Socologia y Educacion - Cap4
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Refiere también, de las particularidades de cambio de siglo como lo son la modernidad, la crisis
ecológica, el pluriculturismo o la globalización, que influyen directamente sobre la educación como
factor fundamental de la sociedad industrializada.
Comenta también, que ciertos rasgos del individuo varían según el tipo de sociedad en que viven y
el grupo o grupos sociales los que pertenecen y así, en la sociedad mediática, la formación de la
personalidad de los jóvenes que se socializan se ve influenciada por la televisión y por los
comentarios que sobre ella se hacen en el grupo de amigos.
Teorías de la Personalidad
Sigmund Freud llamaba id (o Ello) a la parte más inmodificable y ligada a lo biológico de la
personalidad que tenemos desde el nacimiento.
Después del 4o. año, aparece el "superego" cuando un conjunto de normas y valores sociales,
representada por el padre se introducen en el sujeto.
El "ego" (o yo), la etapa más consciente donde se intenta resolver conflictos entre la apetencia y la
norma moral interiorizada, entre los proyectos del sujeto y las exigencias sociales en que se vive,
entre los propios deseos y los deseos de los demás.
En las clases altas, la hipocresía/ diplomacia en el trato cotidiano es una actitud aprendida,
incorporada al carácter y la necesidad de comprar cosas es de escasa utilidad
El carácter individual sería en cambio el conjunto de rasgos construidos que diferencia a una persona
de otra, aun dentro de la misma sociedad y grupo social, y que depende de la suma de experiencias
particulares que un individuo con un temperamento ha tenido, y del modo como ah ido
reaccionando personalmente ante ellas.
b) El carácter de dirección Interna (CDI), el más abundante en las clases medias de la primera
sociedad industrial, la cual de caracteriza por el fuerte crecimiento y movilidad económica,
demográfica, social y cultural, y cuya producción se articula en torno al sector secundario.
Se distingue por la interiorización temprana de principios de conducta firmes aunque
variables individualmente de acuerdo a la profesión elegida.
Los padres que educan a la manera internamente dirigida en una sociedad moderna
avanzada corren el riesgo de dejar a sus hijos fuera del mercado de la personalidad.
Ni en la escuela reformada, ni en el grupo de pares, ni luego en la empresa, valoran a sus
hijos por el arraigo interno, superegoico, de la conducta, sino por su capacidad de
adaptación, incluso interna, a las demandas psicosociales del grupo-
Algunos padres, por inseguridad, por no ser autoritarios, o por no perder el favor de la prole,
tienden a razonar con los hijos todas las decisiones; cosa loable; pero a la vez aflojan la
imposición o reparto de responsabilidades propias del modelo de dirección interna
(limpieza, orden, trabajo doméstico, horario corresponsable fijo).
Los padres que ya han adquirido ellos mismos el carácter de dirección por otros presionan
a sus niños para que se adapten bien a la escuela y se integren bien con los hijos de gente
conocida.
La educación escolar acorde con el modelo de carácter de dirección interna se lleva a cabo
en un clima de disciplina, en el que el maestro inculca decoro, reglas y educación académica;
propone significados de la vida y normas, claras y comprensibles para todos
Los padres de dirección interna (CDI) no toman en cuenta las opiniones o gustos de la panda
de sus hijos en su actuación con ellos. Creen que las normas son válidas
independientemente de la conformidad o no con la gente que los rodea-
En el caso de los niños CDO los padres han perdido parte de su influencia, y el maestro en
buena parte es un facilitador, un animador que estimula iniciativas del grupo de iguales en
la escuela.
Los niños socializados preferentemente según las pautas del grupo de pares, y de las aulas
sin autoridad, no son tímidos con el otro sexo, puesto que han sido más o menos
coeducados; ni con los adultos, de los que se aíslan o marcan distancias, y con los que
pueden llegar a ser arrogantes o perdonavidas, sin llegar a entender muy bien el contexto
en el que interactúan con ellos.
De todo lo anterior se colige que en una sociedad industrial avanzada, donde predomina la
dirección desde otros, puede resultar frustrante para el sujeto una socialización demasiado
“pura” tanto en el carácter social de dirección interna, como en el de dirección ajena.
La sociedad industrial avanzada no sólo es el reino del consumo masivo discriminado por
marcas según status y de la economía globalizada, sino de la omnipresencia de los medios
de comunicación de masas.
Los medios audiovisuales transportan imágenes de impacto emotivo, y hacen circular la
información con una generalidad, rapidez, simultaneidad que convierten el mundo en una
Aldea Global.
El advenimiento del internet, al alba del tercer milenio, sí permite la comunicación entre
usuarios de todo el mundo, a diferencia del medio televisivo, y propicia la formación de
“grupos virtuales”, sin necesidad de juntarse o conocerse.
Reflexionando nuevamente sobre el carácter social, los padres que educan niños proclives
al CDI suelen controlar los programas que ven sus hijos, a menudo junto a ellos, e incluso,
aprovechan los contenidos para moralizarlos, los cuales, tienen mayor capacidad de
independencia en el grupo de amigos.
En cambio, en los ambientes familiares proclives al CDO, dejan a los niños solos ante el
televisor con más frecuencia, y no se preocupan tanto de los efectos morales que puedan
producir. En este tipo, entre los niños y adolescentes ha decrecido el hábito de la lectura.
La escuela en las sociedades modernas es una institución más básica que antaño, pues otras
instituciones dependen más de ella que en tiempos pasados.