Desahogo Emocional
Desahogo Emocional
Desahogo Emocional
Cuando no drenamos ese residuo emocional podemos estar acumulando “basura” durante
años sobre todo relacionada con aspectos emocionales ante los que nos sentimos mas
débiles o indefensos.
Es básico para tu salud emocional conocer mecanismos para drenar como si de toxinas se
tratara todo aquello que te sobra y produce malestar, que en la mayoría de las ocasiones se
trata de emociones que no te corresponden y que inconscientemente recoges de los demás.
Existen muchas alternativas, aquí te voy a explicar un ejercicio a través de la escritura pero
recuerda que meditar es la forma mas sencilla, eficaz y que siempre esta a tu alcance.
Limpia el depósito
Lo ideal es meditar un poco cada día para hacer una limpieza y desechar todo aquel
material (pensamientos, emociones) que no es beneficioso, la meditación hace esto de
forma automática, por eso después de meditar te sientes con más claridad y perspectiva.
Sin embargo puedes trabajar de forma más focalizada, eligiendo un asunto concreto del que
desees liberarte.
NOTA 1: Realiza este ejercicio cuando estés solo y puedas concederte un tiempo y un
espacio exclusivamente para ti.
Escribe en una hoja o varias todos los pensamientos negativos, oscuros o densos que
tengas con respecto a un área de tu vida en la que te sientas limitado o paralizado,
pueden ser cosas que tú te digas o frases que te decía tu madre, creencias, hechos del
pasado, cosas que te reproches, situaciones…
Se trata de escribir todo lo que se te pase por la cabeza sin ningún tipo de filtro y sin dejarte
nada en el tintero, puedes escribir todas las palabrotas que desees, tonterías y absurdeces
que te vengan, incluso si la situación es negra puedes llevarla al extremo de la negrura y el
caos más absoluto.
La finalidad es que todos esos pensamientos que te inquietan tengan un canal de salida
hacia el exterior, en el momento en que salen a la luz pierden fuerza.
Así que solo por esta vez y sin que sirva de precedente puedes sumirte en la critica, el
reproche y la negatividad más absoluta, dales rienda suelta.
Seguramente que al terminar te sentirás un poco cabreado e incluso con ganas de golpear,
eso es normal.
2. Transformación
Después vas a romper el papel en muchos pedazos liberando de esta forma la rabia y por
último lo vas a quemar (cuidado al hacer esto, hazlo de forma segura) a modo simbólico de
purificación.
3. Presente
Ahora escribe todo lo positivo que tienes en tu vida (amigos, pareja, estudios, casa,
logros, familia…), apuntalo todo aunque sean cosas muy sencillas, se trata de que conectes
con el momento presente y el sentimiento de gratitud. También sirve recordar situaciones o
personas del pasado por las que sientas un enorme aprecio o gratitud, puedes tratar de
enviarle a esas personas gratitud. Reiterate en las sensaciones de amor y trata de sentirlas en
tu corazón hasta que este se expanda.
Con este ejercicio cambiamos el cabreo de antes por una sensación de gratitud.
4. Futuro
Después vas a proyectarte cinco años más adelante y vas a escribir en otro papel las
cosas o aspectos que ahora no tienes pero que deseas adquirir, se trata de que dejes
volar tu imaginación y no te pongas limites, el pensamiento es libre y gratis así que no te
pongas ningún tipo de traba.
Si ya has escrito como seria tu futuro ideal, ahora se trata de que lo visualices con todo lujo
de detalles, que te veas en escena disfrutando de absolutamente todo lo que te hace feliz,
para ello si estas cómodo y relajado mucho mejor.
Cuantos más detalles sensoriales más efectiva será la visualización y si ademas puedes
añadir una importante carga emocional positiva mucho mejor.
Con los dos primeros pasos limpias el subconsciente y con los dos últimos haces una
reprogramación con nuevas ideas mucho más interesantes que serán nuevas semillas de
creación.
Animo! Coge lápiz y papel, ponte manos a la obra y comprobarás como al terminar te
sentirás como si te hubieras quitado una nube oscura y densa de encima.
¿Pero qué pasos hay que dar? Te explicamos cómo conseguir ese desahogo emocional.
Es posible que bajo esta coraza ligeramente agresiva no esté otra cosa más que la tristeza, el
pesar por haber perdido algo o alguien, la frustración por el fracaso o la soledad.
Deberemos ir capa a capa, ahondando en nosotros mismos para llegar al centro de
nuestras propias emociones. ¿Cómo me siento? ¿Es odio, es amargura? ¿Qué hay tras
estos sentimientos?
2. Vaciado de mente
El vaciado de mente no es más que ir descendiendo en la escalera de nuestro mundo
interior, de nuestras emociones, para ello podemos seguir los siguientes pasos:
A veces es más fácil acogerse a la salida de emergencia, esa donde uno sale corriendo sin
mirar atrás para huir de aquello que lo inmoviliza. Prefieren no admitir, no pensar, no
hablar de aquello que les duele, les molesta o que les impide ser feliz y vivir en armonía.
El valor personal implica una necesidad por enfrentarse a uno mismo con el fin de alcanzar
las metas propias, que no son otras más que las de encontrar el equilibrio.
La integridad emocional requiere que vayamos liberándonos de todos esos pesos que
enferman nuestro carácter y nuestro cuerpo. Basta con buscar un instante para nosotros
mismos y ahondar en el mapa interior que todos tenemos. Hay que buscar recovecos,
baúles donde se esconde la rabia, la frustración… enfrentarse a ellos y alcanzar la orilla
de la tranquilidad y el desahogo emocional.