Romanticismo Literario
Romanticismo Literario
Romanticismo Literario
ROMANTICISMO LITERARIO
En la literatura del siglo XVIII nos encontramos con el surgimiento de una corriente artística que se basa en el
individuo, en las emociones y en los sentimientos más humanos. Nos referimos al romanticismo, un movimiento
que influyó sobremanera en la gran mayoría de las artes como, por ejemplo, la pintura, la música y, por supuesto,
la literatura. En esta lección de unPROFESOR queremos que descubras las principales características del
romanticismo literario para que aprendas a detectar las bases sobre las que se erigió este nuevo movimiento que
nos trajo a voces tan importantes como William Shakespeare, Victor Hugo, Gustavo Adolfo Bécquer o Walter
Scott.
En la Europa del XVIII fue cuando apareció el romanticismo, una nueva corriente que apostaba por una estética
distinta, una filosofía nueva y una nueva manera de hacer y entender el arte. Veníamos de la época de la
Ilustración, un periodo en el que triunfó la razón y el humanismo dejando, a un lado, las emociones, los
sentimientos y los sueños.
Por tanto, como respuesta a este mundo tan pragmático, apareció el romanticismo, una apuesta para el "yo"
subjetivo y por la exaltación de las emociones y del mundo onírico. Se hizo un regreso al pasado, al folklore
nacional y a las tradiciones para encontrar la individualidad del país y sus características. Esto hizo que hubiera un
florecimiento del nacionalismo y una vuelta al mundo grecolatino y a la Edad Media.
En España, el romanticismo literario empezó a aparecer a principios del siglo XIX y su importancia se mantuvo
hasta las últimas décadas del mismo siglo. Los nombres más destacados son Victor Hugo, William Shakespeare y
en España Gustavo Adolfo Béquer o José de Espronceda.
Individualismo
El discurso de los autores románticos se transforma por completo con respecto a la tendencia anterior. Ahora no
se trata de reflejar un mundo objetivo y real sino de ofrecer una proyección de sus propios sentimientos en la
obra de arte. Las creaciones románticas se pueden considerar como un reflejo del interior de los poetas o de los
artistas que aprovechan elementos de la realidad para dotarlos del significado que ellos mismos buscan.
La influencia de la naturaleza
Una de las características del romanticismo literario más destacadas es que, ahora, el paisaje natural que aparece
en las obras artísticas está totalmente supeditado al estado de ánimo del autor. Es decir, si están inmersos en una
emoción triste, los paisajes que pintará o que describirá irán en comunión a esa emoción y sentimiento; y lo mismo
si se encuentra feliz y alegre. Por tanto, la naturaleza ya no se presentará de modo objetivo sino que, siempre,
pasará el filtro de la emoción del artista que la moldeará según sus propios sentimientos.
Artista rebelde
Normalmente, el artista romántico se caracteriza por ser un incomprendido y por rebelarse contra la sociedad.
Suelen vivir apartados del mundo ya que no sienten que nadie puede comprender su extrema sensibilidad y que
todo el mundo puede hacerles daño. No viven acorde a las reglas sociales porque ellos solamente se dejan llevar
por los sentimientos y por el amor.
Literatura pesimista
La tendencia general que se encuentra en los poemas románticos es la del pesimismo. El motivo es que el autor
siente de forma extrema todo el pesar del mundo, vive con una perenne hiper-sensibilidad que le impide ser
plenamente feliz. La melancolía, la tragedia y los sentimientos encontrados son propios de los autores románticos.
Ansia de libertad
Con la literatura romántica nos encontramos con una vuelta al individualismo y, por tanto, a la subjetividad. La
realidad externa ya no importa tanto sino que cobra una gran importancia las emociones internas, la perspectiva
de cada poeta y cómo siente y vive el mundo. El antropocentrismo vuelve a invadir el arte.
También es propio del romanticismo evocar situaciones y escenas que parecerían sacadas de cuentos de hadas.
Durante este periodo se vuelve a potenciar la fantasía y la imaginación dejando a un segundo plano la realidad
simple y llana.
Pero, ahora, la imaginación, las emociones y el "yo" subjetivo se hacen dueños y señores de la producción artística.
Por eso, los temas de la literatura y del arte en general cambian de forma completa. Los más destacados y que
más fueron cultivados por los principales artistas románticos fueron los siguientes:
Religión: dentro de la literatura romántica también hay presencia de temas religiosos. Sin embargo, lo más
habitual en estos textos es la confrontación con la divinidad o con Dios para rendirle cuentas sobre su sufrimiento
y su dolor en el mundo.
Temas sociales o políticos: también hay autores que crearon textos románticos que hablaban sobre temas que
afectaban directamente al pueblo. Recordemos que este movimiento literario potenció el auge del nacionalismo
y es que lo que buscaba era la máxima liberación de los pueblos y de sus habitantes. Denunciaban el absolutismo
y defendían la idea de un mundo libre y justo.
Durante su carrera literaria, Goethe escribió novelas, poemas y obras de teatro. Una
prolífica carrera literaria que ha hecho que, hoy en día, sea uno de los autores más
representativos del romanticismo europeo y universal. Sus obras fueron muy imitadas
por los autores de su época y sirvió de inspiración para autores de todas las partes del
mundo.
Dentro del romanticismo francés, si hay un nombre que destaca por encima de los
demás este es Victor Hugo. Desde muy pequeño mostró un enorme interés por el
mundo de las letras y, de hecho, siendo solo un niño anotó en su cuaderno del
colegio que quería ser como Chateaubriand.
El romanticismo causó una huella muy profunda en Francia y, por eso, del país galo
tenemos algunos de los mejores autores del El fin de romanticismo en la literatura
universal como es el caso de Alexander Dumas. Este novelista nació en un pueblo de
Francia en el 1802 pero, con poco más de 20 años, se trasladó a París. Fue aquí donde
se codeó con el ambiente literario y dejó su carrera de abogado para apostar por su
habilidad en las letras.
Hoy en día, Poe es muy conocido por ser uno de los maestros más destacados del
relato corto. Pero, además de cuentos, el autor también escribió una gran variedad
de géneros como poesía, ensayo o crítica literaria. Los cuentos de misterio, de terror
o de índole detectivesca siguen siendo, hoy en día, muy conocidos por los aficionados
a la literatura fantástica y gótica.
Obras más destacadas de Poe
El gato negro
El pozo y el péndulo
El corazón delator
El entierro prematuro
La narración de Arthur Gordon Pym