Romance de Doña Alba
Romance de Doña Alba
Romance de Doña Alba
Los romances viejos “cuentan historias”, por eso la acción predomina sobre la
descripción, es decir, son narrativos. En estas narraciones se introducen múltiples
diálogos y también monólogos, que sirven para acelerar el ritmo de la acción. Por
último, vamos a señalar algunos rasgos estilísticos:
Tendencia a la reiteración, tanto semántica como sintáctica, con
presencia de paralelismos, sinónimos, repeticiones, etc.
Empleo de imprecaciones o llamadas al interlocutor, público o a otros
personajes.
Escasez de adjetivos. Se mantiene el uso de los epítetos procedentes de la
épica y, a medida que se introducen temas líricos, se utilizan diminutivos
afectuosos, etc.
Las oraciones suelen ser breves y de sintaxis sencilla.
Uso anárquico y desigual de los tiempos verbales /muchas veces para
adaptarse al número de sílabas y acentos que convienen al romance).