Dale Fuerza y Valor Hazle Saber Qué Crees en El
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La autoestima es la capacidad de quererse y aceptarse a uno mismo y esto es imprescindible para la seguridad y la confianza que una
persona pueda tener en sí mismo; influye en la forma como una persona responde ante las diferentes situaciones que la vida le
presente, la manera de afrontar los fracasos, lograr sus objetivos, realizar sus sueños y propósitos.
Es un deber ineludible en la educación y una gran responsabilidad tanto para los padres como profesores, apoyar a los niños durante
su proceso de formación para que puedan lograr un buen desarrollo de su propia estima o valía personal.
Importancia del desarrollo de una buena autoestima.
La autoestima es fundamental para movernos por el mundo, es el motor que impulsa las acciones del ser humano, la autoestima en
la vida de las personas juega el papel de los cimientos de un edificio, sobre el cual se construye y sostiene.
Sin autoestima, sin seguridad en sí mismo y amor propio un ser humano no tiene el piso sobre el cual construir una vida altamente
satisfactoria y feliz. Sin autoestima las personas se sienten incapaces de actuar eficientemente en la vida y continuamente se llenan
de temores, se angustian ante la imposibilidad de hacer las cosas y se deprimen porque piensan que son personas incapaces que no
merecen.
La autoestima:
Mejora la confianza y la seguridad en sí mismo.
Aporta la fortaleza necesaria para dar sus opiniones, sin temor.
Potencia las habilidades sociales y la capacidad de relacionarse con los demás.
Mejora la empatía, la asertividad y el contacto con personas desconocidas.
Potencian el desarrollo personal.
Permite enfrentar los fracasos y a la frustración, sin que afecte internamente o lo destruya.
Da la posibilidad de conocerse y quererse.
Es la clave para la consecución de logros y para el éxito, la felicidad y la prosperidad.
Factores que influyen en el desarrollo de la autoestima.
El primer y más importante factor que influye en el desarrollo de la autoestima de los niños, es la imagen que las personas tienen de
él, la opinión de sus padres, profesores y familiares cercanos tienen sobre sus acciones y comportamientos, lo que le dicen en
relación a sus comportamientos, los juicios que emiten, en fin lo que el niño escucha diariamente sobre sí mismo tendrá un impacto
definitivo en su autoestima.
Un niño al que continuamente se lo está tratando de tonto, incapaz, que recibe recriminaciones continuas o burlas, poco a poco irá
perdiendo la confianza en sí mismo y en su propia capacidad de hacer las cosas.
Lo mismo sucede con los niños a los que sus padres o alguna persona los sobreprotege y no les permite hacer las cosas por ellos
mismos, llega el momento en que piensan que no son capaces de hacerlas y por este motivo es que necesitan recurrir a que otra
persona las haga por ellos. Además también influye el factor de la comodidad, si todo el tiempo hay alguien que haga las cosas que
él ya puede hacer por sí mismo, es bastante más cómodo dejar que otro las haga, que hacerlo yo mismo, lo que los convierte en
seres inútiles e incapaces.
Los pequeños empiezan a formar una imagen sobre sí mismo desde muy temprana edad, esta imagen se basa en lo que perciben
que los demás piensan de ellos. Esta es la base de su autoestima futura, que se verá determinada por futuras experiencias, es por
ello que debemos dotar a los niños y niñas de mensajes positivos sobre su persona, que los apoyen y hagan sentir muy bien y
seguros, pero sin exagerar, dentro de un parámetro real, para que el niño no perciba que hay un engaño.
Pautas que ayudan a los niños a formar una sana autoestima.
Trátalo con amor, exprésale diariamente lo mucho que lo amas y lo importante que es para ti.
Dale fuerza y valor, hazle saber qué crees en él.
Demuestra tu amor con acciones, abrazos, mimos, caricias
Hazle saber que tu amor es incondicional, que a pesar de sus errores y comportamientos necios, siempre lo vas a amar.
Dile que lo corriges solo para que él aprenda, porque tu deber es enseñarle y ayudarlo a convertirse en una buena persona.
No le impongas nada, la imposición es un error que causa mucho daño, a cambio de imponerle las cosas, explícale el porqué de una
situación.
No castigues, el castigo es una forma de venganza porque no se comporta como quieres que lo haga, a cambio de castigar invítalo a
que reflexione y corrija su comportamiento, muéstrale con argumentos porqué debe hacer las cosas bien. Y si es necesario haz que
asuma los resultados de sus errores, sin castigo, con amor y paciencia se puede lograr que el corrija sus comportamientos.
Escúchalo con atención y amor, deja que te de sus argumentos y haga sus propias reflexiones.
Felicítalo por sus buenas acciones, hazlo sentir importante y bien, los elogios acertados y equilibrados son una gran herramienta de
construcción de la autoestima.
Reconoce sus logros y muestra interés en ellos, hazle saber lo importante que son para ti y para él, sin exagerar, todo en la justa
medida.
Ten en cuenta sus sentimientos y emociones. Cuando un niño llora o está angustiado al adulto puede parecerle una tontería, pero al
niño hay algo que le está generando miedo e inseguridad, por eso hay que escucharlo y poner atención a sus sentimientos, que
pueden ser muy fuertes para él, aunque tontos para otra persona.