Pastor Josè Luis Rodriguez

PREGUNTA: ¿CON CUÀL VASIJA TE

IDENTIFICAS?
MISIÒN: “QUE EL CREYENTE
ALCANCE UN DESTINO DE ESTUDIO- MENSAJE
GLORIA”

“VASIJAS QUEBRADAS
EN MANOS DE ORO”

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 “Bienvenido al taller del maestro ”:

En su taller “El” va a revelarte lo que

quiere hacer con tu vida, y te mostrarà
el propòsito especìfico que tiene para tì.
En un momento de la historia del pueblo de Dios,
el Sr decidiò estimular la imaginaciòn
del profeta Jeremìas, de forma tal que
concibiera al Sr como un alfarero.
Muchos creyentes han experimentado su unciòn
transformadora, pero, con el paso del
tiempo, por diferentes razones, el aceite se
ha estancado, el vino nuevo se ha avejentado,
no ha habido una renovaciòn en el espìritu,
y ni siquiera tu experiencia te ha renovado.
...Ante èsta situaciòn es cuando se oye un
clamor que sale de muy dentro de tì
pidiendo restauraciòn. Pero cuidado! Recuerda que el
principio de la restauraciòn es reconocer nuestra realidad.
En consecuencia....

....Queridos Hnos: ¡Bienvenidos a la

Casa del Alfarero!

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 1-VASIJAS DE BARRO

2-VASIJAS DESESPERADAS

3-VASIJAS VACÌAS

4-VASIJAS QUEBRADAS
VASIJAS DE DESHONRA
5-VASIJAS DESPRECIADAS

6-VASIJAS INMUNDAS

7-VASIJAS REBELDES

8-VASIJAS DE MALDICIÒN

1-VASIJA SANTA

2-VASIJA RESTAURADA

3-VASIJA DE GUERRA

VASIJAS DE HONRA
4-VASIJA DE ALABASTRO

5-VASIJA DE ACEITE

6- VASIJA DE AGUA

7-VASIJA DE SAL

8-VASIJA DE GLORIA

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 1- UNA VASIJA DE BARRO:

“Palabra de Jehovà que vino a Jeremìas diciendo:

Levàntate y vete a casa del alfarero y allì te harè oìr
mis palabras.
Y descendì a casa del alfarero, y he aquì que èl
trabajaba sobre la rueda.
Y la vasija de barro que èl hacìa se echò a perder
en su mano; y volviò y la hizo otra vasija, segùn
le pareciò mejor hacerla.
Entonces vino a mì palabra de Jehovà, diciendo:
¿No podrè yo hacer de vosotros como este alfarero, oh
casa de Israel? Dice Jehovà. He aquì que como
el barro en la mano del alfarero, asì sois vosotros en mi
mano, oh casa de Israel “
Jeremìas 18: 1-6

Aquì, todos debemos hacer una mirada a nuestro interior, y debemos reconocer que
somos barro, porque de lo contrario, el alfarero no podrà trabajar con nuestra vida. Dice
el versìculo 3 : “Descendì a casa del alfarero y he aquì que èl trabajaba sobre la
rueda”.
Desde el dìa que naciste, Dios, te tomò y te colocò en su rueda , y por muchos años ha
tratado de moldearte.
Para que el alfarero realice su diseño, pone al barro (nosotros) sobre una rueda, y con
“SUS” manos le va dando forma.
Debes saber que el “tiempo de la rueda” , es el tiempo en que Dios està imprimiendo
sus huellas en tu vida, y te està moldeando. El necesita trabajar el barro que muchas
veces se està resecando , en otras, denota resistencia y se pone duro. O quizàs, el alfarero
al estar trabajando, observa que en su vasija se produjo una grieta, una imperfecciòn, que
le impidiò seguir modelando, al punto tal que la vasija se deshiso en sus manos.
Ahora, la pregunta es la siguiente: ¿Què pasa si la vasija se malogra? Puede que al
analizar tu vida, hayas sentido un fracaso, y que mires a un costado y veas en el piso los
pedazos de un sueño, y te sientas frustado, creyendo que el plan de Dios para tu vida no
se ha concretado. ¿que crees que harà Dios? ¿tomarà a otra persona para
reemplazarte?....podrìa hacerlo, pero NO LO HARÀ.

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Dice Jeremìas que el alfarero, en lugar de tomar otro barro, en lugar de volcarlo al fango,
toma esa misma pieza que se habìa roto. “EL” vuelve a buscarte y te invita a comenzar
de nuevo.
Asì , podemos ver que hay muchos cristianos malogrados, muchas vasijas quebradas,
vacìas,...estropeadas, fragmentadas,...
Dice el versìculo 4: “Y la vasija de barro que èl hacìa se echò a perder en su mano”
¿estarà hablando de tu vida? –NO RESPONDAS-
Dice luego: “Y volviò y la hizo otra vasija, segùn le pareciò mejor hacerla”.
Dios, la obra que ha comenzado en tì, la perfeccionarà.
Aquì, comienza un gran desafìo, porque èl no quiere una vasija quebrada, ni una de
adorno en un estante.
Cuando la vasija se echò a perder, el proyecto de Dios siguiò sin concretarse. La
pregunta es: ¿DEJARÀS QUE EL PLAN DE DIOS PARA TU VIDA SE MALOGRE?.

2- UNA VASIJA DESESPERADA:

“Y volviò y la hizo otra vasija, segùn le pareciò mejor hacerla”.

Jeremìas 18:4

El 1º paso para permitir que el alfarero obre en nuestras vidas, es reconocer nuestra
necesidad de restauraciòn.
En èsta vasija, vemos el clamor de aquel que se siente mal. Si vamos al Salmo 80, Asaf
suplica ser restaurado. Es el clamor de aquel que conoce muy bien a Dios, y que ahora
reconoce su pecado, su situaciòn, y con desesperaciòn, pide, clama y gime, suplicando
por la restauraciòn de su vida. Es la oraciòn del cristiano que siente que su relaciòn con
Dios se enfriò y perdiò vigor..., que el pecado empezò a instalarse y la comuniòn con
Dios ya no es la misma. Que percibe a Dios distante, o quizàs siente que a causa de
haberse apartado de Dios, ha perdido la cobertura, su protecciòn: dice el V.12: “¿porque
has derribado su cerca, dejando que le arranquen uvas los que van por el camino?”
La cerca que guardaba su vida se vino abajo, los vallados de protecciòn se aportillaron.
Todo comenzò con un enfriamiento, siguiò con un pecado, y ahora la cerca està
derribada, quedando expuesto al leòn rugiente, al ataque del mismo Satanàs. Se ha
vuelto una “vasija desesperada” que no sabe o no le es fàcil volver a lo de antes.
Antes, habìa dado frutos, pero ahora, su viña estaba destruìda, estaba asolada, quemada
y cortada.
Cuando siente que le han arrancado las uvas, se refiere, a que le han arrancado las cosas
hermosas de su vida cristiana.

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Asaf, en el Salmo 80, dramaticamente dice en el versìculo 13: “La destroza el puerco
montès, y la bestia del campo la devora”.
Intenta orar, pero percibe a Dios lejano, enojado, que su presencia se ha ido, que ya no
escucha, y por eso piede en el versìculo 14: “Dios todopoderoso, regresa, por favor,
mira atentamente desde el cielo”.
Y en el versìculo 3,7 y 19 dice: “¡Oh, Dios, restàuranos! Haz resplandecer tu rostro y
seremos salvos. Haz que volvamos a ser lo que fuimos...”
No importa què fue lo que le sucediò a tu vasija. Tal vez fuè simplemente un rayòn, o
quizàs, el golpe la cascò. Tal vez el daño fue màs grave, y el vaso està quebrado y parece
que no volverà a servir.

3- UNA VASIJA Y SUS TIESTOS:

“Bien que fuistes echados entre los tiestos , sereìs como alas
de paloma cubiertas de plata, y sus plumas con amarillez de oro”
Salmo 68:13
Dice la palabra “fuistes echados entre los tiestos”.

 Los tiestos son recipientes, vasijas, vasos hechos de barro que se moldeaban para
usarse con diferentes fines. Estas vasijas de arcilla de barro, precisamente por el material
con el que estaban hechas, no poseìan demasiado valor econòmico. El salmista en èsta
figura se refiere a la experiencia de muchas personas que fueron consideradas como algo
sin valor, como una vasija de barro sin mucha importancia, arrojados allì, entre los
tiestos...., desestimadas como algo comùn, ordinario, que no sobresale. Son casos de
rechazo o de abandono, en donde no pueden avanzar hacia el propòsito de Dios.

 Tambièn la palabra “tiesto”, ademàs de vasija de barro, tiene otro significado. Tiesto
es tambièn un pedazo de vasija. Cuando una vasija se rompìa, lo hacìa en diferentes
tiestos. Cada uno de esos pedazos es un tiesto. Tiesto es un pedazo de esa vasija de
barro.

 El tiesto, es èsta 2º acepciòn, el resultado de algo que se ha quebrado, de una vasija

que se ha partido. “El tiesto es asì, un pedazo de barro quebrado y seco”
El mismo David en el Salmo 22:15 dice: “Como un tiesto se secò mi vigor”, como un
pedazo de vasija seca, de barro seco. Asì como David, muchos creyentes se sienten asì,
hecho pedazos, y dicen “me han destruìdo sin misericordia”.
Tal como dice el pasaje, fuiste echado entre los tiestos. Desvalorizado.Y fuistes tirado
allì, entre los desperdicios. ¿te sientes asì?
Ahora, ¿que harà Dios ante èsta situaciòn?

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Dice el pasaje y presta atenciòn! :”Sereìs como alas de paloma cubiertas de plata, y sus
plumas con amarillez de oro”.
El Sr dice que te harà semejante a las alas de paloma revestidas de plata, y en la Biblia
la plata es sìmbolo de purificaciòn: “como plata refinada en horno de tierra, purificada
7 veces” (Salmo 12:6). La plata es pasada por el fuego y allì, sometida al intenso calor,
es refinada, purificada 7 veces. Dice el Salmo 66:10 : “porque tù nos probaste, oh Dios;
nos ensayaste como se afina la plata”.
Y tambièn que las plumas estàn cubiertas de oro. Y el oro en la Biblia es sìmbolo del
metal màs precioso. Por Ej dice Isaìas 13:12: “Harè màs precioso que el oro fino al
varòn, y màs que el oro de Ofir al hombre”.Osea que para Dios nosotros somos lo màs
valioso. Por eso el Sr dice que “seràs como alas de paloma. Alas revestidas de plata,
purificadas y con plumas cubiertas de oro, el metal màs valioso”.
El Sr quiere que dejes de ser un tiesto tisado en un rincòn, para que comiences a ser una
paloma con alas de plata y plumas cubiertas de oro. “El” te toma para hacer contigo una
obra de arte. La pregunta ahora es ¿que haràs con tu vida? ¿seràs tiesto o paloma?

4- UNA VASIJA VACÌA:

“Se sentaron tristes en tierra, y subiò el clamor de Jerusalèn.

Los nobles enviaron sus criados al agua; vinieron a las
lagunas, y no hallaron agua; volvieron con sus vasijas vacìas,
se avergonzaron, se confundieron, y cubrieron sus cabezas”.
Jeremìas 14:2-3

Este es el caso de aquellos que proyectamos objetivos, sueños, y creemos que

alcanzaremos lo que estamos buscando, pero cuando nos lanzamos hacia el
cumplimiento soñado, no encontramos el agua anhelada, y volvemos con nuestras
vasijas vacìas. La desilusiòn nos golpea duro, y un estado de verguenza y de confusiòn
cubre nuestra mente.
Aquì el centro es la “DESILUSIÒN”, y èsta significa “estar descontento”, porque los
proyectos en los que habìamos confiado y esperanzado, han fracasado. La desilusiòn es
un abatimiento que uno siente cuando ve que sus planes, sus sueños y convicciones se
estrellan frente a tus ojos, osea, ante la realidad de la vida.
Ud. se confronta con la realidad. Satanàs usa ese estado para derrotarnos. El ser humano
debe cambiar de mentalidad, porque aunque Ud no lo crea, la desilusiòn es positiva.

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El diccionario dice que desilusiòn significa “PÈRDIDA DE LA ILUSIÒN,
DESENGAÑO”. Si la desilusiòn permite que ya no vivamos de ilusiones, ni bajo
engaños, entonces, bienvenida sea, porque nos ayuda a comprender cuàl ha sido la
ilusiòn en la que hemos caìdo, y ver que engaño hemos sido vìctimas.
La palabra ilusiòn, deriva de un vocablo en latìn que significa engañar. La ilusiòn es un
error de los sentidos o del entendimiento. Hace que tomemos las apariencias como
realidades. El iluso es el que es vìctima de un engaño.

Vamos a ver los 6 tipos de ilusiones màs comunes:

1)DESILUSIÒNATE DE TUS PROYECCIONES: hay personas que viven pensando en

el mañana, haciendo planes, tratando de discernir la voluntad de Dios para su futuro.
Es bueno prever lo que vendrà, pero si eso impide que yo pueda vivir plenamente el hoy,
estoy cayendo en una evasiòn ilusoria. En lugar de enfrentar la realidad de hoy, huìmos
mirando hacia adelante. Esa vana ansiedad nos llena de carga y angustia. Dice la palabra
“echa tu carga al Sr sabiendo que El tiene cuidado de nosotros”.
Hacer un proyecto para levantar un edificio es esencial, pero si solo tengo proyectos y
nunca doy el paso de contruirlos, jamàs tendrè la obra soñada.
El problema es cuando las realidades presentes siguen sin modificarse.
Jesùs nos exhortò diciendo en Mateo 6:34: “No os afaneìs por el dìa de mañana,
porque el dìa de mañana traerà su afàn. Basta a cada dìa su propio mal”.

2)DESILUSIÒNATE DE TUS PLANES: una 2º ilusiòn es creer que podemos planificar

la vida por nuestra propia cuenta, sin que Dios intervenga. La pregunta es ¿son mis
planes o los de Dios? ¿es mi voluntad o la de El? .Debemos sujetarnos a sus designios.

3)DESILUSIONATE DE TU IDEA DE FELICIDAD: otra fuente de engaño que trae

sufrimiento, es la ilusiòn de creer que la felicidad depende de que nuestros sueños se
concreten.
Existen muchas personas que buscan la felicidad en las cosas y que confìan màs en sus
logros que en el amor de Dios.
La felicidad es mucho màs que la emociòn de lo que sentimos cuando se cumple un
deseo.
La verdadera fuente de felicidad està en nuestra comuniòn con Dios. El salmista luego
de mucho sufrimiento, asì lo comprendiò y asì declarò en el Salmo 16:2,8,9 y 11: “No
hay para mì bien fuera de tì...A Jehovà he puesto siempre delante de mì; porque està a
mi diestra, no serè conmovido...Se alegrò por tanto mi corazòn, y se gozò mi alma; mi
carne tambièn reposarà confiadamente....;me mostraràs la senda de la vida; en tu
presencia hay plenitud de gozo; delicias a tu diestra para siempre”.
David afirma que nada podrìa llegar a conmoverlo. Nada lo desilusionarìa, porque la
fuente de su gozo, de su felicidad, lo que daba plenitud a su vida, no eran sus sueños,
sino estar en la presencia de Dios.

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4)DESILUSIÒNATE DE SER RECONOCIDO: èsta es otra ilusiòn engañosa que nos
hace creer que tenemos que formarnos de una personalidad que vaya por el mundo
cosechando el reconocimiento y la aprobaciòn de los demàs. Muchos no pueden vivir
plenamente porque son esclavos de opiniòn, volvièndose dependientes, respondiendo a
las expectativas de otros, teniendo que vivir a merced de la aprobaciòn ajena. La
tragedia aparece cuando el elogio no llega, o peor aùn, cuando en lugar de aprobaciòn
recibimos crìtica.
Ud debe recordar que no necesitamos del OK humano, sino sòlo de la aprobaciòn y
amor incondicional de Dios, ya que es fuente inagotable de aceptaciòn, de amor y
valorizaciòn.

5)DESILUSIONATE DE ESPERAR CAMBIOS EXTERIORES: èsta 5º ilusiòn o

engaño, se basa en creer que si las circunstancias cambian, entonces serè feliz, o que mi
felicidad depende de lo que suceda alrededor de mì.
La mayorìa de los creyentes piden que Dios les cambie las circunstancias. Son pocos los
que piden: “SR:CÀMBIAME A MÌ”.
Aguardan a que cambie el jefe, la esposa, o que la suegra se mude, o que el gobierno
tenga un plan perfecto “salvacrisis”, osea que viven de desilusiòn en desilusiòn.
Ahora: “si tù cambias, a partir de tu transformaciòn, las circunstancias seràn afectadas”.

6)DESILUSIÒNATE DE LAS PERSONAS: èsta es la desilusiòn màs dolorosa. El

Salmo 118:8-9 dice: “Mejor es confiar en Jehovà que confiar en el hombre. Mejor es
confiar en Jehovà que confiar en prìncipes”.
Tambièn dice el Salmo 146:3: “No confièis en los prìncipes, ni en hijo de hombre,
porque no hay en èl salvaciòn”.
Ahora no nos vayamos al otro extremo. Debemos entender bien lo que la palabra de
Dios nos enseña. No se trata de que desconfìes de tu hermano, ni de convertirnos en
excepticos, ni de aislarse a punto tal de no relacionarse con nadie para no ser heridos. Se
està pidiendo que evitemos descansar nuestra felicidad en la gente, porque el ser humano
es pecador y falible, y en algùn momento nos van a fallar, porque asì es la naturaleza
humana .

RESPUESTA: dice la palabra de Dios en Deuterenomio 31:6-8: “Esforzaos y cobrad

ànimo; no temaìs, ni tengaìs miedo de ellos, porque Jehovà tu Dios es el que va
contigo; no te dejarà ni te desampararà,... Y Jehovà va delante de tì; El estarà contigo,
no te dejarà ni te desampararà,...”

El alfarero permite que nos desilusionemos, porque con sus manos està sacando las
imperfecciones provocadas por las ilusiones engañosas. Tambien en ocasiones permite
que las personas nos lastimen, para que nuestra confianza sea depositada sòlo en El.
Debes abandonar la sensaciòn de fracaso y volver a “SU” taller.

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 5 –UNA VASIJA QUEBRADA:

“De todos mis enemigos soy objeto de oprobio, y de mis

vecinos mucho màs, y el horror de mis conocidos;
los que me ven fuera huyen de mì.
He sido olvidado de su corazòn como un muerto.
He venido a ser como un vaso quebrado”
Salmo 31:11—12

Jesùs dijo “yo he venido al mundo para que tengan vida, y vida en abundancia”. Su
propòsito es que seamos transformados de gloria en gloria en su misma imagen. Pero
¿que nos impide vivir una vida de abundancia, de triunfo en triunfo, una existencia que
sea transformada de gloria en gloria?. La respuesta està en las raìces de amargura, que se
instalan en el corazòn cuando la vida no se nos presenta como esperàbamos. En algunas
ocasiones nos sentimos como David. Hemos sido objeto de oprobio. Nos han herido.
Nos han dejado sòlos, abandonados,...quizàs por tu misma familia, quizàs por tus
amistades, o quizàs o peor aùn, dentro de tu ministerio. La amargura que surge de no
entender porquè tenemos que sufrir, nos hace sentir como “un vaso quebrado”.
Podemos definir a la amargura como un veneno horroroso y tenebroso que lentamente
nos destruye.

Las heridas se profundizan, el perdòn se retiene y nuestra vasija se quiebra.

Dice la palabra en Hebreos 12:15: “Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la
gracia de Dios, que brotando alguna raìz de amargura, os estorbe, y por ella muchos
sean contaminados”.

Lo cierto es que las raìces de amargura son una de las causas principales para los estados
depresivos.
Si èsta es tu situaciòn, debes confesar a Dios tu amargura, ya que no podemos esconder
nada a los ojos de Dios. Luego renuncia a ella, porque es un pecado.
Dice Pablo en efesios 4:31: “Quìtense de vosotros toda amargura”.

Deja que la unciòn de restauraciòn entre a tu vida, y comienza a vivir como vasija
nueva, conforme al plan de Dios para tu vida.

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 6- UNA VASIJA
DESPRECIADA:
“Es èste hombre...una vasija despreciada y quebrada? ¿es un
trasto que nadie estima? ¿porque fueron arrojados èl y su
generaciòn, y echados a tierra que no habìan conocido?”
Jeremìas 22:28

Aquì la palabra nos habla de un hombre, pero ¿quien era ese hombre? La versiòn RVA
lo llama Conìas. Otras versiones lo llaman Jeconìas. De èstas 2 formas designaban al rey
Joaquìn, rey de Judà.
Es importante que la Iglesia vea y sepa la historia de èste rey, porque su situaciòn puede
servir como prevenciòn o correcciòn, ya que es triste que Dios considere la vida de un
hombre como una vasija despreciada y quebrada. El rey Joaquìn reinò solo 3 meses, y en
esos 90 dìas sòlo hizo lo malo delante de los ojos de Dios (2 Reyes 24:9), y como
resultado de su maldad, el Sr lo condenò al destierro babilònico. Dios lo desechò y fuè
deportado a Babilonia, al igual que su influyente madre Nehusta (versìculo 8), la cual
fuè con èl al desierto y allì muriò.
Aquì el pueblo ve al joven rey en el desierto y no entienden el porquè del destino del
monarca, ahora considerado junto a su descendencia como una vasija despreciada y
quebrada. Jeremìas, en lugar de responder al interrogante popular, endurece aùn màs su
profecìa diciendo: “¡tierra, tierra, tierra! oye palabra de Jehovà. Asì ha dicho Jehovà:
Escribid lo que sucederà a este hombre privado de descendencia, hombre a quien
nada pròspero sucederà en todos los dìas de su vida; porque ninguno de su
descendencia lograrà sentarse sobre el trono de David, ni reinar sobre Judà”
(Jeremìas 22:29).
La orden de Dios fuè que quedara registrado en la historia el castigo de èste rey. Su
rebeliòn ante Dios provocò que fuera un hombre cuya descendencia jamàs se sentarìa en
el trono de David en Judà. Su decisiòn de vivir de espaldas a Dios hizo que fuera
considerado como una vasija despreciada y quebrada. Y la palabra dice aùn màs: “a
quien nada pròspero sucederà en todos los dìas de su vida”. La versiòn popular dice:
“anoten a èste hombre como un hombre que fracasò en la vida”.
La historia de Joaquìn puede ser la historia de muchos creyentes que sienten que en sus
vidas algo fracasò. Lo tràgico de Joaquìn es que habìa sido elegido por Dios para ser rey.
Sòlo una persona de toda una naciòn tenìa ese privilegio, pero se hundiò èl y toda su
descendencia, terminando como un esclavo en Babilonia.
La palabra de Dios dice que Jesùs “nos amò, y nos lavò de nuestros pecados con su
sangre y nos hizo reyes” (Ap. 1:5-6)
El Sr nos quiere como vasos de honra. Debes depender sòlo de El y haz todo para su
gloria. NO LO HAGAS ESPERAR. “VUELVE A LA CASA DEL ALFARERO”

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 7- UNA VASIJA INMUNDA:

“Y toda vasija abierta, cuya tapa no estè bien ajustada,

serà inmunda”.
Nùmeros 19:15
Siguiendo la imagen bìblica del alfarero, vemos que cuando pecamos, la obra de Dios se
estropea. Por eso, ahora veremos las consecuencias graves que el pecado trae en una
vida.
Ahora el texto dice que la vasija tiene que estar bien cerrada, y la tapa tiene que estar
bien ajustada, ¿porque?, porque si la dejas abierta, èsta se contamina y se hace inmunda.
Nuestra vida cristiana debe estar bien cerrada a los ataques de Satanàs, a las propuestas
del mundo (¿no sabeìs que la amistad con el mundo, es enemistad contra Dios?), y a
nuestra propia concupiscencia carnal.

Cuando nosotros no tomamos en serio la advertencia de Dios, y dejamos nuestra vasija

destapada, estamos abiertos y expuestos a los ataques de Satanàs. Si nuestra vasija no
està cerrada, nuestra carne buscarà y caerà en el mundo, apagando la obra del Espìritu.
Por eso, el apostol Pablo nos exhorta: “Ni deis lugar al diablo” (Ef 4:27). Osea, cierra
bien la tapa, no te contamines, no te creas autosuficiente.

Isaìas en el capìtulo 59 nos hace comprender mejor, lo que produce el pecado cuando le
damos lugar en nuestra vida. El pecado es un acto de rebeldìa contra Dios: “Hemos sido
rebeldes e infieles al Sr , no quisimos seguir su camino” (versìculo 13, versiòn
popular). Es negarse a reconocer la autoridad de Dios sobre nosotros.

El libro de Levìtico C.11:33 nos dice: “toda vasija de barro dentro de la cual cayere
alguno de ellos (pecados) serà inmunda, asì como todo lo que estuviere en ella, y
quebrareìs la vasija”. Cuando la mano disciplinadora de Dios se apoya sobre nosotros,
“El” trae quebrantamiento a nuestras vidas. La vasija se quebranta. En otras palabras,una
vasija inmunda es quebrada, comienza la disciplina o el trato de Dios, y asì nos dice el
libro de Hebreos 12:11: “Es verdad que ninguna disciplina al presente parece ser
causa de gozo, sino de tristeza; pero despuès da fruto apacible de justicia a los que en
ella han sido ejercitados”.

Por eso es preciso hermanos que tomemos muy en serio el obedecer a Dios para que no
necesite levantar su mano. Cubre tu vida, y ajusta bien la tapa, para que el diablo no
encuentre espacio por donde penetrar, y para que Dios no necesite poner su mano dura
sobre ti. El harà de ti una nueva vasija conforme a su diseño perfecto.

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 8- UNA VASIJA REBELDE:

“Nuestra perversidad ciertamente serà evaluada

como el barro del alfarero. ¿Acaso la obra dirà
de su hacedor: No me hizo? ¿Dirà la vasija
de aquel que la ha formado: No entendiò?”
Isaìas 29:16

A travès del profeta Isaìas, Dios le hablò a un pueblo rebelde y orgulloso para mostrarle
la soberbia, la ceguera y la hipocrecìa que habìa en medio de ellos.
El orgullo muchas veces nos coloca tambièn a nosotros hoy en una situaciòn parecida. El
pasaje de 1 Reyes 16:21-34 nos habla de 4 resultados del orgullo:

1-EL ORGULLO PROVOCA DIVISIÒN: leemos en el versìculo 21 que el pueblo se

dividiò por la lucha por el poder, y detràs de la lucha por ese poder estaba el orgullo. En
èste pasaje habìa una competencia entre los reyes.
El poder no era un medio para el servicio del pueblo, sino que era el medio para
satisfacer la ambiciòn y el orgullo personal. Y èsto, planteado en un sentido amplio,
puede ocurrir dentro de la Iglesia.
Muchas veces el pueblo de Dios se divide a causa del orgullo. Un Ej es la Iglesia de
Corinto, ya que unos eran de Pablo, otros de Apolos, otros de cefas,...cada cual seguìa a
su propio orgullo.
La Iglesia de hoy, es desafiada a guardar el vìnculo del amor, caso contrario, habrà
orgullo. El orgullo de los que se creen algo màs que los otros,..el orgullo de los
inseguros que no pueden trabajar con otros,...como tambièn està el orgullo del chismoso.

2-EL ORGULLO CONDUCE AL FRACASO: es un impedimento para que Dios actùe.

Sòlo el poder de Dios se perfecciona en la debilidad, y no en la autosuficienia.

3-EL ORGULLO SE TRANSMITE: los hijos imitan las conductas de sus padres.

4-EL ORGULLO SE CASTIGA: Dios no puede ser burlado. Dios juzga y castiga
nuestro orgullo, nuestra falta de dependencia de El.
Los cristianos que viven sin negarse a sì mismo cada dìa, se frustran y fracasan.
Dijo Jesùs “Si alguno viene en pos de mì nièguese a sì mismo, tome su cruz y sìgame”.
“Nièguese a sì mismo y tomar la cruz” significa renunciar al orgullo. Y “seguirle”,
significa “dejar que “EL” maneje tu vida”.

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 9- UNA VASIJA DE MALDICIÒN:

“Luego tomarà el sacerdote del agua santa en un vaso de barro;

tomarà tambièn el sacerdote del polvo que hubiere en el suelo del
tabernàculo y lo echarà en el agua”
Nùmeros 5:17

La palabra de Dios en el libro de nùmeros y levìtico nos cuestan que en el antiguo Israel
se sentenciaba a muerte los casos de adulterio. Cuando faltaban pruebas para dictaminar
la culpabilidad de una esposa, que se presumìa habìa caìdo en adulterio, el marido, debìa
traer a su mujer al sacerdote junto con una ofrenda llamada ofrenda de celos. Entonces,
el sacerdote tomaba del agua santa en un vaso de barro y luego tomaba polvo del suelo
del tabernàculo y lo echaba en el agua. Las aguas santas, contaminadas asì con el polvo,
se transformaban en aguas amargas, aguas que traìan maldiciòn.

La mujer debìa tomar de esas aguas y si hubiere cometido pecado de adulterio, la

maldiciòn caerìa sobre ella, su vientre se hincharìa y serìa estèril para siempre.
Hoy, vamos a ver que hay tras esto, una tremenda enseñanza para nosotros ¿porquè?: la
vasija de barro que es tu vida ha sido destinada por Dios para contener aguas sagradas,
aguas santas, pero cuando se cae en pecado, se contaminan pasando a ser aguas amargas,
aguas de maldiciòn.

Asì como el adulterio consiste en llevar o vivir una relaciòn dual, el adulterio espiritual
consiste en decir que somos hijos de Dios, que amamos al Sr, y al mismo tiempo
vivimos en desobediencia a Dios.

El cristiano dual es el que cree que puede caminar por dos caminos a la vez. Juega a 2
puntas y quiere nadar en 2 aguas. No termina por decidirse. Viven una doble vida. Este
tipo de vasija apunta a aquellos que disfrutan de la presencia de Dios en las reuniones,
pero en su vida privada viven otra realidad espiritual.

En la Iglesia tienen gozo, santidad, comuniòn, pero en sus casas todo esto se pierde,...y
chocan con la soledad, la tristeza, el vacìo espìritual, con las contiendas, griterìas,...

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 10- UNA VASIJA SANTA:

“Ya los vasos de los jòvenes eran santos,

aunque el viaje es profano;
¿cuànto màs no seràn santos hoy sus vasos”
I Samuel 21:5

En la antiguedad habìa una disposiciòn en la ley, que cualquiera que estuviese impuro no
podìa salir a combatir. Deuteronomio 23:9 dice: “cuando salieres a campaña contra tus
enemigos, te guardaràs de toda cosa mala”. La victoria en la batalla dependìa
directamente del estado de purificaciòn y santidad del pueblo.

La santificaciòn es un imperativo permanente y universal para el pueblo de Dios. No

podemos ser usados por Dios si no estamos santificados.

John Wesley, preguntò en una ocasiòn: “¿Que es lo que estorba a la obra? Primera y
principal causa: “nosotros mismos”. Si fuèramos todos santos de corazòn y de vida,
totalmente consagrados a Dios, ¿no arderìamos todos los predicadores y propagarìamos
este fuego por todo el mundo?

Debemos estar santificados para combatir a las fuerzas del mal y para que los demonios
se sujeten.

Seamos vasos santos en las manos del alfarero.

11-UNA VASIJA RESTAURADA:

“¿Y què, si Dios, queriendo mostrar su ira y hacer notorio

su poder, soportò con mucha paciencia los vasos de ira
preparados para destrucciòn?”
Romanos 9:22

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La restauraciòn no es instantànea, sino, que el alfarero somete nuestras vidas a un
proceso de moldeo. Un Ej del proceso de restauraciòn lo vemos en 2 Crònicas capìtulo
33, donde aquì se nos cuenta la historia de Manasès, rey de Judà.

Èste, fue alguien que cayò muy bajo a causa de su pecado. Ahora, si Dios restaurò a
Manasès, ¿còmo no lo harà con nosotros?

Manasès comenzò a reinar cuando sòlo era un adolescente de 12 años, y estuvo en el

poder 55 años, sucediendo el trono de su padre Ezequìas.

Manasès, hijo de Ezequìas, llegò a ser el màs impìo de todos los reyes:

 realizò todas las abominaciones que habìan cometido los cananeos. Reedificò los
lugares altos que Ezequìas su padre habìa derribado, y levantò altares a los baales,
hizo imàgenes de Asera,...

rindiò culto y adoraciòn a todo el ejèrcito de los cielos, e introdujo en Judà todo el
panteòn asirio...

pasò a sus hijos por el fuego (èste era el rito pagano tìpico de los pueblos cananeos,
que consistìa en matar a los hijos y quemarlos en holocausto a la divinidad de Moloc),
en el valle del hijo de Hinom, osea que inmolò a sus propios hijos.

Observaba los tiempos, miraba en agueros, era dado a las adivinaciones, consultando
adivinos (pràctica condenada en Deuteronomio 18:9-14 y Levìtico 19:26-31.

El dictamen de Dios para Manasès fuè que superò todos los lìmites de maldad. Manasès,
el peor de los reyes de la historia de Judà, controlado por las fuerzas del mal, capaz de
cometer todo tipo de idolatrìa, ocultismo, satanismo, asesinatos, incluyendo la muerte
ritual de sus propios hijos, arrastrò asì a todo el pueblo,. Pero ¿còmo fuè su
caìda?...Manasès terminò cautivo en Babilonia, engrillado y atado con cadenas, y allì en
la prisiòn, comenzò el proceso de restauraciòn, comenzò el trato con Dios.

AHORA VEREMOS LOS 7 PASOS DEL PROCESO DE RESTAURACIÒN:

1)Tenemos la “RESTAURACIÒN DEL OIR LA VOZ DE DIOS”: dice el versìculo 10:

“Y hablò Jehovà a Manasès y a su pueblo, màs ellos no escucharon”.

Lo 1º que Dios debe restaurar en nuestras vidas es la capacidad de oìr su voz. Manasès
conocìa de Dios (por su padre Ezequìas), pero no querìa oìrlo. Tuvo la instrucciòn, la
recibiò, pero eligiò andar en su propio camino.
Nunca te apartes de la direcciòn de Dios, busca y elige el oìr su voz.

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2) Tenemos la “RESTAURACIÒN DE LA ORACIÒN”: dice la palabra que Manasès
finalmente dejò a un lado su autosuficiencia y orò a Dios: “Màs luego que fuè puesto en
angustias, orò a Jehovà su Dios, humillado grandemente en la presencia del Dios de
sus padres” (versìculo 12)

“Y habiendo orado a èl, fuè atendido; pues Dios oyò su oraciòn y lo restaurò a
Jerusalèn, a su reino. Entonces, reconociò Manasès que Jehovà era Dios” (versìculo
13)

3) Tenemos la “RESTAURACIÒN DEL MURO”: Manasès, luego de ser restaurado por

Dios, restaurò por sì mismo varias cosas.
Dios lo restaurò primeramente a èl, pero èl, restaurò el muro: “Despùes de esto edificò
el muro exterior de la ciudad de David, al occidente de Gihòn, en el valle, a la entrada
de la puerta del pescado, y amurallò Ofel, y elevò el muro muy alto; y puso capitanes
de ejèrcito en todas las ciudades fortificadas de Judà” (Versìculo 14). Una vez que
Dios efectùa la restauraciòn en nuestras vidas, es indispensable levantar una muralla
espiritual que nos proteja contra todo ataque del enemigo. El diablo nada puede hacer
con un creyente lleno del Espìritu Santo de Dios.

4) Tenemos la “RESTAURACIÒN DEL ALTAR”: “Reparò luego el altar de Jehovà y

sacrificò sobre èl sacrificios de ofrendas de paz y de alabanza”(v.16). Dios no va a
restaurar tu altar. Eres tù quien debe hacerlo. No esperes que Dios te dè ganas de orar, de
leer la Biblia, de adorar, de congregarte. El tener comuniòn con Dios no es cuestiòn de
ganas, sino de ejercicio de nuestra voluntad y sometimiento a Dios. Levìtico 6:12 nos
dice: “Y el fuego encendido sobre el altar no se apagarà, sino que el sacerdote pondrà
en èl leña cada mañana, y acomodarà el holocausto sobre èl, y quemarà sobre èl las
grosuras de los sacrificios de paz”. El mantener el fuego encendido en el altar requerìa
del sacerdote un esfuerzo diario y constante. Debìa levantarse cada mañana y caminar
para buscar la leña, preparar el holocausto, y velar diligentemente para que el fuego no
se apague.Es cuestiòn de esfuerzo y disciplina, de entrega y voluntad.
Si no reparas tu altar, tu vida espiritual va a debilitarse.

5) Tenemos la “RESTAURACIÒN DE LA ENTREGA”: y reparado su altar, Manasès

restaurò su entrega, presentando sacrificios y ofrendas. La ofrenda consiste tambièn de
adoraciòn y alabanza a El.

6) Tenemos la “RESTAURACIÒN DE LA ALABANZA”: ademàs de los sacrificios de

paz, entregò sacrificios de alabanza, osea que Manasès restaurò la alabanza.

7) Tenemos la “RESTAURACIÒN DEL SERVICIO”: “Y mandò a Juda que sirviesen

a Jehovà Dios de Israel” (v.16)

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 12-UNA VASIJA DE GUERRA:

“Y Moisès los enviò a la guerra; mil de cada tribu enviò; y

Finees hijo del sacerdote Eleazar fue a la guerra con los vasos
del santuario, y con las trompetas en su mano para tocar”.
Nùmeros 31:6

Es importante notar que cuando Finees, hijo del sacerdote Eleazar fuè a la guerra para
luchar contra los manianitas, llevaba consigo 2 elementos: LA TROMPETA, lo cual
daba la señal de empezar la batalla y de avanzar contra el enemigo, y el segundo, dice la
palabra que LLEVO A LA BATALLA LOS VASOS DEL SANTUARIO.

Cuando Jesùs llama a sus discìpulos lo hace con 2 propòsitos: “Y estableciò a 12, para
que estuviesen con El, y para enviarlos a predicar, y que tuvieren autoridad para
sanar enfermedades y para echar fuera demonios” (Marcos 3:14-15.)

El Sr, al igual que Finees, nos quiere llevar a la guerra. El toma tu vida, un vaso de
santuario, y desea llevarla a la batalla para que alcance la victoria.

El pueblo de Dios es un pueblo en pie de guerra. Dice el libro de Efesios “vestìos de

toda la armadura d Dios, para que podàis estar firmes contra las asechanzas del
diablo...porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados,
contra potestades, contra gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes
espirituales de maldad en las regiones celestes” (Efesios 6:11-12). A los corintios les
recuerda los recursos con que contamos los creyentes, diciendoles: “Pues aunque
andamos en la carne, no militamos segùn la carne; porque las armas de nuestras
milicias no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucciòn de fortalezas,
derribando argumentos, y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y
llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo”. (2 Corintios 10:3-5)

Es decir, que nos guste o no, estamos en medio de un combate, pero Dios nos ha dado
las armas para que alcancemos la victoria de nuestra vida y tambièn la vida de quienes
nos rodean.

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 13- UNA VASIJA DE ALABASTRO:

“Vino una mujer con un vaso de alabastro de perfume de nardo

puro de mucho precio; y quebrando el vaso de alabastro, se lo
derramò sobre su cabeza”
Marcos 14:3

14- UNA VASIJA DE ACEITE:

“La harina de la tinaja no escasearà,

ni el aceite de la vasija disminuirà”
1 Reyes 17:14
Cuando Elìas se encuentra con la viuda de Sarepta, èsta viuda estaba juntando leña y
estaba preparando la ùltima comida para ella y su hijo porque no tenìan nada màs para
comer. Elìas la llama y le pide un poco de agua en un vaso para beber y un bocado de
pan para comer, y ella le explica que solo tenìa un puñado de harina y un poco de aceite
en una vasija. Asì , estàn muchos creyentes hoy...apenas tienen un poco de aceite en sus
vasijas. Son hijos de Dios, el aceite del Espìritu està en sus vidas, pero su vida espiritual
està empobrecida....la unciòn es escasa...todo es para ellos un gran esfuerzo, una gran
carga. Sirven al Sr pero sin unciòn, sin fruto, no brillan...
Pero, èsta viuda tuvo un encuentro con el profeta ungido de Dios. El profeta a quien màs
tarde su siervo Eliseo le dirìa: “Te ruego que una doble porciòn de tu espìritu sea sobre
mì” (2 Reyes 2:9).
Entonces Elìas le da a aquella viuda una serie de instrucciones, para que el aceite no se
acabe. Elìas le asegura que “el aceite no disminuirà”.

Las instrucciones que le diò a la viuda fueron: 1) LA ACTITUD ADECUADA, osea que
la 1º disposiciòn tiene que ver con LA ACTITUD ANTE LA VIDA. El profeta de dijo:
“no tengas temor” (v.13). No temas.

La 2º) instrucciòn tiene que ver CON LAS PRIORIDADES EN LA VIDA. La viuda le
dijo que irìa a cocinar con ese puñado de harina y ese poco de aceite, pero Elìas le hace
un pedido sumamente extraño...le dice:

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“Vè, haz como has dicho; pero hazme a mì primero de ello una pequeña torta cocida
bajo la ceniza, y tràemela; y despùes haràs para ti y para tus hijos” (v.13)

El principio es LA PRIORIDAD. Primero dale a Dios, y Dios, que no es deudor de

nadie, te darà todo lo que necesites y aùn lo harà sobreabundar. Consagra tu vida a Dios,
y que EL sea lo primero en tu vida, lo màs importante, y veràs que el aceite de la unciòn
no disminuirà en tì.

El 3º) precepto que debemos tener en cuenta para que el aceite espiritual no disminuya,
es el de la OBEDIENCIA EN LA VIDA.

El 4º) precepto es que debes apartarte y buscar estar A SOLAS CON DIOS. El encierro
es necesario. Jesùs cada cierto tiempo, se apartaba para estar a solas y orar. Era el
espacio que El creaba para que el Padre lo llenara màs de unciòn santa.

Y el 5º) precepto es el de la UNCIÒN COMPARTIDA . Elìas le dijo: “Vè y pide vasijas

prestadas de todos tus vecinos, vasijas vacìas, no pocas. Entra luego, y encièrrate tù y
tus hijos; y echa aceite en todas las vasijas, y cuando una estè llena ponla aparte”
(v.3:4)

Tu eres la vasija llena de aceite. Tus vecinos, tus familiares, tus amigos, la gente que te
rodea, son las vasijas con quienes tienes que compartir la obra del Calvario para que tu
aceite no mengue.

15-UNA VASIJA DE AGUA:

“Y cuando tengas sed, vè a las vasijas,

y bebe del agua que sacan los criados”
Rut 2:9

Dice la palabra que de tu interior saldràn rios de agua viva de tu ser,...

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 16- UNA VASIJA DE SAL:

“Traedme una vasija nueva, y poned en ella sal.

Y se la trajeron.
Y saliendo èl a los manantiales de las aguas,
echò dentro la sal, y dijo:
Asì ha dicho Jehovà: Yo sanè estas aguas,
y no habrà màs en ellas muerte ni enfermedad”

2 Reyes 2:20-21
Jesùs enseñò que somos la sal de la tierra. Pero esa sal no debe volverse insìpida, no
debe desvanecerse, porque no servirà para nada. Somos vasijas de sal que tienen el
propòsito de sanar la tierra.
El alfarero te hizo vasija de sal para sanar tu ciudad.

17- UNA VASIJA DE GLORIA:

“Y para hacer notorias las riquezas de su gloria,

las mostrò para con los vasos de misericordia
que El preparò de antemano para gloria”
Romanos 9:23

Finalmente , el alfarero te quiere hacer una vasija de gloria. Un vaso que haga notoria la
gloria de Dios a todo el mundo. Cristo, el precioso tesoro, està en tu vida. Tu simple
vasija de barro contiene un inmenso tesoro...¿No serà visto el resplandor de su gloria
desde tu mismo corazòn hacia cada perdido, hacia cada necesitado? El està restaurando
tu vida, no para que sòlo te conformes con un toque de Dios, sino para que seas un canal
de avivamiento donde quiera que te encuentres. Tu vida de oraciòn es el 1º paso.

Que el Sr te bendiga
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Dile como la letra del viejo y hermoso Himno:

“Haz lo que quieras de mi, Señor,

tù el Alfarero, y yo el barro soy,
dòcil y humilde anhelo ser,
cùmplase siempre en mì tu querer.

Haz lo que quieras de mi Señor,

mìrame y prueba mi corazòn,
làvame y quita toda maldad
para que tuyo sea en verdad.

Haz lo que quieras de mì, Señor,

cura mis llagas y mi dolor,
tuyo es, ¡Oh Cristo! todo poder;
tu mano extiende, sana mi ser.

Haz lo que quieras de mi, Señor,

del Santo Espìritu dame la unciòn,
dueño absoluto sè de mi ser,
que el mundo a Cristo pueda en mi ver.”

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