Balón Intragastrico
Balón Intragastrico
Balón Intragastrico
29 septiembre, 2015
Se trata de una esfera de silicona que una vez introducida en el estómago, bajo
control endoscópico, se rellena con una solución acuosa y se deja flotando
libremente en la cavidad gástrica. Al ocupar parcialmente el estómago y
dificultar su vaciado, produce una disminución de la sensación de hambre y
la aparición de saciedad precoz al comer. Con estos dos efectos es fácil seguir
una dieta y cambiar los hábitos dietéticos y de ejercicio necesarios para, no sólo
conseguir una pérdida de peso, sino también mantenerla en el tiempo.
Se coloca de forma ambulatoria, con una sedación ligera controlada por el
médico anestesista y bajo control endoscópico, introduciendo el balón y el
endoscopio por la cavidad oral sin necesidad de practicar ningún tipo de cirugía.
La realización de la técnica no dura más de 20 minutos y el paciente puede
marcharse a su domicilio el mismo día de la colocación. El balón gástrico está
desarrollado especialmente para no deteriorarse con la acidez del estómago,
presenta una válvula de silicona que se cierra automáticamente cuando el balón
está lleno. Se puede llevar alrededor de 6 meses. Durante los 2-3 primeros días es
normal tener náuseas, vómitos y molestias en epigastrio, pues el estómago
intenta liberarse del balón.
Aunque es una técnica segura, todas las intervenciones tienen sus riesgos. Puede
ocurrir que el balón se desinfle por un pinchazo y pase al intestino delgado,
provocando una obstrucción del mismo. Existen tratamientos médicos y
endoscópicos eficaces para solventar estas complicaciones.
Bibliografía:
Dietista-Nutricionista.