ F tales que lim kxm − ym k = d(K; F ).
m→∞
Por otro lado, desde que (kxm − ym k) ⊆ R es convergente y xm ∈ K es acotada, se tiene que
es decir (ym ) ⊆ F también es acotada, luego por Bolzano-Weierstrass, existen subsucesiones (xkm ) ⊆ (xm )
e (ykm ) ⊆ (ym ), tales que lim xkm = x0 , lim ykm = y0 y x0 ∈ K, y0 ∈ F , luego
m→∞ m→∞
Observaciones:
Prueba. Por hipótesis: Rn − U es cerrado, K es compacto y K ∩ Rn − U = ∅, luego por el corolario 1
d(K; Rn − U ) > 0, tomemos ǫ = d(K; Rn − U ). Afirmo que Bǫ (x) ⊆ U , para todo x ∈ K. En efecto: si
y ∈ Rn − U entonces ky − xk ≥ d(K; Rn − U ) = ǫ, luego y 6∈ Bǫ (x), por lo tanto Rn − U ⊆ Rn − Bǫ (x),
para todo x ∈ K. Esto prueba la afirmación.
S
Notación: Dados X ⊆ Rn y ǫ > 0, el conjunto Bǫ (x) es llamado ǫ−vecindad de X. El corolario 3
x∈X
nos dice que si K es compacto, U es abierto y K ⊆ U , entonces existe una ǫ−vecindad de K contenida
en U .
Corolario 4. Si K ⊂ Rn es un conjunto compacto y U ⊂ Rn es un conjunto abierto, tales que K ⊆ U ,
entonces existe un ǫ > 0 tal que:
x ∈ K, y ∈ Rn , ky − xk < ǫ =⇒ [x, y] ⊆ U.
Prueba. Por el corolario 3, existe un ǫ > 0 tal que Bǫ (x) ⊆ U , para todo x ∈ K, luego para x ∈ K,
y ∈ Rn , con ky − xk < ǫ, tomemos z ∈ [x, y], luego existe t ∈ [0, 1] tal que z = (1 − t)x + ty, por lo tanto
1
Prueba. Dado m ∈ N, existen xm , ym ∈ K tales que diam(K) − m < kxm − ym k ≤ diam(K), luego
hemos construido sucesiones (xm ), (ym ) ⊆ K tales que lim kxm − ym k = diam(K).
m→∞
Por otro lado, desde que K es compacto, se tiene que existen subsucesiones (xkm ) ⊆ (xm ) e (ykm ) ⊆ (ym ),
tales que lim xkm = x0 , lim ykm = y0 y x0 , y0 ∈ K, luego
m→∞ m→∞
kx − yk ≤ kx − ak + ka − yk = 2r,
Prueba. Como A ⊆ A, se sigue que diam(A) ≤ diam(A). Dados a, b ∈ A, existen (am ), (bm ) ⊆ A tales
que lim am = a y lim bm = b. Por otro lado kam − bm k ≤ diam(A), para todo m ∈ N, tomando lı́mite
m→∞ m→∞
tenemos ka − bk ≤ diam(A) y desde que a, b ∈ A eran arbitrarios, se sigue que diam(A) ≤ diam(A).
Ejemplo. diam (Br (a)) = 2r.
A continuación, ofrecemos un resultado que perfecciona el Teorema 1.6.2:
Teorema 1.7.9 (Teorema de Cantor para conjuntos encajantes cerrados) Sea {Fm }m∈N una
colección numerable de subconjuntos cerrados no vacı́os de Rn , tales que
1. F1 ⊇ F2 ⊇ F3 ⊇ . . .
2. F1 es acotado.
3. lim diam(Fm ) = 0.
m→∞
∞
\
Entonces Fm es un conjunto unitario.
m=1
Análisis Real I 32
Definición 1.7.3 Sea X ⊆ Rn y {Aλ }λ∈Λ un cubrimiento de X. Decimos que ℓ > 0 es un número de
Lebesgue de X asociado al cubrimiento {Aλ }λ∈Λ si y sólo si para todo B ⊆ X con diam(B) < ℓ, se tiene
que existe un λ0 ∈ Λ tal que B ⊆ Aλ0 .
Observaciones:
El siguiente resultado nos da una condición necesaria par que exista el número de Lebesgue:
Prueba.- Procediendo por contradicción, supongamos que existe K ⊆ Rn conjunto compacto y existe
{Aλ }λ∈Λ un cubrimiento abierto de K que no admita un número de Lebesgue (Hipótesis Auxiliar), luego
para todo ℓ > 0, existe Bℓ ⊆ K, con diam(Bℓ ) < ℓ tal que Bℓ 6⊆ Aλ , para todo λ ∈ Λ. Discretizando,
1
tenemos que para todo m ∈ N, existe Bm ⊆ K, con diam(Bm ) < tal que Bℓ 6⊆ Aλ , para todo λ ∈ Λ.
m
Tomando xm ∈ Bm ⊆ K tenemos que (xm ) ⊆ K y desde que K es compacto, existe (xkm ) ⊆ (xm )
tal que lim xkm = x0 y x0 ∈ K. Luego, existe λ0 ∈ Λ tal que x0 ∈ Aλ0 y por tanto existe ǫ > 0
m→∞
tal que Bǫ (x0 ) ⊆ Aλ0 . Tenemos que existe m1 ∈ N tal que m ≥ m1 entonces kxkm − x0 k < 2ǫ .
1 ǫ
Además, como lim mk = +∞ entonces existe m2 ∈ N tal que si m ≥ m2 entonces < . Tomando
m→∞ km 2
Análisis Real I 33
M = max{m1 , m2 } tenemos
ǫ
y ∈ BkM ⇒ ky − x0 k ≤ ky − xkM k + kxkM − x0 k < diam(BkM ) + <ǫ
2
Concluimos que y ∈ Bǫ (x0 ) y por tanto BkM ⊆ Bǫ (x0 ) ⊆ Aλ0 , lo cual es una contradicción.
1.8 Ejercicios
Capı́tulo 2
lim f (x) = L ⇐⇒ ∀ ǫ > 0, ∃ δ = δ(ǫ) > 0 tal que si x ∈ (X − {a}) ∩ Bδ (a) entonces f (x) ∈ Bǫ (L)
x→a
⇐⇒ ∀ ǫ > 0, ∃ δ = δ(ǫ) > 0 tal quef ((X − {a}) ∩ Bδ (a)]) ⊆ Bǫ (L)
luego
1. lim f (x) = L
x→a
Demostración: (1 ⇒ 2) Sea (xk ) ⊆ X − {a} tal que lim xk = a. Dado ǫ > 0, por hipótesis ∃ δ > 0 tal
k→∞
que
34
Análisis Real I 35
(2 ⇒ 1) Supongamos que lim f (x) 6= L (Hip. Aux.), entonces ∃ ǫ0 > 0, ∀ δ > 0, ∃ xδ ∈ X tal que
x→a
1
0 < kxδ − ak < δ y kf (xδ ) − Lk ≥ ǫ0 , tomando δ = , donde k ∈ N tenemos que
k
1
∃ xk ∈ X tal que kxk − ak < y kf (xk ) − Lk ≥ ǫ0 .
k
De ésta manera, hemos construido una sucesión (xk ) ⊆ X−{a} tal que lim xk = a y kf (xk )−Lk ≥ ǫ0 ,
k→∞
∀ k ∈ N, luego
0 = lim kf (xk ) − Lk ≥ ǫ0
k→∞
lo cual es una contradicción.
Corolario. (Unicidad del lı́mite) Sean X ⊆ Rm , f : X → Rn y a ∈ X ′ . Si lim f (x) = L y
x→a
lim f (x) = L′ entonces L = L′ .
x→a
Prueba. Es consecuencia directa del Teorema anterior y la unicidad del lı́mite de sucesiones.
m n n
Sea X ⊆ R y f : X → R . Dado x ∈ X, tenemos que f (x) ∈ R , luego πi (f (x)) ∈ R, ∀ 1 ≤ i ≤ n
(en donde πi es la i-ésima proyección). Denotemos fi (x) = πi (f (x)), para todo 1 ≤ i ≤ n. De esta
manera la función f puede ser representada como una n-upla de funciones f = (f1 , f2 , . . . , fn ), donde
cada fi está definida en X y toma valores reales. Las fi son llamadas funciones coordenadas de f . El
siguiente Teorema nos dice que hallar el lı́mite de una función con valores en Rn es equivalente a hallar
el lı́mite de sus n funciones coordenadas.
1. lim f (x) = L.
x→a
2. lim fi (x) = Li , ∀ 1 ≤ i ≤ n.
x→a
Prueba. (1 ⇒ 2) Dado ǫ > 0, existe un δ > 0 tal que si x ∈ X y 0 < kx−ak < δ, entonces kf (x)−Lk < ǫ,
luego si x ∈ X y 0 < kx − ak < δ entonces
|fi (x) − Li | = |πi (f (x)) − πi (L)| = |πi (f (x) − L)|
≤ kf (x) − Lk < ǫ
Análisis Real I 36
(2 ⇒ 1) Sea ǫ > 0, para i ∈ {1, 2, . . . , n} existe un δi > 0 tal que si i ∈ X y 0 < kx − ak < δi , entonces
ǫ
|fi (x) − Li | < √ . Considero δ = min{δ1 , δ2 , . . . , δn } > 0, luego si x ∈ X y 0 < kx − ak < δ, tenemos
n
v v
u n u n
uX uX ǫ2
kf (x) − Lk = t |fi (x) − Li |2 < t =ǫ
i=1 i=1
n
1. lim (f + g)(x) = L + M.
x→a
2. lim (f − g)(x) = L − M.
x→a
Prueba. Es consecuencia del corolario al Teorema 2.1.1 y del álgebra del lı́mite de sucesiones (ver
Capı́tulo 1). Sin embargo como muestra, probaremos una de ellas:
1.) (xk ) ⊆ X − {a} tal que lim xk = a =⇒ lim f (xk ) = L y lim g(xk ) = M . Luego
k→∞ k→∞ k→∞
De la teorı́a de funciones reales de variable real, sabemos que el lı́mite del producto de una función
que tiende a cero por otra acotada, es cero. Trataremos de generalizar este resultado a funciones de varias
variables reales, para ellos necesitamos del concepto de función bilineal.
Definición 2.1.2 Una función ϕ : Rm × Rn → Rp es llamada bilineal si y sólo si, satisface las dos
propiedades siguientes:
Una propiedad que cumple las funciones bilineales es que son acotadas, más especı́ficamente tenemos
m X
X n m X
X n
kϕ(x, y)k = k xi yj ϕ(ei , ej )k ≤ |xi ||yj |kϕ(ei , ej )k
i=1 j=1 i=1 j=1
m X
X n m X
X n
′
≤ C |xi ||yj | ≤ C ′ kxkkyk = C ′ mnkxkkyk
i=1 j=4 i=1 j=1
Prueba. Como ϕ es bilineal, por la Proposición anterior, ∃ C1 > 0 tal que: kϕ(x, y)k ≤ C1 kxk kyk,
∀ x ∈ Rm , ∀ y ∈ Rn .
Como g es acotada, ∃ C2 > 0 tal que: kg(x)k ≤ C2 , ∀ x ∈ X. Luego:
por lo tanto
lim kϕ(f (x), g(x))k ≤ lim C1 C2 kf (x)k = 0
x→a x→a
lo cual demuestra el Teorema.
n ′
Corolario. Sean X ⊆ R , a ∈ X , f : X → R con lim f (x) = 0 y g : X → R función acotada, entonces
x→a
lim f (x)g(x) = 0.
x→a
Análisis Real I 38
|x||y| x2 + y 2 + z 2
|g(x, y, z)| = ≤ =1
x2 + y 2 + z 2 x2 + y 2 + z 2
luego g es acotada.
Por el Teorema anterior, concluimos que lim h(x, y, z) = 0
(x,y,z)→θ
x 6= a =⇒ f (x) 6= b (2.3)
Prueba: Dado ǫ > 0, existe un η > 0 tal que y ∈ Y y 0 < ky − bk < η, entonces
Por otro lado, como η > 0, existe un δ > 0 tal que x ∈ X y 0 < kx − ak < δ, entonces
De (2.3), (2.4) y (2.5) tenemos que si x ∈ X y 0 < kx − ak < δ, entonces f (x) ∈ Y y 0 < kf (x) − bk < η,
luego kg(f (x)) − ck < ǫ, es decir hemos probado que lim (g ◦ f )(x) = c
x→a
Observación: La condición (2.3) es necesaria para la validez del Teorema anterior. En efecto, considere
las funciones f, g : R → R definidas por f (x) = 0 y
0, si y 6= 0
g(y) =
1, si y = 0
A = {t ∈ R : a + tu ∈ X} ⊆ R
claramente A 6= ∅ y 0 ∈ A′ . Defino h : A → Rm como h(t) = a + tu. Se sigue que h(A) ⊆ X, lim h(t) = a
t→0
y t 6= 0 =⇒ h(t) 6= a. Luego, por el Teorema 2.1.6, lim f (h(t)) = b.
t→0
xy
Ejemplo. Sea f : R2 − {θ} → R definida por f (x, y) = . ¿Existe lim f (x, y)?
x2 + y2 (x,y)→(0,0)
t2 u 1 u 2
lim f (θ + tu) = lim f (tu1 , tu2 ) = lim
t→0 t→0 t→0 t2 (u2
1 + u2 )
2
u1 u2 u1 u2
= lim 2 = 2
t→0 u1 + u22 u 1 + u2
2
Observe que cuando u = e1 , lim f (θ+tu) = 0 mientras que si tomamos u = (1, 1), entonces lim f (θ+tu) =
t→0 t→0
1
. Por el Corolario anterior, concluimos que no existe el lim f (x, y).
2 (x,y)→(0,0)
Finalizamos la sección, probando que el lı́mite “respeta” la relación ≤.
Prueba. Supongamos que L > M (Hipótesis Auxiliar), luego L − M > 0 y por la definición de lı́mite,
tenemos:
L−M
∃ δ1 > 0 / x ∈ X y 0 < kx − ak < δ1 =⇒ |f (x) − L| <
2
L+M
=⇒ < f (x) (2.6)
2
L−M
∃ δ2 > 0 / x ∈ X y 0 < kx − ak < δ2 =⇒ |g(x) − M | <
2
L+M
=⇒ g(x) < (2.7)
2
L+M
Sea δ = min{δ1 , δ2 }, x ∈ X y 0 < kx − ak < δ, de (2.6) y (2.7) tenemos g(x) < < f (x), lo cual
2
contradice la hipótesis.
Análisis Real I 40
Observaciones:
Como hicimos con el lı́mite de funciones, podemos caracterizar la continuidad de funciones usando
sucesiones.
1. f es continua en a.
2. (xk ) ⊆ X tal que lim xk = a =⇒ lim f (xk ) = f (a).
k→∞ k→∞
De (2.8) y (2.9) tenemos que k ≥ k0 =⇒ xk ∈ X y kxk − ak < δ =⇒ kf (xk ) − f (a)k < ǫ. Por lo tanto
lim f (xk ) = f (a).
x→a
(2 ⇒ 1) Supongamos que f no es continua en a (Hip. Aux.), entonces ∃ ǫ0 > 0, ∀ δ > 0, ∃ xδ ∈ X tal que
1
kxδ − ak < δ y kf (xδ ) − f (a)k ≥ ǫ0 , tomando δ = , donde k ∈ N tenemos que
k
1
∃ xk ∈ X tal que kxk − ak < y kf (xk ) − f (a)k ≥ ǫ0 .
k
De ésta manera, hemos construido una sucesión (xk ) ⊆ X tal que lim xk = a y satisface kf (xk )−f (a)k ≥
k→∞
ǫ0 , ∀ k ∈ N, luego, por hipótesis
0 = lim kf (xk ) − f (a)k ≥ ǫ0
k→∞
kf k(x) = kf (x)k, hf, gi (x) = hf (x), g(x)i y d(f, g)(x) = d(f (x), g(x)),
para todo x ∈ X.
La continuidad de una función vectorial es caracterizada por la continuidad de sus funciones coorde-
nadas.
1. f es continua en a.
2. fi son continuas en a, ∀ 1 ≤ i ≤ n.
Demostración: ¡Ejercicio!.
Corolario. Sea X ⊆ Rm y f : X → Rn g : X → Rp y definamos φ : X → Rn+p como φ(x) = (f (x), g(x)),
∀ x ∈ X. Se cumple:
φ es continua en a ∈ X ⇐⇒ f y g son continuas en a.
Análisis Real I 42
Demostración: ¡Ejercicio!
Finalizamos la sección, demostrando que la composición de dos funciones continuas es continua.
Por otro lado, como η > 0, ∃ δ > 0 tal que x ∈ X y kx − ak < δ, entonces
De (2.10) y (2.11) tenemos que si x ∈ X y kx − ak < δ, entonces f (x) ∈ Y y kf (x) − f (a)k < η, luego
kg(f (x)) − g(f (a))k < ǫ, es decir g ◦ f es continua en a.
Un concepto muy relacionado al de función continua es el de función de Lipschitz.
Ejemplos:
Existe una relación entre los conceptos de función continua y función Lipschitz:
Prueba: Por hipótesis, existe K > 0 tal que kf (x)−f (y)k ≤ kx−yk, ∀ x, y ∈ X. Sea a ∈ X, dado ǫ > 0,
ǫ
existe δ = > 0 tal que si x ∈ X y kx − ak < δ, entonces kf (x) − f (a)k ≤ K < kx − ak < Kδ = ǫ.
K
Por lo tanto f es continua en a, ∀ a ∈ X.
Observaciones:
1. Dado X ⊆ Rm , si denotamos
C(X; Rn ) = {f : X → Rn / f es continua en X}
En los ejercicios al final del capı́tulo, el lector encontrará más propiedades de las funciones Lipschitz.
Observación: Para que una función sea uniformemente continua, el δ sólo depende del ǫ y no de los
puntos x, y ∈ X.
Las dos proposiciones siguientes, relaciona el concepto de continuidad uniforme con los conceptos de
función Lipschitz y función continua.
Prueba: Por hipótesis, existe un K > 0 tal que kf (x) − f (y)k ≤ kx − yk, ∀ x, y ∈ X.
ǫ
Sea ǫ > 0, tomando δ = > 0, se cumple
K
x, y ∈ X y kx − yk < δ ⇐⇒ kf (x) − f (y)k ≤ K kx − yk < Kδ = ǫ
Prueba. Sea x0 ∈ X (fijo, arbitrario), por hipótesis, dado ǫ > 0, ∃ δ > 0 tal que si x, y ∈ X y kx−yk < δ,
entonces kf (x) − f (y)k < ǫ. Haciendo y = x0 , tenemos:
es decir, f es continua en x0 .
Observación: Dado X ⊆ Rm , denotamos
Un ejercicio interesante para el lector, es probar que los contenidos pueden ser estrictos, es decir, exis-
ten funciones continuas que no son uniformemente continuas y existen funciones uniformemente continuas
que no son Lipschitz.
A continuación probaremos que la composición de dos funciones uniformemente continuas es uni-
formemente continua.
Prueba Como g es uniformemente continua, dado ǫ > 0, ∃ η > 0 tal que si y, y ′ ∈ Y y ky − y ′ k < η,
entonces kg(y) − g(y ′ )k < ǫ. Por otro lado, como f es uniformemente continua en X y η > 0, ∃ δ > 0
tal que si x, x′ ∈ X y kx − x′ k < δ, entonces kf (x) − f (x′ )k < η. Luego ∃ δ > 0 tal que si x, x′ ∈ X y
kx − x′ k < δ =⇒ f (x), f (x′ ) ∈ Y y kf (x) − f (x′ )k < η =⇒ kg(f (x)) − g(f (x′ ))k < ǫ, es decir, g ◦ f es
uniformemente continua en X.
El concepto de función uniformemente continua también puede ser caracterizado por sucesiones.
1. f es uniformemente continua en X.
Análisis Real I 45
2. Para todo par de sucesiones (xk ), (yk ) ⊆ X tales que lim kxk − yk k = 0, se tiene que lim kf (xk ) −
k→∞ k→∞
f (yk )k = 0.
Sean (xk ), (yk ) ⊆ X tales que lim kxk − yk k = 0, luego ∃ k0 ∈ N tal que
k→∞
(2 ⇒ 1) Supongamos que f no es uniformemente continua en X (Hip. Aux.), luego ∃ ǫ0 > 0 tal que
∀ δ > 0, existen xδ , yδ ∈ X tales que
De ésta manera, hemos construido dos sucesiones (xk ), (yk ) ⊆ X tales que lim kxk − yk k = 0 y
k→∞
satisface kf (xk ) − f (yk )k = 0. Luego
f: R −→ R
x 7−→ f (x) = cos x2
lo cual implica que lim |xk −yk | = 0. Si f fuera uniformemente continua (Hipótesis Auxiliar), el Teorema
k→∞
2.3.4 implica que
Prueba: Por hipótesis, dado ǫ > 0, ∃ δ > 0 tal que si x, y ∈ X y kx− yk < δ, entonces kf (x)− f (y)k < ǫ.
Como (xk ) ⊆ X es una sucesión de Cauchy, existe un k0 ∈ N tal que si j, k ≥ k0 , entonces kxj − xk k < δ,
luego kf (xj ) − f (xk )k < ǫ, es decir (f (xk )) ⊆ Rn es una sucesión de Cauchy.
Observación: Las funciones continuas no necesariamente llevan sucesiones de Cauchy en sucesiones de
1
Cauchy. Por ejemplo, sea X = ]0, +∞[ , xk = , ∀ k ∈ N y
k
f: X −→ R
x 7−→ f (x) = 1/x
Prueba Sea a ∈ X ′ , entonces existe (ak ) ⊆ X − {a} tal que lim ak = a. Como (ak ) es convergente
k→∞
entonces es una sucesión de Cauchy y por la Proposición anterior (f (ak )) ⊆ Rn es de Cauchy, luego existe
L ∈ Rn tal que lim f (ak ) = L. Vamos a demostrar que lim f (x) = L.
k→∞ x→a
Sea (xk ) ⊆ X −{a} tal que lim xk = a, entonces lim kxk −ak k = 0, luego lim kf (xk )−f (ak )k = 0,
k→∞ k→∞ k→∞
por lo tanto
lim f (xk ) = lim [(f (xk ) − f (ak )) + f (ak )] = L.
k→∞ k→∞
Análisis Real I 47
f : R2 − {θ} −→ R
xy
(x, y) 7−→ f (x, y) =
x2 + y 2
Supongamos que f es uniformemente continua en R2 −{θ} (Hipótesis Auxiliar). Como θ ∈ (R2 −{θ})′ ,
el Teorema anterior implica que existe lim f (x, y), lo cual contradice el resultado obtenido en el
(x,y)→(0,0)
ejemplo de la Sección 2.1. Concluimos que f no es uniformemente continua en R2 − {θ}.
Otro resultado importante sobre funciones uniformemente continuas es que ellas pueden ser extendidas
a la cerradura de su dominio.
F : X̄ −→ Rn (
f (x), si x ∈ X
x 7−→ F (x) = lim f (z), si x ∈ X̄ − X
z→x
Claramente F = f . Vamos a probar que F es uniformemente continua en X̄. Sea ǫ > 0, como f es
X̄
ǫ
uniformemente continua en X, ∃ δ > 0 tal que si x, y ∈ X y kx − yk < δ, entonces kf (x) − f (y)k < .
2
Por otro lado, sean x, y ∈ X̄, entonces existen sucesiones (xk ), (yk ) ⊆ X tales que lim xk = x y
k→∞
δ δ
lim yk = y. Como δ > 0, existe k0 ∈ N tal que si k ≤ k0 entonces kxk − xk < y kyk − yk < .
k→∞ 3 3
δ
Si kx − yk < y k ≥ k0 entonces
3
kxk − yk k ≤ kxk − xk + kx − yk + ky − yk k < δ,
luego
ǫ
kf (xk ) − f (yk )k < , ∀ k ≥ k0 .
2
Análisis Real I 48
Por lo tanto
kF (x) − F (y)k = k lim f (z) − lim f (z)k = k lim f (xk ) − lim f (yk )k
z→x z→y k→∞ k→∞
ǫ
= lim kf (xk ) − f (yk )k ≤ < ǫ
k→∞ 2
δ δ
Hemos demostrado que dado un ǫ > 0, existe un > 0 tal que si x, y ∈ X̄ y kx − yk < entonces
3 3
kF (x) − F (y)k < ǫ, es decir, F es uniformemente continua en X̄.
Finalizamos la sección, con el siguiente resultado
Una función continua es caracterizada por el hecho de que la preimágen de un conjunto abierto es también
un conjunto abierto. Más especı́ficamente, tenemos el siguiente:
1. f es continua en X.
2. Si V es un conjunto abierto en Y , entonces f −1 (V ) es un conjunto abierto en X.
(2 ⇒ 1) Tomemos a ∈ X (fijo, arbitrario). Dado ǫ > 0, Bǫ (f (a)) ∩ Y es abierto en Y luego, por hipótesis,
f −1 (Bǫ (f (a)) ∩ Y ) es abierto en X. Como a ∈ f −1 (Bǫ (f (a)) ∩ Y ), nuevamente por la Proposición 1.3.5,
existe un δ > 0 tal que Bδ (a) ∩ X ⊆ f −1 (Bǫ (f (a)) ∩ Y ), luego:
x ∈ X y kx − ak < δ =⇒ x ∈ Bδ (a) ∩ X =⇒ x ∈ f −1 [Bǫ (f (a)) ∩ Y ]
=⇒ f (x) ∈ Bǫ (f (a)) ∩ Y =⇒ kf (x) − f (a)k < ǫ
luego f es continua en a, ∀ a ∈ X.
Corolario 1. Sea f : Rn → R función continua y a ∈ R entonces el conjunto
A = {x ∈ Rn : f (x) < a}
es abierto.
Prueba. Primeramente, observe que:
x ∈ A ⇐⇒ f (x) < a ⇐⇒ f (x) ∈ ] − ∞, a[⇐⇒ x ∈ f −1 ( ] − ∞, a[) .
Ahora, como f es continua y ] − ∞, a[ es abierto, entonces f −1 ( ] − ∞, a[) es abierto. Concluimos que A
es abierto.
Corolario 2. Sean f1 , f2 , . . . , fk : Rn → R funciones continuas y a1 , a2 , . . . , ak ∈ R. Entonces el
conjunto
A = {x ∈ Rn : f1 (x) < a1 , f2 (x) < a2 , . . . , fk (x) < ak }
es abierto.
Prueba. Ejercicio.
m n m+n
Corolario 3. Si A ⊆ R y B ⊆ R son conjuntos abiertos, entonces A × B ⊆ R es abierto.
Prueba. Consideremos las funciones
p 1 : Rm × Rn −→ Rm
(x, y) 7−→ p1 (x, y) = x
y
p 2 : Rm × Rn −→ Rn
(x, y) 7−→ p2 (x, y) = y
Claramente p1 y p2 son funciones continuas en Rm × Rn = Rm+n . Además, observe que:
(x, y) ∈ p1−1 (A) ∩ p−1
2 (B) =⇒ p1 (x, y) ∈ A y p2 (x, y) ∈ B
=⇒ x ∈ A y x ∈ B =⇒ (x, y) ∈ A × B
es decir, p−1 −1
1 (A) ∩ p2 (B) = A × B. Como A ⊆ R
m
y B ⊆ Rn son conjuntos abiertos, entonces
−1 −1
p1 (A), p2 (B) ⊆ R m+n −1
son abiertos, luego A × B = p1 (A) ∩ p−1
2 (B) es un conjunto abierto.
Observación: Sean X ⊆ Rm , f : X → Rn una función continua en X y U ⊆ X un conjunto abierto en
X, entonces f (U ) no necesariamente es abierto en Y = f [X]. En efecto, considérese la función
f: R −→ R
−x, si x < 0
x 7 → f (x) =
− 0, si 0 ≤ x ≤ 1
x − 1, si x > 1
Análisis Real I 50
Prueba. Sea U ⊆ Rm un conjunto abierto. Dado ai ∈ πi [U ] (1 ≤ i ≤ m), existe a ∈ U tal que πi (a) = ai .
Como U es abierto, existe un r > 0 tal que Br (a) ⊆ U , luego πi (Br (a)) ⊆ πi (U ), lo cual implica que
]ai − r, ai + r[ ⊆ πi (U ), es decir, πi (U ) es abierto.
Sabemos que las funciones continuas no necesariamente son abiertas, ¿Qué podemos decir con relación
al recı́proco? es decir si f es una función abierta entonces ¿f es continua? Dejamos esta interrogante
como ejercicio para el lector.
1. f es continua en X.
2. Si F es un conjunto cerrado en Y , entonces f −1 (F ) es un conjunto cerrado en X.
B = {x ∈ Rm : f (x) ≤ a}
es un conjunto cerrado.
Prueba. Ejercicio.
m
Corolario 2. Sean f1 , f2 , . . . , fk : R → R funciones continuas y a1 , a2 , . . . , ak ∈ R. Entonces
es un conjunto cerrado.
Prueba. Ejercicio.
Corolario 3. Sean f1 , f2 , . . . , fk : Rm → R funciones continuas y a1 , a2 , . . . , ak ∈ R. Entonces
B = {x ∈ Rm : f1 (x) = a1 , f2 (x) = a2 , . . . , fk (x) = ak }
es un conjunto cerrado.
Prueba. Ejercicio.
Corolario 4. Si F ⊆ Rm y G ⊆ Rn son conjuntos cerrados, entonces F × G ⊆ Rm+n es cerrado.
Prueba. Ejercicio.
Corolario 5. Sea X ⊆ Rm y f : X → Rn función continua entonces el gráfico de f , definido como
G(f ) = {(x, y) ∈ X × Rn : y = f (x)}
es cerrado en X × Rn .
Prueba. Consideremos la función
ϕ : X × Rn −→ Rn
(x, y) 7−→ ϕ(x, y) = y − f (x)
Observe que ϕ = p2 − f ◦ p1 , donde p1 y p2 son las funciones definidas en la demostración del Corolario 3
al Teorema 2.4.1 se sigue que ϕ es continua y desde que g(f ) = ϕ−1 (0), concluimos que G(f ) es cerrado
en X × Rn .
Observación: Sean X ⊆ Rm , f : X → Rn una función continua en X y denotemos Y = f (X). Si
F ⊆ X un conjunto cerrado en X, entonces no necesariamente se cumple que f (F ) es cerrado en Y . En
efecto, sea F = {(x, y) ∈ R2 : xy = 1}. Por el Corolario 3, sabemos que F es cerrado. Consideremos la
proyección
π1 : R2 −→ R
(x, y) 7−→ π1 (x, y) = x
Sabemos que π1 es continua en R2 , sin embargo π1 (F ) = R − {0} no es un conjunto cerrado en R.
Las funciones que llevan conjuntos cerrados en conjuntos cerrados, también reciben un nombre espe-
cial.
Prueba. Sea x ∈ X, por la densidad de Y en X, existe (yk ) ⊆ Y tal que lim yk = x. Como f y g son
k→∞
funciones continuas, tenemos:
Las funciones continuas lleva conjuntos conexos en conjuntos conexos. Más especı́ficamente, tenemos el
siguiente resultado:
Prueba. Sea A, B una escisión de f (X), es decir f (X) = A ∪ B, A ∩ B = ∅ y A, B son conjuntos abiertos
en f (X). Se cumple:
X = f −1 (A) ∪ f −1 (B).
• Supongamos que f −1 (A) ∩ f −1 (B) 6= ∅ (Hipótesis Auxiliar), entonces existe x ∈ f −1 (A) ∩ f −1 (B),
luego f (x) ∈ A y f (x) ∈ B, es decir f (x) ∈ A ∩ B = ∅, lo cual es una contradicción. Por lo tanto:
f −1 (A) ∩ f −1 (B) = ∅.
• Como A y B son abiertos en f (X) y f es continua, se sigue que f −1 (A) y f −1 (B) son abiertos en
X.
Por lo tanto f −1 (A) y f −1 (B) forman una escisión de X y como X es conexo concluimos que f −1 (A) =
∅ ó f −1 (B) = ∅. De aquı́ se deduce que A = ∅ ó B = ∅. Luego f (X) es conexo.
Observación: La preimagen por una función continua de un conjunto conexo, no necesariamente es
conexa. En efecto, considere la función continua
f: R −→ R
x 7−→ f (x) = x2
El intervalo I = [1, 4] es conexo, sin embargo f −1 (I) = [−2, −1] ∪ [1, 2] es disconexo.
El siguiente resultado, caracteriza a los conjuntos conexos de la recta:
Análisis Real I 53
1. El cı́rculo unitario
S 1 = {(x, y) ∈ R2 : x2 + y 2 = 1}
es un conjunto conexo. En efecto, considérese la función continua
f : [0, 2π] −→ S 1
t 7−→ f (t) = (cos t, sen t)
Observación: El ejemplo anterior nos dice que no existe ninguna función f : S 1 → R que sea continua
e inyectiva.
Finalizamos la sección con un resultado que nos dice que si un conjunto conexo intersecta a otro
conjunto y a su complemento, entonces necesariamente debe intersectar a su frontera.
Análisis Real I 54
f: C −→ R
z 7−→ f (x) = d(x, X) − d(x, Rn − X)
en donde d(x, X) denota la distancia del punto x al conjunto X. Tenemos que C es conexo y que f es
una función continua, además
y
f (b) = d(b, X) − d(b, Rn − X) = d(b, X) > 0.
Luego, por el Teorema del valor intermedio, existe un c ∈ C tal que f (c) = 0, luego d(c, X) = d(c, Rn −
X) = 0 y esto implica que c ∈ X̄ y c ∈ Rn − X, es decir, c ∈ ∂X, por lo tanto C ∩ ∂X 6= ∅.
Las funciones continuas llevan conjuntos compactos en conjuntos compactos. Más especı́ficamente, ten-
emos el siguiente resultado:
Prueba. Si (yk ) ⊆ f (K), entonces existe (xk ) ⊆ K tal que yk = f (xk ), ∀ k ∈ N. Como K es compacto,
existe (xjk ) ⊆ (xk ) tal que lim f (xjk ) = f (x) y f (x) ∈ f (K). Hemos probado que existe (yjk ) ⊆ (yk )
k→∞
tal que lim yjk = f (x) y f (x) ∈ f (K), es decir, f (K) es compacto.
k→∞
1. f : ϕ(K) → Rp es continua.
2. f ◦ ϕ : K → Rp es continua.
Prueba. Procediendo por contradicción, supongamos que ∃ ǫ0 tal que ∀ δ > 0, ∃ tδ ∈ K y ∃ xδ ∈ X tales
1
que kxδ − x0 k < δ y k f (tδ , xδ ) − f (tδ , x0 )k ≥ ǫ0 (Hipótesis Auxiliar). Haciendo δ = , donde k ∈ N, se
k
1
obtiene sucesiones (tk ) ⊆ K y (xk ) ⊆ X tales que kxk − x0 k < y k f (tk , xk ) − f (tk , x0 )k ≥ ǫ0 , ∀ k ∈ N.
k
Como K es compacto, existe (tjk ) ⊆ (tk ) tal que lim tjk = t0 y t0 ∈ K.
k→∞
1
Por otro lado kxk − x0 k < implica que lim xk = x0 , luego lim xjk = x0 , por lo tanto
k k→∞ k→∞
Se sigue que
ǫ0 ≤ kf (tjk , xjk ) − f (tjk , x0 )k, ∀ k ∈ N.
Tomando lı́mite
ǫ0 ≤ lim kf (tjk , xjk ) − f (tjk , x0 )k = 0,
k→∞
lo cual es una contradicción.
Ejemplo: Sea f : [a, b] × X → R una función continua, donde X ⊆ R. Definamos:
ϕ: X −→ R
Rb
x 7−→ ϕ(x) = a f (t, x)dt
Análisis Real I 56
Afirmo que ϕ es una función continua. En efecto, sea x0 ∈ X (fijo, arbitrario), se cumple:
Z Z b Z b
b
|ϕ(x) − ϕ(x0 )| = f (t, x)dt − f (t, x0 )dt ≤ |f (t, x) − f (t, x0 )|dt
a a a
Por el Teorema anterior, dado ǫ > 0, existe un δ > 0 tal que si t ∈ [a, b], x ∈ X y kx − x0 k < δ entonces
Z b
ǫ ǫ
|f (t, x) − f (t, x0 )| < , luego |ϕ(x) − ϕ(x0 )| < dt = ǫ, siempre que (t, x) ∈ [a, b] × X y
b−a a b − a
kx − x0 k < δ. Por lo tanto, hemos probado que ∀ ǫ > 0, ∃ δ > 0 tal que x ∈ X y kx − x0 k < δ implica
|ϕ(x) − ϕ(x0 )| < ǫ, es decir, ϕ es continua.
Teorema 2.7.3 (Urysohn) Si F1 , F2 ⊆ Rm son dos conjuntos cerrados disjuntos entonces existen con-
juntos abiertos disjuntos U1 , U2 ⊆ Rm tales que F1 ⊆ U1 y F2 ⊆ U2 .
f : Rm −→ R
d(x, F1 )
x 7−→ f (x) =
d(x, F1 ) + d(x, F2 )
Prueba. De la hipótesis se desprende que F (K) es compacto y f (K) ⊆ U . Por el Corolario 3 al Teorema
1.7.4, existe ǫ > 0 tal que Bǫ (f (x)) ⊆ U ; para todo x ∈ K. Por otro lado, como f es uniformemente
continua en K entonces existe un δ > 0 tal que si x, y ∈ K y kx − yk < δ entonces kf (x) − f (y)k < ǫ.
Sea T ⊆ K con diam (T ) < δ. Si x0 , x ∈ T entonces kx − x0 k < δ luego kf (x) − f (x0 )k < ǫ, es decir
f (x) ∈ Bǫ (f (x0 )) ⊆ U . Esto prueba que f (T ) ⊆ Bǫ (f (x0 )).
Para finalizar la sección, observemos que la intersección de dos conjuntos conexos, no necesariamente
es conexa. En efecto, considere A = S 1 y B = ∂B1 (1, 0), se sigue que A y B son conjuntos conexos en
R2 , pero A ∩ B = {p0 , p1 } es disconexo.
El siguiente resultado establece condiciones necesarias para que la intersección de conjuntos conexos
sea conexa.
Teorema 2.7.5 Sea {Ki }i∈N una familia numerable de conjuntos compactos y conexos tales que
K1 ⊇ K2 ⊇ K3 ⊇ · · ·
∞
\
Entonces Ki es conexo.
i=1
Análisis Real I 57
∞
\
Prueba. Denotemos K = Ki y consideremos A, B una escisión de K, entonces K = A∪B, A∩B = ∅
i=1
y A, B son abiertos en K.
Como A = K − B y B = K − A entonces A, B con cerrados en K, luego A y B son cerrados. Por
Urysohn, existen abiertos disjuntos U, V ⊆ Rn tales que A ⊆ U y B ⊆ V . Luego W = U ∪ V es abierto
y K ⊆ W . Por el Teorema 1.6.6, existe un i0 ∈ N tal que Ki0 ⊆ W . Consideremos Ki0 ∩ U y Ki0 ∩ V ,
se cumple:
Luego Ki0 ∩ U y Ki0 ∩ V forman una escisión de Ki0 y como Ki0 es conexo tenemos que Ki0 ∩ U = ∅ ó
Ki0 ∩ V = ∅.
Si Ki0 ∩ U = ∅ entonces A = A ∩ K ⊆ Ki0 ∩ U = ∅. Análogamente si Ki0 ∩ V = ∅ entonces B = ∅.
Luego A, B es una escisión trivial de K y por lo tanto K es conexo.
2.8 Homeomorfismos en Rn
1. f es biyectiva.
2. f es continua en X.
3. f −1 : Y → X es continua en Y .
Ejemplos:
Observación: Una biyección puede ser continua sin que su inversa lo sea. En efecto, consideremos la
función
f : [0, 2π[ −→ S 1
t 7−→ f (t) = (cos t, sen t)
es claro que f es biyectiva y continua en [0, 2π[. Supongamos que f −1 : S 1 → [0, 2π[ sea continua en S 1
(Hipótesis Auxiliar) en particular f serı́a continua en (1, 0). Consideremos las sucesiones (tk ) ⊆ [0, 2π[ y
(zk ) ⊆ S 1 dadas por tk = π − 1/k y zk = f (tk ). Se cumple:
lim zk = lim f (tk ) = lim (cos(2π − 1/k), sen (2π − 1/k)) = (1, 0),
k→∞ k→∞ k→∞
por la continuidad de f −1 tenemos que lim f −1 (zk ) = f −1 (1, 0), es decir lim tk = 0 luego 2π =
k→∞ k→∞
lim (2π − 1/k) = 0, lo cual es una contradicción.
k→∞
Prueba. Vamos a demostrar una de ellas, las demás tienen demostraciones análogas.
1. (⇒) Si U ⊆ X es abierto en X entonces (f −1 )−1 (U ) = f (U ) es abierto en Y .
(⇐) Si f (U ) es abierto en Y entonces U = f −1 (f (U )) = U es abierto en X.
Observe que el Teorema anterior nos dice que los homeomorfismos preservan las propiedades de que un
conjunto sea abierto, cerrado, denso, conexo o compacto. En cuanto al número de componentes conexas
de un conjunto, los homeomorfismos también la preservan, más especı́ficamente, tenemos los siguientes
resultados:
f (Cx ) ⊆ Cy (2.16)
−1 −1 −1
Por otro lado, si y ∈ Cy y Cy es conexo entonces
x = f (y) ∈ f (Cy ) y f (Cy ) es un conjunto conexo,
−1 −1
luego f (Cy ) ⊆ Cx , por lo tanto f f (Cy ) ⊆ f (Cx ), es decir
Cy ⊆ f [Cx ] (2.17)
2.9 Ejercicios
1.
Capı́tulo 3
Caminos en Rn
Muchos objetos geométricos ası́ como fenómenos de la naturaleza, tales como la caı́da libre de un cuerpo,
la trayectoria de un proyectil, la órbita de un cometa, entre otros, son descritos matemáticamente por el
concepto de camino, el cual pasamos a definir:
Observaciones:
1. En la definición anterior, consideramos intervalos I de cualquiera de los siguientes tipos: [a, b], ]a, b],
[a, b[ , ]a, b[ , ] − ∞, b], ] − ∞, b[ , [a, +∞[, ]a, +∞[ e inclusive ] − ∞, +∞[ = R.
2. Si λ : I → Rn un camino entonces λ(t) ∈ Rn , para todo t ∈ I. La variable t se denomina parámetro
del camino λ. Por esta razón, un camino también recibe el nombre de curva parametrizada.
3. El conjunto imagen λ(I) = {λ(t) : t ∈ I} ⊆ Rn , se denomina traza del camino λ.
4. Se debe distinguir entre el concepto de camino (el cual es una función) del concepto de traza (que
es un subconjunto de Rn ).
Ejemplo 1. Sea
λ: R −→ R3
t 7−→ λ(t) = (a cos t, a sen t, bt)
donde a, b ∈ R, a, b > 0. Claramente λ es un camino cuya traza es una hélice de paso 2πb sobre el cilindro
x2 + y 2 = a2 (ver figura). El parámetro t mide el ángulo que forma el eje X con la recta que une el origen
0 con la proyección del punto λ(t) sobre el plano XY .
60
Análisis Real I 61
λ′ : J −→ Rn
t 7−→ λ′ (t)
Observaciones:
λ(t) − λ(a) λ(a + h) − λ(a)
1. Es fácil verificar que la existencia de lim es equivalente a la existencia de lim .
t−a
t→a h→0 h
λ(a + h) − λ(a)
Luego podemos decir que λ es diferenciable en a ∈ I, si y sólo si existe lim .
h→0 h
2. Geométricamente, la derivada de λ en a es interpretada como el vector dirección de la recta tangente
a la curva λ en el punto λ(a), siempre que λ′ (a) 6= 0.
3. Si λ es diferenciable en a y λ′ (a) 6= 0, la recta tangente al camino λ en el punto λ(a) es definida
como:
L = {λ(a) + tλ′ (a) : t ∈ R}.
1. λ es diferenciable en a.
2. λi son diferenciables en a, ∀ 1 ≤ i ≤ n.
λ: R −→ R3
t 7−→ λ(t) = (t, cos αt, sen βt)
λ: R −→ R2
t 7−→ λ(t) = (t, |t|)
Observe que si t > 0, entonces λ(t) = (t, −t), luego λ es diferenciable en R− + y λ′ (t) = (1, −1), ∀ t ∈ R+ .
Si t < 0, entonces λ(t) = (t, −t), luego λ es diferenciable en R− y λ′ (t) = (1, −1), ∀ t ∈ R− .
Finalmente sabemos que la función real de variable real λ2 (t) = |t| no es diferenciable en t = 0, luego,
por el Teorema anterior, se sigue que λ no es diferenciable en 0. Por lo tanto
λ′ : R∗ −→ R2
(1, 1), si t > 0
t 7−→ λ(t) =
(1, −1), si t < 0.
Prueba. Probaremos sólo una de ellas, las demás se demuestran de manera análoga y queda como
ejercicio para el lector.
(4.) Sean λ = (λ1 , λ2 , . . . , λn ) y µ = (µ1 , µ2 , . . . , µn ), entonces
hλ, µi : I −→ R
n
P
t 7−→ hλ, µi (t) = hλ(t), µ(t)i = λi (t)µi (t).
i=1
Desde que λi y µi son funciones reales de variable real, se deduce que hλ, µi es diferenciable en a, más
aún:
n
X
hλ, µi′ (a) = [λ′i (a)µi (a) + λi (a)µ′i (a)]
i=1
n
X n
X
= λ′i (a)µi (a) + λi (a)µ′i (a)
i=1 i=1
= hλ′ (a), µ(a)i + hλ(a), µ′ (a)i
= hλ′ , µi (a) + hλ, µ′ i (a)
Corolario 2. Sea λ : I → Rn un camino diferenciable en I. Se cumple:
kλ(t)k = c, ∀ t ∈ I =⇒ λ(t) ⊥ λ′ (t), ∀ t ∈ I
Prueba.
kλ(t)k = c, ∀ t ∈ I =⇒ kλ(t)k2 = c2 , ∀ t ∈ I
=⇒ hλ(t), λ(t)i = c2 , ∀ t ∈ I
=⇒ hλ′ (t), λ(t)i = 0, ∀ t ∈ I
=⇒ λ(t) ⊥ λ′ (t), ∀ t ∈ I
Un resultado básico en el análisis de funciones reales de variable real, es el Teorema del Valor Medio
(TVM) de Lagrange: “Sea f : [a, b] → R función continua en [a, b] y diferenciable en ]a, b[ entonces existe
un c ∈ ]a, b[ tal que
f (b) − f (a) ′′
f ′ (c) = .
b−a
¿Este resultado puede ser extendido a los caminos? Veamos un ejemplo: consideremos el camino
λ : [0, 2π] −→ R2
t 7−→ λ(t) = (cos t, sen t).
Claramente λ es un camino continuo en [0, 2π] y diferenciable en ]0, 2π[ . Además λ(2π) = λ(0) = (0, 0)
y kλ′ (t)k = 1, ∀ t ∈ [0, 2π]. Esto implica que no existe ningún c ∈ ]0, 2π[ tal que
λ(2π) − λ(0)
λ′ (c) = = (0, 0).
2π − 0
La generalización correcta del TVM para caminos es la siguiente:
Teorema 3.1.3 (TVM para caminos) Sea λ : [a, b] → Rn , un camino continuo en [a, b] y diferenciable
en ]a, b[ . Entonces existen c1 , c2 , . . . , cn ∈ ]a, b[ tales que
λ(b) − λ(a)
= (λ′1 (c1 ), λ′2 (c2 ), . . . , λ′n (cn )),
b−a
en donde λ = (λ1 , λ2 , . . . , λn ).
Prueba. Haciendo λ = (λ1 , λ2 , . . . , λn ) tenemos, por hipótesis, que las funciones coordenadas λi : I → R,
son continuas en [a, b] y diferenciables en ]a, b[ , ∀ 1 ≤ i ≤ n, luego, por el TVM para funciones reales
de variable real se tiene que existen ci ∈ ]a, b[ tales que
λi (b) − λi (a)
λ′i (ci ) = , ∀ 1 ≤ i ≤ n.
b−a
Análisis Real I 66
Por lo tanto:
λ(b) − λ(a)
= (λ′1 (c1 ), λ′2 (c2 ), . . . , λ′n (cn )),
b−a
en donde λ = (λ1 , λ2 , . . . , λn ).
Teorema 3.1.4 Sea λ : [a, b] → Rn es un camino continuo en [a, b] y diferenciable en ]a, b[ . Si kλ′ (t)k ≤
M , ∀ t ∈ ]a, b[ entonces kλ(b) − λ(a)k ≤ M (b − a).
Prueba. Si λ(b) = λ(a), entonces no hay nada que probar. Consideremos entonces el caso en que
λ(b) 6= λ(a). Definimos la función
φ : [a, b] −→ R
t 7−→ φ(t) = hλ(t), λ(b) − λ(a)i .
Por el Teorema del Valor Medio para funciones reales de variable real, existe un c ∈ ]a, b[ tal que
φ(b) − φ(a) = φ′ (c)(b − a), es decir:
hλ(b), λ(b) − λ(a)i − hλ(a), λ(b) − λ(a)i = hλ′ (c), λ(b) − λ(a)i (b − a)
Luego:
kλ(t2 ) − λ(t1 )k ≤ 0 · (b − a) = 0,
1. λ es diferenciable en a.
2. ∃ v ∈ Rn tal que para todo h ∈ R con a + h ∈ I se cumple
λ(a + h) = λ(a) + hv + ra (h),
ra (h)
donde lim = 0.
h→0 h
3. ∃ v ∈ Rn tal que para todo h ∈ R con a + h ∈ I se cumple λ(a + h) = λ(a) + h[v + ρa (h)], donde
lim ρa (h) = 0.
h→0
Prueba. (1. ⇒ 2.) Considero ra (h) = λ(a + h) − λ(a) − hv, se observa que:
ra (h) λ(a + h) − λ(a) ′
lim = lim − λ (a) = 0
h→0 h h→0 h
ra (h)
Por lo tanto existe λ′ (a) ∈ Rn tal que λ(a + h) = λ(a) + hv + ra (h), con lim = 0.
h→0 h
ra (h)
(2. ⇒ 3.) Basta considerar ρa (h) = .
h
λ(a + h) − λ(a)
(3. ⇒ 1.) lim = lim [v + ρa (h)] = v. Por lo tanto λ es diferenciable en a y λ′ (a) = v.
h→0 h h→0
Notaciones:
1. Dado k ∈ Z+ , denotaremos por C k (I; Rn ) al conjunto de todos los caminos definidos en I con
valores en Rn que son de clase C k en I, es decir:
C k (I; Rn ) = λ : I → Rn / λ es de clase C k en I
2. Denotaremos por C 0 (I; Rn ) (o simplemente C(I; Rn )) al conjunto de todos los caminos continuos
definidos en I con valores en Rn , en sı́mbolos:
3. Denotaremos por C ∞ (I; Rn ) al conjunto de todos los caminos de clase C ∞ definidos en I con valores
en Rn , en sı́mbolos:
C ∞ (I; Rn ) = {λ : I → Rn / λ es de clase C ∞ en I}
4. Cuando el camino toma valores en R, escribiremos C k (I), C(I) y C ∞ (I) en vez de C k (I; R), C(I; R)
y C ∞ (I; R); respectivamente.
Como ya el lector debe sospechar, la condición de que un camino sea de clase C k es equivalente a que
todas sus coordenadas sean funciones de clase C k . Más especı́ficamente, tenemos el siguiente resultado:
1. λ ∈ C k (I; Rn ).
2. λi ∈ C k (I), para todo i = 1, 2, . . . , n.
∞
\
1. C ∞ (I; Rn ) = C k (I; Rn ).
k=0
Para finalizar la presente sección, damos un concepto más débil que el de camino de clase C k .
Observaciones:
1. λ es k-veces diferenciable en a.
2. Las funciones coordenadas λi son k-veces diferenciables en a, para todo i = 1, 2, . . . , n.
El concepto de integral de una función real de variable real, puede ser generalizado a los caminos.
1. Una partición P de [a, b] es un conjunto finito de puntos t0 , t1 , . . . , tk ∈ [a, b] tal que a = t0 < t1 <
. . . < tk = b. Denotaremos por P([a, b]) al conjunto de todas las particiones del intervalo [a, b].
Análisis Real I 70
kP k = max{∆i t : 1 ≤ i ≤ k},
en donde ∆i t = ti − ti−1 , ∀ 1 ≤ i ≤ k.
3. Una partición puntuada de [a, b] es un par P ∗ = (P, ξ) donde P = {t0 , t1 , . . . , tk } ∈ P([a, b]) y
ξ = (ξ1 , ξ2 , . . . , ξk ) ∈ Rk es tal que ti−1 ≤ ξ ≤ ti , ∀ 1 ≤ i ≤ k. Denotaremos por P ∗ ([a, b]) al
conjunto de todas las particiones puntuadas del intervalo [a, b].
Definición 3.3.2 Sea λ : [a, b] → Rn un camino y P ∗ ∈ P ∗ ([a, b]). La suma de Riemann asociada a λ y
P ∗ , denotada por S(λ, P ∗ ); es definida por:
k
X
S(λ, P ∗ ) = (∆i t)λ(ξi )
i=1
Observaciones:
Definición 3.3.3 Sea λ : [a, b] → Rn . Decimos que λ es un camino integrable en [a, b] si y sólo si existe
un vector v ∈ Rn tal que ∀ ǫ > 0, ∃ δ > 0 tal que si P ∗ = (P, ξ) ∈ P ∗ ([a, b]) con kP k = δ entonces
kv − S(λ, P ∗ )k < ǫ
Observaciones:
2. En el caso que n = 1 entonces λ es una función real de variable real y la definición anterior coincide
con el concepto de función integrable.
3. En el caso n = 1, la suma de Riemann S(λ, P ∗ ) se interpreta geométricamente como la suma de las
áreas de los rectángulos de altura λ(ξi ) y de base ∆i t.
Teorema 3.3.1 Sean λ : [a, b] → Rn un camino con λ = (λ1 , λ2 , . . . , λn ). Las afirmaciones siguientes
son equivalentes:
Análisis Real I 71
(1. ⇒ 2.) Por hipótesis, existe un v = (v1 , v2 , . . . , vn ) ∈ Rn con la propiedad de que para todo ǫ > 0,
∃ δ > 0 tal que si P ∗ = (P, ξ) ∈ P ∗ ([a, b]) con kP k = δ entonces kv − S(λ, P ∗ )k < ǫ. Se sigue que
para todo i = 1, 2, . . . , n. Es decir, las funciones coordenadas λi son integrables en [a, b], ∀ 1 ≤ i ≤ n.
(2. ⇒ 1.) Dado i = 1, 2, . . . , n existe un vi ∈ R con la propiedad de que para todo ǫ > 0, ∃ δi > 0
ǫ
tal que si P ∗ = (P, ξ) ∈ P ∗ ([a, b]) con kP k = δi entonces |vi − S(λi , P ∗ )k < √ . Consideremos
n
δ = min{δ1 , δ2 , . . . , δn } > 0 y tomemos P ∗ = (P, ξ) ∈ P ∗ ([a, b]) con kP k = δ, se cumple:
n n
X X ǫ2
kv − S(λ, P ∗ )k2 = |vi − S(λi , P ∗ )|2 < = ǫ2
i=1 i=1
n
∗
Por lo tanto kv − S(λ, P )k < ǫ.
Las dos siguientes proposiciones, cuya demostraciones quedaran como ejercicio para el lector, son
generalizaciones directas a la integral de caminos de propiedades bien conocidas de la integración de
funciones reales de variable real.
Proposición 3.3.2 Sea λ : [a, b] → Rn un camino integrable sobre el intervalo [a, b] y sea c ∈ ]a, b[
entonces las restricciones λ y λ son caminos integrables sobre [a, c] y [c, b] respectivamente, y
[a,c] [c,b]
además se cumple:
Análisis Real I 72
Z b Z c Z b
λ(t)dt = λ(t)dt + λ(t)dt.
a a c
Proposición 3.3.3 Sean λ, µ : [a, b] → Rn dos caminos integrables sobre el intervalo [a, b] y sean α, β ∈
R, entonces αλ + βµ es un camino integrable sobre [a, b] y
Z b Z b Z b
(αλ(t) + βµ(t))dt = α λ(t)dt + β µ(t)dt.
a a a
Observación: Denotemos por I([a, b], Rn ) al conjunto de todos los caminos integrables sobre el intervalo
[a, b], es decir:
La proposición anterior nos dice que el conjunto I([a, b], Rn ) dotado de las operaciones usuales de suma
de caminos y producto de un número real por un camino, es un R-espacio vectorial, más aún, el operador
Λ : I([a, b], Rn ) −→ R
Z b
λ 7−→ Λ(λ) = λ(t)dt
a
es un funcional lineal.
Proposición 3.3.4 Si λ : [a, b] → Rn es un camino integrables sobre el intervalo [a, b] entonces kλk es
una función integrable sobre [a, b] y se cumple
Z
Z
b
b
λ(t)dt
≤ kλ(t)kdt.
a
a
es decir
Si tomamos δ = min{δ1 , δ2 } > 0 y P ∗ = (P, ξ) ∈ P ∗ ([a, b]), con kP k < δ; se tiene que:
Z
Z b
b
ǫ ǫ ǫ
∗
kλ(t)kdt − S(kλk, P ∗ ) < .
λ(t)dt
− kS(λ, P )k < y − <
a
2 2 a 2
Luego
Z
Z
b
b
ǫ =
λ(t)dt
− kλ(t)kdt
a
a
Z
b
λ(t)dt
− kS(λ, P ∗ )k + kS(λ, P ∗ )k − S(kλk, P ∗ ) +
=
a
Z b
∗
S(kλk, P ) − kλ(t)kdt
a
ǫ ǫ
< + kS(λ, P ∗ )k − S(kλk, P ∗ ) + ,
2 2
es decir: kS(λ, P ∗ )k > S(kλk, P ∗ ) lo cual contradice (3.1). Esta contradicción prueba el resultado.
El siguiente resultado, es una consecuencia inmediata de la proposición anterior:
Corolario. Si λ : [a, b] → Rn es un camino integrable tal que kλ(t)k ≤ M , ∀ t ∈ [a, b] entonces
Z
b
λ(t)dt
≤ M (b − a).
a
es decir:
S(L ◦ λ, P ∗ ) = L(S(λ, P ∗ )) ∀ P ∗ ∈ P ∗ ([a, b])
Z b
Ahora bien, como λ es integrable, existe λ(t)dt ∈ Rn y desde que L : Rn → Rm es continua, ten-
a
!
Z b
Z b
emos que dado un ǫ > 0, ∃ η > 0 tal que
x − λ(t)dt
< η implica que
L(x) − L λ(t)dt
< ǫ.
a
Z a
b
∗ ∗
∗
Como η > 0, existe un δ > 0 tal que si P = (P, ξ) ∈ P ([a, b]), con kP k < δ; entonces
λ(t)dt − S(λ, P )
<
Z b !
aZ !
b
∗
∗
η, luego
L λ(t)dt − L (S(λ, P ))
< ǫ y por la igualdad anterior tenemos que
L λ(t)dt − S(L ◦ λ, P )
<
a
a
m
ǫ. De esta manera, hemos probado ! que L ◦ λ : [a, b] → R es un camino integrable sobre [a, b] y
Z b Z b
(L ◦ λ)(t)dt = L λ(t)dt .
a a
Los cinco resultados siguientes, cuya demostraciones son dejadas como ejercicio al lector, son gen-
eralizaciones a caminos integrables de propiedades bien conocidas de las funciones reales de variable
real.
Teorema 3.3.7 (Primer Teorema Fundamental del Cálculo para caminos) Si λ : [a, a + h] → Rn
es un camino tal que λ′ es integrable sobre [a, b], entonces
Z a+h Z 1
′
λ(a + h) − λ(a) = λ (t)dt = h λ′ (a + th)dt.
a 0
Definición 3.3.4 Sea λ : [a, b] → Rn un camino integrable sobre [a, b]. La Primitiva o Antiderivada de
λ, es el camino λ : [a, b] → Rn definido por
Z t
λ(t) = λ(s)ds, ∀ s ∈ [a, b].
a
Análisis Real I 75
n
Teorema 3.3.9 (Fórmula R de Taylor infinitesimal para caminos) Sean λ : I → R es un camino
k-veces diferenciable en a (I) y J = {h ∈ R : a + h ∈ I}. Entonces existe una función rk : J → Rn tal
que:
h2 hk (k)
λ(a + h) = λ(a) + hλ′ (a) + λ′′ (a) + . . . + λ (a) + rk (h), ∀ h ∈ J
2! k!
y
rk (h)
lim = 0.
h→0 h
Teorema 3.3.10 (Fórmula de Taylor con resto integral para caminos) Sea λ : [a, a + h] → Rn
un camino k-veces diferenciable en [a, a + h] con λ(k) integrable sobre [a, a + h]. Entonces
h2 ′′ hk−1 (k−1)
λ(a + h) = λ(a) + hλ′ (a) + λ (a) + . . . + λ (a) + rk (h)
2! (k − 1)!
donde
Z 1
hk
rk = (1 − t)k−1 λ(k) (a + th)dt
(k − 1)! 0
Z a+h
1
= (a + h − s)k−1 λ(k) (s)ds.
(k − 1)! a
Observaciones:
Intuitivamente un conjunto conexo es aquel que “está hecho de una sola pieza” (ver Capı́tulo 1, Sección
5), en este sentido, se dieron las definiciones 1.5.1 y 1.5.2 las cuales son generalizaciones directas de lo que
entendemos por conjunto conexo en la recta real. Sin embargo, existen conjuntos conexos (en el sentido
de las definiciones 1.5.1 y 1.5.2) los cuales no están “hechos de una sola pieza”
Ejemplo. Sea
λ : ]0, 1] −→ R2
π
t 7−→ λ(t) = (t, sen t)
claramente λ es un camino continuo en el intervalo ]0, 1] y desde que ]0, 1] es conexo, concluimos que
λ( ]0, 1]) es un conjunto conexo de R2 .
Sea X = λ( ]0, 1]) y consideremos Y = X ∪ {(0, 0)}. Sin ninguna dificultad, el lector puede probar
que
X̄ = X ∪ {(0, t) : −1 ≤ t ≤ 1},
luego tenemos que X ⊆ Y ⊆ X̄. Del Teorema 1.5.3, concluimos que Y es conexo, sin embargo la figura
siguiente muestra que Y no es un conjunto “hecho de una sola pieza”.
Análisis Real I 77
La aparente contradicción se debe a que las definiciones 1.5.1 y 1.5.2 caracterizan a los subconjuntos de
la recta real que “están hechos de una sola pieza” pero esta caracterización se pierde cuando trabajamos
con subconjuntos de Rn cuando n ≥ 2.
La definición correcta que corresponde a la idea intuitiva de que un subconjunto de Rn este hecho de
una sola pieza es la de conexidad por camino, concepto que pasamos a definir:
Definición 3.4.1 Un subconjunto X ⊆ Rn es llamado conexo por caminos o arco conexo si y sólo si para
todo par de puntos x, y ∈ X, existe λ : [0, 1] → X camino continuo tal que λ(0) = x y λ(1) = y.
Ejemplo 1. Todo subconjunto convexo de Rn es conexo por caminos. En efecto, sea X ⊆ Rn un conjunto
convexo y tomemos x, y ∈ X, sabemos que [x, y] = {(1 − t)x + ty : t ∈ [0, 1]} esta contenido en X. Luego,
podemos definir
λ : [0, 1] −→ X
t 7−→ λ(t) = (1 − t)x + ty
claramente λ es un camino continuo que cumple λ(0) = x y λ(1) = y. El camino λ será llamado camino
rectilı́neo.
Ejemplo 2. Sabemos que las bolas abiertas y las bolas cerradas son subconjuntos convexos de Rn , luego
son conexos por caminos.
Ejemplo 3. La esfera unitaria
S n−1 = {x ∈ Rn : kxk = 1}
es un conjunto conexo por caminos. En efecto, sean x, y ∈ S n−1 , consideremos dos casos:
• x e y no son puntos antı́podas (es decir x 6= −y). En este caso, definimos el camino:
λ : [0, 1] −→ S n−1
(1 − t)x + ty
t 7−→ λ(t) =
k(1 − t)x + tyk
• x e y son puntos antı́podas (es decir x = −y). En este caso, consideramos un punto z ∈
S n−1 − {x, y}, es claro que z no es antı́poda ni a x ni a y, luego, por el caso anterior, existen
λ1 , λ2 : [0, 1] → S n−1 caminos continuos tales que λ1 (0) = x, λ1 (1) = z, λ2 (0) = z y λ2 (1) = y.
Ahora definimos
λ : [0, 1] −→ S n−1
λ1 (2t), si 0 ≤ t ≤ 21
λ 7−→ λ(t) =
λ2 (2t − 1), si 12 ≤ t ≤ 1
Se cumple que λ(0) = x, λ(1) = y y además λ es continuo en [0, 1], puesto que:
lim − λ(t) = lim − λ1 (2t) = z
t→( 12 ) t→( 12 )
y
lim λ(t) = lim λ2 (2t − 1) = z
+ +
t→( 12 ) t→( 21 )
Definición 3.4.2 Sean λ, µ : [0, 1] → Rn caminos continuos con λ(1) = µ(0). La yuxtaposición de λ y
µ, denotada por λ ∗ µ es el camino definido por:
λ ∗ µ : [0, 1] −→ Rn
λ(2t), si 0 ≤ t ≤ 21
t 7−→ (λ ∗ µ)(t) =
µ(2t − 1), si 12 ≤ t ≤ 1
Observaciones:
1. Para que la yuxtaposición de los caminos λ y µ este definida, es necesario que el punto final de λ
coincida con el punto inicial de µ.
2. Como λ(0) = µ(1), se sigue que λ ∗ µ ∈ C([0, 1]; Rn ).
3. De manera análoga podemos definir la yuxtaposición de un número finito de caminos. En efecto,
sean λ1 , λ2 , . . . , λk : [0, 1] → Rn caminos continuos tales que λj (1) = λj+1 (0) para todo 1 ≤ j ≤
k − 1. Entonces
λ1 ∗ λ2 ∗ . . . ∗ λk = ((λ1 ∗ λ2 ) ∗ λ3 ) . . . ∗ λk .
4. λ1 ∗ λ2 ∗ . . . ∗ λk ∈ C([0, 1]; Rn ).
5. La yuxtaposición de un número finito de caminos rectilı́neos es llamado camino poligonal.
6. Si λ ∈ C([0, 1]; Rn ), definimos el camino
λ−1 : [0, 1] −→ Rn
t 7−→ λ−1 (t) = λ(1 − t)
Es claro que λ−1 ∈ C([0, 1]; Rn ). Geométricamente, la traza de λ es recorrida por λ−1 en sentido
contrario al recorrido por λ.
Análisis Real I 79
Prueba. Si X es vacı́o entonces no hay nada que probar. Fijemos entonces un a ∈ X, luego para
cualquier punto x ∈ X debe existir, por hipótesis un camino continuo λx : [0, 1] → X tal que λx (0) = a
([0, 1]) ⊆ X es un conjunto conexo y a ∈ λx ([0, 1]), para todo x ∈ X. Por el
y λx (1) = x. Observe que λx[
Teorema 1.5.2 se sigue que λx ([0, 1]) es un conjunto conexo. Por otro lado, no es difı́cil probar que
[ x∈X
X= λx ([0, 1]). Concluimos que X es conexo.
x∈X
Observación: El recı́proco del teorema anterior es falso. En efecto, el ejemplo dado al inicio de la
sección nos brinda un conjunto conexo que no es conexo por caminos.
Una condición suficiente para que un conjunto conexo sea conexo por caminos es dada en el siguiente
resultado:
Prueba. Si X es el conjunto vacı́o entonces no hay nada que probar. Consideremos X 6= ∅, fijemos un
punto x0 ∈ X y definamos el conjunto
El objetivo es probar que Ax0 = X y para ello, usaremos los argumentos usuales de conexidad.
• Ax0 es abierto. Sea x ∈ Ax0 entonces x ∈ X, luego ∃ r > 0 tal que Br (x) ⊆ X. Afirmo que
Br (x) ⊆ Ax0 . En efecto, sea y ∈ Br (x), por la convexidad de la bola, existe un camino rectilı́neo
µ : [0, 1] → Br (x) tal que µ(0) = x y µ(1) = y. Como x ∈ Ax0 entonces existe λ : [0, 1] → X camino
continuo tal que λx (0) = x0 y λx (1) = x, luego µ∗λx : [0, 1] → X (ver figura) es un camino continuo
que satisface (µ ∗ λx )(0) = x0 y (µ ∗ λx )(1) = y, es decir y ∈ Ax0 lo cual prueba la afirmación.
• Ax0 es cerrado. Sea Bx0 = X − Ax0 , afirmo que Bx0 es abierto. En efecto, si Bx0 = ∅ entonces
no hay nada que probar. Sea x ∈ Bx0 entonces x ∈ X luego existe r > 0 tal que Br (x) ⊆ X.
Suponiendo que Br (x) 6⊆ Bx0 (Hip. Aux.), debe existir un y ∈ Br (x) tal que y ∈
/ Bx0 , es decir
y ∈ Br (x) y y ∈ Ax0 .
Análisis Real I 80
Como y ∈ Ax0 , debe existir un camino continuo λy : [0, 1] → X tal que λy (0) = x0 y λy (1) = y.
Como y ∈ Br (x), existe un camino rectilı́neo µ : [0, 1] → Br (x) tal que µ(0) = y y µ(1) = x. Luego
µ ∗ λy : [0, 1] → X es un camino continuo tal que (µ ∗ λy )(0) = x0 y (µ ∗ λy )(1) = x, es decir x ∈ Ax0 ,
lo cual es una contradicción. Por lo tanto, se debe tener que Br (x) ⊆ Bx0 y esto prueba que Bx0
es abierto.
Tenemos que Ax0 es un subconjunto abierto y cerrado de X, además Ax0 6= ∅ (puesto que x0 ∈ Ax0 .
Concluimos que Ax0 = X, es decir todo punto de x ∈ X puede ser unido a x0 por un camino continuo
con punto inicial x0 y punto final x.
Finalmente, sean x, y ∈ X, por lo que acabamos de demostrar, existen caminos continuos λx , λy :
[0, 1] → X tales que λx (0) = x0 , λx (1) = x, λy (0) = x0 y λy (1) = y. Luego λy ∗ λ−1
x : [0, 1] → X es un
camino continuo tal que (λy ∗ λx−1 )(0) = x y (λy ∗ λ−1x )(1) = y, es decir X es conexo por caminos.
Definiendo convenientemente el conjunto Ax0 , el lector no tendrá dificultad en probar el siguiente
resultado:
Teorema 3.4.3 Si X ⊆ Rm es abierto y conexo entonces todo par de puntos x, y ∈ X pueden ser unidos
por un camino polinomial λ : [0, 1] → X tal que λ(0) = x y λ(1) = y.
Sea λ : [a, b] → Rn , definiremos la longitud del camino λ como la distancia recorrida por una partı́cula
que se traslada de acuerdo a la ley de movimiento λ(t) desde el instante t = a hasta el instante t = b.
Como veremos más adelante, ésta longitud no necesariamente coincide con la longitud de la traza de λ.
Sea λ : [a, b] → Rn un camino y P = {a = t0 , t1 , . . . , tk = b} ∈ P([a, b]). La longitud de la poligonal
asociada al camino λ y a la partición P , denotada por ℓ(λ, P ) es definida como
k
X
ℓ(λ, P ) = kλ(ti ) − λ(ti−1 )k.
i=1
Análisis Real I 81
Nuestra idea intuitiva para resolver el problema fı́sico planteado nos dice que mientras más puntos
tenga la partición P , la longitud de la poligonal ℓ(λ, P ) se aproxima mejor a la distancia recorrida por la
partı́cula. Esto nos motiva a dar la siguiente definición:
Definición 3.5.1 Sea λ : [a, b] → Rn un camino y consideremos el conjunto
A = {ℓ(λ, P ) : P ∈ P([a, b])} ⊆ R.
Decimos que el camino λ es rectificable sobre [a, b] si y sólo si A es un conjunto acotado superiormente.
En caso afirmativo, definimos la longitud del camino λ en el intervalo [a, b], denotada por ℓ(λ)[a, b], como
el supremo del conjunto A, es decir:
ℓ(λ)[a, b] = sup{ℓ(λ, P ) : P ∈ P([a, b])}.
Observaciones:
1. Si n = 1 entonces un camino rectificable λ : [a, b] → R es llamado función de variación total acotada
en [a, b] y su longitud ℓ(λ)[a, b] es llamada variación total de la función λ en el intervalo [a, b]. Al
final del capı́tulo, el lector encontrará una buena colección de ejercicios sobre funciones de variación
total acotada.
2. ℓ(λ)[a, b] = 0 si y sólo si λ es un camino constante.
Que un camino sea acotado es equivalente a decir que todas sus funciones coordenadas sean de
variación total acotada.
Proposición 3.5.1 Sea λ : [a, b] → Rn un camino con λ = (λ1 , . . . , λn ). Las afirmaciones siguientes son
equivalentes:
1. λ es rectificable en [a, b].
2. λi son de variación total acotada en [a, b], ∀ 1 ≤ i ≤ n.
• Caso 1: 1 ∈
/ P . Se sigue que
k
X k
X
ℓ(λ, P ) = kλ(tj ) − λ(tj−1 )k = k(tj , 0) − (tj−1 , 0)k
j=1 j=1
k
X
= (tj − tj−1 ) = 2
j=1
y se tiene:
k
X
ℓ(λ, P ) = kλ(tj ) − λ(tj−1 )k
j=1
i−1
X
= kλ(tj ) − λ(tj−1 )k + kλ(1) − λ(ti−1 )k +
j=1
k
X
+ kλ(ti+1 ) − λ(1)k + kλ(tj ) − λ(tj−1 )k
j=i+2
Análisis Real I 83
i−1
X
= k(tj , 0) − (tj−1 , 0)k + k(1, 1) − (ti−1 , 0)k +
j=1
k
X
+ k(ti+1 , 0) − (1, 1)k + k(tj , 0) − (tj−1 , 0)k
j=i+2
i−1
X p
= (tj − tj−1 ) + (1 − ti−1 )2 + 1 +
j=1
p k
X
+ (ti−1 − 1)2 + 1 + (tj − tj−1 )
j=i+2
p p
= ti−1 + (1 − ti−1 )2 + 1 + (ti−1 − 1)2 + 1 + 2 − ti+1
En cualquiera de los dos casos, se tiene que ℓ(λ, P ) ≤ 4, ∀ P ∈ P([0, 2]). Concluimos que λ es
rectificable y que ℓ(λ)[0, 2] ≤ 4.
Observaciones:
Ejemplo 2. Sea
λ : [0, 1] −→ R2
t 7−→ λ(t) = (t, φ(t))
donde
φ : [0, 1] −→ R
π
t sen 2t , si t 6= 0
t 7−→ φ(t) =
0, si t = 0
No es difı́cil ver que λ es un camino continuo en [0, 1]. Vamos a probar que φ no es una función de
variación total acotada en [0, 1]. Sea m ∈ N (fijo, arbitrario) y consideremos la partición:
1 1 1 1 1 1
Pm = 0, , ,..., , , , ,1
4m 4m − 1 5 4 3 2
1 1 1 1 1 1 1 1 1 1
Por ejemplo P1 = 0, , , , 1 , P2 = 0, , , , , , , , 1 y ası́ sucesivamente. Es claro que
4 3 2 8 7 6 5 4 3 2
(Pm ) es una sucesión de particiones del intervalo [0, 1]. Por otro lado, observe que para k ∈ Z+ , tenemos:
1 1
φ = sen (2kπ) = 0,
4k 4k
Análisis Real I 84
π
1 1 1
φ = sen (4k − 1) = − ,
4k − 1 4k − 1 2 4k − 1
1 1
φ =sen ((2k − 1)π) = 0 y
4k − 2 4k − 2
π
1 1 1
φ = sen (4k − 3) = .
4k − 3 4k − 3 2 4k − 3
Luego:
1 1 1
ℓ(φ, Pm ) = φ
− φ(0) + φ
−φ +
4m 4m − 1 4m
1 1
+ φ −φ +
4m − 2 4m − 1
1 1 + · · · + φ 1 − φ 1 +
+ φ −φ
4m − 3 4m − 2 4 5
1 1 1 1 1
+ φ
−φ + φ −φ + φ(1) − φ
3 4 2 3 2
1 1
= |0 − 0| + − − 0 + 0 + +
4m − 1 4m − 1
− 1 + · · · + 0 − 1 + − 1 − 0 + 0 + 1 + |1 − 0|
4m − 3 − 0 5 3 3
1 1 1 1 1 1 1
= + + + + ...+ + + + 1
4m − 1 4m − 1 4m − 3 4m − 3 5 3 3
1 1 1 1 1 1 1
> + + + + ...+ + + + 1
4m − 1 4m − 2 4m − 3 4m − 4 4 3 2
4m−1
X 1
=
j=1
j
4m−1
X 1
es decir: ℓ(φ, Pm ) > , ∀ m ∈ N.
j=1
j
Como la serie armónica es divergente, entonces el conjunto
{ℓ(φ, P ) : P ∈ P([0, 1])}
no está acotado superiormente, luego la función φ no es de variación total acotada en [0, 1] y por la
Proposición 3.5.1, concluimos que λ no es rectificable en [0, 1].
Observaciones:
1. Fı́sicamente, el ejemplo anterior nos demuestra que existen partı́culas que en un tiempo finito recorre
una distancia infinita.
Análisis Real I 85
Si tuviéramos que calcular la longitud de un camino usando la Definición 3.5.1, nos enfrentarı́amos a
un problema muy complicado, sin embargo, para una gran cantidad de caminos, dicho cálculo se reduce
a determinar una integral, como veremos a continuación.
Prueba. Es suficiente considerar el caso en que Q tenga sólo un punto más que P , es decir Q = P ∪ {r}.
Si P = {a = t0 , t1 , . . . , tk = b} ∈ P([a, b]) entonces existe un subı́ndice j ∈ {1, 2, . . . , k} tal que
tj−1 < r < tj , luego:
k
X
ℓ(λ, P ) = kλ(ti ) − λ(ti−1 )k
i=1
j−1
X
≤ kλ(ti ) − λ(ti−1 )k + kλ(r) − λ(tj−1 )k + kλ(tj ) − λ(r)k +
i=1
k
X
+ kλ(ti ) − λ(ti−1 )k
i=j+1
= ℓ(λ, Q)
Prueba. Como λ es continuo en [a, b] se sigue que λ es uniformemente continuo en [a, b] lo cual es
equivalente a decir que todas sus funciones coordenadas λi son uniformemente continuas en [a, b]. Luego,
dado ǫ > 0, existe δi > 0 tal que si t, si ∈ [a, b] y |t − si | < δi implica que
ǫ
|λi (t) − λi (si )| < √ (1 ≤ i ≤ n).
n
Análisis Real I 86
n
X
2
kλ(t) − (λ1 (s1 ), λ2 (s2 )), . . . , λn (sn )k = |λi (t) − λi (si )|2
i=1
n
X ǫ2
< = ǫ2
i=1
n
Como λ es continua en [tj−1 , tj ] y diferenciable en ]tj−1 , tj [ (1 ≤ j ≤ k), por el Teorema del Valor medio
para caminos, existen c′j , c′′j , c′′′
j ∈ ]tj−1 , tj [ tales que
λ(tj ) − λ(tj−1 )
= λ′1 (c′j ), λ′2 (c′′j ), λ′3 (c′′′
j ) , ∀1 ≤ j ≤ k (3.3)
tj − tj−1
Como las λ′i son continuas en [a, b] entonces existen constantes Mi > 0 tales que |λ′i (t)| < Mi , ∀ t ∈ [a, b],
∀ 1 ≤ i ≤ 3, luego de (3.2) y (3.2) tenemos:
k
X
ℓ(λ, P ) = k λ′1 (c′j ), λ′2 (c′′j ), λ′3 (c′′′
j ) k · (tj − tj−1 )
j=1
k q
X
≤ M12 + M22 + M32 · (tj − tj−1 )
j=1
q
= M12 + M22 + M32 · (b − a)
Como la acotación anterior es válida para cualquier P ∈ P([a, b]), deducimos que λ es un camino
rectificable sobre [a, b].
Z b
A continuación, probaremos que ℓ(λ)[a, b] = kλ′ (t)kdt. Sea ǫ > 0, por definición de supremo,
a
existe P1 ∈ P([a, b]) tal que
ǫ
ℓ(λ)[a, b] − < ℓ(λ, P1 ) ≤ ℓ(λ)[a, b] (3.4)
3
Análisis Real I 87
Como kλ′ k es continua en [a, b], se sigue que kλ′ k es integrable sobre [a, b], luego existe δ1 > 0 tal que si
P ∗ = (P, ξ) ∈ P ∗ ([a, b]), con kP k < δ1 implica:
Z
b ǫ
′ ′ ∗
kλ (t)kdt − S(kλ k, P ) < (3.5)
a 3
Observe que:
Z Z
b b
′ ′ ′ ∗
kλ (t)kdt − ℓ(λ)[a, b] ≤ kλ (t)kdt − S(kλ k, P ) +
a a
|S(kλ′ k, P ∗ ) − ℓ(λ, P )|
+ |ℓ(λ, P ) − ℓ(λ)[a, b]| (3.6)
es decir:
k
X
|S(kλ′ k, P ∗ ) − ℓ(λ, P )| ≤ kλ′ (ξj )k −
j=1
− k λ′1 (c′j ), λ′2 (c′′j ), λ′3 (c′′′
j ) k · (tj − tj−1 ) (3.7)
Sea δ = min{δ1 , δ2 }, P ∗ = (P, ξ) ∈ P ∗ ([a, b]) tal que P es refinamiento de P1 y kP k < δ entonces de
(3.4), (3.5), (3.6) y (3.7) tenemos:
Z k
b ǫ X ǫ ǫ
′
kλ (t)kdt − ℓ(λ)[a, b] < + (tj − tj−1 ) + = ǫ, ∀ ǫ > 0
a 3 3(b − a)j=1
3
Z b
Por lo tanto ℓ(λ)[a, b] = kλ′ (t)kdt
a
Análisis Real I 88
el teorema anterior nos dice que C 1 ([a, b]; Rn ) ⊆ R([a, b]; Rn ) ∩ C([a, b]; Rn ).
Ejemplo 3. Sea
λ : [0, π] −→ R3
t 7−→ λ(t) = (cos t, sen t, t)
Es claro que λ es un camino de clase C 1 en [0, π], más aún λ′ (t) = (− sen t, cos t, 1), ∀ t ∈ [0, π]. Por el
teorema anterior concluimos que λ es rectificable en [0, π] y
Z π √
ℓ(λ)[0, π] = kλ′ (t)kdt = 2π.
0
Ejemplo 4. Sea
λ : [ π2 , 3π
2 ] −→ R
2
Observe (ver figura) que la traza del camino λ es el segmento de recta [0, 1] × 0 ⊆ R2 cuya longitud es 1.
Este ejemplo nos muestra que ℓ(λ)[a, b] en general no es igual a la longitud de la traza de la curva λ.
Dos caminos distintos λ : [a, b] → Rn y µ : [c, d] → Rn pueden tener la misma traza. En efecto, considérese
los caminos
λ : [0, 1] −→ R2
t 7−→ λ(t) = (cos 2πt, sen 2πt)
y
µ : [0, 2π] −→ R2
t 7−→ λ(t) = (cos t, sen t)
Análisis Real I 89
La traza de ambos caminos es el cı́rculo unitario S 1 no obstante ser λ y µ dos caminos distintos. Observe
que una partı́cula que se mueve siguiendo la ley µ recorre S 1 en 2π unidades de tiempo en cambio la
partı́cula que se mueve de acuerdo a la ley λ lo hace en una unidad de tiempo.
Dos caminos que tienen la misma traza son llamados reparametrizados. Más especı́ficamente, tenemos
la siguiente:
Definición 3.6.1 Sea λ : [a, b] → Rn un camino dado. Decimos que µ : [c, d] → Rn es una reparame-
trización de λ si y sólo si existe una función ϕ : [a, b] → [c, d] monótona y sobreyectiva tal que λ = µ ◦ ϕ.
Observaciones:
1. λ es rectificable.
2. µ es rectificable.
Prueba. Por hipótesis existe una función ϕ : [a, b] → [c, d] monótona y sobreyectiva tal que λ = µ ◦ ϕ.
Vamos a suponer que ϕ es monótona creciente.
(1. ⇒ 2.) Sea Q = {c = s0 , s1 , . . . , sk = d} ∈ P([c, d]), como ϕ es sobreyectiva, existen t0 =
a, t1 , . . . , tk−1 , tk = b ∈ [a, b] tales que ϕ(tj ) = sj , ∀ 0 ≤ j ≤ k.
Consideremos P = {a = t0 , t1 , . . . , tk = b} ∈ P([a, b]), luego:
k
X k
X
ℓ(µ, Q) = kµ(sj ) − µ(sj−1 )k = kµ(ϕ(tj )) − µ(ϕ(tj−1 ))k
j=1 j=1
k
X
= kλ(tj ) − λ(tj−1 )k = ℓ(λ, P ) ≤ ℓ(λ)[a, b]
j=1
es decir ℓ(µ, Q) ≤ ℓ(λ)[a, b], ∀ Q ∈ P([c, d]). Por lo tanto µ es rectificable y ℓ(µ)[c, d] ≤ ℓ(λ)[a, b]
(2. ⇒ 1.) Dada cualquier P = {a = t0 , t1 , . . . , tk = b} ∈ P([a, b]), considero Q = {c = ϕ(t0 ), ϕ(t1 ), . . . , ϕ(tk ) =
d} ∈ P([a, b]), como ϕ es monótona creciente, se deduce que Q ∈ P([c, d]), luego:
k
X
ℓ(λ, P ) = kλ(tj ) − λ(tj−1 )k
j=1
k
X
= kµ(ϕ(tj )) − µ(ϕ(tj−1 ))k = ℓ(µ, Q) ≤ ℓ(µ)[c, d]
j=1
es decir ℓ(λ, P ) ≤ ℓ(µ)[c, d], ∀ P ∈ P([a, b]). Concluimos que el camino λ es rectificable y ℓ(λ)[a, b] ≤
ℓ(µ)[c, d].
Definición 3.6.2 Sea µ : [c, d] → Rn un camino rectificable. Decimos que µ es parametrizado por
longitud de arco si y sólo si
ℓ(µ)[c, s] = s − c, ∀ s ∈ [c, d].
Ejemplo 1. El camino
µ : [0, 2π] −→ R2
t 7−→ µ(t) = (cos t, sen t)
es parametrizado por longitud de arco. En efecto, dado s ∈ [0, 2π], tenemos:
Z s Z s
ℓ(µ)[0, s] = kµ′ (t)kdt = dt = s
0 0
Proposición 3.6.2 Sean µ : [c, d] → Rn un camino de clase C 1 en [c, d]. Las siguientes afirmaciones son
equivalentes:
1
Z s (1. ⇒ 2) Por hipótesis se cumple que ℓ(µ)[c,
Prueba. Z s s] = s−c, ∀ s ∈ [c, d], como µ es de clase C tenemos
d
que kµ′ (t)kdt = s − w, ∀ s ∈ [c, d], luego kµ′ (t)kdt = 1, ∀ s ∈ [c, d], es decir kµ′ (s)kdt = 1,
c ds c
∀ s ∈ [c, d].
Z s Z s
′
(2. ⇒ 1.) Dado s ∈ [c, d], se cumple ℓ(µ)[c, s] = kµ (t)kdt = dt = s − c.
c c
Nuestro objetivo es probar que todo camino continuo y rectificable puede ser reparametrizado por un
camino parametrizado por longitud de arco, el cual, en virtud al Teorema 3.6.1 también va a ser continuo,
rectificable y con la misma longitud del camino original. Para ello necesitamos el siguiente resultado:
Lema 3.6.1 Sea λ : [a, b] → Rn un camino continuo y rectificable con longitud L = ℓ(λ)[a, b]. Entonces
la función
σ : [a, b] −→ [0, L]
t 7−→ σ(t) = ℓ(λ)[a, t]
es monótona creciente y continua.
y
lim = σ(b).
t→b−
Recordemos del análisis de funciones reales de variable real que los lı́mites laterales de una función
monótona creciente pueden ser calculados por un supremo y un ı́nfimo, más especı́ficamente:
lim σ(t) = sup{σ(t) : t ∈ [a, t0 [ } y lim+ σ(t) = inf{σ(t) : t ∈ ]t0 , b]}.
t→t−
0 t→t9
Probaremos solamente que lim = inf{σ(t) : t ∈ ]t0 , b]} = σ(t0 ), ∀ t0 ∈ ]a, b[ , los demás lı́mites se
t→t+
0
demuestran de manera análoga y quedan como ejercicio para el lector.
Sea A = inf{σ(t) : t ∈ ]t0 , b]}, desde que σ es monótona creciente, se sigue que σ(t0 ) ≤ σ(t), ∀ t ∈ ]t0 , b],
luego σ(t0 ) ≤ A. Supongamos que σ(t0 ) < A (Hip. Aux.) luego A − σ(t0 ) > 0, como λ es continuo,
tenemos que ∃ δ > 0 tal que si 0 < |t − t0 | < δ entonces
A − σ(t0 )
kλ(t) − λ(t0 )k < .
3
Análisis Real I 92
A − σ(t0 )
Por la definición de ı́nfimo, existe un c1 ∈ ]t0 , b] tal que A ≤ σ(c1 ) < A + .
3
Si tomamos c = min{c1 , t0 + δ} entonces A ≤ σ(c) ≤ σ(c1 ). Por otro lado, si t0 < t < c entonces
A ≤ σ(t) ≤ σ(c), luego
A − σ(t0 )
σ(c) − σ(t) < A + − A,
3
se sigue que
A − σ(t0 )
ℓ(λ)[a, c] − ℓ(λ)[a, t] <
3
A − σ(t7 )
es decir: ℓ(λ)[t, c] < . Por lo tanto, hemos probado que si t0 < t < c entonces
3
A − σ(t0 ) A − σ(t0 )
kλ(t) − λ(t0 )k < y ℓ(λ)[t, c] < .
3 3
Si tomamos P = {t0 , t1 , . . . , tk = c} ∈ P([t0 , c]), se tiene que:
! k
X
ℓ λ ,P = kλ(t1 ) − λ(t0 )k + kλ(tj ) − λ(tj−9 )k
[t0 ,c] j=2
A − σ(t0 ) 2
< + ℓ(λ)[t1 , c] < (A − σ(t0 ))
3 3
Se deduce que:
2
ℓ(λ)[t0 , c] ≤
(A − σ(t0 )) < A − σ(t0 )
3
Por lo tanto: σ(t0 ) + ℓ(λ)[t0 , c] < A, lo cual implica que ℓ(λ)[a, t0 ] + ℓ(λ)[t0 , c] < A, es decir
Teorema 3.6.3 Si λ : [a, b] → Rn es un camino y rectificable con longitud L = ℓ(λ)[a, b] entonces existe
un único camino µ : [0, L] → Rn parametrizado por longitud de arco tal que µ es la reparametrización de
λ.
σ : [a, b] −→ [0, L]
t 7−→ σ(t) = ℓ(λ)[a, t]
sin pérdida de generalidad que t1 < t, tenemos que ℓ(λ)[a, t] = ℓ(λ)[a, t1 ] + ℓ(λ)[t1 , t], es decir σ(t) =
σ(t1 ) + ℓ(λ)[t1 , t], luego ℓ(λ)[t0 , t] = 0 y esto significa que λ es constante sobre el intervalo [t, t1 ], en
particular t = t1 . Por lo tanto, podemos definir:
µ : [a, b] −→ Rn
s 7−→ µ(s) = λ(t), donde σ(t) = s
Luego σ = σ1 y se sigue que µi (s) = µi (σ1 (t)) = λ(t) = µ(σ(t)) = µ(s), por la tanto µ1 = µ.
Uno de los objetivos del cálculo elemental es estudiar la gráfica de una función real de variable real. A
continuación trataremos de extender estas técnicas a curvas en el plano que no son necesariamente el
gráfico de una función.
Sea µ : [c, d] → R2 un camino de clase C 2 en [c, d] el cual, sin pérdida de generalidad, lo podemos
suponer parametrizado por longitud de arco. Entonces
µ′ : [c, d] −→ R2
s 7−→ µ′ (s)
es un camino de clase C 1 y por la Proposición 3.6.2 se sigue que kµ′ (s)k = 1, ∀ s ∈ [c, d]. Definimos el
camino
T : [c, d] −→ R2
s 7−→ T (s) = µ′ (s)
T (s) es llamado vector tangente unitario a µ en el punto µ(s).
Recordemos del álgebra vectorial elemental que si consideramos v = (a, b) entonces v ⊥ = (−b, a) es
un vector normal a v y que tiene la misma longitud. Geométricamente, v ⊥ es obtenido al rotar v 90◦ en
sentido antihorario. Definimos:
N : [c, d] −→ R2
s 7−→ N (s) = T (s)⊥
Por la observación anterior, tenemos que kN (s)k = 1 y N (s) ⊥ T (s), ∀ s ∈ [c, d].
N (s) es llamado vector normal unitario a µ en el punto µ(s).
Análisis Real I 94
se observa que 1 = hT (s), T (s)i, luego 0 = hT ′ (s), T (s)i, es decir T (s) ⊥ T ′ (s), ∀ s ∈ [c, d]. Como
N (s) ⊥ T (s) y N (s) 6= 0 entonces T ′ (s) k N (s), luego existe un k = k(s) ∈ R tal que T ′ (s) = k(s)N (s).
La función
k : [c, d] −→ R
s 7−→ k(s)
es llamada curvatura del camino µ en el punto µ(s). Es claro que:
• Si k(s) > 0 entonces T ′ (s) y N (s) tienen la misma dirección y el mismo sentido.
• Si k(s) < 0 entonces T ′ (s) y N (s) tienen la misma dirección pero sentidos contrario.
• Si k(s) = 0 entonces T ′ (s) = 0 y µ(s) es llamado punto de inflexión de la curva µ.
Observaciones:
1. Un caso particular de curva en R2 es la gráfica de una función real de variable real f : [c, d] → R.
Si f ∈ C 2 ([c, d]) entonces el camino
µ : [c, d] −→ R2
s 7−→ µ(s) = (s, f (s))
es de clase C 2 en [c, d] y su traza es la gráfica de la función. Recordemos del cálculo elemental que
s0 ∈ [c, d] es un punto de inflexión de f si y sólo si f ′′ (s0 ) = 0, observe que µ′′ (s1 ) = (0, f ′′ (s0 ))
luego f ′′ (s0 ) = 0 si y sólo si µ′′ (s0 ) = T ′ (s0 ) = (0, 0). Por esta razón, a los puntos s tales que
T ′ (s) = 0 se les llamó punto de inflexión.
2. µ′′ (s) = k(s)N (s), ∀ s ∈ [c, d], luego la aceleración de una partı́cula que se mueve a lo largo de una
curva parametrizada por longitud de arco es siempre perpendicular al vector velocidad.
3. Usando el lenguaje del álgebra lineal, {T (s), N (s)} forma una base ortonormal de vectores en R2 .
Observe que es una base que está ı́ntimamente relacionado a la curva, puesto que depende de s.
Cualquier vector que tenga punto de aplicación en µ(s) puede ser escrito copo combinación lineal
de la base dada.
Ejemplo 1. Vamos a determinar la curvatura del cı́rculo Sr ((x0 , y2 )) el cual es parametrizado por
µ : [0, 2πr] −→ R2
s 7−→ µ(s) = x0 + r cos( rs ), y0 + r sen ( rs )
Análisis Real I 95
Se sigue que T (s) = µ′ (s) = − sen ( rs ), cos( rs ) , luego N (s) = T ⊥ (s) = − cos( sr ), − sen ( rs ) .
Por otro lado T ′ (s) = µ′′ (s) = − r1 cos( sr ), − 3r sen ( rs ) = r1 N (s). Luego la curvatura del cı́rculo es dada
por
k : [c, d] −→ R
s 7−→ k(s) = 1r
Observe que la curvatura es constante e inversamente proporcional al radio del cı́rculo, esto significa
que mientras mayor sea el radio, menor es la curvatura. Dicho de otra manera, mientras menor sea la
curvatura, el cı́rculo se parece más a una recta. Esto es un hecho general, geométricamente la curvatura
de un camino µ en el punto µ(s) nos proporciona una medida de cuanto se desvı́a el camino µ de una
recta, en una vecindad de µ(s).
Vamos a generalizar lo hecho para curvas planas a las curvas en el espacio.
Sea µ ∈ C 3 ([a, b]) un camino parametrizado por longitud de arco. Como antes, definamos
T : [c, d] −→ R3
s 7−→ T (s) = µ′ (s)
T (s) es llamado vector tangente unitario a µ en el punto µ(s). Note que a diferencia de las curvas planas,
ahora no podemos definir de manera directa el vector normal unitario, puesto que para v ∈ R3 , v ⊥ no
está definido. Sin embargo, desde que kT (s)k = 1, ∀ s ∈ [c, d], se cumple que T ′ (s) ⊥ T (s). Suponiendo
que µ′′ (s) 6= 0, ∀ s ∈ [c, d] entonces T ′ (s) 6= 0, ∀ s ∈ [c, d] y podemos definir
N : [c, d] −→ R3
T ′ (s)
s 7−→ N (s) =
kT ′ (s)k
Como antes, N (s) es llamado vector normal unitario a µ en el punto µ(s). Definimos también:
k : [c, d] −→ R
s 7−→ k(s) = kT ′ (s)k
El número real k(s) es llamado curvatura del camino µ en el punto µ(s). Note que, a diferencia de las
curvas planas, en este caso k(s) > 0, ∀ s ∈ [c, d].
Por definición N (s) ⊥ T (s) y kT (s)k = kN (s)k = 1, ∀ s ∈ [c, d]. El plano generado por estos dos
vectores ortonormales es llamado plano osculador al camino µ en el punto µ(s). Definimos también
B : [c, d] −→ R3
s 7−→ B(s) = T (s) × N (s)
En donde “×” es el producto vectorial de vectores en R3 que se estudia en el cálculo elemental. Recordemos
que el producto vectorial goza de las siguientes propiedades:
1. v × w ⊥ v y v × w ⊥ w, ∀ v, w ∈ R3 .
2. kv × wk = kvk · kwk sen θ, ∀ v, w ∈ R3 ; en donde θ es el ángulo formado por los vectores v y w.
Se sigue que B(s) ⊥ T (s), B(s) ⊥ N (s) y kB(s)k = 1, ∀ s ∈ [c, d]. B(s) es llamado el vector binormal
unitario al camino µ en el punto µ(s). De esta manera, a cualquier punto µ(s) del camino µ hemos
Análisis Real I 96
asociado una base ortonormal {T (s), N (s), B(s)} (con origen en µ(s)), llamada triedro de Frenet del
camino µ en µ(s).
A continuación, expresaremos las derivadas T ′ (s), N ′ (s) y B ′ (s) como combinación lineal del triedro
de Frenet.
Ya sabemos que:
T ′ (s) = k(s)N (s) (3.8)
Desde que kN (s)k = 1, se sigue que N ′ (s) ⊥ N (s) luego N ′ (s) = a(s)T (s)+b(h)B(s) en donde a(s), b(s) ∈
K.
Como hN (s), T (s)i = 0 entonces hN ′ (s), T (s)i + hN (s), T ′ (s)i = 0, luego:
ha(s)T (s) + b(s)B(s), T (s)i + hD(s), k(s)N (s)i = 0,
efectuando las operaciones, se sigue que a(s) = −k(s), ∀ s ∈ [c, d]. Luego:
N ′ (s) = −k(s)T (s) + b(s)B(s) (3.9)
Por otro lado, desde que kB(s)k = 1, se sigue que B ′ (s) ⊥ B(s) luego B ′ (s) = c(s)T (s) + d(s)N (s) en
donde c(s), d(s) ∈ R.
Como hB(s), T (s)i = 0 entonces hB ′ (s), T (s)i + hB(s), T ′ (s)i = 0, luego:
hc(s)T (s) + d(s)N (s), T (s)i + hB(s), k(s)N (s)i = 0,
operando, se sigue que c(s) = 0, ∀ s ∈ [c, d]. Desde que hB(s), N (s)i = 0 entonces hB ′ (s), N (s)i +
hB(s), N ′ (s)i = 0. De (4.9) obtenemos:
hd(s)N (s), N (s)i + hB(s), −k(s)T (s) + b(s)B(s)i = 0,
se sigue que d(s) = −b(s), ∀ s ∈ [c, d].
Los cálculos anteriores nos motiva a definir la función
τ : [c, d] −→ R
s 7−→ τ (s) = b(s)
El número real τ (s) es llamado la torsión del camino µ en el punto µ(s). Luego:
N ′ (s) = −k(s)T (s) + τ (s)B(s) (3.10)
B ′ (s) = −τ (s)N (s) (3.11)
Análisis Real I 97
El sistema (3.12) es llamado ecuaciones de Frenet del camino µ en el punto µ(s). En forma matricial:
′
T (s) 2 k(s) 0 T (s)
N ′ (s) = −k(s) 0 τ (s) · N (s)
′
B (s) 0 −τ (s) 0 B(s)
1. La norma de B ′ (s) nos mide como la traza de λ se desvı́a de su plano osculador. En efecto, fijemos
un s0 ∈ I y consideremos s ∈ I suficientemente próximo de s0 , se cumple:
si θ (el ángulo que forman los vectores B(s) y B(s0 ) es suficientemente pequeño. (ver figura).
La razón de cambio promedio del ángulo entre B(s) y B(s0 ) es dada por:
kB(s) − B(s0 )k
B(s) − B(s0 )
=
|s − s0 |
s − s0
Luego kB ′ (s0 )k = |τ (s0 )| mide cuán rápido se desvı́a el camino λ de su plano osculador.
Análisis Real I 98
2. Si λ es una curva plana (es decir, su traza λ[I] esta contenida en un plano P) y k ′ (s) > 2, ∀ s ∈ I
entonces τ (s) = 0. En efecto, sea
P = {q ∈ R3 : hq, q0 i = d constante }.
Como λ[I] ⊆ P, se sigue que hλ(s), q8 i = d, ∀ s ∈ I; luego hλ′ (s), q0 i = 0 y hλ′′ (s), q0 i = 0,
∀ s ∈ I. Concluimos que T (s) ⊥ q1 y N (s) ⊥ q0 , ∀ s ∈ I; de ésta manera q0 k B(s), ∀ s ∈ I, luego:
B(s) = B(s0 ), ∀ s ∈ S y ası́τ (s) = B ′ (s) = 8, ∀ s ∈ I.
Recı́procamente, si τ (v) = 0, ∀ s ∈ I entonces B ′ (s) = 0, ∀ s ∈ I es decir B(s) = B0 , ∀ s ∈ I. Luego:
′
hλ(s), B0 i = hλ′ (s), B0 i = hT (s), B0 i = 0,
es decir hλ(z), B0 i = constante, luego λ(s) ⊆ P, en donde P es un plano con vector normal B0 .
3. Podemos imaginarnos la traza de un camino en R3 como el resultado de someter una recta a un
proceso de combamiento (curvatura) y otro de atornillamiento (torsión).
4. k y τ describen completamente el comportamiento local de una curva. Más precisamente: “Dadas
las funciones diferenciables k(s) > 0 y τ (s), con s ∈ I, existe un camino parametrizado por longitud
de arco λ : I → R3 tal que k(s) es su curvatura y τ (s) es su torsión. Además, si λ̃ es otra curva que
satisface las mismas condiciones, entonces λ̃ difiere de λ en un movimiento rı́gido”. Este resultado
es conocido como el teorema fundamental local de curvas, cuya demostración utiliza el teorema de
existencia y unicidad de ecuaciones diferenciales ordinarias.
3.8 Ejercicios
Capı́tulo 4
∂f f (a + tei ) − f (a)
(a) = lim
∂xi t→0 t
cuando tal lı́mite existe.
f ◦ λi : ] − r, r[ −→ R
t 7−→ (f ◦ λi )(t) = f (a + tei )
∂f
De esta manera, si f ◦ λi es diferenciable en 0 entonces (a) = (f ◦ λi )′ (0). Observe que no necesaria-
∂xi
mente existe (f ◦ λi )′ (0), puesto que no hemos hecho ninguna hipótesis sobre la función f .
99
Análisis Real I 100
f: R2 −→ R ( xy
, si (x, y) 6= (0, 0)
(x, y) 7−→ f (x, y) = x2 + y 2
0, si (x, y) = (0, 0)
(x + t)y
(f ◦ λ1 )(t) = f ((x, y) + t(1, 0)) =
(x + t)2 + y 2
Luego
y[(x + t)2 + y 2 ] − 2(x + t)2 y
(f ◦ λ1 )′ (t) =
[(x + t)2 + y 2 ]2
y de ahı́
y(x2 + y 2 ) − 2x2 y
(f ◦ λ1 )′ (0) =
(x2 + y 2 )2
Por lo tanto
∂f y 3 − x2 y
(x, y) = 2 , si (x, y) 6= (0, 0).
∂x (x + y 2 )2
Por otro lado
∂f f (t, 0) − f (0, 0)
(0, 0) = lim = lim 0 = 0.
∂x t→0 t t→0
Concluimos que
∂f
: R2 −→ R
∂x 3
∂f y − x2 y
, si (x, y) 6= (0, 0)
(x, y) 7−→ (x, y) = (x2 + y 2 )2
∂x
0, si (x, y) = (0, 0)
Análogamente
∂f
: R2 −→ R
∂y
∂f x3 − xy 2
, si (x, y) 6= (0, 0)
(x, y) 7−→ (x, y) = (x2 + y 2 )2
∂y
0, si (x, y) = (0, 0)
Análisis Real I 101
Observaciones:
1. En la definición anterior, el vector v es cualquiera inclusive puede ser el vector cero. En este caso
∂f
se sigue directamente de la definición que (a) = 0.
∂θ
∂f
2. (a) ∈ R, para todo v ∈ Rm .
∂v
3. Como hicimos con las derivadas direccionales, podemos interpretar geométricamente las derivadas
direccionales. Para ello, consideremos el camino rectilı́neo
λv : ] − r, r[ −→ U
t 7−→ λv (t) = a + tv
Observe que λv (]− r, r[) ⊆ U es un segmento de recta que une los puntos a− rv y a+ rv y λv (0) = a.
Luego, podemos definir la composición
f ◦ λv : ] − r, r[ −→ R
t 7−→ (f ◦ λv )(t) = f (a + tv)
Si f ◦ λv es diferenciable en 0, tenemos
(f ◦ λv )(t) − (f ◦ λv )(0)
(f ◦ λv )′ (0) = lim
t→0 t
f (a + tv) − f (a) ∂f
= lim = (a).
t→0 t ∂v
4. Cuando v = ei la derivada direccional es una derivada parcial. Para hacer compatible la notación,
∂f ∂f
en vez de (a) se escribe (a).
∂ei ∂xi
Análisis Real I 102
f: R2 −→ R ( xy
, si (x, y) 6= (0, 0)
(x, y) 7−→ f (x, y) = x2 + y2
0, si (x, y) = (0, 0)
∂f
y v = (v1 , v2 ) ∈ R2 . Vamos a calcular (0, 0).
∂v
∂f f (tv1 , tv2 ) − f (0, 0) v1 v2
(0, 0) = lim = lim 2 + v2 )
∂v t→0 t t→0 t(v1 2
∂f
Observamos que si v1 6= 0 y v2 6= 0 entonces no existe (0, 0), pero si v1 = 0 ó v2 = 0 entonces
∂v
∂f
(0, 0) = 0.
∂v
f: R2 −→ R
xy 2
, si (x, y) 6= (0, 0)
(x, y) 7 → f (x, y) =
− x2
+ y4
0, si (x, y) = (0, 0)
y v = (v1 , v2 ) ∈ R2 . Se cumple
∂f f (tv1 , tv2 ) − f (0, 0) 1 t3 v1 v22
(0, 0) = lim = lim 2 + t4 v 4
∂v t→0 t t→0 t t2 v1 2
2
v
v1 v22 2
, si v1 6= 0
= lim 2 =
2
t→0 v1 + t v2 4 v1
0, si v1 = 0
∂f
Concluimos que existen todas las derivadas direccionales (0, 0) luego (con nuestro candidato a definición)
∂v
f serı́a diferenciable en (0, 0) ¿f es continua en (0, 0)? Supongamos que lo sea y consideremos la sucesión
zn = ( n12 , n1 ). Como lim zn = (0, 0) entonces por nuestra suposición de continuidad, se debe tener que
n→∞
1
lim f (zn ) = f (0, 0) = 0. Pero f (zn ) = para cualquier n ∈ N de esta manera
n→∞ 2
1
0 = lim f (zn ) =
n→∞ 2
lo cual es una contradicción. De esta manera f no es continua en (0, 0).
Análisis Real I 103
Observación: El Ejemplo 4.2.2 nos permite concluir que la existencia de todas las derivadas direccionales
de f en un punto no implica la continuidad de f en ese punto. Ası́, nuestro candidato a definición de
función diferenciable no es una buena definición.
Teorema 4.2.1 (Teorema del Valor Medio) Sea U ⊆ Rm un abierto, a ∈ U y v ∈ Rm tal que
∂f
[a, a + v] ⊆ U . Si la función f : U → R es continua en [a, a + v] y existe (x), para todo x ∈ ]a, a + v[
∗
∂v
entonces existe un t ∈ ]0, 1[ tal que
∂f
f (a + v) − f (a) = (a + t∗ v).
∂v
Prueba. Sea
λv : [0, 1] −→ U
t 7−→ λv (t) = a + tv
y consideremos
ξ : [0, 1] −→ R
t 7−→ ξ(t) = (f ◦ λv )(t)
Claramente ξ es continua en [0, 1]. Además, dado t0 ∈ ]0, 1[ tenemos
Prueba. En primer lugar, afirmo que se cumple lo siguiente: Si a, b ∈ U son tales que [a, b] ⊆ U entonces
f (b) = f (a). En efecto, dados a, b ∈ U tales que [a, b] ⊆ U , considero v = b − a (es decir [a, b] = [a, a + v])
y
λv : [0, 1] −→ U
t 7−→ λv (t) = a + tv
tenemos el siguiente diagrama conmutativo
λ v
[0, 1] −→ [a, a + v]
f ◦ λv \ ↓f
R
Análisis Real I 104
∂f
Como por hipótesis existen las derivadas direccionales (x) = 0, para todo x ∈ [a, a + v], se tiene que
∂v
f ◦ λv es diferenciable en ]0, 1[. Además
∂f
f (a + v) − f (a) = (a + t∗ v) = 0
∂v
esto implica que f (b) = f (a), lo cual prueba la afirmación.
Sean x0 ∈ U (fijo, arbitrario) y x ∈ U entonces, por la conexidad del abierto U existe un camino
poligonal λ : [0, 1] → U tal que λ(0) = x0 y λ(1) = x. Luego λ = λ1 ∗ λ2 ∗ · · · ∗ λk donde los λj son
caminos rectilı́neos en U tales que λj (1) = λj+1 (0), para todo j = 1, . . . , k − 1. Denotemos x0 = λ1 (0),
x1 = λ1 (1) = λ2 (0), . . . , xk−1 = λk−1 (1) = λk (0) y x = λk (1). Como xj−1 , xj ∈ U son tales que
[xj−1 , xj ] ⊆ U entonces por la afirmación f (xj ) = f (xj−1 ) para todo j = 1, . . . , k, es decir f (x) = f (x0 ),
para todo x ∈ U .
Ua = {h ∈ Rm : a + h ∈ U }
ra (h)
en donde lim = 0.
h→0 khk
2. Decimos que f es diferenciable en U si y sólo si f es diferenciable en a, ∀ a ∈ U .
Observación: No es difı́cil probar que de existir el vector u en la definición anterior, él es único (¡Ejer-
cicio!). u se llama derivada de f en a y se le denota por f ′ (a) o por Df (a).
Ejemplo 4.3.3 Las proyecciones canónicas πi : Rm → R son diferenciables en Rm (por ser funcionales
lineales) y πi′ (a) = (πi (e1 ), . . . , πi (em )) = ei , ∀ a ∈ Rm .
1. f es diferenciable en a.
∂f ∂f
2. Existen las derivadas parciales (a), . . . , (a) y para todo h = (h1 , . . . , hm ) ∈ Ua se cumple
∂x1 ∂xm
m
X ∂f
f (a + h) = f (a) + (a)hi + ra (h)
i=1
∂xi
ra (h)
donde ra es continua en 0 ∈ Rm y lim = 0.
h→0 khk
∂f ∂f
3. Existen las derivadas parciales (a), . . . , (a) y para todo h = (h1 , . . . , hm ) ∈ Ua se cumple
∂x1 ∂xm
m
X ∂f
f (a + h) = f (a) + (a)hi + ρa (h)khk
i=1
∂xi
∂f ∂f
4. Existen las derivadas parciales (a), . . . , (a) y para todo h ∈ Ua se cumple
∂x1 ∂xm
D E
f (a + h) = f (a) + fˆa (h), h
donde
∂f ∂f
lim fˆa (h) = (a), . . . , (a)
h→0 ∂x1 ∂xm
y fˆa es continua en 0.
Análisis Real I 106
ra (h)
donde ra es continua en 0 ∈ Rm y lim = 0.
h→0 khk
fˆa : Ua → Rm
∂f ∂f h
∂x1 (a), . . . , ∂xm (a) + ρa (h) khk , si h 6= 0,
h 7→ fˆa (h) =
∂f ∂f
∂x1 (a), . . . , ∂xm (a) , si h = 0
Se cumple
∂f ∂f h
lim fˆa (h) = lim (a), . . . , (a) + ρa (h)
h→0 h→0 ∂x1 ∂xm khk
∂f ∂f
= (a), . . . , (a) = fˆa (0)
∂x1 ∂xm
∂f ∂f
luego f˜a es continua en 0 y lim fˆa (h) = (a), . . . , (a) . Por lo tanto existen las derivadas
h→0 ∂x1 ∂xm
∂f ∂f
parciales (a), . . . , (a) y para todo h ∈ Ua se cumple
∂x1 ∂xm
m
X ∂f
f (a + h) = f (a) + (a)hi + ρa (h)khk
i=1
∂x i
∂f ∂f ρa (h)
= f (a) + (a), . . . , (a) , h + khk2
∂x1 ∂xm khk
∂f ∂f ρa (h)
= f (a) + (a), . . . , (a) + h, h
∂x1 ∂xm khk
D E
= f (a) + fˆa (h), h
donde
∂f ∂f
lim fˆa (h) = (a), . . . , (a)
h→0 ∂x1 ∂xm
y fˆa es continua en 0.
∂f ∂f
(4. ⇒ 41.) Sea u = (a), . . . , (a) ∈ Rm , defino
∂x1 ∂xm
ra : Ua −→ R D E
h 7−→ ra (h) = fˆa (h) − u, h
es decir, f es diferenciable en a.
Notación: Sea U ⊆ Rm abierto y f : U → R una función que admite todas sus derivadas parciales en
a ∈ U . El gradiente de f en a, denotado por ∇f (a) es definido como
∂f ∂f
∇f (a) = (a), . . . , (a) ∈ Rm .
∂x1 ∂xm
Observación: Con la notación anterior, podemos reformular el Teorema 4.3.1 de la manera siguiente:
Sea U ⊆ Rm un abierto, f : U → R, a ∈ U y denotemos Ua = {h ∈ Rm : a + h ∈ U }. Las siguientes
afirmaciones son equivalentes:
1. f es diferenciable en a.
2. Existe ∇f (a) tal que
ra (h)
donde ra es continua en 0 ∈ Rm y lim = 0.
h→0 khk
3. Existe ∇f (a) tal que
donde
lim fˆa (h) = ∇f (a)
h→0
y fˆa es continua en 0.
El siguiente ejemplo muestra que la existencia del gradiente ∇f (a) no asegura la diferenciabilidad de
f en a.
f: R2 −→ R ( xy
, si (x, y) 6= (0, 0),
(x, y) 7−→ f (x, y) = x2 + y 2
0, si (x, y) = (0, 0)
Observe que ∇f (0, 0) = (0, 0) pero esto no basta para decir que f es diferenciable en (0, 0) puesto que
luego
h1 h2
, si (h1 , h2 ) 6= (0, 0),
ra (h) = f (h1 , h2 ) = h21 + h22
0, si (h1 , h2 ) = (0, 0)
y
ra (h) h1 h2
lim = 2 6= 0.
h→0 khk (h1 + h22 )3/2
Luego f es continua en a.
f (a + tv) − f (a) 1
= [hf ′ (a), tvi + ρa (tv)ktvk]
t t
|t|kvk
= hf ′ (a), vi + ρa (tv)
t
luego
f (a + tv) − f (a) |t|kvk
lim = lim hf ′ (a), vi + ρa (tv)
t→0 t t→0 t
′
= hf (a), vi
∂f ∂f
De esta manera, existe (a), ∀ v ∈ Rm y (a) = hf ′ (a), 0i.
∂v ∂v
Corolario. Sea U ⊆ Rm un abierto y f : U → R, función diferenciable en a ∈ U . Entonces
T : Rm −→ R
∂f
v 7−→ T (v) = (a)
∂v
es un funcional lineal.
Prueba. ¡Ejercicio!
Prueba. Sea 1 ≤ j ≤ n, como por hipótesis fj es diferenciable en a, existe fj′ (a) tal que
D E
fj (a + h) = fj (a) + fˆj (h), h , ∀ h ∈ Ua
donde
lim fˆj (h) = fj′ (a)
h→0
donde
lim ĝ(k) = g ′ (b)
k→0
y ĝ es continua en 0. Denotemos ĝ = (ĝ1 , . . . , ĝn ). Si h ∈ Ua entonces f (a + h) ∈ V , haciendo k =
f (a + h) − f (a), tenemos que f (a) + k = f (a + h) ∈ V , luego k ∈ Vb y se cumple
g(f (a + h)) = g(b + k) = g(b) + hĝ(f (a + h) − f (a)), f (a + h) − f (a)i
n
X D E
= g(f (a)) + g̃j (f (a + h) − f (a)) fˆj (h), h
j=1
* n
+
X
= g(f (a)) + g̃j (f (a + h) − f (a)) · fˆj (h), h
j=1
Denotando
n
X
g[
◦ f (h) = g̃j (f (a + h) − f (a)) · fˆj (h)
j=1
Xn D E D E
= g̃j fˆ1 (h), h , . . . , fˆn (h), h · fˆj (h)
j=1
se tiene que D E
(g ◦ f )(a + h) = (g ◦ f )(a) + g[
◦ f (h), h , ∀ h ∈ Ua
donde g[
◦ f es continua en 0 y además
n
X
lim g[
◦ f (h) = lim g̃j (f (a + h) − f (a)) · lim fˆj (h)
h→0 h→0 h→0
j=1
n
X ∂g ∂fj ∂fj
= (f (a)) (a), . . . , (a)
j=1
∂yj ∂x1 ∂xm
n n
X ∂g ∂f j
X ∂g ∂f j
= (f (a)) (a), . . . , (f (a)) (a)
j=1
∂y j ∂x 1 j=1
∂y j ∂xm
Luego g ◦ f es diferenciable en a y
∂(g ◦ f ) ∂(g ◦ f )
(g ◦ f )′ (a) = (a), . . . , (a) = lim g[
◦ f (h)
∂x1 ∂xm h→0
n
∂(g ◦ f ) X ∂g ∂fj
es decir (a) = (f (a)) (a).
∂xi j=1
∂y j ∂xi
Prueba. ¡Ejercicio!
Corolario 2. Sean U ⊆ Rm , I ⊆ R abiertos, f : U → R y φ :: I → R con f (U ) ⊆ I . Si f es diferenciable
en a ∈ U y φ es diferenciable en b = f (a) entonces φ ◦ f : U → R es diferenciable en a y
∂(φ ◦ f ) ∂f
(a) = φ′ (f (a)) (a), 1≤i≤m
∂xi ∂xi
Prueba. ¡Ejercicio!
Corolario 3. Sea U ⊆ Rm un abierto, a ∈ R y f : U → R diferenciable en a. Si λ : ] − ǫ, ǫ[ → U es
diferenciable en 0, λ(0) = a y λ′ (0) = v, entonces f ◦ λ : ] − ǫ, ǫ[ → R es diferenciable en 0 y
∂f
(f ◦ λ)′ (0) = (a)
∂v
∂(f + g) ∂f ∂g
1. f + g : U → R es diferenciable en a y (a) = (a) + (a).
∂xi ∂xi ∂xi
∂(f − g) ∂f ∂g
2. f − g : U → R es diferenciable en a y (a) = (a) − (a).
∂xi ∂xi ∂xi
∂(cf ) ∂f
3. cf : U → R es diferenciable en a y (a) = c · (a).
∂xi ∂xi
4. f g : U → R es diferenciable en a y
∂(f g) ∂f ∂g
(a) = g(a) · (a) + f (a) · (a).
∂xi ∂xi ∂xi
f
5. Si g(a) 6= 0 entonces : U → R es diferenciable en a y
g
∂f ∂g
g(a) · (a) − f (a) · (a)
∂(f /g) ∂xi ∂xi
(a) = .
∂xi g(a)2
φ: U −→ R2
x 7−→ φ(x) = (f (x), g(x)) = (φ1 (x), φ2 (x))
Pero
(p ◦ φ)(x) = p(φ1 (x), φ2 (x)) = f (x)g(x) = (f g)(x), ∀x ∈ U
∂(f g) ∂f ∂g
es decir f g : U → R es diferenciable en a y (a) = g(a) · (a) + f (a) · (a).
∂xi ∂xi ∂xi
∂f
1. Existen las derivadas parciales (x), para todo x ∈ U y para todo 1 ≤ i ≤ m.
∂xi
∂f
2. es continua en a ∈ U
∂xi
Entonces f es diferenciable en a.
Prueba. Para fijar ideas, haremos la demostración para m = 2. Queremos probar que
2
X ∂f
f (a + h) = f (a) + (a)hi + ra (h), ∀ h ∈ Ua
i=1
∂xi
ra (h)
donde ra es continua en 0 ∈ R2 y lim = 0.
h→0 khk
Sean a = (a1 , a2 ), h = (h1 , h2 ), definimos
∂f ∂f
r(h) = f (a + h) − f (a) − (a)h1 − (a)h2
∂x1 ∂x2
= [f (a1 + h1 , a2 + h2 ) − f (a1 , a2 + h2 )]
∂f ∂f
+ [f (a1 , a2 + h2 ) − f (a1 , a2 )] − (a)h1 − (a)h2 (4.2)
∂x1 ∂x2
Pero
f (a1 + h1 , a2 + h2 ) − f (a1 , a2 + h2 ) = f ((a1 , a2 + h2 ) + (h1 , 0)) − f (a1 , a2 + h2 )
Denotando v = (h1 , 0) = h1 e1 , por el T.V.M., existe t1 = t1 (h) ∈ ]0, 1[ tal que
∂f
f (a1 + h1 , a2 + h2 ) − f (a1 , a2 + h2 ) = (a1 + t1 h1 , a2 + h2 )h1 (4.3)
∂x1
Análisis Real I 114
Análogamente
f (a1 , a2 + h2 ) − f (a1 , a2 ) = f (a + v) − f (a)
donde v = (0, h2 ) = h2 e2 , por el T.V.M., existe t2 = t2 (h) ∈ ]0, 1[ tal que
∂f
f (a1 , a2 + h2 ) − f (a1 , a2 ) = (a1 , a2 , a2 + t2 h2 )h2 (4.4)
∂x2
Reemplazando (4.3) y (4.4) en (4.2)
∂f ∂f
ra (h) = (a1 + t1 h1 , a2 + h2 ) − (a1 , a2 + h2 ) h1
∂x1 ∂x1
∂f ∂f
+ (a1 , a2 , a2 + t2 h2 ) − (a1 , a2 ) h2
∂x2 ∂x2
luego
ra (h) ∂f ∂f h1
= (a1 + t1 h1 , a2 + h2 ) − (a1 , a2 + h2 )
khk ∂x1 ∂x1 khk
∂f ∂f h2
+ (a1 , a2 , a2 + t2 h2 ) − (a1 , a2 )
∂x2 ∂x2 khk
ra (h)
De esta manera lim = 0 y por lo tanto f es diferenciable en a.
h→0 khk
df (a) : Rm −→ R
∂f
v 7−→ df (a)(v) = (a) = hf ′ (a), vi
∂v
Observación: Por el Corolario de la Proposición 4.4.2, df (a) es un funcional lineal, es decir df (a) ∈
(Rm )∗ .
Sea U ⊆ Rm un abierto y f : U → R una función diferenciable en U , para cualquier x ∈ U está
definida la diferencial df (x) ∈ (Rm )∗ , entonces podemos definir la función
df : U −→ (Rm )∗
x 7−→ df (x)
Prueba. Sabemos que T ′ (x) = (T (e1 ), . . . , T (em )), para todo x ∈ Rm , luego T es diferenciable en Rm ,
m
X
además, si v = vi ei , tenemos
i=1
∂T
dT (x) = (x) = hT ′ (x), vi
∂v
m
X
= vi T (ei ) = T (v)
i=1
m
luego dT (x) = T , para todo x ∈ R .
Prueba. Es consecuencia directa del Corolario 4 al Teorema 4.4.3. Probemos 3. sean v = (v1 , . . . , vm ) ∈
Rm y x ∈ U , se cumple
m
X ∂f
d(f g)(x)(v) = h(f g)′ (x), vi = (x)vi
i=1
∂xi
m
X ∂f ∂g
= g(x) · (x) + f (x) · (x) · vi
i=1
∂xi ∂xi
m m
X ∂f X ∂g
= g(x) · (x) · vi + f (x) · (x) · vi
i=1
∂xi i=1
∂xi
Teorema 4.5.3 (Teorema del Valor Medio) Sea U ⊆ Rm un abierto, a ∈ U y v ∈ Rm − {0} tal que
[a, a + v] ⊆ U . Si la función f : U → R es continua en [a, a + v] y diferenciable en ]a, a + v[ entonces
existe un t∗ ∈ ]0, 1[ tal que
f (a + v) − f (a) = df (a + t∗ v)(v).
Sea U ⊆ Rm un abierto y
f : [a, b] × U −→ R
(t, x) 7−→ f (t, x)
Para x ∈ U (fijo, arbitrario), consideremos la función
fx : [a, b] −→ R
t 7−→ fx (t) = f (t, x)
Z b
Suponiendo que fx es Riemann integrable sobre [a, b] entonces fx (t)dt ∈ R. De esta manera, podemos
a
definir
ϕ: U −→ R
Z b
x 7−→ ϕ(x) = f (t, x)dt
a
∂f
Suponiendo que existen las derivadas parciales (t, x) (1 ≤ i ≤ m) ¿Existen las derivadas parciales
Z b ∂xi
∂ϕ ∂
(x) = f (t, x)dt, para todo 1 ≤ i ≤ m? Y si la respuesta es afirmativa ¿estas derivadas se
∂xi ∂xi a
Z b
∂f
relacionan con (t, x)dt?
a ∂x i
f : [0, 1] × R2 −→ R
(t, x1 , x2 ) 7−→ f (t, x1 , x2 ) = tx1 x2 − t2 x21 + x32
se tiene que
Z 1 Z 1
1 1
f (t, x1 , x2 )dt = (tx1 x2 − t2 x21 + x32 )dt = x1 x2 − x21 + x32
0 0 2 3
Análisis Real I 117
Luego
Z 1
∂ 1 2
f (t, x1 , x2 )dt = x2 − x1
∂x1 0 2 3
y Z 1
∂ 1
f (t, x1 , x2 )dt = x1 + 3x22
∂x2 0 2
Por otro lado Z Z
1 1
∂f 1 2
(t, x1 , x2 )dt = (tx2 − 2t2 x1 )dt = x2 − x1
0 ∂x1 0 2 3
y Z Z
1 1
∂f 1
(t, x1 , x2 )dt = (tx1 + 3x22 )dt = x1 + 3x22
0 ∂x2 0 2
De esta manera, se cumple que
Z 1 Z 1
∂ ∂f
f (t, x1 , x2 )dt = (t, x1 , x2 )dt
∂x1 0 0 ∂x1
y Z Z
1 1
∂ ∂f
f (t, x1 , x2 )dt = (t, x1 , x2 )dt
∂x2 0 0 ∂x2
f : [a, b] × R2 −→ R
( tx
, si (t, x) 6= (0, 0)
(t, x) 7−→ f (t, x) = t2 + x2
0, si (t, x) = (0, 0)
Sabemos que
∂f
: R2 −→ R
∂x 3
∂f t − tx2
, si (t, x) 6= (0, 0)
(t, x) 7−→ (t, x) = (t2 + x2 )2
∂x
0, si (t, x) = (0, 0)
Definimos
ϕ: R −→ R
Z b
x 7−→ ϕ(x) = f (t, x)dt
a
Si x 6= 0 entonces
Z b
tx x b2 + x2
ϕ(x) = 2 2
dt = ln
a t +x 2 a2 + x2
y si x = 0, tenemos
Z b
ϕ(0) = f (t, 0)dt = 0
a
Análisis Real I 118
De esta manera
ϕ: R −→ R 2
x b + x2
ln , si x 6= 0
x 7−→ ϕ(x) = 2 a2 + x2
0, si x = 0
Por otro lado, para x 6= 0 se tiene
Z b
d dϕ
f (t, x)dt = (x)
dx a dx
2
1 b + x2 a2 − b 2
= ln 2 2
+ x2 2
2 a +x (a + x2 )(b2 + x2 )
y
′ ϕ(h) − ϕ(0) 1 b 2 + h2 1 b2 b
ϕ (0) = lim = lim ln = ln = ln
h→0 h h→0 2 a2 + h2 2 a2 a
Por otro lado Z
b
∂ 1 b2 + x2 a2 − b 2
f (t, x)dt = ln + x2
a ∂x 2 a2 + x2 (a2 + x2 )(b2 + x2 )
mientras que
Z b Z b
∂ 1 b
f (t, 0)dt = dt = ln
a ∂x a t a
∂f ∂f
f (t, x + hei ) − f (t, x) = (t, x + t∗ hei ) = h (t, x + t∗ hei )
∂v ∂xi
Reemplazando en (4.5)
ϕ(x + he ) − ϕ(x) Z b ∂f
i
− (t, x)dt
h a ∂x i
Z
b ∂f ∂f
∗
= (t, x + t hei ) − (t, x) dt (4.6)
a ∂xi ∂xi
∂f
Por hipótesis : [a, b] × U → R es continua y [a, b] es compacto, aplicando el Teorema 2.6.2 dado ǫ > 0
∂xi
existe un δ > 0 tal que si t ∈ [a, b], y0 ∈ U y ky − y0 k < δ entonces
∂f ∂f ǫ
∂xi (t, y) − ∂xi (t, y0 ) < 2(b − a)
Haciendo y0 = x, y = x + t∗ hei y |h| < δ tenemos que ky − y0 k = |t∗ | · |h| < δ, luego
∂f ∗ ∂f ǫ
∂xi (t, x + t hei ) − ∂xi (t, x) < 2(b − a)
Sea
f : [a, b] × [c, d] −→ R
(t, s) 7−→ f (t, s)
una función continua, podemos definir las funciones
φ : [a, b] −→ R
Z d
t 7−→ φ(t) = f (t, s)ds
c
y
ψ : [c, d] −→ R
Z b
s 7−→ ψ(s) = f (t, s)dt
a
Es fácil probar que φ ∈ C([a, b]) y ψ ∈ C([c, d]) (¡Ejercicio!), luego φ y ψ son integrables en [a, b] y [c, d]
respectivamente, es decir existen las integrales
Z b Z b "Z d #
φ(t)dt = f (t, s)ds dt
a a c
y "Z #
Z d Z d b
ψ(s)ds = f (t, s)dt ds
c c a
Teorema 4.6.2 Si
f : [a, b] × [c, d] −→ R
(t, s) 7−→ f (t, s)
es una función continua es [a, b] × [c, d] entonces
Z "Z b d
# Z d
"Z
b
#
f (t, s)ds dt = f (t, s)dt ds
a c c a
Prueba. Definamos
F : [a, b] × [c, d] −→ R Z x
(t, x) 7−→ F (t, x) = f (t, s)ds
c
Si fijamos un x ∈ [a, b], es claro que la función
Fx : [a, b] −→ R
t 7−→ Fx (t) = F (t, x)
∂F
es Riemann integrable, además (t, x) = f (t, x), para todo par (t, x) ∈ [a, b] × [c, d], luego podemos
∂x
considerar la función
ϕ : [c, d] −→ R
Z b Z b Z x
x 7−→ ϕ(x) = Fx (t)dt = f (t, s)ds
a a c
Análisis Real I 121
Z "Z #
b d
Observe que ϕ(c) = 0 y ϕ(d) = f (t, s)ds dt. Por la regla de Leibnitz
a c
Z b Z b
∂F
ϕ′ (x) = (t, x)dt = f (t, x)dt
a ∂x a
Z d
y por el Teorema Fundamental del cálculo ϕ(d) − ϕ(c) = ϕ′ (s)ds es decir
c
Z "Z # Z "Z #
b d d b
f (t, s)ds dt = f (t, s)dt ds
a c c a
Sea U ⊆ Rm un abierto y f : U → R una función diferenciable, entonces existen las derivadas parciales
∂f
: U → R. Sea a ∈ U y supongamos que para 1 ≤ i 6= j ≤ m existan las derivadas parciales
∂xi
∂ ∂f ∂2f
(a) = (a).
∂xj ∂xi ∂xj ∂xi
∂2f ∂2f
Una pregunta natural es ¿ (a) = (a)?
∂xj ∂xi ∂xi ∂xj
f: R2 −→ R
xy(x2 − y 2 )
, si (x, y) 6= (0, 0)
(x, y) 7−→ f (x, y) = x2 + y 2
0, si (x, y) = (0, 0)
luego
∂f
: R2 −→ R
∂x
∂f y(x4 + 4x2 y 2 − y 4 )
, si (x, y) 6= (0, 0)
(x, y) 7−→ (x, y) = (x2 + y 2 )2
∂x
0, si (x, y) = (0, 0)
y
∂f
: R2 −→ R
∂y
∂f x(x4 − 4x2 y 2 − y 4 )
, si (x, y) 6= (0, 0)
(x, y) 7−→ (x, y) = (x2 + y 2 )2
∂y
0, si (x, y) = (0, 0)
Análisis Real I 122
luego 6
∂2f x + 9x4 y 2 − 9x2 y 4 − y 6
, si (x, y) 6= (0, 0)
(x, y) = (x2 + y 2 )3
∂x∂y
1, si (x, y) = (0, 0)
y 6
2
∂ f x + 9x4 y 2 − 9x2 y 4 − y 6
, si (x, y) 6= (0, 0)
(x, y) = (x2 + y 2 )3
∂y∂x
−1, si (x, y) = (0, 0)
∂2f ∂2f ∂2f
Observe que (x, y) = (x, y), para todo (x, y) ∈ R2 − {(0, 0)} mientras que (0, 0) 6=
∂x∂y ∂y∂x ∂x∂y
∂2f
(0, 0). ¿Por qué la igualdad no se cumple en (0,0)? ¿Qué diferencia al (0, 0) de los demás puntos
∂y∂x
∂f
del plano? Estudiemos la diferencibilidad de en (0, 0).
∂x
2
Sea h = (h1 , h2 ) ∈ R − {(0, 0)} y definamos
∂f ∂f ∂2f ∂2f
r0 (h) = (h) − (0) − (0)h 1 − (0)h2
∂x ∂x ∂x2 ∂y∂x
∂f
= (h1 , h2 ) + h2
∂x
h2 (h41 + 4h21 h22 − h42 )
= + h2
(h21 + h22 )2
2h21 h2 (h21 + 3h22 )
=
(h21 + h22 )4
Luego
r0 (h) 2h2 h2 (h21 + 3h22 )
= 1 , ∀ h 6= 0
khk khk5
r0 (h) 1 1 1
¿ lim = 0? Consideremos las sucesiones hk = , 0 y h′k = , . Claramente (hk ), (h′k ) ⊆
h→0 khk k k k
r0 (hk )
R2 − {(0, 0)}, lim hk = 0, lim h′k = 0, pero lim =0y
k→∞ k→∞ k→∞ khk k
2 1 3
r0 (h′k ) ( + 2)
3 k2 8 √
lim = lim k √ k = lim √ = 2
k→∞ khk k′ k→∞ 2 k→∞ 4 2
k5
r0 (h) ∂f
Concluimos que no existe el lim y por lo tanto no es diferenciable en (0, 0).
h→0 khk ∂x
1. f es diferenciable en U .
Análisis Real I 123
∂f
2. Todas las derivadas parciales : U → R son diferenciables en a.
∂xi
Observación: La función f del Ejemplo 4.7.1 es dos veces diferenciable en R2 − {0} pero no es dos veces
diferenciable en 0.
Teorema 4.7.1 (Teorema de Schwartz) Sea U ⊆ Rm abierto y f : U → R función dos veces diferen-
ciable en a ∈ U . Entonces
∂2f ∂2f
(a) = (a), ∀ 1 ≤ i, j ≤ m
∂xj ∂xi ∂xi ∂xj
Prueba. Haremos la demostración para el caso m = 2. Sea a = (a1 , a2 ) ∈ U entonces existe un r > 0
tal que I¯ × J¯ ⊆ U , donde I = ]a1 − r, a1 + r[ y J = ]a2 − r, a2 + r[. Definimos la función
φ : ] − r, r[ × ] − r, r[ −→ R
(t1 , t2 ) 7−→ φ(t1 , t2 )
definida por
φ(t1 , t2 ) = f (a1 + t1 , a2 + t2 ) − f (a1 + t1 , a2 ) − f (a1 , a2 + t2 ) + f (a1 , a2 )
Fijemos un t2 ∈ ] − r, r[ y consideremos la función
ξt2 : I¯ −→ R
x 7−→ ξt2 (x) = f (x1 , a2 + t2 ) − f (x1 , a2 )
Observe que φ(t1 , t2 ) = ξt2 (a1 + t1 ) − ξt2 (a1 ), para todo t1 ∈ ] − r, r[ .
Claramente ξt2 es continua en el intervalo cerrado de extremos a1 , a1 + t1 y diferenciable en el interior
de dicho intervalo (donde t1 ∈ ] − r, r[ ) luego, por el TVM para funciones reales de variable real, existe
un θ1 = θ1 (t1 , t2 ) ∈ ]0, 1[ tal que
ξt2 (a1 + t1 ) − ξt2 (a1 ) = ξt′2 (a1 + θ1 t1 )t1 )
es decir
∂f ∂f
φ(t1 , t2 ) = (a1 + θ1 t1 , a2 + t2 ) − (a1 + θ1 t1 , a2 ) t1 (4.7)
∂x ∂x
∂f
Como es diferenciable en a, para h = (h1 , h2 ) ∈ Ua tenemos
∂x
∂f ∂f ∂2f ∂2f
(a + h) = (a) + 2
(a)h1 + (a)h2 + ra (h)
∂x ∂x ∂x ∂y∂x
ra (h)
donde lim = 0. Haciendo h = (θ1 t1 , t2 ) y h′ = (θ1 t1 , 0), tenemos que h, h′ ∈ Ua y se cumple
h→0 khk
∂f ∂f ∂2f
(a1 + θ1 t1 , a2 + t2 ) = (a) + (a)θ1 t1
∂x ∂x ∂x2
∂2f
+ (a)t2 + ra (θ1 t1 , t2 ) (4.8)
∂y∂x
Análisis Real I 124
∂f ∂f ∂2f
(a1 + θ1 t1 , a2 ) = (a) + (a)θ1 t1 + ra (θ1 t1 , 0) (4.9)
∂x ∂x ∂x2
Reemplazando (4.8) y (4.9) en (4.7) tenemos
2
∂ f
φ(t1 , t2 ) = (a)t2 + ra (θ1 t1 , t2 ) − ra (θ1 t1 , 0) t1 (4.10)
∂y∂x
ηt1 : J¯ −→ R
y 7−→ ηt1 (x) = f (a1 + t1 , y) − f (a1 , y)
es decir
∂f ∂f
φ(t1 , t2 ) = (a1 + t1 , a2 + θ2 t2 ) − (a1 , a2 + θ2 t2 ) t2 (4.11)
∂y ∂y
∂f
Como es diferenciable en a, para h = (h1 , h2 ) ∈ Ua tenemos
∂y
∂f ∂f ∂2f ∂2f
(a + h) = (a) + (a)h1 + 2 (a)h2 + ρa (h)
∂y ∂y ∂x∂y ∂y
ρa (h)
donde lim = 0. Haciendo h = (t1 , θ2 t2 ) y h′ = (0, θ2 t2 ), tenemos que h, h′ ∈ Ua y se cumple
h→0 khk
∂f ∂f ∂2f
(a1 + t1 , a2 + θ2 t2 ) = (a) + (a)t1
∂y ∂y ∂x∂y
∂ 2f
+ 2 (a)θ2 t2 + ρa (t1 , θ2 t2 ) (4.12)
∂y
y
∂f ∂f ∂2f
(a1 , a2 + θ2 t2 ) = (a) + 2 (a)θ2 t2 + ρa (0, θ2 t2 ) (4.13)
∂y ∂y ∂y
Reemplazando (4.12) y (4.13) en (4.11) tenemos
2
∂ f
φ(t1 , t2 ) = (a)t1 + ρa (t1 , θ2 t2 ) − ρa (0, θ2 t2 ) t2 (4.14)
∂x∂y
Análisis Real I 125
Sea
ϕ : ] − r, r[ −→ R
t 7−→ ϕ(t) = φ(t, t)
∂ 2f
De (4.10) y (4.14) tenemos ϕ(t) = (a)t2 + [ra (θ1 t, t) − ra (θ1 t, 0)]t, luego
∂y∂x
2
ϕ(t) ∂ f ra (θ1 t, t) ra (θ1 t, 0) ∂2f
lim 2 = lim (a) + − = (a)
t→0 t t→0 ∂y∂x t t ∂y∂x
Análogamente
ϕ(t) ∂2f
lim = (a)
t→0 t2 ∂x∂y
∂2f ∂2f
Por lo tanto (a) = (a).
∂y∂x ∂x∂y
∂2f
Si todas las funciones son continuas, decimos que f es de clase C 2 en U . Podemos seguir el
∂xj ∂xi
procedimiento anterior y obtener la siguiente definición.
∂f ∂f
1. Decimos que f es de clase C 1 en U si y sólo si existen las derivadas parciales (x), . . . , (x),
∂x1 ∂xm
∂f
∀ x ∈ U y las funciones : U → Rn son continuas, ∀ 1 ≤ i ≤ m.
∂xi
Análisis Real I 126
∂f
2. Decimos que f es de clase C k en U (k ≤ 2) si y sólo si existen las derivadas parciales (x), . . . ,
∂x1
∂f ∂f
(x), ∀ x ∈ U y las funciones : U → Rn son de clase C k−1 en U , ∀ 1 ≤ i ≤ m.
∂xm ∂xi
3. Decimos que f es de clase C ∞ en U si y sólo si f es de clase C k en U , ∀ k ∈ N.
Notaciones:
1. C k (U ) = {f : U → R : f es de clase C k en U } (k ≥ 1).
2. C 0 (U ) = C(U ) = {f : U → R : f es continua en U }.
3. C ∞ (U ) = {f : U → R : f es de clase C ∞ en U }.
Observaciones:
∞
\
∞
1. C (U ) = C k (U ).
k=1
2. C (U ) ⊂ · · · ⊂ C k (U ) ⊂ C k−1 (U ) ⊂ · · · ⊂ C 1 (U ) ⊂ C(U ).
∞
∂f
3. f ∈ C k (U ) si y sólo si ∈ C k−1 (U ), ∀ 1 ≤ i ≤ m.
∂xi
4. Si f ∈ C 1 (U ) entonces f es diferenciable en U .
Prueba. Por inducción sobre k. Para k = 1 tenemos que f y g son diferenciables en U , luego f g es
diferenciable en U y
∂(f g) ∂f ∂g
=g +f , ∀1 ≤ i ≤ m
∂xi ∂xi ∂xi
∂(f g)
luego ∈ C(U ), ∀ 1 ≤ i ≤ m es decir f g ∈ C 1 (U ).
∂xi
∂(f g)
Supongamos que el resultado es válido para k − 1 (Hip. Ind.) Sean f, g ∈ C k (U ) entonces =
∂xi
∂f ∂g ∂(f g)
g +f , ∀ 1 ≤ i ≤ m. Luego ∈ C k−1 (U ), ∀ 1 ≤ i ≤ m, es decir f g ∈ C k (U ).
∂xi ∂xi ∂xi
Prueba. Por inducción sobre k. Para k = 1 las funciones fj son diferenciables en U y g es diferenciable
en V , luego por la regla de la cadena g ◦ f es diferenciable en U y
n
∂(g ◦ f ) X ∂g ∂fj
= ◦f , ∀1 ≤ i ≤ m
∂xi j=1
∂y j ∂x i
∂(g ◦ f )
Se sigue que ∈ C(U ), ∀ 1 ≤ i ≤ m es decir g ◦ f ∈ C 1 (U ).
∂xi
Supongamos que el resultado es válido para k − 1 (Hip. Ind.) Sean fj ∈ C k (U ) (1 ≤ j ≤ n y g ∈ C k (V )
n
∂(g ◦ f ) X ∂g ∂fj ∂(g ◦ f )
entonces = ◦f , ∀ 1 ≤ i ≤ m luego ∈ C k−1 (U ), ∀ 1 ≤ i ≤ m es decir
∂xi j=1
∂y j ∂x i ∂x i
g ◦ f ∈ C k (U ).
1. f es continua en [a, b] × U .
∂f
2. Existen las derivadas parciales (t, x), para todo (t, x) ∈ [a, b] × U y para todo i = 1, 2, . . . , m.
∂xi
∂f
3. Las funciones : [a, b] × U → R son continuas, ∀ 1 ≤ i ≤ m.
∂xi
Entonces la función
ϕ: U −→ R
Z b
x 7−→ ϕ(x) = f (t, x)dt
a
es de clase C 1 en U y se cumple
Z b Z b
∂ϕ ∂ ∂f
(x) = f (t, x)dt = (t, x)dt
∂xi ∂xi a a ∂xi
∂f
Teorema 4.8.4 Sea U ⊆ Rm , f : [a, b] × U → R continua tal que las funciones : [a, b] × U → R
∂xi
1
existen y son continuas ∀ 1 ≤ i ≤ m. Si g : U → [a, b] es una función de clase C en U entonces
ϕ: U −→ R
Z g(x)
x 7−→ ϕ(x) = f (t, x)dt
a
∂ξ
Además, = f (s, x), luego ξ es de clase C 1 en [a, b] × U . De esta manera la función
∂s
ϕ: U −→ R
x 7−→ ϕ(x) = ξ(g(x), x)
es diferenciable en U y
∂ϕ ∂ξ ∂g ∂ξ
(x) = (g(x), x) (x) + (g(x), x)
∂xi ∂s ∂xi ∂xi
Z g(x)
∂f ∂g
= (t, x)dt + f (g(x), x) (x)
a ∂x i ∂xi
∂2f ∂2f
= , ∀ 1 ≤ i, j ≤ m
∂xj ∂xi ∂xi ∂xj
xα = xα αm
1 · · · xm .
1
∂ |α| f
Dα f =
∂xα
1
1
· · · ∂xα
m
m
Análisis Real I 129
En general, si k ≤ p entonces
m
X ∂kf
f (k) (a)hk = (a)hi1 · · · hik
i1 ,...ik =1
∂xi1 · · · ∂xik
m
X ∂f
Pero φ′ (t) = (a + th)hi , luego
i=1
∂xi
m
X ∂f
φ′ (0) = (a)hi = f ′ (a)h
i=1
∂xi
m
"m #
′′
X X ∂2f
también φ (t) = (a + th)hi hj , luego
j=1 i=1
∂xj ∂xi
m
′′
X ∂2f
φ (0) = (a)hi hj = f ′′ (a)h2
i,j=1
∂xj ∂xi
En general
φ(k) (0) = f (k) (a)hk , ∀1 ≤ k ≤ p + 1
Reemplazando en (4.15) el resultado se sigue.
Teorema 4.9.2 (Fórmula de Taylor con Resto Integral) Sea U ⊆ Rm abierto, a ∈ U , h ∈ Rm tal
que [a, a + h] ⊆ U . Si f ∈ C p+1 (U ; Rn ) entonces
1 ′′
f (a + h) = f (a) + f ′ (a)h + f (a)h2 + · · ·
2!
Z
1 1 1
+ f (p) (a)hp + (1 − t)p f (p+1) (a + th)hp+1 dt
p! p! 0
Prueba. ¡Ejercicio!
Existe otra versión de la fórmula de Taylor que para demostrarla, necesitamos del siguiente resultado
Prueba. Procediendo por inducción sobre p. Si p = 0, el reultado es obvio. Suponiendo que el lema se
cumple para p (Hip. Ind.) probaremos para p+1. Sea r : U → R una función (p+1)-veces diferenciable en
∂r
0 ∈ U tal que Dα r(0) = 0, para todo |α| ≤ p + 1. Si i ∈ {1, . . . , m} entonces es p-veces diferenciable
∂xi
∂r
en 0 y Dα (0) = 0, para todo |α| ≤ p, por la hipótesis inductiva tenemos que
∂xi
∂r
(h)
∂xi
lim = 0.
h→0 khkp
Análisis Real I 131
m
X ∂r ∗
Por el TVM existe un t∗ ∈ ]0, 1[ tal que r(h) = (t h)hi . Luego
i=1
∂xi
∂r
m m (h)
r(h) X ∂r ∗ hi X ∂xi hi
p+1
= (t h) p+1
= p
khk i=1
∂xi khk i=1
khk khk
y tomando lı́mites
∂r
m (h)
r(h) X ∂xi hi
lim = lim =0
h→0 khkp+1 i=1
h→0 p
khk khk
Prueba. Sea
1 ′′ 1
rp (h) = f (a + h) − f (a) − f ′ (a)h + f (a)h2 − · · · − f (p) (a)hp .
2! p!
Es claro que rp (0) = 0. Además
" m #
∂r ∂f ∂ X ∂f
(h) = (a + h) − (a)hi1 −
∂xi ∂xi ∂xi i =1 ∂xi1
1
m
1 ∂ X ∂2f
− (a)hi1 hi2 − · · ·
2! ∂xi i ,i =1 ∂xi1 ∂xi2
1 2
m
1 ∂ X ∂ pf
− (a)hi1 · · · hip
p! ∂xi i ,...i =1 ∂xi1 · · · ∂xip
1 p
m
∂f ∂f 1 X ∂2f ∂
= (a + h) − (a) − (a) [hi hi ] − · · ·
∂xi ∂xi 2! i ,i =1∂xi1 ∂xi2 ∂xi 1 2
1 2
m p
1 X ∂ f ∂
··· − (a) hi1 · · · hip
p! i ∂xi1 · · · ∂xip ∂xi
1 ,...ip =1
∂f ∂f 1 ∂ 2f
= (a + h) − (a) − (a)(2h) − · · ·
∂xi ∂xi 2! ∂x2i
1 ∂ pf
··· − (a)(php−1 )
p! ∂xpi
Análisis Real I 132
∂r
luego (0) = 0, para todo i = 1, 2, . . . , m.
∂xi
De manera análoga se prueba que Dα r(0) = 0, para todo |α| ≤ p, entonces por el Lema 4.9.1 se tiene
r(h)
que lim = 0.
h→0 khkp
1. Decimos que f tiene un máximo local en a ∈ U si y sólo si existe un δ > 0 tal que f (x) ≤ f (a),
para todo x ∈ Bδ (a) ⊆ U .
2. Decimos que f tiene un mı́nimo local en a ∈ U si y sólo si existe un δ > 0 tal que f (a) ≤ f (x), para
todo x ∈ Bδ (a) ⊆ U .
Prueba. Sea a ∈ U y consideremos δ > 0 tal que si x ∈ Bδ (a) ⊆ U entonces f (x) ≤ f (a). Para
i ∈ {1, 2, . . . , m} consideremos la función
ϕi : ] − δ, δ[ −→ R
t 7−→ ϕi (t) = f (a + tei )
Se sigue que ϕi (t) ≤ ϕi (0), ∀ t ∈ ] − δ, δ[. De esta manera, la función real de variable real ϕi tiene un
∂f
máximo en 0 ∈ R. Luego ϕ′i (0) = 0, es decir (a) = 0, para todo i = 1, 2, . . . , m.
∂xi
Lema 4.10.1 Si T ∈ GL(Rm ) entonces existe un C > 0 tal que kT (x)k ≥ Ckxk, para todo x ∈ Rm .
Prueba. Sea T −1 ∈ GL(Rm ), sabemos (ver Ejemplo 5 de la secció, 2.2) existe un K > 0 tal que
kT −1 (y)k ≤ Kkyk, para todo y ∈ Rm . Sea x ∈ Rm entonces T (x) ∈ Rm luego
kxk = kT −1(T (x))k ≤ KkT (x)k
1
Se sigue que kT (x)k ≥ kxk.
K
Lema 4.10.2 Sea U ⊆ Rm un abierto F = (f1 , . . . , fm) : U →
m
R en donde las funciones coordenadas
∂fi
fi : U → R son diferenciables en a ∈ U . Si la matriz (a) ∈ GL(Rm ) entonces existe un δ > 0 tal
∂xj
que 0 < kx − ak < δ implica que F (x) 6= F (a)
+ρ(x)kx − ak (4.16)
donde ρ(x) = (ρ1 (x), . . . , ρm (x)). Se sigue que lim ρ(x) = 0.
x→a
∂fi
→ m
Sea T : R R definida por T (x) = Ax donde A = (a) ∈ GL(Rm ). Se sigue que T es inversible
∂xj
y por el Lema 4.10.2, existe C > 0 tal que kT (x)k ≥ Ckxk, para todo x ∈ Rm .
C
Como C > 0, existe un δ > 0 tal que si 0 < kx − ak ≤ δ entonces kρ(x)k < . De (4.16), para
2
0 < kx − ak ≤ δ tenemos
F (x) = F (a) + T (x − a) + ρ(x)kx − ak
luego
kF (x) − F (a)k = kT (x − a) + ρ(x)kx − akk
≥ kT (x − a)k − kρ(x)kkx − ak
C
≥ C− kx − ak > 0
2
es decir F (x) 6= F (a).
Análisis Real I 134
Teorema 4.10.2 Sea U ⊆ Rm un abierto y f ∈ C 2 (U ). Entonces el conjunto de todos los puntos crı́ticos
no degenerados de f es discreto.
Prueba. Consideremos
A = {x ∈ U : x es punto crı́tico no degenerado de f }
Si A = ∅ entonces no hay nada que probar. Sea a∈ A, debemos probar que a es un punto aislado. Por
′ ∂ 2f
hipótesis se tiene que f (a) = 0 y detHf (a) = det (a) 6= 0. Sea
∂xi ∂xj
fi : U −→ R
∂f
x 7−→ fi (x) = (x)
∂xi
donde (1 ≤ i ≤ m) y definamos
F : U −→ Rm
x 7−→ F (x) = (f1 (x), . . . , fm (x))
Como f ∈ C 2 (U ) entonces las funciones fi son diferenciables en U y
2
∂fi ∂ f
det (a) = (a) 6= 0
∂xj ∂xi ∂xj
Por el Lema 4.10.2 existe un δ > 0 tal que 0 < kx − ak < δ implica que kF (x) − F (a)k = 6 0.
Si x ∈ Bδ (a) − {a} entonces kF (x) − F (a)k 6= 0 luego existe un i ∈ {1, 2, . . . , m} tal que fi (x) 6= fi (a),
∂f ∂f
es decir (x) 6= (a) = 0, por lo tanto x ∈
/ A.
∂xi ∂xi
Corolario 1. Sea U ⊆ Rm un abierto y f ∈ C 2 (U ). Entonces el conjunto de todos los puntos crı́ticos
no degenerados de f es numerable.
Corolario 2. Sea U ⊆ Rm un abierto y f ∈ C 2 (U ). Si todos los puntos crı́ticos f son no degenerados
entonces todo compacto K ⊆ U contiene a lo más un número finito de ellos.
Prueba. Sea
A = {x ∈ U : x es punto crı́tico de f }
Supongamos que existe un K ⊆ U compacto tal que K ∩ A es infinito (Hip. Aux.) entonces existe
(ak ) ⊆ K ∩ A y como K es compacto existe (ajk ) ⊆ (ak ) tal que lim ajk = a y a ∈ K. Como
k→∞
∂f ∂f ∂f ∂f
∈ C 1 (U ) se tiene que lim (ajk ) = (a), luego (a) = 0, para todo i = 1, 2, . . . , m por lo
∂xi k→∞ ∂xi ∂xi ∂xi
tanto a ∈ A y por hipótesis a es un punto crı́tico no degenerado de f el cual, por el Teorema 4.10.2 debe
ser aislado. Esta contradición prueba el resultado.
Del álgebra lineal, sabemos que a toda matriz simétrica A = (aij ) ∈ Rm×m le podemos asociar su
forma cuadrática FA definida como
FA : Rm × Rm −→ R
m
X
(x, y) 7−→ FA (x, y) = xAy t = aij xi yj
i,j=1
Análisis Real I 135
Recordemos que una forma cuadrática FA es llamada definida positiva si y sólo si Ax2 > 0, para todo
x ∈ Rm − {0}, es llamada definida negativa si y sólo si Ax2 < 0, para todo x ∈ Rm − {0} y es llamada
indefinida si y sólo si existen un par de vectores no nulos x, y ∈ Rm tal que Ax2 > 0 y Ay 2 < 0.
Proposición 4.10.3 Sea A = (aij ) ∈ Rm×m una matriz simétrica y FA su forma cuadrática asociada. Si
FA es definida positiva o definida negativa entonces A ∈ GL(Rn ).
Prueba. En primer lugar, dado a ∈ U , existe un δ1 > 0 tal que Bδ1 (a) ⊆ U . Como f ∈ C 2 (U ), por
Taylor, para h ∈ Rm y 0 < khk < δ1 tenemos
1
f (a + h) = f (a) + f ′ (a)h + f ′′ (a)h2 + r2 (h)
2
r2 (h)
donde lim = 0. Como a es punto crı́tico de f , tenemos
h→0 khk2
1
f (a + h) = f (a) + Hf (a)h2 + r2 (h)
2
" #
2
1 h r2 (h)
= f (a) + Hf (a) + khk2 (4.17)
2 khk khk2
1. Sea
L Rm −→ R
1 1
x 7−→ L(x) = Hf (a)x2 = hHf (a)x, xi
2 2
Por hipótesis L(x) > 0, para todo x ∈ Rm − {0}. Como S m−1 es compacto, existe x0 ∈ S m−1 tal que
1
L(x) ≥ L(x0 ), para todo x ∈ S m−1 , es decir Hf (a)x2 ≥ L(x0 ), para todo x ∈ S m−1 .
2
|r2 (h)|
Por otro lado, existe un δ2 > 0 tal que si 0 < khk < δ2 entonces < L(x0 ), es decir
khk2
r2 (h)
−L(x0 ) < < L(x0 )
khk2
Sea δ = min{δ1 , δ2 } > 0, 0 < khk < δ tenemos
2 2
1 h 1 h r2 (h)
0 ≤ Hf (a) − L(x0 ) < Hf (a) −
2 khk 2 khk khk2
En (4.17): f (a + h) ≥ f (a), para todo h ∈ Bδ (a), luego a es un mı́nimo local.
2. Análoga a 1. (¡Ejercicio!)
3. Por hipótesis existe v, w ∈ Rm − {0} tal que Hf (a)v 2 > 0 y Hf (a)w2 < 0.
Como Hf (a)v 2 > 0, existe un δ2 > 0 tal que si 0 < khk < δ2 entonces
|r2 (h)| 1
2
< Hf (a)v 2
khk 2kvk2
δ2 |r2 (tv)| 1 |r2 (tv)| 1 1
Si 0 < |t| < entonces < Hf (a)v 2 , es decir < Hf (a)v 2 , luego − Hf (a)v 2 <
kvk ktvk2 2kvk2 t2 2 2
r2 (tv) 1
< Hf (a)v 2 , lo cual implica
t2 2
r2 (tv) 1
+ Hf (a)v 2 > 0 (4.18)
t2 2
Análisis Real I 137
Análogamente, como Hf (a)w2 < 0, existe un δ3 > 0 tal que si 0 < khk < δ3 entonces
|r2 (h)| 1
2
<− Hf (a)w2
khk 2kwk2
1
f (a + tv) = f (a) + Hf (a)(tv)2 + r2 (tv)
2
2 1 2 r2 (tv
= f (a) + t Hf (a)v + 2 > f (a)
2 t
Ejemplo 4.10.1 Localizar los máximos, mı́nimos y puntos de silla de cada una de las siguientes fun-
ciones:
2x 2y
2. f ′ (x, y) = , , luego el único punto crı́tico es (0, 0). Como
x2 + y 2 + 1 x2 + y 2 + 1
−2x2 + 2y 2 + 2 4xy
(x2 + y 2 + 1)2 −
(x2 + y 2 + 1)2
Hf (x, y) =
4xy 2x2 − 2y 2 + 2
− 2
(x + y 2 + 1)2 (x2 + y 2 + 1)2
2 0
se tiene que Hf (0, 0) = , luego su forma canónica asociada es
0 2
2 0
F (x, y) = (x, y) · · (x, y)t = 2(x2 + y 2 ) > 0
0 2
para todo (x, y) ∈ R2 − {(0, 0)}. Por lo tanto (0, 0) es un mı́nimo local de f .
3. f ′ (x, y, z) = (6x
+ 4y + 2z, 4x + 4y − z, 2x − y − 10z), luego el único punto crı́tico de f es (0, 0, 0).
6 4 2
Como Hf (0, 0) = 4 4 −1 se tiene que su forma canónica asociada es
2 −1 −10
6 4 2
F (x, y) = (x, y, z) · 4 4 −1 · (x, y, z)t
2 −1 −10
= 6x2 + 4y 2 − 10z 2 + 8xy + 4xz − 2yz
Para decidir si F es definida positiva, negativa o indefinida, emplearemos el “método de Lagrange” de
completar cuadrados:
a2 + 2ab = (a + b)2 − b2
4 2 2 1
6x2 + 8xy + 4xz = 6(x2 + xy + xz) = 6 x2 + 2x y+ z
3 3 3 3
" 2 2 #
2 1 2 1
= 6 x+ y+ z − y+ z
3 3 3 3
luego
2 2
2 1 2 1
F (x, y) = 6 x+ y+ z −6 y+ z + 4y 2 − 10z 2 − 2yz
3 3 3 3
2
2 1 4 14 32
= 6 x+ y+ z + y 2 − yz − z 2
3 3 3 3 3
2
2 1 4 7 49 49 32
= 6 x+ y+ z + y 2 − yz + z 2 − z 2 − z 2
3 3 3 2 16 16 3
2 2
2 1 4 7 117 2
= 6 x+ y+ z + y− z − z
3 3 3 4 12
Por lo tanto F es indefinida, luego (0, 0, 0) es un punto de silla.
Análisis Real I 139
1. Bδ (x0 ) × Iǫ (y0 ) ⊆ U .
2. Dado (x, y) ∈ Bδ (x0 ) × Iǫ (y0 ) se cumple
f (x, y) = x2 − y 2 = 0
no define y implı́citamente en función de la variable x en ninguna vecindad del (0, 0) ∈ R2 , puesto que
para cualquier δ > 0 y para cualquier par (x, y) ∈ Bδ (0, 0) existen dos valores de y, a saber y = x e
y = −x tales que x2 − y 2 = 0.
Pero si consideramos c = f (1, 1) = 0, entonces la ecuación anterior si define y implı́citamente en
función de la variable x. En efecto, sea ξ : ] − 1, 1[ → R dada por ξ(x) = x, si (x, y) ∈ ] − 1, 1[ × ] − 1, 1[
entonces
f (x, y) = 0 ⇔ y = ξ(x)
Análisis Real I 140
f (x, y) = c
a) f (x0 , y0 ) = c.
∂f
b) (x0 , y0 ) 6= 0.
∂y
Entonces existen Bδ (x0 ) ⊆ Rm−1 Iǫ (y0 ) ⊆ R y existe ξ : Bδ (x0 ) → Iǫ (y0 ) función de clase C k tales que
1. Bδ (x0 ) × Iǫ (y0 ) ⊆ U .
2. f −1 (c) ∩ (Bδ (x0 ) × Iǫ (y0 )) = G(ξ).
∂f
(x, ξ(x))
∂ξ ∂xi
3. (x) = − , ∀ x ∈ Bδ (x0 ), ∀ 1 ≤ i ≤ m − 1.
∂xi ∂f
(x, ξ(x))
∂y
∂f ∂f
Prueba. Supongamos (x0 , y0 ) > 0. Desde que : U → R es continua en (x0 , y0 ) ∈ U entonces
∂y ∂y
existen δ1 , ǫ > 0 tales que
∂f
(x, y) > 0, ∀ (x, y) ∈ Bδ1 [x0 ] × Iǫ [y0 ] ⊆ U
∂y
De esta manera, para cualquier x ∈ Bδ1 [x0 ] fijo, la función φx : Iǫ [y0 ] → R definida por φx (y) = f (x, y)
es estrictamente creciente. En particular
Si x ∈ Bδ1 (x0 ) y kx − x0 k < δ3 entonces |f (x, y0 + ǫ) − f (x0 , y0 + ǫ)| < f (x0 , y0 + ǫ) − c, es decir
c < f (x, y0 + ǫ).
Haciendo δ = min{δ1 , δ2 , δ3 } y denotando B = Bδ (x0 ) e I = Iǫ (y0 ), tenemos
f (x, y0 − ǫ) < c < f (x, y0 + ǫ), ∀x∈B
Para x ∈ B fijo, el T.V.I. garantiza la existencia de un yx ∈ I tal que f (x, yx ) = c y desde que φx
es estrictamente creciente, entonces yx es único. Esto nos permite definir la función ξ : B → I dada
por ξ(x) = yx . Observe que, por definición, f (x, ξ(x)) = c, ∀ x ∈ B, es decir G(ξ) ⊆ f −1 (c) ∩ (B × I).
Recı́procamente, si (x, y) ∈ f −1 (c) ∩ (B × I) entonces f (x, y) = c, también f (x, ξ(x)) = c, luego φx (y) =
φx (ξ(x)) y por lo tanto y = ξ(x). Esto muestra que (x, y) ∈ G(ξ).
Probaremos ahora que ξ es continua en B. Sea x ∈ B y consideremos (xk ) ⊆ B tal que lim xk = x.
k→∞
Afirmo que (ξ(xk )) ⊆ I tiene un único valor adherente. En efecto, sea y0 ∈ I¯ valor adherente de la
sucesión (ξ(xk )), luego existe (ξ(xjk )) ⊆ (ξ(xk )) tal que lim ξ(xjk ) = y0 . Se cumple
k→∞
luego
f (x, y0 ) = lim f (xjk , ξ(xjk )) = lim c = c
k→∞ k→∞
Ahora bien, suponiendo que ξ(x) < y0 entonces φx (ξ(x)) < φx (y0 ), es decir c = f (x, ξ(x)) < f (x, y0 ) = c,
una contradicción, análogamente se llega a una contradicción al suponer que ξ(x) > y0 , luego debe ser
y0 = ξ(x), esto prueba la afirmación. De esta manera lim ξ(xk ) = ξ(x) y por tanto ξ es continua en B.
k→∞
Probemos ahora la diferenciabilidad de ξ. Para 1 ≤ i ≤ m − 1, definamos k = k(t) = ξ(x + tei ) − ξ(x),
luego ξ(x + tei ) = ξ(x) + k. Por el T.V.M., existe un θ = θ(t) ∈ ]0, 1[ tal que
0 = f (x + tei , ξ(x + tei )) − f (x, ξ(x)) = f (x + tei , ξ(x) + k) − f (x, ξ(x))
∂f ∂f
= (x + tθei , ξ(x) + θk)t + (x + tθei , ξ(x) + θk)k
∂xi ∂y
Despejando
∂f
(x + tθei , ξ(x) + θk)
ξ(x + tei ) − ξ(x) ∂xi
=−
t ∂f
(x + tθei , ξ(x) + θk)
∂y
tomando lı́mite
∂f
(x, ξ(x))
∂ξ ξ(x + tei ) − ξ(x) ∂xi
(x) = lim =− , ∀x ∈ U
∂xi t→0 t ∂f
(x, ξ(x))
∂y
∂ξ ∂ξ
Observe que es continua en x, ∀ x ∈ B, ∀ 1 ≤ i ≤ m, es decir ξ ∈ C 1 (U ), de la fórmula ∈ C 1 (U )
∂xi ∂xi
y por lo tanto ξ ∈ C 2 (U ). Ası́ sucesivamente se llega a que ξ ∈ C k (U ).
Observación: No hay nada especial con respecto a la última variable, sólo se mencionó el Teorema de
éste modo para que la notación sea menos engorrosa:
Sea U ⊆ Rm abierto, f ∈ C k (U ) (k ≥ 1) y p ∈ U tal que
Análisis Real I 142
1. f (p) = c.
∂f
2. Existe un j ∈ {1, 2, . . . , m} tal que (p) 6= 0.
∂xj
Entonces existe V ⊆ Rm vecindad abierta de p tal que f −1 (c) ∩ V es el gráfico de una función de m − 1
variables de clase C k . Más precisamente, existe ξ : B → I de clase C k tal que
entonces C es de clase C ∞ .
Análisis Real I 143
Ejemplo 4.11.7 El conjunto C = {(t3 − 4t, t2 − 4); t ∈ R} no es una curva, puesto que no existe ninguna
vecindad abierta V de p = (0, 0) ∈ C tal que V ∩ C sea el gráfico de una función.
Observaciones:
Teorema 4.11.2 (Forma Geométrica del Teorema de la Función Implı́cita) Sea U ⊆ Rm abierto,
y f ∈ C k (U ) (k ≥ 1). Para todo valor regular c de f , el conjunto f −1 (c) es vacı́o o es una hiperficie de
clase C k .
Observaciones:
Análisis Real I 144
p
Ejemplo 4.11.11 Sea M = {(x, y, z) ∈ R3 ; z = x2 + y 2 } y p = (0, 0, 0) ∈ M . Vamos a determinar
Tp M .
Dado v ∈ Tp M , existe α : Iǫ (0) → M , diferenciable en 0, con α(0) = p y α′ (0) = v. Se tiene que
p
α(t) = α1 (t), α2 (t), α1 (t)2 + α2 (t)2 , ∀ t ∈ Iǫ (0)
√ p
ahora bien como la función f (t) = t no es diferenciable en t = 0, para que α1 (t)2 + α2 (t)2 sea
diferenciable en 0 entonces α1 (t)2 + α2 (t)2 debe ser constante y por lo tanto α(t) = (0, 0, 0) y α′ (0) =
(0, 0, 0). Luego
Tp M = {(0, 0, 0)}
Observe que si v ∈ Tp M entonces existe α = (α1 , . . . , αm ) : Iǫ (0) → M diferenciable en 0 tal que α(0) = p
y α′ (0) = v. Tomando ǫ > 0 suficientemente pequeño se tiene α(t) ∈ M ∩ V , ∀ t ∈ Iǫ (0), luego
Se sigue que
m
X ∂ξ ∗ ′
α′j (0) = (p )αi (0)
∂xi
i=1,i6=j
donde p = (p1 , . . . , pj−1 , pj+1 , . . . , pm ). Esto motiva la definición del funcional lineal (no nulo) φ : Rm →
∗
R dado por
m
X ∂ξ ∗
φ(x) = xj − (p )xi
∂xi
i=1,i6=j
m
X ∂ξ ∗
Por lo anterior, se cumple que Tp M ⊆ N u(φ). Recı́procamente, sea v ∈ N u(φ) entonces vj = (p )vi .
∂xi
i=1,i6=j
Dado ǫ > 0 suficientemente pequeño tal que t ∈ Iǫ (0) ⇒ p∗ + tv ∗ ∈ U . Definimos α : Iǫ (0) → M ∩ V
por
α(t) = (p1 + tv1 , . . . , pj−1 + tvj−1 , ξ(p∗ + tv ∗ ), pj+1 + tvj+1 , . . . , pm + tvm )
Claramente α es diferenciable en 0, α(0) = p y
m
X ∂ξ ∗
α′ (0) = (v1 , . . . , vj−1 , (p )vi , vj+1 , . . . , vm ) = v
∂xi
i=1,i6=j
Ejemplo 4.11.14 Sabemos que S m−1 = f −1 (1) en donde f : Rm → R es dada por f (x) = kxk2 . Como
∇f (p) = 2p, por el Teorema anterior tenemos
Sea U ⊆ Rm un abierto, f : U → R una función y X ⊆ U , el problema que vamos a resolver es: ¿Bajo
qué condiciones podemos determinar los máximos y mı́nmos locales de f X : X → R?
Ejemplo 4.12.1 Sea f : R2 → R dada por f (x, y) = y y consideremos el cı́rculo unitario S 1 . Geométricamente
es claro que f S 1 : S 1 → R tiene un máximo en (0, 1) y un mı́nimo en (0, −1).
¿Existe un método analı́tico para determinar los máximos y mı́nimos? En la sección 4.10 estudiamos
un criterio para determinar los máximos y mı́nimos locales de una función diferenciable a travéz del
concepto de punto crı́tico. ¿Este método sirve para nuestro caso? es decir ¿es cierta la siguiente general-
ización de la Proposición 4.10.1: Sean U ⊆ Rm un abierto, X ⊆ U y f : U → R una función diferenciable
en U . Si x0 ∈ X es un máximo (o un mı́nimo) local de f X : X → R entonces f ′ (x0 ) = 0 (es decir, x0 es
un punto crı́tico de f )?
El Ejemplo 4.12.1 responde negativamente a nuestra interrogante puesto que (0, 1) y (0, −1) son
respectivamente máximo y mı́nimo de f S 1 y sin embargo ∇f (x, y) = (0, 1), ∀ (x, y) ∈ S 1 , es decir
ninguno de ellos puede ser punto crı́tico de f .
Cuando f : U → R es diferenciable en U y X ⊆ U es un hiperficie, entonces vamos a demostrar que
es posible dar un método analı́tico para detectar los máximos y mı́nimos locales de f X , el primer paso
es extender de manera adecuada el concepto de punto crı́tico usando la noción de espacio tangente. Esto
se hace de la manera siguiente: sea p ∈ U un punto crı́tico de f , es decir ∇f (p) = 0, recordando que
Tp U = Rm entonces h∇f (p), vi = 0, ∀ v ∈ Tp U . Recı́procamente, si h∇f (p), vi = 0, ∀ v ∈ Tp U = Rm
entonces es claro que ∇f (p) = 0. Luego hemos probado que, en el caso particular que X = U (todo el
abierto) entonces p ∈ U es un punto crı́tico de f si y sólo si h∇f (p), vi = 0, ∀ v ∈ Tp U . Esto motiva la
siguiente definición.
Con esta nueva definición de punto crı́tico, tenemos la generalizacı́on correcta de la Proposición 4.10.1.
Prueba. Si p ∈ M es un máximo local de f M entonces existe un δ > 0 tal que f (x) ≤ f (p), ∀ x ∈
Bδ (p) ∩ M . Sea v ∈ Tp M entonces existe α : Iǫ (0) → Bδ (p) ∩ M , diferenciable en 0, con α(0) = p y
α′ (0) = v. Considerando f ◦ α : Iǫ (0) → R entonces
Ejemplo 4.12.2 Sea f : R2 → R dada por f (x, y) = y y consideremos el cı́rculo unitario S 1 . Vamos a
hallar los puntos crı́ticos de f S 1 . Por el Ejemplo 4.11.14 sabemos que Tp S = [p]⊥ , luego
1
si v ∈ Tp M
entonces v = c(−p2 , p1 ) c ∈ R (donde p = (p1 , p2 )). De esta manera p ∈ S 1 es P.C. de f S 1 si y sólo si
0 = h∇f (p), vi = h(0, 1), c(−p2 , p1 )i = cp1 , ∀ c ∈ R, concluı́mos que p1 = 0 y por tanto p = (0, ±1).
Ejemplo 4.12.3 Determine las dimensiones de una caja de base rectangular, sin tapa, que tenga el
mayor volumen posible y cuya área lateral sea S.
4.13 Ejercicios
Integrales de Lı́nea
Definición 5.1.1 Sean f, α : [a, b] → R y P ∗ = (P, ξ) ∈ P ∗ ([a, b]) donde P = {a = t0 < t1 < . . . < tk =
b} y ξ = (ξ1 , . . . , ξk ) ∈ Rk . La suma de Riemann-Stieltjes asociada a f , α y P ∗ , denotada por S(f, α, P ∗ )
es definida como
k
X
S(f, α, P ∗ ) = f (ξi )[α(ti ) − α(ti−1 )]
i=1
Definición 5.1.2 Sean f, α : [a, b] → R. Decimos que f es Riemann-Stieltjes integrable con respecto a
α sobre [a, b] si y sólo si existe I ∈ R tal que dado ǫ > 0, ∃ δ > 0 tal que si P ∗ = (P, ξ) ∈ P ∗ ([a, b]) con
kP k < δ implica que |S(P ∗ ) − I| < ǫ.
Observaciones:
2. Dado α : [a, b] → R, denotaremos por Rα ([a, b]) al conjunto de todas las funciones f : [a, b] → R
que son Riemann-Stieltjes integrables con respecto a α sobre [a, b].
1. f ∈ Rα ([a, b]).
2. Dado ǫ > 0, ∃ δ > 0 tal que si P ∗ = (P, ξ), Q∗ = (Q, η) ∈ P ∗ ([a, b]) con kP k < δ y kQk < δ implica
que |S(P ∗ ) − S(Q∗ )| < ǫ.
149
Análisis Real I 150
∗ ∗
Prueba. (1. ⇒ 2.) Dado ǫ > 0, por hipótesis ∃ δ > 0 tal que si P = (P, ξ) ∈ P ([a, b]) con kP k < δ
Z b ǫ
implica que S(P ∗ ) −
f (t)dα < .
a 2
Sean P ∗ = (P, ξ), Q∗ = (Q, η) ∈ P ∗ ([a, b]) con kP k < δ y kQk < δ, tenemos
Z b Z
b ǫ ǫ
|S(P ∗ ) − S(Q∗ )| ≤ S(P ∗ ) − f (t)dα − S(Q∗ ) < + = ǫ
f (t)dα +
a a 2 2
(2. ⇒ 1.) Sea ǫ > 0, por hipótesis ∃ δ > 0 tal que si P ∗ = (P, ξ), Q∗ = (Q, η) ∈ P ∗ ([a, b]) con kP k < δ y
kQk < δ entonces
ǫ
|S(P ∗ ) − S(Q∗ )| < (5.1)
2
Dado k ∈ N, consideremos Pk∗ = (Pk , ξk ) ∈ P ∗ ([a, b]) definida por
b−a 2(b − a) (k − 1)(b − a)
Pk = a = t0 , t1 = a + , t2 = a + , . . . , tk−1 = a + , tk = b
k k k
b−a
y ξk = (t0 , t1 , . . . , tk−1 ). Luego (Pk∗ ) ⊆ P ∗ ([a, b]) con kPk k = . Como lim kPk k = 0, existe k0 ∈ N
k k→∞
tal que
Si j, k ≥ k0 , de (5.1) tenemos que |S(Pj∗ ) − S(Pk∗ )| < 2ǫ . De esta manera (S(Pk∗ )) ⊆ R es Cauchy y por
tanto existe I ∈ R tal que lim S(Pk∗ ) = I. Ası́
k→∞
ǫ
existe k1 tal que si k ≥ k1 entonces |I − S(Pk∗ )| < (5.3)
2
Tomemos k = max{k0 , k1 } y si P ∗ = (P, ξ) ∈ P ∗ ([a, b]) con kP k < δ, de (5.1), (5.2) y (5.3) tenemos
ǫ ǫ
|I − S(P ∗ )| ≤ |I − S(Pk∗ )| + |S(Pk∗ ) − S(P ∗ )| < + =ǫ
2 2
y por tanto f es Riemann-Stieltjes integrable con respecto a α sobre [a, b].
Prueba. ¡Ejercicio!
Análisis Real I 151
Proposición 5.1.3 Sea α : [a, b] → R. Si f ∈ Rα ([a, b]) y c ∈ ]a, b[, entonces f ∈ Rα ([a, c]), f ∈
Rα ([c, b]) y se cumple
Z b Z b Z b
f dα = cf dα + f dα
a a c
Prueba. ¡Ejercicio!
El siguiente teorema da condiciones suficientes para que una función f sea Riemann-Stieltjes integrable
con respecto a α sobre [a, b].
Teorema 5.1.4 Si f ∈ C([a, b]) y α : [a, b] → R es de variación total acotada sobre [a, b] entonces
f ∈ Rα ([a, b])
Prueba. Por hipótesis, f es u. c. en [a, b]. Luego, dado ǫ > 0, existe un δ > 0 tal que si s, t ∈ [a, b] y
ǫ
|s − t| < δ entonces |f (s) − f (t)| < .
ℓ(α)
Dados P ∗ = (P, ξ), Q∗ = (Q, η) ∈ P ∗ ([a, b]) con kP k < δ y kQk < δ, vamos a probar que
|S(P ∗ ) − S(Q∗ )| < ǫ
Consideremos dos casos:
Caso 1: Q refinamiento de P . Sin pérdida de generalidad, podemos suponer que Q = P ∪ {t∗ }. Sea
P = {a = t0 < t1 < · · · < tk = b}, ξ = (ξ1 , . . . , ξk ) ∈ Rk , luego existe j ∈ {1, . . . , k} tal que t∗ ∈ ]tj−1 , tj [,
luego Q = {a = t0 < t1 < · · · < tj−1 < t∗ < tj < · · · < tk = b} y η = (η1 , . . . , ηj−1 , ηj′ , ηj′′ , ηj+1 , . . . , ηk ) ∈
Rk+1 . Se sigue que
k
X
|S(P ∗ ) − S(Q∗ )| = f (ηi )[α(ti ) − α(ti−1 )] + f (ηj′ )[α(t∗ ) − α(tj−1 )] + f (ηj′′ )[α(tj ) − α(t∗ )]+
i=1,i6=j
k
X
− f (ξi )[α(ti ) − α(ti−1 )] + f (ξj )[α(tj ) − α(tj−1 )]
i=1,i6=j
k
X
≤ |f (ηi ) − f (ξi )| · |α(ti ) − α(ti−1 )| + |f (ηj′ ) − f (ξj )| · |α(t∗ ) − α(tj−1 )| +
i=1,i6=j
Caso 2: Caso general Considero R∗ = (R, µ) ∈ P ∗ ([a, b]) donde R = P ∪ Q, tenemos que P ⊆ R. Q ⊆ R,
kRk < δ y por el caso anterior:
|S(P ∗ ) − S(Q∗ )| ≤ |S(P ∗ ) − S(R∗ )| − |S(R∗ ) − S(Q∗ )| < 2ǫ
Análisis Real I 152
Prueba. Como α ∈ C 1 ([a, b]) entonces α es de variación total acotada sobre [a, b], luego por el Teorema
5.1.4, dado ǫ > 0, existe δ1 > 0 tal que si P ∗ = (P, ξ) ∈ P ∗ ([a, b]) con kP k < δ1 entonces
Z
b ǫ
f dα − S(P ∗ ) <
(5.4)
a 2
También, por el teorema anterior, tenemos que f α′ es Riemann integrable sobre [a, b], luego existe δ2 > 0
tal que si P ∗ = (P, ξ) ∈ P ∗ ([a, b]) con kP k < δ2 entonces
Z
b ǫ
′ ′ ∗
f (t)α (t)dt − S(f α , P ) < (5.5)
a 2
Sea δ = min{δ1 , δ2 } > 0 y considero P = {a = t0 < t1 < · · · < tk = b} ∈ P([a, b]) con kP k < δ.
Como α es continua en [tj−1 , tj ] y diferenciable en ]tj−1 , tj [ , por el TVM existe t∗j ∈ ]tj−1 , tj [ tal que
α(tj ) − α(tj−1 )
α′ (t∗j ) = , ∀ 1 ≤ j ≤ k, luego para P ∗ = (P, ξ) ∈ P ∗ ([a, b]) con ξ = (t∗1 , . . . , t∗k ), tenemos
tj − tj−1
k
X k
X
S(f α′ , P ∗ ) = (f α′ )(t∗j )[tj − tj−1 ] = f (t∗j )[α(tj ) − α(tj−1 )] = S(P ∗ ) (5.6)
j=1 j=1
Proposición 5.1.6 Si f ∈ C([a, b]) y α : [a, b] → R es de variación total acotada sobre [a, b] entonces
Z
b
f dα ≤ Kℓ(α)
a
Prueba. Dado ǫ > 0 existe δ > 0 tal que si P ∗ = (P, ξ) ∈ P ∗ ([a, b]) con kP k < δ implica que
|S(P ∗ ) − I| < ǫ.
Por otro lado, si P ∗ = (P, ξ) ∈ P ∗ ([a, b]) es tal que P = {a = t0 < t1 < . . . < tk = b} y ξ =
(ξ1 , . . . , ξk ) ∈ Rk entonces
Xk X k
∗
|S(P )| = f (ξi ) [α(ti ) − α(ti−1 )] ≤ |f (ξi )| · |α(ti ) − α(ti−1 )| ≤ Kℓ(α)
i=1 i=1
luego
|I| ≤ |I − S(P ∗ )| + |S(P ∗ )| < ǫ + Kℓ(α)
y desde que el ǫ > 0 fue arbitrario, la proposición queda demostrada.
Prueba. En primer lugar, es fácil demostrar que si α es de variación total acotada y ϕ : [a, b] → [c, d] es
un homeomorfismo entonces α ◦ ϕ : [a, b] → R también es de variación total acotada (¡Ejercicio!), luego
f ◦ ϕ ∈ Rα◦ϕ ([a, b]). Vamos a suponer que ϕ es creciente.
Sea ǫ > 0, existe δ1 > 0 tal que
Z b
ǫ
si P ∗ = (P, ξ) ∈ P ∗ ([a, b]) con kP k < δ1 entonces S(f ◦ ϕ, α ◦ ϕ, P ∗ ) −
(f ◦ ϕ)(s)d(α ◦ ϕ) < (5.7)
a 2
Z b
ǫ
∗ ∗ ∗
si Q = (Q, η) ∈ P ([c, d]) con kQk < δ1 entonces S(f, α, Q ) − f (t)dα < (5.8)
a 2
Además, como ϕ es hoemomorfismo, ϕ es u.c. en [a, b], luego existe un δ2 > 0 tal que
Sea P ∗ = (P, ξ) ∈ P ∗ ([a, b]), P = {a = s0 < s1 < · · · < sk = b} y kP k < δ = min{δ1 , δ2 }. Desde que
ϕ es creciente, definimos QP = {c = ϕ(s0 ) < ϕ(s1 ) < · · · < ϕ(sk ) = d} y ηi = ϕ(ξi ) ∈ [ϕ(si−1 ), ϕ(si )].
Luego Q∗P = (QP , η) ∈ P ∗ ([c, d]). Un fácil cálculo muestra que S(f, α, Q∗P ) = S(f ◦ ϕ, α ◦ ϕ, P ∗ ). Además
de (5.9) se tiene que |si − si−1 | ≤ kP k < δ, luego |ϕ(si ) − ϕ(si−1 )| < δ1 y por tanto kQk < δ1 . De (5.7)
y (5.8) se tiene
Z Z b Z b
b
∗
f (t)dα − (f ◦ ϕ)(s)d(α ◦ ϕ) ≤ S(f, α, Q ) − f (t)dα
a a a
Análisis Real I 154
Z b
∗
+ S(f ◦ ϕ, α ◦ ϕ, P ) − (f ◦ ϕ)(s)d(α ◦ ϕ)
a
ǫ ǫ
< + =ǫ
2 2
y como el ǫ > 0 fue arbitrario, el Teorema queda probado.
Definición 5.5.1 Sea U ⊆ Rm abierto, α1 ∈ C 1 ([a, b]; U ), α2 ∈ C 1 ([c, d]; U ). Decimos que α2 es una
reparametrización positiva de α1 , lo cual escribiremos α2 ≡ α1 si y sólo si existe ϕ : [c, d] → [a, b]
difeomorfismo creciente de clase C 1 tal que α2 = α1 ◦ ϕ.
Definición 5.5.2 Sea U ⊆ Rm abierto y α ∈ C 1 ([a, b]; U ). Decimos que β : [c, d] → U es un camino
inverso de α si y sólo si β ≡ α−1 .
Observaciones:
Análisis Real I 155
Sean α1 : [a1 , b1 ] → U y α2 : [a2 , b2 ] → U caminos tales que α1 (b1 ) = α2 (a2 ), podemos construir
un tercer camino cuya traza sea la “unión” de las trazas de α1 y α2 . En efecto, sea [a, b] y c ∈ ]a, b[ ,
considero las funciones ϕ1 : [a, c] → [a1 , b1 ] y ϕ2 : [c, b] → [a2 , b2 ] definidas por
b 1 − a1 a1 c − ab1 b 2 − a2 a2 b − cb2
ϕ1 (t) = t− y ϕ2 (t) = t+
c−a c−a b−c b−c