Plan de Cierre y Abandono
Plan de Cierre y Abandono
Plan de Cierre y Abandono
El plan de cierre busca que, una vez finalizada la vida útil del proyecto y de acuerdo con la
legislación aplicable y los lineamientos corporativos, se cumpla con los requisitos que
permitan integrar el área intervenida a usos del suelo compatibles con el ordenamiento
territorial y las características definitivas del área, buscando minimizar o mitigar los efectos
ambientales adversos y potenciar los positivos o favorables sobre el al ambiente y el medio
social.
El plan de cierre que se entrega en el presente documento es inicial, ya que se elabora en
la etapa de planeamiento y operación inicial de la mina. Todo cambio generado por el
desarrollo de la mina, las operaciones y las actividades de rehabilitación, se reevaluará a lo
largo de la vida útil de la mina y serán tratados e incorporados en las actualizaciones del
plan de cierre. El Plan de Cierre incluirá las medidas de manejo general para los siguientes
escenarios:
En el caso de que las circunstancias sean adversas para el reinicio de la operación, será
necesaria la revisión del Plan de Cierre y su posterior implementación.
Los objetivos que se pretenden alcanzar con el cierre del proyecto minero, en cada uno de
sus diferentes escenarios, serán los siguientes:
• Desarrollar actividades de recuperación del área intervenida de tal manera que ésta no
constituya riesgo para la salud, la vida humana y el medio ambiente.
• Implementar medidas para la estabilización física de las zonas intervenidas, de tal manera
que estas no generen impactos sobre los componentes abióticos y bióticos de la zona. La
estabilización química se implementará sólo si las condiciones del suelo así lo ameritan, ya
que de esto dependerá en gran medida el desarrollo de la vegetación que se requiere
implantar.
• Posibilitar que el área intervenida tenga como uso final del suelo los previamente
establecidos mediante los instrumentos de ordenamiento territorial en el municipio de Pesca
lugar en el que se encuentra en el área de influencia del proyecto. De acuerdo con la
evolución de los instrumentos de ordenamiento territorial se deberá ajustar el uso final
establecido para la zona del proyecto, de tal forma que sea acorde a las características
socio-económicas del área y los habitantes de la misma.
9.2 ALCANCE
El Plan de Cierre Minero constituye una hoja de ruta para el cierre de las operaciones del
Proyecto dentro del área de la Licencia No 00136-15, cuyo alcance incluye el
establecimiento de los lineamientos y los pasos a seguir para que la empresa desarrolle
adecuadamente las acciones de cierre, durante las etapas de reasentamiento, construcción
y montaje, operación y abandono, cierre y post-cierre de la mina, constituyéndose así en
un instrumento de planificación que incorpora medidas orientadas a la rehabilitación
ecológica y morfológica de los terrenos intervenidos por el Proyecto.
9.3 METODOLOGIA
La metodología general para el desarrollo del cierre está enmarcada en los siguientes
pasos:
Para cada una de las alternativas identificadas, se establecerán los métodos de ejecución
y la estimación de presupuesto para su implementación.
Formulación de las actividades de post – cierre: se formulan las actividades que deben
ser implementadas, y el presupuesto requerido, para continuar, durante un tiempo
previamente definido, una vez se hayan realizado las actividades de cierre final del
Proyecto, de tal forma que permitan y posibiliten la reconformación, readecuación,
rehabilitación y recuperación de las áreas intervenidas tal como fue diseñado para cumplir
con los objetivos ambientales del plan de cierre. Incluye las medidas de seguimiento e
instrumentación para medir el desempeño de las medidas de cierre implementadas.
Cronograma y Presupuesto del Cierre: para cada uno de los escenarios de cierre se
realizará una estimación de la duración y costo de las actividades de cierre.
Evaluación del cierre: los resultados de los programas de monitoreo serán comparados
con las predicciones de la evaluación de desempeño, el resultado permitirá evaluar de
manera periódica las actividades de cierre y rehabilitación y retroalimentar el proceso para
tomar las medidas correctivas y/o preventivas necesarias.
La evaluación del plan de cierre para las áreas afectadas por la actividad minera, deberá
incluir: i) estabilidad física y geoquímica de los suelos ii) estabilidad química y biológica de
las aguas y iii) estabilidad socioeconómica de las comunidades del área de influencia
directa del Proyecto.
Socialización: identificadas las alternativas de cierre para los componentes del Proyecto
y para las áreas afectadas por la actividad minera y a partir de la formulación inicial de las
mismas, se someterán a un proceso de socialización. El objetivo de esta socialización es
brindar el conocimiento, a las comunidades del área de influencia directa del Proyecto, de
las medidas de cierre identificadas con el soporte técnico respectivo, para generar en la
comunidad la apropiación del territorio que es reintegrado luego de la actividad minera.
Legislación minera
Ley 685 de 2001: contempla el cierre como una actividad planificada, que debe empezar
a ejecutarse en cumplimiento de la concesión minera y que está supervisada no solo por la
autoridad ambiental sino también por la minera (Artículo 84. Programa de Trabajos y
Obras), igualmente indica que las actividades del cierre se constituyen en obligaciones
contractuales amparadas en la póliza minero ambiental (Artículo 45: Objeto del contrato y
Artículo 280).
Legislación Ambiental
Ley 99 de 1993, Art. 60: Establece para la explotación minera a cielo abierto la obligación
de realizar “restauración o la sustitución morfológica y ambiental de todo el suelo intervenido
con la explotación, por cuenta del concesionario o beneficiario del título minero, quien la
garantizará con una póliza de cumplimiento o con garantía bancaria. El Gobierno
reglamentará el procedimiento para extender la póliza de cumplimiento o la garantía
bancaria.”.
Decreto 2820 de 2010, Art 40: Define para los proyectos el plan de desmantelamiento y
abandono; el cual incluirá las medidas de manejo del área, las actividades de restauración
final y demás acciones pendientes.
Identifica los objetivos principales para el cierre de mina y orienta el desarrollo y diseño del
proyecto para la explotación a cielo abierto.
Considera objetivos del cierre, componentes de cierre, actividades de cierre, requerimientos
de mantenimiento, monitoreo post-cierre, cronograma y presupuestos. El plan contiene el
diseño esquemático de la geoforma final dejada en el terreno intervenido, incluye:
• Uso
• Oportunidades para el desarrollo local
• Revegetalización y demás aspectos previstos por el proyecto
Los componentes generales para el cierre del Proyecto se presentan en la Tabla siguiente,
en la cual se indica en cuál etapa se implementará su cierre. Es importante precisar que
algunos de estos componentes serán demolidos una vez culmine el Proyecto, dado que no
prestarán ninguna utilidad para los nuevos usos que se proyectan en el área.
Por otro lado, algunos de los componentes de la mina serán de tipo residual, dadas las
condiciones que presentan al momento del cierre, la funcionalidad que pueden presentar
en los nuevos usos que se van adecuar en el terreno, o para procurar la no generación y la
mitigación de impactos. Estos componentes quedan incluidos en el post cierre.
Los pozos sedimentadores que quedan incluidos en el post cierre se dejarán para que de
manera natural se colmaten y se inicie la revegetalización, evitando de esta manera los
impactos que se generarían si se realizara su demolición al finalizar la operación del
Proyecto.
La permanencia de los terrazas de explotación, el depósito de estériles está dada por las
características morfológicas y las propiedades fisicoquímicas de los suelos y químicas de
las aguas que presenten al finalizar la actividad minera y son las obras que condicionarán
la duración del escenario de post cierre.
Por último, la utilidad en los usos posteriores define la permanencia de la mayoría de las
áreas de apoyo (Vestier, taller, oficina, planta de beneficio, redes de distribución de aguas
y energía, y parte de la infraestructura vial).
La zonificación por áreas homogéneas es una forma de clasificar el área del proyecto
minero, de modo que los componentes reúnan ciertas propiedades similares, con el fin de
diseñar estrategias de cierre que permitan optimizar los espacios, aprovechar el recurso y
tener en cuenta todas las variables de manejo de un área de acuerdo con las características
del sitio y el uso que se le dio durante la operación, para proyectar así el uso final del
territorio.
Las restricciones al uso van a estar asociadas al cambio físico, químico y geotécnico
que sufren los componentes del Proyecto durante la operación. En la Tabla siguiente
se presentan los criterios utilizados para identificar las restricciones al uso y los sitios
del Proyecto que responde a estas características.
Para la definición de los usos potenciales del suelo donde se localizan los componentes del
proyecto, se han clasificado las áreas de acuerdo con las zonas homogéneas definidas y a
las restricciones de uso identificadas, conformando seis tipos de áreas para el uso del suelo.
En la Tabla siguiente se resume de manera general los usos que se establecieron para
cada componente:
Después del
desmantelamiento
de la
infraestructura que
Áreas auxiliares
pueda ofrecer
mineras, cuya
riesgos para la
infraestructura es
comunidad o el
susceptible de
Planta de ambiente, el suelo
desmantelarse,
Tipo II beneficio, potencialmente 4046
demolerse y/o
Taller puede adoptar los
adecuarse, sin
siguientes usos:
restricciones para
el uso posterior
Pecuario Semi-
intensivo
Industrial
Agrícola
Después del
desmantelamiento
de la
infraestructura que
pueda ofrecer
riesgos para la
comunidad o el
ambiente, el suelo
potencialmente
Áreas de apoyo, puede adoptar los
sin restricciones siguientes usos:
Tipo III Oficina, Vestier 59
de uso
Reversión al
estado (Art. 113 de
la Ley 685 de
2001):
infraestructura vial
e Infraestructura
para uso
comunitario.
Industrial
Comercial
Servicios
Las áreas tipo I se caracterizan por presentar restricciones de estabilidad para el uso
potencial del suelo, debido a la falta de consolidación de los materiales depositados, o
por la inexistencia de cobertura vegetal. Estas áreas entrarán a un proceso de
rehabilitación de suelos y siembra de especies de bajo porte, con el fin de conseguir
por medio de una sucesión natural zonas destinadas ya sea a la protección y
rehabilitación del paisaje o al uso agrícola.
Las áreas tipo II, están constituidas por las zonas auxiliares mineras, cuya
infraestructura es susceptible de desmantelarse, demolerse y/o adecuarse, sin
restricciones para el uso posterior. Entre los componentes del proyecto que hacen parte
de esta clasificación se encuentran planta de beneficio y taller. Se realizará el
desmantelamiento de la infraestructura que pueda generar riesgos a la comunidad o al
ambiente y el suelo podrá potencialmente utilizarse para uso pecuario semi-intensivo o
uso industrial. No se considera inicialmente el agrícola como uso potencial, sin
embargo, si los análisis de fertilidad del suelo así lo definieran, en el futuro podría
incluirse como uso.
Las áreas tipo III, son aquellas áreas de apoyo que no presentan restricciones para su
uso después del cierre, algunas de las cuales se demolerán, otras se entregarán para
el uso comunitario y otras serán entregadas a terceros para usos comerciales,
industriales o de servicios. Entre estas áreas se cuentan la oficina, Vestier, zonas de
servicio, zonas de emergencia e infraestructura vial. La reversión gratuita al estado, se
realizará en los casos en que las características y dimensiones de las obras, a juicio de
la autoridad minera, los hagan aptos como infraestructura destinada a un servicio
público de transporte o embarque, o para el uso de la comunidad, conforme a lo
dispuesto en el artículo 113 de la Ley 185 de 2001.
La recuperación del área del proyecto se realizara con miras al aprovechamiento de los
recursos y a la mejora de las condiciones del ambiente y la calidad de vida de la población
del área de influencia.
En la etapa final del cierre, se suministrará información de interés a las partes interesadas
sobre temas como son los criterios de la disminución de la demanda de empleo y la
reducción de puestos de trabajo, incluyendo los beneficios sociales que apliquen.
Con el fin de minimizar el impacto social severo por la reducción del empleo en la zona por
el cierre de la mina, la empresa promoverá la capacitación y la formación en oficios tanto
para las personas del área de influencia como para el personal vinculado al proyecto de
acuerdo con sus actividades específicas.
Delimitación y señalización
- Puntos de acceso: se identificarán los puntos de acceso a las diferentes áreas que se van
abandonar y/o desmantelar. Las señales que se instalen serán de carácter informativo,
donde se expondrán las características y riesgos del terreno. De ser necesario, se indicarán
las restricciones de acceso.
- Vías internas: se indicará que es una zona que se encuentra en etapa de cierre minero,
indicando las características y condiciones topográficas del área en la cual se encuentra.
De igual forma se ubicará señalización indicando riesgos tales como caída de rocas,
superficies deslizantes, hundimiento de banca, etc.
- Zona de excavación: la señalización indicará que se encuentra en etapa de cierre minero
e identificará los riesgos específicos que se tienen de acuerdo con las condiciones
estructurales de sus taludes.
- Aislamiento de núcleos poblados: el aislamiento entre las áreas liberadas y los centros
poblados cercanos deberá mantenerse hasta finalizar el post cierre, con el objeto de
disminuir la accesibilidad de personas ajenas al Proyecto. Para tal fin, se instalará una
señalización en postes de madera hincadas que soportarán mallas en polipropileno
clavadas en las colombinas o listones de madera.
En donde se requiera dejar pasos peatonales, estos deben ser amplios, señalizados,
garantizando una superficie transitable.
Todos los equipos se desmantelarán y trasladarán fuera del área del Proyecto, con el fin de
ser vendidos, arrendados o dispuestos en un lugar apropiado.
Demolición de infraestructura
Los materiales desechados, así como los restos de paredes y pisos deberán ser
trasladados a una planta o sitio autorizado de acuerdo con los requerimientos legales y
buenas prácticas, para ser sometidos a los diferentes procesos de tratamiento y
eliminación.
Los suelos contaminados por aceite y grasas deben ser removidos hasta una profundidad
de 10 cm por debajo del nivel inferior de contaminación y disponerlo con una Empresa
Prestadora de Servicios (EPS) autorizada. Posteriormente se nivelará el área para
integrarla al paisaje circundante.
Reconformación de taludes
Una vez la superficie del terreno esté nivelada y escarificada según necesidades, se
procederá al transporte del material edáfico almacenado en equipos de tolva al área de
rehabilitación, disponiéndolo de forma ordenada por toda el área, para luego esparcirlo con
la ayuda de tractores de oruga de forma uniforme.
En la descarga, habrá que tener en cuenta que el material está esponjado y prever un
espesor algo mayor al original.
Este proceso termina con el uso de una motoniveladora para emparejar el terreno y con
la realización de obras de drenaje para evitar problemas de pérdidas de suelo por
escorrentía. Es recomendable realizar las actividades de adecuación durante la época
de verano para lograr que el material tenga una estabilidad antes de que comience la
época invernal.
Para el caso de los taludes o las áreas de los depósitos, se tendrán en cuenta las
restricciones operacionales y del terreno, restringiendo esta actividad a las zonas con
pendientes menores al 30%.
Figura 12. Clasificación del área intervenida por el proyecto minero para cierre y abandono
Se propone llevar a cabo los siguientes programas para el mantenimiento del post-cierre:
De acuerdo con lo anterior, el plan de cierre inicial se actualizará cada cinco años y se
considerarán los avances en los programas de cierre progresivo, los resultados de las
investigaciones, las modificaciones al desarrollo del Proyecto minero (si aplica), los
resultados de las mesas de concertación con la comunidad y todos los aspectos que
hubiesen cambiado en la operación de acuerdo con lo reportado en el Plan de Cierre Inicial
y los Planes de Manejo Ambiental, al igual que todos aquellos aspectos que sean relevantes
para efecto de los diferentes planes.
Por último es importante anotar que los aspectos financieros pueden requerir
actualizaciones anuales y esto puede conllevar a revisar los costos del plan de cierre. Sin
embargo estás actualizaciones se verán reflejadas en el documento de plan de cierre, en
la medida que se realice la actualización de éste cada cinco años.
De igual manera en la actualización del plan de cierre se realizará el ajuste de los usos del
suelo propuesto, como resultado de los estudios realizados, de la concertación con la
comunidad, de la dinámica económica regional y de los lineamientos de EOT del municipio
de Pesca.
Las actividades para el cierre temporal, deberán permitir que la infraestructura asociada al
proyecto y las zonas de explotación y botadero puedan ser rehabilitadas de manera
inmediata para comenzar la operación. De forma general, el cierre temporal comprenderá
las siguientes actividades:
Efectuar una serie de reuniones en cada una de las comunidades del área de influencia
que permitan desarrollar una comunicación transparente, informando sobre la situación del
proyecto, el cierre temporal y el cese pasajero de las actividades operativas en la mina.
• Instalar señalización alrededor de la mina para indicar que se prohíbe la caza, al igual que
la captura de las especies.
El cierre progresivo se llevará a cabo para cada área de explotación definido dentro de la
secuencia minera de la mina, el cierre del área se iniciará una vez se hayan agotado los
recursos del mismo y a medida que el avance de la explotación lo permita.
• Los accesos hacia los frentes serán conservadas como vías para el tránsito de los
vehículos y maquinaria de la explotación desde y hacia los frentes, así como para el tránsito
esporádico de vehículos y funcionarios para actividades de mantenimiento de predios y
áreas recuperadas.
CIERRE PROGRESIVO
OBJETIVO:
Mitigar y corregir los impactos ocasionados por el desarrollo de la actividad minera, a través de la
implementación de actividades de recuperación del área intervenida.
JUSTIFICACION:
Establecer cobertura vegetal posterior a la reconformación del terreno durante la etapa de cierre y
abandono
Descripción: Valor de referencia
(Área sembrada con cobertura vegetal en cierre
y abandono /Áreas total en cierre y abandono) ≥80%
x 100%
ACCIONES A DESARROLLAR
Para poder hacer un cierre de mina final eficiente, se harán cierres parciales los cuales consisten en que
desde la misma explotación, los taludes sean dejados con cobertura vegetal compuesta por especies
leguminosas rastreras. Las bermas serán recuperadas con árboles o arbustos siendo vegetación propia de
la región.
Para poder hacer un cierre de mina final y botadero eficiente, se harán cierres parciales los cuales consisten
en que desde la misma explotación, los taludes sean dejados con cobertura vegetativa caracterizada por
gramíneas. Las bermas serán recuperadas con árboles o arbustos.
BOTADERO
Angulo de trabajo 38°
Angulo final de explotación 20°
Ancho de bermas 7m
Altura del talud 7m
El diseño del botadero corresponde a 20° de inclinación (danto alta estabilidad al depósito; con una altura
máxima de talud de 7 m, cuyas bermas tendrán un ancho de cuatro (4) metros.
Para evitar posibles socavaciones de la base del talud, se conformarán las bermas con una pequeña
inclinación de unos pocos grados (1-2%) para que el agua lluvia pueda circular; además, se proyecta la
construcción, de acuerdo con el avance de la explotación.
La reconformación de los frentes va a permitir dotarlos de un aspecto más natural y pendientes más tendidas
suavizando las formas, evitando salientes que sean fácilmente erodables por el viento y el agua y permitiendo
que el área del proyecto se pueda integrar fácilmente al paisaje de la zona.
Los materiales de desecho se irán extendiendo en función de tamaño; los de mayor volumen
ocuparán la base y sobre ellos se localizarán materiales sueltos y tierras, en capas de
aproximadamente 50 cm de espesor. Para asegurar la estabilidad y permitir el drenaje de la masa,
los taludes se perfilarán en 38º.
Los botaderos y áreas de botadero se conformarán con Bulldozer o cargador en capas horizontales
continuas de material suelto, de 50cm de espesor y compactadas hasta que el terraplén alcance
una altura máxima de 7m.
Inmediatamente establecida cada una de las terrazas del botadero se procederá a la empradización
de éstos.
Los contornos del área del botadero, incluidos los taludes, también requerirán la implantación de
especies vegetales: herbáceas y arbustivas en los taludes y arbóreas en la periferia, procurando
cerrar las visuales del botadero.
Una vez concluida la actividad de disposición de material por terraza, se procederá a extender de
nuevo la capa orgánica y luego se empradizará. Este procedimiento además de favorecer la
retención de partículas, promueve la recuperación paisajística.
La reconstitución del suelo, inicialmente, consiste en una escarificación leve de la superficie y adición de
fertilizantes, en caso de ser necesario, que permitan la siembra de leguminosas rastreras inicialmente y
especies arbóreas o arbustivas de forma posterior. En su momento se realizarán pruebas que indiquen si es
necesario o no, usar aportes adicionales de fertilizantes para obtener las condiciones necesarias de
germinación. Por otro lado, el inicio de la fase de recubrimiento del terreno de una determinada zona de la
mina debe coincidir con el comienzo del período húmedo del año, con la intensión de que las lluvias faciliten
el crecimiento de las primeras leguminosas rastreras sobre el suelo dispuesto sobre las áreas que serán
recuperadas.
Una vez colocado el suelo se procede con la siembra de vegetación herbácea o rastrera, adaptada a
condiciones abiertas y que permitan mejorar el contenido de nitrógeno en el suelo (por ejemplo,
leguminosas). Esta siembra tiene como objeto prioritario establecer una cubierta vegetal baja y densa que
sea capaz de proteger el suelo de las aguas de escorrentía que puedan generar procesos erosivos y evitar
la pérdida de suelo por la acción del viento. Si la recuperación de una zona sigue muy de cerca la etapa de
explotación, de manera que el tiempo entre las dos sea menor a un año, el recubrimiento con la tierra vegetal
almacenada será suficiente y no necesitará de siembra, pues las semillas que se encuentran latentes en el
banco del suelo y posiblemente sean viables aún.
Área de influencia puntual, sobre la zona que La titular de la licencia de Explotación No 00136-15,
circunda la explotación. Mina Cañaguate y la comunidad de Pesca
SEGUIMIENTO Y MONITOREO
La propuesta de recuperación del terreno fue concebida para que las actividades de
mantenimiento de las zonas sean mínimas, es decir que el cuidado sea pasivo y que
se encuentre dentro de los usos de suelo establecidos por parte de los instrumentos
de ordenamiento territorial del municipio de Pesca, los cuales permiten que el área sea
usada con fines de conservación y silvopastoriles.
El plan de cierre se hace durante la operación minera, pues a medida que avanzan las
terrazas de explotación y se agoten las reservas se van recuperando, de igual forma
se propone para el botadero el cual una vez se compacten las terrazas de este será
recuperado y estabilizado con siembra de vegetación.
Dentro de cada una de las actividades que se pretenden realizar para el cierre
progresivo, se busca que las actividades de monitoreo y mantenimiento sean de tipo
pasivo. Las actividades a realizar son: