FEISMO

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El feísmo y su ARTE El tema de la fealdad se acentúa en

el arte del siglo XX, hasta llegar a


belleza extremos demoledores por su
extensión e intensidad. Se diría que
ANA MARÍA el arte hermoso apenas existe en el
PRECKLER siglo XX. Permanece en algunas de
las manifestaciones figurativas,

D esde que Nietzsche pero en el arte de la modernidad es


retomara de la antigua difícil encontrar belleza, de ahí la
Grecia el mito de lo controversia que produce el arte
Dionisíaco y lo contemporáneo y su no
Apolíneo, con la contraposición del inteligibilidad para el espectador en
dios Apolo —representante de la la simple contemplación de la obra
belleza, el equilibrio y la de arte. Por ello, es preciso mirar el
serenidad— y el dios Dionysos — arte contemporáneo con otros ojos:
representante del desbordamiento, con ojos intelectuales, psicológicos,
el delirio y las pasiones—, este inquisidores, investigadores,
mito se ha convertido en metáfora críticos, para tratar de encontrar la
de la lucha vital entre las fuerzas belleza del feísmo, que la hay. Por
del bien y el mal, de la orgía y la ejemplo el arte de las Vanguardias,
serenidad, de lo bello y de lo feo. recubierto ya por la pátina del
Es una metáfora hermosa y muy tiempo y la belleza a que se hacía
significativa pues en el alusión. No obstante, hay que ser
antagonismo de los dos dioses muy cautos a la hora de distinguir
griegos queda plasmada la la auténtica belleza del feísmo, y la
contradicción real del ser humano y simple fealdad de algunas obras de
su lucha constante entre esos dos arte que no merecen el nombre de
polos extremos que hay en la tales. En este sentido, otra cuestión
existencia, en la vida y en el interior a plantear sería la de si en el arte
del propio hombre. está absolutamente todo permitido,
o hay límites que no se pueden
Esta contraposición vital se transgredir pues son sagrados.
establece en el arte desde sus Recientemente se ha estrenado una
inicios. Y ello da lugar a la película que precisamente plantea
alternancia de estilos a lo largo de este tema: Por amor al arte, escrita
la historia del arte. A un arte expresividad deformante, contraria y dirigida por Neil La Bute. El
clásico, ejemplo de belleza a los cánones clásicos, aquello que director expone la historia de una
apolínea, le sucede un arte que el artista ha querido crear. Lo que estudiante de Bellas Artes que, si-
rompe las estructuras de la belleza ocurre es que a lo largo de la histo- guiendo el consejo de un profesor
clásica para mostrar la tortuosidad, ria lo que fuera feo en un principio que le invita a hacer algo distinto,
la pasión, el dolor y, a veces, la se envuelve en la pátina del tiempo realiza la transformación física y
fealdad. Pues uno de los dualismos que lo transfigura y lo convierte al moral de un joven al que conoce y
más universales, en los que se final en belleza. Un ejemplo de ello seduce. A modo de un moderno
plasma la metáfora de lo Dionisíaco es el arte Románico, lleno de Pigmalión, la artista va trans-
y lo Apolíneo es en los conceptos expresividad, tormento y formando el interior y el exterior de
de belleza y fealdad artísticas. La deformación, en parte porque su novio con el único objeto de
fealdad ha estado representada provenía de un arte Prerrománico hacer de él una obra de arte, una
siempre en el arte como una manera realizado por los godos o bárbaros, escultura viva. La película termina
de reflejar lo feo de la vida o de que rompieron todas las estructuras dramáticamente al mostrarse, en
plasmar con determinada clásicas. una sala de actos, un performance
con el hecho y su exposición y las
explicaciones en vivo de la propia costumbrismo desnudo, el de los largo de dos extensas salas, con
artista; así, las fotos reales del joven bajos fondos, el de los ámbitos zonas delimitadas que demarcaban
antes y después del cambio, un rurales límites, el de los duros los distintos géneros tratados por el
vídeo con las escenas amorosas, las oficios del vivir, el de las escenas pintor, ya comentados, se pudieron
ropas antiguas ya desechadas, etc., religiosas populares y las de admirar algunos de sus más
en un marco de tubos de neón con tauromaquia, el de las histriónicas conocidos cuadros. Así, algunos
frases que propugnan la total máscaras carnavalescas y el de las retratos entre los que destacaba el
libertad en el arte. El resultado final fiestas y las costumbres hispanas, colectivo de La tertulia del Café
es la destrucción del ser humano juntamente con la irrealidad de las Pombo, 1920, con personajes de las
utilizado como objeto artístico; en calaveras que deambulan por sus artes y las letras de su tiempo, entre
este caso el joven que al ver el cuadros con vida propia. Todo ello ellos él mismo. El Cristo de la
fraude del que ha sido protagonista pintado en un feísmo descarnado Sangre, 1920, y El Cristo de
sin saberlo, huye desolado. Es un que se hace revelación interior. En Burgos, 1920, como muestras de su
ejemplo límite pero el arte actual la exposición efectuada en el pintura religiosa. La procesión de
camina a veces peligrosamente en Museo Nacional Reina Sofía, a lo la muerte, 1930, Garrote vil, 1931,
esas lindes. La guerra, 1920, y El osario, 1931,
de su fascinación por la muerte. Las
En la exposición antológica que se señoritas toreras, 1931, Corrida de
realizara de José Gutiérrez Solana, toros en Sepúlveda, 1923, y Capea
en el Museo Nacional Reina Sofía, en Ronda, 1926-27, de sus facetas
se pudo contemplar en vivo lo que taurinas. Chulos madrileños en
supone el feísmo y su posible belle- domingo, 1915-20, Los autómatas,
za. Gutiérrez Solana es un claro 1907, Verbena en la Pradera de
representante de la llamada San Isidro, 1933, Chozas en la
“ Espa ña Ne gra” o,l o qu ee sl o Alhóndiga, 1912, y Gigantes y
mismo, de la España expresionista. cabezudos, 1932, de sus escenas
El Expresionismo es una de las costumbristas, rurales o urbanas.
Vanguardias Históricas más Reunión de botica, 1934, Los
relevantes y duraderas, pero es un traperos, 1921, y Barbería del pue-
movimiento fundamentalmente cen- blo, 1925, de su tratamiento de los
troeuropeo, y más concretamente trabajos y oficios. Las lavanderas,
alemán. Sin embargo, en España 1910, La cupletista, 1927,
hemos tenido algunos buenos Maniquíes, 1927, Las chicas de
ejemplos expresionistas, como es el Claudia, 1929, y Las vitrinas,
caso de este pintor madrileño cuya 1910, de sus visiones del mundo de
vida y arte parece que estuvieran la mujer, casi siempre en
dominadas por una extraña prostíbulos y teatros. Y finalmente,
predestinación hacia la muerte y Máscaras bailando del brazo,
hacia el carnaval. Dominado por 1938, Mascarada, 1938, El entierro
unas fuerzas ajenas a la voluntad de la sardina, 1935, Máscaras a
del pintor —también magnífico caballo, 1935, y Taller de caretas,
escritor—, siempre se sintió 1943, en los que Solana manifiesta
fascinado y así lo expresó en su su pasión por el carnaval y las
obra, por esas dos realidades máscaras, a la manera del pintor ex-
vitales, la muerte y su caricatura presionista belga James Ensor,
carnavalesca. Marcado por esta aunque de una manera más trágica
circunstancia, el pintor desarrolla e inquietante. Las máscaras de
un estilo propio, solanesco, tene- Ensor resultan tiernas, inofensivas,
brista, oscurantista, expresionista, lúdicas, infantiles, las de Solana,
con personajes inquietantes, de por el contrario, impregnadas de
rostros amalgamados en la más feísmo, conducen a mundos esotéri-
cruda y dura realidad: el del
ARTE
cos, fatales, predestinados y, por primer lugar, el edificio adosado al
tanto, dramáticos. Museo Thyssen Bornemisza que
alberga la Colección Carmen Thys-
Una segunda exposición del Museo sen-Bornemisza, inaugurada por
Reina Sofía, ubicada en el Palacio sus Majestades los Reyes el pasado
de Velázquez del Retiro, se halla mes de junio. Construida por el
igualmente en los límites del estudio BOPBAA (Baquero, Bru-
feísmo, esta vez con una obra total- fau, Bohigas, Plá...) —según
mente contemporánea y transgre- información del profesor Delfín
sor a,l a d e “ Julian Sc h nabel, Rodríguez—, la reciente ampliación
Pinturas 1978-20 03” ,qu es e ha se levanta junto al decimonónico
podido visitar hasta el 13 de Palacio de Villahermosa, de López
septiembre de 2004. El Aguado, reconstruido mag-
inclasificable artista nor- níficamente por Rafael Moneo en
teamericano, aunque en algunas de los años noventa, en lo que se
sus etapas primeras se le sitúe en la podría considerar una arquitectura
Bad Painting, muestra en Madrid elegante y avanzada, soberbiamente
sus enormes pinturas en las que, sin integrada a la correspondiente a los
abandonar por completo la anteriores constructores. De marca-
figuración —así sus dos Large girl do color blanco, se diría que de una
with no eyes, 2001, su Resurrec- claridad refulgente, el nuevo
tion, 1984, o sus Retratos—, se edificio se integra con el antiguo, a
demarca más hacia la abstracción pesar de su modernidad, por su
matérica o expresionista, utilizando extremado equilibrio y simplicidad
en su plasmación cualquier medio de líneas. En sintonía con un neo-
de expresión, lenguaje o material racionalismo que bien podría
siempre que convenga a sus fines suscribir Mies Van der Rohe, la fa-
artísticos. En sus generalmente chada se conjuga en horizontales y
inmensas pinturas todo está per- verticales establecidas por vanos
mitido. Desde sus cuadros de los opacos que en la parte superior se
años setenta y ochenta, convierten en un largo panel
conformados con restos de corrido de ventanas. En su interior,
porcelanas, jarras, ánforas, platos, la ampliación continúa el estilo de
etc., previamente tratados y la remodelación de Moneo, de tal
pintados —según se afirma como manera que se hace difícil apreciar
influjo de sus reminiscencias dónde termina una y empieza la
gaudianas—, ciertamente originales nado con Europa y más concreta- otra. Las paredes rosáceas y los
aunque un tanto aparatosos, como mente con España, su obra es ine- altos lucernarios de luz natural, en
pueden ser The mud in mudanza, quívocamente norteamericana, sobrios cortes angulares, se erigen
1982, The patients and the doctors, especialmente sus grandes con sencillez dando preeminencia a
1978, o The sea, 1981, hasta sus abstracciones deudoras del las obras de arte. En este marco ar-
grandes series abstractas, Los patos Expresionismo Abstracto. quitectónico, la Colección Carmen
del Buen Retiro, 1991, El es- Thyssen-Bornemisza resulta
pontáneo, 1990, Cortes, 1988, Las últimas novedades artísticas de exquisita en su calidad y ajustada
Adieu, 1992, y Ozymandias, 1990, la temporada tuvieron un aliciente en su cantidad. Distribuida a lo
en las que el pintor va realizando añadido a las exposiciones largo de quince salas, en las que se
una obra descomunal, mezclando pictóricas-escultóricas habidas, la ofrecen obras desde el siglo XVII
pintura y materia, a veces con de incorporar dos nuevos edificios hasta principios del siglo XX, la
objetos insólitos, vitalista, llena de museísticos que por su relevancia Colección se ofrece al espectador
fuerza y exuberancia, como una arquitectónica y su modernidad sin como una delicia para los sentidos,
especie de retrato de sí mismo. Si duda darán mucho que hablar. En con el privilegio de poder contem-
bien Schnabel se encuentra relacio- plar en su arte, como sucede en el
primer edificio Thyssen, a muchos Bornemisza y ahora en esta restantes Salas, N, O, P, están
artistas inexistentes en España y sus Colección que amplía la anterior. dedicadas a la pintura de las
museos. Aunque en las primeras Prosiguiendo el recorrido, la Sala L primeras décadas del siglo XX,
salas abunda la pintura flamenca — está dedicada principalmente a la haciendo especial hincapié, como
la Sala A se inicia con un soberbio pintura Nabi y a su gran impulsor no podía ser menos tratándose de
Cristo en la Cruz, 1627, de Anton Gauguin, así los pintores Bonnard, una colección del Thyssen, en los
Van Dyck, de sublime belleza, que Serusier, Denis, Vuillard, junto a expresionistas alemanes, tanto los
por su elevación y ausencia de los cuales también figura Toulouse- del Die Brucke o El Puente, con
sufrimiento anuncia más la Lautrec y de nuevo Rodin con una Emil Nolde, Max Pechstein, Ernst
Resurrección que la Crucifixión—, osada e insólita escultura, Cristo y Ludwig Kirchner, Erich Heckel y
enseguida aparecen Canaletto, y la Magdalena, 1905, abrazados en Karl Schmidt-Rottluff, como los del
Van Wittel con escenas venecianas la cruz. La Sala M presenta otra Der Blaue Reiter o El Jinete azul,
y romanas, un pequeño paisaje algo escultura de Rodin y a algunos neo- con la figura versátil y única de
oscuro de Caspar David Friedrich, impresionistas como Signac, Wassily Kandinsky, así como la del
y tres preciosos paisajes dignos de Regoyos y Van Rysselbergue. Las independiente Munch. También hay
una larga y detenida representantes del Fauvismo, como
contemplación: La soledad, 1866, Matisse, Derain, Dufy y Vlaminck,
de Corot; Molino de Agua, 1884, de y algunos otros del Cubismo y Post-
Van Gogh; y La esclusa, de Cubismo, como Picasso, Braque,
Constable. La Sala D está dedicada Delaunay, Léger, Juan Gris, Kupka,
a la pintura francesa del XVIII, Goncharova y Stepanova. Un solo
Boucher, Fragonard...; las Salas E y cuadro de Edward Hopper, Veleros
F a la pintura Norteamericana del “ElMar thaMcKe en ”, nos acerca
XIX, Bierstadt, Winslow Homer..., a la pintura enigmática y serena del
que se continúa posteriormente en artista norteamericano, y conduce al
la Sala J, con el Impresionismo final de la exposición de esta
anglosajón USA, William Merrit exquisita y magnífica Colección
Chase, etc. La Sala G conduce al Carmen Thyssen-Bornemisza, desa-
Realismo en Francia, Corot, rrollada en los tres grandes campos
Courbet, Boudin... En la Sala H artísticos, arquitectura, escultura y
comienzan a aparecer los pintura, donde sin peligro de exa-
impresionistas franceses, Pissarro, geración, se puede deleitar la
Monet, Sisley, Renoir, Degas, que belleza en toda su pureza.
prosiguen en la Sala K, donde se
repiten los Monet, Sisley y Pisarro, Mucho más controvertido es el
junto a Berthe Morisot —la única segundo edificio museístico abierto
privilegiada pintora impresionista— al público este verano, aunque toda-
, Sorolla, y una bella escultura de vía no lo sea oficialmente, según su
Rodin, El Beso del Ángel, 1911. constructor el francés Jean Nouvel
Entre estas últimas salas hay una que no ha visto con buenos ojos
pequeña rotonda, que conserva la que se inauguraran dos
antigua decoración arquitectónica exposiciones sin estar
del edificio —rejería y zócalo de completamente terminado el
mosaico—, que alberga una sola monumento. Se trata de otra
escultura de Rodin: La muerte de ampliación, esta vez la
Atenas, 1904-06. No cabe duda que correspondiente al Museo Nacional
estas salas son las más Reina Sofía, que se erige en la parte
espectaculares de la Colección, por de atrás del antiguo hospital de
la universal belleza que poseen las Sabatini, por lo que su visión
obras impresionistas que en España completa sólo puede ser efectuada
no se pueden contemplar más que desde la Ronda de Atocha. Al con-
en el primer Museo Thyssen- trario de lo que sucedía, a pesar de
e lNou ve l
,“ RoyLi chtens t
ein:Al l
ARTE
su modernidad, con la ampliación
del Thyssen, la del Reina Sofía no a bouta rt”,ques eh ap odi dov isitar
se integra con el viejo hospital hasta el 27 de septiembre, muestra a
sabatiniano, todo lo contrario, uno de los representantes más egre-
forma un fuerte contraste, casi un gios del Pop-Art, estilo
cuerpo extraño se podría decir. De fundamentalmente norteamericano
dimensiones colosales, debido poco visto en España, por lo que ya
principalmente al enorme alero en sí supone un aliciente añadido a
voladizo de color rojo que corona la la exhibición, no demasiado
construcción, la ampliación se extensa ni demasiado sistematizada.
puede enc uad rare nune s
til
o“ high El Pop-Art que todos conocemos,
tech” , por e l
lo t i
e ne c i
e rt
as que nació como contraposición al
similitudes con el Museo Pompidou Expresionismo Abstracto —tan
de París, y por lo mismo se bello como deshumanizado—, con
encontraría completamente dentro sus grandes figuras e iconos
de la cultura del feísmo. Otra coloristas, llegó a ser un arte
cuestión sería la de si ese feísmo, irónico, divertido y vital, con un
en este caso, posee belleza o no, lo gran sentido crítico que atacaba los
cual dejamos al criterio del lector. excesos del consumismo y de la
Lo que sí es indudable es que el publicidad, desprovisto de carga
edificio será muy comentado, dramática, y disfrutaba con fruición
aunque quizá mucha gente no lo del arte y de la vida. Y aunque
vea exteriormente simplemente al tenga sus detractores, el Pop-Art
pasar, debido a su ubicación, y haya resulta un arte-arte definitivo. En el
que ir ex profeso a verlo a la citada caso de Lichtenstein, el pintor hizo
Ronda. Por lo demás, su fachada, del cómic un mito, lo cual no es
aparte del gran alero voladizo que poca tarea. Por otro lado, su cultura
es el principal protagonista, se de la imagen y la de cuadros de
estruc turaenuna szona scon“ br is
e- historia del arte constituyen
sole il”ye no t
rasc on gr ande s también el eje de su producción,
paneles rojo brillante y losetas de que podríamos resumir en términos
material, además de con escaleras de simplicidad y comunicabilidad
vistas. En su interior, el edificio directa. Esta exposición, que abarca
posee grandes naves que se pueden desde 1961 a 1997, muestra algunas
compartimentar a conveniencia, de sus obras más significativas en
pero todo él, si bien hay que esperar sus diferentes etapas. Se inicia con
a su definitivo acabamiento, resulta que finalmente haya cambiado la algunos cómic de los años sesenta
un tanto destartalado interiormente. estructura completamente cúbica y de su período Pop 1961-66:
De s de l ue
go,e sos í,muy “ high cerrada —que sólo se mantiene en Popeye, 1961, Look Mickey, 1961,
tech” ,e nc onc ret
ol a ss onoras la parte de atrás—, y haya abierto Kiss V, 1964, Forget it! Forget me!,
escaleras de hierro que comunican vanos y galerías sustentadas con 1962, Whaam!, 1963, su célebre
sus dos pisos. Con la finalización columnas en la fachada principal, lo combate aéreo; continúa con su
de este segundo edificio museístico que aligera notablemente la período moderno-minimalista 1966-
de Nouvel, ya solamente resta arquitectura y la hace más armónica 1972, con grandes cuadros
esperar el término de la ampliación con el edificio de Villanueva abstractos minimalistas: Mirror n°
del Museo del Prado, con el (Museo del Prado) y con Los 1, 1969, de su serie de espejos,
co ntrov er
ti
do “ cubo ” de Ra fae
l Jerónimos. Entablature, 1974, Big Painting VI,
Moneo, y la prometida Tres exposiciones se muestran en la 1965; prosigue con su período
urbanización de la gran zona actualidad en el Museo Nacional pseudo cubista 1972-77: Cosmolo-
artística. En la actualidad, el Reina Sofía, dos en el edificio gy, 1978, Figuras en paisaje, 1977;
monumento se encuentra muy avan- Nouvel y una en el de Sabatini. En enlaza con el período pseudo
zado, y hay que agradecer a Moneo surrealista 1977-80: Portrait, 1977,
retrato sin cabeza y en su lugar un relación de Dalí con el mundo del Relaciones de Dalí con el mundo de
queso de gruyere, Chica con cine, en concreto con Buñuel, la moda. Obras: Venus de Milo con
lágrima III, 1977; y finalmente Disney, Hitchcock, etc., en cajones, 1936, (escultura), Mujer
muestra algunos de sus intermedios decoración con fondo de color gris. cajón, 1936, Aparición de la
y últimos cuadros, todo ello un Entre las obras: Retrato de Luis Afrodita de Cnido, 1981, trajes
tanto entremezclado y sin delimitar Buñuel, 1924, Shirley Temple, el surrealistas, publicidad de revista
cronológicamente: Rouen Cathe- monstruo sagrado, 1939, Retrato Vogue, perfume Dalí, zapatos, cor-
dral set V, 1969, tres cuadros de Lawrence Olivier como Ricardo ba tas, e t
c.. 6) “ Documentos
basados en la famosa serie de III, 1955, fotografías, manuscritos, fo t
og ráfi
c os”. A través de una
Monet, Landscape with boat, 1996, etc .
. 4) “ Sueño de Ve nus ”. cortina de lamas se pasa a esta zona
y Vista con puente, 1996, ambos en Dedicado al Pabellón de Dalí en la dedicada a sus colaboraciones con
un pseudo puntillismo casi Exposición Universal de Nueva fotógrafos como Man Ray, y el
abstracto. York, 1939, mostrado en cuadro Leda Atómica, 1949, con
fotogr af
ías.5)“ Fiat modes, pereat Ga l
ac omomus a.7)“ Dal íNe ws ”.
“ Da l
í. Cu ltura de ma sas”, ar s”. Decoración en color amarillo. Medios de comunicación. Rela-
constituye la segunda gran ciones de Dalí con la prensa, y
exposición ubicada en el edificio publicación de su propio periódico
Nouvel del Museo Nacional Reina Dalí News. Periódicos, revista Life,
Sofía, organizada en conmemora- Vogue, etc.. Pinturas: Autorretrato,
ción al centenario del artista. 1941, Apoteosis de Homero, 1944-
Compartimentada en ocho zonas, y 45, La nariz de Napoleón, 1945. 8)
decorada de una manera muy su- “ Epílogo”. Dalí y Andy Warhol se
rrealista, con habitáculos extraños, conocen en 1965, en Nueva York.
colores estridentes y elementos En esta última sala se proyectan en
sorpresa, que la hacía curiosa y las paredes retratos
original. La exposición mostraba cinematográficos o screen tests,
obras de Dalí junto a toda clase de realizados a Dalí por Warhol. Las
objetos y escritos relacionados con películas se pueden contemplar
ella, en la eterna relación- desde tumbonas situadas en el
contraposición del arte y el antiarte, suelo.
dentro del amplio ámbito de la La tercera exposición del Museo
c ult
ur a de ma sa s. 1) “ Vida Nacional Reina Sofía, esta vez en el
moderna. Arte. e
Antiart ”. edif i
c i
odeSa bati
n i,“Monocromos.
Decorada en fuerte color rojo, con De Malevich al presente”,hasta el
cuadros como Ferias de la Santa 6 de septiembre de 2004, consisti-
Creu, 1922, Autorretrato cubista, ría en una exhibición pictórica y
1923, El enigma de Hitler, 1939, escultórica delimitada por zonas de
Teléfono-langosta, 1938, y El gran color; según el programa, sería
masturbador, 1929, con una gran concebida como una instalación
mesa central de cristal conteniendo colorista, sin la disposición de
libros, ilustrac iones ,e t
c .2 )“ El orden cronológico convencional,
Ánge lus.Elmi t
ot rágico”.Dalí efectuando la agrupación de las
siempre estuvo obsesionado con la obras con las mismas tonalidades
pintura de Millet, El Ángelus, 1857- cromáticas, de donde proviene el
59, lo cual se refleja en esta zona. título de la muestra. Así, la zona de
Así, El Ángelus arquitectónico de color blanco, la zona de color
Millet, 1933, Reminiscencias plateado, la de color oro, la de color
arqueológicas del Ángelus de azul, la de color rojo, la de color
Millet, 1933, porcelanas decoradas negro... Las obras funda-
con el tema, ilustraciones, etc.. 3) mentalmente son minimalistas, esto
“ Hollywood: lugar de es, de grandes dimensiones y
p eregr i
na je”. Enseña la constante abstractas, con el mínimo de expre-
sión artística y uniformes en el pasional, y por tanto deviene la
color, abundando más las esculturas ataraxia.
que las pinturas. Por tanto, en la
exposición encontraremos a
algunos de los más relevantes
artistas del Minimal, así como del
Colour-field (pinturas en grandes
zonas de color plano). Como las
obras mayoritariamente son
inmensas, la exposición requiere de
un gran espacio, a veces se sitúan
en el techo o en el suelo, pero esas
disposiciones son ya habituales en
el Reina Sofía. Lo interesante de la
exposición es su carácter Minimal,
Espacial y Colour-field, en los en-
tornos de color citados, con obras
de artistas tan representativos del
arte de la segunda mitad del siglo
XX, como son Yves Klein, Robert
Ryman, Lucio Fontana, Julio Le
Parc, Donald Judd, Carl Andre,
Ellsworth Kelly, Pierre Soulages,
Alberto Burri, Frank Stella, Susana
Solano, Juan Uslé, Antoni Tàpies,
entre otros. La consecuencia final
de la exposición resulta muy
armónica, debido a las
agrupaciones de las unidades
cromáticas, aunque un tanto fría,
por la frialdad que siempre conlleva
la abstracción Minimal. Pero el
largo paseo entre las obras, en una
exposición casi vacía de público,
fue gratificante; envuelto en un
misterioso halo de sosiego, como el
de un templo. Acaso precisamente
por esa frialdad distante y hueca
que hacía de las esculturas un
bosque de piedra silencioso en
perfecta geometría y a las pinturas
grandes espejos planos de color
uniforme. Y es que el nihilismo y la
deshumanización que siempre
acompañan a la abstracción, tanto
más cuando las abstracciones son
planas, minimalistas, de grandes
proporciones y geométricas —lo
que en cierto modo las convierte en
un arte apolíneo lejos del feísmo—,
producen ese efecto de evasión de
todo componente emocionante y

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