Guia Didactica Orfebreria
Guia Didactica Orfebreria
Guia Didactica Orfebreria
Página
I. Introducción. 5
II. Objetivos. 6
Del documento.
Del curso o taller.
III. Políticas. 7
V. Contenido temático. 12
1. Carta descriptiva. 13
3. Proceso de evaluación. 60
VII. Bibliografía. 66
VIII. Anexos 67
El hombre desde tiempos remotos, ha buscado darle un significado a sus actos y a la vida misma, la relación con su entorno
se ha reflejado a través del arte y la religión, que se plasma en cada rito y en cada ceremonia, es así, que la producción de
artículos hoy llamadas artesanías o arte popular cobra relevancia para entender y visualizar la integralidad entre los
elementos sociales, naturales y simbólicos que conforman la cultura de un grupo o sociedad en particular.
Aunada a esta función cotidiana que los artículos tienen al interior de la comunidad, la producción artesanal como resultado
de la creatividad individual vincula a la vez el pensamiento y la salud ocupacional, favoreciendo asimismo la socialización, la
autoestima y la adopción de estilos de vida favorables en quien la practica.
Con este panorama, las actividades de artesanías en el IMSS forman parte integral de los programas de Prestaciones
Sociales que representan hoy en día, por medio de sus acciones, una opción importante para que la población mexicana
acceda a diversos programas integrales orientados a la promoción de la salud, la recreación y el mejoramiento del nivel y
calidad de vida. Como una de sus unidades operativas se encuentran los Centros de Artesanías y Artes Plásticas, cuya
presencia en el Instituto Mexicano del Seguro Social data de 1964, año en que se fundan los talleres de artes plásticas y
artesanías en la Unidad Habitacional Independencia. Posterior a este centro, se crea uno más ubicado en el complejo de la
Unidad de Servicios Sociales Cuauhtémoc. Finalmente, en el año 1976 se funda Artesanías Hidalgo, que más tarde se
convierte en el Centro de Artesanías Morelos.
Estos tres centros ubicados en el Valle de México tienen como objetivos: fomentar y preservar la actividad artesanal, así
como el promover la utilización del tiempo libre a través de la creación de piezas artesanales, utilizando los materiales que
las diversas regiones proporcionan, estimulando la práctica de actividades que propicien actitudes creadoras como un
medio para procurar la salud mental de los participantes , mejorar el ingreso económico en el hogar, y conservar y rescatar
las artes populares; en estos se aglutinan diversas actividades tales como: cursos, conferencias, exposiciones y concursos
que permiten la creación y preservación de nuestra vasta artesanía, además de propiciar en los participantes el desarrollo
de la creatividad y las potencialidades individuales.
La estructura del documento integra en términos generales los siguientes apartados: objetivos, políticas, criterios generales
de aplicación, carta descriptiva, un breve desarrollo de los contenidos temáticos y esquema de evaluación.
II. OBJETIVOS.
− Del Documento.
Proporcionar a los instructores responsables de la impartición de la disciplina artesanal en orfebrería, los elementos de
carácter técnico y metodológico que deberán considerarse durante el desarrollo teórico y práctico del curso o taller.
Transmitir a los participantes al curso o taller, los conocimientos, técnicas y habilidades requeridas para el manejo de
materiales, herramientas y equipos que se utilizan en la creación de piezas artesanales en la especialidad de orfebrería.
− La presente guía será de aplicación general en las unidades operativas de Prestaciones Sociales Institucionales donde
se imparten los cursos o talleres de Artesanías en Orfebrería.
− La programación del curso o taller se realizará con apego al documento: “Criterios Técnicos para la Programación Anual
de Actividades” que emite la Coordinación de Prestaciones Sociales.
− El Director del Centro de Artesanías y Artes Plásticas deberá proporcionar un ejemplar impreso de la presente guía al
instructor responsable del curso o taller artesanal en Orfebrería y vigilará su aplicación.
− El Instructor de Artesanías deberá complementar el curso o taller con otras actividades afines tales como: exposiciones,
conferencias y concursos relacionados con el trabajo artesanal al interior del centro y con instituciones dedicadas a la
promoción de las artesanías.
− El Instructor de Artesanías promoverá entre los usuarios del curso o taller el rescate y revitalización de nuestras
artesanías tradicionales mexicanas como parte del patrimonio pluricultural del país.
− Las sugerencias o modificaciones para mejorar la presente guía, se deberán plantear por el instructor de la especialidad,
a través de la Jefatura de Servicios de Prestaciones Económicas y Sociales, instancia receptora de las sugerencias del
entorno operativo, quien a su vez las hará llegar a la Coordinación de Prestaciones Sociales.
− El Departamento de Prestaciones Sociales verificará la implantación de esta guía en los Centros de Artesanías y Artes
Plásticas.
− De acuerdo con la guía, el instructor podrá atender durante el semestre mínimo a dos grupos, dos o tres veces por
semana de acuerdo a las características de la especialidad.
− El instructor deberá promover que los participantes al curso o taller reciban la información y participen en las actividades
complementarias (pláticas, campañas y talleres), así como en exposiciones y conferencias que organice la unidad
operativa.
− El instructor solicitará a los participantes las herramientas y materiales del uso personal requeridos durante el desarrollo
del curso o taller.
− El instructor deberá aplicar una evaluación inicial y otra final de forma semestral. En el apartado V 3. Proceso de
evaluación se sugiere el cuestionario; sin embargo, el instructor podrá formular sus propios reactivos y forma de
evaluación.
− El desarrollo del curso o taller de artesanías en Orfebrería que se presenta en esta guía, tendrá una duración de un
semestre de 180 horas, con sesiones de 2.5 a 3.5 horas, dos o tres veces por semana. El instructor con base en el
avance del grupo, podrá ajustar los tiempos considerados para cada módulo temático.
15 horas
1. Repujado en forma manual.
15 horas
2. Repujado calado.
15 horas
3. Repujado calado con incrustaciones en piedra.
Módulo 6: Elaboración de piezas de joyería en diferentes metales. 39 horas distribuidas para el módulo.
- Materiales: láminas
y alambres de cobre,
latón, alpaca y plata.
2. Herramienta Identificar y practicar Demostrativa. - Herramientas – Explica y – Practica la forma Observa el correcto 2
manual. el uso correcto de manuales: pinzas ejemplifica el uso correcta de utilizar manejo de herramientas
las herramientas para joyero: de de las las herramientas y materiales.
manuales. rosario, punta plana, herramientas. requeridas para la
alicate y de carga; elaboración de
espirolera, arco de piezas en Orfebrería.
joyero, seguetas,
limas de joyero,
musas y bastardas,
lijas de agua, piedra
de carborundum,
accesorios diversos
para motor de baja
velocidad, de
desbaste, corte y
pulido; tijeras: corte
recto para lámina;
brocas para metal,
alambre de acero
inoxidable para la
elaboración de
herramientas como
espátulas y grifas.
– Limpia y monta el
trabajo.
3. Repujado Elaborar una pieza a Práctica - Utilizar los – Indica de manera – Elabora diseño y Asesora y verifica el 15
calado con partir de las técnicas demostrativa. materiales antes práctica el elige la lámina que correcto desarrollo de
incrustaciones de repujado calado mencionados. procedimiento para se va a trabajar. los trabajos.
en piedra. con incrustación de montar o incrustar
piedras. las piedras o – Calca sobre la
cuentas lámina.
seleccionadas.
– Repuja, rellena y
coloca las piedras
que se van a
incrustar.
– Limpia y pega en la
superficie deseada.
2. Grabado a Identificar y aplicar la Demostrativa. Utilizar los − Explica el − Realiza los pasos Asesora y verifica que la 15
línea. técnica de grabado a materiales antes procedimiento para anteriores. pieza se haya realizado
línea en la mencionados. lograr el grabado. correctamente.
elaboración de una
pieza.
1. Técnica del Practicar de manera Demostrativa. - Papel bond, − Explica como se − Lleva a cabo la tarea Verifica la correcta 15
cincelado. correcta en una - Lápiz, - Goma, debe llevar a cabo encomendada por el ejecución de la práctica.
pieza de lámina la - Pegamento esta técnica paso a instructor.
técnica de cincelado. blanco, - Lámina de paso de la figura
cobre, - Latón o diseñada. − Elabora diseño.
alpaca de diferentes
calibres, - Cinceles − Prepara el lacre y el
de diferentes ácido.
formas,
- Martillo de metal, − Calca el dibujo sobre
- Lacre, - Acido la lámina.
sulfúrico, - Lijas,
pastas y ruedas de − Aplica la técnica de
manta para pulir. cincelado.
1. Fundición de Preparar el material Demostrativa - Granalla, - Latón, − Indica la forma de − Prepara los Asesora y verifica la 8
metales y para diferentes - Bórax, - Pinzas cómo preparar el materiales que se le correcta aplicación de la
aleación. aleaciones de cargar, - Rielera material para las indican para realizar técnica en las
o lingotera, - Lima diferentes este proceso. aleaciones realizadas.
bastarda de media aleaciones de
caña, - Soplete, metales − Pesa los metales
- Laminadora de que se van a fundir.
rodillos, - Hilera de
palacios, - Ácido − Funde y verter en la
sulfúrico, - Crisol. rielera.
− Pasa por el
laminador de rodillos
y la hilera de
palacios, para hacer
hilo de alambre.
2. Preparación Aplicar las técnicas Demostrativa. - Utilizar los − Indica como se − Identifica, prepara y Asesora y verifica el 2
de soldadura de soldadura en materiales antes realiza paso por pesa los materiales a correcto acabado de la
en plata. plata que se utilizan mencionados. paso esta aleación. utilizar y lleva a cabo soldadura.
en la joyería. los pasos anteriores.
− Funde y verter en la
rielera.
ACTIVIDADES
3. Elaboración Aplicar técnicas para Demostrativa. - Granalla, − Indica como − Identifica y obtiene Asesora y verifica la 4
de lámina y la preparación de la - Cobre realizar este tipo los porcentajes de correcta aplicación de
alambre de aleación de alambre electrolítico, de aleación y el los materiales a esta técnica.
plata “925”. y plata. - Bórax Crisol, proceso de fundir.
- Pinzas de cargar, elaboración del
- Cañonera, alambre y la − Coloca en el crisol y
- Rielera o lingotera, lámina. lo funde a la
- Laminadora de temperatura
rodillos, manual o indicada.
eléctrica, - Hilera
de palacios, - − Vacía en la rielera.
Lima bastarda.
− Pasa por el
laminador de rodillos
para procesar su
material al calibre
deseado.
4. Ejercicio de Aplicar técnicas de Demostrativa. - Cobre, latón, − Indica la forma de − Identifica el material Asesora y verifica la 5
soldadura en soldadura en alpaca y plata, cómo llevar a cabo que se va a utilizar correcta elaboración de
diferentes diferentes metales - soldadura de esa técnica, en esta técnica y las piezas.
metales: para la elaboración plata, - Pinzas de utilizando los realiza ejercicios
cobre, latón, de piezas sencillas. cargar, - Pinzas de materiales elegidos básicos que le
alpaca y plata. punta plana, por el participante. indique el instructor.
- Pinzas de rosario,
- Tijeras de joyero,
- Pinza de corte,
- Pinza de avión o
tercera mano,
- Arco y seguetas,
- muela o entenalla,
5. Elaboración Elaborar pendientes Demostrativa. - Lámina de plata − Ejemplifica y da las − Elabora el diseño de Verifica la correcta 4
de piezas de de aro en plata calibre 23, instrucciones para la pieza. elaboración de las
joyería: hueca. - Alambre de plata la realización de piezas.
pendientes, cal. 20, - soldadura estas piezas. − Corta la lámina de
brazaletes, para plata, - Hilera las medidas
anillos y de palacios, - Lijas, adecuadas.
cadenas. - Limas, - Mantas
− Recose el material
para pulir.
para darle forma al
aro.
− Corta, lima y lija la
pieza.
− Brazalete. Elaborar brazaletes Demostrativa - Lámina de plata − Ejemplifica las − Realiza el diseño de Verifica la correcta 4
con lámina de plata. calibre 16-18, - diferentes técnicas la pieza. Prepara el elaboración de la pieza.
Limas, - Lijas, que se pueden material, selecciona
- Pastas y ruedas utilizar. la técnica. (calado,
de manta para pulir. grabado o
cincelado).
− Anillos. Elaborar anillos con Demostrativa - Alambre de plata − Emite las − Realiza el diseño del Verifica la adecuada 4
lámina de plata. de media caña, indicaciones anillo. elaboración de la pieza y
- soldadura para correctas para la el terminado de la
plata, - Anillero y realización de esta − Prepara el material misma
lastra, - Limas, pieza. que se le indica.
- Lijas, - Pastas y
ruedas de manta − Corta, redondea y
para pulir, suelda el anillo.
- Martillo de metal y
goma, - Soplete − Limpia, lima, lija y
para soldar. pule el anillo
− Pendientes Elaborar pendientes Demostrativa - Lámina de plata − Emite las − Realiza diseño. Verifica la adecuada 4
calados. con lámina de plata. calibre 18-20. indicaciones elaboración de la pieza y
correctas para la − Prepara el material el terminado de la
realización de esta solicitado. misma.
pieza.
− Cadena. Elaborar cadenas Demostrativa. - Alambre de plata, − Emite las − Elabora el diseño. Verifica la correcta 4
sencillas de - Tramos de tubo indicaciones elaboración de la pieza.
eslabones de tubo y diferentes tamaños, correctas para la − Elige el calibre de
alambre de plata. - soldadura para realización de esta material a utilizar.
plata, - Fundente, pieza.
- Acido para − Corta tramos de tubo
decapar (sulfúrico), de 1.5 cm. de largo.
- Limas, - Lijas,
- Pastas y ruedas − Enhebra los tubos
de manta para pulir. con el alambre, para
unir uno con otro.
Conclusiones Realizar una síntesis Expositiva y - Cuestionario de − Solicita − Comenta acerca del Evaluación final y
y evaluación y comentarios aplicación del evaluación final. comentarios a los desarrollo del curso exposición de las piezas
final. generales del curso cuestionario de participantes y requisita en cerámica producidas
y requisita el evaluación acerca del curso y cuestionario de por los participantes al
cuestionario de final. aplica cuestionario evaluación. curso.
evaluación final. de evaluación final.
El conocimiento del equipo y la herramienta que ha de utilizarse en el taller de Orfebrería, es indispensable para lograr
óptimos resultados, sobre todo porque es un equipo de alto riesgo, considerando que habremos de trabajar con el equipo
que consiste en:
– Horno eléctrico: cuya temperatura oscilará entre los 750° C y los 900° C en tiempos cortos por lo que es requisito para
cualquier orfebre conocer tanto el funcionamiento del horno, así como las reglas de seguridad que habrán que guardarse
estrictamente, ya que cada participante tendrá que hornear sus propias piezas.
– Estibas, horquillas y tenazas: estos son utensilios hechos con acero inoxidable, con diversas formas para estibar las
piezas que han de hornearse, existen desde rejillas, hasta formas muy sofisticadas para cargar adecuadamente cada
pieza; las horquillas y tenazas son para sostener las piezas mientras las introducimos al horno, el tamaño de estos
instrumentos dependerá del tamaño del horno. Para hornear se debe usar adecuadamente el equipo de seguridad que
consiste en guantes de asbesto, careta y de ser necesario, peto de asbesto.
– Laminadora: esta herramienta nos permite reducir el calibre de los metales, ya sean en lámina o en alambre, resulta
indispensable para trabajar metales.
– Cizallas: forman parte del equipo fijo que nos auxilia en el corte de láminas, es importante poder contar con una cizalla
de corte recto y una de corte curvo, el uso de estas herramientas requiere de concentración y cuidado.
– Soplete de alta presión: es preferible usar un soplete de gas en un espacio específico para disminuir los riesgos que
pueda representar el uso directo del fuego, habrá que disponer de un espacio adecuado, con buena ventilación, así
– Motor fijo: es recomendable que de un lado cuente con un disco de piedra de carborundum y del otro lado un manta de
popelina o algodón, ya que estos son los aditamentos que se utilizan con más frecuencia para desbastar y para pulir
respectivamente. Este es otro aparato con el que deben seguirse cuidadosamente las reglas de seguridad. Se
recomienda este motor con una potencia de ¾ c.f.
– Motor de baja velocidad; existen varias marcas de esta útil herramienta de uso manual, se vende comercialmente
acompañada de varios accesorios, sirve como herramienta de desbaste, para grabar, para perforar, acanalar, cortar, lijar
y pulir, y es sencilla de usarse sobre todo para los detalles. Es importante seguir las indicaciones del instructivo, ya que
cada marca cuenta con especificaciones propias.
– Taladro de banco: esta herramienta es muy útil para barrenar: sin embargo, existen múltiples accesorios para pulir,
desbastar y lijar, en superficies con volumen y planas.
– Tornillo de banco: este instrumento es útil para sostener las piezas, mientras se trabaja en ellas; por ejemplo, nos
podemos auxiliar con él cuando haya que limar y la pieza sea demasiado grande para sostenerla y trabajarla
simultáneamente.
– Herramienta de golpe: yunque, martillos de diversos pesos y formas, de hojalatero y de mecánico, martillos de goma y
de madera: Con este conjunto de herramientas se podrán forjar piezas, darles texturas, formas y enderezar el metal en
caso de ser necesario.
– Pinza de rosario: es una pinza de punta redonda que funciona para dar formas curvas.
– Pinzas de punta plana: pinza para enderezar alambres y ayudarnos en formas planas.
– Pinzas de carga: se utilizan para tomar con delicadeza los alambres o piezas pequeñas.
– Limas de joyero: se utilizan para dar acabados, pulir y retirar rebabas de metal.
– Lijas de agua: son hojas de papel con esmeril para dar acabados lisos al metal.
– Accesorios para moto tool: estos aparatos de baja velocidad cuentan con su instructivo propio y recomendaciones de
uso, es una herramienta multiusos y cada uso requiere de un aditamento específico.
– Coladeras o cernidores de malla de 80 mesh: son coladores de preferencia metálicos con una malla cerrada para
aplicar el esmalte en seco.
– Espátulas: herramientas pequeñas manufacturadas manualmente, para la aplicación del esmalte en húmedo.
Equipo de seguridad.
– El equipo de seguridad para el uso del horno consiste en: guantes de asbesto y careta.
– El equipo para el uso de herramientas como piedras y mantas de pulir consiste en: gogles y guantes de carnaza.
– El equipo para el manejo de ácidos consiste en: gogles, guantes de hule y pinzas de hule.
De cualquier manera, es importante tomar en cuenta que el vestido es muy importante por las temperaturas y los ácidos que
se manejan en el taller, se recomienda ropa resistente de algodón, calzado cómodo seguro y de piso, así como el uso de un
delantal largo.
Con toda seguridad el arte de la joyería es un de los mas antiguos que existen, precisamente porque el afán de
embellecimiento personal es también uno de los primeros afanes del hombre. Junto a la joyería fue creada la joya con
metales nobles y piedras preciosas.
Por tratarse de materiales nobles, requieren para su empleo en labores artesanales conocimientos técnicos sin los cuales la
creación se vería imposibilitada. Sin embargo, estos conocimientos no son difíciles de adquirir, un poco de atención y algo
de práctica serán suficientes.
Joyería y orfebrería.
El hombre se ha sentido siempre atraído por las piedras preciosas y los ricos y brillantes metales, los cuales ha utilizado
para su propio adorno o para hacer más lujoso su entorno. De la transformación de estos materiales suntuosos en objetos
de uso y disfrute se encargan dos artes: la joyería y la orfebrería.
Mientras la joyería se dedica a la creación de joyas y otros objetos destinados al adorno personal -mediante el empleo de
metales y piedras preciosas-, la orfebrería, que trabaja los metales, principalmente oro y plata, abarca un campo de acción
mas amplio: objetos de mesa, de culto y ornamentales en general. En cualquier caso, ambas artes mantuvieron estrechos
lazos durante su desarrollo.
Evolución histórica.
Desde la edad de los metales, en la que se hicieron los primeros adornos con metales preciosos, la joyería y la orfebrería
experimentaron diversas influencias y desarrollaron técnicas muy variadas.
Antigüedad.
Fueron las antiguas civilizaciones mesopotámicas las que exploraron estas técnicas, algunas excavaciones realizadas en
tumbas reales de Ur en Sumer, sacaron a la luz ajuares decorados con lapislázuli y piedras preciosas. Pero sería en Egipto,
donde, a partir del tercer milenio antes de la era cristiana, estas alcanzaron un gran lujo. Allí se empleaba la incrustación de
pastas vítreas, o piedras preciosas, en oro y otros metales. La joyería egipcia estaba destinada a enfatizar el esplendor de
los faraones, como una muestra se conserva el ajuar de Tutankamon.
Las culturas prehelénicas también trabajaron el oro y la plata con gran maestría, como lo atestiguan los llamados tesoros de
Mecenas y Príamo, compuestos por diademas, máscaras y vasos de oro. Los griegos contaron con grandes orfebres como
Teodoro de Samos y algunos escultores entre ellos Fidias, quienes combinaron el oro con el marfil para realizar sus
estatuas; aunque seguramente también crearon ricas joyas, estas no se han conservado. Los romanos, que en un principio
declararon su austeridad y renegaron del lujo, terminaron prestando una gran atención a las joyas y a los objetos de
orfebrería.
Fuera del ámbito occidental, otras civilizaciones se interesaron por los adornos fastuosos: en la India se recibieron
influencias persas y helénicas mientras que en China se elaboraron brillantes joyas con formas de insectos y flores. A su
vez, las culturas precolombinas de América trabajaron con originalidad el oro y la plata.
Edad Media.
Los pueblos germánicos hicieron hincapié en las artes menores y ejecutaron joyas esquemáticas, con espirales y motivos
zigzagueantes. En España, la fusión de estas tradiciones con las mediterráneas, dio lugar a las extraordinarias realizaciones
de los visigodos, cuyo máximo ejemplo seria el tesoro de Guarrazar. En el lujoso imperio bizantino proliferaron las joyas y
ricos objetos como cofres y relicarios. Era típico el empleo del esmalte, según puede apreciarse en el retablo mayor o Pala
d`oro de la iglesia de San Marcos, en Venecia.
Con la expansión del arte románico en Europa, el esmalte adquirió gran calidad y sirvió para crear todo tipo de objetos de
culto (altares, relicarios, cálices…); particular fama alcanzaron las obras ejecutadas en la localidad francesa de Limoges. A
partir del siglo XIII, la creciente demanda de objetos de joyería y orfebrería por parte de la nobleza de la floreciente
burguesía mercantil dio lugar a un notable desarrollo en ambas artes.
El renacimiento conoció un enorme auge de la orfebrería laica, plasmada en piezas ornamentales de todo tipo y servicios de
mesa. Artistas tan destacados como el alemán Alberto Durero y el italiano Benvenuto Cellini, autor de un tratado sobre
orfebrería, fueron grandes maestros en estas técnicas artesanales.
En España se realizaron a partir de siglo XVI -gracias a la llegada de oro y piedras preciosas de América-, joyas y objetos
eucarísticos de singular riqueza como la excepcional custodia de la catedral de Toledo.
En el arte barroco las formas se tornaron más abigarradas y complejas, un ejemplo de este lo fueron las joyerías española y
portuguesa, con motivos decorativos de influencia colonial. Posteriormente, durante el siglo XVIII, surgió el estilo rococó
caracterizado por el lujo, que alcanzo su esplendor en Francia. De este país, se difundió entre las clases altas europeas el
uso de los relojes, bomboneras, elementos de tocador y diamantes.
En contraste con el estilo rococó, durante el neoclasicismo se impuso una joyería austera. Hacia mediados del siglo XIX
aparecieron formas más pintorescas e influencias históricas en distintos lugares: reminiscencias clásicas en Francia,
etruscas en Italia y bizantinas en Rusia.
A fines del siglo XIX, con el surgimiento del modernismo, y el empleo de las formas curvas y motivos orgánicos, produjo
joyas de refinada belleza, entre las que deben destacarse aquellas del francés René Lalique.
El desarrollo de las técnicas mecánicas trajo consigo notables cambios en estas artes, sobre todo en la orfebrería. En el
Reino Unido, el movimiento Arts and Crafts logro recuperar el concepto de la joya como labor artesanal y, a fines de la
centuria, sobresalieron las piezas de Peter Carl Faberge, artista que trabajo sobre todo en Rusia.
Ya en el siglo XX, la carestía de las piedras y los metales propició que se impulsaran técnicas de imitación mediante
procedimientos industriales de materiales sintéticos de menor costo. En el aspecto estético, se procuró una mayor
simplicidad de formas y se pudo contar con destacada labor de artistas como el español Salvador Dalí.
El trabajo del metal es tan antiguo como la civilización. El oro y la plata fueron empleados, al igual que el cobre, por las
civilizaciones Escita e Inca, por los bizantinos y, más tarde, en la Francia merovingia. El uso de estos metales estaba
fundamentalmente reservado a la orfebrería, mientras que el estaño, tan apreciado hoy en día, casi no era empleado más
que para la vajilla corriente. La vajilla de oro y plata, cuya posesión era un privilegio, presentaba independientemente de su
esplendor la ventaja de constituir una reserva monetaria que se podía fundir según las necesidades, en efecto, se fundió
tanto que numerosísimas obras maestras desaparecieron así, y los únicos vestigios que quedan de estos fabulosos tesoros
son sus descripciones, sobre las cuales se puede soñar a placer.
En aquellos tiempos el oro y la plata, que son metales blandos se fundían con cobre y se vertían en moldes, las formas eran
luego martilladas antes de ser adornadas por grabado, cincelado y repujado.
En el transcurso de la Alta Edad Media, Francia fue el centro de la orfebrería. En el siglo X el taller monástico de Conques
se hallaba en pleno desarrollo, pocas piezas han sobrevivido al paso de los siglos, pero las que quedan permiten juzgar el
valor de los orfebres. La estatua-relicario de Sainte Foye, talladas en madera, recubierta de placas de oro repujado e
incrustada de piedras preciosas, es el testimonio más brillante. Citemos también la lámpara de Begon en Coques, la silla de
Mozart en el Puy-de-Dome, el relicario de San Vicente de oro y plata repujados con esmaltes tabicados y piedras preciosas.
En los siglos XI y XII y especialmente bajo el impulso de Suger, abad de Saint-Denis (1135), numerosos altares, relicarios y
retablos, después desaparecidos, se inspiraron en la arquitectura. Frecuentemente eran de cobre repujado y esmaltado. La
silla de Saint Turín (siglo XIII) es una de las raras obras maestras del arte gótico que aun se puede admirar en Evreux. Su
composición y decoración están estrechamente relacionadas con la arquitectura de su tiempo.
El siglo XIV fue el siglo de oro de la orfebrería, pero solo podemos referirnos a los inventarios de Carlos V y de sus
hermanos; en efecto de este magnifico tesoro, compuesto por jarros, fuentes, copas y vajillas, no queda mas que la Virgen
de Jeans d`Evreux ( en el Museo del Louvre) y el cetro de Carlos V.
En la época del Renacimiento, en el siglo XVI, Francia se hallaba en guerra con numerosos países europeos. La orfebrería
fue fundida, y también en este caso, solo existen comentarios con las descripciones hechas por los orfebres, entre los
cuales se contaban emigrados italianos. Por entonces Italia imponía su supremacía en este campo y las numerosas
demandas religiosas veían rivalizar en talento a orfebres prestigiosos, como Benvenuto Cellini, y a sus piezas competir con
riqueza.
En Alemania, al contrario de lo que sucedía en Italia, la orfebrería era fundamentalmente profana y utilitaria. Las jarras de
cerveza con tapadera de metal repujado, con decoración inspirada en piñas, estuvieron muy de moda.
En Inglaterra por el contrario no hubo nunca una orfebrería verdaderamente original y el repujado del metal, cuyos motivos
se inspiraban en general en el extranjero, no tuvo en ella más que una moda pasajera.
En los siglos XVII y XVIII el dominio de Francia en el campo de la orfebrería fue de nuevo indiscutible y el uso de la platería
alcanzó todas las capas de la sociedad. La corte de Versalles daba el tono y la orfebrería invadía los muebles y decoraba
los objetos utilitarios; pero los motivos decorativos de hojas, flores y animales mostraban la influencia de Holanda, que
persistió hasta la aparición de la hoja de acanto francesa, la cual desplazó los motivos naturalistas, El comercio con Oriente
motivó, por otra parte, una moda de lo chinesco que se desarrolló parcialmente a un estilo mas sobrio.
Todo esto desapareció con la Revolución, pero volvió a renacer bajo el Directorio y el Imperio. Como en las épocas góticas
los temas se inspiraron en la arquitectura.
El siglo XIX vio el renacimiento de la era industrial; el repujado se prestaba a la industrialización y las manufacturas de
Sheffield en Inglaterra pusieron a punto la embutición a máquina.
Las obras de las que hemos hecho mención, han sido realizadas por los especialistas cuyo arte y gusto precisaban largos
años de práctica y de ensayos, a la vez de unas condiciones económicas que permitían ver la luz a estas preciosas obras.
Por otra parte el herramental empleado por los orfebres era mucho más importante que en nuestra época y de este no se
encuentran más que algunos restos en casas de los descendientes de estas generaciones de artistas.
El repujado del metal, tal como hoy se concibe, sigue siendo del dominio de los orfebres. Pero nuestro propósito es iniciar
un amplio público en las técnicas y posibilidades del repujado del metal y las técnicas afines que de este se derivan. Los
metales que utilizaremos no son preciosos en cuanto a su valor intrínseco, pero poseen una belleza propia que podemos
poner en relieve, y el ejecutante podrá permitirse no solamente interpretar los modelos que ofrece la historia del arte, sino
también crear obras personales de auténtico valor artístico.
Procedimiento:
Antes de comenzar el trabajo, es necesario plasmar sobre una hoja de papel las dimensiones de la pieza que se va a
recubrir.
Se comienza por la línea de la plantilla agregando un centímetro o más por todos los extremos, de manera que se pueda
recubrir todos los bordes de la pieza elegida.
Una vez que se ha fijado el plano y cortado el metal a las dimensiones de la pieza, se elige la decoración.
Nuestro siguiente paso es calcar sobre el metal, terminado esto, se retira el papel.
Se coloca el metal con el motivo calcado por el reverso sobre la superficie suave. Partiendo del centro del dibujo se
efectúa un movimiento circular hacia los bordes con la extremidad redondeada de la herramienta, aplicando una presión
constante sobre la lámina.
En cuanto se empieza a sentir el volumen en hueco, se dará vuelta a la lámina para comprobar el relieve obtenido,
aprovechando este momento para delinear los bordes del relieve sobre una superficie dura, con la herramienta correcta.
Repetiremos esta operación tantas veces sea necesario hasta obtener el relieve deseado.
Para evitar que se aplasten las partes huecas es necesario rellenarlo con pasta resanadora y dejar secar.
Limpiar con solvente y estopa, para poder pulirlo, o si se desea aplicar algún tipo de pátina.
Para pulir utilizaremos pastas abrasivas y solventes, frotando con fuerza, con una estopa hasta que quede brillante.
Procedimiento:
Este trabajo se lleva a cabo repitiendo los nueve pasos del repujado en forma manual.
A continuación, llevaremos a cabo la eliminación del metal por medio del calado, sin que esto afecte el diseño.
Esto lo realizaremos con un cutter o exacto, respetando el contorno del diseño, sobre una superficie suave. (madera o
cartón).
Terminado este paso, procedemos a pegar el diseño en la superficie elegida, aplicando pegamento de contacto a las
dos partes y dejar secar según las instrucciones que indica el recipiente del pegamento.
En esta técnica se realiza un trabajo más delicado y complicado, llevando a cabo los pasos siguientes.
Hacer el diseño donde las piedras a montar se integren a la pieza y que no se vean sobrepuestas.
Por el lado del revés, sobre una superficie suave, repujar el diseño con la herramienta adecuada.
Colocar resanador en las partes ahuecadas y dejar secar. Para poder eliminar las partes del metal que no pertenecen al
diseño, utilizar el cutter o el exacto.
Pegar el diseño como se ha venido mencionando. Para darle su acabo final, se deberá limpiar, pulir y abrillantar.
El calado realizado a línea o eliminando huecos de un diseño determinado, se puede hacer en cualquier metal de calibre
delgado y elaborar piezas de ornato y joyería.
Al manejar la sierra o segueta de joyero, debe recordarse que el movimiento del brazo debe guiar el corte, en forma tal que
este se dirija en una sola dirección, de arriba hacia abajo y viceversa, pero siempre perpendicularmente al trabajo. De lo
contrario, si se mueve ligeramente hacia los lados, la sierra se romperá.
El cobre, el latón, la alpaca y la plata ofrecen una extensa gama de posibilidades de trabajo y pueden tomar aspectos muy
variados como consecuencia de su resistencia al fuego.
Se pueden elaborar tanto piezas de joyería como de ornamentación. Según el gusto del creador, quien debe basarse en un
dibujo. Este último elemento es muy importante: debe tener líneas perfectamente definidas, sin medios tonos, y tiene que
adherirse a la lámina con pegamento blanco.
1. Calado de metal.
En este tema se realizarán motivos decorativos con lámina gruesa, por medio de la eliminación de metal.
Procedimiento:
En esta técnica, como en todas las actividades artístico-manuales hay que elegir un diseño que nos motive para
realizarlo.
Una vez que se haya seleccionado la lámina y el diseño en papel, se pegan ambas partes.
Si el diseño lleva calado interior se le hacen los taladros necesarios, lo más cercano a las líneas.
Utilizando el arco y la segueta procedemos a hacer cortes siguiendo la línea, procurando no salirnos de la misma.
Una ves terminado el calado del metal, utilizando las limas adecuadas, corregimos los malos cortes.
Utilizando lijas de papel para metal, de grano grueso a fino, lijaremos en un solo sentido, hasta lograr un acabado semi-
brillante.
Nuestro siguiente paso es el de darle un acabado brillante, utilizando las pasta abrasivas y las mantas para pulir, y poder
darlo por terminado.
En este tema se elaboran diseños que permiten lucir un trabajo en el cual no se elimina el metal.
Procedimiento:
Utilizando las mismas herramientas y materiales se elabora un diseño en el cual sólo se harán cortes lineales procurando
no unirlas, para evitar que se desprenda partes del diseño.
Nuestro siguiente paso, es hacer pequeños taladros, sobre todas y cada una de las líneas, para hacer el corte.
Armamos nuestro arco e introducimos la segueta en los orificios, para hacer el corte con movimientos precisos,
siguiendo cada una de las líneas de nuestro diseño.
Al igual que en el tema anterior en el proceso del trabajo, procedemos a darle el acabado necesario: limar, lijar, pulir,
para poder montarlo en la forma que se haya elegido, y concluir la pieza.
El grabado a buril es difícil de aprender correctamente en la elaboración de una obra artística de categoría. La mayor parte
de los plateros no son grabadores, pero si los joyeros, aunque muchos de estos se limitan a grabar las inscripciones
sencillas de los anillos, pulseras, medallas, etcétera.
Se necesita destreza y control a fin de no inclinar el buril demasiado o muy poco, haciéndolo saltar para rayar la pieza.
El grabado artístico, generalmente practicado sobre láminas gruesas de cobre, es un arte casi perdido, y aún los anuncios
de matrimonio e invitaciones elegantes son grabados con pantógrafo.
Después que se ha burileado el dibujo sobre el cobre se le quitan las asperezas con la rasqueta (herramienta terminada en
punta, de tres filos); se pule y queda lista.
En los temas abstractos, los mejores se obtienen combinando el grabado con los procesos del agua fuerte, acuatinta. Estos
términos indican distintos modos de grabar con ácido para obtener medios tonos en diferentes intensidades.
Se obtienen resultados maravillosos cuando, después de barnizar con una sustancia resistente al ácido, se imprimen las
huellas de telas de diferentes texturas en las superficies deseadas.
Al grabar al ácido, el cobre se consume con mayor o menor grado, y la placa queda lista para la impresión.
Para “sofá-ground” (fondo suave), solución saturada en alcohol con 75% de chapopote y 20% de cera de abeja y dos
tubos de glicerina.
La solución de inmersión para placas de cobre tiene esta formula: 10% de ácido clorhídrico químicamente puro en solución
saturada de clorato de potasio.
El agua fuerte se obtiene con ácido nítrico, en una formula de 10% de ácido puro y 90% de agua.
Solo una advertencia, el ácido es tóxico, aunque no peligroso en esta cantidad y solución, y no debe ser tocado con las
manos. Dispongamos, los elementos necesarios e iniciemos la creación de nuestro primer grabado.
Se trata de la más elemental técnica de grabación sobre metales, esta consiste en cubrir zonas que quedarán en relieve con
el bloqueador resistente al ácido.
Nos basaremos en un dibujo sencillo, que reproduciremos en una chapa metálica con una punta.
La lámina que utilizaremos, y la que aconsejamos, ofrece un grosor de 0.6 mm. de espesor, que tras la acción del ácido
quedará en 0.4 mm. En esta realizaremos el grabado a línea, en alto y bajo relieve.
Una vez marcado el dibujo retiramos el bloqueador de los espacios que permite el diseño.
Se pone la placa en la solución que tenemos ya preparada, y la dejamos el tiempo que sea necesario hasta lograr el
objetivo, al término de este paso; retiramos el bloqueador solvente, para continuar con los pasos siguientes: lijar, pulir y
abrillantar, para montarlo en la superficie que se haya elegido.
Procedimiento:
Preparar la cera en la siguiente proporción, en un recipiente resistente al fuego fundir el 60% de cera blanca, 40% de
cera de Campeche con un 5% de betún de Judea y revolver hasta que se integren.
Preparación del ácido. En un recipiente de vidrio plástico o acero colocar 60% de agua y 40% de ácido nítrico. Esto se
hará usando mascarilla y guantes de protección.
Bloquear la lámina con la cera diluida, ya sea por aplicación o sumergirla, y dejar enfriar.
Retirar el diseño y con una punta de metal o madera empezar a limpiar las líneas que se van a corroer.
Si tiene la profundidad deseada retirar la cera a base de calor, hasta que esta desaparezca.
Procedimiento:
Retirar las áreas del diseño que se van a corroer con el ácido.
Una vez obtenida la corrosión deseada, se retira la cera por medio de calor para limpiar el trabajo.
Utilizando lijas de papel de esmeril se le da una lijada al trabajo para eliminar los rayones profundos.
Con las pastas y las mantas se pule hasta que quede brillante, y montar en la superficie deseada.
Aplicar una capa de laca o esmalte acrílico brillante o transparente para proteger el trabajo de la oxidación prematura.
Este debe practicarse una y otra vez, si se es principiante, antes de tratar de hacerlo directamente en la obra, ya que
requiere algo de práctica el aprender a correr una mano, que sujeta el cincel, sobre la obra, mientras que la otra aplica la
serie de golpes iguales del martillo, que deben hacer la incisión de igual intensidad y línea fluida, que no deberá ser mordida
al despegar la herramienta. En los cincelados se utiliza una placa gruesa de acero, lisa, pulida y escuadrada, de tamaño
adecuado para acomodar las láminas, según el trabajo. No hay necesidad de cincelar la parte de la orilla, pues esta tendrá
que ser calada después con la segueta.
La preparación del lacre que utilizaremos en este trabajo, se prepara de la siguiente manera: en un cajón de madera
ensamblado vamos a verter la pasta, para la que utilizaremos tierra de ladrillo, brea, cera blanca, cera de abeja y cebo, (las
cantidades varían de acuerdo al tamaño del cajón). La consistencia del lacre puede variar según el trabajo que se vaya a
ejecutar, aumentando o disminuyendo los ingredientes a fin de hacerla más suave o más dura.
Para poder cincelar, es necesario tener el dibujo pegado en la lámina previamente recocida para poder marcar los contornos
del mismo. La lámina debe ser de un espesor adecuado, de acuerdo con la profundidad requerida del cincelado.
A esta lámina se le hace una serie de cortes diagonales de tijera, en todo el contorno de la orilla con el fin de doblarlos hacia
dentro, actividad que se hace fácilmente con los dedos para poder insértalos en la brea caliente que se ha preparado
previamente en un cajón de madera. Al enfriarse la brea, la lámina a cincelar quedará a su nivel.
En el repujado, como en el cincelado, se emplea un sinnúmero de herramientas especiales para los trabajos, que uno
mismo puede hacer con pernos de acero para convertirlos en cinceles, planetes, embutidores, etcétera.
En esta forma es posible dar a las herramientas las formas caprichosas que a veces se requieren, y de esta manera
adaptarse al embutido del metal en los lugares reducidos, o de contornos de otra manera inaccesibles.
Debe tenerse en cuenta que el trabajo del cincelado se efectúa, principalmente, en el reverso de la pieza y que esta, en su
anverso, aparecerá con muchas pequeñas deformaciones, causadas por los golpes del cincelado.
En ningún caso debe perforarse la lámina de un cincelado, y no deben ser muy profundos, pues entonces la tendencia del
metal seria a “calarse”, inutilizando el trabajo. Al trasluz, un repujado no debe mostrar ni un solo punto luminoso.
Al término del proceso en el diseño preestablecido y como en las técnicas anteriores procedemos a dar el acabado: limpiar,
lijar, pulir y montar en la superficie deseada.
Este es un método simple de fundir los metales de la plata y el cobre (0.925 Ag. 0.075 Cu). También el oro puro y su
respectiva aleación para los diferentes kilatajes en los que se vaya a trabajar.
El bórax (tetraborato de sodio), bicarbonato de sodio, salitre o nitro (nitrato de potasio) y la sal común son buenos fundentes
y limpiadores de residuos y se deben aplicar en cantidades pequeñas. Estos fundentes extraen las impurezas que tienen
los metales, las cuales se adhieren a un alambrón, que al retirarse de la mezcla deja una superficie de espejo en la parte
superior del metal. En este momento del proceso la aleación esta lista para ser vaciada dentro de la chaponera o rielera y
ya se puede obtener chapa o lingote.
La chapa se utiliza para lámina angosta y para joyería y el lingote se utiliza para estirar alambre.
Utilizando 70% de plata (granalla) y 30% de latón en un crisol con bórax, fundir hasta que se haga liquida la mezcla y
esté completamente integrada.
Una vez liquida, se vacía en la rielera, y se pasa por la hilera de rodillos para que quede delgada.
Recocer el alambre y pasarlo uno por uno por la hilera de palacios, hasta dejarlo a un calibre 23.
Al terminarla, recocer y colocarlo en el ácido para limpiarlo, de lo contrario no servirá porque estará sucio cuando se
quiera usar.
En un crisol de barro se coloca el material puro (plata u oro) en la cantidad necesaria, también se coloca el material con
que se va alear. Fundir a temperatura de 650º C.
Con soplete de alta presión se funde hasta que se haga líquido y se vacía en la rielera o chaponera según lo que se va
trabajar.
Pasar el metal por el laminador de rodillos, para laminar o hilar según sea el caso, y dejarlo al calibre deseado y de esta
forma poder usarlo.
Procedimiento:
Aplicar un poco de bórax y calor con soplete de gas o gasolina para soldar, ya que es un elemento fundente.
Una vez soldadas las piezas sumergirlas en acido para lavarlas, para limar, lijar y pulir.
Para este trabajo se utiliza tubo de plata, el tamaño de los pendientes puede variar según los deseos individuales.
Procedimiento:
Corte dos largos de 7.5 cm. de tubo de plata de 3 mm. Engrase un trozo de alambre, córtelo en dos trozos y enhébrelo a
través del tubo.
Recueza el tubo, luego dóblelo suavemente alrededor de virgoneta para anillos. Vuélvalo a recocer, con un martillo
golpee suavemente para formar el círculo dejando una separación entre las puntas de unos 3mm.
Ya elaborado el círculo, puede desechar el alambre aceitado que había utilizado para proteger el tubo mientras lo
martilleaba. Quite el alambre estirando con unas alicatas. Si se pega, vierta una gota de aceite en el tubo para ayudarle a
salir.
Lime de forma plana el extremo del tubo con una lima de uso general. Luego lime un ángulo en el extremo que lleva el
pasador; su objetivo será ajustar el pasador aproximadamente a 45º C, cuando lo suelde. Afínelo con palillo de esmeril.
Sitúe el pasador en posición con pasadores partidos y suelde utilizando una cantidad generosa de soldadura para hacer
segura la unión. Decape y manténgase el tubo en el agua para eliminar todas las trazas de ácido.
Seque y lime alrededor de la junta hasta alisarla, quite las rayas con papel de esmeril. Deje el otro extremo abierto o
séllelo soldando dentro un alambre de plata.
Pula en una rueda con pastas abrasivas hasta que quede brillante, y los pendientes estarán listos para ser usados.
Los brazaletes metálicos se presentan en todas las formas y tamaños, pero en esta técnica básica puede adaptarse a
cualquier diseño concreto y cualquier elección de material. Por ejemplo, puede variar el ancho del brazalete o utilizar
cualquier metal; como base el brazalete acabado puede dorarse o platearse, texturarse, colorearse u oxidarse.
Es aconsejable hacer el brazalete algo más grande de lo necesario para tener en cuenta las imperfecciones de limado.
Generalmente, es preferible la soldadura de plata incluso cuando trabaje con materiales bajos, porque es más fuerte y
menos sucia que otras alternativas.
Corte una tira de 16-18 cm. de largo de una plancha del material que eligió de 1 mm. de grueso. Alise los bordes rugosos
por medio del limado.
Recueza, decape, lave y doble la tira alrededor de un mandril o trozo de tubo de metal de alrededor de 7 cm. de
diámetro. Golpee la cinta con un martillo hasta formar un círculo, de forma a la tira hasta que los extremos se junten o
hasta que se superpongan ligeramente.
Rectifique la junta con una lima de uso general. Sostenga con cuidado el brazalete para evitar que se deforme durante el
limado y haga este con movimientos suaves hacia abajo. El ángulo de la junta debe ser preciso para que tenga éxito la
soldadura.
Aplique abundante soldadura de plata para que esta sea invisible, después del limado, decape y lave.
Lime la soldadura alisándola. Para quitar las rayas del brazalete utilice un palillo para pulir y distintos grados de papel de
esmeril, iniciando con el número del más grande al más pequeño, hasta que la superficie quede completamente lisa.
Finalmente pula el brazalete con las mantas y las pastas abrasivas. Sostenga firmemente contra el centro de la rueda
girando gradualmente hasta que toda la superficie haya sido pulida.
Los brazaletes de latón y cobre tienen tendencia a dejar marcas verdes en el brazo de quien lo usa, esto puede evitarse
pintando el brazalete con laca. Como alternativa puede chapar el mismo.
– Confección de un anillo.
Para hacer este anillo se utiliza la plata, pero puede utilizar exactamente las mismas técnicas trabajando con oro.
Procedimiento:
Recueza el alambre cortado hasta obtener un color azul oscuro, dóblelo suavemente con los dedos alrededor de la lastra
para dar la medida deseada.
Cuando la plata comience a sentirse menos maleable recueza de nuevo el aro. Golpéelo suavemente con el martillo
hasta que se forme el círculo, recuerde que debe dejar un poco de metal para quitar a través del limado y con esto
obtener una junta fina.
Realice la unión soldando los extremos del alambre y cerrando a través de ellos.
Lime los extremos con una lima plana hasta que encajen exactamente. Esto es importante cuando llega el momento de
soldar.
Cubra la junta con fundente y aplique tres o cuatro trocitos de soldadura de plata dura. Caliente hasta que la soldadura
corra y el anillo este al rojo vivo. No sobrecaliente o se fundirá la plata, deje enfriar, decape y lave. Vuelva a colocar el
anillo en la lastra y golpéelo suavemente para redondear la circunferencia, cuidando de no dejar indentaciones en la
plata. Si el anillo es demasiado grande corte la unión soldada con la sierra y lime hasta la medida correcta.
La unión debe quedar completamente oculta por la soldadura y luego limarse, para alisarla con una lima de todo uso.
Lime el interior, utilice una lima de media caña, cuidando de no hacer el anillo más grande al limar demasiado el metal.
Quite todas las rayas frotando la superficie con cuidado con palitos de esmeril.
– Pendientes calados.
Necesitará un trozo de plancha de 5 por 9 cm. y del material elegido 1 mm. de grueso. Para realzar el efecto
tridimensional bisele los bordes. Requerirá también alambre redondo de 1 mm., alambre de plata para las orejas de
alrededor de 0.8 a 0.9 mm. de grueso y seis arillos de unión. En el caso, de un dibujo complicado, es aconsejable
trazarlo sobre papel de gráficos. Fije el trazado a lápiz con fijador de dibujo o con laca para el cabello, ya que de lo
contrario la fricción producida por el proceso de calado puede borrar el dibujo.
Procedimiento:
Una vez trazado el dibujo fije el papel de trazar sobre la chapa metálica con adhesivo o pegamento.
Con un punzón de centrar y un martillo marque el metal en puntos bien dentro el trazado del modelo.
Taladre un agujero donde ha marcado el metal. Utilice un taladro colgante y una broca de 1mm.
Afloje el tornillo inferior de la sierra, enhebre la hoja a través de uno de los agujeros y sujétela tensamente. Sujete la
pieza, mantenga la hoja vertical y corte asegurándose de seguir el diseño con precisión. Repita estas operaciones hasta
haber cortado todo el dibujo.
Corte a lo largo del borde exterior de los pendientes y lime hasta que queden lisos todos los cantos.
Utilizando limas de aguja, alise todos los bordes irregulares del calado. Corte trocitos de alambre de plata de 1 a 2 mm.
de longitud. Para la granulación, caliente cada trocito con el soplete hasta que se funda formando una pequeña esfera.
Suelde un arillo de enlace en cada pendiente en el punto que se ha de colgar. Elabore las partes superiores de los
pendientes siguiendo las fases antes descritas.
Corte dos largos de 4 cm. de alambre de plata para las orejas. Coloque un extremo de cada alambre sobre un bloque de
acero y aplánelo ligeramente con el martillo, como alternativa los extremos pueden aplanarse en un laminador de
rodillos.
Dejando plana la parte martillada, curve cada alambre con unos alicates de puntas redondas, la zona plana asegura una
unión más fuerte cuando se suelde a la parte superior del pendiente.
La parte de la cola del alambre que se inserta en la oreja, tiene un mejor aspecto con una suave curva; la mejor manera
de darle forma es con los dedos. Lime el extremo de los alambres hasta que estos se deslicen con suavidad a través del
lóbulo de la oreja.
Suelde el alambre que va de la oreja a la parte superior del pendiente, sosténgalo en su lugar con pinzas de muelle y
utilice soldadura fluida. Decape y lave. Alise cualquier superficie irregular con papel de esmeril envuelto alrededor de los
dedos.
Pula con una rueda de popelina y pasta abrasiva, sostenga firmemente el trabajo especialmente la parte alta que puede
ser más difícil de pulir.
Encadenen entre si las dos partes del pendiente utilizando alicates y un pequeño arillo de unión, límpielos
completamente y la pieza estará terminada.
La técnica básica para elaborar cadenas puede variar al elegir distintos tipos de tubo de metal, de cualquier grueso y
longitud, o utilizar alambre y bolas de plata.
La técnica será esencialmente la misma, si ha elegido tubo de 2.5 mm. cortado en largos de 1.5 cm. o alambre de plata
de 0.8 mm. o bolitas de plata perforadas de 2.5 mm. de diámetro y alambre para el cierre que es hecho a mano.
Procedimiento:
Corte el tubo en trozos de 1.5 cm. de largo, el número de piezas necesarias dependerá de la longitud de la cadena.
Lime de forma plana los extremos de los tubos y luego alíselos con papel de esmeril, utilice corta alambres para cortar
el alambre de plata en trozos de 4 cm. de largo y recuézalos.
Con alicates redondos realice un bucle en un extremo de cada alambre a 1.2 -1.3 cm. de la punta, continúe sosteniendo
el alambre a través de cada trozo de tubo y efectúe un bucle en el otro extremo con los alicates.
Enhebre una cuenta de plata, elabore bucles como en el paso anterior y recueza al alambre para asegurar la cuenta.
Arregle los extremos con una lima de aguja, y elabore 8 ó10 de estos eslabones.
Encadene los componentes del collar utilizando alicates de puntas redondas para reabrir con suavidad los bucles de los
extremos de los tubos y enhebrar las piezas, una a una.
Para realizar un broche en forma de “s”, como se encuentra a menudo en la joyería oriental es fácil de hacer, sólo
elabore una figura de “s “alargada de alambre de 0.9 mm., utilizando unos alicates de puntas redondas.
Enganche la parte mas pequeña de bucle en un extremo de la cadena y suelde donde la punta toca la curva de la ”s”.
Puede añadirse un toque decorativo fundiendo las puntas de las “s “ para formar un esfera.
Durante el desarrollo de los contenidos temáticos, el Instructor de Artesanías dará seguimiento al aprendizaje de los
participantes conforme al monitoreo de las actividades señaladas en la columna de “evaluación” de la carta descriptiva.
Este seguimiento cotidiano, se complementa con un cuestionario de evaluación inicial y una evaluación final, el cual se
requisitará de forma individual y por escrito. Este tipo de evaluación (cognoscitiva) se recomienda aplicarla en la primera y
última sesión del curso o taller. Tiene como propósito en una primera instancia, identificar los conocimientos que los
participantes tengan con relación a la disciplina en orfebrería, y en la parte final, medir el aprendizaje teórico adquirido, por
los que resulta importante aplicar en ambos momentos los mismos reactivos.
Dado el carácter eminentemente práctico de este curso o taller, el instructor cotidianamente verificará el dominio de las
técnicas y materiales por parte del alumno, realizando las correcciones pertinentes a los procedimientos y objetos
artesanales. Al finalizar el curso o taller, es importante mostrar los avances de los participantes, a través del montaje de
exposiciones que puedan ser presentadas ante la población usuaria e invitada al Centro de Artesanías y Artes Plásticas,
como una forma de promoción de los servicios.
1. ¿Qué es la orfebrería?
a) Soldar.
b) Pulir.
c) Manejo de ácidos.
a) Contaminan.
b) Limpian.
c) Corroen.
CURSO DE ORFEBRERÍA
REACTIVO RESPUESTA
1 b
2 a
3 c
4 b
5 c
− Casabo, Juan, Manual del joyero, Editorial albatros, Buenos Aires, Argentina. Tercera edición 1953.
− Cellini, Benvenuto, Tratados de la orfebrería y la escultura, Colección Atala, Editorial leyenda. México, D. F.
− Gómez, Burón, Joaquín, Metales, Ediciones iberoamericanas quórum, S. A. Madrid, España. 1989.
− Gómez, Burón, Joaquín, Bisutería/joyas, Ediciones iberoamericanas quórum, S. A. Madrid, España. 1989.
− Muriel-Bussy, Yves, Repujando el metal, Ediciones CEAC. Barcelona, España. Cuarte edición 1981.
− Ricke, H. A., Artesanía en plata, Manuales UTHEA, Unión tipográfica editorial hispano americana. 1968.
A nadie puede enseñarse el diseño como tal; sin embargo lo que usted puede aprender es como mirar el mundo que lo
rodea, adaptando lo que usted ve y transformándolo en un diseño que sea nuevo, emocionante y únicamente suyo.
Una estrategia importante que ayuda a elaborar diseños consiste en observar tantas joyas como sea posible. Visite museos
y estudie joyería de cada época y cultura.
Contemple los escaparates de las joyerías y vaya a los mercados y tiendas de antigüedades. Compre joyas viejas y
desmóntelas en piezas de manera que pueda apreciar exactamente como están unidas. Gradualmente comenzará a tener
una idea del tipo de joyería que le interesa y la orientación de diseño que desea seguir.
La inspiración puede llegar de cualquier fuente, así que no se limite a observar solo la joyería. Cuando visite un museo
puede encontrar formas y motivos decorativos excitantes en hierro forjado, tejidos, alfombras, esculturas, tiradores de
puertas decorativos, llaves, frisos, espadas, cetros y coronas de magistrado. Ideas para el diseño pueden inspirarse por casi
cualquier objeto: desde componentes electrónicos hasta componentes biológicos. La mayoría de los diseñadores
profesionales son coleccionistas entusiastas de revistas, libros, postales y objetos interesantes. Cualquier cosa que mire,
puede ser base para una pieza de joyería, ya que el diseño es realmente un proceso de rechazo y selección tanto como de
inspiración personal, ésta ha de trasladarse del objeto al diseño. La mejor manera de desarrollar sus ideas es elaborando
dibujos. Cuanta más experiencia tenga en dibujar tales objetos mayor facilidad encontrará en traducir las ideas de su mente
a dibujos en papel.
Una vez que haya alcanzado el nivel en el que esté listo para traducir sus bocetos a piezas de joyería, es el momento de
pensar en los materiales que utilizará y, desde luego, de si es técnicamente posible realizar el diseño. En las primeras
etapas será más fácil iniciar con broches, pendientes y colgantes. Los collares y brazaletes son más exigentes tanto en
Supongamos que ha visto un friso que le ha inspirado con su forma, motivos y colores. Lo ha dibujado o fotografiado y le ha
dado idea para un brazalete. La etapa siguiente consistiría en realizar un modelo dibujado sobre cartón; también puede
utilizar plastilina, lámina metálica o arcilla autoendurecible. Tales modelos le ayudarán a visualizar como puede elaborarse la
pieza y los materiales a utilizar. Luego decidirá si su diseño tendrá un aspecto más específico: estampado, grabado,
incrustado o calado en el metal; si se desea chapearlo o colorearlo y si se desea incorporar con piedras o gránulos. Cuando
haya decidido todos estos puntos puede utilizar otra parte del friso como inspiración del diseño para un par de pendientes a
juego.
Antes de comprar o usar una joya debe usted evaluar su constitución física. Si ha de elegir unos pendientes; por ejemplo,
debe considerar la forma de su cara y la longitud de su cuello. Si tiene una cara redonda puede tener mejor aspecto con
pendientes largos colgantes que con unos circulares de clip, mientras que unos pendientes colgantes pueden ser
inadecuados si tiene un cuello corto y una cara larga. Es importante pensar que los pendientes y los collares son un marco
para su rostro.
Los pendientes, pulseras y collares se seleccionan comúnmente complementándose uno a otro y para realzar el vestido,
mientras que los anillos son más independientes y personales. Los anillos son los únicos elementos de joyería que usted
puede ver constantemente y disfrutar de ellos y aunque armonicen con las otras piezas que esté usando, pueden ser más
individuales. Sin embargo, debe considera la forma de sus manos y dedos. Los anillos anchos no hacen juego con los
dedos cortos y gruesos y los anillos pequeños y delicados pueden pasar desapercibidos si tiene manos grandes con dedos
robustos.
La pigmentación de piel y ojos puede influenciar su elección de joyería. Si por ejemplo, tiene los ojos azules, puede elegir
usar zafiros mejor que esmeraldas. Una complexión pálida y cabello muy rubio puede lucir usando plata mejor que oro;
mientras que el oro luce especialmente espectacular en una piel oscura.
Si mezcla un juego de aros de oro fino y piedras preciosas con un brazalete de bisutería dorado barato, este último
degradará los aros, mientras que el brazalete usado solo puede ser de gran efecto, si su vestido esta ornamentado con
apliques o botones de fantasía. Debe usar joyería muy sencilla puesto que los broches o pendientes ornamentados
disminuirán la impresión que se quiere dar con un vestido.
El color juega un papel importante en el diseño de la joyería. Algunos materiales parecen complementarse uno a otro
mientras que otros chocan entre si. El marfil por ejemplo tiene mejor aspecto montado en plata que en oro. La frialdad de la
plata da énfasis al color del marfil, mientras que el oro tiende a dominarlo. El lapislázuli por otra parte, puede montarse en
oro o plata, mientras que los rubíes y granates lucen mejor en oro, Se debe ser cuidadoso con la mezcla de piedras de
distintos colores.
La forma es otra consideración importante cuando se piensa sobre un diseño, un collar que sea ancho y pesado a la altura
de los hombros y luego disminuya, no sólo parecerá fuera de proporción, sino que no se ajustará adecuadamente, el peso
de un collar debe estar siempre en su punto más bajo. Los pendientes de clip demasiado grandes se deslizarán sobre los
lóbulos de las orejas, en cambio los pendientes colgantes que tengan una pequeña forma, pueden ser armoniosos.
La luz.
Si se trabaja con piedras traslúcidas tales como cuarzo o piedra de luna, puede arruinar su efecto delicado combinándolas
con piedras fuertemente coloreadas o metales pesados.
Los pendientes traslúcidos deben colgarse con el mayor cuidado para su máximo efecto. El sistema para suspender el
colgante debe ser tan ligero como sea posible haciendo un mínimo uso de metal. Los pendientes colgantes de cristal son
particularmente atractivos ya que, mediante el facetado y utilizando un montaje no obstructivo pueden lograrse efectos
luminosos llamativos. Los montajes son igualmente importantes cuando esta suspendiendo piedras preciosas en pendientes
colgantes.
Peso y proporción.
La joyería debe ser cómoda de usar. Si es pesada y voluminosa puede no sólo parecer vasta y ostentosa, sino que será un
agobio físico real. Si un broche es demasiado pesado puede desgarrar el material al que se prende, especialmente el satín
delicado o la seda.
La proporción es especialmente importante cuando diseña pendientes. El reverso de un pendiente colgante es tan
importante como el frente, por lo que el diseño debe ser imaginado desde todos los lados y ángulos. El método de colgado
debe ser también considerado cuidadosamente ya que el equilibrio de la parte colgante afectará las proporciones de los
pendientes.
Técnicas.
Una vez que ha decidido el diseño y pensado sobre el color, peso y proporciones, es el momento de seleccionar las
técnicas que puede utilizar. Si la forma es maciza o escultórica puede ser lo mejor tallarla en cera, hacer un molde y fundirla
en metal. Un diseño muy delicado puede ejecutarse en hilo de plata fino, que puede torcerse y doblarse, o bien en un fino
trabajo de calado. Si las ideas se basan en dibujos superficiales habrá de considerar las texturas y decidir que técnicas
puede usarse para lograr el efecto previsto.
Si el diseño exige color se deberá pensar en piedras que se complementen en unas a otras o metales que pueden
mezclarse o colorearse. Diseñar joyería es tan divertido como gratificante. En cualquier tipo de diseño es aconsejable
comenzar por aprender los principios básicos, teóricos y prácticos antes de intentar algo demasiado ambicioso.
TÉCNICAS ADICIONALES.
Calado
Para esta técnica se requiere una sierra de joyero y un par de alicates, estas son las herramientas básicas, toda vez que la
sierra corta metales y también madera, concha, marfil y plásticos. Se recomienda adquirir sierras con arco ajustable, ya que
con estas pueden acoplarse diferentes longitudes de la hoja. Cuando se usa la sierra debe mantenerse en posición vertical
con los dientes de la hoja mirando hacia abajo; la carrera hacia abajo es la que corta realmente.
Se pueden adquirir las hojas de la sierra en paquetes. El tamaño de la hoja que se requiera dependerá del espesor del
metal con que se trabaje y la delicadeza del diseño. Para un trabajo delicado se necesitará una hoja muy fina (8/0 a 3/0); las
hojas normales son de 2/0 y 1/0; la serie más gruesa es del 1 al 4. Esta graduación se basa en el número de dientes por
pulgada. Cuanto más grueso sea el metal se requerirá de un mayor número de dientes en la hoja.
Cuando se monte la hoja se deberá asegurar de que esté firmemente fijada en el arco de la sierra. Antes de fijarla
compruebe que los dientes miran hacia abajo, apriete el tornillo del arco, empuje el extremo del arco contra algo sólido, su
banco de trabajo, y apriete el tornillo inferior para fijar el otro extremo de la hoja, compruebe cuidadosamente la tensión
final. Si tensa demasiado los tornillos, la hoja puede chascarse, si por el contrario, la hoja esta demasiado floja se doblará
cuando sierre y perderá el control de la dirección del corte.
Calado de un dibujo.
Puede marcarse el dibujo directamente sobre el metal con una punta de trazar aguda; alternativamente puede elaborarse el
Limas.
Existen una amplia variedad de limas; esencialmente se utilizan las siguientes: lima plana de uso general con una superficie
ancha para desbastar y biselar cantos y hacer uniones rectas; lima triangular que permite dar forma a rincones en ángulo,
también puede usarse sobre superficies planas; lima de media caña, es especial para dar forma a las curvas interiores de
los elementos tales como: brazaletes y anillos; lima ovalada que sirva para dar forma a las curvas más suaves.
Es importante contar con un juego de limas de aguja, pues estas pueden llegar a zonas que de otra manera serían
inaccesibles. Para trabajos muy finos puede utilizar limas de relojero que son aún más pequeñas o limas curvas cuyos
extremos están curvados de diferentes formas; existen limas curvas por lo menos con dieciocho formas diferentes de
puntas.
Limado.
Se recomienda practicar primero el limado sobre una pieza de metal cuadrada y luego sobre una circular. Se debe sujetar
firmemente la pieza a trabajar y limar con golpes largos y uniformes manteniendo la herramienta en continuo contacto con
el metal. la muñeca de la mano controlará el movimiento.
Es preferible no utilizar la misma lima para distintos materiales; es importante utilizar limas no contaminadas cuando se
trabajan metales preciosos, ya que la superficie del metal debe estar limpia tanto para soldar como para marcar el contraste,
reserve las limas usadas para utilizarlas sobre plásticos, acero y plomo.
Esta herramienta es de gran utilidad, estos son movidos por un motor y tienen un eje flexible, lo cual significa que pueden
manipularse casi tan fácilmente como una pluma o lápiz de dibujo. En el porta brocas pueden colocarse brocas helicoidales,
que son las piezas del taladro que realmente realizan el corte, de distintos tamaños así como también bruñidores, que son
pequeñas ruedas de pulir. También se puede regular la velocidad del taladro, a menudo utilizando un pedal. Es preferible
contar con un buen taladro eléctrico para todo uso, que pueda sostener en la mano o fijarlo a un soporte de taladro para el
trabajo difícil. Tales taladros son de extrema precisión. Existen muchos modelos diferentes, teniendo algunos de ellos
características adicionales tales como controles de velocidad variable y bases inclinables.
Para algún trabajo puede necesitarse un taladro de mano; que se sostiene por medio de un tornillo de banco. Este equipo es
fácil de manejar y extremadamente versátil, pues puede utilizarse para sostener diferentes herramientas desde brocas a
escariadores y bruñidores.
Como se ha indicado antes primero se recomienda realizar una pequeña marca con un punzón de centrar en la superficie a
taladrar. La finalidad de esta indentación es impedir que la broca se deslice o resbale haciendo marcas o rayas sobre la
superficie que se esta trabajando.
Naturalmente la medida de la broca que se elija depende de la medida del agujero requerido. Si utiliza una broca
extremadamente fina debe tener mucho cuidado, tales brocas se chascan con facilidad. Se debe asegurar que la broca esté
fuertemente sujeta en el porta brocas.
Pulido.
Lograr el mejor acabado superficial posible es una de las habilidades claves del joyero, que se debe practicar.
El pulido final puede llevarse a cabo a mano o a máquina, el pulido a mano implica trabajar pasando por todos los grados
disponibles de papel de esmeril, desde los más gruesos a los más finos, luego debe frotarse bien la superficie con pasta
abrasiva y una manta de pulir y un trapo limpio. Se quita la pasta con gasolina, y se limpia con agua jabonosa.
El pulido a mano, aunque eficaz es extremadamente arduo y lento. Por lo que es recomendable contar con una pulidora de
motor como pieza básica del equipo de joyería. Al eje de ésta pueden acoplarse ruedas de distinto grado de abrasión. Se
requerirá de una rueda de fieltro para pulir superficies lisas; una rueda cepillo para superficies texturadas o con relieves; una
rueda de manta de uso general para pulir con pasta; una rueda de cepillo de alambre de acero o de latón para quitar las
rayas gruesas y una rueda de lana fina para el rojo de los joyeros.
Cuando se utilice la pulidora se debe tener cuidado de sujetar firmemente el trabajo en la mano. Si no se toma con suficiente
fuerza, el movimiento de la rueda puede despedir la pieza de las manos dañándola o rompiéndola. Es importante siempre
limpiar bien la manta antes del pulido final con rojo de joyeros.
La pulidora de bombo es extremadamente útil si se ha de llevar a cabo una gran cantidad de pulido, especialmente cuando
se trata de bisutería de fantasía. La máquina consiste en un motor eléctrico que hace girar un depósito de tambor lleno de
bolas de cojinetes o perdigones con agua jabonosa con lo que se pule el trabajo mientras que gira el tambor.
Recocido o acritud.
El recocido es una de las técnicas básicas más importantes, especialmente cuando se trabaja con planchas metálicas. El
proceso utilizado se traduce en una primera materia que se denomina técnicamente “ dura “o “agria “. Esto significa que el
metal es demasiado duro que lo normal y de esta forma es más fácil trabajarlo. Para restaurar su estado original debe
recocerlo, devolviendo al material su maleabilidad. A medida que se avanza en el trabajo puede ser necesario volver
Como una sugerencia para familiarizarse con el trabajo del metal ablandado, se pueden practicar las técnicas de doblado,
utilizando para ello cobre relativamente barato y naturalmente maleable. El metal recocido puede doblarse, martillarse y
retorcerse en multitud de formas atractivas, lo que es ideal en joyería. El endurecimiento por deformación en frío; sin
embargo, puede ser un proceso extremadamente útil especialmente si se trabaja con metales naturalmente blandos.
Decapado.
Una de las desventajas del proceso de recocido es que a menudo deja sobre el metal un depósito superficial de óxido que
puede manchar o incluso formar cascarilla. Para quitar las manchas o cascarilla se debe decapar el metal, es decir limpiar
las manchas con una solución química. Al realizar determinadas piezas de joyería puede se necesario repetir el proceso
varias veces.
Generalmente el principal componente decapante es el ácido sulfúrico diluido con 6 a 10 partes de agua según la fuerza
necesaria. Como alternativa se puede utilizar una solución acuosa de alumbre de polvo.
Para hacer el decapante de ácido sulfúrico necesitará guantes de goma, un platillo de vidrio o acero resistentes al ácido. Se
vierte en el recipiente 10 partes de agua por una de acido, cuando el decapante esté listo, se utilizan unas pinzas de
plástico, para poner cuidadosamente el metal que se esta decapando en la solución. El ácido elimina gradualmente la
oxidación. Cuando el decapado este terminado se lava el metal; con agua fría y se seca. Como reglas básicas de seguridad,
no hay que olvidar que los vapores del ácido pueden ser peligrosos. Por lo que se recomienda proteger las
manos y ojos y usar un guardapolvo de protección. Si el ácido salpica la piel, se debe lavar inmediatamente la zona
afectada con agua fría. Debe cambiarse el decapante cuando el ácido se vuelva verde, turbio o gris negro cuando se
introduzca cobre.
CLAVE DE LA NORMA FECHA DE EMISIÓN / ACTUALIZACIÓN
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No se deberán decapar piezas que contengan plomo, acero o hierro pues el ácido reacciona con estos metales.
Soldadura.
Soldar correctamente es de suma importancia en la joyería y orfebrería. Su finalidad no es rellenar con una gruesa capa de
soldadura el espacio entre las distintas piezas que se están uniendo entre si, mas bien lo ideal es utilizar cantidades
mínimas de soldadura como sea posible para lograr una unión invisible. La superficie que se van a soldar deben estar
ajustadas lo más cerca posible y deben estar limpias.
Se encuentran distintos tipos o grados de soldadura, basados en los distintos puntos de fusión de cada uno de ellos. Los
grados más comunes son: dura, blanda y suave o fluida; cuanto más duro es el grado más elevada es la proporción del
metal real de soldadura. Generalmente, se podrá utilizar soldadura dura para todos los procesos, pero con ciertas
consideraciones; por ejemplo: si la pieza de joyería que se está elaborando es particularmente complicada, tendrá que
utilizar distintos grados, primero las soldaduras duras. Independientemente del grado específico todas las soldaduras están
formadas por dos elementos: un metal especifico y una cierta proporción de un metal más bajo. La soldadura que se elija
debe hacer juego con los metales que está soldando. Cuando se suelde oro; por ejemplo, la soldadura debe ser del mismo
grado y calidad que el oro mismo; así si se trabaja con oro amarillo de 18 quilates, la soldadura debe ser del mismo color y
calidad.
La excepción a esta regla general es la soldadura de plata. Esta puede ser utilizar sobre metales bajos, tales como el níquel,
el latón y el cobre, en caso de que se requiera una unión más fuerte. También es recomendable utilizarla sobre piezas que
requieran varias soldaduras.
Tanto la soldadura de oro como la de plata se presentan en forma de varillas o planchas delgadas que deberán cortarse con
tijeras de planchas o tenacillas de cortar, en trocitos muy pequeños que no deberán exceder de 0.5 mm. cuadrados. Los
joyeros llaman a estos trocitos “pajuelas”.
Práctica de la soldadura.
Existen ciertas reglas básicas en la práctica de la soldadura, como son las siguientes:
En la soldadura el fundente juega un papel tan importante como el mismo metal de aportación. Cuando se aplique con el
pincel sobre las superficies calientes debe burbujear ligeramente y extenderse con uniformidad.
Dejar enfriar un poco y luego colocar los trocitos de soldadura en su posición con unas pinzas o con la punta de un
pincel.
Calentar la unión uniformemente, y separar la llama inmediatamente después de que corra la soldadura.