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El objetivo de la práctica era el identificar a que microestructura pertenecía el acero en

la muestra dada.

El trabajo que realicé consistió en usar la lija 400 para dar a la muestra un acabado
espejo. La muestra utilizada fue un trozo grande de acero, que nos fue entregado (al equipo)
con bastante óxido. Nunca nos fue especificada la denominación técnica del acero.

Muestra que nos fue entregada.


Dado que no se tomó fotografía se
dibujo esta aproximación.

Primeramente se nos explicó el trabajo a realizar, consistente en pulir la muestra hasta


obtener un acabado espejo, en cada una de las lijas de la pulidora manual: 100, 200, 400 y 600.
Se nos dividió en varios equipos, a cada equipo se le asignó una tarea. A mí y a mi equipo, el
equipo γ, se nos asignó el pulido con la lija 400. Después, se nos explico el uso de la pulidora:
se debía usar agua para enfriar la muestra, debido a que con la fricción se podía alterar la
microestructura del acero y así no se podría obtener el resultado deseado. Al pulir, lo
debíamos hacer perpendicularmente, por lo que a la muestra le pegamos un par de pedazos
de cinta adhesiva para formar una cruz, para así, al pulir, seguir la recomendación para
efectuar el trabajo óptimamente.
Esquema de la muestra preparada
después de salir del tornamesa y
antes de ser pulida.

A continuación muestro la pulidora manual.

Lija de 600

Lija de 400
Lija de 100 Lija de 200

Pero primeramente la muestra fue puesta en el tornamesa, me parece que para


eliminar lo más oxidado y tener una mejor muestra, porque si se hubiera pulido tal cual estaba
la muestra, nos hubiésemos acabado miles de lijas y no se hubiera obtenido el resultado
deseado. Así, en pocas palabras se utilizó el tornamesa para simplificar el trabajo.
Imagen del tornamesa.

Posteriormente se nos explicó el porqué del pulido. Se pulía para así para tratar de
eliminar las imperfecciones en la superficie para que al momento de efectuar el ataque
químico, fuese más fácil atacar los límites de grano, todo esto con un objetivo, cuando se
introdujera la muestra en el metalógrafo, se pudiera reflejar la máxima luz posible y así
obtener una imagen clara de los limites de grano para poder así determinar la microestructura
de la muestra y poderla comparar con las que se tienen en un cuadro cerca del metalógrafo.

Así quedó la muestra.


Muestra preparada para el ataque
químico con acabado espejo.

Se presenta el metalógrafo (No se usó)

Poco después se atacó químicamente la muestra con cloruro férrico (FeCl3), con el
objetivo antes mencionado de obtener una mejor visualización de los límites de grano.

Sin embargo al final no se pudo observar la muestra al metalógrafo dado que las
muestras se perdieron.

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