Pruebame Tu Fe
Pruebame Tu Fe
Pruebame Tu Fe
Hay quienes dicen que lo que tenemos en esta sección es una contradicción con los
escritos de Pablo, porque el apóstol Pablo explicó con mucha claridad que la fe puede
salvarnos.
a. Gálatas 2:16, sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la Ley,
sino por la fe de Jesucristo, nosotros también hemos creído en Jesucristo, para
ser justificados por la fe de Cristo y no por las obras de la Ley, por cuanto por las
obras de la Ley nadie será justificado.
1. La interpretación de la fe. Pablo dijo que un individuo no es salvo por las obras
o acciones de la ley.
Romanos 3: 28 Concluimos, pues, que el hombre es justificado por la fe sin las
obras de la Ley.
En aquellos días había quienes estaban diciendo que uno tenía que realizar las
obras de la ley (la ley de Moisés), que uno tenía que venir a la ley para ser salvo.
Y Pablo respondió a esa afirmación diciendo que las obras de la ley no salvarían
a nadie, porque solo la fe en Cristo podía salvar a una persona.
Las obras de la ley en este caso era todo el cuadro religioso litúrgico y ritual que
las personas cumplían
Santiago 2:14 Hermanos míos, ¿de qué aprovechará si alguno dice que tiene
fe, y no tiene obras? ¿Podrá la fe salvarle?
a. Santiago no estaba hablando de las obras de la ley. Él simplemente dijo que la
fe que salva a la persona, producirá obras, obras de fe. La fe la cual estaba
hablando Santiago aquí era la fe profesante (teórica) es decir, todo aquello que
era falso, fingido, o una mera imitación.
b. Hay una historia breve que cuenta que el diablo estaba manteniendo una reunión
de trabajo con los demonios para decidir cómo convencer a los seres humanos
de que Dios no existía. Teniendo en cuenta que ellos mismos creían en Su
existencia, se estaban preguntando cómo lograr su meta. Un demonio sugirió que
le dijeran a la gente que Jesucristo, en realidad, nunca había existido y que los
hombres no debían creer en esa ficción. Otro demonio sugirió que convencieran
a los hombres de que la muerte era el final de todas las cosas y que no era
necesario preocuparse por la vida después de la muerte. Finalmente, el demonio
más inteligente sugirió que debían decirle a todas las personas que había un Dios,
que había un Jesucristo, y que creer en Él salvaba, pero uno podía salirse con la
suya simplemente profesando una fe y después continuar viviendo en el pecado
como uno solía hacerlo anteriormente. Y ellos decidieron utilizar esta táctica, que
es la estrategia que el diablo usa aún en la actualidad.
c. Así que Pablo y Santiago estaban en perfecta armonía el uno con el otro en su
enseñanza. En Gálatas 2:16, Pablo dejó en claro que los hombres no son salvos
por la ley, pero más adelante en esa epístola escribió No nos cansemos, pues, de
hacer bien (Gálatas 6:9). No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su
tiempo segaremos, si no desmayamos. En Cristo Jesús de nada vale estar o no
circuncidado; lo que vale es la fe que actúa mediante el amor. Así que ambos
apóstoles enseñaron que la fe debía ser una fe que obra, que actúa, una fe viva.
Como dijo Juan Calvino: "La fe sola, salva. Pero la fe que salva, no está sola"..
d. La fe no debe ser pasiva, sino activa, mediante las obras que nacen en una
persona nacida de nuevo.
En cierta ocasión una joven le preguntó a su maestra de Biblia: ¿Cómo puedo ser
creyente y continuar haciendo las cosas como yo quiero? Y la maestra le contestó
citando el pasaje de la epístola a los Romanos 8:5, Porque los que son de la carne
piensan en las cosas de la carne; pero los que son del Espíritu, en las cosas del
Espíritu. Si usted es un hijo de Dios, no puede hacer solamente lo que usted
quiera. Usted va a hacer lo que Él quiera.
a. La fe es una doctrina clave en la vida cristiana. Efesios 2:8–9 dice que el pecador
es salvo por fe. Y 2 Corintios 5:7 dice que la creyente debe de andar por fe. Y
Hebreos 11:6 afirma que “Sin fe es imposible agradar a Dios”.
b. El enfoque de la carta de Santiago es la relación entre la fe y las obras. Santiago
sugiere, que la fe y las obras, son dos lados de la misma moneda de salvación.
La fe y las obras no se excluyen mutuamente, más bien, la verdadera fe se
manifiesta en buenas obras. La fe y las buenas obras están tan interconectadas,
que Santiago concluye, que si decimos que somos salvas por fe, pero no tenemos
buenas obras, que demuestren nuestra fe, NO SOMOS ”nadita” diferentes a la
persona, que dice no tener fe… ni hace buenas obras.
c. Lo que queremos señalar es que uno no puede decir que es un hijo de Dios y vivir
como una persona que no tiene ley. Es momento de evaluar nuestra vida y
encontrar si nuestra Fe en Jesús produce buenas obras
d. ¿Conoce usted de alguien que está ayudando a personas que tienen grandes
necesidades o apoyando a misioneros sin decirle nada a nadie? ¿Pero, lo hace
usted?
Santiago 2: 19-20 Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios
creen, y tiemblan. 20 ¿Mas quieres saber, hombre vano, que la fe sin obras es
muerta?
a. ¿Qué creen los demonios? Ellos creen en la existencia de Dios. Estos ángeles
caídos estuvieron con Dios en el cielo. Ellos vieron Su majestad y gloria. Ellos
cantaron alabanzas. Ellos vieron el poder de Dios. Pero cuando se rebelaron
contra Dios, fueron expulsados del cielo para siempre. Así que estos demonios no
son ateos, ni tampoco agnósticos. Igualmente, ellos creen en la divinidad de
Cristo. Mientras que Jesús caminó por esta tierra, cuando los demonios se
encontraban con El, ellos testificaban que Jesús era el Hijo de Dios. Y asimismo,
ellos creen en la existencia de un lugar de tormento, en la existencia del
infierno, y también reconocen que Jesucristo es el Juez.
b. Los demonios creen, y tiemblan. Pero el creer y el temblar, no los salvan. Creer
en algo de manera pasiva no es suficiente.
c. Esta es una manera de graficar lo grave que puede ser que nuestra fe no
manifieste buenas obras. Podemos profesar Fe y actuar incluso causando daño
como un demonio
Santiago 2:21-24 ¿No fue justificado por las obras Abraham nuestro padre,
cuando ofreció a su hijo Isaac sobre el altar? 22 ¿No ves que la fe actuó
juntamente con sus obras, y que la fe se perfeccionó por las obras? 23 Y se
cumplió la Escritura que dice: Abraham creyó a Dios, y le fue contado por
justicia, y fue llamado amigo de Dios. 24 Vosotros veis, pues, que el hombre es
justificado por las obras, y no solamente por la fe.
g. Gálatas 5:22-23 Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia,
benignidad, bondad, fe,23 mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay
ley.
h. Juan 15:5 Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo
en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.
Santiago 2:26" Porque como el cuerpo sin espíritu está muerto, así también la
fe sin obras está muerta.
a. La fe sin obras es como cadáver. Santiago lo dijo, y Pablo también lo afirmó. Y
nosotros creemos lo que ambos dijeron porque nos lo estaban declarando como
la Palabra de Dios.