Descargue como DOCX, PDF, TXT o lea en línea desde Scribd
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 3
IMPORTANCIA DE LA IMPLEMENTACIÓN DE LA GESTIÓN DE PROCESOS
Una de las grandes consecuencias que ha ocasionado la apertura de los mercados
y la globalización, es el incremento en el nivel de exigencia de los clientes, que cada día sigue en aumento debido al fácil acceso a los mercados internacionales y a los beneficios que estas ofrecen. Es por esta razón que las empresas han visto la necesidad de implementar nuevos métodos que los ayuden a ser más competitivos, y asegurar su sostenibilidad y su perdurabilidad en los consumidores. En las últimas décadas se comenzó la iniciativa de revisar constantemente las operaciones estratégicas de las empresas, para identificar esas posibilidades de mejora que los ayuden a ser más eficientes y eficaces; igualmente se dio el cambio del concepto de trabajo por áreas al de mejora por procesos, lo cual significó un cambio radical en la forma como se hacían las cosas, en la cultura organizacional y en la misma planeación estratégica de la empresa. El proceso de mejora por áreas permitía en las organizaciones establecer parámetros de medición y mejora de actividades puntuales del negocio, sin tener en cuenta como estas interactuaban con las demás áreas, teniendo un enfoque muy específico y limitado de lo que realmente es la compañía, y ocasionando inconvenientes en la comunicación y la integración de la cadena de valor. A medida que se fueron desarrollando nuevas prácticas administrativas, de calidad, de estandarización y de mejora, se vio la importancia de trabajar con un enfoque por procesos, dando continuidad a la mejora a lo largo de la cadena de valor y generando mayor integración y comunicación al interior de la organización, beneficiando enormemente a la búsqueda de la satisfacción del cliente final. Es necesario crear conciencia acerca de la importancia y el papel del cliente para la empresa; cuando visualizamos al cliente como un integrante más de la cadena de valor y no comprendemos su importancia, podemos caer en el error de diseñar procesos que en realidad no ofrecen valor agregado y adicional a esto podríamos realizar mediciones cuyo enfoque no gire en torno a la satisfacción del cliente. Es por esto que la alta dirección debe asegurar el cumplimiento de los requisitos del cliente de manera que se superen las expectativas del mismo, para esto la planeación estratégica de todas las áreas funcionales de la organización, y en especial la del sistema de gestión de calidad, deben girar en torno a cumplir este objetivo y esto se logra con procesos óptimos y mediciones asertivas. Tal como se dijo anteriormente, es de vital importancia tener presente dentro de la planeación estratégica de la empresa, al sistema de gestión de calidad, pues este se encarga de la planificación, el establecimiento y la ejecución de procesos, con sus respectivas acciones de mejora continua, bajo determinados estándares de calidad, que se miden a través de indicadores de gestión, para cumplir los requisitos del cliente en lo relacionado con el producto o servicio prestado. Es aquí donde cobra importancia el enfoque de procesos, pues si por ejemplo para producir y vender de manera exitosa un producto como la “crema dental”, al interior de la empresa se deben realizar procesos como la planificación y desarrollo del producto, la compra de insumos y materias primas, la administración y mantenimiento de oficinas, plantas, bodegas y maquinaria, la gestión de logística, la labor de mercadeo, las ventas, la facturación, la contabilidad, entre muchos más procesos necesarios para el sostenimiento de la empresa. Puede suceder que fácilmente estos procesos se tornen complicados, redundantes, costosos y que no logren adaptarse fácilmente a las necesidades de clientes exigentes, que al acercarse a múltiples vitrinas encuentren variedad de “cremas dentales” a diferentes costos, con aspectos innovadores o incentivos promocionales de compra. Es por esto la importancia de que en las organizaciones se centre especial atención al enfoque de procesos, que garantice la calidad de procesos existentes, la utilidad y finalidad de cada uno de ellos y claramente su correcta definición y estructuración, para llegar al mercado con resultados altamente competitivos. Evaluar detenidamente los procesos y su comportamiento a través del tiempo, es una actividad que permite ver tendencias favorables o desfavorables; normalmente tras la realización de este diagnóstico periódico se puede identificar si existe duplicidad de procesos, procesos innecesarios, oportunidades de mejora para procesos útiles, dependencia de procesos y conflictos entre áreas. Una vez identificados estas oportunidades de mejora se hace necesario diseñar un plan de trabajo con miras a la optimización de procesos, identificando aquello que no existe y se debe crear, aquello que ya existe y se debe mejorar, y potencializar las buenas practicas que pueden ser llevadas a otras áreas para ser implementadas como modelo de trabajo a seguir. Es primordial que todas las personas que forman parte de la organización, y en especial la alta gerencia, tengan como parte de sus objetivos la mejora continua de cada uno de los procesos que ejecutan y de los cuales forman parte. Son los trabajadores en primera instancia quienes forman parte esencial del éxito en la mejora de los procesos, pues ellos diariamente con la ejecución de los procesos, con la recepción de reclamos, con el comportamiento de los indicadores; pueden identificar que procesos requieren mejoras en costos, tiempos de ejecución, tiempos de respuesta al cliente, entre otros. Se necesita un alto grado de compromiso de todo el personal para que la empresa logre subsistir en este mercado tan volátil, cambiante y competitivo; y en especial se requiere enfocar los esfuerzos de la organización en cumplir las expectativas de sus clientes, de tal forma que la mejora continua y el enfoque de procesos se conviertan en insumos innatos dentro de la compañía. La alta dirección se debe cuestionar sobre su qué hacer, y fijar sus objetivos estratégicos en buscar respuesta a grandes interrogantes, tales como: ¿comprenden las organizaciones las necesidades de sus clientes y se esfuerzan por exceder sus expectativas?, ¿conocen los beneficios que conlleva una política de mejora continua en todas las áreas de la compañía?, ¿su plan estratégico está enfocado en los procesos y en los estándares del sistema de gestión de calidad? Únicamente aquellas empresas que respondan satisfactoriamente estos interrogantes, serán las que dentro de unos años dominaran y subsistirán en el mercado global.