Introduccion A La Lexicografia. Analisis PDF
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A mis alumnos: mi fuente de estímulos
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ÍNDICE
Pág.
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INTRODUCCIÓN A LA LEXICOGRAFÍA. ANÁLISIS Y RESEÑA CRÍTICA DEL
DICCIONARIO ACTUAL DE LA LENGUA ESPAÑOLA VOX
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Los primeros ensayos lexicográficos son los glosarios del latín a la lengua vulgar. Los
más antiguos deben ser el llamado Glosario de Toledo, conservado en la Biblioteca de la
Catedral de Toledo y el Glosario de Palacio, conservado en la Biblioteca del Palacio
Nacional de Madrid; ambos son de finales del siglo XIV. Del siglo XV se conserva el Glosario
de El Escorial y un fragmento de un vocabulario que se conserva en la Biblioteca de la Real
Academia de la Historia.
Es Antonio de Nebrija el que marca el comienzo de la lexicografía hispánica. Fiel a su
lema “siempre la lengua fue compañera del Imperio” ve que no hay razón para seguir
utilizando siempre el latín como lengua noble, con el evidente menosprecio y perjuicio del
castellano, “la lengua vulgar”. El mismo año en que aparece la Gramática castellana
(Salamanca, 18 de agosto de 1492), ve también la luz el Dictionarium latino-hispanicum
(Salamanca, 1492), y un poco después el Dictionarium hispano-latinum (Salamanca, 1495).
Este diccionario es la primera obra importante en nuestra lexicografía.
Los criterios que utiliza Antonio de Nebrija para la elaboración de sus obras lexicográficas
son: la actualidad, la arbitrariedad y el cambio, la falta de correspondencia exacta entre los
términos de las dos lenguas y los tipos de vocablos (oscos, antiguos, nuevos, bárbaros y
aprobados).
Tanto Antonio de Nebrija como los lexicógrafos que surgen inmediatamente después de
él, y llegan hasta el siglo XX, se limitan a colocar las palabras en orden alfabético,
explicando su significado.
Los primeros diccionarios que surgen en esta época son bilingües: el de Antonio de
Nebrija y el de Alonso de Palencia eran latín-castellano.
Del año 1965 data el primer vocabulario bilingüe español: el Vocabulario de los vocablos
que más comúnmente se suelen usar, de Jacques de Liaño (impreso en Alcalá). Es un
léxico breve francés-español, destinado a la enseñanza del francés para españoles.
Todos estos diccionarios y otros surgían de una necesidad evidente: la lectura de textos
de otras lenguas, sus traducciones o su enseñanza.
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encuentra lo que busca o halla lo que ya sabía. Así, los diccionarios son tanto creadores de
ilusiones como desilusiones, convirtiéndose, de algún modo, en objetos míticos; lo que está
en ellos está bien dicho y lo que no, no, sustituyendo, frecuentemente, en sus funciones a
las gramáticas.
Por otra parte, se concibe también el diccionario como obra de carácter didáctico, lo
cual es evidente, por más que en España no goce del respaldo oficial de que disfruta en
otros lugares. El diccionario enseña (no solo informa), regula (es garante de la norma),
además de ser un objeto sociocultural cuyo texto está acotado (lo que no está en él, no
pertenece a la lengua). En realidad, cada diccionario es fruto de una ideología, expresada
voluntariamente o no en sus páginas, que transmite a sus lectores.
El ser una obra de carácter social y didáctico conlleva que sea un instrumento, “un
artilugio conveniente para el manejo de la lengua”.
El diccionario tiene la doble misión de darnos el significado de la palabra desconocida
y de ayudarnos a buscar el término oportuno para una idea que no sabemos expresar
adecuadamente. No obstante, los diccionarios usuales solo sirven para la primera
necesidad, son incompletos. Los diccionarios que van de la idea a la palabra -los llamados
ideológicos u onomasiológicos- son, en cambio, completos, ya que se complementan con
el diccionario alfabético usual, que les sirve de índice.
Los diccionarios se dividen en dos grandes series: monolingües y plurilingües. Los
monolingües, esto es, de una sola lengua, lo son de palabras y cosas, agrupándose en dos
grandes ramas: de la lengua y enciclopédicos. Los de la lengua pueden ser generales o
especializados (según aspectos segmentales, morfogramaticales, formales o semánticos),
los enciclopédicos también son generales y especializados (de nociones, de nombres
propios o de hechos). En los diccionarios monolingües la definición está en la misma lengua
que el definido. Los plurilingües pueden ser homoglosos (la misma lengua): dialectales y
jergales, y de la lengua antigua; y heteroglosos (bilingües): de lenguas muertas (latín-
español, etc.), de lenguas vivas (inglés-español) y multilingües.
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El texto del diccionario consta de dos partes nucleares: la macroestructura y la
microestructura, sin olvidar otras partes como los datos bibliográficos (título, número de
páginas, editorial, etc.) y la caracterización tipológica (tipo de diccionario, finalidad y la
clasificación de los materiales léxicos).
Las partes que voy a analizar más minuciosamente son la macroestructura y la
microestructura. En la descripción de la macroestructura empezaré por ver la guía para
consultar el diccionario. En los artículos ejemplificados de esta guía aparecen los elementos
e indicaciones propios de la microestructura. A continuación, haré un listado con algunas
de las abreviaturas utilizadas en el diccionario ordenadas alfabéticamente y, a continuación,
enumeraré los principales objetivos que quedan plasmados en el prólogo. Asimismo,
observaré, por un lado, el Índice General del diccionario y, por otro, el Índice de cuadros
donde se recogen de la a a la v una serie de términos lingüísticos con el número de página
en la que se desarrolla el contenido de los mismos. No se puede pasar al análisis de la
microestructura sin antes decir que, para concluir con esta parte del diccionario, reseñaré
las características fundamentales del inventario léxico, así como las poquísimas
ilustraciones que aparecen en este diccionario. En el análisis de la microestructura, definiré
el concepto de lematización por homonimia y polisemia. Debido, a veces, a la confusión
entre homonimia y polisemia, he creído conveniente ampliar este apartado con precisiones
teóricas de estos fenómenos semánticos y enumerar los criterios diacrónicos y sincrónicos
utilizados por diversos lingüistas para diferenciar la homonimia de la polisemia. Tras realizar
un breve comentario de la división o partición silábica y de las indicaciones fonéticas, pasaré
a analizar las marcas o indicaciones gramaticales, etimológicas, especialidad, geográficas,
estilísticas y cronológicas. A fin de ampliar la indicación gramatical, he elegido dos
diccionarios escolares para establecer diferencias y semejanzas entre unos y otros. En
cuanto a los elementos paradigmáticos, en primer lugar, he partido de varios lemas o
entradas del propio diccionario (hierba-yerba, selvicultura-silvicultura, etc.) para estudiar las
variantes ortográficas. En segundo lugar, el apartado de sinónimos y antónimos se ha
ampliado -como en el caso de la homonimia y la polisemia- con precisiones teóricas, pero
siempre usando ejemplos del Diccionario Vox para verificar todo aquello que se dice en la
teoría. Por último, realizaré un análisis sistemático de la definición y clases de definiciones
“propia” e “impropia” con sus correspondientes características: la ley de la sinonimia y
contorno.
En la evaluación general del Diccionario Vox, ratificaré lo que dice el propio director de
la obra en el prólogo y propondré qué aspectos se podrían solventar o mejorar los que no
parecen adecuados.
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4. DATOS BIBLIOGRÁFICOS
Ciudad: Barcelona
Editorial: Bibliograf, S. A.
Fecha de edición: 1ª ed. 1990.
Formato: 16 x 24 cms.
Número de páginas: 1668.
5. CARACTERIZACIÓN TIPOLÓGICA
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6. DESCRIPCIÓN DE LA MACROESTRUCTURA
6.1. LA MACROESTRUCTURA
Indicación de la
especialidad rubefaciente adj.-m. MED. Que produce rubefacción.
Categoría gramatical rubelana f. Mica de color pardo rojizo que se encuentra asociada con rocas
efusivas.
Entrada rubia (1) f. […] 5 fam. Peseta que no es de plata, Indicación del nivel
sino de metal dorado. de lengua
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Indicación de cambio
de categoría gramatical rubiáceo, -a (de rubia) adj. -f. […]. -2 f. pl. Familia de plantas dicotiledóneas de
hojas enteras, opuestas, […].
Contorno del adjetivo rubial m. Tierra donde se cría la rubia. -2 adj. [tierra, planta] Que tira al
color rubio.
Definición rubicela f. Espinela de color vinoso más bajo que el del balaje […].
Nombre propio Rubicón n. pr. Río situado entre Italia y la Galia Cisalpina, el cual cruzó
lexicalizado César (101-44 a. C) […].
Números para
separar acepciones rubicundo, -da (l. -du) adj. Rubio que tira a rojo. 2. [pers.] De buen color
y aspecto saludable. 3. [pelo] Que tira a colorado.
Contorno del rubificar (l. ruber, rojo + facere, hacer) tr. Poner colorada [una cosa] o
verbo teñirla de color rojo […].
Distinta entrada
para palabras de
distinta procedencia I) ruche, -cho (de rucio) m. Pollino (asno). Aclaracines de la definición.
II) ruche m. S. Dom. Entendido, secreto.
Nota gramatical rugir (l.-ire) intr. Bramar el león […]. ◊ **CONJUG [6] como dirigir.
Sinónimos ruin (de ruina) adj. Vil. 2 [pers.] De malas costumbres y procedimientos.
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SIN. 1 y 2 v. Malo.
Nombre científico ruiseñor […]. m. Ave paseriforme de plumaje pardo rojizo, notable
de fauna por la belleza de su canto (Luscinia megarhynchos).
Variantes dialectales rula f. Ar. Juego parecido a la chueca I. 2 Ar. Palo encorvado en uno
de sus extremos, con el que se juega a la rula. 3 La Mancha Aro I,
juguete. 4 Ast. y Mál. Lonja de contratación de pescado. 5 Ast. y Mál.
Rueda o grupo de pescadores que forman una compañía para la compra
Americanismos o venta del pescado. 6 Extr. Tórtola. 7 Colomb. y Pan. Cuchillo de
monte, machete recto y angosto.
A
abs. absoluto
adj. adjetivo
adv. m. adverbio de modo
ANAT. Anatomía
aum. aumentativo
B
Bad. Badajoz
BIB. Biblia
Biol. Biología
Burg. Burgos
burl. burlesco
C
c. ciudad
Can. Canarias
cap. capital
célt. Céltico
conj. Conjunción
G
gén. género
gót. gótico
gralte. Generalmente
Gran. Granada
Guat. Guatemala
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M
med. medieval
MED. Medicina
MÉTR. Métrica
moz. mozárabe
Murc. Murcia
P
p. us. poco usado
partic. participio
pl. plural
prnl. pronominal
PSICO. Psicología
S
s. substantivo
Seg. Segovia
sing. singular
subj. subjuntivo
superl. superlativo
V
Val. Valencia
var. Variante
vasc. vascuence
VETER. Veterinaria
vulg. vulgar o vulgarismo
Z
Zam. Zamora
> da
< viene o procede de
+ composición
x cruce fonético o semántico
* forma hipotética
** referencia a cuadros sinópticos
~ indica la palabra que encabeza el artículo
◊ introduce observaciones y notas gramaticales
En esta última letra, además de las abreviaturas, están expuestos los símbolos o iconos
que se usan en el Diccionario: ◊,<,>, etc.
Todas las abreviaturas son adecuadas, completas y se explican sistemáticamente.
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6.4. PREFACIO O PRÓLOGO
Tras realizar una pausada y reflexiva lectura del prólogo, redactado por el propio
director del Diccionario Vox, se observa que quedan plasmados claramente los siguientes
objetivos:
1. Renovar el Diccionario Vox, ya que el Diccionario Actual de la Lengua Española viene
a ocupar el lugar que dejó el Diccionario General Ilustrado de la Lengua Española (edición
1986).
2. Completar el Diccionario en lo que atañe a la cantidad de artículos y acepciones,
pues aumenta en más de 4.000 artículos los ya existentes en el Diccionario General
Ilustrado de la Lengua Española (nueva edición 1987) que le sirve como punto de partida.
3. Suprimir voces y acepciones anticuadas con el fin de atender las necesidades de los
usuarios, reflejando el estado actual de nuestra lengua.
4. Incorporar voces nuevas y significados que no constataban en el diccionario del que
parte este, con el fin de poner a disposición de cualquier persona culta el caudal léxico con
el que pueda encontrarse.
5. Mantener los artículos y acepciones de un uso geográfico restringido, con alguna
incorporación nueva.
6. Revisar de manera sistemática algunos grupos de palabras tales como los nombres
de las aves, de plantas, de mamíferos, de peces y de insectos, para proporcionar
definiciones más modernas.
7. Incrementar el léxico procedente de las ciencias y de las técnicas.
8. Corregir errores en el interior de los artículos.
9. Actualizar contenidos en el interior de los artículos.
10. Introducir los nuevos significados en el interior de los artículos.
11. Alterar el espacio dedicado a la etimología de las palabras compuestas.
12. Revisar y actualizar los prefijos y los elementos compositivos.
13. Cambiar las referencias a los modelos de la conjugación verbal irregular. Se elabora
un nuevo cuadro de irregularidades.
14. Prescindir de las ilustraciones con el fin de conceder un mayor espacio a la
descripción de la lengua.
15. Aceptar el orden alfabético internacional. Las letras ch y ll se alfabetizan entre las
combinaciones de c y l.
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Manuel Alvar concluye el prólogo diciendo: “Por todo ello, este es un diccionario nuevo
y bien diferente de los que componen la serie Vox, y, sin dudarlo, un Diccionario Actual de
la Lengua Española merecedor de ese nombre y que no defraudará a sus usuarios”.
Después del prólogo se indica el Índice General con las páginas numeradas con números
romanos. Este dato sirve para diferenciar el Índice General del Índice de Cuadros, en el que
las páginas van numeradas con cifras arábigas.
El Índice General comprende el prólogo, el índice de cuadros, las abreviaturas utilizadas
en el diccionario y el diccionario.
Índice General
Pág.
Prólogo ….................................................................................... V
Índice de cuadros …................................................................... VI
Abreviaturas utilizadas en el diccionario ….............................. VII
Diccionario …................................................................................ 1
Índice de Cuadros
Pág.
Acento …................................................................................... 18
Adjetivo …................................................................................. 37
Adverbio …................................................................................ 42
Alfabeto ….................................................................................. 76
Anfibologías …........................................................................... 108
Barbarismos …........................................................................... 201
Complemento directo …............................................................ 409
Composición …............................................................................ 411
Concordancia ….......................................................................... 418
Conjugación …............................................................................. 427
Conjunción y nexos conjuntivos …............................................ 458
Consonantes …............................................................................. 459
Derivación …................................................................................. 533
Fonética …..................................................................................... 755
Género …....................................................................................... 792
Gerundio ….................................................................................... 796
Infinitivo …..................................................................................... 896
Mayúsculas …................................................................................ 1029
Numeración …............................................................................... 1109
Número …...................................................................................... 1112
Ortografía ….................................................................................. 1142
Palabras …..................................................................................... 1168
Participio ….................................................................................... 1192
Poesía …......................................................................................... 1261
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Pronombre personal …................................................................. 1296
Puntuación …................................................................................. 1312
Sílaba ….......................................................................................... 1456
Con el fin de ver con toda claridad la información que proporciona cada uno de los
cuadros sinópticos que aparecen en el Diccionario Vox, creo que es conveniente
ejemplificar con uno de ellos:
DERIVACIÓN
En español, como en las demás lenguas neolatinas, la derivación es el medio más usual para la
formación de palabras nuevas. Consiste en añadir a una palabra primitiva algún sufijo de los
muchos que el idioma tiene en uso, por ej., bondad -oso, real -engo, can -ino, pas -iego. La palabra
se llama derivada. Cuando a un vocablo ya derivado se le añade otro sufijo, se forma un derivado
secundario, por ej., mar- mar -ino, marin -ero, […].
En cuanto al inventario léxico, son varias las características que se pueden destacar:
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6.6. ILUSTRACIONES
7. ANÁLISIS DE LA MICROESTRUCTURA
7.1. LA MICROESTRUCTURA
Son, por tanto, dos palabras homónimas, esto es, formalmente idénticas (grafía y
pronunciación), pero de origen diferente. El nombre de la planta viene del latín iunco > junco,
y el de la embarcación es de origen asiático. Así pues, si se parte de la etimología y del
hecho de que dos palabras de origen diferente coinciden en su grafía y pronunciación
(homonimia), se pueden poner dos lemas con números romanos antepuestos.
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b. La polisemia: un solo lema con una entrada y varias acepciones. Por ejemplo:
Con este ejemplo se puede ver que concha es un único lema que tiene varias acepciones,
que se definen en la misma entrada generalmente separadas por cifras arábigas. Otros
ejemplos de polisemia son: calor, curso, ocaso, etc.
Francisco Abad, en su Diccionario de lingüística de la escuela española, en el artículo
de sinonimia, escribe:
No obstante, autores como Ullmann, Dubois, Lyons, Palmer y Todorov consideran que
este problema está relacionado con la labor del lexicógrafo, quien tendrá que decidir si una
unidad particular debe manejarse en función de polisemia u homonimia. Un ítem polisémico
se tratará como una entrada singular con diferentes subsentidos, mientras que uno
homonímico tendrá una entrada diferente para cada uno de los distintos signos u
homónimos, es decir, tendrá descripciones diferentes. El lexicógrafo deberá determinar si
registra los homónimos dudosos como una palabra o como dos.
1. Criterio Etimológico-Histórico
2. Criterio de afinidad de significado
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2.1. Criterio de la conciencia lingüística del hablante
2.2. Criterio de la posesión de semas comunes
3. Criterio de “modelos derivacionales” (familias, paradigmas)
4. Criterio de campo léxico
5. Criterio de identificación con sinónimos
Para concluir con este apartado, he de decir que Ullmann defiende el lado positivo de la
polisemia:
“Una buena reflexión mostrará que, lejos de ser un defecto del lenguaje, la polisemia
es una condición esencial de la eficacia. Si no fuese posible atribuir varios sentidos a
una palabra, esto equivaldría a una carga abrumadora sobre nuestra memoria […]. La
polisemia es un factor inapreciable de economía y flexibilidad en el lenguaje”.
Los lemas formados por más de una palabra, separadas o no por un guion, coma, etc.,
se alfabetizan como si fueran una sola palabra: best-seller, jet set, etc. Hay lemas que
son símbolos o abreviaturas como kcal, símbolo de kilocaloría, kv, abreviatura de kilovoltio.
Otros, en cambio, son elementos formadores de compuestos: -rrea (gr. rheo, fluir) V. reo-., -
rrino (gr. rhis, rhinós, nariz) V. rino-., -rrizo (gr. rhiza, raíz) V. rizo-., etc.
Se puede afirmar que hay pocos diccionarios generales monolingües que ofrecen, como
el Gran Diccionario de Aquilino Sánchez (1985), la transcripción fonética de cada lema.
Más útil que la transcripción fonética es para el usuario la versión de diccionarios
bilingües en CD-ROM, que permite oír la pronunciación grabada en el disco compacto.
1. El nombre o sustantivo
hipogeusia ( hipo- + gr. geusis, gusto) f. Pérdida del sentido del gusto.
2. El verbo
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gerundios y participios también se indican en el artículo correspondiente.
Hay incluso verbos que pueden pertenecer a dos o más clases a la vez. Por ejemplo:
II) haber (l. -ere) tr. Ant. Poseer, tener (una cosa). 2 Coger, alcanzar: los malhechores
no fueron habidos; lee cuantos libros puede. 3 aux. Forma los tiempos compuestos
dando a la acción expresada por el verbo que va en participio un sentido perfectivo: he
ido; había desayunado. 4 […] 5 unipers. Acaecer, ocurrir: hubo una hecatombe; hubo
muchos muertos. […] 11 reflex. Portarse, proceder bien o mal: te has habido sin
decoro.
absolver […] ◊** CONJUG. (32) como mover, pp. Irreg. Absuelto.
3. El artículo
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lo explican:
I) la, forma del artículo el en género femenino y número singular: casa, mujer.
los. forma del artículo el en género masculino y número plural: hombres, árabes.
lo, forma del artículo en género neutro y número singular: bueno, futuro.
4. El adjetivo
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5. Los pronombres personales
Los pronombres personales aparecen abreviados con la forma pron. pers. Por
ejemplo:
yo ( l. ego) pron. pers. Forma de la 1ª persona para el sujeto en género masculino y
nosotros, -tras ( nos + otros) pron. pers. Forma de la primera persona para el
sujeto en género masculino y femenino y en número plural, precedido de preposición
se usa para los complementos.
mí ( l. mihi, a mí, para mí) pron. pers. Forma tónica de 1ª persona en género
masculino y femenino y en número singular que, siempre precedida de preposición,
se usa para todos los complementos: a ~ ; hacia ~ ; de ~ ; en ~ , etc.
Para más información sobre los pronombres personales, véase el cuadro sinóptico de
las páginas 1296 y 1297.
6. La conjunción
En algún caso, los lemas, cuando son homógrafos, se distinguen con número romanos:
Véase el cuadro de la conjunción y los nexos conjuntivos en la pág. 458 del Diccionario
Vox.
7. El adverbio
allí ( l. ad illic) adv. l. En aquel lugar precioso: ¿ves aquella polvareda que ~ se
levanta? […] 4 adv. t. Entonces, en tal ocasión: ~ fue el reír de la gente. V, allá.
Para el estudio del adverbio, véase el cuadro de las páginas 42 y 43 del Diccionario
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Vox.
8. La preposición
ESCOLARES
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frustrar (frus-trar) v. tr.
Con respecto al artículo, la diferencia radica en la abreviatura. En el Diccionario Everest
queda reflejada la abreviatura art. (artículo) más la clase de artículo: det. (determinado) e
indet. (indeterminado), mientras que en el Diccionario Vox la categoría gramatical aparece
plenamente escrita. (Véase el epígrafe del artículo).
La conjunción, el adverbio y la preposición aparecen de la misma manera, esto es,
de forma abreviada en ambos diccionarios. La única diferencia existente es que en el
Diccionario Vox las abreviaturas aparecen en letra negrita y en el Diccionario Everest no:
Dicc. Everest
En síntesis, sin temor a equívocos, se puede afirmar que este último diccionario -
Diccionario Espasa- es más primario o elemental.
7.1.5. LA ETIMOLOGÍA
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castellano e hispánico, 6 tomos, Madrid.
c. García de Diego, V. (1992), Diccionario etimológico español e hispano, Madrid.
Son muchos los lemas, con sus correspondientes etimologías, que aparecen en el
Diccionario vox. Por ejemplo:
7.1.6. LA ESPECIALIDAD
ANAT. Anatomía.
ARQ. Arquitectura.
ASTROL. Astrología
BOT. Botánica.
CETR. Cetrería.
COM. Comercio.
DER. Derecho.
DIAL. Dialéctica.
ECON. Economía.
ESGR. Esgrima.
FILOL. Filología.
GEOD. Geodesia.
GR. o GRAM. Gramática.
LING. Lingüística.
MEC. Mecánica.
NUMIS. Numismática.
ÓPT. Óptica.
POL. Política.
QUÍM. Química.
RET. Retórica.
TEOL. Teología.
TRIG. Trigonometría.
VETER. Veterinaria.
ZOOL. Zoología.
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Son varios los ejemplos de especialidades que se pueden citar:
Existen otras marcas que sirven para delimitar el uso de las unidades léxicas:
accos m. Perú. Hombre que se alquila para transportar la coca y otras mercancias.
maní (del taíno de Haití) m. Cacahuete. 2. Cuba y P. Rico fam. Dinero. -Pl.: manises.
palanquinero m. Murc. Obrero de las minas que mueve la palanca de las cribas donde se
lava el mineral.
Para evitar las palabras malsonantes (“tacos” y “palabrotas”), pero sin dejar de aludir a
ellas, se usan eufemismos que pueden ser parónimos y sinónimos de una voz tabuizada,
por ejemplo se usan en las distintas áreas hispanohablantes las voces ¡caramba!, ¡caracho!,
¡caracoles!, etc., para evitar la palabra carajo, mandar a la “m” para no decir mierda.
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c. Marcas cronológicas que especifican si la unidad léxica descrita es arcaica
(obsoleta), obsolescente, es decir, cayendo en desuso, especialmente entre los hablantes
de las generaciones jóvenes, o un neologismo (especialmente cuando aún no se sabe
todavía si este será integrado en el léxico de la lengua o sustituido por otra unidad léxica).
Por ejemplo: rúbrica (1) f. desus. Señal encarnado roja; seceso (l. -essu) m. desus. Deposición del
vientre. Otras veces aparecen las abreviaturas p. us. (poco usada) a fin de indicar que se
trata de una unidad léxica poco usada: zurumbático, -ca adj. p. us. Lelo, pasmado, aturdido.
Sin embargo, como ya se ha indicado antes, las variantes ortográficas son más
frecuentes en extranjerismos. Así, en la terminología del lema carné (fr. carnet) se indica la
procedencia de la variante ortográfica carnet. Asimismo, aparece carnet como lema
autónomo con remisión al lema carné. Un lema independiente como whisky remite a
güisqui, que es un lema derivado del anglicismo whisky. Por ej.: whisky (voz inglesa) m.
güisqui.
El lema “principal” de los ejemplos citados antes son: hierba, carné, silvicultura y
güisqui, y es aquí donde se da la explicación. Por ej.: güisqui (ing. Whisky) m. Licor alcohólico
obtenido por la destilación de cereales, especialmente avena y cebada, fermentados.
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7.1.8.2. SINÓNIMOS Y ANTÓNIMOS
Tanto los sinónimos como los antónimos se dan en el diccionario que
se está analizando. Ciertos autores niegan que existan sinónimos porque, aunque un
significado básico, la denotación, pueda corresponder a varias palabras, siempre hay un
matiz (nivel de estilo, extensión geográfica, etc.), una connotación que las distingue, por lo
cual, en muchos casos, no son sustituibles. Otros autores, por el contrario, afirman que sí
hay sinónimos.
En torno al fenómeno semántico de sinonimia y a su estudio escribe don Samuel Gili
Gaya:
“De acuerdo con la etimología del vocablo, suele decirse que dos o más palabras son
sinónimas cuando tienen el mismo significado. Según la creencia común, la relación que guardan entre
sí los términos sinónimos es de identidad en su contenido semántico”.
Sin embargo, en el lema pueril aparece un único sinónimo: infantil, sin ningún tipo de
explicación.
Lyons distingue, por un lado, dos tipos de sinonimia:
a. Sinonimia completa (y no total). Los lexemas coinciden en su significado
descriptivo, social y expresivo en una serie de contextos. Por ejemplo: terreno árido/ terreno
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seco frente a árbol seco (correcto) / árbol árido (imposible). No podemos decir, por tanto,
árbol árido. En el Diccionario Vox, tras la categoría gramatical de adjetivo aparecen dos
posibles sinónimos sin la abreviatura SIN., así pues, forman parte de la definición. Por ej.:
árido, -da (l. -du) adj. Seco, estéril […]. Por el contrario, en el lema seco, -ca sí aparece la
abreviatura SIN. Reseco, intensivo.
b. Sinonimia descriptiva (y total). Los lexemas coinciden solamente en su significado
descriptivo. Posibles ejemplos son amígdalas / anginas, papá / papi, etc. Designan la misma
realidad.
Por otro lado, distingue:
c. Sinonimia absoluta (completa y total). Los lexemas deben tener la misma
distribución y ser completamente sinónimos en todos los contextos. La distribución
sintáctica debe ser idéntica. Señala, Lyons, que esta posibilidad solo existe en el
vocabulario descriptivo y muy especializado, y los ejemplos son escasos. Por ej.: altimetría
/ hipsometría. Añade, recordando las leyes de Bréal, que la sinonimia absoluta solo existe
temporalmente, porque, o bien se impone un término sobre otro que progresivamente
desaparece, como por ejemplo coche o automóvil, o bien porque se produce un cambio de
sentido en ellos: aeródromo o aeropuerto (se referían a lo mismo en su origen). En tal caso,
según esta teoría, oculista y oftalmólogo no serían sinónimos, porque varía su significado
social, o en el caso de que fueran, solamente ocurriría temporalmente.
d. Sinonimia descriptiva (incompleta y no total). Que sea no total significa que
solamente es intercambiable en algunos contextos, pero no en todos. Así, padre y papá
serían sinónimos incompletos solo en su significado descriptivo, pero no totales puesto que
en algunos contextos no serían intercambiables. Por ej.: el padre de la iglesia, pero no el
papá de la iglesia. Esta sinonimia descriptiva sería total si fuese intercambiable en todos
los contextos, pero los ejemplos son pocos. Así, mear y orinar son sinónimos descriptivos
y totales, porque son intercambiables en todos los contextos.
A continuación, se van a citar algunos lemas o artículos en los que aparecen sinónimos
y antónimos:
rumiar (l. rumigare, de rumar, primer estómago de los rumiantes; doble etim. Remugar)
tr. Masticar por segunda vez los animales herbívoros, volviendo a la boca [el alimento] que
estuvo en una de las cavidades del estómago. 2. fig. y fam. Considerar despacio y pensar
con madurez [una cosa]. 3. fig. y fam. Rezongar, refunfuñar. […]
SIN. 1. Remugar. 2. v. Pensar
En el ejemplo anterior aparece un sinónimo distinto para cada una de las acepciones o
significados que le corresponde. Así pues, el primer sinónimo que va antepuesto con el
número cardinal 1 hace referencia a la primera acepción, mientras que el segundo se refiere
a la acepción 2, que además aparece con la remisión véase (v.).
ruin (de ruina) adj. Vil. 2. [pers.] De malas costumbres y procedimientos. […]
SIN. 1 y 2 v. Malo.
malo, -la (l. –lu) adj. […] 2 Propenso al mal, de mala vida; es un hombre – con, para , o
para con, su padre. SIN. 2 Serie intensiva: mal inclinado, enviciado, bajo, malo, bellaco,
ruin, depravado, corrompido.
Son muchos los artículos del diccionario que van seguidos de una lista de sinónimos
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distribuidos por acepciones, y en algunos casos con una explicación de matiz y de nivel de
uso. Por ejemplo:
frenar (l. –are) tr. Enfrenar. 2. Moderar o parar con el freno el movimiento: -- el tren.
3.fig. Reducir, moderar [la actividad]. SIN. Refrenar, reprimir, sofrenar, se aplicar al
caballo o en sentido fig., lo mismo que frenar: tratándose de máquinas, frenar, pero no los
demás.
diligente (l. diligens, der. de diligere, amar) adj. Cuidadoso, exacto y activo: --- en su
oficio. 2. Pronto, ligero en el obrar: --- en sus acciones; --- para cobrar. CONTR. Negligente.
escupitajo m. Escupidura.
SIN. v. Esputo.
escupitina f. Escupitinajo.
SIN. v. Esputo.
escupitinajo m. Escupidura.
SIN. v. Esputo.
frialdad f. Frío (sensación). 2. fig. Indiferencia, desafecto. 3. fig. y p. us. Dicho insulso
o inoportuno. 4. Necedad. 5. fig. y p. us. Flojedad o descuido en el obrar.
SIN. Frigidez, culto o lit.
fricación (l. –atione) f. Acción de fricar. 2. Efecto de fricar. SIN. Ús. Como tecn. en GRAM.:
~ de una consonante […].
Escasean las voces en las que puedan aparecer tanto sinónimos como antónimos.
Algunos lemas en los que aparecen sinónimos y antónimos son:
perfectivo, -va adj. Que da o puede dar perfección. 2 GRAM. [acción verbal] Que
necesita llegar a su término para que se realice; firmar, saltar, disparar.
SIN. 2. Desinente. CONTR. 2. Imperfectivo, permanente.
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pleamar (port. pera mar; adaptación del fr. pleine mer ) f. Fin de la marea creciente del
mar. 2 tiempo que esta dura.
SIN. plenamar. CONTR. Bajamar.
7.1.9.1. LA DEFINICIÓN
La definición es la información sobre el contenido de la palabra-
entrada. Es teóricamente una información sobre el contenido y nada más que el contenido
de la palabra definida. Si esta condición se cumple, la definición deberá ser capaz de ocupar
en un enunciado de habla el lugar del término definido sin que por ello se altere el sentido
del enunciado. La definición es la tarea más ardua que le toca al lexicógrafo.
Como herencia de la lingüística funcional, se ha establecido la prueba de la
conmutación para comprobar si la definición está bien enunciada. En principio, el definidor
debe poder sustituir al definido, pues, la definición no es sino un proceso sinonímico. Ahora
bien, hay casos en los que la sustitución no es posible, como en los elementos gramaticales,
ya que la definición es realizada en metalengua de signo y no de contenido; y tampoco es
posible efectuar el cambio cuando la definición tiene un doble metalenguaje. M. Seco (1979)
afirma que “la sustitución del definido por la perífrasis definitoria se muestra, en efecto,
perfectamente viable en segmentos del habla”.
Fundamentalmente existen dos tipos de definiciones: la “propia” y la “impropia”. Hay,
pues, dos clases de artículos en el diccionario: los de “definición propia” (definición en
metalengua de contenido), que corresponde a todos los nombres y a la inmensa mayoría
de los adjetivos, verbos y adverbios. La definición tiene que ser necesaria y suficiente. Los
artículos de “definición impropia” o “explicación” (definición en metalengua de signo)
corresponden a las interjecciones y a las palabras gramaticales: preposiciones,
conjunciones, pronombres, artículos y también ciertos adverbios, adjetivos y verbos. La
diferencia está en que en los artículos de “definición propia” rige el principio de
sustituibilidad.
II) ante (I.) prep. Expresa en general prioridad o preferencia. Significa: en presencia de,
delante de: se hincó de rodillas ~ el rey; una sílaba breve ~ otra larga; precediendo a corta
distancia: iba ~ ellos iluminándolos. […].
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II) e conj. copul. Se usa en vez de la y para evitar la repetición de un mismo sonido antes
de palabras que empiecen por i o hi: Juan e Ignacio; padre e hijo; pero no reemplaza a la y
en principio de interrogación o admiración: ¿Y Ignacio?; ¡y Isidro! Ni cuando la palabra
siguiente empieza por y o hi formando diptongo: Ocaña y Yepes; tigre y hiena.
Profesor, -ra (b. 1. –essore) m. f. persona que ejerce o enseña una ciencia o arte.
En muchos casos, más que una definición de las palabras a veces muy abstracta, el
usuario necesita una explicación semántico-pragmática de ellas, como nombres de plantas
y animales, incluso con elementos enciclopédicos. Las definiciones tienen a veces defectos
graves: la circularidad de la definición, las pistas pérfidas y las definiciones insuficientes.
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alcance de la definición. Esto sucede en el Diccionario Vox: petiso, -sa adj.
América Merid. Pequeño, bajo, rechoncho. 2 adj. –s- Amér. Merid. Caballo de poca
alzada. Por tanto, no se dice que este adjetivo se refiere únicamente a
personas o animales.
Si se trata de un verbo (que, para figurar como lema o entrada, es reducido a la forma
no personal de infinitivo), la definición estará constituida por otro verbo en infinitivo, seguido
o no de complementos:
barbechar tr. Arar [la tierra] para la siembra. Arar [la tierra] para que se meteorice
y descanse.
raciocinar (l. ratiocinari) intr. Usar de la razón sacando argumentos de una
premisa o principio para conocer y juzgar una cosa.
Un adverbio será definido por medio de otro adverbio, o de un sintagma con forma
propia de complemento adverbial:
La línea fronteriza entre artículos “de definición” y artículos “de explicación” es irregular
en un amplio sector de la lexicografía. Veamos algunas definiciones de, por ejemplo,
adjetivos en el Diccionario académico, recogidas todas en el espacio de cuatro columnas
(págs. 882-883):
MISAL: “Aplícase al libro en que se contiene el orden y modo de celebrar la misa”.
MISERO: “Aplícase a la persona que gusta oír muchas misas”; Dícese del sacerdote
que no tiene más obvención que el estipendio de la misa”.
Estas definiciones, encabezadas por “dícese de” o “aplícase a”, quedan fuera de la “ley
de la sinonimia”. Ni siquiera existe la identidad de categoría entre el definiente y el definido.
Por ejemplo, la sustitución del lema misericordioso por su definición académica en un
texto como Es misericordioso con los que sufren, daría este otro texto en modo alguno
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equivalente:* Es dícese del que se conduce y lastima con los trabajos ajenos, con los que
sufren. La explicación está en que estas definiciones no son “propias”, sino “impropias”,
esto es, no son definiciones en metalengua de contenido, sino en metalengua de signo.
misal (b. l. missale) adj. –s. Libro litúrgico que contiene las ceremonias, oraciones
y lecturas para la celebración de la misa.
misericordioso, -sa adj. –s. Que tiene misericordia […].
misero, -ra adj. fam. Que gusta de oír muchas misas. Devoto, beato (muy devoto).
lagarto (l. v. lacartu; var. dial. del l. lacertu) m. Reptil saurio de cuerpo largo y casi
cilíndrico, cola larga y cónica, cuatro patas cortas y piel cubierta de laminillas
escamosas; útil a la agricultura por los insectos que devora (gén. Lacerta; esp.
Lacerta ocellata).
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germ.) tr. Dar a uno graciosamente [una cosa] en muestra de afecto, consideración,
etc.
extender (l. –ere) tr. Hacer que [una cosa], aumentando su superficie, ocupe más
espacio que antes…
Los casos en que la mención del entorno se hace necesaria en una definición no son
escasos, y además no se limitan a los verbos. Puede aparecer el contorno del adjetivo: el
nombre al que se adjunta un adjetivo es contorno de ese adjetivo. Por ejemplo:
rubial m. tierra donde se cría la rubia. –2 [tierra, planta] que tira al color rubio.
ruin (de ruina) adj. Vil. 2[pers.] De malas costumbres y procedimientos.
3 [costumbre, procedimiento] Malo. 4 [Animal] De malas mañas
Sería conveniente que los lemas que pertenecen a las categorías gramaticales
nombres –comunes- y verbos apareciesen con su correspondiente categoría
gramatical abreviada como el resto de las categorías gramaticales. No es
comprensible por qué la categoría gramatical artículo se escribe de forma completa
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y no abreviada, e incluso, cómo los elementos que lo explican siguen una secuencia
distinta. Una posible medra sería usar la abreviatura del artículo (art.), seguido de su
correspondiente clase: determinado (det.) o indeterminado (indet.). Es más, en la
categoría gramatical de verbo, en la propia entrada o lema, se podría indicar si es
regular o irregular.
En la evaluación del contenido, los dos criterios fundamentales que hay que
aplicar son como siguen:
d. La selección de las entradas. Se trata de un diccionario de más de 100.000
entradas, por tanto, no suele omitir unidades léxicas de uso frecuente. Se trata,
en suma, de un diccionario muy completo.
e. La explicación de las unidades léxicas. El diccionario monolingüe que se ha
analizado da definiciones en metalengua de signo y en metalengua de
contenido. Tanto las definiciones “propias” (en metalengua de contenido)
como las definiciones “impropias” (en metalengua de signo) son correctas y
completas. Además, suelen evitarse las definiciones que crean un círculo
vicioso remitiendo de un lema a otro sin dar la definición “propia” o “impropia”
en ninguna de la dos entradas o lemas correspondientes. Así pues, se puede
afirmar que no se dan pistas perdidas.
Suelen distinguirse claramente las diferentes acepciones de un lema mediante una
subdivisión acertada de la entrada con números arábigos.
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9. CONCLUSIONES
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10. BIBLIOGRAFÍA
Haensch, Günther (1997): Los diccionarios del español en el umbral del siglo XXI,
Salamanca, Ediciones Universidad de Salamanca.
López Morales, Humberto (1983): Introducción a la lingüística actual, Madrid,
Playor.
Martínez de Sousa, José (1995): Diccionario de lexicografía práctica, Barcelona,
VOX, Biblograf S.A.
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