Investigacion
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Tour Altiplano
Prof. Marco Ordóñez
Monografía
Semana Santa
Historia
Aunque durante la Edad Media ya existieron cofradías en España, no fue hasta
el siglo xvi cuando se consolidaron las hermandades de pasión o penitencia
como asociaciones que veneran la pasión y muerte de Cristo y le rinden culto
con una salida procesional. La primera procesión cristiana en Guatemala se
realizó en la ciudad de Santiago de los Caballeros, hoy Antigua Guatemala, el
10 de marzo de 1543.
Reformas borbónicas
En 1765 se publicaron las reformas borbónicas de la Corona española, que
pretendían recuperar el poder real sobre las colonias y aumentar la recaudación
fiscal. Con estas reformas se crearon los estancos para controlar la producción
de las bebidas embriagantes, el tabaco, la pólvora, los naipes y el patio de gallos.
La real hacienda subastaba el estanco anualmente y un particular lo compraba,
convirtiéndose así en el dueño del monopolio de cierto producto. Ese mismo año
se crearon cuatro subdelegaciones de la Real Hacienda en San Salvador,
Ciudad Real, Comayagua y León y la estructura político administrativa de
la Guatemala cambió a 15 provincias.
Siglo XIX
A principios de 1803, el capitán general Antonio González y Mollinedo, siguiendo
los lineamientos de las Reformas Borbónicas indicó que quedaban prohibidos
los penitentes de sangre, los que salían con grilletes en manos y pies, y los que
se empalaban, pues eran costumbres perniciosas para la salud; sí se permitía,
no obstante, que aquellos penitentes que no realizaran semejantes actividades
podían llevar el rostro cubierto dentro de las procesiones, siempre y cuando
dichas expresiones de fe no se extendieran más allá del anochecer.
Los cristianos de la época del régimen de los 30 años se vestían de luto riguroso,
hablaban en voz baja y caminaban por las calles con paso mesurado y lento.
La Gaceta del Gobierno de Guatemala publicaba un editorial político-cristiano,
dado el fuerte influjo que el obispo Juan José de Aycinena y Piñol tenía para
entonces en el gobierno. Se escribían textos como éste: (Preciso es que
asistamos todos a los oficios con espíritu de fervorosa piedad); o bien como éste:
nada tenemos que recomendar a las autoridades civiles sobre el buen orden de
las procesiones públicas, porque actos son éstos que el cristiano no debe
profanar; pero si por desgracia nuestra tuviese en ellos entrada el espíritu de
impiedad, que todo lo corrompe, caerá sobre sus autores la maldición del cielo y
la reprobación del verdadero creyente.
A finales del siglo XIX la presentación de adornos era semejantes entre las andas
de Jesús Nazareno de las iglesias de La Merced y de Candelaria, utilizando los
mismos recursos. Comparando fotografías de la época tomadas por José García
Sánchez de ambas imágenes se observa que había un próspero negocio de
alquiler de adornos para altares y procesiones. Ese mismo negocio fue utilizado
para las carrozas que los estudiantes de la Universidad Nacional empezaron a
sacar para su desfile bufo de la Huelga de Dolores, el que se inició en 1898.
Procesiones
Punto de identidad de los barrios
Se cerca la semana Santa Que en Guatemala se llama cariñosamente la semana
mayor y así lo es en realidad porque las más importantes del corresponder a los
días gastar más precisiones chico de los antañones barrios de la capital y de la
provincia.
Historia
Aunque durante la Edad Media ya existieron cofradías en España, no fue hasta
el siglo XVI cuando se consolidaron las hermandades de pasión o penitencia
como asociaciones que veneran la pasión y muerte de Cristo y le rinden culto
con una salida procesional. La primera procesión cristiana en Guatemala se
realizó en la ciudad de Santiago de los Caballeros, hoy Antigua Guatemala, el
10 de marzo de 1543.
Jesús Nazareno de las Tres Potencia, imagen obra de Alonso de La Paz y Toledo
quien la buriló en 1667 se encontraba originalmente en la Escuela de
Cristo en Santiago de los Caballeros de Guatemala; La Paz y Toledo no
encarnaba sus obras por lo que la encarnación de dicha imagen estuvo a cargo
del maestro dorador Joseph Mazariegos2 En 1737 se fundó la “Cofradía de la
Santa Pasión” y dieron inicio cortejos procesionales, los cuales se verificaban el
Domingo de Ramos; estas procesiones eran organizadas por caballeros de la
alta sociedad, razón por la cual la imagen del Nazareno de la Escuela de Cristo
también era conocida como Jesús Nazareno de Los Nobles.
Reformas borbónicas
En 1765 se publicaron las reformas borbónicas de la Corona española, que
pretendían recuperar el poder real sobre las colonias y aumentar la recaudación
fiscal. Con estas reformas se crearon los estancos para controlar la producción
de las bebidas embriagantes, el tabaco, la pólvora, los naipes y el patio de gallos.
La real hacienda subastaba el estanco anualmente y un particular lo compraba,
convirtiéndose así en el dueño del monopolio de cierto producto. Ese mismo año
se crearon cuatro subdelegaciones de la Real Hacienda en San Salvador,
Ciudad Real, Comayagua y León y la estructura político administrativa de
la Guatemala cambió a 15 provincias.
Posiblemente los daños causados por el terremoto fueron serios, pero fueron
más serios los que provocó el saqueo y el abandono de la ciudad. El 16 de enero
de 1775 el maestro mayor de obras Bernardo Ramírez, comenzó a sacar todos
los materiales utilizables del edificio para trasladarlos a la nueva capital ya que
se había emitido orden legal en la cual se ordenaba que debían ser trasladados
al nuevo asentamiento todos los materiales que pudiesen servir en la
construcción de edificios y casas. Por esta disposición muchos edificios aún en
pie fueron despojados de puertas, ventanas, balcones, objetos decorativos, etc.
Siglo XIX
Tras el derrocamiento y expulsión de los miembros del Clan Aycinena en 1829,
los liberales expulsaron a las órdenes regulares y sólo dejaron al clero secular -
pero sin el ingreso fijo del diezmo obligatorio- en Centroamérica.12 Esto debilitó
considerablemente a la Iglesia Católica en Guatemala, pero tras el fracaso de la
gestión liberal del gobernador Mariano Gálvez para combatir una epidemia de
cólera morbus, los curas párrocos aprovecharon para azuzar a la población
campesina en su contra, y bajo el liderazgo del caudillo Rafael Carrera
expulsaron a Gálvez y a los liberales del poder. Tras una década de gobierno,
Carrera permitió el regreso de las órdenes regulares, de los conservadores
católicos y autorizó nuevamente el diezmo obligatorio, lo que reforzó a la Iglesia
en el país y las manifestaciones de fe como la Semana Santa cobraron un gran
auge. Es más, en 1852, Guatemala y la Santa Sede firmaron un concordato en
el que se le encomendaba la educación de la población a los sacerdotes, y se
reforzaba la unión Iglesia-Estado en el país.