Procesalismo Italiano GRUPO 7
Procesalismo Italiano GRUPO 7
Procesalismo Italiano GRUPO 7
TRABAJO MONOGRÁFICO
EL PROCESALISMO
ITALIANO
CICLO: III
HUANCAVELICA _ 2019
DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
AGRADECIMIENTOS
Queremos expresar nuestros más sinceros agradecimientos a nuestros padres porque nos han
apoyado moralmente en el proceso de este trabajo y haber confiado en nosotros sin ninguna
Al Dr. Percy Eduardo Basualdo García por haber confiado en nosotros para poder realizar
este trabajo y motivado a poder lograrlo, con su apoyo incondicional, día a día.
Por último, gracias a todas las personas que nos han apoyado en todas nuestras dudas y han
ÍNDICE
CAPÍTULO I ............................................................................................................................ 1
1.2.1. La Magistratura....................................................................................................... 3
3.1. La acción............................................................................................................... 10
CONCLUCION ...................................................................................................................... 26
INTRODUCCIÓN
La Teoría General del Proceso es una parte muy importante del derecho ya que esta realiza
estudios técnicos jurídicos que tienen una estrecha relación con el derecho, en sentido general
es el cómo funciona la administración de justicia en nuestro país y en cualquier otro que exista
esta Teoría.
La necesidad del ser humano y de la sociedad en general es lo que ha logrado que se tenga
una teoría acerca del proceso así mismo un Derecho Procesal ya que cada día la sociedad
evoluciona a pasos agigantados y es por eso que se necesita tener cuerpos legales e instrumentos
Proceso así como también el concepto de Derecho Procesal, estás dos en la antigüedad se decía
que eran completamente distintas pero ya en nuestros tiempos podemos decir que es lo mismo.
El Derecho Procesal regula la forma general y el orden exterior de las actividades que deben
Teoría General del Proceso y de tales definiciones partiremos para llega a un estudio más
General del Proceso en el ámbito procesal, las definiciones, al Derecho Procesal, así mismo su
En Italia es concretamente al llamado proceso de conocimiento, que fue el tema que como
en Florencia en 1950; pero Calamandrei además de una nota informativa sobre “la Ciencia
CAPÍTULO I
PROCESALISMO ITALIANO
fascista con una impronta marcadamente inquisitoria (R.D. 19-10-1930, n.1399). Tras la
innumerables reformas tanto por la acción legislativa, como por la labor de la Corte
El cambio definitivo de modelo se produce con la Ley 16-2-1987, n.81, por la que se delegó
Finalmente, el nuevo Código se emanó por medio de Decreto del presidente de la República N.º
Sin embargo, este desvío hacía un modelo acusatorio puro no se ha llegado a producir pues
la lucha contra la criminalidad organizada ha provocado de nuevo sucesivas reformas que han
vuelto a introducir elementos procesales típicos del modelo inquisitivo, Por último, y tras la
modificación del artículo 111 de la Constitución, y en aras de equilibrar la posición de las partes
acusatorio, cuyos caracteres principales son los siguientes: posición del juez como una parte
del debate; formación de la prueba en un proceso contradictorio entre las partes; publicidad y
justo proceso.
Los principios de derecho sobre los que reposa el proceso penal italiano guardan bastante
similitud con los principios de derecho procesal español, por lo que nos limitaremos a su mera
exposición.
En referencia a los principios de derecho interno, al igual que en España se recoge el derecho
a la libertad personal; la prohibición de extradición por delitos políticos, excepto los delitos de
genocidio.
destacamos los siguientes por no coincidir exactamente con el proceso español: la prohibición
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
del juez de proceder de oficio; el principio de contestación, según el cual nadie puede ser
condenado por un hecho sin que se le haya colocado en una posición donde pueda defenderse
(fiscal e imputado) en las diversas fases del proceso frente a un juez que es una tercera parte e
que en nuestro país pues otorga a la Defensa entre otras, la facultad de interrogar o de hacer
interrogar a su propio cargo a quien pueda ofrecer declaraciones de relevancia para el juicio.
1.2.1. La Magistratura
Son varias las clasificaciones que se pueden realizar de los órganos judiciales italianos. En
aras a la brevedad realizaremos solamente dos. Si tenemos presente la composición del órgano
decisor podemos encontrarnos con jueces unipersonales, los que ejercitan por sí mismos el
jueces.
1.2.2. La Fiscalía
La Fiscalía en Italia tiene un papel más importante en el sistema procesal que en nuestro
que dirigirlas; al tener que dar las directivas oportunas a la Policía Judicial; al tener que adoptar
La Fiscalía en Italia está compuesta por magistrados que pertenecen al orden judicial,
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
juzgadora, tiene como misión no la de sentenciar sino la de dar impulso al proceso (con el
ejercicio de la acción penal). Esta función la ejercita sea por medio de sus propias peticiones o
por medio de recurrir las decisiones judiciales con las que se encuentre en desacuerdo, y
acompañando a las partes en su camino procesal penal hasta que se obtenga una sentencia firme.
Como regla de principio cuando la Policía Judicial comienza a investigar un delito, debe de
informar sin dilación de sus investigaciones a la Fiscalía. Una vez que se haya dado parte la
Policía Judicial, seguirá investigando el delito de forma autónoma hasta que la Fiscalía no
decida motu proprio asumir la dirección del caso, o impartir las directivas necesarias que
1.2.4. El Imputado.
la acción penal. El imputado tiene derecho, entre otros, a una defensa técnica, lo que incluye el
derecho a nominar a un abogado defensor sea este de confianza o de oficio, y al derecho bajo
A tal fin y bajo pena de nulidad de actuaciones, el imputado desde el primer acto procesal
al que asista debe de ser informado por el Fiscal de sus derechos procesales.
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
daño (patrimonial o no patrimonial), lo cual implica la obligación de reparación por parte del
(Código procesal penal), es la persona que ha sido directamente perjudicada por la acción
delictiva, pudiendo actuar en su sustitución sus herederos en caso de fallecimiento. Esta persona
El Responsable Civil es una persona diferente al imputado, contra la cual se dirige la misma
acción civil que se dirige contra el imputado tendente al resarcimiento del daño.
El Responsable Civil es por lo tanto una parte procesal, en cuanto a que es sujeto pasivo de
pues no de todo proceso penal se deriva la existencia de una responsabilidad civil de la que
tengan que responder terceras personas diferentes al imputado (por ejemplo, los padres respecto
a los hijos menores sujetos a su patria potestad, las compañías de seguros en lo accidentes de
circulación.)
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
país, el medio ordinario de impugnación de una resolución judicial emitida en primera instancia
Este recurso está previsto en el artículo 111 de la Constitución italiana, y viene regulado en
de segundo grado o de primer grado inapelables, a través del cual se reclama contra un error de
derecho del juez en la aplicación de las normas de derecho material (error in iudicando) o de
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
por el medio del cual una persona condenada por una sentencia, puede atacar la firmeza de la
misma en cualquier momento, aunque la pena ya se haya cumplido o se haya declarado extinta
Los casos en los que se admite el recurso de revisión, son los establecidos en el artículo 630
Cpp y están relacionados con la aparición, una vez terminado el proceso, de nuevas fuentes de
prueba; con la anulación de otras pruebas asumidas dentro del proceso; o con el dictado de
posteriores fallos en casos relacionados con los mismos hechos que son inconciliables con el
caso sentenciado, que hacen ver a posteriori y a la luz de los nuevos acontecimientos la
adelante, dedicaremos unas líneas a una gran figura del derecho procesal italiano, a saber:
Lodovico Mortara, nacido antes que Chiovenda (en 1855, frente a. 1872), pero fallecido el
mismo año, en 1937. Cuando Carnelutti en su Sistema señala las fases que, a su entender,
b) periodo de las teorías particulares, con Mattirolo y Mortara como principales paladines.
d) periodo de la teoría general del proceso, con el propio Camelutti como guía.” En realidad,
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
CALAMANDHI permanece muy próximo al maestro, pero no deja de oponerle reservas aun
siendo cuatro, esas fases se reducen, como los mandamientos, a dos: las dos primeras pertenecen
de lleno al procedimentalismo, sin más diferencia que la de ser Borsari y compañía meros
exegetas, que no alcanzan la altura de Mattirolo y, sobre todo, de Mortara; y las dos últimas,
proclamar el suyo propio, forman parte del procesalismo cientifico. Pues bien: elemento de
todavía a la escuela exegética. De cualquier modo, su famoso “Comentario del código y Leyes
del procedimiento civil” tan distinto, hasta en la arquitectura, del género así denominado sigue
MORTARA. Jurisdicción es, para él, solo la resolución de oposiciones expresas; y el juez,
en el procedimiento ejecutivo, a menos que surjan controversias, “no hace más que homologar,
ordenar, autorizar los actos del acreedor (¿cuáles? los actos del acreedor están dirigidos a
obtener actos del juez o del ujier), extinguiendo algunos derechos, constituyendo otros nuevos
con formas genuinamente contractuales; pero nunca limitándose a declararlos; realiza, en suma,
una función más afín a la voluntaria que a la jurisdicción contenciosa”. Pero con esto se olvida
están marcadas con esta finalidad, lo que basta para alejar el carácter de jurisdicción voluntaria.
jurisdiccional atribuida a ellos; pero, si entendernos bien el concepto del insigne escritor, esto
se dice con el carácter de una figura, ya que inmediatamente se agrega que a estas partes de
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
jurisdicción les falta necesariamente un requisito esencial para dar vida a un acto jurisdiccional
completo, lo que es tanto como decir que el acto del árbitro no es en absoluto jurisdiccional.
sentido es una relación de derecho público que se desarrolla entre tres sujetos: la persona que
se queja de la disminución de las propias facultades jurídicas; la persona contra la cual tal queja
proveer: es, pues, todo el juicio. En el segundo sentido es la; facultad de proponer la demanda
judicial. Volveré sobre estos conceptos, con los cuales MORTARA tiene el mérito de haber
MORTARA, concibe ante todo la acción judicial como “una relación de derecho público
que, teniendo su origen en una, oposición entre sujetos privados concerniente a materia, de
obra, y autoridad del magistrado”: en este sentido la acción es el juicio, la misma es la “relación
jurídica procesal”, esto es, “litigioso”. Pero “por tradición secular y por oportunidad práctica, el
una parte de la relación procesal, esto es, la exposición de la pretensión o razón del actor en el
momento en que él promueve sobre ella el examen del órgano de jurisdicción” por consiguiente,
la segunda definición del derecho de accionar como “el derecho de provocar el ejercicio de la
autoridad jurisdiccional del Estado, o en general de los órganos habilitados al objeto, contra las
violaciones que estimamos parecidas, por cualquier hecho ajeno, positivo o negativo, por un
derecho que nosotros afirmamos pertenecemos”. Que la noción de la acción y del juicio
coincidan es una idea que ha determinado ya objeciones por otra parte, como hemos indicado.
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
3.1. La acción.
actividad jurisdiccional para obtener la tutela jurídica del Estado, es un poder que la ley coloca
confiado a la propia iniciativa del órgano jurisdiccional en ciertos litigios de orden público.
Causa y Objeto.
a) Los sujetos: son las personas físicas o jurídicas, titulares de la acción, que tienen el poder
pasivo (demandado). En materia procesal los sujetos son denominados partes o litigantes, a
razón de una pretensión la constituye según el autor: La afirmación de una relación jurídica y la
afirmación de la existencia de un hecho particular c) La afirmación del hecho del que nace el
interés en obrar.
c) El objeto (petitum): Es la cosa que se reclama o se pide pago del precio, restitución del
fundo etc.
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
concepción abstracta se considera que la acción tiene dos electos constitutivos las cuales señalan
los siguientes:
Elemento objetivo: Que es la pretensión la reclamación que una parte dirige frente a otra y
ante el juez, también podríamos decir que es el acto de subordinación de un interés ajeno a
otro propio.
Se efectúa una operación cultural (importación por parte de la cultura procesalista italiana)
de que este concepto ya era debatido con mucho furor en Alemania. CHIOVENDA trata el
concepto de acción no como una cosa, que el mismo está construyendo mediante las
clasificaciones y distinciones que desarrolla en su análisis, sino como una cosa que existe en sí,
como un objeto empírico, que se busca descubrir en su realidad objetiva y material, por lo que
las propias ideas, tomándolas por la realidad objetivas de las cosas. CHIOVENDA era hijo de
su tiempo por eso se habla de un tiempo procesalista y de un tiempo filosófico, por lo que las
nuevas tendencias filosóficas no habían penetrado (por lo que manejaba sus propias teorías
filosóficas particulares basadas en un sistema alemán, pero tomando este sistema con críticas)
en este entonces.
Los conceptos se construyen por inducción a partir de los datos que vienen suministrando
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
críticas que los conceptos que los mismos alemanes habían elaborados.
se dice que no puede ser así, puesto que los conceptos no son fantasmas por lo tanto son
pura.
Hay una mayor referencia al contenido del concepto de acción, hay puntos fundamentales
entre la acción y el derecho sustancial, que en medio de la acción el derecho sustancial se hace
valer en juicio.
derecho subjetivo para defender, pero sucede que una otra vez la voluntad del particular se
encuentra en dicha relación con la voluntad colectiva, la iniciativa particular es necesaria para
provocar la actuación de la voluntad colectiva (ósea del derecho), por lo que dice TARUFFO
que este concepto tiene que ver más con el principio de la demanda que con el derecho de
acción. La acción debe ser considerada como una figura jurídica autónoma, necesariamente
coordinada con un interés, pero no necesariamente coordinada con otro tipo de derecho,
criticando la teoría abstracta de la acción dice que no existe un derecho de obrar independiente,
de un efectivo derecho privado o de un interés en una sentencia favorable, lo que no parece una
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
definición entre la acción, el interés y el derecho sustancial. La mera posibilidad de obrar les
Además, se subraya que junto con la injusta sentencia afirma o niega también el derecho de
obrar, con lo cual se niega la distinción entre acción y derecho sustancial, por lo que no habría
Se habla de acción dentro de un sistema de derecho, se habla de que la acción puede ser
chiovendiana cumple un rol con el concepto jurídico procesal y el sistema de los derechos
sustanciales.
El propósito es poner la acción en el sistema general de los derechos (dentro de los sistemas
El derecho de acción dentro de este sistema viene hacer una casilla sistemática que contiene
la base de un solo elemento de la analogía entre el derecho de acción y los demás derechos
sujetos; el poder de querer los efectos jurídicos, no parece una explicación, particularmente
clara, por lo que se dice que no se puede encontrar analogías útiles entre el derecho de acción.
Por lo que CHIOVENDA termina diciendo que la acción no está dirigida a producir efectos
jurídicos, como ocurre con los otros derechos potestativos, si no hacer corresponder el estado
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
de hecho al estado de derecho, con esto se pierde la analogía que sostendría, la reconducción de
bastantes débiles, frente a diferencias muy relevantes, que se vuelven muy precaria la operación
potestativos.
jurídica entre el ciudadano y el Estado; «negativos», porque el Estado, aceptando tales derechos
no se obliga a hacer algo de positivo en su favor, sino que asume solamente un deber de
abstenerse, de dejar que el ciudadano cumpla sin perturbaciones ciertas actividades de las que
Estos derechos no son inmutables y eternos sino «abiertos», pues no se puede definir «a
priori» y de una vez por todas las específicas actividades individuales cuyo libre ejercicio deba
inicialmente parecía satisfecha por pocas libertades esenciales, y que siente la necesidad de
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
función: por un lado, son necesarias como “reconocimiento práctico de la dignidad moral de
cada persona”; por otro, constituyen el “medio para hacer operativa y fecunda la vida política
política (la concepción de los derechos y libertades públicas como instrumento de “respeto de
la minoría” es crucial para nuestro autor), como elemento indispensable de la renovación social
y política que conlleva la dinámica democrática. Pero además como reconocimiento de esa
política de todos los ciudadanos), que arrancan de la Revolución Francesa, encuentran sus
obstáculos no tanto sobre el plano político, sino sobre el plano económico, desplazando del uno
al otro la lucha por la «libertad efectiva». Las libertades políticas codificadas se revelaron
privilegio económico garantizado por todas esas libertades. El liberalismo económico, más que
una integración de las libertades políticas de todos los ciudadanos, se convirtió en el instrumento
de la burguesía para monopolizar estas libertades políticas en detrimento de todos aquellos que
no disponían de los medios económicos para hacerlas valer. Por ello, “no bastaban solamente
las libertades políticas, las cuales, cuando se acompañan del privilegio económico, sirven en
realidad para hacer del poder político un monopolio cristalizado de los hacendados y a impedir
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
el perpetuo afluir de las más sanas fuerzas populares a la renovación del grupo dirigente que es
la esencia misma de la democracia”. Según nuestro autor, en el sistema político liberal, las
libertades políticas eran, «de derecho», escritas para todos, pero en realidad solamente los ricos
Para Calamandrei, uno de los defectos más graves de la Constitución italiana era la falta de
claridad: a falta de acuerdo sustancial entre los partidos, los constituyentes se refugiaron en
generales que no podían ser consideradas normas jurídicas, entre ellas los derechos sociales
“travestidos” de derechos del ciudadano, pero sin garantías jurídicas de aplicación efectiva. Para
nuestro autor estos artículos engañosos eran una forma de sabotaje a la Constitución, una forma
Cuando el juez desciende del cielo a la tierra, y se observa que también es un hombre, para
dar crédito a su sentencia es preciso iniciar la búsqueda, en el mecanismo cada vez más preciso
del proceso, de las garantías necesarias para asegurar que la sentencia constituya, en todo caso,
Es necesario persuadirnos cada vez más de que el proceso objeto de nuestros estudios no es
como el legislador lo ha previsto en abstracto, sino como lo hacen vivir, como lo representan
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
(en el sentido teatral de la palabra) los hombres, jueces y justiciables, que participan en él en
concreto, y que no son muñecos mecánicos construidos en serie, sino hombres vivos, cada uno
El juez es un tercero extraño a la contienda que no comparte los intereses o las pasiones de
las partes que combaten entre sí, y que desde el exterior examina el litigio con serenidad y
un interés personal, egoísta, que se encuentra en contraste o en connivencia o amistad con uno
o con otro de los egoísmos en conflicto. El interés que lo mueve es un interés superior de orden
colectivo, el interés de que la contienda se resuelva civil y pacíficamente para mantener la paz
social.
puramente intelectualista y silogística del juez es satisfactoria, y sobre todo, que corresponde a
previsible con seguridad?¿Es propiamente verdad que el juez se limita a declarar lo que ya
existe, tal como si fuese una historia de la realidad jurídica, sin concurrir con la voluntad
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
Calamandrei concluye que reducir la función del juez a una simple actividad de hacer
Estado e independencia individual de cada Juez. Se trata de dos conceptos coordinados pero
para juzgar, como orden autónomo e independiente de cualquier otro poder, no constituye sino
Esta independencia individual del hombre juez es la que verdaderamente tiene importancia
y constituye el fin último al cual deben mirar todos los perfeccionamientos del ordenamiento
Las ventajas en este punto del sistema uruguayo en cuanto al ingreso y al desarrollo ulterior
de la carrera judicial. El peligro del conformismo de los magistrados inferiores concordante con
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
con ordenar, no se limita ya al “sic volo, sic iubeo” (así lo quiero, así lo mando), pronunciado
desde lo alto de su sitial, sino que desciende al nivel del justiciable y al mismo tiempo que
manda, pretende explicarle la racionalidad de esa orden. La motivación es, antes que nada, la
tiene también otra función más estrictamente jurídica, o sea, la de poner a las partes en condición
puede descubrirse alguno de aquellos defectos que dan motivo a los diversos medios de
impugnación.
Podría decirse que la misma ley, al exigir que en el texto definitivo de la sentencia los puntos
resolutivos estén precedidos por la motivación, quiere hacer aparecer a la luz del sol la estructura
demostración de que el juzgador se quiere dar a sí mismo antes que a las partes la “ratio scripta”
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
la intuición que la dicta y la razón que la controla (y que, por consecuencia, la motivación sea
sentimiento y la razón del juez funcionen al unísono, o sea, que el sentimiento que se encuentra
vivo en la conciencia del juzgador y del cual extrae su decisión antes que del razonamiento, sea
El drama comienza cuando el sentimiento social del Juez se encuentra en desacuerdo con el
que ha inspirado al legislador, es decir, cuando el juez, con motivo de acontecimientos históricos
encuentra en el deber de aplicar una ley que en su conciencia considera socialmente injusta, no
obstante que se diga que en el sistema de la legalidad impera el principio de “dura lex sed lex”,
y que, en consecuencia, el juez debe tomar la ley como es, sin juzgarla.
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
sigue siendo) pernicioso puesto que, habiendo sido una auténtica tentativa de compatibilizar la
teoría concreta y abstracta de la acción, las condiciones de la acción recibieron un enfoque muy
particular que, posteriormente, con las fulminantes críticas a la propuesta de LIEBMAN, sirvió
para entender aquello que realmente interesa demostrar: que ellas pertenecen, en realidad, al
subjetivo instrumental mediante el cual se afirma un derecho en juicio, y viene a ser un derecho
a la jurisdicción, o sea, un derecho a que el juez aplique la regla objetiva en el caso concreto, lo
cual sólo se puede traducir en decidir sobre el mérito de la demanda. Por eso que expresamente
señala que “entre acción y jurisdicción existe, por tanto, una correlación exacta, no pudiendo
Ahora bien, cuando LIEBMAN entiende el interés en la acción y legitimidad para actuar (o
que, precisamente, ambos elementos deben estar presentes para que exista la acción, cuya
trata, por tanto, de requisitos de existencia de la acción que son verificados preliminarmente al
examen de mérito.
LIEBMAN dice que el interese para actuar es la “necesidad de obtener del proceso la
protección del interés sustancial”, siendo que éste se identifica con el bien de la vida pretendido.
corresponde a aquella persona que detenta el interés para actuar. No obstante, LIEBMAN
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
reconoce que la legitimidad pasiva es un elemento de la legitimidad para actuar y esta titularidad
se presenta como un derecho bilateral, que pertenece tanto al demandante (por ser el titular del
interés para accionar) como al demandado (por ser el titular del interés de contradecir).
Esta referencia que la legitimidad tiene frente al interés permite afirmar que “la legitimidad
es apenas uno de los requisitos sin los cuales no hay interés para obrar”. En el entendimiento de
LIEBMAN, el hecho que se presenten el interés para actuar y la legitimidad para actuar no
implica que el autor tenga razón, sino apenas que el proceso es necesario para la tutela de su
interés sustancial y que quien pida tutela jurisdiccional lo haga en un interés propio. Por ello,
cuando no se presenta alguna de las condiciones de la acción se verifica una carencia de acción
y la imposibilidad de que el juez resuelva sobre el mérito de la demanda, en cuyo caso no habría
“un verdadero ejercicio de la jurisdicción, sino apenas un uso de sus formas para realizar aquel
examen preliminar (asignado por necesidad a dicho magistrado) que sirve para excluir de plano
aquellas causas en las cuales hacen falta las condiciones que se requieren para el ejercicio de la
la enorme influencia que tuvo en Brasil, y, por qué, no, también a un culto a la personalidad, lo
cierto es que muchísimas críticas pueden realizarse a esta doctrina. Entre las más importantes y
más devastadoras podemos mencionar las de Ovídio Baptista da Silva (2006, y Luiz Guilherme
teorías de Chiovenda y de Liebman, era absolutamente apropiado debido a la forma cómo ellos
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
mayoritaria como un derecho fundamental, es claro que ella no puede soportar ningún
no es más que un homenaje a una tradición doctrinaria que no tiene ningún sustento en nuestro
contexto.
Pero las dificultades no son apenas semánticas. En lo que se refiere a la teoría de Liebman,
además de la imposibilidad de explicar la naturaleza de los actos del proceso cuando existe
carencia de acción (puesto que, según él, sin acción no hay jurisdicción), la debilidad de la
teoría del maestro milanés reside precisamente en el intento de comprender las condiciones de
es una y solo una: las “condiciones de la acción”, en realidad, ¡integran el propio mérito!
La explicación de ello puede ser realizada de la siguiente manera: La excepción, tal como
fue plasmada por el legislador de 1993, constituye un tipo de defensa dirigida a cuestionar los
elementos que integran la validez del procedimiento sin los cuales no es posible la emisión de
al imponer dicho tratamiento a aquellos elementos que deben ser discutidos mediante la
procesales.
No obstante, esto es un gravísimo equívoco, puesto que el legislador mezcla elementos que
realmente forman parte del análisis de la validez del procedimiento (como la competencia, la
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
caducidad, la cosa juzgada, la legitimidad para obrar, el interés para obrar, entre otros) (Cavani,
2012, 89 ss.). En el contexto del proceso principal, el mérito es un concepto que remite al objeto
litigioso (res in iudicium deducta) delimitado por los hechos llevados al proceso por las partes.
En otras palabras, el mérito refleja la materia prima con la que se trabaja en el proceso, la cual
titularidad de aquella situación jurídica subjetiva material llamada de propiedad. Por su parte,
si el demandante pide una indemnización debido a un accidente de tránsito donde sufrió daños,
y el demandado contesta diciendo que él no tiene responsabilidad, el mérito del proceso será la
existencia o no de ese derecho de crédito del que el demandante dice ser titular y, por tanto, si
Estando claro el concepto de mérito, no resulta difícil entender por qué la legitimidad para
obrar y el interés para obrar (o interés procesal) pertenecen al mérito del proceso y no a la
validez del procedimiento. Los ejemplos que fueron dados serán de gran utilidad: Si en el caso
del proceso de reivindicación se declarase fundada una falta de legitimidad para obrar activa, se
habría comprobado que el demandante no poseía la titularidad que dijo poseer, o sea, que no es
propietario.
tiene la titularidad del derecho de crédito, por tanto, no debió demandar su cobro. Nótese el
vínculo con la relación de derecho material llevada al proceso, la cual, como se dijo, no es otra
cosa que el mérito. En efecto, al ser la legitimidad para obrar esa identidad entre la posición de
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
un sujeto en la relación material, por un lado, y en el proceso, por otro, su examen únicamente
puede darse explorando el derecho material. Y si ello es así, entonces no puede ser tratado como
Lo mismo puede decirse del interés para obrar. Siendo este concepto aquella necesidad
prestación de obligación de dar suma de dinero sujeta a una condición suspensiva que aún no
se ha cumplido, entonces la respuesta del juez sería que el derecho de crédito aún es inexigible
Lo mismo sucede con el no agotamiento de la vía administrativa, típico caso de falta interés
para obrar: el hecho de recurrir a un proceso judicial cuando la situación jurídica material debe
ser examinada por un tribunal administrativo escapa de la esfera de “lo procesal” y entra de
lleno a la esfera del derecho material. ¿Por qué? Porque la respuesta que daría el juez en ese
caso es que la situación jurídica subjetiva no puede ser tutelada, por el momento, en ámbito
jurisdiccional. Y véase que no se trata de un análisis meramente procesal, como lo es, por
De esta manera, insistir en vincular las “condiciones de la acción” con la validez del
procedimiento implicaría no otra cosa que un lamentable trastrocamiento entre derecho material
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
CONCLUCION
En conclusión, todos estos temas que abarcamos dan un gran apoyo muy importante a los
estudiantes para su correcta formación académica ya que nos da a conocer puntos que son de
suma muy importantes en nuestra carrera jurídica. Puesto que son temas esenciales y con un
La tradición nacional a la cual este Código quiere mantenerse fiel ha tenido manifestaciones
aun mis recientes. La degeneración formalista hacia el procedimiento escrito no tuvo sus
orígenes en Italia, donde, ante los rigores y las sutilezas del proceso ordinario contagiado por
típicamente italiano, creando los procedimientos sumarios que representaban con su simplicidad
expeditiva una reacción del buen sentido contra las sutilezas del proceso escrito.
Podemos, finalmente, como producto del análisis de las diversas concepciones propugnadas
en torno a la acción, y en aras de la determinación de un concepto que busque ser no solo técnico
sino también adecuado, afirmar que aquella constituye el poder jurídico de naturaleza pública
Lo que podemos concluir de todo lo anteriormente expuesto es que la Teoría General del
Proceso es la base del Derecho Procesal ya que desde mi punto de vista todo tipo de derecho
(civil, penal, laboral, etc.) comienza con una teoría para posteriormente convertirse en realidad,
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DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
Chiovenda, Giuseppe (1923): Principii di diritto processuale civile, 3a ed. Nápoles: Jovene.
Cintra, Antonio Carlos de Araújo; Dinamarco, Cândido Rangel; Grinover, Ada Pellegrini (2006):
Teoria geral do processo, 22ª ed. revisada y actualizada. São Paulo: Malheiros.
Dinamarco, Cândido Rangel (2009) Instituições de direito processual civil (II), 6ª ed. revisada y
Liebman, Enrico Tullio (1957): Manuale di diritto processuale civile (I), 2ª ed. Milán: Giuffrè.
CALAMANDREI, “Crisis de la justicia”, en AA.VV., La crisis del Derecho, op. cit., p. 315.
https://www.ugr.es/~redce/REDCE8/articulos/10PieroCalamandrei.htm#29bis
https://www.academia.edu/3079015/Las_condiciones_de_la_acci%C3%B3n_una_categor%C3
%ADa_que_debe_desaparecer
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