El Desanimo
El Desanimo
El Desanimo
Así mismo, en el área espiritual pasamos circunstancias que son difíciles, ya sea,
en el aspecto económico, o en el aspecto de salud y aun nos desanimamos.
Dios desea que sus hijos ante cada situación de la vida podamos depender de él y
tomar decisiones correctas que nos permitan seguir avanzando con firmeza y con
la fortaleza de Dios.
El desánimo nos lleva muchas veces a ver las cosas sin una importancia real, en lo
espiritual nos lleva a ya no practicar aquellas cosas que nos fortalecen. Una
persona desanimada es una persona que difícilmente buscará orar, es una persona
que difícilmente querrá leer la Biblia, es una persona que difícilmente tendrá el
ánimo de ir a congregarse y menos de servir a Dios.
El desánimo es aquella sensación que quiere privarnos de hacer todo lo que Dios
quiere que hagamos. Este produce decaimiento, te hace tropezar, en otras
palabras cuando una persona está caminando firme y se desanima pierde fuerza,
empieza a tropezar, empieza a tomar decisiones a la deriva, y por eso se ve en
momentos en donde está tropezando con cosas que pudo elevarse a otro nivel de
gloria para poder vencerlas pero no lo logro, porque se apagó, se debilito, se
rindió y se disolvió el fuego del espíritu santo en su vida. Pero es ahí, donde la
palabra de Dios nos dice: Por lo demás, hnos. míos, fortaleceos en el Señor, y en
el poder de su fuerza. Efesios 6:10