Pueblo Paraguayo

Descargar como doc, pdf o txt
Descargar como doc, pdf o txt
Está en la página 1de 11

www.monografias.

com

Características socio-culturales del pueblo Paraguayo

1. Introducción
2. Características socio-culturales del pueblo Paraguayo.
3. Descubridores
4. Pueblos de indios.
5. ¿Qué es cultura?
6. Cultura y bilingüismo en el Paraguay
7. La religiosidad popular, costumbres, danzas, comidas típicas, juegos folklóricos
8. División política
9. Símbolos que distinguen al Paraguay
10. Implicaciones del proceso de globalización en el Paraguay.
11. Conclusión
12. Bibliografía
Introducción:
El siguiente trabajo de investigación, nos presenta una perspectiva actualizada de los valores y
costumbres del pueblo Paraguayo, analizados desde distintos puntos de vista –por la amplia bibliografía
consultada- siendo así, veremos el proceso e integración de la cultura Guaraní, muy arraigada dentro de
nuestro pueblo, y sus constantes cambios, como parte de un modelo de cultura bilingüe, que sigue
atravesando un proceso de trancision hacia la completa aceptación de su valor y aporte a la identidad
nacional.
El folklore paraguayo, identificado entre otras cosas por su gastronomía, su danza, sus juegos y
tradiciones, hacen de la cultura Paraguaya una rica mezcla de las raíces indígenas de Sudamérica, y el
aporte de las distintas culturas de los colonizadores y conquistadores, donde cabe destacar también algo
muy importante como lo fué el aporte de las misiones Jesuíticas para la religiosidad popular.
Siendo de esta manera, mencionamos el proceso de adaptación del pueblo Paraguayo a la
globalización, como un proceso de tolerancia y aceptación de las distintas culturas con las que conviven
nuestros compatriotas, ya que gran parte de la población rural se mantiene en contacto con inmigrantes de
diversos puntos del globo, cosa a la que no están ajenas los grandes centros urbanos, en los que el
comercio y las relaciones sociales se ven envueltos en el trato con personas de distintas nacionalidades,
siendo las predominantes en nuestro país, el trato con la comunidad del MERCOSUR, e inmigrantes
menonitas, que tienen una significativa y activa participación en lo que respecta a la economía nacional, en
el sector agro-industrial.
El proceso de globalización conlleva, entre otras cosas, que se vayan perdiendo costumbres y
valores dentro de la población de los centros urbanos, ya que son los que están mas expuestos al
consumismo de todo tipo de producto o servicio, que se implementa a través del comercio internacional, de
esta manera podemos apreciar que en la población rural se mantienen ciertas costumbres, que ya no se
practican en las ciudades, y parafraseando al célebre Arthur Helps coincidiremos en que “La tolerancia es
la auténtica prueba de civilización”.

Características socio-culturales del pueblo Paraguayo.


El hombre americano, el paleo-americano, no es autoctono; los amerindios son inmigrantes muy tardios. El
continente americano y el australiano son los de poblamiento mas tardio, podemos afirmar la existencia del
hombre en America hacia los 10.000 años a. de C.
Todos los inmigrantes llegaban por oleajes migratorios, por avanzadas migraciones paulatinas; primero por
el estrecho de Bering, desplazandose por Norteamerica hacia Sudamerica; luego, 3.000 años a. de C. otros
inmigrantes utilizaban como punto de entrada la zona del Istmo de Panama.
Los tipos de cultura que nosotros tenemos en el Paraguay prehistorico son dos: el paleolitico y el neolitico.
El tipo de cultura paleolitico - paleolitico superior, es el mas antiguo: por los hallazgos arqueologicos y por
las tribus supervivientes.
Se caracteriza por el nomadismo de cazadores y recolectores, aprovechando los recursos naturales sin
ninguna productividad humana, por ende, todo el problema o la crisis de la sobrevivencia de estas culturas
proviene de la disponibilidad de los recursos para la caza, pesca o recoleccion.
Dado el nomadismo de estas culturas, estaban organizados en simples bandas unilineales (a las que
podriamos llamar familias). Podra hallarse una federacion de estas bandas en defensa mutua contra otras
tribus.
Estas bandas no tienen apego a la tierra, solo existe interés por la caza. En las zonas donde se encontraban
estas culturas habia escasa densidad demografica: 2 a 8 personas sobre 100 Km cuadrado. Por lo tanto en
zonas pampidas, de planicie o sabana no hay densa poblacion del tipo cultural paleolitico.
Tambien su ideologia, sus creencias, sus tendencias respecto a la sobrevivencia eran utilitarias, un puro
interes subsistencial. Los conflictos se basaban en interferencias de las fuerzas consideradas magicas,
sobrenaturales.
En contraste con estas culturas paleoliticas alrededor de los 3.000 años a. de C. comienza a asomar otro
tipo de cultura denominada neolitico.
Los pueblos de cultura neolitica, siguen basando su subsistencia en la caza, pero interviene ya el cultivo.
Entonces, las tribus consideradas de cultura neolítica, son cazadoras y cultivadoras intensivas o
desarrolladas, ya que el cultivo nunca produjo un superavit que permita otras actividades.
Estos cultivadores neoliticos practican la cultura depredadora con el metodo de la roza, un metodo que no
permite el cultivo eficiente por mas de dos años.
Por esto, en la zona de Sudamerica, zona tropical, estos pueblos se hallaban en continuo movimiento, pues
no conocian los metodos de abono.
La ideologia de estos pueblos sera distinta de los de cultura paleolitica. Los pueblos neoliticos tambien son
utilitarios, pero buscan abundancia. Los pueblos guarani de hoy mantienen la ideologia del " teko pora" que
quiere decir "vida buena", en contraposicion al "yby mara", la tierra mala y del "teka mara", la vida mala.
Los pueblos de este tipo trajeron una revolucion cultural frente a los paleoliticos puramente cazadores,
pescadores y recolectores. Cuando hay cultivo, la organización social tiene una base en grandes casas
comunales, lo que permite mayor desarrollo de la manufactura y la ceramica.
Estos eran los dos tipos de cultura que conocemos del Paraguay prehistorico, se desconocen en este ambito
otros grupos y tipos culturales que sí es posible hallar en Sudamérica: los pueblos marginales.
Los pueblos neoliticos se hallaban en la Region Oriental, separados de los paleoliticos por el rio Paraguay
que dividia asi, dos tipos de cultura, encontrandose los paleoliticos en la region Occidental.
Faltan en Paraguay los llamados neoliticos superiores, que llegaron a un grado de dessarrollo socio-politico
con reinos y jefaturas, ya que, cuando un pueblo tiene superproduccion permite su organizacion social.
Cuando no hay contacto periferico, las culturas se estancan, asi como describimos a las culturas paleoliticas
y neoliticas. La conquista española encontro a los guaranies en las mismas condiciones de desarrollo
cultural de 3.000 años a. de C.
No empleamos la palabra "civilizacion" sino cultura, porque implica a un desarrollo de la ciudad como
centro. Asi el neolitico-superior y civilizacion del tipo incaico no se encuentran en Paraguay.

DESCUBRIDORES
JUAN DE SALAZAR DE ESPINOZA
Nacio en 1508, llego a Rio de la Plata con la expedicion del primer Adelantado. Primer Oficial de la Real
Hacienda. El 15 de Agosto de 1537 fundo el Fuerte "Nuestra Señora Santa Maria de la Asuncion". En este
lugar se levanta una precaria capilla en la que fue entronizada la Imagen de la Virgen de la Concepcion ·La
Conquistadora·; que fue sustituida en 1742 por la Virgen Sta. Ma. De la Asuncion. Incremento la ganaderia
paraguaya y rioplatense al introducir al fuerte los primeros vacunos al Paraguay: 7 vacas y 1 toro.
RELIGIOSOS
ROQUE GONZALEZ DE SANTACRUZ
Criollo asunceno, nacio en 1576; fueron sus padres Bartolome Gonzalez de Villaverde y Maria Santacruz.
Ordenado sacerdote en 1598 por Fray Hernando de Trejo y Sanabria, acompaño en sus primeras labores
misionales al ilustre franciscano fray Luis Bolaños. Fue por muchos años cura parroco de la catedral
asuncena. Ingreso a la orden jesuitica; cumpliendo a partir de entonces una extraordinaria cruzada misional.
El padre Roque Gonzalez de Santacruz fue sacrificado con otros compañeros por orden del cacique Ñezu,
en Caaro, el 15 de noviembre de 1628. De su cuerpo lanzado a la hoguera no se quemo el corazon, que
guardado en un arca, fue llevado a roma en 1663. Para la conmemoracion del tricentenario del martirio, la
reliquia fue traida de vuelta, recien en 1928 (300 años despues). Hoy se guarda en la Capilla de los Martires
de laIglesia Cristo Rey. El padre Roque Gonzalez con sus compañeros martires Alonzo Rodriguez y Juan del
Castillo, fueron beatificados por el Papa Pío XI, en 1934.
FRAY LUIS BOLAÑOS
Llego al fuerte Nuestra Señora Santa Maria de la Asuncion en febrero de 1575 gracias al Adelantado Ortiz de
Zarate. Con Alonzo de Buenaventura enseñaron las primeras letras y la doctrina cristiana hasta 1580 entre el
abundante mestizaje, interin aprendian el idioma nativo de los mancebos de la tierra, hijos de capitanes de la
conquista y madre india. Despues de 1580 la entrada de fray Alonzo, Bolaños, Gabriel de la Anunciacion y
otros en la region del Ypane y el Manduvira, cuyos resultados inmediatos fueron las fundaciones de los
primeros

PUEBLOS DE INDIOS.
Ya despues de la creacion del Seminario asunceno por 1885 recibio Bolaños su ordenamiento
presumiblemente por manos del Obispo Guerra. Y sigio misionando y fundando pueblos.
Fray Luis Bolaños fue por breve tiempo GUARDIAN del Convento franciscano de Asuncion (de 1606 a
1607), y custodio de la ORDEN en el Paraguay. Vivio sus ultimos años de su ilustre vida en el Convento de
Buenos Aires, enfermo y ciego. Alli murio, el 11 de octubre de 1629; luego de realizar una labor
extraordinaria de mas de 54 años.
FRAY DOCTOR FRANCISCO JOSE BOGARIN
Oriundo de Carapegua, habia nacido en 1763; estudio en el colegio de Monserrat, de Cordoba en donde
se ordeno sacerdote y obtuo el grado de Doctor en Sagrada Teologia; al regreso al Paraguay fue nombrado
Secretario de Camara del Obispo Nicolas Videla del Pino, ejercio la Catedra de Prima de Teologia en el
Colegio Carolino. Convencional en el Congreso de 17-20 de junio de 1811, fue designado vocal del nuevo
gobierno independiente. Nada mas se supo de el, ni de la circunstancia ni fecha de su muerte.

¿Qué es CULTURA?
"Cultura, es el aprovechamiento social del conocimiento" (Gabriel García Marqués).
El uso de la palabra CULTURA fue variando a lo largo de los siglos. En el Latín hablado en Roma significaba
inicialmente "cultivo de la tierra", y luego, por extensión metafóricamente, "cultivo de las especies Humanas".
Alternaba con civilización, que también deriva del latín1 y se usaba como opuesto a salvajismo, barbarie o al
menos rusticidad2. Civilizado era el hombre educado.
Desde el siglo XVIII, el romanticismo impuso una diferencia entre civilización y cultura. El primer término se
reservaba para nombrar el desarrollo económico y tecnológico, lo material; el segundo para referirse a lo
"espiritual", es decir, el "cultivo" de las facultades intelectuales. En el uso de la palabra "Cultura" cabía,
entonces, todo lo que tuviera que ver con la filosofía, la ciencia, el arte, la religión, etc. Además, se entendía
la cualidad de "culto" no tanto como un rasgo social sino como individual. Por eso podía hablarse de, por
ejemplo, un hombre "culto" o "inculto" según hubiera desarrollado sus condiciones intelectuales y artísticas.
Esto es hoy muy frecuente.
Las nuevas corrientes teóricas de sociología3 y la antropología4 contemporáneas redefinieron este término,
contradiciendo la conceptualización Romántica. Se entiende CULTURA en un sentido social. Cuando se dice
"CULTURA China", "CULTURA Maya" se está haciendo uso muy distinto de aquel, se refiere a los diversos
aspectos de la vida en esas sociedades. En general, hoy se piensa a la CULTURA como el conjunto total de
los actos humanos en una comunidad dada, ya sean éstos prácticas económicas, artísticas, científicas o
cualesquiera otras. Toda práctica humana que supere la naturaleza biológica es una práctica cultural.
Esta sentido de la palabra CULTURA implica una concepción mucho más respetuosa de los Seres Humanos.
Primero, impide la discriminación entre "hombres cultos"y "hombres incultos" que el término podía tener
desde el romanticismo; Se hablará de diferencias culturales, en todo caso. Segundo, también evita la
discriminación de pueblos que, como los nativos de América, fueron vistos por los europeos como
"salvajes"por el solo hecho de tener"cultura" distinta.
Resumiendo, este uso actual del término CULTURA designa, como se dijo arriba, el conjunto total de las
prácticas humanas, de modo que incluye las prácticas: económicas, políticas, científicas, jurídicas.
Religiosas, discursivas, comunicativas, sociales en general. Algunos autores prefieren restringirse el uso de
la palabra CULTURA a los significados y valores que los hombres de una sociedad atribuyen a sus prácticas.
Hay que señalar que cuando se estudian los hechos sociales, por ejemplo la economía o el Arte, se toman
esos aspectos en forma parcial auque en la realidad están estrechamente relacionados. Esto ocurre por la
imposibilidad del pensamiento humano abarcarlo en su compleja red de interrelaciones. No está de más
insistir en que no hay práctica social que esté desvinculada de las restantes, formando un todo complejo y
heterogéneo de recíprocas influencias. Así, no puede explicarse cabalmente la historia del arte, para
continuar con el mismo ejemplo, si no se hace referencia a la historia económica, a la política, a las
costumbres, la moral, las creencias, etc., de la época.
Esta es la razón por la cual cuando se estudia la cultura se prefiere el sentido segundo de los mencionados
párrafos arriba, el de los significados y valores que los hombres atribuyen a su praxis5.
En las ciencias sociales, el sentido de la palabra cultura es más amplio la cultura abarca el conjunto de las
producciones materiales (objetos) y no materiales de una sociedad (significados, regularidades normativas
creencias y valores)
Empleos de la Palabra Cultura.
Se puede decir que en la vida cotidiana se utiliza algunas nociones de cultura, a las que se las pueden
considerar como prejuicios que la sociedad posee.
Estos son:
Un estado desarrollado de la mente. (Utilizamos este significado para decir que una persona sabe mucho o
que conoce de arte o que se relaciona con alguna de estas actividades). (resultado)
Los procesos por los cuales se alcanza ese desarrollo o estado, ("Los intereses Culturales"; "las actividades
Culturales") (camino; proceso)
Los productos a través de los cuales se alcanza dicho desarrollo (básicamente, los considerados productos
culturales, como los cuadros las obras musicales y las obras literarias).(medios que ayudan al camino)

CULTURA Y BILINGÜISMO EN EL PARAGUAY


1. La unión de dos culturas
La población paraguaya actual es el resultado de la mestización de dos tipos étnicos y culturales diferentes:
uno americano, otro europeo: guaraníes y españoles. Esta mestización tiene características algo diferentes a
la que se realizó en otras regiones americanas, en algunas de las cuales ella no llegó a completarse y
existen, por un lado, grupos importantes de descendientes de indígenas que conservan la mayoría de sus
rasgos raciales y culturales originarios y, por otro lado, una población que está compuesta por descendientes
de españoles u otros europeos con sus características étnicas y culturales propias.
En nuestro país, desde el comienzo de la conquista y colonización se produjo -principalmente a causa del
aislamiento geográfico y la ausencia de metales preciosos- una intensa mestización por el muy reducido
número de hombres españoles en medio de una gran población indígena. Esto último los indujo a tomar
como esposas o concubinas a las indias guaraníes y a practicar la poligamia. Hoy en día la población
paraguaya es mestiza prácticamente en su totalidad.
Se conoce poco y hay muchas opiniones sobre la proporción de "sangre" indígena y española que entra en
la composición biológica de la población paraguaya. En las áreas rurales parece prevalecer el elemento
indígena y en las urbanas el español, aunque eso no sea muy determinante y se pueda encontrar tanto entre
los ciudadanos como entre los campesinos tipos raciales que se asemejan a representantes de cualquiera
de sus dos ascendencias, así como tipos mixtos o mestizados en la mayoría de los casos .
Como consecuencia de la mezcla de los dos tipos étnicos, cada uno poseyendo su propia cultura -una,
neolítica con conocimiento de la agricultura y otra, europea del siglo XV estancada por el prolongado
aislamiento en que estuvo primero la provincia y luego el país independiente-, se produjo una mezcla que dio
por resultado la actual cultura paraguaya.
Todavía no se ha llegado a estudiar suficientemente qué proporción de cada cultura originaria entró en la
mezcla resultante y hay quienes discuten sobre si tenemos una o dos culturas paraguayas. Aparentemente
prevaleció la cultura del dominador: la organización política, social y económica; la religión; la vestimenta y la
vivienda; los instrumentos de metal y las técnicas de producción; el arado y la carreta. De la cultura indígena
se conservan algunas costumbres y utensilios: el uso de la yerba mate y otros productos agrícolas; valores
como la solidaridad y la cooperación; y -lo más sorprendente- la lengua guaraní hablada por casi toda la
población.
Es evidente la existencia de una cultura propiamente paraguaya que es muy homogénea y compartida por
toda la nación. Somos culturalmente originales y diferentes en muchos aspectos respecto a nuestros vecinos
argentinos, uruguayos, chilenos, bolivianos y brasileños. Tenemos ricas tradiciones que son propias de este
país: música, folclore, comidas típicas, costumbres y valores; de los que participamos todos.
Con respecto al uso mayoritario del guaraní en toda la extensión del país, una lengua aborigen americana,
se puede decir que el Paraguay es el único caso de este tipo en América. La lengua española, lengua del
dominador usada en casi todo el continente, se usó también en el país desde su origen pero cuenta con
menor número de hablantes, calculado en poco más de la mitad de la población.
Como la lengua guaraní se usa más en el campo, donde reside la mayoría de la población, y el castellano se
usa más en las áreas urbanas, se podría decir que hay una cultura rural y otra urbana; pero -por la gran
movilidad social entre campo y ciudad- en las ciudades nadie es ajeno a las costumbres y usos campesinos.
También hay pocas cosas de la cultura ciudadana que el campesino no conoce porque ambas culturas han
estado en contacto por mucho tiempo, solamente que el campesino no puede participar de esta cultura, está
forzado a vivir en las costumbres que funcionan para él bajo circunstancias económicas particulares y que es
incapaz de cambiar .
Cada cultura debe corresponder a una lengua y cada lengua a una cultura. Como en el Paraguay el 90% de
la población habla en guaraní y el 55% en castellano, según el censo de 1982, tendríamos que deducir que
hay dos culturas nacionales: prácticamente todos los paraguayos pertenecerían a la cultura paraguaya que
se expresa en guaraní y más de la mitad serían biculturales poseyendo dos culturas nacionales. Sin
embargo, se puede afirmar que la única cultura verdaderamente nacional y paraguaya es la que se expresa
en guaraní. Los que también hablamos en castellano, participamos de la cultura hispana, muy semejante a
la de los demás países de América Latina y que es próxima a otras culturas europeas. Pero esa cultura no
es una cultura verdaderamente paraguaya, es cultura europea y universal. La nación está atrasada desde el
punto de vista del desarrollo del comercio y la industria internacionales, es esencialmente una sociedad
campesina, pero desde el punto de vista de la unidad cultural es muy avanzada . Gracias a Dios, el pueblo
paraguayo no está del todo "civilizado" ni del todo "desarrollado" y por lo tanto puede todavía ser paraguayo.
Hay en él recursos del pasado que son energía para el futuro. La cultura que comprenda ese proceso y lo
potencie en el pueblo, será cultura nacional.
La cultura paraguaya entonces -a nuestro parecer-, a pesar de tener aparentemente más elementos de
procedencia española que de la aborigen, es la que principalmente se expresa en guaraní y los paraguayos
que aprenden el castellano lo hacen como quien aprende por necesidad una lengua extranjera.
Esto se refleja en la escasez de literatura paraguaya en castellano -el escritor se encuentra con la dificultad
de expresar en español una realidad pensada en guaraní-, y también en que usamos muy pocos dichos y
proverbios en español. En cambio tenemos muchísimos ñe'enga, que se dicen en guaraní o jopara (mezcla
de guaraní y castellano). La literatura en guaraní también es escasa y eso se debe a que no se nos enseñó
a leer y escribir en guaraní. Somos analfabetos en la lengua que casi todos hablamos, pero se tiene una
riquísima "literatura" oral: adivinanzas, proverbios, relaciones, relatos, fábulas, mitos y leyendas que se
cuentan en guaraní y corren de boca en boca entre la gente campesina.
Si se llegara a alfabetizar a la población en guaraní se estimularía su producción literaria y podría producirse
un auge cultural, recién entonces habría una verdadera literatura paraguaya en guaraní. Si además de eso
se enseñara en las escuelas a hablar en castellano con métodos efectivos de enseñanza de segundas
lenguas también aumentaría en calidad y cantidad la literatura paraguaya en español porque aumentaría su
número de lectores y escritores.
Causas de la sobrevivencia del guaraní
El guaraní no sólo sobrevivió en el Paraguay y algunas regiones cercanas de los países con que limita, sino
que se volvió la lengua que habla casi toda la población de un país sudamericano moderno. Los que lo
hablan no son indígenas, son mestizos con cultura hispana usando técnicas de producción, organización
social y económica -aunque anticuadas-, de origen europeo.
Como dice Morínigo en Raíz y destino del guaraní, esta situación se debería principalmente a la originaria
constitución de la sociedad . Como consecuencia de la superioridad numérica de hablantes del guaraní y la
relación de parentesco que existía entre españoles e indios, la lengua indígena gozó desde el comienzo de
una amplia aceptación social. Esta lengua era la diaria en la vida paraguaya y la aceptación social era
paralela a la del español, en contraste a lo que ocurría o ocurre aun en el resto de América donde quien
habla la lengua autóctona sufre discriminación racial.
La razón por la que los días del guaraní no están aun contados, por la que no ha perdido su fuerza creativa
interior, por la que se ha creado una literatura que interesa a sus hablantes, es clara y sencilla: el guaraní ha
dejado de ser una lengua india para poder ser el instrumento de expresión de los sentimientos colectivos de
un pueblo que pugna por ser parte de la vida occidental .
El guaraní dejará de hablarse el día que esté agotada su capacidad de adaptación a los tiempos modernos
para seguir interpretando en el campo semántico las necesidades a que la cultura actual le ha confinado, las
singularidades intransferibles de un pueblo que todavía se siente ligado a un pasado ancestral, porque se ha
constituido -precisamente por haber sido tradicionalmente la lengua vernácula de todas las clases sociales-
en una suerte de fundamento del patriotismo local.
La aceptación social que siempre tuvo el guaraní sigue hasta hoy en día, incluso va creciendo últimamente
por su uso en educación, medios de comunicación, y su reciente promulgación como lengua oficial del país.
Sin embargo, siempre hubo y hay hasta ahora quienes -primero desde el poder colonial y luego desde los
gobiernos independientes- pretendieron y hasta ahora pretenden denigrarlo y desplazarlo, usándolo
solamente cuando se requiere la cooperación del pueblo, por ejemplo, en caso de guerra o en época de
elecciones.
Guaraní y español: dos lenguas en contacto
A las personas que hablan dos lenguas las llamamos bilingües y a las comunidades en las que coexisten
dos lenguas se las suele llamar diglósicas. La diglosia es una situación en que una de las dos lenguas
-llamada lengua alta o estandar- goza de un estatus más privilegiado: se la usa en situaciones formales
como serían la administración pública, el sistema educativo, la religión y los medios de comunicación. La
otra lengua -la lengua baja o vernácula-, se usa en situaciones informales: en el hogar, en el trabajo, con
familiares y amigos.
Las comunidades lingüísticas en las que están difundidos tanto la diglosia como el bilinguismo a veces hasta
comprenden una nación entera, pero realmente hay pocas naciones que sean totalmente bilingües. Una
aproximación a tal nación es el Paraguay, donde más de la mitad de la población habla español y guaraní
(Fishman; 1979: 121; citando a Rubin).
Desde el comienzo de la colonia el castellano fue la lengua alta en la región, que se usó en documentos
oficiales y relaciones con el gobierno mientras que el guaraní se usaba en las relaciones íntimas, familiares y
laborales (Meliá: 41; Morínigo: 70). Esta situación persiste hasta hoy en día y es causa de una relación
injusta en que una gran parte de la nación -los que hablan sólo en guaraní y que son un 40% del total- no
tienen acceso al gobierno, la educación, la cultura universal y, a consecuencia de ello, al progreso
económico. En las misiones jesuíticas que convivieron con la sociedad colonial, la situación del guaraní era
diferente. En ellas fue desde el principio lengua literaria y se usó para enseñar a los indígenas a leer y
escribir. Fue la lengua única de los pueblos de indios de las misiones de los jesuitas y en ellos hasta la
correspondencia oficial con las autoridades se llevaba en guaraní .
El guaraní de las misiones era lengua de indios de un nuevo modelo de sociedad que tal vez ninguna otra
lengua aborigen americana haya emprendido, la aventura de una adaptación a necesidades culturales
traídas de afuera, sin negarse a sí misma. Después que los jesuitas fueron expulsados de la región
desapareció el modelo de sociedad que crearon, aunque se conservaron -además de las impresionantes
ruinas que hoy admiramos- documentos y literatura en guaraní producida bajo su influencia. Es muy
probable que esa experiencia fue la que más ayudó a la sobrevivencia y grado de difusión actual del guaraní
en nuestro país.
Hoy en día, aunque hay hablantes de ambas lenguas tanto en áreas urbanas como en las rurales, prevalece
el bilinguismo y el monolinguismo en español en las primeras y el monolinguismo en guaraní en las últimas.
El guaraní todavía puede considerarse como lengua vernácula usada en situaciones informales, pero su
situación está empezando a cambiar -por lo menos respecto a su estatus legal- por su reciente inclusión
como lengua oficial en la Constitución Nacional de 1992, así como por la inclusión en ella del artículo
referente a su uso en la educación.
El castellano continúa siendo la lengua que goza de mayor prestigio en nuestro país, porque todos somos
conscientes de que su conocimiento es indispensable para relacionarnos con los países vecinos, tener
acceso a la educación, la justicia, el gobierno, los puestos de trabajo y -por consiguiente- a la prosperidad
económica. Sin embargo, el guaraní despierta en la gente sentimientos de orgullo y lealtad lingüística
(Granda; 1990: 160). El conocimiento del guaraní es tenido como índice de la nacionalidad paraguaya, se
considera extranjero al que no lo habla. Los paraguayos siguen siendo nacionalistas y mucho de esa
emoción parece que se relaciona con sentimientos sobre su lengua.
El contacto de lenguas está considerado como un aspecto del contacto de las culturas y la interferencia
lingüística como difusión de las culturas y aculturación (Weinreich: 5). Cuando en una región o país se ponen
en contacto e interactúan dos comunidades de diferentes culturas que hablan diferentes lenguas, como
resultado de este contacto pueden darse tres posibilidades: 1) Que una de las lenguas prevalezca sobre la
otra y la haga desaparecer; 2) Que se produzca una mezcla de las dos lenguas formando una tercera como,
por ejemplo, la lengua inglesa actual; 3) Que se use el "code switching" o cambio de código, alternando en el
habla trozos de ambas lenguas.
En nuestro país, ninguna de las dos lenguas que entraron en contacto desde la época de la conquista llegó
hasta ahora a prevalecer sobre la otra hasta hacerla desaparecer y, aparentemente, no parece que esto sea
posible a corto plazo. Tampoco llegó hasta ahora a formarse una tercera lengua, aunque ambas -tanto el
guaraní como el castellano que hablamos corrientemente- contienen una considerable proporción de mezcla
del uno en el otro. El cambio de código es de uso muy frecuente entre nosotros.
Se suele llamar jopara al guaraní paraguayo que tiene mucha interferencia del castellano. Esta variedad no
puede todavía considerarse como una nueva lengua porque la interferencia se da guaraní. Pero si no
actuamos a tiempo corrigiendo el uso de las lenguas en la educación, podría llegar a formarse una tercera
lengua.
Las cifras sobre el bilinguismo paraguayo que arrojan los censos no son confiables porque no especifican el
grado de bilinguismo de las personas (Granda; 1980: 16). La mayoría además de hablar una de las dos
lenguas tenemos por lo menos algún conocimiento de la otra y la competencia lingüística en la segunda
puede variar entre bilinguismo incipiente y subordinado. Son pocos los que realmente puedan considerarse
bilingües coordinados, es decir, personas que manejan ambas lenguas con la misma soltura y perfección.
El manejo deficiente del español es muy notorio, la mayoría tenemos serias dificultades para expresarnos en
español. "Las dificultades que comportan los textos de español paraguayo de representantes de los
sociolectos más profundamente interferidos por el guaraní pueden ser excesivas y conducir a momentos de
parcial interrupción comunicativa o de alteración parcial o total del mensaje emitido" .
Las faltas de concordancia, la ausencia de expresiones con estructuras más complejas, la incoherencia y la
inexactitud, son características en el habla y en la redacción de la mayoría de los estudiantes y, ni qué
hablar, de las clases populares.
Esta situación, consecuencia del tratamiento injusto para con los hablantes del guaraní que se practicó
desde la colonia, continuó o se incrementó en la de la independencia y persiste hasta hoy, puede tener
consecuencias muy graves para la sociedad paraguaya. "Es el ser y la justificación de la sociedad
paraguaya lo que está en juego". Un sistema lingüístico no es mejor que otro, una lengua no es superior a
otra, lo único malo es carecer de lengua y el alinguismo es por desgracia posible.
La poca competencia de los paraguayos en general en el uso del castellano se debe a que en el sistema
educativo se pretendió y se pretende hasta ahora dar instrucción en una lengua que la mayoría de los niños
-por lo menos el 60% de los que están en edad de comenzar la escuela- no entienden ni hablan. Más de la
mitad dejan la escuela antes de concluir la etapa primaria y los que logran aprender el español lo aprenden
en forma muy deficiente.
Generalmente los padres quieren que sus hijos aprendan a hablar, leer y escribir en castellano, pero ellos no
son conscientes de que para que eso sea factible hace falta primero alfabetizarlos y darles instrucción en
guaraní así como enseñarles el español como segunda lengua. Sienten la necesidad de conocer el
castellano para tener acceso a la educación y la participación en el poder político y económico, pero no
conocen las ventajas que puede representar un plan de educación bilingüe que, para tener éxito, tendría que
ir precedido por una intensa campaña de conscientización de toda la población.
Para que surja un verdadero cambio en la relación entre ambas lenguas todavía falta redactar -a partir de la
nueva Constitución- leyes que regulen su uso en la administración pública y los medios de comunicación, así
como su aplicación efectiva en la educación. La planificación lingüística y la educación bilingüe encaradas
con acierto a nivel nacional pueden ayudar muchísimo para desterrar la injusta situación de los monolingües
en guaraní y las deficiencias de la competencia de los paraguayos en ambas lenguas.
Variedades actuales del guaraní y del castellano paraguayos
Tanto el guaraní como el castellano que hablamos, por el contacto en que convivieron, se han interferido
mutuamente en la pronunciación, en el léxico y en las estructuras gramaticales. Se llegó en la actualidad a
una situación en que se hablan dos lenguas, cada una de las cuales tienen a su vez variedades -que son
dos "continuums" y, de las que por medio de una abstracción podemos separar una más prestigiosa o
estándar que se usa en situaciones formales y otra coloquial o popular usada en las relaciones más íntimas
e informales. Las variedades del castellano y del guaraní que tienen menor cantidad de interferencia son las
más prestigiosas. Hay que tener en cuenta, sin embargo, que un purismo excesivo resulta perjudicial.
En el guaraní paraguayo hay mucha interferencia del español y se usan innumerables hispanismos. Los
hispanismos son préstamos o palabras extranjeras que se integran en la lengua, a veces con cambios
fonéticos, como serían: sevói (cebolla), asuka (azúcar), aramiro (almidón). Muchos piensan que los
hispanismos constituyen un gran peligro para la sobrevivencia del guaraní, están equivocados. Los
hispanismos fueron desde el siglo XVI un procedimiento adoptado por la lengua para asimilar y ponerse a
tono con el forzoso cambio cultural que la presencia del europeo y la adopción de su estilo de vida impuso a
los guaraníes (Morínigo: 176).
Las interferencias, en cambio, son ocasionales y generalmente consisten en la introducción de palabras tal
como se pronuncian en la lengua de origen. La planificación lingüística podría ayudar a disminuir la cantidad
de interferencias.
El castellano paragayo debe muchas de sus características a las diferencias dialectales de la lengua de los
colonizadores y otras a interferencias del guaraní (Krivoshein y Corvalán: 13). Vamos a citar algunas de ellas
solamente como ejemplos ilustrativos.
La pronunciación local de la /ll/ como consonante palatal lateral es diferente a la de la /y/ como consonante
africada. En esto difiere de la pronunciación de los otros países rioplatenses donde ambas corresponden al
mismo sonido de consonante palatal fricativa sonora: halla y haya se pronuncian de la misma forma. En el
castellano paraguayo no hay diferenciación entre la pronunciación de /s/, /c/ y /z/, todas se pronuncian como
alveolar fricativa, en cambio en España y algunos otros países hispano-hablantes se pronuncian como
palatal fricativa la /s/ y como interdental la /c/ y la /z/. El voseo es común a toda la región rioplatense y la
única forma de segunda persona de trato informal usada en el Paraguay.
Una de las innumerables singularidades léxicas que se pueden citar como ejemplo de arcaísmo proveniente
del habla de los colonizadores es la palabra argel que para nosotros significa antipático, desagradable, y la
aplicamos tanto a personas como a objetos. Posiblemente esta palabra la usaban como adjetivo despectivo
los españoles del siglo XV comparando a las personas con quienes no simpatizaban con sus enemigos, los
moros que vivían en Argelia.
La mezcla de lenguas puede producir enriquecimiento, empobrecimiento y sustitución y en nuestra habla
cotidiana se dan en forma profusa estos tres fenómenos (Krivoshein y Corvalán: 15). Ejemplos de
enriquecimiento serían las partículas del guaraní usadas cuando hablamos en castellano como na (por
favor), pa (partícula interrogativa), gua'u (ficticiamente), y tantas otras; así como tantísimas palabras
tomadas en forma de préstamo, como ñembotavy (hacerse el desentendido), mbarete (poderoso), oparei
(final intrascendente). Empobrecimiento sería el desconocimiento o poco uso de palabras como jalar, bonito
o cesta. Ejemplo de sustitución entre otros muchísimos sería el uso del diminutivo i en vez de los castellanos
illo o cillo: Jose'i en vez de Josecillo.
Como otra forma de enriquecimiento podría considerarse a las palabras o frases mixtas, formadas con
elementos de ambas lenguas, que se usan tanto en el guaraní como en el español paraguayo coloquial, y
que se siguen formando todos los días. Dos de las que aparecieron recientemente son pila'i e ingueroviable.
La primera significa débil, desganado y proviene del uso generalizado de la radio a transistores entre los
campesinos paraguayos. La segunda es creación de intelectuales y periodistas en son de broma y significa
increíble.
Germán de Granda (1990: 162) opina al respecto que la interferencia léxica del guaraní sobre el español
paraguayo, lejos de representar un elemento desestructurador de este último código lingüístico, constituye,
por el contrario, un factor positivo de enriquecimiento del mismo y desempeña un relevante papel en cuanto
a expresión de amplias posibilidades denotativas y connotativas que no podrían ser realizadas utilizando
solamente los recursos léxicos propios del castellano normativo.
Para que la población paraguaya pueda acceder al uso correcto y eficiente de sus dos lenguas sería preciso
encarar en forma seria y organizada la educación bilingüe basada en una planificación lingüística que tomara
en cuenta: la selección de normas prestigiosas para el guaraní y el español paraguayos; la aceptación de las
mismas especialmente en la enseñanza y en los medios de comunicación; codificación progresiva de los
diasistemas paraguayos español y guaraní; y la elaboración de ambos sistemas a partir de la codificación y
la normalización (Granda; 1982: 84).
En el sistema educativo de nuestro país, se han fijado como metas en la enseñanza de ambas lenguas
modelos de variedades que no tienen uso en el país, ni aun en la región rioplatense. Se trata de enseñar una
variedad de castellano con, por ejemplo, los pronombres tú y vosotros de segunda persona de trato informal
y las conjugaciones verbales correspondientes (Krivoshein y Corvalán: 11). En el guaraní que se enseña en
los cursos básicos de la educación secundaria se ha introducido una excesiva cantidad de neologismos que
no son conocidos ni usados en el habla corriente, como sistemas de numeración, días de la semana, meses
del año, elementos de aula, etc.
La equivocada elección de los objetivos respecto a las variedades de las lenguas nacionales produce
rechazo por parte de los alumnos y padres de familia -en el caso del guaraní-, dificultades de comunicación y
bajo rendimiento escolar -en el caso del castellano.
El error principal, sin embargo, en la política educativa paraguaya -para el que actualmente hay propósito de
enmienda- es la ausencia de programas de alfabetización en lengua materna para los que hablan sólo
guaraní- y enseñanza del español como segunda lengua. Esta deficiencia provoca una falta de
aprovechamiento en todas las materias y especialmente en castellano, deserción y un rendimiento escolar
que en la primaria no alcanza el 50%. Los niños que llegan a aprender el castellano a pesar de que no se les
enseña en forma adecuada la estructura de la lengua quedan con una competencia lingüística deficiente
para toda la vida.
Para que la educación dé los resultados esperados en una sociedad bilingüe como la nuestra debe hacerse
en la lengua materna en los tres primeros grados y enseñar la segunda lengua como lengua extranjera.
Además se deben elegir las variedades de guaraní y español que sean más adecuadas y funcionales.
El español paraguayo coloquial debe usarse para redactar los primeros textos de educación primaria
(Krivoshein y Corvalán : 19) porque tiene características muy propias en cuanto a léxico y estructura
gramatical. Ningún niño en edad de empezar la escuela -aun de clase alta- entiende más que esa variedad
de castellano porque existen en él carencias, diferencias léxicas y gramaticales respecto al español
paraguayo estándar y ni qué decir respecto a la variedad ibérica que usan muchos textos escolares y libros
de cuentos infantiles.
El español paraguayo estándar, que se usa en los medios de comunicación y otras situaciones formales, en
el que se respetan las normas que fija la Real Academia Española aunque eligiendo modalidades y estilo
propios de entre las posibilidades que da la lengua, es la variedad de español cuyo conocimiento tendría que
ser la meta en la educación paraguaya; pero que debería ser introducida progresivamente durante la
educación primaria mediante métodos adecuados y modernos de enseñanza de lenguas .
La aspiración generalizada en nuestro país, que tendría que ser el objetivo de la planificación lingüística y de
la educación bilingüe bicultural, es el logro de un bilinguismo coordinado entre guaraní y castellano para
todos los habitantes. Esta es la condición indispensable para que el país tenga posibilidades de practicar la
democracia, conservar su identidad nacional, acceder al progreso socio-económico y participar con éxito de
la integración regional en el marco del Mercosur.

LA RELIGIOSIDAD POPULAR, COSTUMBRES, DANZAS, COMIDAS TÍPICAS, JUEGOS


FOLKLÓRICOS:
IDIOMAS
El Art. 140 de la Constitución Nacional: "El Paraguay es un país pluricultural y bilingüe.
Son idiomas oficiales el castellano y el guaraní. La ley establecerá las modalidades de utilización de uno y
otro.
Las lenguas indígenas, así como las de otras minorías, forman parte del patrimonio cultural Nacional".
RELIGIÓN
Gran parte de la población del país profesa la religión Católica, Apostólica y Romana, y un buen número de
personas son adeptas a otras religiones, por lo que se establece la libertad religiosa y la ideológica en el art.
24, de la Constitución Nacional, que expresa lo siguiente:
"Quedan reconocidas la libertad religiosa, la de culto y la ideológica, sin más limitaciones que las
establecidas en esta Constitución y en la Ley. Ninguna confesión tendrá carácter oficial.
Las relaciones del Estado con la Iglesia Católica se basan en la independencia, cooperación y autonomía.
Se garantizan la independencia y la autonomía de la iglesia y confesiones; sin más limitaciones que las
impuestas en esta Constitución y las leyes.
Nadie puede ser molestado, indagado u obligado a declarar por causa sus creencias o de su ideología."
En el Art. 82. se establece un reconocimiento a la Iglesia Católica, en los siguientes términos: "Se reconoce
al protagonismo de la Iglesia Católica en la formación histórica y cultural dela República".

DIVISIÓN POLÍTICA
Teniendo en cuenta el desarrollo económico y los distintos tipos de relieves orografía - hidrografía, se vio la
necesidad de dividir el territorio paraguayo en porciones denominados departamentos para su mejor
administración.
De acuerdo con lo establecido en la Constitución de 1870, reformada en 1940, 1967 y 1992, Paraguay es
una república unitaria, representativa y democrática con un distrito capital que se halla en la ciudad de
Asunción, y diecisiete departamentos con sus respectivas capitales.
En un comienzo se tenían 19 departamentos pero a partir de 1993 por la ley n° 71 del 6 de noviembre de
1992 (que modifica a la ley n° 426 del 7 de diciembre de 1973) la región occidental quedo reducida a tres
departamentos (Presidente Hayes, Boquerón y Alto Paraguay). Por razones administrativas el departamento
Chaco se integro a Alto Paraguay y el departamento Nueva Asunción a Boquerón.

SÍMBOLOS QUE DISTINGUEN AL PARAGUAY


LA BANDERA
Las invasiones inglesas del Río de la Plata en 1805 y 1806 motivaron la organización y movilización de
contingentes militares para la defensa de posesión española en la región. La Gobernación del Paraguay
envión un batallón de soldados que portaban distinciones tricolores (rojo, blanco y azul) para diferenciarlos
del resto de las fuerzas de la colonia.
El Paraguay empezó a usar normalmente el pabellón tricolor -dividido en tres franjas horizontales iguales,
con el rojo arriba, el blanco en medio y el azul en la parte inferior- desde el 15 de agosto de 1812 cuando fue
enarbolado al comenzar la misa mayor, con el saludo de una salva de artillería. Sin embargo, recién durante
el Segundo Consulado, de Mariano Roque Alonso y Carlos Antonio López, el 25 de noviembre de 1842, el
Congreso Extraordinario adoptó solemnemente el diseño descrito como bandera nacional.
LOS ESCUDOS
El mismo congreso que aprobó la bandera tricolor como emblema patrio adoptó también los dos escudos
que figuran en el medio de la franja blanca. De un lado, una palma y una oliva enlazadas en la parte de
abajo y abiertas en la parte superior resaltando en medio una estrella, con la inscripción "República del
Paraguay". En el lado opuesto, un león y gorro frigio -símbolo de la libertad- sostenido en lo alto con la
leyenda "Paz y Justicia".
EL HIMNO NACIONAL
El presidente Carlos Antonio López encomendó a los comisionados de su gobierno en Montevideo, capital
uruguaya, Bernardo Jovellanos y Anastasio González, la tarea de contratar al poeta Francisco Acuña de
Figueroa, autor del himno de ese país, para la composición de una canción nacional paraguayo.
El 20 de mayo de 1846, en cumplimiento de su palabra, el poeta uruguayo entregaba a los comisionados los
originales del Himno Nacional de nuestro país dedicándoselo a Carlos Antonio López y negándose a recibir
el pago por su trabajo. El gobierno ordenó la difusión intensiva -en bailes, cuarteles militares, escuelas, etc.-
la canción.
Sobre la música del Himno aún hoy existen divergencias. Mientras que algunos sostienen que fue obra del
francés Francisco de Dupuis, no son menos los que afirman que el orquestador uruguayo Francisco José
Devali fue quien puso música al poema de Acuña de Figueroa. Lo cierto es que durante el gobierno del
doctor Eusebio Ayala, en 1933, el maestro paraguayo Remberto Giménez, tratando de respetar al máximo
las formas y ritmos originales, reconstruyó definitivamente la composición.
LA FLOR, LAS DANZAS Y COSTUMBRES
La flor nacional del Paraguay es el mburucuyá o pasionaria. Tampoco en este punto se verifica plena
coincidencia.
Muchos científicos sostienen que la flor nacional paraguaya es el jazmín, mientras que otros defienden la flor
del guayabo.
El árbol nacional es el tajy o lapacho.
En general, aunque se trata de un tema de fuertes polémicas, se consideran como bailes nacionales
-productos directos de la mezcla de culturas, característica de la mayor parte de los países del continente- a
la polca, la galopa y el chopí.
Las costumbres, aunque no sean contempladas en declaraciones oficiales, forman parte integrante de la
cultura nacional que une a los paraguayos y los diferencia del resto de los países. Entre ellas pueden citarse
los juegos folklóricos, las comidas típicas y bebidas típicas y algunas tradiciones de carácter religioso.
Artesanía
Desde el encuentro de la cultura española con la habilidad de los nativos originarios del país, se ha
desarrollado en el Paraguay una notable variedad de artesanías que han mantenido toda su belleza y
calidad a lo largo de los siglos. Artesanos paraguayos crean objetos bellos y de uso práctico en la vida
corriente y apreciados como excelentes piezas para la decoración.
Ud. Puede encontrar:
- Tallados en madera; especialmente en Tobatí y Capiatá.
- Aó po’i (tela fina):
- Ñandutí; el encaje más tradicional del Paraguay en Itauguá, Guarambaré, Areguá.
- Ponchos; utilizados como cobertores o abrigos, en San Miguel y Piribebuy.
- Hamacas de algodón; Itauguá, Pirayú.
- Orfebrería; piezas en oro y plata, en Luque.
- Cerámica; piezas de origen indígena y de otros tipos en Itá, Areguá y Tobatí.
- Artículos de lana; en San Miguel, Misiones
- Karanday; trabajos en hoja de Palma, en Limpio, Luque y emboscada.
- Artesanía en cuero; en Atyrá, Luque, Ypacarai, Asunción, Caacupé y Concepción.
- Trabajos en guampa; en Itauguá.
- Grabado y pirograbado; en Caacupé.
- Instrumentos musicales; en Luque.
- Artesanía indígena; obras de las familias Nivaklé, Ayoreo, Guaraní Ñandéva, en el Chaco Paraguayo.
Música y Danzas
Los ritmos típicos del Paraguay son la polca y la Guarana. La Guaranda es creación del músico paraguayo
José Asunción Flores alrededor del año 1925. La polea tiene ascendencia europea. Los instrumentos típicos
son el arpa y la guitarra.
Las danzas típicas paraguayas son el resultado de adaptaciones de antiguas danzas europeas. Las más
tradicionales son la galopa y la danza de las botellas.
En todo el año y en todos los pueblos y ciudades del Paraguay se realizan fiestas populares en las que se
recrean costumbres tradicionales.
Comidas Típicas
La gastronomía del Paraguay tiene elementos comunes a toda América como ser el uso del maíz, la
mandioca, el maní y las legumbres, pero además la herencia de los recursos naturales y de la cultura de los
Guaraníes y la amalgama con la cultura europea nos dan una gastronomía diferente al resto de América y
dentro del mismo MERCOSUR.
Las comidas más tradicionales son: el asado de carne vacuna a la parrilla (a buen precio y de variados
tipos), la chipa o pan paraguayo, la sopa paraguaya y una gran variedad de postres.
No obstante, uno puede consumir en las ciudades comida internacional variada e incluso comidas típicas
japonesa, china, mexicana, cubana, brasilera, Argentina, alemana, italiana etc. en restaurantes de buen
nivel.

IMPLICACIONES DEL PROCESO DE GLOBALIZACIÓN EN EL PARAGUAY.


La globalización, y de manera más perceptible, la integración regional, atrae ahora la atención a los roles
cambiantes del estado-nación. La soberanía es asociada y la gobernabilidad es transferida a diferentes
niveles. Así como Deutch argumenta, la integración afecta a una comunidad 1. Diferentes intereses están
relacionados unos a otros. Se sostiene acá que la integración regional al Mercosur es un proceso con raíces
en la historia económica de la sub-región, tomando en cuenta el contexto global en el cual la región se
encuentra hoy. Este nivel macro-regional influye así sobre las acciones que se toman a nivel nacional, como
por ejemplo, la transformación de la soberanía o, en otras palabras, de los niveles cambiantes de
gobernabilidad.
Surge así una amplia gama de preguntas interesantes: ¿Cuál es la relación entre el proceso de globalización
económica y la integración macro-regional?. ¿Se puede entender a la integración macro-regional como un
sub-proceso de la globalización o como una reacción al proceso de globalización?. ¿Los estados-naciones
tienen alguna otra posibilidad de elegir, que no sea la de integrarse a una economía global?. Si la soberanía
está abandonando a los estados nacionales, ¿dónde acaba?. Estas son las preguntas que quiero tratar más
adelante. En este trabajo, sin embargo, decidí limitar el tema central a una evaluación de la influencia del
nivel macro-regional, esto es, el Mercosur sobre la política interna del Paraguay. Por supuesto, será
necesario trabajar con los actores internos, así como con otras fuerzas externas como los Estados Unidos, la
Organización de Estados Americanos (OEA) o la Unión Europea (UE), para poder separar la influencia del
Mercosur de la de otros actores.
En ese sentido, hay que ver este trabajo como un intento de entender una de las piezas en el gran
rompecabezas, que una vez armado, nos dará una respuesta sobre las causas de los cambiantes niveles de
gobernabilidad. Como se señaló más arriba, la idea que está por detrás de este marco teórico fue extraída
de la literatura, de una amplia gama de disciplinas. Sin embargo, lo principal proviene de la literatura referida
a los procesos de globalización en curso, así como del campo más específico de la Economía Política
internacional. Lo que une a las diferentes áreas, es el explícito interés en el estudio de la transformación del
sistema internacional y de los niveles cambiantes de gobernabilidad. Una interesante perspectiva de cómo la
globalización ha cambiado las capacidades de actuar de los estados, ha sido discutida por Philip McMichael,
quien argumenta que los intereses nacionales se han subordinado a los intereses globales en el así llamado
‘proyecto de globalización’. La esencia de este argumento es, que la globalización económica y la creación
de instituciones internacionales crean un ambiente en el cual los estados tienen la elección de participar en
el mundo económico bajo condiciones postuladas por ese ‘interés global’, o de quedarse irrevocablemente
atrás. Eso implica que los estados tienen que aceptar las reglas del juego impuestas por la comunidad
internacional, tales como el respeto a los derechos humanos, un sistema democrático de gobernabilidad y la
adhesión a los principios vigentes de la economía de mercado 2.
Siempre sentí que los autores que tienen una visión crítica hacia el concepto de la globalización, como Hirst
y Thompson, lo ven como algo acabado que puede ser comparado a un tipo ideal. En su libro “Globalization
in Question”3, los autores sostienen que la economía mundial actual es más bien internacional que global, y
que los principales actores son los estados nacionales. Ellos presentan dos tipos ideales, primero, ‘la
economía internacional’ basada en el estado-nación, y segundo, ‘la economía globalizada’ basada en el nivel
global. Ellos argumentan que la interdependencia entre los estados no conduce necesariamente a una
mayor integración. Sostienen que los factores reguladores de los diferentes niveles entrarían en conflicto lo
que conducirá a una desintegración que haría imposible regular la economía a un nivel global. Cuando
continúan la critica a los proponentes de la globalización se da el problema que éstos difícilmente aceptarían
la misma definición de globalización propuesta por Hirst y Thompson. Por ejemplo, ellos argumentan que
una economía mundial crecientemente integrada desde los 70 (s), no es prueba alguna de una economía
globalizada. Eso puede ser cierto, pero es ciertamente una prueba de una economía en proceso de
globalización. Solamente por el hecho que el mundo carezca de una fuerza política lo suficientemente fuerte
para regular la economía a escala mundial, no significa la imposibilidad que ésta pueda desarrollarse en el
futuro.
Estoy de acuerdo en que el estado-nación sigue siendo el actor más importante en el escenario global, pero
sin embargo, pienso que su relevancia y su importancia está en descenso, y que será drásticamente
transformada en el futuro. Mi argumento es que la supremacía del estado-nación hoy se debe a la falta de
instituciones suficientemente fuertes a niveles superiores y no a que el estado-nación sea irreemplazable 4.
Hirst y Thompson ven el futuro del estado-nación como un problema. Mi opinión es que ellos están anclados
en una manera de pensar provincial. Ellos cuestionan el proceso de globalización, creo, porque no logran
reconocer su rasgo central, que es la transformación del papel del estado-nación y, por (en) consecuencia,
sus cambiantes niveles de gobernabilidad.
1 Ver Mutimer 1994, pp.34-36
2 McMichael 1996
3 Hirst y Thompson 1996
4 Una posición ‘ transformalista’ es la concepción de McGrew. Ver McGrew 1997 como un
intento interesante de conceptualizar las posturas académicas sobre la globalización. El divide a
los académicos en tres categorías: hiper- globalizantes, escépticos y transformacionalistas
Se argumenta que los países en vías de desarrollo se encuentran en una situación, en la que el Fondo
Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial (BM) y los países líderes industrializados usan su poder
para influenciar en gran medida sus economías forzando a que obren de acuerdo a las pautas dadas para la
estructuración del sector público, impuesto por estos actores externos 5. Pero la suerte de estas economías
sin embargo, de acuerdo a Dionisio Borda, está finalmente determinada por factores internos 6. Esto es cierto
si se utiliza el aspecto formal de la soberanía, pero es más cuestionable si se usa el concepto de soberanía
real. La gobernabilidad, según mi modo de usar el término, tiene que ver con la soberanía real. En
consecuencia, los niveles cambiantes de gobernabilidad se refieren al cambio de los niveles organizativos,
sea nacional, regional o, global, en dónde se forman las decisiones que se refirieren a determinados países.
Las realidades del mundo de hoy requieren un nivel más alto de cooperación entre sus actores. En este
proceso de interacción las unidades no están solamente llegando a acuerdos sobre soluciones técnicas a
problemas particulares, sino también se están insertando en un proceso de socialización. A través del
desarrollo técnico y la interdependencia económica, que achican la distancia entre los pueblos, se van a
formar lazos que significan algo más que una mera estructura institucional.
En el capítulo siguiente elaboraré la idea de la importancia del contexto histórico. Se argumentará que el
Paraguay está entrando en un nuevo contexto histórico. Después presentaré la crisis de Abril. Primero,
destacando quiénes fueron los actores principales, después, señalando los acontecimientos de la crisis, y
finalmente, se evaluará las acciones emprendidas por los diferentes actores. Por último, en relación al
postulado teórico que el mundo está entrando en un nuevo contexto histórico, según las evidencias
empíricas, sostendré que este nuevo contexto histórico afecta a los niveles de gobernabilidad y, busco llamar
la atención sobre los siguientes puntos:
- El nuevo contexto histórico puso límites a la soberanía real del Paraguay, esto es, los niveles de
gobernabilidad están cambiando debido al cambio histórico.
- El hecho que el Mercosur es una organización intergubernamental, pero que aún así afecta la política
interna del Paraguay, sugiere que el efecto de derrame (spill-over) entre la economía y la política es central
en este caso.

CONCLUSIÓN:
Hemos analizado en este trabajo varios aspectos de la cultura Paraguaya, hemos detallado a fondo el
ambiente socio cultural de la raza hispano-guaraní, que ha atravesado varios momentos difíciles a través de las
sucesivas etapas de evolución de una cultura que aun se mantiene firme y con proyecciones de no perderse en el
tiempo, ya que la variedad de elementos que la conforman están ampliamente arraigados en la población.
Siendo así podemos decir que la evolución económica, el proceso de globalización, la integración cultural
y económica con el MERCOSUR, y el creciente índice en el aumento en población, no han influido de forma
negativa en nuestra cultura, sino que la ha fortalecido a través del interés de gran parte del mundo hacia una de
las pocas culturas bilingües existentes en el mundo, brindando así apoyo constante a nuestros artistas, nuestra
lengua guaraní, nuestra danza y, apreciándola desde varios puntos de vista se han rescatado valores históricos,
que han sido ampliamente investigados por profesionales de nivel internacional, rescatando así nuestros orígenes
y nuestra típica forma de ser.
Esperando haya sido de utilidad y agrado de ustedes, este material ha sido confeccionado a partir de
medios impresos, entrevistas a protagonistas –en lo que se refiere a la globalización económica- e investigación a
través del apoyo de medios de comunicación digitales (Internet).

BIBLIOGRAFIA
DOMINGUEZ, Ramiro. "Glosario del yopará" en Suplemento Antropológico, Vol. XIII, n° 1-2, diciembre de
1978. Universidad Católica de Asunción.
FISHMAN, Joshua. Sociología del lenguaje. Ediciones Cátedra, Madrid, 1979.
"Preface"; en: MAUROIS, Jacques. Politique et aménagement linguistiques. Conseil de la Lange Francaise.
Quebec, Canadá, 1987.
GRANDA, Germán de. "El español del Paraguay; temas problemas y mátodos"; en: Estudios Paraguayos,
vol. VII, n°1, junio de 1979; Universidad Católica; Asunción.
"Lengua y sociedad; notas sobre el español del Paraguay"; en: Estudios Paraguayos, vol. VIII, n°1, junio de
1980; Universidad Católica; Asunción.
"Hacia la caracterización linguística del español paraguayo"; en: Estudios Paraguayos, vol. X, n°2, diciembre
de 1982; Universidad Católica; Asunción.
"Hacia una valoración del proceso de interferencia léxica del guaraní sobre el español paraguayo"; en:
Revista Paraguaya de Sociología, año 27, n°77, enero-abril de 1990; Asunción.
KRIVOSHEIN de CANESE, Natalia y CORVALAN, Graziella. El español del Paraguay en contacto con el
guaraní. Centro Paraguayo de Estudios Sociológicos; Asunción; 1983.
MELIA, Bartomeu. Una nación dos culturas. Ediciones CEPAG, Asunción, 1988.
MORINIGO, Marcos A. Raíz y destino del guaraní. Universidad Católica, Biblioteca Paraguaya de
Antropología, vol. 8, Asunción, 1990.
SERVICE, Elman y Helen. Tobatí: paraguayan town. The University of Chicago Press, 1954.
WEINREICH, Uriel. Languages in contact. Mouton and Co., London, Paris, The Hage, 1963.
BARTELSON J., 1993, A Genealogy of Sovereignty, Stockholm Studies in Politics 48, University of
Stockholm - Department of Political Science, Stockholm
BEHAR, J., 1995, ”Measuring the Effects of Economic Integration for the Southern Cone Countries: Industry
Simulations of Trade Liberalization”, en The Development Economies, Vol.XXXIII, No.1, March 1995

5 Ver por ejemplo McMicheael 1996


6 Borda 1994, p. 11
BIZZOZERO L., 1996, "Agenda de Temas y Equilibrio Regional: Hacia la Definición de un Nuevo
Cronograma" en ALONSO J.M. and STOLOVICH L., 1996, Economía y Participación Social en el Mercosur,
Red de Apoyo a Organizaciones Sociales del Mercosur, Montevideo
BORDA D., 1994, ”Economía y pobreza”, in La Pobreza en Paraguay; sus causas y pistas de
solución, Volume published from a seminar held between the 11 and 12 of March, Centro de Estudios
Paraguayos ”Antonio Guasch” (CEPAG), Asunción
BULMER-THOMAS V., 1994, The Economic History of Latin America Since Independence,
Cambridge University Press, New York
BUZAN B., 1993, "From International System to International Society: Structural Realism and
Regime Theory meet the English School", International Organization, Vol. 47, No. 3
COCKCROFT J.D., 1996, Latin America; History, Politics and U.S. Policy, Nelson-Hall Publishers,
Chicago
CONSTITUCIÓN NACIONAL, 1992
COSTA J.M. and AYALA BOGARÌN O., 1996, Operación Gedeón: Los secretos de un golpe
frustrado, Editorial Don Bosco, Asunción
COUFFIGNAL G., 1996, "Integración Latinoamericana: del Sueño a las Realidades", en
COUFFIGNAL G. y de la REZA G.A. (eds.), 1996, Los Procesos de Integración en América Latina:
enfoques y perspectivas, Institute of Latin American Studies Stockholm: University, Stockholm
DABÉNE O., 1996, "La Dimensión Política de los Procesos de Integración Latinoamericanos", in
COUFFIGNAL G. and de la REZA G.A. (eds.), 1996, Los Procesos de Integración en América Latina:
enfoques y perspectivas, Institute of Latin American Studies Stockholm: University, Stockholm
de ALMEIDA P.R., 1996, "Mercosur y la Unión Europea: De la Cooperación a la Asociación", in
COUFFIGNAL G. and de la REZA G.A. (eds.), 1996, Los Procesos de Integración en América Latina:
enfoques y perspectivas, Institute of Latin American Studies Stockholm: University, Stockholm

Christian Baez
[email protected]

También podría gustarte