Derecho Agrario en Mexico Universidad Metropolitina

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Universidad Metropolitana

Latin Campus

DERECHO AGRARIO EN
MEXICO

OSCAR ARTURO GUTIERREZ


ONTIVEROS
INTRODUCCIÓN GENERAL

El hacer la compilación general de varios temas de derecho agrario mexicano lleva


por objetivo el dar a conocer desde su origen y hasta lo posible en nuestra actualidad
el proceso y el objetivo es el interés que se tiene por mejorar las condiciones que
existen en el campo mexicano. Se acepta de manera general, de manera tácita o
expresa que los que habitan el medio rural mexicano sufren realmente de pobreza
extrema, la llamaría yo miseria, y por lo tanto también sufren de la discriminación,
así como el que la última manera de combatir esa miseria en forma real es por medio
de la generación de riqueza. Todas las propuestas son variadas, pues son muy
vastos los aspectos del medio rural, aquí se menciona algo de su historia y su

1
desarrollo a través de los tiempos, para identificar su inicio y de dónde venimos y la
realidad de por qué el campo mexicano se vive de tal manera.

Otros presentan propuestas más concretas para mejorar las supuestas figuras
jurídicas que en su letra dicen una gran justa demanda de mejorar dicho medio rural
y las condiciones generales de vida, que puedan cambiar la triste realidad actual.

Lo que hay que destacar en mi percepción al retomar los temas agrarios en México
es que hay una pobreza generalizada en este medio rural mexicano que resulta que
gran parte de la población nacional que se encuentra en dicho estrato socio-
económico (casi 31 millones de personas), vivan en Estados Unidos. Esto es
provocado por que hay dos situaciones en nuestro México lindo y querido; una que
no se brindan las suficientes oportunidades para que sus pobladores puedan por lo
menos vivir dignamente en su medio rural y la otra es que el sistema jurídico de Los
Estados Unidos de Norteamérica proporciona las figuras jurídicas necesarias para
que las personas puedan desarrollarse en forma individual, sin ninguna distinción de
si son inmigrantes o nacionales.

La mitad o más de la mitad de la población de nuestro país vive en el campo o está


relacionada con este sector, y que también la humanidad depende de los alimentos
productivos del campo. Y es importante dar a conocer y señalar las actividades de
tipo jurídico para no ser ignorantes del derecho agrario, de que existen leyes,
reglamentos, reformas a dichos artículos en benéfico nada más y nada menos de
los actores directos del campo, pero en la práctica no pasa, ni siquiera se enteren
de que hay estancias que asesoran y apoyan a la gente del campo, para elevar,
cambiar, ayudar a tener una mejor calidad de vida.
La necesidad de hacer mejores leyes recae en el poder legislativo, el cual poco y
casi nada se preocupa por hacer leyes agrarias en el país, mucho menos en dar a
conocer por medio del ejecutivo todo ese mar de ideas y leyes que otorgarían ese
mágico estado de la conciencia de conocer las leyes.

Es un derecho y una gran necesidad de legislar y cambiar el rumbo del Municipio,


del Estado y de la Nación con nuevas opciones y más que en letras muy bien
escritas, accionar y trabajar conjuntamente los tres poderes de la nación y coadyuvar
en generar más empleos, más que apoyos paternalistas desde que nace el derecho
agrario en nuestro país, es hacer digno al campesino no con regalos, dádivas o
endeudamiento con bancos para poder tener semilla, fertilizantes, etc., si no con
educación y ser solidario, subsidiario y así identificar al campo no como gente pobre,
humillada, mal comida, mal vestida, maltratada por otros estratos social.

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En este texto se podrá encontrar desde el inicio como una necesidad de crear un
derecho agrario en México, pasando por la época pre-colonial, Colonial, México
Independiente, Posrevolucionario, y Contemporáneo, se observan los cambios y las
creaciones de las necesidades de regular al campo mexicano, con todas sus
bondades y su problemática social, como conocer los tipos de autonomía del
derecho, en su estrato agrario, y que en un gran porcentaje del crecimiento depende
su economía el país, aunque han cambiado los tiempos y su actividad preponderante
no es la agricultura, ya es la industrias, bienes y servicios.

Todo gracias a la apertura comercial del famoso Tratado de Libre Comercio de


América Latina, y donde se concentraron los grandes monopolios comerciales que
desencadenaron y saturaron los grandes mercados entre los países miembros de
dicho tratado.

Han sido años de lucha social y en su momento de guerras tal vez, todo esto con el
fin de que la tierra tenga el marco jurídico que permita a los que desean tener la
seguridad necesaria para trabajarla.

El derecho es el espíritu de un pueblo, el poder convivir los seres humanos en


armonía total, su bandera para defender a la nación o al hombre que se agrede física
o económicamente.

El derecho agrario como producto social, es dinámico y en realidad aunque no lo


pareciera en la práctica está en constante movimiento, en transformación, ha sido
un grave error considerarlo que existe un sentido de identidad entre el derecho
agrario y la reforma agraria y entre ésta y el reparto de tierras. Se destaca el estudio
de las formas de asociarse para la producción, que regula la legislación agraria,
como instrumentos que permiten conjuntarse los esfuerzos para el mejor
aprovechamiento de las tierras ejidales y comunales, así como para su
comercialización de servicios y otros objetos que les permitan a los ejidatarios y los
comuneros, así como a los ejidos y comunidades, el óptimo desarrollo de sus
actividades.

De nada sirve hacer estas compilaciones sobre al agro mexicano si verdaderamente


no hay cambio y nuevas formas de legislar, de dar un giro total y que así renazca el
agro mexicano, que cada trabajador del campo se sienta apoyado, digno. La lucha
continúa y leyes… leyes hay muchas y para muestra un botón, y sea el tipo de
derecho que sea, si no se acatan y aplican al 100% esas leyes que en letra son
perfectas… difícilmente nuestro país va a poder llegar a latitudes de gran poder.

Agradezco a la Universidad Metropolitana el poder crear esta antología para dar a


conocer y promover como una obligación para el alumno de derecho y dejar a tras
si no totalmente, si un poco la ignorancia de dichas leyes.

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4
CAPITULO I

EL DERECHO AGRARIO EN MEXICO

INTRODUCCION

Se remontará este tema a los inicios de la época pre colonial y presentar de forma
un tanto global de esta rama del derecho, a fin de identificar los conceptos básicos
que dan la forma y el surgimiento y que permitan su fácil comprensión, para que ya
adentrados en el tema observemos su evolución hasta llegar a nuestros días
actuales, de acuerdo con las modalidades que le han impuesto a todos esos
reclamos sociales y todo lo relativo a la modernidad de los tiempos requerida.

Se escriben de manera general los diferentes aspectos generales que permiten


identificar y conocer la esencia del derecho agrario sin hacer un análisis tan
exhaustivo que no lleva a nada, solo nos apoyaremos en sus ideas y así poder
expresar puntos de vista muy particulares.

1.1 ANTECEDENTES HISTORICOS

“Los antecedentes históricos, sociológicos y políticos en México, le han dado a su


Derecho Agrario una importancia progresiva que se desarrolló paralelamente con su
devenir social. Con cuánta razón afirma el agrarista internacional Bernardino C.
Horne que “la tierra es el punto de partida. Su distribución, la forma en que se divide
y explota, repercute sobre la economía y organización de cada país. A ello se vincula
la prosperidad o el bienestar de los habitantes y hasta su sistema político. La tierra
es la base principal de la producción que da vida a los pueblos. De ahí que su
régimen se vincule a las luchas sociales de todas las naciones, en distintas épocas.
En México nuestros problemas agrícolas y agrarios, no constituyen la cúspide
angulosa de una situación cuya gravedad fue repentina; por el contrario, el programa
agrario se desenvuelve lenta, pero estrechamente ligado a la singular trayectoria
histórica de México.

1.2 ÉPOCA PRECOLONIAL

La gente del pueblo poseía tierras en pequeñas extensiones, pues el Calpulli era una
pequeña parcela y pertenecía al Calputlalli como comunidad. Cuando los

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conquistadores europeos en el siglo XV arribaron continente americano y lo
sometieron, el contraste de razas y culturas motivó polémicas condenando o
defendiendo a los indígenas. Teóricamente los juristas, teólogos y moralistas
comprendieron y tratar de proteger las mejores instituciones indígenas; pero
prácticamente, desde la llegada de Cristóbal Colón a la Española y de Cortés a la
Nueva España, las necesidades políticas y fiscales desvirtuaron las buenas
intenciones y las órdenes de los reyes españoles.

1.3 ETAPA COLONIAL

Recién realizada la conquista era lógico que los españoles se vieran obligados a vivir
en los pueblos y ciudades aborígenes y que en recompensa a sus hazañas e
inversiones personales exigieran las poeínas, caballerías, mercedes, tierras de
común, repartimiento, propios y dehesas, que necesitaban tomando las tierras de
los pueblos conquistados.

Las órdenes legislativas indianas positivas eran justas; pero en la realidad se


acataban, pero no se cumplían. La encomienda no fue provisional y con el tiempo se
concedieron hasta cinco vidas”.

“Cuando las ideas independistas aparecieron, la corona española intentó resolver


rápidamente la situación reinante n contrastada, pero a pesar de sus bandos, la
población indígena rural ingresó a las filas independientes.

1.4 LA CONFORMACION DE LOS LATIFUNDIOS

“En España, y específicamente en Castilla, la encomienda existió, hasta el momento


en que se establecieron los grandes señoríos que marcaron el punto de ruptura entre
las pequeñas explotaciones territoriales y la formación del territorio señorial de corte
feudal. La unión de reino de Castilla con el de Aragón marco la entrada de España
en el capitalismo moderno, cuya necesidad de expansión mercantil requirió de oro y
su transformación en un sólido sistema monetario.

El descubrimiento de las Indias occidentales y su conquista aporto a la Metrópoli


Española los metales necesarios para la consolidación de su sistema monetario así
como los productos agrícolas que en abundancia le dieron la riqueza para consolidar
el sistema capitalista. Ello constituyo una primera etapa en la época de capitalización
de España, independientemente de que las formas de producción fueran las
encomiendas y los repartimientos indianos.

Según señala Guadalupe Rivera, la forma de consolidación de la gran propiedad fue


siempre la misa: los hispanos se convirtieron de encomenderos en hacendados en

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virtud de la obtención de mercedes y gracias y de la compra ilegal de tierras
mercedadas a favor de terceros. La condición de la mano de obra obtenida primero
en la encomienda, después en los repartimientos y finalmente como fuerza de
trabajo cautiva, bien por el control de la paga a los peones, bien por los adeudos
contraídos por los mismos, permitió la acumulación de propiedades y el control de
una agricultura monopólica apoyada en los grandes latifundios.

1.5 MEXICO INDEPENDIENTE Y CONTEMPORANEO

El gobierno del México independiente encontró problemas agrarios ya definidos, pero


todas las soluciones que legisló se fundaron en planteamientos incompletos y
erróneos de funestas consecuencias, pues remitieron la solución a colonizaciones
agrícolas en terrenos baldíos, no propios para cultivo. Toda la legislación parte del
falso supuesto de que la sola distribución poblatoria resolvería la mala distribución
territorial.

Sin embargo, la experiencia obtenida no fue sistematizada para provecho de futuras


soluciones de hecho o legislativas; por lo contrario, se dictaron más decretos sobre
colonización, pero los de 1875 y 1883 autorizaron a compañías particulares para que
realizaran los deslindes territoriales.

Cuando el embate revolucionario de 1910 triunfó en México era ya clara una Doctrina
Agraria que en su más pura esencia conjugaba los derechos individuales con una
necesidad de justicia social. Así llegó a los artículos 27 y 123 constitucionales el 5
de febrero de 1917. Las tendencias sociales, los anhelos populares transformaron
en formas jurídicas fundamentales, pero esto no sucedió en México a la manera
tradicional, sino que se crearon innovaciones de fondo con

Tras cuatro siglos de tanteos desordenados, las adicciones al Plan de Guadalupe


hechas en Veracruz el 12 de diciembre de 1914, la ley del 6 de enero de 1915, y la
Constitución Federal del 5 de Febrero de 1917, iniciaron en el siglo XX una nueva
era para el derecho social y un derrotero autónomo para el Derecho Agrario
Mexicano.”

1.6 RAZONES JURIDICAS QUE FUNDAN ESTE ESTUDIO

Las razones históricas que explican el Derecho son solo acicates que despiertan
nuestro interés jurídico conduciéndonos de la periferia hacia el centro. Todavía a los
argumentos jurídicos, podrían agregarse las razones legislativas que señalan una
larga lista de leyes que integran la Reforma Agraria en México a partir de 1915”. 1

1.7 CONCEPTO DERECHO AGRARIO

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Es más cierto que “el Derecho es producción a la vez que conocimiento del espíritu
humano” y que “el derecho responde a una necesidad del hombre y es inseparable
de la vida humana”.

Lucio Mendieta y Núñez sostiene que el derecho agrario es el conjunto de normas,


leyes, reglamentos y disposiciones en general, doctrina y jurisprudencia, que se
refieren a la propiedad rústica y a las explotaciones de carácter agrícola.

“Según el diccionario de la Real Academia Española, lo rural o lo agrario es lo


perteneciente o relativo al campo; el derecho agrario es pues, el conjunto de normas
que regulan el ejercicio de las actividades agrarias, o sea el cultivo del fundo, la
forestación, la ganadería y las actividades conexas.

Martha Chávez Padrón proporciona la siguiente definición: Parte del sistema jurídico
que regula la organización territorial rústica, todo lo relacionado con las
explotaciones y aprovechamientos que este sistema considera como agrícolas,
ganaderos y forestales y algunos otros aprovechamientos colaterales, y la mejor
forma de llevarlas a cabo.”2

“Conforme al nuevo marco jurídico, el derecho agrario es el conjunto de normas


legales, principios jurídicos, doctrina y criterios jurisprudenciales que regulan las
relaciones surgidas entre los sujetos dedicados a la actividad campesina. Esas
relaciones derivan de la tenencia de la tierra cuyo destino (agrícola, pecuario o
forestal) sea explotarla en forma racional y respetuosa del medio, y mejorar la calidad
de vida de las familias rurales mediante una mayor redituabilidad en la producción
del sector primario. Para lograr esto, el Estado otorga seguridad jurídica en la
tenencia de la tierra, a la vez que permite el esfuerzo asociado entre sujetos agrarios
con terceras personas.

1.8

CONCEPTO DE AGRARIO

El derecho agrario o derecho rural, como lo llama Eduardo García Máynez, “es la
rama del derecho que contiene las normas reguladoras de las relaciones jurídicas
concernientes a la agricultura”.3

“Para el doctor Mendieta y Núñez, “la palabra mencionada viene del latín Agrarium,
de ager, campo, en consecuencia designa todo lo relativo al campo”. Nótese que la
palabra, en su origen, peca de amplia y que el mismo sentido tiene ruri que significa
en el campo y campus, campo; la palabra agrario nos facilitara tanto determinar el
contenido o la materia del derecho agrario, como la palabra compuesta agrícola.
Como más adelante veremos, el Lic. Ángel Cazo, dice que la palabra agrario tiene

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dos acepciones: “En su acepción restringida agrario debe ser tomado como sinónimo
de reparto de tierra, tomando este vocablo a su vez, como sinónimo de suelo”. 4

1 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, ed. Porrúa, México 2012, p3

2 Rivera Rodríguez, Isaías, El Nuevo Derecho Agrario Mexicano, ed. Mc Graw Hill, 2ª edición, México 2013, p3

3 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p11

1.9 CONTENIDO DEL DERECHO AGRARIO

“El contenido del derecho agrario lo forman sus normas jurídicas vigentes que regulan
lo relativo a la propiedad rustica incluyendo toda institución que se relacione con este
concepto ya su explotación, a colación de la cual y teniendo en cuenta la planificación
agraria, debe incluirse la agricultura, ganadería, silvicultura y actividades que permiten
al campesino el aprovechamiento de todos sus recursos, y aquellas que coadyuvan a
que dichas actividades den mejores resultados como son las referentes a los
aprovechamientos hidráulicos, créditos y sociedades agrícolas, educación rural y
agrícola, vías de comunicaciones rurales, seguros agrícolas, seguro social en el
campo, higiene y salubridad rural, industrialización agrícola, derecho laboral rural,
contratos y concesiones rurales, etc., hasta la organización productiva con todos los
renglones que este implica”. 1

1.10 EL DERECHO AGRARIO COMO DERECHO SOCIAL

9
1.10.1 CLASIFICACION DEL DERECHO

“Desde la antigua Roma, al derecho se ha clasificado en público y privado, pero a


partir de las modernas constituciones sociales se ha elaborado una nueva
clasificación tripartita que lo divide en público, privado y social”:

1.10.2 CLASIFICACION TRADICIONAL:

“Desde el punto de vista material, el derecho se divide en dos ramas: la del


derecho público, cuando se trata de relaciones de orden público, y la del derecho
privado que se refiere a las relaciones, entre particulares. A su vez, el derecho
público se le subdivide, en ramas constitucionales, administrativas, penales,
procesales e internacionales; dentro de esta subclasificación se incluye es derecho
agrario. Por su parte, el derecho privado se subdivide en ramas civiles y
mercantiles.

1.10.3 CLASIFICACION MODERNA:

Esta clasificación del derecho pugna para una separación entre el derecho público y
el derecho social, tomando como base el caso de los grupos sociales más
desprotegidos. Estos, que en teoría conservan sus derechos (públicos y privados),
en la realidad se encuentran en un plano de desventaja frente al resto de la población
para hacer valer tales derechos, debido a sus desigualdades educativas, culturales
o económicas. Por ello, esta teoría establece que le conjunto de normas sociales se
enfocaran específicamente a garantizarles a esos grupos el acceso a la justicia,
elevándolos a un plano de igualdad compensatoria, de manera que se ve la
necesidad de una clasificación tripartita del derecho: público, privado y social.

El derecho agrario atendiendo al punto de vista de los sujetos a quien va dirigido,


también puede clasificarse en individual y colectivo.

El derecho agrario individual es aquel que se refiere a todas las disposiciones que
consideran al productor agrícola, pecuario o forestal desde el punto de vista
interpersonal.

A su vez, el derecho agrario colectivo se da sobre la base de todas aquellas


relaciones entre núcleos agrarios (ejidos, comunidades) o también entre estos y los
productores individuales.

1.11 PRINCIPALES CARACTERISTICAS DEL DERECHO AGRARIO

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El derecho agrario es eminentemente social, tutelado por la Constitución general de
la Republica, y se dirige a proteger los derechos de los individuos más
desamparados dedicados a la actividad primaria (agropecuaria y forestal). Su
objetivo es otorgar seguridad y certeza jurídica a la tenencia de la tierra; asimismo,
por medio de los procesos de reforma agraria y desarrollo rural busca la superación
dedicado a esta actividad.

1.12 FUENTES DEL DERECHO AGRARIO

Fuentes de derecho es el origen de donde emana el conocimiento jurídico, sus


principios, sus fundamentos valores y procedimientos, es decir el origen de las
normas jurídicas

Las fuentes de derecho son tres: formales, reales e histórica.

Las fuentes formales se originan mediante el proceso legislativo; también las


conforman la jurisprudencia, la investigación científica del derecho y la costumbre.

Por fuentes reales se entiende el acto retirado (consuestudo inveteretea) que se


produce en la sociedad (fenómeno social) y que dará origen a la legislación.

Las fuentes históricas se integran con la ley derogada o abrogada, con todos aquellos
documentos pasados y también con la jurisprudencia superada.

Las fuentes formales en materia agraria son la legislación agraria vigente, como la
ley agraria. Supletoriamente son también fuentes formales: el código civil federal, el
código federal de procedimientos civiles, los reglamentos de la ley agraria, etc.; la
jurisprudencia dictada por los tribunales del poder judicial de la federación, los usos
y costumbres de las comunidades (en términos del artículo 2° de la constitución).

1.12.1 FUENTES FORMALES

Las fuentes formales, como sabemos, son los procesos tradicionales de


manifestación de las normas, conformadas por la ley, la costumbre, la doctrina y la
jurisprudencia, a las que se agregan los principios generales del derecho.

1.12.2 FUENTES REALES

Las fuertes reales son las circunstancias efectivas, reales, como el verdadero
alcance del contenido de las normas, las necesidades económicas y culturales, el
bien común y, de más actualidad, los requerimientos indispensables de
capitalización del campo evitar y revertir el minifundismo y, en general, toda la

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problemática agraria que se gestó ya cumulo a lo largo del periodo de la llamada
fase del reparto agrario y que a la postre fue la causa de la reforma constitucional de
1992.

1.12.3 FUENTES HISTORICAS

Las fuentes históricas están constituidas por vestigios y documentos tales como
murales, artesanías, códices, papiros, libros, que contienen el texto de una o más
normas. A lo anterior agregaríamos también la experiencia histórica, muy cercana a
la real, peor que está conformada por el efecto directo e indirecto de la aplicación de
la norma en un momento y ligar determinados.

1.13 EL PROCESO LEGISLATIVO REALIZADO POR LA AUTORIDAD


POLITICAMENTE AUTORIZADA PARA FORMAR NORMAS VIGENTES

Mediante este proceso legislativo, obtenemos la ley con sus características típicas y
con su validez extrínseca.

Cualquiera de las leyes reglamentes circulares, etc.; que integran la legislación


agraria mexicana ha pasado por este proceso legislativo hecho por el Poder
Legislativo o el Ejecutivo, según el caso para convertirse de proyecto jurídico en
ordenamiento legal recordemos que le proceso legislativo típico se integra de
diversas etapas que son: la iniciativa, la discusión, la aprobación, la publicación y la
iniciación de la vigencia de determinada ley.

1.14 LA COSTUMBRE

La costumbre puede constituir normas pero solo cuando la fuente formal inmediata,
o sea la ley de un sistema positivo la reconoce como tal y la engloba en lo legal, por
eso se dice que es mediata.

La costumbre secundum legem es el resultado consecuencia de la aplicación de una


ley; la costumbre contra legem es la que va contra la ley y la deroga, situación que
no se admite en nuestro sistema jurídico; la costumbre praeter legem o delegada es
la que suple a la ley en la medida en que esta lo permite, caso que se da en nuestro
sistema jurídico.

1.15 EL PROCESO JURISPRUDENCIAL DE INTEGRACION NORMATIVA

La ley admite en nuestro sistema jurídico el proceso jurisprudencial para crear


normas de aplicación colectiva; de esta manera la jurisprudencia obligatoria puede

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equipararse a la ley y con las características de esta, siempre y cuando cumpla con
los requisitos integrándose de cinco ejecutorias consecutivas, en el mismo sentido,
pues solo así será obligatoria para los Magistrados y de Circuito, Jueces de Distrito,
Tribunales de los Estados, Distrito Federal y juntas de Conciliación y Arbitraje.

1.16 PROCESO RESOLUTORIO PRESIDENCIAL EN MATERIA AGRARIA

En el concepto, también el proceso mediante el cual se dictaba una resolución


agraria definitiva en materia agraria, era fuente mediata formal, pues creaba normas
que contribuían a regir de manera general, la situación de un grupo determinado de
campesinos.

1.17 PRINCIPIO GENERAL DEL DERECHO

Indudablemente los conceptos jurídicos fundamentales deben observarse en


cualquier manifestación externa y formal del derecho; pero el problema aparece
cuando la ley nada dice para resolver un caso concreto, o sea cuando estamos frente
a una alaguna legal, o cuando un precepto resulta obscuro y es menester recurrir a
la interpretación de el mismo. Es en estos casos cuando la fuente inmediata, la ley,
permite que los principios generales del derecho sean fuentes formales, ya que
siempre lo serán de la parte esencial de la norma jurídica. La justicia, pero ya con el
calificativo de social, resulta principio especifico del derecho agrario así como a otros
principios singulares como su concepto de propiedad, a cuyo espíritu deberán
aclararse las normas del derecho agrario y llenarse las lagunas legales”.2

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DERECHO AGRARIO

DERECHO AGRARIO

CLASIFICACION DERECHO AGRARIO del

PUBLICO SOCIAL Jurídico PRIVADO

FOFORMALES

FUENTES DEL DERECHO REALES

HISTORICASJ

1 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p17

2 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, ed. Porrúa, México 2012, p100
1.18 EL PROBLEMA AGRARIO Y LAS NORMAS AGRARIAS EN LA EPOCA
PRECOLONIAL

Los aztecas tenían una organización político-social y un régimen de tenencia de la


tierra que se encontraba en plena evolución, pero también es cierto que las culturas
indoamericanas no eran iguales a la de los pueblos europeos contemporáneos.

Entre los aztecas hubo un problema agrario porque en el mejor de los casos el pueblo
azteca libre podía detentar un pequeño pedazo de tierra a través del Calpulli; pero
la inmensa mayoría de los aztecas no libres y de los pueblos sojuzgados labraban
las tierras que en grandes extensiones habían sido repartidas graciosamente entre
los principales, los guerreros y los sacerdotes; de todas maneras y en el mejor de
los casos como dijimos, de lo que sembraban tenían que dar una medida de cada
tres en calidad de tributo. Por todo lo anterior notamos que había una defectuosa
distubuci0on territorial, pues la tierra se encontraba concentrada en pocas manos

14
que había también una injusta explotación agrícola, porque quienes trabajaban la
tierra normalmente no eran dueños de ella y pagaban altos tributos. No es pues de
extrañarnos que los pueblos sojuzgados por los mexicas estuvieran inconformes con
esta situación y que fueran factor propicio y determinante para ayudar a los
españoles a derrocarlos. Así se explica que el 24 de Abril de 1519 llegara Hernán
Cortes con un puñado de hombres a San Juan de Ulúa y apenas dos años después
el 13 de agosto de 1521 cayera en sus manos Tenochtitlán, diezmada por la peste
de viruela traída por los europeos, y con ella todos los pueblos aborígenes.

Por otra parte debemos observar que los aztecas tenían sus leyes agrarias para regir
esa maravillosa institución llamada Calpulli y que en nuestra legislación de 1915 a
1992 se conservaran aquellas normas de residencia para darle parcela a alguien.

Trascendental fue que los aztecas tuvieran un problema agrario respecto de los
pueblo sojuzgados y que no lo hubieran resuelto con el sentido social con que
trazaron el Calpulli, porque esa fue una de las causas fundamentales de la caída de
su imperio ya que como dice Mendieta y Núñez, l agricultura en la época pre colonial
por lo que respecta a los pueblos sedentarios, a las monarquías o cacicazgos
establecidos definitivamente, era a la industria principal… la agricultura era la base
de sustentación de los pueblos del Anáhuac”.

1.19 DISTINTOS TIPOS DE TENENCIA DE LA TIERRA

Entre los aztecas solamente el Señor (Tzín) podía disponer de la tierra como
propietario y ejercer la plena in rre potestas (derecho de usar, del fruto y de disponer
de una cosa). El Señor podía dejar las tierras para sí, llamándose entonces Tlatocalli
(tlatoa, mandar; calli, casa) o la repartía entre los Principales (pipíltzin), siguiendo por
regla general sus costumbres, pero estas tierras podían volver a poder del Señor
cuando este lo desease. Veamos cuales son los tipos de propiedad que emanaban
de la voluntad del señor:

1. Pillalli. Clavijero escribió que eran posesiones antiguas de los pipiltzin,


transmitidas de padres a hijos, o concedidas por el rey en galardón de los
servicios hechos a la colonia.
2. Teotlalpan. Los productos de esta tierra llamada Teotlalpan (tierra de los
dioses) estaban destinadas a sufragar los gastos del culto.
3. Milchimalli. Estas tierras estaban destinadas a suministrar víveres al ejército
en tiempo de guerra, las cuales se llamaban milchimalli o cacalomilli, según
la especie de víveres que daban.
4. Altepetlalli. Había tierras cuyos productos se destinaban a sufragar los gastos
del pueblo y Clavijero escribió que el altepetlalli, esto es, de los comunes de
las ciudades, se dividían en tantas partes cuantos eran los barrios de aquella

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población y cada barrio poseía su parte con entera exclusión e independencia
de los otros. Esta institución tuvo perfiles similares a la que los españoles
llamaron Propios.
5. Calpulli. El Calpulli, como su génesis nominativa lo indica (calli, casa; pulli,
agrupación) era una parcela de tierra que se le asignaba a un jefe de familia
para el sostenimiento de esta, siempre que perteneciera a un barrio o
agrupación de casas, aunque muy al principio el requisito más que de
residencia era de parentesco entre las gentes de un mismo barrio.
Los requisitos para que una persona tuviera el calpulli y no fuera molestado
en el goce del mismo, consistía en ser residente de le barrio del que se tratara
y continuar viviendo en él mientras se deseara seguir conservando el calpulli
pero además y esto si se dejaba de cultivar un ciclo agrícola, el jefe de familia
que detentara el calpulli era llamado y amonestado por el jefe del barrio o
calputlalli y si el amonestado reincidía de tal manera que el calpulli dejara de
cultivarse durante dos ciclos agrícolas, el jefe de familia perdía el calpulli y
este se le asignaba a otra familia que quisiera cultivarlo; en caso de que
hubiera conflicto y que se dudara de la equidad de la resolución del jefe de
un barrio éste llevaba el asunto al tribunal correspondiente para que se
resolviera el caso. 1

1 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, ed. Porrúa, México 2012, p126
CUESTIONARIO

1.- Menciona como se le nombra a la pequeña parcela de la gente del pueblo en la


época pre colonial.

2.- ¿Cuál es la clasificación del derecho como derecho social?

3.- Menciona la clasificación tradicional del derecho

4.- Menciona las principales características del derecho agrario.

5.- Mencione los distintos tipos de tenencia de la tierra época colonial.

6.- ¿Considera importante el estudio del derecho agrario? Explique ¿por qué?

7.-Desde el punto de vista histórico, ¿Cuál es la importancia del estudio del


derecho agrario?

8.- ¿Cuál es el ámbito de desarrollo profesional del abogado en esta materia?

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9.- En relación al ámbito social, ¿Por qué se debe estudiar el derecho agrario?

10.- ¿Por qué se considera al derecho agrario una disciplina autónoma del derecho?

11.- ¿Qué es el Pillalli?

12.- ¿Qué es el Milchimalli?

13.- ¿Qué es el Teotlalpan?

14.- ¿Qué es el Altepetlalli?

15.- ¿Que es el Calpulli?

CAPITULO II

LA PROPIEDAD RURAL DURANTE LA COLONIA

INTRODUCCIÓN

En este pequeño capítulo de la propiedad rural durante la época colonial se


describen las diferentes tipos de propiedad y desde el descubrimiento del nuevo
continente los Reyes católicos habían acudido al papa Alejandro VI con el objetivo
de pedirle que con la autoridad que le confería legitimara su actuar en las tierras que
recientemente se habían descubierto y ganado Cristóbal Colón para la Corona de
Castilla y mediante diversos documentos que se les conoce como Bulas
alejandrinas, se legitima la actuación de la Corona de Castilla en las tierras
descubiertas, de que si Dios es el creador de las cosas terrenales y el papa es el
representante terrenal de Jesús, entonces ello resulta ser un justo título para
legitimar esas dichas tierras. Entonces en esa época la Iglesia imperaba y controlaba
la tenencia de la tierra, lo cual afectaba totalmente y eso se ve hasta nuestros
tiempos, los dueños realmente de la tierra no son los que la trabajan. En el desarrollo
del texto se irá observando cambios, evolución de la tenencia de la tierra, y con ello
las leyes apoyaran a este rubro social económico para según elevar la calidad de
vida, cosa que no pasa, aun con todo y los levantamientos de fuerzas armadas ya
cansadas de maltrato y robo total de su vida misa.

17
2.1 LA PROPIEDAD RURAL DURANTE LA COLONIA

“Durante la época colonial la división de la superficie territorial conquistada estuvo


sujeta a las hazañas o inversiones realizadas por los españoles. Así, los pueblos
avasallados vieron como sus tierras fueron a dar al patrimonio del Estado peninsular.

En tal forma legitimadas las tierras a favor de la Corona española, se constituye la


propiedad de ésta así como la personal del monarca, con los que surgen las tierras
realengas, que pertenecían al tesoro real e incluían tierras de siembra, montes,
pastos y aguas. De ahí se deriva la propiedad inmueble que rige durante el coloniaje
y que desde el punto de vista individual incluía:
Las mercedes reales. Eran tierras dadas a los conquistadores y colonizadores, cuya
superficie variaba en cuanto a su extensión por los méritos del solicitante o la calidad
de las tierras. Las mercedes eran provisionales, ya que el titular tenía que cumplir
con los requisitos de residencia y de explotación agrícola que se imponían para
obtener la propiedad.

La caballería. Medida de tierra que se le entregaba el merced a un soldado de


caballería.

La poenía. Consistía en la tierra entregada en merced a un soldado de infantería

Las suertes. Solares de labranza que se daban a los colonos por medio de una
capitulación o una merced.

La compra venta. El Tesoro Real podía vender las tierras avasalladas por medio de
la compra venta a particulares.

En cuanto a los medios que disponían tanto las personas morales como las personas
físicas para adquirir la propiedad, estos eran:

1. Confirmación. Era un procedimiento por el cual el rey “confirmaba” la tenencia


de la tierra a alguien que carecía de títulos sobre ella, o bien cuando su título
tuviera algún vicio.
2. Usucapión. Las tierras realengas podían usucapiarse (prescribir) y el termino
para ello variaba.
3. Composición. En 1631 los cabildos dispusieron que aquellos que hubieren
introducido y usurpado más de lo que les perteneciera, fueran admitidos en
cuanto al exceso o moderada composición, despachándole nuevos títulos.

Las capitulaciones consistían en los contratos que celebraba la Corona con


particulares para la realización de determinadas empresas; así el particular

18
financiaba la empresa a cambio de ciertas prestaciones. Las capitulaciones podían
ser de descubrimiento, de explotación o de colonización y mediante este contrato, a
la persona que se comprometiera a colonizar se le daba en pago determinada
cantidad de tierra, no sin antes deducir los olares del pueblo, el excido, la dehesa,
así como otro tanto para los propios del lugar.

Las tierras sobrantes se dividían en cuatro partes: Una para el comprometido a hacer
el pueblo y las otras tres para repartirse en suertes iguales entre los pobladores.

En cuanto a la propiedad colectiva, existían las siguientes: las reducciones, el fundo


legal, los ejidos, la dehesa, las tierras de repartimiento, los propios.1
Las reducciones. Consistían en pueblos de fundación indígena cuyo objeto era
concentrar a los indios para que fueran instruidos en la santa fe católica y sometidos
a un orden legal.

El fundo legal. Estaba constituido por terrenos disponibles para el asentamiento del
pueblo, inicialmente el fundo media 500 varas hacia los cuatro vientos, pero
posteriormente por Cédula real del 4 de Junio de 1687 se aumentó la extensión a
600 varas y una superficie de 1 400 000 varas cuadradas, como mínimo ya que se
abría la posibilidad de repartirlas a los indios mucha más cantidad según pareciera
suficiente al Rey.

Los ejidos. Felipe II, por disposición del 1º de diciembre de 1573, ordenó que los
sitios en que se formaron los pueblos y las reducciones tuvieran comodidad de
aguas, tierras y bosques, entradas, salidas y labranzas y un ejido de una legua de
largo, donde los indios pudieran criar sus ganados sin que se revolvieran con otros
españoles. Así el ejido español estaba constituido por las tierras que se hallan a la
salida del lugar, era común a todos los vecinos y en él no se podía plantar ni labrar.

La dehesa. Era un lugar a donde se llevaba a pastar al ganado y, al igual que el ejido,
se encontraba a la salida del pueblo. No se podía labrar ni plantar en él.

Las tierras de repartimiento. Por disposición de Cédula del 19 de febrero de 1560,


los indios que se fueran a vivir a los pueblos de nueva fundación deberían continuar
en el goce de las tierras que antes de ser reducidas poseían, las cuales se les dieron
por disposición y mercedes especiales, constituyéndose en parcialidades indígenas
y de comunidad, es decir, estas tierras de repartimiento se daban en usufructo a las
familias que habitaban los pueblos, con la obligación de utilizarlas , y si quedaban
vacantes las parcelas, éstas eran repartidas entre quien las solicitaban.

Los propios. Tanto los pueblos españoles como los indígenas tenían determinados
terrenos que se destinaban a cubrir los gastos públicos. Los ayuntamientos eran los

19
encargados de su administración y los daban a censo enfitéutico o los arrendaban
entre los vecinos del pueblo”.1

1 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p23

CUESTIONARIO

1.- Durante la Colonia, ¿quiénes tuvieron sujeta la decisión de usar las superficies
territoriales?

2.- ¿Qué es una merced real?

3.- ¿Qué es una caballería?

4.- ¿Qué es la poenía?

5.- ¿Qué son las suertes?

6.- ¿Qué es la compra-venta?

7.- ¿Qué es la confirmación?

8.- ¿Qué es la usucapción?

9.- ¿Qué es la composición?

10.- ¿Qué son las reducciones?

11.- ¿Qué es el fundo legal?

12.- ¿Qué es un ejido?

13.- ¿Qué es la dehesa?

14.- ¿Qué son las tierras de repartimiento?

15.- ¿Qué es un propio?


20
CAPITULO III

LA EXPLOTACION AGRICOLA EN LA EPOCA COLONIAL

INTRODUCCION

La explotación como siempre en nuestro país, en este caso la explotación agrícola y


más aún en la época colonial, no era tanta pues las siembras y las cosechas en las
haciendas y en los ranchos eran de poca cantidad, y se necesitaba contratar gente
que se dedicara exactamente a las actividades agrícolas, los indígenas se
contrataban de vez en cuando, esporádicamente, eran los peones de temporada.
Todo cambia a partir de la ley del 6 de junio de 1523 sobre el trato a los naturales,
que ordenaba que los indios nos e encomendaran, ni depositarlos a ellos en rancho
o haciendas, se dispuso que entre ellos y los españoles hubiese una contratación y
el comercio de forma voluntaria.

Se crea con esto la encomienda para la explotación agrícola de todas las tierras
repartidas en la Nueva España, mucho más por esos indios encomendados que por
los esclavos o el llamado trabajo de libre concierto, lo cual es explicado en este
capítulo.

Se explica que hubo cédulas creadas para la protección de los indígenas, la


encomienda se sostuvo y así con esto se creaban conflictos entre el principio de
libertad y las encomiendas de por vida.

Cuando se exceptúa al indígena de la esclavitud también se sostuvo la dicha


encomienda, pues así se creía se respetaba el derecho de libertad del indígena, pero
en la realidad se le utilizaba para el trabajo agrícola que necesitaba la Nueva España,
por medio de la conciencia religiosa y la gran necesidad de satisfacer todo el trabajo
que se requería desde el nacimiento y el desarrollo de la Nueva España.

3.1 LA EXPLOTACION AGRICOLA

“Si la Nueva España tuvo como actividad predominante la agricultura, muy


importante resulta investigar de qué manera se realizó y quienes ejecutaron dicho
trabajo. Puede sintetizarse entre las instituciones mediante las cuales se llevó a cabo
la explotación agrícola en la época colonial y que son: el trabajo agrícola de libre
concierto, la encomienda y la esclavitud.

3.3 EL TRABAJO AGRICOLA DE LIBRE CONCIERTO

21
Es probable que esta forma de explotación agrícola fuera la menos usada en etapa
colonial, porque en los ranchos y haciendas en la época de recoger la cosecha y en
poca cantidad, necesitaron emplear trabajadores agrícolas, ya que los indios
encomendados realizaban las faenas rusticas durante todo el año.

Desde la ley del 6 de junio de 1523 sobre trato de los naturales (ley XXIV, título I,
libro VI) en la cual se ordenaba que los indios no se encomendaran, ni se hiciera
depósito de ellos, se dispuso que entre los dicho indios y españoles hay contratación
y comercio voluntario, se requería la intervención al principio de loa colonia de la
audiencia para evitar la explotación inmoderada.

3.4 LA ENCOMIENDA

Es posible que los indígenas encomendados se convirtieran en los llamados peones


acasillados de las haciendas, los cuales mencionó nuestra legislación agraria desde
1929 a 1992.

En cuanto a la Nueva España, se señala que Carlos V el 26 de junio de 1523 instruyo


a Hernán Cortes sobre el trato que debía de darles a los naturales y para que no
hiciera repartimiento de hombres en la Nueva España viendo el gran daño que con
dichos repartimientos se había hecho a los indígenas; y en la ley I, título V libro VI
de las Leyes de Indias, fechada del 26 de junio de 1523, se dispuso que ya que los
indios no iban a repartirse, rindieran vasallaje pagando una moderada cantidad de
frutos de la tierra, como antes lo habían hecho con sus jefes teules. Con la ley de
sucesión del 26 de mayo de 1526 se crearon las encomiendas por más de dos vidas.

Desde un principio en relación con la encomienda, Fray Bartolomé de las Casas,


tomo la defensa aborigen y para tal efecto desde 1515 se trasladó a las cortes
españolas, reiterando repetidamente su protesta contra los abusos de los
encomenderos como consecuencia de esto, se quiso evitar que en la encomienda
de las islas se trasladaran a Nueva España posteriormente en las juntas de
Valladolid y Barcelona, Bartolomé de las Casas expuso sus famosos 20 argumentos
a consecuencia de los cuales en 1542 se dictaron las leyes nuevas en las cuales se
intentó suprimir la encomienda substituyéndola por el sistema de empadronamiento,
tasación y tributación general de los indígenas a favor de la corona y se ordenó que
los españoles no tengan mano ni entrada en los indios, ni poder, ni mando alguno,
ni haya más del gozar de su tributo con forme a la orden que él, Audiencia o
Gobernador, dieren para la cobranza del.

3.5 LA ESCLAVITUD

22
La esclavitud de los indígenas solo fue permitida en dos casos y muy a raíz de la
conquista; las dos causas de esclavitud fueron, el cautiverio por guerra justa y el
cautiverio por rebelión religiosa.

Esta institución fue la causa de la trascendental polémica entre Fray Bartolomé de las
Casas y Ginés de Sepúlveda en 1550.

Precisamente porque se exceptuó la indígena de la esclavitud, se sostuvo la


encomienda, institución en la cual se creía respetar el derecho de libertad del
indígena, pero se le utilizaba para que realizara el trabajo agrícola que necesitaba la
Nueva España, conciliándose así la exigencia de la conciencia religiosa de esta
etapa y la necesidad de satisfacer todo el trabajo que requería el nacimiento y
desarrollo de la Nueva España.

Todo lo anterior explica porque en la época de la independencia, Don José María


Morelos, el 17 de noviembre de 1810, dictó una orden en el cuartel general de
Aguacatillo, diciendo que nadie pagaría tributo y que no habría esclavos en lo
sucesivo.

Por esta disposición deducimos que otra de las causas que explican la guerra de la
independencia, fue la esclavitud.

El 19 de octubre de 1810 Don Miguel Hidalgo dicto un Bando mediante el cual declaro
la abolición de la esclavitud.” 1

1 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, ed. Porrúa, México 2012, p177

23
EXPLOTACIÓN AGRICOLA

EXPLOTACIÓN EPOCA COLONIAL

LIBRE CONCIERTO LA ENCOMIENDA LALA ESCLAVITUD


Jurídico

CUESTIONARIO

1.- ¿Qué es el libre concierto?

2.- ¿Qué es la encomienda?

3.- ¿Qué es la esclavitud en la época de la Colonia en México?

CAPITULO IV

LA PROPIEDAD DE LOS ESPAÑOLES, DE LOS INDIGENAS Y DEL CLERO

INTRODUCCION

24
Hay que reconocer que se incorpora la institución de la propiedad privada en la
Nueva España que le otorgó desde su origen un carácter social, ya que para
concederla mediante merced, exigía la residencia del beneficiario y el cultivo de la
tierra, bajo pena de revocación. España fundamenta su derecho territorial en una
gran diversidad de precedentes jurídicos, entre ellos los fueros.

Como antecedente inmediato a la conquista encontramos la estructura de tenencia


de la tierra existente en los pueblos que conformaban la triple alianza: mexicas o
aztecas, tecpanecas y alcohuas.

Existían muy marcadamente las diferentes propiedades de esa época, los españoles
como siempre, se adueñaban de la mayor parte de la tierra, el clero también contaba
con su gran poderío y tenencia de la tierra, y por último escalón dejaban a los
indígenas, y mentira desde mi punto de vista que la tierra era de quien la trabajaba,
desde ese entonces y hasta nuestros días sabemos que eso no es verdad, y que
hay cambios en la ley, sí, pero en la realidad no hay ese desarrollo, esa libertad para
hacer de la tierra un gran proyecto de nación de comercialización si monopolios de
los productos de esa actividad agrícola. En comparación solo cambiaron los roles de
los tenedores de las tierras, de los españoles a los estadounidenses, de los del clero
a los gobiernos, y de los indígenas a los más pobres de México.

4.1 LA PROPIEDAD DE LOS ESPAÑOLES

“Los españoles en la época colonial ocuparon al principio, por lógica necesidad, las
ciudades y pueblos aborígenes, apoderándose de estas tierras que ya habían tenido
dueño, que estaban cultivadas o por lo menos que se encontraban situadas en zonas
pobladas; fue en fechas posteriores a la conquista cuando ellos y sus descendientes,
que formaron las castas de los peninsulares y los criollos, se aventuraron a colonizar
en territorios no poblados utilizando para ello el sistema; esto explica que aun cuando
legalmente se reconoció y protegió al propietario indígena, en la realidad las leyes
no se cumplieron.
Solamente los españoles y sus descendientes gozaron libremente del sistema
educativo colonial y sobre todo de los centros de alta educación; las castas y los
indígenas no tenían a su alcanza la educación laica en general y menos en sus fases
superiores.

Desde un principio Hernán Cortes dicto providencias que dicen por resultado el
desarrollo de la agricultura, hiso llevar de Cuba de Santo Domingo y de las demás
islas dominadas por España, ganado mayor y menor, la caña dulce que Colon había
llevado de las Canarias a las Antillas; pidió al emperador que enviase labradores con
toda especie de semillas, que diese orden para que cada barco que marchase de

25
España hacia Méjico llevase cierta cantidad de plantas, pues era el medio mejor de
engrandecer al país, y que se dignase allanar los obstáculos que le gobernador de
Cuba ponía para que saliesen de ella caballos y yeguas hacia el nuevo reino.
Lorenzo de Zavala indico que la inquietud social a finales de la Colonia y principios
del siglo XIX se explicó porque las haciendas de ganado mayor lanar eran
posesiones de príncipes, pues tenía desde 20 a 30 mil cabezas; las de cultivo,
aunque atrasada la agricultura, producían trigo, cebada, maíz, frijol y demás granos
alimenticios. En la tierra caliente se cultivaba la caña de azúcar y el café y estos
ramos preciosos formaban la riqueza de los propietarios, cuya mayor parte eran
españoles y frailes.

4.2 LA PROPIEDAD DE LOS INDIGENAS

La idea de destruir la idolatría aborigen y del derecho de conquista dio causa a los
españoles conquistadores para que se repartiera entre ellos y de inmediato aquellas
propiedades indígenas pertenecientes al Señor (tlatocalli), a los Principales que
fueron enemigos (pillalli), a los dioses (teotlalpan) y a los guerreros (milchimalli). Sin
embargo, aún los calpullec pasaron a manos de los españoles porque eran
propiedades situadas dentro de la ciudad y los conquistadores se asentaron primero
en los lugares ya poblados adueñándose de las tierras de esos pueblos.

Las leyes del 15 de octubre de 1754, ordenaba Fernando VI ordena que las
comunidades de indios se les restituyeran sus tierras de pastos y ejidos; la Real
Instrucción del 23 de febrero de 1781 obligó a los indígenas a que obtuvieran una
licencia del Juzgado General de Naturales o de la Real Audiencia para que pudieran
vender sus propiedades; las instrucciones para evitar la usurpación de las tierras de
indios de 11 de febrero de 1791; el Informe del Virrey del 29 de mayo de 1806 del
Consulado de Guadalajara que ordenó l distribución de tierras para los padres de
familia y los indígenas: Ley del 26 de mayo de 1810 que eximió de tributos a los
indios y ordenó se les repartieran tierras de inmediato; la ley del 9 de febrero de 1811
que reconoció el derecho de los naturales y habitantes de América y sembrar y
cultivar; el 9 de noviembre de 1812 se ordenó el reparto de tierras a indios casados
mayores de veinticinco años y prohibió la encomienda; y el 14 de enero de 1813 se
ordenó dotar de terrenos para cultivo a los pueblos y a los vecinos necesitados de
tierras.

Las leyes citadas nos hacen ver que durante la Colonia, el indígena continuó
legalmente siendo el propietario mediante el reconocimiento de sus propiedades
hicieron los Gobernantes Españoles; pero la realidad fue otra, lo cual quiere decir
que las leyes no se cumplieron.

Además, hubo en la Nueva España una diferencia entre los españoles que
reservaron privilegios para sí, y los indios y castas que eran los obligados a pagar
26
los tributos, a la servidumbre y esclavitud; así se explica por qué en la Guerra de
Independencia don Miguel Hidalgo y Costilla dictó decreto sobre abolición de la
esclavitud y los tributos para los indios y las castas, y por qué Morelos en su Bando
del 23 de marzo de 1813 declaró la abolición de las calidades de indios, mulatos o
mestizos, para que todos se llamasen americanos, que en consecuencia nadie
pagase tributo y que los naturales de los pueblos fueran dueños de sus tierras.

Así pues, la mayor parte de la población de la Nueva España, indígena o de castas,


estaba desposeída de tierras, pues las pocas que tenían eran insuficientes para
satisfacer sus necesidades y no eran de tipo privado, todavía tenían tributos a su
cargo y sin embargo, eras lo que labraban los campos sin ser dueños de los mismos
y sin tener una retribución justa que sirviera para resolver sus problemas
económicos.

4.3 PROPIEDAD DEL CLERO

Junto con los conquistadores vinieron los frailes, pues el Capítulo de los
Descubrimientos de las Leyes de Indias ordenaban que vinieran “con cada uno de
los navíos que fueren a descubrir, dos sacerdotes o clérigos, o religiosos, para que
se empleen en la conversión de los indios a nuestra Santa Fe Católica”, tal
disposición se explica recordando los términos en que se dictaron las Bulas
Alejandrinas, la unión entre el Reino y la Iglesia y la obligación de los Reyes
Españoles tanto de pacificar y poblar, como de propagar y defender la fe católica.

En 1767 Carlos III expulsó a los jesuitas; luego mediante cédula del 26 de marzo de
1769, Carlos III dispuso la enajenación de los bienes de los jesuitas entre los cuales
se contaban en la Nueva España 126 haciendas y ranchos; la cedula del 27 de
agosto de 1796 grabo con un 15% como derechos por traslación de dominio, los
bienes raíces que adquiriese el clero; la cedula del 19 de septiembre de 1798 ordeno
la venta de los bienes de cofradías, hospitales, hospicios, casas de expósitos,
memorias pías, para pagar las deudas contraídas por Carlos IV y la Nueva España
produjo por este concepto 10.500, 000.00 pesos; el citado monarca en 1805 ordeno
en calidad de préstamo y con convencimiento del papa Pio VII la enajenación de
bienes eclesiásticos que produjera anualmente una cantidad de 200 000 ducados de
oro; y en 1808 Napoleón suprimió la inquisición.” 1

4.4 EL PROBLEMA AGRARIO Y LAS NORMAS AGRARIAS EN EL MEXICO


INDEPENDIENTE HASTA 1910

27
4.4.1 LA PROPIEDAD RURAL Y SU EXPLOTACION EN ESTA EPOCA

“El México independiente se inició el 20 de septiembre de 1821 con la entrada a la


ciudad de México del ejército trigarante; pero en materia agraria, la nueva república
tenía que enfrentarse a los hechos que le heredo la Colonia: una defectuosa
distribución de tierras y una defectuosa distribución de habitantes, como factores
principales, pero no únicos, de un problema agrario único y definido. En los lugares
poblados el problema agrario se apreciaba observando una propiedad indígena
individual y comunal casi desaparecida y una propiedad siempre creciente en manos
del clero y de los españoles y sus descendientes; en los lugares despoblados el
aspecto era diverso, pues se trataba de regiones de tierras de mala calidad, sin
cultivo y sin pobladores.

Las colonizaciones podían ser fomentadas por el estado, por particulares o por
empresas privadas y ser internas con elementos nacionales, típicas con extranjeros,
y mixtas.

A mediados de siglo XX, presenciamos otro cambio en estos conceptos, con la


acción de creación de nuevos centros de población, equidad que existió hasta 1992.

Durante la etapa comprendida entre 1821y el 23 de junio de 1856 observamos que


el problema agrario continuo agravándose en su configuración; se reconoció la
existencia de una defectuosa distribución de tierras, pero se legisló para resolver
dicho aspecto solo con redistribuir la población, promoviendo la colonización en los
terrenos baldíos principalmente de las fronteras y zonas despobladas, desde luego,
era inadecuado tratar de resolver un problema agrario ya plenamente formado y
compuesto de muchas facetas, tan solo con colonización; y todavía más, de
colonización en terrenos no cultivables, como eran los baldíos.
Este es el panorama ambiental que nos presenta al existencia de un problema
agrario, que el tiempo, el crecimiento poblatorio, los erróneos planteamientos
técnicos y las ineficaces leyes agrarias, agudizaron más durante la primera etapa del
México independiente”. 2

“En 1810, aprovechando razones coyunturales de índole política exógenas y sumarla


a la descomposición socio-económica endógena de la Colonia, se inició la lucha por
la independencia de la Nueva España. En efecto, aquí conviene decir, aunque esto
podrá generar algún escozor, que gracias al activismo político, intervención y fuerte
presencia de Napoleón Bonaparte en los asuntos internos de algunos países de
Europa y en nuestro caso, específicamente en España, es decir de una situación
política externa, a la nueva España producida, en el océano Atlántico, aunados los
elementos de descontento y descomposición domestica que ya se presentaban de
naturaleza política, social y económica, se gestó el caldo de cultivo para que se

28
produjera la Independencia de nuestro país, y en cascada, las de los demás que
estaban bajo el control de la Corona Española.

Siguiendo los pasos y la ruta atrasada por Hidalgo, en esta misma línea de
pensamiento se ubica Morelos y Pavón al señalar en uno de los párrafos del Bando,
por el cual suprimió las castas y abolió a la esclavitud fechado el 17 de noviembre
de 1810, que no hay cajas de comunidad y los indios percibirán los reables, de su
tierras como suyas propias. Dos años más tarde, el 29 de enero de 1913, dispuso
que los naturales de los pueblos sean dueños de sus tierras y rentas, sin el fraude
de entrada en las casas. Que estos puedan entrar en constitución, los que sean
aptos para ello, y meses después, cuando el numeral 17 de Los Sentimientos de la
Nación, del 14 de septiembre de 1813 determino que a cada uno se le guarden sus
propiedades y respete en su casa, como en un asilo sagrado, señaland0 penas a los
infractores”. 3

4.4.2 NUEVA ESPAÑA AL MEXICO INDEPENDIENTE

“Ahora bien, cerrada al etapa pre colonial de nuestra historia, con el advenimiento de
la conquista española de los pueblos primigenios que habitan en estas tierras
mesoamericanas, y por ende, de la adjudicación de sus tierras podemos decir que la
propiedad originaria de la tierra no cambia en cuanto a la figura gobernante se refiere,
es decir en el rey, aunque sí de casa reinante, trasladándose ahora a la corona
española, en otras palabras el origen de la propiedad de la tierra paso a ser del rey
español mediante la adjudicación a través del mecanismo de la conquista.

Las autoridades crearon las figuras de la encomienda y repartimiento a favor de los


españoles, en la que estaban consideradas no solo grandes superficies territoriales si
no también la asignación de personas nativas para que entre otras cosas, trabajaran
la tierra y los adoctrinaran en la religión católica de ahí que a través de mercedes
reales, se favorecieran a los súbditos españoles y a sus hijos otorgándoles tierras en
propiedad.

Un retrato de la situación imperante en esta época, nos la da la pluma del obispo


asturiano Manuel Abad y Queipo, quien en 1799, envió al rey una representación
sobre la inmunidad personal del clero, la cual controvertí a la real cedula emitida en
el mes de Octubre de 1795 en la que defendía la inmunidad de los ministros de la
iglesia y de sus templos. Al final de la representación escribía el estado en que se
encontraba la nueva España en ese tiempo, calculando su población en
aproximadamente 4.5 millones de habitantes. Asimismo señalaba que la Nueva
España se dividía en tres clases sociales: Españoles, indios y castas”. 2

29
LA PROPIEDAD EN MEXICO

PLA PROPIEDAD EPOCA COLONIAL

ESPAÑOLES INDÍGENAS LACLERO


Jurídico

1 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, ed. Porrúa, México 2012, p177

2 Pampillo Baliño, Juan Pablo, Munive Paez, Manuel Alexandro, Derecho Agraria y Desarrollo rural, Editorial Porrúa, México,
2013 p. 123

3 Pampillo Baliño, Juan Pablo, Munive Paez, Manuel Alexandro, Derecho Agraria y Desarrollo rural, Editorial Porrúa, México,
2013 p. 126

CUESTIONARIO

1.- ¿Quién dictó las providencias que dicen por resultado del desarrollo de la
agricultura en Santo Domingo?

2.- ¿Quiénes gozaban del sistema educativo y centros de alta educación en la época
colonial?

3.- ¿Qué ley ordenaba a los frailes vinieran con navíos a descubrir los indios y
convertirse a la fe católica?

4.- ¿Qué ley y de qué fecha ordenaba Fernando VI que se restituyeran a los indígenas
sus ejidos?

30
5.- ¿Quién expulsó a los jesuitas de la Nueva España?

6.- ¿Quién suprimió la inquisición en 1808?

7.- Explica brevemente cual es la propiedad del clero

8.- Menciona las principales características de la propiedad de los españoles

9.- Has un cuadro sinóptico y muestra en él como se encontraban en la época


colonial divididas de acuerdo a la propiedad social, divide al clero y sus propiedades,
a los españoles y a los indígenas.

CAPITULO V

PANORAMA DE LAS DIVERSAS LEGISLACIONES INCIDENTES EN EL


MOVIMIENTO ARMADO DE 1910, ASI COMO EN EL TEXTO DEL ART. 27 DE LA
CONSTITUCION DE 1917

INTRODUCCION

En el amplio panorama de las legislaciones que surgieron del movimiento armado del
año 1910 se desprenden las ideas sociales las cuales llevaron a este movimiento
revolucionario, y la redacción del art. 27 de la Constitución de 1917, decreto de la ley
sobre Ocupación y Enajenación de Terrenos Baldíos, el Decreto sobre Colonización
de 1883, y así estas leyes nacen por la gran necesidad de regular el desorden de esa
época para poder tener el control en venta a corto y largo plazo del precio de terrenos
o de propiedad nacional, quitar impuestos excepto los establecidos para mejoras de
la nación, logrando con estas acciones la apertura a la concentración ilimitada de
tierras y a grandes injusticias para millones de mexicanos, sus efectos que en casos
se intentaron ser suspendidos, y que no se pudieron poner algunas legislaciones en
práctica debido al movimiento armado de aquel entonces.

Siempre y con el mejor propósito de beneficiar a los habitantes del país a mejorar
sus condiciones de trabajo, de tenencia de la tierra y llegar a buen puerto en las
relaciones de Estado y civiles dedicados a la parte agraria de la Nación.

5.1 LA LEY DE DESAMORTIZACION

31
“Al hecho de poner en circulación los bienes inmuebles que por alguna razón no
pueden ser vendidos se le llama desamortización. Los bienes inmuebles que se
hallan amortizados es decir fuera del mercado, se dice que son de manos muertas.
El diccionario jurídico dice lo siguiente sobre la desamortización:

Desde el siglo X la iglesia prohibió la enajenación de sus propios bienes, salvo en los
casos de necesidad (pagos, deudas, redimir cautivos, alimentar a los pobres).

Las corporaciones dedicadas a la realización de obras de beneficencia e instrucción


también obtuvieron el beneficio de tener sus bienes amortizados. Las llamadas
cartas de amortización eran expedidas por los obispos y abades de monasterios de
otra parte, por diversas razones, los bienes comunes de los municipios pueblos,
villas y lugares, y en México los de las comunidades indígenas, también gozaran del
beneficio de la amortización.
El presidente Comonfort y su ministro de Hacienda, Miguel Lerdo de Tejada
expidieron la Ley de Desamortización del 25 de junio 1856, también llamada ley de
Lerdo, la cual si bien tenía por objetivo fundamental dar movimiento a la propiedad
inmueble, también originó el despojo de tierras colectivas aun cuando no existía el
interés de ocasionar perjuicio alguno a las comunidades, ya que al fraccionarse su
superficie debía de ser adjudicada a los condueños en caso de las tierras comunales
y no a terceras personas ( a esta razón obedece la actual redacción de la fracc. VIII
del art. 27 de la actual Constitución.

5.2 EL ARTÍCULO 27 DE LA CONSTITUCIÓN DE 1857

En 1857 se promulgó la Constitución Política, que en su art. 27 establecía la


protección a favor de la propiedad particular.

La propiedad de las personas no puede ser ocupada sin un consentimiento, sino por
causa de utilidad pública y previa indemnización.

De este modo, la propiedad individual solo podía ocuparse por causa de utilidad
pública y previa indemnización. Esta redacción fue uno de los obstáculos con los que
inicialmente se enfrentó el reformador agrario, porque el gobierno carecía de los
recursos suficientes para afrontar dicha responsabilidad. Por ello se suscitó el
cambio, al texto actual que en la redacción del Constituyente señala “mediante” y no
previa “indemnización”, con lo que se sugiere que puede darse primero la ocupación
y con posterioridad el señalado el señalado pago.

El segundo párrafo del art. 27 de la Constitución de 1857 establecía:

La ley determinará la autoridad que deba hacer la expropiación y de los requisitos con
que ésta haya de verificarse.

32
El tercer y último párrafo reviste una gran importancia por su intención de elevar a
rango constitucional la incapacidad de las corporaciones civiles y eclesiásticas para
administrar bienes y, por ende, para comparecer a juicio a defender su propiedad,
retomando el texto del art. 25 de la Ley de Desamortización de 1856. El contenido
del citado párrafo es el siguiente:

Ninguna corporación civil o eclesiástica, cualquiera que sea su carácter,


denominación u objeto, tendrá capacidad legal para adquirir en propiedad o
administrar por sí bienes raíces, con la única excepción de los edificios destinados
inmediata y directamente al servicio u objeto de la situación.

De esta manera y ya elevada a rango constitucional la incapacidad legal de las


comunidades, entre otras corporaciones, para defender su patrimonio, llegaron a
multiplicarse los despojos de tierras. Esto sirvió como un medio para incrementar, si
no ilícita, sí injustamente las desproporcionadas ganancias de las compañías
deslindadoras, al abrigo de ordenamientos tales como la Ley de Baldíos de 1863 o
el Decreto sobre Colonización y Compañías Deslindadoras del 15 de Diciembre de
1883, pero ante todo la Ley de Ocupación y Enajenación de Terrenos Baldíos de
1894.

5.3 LEY DE NACIONALIZACIÓN DE BIENES ECLESIASTICOS

Dicha ley fue promulgada cuando era presidente interino Benito Juárez García el 12
de julio de 1859. Tenía por objeto desaparecer las ordenes monísticas y declarar la
separación de la Iglesia y del Estado. En su art. 1º señalaba que entrarían al dominio
de la nación todos los bienes del clero secular y regular había estado administrando
con diversos títulos, sea cual fuere la clase de predios, derechos y acciones en que
consistieran, el nombre y la aplicación que hubieren tenido.

Por su parte, el art. 4º impedía que las ofrendas y la indemnización por los servicios
que les pidieran los creyentes, pudieran efectuarse con bienes raíces.

El art. 5º suprimió las órdenes religiosas regulares, y el art 12 prevenía que los libros,
impresos, manuscritos, pinturas, antigüedades y otros objetos pertenecientes a las
comunidades religiosas se aplicarían a los museos, liceos, bibliotecas y demás
establecimientos públicos.1

5.4 SURGIMIENTO Y UBICACIÓN DEL DERECHO AGRARIO EN EL CONTEXTO


CONSTITUCIONAL MEXICANO

El derecho agrario se encuentra inmerso desde 1917 en el contexto jurídico de


nuestra Carta Magna como un derecho del individua para gozar de los beneficios del
33
reparto agrario. Ello se observa en los debates parlamentarios del Constituyente de
Querétaro, en voz de Juan de Dios Bojórquez, diputado constituyente que en su
discurso sobre el dictamen del art. 27 constitucional señaló:

Necesitamos buscar a todos los hombres de buena voluntad y darles un pedazo de


tierra. Antes vi esto como un quijotismo; tenía la idea que en el artículo 27 se colocara
un precepto en esta forma: todo mexicano que desee dedicarse a la agricultura, tiene
derecho a que el gobierno le proporcione la tierra que necesite.

Cabe recordar que en ese entonces la noción del derecho agrario era prácticamente
desconocida tanto para el constituyente Queretano, como para los abogados; por
ello, no es difícil suponer que haya atraído más la idea de equiparar esta garantía no
como social, sino como una prerrogativa individual, es decir, a un derecho del
individuo para acceder a la propiedad rural como un medio que le permita subsistir
de manera honrada y a la vez, por qué no, resolver el problema de la distribución
territorial al elevar a rango constitucional el derecho del individuo a obtener de forma
gratuita una dotación de tierras agrícolas, e insertarlo en el contexto.

Cabe destacar que la nulidad de las enajenaciones realizadas en contravención a la


ley del 25 de junio de 1856, (ley de desamortización) procede cuando no se hubiere
hecho el fraccionamiento conforme a esta ley, es decir, dicha normatividad no
pretendió despojar de sus tierras a las comunidades, sino que el fraccionamiento de
las tierras de los pueblos debía realizarse y adjudicarse a favor de sus moradores,
por lo que si la enajenación se realizó a personas extrañas a los pobladores, resulta
procedente dicha nulidad, conforme al referido texto constitucional, que en la
actualidad se conserva en la fracc. VIII del art 27 del Pacto Federal”.1

5.5 EL PORFIRIATO Y LA REVOLUCIÓN

Haremos un breve resumen de los antecedentes y el panorama de la situación en


que se encontraba México a principios de nuestro siglo en cuanto a la tenencia de la
tierra:

a) A partir de la Independencia, la nación se subroga en los derechos de


propiedad de la Corona española sobre la Nueva España.
b) Al ocurrir la subrogación de derechos, la propiedad inmueble estaba muy
concentrada en virtud del sistema de las mercedes reales que concedía la
Corona, situación que continúo luego de la Independencia.
c) Prácticamente sin tocar los intereses de los grandes terratenientes, durante
el periodo de Reforma se impuso a la desamortización de los bienes de las
corporaciones civiles y eclesiásticas, incluidos los ayuntamientos y
comunidades, y después de la nacionalización de los bienes del clero, lo que
incrementó la concentración de tierras en manos de los particulares.
34
d) Con base en objetivos colonizadores, se permitió a ciertas compañías
localizar, deslindar y medir los terrenos baldíos a cambio de tierra, lo cual
generó toda suerte de despojos, una mayor reconcentración y el latifundismo.
e) Cuando la inconformidad social era más que evidente, el gobierno de la
República pretendió atenuarla mediante tibias disposiciones, regalando lotes
de tierra a los necesitados, pero sin tocar los intereses de los grandes
propietarios de tierras, ya metamorfoseados en latifundistas.

5.6 PLAN DE AYALA

El 28 de noviembre de 1911, Zapata declara traidor a Madero, y elabora este


plan que representa la expresión más clara del agrarismo mexicano, que ya
contaba con objetivos muy definidos, aunque no muy radicales. Para muchos
este plan vendría a complementar la reforma democrática incluida en el plan
de San Luis. Antonio Díaz Soto y Gama señaló que contenía tres grandes
propuestas:
a) Restitución de ejidos: debían reintegrarse las tierras de que hubieren sido
despojados los poblados, los cuales debían contar con sus títulos
primordiales; la toma de posesión debería ser inmediata y el
procedimiento se ventilaría ante tribunales especiales.
b) Fraccionamiento de latifundios: debido a la miseria de la gran mayoría de
los pueblos y ciudadanos, se ordenaba la expropiación, previa
indemnización, de un tercio de dichos latifundios para otorgar ejidos,
colonias, fundos legales y campos para siembre. De lo anterior se
desprende, que para Zapata, deberían convivir la parcela y la mediana
hacienda. Como se puede apreciar, el caudillo de Amecameca nunca
consideró la necesidad de soluciones radicales para el problema de la
concentración de la propiedad agraria.
c) Confiscación de propiedades: Todas las tierras de aquellos que se
opusieron al plan deberían ser confiscadas y luego destinadas al pago de
indemnizaciones de guerra.

En su parte pertinente, el Plan disponía:

Plan libertador de los hijos del Estado de Morelos, afiliados al Ejercito Insurgente que
defienden al cumplimiento del Plan de San Luis Potosí, con las reformas que ha
creído conveniente aumentar en beneficio de la Patria Mexicana…4.- La junta
Revolucionaria del Estado de Morelos manifiesta a la Nación bajo formal protesta:
Que hace suyo el Plan de San Luis con las adiciones que a continuación se
expresan…6.-Que los terrenos, montes y aguas que hayan usurpado los
hacendados, científicos o caciques a la sombra de la tiranía y justicia venal, entrarán

35
en posesiones de éstos bienes y muebles desde luego los ciudadanos que tengan
sus títulos correspondientes a esas propiedades,, de los cuales han sido despojados
de mala fe de nuestros opresores…7.- En virtud de que la inmensa mayoría de los
pueblos y ciudadanos mexicanos, no son más dueños del terreno que pisan… por
estar monopolizadas en unas cuantas manos las tierras , montes y aguas, por esta
causa se expropiaran, previa indemnización de la tercera parte de esos monopolios
a esos propietarios de ellas, a fin de que los pueblos y ciudadanos de México tengan
ejidos, colonias, fundos legales para pueblos o campos de sembradura de labor y se
mejore en todo y para todo la falta de prosperidad y bienestar de los mexicanos…8.-
Los hacendados…que se opongan directa o indirectamente al presente plan, se
nacionalizarán sus bienes…9.-Para ajustar los procedimientos respecto a los bienes
antes mencionados, se aplicarán leyes de desamortización y nacionalización según
convengan.

El primer acto de dotación de tierras lo realizó el General Lucio Blanco en la hacienda


“Los Borregos” de Matamoros, Tamaulipas, el 30 de agosto de 1913, el expediente
culminó en resolución presidencial el 26 de octubre de 1938. Como reflejo directo
del pensamiento de Emiliano Zapata y sus asesores se sancionó una ley agraria del
26 de octubre de 1915, en la que en forma concreta se especifica el tratamiento que
deberá dársele a la propiedad con el motivo del Plan de Ayala.

5.7 EL CONGRESO CONSTITUYENTE DE 1917

En virtud de la relevante personalidad que significó para la consolidación del México


moderno, haremos una breve referencia al ideario presentado por Venustiano
Carranza en su discurso pronunciado el 24 de septiembre de 1913 ante el
ayuntamiento de Hermosillo, Sonora:

Aprovecho la ocasión de encontrarme ante tan selecta concurrencia y distinguidas


personalidades revolucionarias para expresar, aunque someramente, mis ideas
políticas y sociales…Ya es tiempo de no hacer falsas promesas al pueblo…por esto
señores, el Plan de Guadalupe no encierra ninguna utopía…sepa el pueblo de
México, que terminada la lucha armada a que convoca el Plan de Guadalupe, tendrá
que principiar formidable y majestuosa la lucha social…las nuevas ideas sociales
tendrán que imponerse en nuestras masas: y no es solo por repartir las tierras y las
riquezas nacionales, no es el sufragio efectivo, no es abrir más escuelas, no es
igualar y repartir las riquezas nacionales , es algo más grande y más sagrado, es
establecer la justicia y buscar la igualdad, la desaparición de los poderes, para
establecer el equilibrio de la conciencia nacional. Tendremos que removerlo todo…
nos faltan leyes que favorezcan al campesino y al obrero, pero éstas serán

36
promulgadas por ellos mismos, puesto que ellos serán los que triunfen en esta lucha
reivindicatoria y social.

Antonio de Ibarrola extrae algunas conclusiones específicas; entre ellas señala que
la función del Estado es única y exclusivamente la de velar por el cumplimiento pleno
de la función social del derecho de propiedad, regular el aprovechamiento de los
elementos naturales susceptibles de apropiación, así como respetar íntegramente la
iniciativa privada; acepta tácitamente el fraccionamiento de los latifundios,
diferenciándolos de los que él denomina “grandes emporios agrícolas”2

RESULTADO DE LEYES DE MOVIMIENTO


ARMADO DE 1910 HASTA LA CONSTITUCION
DE 1917.

LEY DE ART. 27 DE LEY DE PORFIRIATO Y PLAN DE


DESAMORTIZ LA NACIONALIZACIO REVOLUCION AYALA
ACION CONSTITUCI N DE BIENES
ON DE 1857 ECLESIASTICOS

CUESTIONARIO

1.- ¿Qué es amortizar?

2.-Explique que es la desamortización

3.- ¿En qué fecha se expidió la Ley de Desamortización?

4.-Explica que establecía el primer párrafo del art.27 de la Constitución de 1857

5.- Explica que establecía el segundo párrafo del art. 27 de la Constitución de 1857.

37
1 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p43

2 Rivera Rodríguez, Isaías, El Nuevo Derecho Agrario Mexicano, ed. Mc Graw Hill, 2ª edición, México 2013, p53

CAPITULO VI

AUTONOMIA DEL DERECHO AGRARIO

INTRODUCCIÓN

El estudio del derecho agrario es de gran importancia, tomando en cuenta que más
de la mitad del país es suelo regulado por normas jurídicas agrarias, sin aun contar
con las superficies correspondientes a colonias agrícolas y ganaderas, ni a los
terrenos baldíos o terrenos nacionales. Por lo tanto por los que estudien el derecho
corporativo, como asesores en asuntos de desincorporación o de la privatización de
la propiedad social, privatización destinada a los asentamientos humanos, a la
constitución de empresas agrícolas, expropiaciones, y ese gran universo de asuntos
agrarios, como para los abogados sociales que luchan por la justicia de los más
desprotegidos. También día a día, se requiere de la asesoría más especializada en
la materia, sobre todo si se toma en cuenta que los tribunales agrarios encargados
de aplicar esta rama jurídica son de estricto derecho y no permite ningún descuido,
por eso hay que conocer sus autonomías del derecho agrario, como son las que se
presentan en este capítulo. Además, la relación del derecho agrario con otras
materias es muy variada, pues hay normas de derecho de carácter social agrario
inmersas en el derecho constitucional y en el civil, así como en la materia de amparo,
administrativo, mercantil, penal, en el medio ambiente entre otras.

“El doctor Ordoñez Carasa, autor de la voz “derecho agrario" en la Enciclopedia


Jurídica Omeba, reflexiona sobre la autonomía de esta rama jurídica y señala que es
común que se crea< que nació como un apéndice del derecho civil, evolucionando
hasta obtener su completa separación, pero que ello sólo es parte de la verdad en la
conformación del derecho agrario moderno, ya que el derecho romano de la primera
época fue más agrario que civil, por lo que en algunos casos esta evolución se realizó
en sentido contrario. La conquista y la colonización de América provocaron una fusión
de conceptos que en algunos casos aún prevalece; después, la Revolución francesa
desmontó las estructuras feudales y consolidó la propiedad individual y absoluta. Sin
embargo, la intervención del Estado en las convenciones privadas acentúo la
38
importancia del carácter social del derecho, lo cual restringió la naturaleza ilimitada
de la propiedad y fundamentó la función social de la misma.
Como se puede apreciar, la mayoría de los tratadistas reconoce la existencia de un
derecho agrario autónomo con respecto a las otras ramas, que le permiten existir
por sí mismo. Su autonomía se divide en:

6.1 AUTONOMIA HISTORICA

El derecho agrario mexicano tiene un origen propio, independiente del derecho


romano, aun cuando después adopta principios de éste. Por ello podríamos afirmar
que es un derecho autóctono, de profunda raigambre mexicana, a diferencia de las
demás ramas que en general son adaptaciones locales del tronco común que se
localiza en el derecho romano y el Código Napoleónico. Aun hoy, a pesar de haber
sufrido una importante merma conceptual que beneficio al derecho civil conserva
conceptos e instituciones propias. Martha Chávez afirma “que todas nuestras
actuales instituciones agrarias, se explican claramente por nuestros antecedentes
históricos, así como por la importancia de las mismas para la resolución de nuestros
grandes problemas nacionales”.

6.2 AUTONOMIA JURIDICA

El derecho agrario mexicano posee principios propios, normas jurídicas particulares


que nacen en la época prehispánica, entre las cuales podemos mencionar la
regulación de los calpulli y las normas para asignar y aprovechar los calpullalli,
distribuir los frutos y productos, el respeto legislativo de la Corona a la propiedad
comunal indígena, las Leyes de Indias, las mercedes reales, cédulas y ordenanzas,
las disposiciones libertadoras de la Independencia, las leyes de Reforma de
colonización y baldíos y, durante el movimiento revolucionario, la ley del 6 de enero
de 1915 y el artículo 27 constitucional. Todas ellas y muchas otras que lo
conformaron, especialmente a partir de su constitución como derecho agrario
revolucionario, le dieron un perfil específico y diferente al de otras ramas del derecho.

6.3 AUTONOMIA CIENTIFICA

Por su materia tan original, autóctona, especial y compleja, el derecho agrario


requiere una constante investigación de naturaleza técnico-jurídica. Es una rama que
no ha dejado de evolucionar y, de acuerdo con este característico dinamismo, la
investigación debe adaptarse también.

Existe una gran controversia acerca de la existencia de esta autonomía. La niegan


quienes sostienen que los intereses rurales no son diferentes de los urbanos o que,
de existir, carecen de homogeneidad. A favor de la autonomía podemos asegurar

39
que las actividades agropecuarias presentan problemas específicos, cuentan con
instituciones especiales y sus principios pueden ser sistematizados.
Además, dicha autonomía tiene un objeto propio: regular las relaciones jurídicas de
la empresa agraria. Por si ello no fuera suficiente, su estudio ha exigido el desarrollo
de un método especial.

6.4 AUTONOMIA LEGISLATIVA

En el derecho precolombino de Mesopotamia, normalmente consuetudinario y solo


en algunos casos escrito, parte de la normatividad en materia de la tenencia de la
tierra fue rescatada y aun respetada, incorporándose incluso, a las Leyes de Indias.
Fiel a este proceso, el derecho agrario continua alimentándose de la evolución
constitucional, en un Estado independiente, buscando su propia identidad a través
de las Leyes de Reforma hasta llegar a la ley agraria del 6 de enero de 1915, al
artículo 27 constitucional, a los códigos agrarios de 1934, 1940 y 1942, a la Ley
Federal de la Reforma Agraria, hoy en vigencia transitoria, y finalmente la ley agraria
y sus diversas disposiciones conexas.

6.5 AUTONOMIA DIDACTICA

Existe unanimidad entre los investigadores sobre este aspecto, ya que sostienen que
debe estudiarse por separado de las demás ramas jurídicas porque se trata de un
complejo conjunto de elementos históricos, sociológicos y jurídicos. En México, el
derecho agrario adquiere autonomía prácticamente desde el primer Código Agrario
de 1934 y se conforma como materia especial a impartir en las universidades en
1939 en virtud del cúmulo de disposiciones jurídicas y de sus problemas especiales;
su estudio se separa de las otras materias y se considera que debía cursarse al final
de la carrera por ser indispensables para su conocimiento otras asignaturas
estrechamente relacionadas.

6.6 AUTONOMIA SOCIOLOGICA

Martha Chávez nos dice que la autonomía sociológica deviene de la imperiosa


necesidad de establecer reglas específicas para la clase campesina de origen
indígena. Por su parte, Mario Ruiz Massieu sostiene que, dada la clara definición y
amplitud del sector rural mexicano, es necesario otorga un trato especial a las
normas jurídicas agrarias, atendiendo a las características de los sujetos de las
mismas, y nuestro caso es más específico, ya que en México es una nación de
profundas raíces en el campo, además de que la mitad del territorio nacional es
propiedad social.

6.7 AUTONOMIA ECONOMICA

40
Nunca tanto como ahora se ha podido asegurar la existencia de esa autonomía: la
situación imperante en el campo impulsó la reciente reforma constitucional en
materia de dominio y tenencia de la tierra, cuyo objetivo primordial es otorgar las
bases para el despegue económico del agro. Existen fundadas razones, como
incrementar la producción agrícola, base de una economía sana, para lograr la
redistribución de la propiedad. Por ello, un adecuado enfoque del derecho positivo
sobre la propiedad agrícola permitirá reactivar la economía al propiciar una mayor y
mejor producción en el campo.”1

6.8 CONSTITUCIÓN FEDERAL DE LA REPUBLICA MEXICANA DEL 5 DE


FEBRERO DE 1857.

Desde febrero de 1856 se había reunido el Congreso de la Unión para dar a la nación
una nueva Constitución Política, Ley Fundamental que fue expedida el 5 de febrero
de 1857.

Rabasa opinó que “los autores de la Constitución, a parte de las dificultades con que
tropezaron para plantear libremente sus ideas, estuvieron siempre sometidos a
poderosas causas que perturbaban su criterio. Cuando los días no eran serenos, no
podían estar serenos los espíritus. Los errores de la Ley de 57 no son precisamente
numerosos, los errores son pocos, pero hieren puntos esenciales que producen el
desconcierto general de todo sistema.”

Esta Constitución se decretó “en el nombre de Dios y con la autoridad del pueblo
mexicano” pues como ya vimos originalmente no consignó la libertad de cultos,
suscitándose al respecto acalorados debates.

El artículo 27 de la Constitución de 1857 declaró por una parte su concepto de


propiedad como garantía individual y, por otra, reiteró los principios de
desamortización en contra de las corporaciones civiles y eclesiásticas, loables en
relación con las últimas, pero de graves consecuencias en relación con las primeras.
El artículo que nos ocupa dispuso textualmente: “La propiedad de las personas no
puede ser ocupada sin su consentimiento, sino por causa de utilidad pública y previa
indemnización. La ley determinará la autoridad que deba hacer la expropiación y los
requisitos con que esta haya de verificarse. Ninguna corporación civil o eclesiástica,
cualquiera que sea su carácter, denominación u objeto, de la institución.

Cabe señalar que en relación con esta Constitución, un hecho notorio en aquella
época; se expidió una ley para que los empleados y funcionarios públicos juraran
guardar y hacer guardar la Constitución y ante tal ley, el clero declaró excomulgados
a quienes cumplieran sus preceptos, negando incluso los sacramentos de
extremaunción a quiénes habiéndolo hecho no se retractaran del mismo. Este hecho

41
solo tiene importancia a fin de objetivizar la pugna política que existió en forma franca
y abierta, entre el Clero y el Gobierno.
Los anteriores son los puntos fundamentales de la Constitución de 1857 que, en
mayor o menor grado, explican la trayectoria creciente del problema agrario durante
aquellos años. Efectivamente, al reiterarse constitucionalmente la incapacidad de las
corporaciones civiles para adquirir o administrar bienes raíces, los pueblos dejarán
de ser dueños definitivamente de sus ejidos, desapareciendo la propiedad
inalienable, imprescriptible e inajenable de las comunidades agrarias confirmándose
la entrega de estas tierras en manos de quienes as detentaban ,pero en calidad de
propiedad particular. Y en los años subsecuentes, poco a poco nos daremos cuenta
que, cuando desaparece el sistema proteccionista del indígena al suprimirse el
régimen jurídico de las tierras de comunidad agraria, se propiciará su despojo, por
miseria o ignorancia, y se contribuirá a gravar el problema agrario.

Aconteció entonces la Guerra de Reforma de 1857 a 1860, a la que a su vez siguió la


del Segundo Imperio de 1862 a 1867.

6.9 LEY SOBRE OCUPACION Y ENAJENACION DE TERRENOS BALDÍOS DEL 20


DE JULIO DE 1863.

Esta ley de baldíos dictada por Benito Juárez en San Luis Potosí, definió los mismos
como “todos los terrenos de la República que no hayan sido destinados a un uso
público por la autoridad facultada para ello por la ley, ni cedidos por la misma a título
oneroso o lucrativo, a individuo o corporación autorizada para adquirirlos. A
excepción del Reglamento del 4 de diciembre de 1846 las leyes anteriores no habían
consignado una definición legal de baldíos; y este punto es sumamente importante
porque el concepto de baldíos de México, durante el siglo pasado, evolucionó desde
el simple sinónimo de terreno eriazo, hasta el concepto estricto de terreno no
amparado por un título primordial, transformación que se hará para perjudicar a la
gente de poca potencialidad económica, porque bajo ésta argumentación, será
desposeída.

Así, pues no debemos perder de vista el análisis de esos años que fue retirado el
articulo 9 usado en perjuicio del más pequeño y pobre campesino; en cambio los
preceptos que favorecían la adjudicación de baldíos y cuyo contenido era
bondadoso, no se aplicaron, como consta en la Memoria que el secretario del Ramo
dirigió al Congreso de la Unión el año de 1896, en donde admitió que no obstante
los vigorosos esfuerzos que se hicieron para habilitar baldíos, no se logró realizar ni
la inmigración, ni la colonización nacional en dichos terrenos.

6.10 OTROS DATOS CORRESPONDIENTES AL FINAL DE LA EPOCA ENTRE

42
1907 a 1910.

Las inquietudes provenían no sólo de los campesinos, sino también de los obreros,
sin embargo, aunque son muy conocidas las huelgas obreras que fueron ahogadas
en sangre, de Cananea el 1º de junio de 1906 y la de Río Blanco del 7 de enero de
1907, el movimiento obrerista será corolario, pero no determinante en la lucha social
de la Revolución. Mientras que en la mayoría de los países del proletariado ha sido
factor fundamental para lograr los derechos sociales, en México lo será el
campesinado, como se verá más adelante.

Es curioso observar cuando el 19 de mayo de 1909, se fundó el Centro Anti


reeleccionista de México, que entre sus fundadores se encontraban Francisco I.
Madero y el licenciado Luis Cabrera unidos por el ideal político de la No Reelección,
y cómo ambos observarán posteriormente posturas ideológicas diferentes frente a
la resolución del problema agrario. Sin embargo, será la causa política la que mueva
primero a los mexicanos hacia una Revolución; esto es explicable desde muchos
puntos de vista, uno de ellos sería la opinión de Morales Jiménez, quien nos dice
que para el 4 de octubre de 1910, mientras se promulgaba el Derecho que declaraba
electos a Porfirio Díaz y Ramón Corral para presidente y Vicepresidente de la
República, respectivamente, setenta mil personas estaban prisioneras en diversos
lugares del país.

En relación con el régimen territorial rustico observamos que en esta época el Clero
fue excluido definitivamente como poseedor de bienes raíces, pero a este gran
terrateniente no vinieron a suplirlo los miles de labradores pobres que así debieron
hacerlo, sino que sus haciendas enteras, o varias de ellas aumentaron el caudal de
los grandes hacendados que de esta manera se convirtieron en latifundistas. Así los
tipos de propiedad llegaron a grandes superlativos y las grandes haciendas se
enfrentaron a las pequeñas propiedades, con desigualdad social, cultural, política y
económica; y ante la desigualdad, el Gobierno se cruzó de brazos dejando que sus
ciudadanos se movieran en el libre juego de sus desiguales poderes patrimoniales,
porque las doctrinas liberalistas le inspiraban tal actitud abstencionista; por la misma
razón, se abolieron los límites en la propiedad dejando que el poderoso adquiriera
tantas que sabes que una quinta parte de la propiedad se encontraba en manos de
cincuenta propietarios y es célebre la frase del general Terrazas de “Yo no soy de
Chihuahua, Chihuahua es mío”.

La situación del indígena campesino llegó a ser desesperante, pues muchos


perdieron aquella pequeña propiedad que antes había sido de la comunidad agraria,
que luego al desamortizarse se le concedió en propiedad privada, pues con la
complicidad de las compañías deslindadoras y con la interpretación de las leyes

43
frente a las cuales no podía mostrar un título primordial y perfecto, su pequeña
propiedad se vio absorbida por el gran latifundio colindante.

Todo esto anterior explica fácilmente por qué la mayoría de los historiadores a
excepción de don Toribio Esquivel Obregón y de don Emilio Rabasa, se inclinaron a
considerar el descontento campesino y el problema agrario existente, como causas
determinantes de la Revolución Mexicana de 1910. Los regímenes gubernamentales
del México Independiente hasta noviembre de 1910 habían intentado resolver el
problema colonizando en terrenos baldíos, pretendiendo en esta forma, ahogar las
voces visionarias de los precursores de la Reforma Agraria , pero los fracasos de las
Leyes de Colonización y Baldíos con sus desaciertos e ineficacias dieron la razón a
Hidalgo, Morelos y a Ponciano Arriaga, cuyas ideas cobraron nueva vigencia
señalando que el problema agrario debería resolverse conforme a un ancestral
concepto de propiedad en función social y de que la tierra debería estar repartida en
manos de muchos, en pequeñas porciones que cada quien atendiera directamente
con su trabajo, en forma constante, para beneficio familiar, social y nacional y que
bastara para el sostenimiento de una familia.1

44
1 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, ed. Porrúa, México 2012, p229

AUTONOMIAS DEL
DERECHO AGRARIO

AUTONOMIA AUTONOMIA AUTONOMIA AUTONOMIA AUTONOMIA AUTONOMIA AUTONOMIA


HISTORICA JURIDICA CIENTIFICA LEGISLATIVA DIDACTICA SOCIOLOGICA ECOLOGICA

CUESTIONARIO

1.- ¿Por qué considera importante el estudio del derecho agrario?

2.- ¿Cuál es la importancia del estudio del derecho agrario desde el punto de vista
histórico?

3.- ¿Cuál es la relevancia del derecho agrario desde el punto de vista de la


globalización?

4.- Menciona cuál es el ámbito de desarrollo del abogado en materia agraria.

5.- ¿Por qué al derecho agrario mexicano se considera una disciplina autónoma del
derecho?

6.- Explica la relación que hay entre el derecho agrario con otras materias.

7.- menciona brevemente las autonomías del derecho agrario.

CAPITULO VII

DISPOSICIONES RELATIVAS AL DERECHO AGRARIO DE 1911 A 1917

INTRODUCCION

45
Las instituciones agrarias comenzaron a surgir en el periodo de 1911 a 1917,
respondiendo a la gran necesidad del movimiento armado de esa época, mediante
planes y pactos es que se fue delineando este movimiento armado que inició
Madero, en la lucha por el poder tras las elecciones presidenciales de 1910. Madero
inicia después de la reelección de Porfirio Díaz, La Revolución Mexicana con el Plan
de San Luis. Y en este plan comienza a exponer las condiciones sociales de los
mexicanos, donde defiende los ideales de libertad y justicia, y por medio de este plan
Madero es cuando declara nulas las elecciones Presidenciales y comienza un
movimiento político social muy importante en México. Pero desgraciadamente
madero no cumplió los postulados revolucionarios incluidos en el plan de San Luis.
Se hace el Plan de Texcoco cuando triunfa Madero y se sigue sin cumplir y dar
prioridad a los tema agrarios. Todo esto siempre el que se llevaba la peor parte, el
títere de todos, el campesino, el medio rural.

7.1 LA POLITICA AGRARIA DE MADERO

“En la práctica, el presidente Madero incumplió los postulados revolucionarios


incluidos en la proclama del Plan de San Luis, entre otros lo referente a restituir a
sus antiguos poseedores los terrenos de que se les despojó, por lo que diversas
formas de inconformidad surgieron ante lo que se consideró la traición de Madero a
los ideales revolucionarios. Esta situación provocó una lucha de grupos por el poder
y en otros casos, como el de Zapata, por el cumplimiento de los anhelos de justicia
y libertad.”1

“Durante los últimos años del Gobierno del Presidente Porfirio Díaz Mori, la sociedad
ya venía exigiendo un gobierno electo demócratamente. La entrevista Díaz-
Creelman celebrada en 10908, marcó el comienzo de la lucha política por la
Presidencia de la República.

Después del proceso electoral de 1910, Francisco Ignacio Madero demandó la


nulidad de las elecciones en las que Porfirio Díaz se proclamó nuevamente
Presidente de la República para el siguiente periodo Presidencial y promulgó el Plan
de San Luis, el 5 de octubre de 1910. Para el propósito que nos anima se debe
destacar que ya desde el Plan de San Luis en su art.3, tercer párrafo, se estipuló la
necesidad de que las tierras despojadas fueran devueltas a sus legítimos
poseedores, por lo mismo, estimamos que este fue el primer pronunciamiento
político agrario desde la edad temprana de la Revolución Mexicana.

Francisco I. Madero, en el Plan de San Luis, pronunciamiento político con el cual se


da banderazo de salida para el comienzo de las actividades políticas de la

46
Revolución Mexicana, avanzó la idea de la restitución de las tierras a los antiguos
poseedores, los campesinos, a quienes les habían despojado.”2

7.2 PLAN DE TEXCOCO

Al triunfo del maderismo, Andrés Molina Enríquez es uno de los que se adhiere a la
lucha, en 1911, porque no se le da la prioridad al problema de la tierra. Lanza
entonces el Plan de Texcoco, que si bien parecía dirigido al gobierno interino de
León de la Barra, en realidad era la expresión de inconformidad por el incumplimiento
de algunos planteamientos del Plan de San Luis enarbolado por Madero.

Desde su trinchera, Molina Enríquez luchó por el fraccionamiento de los grandes


latifundios, por la desaparición del cargo de jefe político y por el mejoramiento de los
salarios.

El Plan de Texcoco es el documento antecesor del Plan de Ayala, elaborado el 23


de agosto de 1911, donde se plantea la necesidad de una reforma agraria a fondo”.1

7.3 PANORAMA DE LAS LEGISLACIONES AGRARIAS DE MÉXICO EN EL


PERIODO POSREVOLUCIONARIO

“Las disposiciones constitucionales del periodo posrevolucionario surgieron diversas


leyes reglamentarias, tales como la Ley de Ejidos de 1920, la Ley de Dotaciones y
47
Restituciones de Tierras y Aguas de 1927, la Ley Agraria del 6 de Enero de 1915, la
cual creó, entre otras instituciones, la Comisión Nacional Agraria y estableció las
figuras jurídicas de la restitución y dotación de tierras y aguas, como un medio de
equilibrio en la distribución territorial.

Posteriormente se promulgaron los códigos agrarios de 1934, 1940 y 1942, así como
la Ley Federal de Reforma Agraria en 1971, regulaciones que establecían diversas
normatividades proteccionistas en cuanto a la prescripción, la venta y la asociación,
entre otras figuras, respecto de la propiedad social.

En la vigencia de estos códigos, la protección de la propiedad social tenía


determinadas características; algunas de éstas continúan en vigor, pero otras
cayeron en desuso en algunos periodos y en otros fueron retomadas. Como ejemplo
tenemos el art. 140 del Código Agrario de 1934, el cual establecía que los derechos
agrarios individuales eran imprescriptibles, mientras que el artículo 128del Código
Agrario de 1940 disponía la prescripción sobre los derechos agrarios a favor del
poseedor quieto y pacífico que tuviera dos años de posesión en la unidad parcelaria;
en la Ley Federal de la Reforma Agraria, dicho concepto se redefinió como paso al
juicio privativo de derechos agrarios y nuevas adjudicaciones.

7.4 DISPOSICIONES AGRARIAS DE 1920 A 1934

La ley del 6 de enero de 1915 siguió vigente hasta el decreto que la abrogó, del 9 de
enero de 1933, publicado en el Diario Oficial de la Federación del 10 de enero del
mismo año, aunque en este periodo se expidieron diversas disposiciones entre ellas:

Ley de ejidos de 1920

Ley de dotaciones y restituciones de tierras y aguas del 23 de abril de 1927

Decreto que reforma el art. 10 de la ley del 6 de enero de 1915

Códigos agrarios de 1934, 1940 y 1942

Código agrario del 23 de septiembre de 1940

48
Código agrario del 30 de diciembre de 1942”1

DISPOSICIONES RELATIVAS AL DERECHO


AGRARIO DE 1911 A 1917

PANORAMA DE LA CONSTITUCION DE
LA POLITICA PLAN DE DISPOSICIONE LOS ESTADOS
LEGISLACION UNIDOS
AGRARIA DE TEXCOCO AGRARIA DE S AGRARIAS MEXICANOS DE 5
MEXICO FEB DE 1917
1920-1934
MADERO POSREVOLUCIONA
RIO

1 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p51

2 Pampillo Baliño, Juan Pablo, Munive Páez, Manuel Alexandro, Derecho Agrario y Desarrollo Rural, Edit. Porrúa, México
2013, p.133

CUESTIONARIO

1.- Explica las condiciones agrarias del país señaladas en los considerandos de la ley
del 6 de enero de 1915.

2.- ¿Cuál fue brevemente la política de Madero?

3.- ¿Por qué nace el Plan de Ayala?

4.- ¿Cuándo nace el Plan de Texcoco y que contenía?

5.- Molina Enríquez ¿Por qué luchó incansablemente en la época de Madero?

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6.- ¿Cuándo se promulgó el Plan de San Luis?

7.- ¿Qué plan antecedió al Plan de Ayala?

8.- Menciona tres de las disposiciones agrarias del periodo 1920 a 1934.

CAPITULO VIII

LA CONSTITUCIÓN DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS, DEL 5 DE


FEBRERO DE 1917.

INTRODUCCIÓN

El derecho agrario se encuentra dentro del contexto jurídico desde 1917 de la


Constitución, llamada también nuestra Carta magna como un derecho de la persona
para poder gozar de los beneficios del reparto agrario. Hubo debates del parlamento
del Constituyente de Querétaro.

Nace al mundo un 5 de febrero de 1917 la primera Constitución social, cuyo artículo


27 consagra el derecho de propiedad social rural.

En este apartado se exponen los motivos que hacen al Derecho como una parte
fundamental e importante en la vida de los individuos que vivimos en sociedad. Más
que ver al derecho como una imposición del Estado en nuestra vida diaria es
imprescindible que lo hagamos como aquella herramienta complementaria de
nuestra actividad y es que no basta realicemos ciertas conductas que nos obligue o
nos generen derechos ya que por sí solas estas nos producirían efectos o bien el
sentido en que resultaran estaría fuera del contexto de nuestros intereses y la
pregunta es ¿qué hacer si en la celebración de un acto alguno no cumple con lo que
le corresponde? y si alguien me causa un daño ¿cómo hago para que lo repare?
Estas cuestiones y muchas más hacen necesaria la existencia del Derecho en
nuestra vida diaria y le revisten de importancia.

El objetivo de esta unidad será dar a conocer la importancia que tiene el derecho en
nuestra sociedad, y que el alumno o el lector tengan el conocimiento básico

50
necesario para entender la esencia del derecho en lo sucesivo, es decir de dónde
viene y hacia dónde va la tendencia jurídica de las diversas sociedades.

8.1 CONCEPTO ROMANO DE PROPIEDAD

“Desde la época de los romanos, se había considerado que el derecho de propiedad


constaba de tres beneficios: el jusutendio usus, facultad de servirse de una cosa y
de aprovecharse de los servicios que rinda, además de sus frutos: el jusfruendi o
fructus, derecho sobre frutos o productos; y el jusfruendi o fructus, derechos sobre
frutos o productos; y el jusabutendi o abuso, el poder de disponer hasta la
consumación o destrucción de la cosa o su enajenación; la persona que reunía los
tres beneficios tenía sobre su cosa, un poder absoluto.

A través de muchas centurias, desde el primitivo derecho romano, casi hasta


principios de este siglo, muy pocas variantes sufrió el citado concepto de propiedad,
y esta historia podía sintetizarse en: la suspensión de diferencias entre ciudadanos
romanos y extranjeros; luego durante la época feudal, el derecho de propiedad
implico el imperio y el dominio, y el propietario de la tierra gobernó así sobre sus
vasallos; después, durante la revolución francesa de 1789, en la declaración de los
derechos del hombre y del ciudadano, se señaló que toda sociedad debían parar y
reconocer los derechos naturales del hombre que son la propiedad y la libertad del
primer término, derechos que el hombre trae consigo desde su nacimiento y que de
estado solo reconoce, pero que no los crea; esto explica el concepto individualista
del código de Napoleón que reafirmo los atributos romanos de la propiedad y
protegió sus intereses personales.

Así nos explicamos el problema agrario tratara de resolverse en el México


independiente anterior a 1917, siempre a través de la colonización de terrenos
baldíos, del respeto del derecho de propiedad de los latifundistas, de la desaparición
de las comunidades agrarias y la privación de su personalidad jurídica para tener
tierras, de la conversión de los comuneros en propietarios individuales, etc.; y que
fueron inútiles las precursoras voces de los que pedían la explotación de tierras y su
reparto gratuito a los campesinos desposeídos y pobres, como la de Ponciano
Arriaga, Emiliano Zapata y Luis Cabrera. El diputado constituyente, Heriberto Jara
diría que: “La formación de las constituciones no ha sido otra cosa sino el resultado
de la experiencia, el resultado de los deseos, el resultado de los anhelos del pueblo,
condensado de eso que se ha dado en llamar Constitución”.

51
8.2 TEORIAS SOBRE PROPIEDAD QUE SE DISCUTIERON EN EL
CONSTITUYENTE DE 1917

Desde fines de noviembre de 1916, en Querétaro se iniciaron las discusiones para


proponer, discutir y aprobar, la nueva constitución política, de los Estados Unidos
Mexicanos; el periodo fijado para terminar los debates se había señalado para el 1 de
febrero de 1917, pues el día 5 del mismo mes y año, debía iniciar su vigencia en la
citado constitución. Muchos temas se debatieron en aquellos azarosos días y estos
transcurrían ya cercanos al final del término señalado, sin que el problema de la tierra
se discutiera; fue hasta el lunes 29 de enero de 1917 cuando se presentó el proyecto
del Artículo 27 constitucional, firmado por Pastor Rouaix, José N. Macías, E. A.
Enríquez y otros diputados , proyecto que se discutiría tan apasionada, como
sumariamente, pues el Articulo 27 se aprobó el 30 de enero a las 3.30 de la
madrugada, y al hacerlo consideraba “que la ley constitucional, fuente y origen de
todas las demás que habrán de dictarse, no eluda como lo hizo la de 1857, las
cuestiones de propiedad por miedo a las consecuencias”.

La ley del 6 de enero de 1915 tuvo un carácter provisional, y era la fin y al cabo, una
ley secundaria, por eso el diputado, Magallón considero que ese “Congreso
constituyente no terminara debidamente su obra, si no diera cima a la labor relativa
de poner al poner la base para asegurar de manera definitiva la cuestión Agraria en
la República Mexicana.

Por su parte el diputado Bojorquez señalo al iniciarse la discusión del Articulo 27 que
“en estos momentos se ha iniciado el debate más importante de ese Congreso… ha
sido una magnífica idea la de la Comisión al sostener como precepto constitucional
el Decreto del 6 de enero de 1915… en mi concepto el Decreto del 6 de enero de
1915 fue uno de los que trajeron mayor contingente al seno de la Revolución.

El Artículo 27 constitucional desde que se discutió en 1917, se proyectó teniendo en


cuenta todas las doctrinas que aun actualmente ocupan la atención de juristas y
políticos; por eso resulta anacrónico pretender reconsiderarlo nuevamente frente a
esas mismas doctrinas. En efecto, debe deducirse que los legisladores
constituyentes estaban al día en las varias corrientes doctrinas que podrían influir
para decidir sobre el concepto de propiedad que debía consagrarse en la
constitución; y así se comprueba, cuando al discutirse previamente los artículos 95,
96 y 97 relativos a la forma de integrarse al Poder Judicial, el diputado Hilario Medina
dijo que “El Diputado, señores, puede sostener ante aquellos a quienes pide el voto,
que en el Parlamento sostendrá la idea socialista, la idea democrática, la idea
comunista, etc., puede sostener las ideas que estime que son las más aceptadas al
pueblo a quien ofrece”, lo cual nos indica claramente que entre los legisladores había
52
claridad de conceptos y actualidad en el conocimiento de las diversas doctrinas que
sostenían.

Por eso no son extrañas las diversas proposiciones que pretendieron hacerse.
Podríamos localizar en un primer grupo, quienes manifestaron que “El estudio del
Artículo 27 del proyecto de la Constitución como derecho natural”. O porque de ser
así “fuerza será convenir en que la propiedad es un derecho natural, supuesto que la
apropiación de las cosas para sacar de ellas los elementos necesarios para la
conservación de la vida, es indispensable… como consecuencia de lo expuesto, la
Comisión después de consagrar la propiedad como garantía individual, poniéndola a
cubierto de toda expropiación que no esté fundada en la utilidad pública, ha fijado las
restricciones a que está sujeto ese Derecho

Más bien dentro de esta corriente se reconocen las necesidades y exigencias del
pueblo, pues más adelante el citado diputado acepto la admisión del derecho de
propiedad cuando señalo que “ yo pediría a la comisión que reformara este inciso
diciendo: que la nación es la única dueña de los terrenos de la república, de las
tierras, aguas y bosques, pero que de aquí en adelante ella se reserva el derecho
de vender y que las propiedades adquiridas por medio de despojos, por medio de
infamias, deben desaparecer de nuestra constitución , y que en lo sucesivo, todo el
que quiera adquirir un pedazo de terreno, deberá adquirirlo conforme a las bases
que establezcamos aquí.

Una tercera corriente se manifestó a través de la misma comisión redactora, pues


creyeron que le derecho de propiedad debía compaginarse al trabajo de la tierra,
cuando manifestaron que sería pueril buscar las solución del problema agrario
convirtiendo en terratenientes a todos los mexicanos, lo único que puede hacerse,
es facilitar las condiciones para que puedan llegar a su propiedad todos los que
tengan voluntad y actitud para hacerlo. Pero en donde no cabe lugar a dudas, de
que campeaba en la comisión y en todo el congreso constituyente la idea de
consagrar el derecho de propiedad con una función social, es en la parte del
proyecto, aprobado sin discusión, que dijo desde ese texto original, que “la nación
tendrá en todo tiempo el derecho de imponer a la propiedad privadas modalidades
que dicte el interés público; así como el de regular el aprovechamiento de los
elementos naturales susceptibles de aprovechamiento, para hacer una distribución
equitativa de la riqueza publica y cuidar de su conservación. La estructuración de
este concepto base del artículo 27 constitucional, a cuya luz e intención tendrá que
interpretarse dicho precepto y estructura las leyes secundarias, poco a poco se
impondrá aun contra las confusiones de la propia comisión redactora que deseaba
resolver el problema agrario al exterminar los latifundios, respetando los derechos
de los dueños, por medio de expropiación.” 1

53
8.3 CONSTITUCION DE 1917 Y SU CAPITULO AGRARIO

“En muy buena medida en toda la historia de México y en especial en los grandes
acontecimientos nacionales, ha estado presente el renglón agrario, a grado tal que
en el congreso constituyente de la cual emano nuestra Constitución uno de los
grandes debates legislativos, que se significaron fue precisamente el relativo al
campo, rubro que finalmente quedó plasmado en el artículo 27 constitucional cuya
filosofía, juntamente con la contemplada en otros numerales, hiso posible que fuera,
en la Constitución Mexicana, donde se consagraran por primera vez en los derechos
sociales, en la historia constitucional del mundo. Así, el 5 de febrero de 1917 se
publicó en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, cuyo artículo
27, recogiendo en buena medida el pensamiento agrario de las diversas corrientes
revolucionarias y basándose en la Ley Agraria, del 6 de enero de 1915, estableció
las bases y lineamientos que regularía el proceso de reforma agraria, la cual ha
pasado por varias etapas y con diversos toques distintivos en su contextura y larga
trayectoria centenaria. Con la promulgación de la constitución política de 1917 dio
inicio pues, la transformación social de México. Así, hoy en el contenido del artículo
27 constitucional se describen las riquezas del suelo, del subsuelo, de las aguas y
de los mares; que la nación puede ceder a los particulares el derecho de propiedades
de la tierra y de la explotación del subsuelo, pero también del derecho de
expropiación que puede ejercer; de la organización social de la propiedad de la tierra,
pero también compatibilizado con el cuidado del medio ambiente, entre otras
importantes líneas normativas.”1

1 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, ed. Porrúa, México 2012, p289

8.4 CONCEPTO DE PROPIEDAD CON FUNCION SOCIAL

En todas las opiniones expuestas en el constituyente de 1917 se notó, que aunque


inspiradas en doctrinas originariamente diversas, todas ellas tendrían y coincidían

54
en darle al concepto de propiedad una función social, en hacer que el propietario ya
no lo fuera solo para sí, en ejercicio de un derecho exclusivamente individual, si no
el que lo fuere también para su sociedad, manteniendo en constante explotación la
tierra, y en que era necesario que aunque se consagrara el derecho de propiedad,
este se sujetara a las modalidades que dictaran el interés público y estuviera
originalmente en manos del estado. Surgió así un nuevo concepto dinámico de
propiedad, con función social, sujeto a las modalidades que fuere dictando el interés
público como garantía individual para el pequeño propietario; ya no lo fuera solo para
si en ejercicio de un derecho exclusivamente individual, sino en que lo fuera también
para su sociedad, manteniendo en constante explotación la tierra, y en que era
necesario que aunque se consagrara el derecho de propiedad este se sujetara a las
modalidades que dictara el interés público y estuviera originalmente en manos del
Estado.

Surgió así un nuevo concepto dinámico de propiedad, con función social, sujeto a
las modalidades que fuera dictando el interés público como garantía individual para
el pequeño propietario; pero también como garantía social para los núcleos de
población que tuvieran tierras o que no las tuvieran en cantidad suficiente; el
concepto de justicia se modificó al establecerse legalmente la posibilidad de
expropiar los latifundios gratuitamente entre los campesinos , apareciendo el
moderno concepto de justicia social distributiva; con todo ello, los conceptos
jurídicos, ramas fundamentales del derecho y subramas del mismo, se verán
modificados, pues el nuevo concepto de propiedad con sentido y dinamismo social
supera al caduco concepto rígido romanista, la justicia y las garantías individualistas
se ven forzadas a hacerles un lugar y equilibrarse con la justicia social y las garantías
sociales; y junto a las tradicionales ramas del Derecho Público Privado se colocó el
Derecho Social amparando a los núcleos de población campesinos desvalidos,
desde la propia Constitución y apareció, asimismo la nueva subrama del Derecho
Agrario..

Este nuevo concepto de propiedad tiene mucho de antecedentes en la antigua forma


azteca de tendencia de la tierra, en donde el calpulli se otorgaba solo al vecino de
un barrio , jefe de familia, que lo trabajara personalmente, en forma constante, pues
de lo contrario se le revocaba dicha tenencia de la tierra, en donde el calpulli se
otorgaba solo al vecino de un barrio, jefe de familia, que lo trabajara personalmente,
en forma constante, pues de lo contrario se le revocaba dicha tenencia; es una forma
mediante la cual se mantiene la propiedad con una función social, concepto que
lógicamente implica el dominio originario en manos del Estado y la facultad necesaria
para vigilar, cuidar y distribuir equitativamente los elementos naturales susceptibles
de apropiación.

55
A la luz de la historia afina sus perfiles propios nuestro singular concepto de
propiedad, nos abre un camino por donde transitar seguros en medio de contiendas
y nos coloca como sucesores y continuadores de una doctrina indiscutiblemente
nuestra, por aborigen, que aflora a la conciencia nacional y se consagra en las Ley
Fundamental, por voluntad y acción del mismo pueblo.

8.5 ASPECTOS FUNDAMENTALES DEL ARTÍCULO 27 CONSTITUCIONAL

El nuevo concepto de propiedad con función social, sujeta a las modalidades que
dicte el interés público, hizo posible que en 1917 la Nación recuperara
definitivamente y reafirmara su propiedad originaria no solo como un derecho, sino
acaso más como una obligación de conservar y de regular el adecuado uso de los
recursos naturales, obligando a que éste estableciera las formas jurídicas para evitar
el acaparamiento e inmoderado o indolente aprovechamiento de las tierras; así se
hace posible la redistribución de la tierra rustica, acatando el viejo ideal de Morelos,
de que ésta estuviera en manos de muchos, en pequeñas parcelas, que cultivaran
personalmente; en consecuencia, el latifundio se proscribió y la mediana propiedad
se limitaron, y se vio sujeta a una vida transitoria, las extensiones de propiedad y del
ejido; la afectación de las tierras por causa de utilidad social se fundó y éstas se
empezaron a repartirse gratuitamente a los núcleos de la población necesitados que
no tenían tierras o que no las tenían en cantidad suficiente. Este sistema duró vigente
hasta 1992.

El artículo 27 constitucional rigió así, con su mismo concepto de propiedad, que es


uno solo con modalidades y no varios conceptos, tanto a la pequeña propiedad,
como al ejido; tanto a la propiedad rural, como a la propiedad urbana. De esta
manera del Artículo 27 constitucional derivan:

I.- Las propiedades particulares, que se rigen por los Códigos Civiles de cada Entidad
Federativa.

II.- La propiedad de la Nación.

III.- La propiedad social de las comunidades agrarias y de los ejidos”.2

1 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p93

2 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, ed. Porrúa, México 2012, p289

CUESTIONARIO

56
1.- En el contexto constitucional, ¿en qué artículo se ubica al derecho agrario?

2.- Conforme al texto original del artículo 27 constitucional, en su origen, ¿a quién le


corresponde la propiedad de las tierras?

3.- Mencione las principales figuras jurídicas en materia agraria, según texto original
del art. 27 constitucional

4.- Mencione cuantas reformas principales ha tenido el artículo 27 constitucional en


materia agraria

5.- ¿Cuándo se publicó el artículo 27 constitucional en materia agraria?

CAPITULO IX

EL EJIDO EN EL NUEVO MARCO LEGAL

INTRODUCCIÓN

En este apartado del ejido, institución centenaria en el país actual que inició hace
más de trece siglos en los reinos, ahora españoles, trasladado por las leyes de Indias
desde 1523, en su devenir histórico, posee hoy más del 54% del territorio nacional:
esto es 105.9 millones de hectáreas, una superficie mayor que la de toda América
central; de Guatemala a Panamá y también mayor a la de Francia, el mayor territorio
nacional de Europa de Occidente.

Desgraciadamente al adentrarse en el estudio de los ejidos en México se llega a la


muy triste realidad conociendo datos para dar vergüenza y más como mexicanos;
más del 51% de los ejidatarios del país no tiene ni siquiera la mitad de un salario
mínimo de ganancia, les llegan según los gobiernos de cualquier color que estén en
el poder, miles de millones de pesos en apoyos con los que en solamente teoría
deberían de cubrir sus necesidades básicas como comer, vestir, de habitación,
salud y educación por no nombrar más, que ni siquiera se puede llegar a pensar se
puedan lograr. ¿Qué es lo que sucede en los ejidos mexicanos?

Es cuestión de las malas políticas públicas de inversión en el campo y su


comercialización, al mal funcionamiento de las dependencias y el mal o nefasto

57
manejo de las leyes agrarias para no lograr la justicia rural, y estos ejidatarios ya no
siembran al no creer en sus gobernantes y prefieren irse a los Estados Unidos a
buscar mejor suerte, porque en sus ejidos, no encuentran absolutamente nada.

La realidad también nos dice que la gente del medio agrario no puede colarse en los
créditos institucionales ni el financiamiento agrario, y esto es porque los ejidatarios
no son propietarios explícitamente de sus tierras, por lo tanto, no tiene las garantías
para poder solventar esos créditos.

Ojalá que tu como estudiante de derecho pienses y tomes conciencia en esta nueva
era de jóvenes que aún creen en el país, en las leyes y que estas leyes en el ejido
son para logra así armonía en la nación. Es tu obligación y derecho hacerlo posible.

9.1CONCEPTO

“La palabra ejido proviene del vocablo latino exitus, que significa “salida”. Al
consumarse la Conquista en lo que hoy es nuestro territorio nacional, recibían este
nombre las tierras que se encontraban a la salida de los pueblos españoles que se
iban fundando. Durante la Colonia se crearon pueblos indígenas a los que se les
dotó de ejidos, tierras que se fueron perdiendo en virtud de las leyes de colonización,
o bien ante la obligatoriedad que impuso la ley de Desamortización de que las tierras
o ejidos de los pueblos fueran fraccionados y adjudicados a sus miembros. El ejido
resurgió a propuesta de Luis Cabrera, quien, en su célebre discurso del 3 de
diciembre d e1912, planteó la necesidad de reconstituir los ejidos.

9.2 DEFINICIÓN Y PATRIMONIO

El ejido puede definirse como una sociedad de interés social, con personalidad
jurídica y patrimonio propio, integrado por el conjunto de tierras, aguas y bosques y,
en general, por todos los recursos naturales que lo constituyen. Su finalidad es el
mejoramiento de la vida campesina mediante el uso y la explotación lícita, integral y
respetuosa del medio ambiente y de las tierras de su propiedad que hubieren sido
entregadas por dotación o se hayan adquirido mediante cualquier otro título. (Art. 9º
de la).

9.3 DIFERENCIA ENTRE EJIDO Y COMUNIDAD

La diferencia entre el ejido y la comunidad estriba en que ésta presupone una


existencia previa del carácter comunal (la supervivencia del pueblo al que se le
hubiere privado de sus tierras), anterior a su reconocimiento como tal, a través de

58
una restitución, jurisdicción voluntaria o de la resolución correspondiente, si dicha
vía se controvierte. Por su parte, el ejido surge a la vida jurídica mediante el
procedimiento de dotación, ampliación o creación de nuevos centros de población
ejidal, conforme a la derogada Ley Federal de la Reforma Agraria y en la actualidad
en términos del art. 90 de la Ley Agraria.

9.4 OBJETO

Estriba en considerar el ejido como una empresa social, puesto que lleva como fin la
satisfacción de las necesidades del núcleo de la población, a la vez que se busca
una redituabilidad del terreno ejidal mediante formas de unidades productivas; por
ello, se otorga a los núcleos agrarios y a los sujetos individuales agrarios la
protección legal sobre sus tierras, al mismo tiempo que se brinda seguridad jurídica
en las relaciones con terceros, por medio de las formas asociativas permitidas por la
ley.

9.5 PROTECCION DE LA PROPIEDAD SOCIAL

El espíritu de diversas legislaciones agrarias ha dado distintas modalidades a la


tenencia de la tierra. En nuestro país se impuso el principio de cultivo directo de la
tierra, proceso que culminó con el decreto del 6 de enero de 1992, el cual, si bien
permite la libre asociación y disposición sobre las tierras ejidales, aplica ciertos
candados legales para proteger la propiedad social.

Así, desde la Ley del 6 de enero de 1915, pasando por legislaciones como la ley de
ejidos del 28 de diciembre de 1920, el Decreto del 22 de noviembre de 1921, el
Reglamento Agrario del 10 de Abril de 1922, la Ley de Dotaciones y Restituciones
de Tierras y Aguas del 23 de abril de 1927, los Códigos de 1934, 1940 y 1942, y la
Ley Federal de Reforma Agraria de 1971, se han establecido diversas protecciones
legales a la propiedad social.

9.6 REGLAMENTO INTERNO

En su acepción genérica, el reglamento es la colección ordenada de reglas o


preceptos que una autoridad competente (o una persona moral) da para la ejecución
de una ley o para el régimen de una corporación, una dependencia o un servicio, o
para cualquier actividad.

El reglamento interno es el conjunto de reglas organizativas al interior del ejido y


tiene como fin establecer las bases generales para la organización económica y

59
social del mismo, así como los requisitos para admitir nuevos ejidatarios, las normas
para el aprovechamiento de las tierras de uso común y los demás aspectos que los
ejidatarios consideren pertinentes o que conforme a la ley deban ser incluidos. (Art.
10 de la).

El reglamento es un complemento muy importante del desarrollo rural, ya que en él


pueden establecerse los mecanismos para la realización de la asociación productiva;
es decir, mediante el reglamento los ejidatarios podrán adoptar mecanismos alternos
de tipo jurídico que protejan los intereses de los más desamparados, a la vez que
les permitan establecer la forma de explotación más adecuada a sus suelos, así
como las reglas con las cuales deberán participar las personas físicas o morales
interesadas en el esfuerzo productivo asociado.

9.7 CONSTITUCIÓN DE NUEVOS EJIDOS

La Ley Agraria en su art. 90 establece los requisitos necesarios para la constitución


de un ejido:

I.- Un grupo mínimo de veinte personas que participen en su constitución.

II.- Que cada individuo aporte una superficie d tierra.

III.- Que el núcleo cuente con un proyecto de reglamento interno y que éste se sujete
a lo dispuesto por la Ley Agraria.

IV.- Que tanto la aportación de tierras como el reglamento interno consten en


escritura pública y se solicite la inscripción de su testimonio en el Registro Agrario
Nacional.

Establece además, como prohibición, la aportación de tierras en fraude de


acreedores, bajo pena de declararse nula.

Con esta disposición legal se trata de evitar que los propietarios de tierras
constituyan ejidos en los cuales se busque incumplir con las obligaciones crediticias
en perjuicio de sus acreedores, ya que de constituirse un ejido con tierras aportadas
en fraude de acreedores, éstos podrán ejercitar la acción correspondiente (similar a
la acción pauliana) a efecto de retrotraer las cosas al estado que antes guardaban.

9.8 MODOS DE EXTINCIÓN

La Ley Agraria dispone como formas de terminar el régimen ejidal el que no existan
las condiciones para su permanencia, o bien, cuando proceda su liquidación.

60
9.8.1POR QUE NO EXISTAN LAS CONDICIONES PARA SU PERMANENCIA

Establece el artículo 23, fracción XII, como facultad de la asamblea general de


ejidatarios, la terminación del régimen ejidal, cuando previo dictamen de la
Procuraduría Agraria, se determine que ya no existen las condiciones para su
permanencia.
Ello, obviamente, se dará cuando no exista el objeto o motivo por el que fue creado,
es decir, cuando el ejido carezca ya de tierras para el sustento de sus miembros,
sea por desincorporación de éstas del régimen ejidal o por aportación a sociedades
o expropiación por causa de utilidad pública.

9.8.2POR LIQUIDACIÓN

El art. 29 de la Ley Agraria dispone que cuando la asamblea resuelva terminar el


régimen ejidal, el acuerdo respectivo se publicará en el Diario Oficial de la
Federación y en el periódico de mayor circulación de la localidad en que se ubique
el ejido. Lo anterior, previa liquidación de las obligaciones subsistentes del ejido. Una
vez asignadas las tierras ejidales, se otorgará el pleno dominio de sus miembros, de
acuerdo con los derechos que les correspondan; se exceptúan de ello los bosques
o las selvas tropicales.

La superficie asignada por este concepto a cada ejidatario no podrá rebasar los límites
señalados a la pequeña propiedad.

Si después de la asignación hubiera excedentes de tierra o se tratare de bosques o


selvas tropicales, pasarán a ser propiedad de la nación.

Los órganos de dirección y representación ejidal comunal son:

La asamblea;

El comisariado ejidal, y

El consejo de vigilancia

La asamblea es el órgano supremo del ejido o la comunidad es la asamblea. Ésta,


genéricamente, es un órgano integrado por personas con un fin común, el cual no
funciona en forma permanente, sino sólo cuando se convoca y sus miembros se
reúnen para deliberar y votar los asuntos correspondientes.

La asamblea en materia agraria, es una reunión temporal de los miembros


integrantes de un mismo núcleo agrario, celebrada para deliberar y votar los asuntos

61
para los cuales fueron convocados conforme a los procedimientos señalados por la
Ley Agraria.

Los artículos de la Ley Agraria que regulan lo relacionado con la asamblea son el
11 y del 22 al 31 de dicho ordenamiento. Los asuntos de la exclusiva competencia
de la asamblea son los que señalan las 15 fracciones del artículo 23 de la Ley
Agraria.
En cuanto a periodicidad de la asamblea, la Ley Agraria dispone que deberá reunirse
por lo menos una vez cada seis meses, o con mayor frecuencia cuando así lo
determine el propio núcleo a través de su reglamento o su costumbre.

La convocatoria deberá expedirla el comisariado ejidal o comunal, o el consejo de


vigilancia, ya sea a iniciativa propia o a solicitud de al menos 20 ejidatarios o 20% o
más del total de ejidatarios que integren el núcleo.

Para la validez de la asamblea, la Ley Agraria realiza una distinción respecto a los
asuntos para los cuales es convocada, dependiendo de si se encuadran o no las
fracciones VII a XIV de su art. 23, ya que para los asuntos comprendidos en estas
fracciones se requiere de mayor formalidad.

9.9 EL COMISARIADO

El comisariado ejidal es el órgano encargado de la ejecución de los acuerdos de la


asamblea, así como de la representación y gestión administrativa del ejido.

Lo integran un presidente, un secretario y un tesorero, con sus respectivos suplentes.


Si el reglamento interno no dispone la forma y extensión de sus funciones de cada
miembro del comisariado; si nada dispone, se entenderá que sus integrantes
funcionarán conjuntamente y no en forma separada o individual, criterio que también
ha sido definido por el Tercer Tribunal Colegiado del Segundo Circuito.

Por ello la representación del comisariado ante una autoridad jurisdiccional deberá
efectuarse de manera conjunta por los tres integrantes, ya que de faltar uno de ellos;
se tendrá al núcleo agrario como que no compareció ante la autoridad respectiva; o
de lo contrario, si la autoridad no realiza el emplazamiento o una notificación personal
con los tres integrantes, el acto es ilícito y procede su reposición. Se ha pronunciado
al respecto el Tribunal Colegiado del Vigésimo Circuito.

Por otra parte, ante la actuación judicial no requiere el comisariado un mandato


especial por otra parte de la asamblea para actuar en algún procedimiento
jurisdiccional, dado su carácter implícito de representante legal de núcleo agrario
respectivo. Así lo afirmo el Tribunal Colegiado del Vigésimo Segundo Circuito.

62
También es de resaltar que el comisariado contara, en su caso, con las comisiones y
los secretarios auxiliares que señale el reglamento interno.

Las facultades y obligaciones del comisariado ejidal son las siguientes:


I. Representar al núcleo de población ejidal y administrar los bienes comunes
del ejido, en los términos que fije la asamblea, con las facultades de un
apoderado general para actos de administración, pleitos y cobranzas.
II. Procurar que se respeten estrictamente los derechos de los ejidatarios;
III. Convocar a la asamblea en los términos de la ley, así como cumplir los
acuerdos que dicten las mismas;
IV. Dar cuenta a la asamblea en los términos de la ley, así como cumplir los
acuerdos que dicten las mismas.
V. Las demás que señalen la ley y el reglamento interno del ejido.

9.10 EL CONSEJO DE VIGILANCIA

Se constituye por un presidente y dos secretarios, con sus respectivos suplentes. Si


el reglamento no dispone nada en cuanto a su función, se entenderá que sus
integrantes lo harán conjuntamente.

1. Vigilar que los actos del comisariado se ajusten a los preceptos de la


ley y a lo dispuesto por el reglamento interno o a la asamblea;
2. Revisar las cuentas y operaciones del comisariado a fin de darlas a
conocer a la asamblea y denunciar ante esta las irregularidades en que
haya incurrido el comisariado;
3. Convocar a asamblea cuando no lo haga el comisariado
4. Las demás que señalen la ley y el reglamento interno del ejido.

Ahora bien, conforme al art.39 de la Ley Agraria los integrantes de los comisariados
y de los consejos de vigilancia duraran en sus funciones tres años. En adelante, no
podrán ser electos para ningún cargo dentro del ejido, sino hasta que haya
transcurrido un lapso igual a aquel en que estuvieron en ejercicio.

Si al término del periodo para el que haya sido electo el comisariado ejidal no se han
celebrado elecciones, sus miembros propietarios serán automáticamente sustituidos
por suplentes. El consejo de vigilancia deberá convocar a elecciones en un plazo no
mayor de 60 días contados a partir de la fecha en que concluyan las funciones de
los miembros propietarios. Al respecto del Tercer Tribunal Colegiado del Octavo
Circuito.

63
9.11 REMOCION

En lo que concierne a la remoción de los miembros del comisariado y del consejo de


vigilancia, el art. 40 de la Ley Agraria precisa que podrá ser acordada por voto
secreto en cualquier momento por la asamblea que al efecto se reúna que sea
convocada por la Procuraduría Agraria a partir de la solicitud de por lo menos 25%
de los ejidatarios del núcleo.

9.12 INCAPACIDAD PARA ADQUISISION DE TIERRAS Y DERECHOS

El art. 34 de la Ley Agraria establece que los miembros del comisariado ejidal en
funciones estarán incapacitados por adquirir tierras u otros derechos ejidales
excepto por herencia.

Este articulo resulta oscuro respecto a la asignación de derechos y tierras dentro del
procedimiento de delimitación de las tierras ejidales, ya sea que se lleve a través del
Programa de certificación de derecho ejidales y titulación de solares o bien en forma
independiente, puesto que al delimitarse y asignarse derechos sobre tierras de uso
común o bien en la asignación de parcelas, surge la siguiente pregunta: ¿los
integrantes del comisariado ejidal se quedarán sin la correspondiente adjudicación?

Al respecto, consideramos que los derechos correspondientes deberán ser


adjudicados en proporción igual que a cualquier otro ejidatario, y si existe, conforme
a la fracc. III del art. 56 de la Ley Agraria, algún derecho a una superficie superior a
razón de las aportaciones materiales, de trabajo y financieras, deberá justificarse
plena y debidamente este hecho, ya que existen casos como el de la ignorancia de
sus miembros, la presidenta del comisariado se las arregló para que la asamblea
aprobara una distribución inequitativa de parcelas con superficies de más de tres mil
hectáreas a favor de una minoría, entre las que se encontraba ella misma, mientras
que la media superficie del resto de los integrantes fue de 30 hectáreas, con
excepción de 50 ejidatarios a quienes no se les entregó superficie cuando en forma
gratuita el Estado otorga este servicio a través del PROCEDE”.1

1 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p163

64
CUESTIONARIO

1.- ¿Qué es el ejido?

2.- ¿Cuándo resurgió el ejido por Luis Cabrera en su gran discurso?

3.-según el Código Agrario de 1942, ¿Qué debían comprobar los núcleos agrarios
para que procediera la restitución?

4.- ¿Cómo se integra la comisión mixta de un ejido?

5.- ¿En la propiedad social, que modalidades imponía?

6.- De acuerdo al ejido, ¿qué es la posesión?

7.- ¿A qué órganos consideraba el Estado la Ley de Reforma Agraria como


autoridades agrarias?

8.- ¿Cómo se integraba la Comisión Agraria Mixta?

9.- ¿A partir de cuándo se consideraba el núcleo de población como propietario?

10.- ¿Qué facultades tenía el consejo de vigilancia en el ejido?

11.- ¿cuáles son los requisitos para ser constituido un ejido?

12.- menciona el concepto de comisariado ejidal

13.- ¿qué es la remoción, cuando procede?

14.- Establezca la diferencia entre ejido y comunidad

15.-explique que significa PROCEDE

16.- ¿Cuáles son los modos de extinción de un ejido?

17.- ¿Cuál es el objeto de considerar el ejido como una sociedad de interés social?

CAPITULO X

SISTEMAS AGRARIOS EN ALGUNAS REGIONES DEL MUNDO LA LEY Y LA

65
HISTORIA EN EL AGRARISMO MEXICANO. SIMILITUDES CON LAS DE
OTRAS
LATITUDES LEJANAS A LAS NUESTRAS

INTRODUCCIÓN

Es histórico y de importancia el poder investigar y conocer los demás sistemas


agrarios de otros países de diferentes continentes para así poder comparar y
compartir experiencias, el poder mejorar la vida de los habitantes de un país por
medio de su producción más preponderante, como alguna vez lo fue en nuestro país,
la agrícola, entender el desarrollo de otros países como Los Estados Unidos de
Norteamérica donde la agricultura incorpora una variedad y riqueza difícil de
encontrar en el resto del mundo. Esto se debe en gran parte a lo vasto que es ese
país y además a la generosidad de su naturaleza, por ejemplo que solo en el oeste,
un área relativamente pequeña, existan desiertos pequeños debido a las escazas de
lluvias, y de nevadas.

Por ejemplo en un principio los agricultores araban más de la cuenta la tierra y con
ello agotaban los elementos nutritivos sin reponerlos con fertilizantes, los surcos se
hacían a lo tonto, de modo que cuando llovía mucho, el agua formaba arroyos
profundos en el campo. Esto provocaba consecuencias graves que los agricultores
negligentes, como hay muchos en México, pues no les importaba y se podía ir de
marcha a otro pueblo.

Y así se puedo uno dar cuenta de los logros o de los retrocesos en los sistemas
desde la forma de sembrar, el tipo de tierras a cultivar, los tiempos de lluvias, los
tipos de semillas que sembrar y saber en comparativo de las bondades de cada
región, de cada país, aunado al proceso legislativo de dichos países, unos más
ignorantes que otros, unos más fuertes que otros, por eso da como resultado, un
mejor país por lo menos en la forma de llevar a cabo si actividad agrícola en todos
sus aspectos.

“Considero en verdad que para diseñar nuestro futuro, —de especial manera en el
campo mexicano, hijo de tantos debates, de tantas carencias, de tanta hambre y de
tanta sangre—, debemos conocer e interpretar a fondo nuestro pasado, bajo pena
de repetir por ignorancia o superficialidad, los errores cometidos por nuestros
abuelos. No basta repetir con superficial frialdad y falta de convencimiento que "la
Historia es la maestra de la vida" sin creerlo siquiera. Si lo es, hay que aprender
lecciones de ella y ponerlas en práctica; si no lo fuera: ¿a qué repetir tonterías
inexistentes?

66
Igualmente estoy cierto de que para entender el entramado de la convivencia social,
son indispensables el conocimiento sólido de la Historia y el del Derecho; ambos, se
necesitan e implican mutuamente; que la Historia, sin el Derecho, es anarquía; y que
el Derecho, sin la Historia, es utopía.

No creo en los dogmatismos filosóficos ni económicos. Ninguno es perenne y ambos


han probado su volatilidad. Creo, sí, en la fuerte incidencia de la Historia que nos
impone los hechos de los que nuestro "hoy" y nuestro "mañana" se ven, ciertamente,
influidos a tal grado, que con frecuencia podemos encontrar en ella la razón última
de situaciones que sin conocerla, nos resultaría imposible entender.

Si no actuamos conscientemente en estos términos, habremos de trabajar sin


fundamento, sin bases sólidas, con una ligereza ajena del todo a la reciedumbre
intelectual y a las necesidades del país.

¿Cuáles han sido pues las razones históricas y jurídicas de la existencia actual en
México de millones de campesinos depauperados, millones también en la miseria,
como he dicho y conociéndolos, faltos de fe y huérfanos de esperanza?

¿Cuál es la razón final de que las parcelas ejidales y las tierras comunales, la llamada
"propiedad social", hayan fracasado como figuras económicas productivas, como
rescate de la secular miseria campesina, como real elemento factor de una vida
económicamente sana, atendiendo a la dignidad de la persona humana, como
sustento de una clase media agrícola y agropecuaria holgada, como unidades
económicas eficientes, concurrentes con sus productos al mercado nacional, exporta
doras incluso?

Por la calidad de su autoría, por su experiencia, por su actualidad vale la pena tomar
en cuenta la siguiente opinión crítica:

Si queremos ser sinceros con nosotros mismos, tenemos la obligación confesar, los
hijos de la revolución, que el agrarismo, tal como lo han entendido y practicado hasta
ahora, es un fracaso.

Común denominador de la miseria de millones de campesinos mexicanos:


Los campesinos pobres de México, nunca han sido propietarios, ni de sus tierras ni
de sus destinos.

La propiedad privada, ha demostrado hoy a nivel universal, [díganlo las actuales


economías de la Europa del Este, las de Asia, la economía china en lo particular y
que los señores economistas den rumbo, contenido y cifras a mi dicho], en el tiempo
y en el espacio, que es el sistema más propicio para la creación y la distribución de
la riqueza, sin que el Estado se abstenga nunca de su esencial responsabilidad de

67
promover la auténtica justicia social, conmutativa, distributiva y legal; y aún más
lejos, la equidad, como aplicación de la justicia al caso concreto, según decía
Aristóteles.

La propiedad colectiva de las tierras, vía ejidos o comunidades, ha mostrado


históricamente en nuestra patria su rotundo fracaso económico, social y cultural. Y lo
mismo ha sucedido en México que en la antigua Europa socialista del Este, en
Vietnam, en Corea del Norte, en China. Es una regla general, probada a nivel
universal.

Aquí, he reproducido, en cuanto nos son aplicables, las reflexiones de un hombre


político del otro lado del mundo, de la talla de Shimon Pérez. Me impactaron desde
hace años, su visión de la pobreza y la agudeza de sus juicios, tan aplicables a
nuestras realidades. Lo dicho por Plutarco Elías Calles, es a mí entender irrefutable.
Nuestra historia y la realidad, le han dado la razón, aunque no deja de haber quienes
negando la luz del sol, nieguen esos fracasos. "Estultorum est infinitos nu meros",
decían los viejos, sabios romanos. El número de los tontos | infinito.

10.1.1ESTADOS UNIDOS DE AMERICA

Evolución

“Al igual que para otros descubridores de la época, el principal argumento jurídico de
los inmigrantes ingleses para la ocupación de las tierras en América fue a la llegada
del marino italiano Cabot a la Isla de Labrador en 1497, sólo cinco años después
que Colón.

También consideraron legal practicar la guerra justa, resistiendo la violencia con más
violencia; el mismo principio se aplicó para el sojuzgamiento de los indios y la
apropiación de sus tierras si renegaban de la fe cristiana una vez convertidos. Los
colonos sostenían que los indios habían recibido de Dios sólo el derecho natural de
posesión, no el derecho civil, que implicaba el mejoramiento del suelo, la cría de
ganado y la multiplicación de los frutos y cosechas, derechos que los puritanos sí
habían recibido de Jehová.

En 1603 se fundó la colonia de Virginia y en 1620 la de Massachusetts, cuya


prosperidad permitió la fundación de Connecticut en 1639, Maine y New Hampshire
en 1650 y Carolina en 1663, así como de otras hasta llegar en 1732 a la de Georgia.
De esta manera se conformaron las colonias iniciales como asentamientos a lo largo
de las costas orientales.

En el norte, integrado por las primeras colonias, la agricultura era poco productiva,
por lo cual se desarrolló la pesca y el comercio marítimo en general, en el centro

68
(Nueva York), New Jersey y Pensilvania) la tierra era de mejor calidad, lo que
permitió la constitución de productivas haciendas; en el sur, desde Virginia hasta
Georgia, se formaron las más grandes plantaciones trabajadas por esclavos negros;
en esa región casi todos vivían de la agricultura a manera de pequeños estados
comerciales. La cultura social estaba conformada por los grandes terratenientes, la
gran masa de los “blancos pobres”, pequeños propietarios o empleados y jornaleros
y, finalmente, los negros. Segregado se encontraba un grupo de hombres, casi una
especie, llamados squatters, quienes sin ocuparse de las reglamentaciones
concernientes a la propiedad se establecieron donde quisieron, específicamente a
partir de la zona limítrofe que se extendía a lo largo de la frontera occidental de las
colonias, avanzando hacia la gigantesca llanura que se abría al oeste.

Independencia.

Con la declaración de independencia de 1776las colonias se separaron de la


metrópoli y se constituyeron en república autónoma, conforme se desprende de su
Constitución de 1787. Sin embargo, ya desde 1780 las 13 colonias, como estados
independientes, poseían constituciones propias en las cuales se reflejaba el
sentimiento individualista propio de la colonización inicial y que pronto se incrementó
exponencialmente con base en el ideal de Jefferson de constituir un país poblado
por propietarios de pequeñas haciendas agrícolas.

Como consecuencia directa de la independencia, innumerables grandes posesiones,


sobre todo las pertenecientes a la corona inglesa, fueron subdivididas y repartidas
en pequeñas haciendas agrícolas, con lo que hasta entonces arrendatarios se
convirtieron en propietarios.

Leyes de Homestead.

Este grupo de disposiciones instituyó una ficción jurídica concebida para proteger la
posesión y disfrute del propietario de la tierra ante reclamos de sus acreedores. El
predio que debe ser la residencia permanente del jefe de una familia incluye la tierra
y las edificaciones que rodean la casa habitación.

Entre otros aspectos, esta ley prohibió la ejecución y venta forzada de la tierra,
protección que dura en tanto ésta sea domicilio y único patrimonio del titular. Así,
implica el derecho personal al aprovechamiento pacífico, ininterrumpido, de la
propiedad domiciliaria, libre de afectaciones o acreedores.

Estructura fundamental de la tenencia de la tierra.

La mayor parte del derecho angloamericano no está codificada ni en forma de leyes


escritas. Una de las características fundamentales de este sistema jurídico es la que

69
se conoce como case law, o sea derecho del caso, cimentado en la adhesión a los
precedentes.

La organización agraria se asienta sobre la pequeña y mediana propiedad. La


incidencia porcentual de los grandes latifundios es de escasa significación. La
extensión de las explotaciones agrícolas debe ser suficiente para satisfacer las
necesidades materiales y culturales del hogar campesino. Además, se garantiza la
comercialización de sus productos, a fin de beneficiar a la colectividad y se estimula
su progreso poniendo a su alcance los adelantos de la técnica moderna.

10.1.2 FRANCIA

Este país ha logrado la más amplia distribución de la propiedad territorial. La


agricultura se encuentra agobiada por la preeminencia de la industria, que abate los
precios de la producción agrícola hasta límites intolerables. Por ello, el gobierno
otorga fuertes subsidios a los pequeños agricultores.

10.1.3 CHINA

La información con que se cuenta es realmente escasa. Ni siquiera la representación


diplomática de esta nación posee material documental actualizado de la situación
agraria. Sin embargo, es por todo conocido que el sistema chino está estructurado
con base en el colectivismo comunista. Así, la ley del 28 de junio de 1950,
sancionada por el Gobierno Central de la República Popular China, establece la
colectivización de la tierra y de los instrumentos de producción agrícola, necesaria
para impulsar la industrialización.

Se confisco a los terratenientes sus tierras (excepto las correspondientes a los


templos y a las empresas), bestias de tiro, material agrícola y excedentes de grano.
La citada ley estableció la pequeña propiedad, inafectable por la confiscación,
cuando su titular la trabaja por si o con ayuda de mano de obra asalariada. El
terrateniente afectado conservo una extensión de tierra igual a la otorgada a cada
campesino, destinada a su sostenimiento, cuyo trabajo lo “reformaría”.
Tanto la tierra como los medios de producción confiscados fueron puestos a
disposición de las federaciones de agricultores de las comunidades rurales, para que
estas procedieran a la entrega de las unidades de tierra según determinadas
prioridades. Se reconoce la propiedad individual, ya que su colectivización no es
obligatoria, sino únicamente fomentada para fines productivos.

La ley establece que el gobierno entregara a los campesinos los títulos de posesión
de la tierra repartida, lo cual les permitirá ejercer el derecho de libre explotación, de

70
compra y de venta. Con la finalidad de fiscalizar este proceso se instituyeron
autoridades agrarias y se creó un Tribunal Popular para juzgar y sancionar toda
controversia surgida con motivo de la aplicación de la ley.

10.1.4 ARGENTINA

Argentina sufre una gran dispersión legislativa, ya que no existe una codificación
especial unificada de las normas jurídicas agrarias. Por una parte encontramos
normas generales y comunes, y por la otra, normas especiales para ciertas clases
de dominio agrario, sobre todo en materia de colonización. Aquellas han logrado
derogar una significativa cantidad de normas civiles, lo cual no significa que pueda
prescindirse del Código Civil para poner en práctica, desarrollar y solucionar las
relaciones jurídicas que regulan la propiedad rural.

Según algunos tratadistas argentinos, el problema reside en que la Constitución,


caracterizada por su liberalismo y su desconocimiento de los valores agrarios, solo
contiene algunas normas específicas sobre la materia. La inexistencia del derecho
agrario como una rama autónoma obliga a acudir a esta normatividad dispersa ya,
respetar el orden jerárquico conformado por la constitución Nacional, el Código Civil,
las leyes agrarias nacionales y las constituciones y leyes provinciales.
Sustancialmente, el esquema del dominio agrario vigente se estructura sobre las tres
normas señaladas en primer lugar, que por razones de brevedad serán las que
rápidamente abordaremos.

NORMAS CONSTITUCIONALES

El artículo 17 señala que la propiedad es inviolable, por lo que nadie puede ser
privado de ella sino mediante sentencia fundada en la ley. La expropiación solo se
podrá aplicar por causa de utilidad pública fundada y previa indemnización. Está
prohibida la confiscación de bienes y los cuerpos armados no pueden hacer
requisiciones. El artículo 14 indica que los habitantes gozan del derecho de usar y
disponer de su propiedad. Por su parte, el 20 concede a los extranjeros los mismos
derechos que a los ciudadanos, incluyendo la posesión, compra y enajenación de
bienes raíces. El numeral 11 prohíbe aplicar impuestos por el tránsito de ganado de
una provincia a otra.

Ley 20.518

Mediante esta ley Suspensión de Desalojos en Arrendamientos Rurales del 31 de


julio de 1973, se pretende evitar que se abandonen los predios o se afecte su

71
producción, para lo cual se establecen líneas de crédito del Banco de la Nación para
adquirir el inmueble, previo trámite ante el Consejo Agrario Nacional.

10.1.5 CUBA

Los principios de la propiedad territorial cubana están contenidos en la ley de


Reforma Agraria expedida el 17 de mayo de 1959, la cual admite la pequeña
propiedad de hasta 30 caballerías, ya que se considera que esta extensión es
suficiente para el mantenimiento de la burguesía agraria. La ley respeta las fincas
rústicas de mayor extensión si son ganaderas o están sembradas con caña de
azúcar. Arroz o cultivos de altos rendimientos.

También dispone que solo los cubanos podrán ser propietarios de la tierra y otorga
parcelas de dos caballerías de tierras fértiles, como mínimo, para las familias de
cinco miembros. Este proceso está cargo del Instituto Nacional de la Reforma
Agraria; la entrega es gratuita y se indemniza a los afectados.

Por otro lado, ante la difícil situación en la economía cubana, consecuencia del cese
de los apoyos económicos y los embargos, en 1993 se constituyeron las Unidades
Básicas de Producción Cooperativa en tierras estatales administradas por antiguos
obreros asalariados.

10.1.6 PERÚ

Disposiciones constitucionales

La Constitución política de Perú, promulgada el 12 de julio de 1979, contiene


importantes principios en materia agraria. El título I trata de los derechos y deberes
fundamentales de la persona; el título III se refiere al régimen económico, cuyo
capítulo 3º se dedica a la propiedad, a la cual asigna una esencia social liberal, en
tanto que el capítulo 7º, denominado Del régimen agrario, contiene los lineamientos
estructurales de la reforma agraria; el capítulo 8º otorga un tratamiento especial a
las comunidades campesinas y nativas a la par que crea un seguro agrario para
protección contra calamidades y desastres.

Estructura agraria
El decreto ley número 17.716, promulgado el 24 de junio de 1969, regula la reforma
agraria en las regiones de la costa, sierra y ceja de la selva del Perú, definiéndola
como un proceso integral e instrumento de transformación de la estructura agraria
para sustituir el régimen de latifundio y minifundio por un sistema más justo de
propiedad, tenencia y explotación de la tierra, que garantice la justicia social en el
campo y el aumento de la producción y productividad del sector agropecuario.
72
La región de la selva queda por entero sujeta a la aplicación del decreto ley número
20.653, relativo a Comunidades Nativas y de Promoción Agropecuaria de Regiones
de Selva y Ceja de Selva.

Esta ley establece límites a la extensión de la propiedad, bajo pena de afectación.


En la costa, la inafectabilidad agrícola se fijó en 150 hectáreas, en tanto la ganadera
asciende 1.500 hectáreas, límites que sin embargo pueden ser incrementados bajo
ciertas condiciones. En las zonas de la sierra y ceja de selva, los límites varían de
acuerdo con cada provincia, a las cuales corresponde la facultad de establecerlos
según sus propias circunstancias entre 15 y 55 hectáreas.

La reforma agraria peruana se basó en el principio de que la tierra es de quien la


trabaja. En consecuencia, prohibió toda forma de tenencia indirecta, incluyendo la
posibilidad de arrendamiento, así como toda forma de cesión de predios a título
oneroso o gratuito.

La ley prevé una propiedad inafectable, sujeta a los límites de extensión


mencionados y a su explotación directa y eficiente. Cabe mencionar que la
afectación se realiza por la vía de la expropiación y mediante indemnización, para
cuyo cumplimiento se creó la Deuda Agraria, ya que se expiden bonos para dicho
fin.

10.1.7 ISRAEL

Características de la agricultura Recursos

básicos limitados.

Sólo la cuarta parte del territorio es cultivable, los recursos hidrológicos son limitados
y el régimen de lluvias desfavorable, el clima es semiárido y ardió, los suelos están
erosionados por el abandono y la tala anterior. Israel goza de precipitaciones
pluviales solo durante los tres o cuatro meses de invierno, y 80% del territorio cuenta
con 20% de los recursos hidrológicos, en tanto que 80% restante se halla en el
extremo norte del país, en un área que no supera 20% de su territorio.
Suelo y agua propiedad de la nación

Más de 95% de la tierra es propiedad de la nación, así como todos los recursos del
subsuelo y los recursos hidrológicos. Al agricultor se le asigna una determinada
cuota anual de agua que debe aprovechar para obtener el mayor beneficio posible.

Cooperativismo

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Su organización es predominantemente cooperativa (kibutz, moshav, etc.), como se
verá más adelante.

Planificación

Esencialmente planificada desde el plano nacional hasta el individual respecto de


cada unidad de explotación.

Participación

Participación integral del gobierno y organizaciones.

Tecnificación

La explotación agrícola y ganadera es esencialmente intensiva, lo cual incrementa los


índices de productividad.

Limitaciones del mercado

El mercado interno ha quedado cubierto, por lo cual la capacidad de expansión del


sector depende del mercado externo.

Instituciones rectoras de la agricultura

Se ocupa de la producción, precios, crédito de avío, presupuestos de fomento para


aldeas ya consolidadas, importación de productos agropecuarios, servicios
veterinarios y fitosanitarios, investigación, conservación de suelos, desarrollo de
recursos hidrológicos, etc.

Fondo agrario nacional

Creado a comienzos del siglo con el propósito de adquirir tierras en la Palestina de


ese entonces y habilitarlas para la agricultura y la silvicultura, ha coordinado sus
tareas con el Ministerio de Agricultura y actualmente se dedica a la adquisición y
habilitación de tierras, su registro y arrendamiento, así como la silvicultura.

Régimen de tenencia de la tierra


Israel es uno de los pocos países del mundo cuyo proceso de reforma agraria
concluyó, ya que el mismo inició antes del mandato británico sobre Palestina y
culminó con su constitución en Estado independiente en 1948. Bajo este esquema,
más de 95% de su territorio es de propiedad nacional; el uso de suelo está totalmente
planificado. La ley bíblica del “jubileo” regula la tenencia de la tierra (ésta retorna a
su propietario al cabo de 49 años). De esta forma, el Estado renta al agricultor por
49 años, de acuerdo con un planteamiento socioeconómico de nivel profesional,

74
científico y social. El agricultor no es propietario del suelo; no puede por lo tanto,
especular con él o subdividirlo entre sus herederos (lo que lleva al antieconómico
minifundio), o acumular grandes extensiones de suelo (lo que lleva al ineficiente e
injusto latifundio).

Básicamente el origen de la propiedad de la tierra emana de tres afluentes:

El primero conformado por la compra formal por conducto del Fondo Agrario
Nacional; principalmente, y en menor medida, a título particular; el segundo,
constituido por una expropiación anterior a la creación del Estado (independiente de
la expropiación por razones de seguridad pública o motivos socioeconómicos); y el
tercero, a partir de las tierras abandonadas por los aldeanos árabes como
consecuencia de la guerra. En este último caso, la ley impone la obligación de
indemnizar plenamente al dueño de la propiedad abandonada.

Como índice de la situación que se encuentra la tenencia de la tierra en Israel, a


continuación se incluye un cuadro informativo:

Propiedad y explotación colectiva 95% Kibutz,

Moshav ovdim,

Moshav shitufi

Propiedad y explotación particular 5% Moshavá

Aldea árabe

Kibutz

Esta institución es una sociedad de carácter voluntario, asentada sobre una forma
de vida colectiva basada en la propiedad, producción, trabajo, consumo y educación
de los hijos, comunes.
En ella se aplica el principio de “cada uno según sus posibilidades, a cada uno según
sus necesidades”. Las tierras son propiedad nacional, la vivienda es propiedad del
kibutz, el comedor es colectivo, cuentan con servicios médicos asistenciales (kupat
jolim); la educación es colectiva, por lo cual los niños pasan gran parte del día en
una casa especial común; la cultura, producción y sus medios, consumo, trabajo,
organización para el trabajo, son colectivos; la herencia pertenece al kibutz, no hay
remuneración y solo se proporciona dinero para pequeños gastos; se conceden 10
días anuales de vacaciones a cuenta del kibutz; la afiliación y retiro de éste son
75
voluntarios; la Ley de Cooperativas los reconoce como sociedad cooperativa;
además, quienes lo integran, no realizan aportaciones a la sociedad.

Moshav ovdim

Constituye una forma de colonización agrícola intermedia basada en dos principios


fundamentales: el individual y el colectivo.

La educación, así como la producción, son privadas, pero los medios de producción
son tanto particulares como colectivos; el trabajo y su organización son particulares;
el consumo se realiza mediante cooperativas.

La estructura administrativa del moshav se compone de una asamblea general, un


consejo de administración, el secretario interno y el externo, y diversas comisiones.

Moshav shitufí

Éste es un tipo de colonización agraria en el que todos los miembros, propietarios


colectivos de los bienes de la colonia, participan en la administración, en el trabajo,
en la ayuda mutua y asumen una responsabilidad común, en tanto que la familia
conserva su existencia unitaria en el marco de un hogar individual donde desarrolla
su vida privada.

Moshavá

Aldea de tipo privado, no difiere mucho de las poblaciones rurales existentes en otras
partes del mundo desde el punto de vista de su estructura social, económica y
organizativa. Es la forma de colonización más antigua en la historia de la
colonización judía en Israel. Estableció sobre tierras privadas, se basan en el
principio de la granja individual; no se ajustan al principio del trabajo personal, pero
no prohíben el empleo de asalariados en general y judíos en particular. Además, no
exigen a los agricultores organizarse en asociaciones cooperativas para la compra
y venta de sus productos.
Aldea árabe

Suministra cerca de 12% de la producción agrícola de Israel y se basa por entero en


los principios de la explotación privada.”1

CUESTIONARIO

1.- En qué consiste la ley Homestead?


76
2. ¿Cuáles son las medidas de protección para la producción agrícola en los Estados
Unidos?

3.- ¿Qué es el Moshavá?

4.- Menciona que es un Kibutz

5.- ¿Cuáles son las leyes pre-Emption?

6.- ¿Qué ley en China establece la colectivización de la tierra y de los instrumentos


de producción agrícola?

7.- ¿Qué artículo en Argentina menciona que la propiedad de la tierra es inviolable?

1 Rivera Rodríguez, Isaías, El Nuevo Derecho Agrario Mexicano, ed. Mc Graw Hill, 2ª edición, México 2013, p106
CAPITULO XI

LEGISLACIÓN DE LA REFORMA AGRARIA, DERIVADA DEL ARTÍCULO 27


CONSTITUCIONAL

INTRODUCCIÓN

En el trabajo de formar una legislación agraria intervienen actores políticos que


muchas de las veces, la mayoría, nada tiene que ver con el agro, y no tienen la más
remota idea de lo que van a trabajar en cuando elaboran este tipo de leyes.

Para empezar se debe conocer que ejidatario es todo aquel ser humano hombre o
mujer con derechos titulares ejidales, y desde ese problemas jurídico de saber cuál
es el concepto de que es ejidatario y de que es un comunero, y se ha centrado este
concepto en la persona moral de la cual forman parte cada individuo. Esto es tan
solo el inicio para poder legislar en materia agraria, redefiniendo los conceptos de
cada actor jurídico. Ya establecido esto, pues se procede a definir los derechos
agrarios individuales , sus bienes en materia, su calidad de ejidatario, con su
adquisición y acreditación, y la pérdida legalmente del mismo título, derecho y
responsabilidad.

77
Debe ser muy precisa y directa esta legislación, puesto que la mayoría de los
ejidatarios o comuneros no saben por lo menos leer ni escribir, y a veces el hacer
leyes de poco entendimiento entre el medio de los abogados, su uso en el medio
agrario es complicado y nada práctico en la vida diaria del campo mexicano.

11.1 LEY DE EJIDOS DEL 30 DE DICIEMBRE DE 1920

a) “Antecedentes. Como el sistema de expedir Circulares por la Comisión


nacional Agraria, resultó un tanto caótico porque las Circulares eran
casuistas, con frecuencia contradictorias y no respondían a un sistema
interno, se utilizó la experiencia obtenida a través de ellas para expedir un
ordenamiento legal que respondiera a un plan sistemático jurídico; así nació
la primera Ley Agraria, la Ley de Ejidos del 30 de diciembre de 1920, bajo el
régimen presidencia del general Álvaro Obregón, que recapituló la
experiencia adquirida a través de las Circulares, pero que adicionó otros
lineamientos más sobre conceptos fundamentales.
Por otra parte los campesinos que habían luchado por la Revolución de 1910
por conquistar y consagrar un artículo 27 constitucional, exigieron el
cumplimiento de éste como realidad que los convenciera de que su lucha ya
había terminado porque habían triunfado; pero la generosidad del artículo 27
constitucional y sus grandes lineamientos aún debía de ponerse en juego
con la dinámica social y crearse su legislación secundaria que, respetando
sus grandes principios, llegara hasta los detalles de la Reforma Agraria, en
consonancia con las necesidades nacionales del momento para que sus
acciones, procedimientos e instituciones resultaran eficaces

Hasta ese año Venustiano Carranza logró repartir 132,639/87-02 hectáreas entre
59,848 beneficiados y Adolfo de la Huerta 33,695/87-24 entre 17,355 beneficiados.

b) Contenido. Esta ley constó apenas de 42 artículos y 9 transitorios. Respecto


de la capacidad jurídica estableció que tienen derecho a obtener tierras por
dotación o restitución, en toda la República…I. Los pueblos; II. Las
rancherías; III. Las congregaciones; IV. Las comunidades y V. Los demás
núcleos de población de que se trata esta ley (artículo 1). En otras palabras

78
la capacidad jurídica se determinó por la categoría política de un núcleo de
población (artículo 3).
c) Respecto de la capacidad individual el artículo 3º mencionó a los “vecinos,
jefes de familia”, concepto aplicado por igual a varones y mujeres, pues la
Circular número 48 de la Comisión Nacional Agraria, en su regla número 12
dijo que las mujeres solteras o viudas que tengan a su cargo familia que
atender, serían consideradas también como “jefes o cabezas de familia”. El
artículo 13 estableció que “la tierra dotada a los pueblos se denominará ejido”,
explicándose así legalmente el cambio de significación de la palabra ejido en
la etapa contemporánea. Más adelante el citado precepto explicó la extensión
de los ejidos diciendo que el “mínimo de tierras de una dotación sería tal, que
pudiera producir a cada jefe de familia una utilidad diaria equivalente al duplo
del jornal medio de la localidad”, para hacer esta determinación a toda
solicitud deberían acompañarse datos varios, sobre salarios, precios de
artículos de consumo, de objetos necesarios para la vida, etc. (artículos 7 y
34, fracc. II, inciso d).
Respecto de la dotación (artículo 34), la solicitud también se presentaba ante
el Gobernador (fracc. I), quien la transcribía a la Comisión Local Agraria; ésta
levantaba informaciones de oficios sobre los datos necesarios, y en cuatro
meses debía formular dictamen sobre las conveniencias o necesidades de la
dotación (fracs. II, III y IV), notificándoselo a los presuntos afectados; el
expediente se turnaba a la Comisión Nacional Agraria la que en un mes debía
formular su dictamen y el Ejecutivo fallaría en definitiva. (Fracs. V, VI, VII y
VIII del artículo 34).

d) Efectos. La Ley de Ejidos duró vigente sólo once meses, pues fue derogada
por el Decreto del 22 de noviembre de 1921, y lógicamente en tan poco
tiempo, sus efectos fueron bien pocos; ésta simple observación indica que
resultó muy defectuosa en relación con la imperiosa necesidad de aquellos
años de llevar a cabo el reparto agrario; el trámite era dilatado, los términos
se prolongaron más allá de lo estableció, pues tan solo para determinar la
extensión de la parcela, los estudios previos sobre salarios, precios de los
artículos de consumo, etc., eran realmente engorrosos y dilatados, de tal
manera, que los expedientes tardaban en llegar a la resolución final y sólo
hasta entonces, en caso favorable, había posesión definitiva de tierras para
los pobladores necesitados, los que urgentemente requerían las tierras; en
consecuencia , la Ley de Ejidos, no respondió a la realidad para la cual se
expidió y pronto hubo de derogarse. Por otra parte, se comprendió que la ley
solo se preocupara de los ejidos, pues era la inmensa mayoría del pueblo,
desposeído de tierras quienes exigían su reparto, por eso no encontramos en
dicha ley ninguna preocupación por la pequeña propiedad.

79
11.2 DECRETO DEL 22 DE NOVIEMBRE DE 1921

a) Antecedentes. El Decreto del 6 de enero de 1915 fue reformado en sus


artículos 7, 8 y 9 por el Decreto preconstitucional del 19 de septiembre de
1916, que a su vez fue derogado por la Constitución de 1917; en
consecuencia fue necesario aclarar que los artículos precitados del Decreto
del 6 de enero de 1915 recobraron su validez con que aparecieron en su texto
original, el que, fue incorporado a la propia Constitución; y así lo hizo el
Decreto del 22 de noviembre de 1921, en su artículo segundo, Decreto
expedido por Álvaro Obregón y que vino a derogar en su artículo 1º la Ley de
Ejidos del 28 de diciembre de 1920.
b) Bases que dio. I. El artículo tercero estableció una nueva corriente en la forma
de integrar las leyes agrarias, propiciando la creación de las normas de tipo
material expedidas por el Poder Ejecutivo de la Nación para que dicte todas
las disposiciones convenientes a reorganizar y reglamentar el funcionamiento
de la autoridades que para su aplicación creó el Decreto preconstitucional del
6 de enero de 1915. Hoy observamos una gran cantidad de normas de tipo
material en la Legislación Agraria, y estas facultades y tendencias se iniciaron
con el Decreto que nos ocupa. La facultad se extendió, continuaba diciendo
el artículo tercero, “a todas las demás disposiciones agrarias que se hayan
expedido o se expidan en lo sucesivo, de acuerdo con el programa político de
la Revolución sobre las bases siguientes” (éste artículo explicó, además, la
estrecha vinculación entre Derecho Agrario. La Legislación Agraria, la
Reforma Agraria, la Política Agraria y la Revolución de 1910).

c) Efectos. Este Decreto de 1921 inició la técnica legislativa material, de acuerdo


con la cual, el Poder Legislativo autorizó al Poder Ejecutivo para que
reglamente las leyes que expide.

Bajo la vigencia del Decreto que creó las bases de la legislación Agraria, los
procedimientos se activaron, acelerándose en consecuencia la restitución y
dotación de tierras a los pueblos necesitados de ellas y se estableció que este
hecho era una necesidad inaplazable para nuestra estabilidad interna. El 29
de mayo de 1922 se expidió un Decreto que aclaró la fecha correcta de
expedición del Derecho de las Bases Agrarias, señalando el 22 de noviembre
de 1922 como la fecha correcta. El artículo 1º transitorio de la Ley de
Dotaciones y Restituciones de Tierras y Aguas de 1927 derogará este
Decreto exceptuando su artículo 4º.

80
11.3 REGLAMENTO AGRARIO DEL 10 DE ABRIL DE 1922

a) Antecedentes. Este reglamento se expidió por Álvaro Obregón, utilizando


las facultades señaladas por el artículo 3º del decreto de las Bases
Agrarias del 22 de noviembre de 1921. En relación con la Ley de Ejidos
de 1920, se utilizó su experiencia, pero asimismo, trató de superarse,
introduciendo novedades.
b) Contenido. Este reglamento constó de veintiocho artículos y dos
transitorios. Aun cuando se había visto que el sistema de determinar
capacidad jurídica de los poblados por la categoría política de los mismos,
implicaba problemas, pues muchos de ellos no tenían le denominación
señalada por la ley y si la necesidad de obtener tierras para labrarlas, el
Reglamento continuó con éste sistema intentando remediar el defecto tan
solo con adicionas a las cuatro categorías más, los condueñazgos, “ los
núcleos de población existentes en las haciendas que hayan sido
abandonadas por sus propietarios y que tuvieren necesidad de cultivar
terrenos de las inmediaciones, a fin de poder subsistir; y las ciudades y
villas cuya población ha disminuido considerablemente o hayan perdido la
mayor parte de sus fuentes de riqueza, así como carácter de centros
industriales, comerciales o mineros”, (artículo 1º). En cuanto a la
capacidad individual, el artículo 9º señaló al jefe de familia o individuo
mayor de 18 años, iniciando el abandono del concepto familista que inspiró
la legislación Agraria desde la época colonial.
c) Efectos. La ley estaba redactada sin técnica en cuanto a la ordenación de
los preceptos. Su contenido siguió ocupándose sólo del reparto de tierras
para constituir ejidos, pero no de los otros aspectos del ejido, ni de la
pequeña propiedad; el problema agrario seguía pues sin ser atendido en
muchas de sus fases. Por otra parte, la estructuración defectuosa del
procedimiento permitía que la mayoría de los presuntos afectados se
amparan utilizando el recurso a que se refería el artículo 10 de la Ley del
6 de enero de 1915, y muchas veces, cuando el amparo procedía por
deficiencia del procedimiento, el recurso de amparo venía a nulificar la
Legislación Agraria, retrasando el reparto de la tierra.
Otro de los efectos notorios de este Reglamento Agrario fue permitirles a
los Comités Particulares Administrativos atender a la administración y
mejoramiento de los ejidos; véase la Circular número 51 del 11 de octubre
de 1922 que, además, establecía que se debía procurar la organización
cooperativa para la explotación ejidal y organizar en cooperativas a todos
los pueblos, congregaciones o rancherías.

El reglamento duró vigente cinco años. Hasta que lo derogó la Ley Bassols.
81
De aquí para adelante surge también:

La primera Ley Reglamentaria sobre Repartición de Tierras Ejidales y Constitución


del Patrimonio Parcelario Ejidal del 19 de diciembre de 1925.
La Ley de Dotaciones y Restituciones de Tierras y Aguas del 28 de abril de 1927.

La Ley del Patrimonio Ejidal del 25 de agosto de 1927.

Ley de Dotaciones del 21 de marzo de 1929.

Decreto del 23 de Diciembre de 1931 que prohibió el amparo en Materia Agraria a los
Propietarios Afectados.

Decreto del 10 de Enero de 1934 que Reformó el Artículo 27 Constitucional Primer

Código Agrario de los Estados Unidos Mexicanos del 22 de marzo de 1934. Código

Agrario del 23 de septiembre de 1940.

Decreto que reformó el artículo 27 constitucional del 30 de diciembre de 1946. El juicio


de amparo en materia agraria.

Código Agrario del 30 de diciembre de 1942.

Ley Federal de Reforma Agraria del 16 de marzo de 1971.

Ley Agraria de 1992”.1

1 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, ed. Porrúa, México 2012, p325

82
LEY DE
EJIDOS 30 DIC
1920

LEGISLACIÓN DE
LA REF AGRARIA DECRETO 22
ART 27 NOV 1921
CONSTITUCIONAL

REGLA MENT
O

AGRARIO

CAPITULO XII

LAS COMUNIDADES

INTRODUCCION

Este es un pequeño tema que no se puede dejar de atender, por la importancia


dentro del patrimonio de la agricultura en México, la comunidad está protegida por
leyes agrarias, así como su forma de explotarlas, y debe de tener una serie de
cumplimientos a los requisitos para que exista.

83
Hay diferentes procedimientos necesarios para la constitución y más que nada
reconocimiento legal como por ejemplo exista una acción agraria de restitución para
una comunidad despojada de su propiedad.

Cuentan con un órgano de representación y gestión legal que es el comisariado de


bienes comunales el cual se rige en los términos que establezca un estatuto comunal
o por costumbre.

“La propiedad comunal es el patrimonio constituido por un inmueble y sus derechos


sobre el mismo, mediante los procedimientos establecidos en la ley Agraria,
aprovechando por el conjunto de los habitantes de un pueblo, que lo tienen como
parte indivisa entre sí.

La tenencia de los terrenos propiedad de las comunidades, su protección, así como


sus formas de explotación están contenidas en el capítulo V, en los artículos 98 al
107 de la Ley Agraria en vigor.

12.1 RECONOCIEMIENTO LEGAL Y SUS EFECTOS

El reconocimiento de una comunidad puede derivarse de cualquiera de los


procedimientos siguientes:

1. Una acción agraria de restitución para las comunidades despojadas de su


propiedad;
2. Un acto de jurisdicción voluntaria promovido por quienes guardan el estado
comunal cuando no existe litigio en materia de posesión y propiedad comunal.
3. La resolución de un juicio promovido por quienes conserven el estado
comunal cuando exista litigio u oposición de parte interesada respecto a la
solicitud del núcleo, o
4. El procedimiento de conversión de ejido a comunidad (art.98 de la LA).

12.2 EXLCUSION DE PEQUEÑAS PROPIEDADES

En los casos señalados por el artículo 193 de la Ley Federal de Reforma Agraria, de
ser la hipótesis del que reconocimiento se hubiera iniciado durante su vigencia, las
pequeñas propiedades enclavadas en las comunidades deberían ser respetadas y
excluidas del reconocimiento cuando: se trate de tierras y aguas tituladas en los
repartimientos hechos conforme a la ley del 25 de junio de 1856, o se poseen hasta
50 hectáreas de tierras, siempre que hayan estado poseídas en nombre propio, a
título de dominio, por más de 10 años anteriores a la fecha de la notificación inicial

84
del procedimiento que se haga al propietario o poseedor, en los términos de la ley
vigente en la fecha de la solicitud.

Respecto de la exclusión por razón de la sustitución de autoridades, corresponde


conocer en primera instancia a los tribunales agrarios.

12.3 PROTECCIÓN JURIDICA

Las tierras comunales se caracterizan por ser inalienables, imprescriptibles e


inembargables, excepto que la comunidad determine la asociación con terceros,
para de este modo ceder el uso y disfrute de sus bienes de manera temporal y
transmitir el dominio de áreas de uso común a sociedades civiles o mercantiles en
los casos de manifiesta utilidad, así como encargar la administración a terceras
personas sobre dichas tierras.

12.4 ORGANOS DE REPRESENTACIÓN

Su órgano de representación y gestión es el comisariado de bienes comunales, que


se rige en los términos que establezcan el estatuto comunal y la costumbre.

12.5 DIVISION DE TIERRAS

El art. 100 del mismo ordenamiento faculta a la comunidad para que esta determine
el uso de sus tierras, su división en distintas porciones según diversas finalidades y
la organización para el aprovechamiento de sus, bienes. La misma comunidad podrá
construir sociedades civiles o mercantiles, asociarse con terceros encargar la
administración o ceder temporalmente el uso y disfrute de sus bienes para su mejor
aprovechamiento de sus bienes. La misma comunidad podrá constituir sociedades
civiles o mercantiles, asociarse con terceros, encargar la administración o ceder
temporalmente el uso y disfrute de sus bienes para su mejor aprovechamiento.

Por otra parte, conforme al art. 101 del ordenamiento que nos ocupa, la comunidad
implica el estado individual de comunero y, en su caso permite a su titular el uso y
disfrute de su parcela y la cesión de sus derechos sobre la misma den favor de sus
familiares y avecinados del lugar, así como el aprovechamiento y beneficio de los
bienes del uso común en los termino que establezca el estatuto comunal. El
beneficiado por la cesión de derechos de un comunero adquirirá la calidad del
comunero.

85
Cuando no exista litigio, se presume como legitima la asignación de parcelas
existentes de hecho en la comunidad.

En los casos en que exista asignación de parcelas individuales, según el art. 102 de
la ley agraria, se presumirán iguales los derechos correspondientes a los comuneros,
mientras no se pruebe o contario.

12.6 CONVERSION DE EJIDO A COMUNIDAD

Los ejidos que decidan adoptar el régimen de comunidad podrán hacerlo mediante
la aprobación de la asamblea general de ejidatarios, cumpliendo con los requisitos
de asistencia y votación previstos en la fracc. IX del art. 23 de la ley agraria. La
asignación parcelaria de los ejidos que opten por la calidad comunal será reconocida
como legitima.

A partir de la inscripción de la resolución respectiva en el registro agrario nacional, el


ejido se tendrá por legalmente transformado en comunidad.

Por su parte, las comunidades que quieran adoptar el régimen ejidal podrán
realizarlo por medio de su asamblea, con los requisitos previstos en los arts. 24 a 28
y 31 de dicha ley, por lo que a partir de la inscripción de la resolución respectiva en
el Registro Agrario Nacional, la comunidad se tendrá por legalmente transformada
en ejido.

Cuando los inconformes con la conversión al régimen ejidal sean como mínimo 20
comuneros, estos podrán mantenerse como comunidad con las tierras que les
correspondan.

Para su administración las comunidades podrán establecer grupos o


subcomunidades con órgano de representación y gestión administrativa, así como
adoptar diversas formas organizativas sin prejuicio de las facultades de los órganos
generales de la asamblea. Esta podrá establecer el régimen de organización interna
de los grupos comunales o subcomunales.

12.7 REGLAMENTACION SOBRE LA PROTECCION DE TIERRAS INDIGENAS

Conforme al art.106 de la ley agraria, las tierras que corresponden a los grupos
indígenas deberán ser protegidas por las autoridades, en los términos de la ley que
reglamente el art.4º. Constitucional y el segundo párrafo de la fracc. VII del art. 27
constitucional. Mediante decreto de 3 de agosto de 2001 se suprimió dicha

86
disposición del art. 4º, y el segundo párrafo de la fracc. VII del art. 27 constitucional.
Mediante decreto del 3 de agosto de 2001 se suprimió dicha disposición del art 4º.
Constitucional y se derogo el 2º. para establecer en él lo relativo a la protección de
los pueblos indígenas.

De acuerdo al actual texto del art 2º, constitucional, los pueblos indígenas tienen
derecho para aplicar sus propios sistemas normativos en la regulación y solución de
sus conflictos internos, pero deben sujetarse a los principios generales de la
constitución, respetando las garantías individuales, los derechos humanos y, de
manera relevante, la dignidad e integridad de las mujeres. Se prevé el
establecimiento de los casos y procedimientos de validación por los jueces o
tribunales correspondientes.

Asimismo, se encuentran facultados para elegir de acuerdo con sus normas,


procedimientos y prácticas tradicionales, a las autoridades o representas para el
ejercicio de sus formas propias de gobierno interno, garantizando la participación de
las mujeres en condiciones de equidad frente a los varones, en un marco que respete
el pacto federal y la soberanía de los estados, así como la preservación de la
integridad de sus tierras en los términos establecidos en la constitución.

Se encuentran facultados los pueblos indígenas para acceder al uso y disfrute


preferentemente de los recursos naturales de los lugares que habitan y ocupan sus
comunidades, ello con respeto a las formas y modalidades de propiedad y tenencia
de la tierra establecida en la constitución y a las leyes de la materia, así como a los
derechos adquiridos por terceros o por integrantes de la comunidad, salvo los
derechos adquiridos por terceros o por integrantes de la comunidad, salvo aquellos
que corresponden a alas áreas estratégicas, en términos de la constitución,
permitiendo a las comunidades para estos efectos asociarse en términos de ley.

También se les garantiza el acceso pleno a la jurisdicción del Estado y, para


garantizar ese derecho, en todos los juicios y procedimientos en que sean parte
individual o colectivamente, se deberán tomar en cuenta sus costumbres y
especificidades culturales, representando los preceptos de la constitución;
asimismo, los indígenas en todo el tiempo gozaran del derecho de ser asistidos por
intérpretes y defensores que conozcan su lengua y cultura”.1

87
LAS COMUNIDADES

RECONOCI EX CLUSION PROTECCI ORGANOS DIVISION CONVERSION


PEQUEÑAS DE EJIDO A
MIENTO PROPIEDADE
ÓN DE DE COMUNIDAD
LEGAL Y S JURIDICA REPRESE TIERRAS
SUS NTACIÓN
EFECTOS

12. 8 DISPOSICIONES COMUNES A LOS EJIDOS Y COMUNIDADES

Son aplicables a las comunidades todas las disposiciones que para los ejidos prevé
la Ley agraria en lo que no contravenga lo dispuesto en su capítulo quinto título
tercero.

Como se advierte, los terrenos comunales están protegidos de manera similar a los
terrenos ejidales de uso común; así, la ley les impone como características ser no
enajenables, imprescriptibles e inembargables, pero señala como salvedad que
pueda transmitirse el uso y aprovechamiento de áreas comunales para el
establecimiento de asociaciones o sociedades civiles y mercantiles, de conformidad
con los dispuesto por el art. 100, en relación al 75 de la ley agraria”.1
CUESTIONARIO

1. Defina comunidad.
2. ¿Mediante que procedimientos se deriva el reconocimiento de comunidad?
3. Explique cuáles son los efectos jurídicos del reconocimiento de la
comunidad
4. ¿Cómo protege la Ley Agraria la propiedad de las comunidades?
5. ¿Cuál es el órgano de representación de la comunidad?
6. Explique en qué consistió el Decreto del 3 de agosto de 2001
7. ¿Cómo protege a las comunidades indígenas el actual art. 2º.
Constitucional?

88
CAPITULO XIII

LOS SUJETOS AGRARIOS INDIVIDUALES

INTRODUCCIÓN

En esta parte de la antología se da a conocer a las personas hombres y mujeres del


territorio nacional que se dediquen al agro y tengan derechos ejidales, así se le
conoce en forma general a los titulare del derecho social, enunciando aquí también
todos sus derechos que tienen a los mismo, de tal forma que al terminar de estudiar
este capítulo el alumno de derecho deberá además de saber quiénes son los sujetos
agrarios individuales, analizar y explicar los requisitos y los procedimientos para
poder adquirir dicha calidad de sujeto agrario, y así también las formas de perderla.

13.1 LOS EJIDATARIOS Y COMUNEROS

“Los sujetos ejidales, del orden individual, según la definición que proporciona el art.
12 de la ley agraria, son todos los hombres y las mujeres titulares de derechos
ejidales.

Corresponde a los titulares o ejidatarios, de conformidad con el art. 14 de la ley


agraria, el derecho de uso y disfrute sobre sus parcelas, los derechos que el
reglamento interno de cada ejido les otorgue sobre las demás tierras ejidales y en
general los que legalmente les pertenezcan.

13.2 LA CAPACIDAD AGRARIA

En cuanto su capacidad legal, la ley no distingue en razón de sexo, religión o estado


civil, pero si en lo que se refiere a la nacionalidad y edad. Así en la fracc. I del art. 15
se establece que para poder adquirir la calidad de ejidatario se requiere ser mexicano
y mayor de edad (además del requisito de ser avecinado del lugar).

13.3 REQUISITOS PARA ADQUIRIR LA CALIDAD DE EJIDATARIO O COMUNERO

En el art. 15, la Ley Agraria prevé los requisitos para adquirir la calidad de ejidatario o
comunero:
89
1. Ser mexicano, mayor de edad o de cualquier edad si tiene familia a su
cargo o se trate de heredero ejidatario
2. Ser avecinado del ejido correspondiente (no es necesario si se trata de
heredero) o cumplir con los requisitos que establezca cada ejido en su
reglamento interno).

13.4 NACIONALIDAD

En lo que se refiere a nacionalidad, la ley agraria no es clara, por lo que puede haber
confusión sobre cómo debe de entenderse: si ha de ser mexicano por nacimiento,
como lo especificaba la derogada Ley federal de reforma agraria o basta que sea
por naturalización. Para resolver el problema debemos recurrir al art.27 de la
constitución política, la cual establece su en su fracc. I que solo los mexicanos por
nacimiento o naturalización tienen capacidad y el derecho para adquirir el dominio
de las tierras y las guías de la nación.

En lo que concierne a la naturalización, el art. 7 de la ley de naturalización establece


que son mexicanos por naturalización: “los extranjeros a quienes de acuerdo con la
presente ley, la secretaria (de relaciones exteriores) otorgue carta de naturalización,
y a la mujer o varón o establezcan su domicilio conyugal dentro del territorio nacional.

13.5 MAYORIA DE EDAD Y REPRESENTACION

La ley agraria dispone que la mayoría de edad sea un requisito necesario para formar
parte de un ejido, excepto en el caso de que el aspirante tenga familia a su cargo o
se trate de heredero de ejidatario.

Ante ello, cabe reflexionar acerca de la minoría de edad en cuanto a la capacidad


para contratar y obligarse. Esta se divide en capacidad de goce y de ejercicio. La
primera no reviste mayor dificultad dado que es la capacidad del goce y de ejercicio.
La primera no reviste mayor dificultad dado que es la capacidad de ser receptor de
derechos; en cambio, la capacidad de ejercicio estriba en la capacidad del individuo
para asumir responsabilidades legales.

Durante la vigencia del código agrario de 1934 ello no representaba ningún problema
por la disposición establecida en su art.140, el cual facultaba al consejo de vigilancia
para que designara persona que en representación del menor de 16 años,
incapacitado para dirigir la explotación, cuidara de la parcela, cuando conforma a la
lista de sucesión de un ejidatario la parcela debiera transmitirse a un impúber.
90
Al no haber disposición al respecto en la actual Ley agraria, cabe analizar si el
ejidatario menor de edad es sujetos de derechos obligaciones y de no ser así, quien
tendría la representación legal. De esto se desprenden dos posibilidades: la primera
es la del menor ejidatario con familia a su cargo, y la segunda, la del menor sin familia
a su cargo, heredero de los derechos ejidales.

En el primer caso encontramos como figura central la emancipación, y el art. 641 del
Código Civil Federal dispone:

El matrimonio del menor de dieciocho años produce de derecho la


emancipación. Aunque el matrimonio se disuelva, el cónyuge emancipado,
que sea menor no recaerá en la patria potestad.

En cuanto a sus bienes, el art. 623 del citado ordenamiento establece:

El emancipado tiene la libre administración de sus bienes, pero siempre


necesita durante su menor edad:
1. De la autorización judicial para la enajenación, gravamen o hipoteca de
bienes raíces;
2. De un tutor para negocios judiciales.

Para el segundo caso, el art.646 del precitado ordenamiento jurídico establece que
la mayoría de edad comienza a los 18 años cumplidos. Entonces, todos aquellos
menores de 18 años herederos de derechos ejidales por disposición del art.15 fracc.
I de la Ley Agraria, de conformidad con el numeral 23 del Código Civil Federal, no
podrán contraer obligaciones directamente: “La minoría de edad, el estado de
interdicción y las demás incapacidades establecidas por la ley son restricciones a la
personalidad jurídica...”

Pero, a su vez, la segunda parte del mismo párrafo establece la manera de poder
contraer obligaciones: “Los incapaces pueden ejercitar sus derechos o contraer
obligaciones por medio de sus representantes”

Ahora bien, en las dos hipótesis los menores deberán ser representados en todo
acto jurídico por un tutor, tutoría que puede ser testamentaria, legitima o dativa de
conformidad con el Titulo Noveno del Código Civil Federal.

91
El procedimiento de nombramiento de tutor, en caso de no existir, habrá de realizarse
en la forma establecida por la ley común y ante la autoridad competente del orden
familiar, porque ante un juicio o tramite agrario el menor no emancipado deberá
comparecer por medio de su tutor, aun cuando lo sea para el reconocimiento de los
derechos agrarios por la vía de sucesión, no obstante estar designado mediante lista
de sucesores. Además, sin tutor no podrá participar ni en la vida productiva
asociativa del ejido ni en las decisiones de las asambleas.

Cuando se trata de un menor sujeto a la patria potestad, quienes la ejercen son los
legítimos representantes de los que están bajo ella y tienen la administración legal
de los bienes que les pertenecen, conforme a la ley.

La patria potestad sobre los hijos, dispone el art. 414 del Código Civil Federal se
ejerce por los padres. Cuando por cualquier otra circunstancia deje de ejercerla
alguno de ellos, corresponderá su ejercicio al otro.

A falta de ambos padres o por cualquier otra circunstancia prevista en ese


ordenamiento, ejercerán la patria potestad sobre los menores los ascendientes en
segundo grado en el orden que determine el juez de lo familiar, tomando en cuenta
las circunstancias del caso.

13.6 AVECINADOS

Por lo que hace al requisito avecindad, el art. 13 de la Ley Agraria define a los
avecinados como “aquellos mexicanos mayores de edad que han residido por un
año o más en las tierras del núcleo de población ejidal y que han sido reconocidos
como tales por la asamblea ejidal o el tribunal agrario competente”1

92
93
LOS SUJETOS AGRARIOS
INDIVIDUALES

LOS REQUISITOS
LA PARA SER
EJIDATARIOS Y
LOS CAPACIDA EJIDATARIO O
COMUNERO
COMUNEROS D AGRARIA

SER MAYOR DE SER


AVECINADO
MEXICANO EDAD
DEL EJIDO

1 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p201

94
CUESTIONARIO

1.- Mencione que es un ejidatario

2.- Enumere los requisitos para ser ejidatario

3.- Mencione las formas para poder adquirir la calidad de ejidatario

4.- ¿Cuándo aplica la prescripción negativa?

5.- mencione las tres formas para perder la calidad de ejidatario

6.- ¿Qué es la enajenación?

7.- Mencione los requisitos para ser ejidatario o comunero CAPITULO XIV

OTRAS FORMAS DE TENENCIA DE LA TIERRA AGRICOLA

INTRODUCCIÓN

En este capítulo se explica cómo distinguir y precisar todos los conceptos que rigen
la propiedad privada, se explica el gran problema de latifundismo, los criterios que
determinan los límites y las calidades de la pequeña propiedad en México. Así como
la venta de los excedentes por virtud a la reforma del artículo 27 de la Constitución
de 1917, se enuncian las condiciones y los requisitos para las sociedades
propietarias de tierras. De igual manera se mencionan los terrenos baldíos y
nacionales, mencionando el procedimiento de deslinde y sobre las colonias agrarias
y ganaderas del país y sus formas de organización.

“Además de las tierras ejidales y comunales ya enumeradas, hay otras formas que
si bien no se encuentran sujetas, en sentido estricto, al régimen de propiedad social,
la legislación agraria las contempla, como es el caso de la pequeña propiedad, los
terrenos baldíos y nacionales y las colonias agrícolas y ganaderas.

14.1 LA PROPEDAD PRIVADA

En su primer párrafo, el art.27 de la Constitución establece que la propiedad de las


tierras y aguas comprendidas dentro de los límites del territorio nacional

100
corresponde originalmente a la nación, la cual tiene el derecho de transmitir el
dominio de ellas a los particulares, constituyendo así la propiedad privada.

La propiedad social es la constituida por la de ejidos y comunidades, y se encuentra


totalmente regulada por el derecho agrario.

La propiedad privada rustica se rige por el derecho civil; en cuanto a los límites de
superficie y fraccionamientos descendentes que constituyan latifundios, la
propiedad privada se regula por la materia agraria.

14.2 LATIFUNDIOS

El termino latifundio proviene de los vocablos latinos latos, “amplio” y fundus,


“fundo”. Significa fundo o terreno amplio o extenso. En México, los latifundios están
prohibidos por disposición de primer párrafo de la fracc. XV del art.27 constitucional.

Por otra parte, si en 1992 se argumentó que debía cancelarse el reparto de tierras
porque ya no las había, entonces tampoco se puede justificar la existencia de
latifundios, por lo que de haberlos debe establecerse un procedimiento para su
reincorporación al dominio de la nación, a fin de que el Estado le dé el destino
correspondiente y así se satisfagan eventuales necesidades agrarias.

14.3 ENAJENACION DE EXCEDENTES Y ORDEN DE PREFERNCIA

Las tierras que excedan de la extensión de la pequeña propiedad individual deberá


fraccionarlas y enajenarlas el propietario; si no lo hiciere, los excedentes serán
enajenados en publica almoneda.

En caso de comprobarse un excedente de la propiedad individual rural se deberá


determinar, en la opinión que al respecto formule la Procuraduría Agraria, la
superficie que presumiblemente rebase los limites; así mismo, deberá ordenarse
que el expediente se remita a la autoridad estatal correspondiente, para que esta

101
aplique el procedimiento previsto ene l art. 124 de la ley (art. 56 del citado
reglamento).

14.4 LA PEQUEÑA PROPIEDAD INDIVIDUAL, LIMITES DE PROPIEDAD Y


CALIDAD DE TIERRAS

La pequeña propiedad individual es la superficie de tierras agrícolas, ganaderas o


forestales cuya propiedad recae en un solo individuo y sin que exceda los límites
permitidos por la ley (art. 115 y 116 de LA)

Se entiende por tierras agrícolas los úselos utilizados para el cultivo de vegetales;
por tierras ganadera, lo suelos empleados para la producción y cría de animales
mediante el uso de su vegetación, sea esta natural o inducida; por último, tierras
forestales son los suelos utilizados para el manejo productivo de bosques y selvas.
Se reputan como agrícolas las tierras rusticas que no estén dedicadas en realidad
a alguna otra actividad económica.

14.5 LA PEQUEÑA PROPIEDAD AGRICOLA

Se considera péquela propiedad agrícola a la superficie de tierras agrícolas de riego


o humanidad de primera que no exceda los siguientes límites o sus equivalentes en
otras clases de tierras:

I. 100 hectáreas si se destina a cultivos distintos de los señalados a


continuación:
II. 150 hectáreas si se destina al cultivo de algodón;
III. 300 hectáreas si se destina al cultivo de plátano, caña de azúcar,
café, henequén, hule, palma, vid, olivo, quina, vainilla, caco, agave,
nopal o árboles frutales. (Art. 117 de LA)

14.6 LA PEQUEÑA PROPIEDAD FORESTAL

Es la superficie de tierras utilizadas para el manejo productivo de bosques, de


cualquier clase, que no exceda de 800 hectáreas. (Art. 119 de la LA)

14.7 SOCIEDADES PROPIETARIAS DE TIERRAS AGRICOLAS,


GANADERAS O FORESTALES

102
Las disposiciones del Título Sexto de la Ley Agraria son aplicables a las sociedades
mercantiles o civiles que tengan en propiedad tierras agrícolas, ganaderas o
forestales. Asimismo, serán aplicables a las sociedades que se constituyan con la
participación de ejidos o comunidades, aportando tierras para la constitución de las
sociedades en los términos de los arts. 75 y 100 de la Ley Agraria, excepto cuando
las sociedades se dediquen a actividades distintas de las agrícolas, ganaderas o
forestales.

Las disposiciones de dicho título se encuentran reguladas por los arts. 125 a 133 de
la Ley Agraria.

14.8 SOCIEDADES MERCANTILES Y CIVILES

Las sociedades mercantiles y civiles propietarias de tierras agrícolas, ganaderas o


forestales, afirma Víctor Aguilar Molina:
Quedan sujetas a las disposiciones de la ley de su fuente, Ley General de
Sociedades Mercantiles, o Coditos Civiles, así como a la Ley Agraria y a la Ley de
Inversión extranjera. Estas sociedades deben considerarse como sociedades de fin
específico, en tanto que es la ley, en este caso la agraria, la que establece
disposiciones relativas al objeto social, a la vigilancia de la sociedad, tenencia
accionaria, respecto de series e acciones, así como derechos especiales en caso
de liquidación dependiendo, del origen de la tierra, si es de uso común o si es de
dominio pleno.

14.9 TERRENOS BALDIOS Y NACIONALES

Recordemos que, conforme al art.27 de la Constitución, la propiedad originaria


corresponde a la nación, que puede transmitirla a los particulares, con las
modalidades que la propia ley le imponga. En tales términos, en el transcurso de los
años esta propiedad de la nación ha venido siendo enajenada a particulares y por
ello, cuando esta no ha salido del dominio de la nación, se entiende que no ha sido
medida ni deslindada; es decir, son terrenos baldíos, por lo que, una vez hecho lo
anterior, los terrenos, previo cerciora miento de que no son propiedad particular, se
declaran terrenos nacionales.

14.9.1 TERRENOS BALDIOS

Los baldíos de conformidad con la Ley Agraria, son los terrenos de la nación que no
han salido de su dominio por título legalmente expedido y que no han sido
deslindados ni medidos.

14.9.2 TERRENOS NACIONALES

103
Los nacionales son los terrenos baldíos deslindados y medidos de acuerdo con los
procedimientos establecidos por la ley, así como aquellos terrenos que recobre la
nación en virtud de nulidad de los títulos que respecto de ellos se hayan otorgado
(art. 158 de la LA).

14.10 LA EXPROPIACION EN MATERIA AGRARIA

CONCEPTO

Expropia consiste en desposeer legalmente de una cosa a su propietario, por


motivos de utilidad pública, mediante una indemnización.

La expropiación, según el Diccionario jurídico, es una facultad del poder público por
lo cual impone a una particular cesión de su propiedad mediante ciertos requisitos,
de los cuales el principal es una indemnización, por razones de utilidad pública, para
realizar obras de interés general o de beneficio social.

Con base en tal definición, expropiar es la privación de los bienes propiedad de una

persona física o moral a favor de una entidad pública, por causa de utilidad colectiva,

mediante el procedimiento previamente establecido por la ley y que realiza la

autoridad correspondiente a cambio de un pago indemnizatorio.”1

CUESTIONARIO

1.-Define la pequeña propiedad

2.- ¿Qué se entiende por tierra agrícola?

3.- ¿A qué se le llama la propiedad forestal?

4.- Da la definición de pequeña propiedad forestal

5.- ¿Quién determina el coeficiente de agostadero?

104
6.- Concepto de terreno baldío

7.- Concepto de terreno nacional

8.- ¿Cuál es la autoridad facultada para enajenar los terrenos nacionales?

1 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p261

CAPITULO XV

EL DERECHO PROCESAL

15.1 EL DERECHO PROCESAL EN EL ENTORNO DE LA CIENCIA JURIDICA

“El proceso o derecho del procedimiento, como también podríamos llamarlo, está
constituido por las reglas que deben garantizar una verdadera igualdad entre los
contendientes y cuya observancia han de cumplir tanto los justiciables como el
propio juzgador.

De acuerdo con el Diccionario jurídico mexicano, el derecho procesal es: “el


conjunto de disposiciones que regulan la sucesión concatenada de los actos
jurídicos realizados por el juez, las partes y otros sujetos procesales, con el objeto
de resolver las controversias que se suscitan con la aplicación de las normas del
derecho sustantivo.

Para Eduardo B. Carlos, el derecho procesal es: “una ciencia que estudia el conjunto
de las normas jurídicas que regulan el proceso por cuyo medio el Estado, ejercitando
la función jurisdiccional, asegura, declara y realiza el derecho”.

15.2 JUSTICIA CONMUTATIVA

Es la relación jurídica entre sujetos iguales. De acuerdo con este principio, la ley no
establece diferencias, tal como sucede en el derecho civil, en el que los
contendientes se encuentran en un plano de igualdad, de igual a igual (aunque en
realidad en muchos casos no lo sean).

15.3 CONCEPTO DE DERECHO PROCESAL AGRARIO

Luis Ponce de León Armenta indica que el derecho procesal agrario “es el sistema
de normas jurídicas, principios y valores que regulan las relaciones humanas que

105
se dan con motivo de la realización de la justicia agraria, la integración de los
órganos y autoridades jurisdiccionales agrarias, su competencia, así como la
actuación de los juzgadores y las partes en la substanciación del proceso.”

A su vez, Gonzalo Armenta Calderón señala que el derecho procesal o adjetivo es


el conjunto de normas jurídicas que regulan el proceso (agrario); mediante el cual
los particulares obtienen los medios jurídicos para ejercitar sus acciones, hacer valer
excepciones y defensas, probar su dicho e impugnar sentencias, resoluciones o
actos de autoridad”1
1 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p337

CUESTIONARIO

1. Defina el derecho procesal en general.


2. ¿Qué es justicia distributiva?
3. ¿Qué es justicia conmutativa?
4. ¿En qué consiste la igualdad por compensación?
5. Defina el derecho procesal agrario.

CAPITULO XVI

LA ADMINISTRACION DE JUSTICIA AGARIA

INTRODUCCIÓN

En el inmenso mundo de la justicia se encuentra el apartado de la administración de


la justicia, y en específico de la justicia agraria en este capítulo se explica para poder
identificar a las instituciones encargadas de la impartición de la justicia en materia
agraria, y se explica a groso modo las facultades de conocimiento que le competen.
Se menciona a los tribunales agrarios como órganos federales que están dotados
de su plena jurisdicción y autonomía, la competencia para no salirse de sus límites,
y de la competencia del tribunal superior agrario; su competencia ordinaria y su
competencia transitoria.

“La palabra jurisdicción proviene del latín iuris, “derecho” y dictio o decire, “decir”, lo
que significa decir el derecho. La noción moderna de jurisdicción nos la da el
procesalista Hugo Alsina, quien la concibe como la potestad conferida por el Estado

106
a determinados órganos para resolver, mediante sentencia, las cuestiones litigiosas
que les sean sometidas y hacer cumplir sus propias resoluciones.

16.1 LOS TRIBUNALES AGRARIOS COMO ORGANOS FEDERALES DOTADOS


DE PLENA JURISDICCION Y AUTONOMIA

El art. 1 de la Ley Orgánica de los Tribunales Agrarios los conceptúa como órganos
federales dotados de plena jurisdicción y autonomía para dictar sus fallos, a los que
corresponde, en los términos de la fracc. XIX del art. 27 de la Constitución Política
de los Estados Unidos Mexicanos, la administración de la justicia agraria en todo el
territorio nacional.

Así como órganos federales, los tribunales agrarios se crearon mediante el decreto
que reformo el art. 27 constitucional, publicado en el Diario Oficial de la Federación
el 6 de enero de 1992. Son parte de la organización política de la administración
pública federal, pero con plena autonomía, entendida esta como la facultad de
gobernarse por sus propias normas, respecto del Ejecutivo y las secretarias de
Estado, con la función específica de impartir justicia en el ámbito social agrario en
todo el territorio nacional.

16.2 LA COMPETENCIA

Dentro de la función jurisdiccional se halla la competencia, como limitación en las


facultades impuestas a los órganos del Estado, sea judicial, administrativa o
legislativa.

En el ámbito jurisdiccional, la competencia la hay en formas diversas; así puede ser


por ámbito federal o local, por materia, instancia o grado, por cuantía o por territorio.

16.3 EL JUICIO AGRARIO

CONCEPTO

De acuerdo con la ley agraria, el juicio agrario es el conjunto de pasos regulados


jurídicamente con el objeto de sustancia, dirimir (averiguar, indagar por medio de
las pruebas) y resolver las controversias que se susciten con motivo de la aplicación
de la legislación agraria.

107
Es necesario destacar que las “controversias” a que se refiere la definición anterior
deben de ser entendidas como un sinónimo littigio.

Carnelutti conceptúa la controversia en su definición de littigio en los siguientes


términos: “Llamo littigio al conflicto de intereses calificado por la pretensión de uno
de los interesados y por la resistencia del otro”.

16.4 LA DEMANDA

De conformidad con el art.170 de la Ley Agraria, el actor puede presentar su


demanda por escrito o por simple comparecencia; en este caso, en su coadyuvancia
la Procuraduría Agraria podrá auxiliarlo en la formulación de la demanda por escrito
y de manera concisa.

Los requisitos de la demanda, en supletoriedad, que establece el art. 167 de la Ley


Agraria, están dispuestos en el Código Federal de Procedimientos Civiles, cuyo art.
322 señala que en la demanda se expresara lo siguiente: el tribunal ante el cual se
promueve; el nombre del actor y el del demandado, con la salvedad de que si se
ignora quién es el propietario o contra el que deba enderezase la demanda, no será
necesario indicar su nombre, sino que bastara con la designación confundible del
inmueble para que tenga por señalado al demandado, y el emplazamiento será
mediante edictos.

108
16.5 LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN PROCESAL

Los medios de comunicación entre el juzgador y los particulares pueden ser por
estrados o de forma personal.

Son por estrados cuando la notificación sea de mero trámite cuando no se


encuentren en los casos señalados por la ley, como aquellos que deban ser
personales.

Las notificaciones serán personales, conforme al art.309 del Código Federal de


Procedimientos Civiles:

I. Para emplazar a juicio al demandado, y en todo caso en que se trate de


la primera notificación en el negocio
II. Cuando dejare de actuare durante más de seis meses, por cualquier
motivo (siempre y cuando no se esté en el caso del art. 190 de la Ley
Agraria); en este caso, si se ignora el domicilio de un aparte, se le ha la
notificación por edictos
III. Cuando el tribunal estime que se trata de un caso urgente, o que, por
alguna circunstancia, deban ser personales, y así lo ordene
expresamente
IV. En todo caso , al procurador de la Republica y agentes del Ministerio
Público Federal, y cuando la ley expresamente lo disponga

La notificación personal comprende las siguientes formas:

• La notificación en estricto sentido, que se limita a dar a conocer una


resolución judicial
• El emplazamiento, que supone la fijación de un plazo para comparecer
(contesta la demanda dentro del plazo).
• La citación, que implica un llamamiento para concurrir a la presencia
judicial en lugar, día y hora determinados (para que se presente en el
término señalado)
• El requerimiento, que contiene una intimación judicial para que una
persona haga o deje de hacer alguna cosa.

16.6 EL PROCEDMINIENTO AGRARIO

Una vez practicado el reemplazamiento, la copia de la demanda se entregara al


demandado o ala apersona con quien se practique dicho emplazamiento.

110
Por su parte, el demandado deberá contestar la demanda a más tardar en la
audiencia; puede realizarlo por escrito o mediante su comparecencia. En este último
caso, el tribunal solicitara a la Procuraduría Agraria que coadyuve en su fórmula por
escrito, lo que deberá ejecutar en forma concisa. En su actuación, dicho organismo
se ha de apegar a los principios de objetividad e imparcialidad.

Sera optativo para las partes acudir asesoradas. En caso de que una de las partes
se encuentre asesorada y la otra no, se suspenderá el procedimiento, y se solicitara
de inmediato los servicios de un defensor de la Procuraduría Agraria, quien, para
enterarse del asunto, gozara de cinco días contados a partir de la fecha en que se
apersone al procedimiento.

Si al ser llamado a contestar la demanda el demandado no está presente y consta


que fue debidamente emplazado, acción que el tribunal debe comprobar con
especial cuidado, continuara la audiencia, y en caso de presentarse durante ella el
demandado, podrá intervenir según el estado en que se halle dicha diligencia y nos
e le admitirá prueba sobre ninguna excepción si no demuestra el impedimento de
caso fortuito o fuerza mayor que le impidió presentarse a contestar la demanda.

Confesada expresamente la demanda en todas sus partes y explicados sus efectos


jurídicos por el magistrado, u cuando la confesión sea verosímil, se encuentre
apoyada en otros elementos de prueba y este apegada a derecho, el tribunal
pronunciara sentencia de inmediato; en caso contrario, continuara con el desahogo
de la audiencia.

Una vez presentada la demanda o realizada la comparecencia, el tribunal del


conocimiento examinara y si hay irregularidades en la misma o se hubiera omitido
en ella alguno de los requisitos previstos legalmente, prevendrá al promovente para
que lo subsane dentro del término de ocho días.

Si el demandado opone reconvención, lo efectuara precisamente al contestar la


demanda y nunca después. El mismo escrito o comparecencia deberá ofrecer las
pruebas que estime pertinentes.

En este caso, se trasladara el actor copia de la reconvención y anexos, para que


esté en condiciones de contestar lo que a su derecho convenga y el tribunal diferirá
la audiencia por un término no mayor de 10 días, excepto cuando el redefiniera la
audiencia por un término no mayor de 10 días, excepto cuando el reconvenido este
de acuerdo en proseguir el desahogo de la misma.
SI al iniciarse la audiencia no está presente el actor pero si el demandado, se
impondrá a aquel una multa equivalente al monto de uno a diez días de salario
mínimo de la zona de que se trate. Si no se ha pagado la multa no se emplazara de
nuevo para el juicio.

111
Si al iniciarse la audiencia no están presentes ni el actor ni el demandado, se tendrá
por no practicado el emplazamiento y podrá ordenarse de nuevo si el actor lo pide.
Lo mismo se observara cuando no concurra el demandado o reo, y en determinados
casos los terceros procesales.

Las partes. Estas son el actor (quien demanda), el demandado o reo, y en


determinados casos los terceros procesales.

Terceros procesales. Sobre estos, el art. 78 del Código Federal de Procedimientos


Civiles regula la figura jurídica del tercero en el proceso, interviniente o tercerista, y
consiste en que cuando un tercero tenga una controversia con una o varias partes
en juico y la sentencia que en este se haya de pronunciar deba influir en dicha
controversia, pueden las partes interesados hacer venir al tercero, siempre que en
el juicio aún no se celebre la audiencia final. Las partes puedan hacer venir al tercero
con interés realizando su petición en la demanda y dentro del mismo por eso
sujetándose a las reglas ordinarias; también puede el tercero realizarlo por si,
formulándola en los mismos términos, con la finalidad, en ambos casos, de que se
resuelva la tercería conjuntamente con la reclamación primitiva, para lo cual se
suspenderá el procedimiento den el juicio inicial hasta que la tercería se encuentre
en el mismo estado. Cabe agregar que si el tercerista se adhiere a una de las partes,
será coadyuvante; si no, será interviniente principal. También puede comparecer
dentro del proceso a deducir sus derechos o bien en la ejecución, como en el caso
que al pretender ejecutar una sentencia resulte que la propiedad corresponde al
tercero, lo que sería la tercería excluyente de dominio.

Litis consorcio. Consiste en la pluralidad de personas que pueden actuar en un


juicio, ya como actores o como demandados. Esta figura jurídica procesal se hallan
en el texto del art. 5 del Código Federal de Procedimientos Civiles, donde se
establece que siempre que una parte, dentro de un juicio, este compuesta de
diversas personas, deberá tener una sola representación, para lo cual nombrara los
interesados un representante común. También indica que si se trata de la actora, el
nombramiento de representante se efectuara en la demanda o en la primera
promoción, sin lo cual no se le dará curso. Si fuera la demandada, el nombramiento
se formulara en un plazo que concluirá a los tres días siguientes al vencimiento del
término del último de los emplazados para contestar la demanda, y cuando la
multiplicada de personas surja en cualquier otro momento del juicio, se nombrara
representante común en el plazo de cinco días a partir del primer ato procesal en
que se tenga conocimiento de esa multiplicidad. SI el nombramiento no lo realizan
los interesados dentro del término correspondiente, lo hará de oficio, el tribunal de
entre los interesados mismo. Por su parte, el representante está obligado a hacer
valer todas las acciones o excepciones comunes a todos los interesados y las
personales de cada uno de ellos; pero si estos no cuidan de darlas a conocer en

112
forma oportuna al representante común tendrá todas las facultades y obligaciones
de un, mandatario judicial.

Cabe destacar que será litis consorcio activo cuando se trate de los actores y litis
consorcio pasivo cuando se refiere a los demandados.

16.7 LOS MEDIOS PROBATORIOS EN MATERIA AGRARIA

La prueba, en general, puede definirse como los actos desarrollados por las partes,
los terceros y el propio juzgador, con el objeto de lograr el cercioramiento judicial
sobre el hecho controvertido cuyo esclarecimiento resulte necesario para la
resolución del conflicto sometido a proceso.

Los principales medios probatorios contemplados por el Código Federal de


Procedimientos Civiles (CFPC), de la aplicación supletoria de la Ley Agraria, son los
siguientes:

1. La confesión
2. Los documentos públicos
3. Los documentos privados
4. Los dictámenes periciales
5. El reconocimiento o inspección judicial
6. Los testigos
7. Las fotografías, escritos y notas taquigráficas y, en general, todos
aquellos elementos aportados por los descubrimientos de la ciencia.
8. Las presunciones”.1

1 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p2341
CUESTIONARIO

1. Mencione el concepto de juicio agrario


2. Explique qué significa controversia como sinónimo de litigio 3.
Enuncie el concepto de derecho procesal agrario
113
4. ¿Qué requisitos debe contener la demanda?
5. Señale las formas que comprenden los medios de comunicación
procesal.
6. Precise que efectos causa el emplazamiento
7. Indique donde se podrá efectuar el emplazamiento

CAPITULO XVII

REGISTRO AGRARIO NACIONAL

INTRODUCCIÓN

Se enuncia y explica las facultades de las autoridades administrativas en materia


agraria, así como sus procedimientos administrativos. La noción jurídica de
autoridad presupone la idea de una potestad o facultad concedida por la ley, que le
otorga poder o la capacidad para modificar una situación jurídica existente. En el
orden jurídico otorga a los individuos investidos como órganos del Estado a quien
se les llama autoridades, los faculta de obligar a los demás mediante actos de

114
coercitividad, propiciando así la posibilidad de imponer la voluntad de uno a la
conducta de los demás. Es entonces cuando los funcionarios públicos están
dotados de autoridad para estar cumpliendo las funciones de regularización de la
propiedad, e intervenir en su caso dependiendo del origen del problema sobre la
planeación y programación y coordinación con las unidades administrativas del
sector agrario. Por lo que hace al Registro Agrario Nacional(RAN), su función es esa
registrar mediante actividades de calificación, inscripción y certificación de los actos
y documentos en los que consten las operaciones relativas a la propiedad ejidal y
comunal.

En esta introducción menciono que para el ejercicio de sus funciones y el despacho


de los asuntos de su competencia debe contar con sus unidades administrativas.

“El Registro Agrario Nacional es la institución encargada de llevar el registro de la


tenencia de la tierra y la seguridad documental derivada de la aplicación de la Ley
Agraria. En él se inscriben los documentos donde constan las operaciones
originales y las modificaciones que sufra la propiedad ejidal y comunal, la inscripción
de las figuras asociativas, así como asistencia técnica y catastral.

A lo largo de su historia, el RAN ha tenido el control de las inscripciones de las


acciones derivadas del reparto agrario, lo mismo que sus efectos en la constitución
de derechos sobre las tierras repartidas, tanto de respecto de los ejidatarios o
comuneros, como de los pequeños propietarios que surgieron a raíz de la
redistribución del territorio que se llevara a cabo con la promulgación de la Ley
Agraria de 1915 y la Constitución de 1917.

De acuerdo a la Ley Agraria, el RAN tiene diversas atribuciones, como la


delimitación y destino de las tierras ejidales y la expedición de certificados de
derechos parcelarios o sobre tierras de uso común, que serán previamente inscritos
en esa institución. De igual forma, de conformidad con el artículo 47, tiene
atribuciones para dar aviso a la Secretaria de la Reforma Agraria sobre la
identificación de titulares de derechos agrarios en una superficie que exceda el 5%
del total del ejido.

A partir de 1997, el RAN es el órgano encargado de velar por la seguridad jurídica


documental de la tenencia de la tierra ejidal y comunal del país, así como
responsable de la operación de programas especiales, como el Programa del Fondo
de Apoyo a Núcleos Agrarios sin Regularizar (FANAR) y el Programa de
Modernización del catastro Rural Nacional, que incluye la modernización del Archivo
General Agrario.

115
Contar con un sistema permanente y actualizado del Catastro Rural de la Propiedad
Social, permitirá garantizar la protección de los derechos de propiedad y alcanzar
plena certeza jurídica en la tenencia de la propiedad social, ya que con la
sistematización y con la vinculación de la información catastral y registral se
dispondría de información certera y específica de la situación jurídica de la
propiedad de la tierra.

Este instrumento fortalecería la transparencia y el acceso a la información pública,


mejorando la calidad del servicio. Al concentrar toda la información de la propiedad
social en una plataforma tecnológica, con datos registrales, catastrales, geográficos,
socio-económicos y ambientales, se podrían realizar consultas de manera ágil y
dinámica.

El presente documento plantea 2 acciones indispensables para garantizar la


actualización permanente del Catastro Nacional: la aprobación de la Junta de
Gobierno del INEGI, de considerar información registral y catastral como de Interés
Nacional, con las implicaciones normativas y tecnológicas que contuviera y la
modificación a la Ley Agraria, con la inclusión de mecanismos de control que den
seguimiento a los límites de la pequeña propiedad, el usufructo de los derechos
parcelarios, y la propiedad de tierras en sociedades agrícolas, ganaderas y
forestales.” 1

“Por lo que hace al Registro Nacional, su reglamento interno, en el art. 3º. Dispone
que con el objeto de lograr el control de la tenencia de la tierra y la seguridad
documentada respecto de los predios rústicos, el Registro tendrá a su cargo las
funciones registral, de asistencia técnica y catastral, de conformidad con lo
dispuesto por la ley y sus reglamentos.

Asimismo, el Registro tendrá a su cargo las funciones de resguardo, acopio, archivo


y análisis documental del sector agrario, necesarias para el conocimiento de los
problemas, la identificación de las acciones y la evaluación de la gestión agraria.

17.1 SECRETARIA DE AGRICULTURA, GANADERIA, PESCA


Y ALIMENTACION

Es una dependencia del Poder Ejecutivo Federal que tiene entre sus objetivos
proporcionar el ejercicio de una política de apoyo que permita producir y aprovechar
mejor las ventajas comparativas de nuestro sector agropecuario, integrar las
actividades del medio rural a las cadenas productivas del resto de la economía y
estimular la colaboración de las organizaciones de productores con programas y

116
proyectos propios, así como con las metas y objetivos propuestos, para el sector
agropecuario, en el Plan Nacional de Desarrollo.

17.2 LA PROCURACION DE JUSTICIA AGRARIA

17.2.1 LA PROCURADURIA AGRARIA COMO INSTITUCION DE ASESORIA Y


PROCURACION DE JUSTICIA

La procuraduría Agraria es el organismo facultado por el art. 27, fracc XIX, de la


Constitución, así como por la Ley Agraria, para que ejerza ante los tribunales la
representación de cada interesado en un juicio.

Según disposición del art. 2º, del Reglamento Interior de la Procuraduría Agraria
(RIPA), la dependencia tiene a su cargo funciones de servicio social, mediante la
defensa de los derechos de los sujetos agrarios y de su asesoramiento, derivado de
la aplicación de la ley.

El art. 1º. Del referido reglamento precisa que los sujetos agrarios son: los ejidos y
comunidades; ejidatarios, comuneros y posesionarios y sus sucesores pequeños
propietarios ; avecinados; jo9rnaleros agrícolas; colonos; poseedores de terrenos
baldíos o nacionales, y campesinos en general.

17.2.2 DE LAS DELEGACIONES

Conforme al art. 29 de su reglamento interior, las delegaciones y residencias, se


establecerán en número, lugar y con la circunscripción territorial que determine el
procurador. Al frente de cada delegación habrá un delegado, quien será auxiliado
para el despacho de los asuntos por los subdelegados, residentes, jefes de
departamento, abogados agrarios, visitadores y demás personal que permita el
presupuesto autorizado”2.

1 Pampillo Baliño, Juan Pablo, Munive Paez, Manuel Alexandro, Derecho Agraria y Desarrollo rural, Editorial Porrúa,
México, 2013 p. 235

2 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, ed. Porrúa, México 2012, p325
CAPITULO XVIII

ANALISIS SINTETICO DE LA REFORMA AGRARIA MEXICANA


117
INTRODUCCION

A grandes rasgos se puede decir que en este tema se trata de los logros de la
reforma agraria desde sus inicios y sus grandes y fallidos logros también, de que las
leyes son creadas y estipuladas de una manera, pero que en la realidad son
tristemente otra. Pues los beneficios de esta reforma agraria siempre es la de
mantener en orden y lograr una mejor distribución de la tierra, y de comercializar los
productos de la misma obteniendo mejores mercados y llegar a niveles más altos
en la producción agraria, en resumen fue: El reparto de la tierras legalmente
afectables; el apoyo a la producción mediante una infraestructura
económicoproductiva y una infraestructura de bienestar social rural.

18.1 OBSERVACIONES PREELIMINARES

“Si ya históricamente hemos visto que el Derecho Agrario comprende el estudio del
régimen de explotación, después de las reformas constitucionales al Artículo 27,
fechadas del 2 de febrero de 1983, en sus fracciones XIX y XX, vino a clarificarse
que desde el pináculo del rango constitucional, y desde sus orígenes, la Reforma
Agraria Integral era todo un proceso y que sus normas e instituciones deben
interpretarse dentro de este contexto general.

A esta altura del capitulado desarrollado en este libro, podemos observar que desde
el principio la Reforma Agraria se desenvolvió, junto con el proyecto de desarrollo
nacional, y solo como parte de uno mismo, etapa por etapa, cultivo por cultivo,
región por región, acción agraria tras acción agraria, apoyo tras apoyo, servicio tras
servicio, etc.; hasta desembocar en la etapa contemporánea de la organización
productiva, de la protección a la organización productiva, de la protección a los
productos básicos y en la organización de cada vez mayor de los productores
rurales e implicada en el abasto popular y, por último en la política internacional.
Todo este vasto proceso parte desde la frase inicial del Artículo 27 constitucional
que dispone que “la Nación tendrá en todo el tiempo el derecho de… regular el
aprovechamiento de los elementos susceptibles de apropiación, para hacer una
distribución equitativa de la riqueza pública y para cuidar de su conservación.

A muy grandes rasgos podríamos decir que la Reforma Agraria de 1915 y 1917
cubriendo las necesidades más inmediatas y urgentes posteriores a la Revolución
de 1910, que fue la del reparto agrario. Esta etapa comprende un periodo que

118
abarca de 1915 a 1970, y este gran periodo otras subetapas como fueron aquella
en que se fijaron los lineamientos jurídicos fundamentales del ejido como institución
predominante del campo mexicano, tarea que ocupó una era que va desde 1915 a
1934, fecha del primer Código Agrario que subsumió duchos lineamientos
dispersos; después de esa fecha, comenzó la etapa consolidada del gran reparto
agrario con Lázaro Cárdenas, era que se extendió en cifras de magna consideración
hasta finales del sexenio del licenciado Gustavo Díaz Ordaz, en 1970.

La ley de la Reforma Agraria de 1971, abrió otra etapa de la Reforma Agraria al


incluir un nuevo capítulo sobre organización agraria; desde entonces, en la historia
rural hasta finales del siglo XX, reciente se observó la búsqueda de las formas
organizativas para campesinos; así como en 1915 se inició la búsqueda de los
lineamientos jurídicos de los derechos agrarios. Dicho en otras palabras, el acento
de la Reforma Agraria se transfirió del reparto agrario a la organización rural.

En esta búsqueda, desde 1970se ha caminado un trecho que también nos condujo
a calificar de integral a la organización rural y a consagrar dicho calificativo en la
Constitución, pues se vio que no solo era organizar a los campesinos en formas
societarias adecuadas, sino también organizarlos para la comercialización, el
almacenaje, el transporte, los precios-salarios, los insumos, el señalamiento de
productos básicos, etc., hasta que por fin se llegó a la estructuración de un
Programa Nacional de Alimentación, con un subprograma de Abasto Popular.

En síntesis, podríamos decir que el proceso de la Reforma Agraria Integral fue


comprendido sucesivamente:

I. El reparto de la tierras legalmente afectables;


II. El apoyo a la producción mediante una infraestructura económico-
productiva y una infraestructura de bienestar social rural, y III.
El apoyo al desarrollo integral, desde:
1. La organización productiva de los campesinos y de los productos;
2. La comercialización, el transporte y el almacenamiento; hasta
3. La distribución y el abasto popular nacional;
4. La comercialización internacional de los productos agropecuarios y
forestales.

La fase marcada como numero I relativo al reparto de la tierra hemos tratado ya en


páginas anteriores; en especial nos remitimos a la edición VI de este libro titulado
entonces, el Derecho Procesal Social Agrario y su Procedimiento, capítulo relativo
al procedimiento dotatorio, en donde citamos el Acuerdo del 26 de enero de 1916
que expresamente señaló que la “aplicación de la Ley del 6 de enero de 1915 se

120
encuentra en su primera fase” ; razón por la cual, desde el inicio de la Reforma
Agraria mexicana siempre se le llamó a la etapa del reparto agrario, la primera fase
de dicha Reforma.

Por tanto, dedicaremos este capítulo a tratar sobre la estructura de apoyo a la


organización productiva y al desarrollo y los Ordenamientos Legales que rigen estas
actividades.

En relación al punto marcado como II, señalaremos que, la producción rural debe
apoyarse en:

1. Una INFRAESTRUCTURA DE BIENESTAR SOCIAL RURAL, que contribuya


al arraigamiento del campesino y a su incorporación al proceso de desarrollo
nacional, como son:
a) La educación rural, agrícola y técnicas agropecuarias y
forestales, así como la investigación científica sobre esos
temas;
b) La atención médica social rural con sus correspondientes
centros hospitalarios generales y especializados;
c) Una política poblacional rural, con programas específicos de
arraigamiento, movilidad rural y planeación familiar;
d) De vivienda rural, establecimiento y mejoramiento
e) De agua potable;
f) De electrificación rural;
g) De letrinización y alcantarillado rural,
h) De servicios generales en los pueblos rurales;
i) De programas de huertos familiares, para la unidad agrícola,
industrial de la mujer y de la juventud y para parcelas escolares;
j) De productividad con estímulos,
k) De comercialización y trueque de productos;
l) De distribución de productos agropecuarios, con programa de
almacenes convenientemente ubicados; y de transportación
rural; etc.

2. Una INFRAESTRUCTURA PRODUCTIVA ECONÓMICA que incluye:


a) El aprovechamiento de los recursos hidráulicos y el total
aprovechamiento de las aguas;
b) Caminos rurales y caminos de producción rural;
c) Crédito rural suficiente, honesto y oportuno;
d) Desmontes mancomunados a la conservación ecológica;

121
e) Semillas mejoradas;
f) Aseguramientos rurales que cubran el proceso total de la
producción;
g) Fertilizantes suficientes;
h) Sanidad fitopecuaria; y control de plagas;
i) Régimen fiscal rural;
j) Servicios de asistencia técnica agrícolas, ganaderos,
forestales, de sanidad y varios, suficientes, como son los
campos experimentales, los servicios meteorológicos, etc.;
k) La organización adecuada en tiempos y gastos de insumos
para fijar una política satisfactoria de precios a los productos
campesinos.
l) Señalamiento de zonas de conservación ecológica. En relación
al punto III relativo a los apoyos para el desarrollo rural integral,
podemos observar en relación a:
1. La organización productiva de los campesinos y de sus productos, lo
siguiente:
a) Qué hay organización no básica;
b) Para exportación; y
c) Organización básica. Dentro de ésta área se
comprenden:
1. Medidas de organización básica:
a) Regularización de la tenencia de la tierra;
b) Documentación básica: de resoluciones presidenciales;
plano proyecto aprobado; y censo actualizado;
c) Cambios actualizados de autoridades ejidales;
d) Estudios socioeconómicos y sociogramas para detectar
líderes y necesidades;
e) Organización de asambleas;
f) Organización del Reglamento Interno.
1. La necesidad de establecer formas organizativas como las siguientes:
a) Las sociedades civiles mercantiles a que se refieren los
artículos 75, 100 y 23 fracc. IX de la Ley Agraria-92.
b) Las uniones de ejidos y de comunidades agrarias que se
especifican en los artículos 108 y 109 de la Ley Agrsria-
92.
c) Las asociaciones rurales de interés colectivo
mencionadas en los artículos 110 y 92 de la Ley Agraria-
92.

122
d) Las sociedades de producción rural señaladas por los
artículos 11 y 113 de la Ley Agraria-92.

Hasta 1992 se le dio mucha importancia a un Plan nacional de Alimentación y un


complejo sistema de Abasto Nacional básico que implicó muy diversas actividades
que iban desde la producción de determinado bien agropecuario o forestal, hasta
sus financiamientos, transporte, almacenaje y acopio; la comercialización,
información de mercadeo; y sobre todo, la planeación de la alimentación nacional
para diseñar satisfacción con eficacia y distribución y precios con equidad.

18.2 TRATADO DE LIBRE COMERCIO DE AMERICA DEL NORTE

(E.U.A., CANADÁ Y E.U.M., 1994.)

A partir de la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos
de América, Canadá y los Estados Unidos Mexicanos el 1º de enero de 1994, la
producción agropecuaria y forestal de nuestro país también se ha enfocado hacia
su comercialización internacional y la producción para la exportación.

En el punto relativo a la agricultura se elaboró una síntesis del programa de


liberación comercial del que citamos lo siguiente:

(Acordada por los tres Gobiernos participantes)

“Se reconocen las asimetrías entre los países y se brindarán plazos adecuados a
las características de las distintas ramas del sector.

“Estados Unidos de América y Canadá desgravarán de inmediato productos que


representan el 51 y 88%, respectivamente de las exportaciones mexicanas a esos
mercados.

“México sólo desgravará de inmediato fracciones que comprenden el 36 y 47% de


las importaciones provenientes de E.U.A., y Canadá respectivamente.

“el 60% de las importaciones provenientes de E.U.A, serán desgravadas en 10 y 15


años. El maíz, el frijol. La leche en polvo y algunos productos forestales estarán
sujetos al plazo más largo de desgravación, 15 años.

Se reconoce explícitamente el derecho del Gobierno mexicano para respaldar al


campo a través del desarrollo de la infraestructura, así como programas sanitarios,
fitosanitarios, de asistencia técnica y de investigación dirigida, entre otros.

123
México podrá introducir un sistema de pagos directos que sustituya la producción
comercial.
Se establecerán disciplinas estrictas para la aplicación de subsidios a la producción
“1
1 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, editorial Porrúa, 19ª edición, segunda reimpresión, México 2012,
p391

CUESTIONARIO

1.- Menciona algunos logros de la Reforma Agraria

2.- ¿En qué debe apoyarse la producción rural, según el ordenamiento legal en su
punto II?

3.- Menciona 3 medidas de organización básica de la Reforma Agraria

CAPITULO XIX

DERECHOS AGRARIOS FUNDAMENTALES Y PRINCIPIOS GENERALES DE


DERECHO APLICABLES AL CAMPO MEXICANO

19.1DUALIDAD DE SISTEMAS DE PROPIEDAD, PRIVADA Y COMUNITARIA EN


LA TENENCIA DE LA TIERRA

“Históricamente, la lucha entre los sistemas de explotación colectiva de la tierra y


los sistemas basados en el derecho de propiedad, provenientes del derecho
Romano con sus características esenciales de uso, disfrute y disposición, se
remontan a nuestro nacimiento como Nación. Muy recién lograda la pacificación de
las tribus indígenas del Altiplano, se manifestó el afán de la Corona por ordenar la
convivencia entre las comunidades nativas y los colonizadores europeos. Las leyes
de Indias y sus instituciones como las Mercedes Reales y Virreinales, los
Mayorazgos, las Cofradías, etc., trataron de reconocer, delimitar y proteger la
propiedad comunal.

Ambas figuras jurídicas, las relativas a la propiedad privada y a la de la propiedad


comunal, convinieron, no sin tensiones, hasta mediados del siglo XIX, cuando las
leyes de Reforma, la Desamortización de Bienes de la Iglesia y de Instituciones y la
Constitución del 57, en la práctica afectaron la propiedad comunal y promovieron su
privatización junto con las propiedades del clero.

124
La Revolución institucionalizada, sobre todo a partir del sexenio del Gral. Cárdenas,
privilegió al reparto agrario más inspirado en criterios sociales, (Ejidos y
comunidades) que en la propiedad personal y familiar, manteniéndose sobre el
primer tipo de tenencia, (denominada social), hasta el día de hoy, una serie de
limitantes, como las de ser mera posesión de sus titulares, con solo derecho al uso
y al disfrute, sin llegar a ser “dominio pleno” o sea propiedad completa, resultando
por tanto inembargable, inalienable, ingravable e imprescriptible, ( como su modelo
del Medievo español), amén a sujetar al ejidatario y al comunero a órganos de
decisión y administración colectiva , como asambleas, comisariados ejidales y
comunales, comités, grupos de trabajo, etc., con elevada dependencia de éstos
órganos de gobierno colectivo, así como a entidades oficiales de supervisión, como
la Secretaría de la Reforma agraria.

Esta dualidad de sistemas de propiedad rural en México, se ha vivido con singular


pasión en nuestra historia, especialmente y como dije a partir del sexenio del general
Lázaro Cárdenas, no ajena en muchos casos a violencia también a derramamiento
de sangre; por una parte, los ejidatarios y comuneros, o quienes pretendían serlo y
que, ya durante la vigencia de la Constitución de 1917, entablaban una acción
agraria ante el gobierno y sus instituciones agrarias para obtener que se les
restituyera o dotara de ejidos, se les reconocieran y confirmaran posesiones
anteriores, se ampliaran éstos, o se crearan nuevos centros de población con
nuevas tierras ejidales por lejos que estuvieran, cuando se agotaron las tierras
cercanas a sus lugares de origen; por la otra, los propietarios de tierras privadas,
que defendían sus terrenos, primeramente en la vida jurídica, pero, en ocasiones,
también en las vías de hecho. Por último tenemos las tenciones y gravísimos
problemas entre generados por los ejidos entre sí, por existir en la realidad ejidos
superpuestos con otros, por los ejidos contra las comunidades o por ejidatarios
contra comuneros o por ejidatarios o por comuneros entre sí, en demanda y en
defensa de sus respectivas tierras, o de los terrenos que pretendían les
pertenecieran, que fueron y siguen siendo aún en ocasiones, fuentes de discordias,
de disputas y, también, de gravísimos actos de violencia.”

19.2 EFECTOS DE LA DUALIDAD DE LA TENENCIA DE LA TIERRA EN EL


FINANCIAMIENTO

Otro tema bien conocido es la falta de financiamiento en general al sector


agropecuario, y muy particularmente, a la propiedad social del mismo sector.

El sector agropecuario en su conjunto, recibe cerca del 2% del financiamiento total


del país. Sólo que esos créditos van a dar a la propiedad privada agropecuaria y
agroindustrial, que tiene los bienes reales necesarios para garantizar a las
instituciones financieras el cobro de sus créditos, mientras que el financiamiento de

125
las instituciones del sector bancario a los ejidos y a las comunidades y
específicamente a los ejidatarios y comuneros, es, en los hechos, nula.

Resulta que pues más de la mitad del territorio nacional, no es sujeto de crédito, ni
puede ser otorgado en garantía, problema enorme que no ha sido debidamente
dimensionado en el conjunto del país.

Como una hipótesis de trabajo para dimensionar la enorme magnitud de lo que


significaría un correcto financiamiento al sector social, supongamos que siendo ya
propiedad privada y en consecuencia garantía real, se financiara con dos mil pesos
promedio por hectárea en un año, 106,000,000 de hectáreas ejidales y comunales
del país: nos arrojaría un financiamiento total de $212´000,000,000 doscientos doce
mil millones de pesos, como palanca básica de una producción proporcional a ese
financiamiento. Eso, contra hoy, prácticamente nada.

Sinceramente hay que replantearnos estas realidades para tomar decisiones a


fondo que alivien la pobreza, la falta de producción y las carencias del campo, como
condición previa a una producción nacional cada vez más urgente en un mundo que
agota sus encarecidos productos agropecuarios.

19.3 LA DUALIDAD EN LA TENECIA DELA TIERRA Y LA INVERSIÓN

Dentro del entorno de economía de mercado del que hemos hecho referencia,
también se dan diferencias fundamentales en cuanto se hace a la inversión aplicada
al sistema de tenencia de la tierra privado y social.

En efecto; cualquier inversionista, independientemente del monto de sus


inversiones, pretende, dentro de los riesgos propios de la inversión, tener el máximo
de seguridades en razón de la recuperación de la misma.

Si se invierte, digamos, en un edificio en una ciudad, se tendrá especial cuidado


primero en que el terreno sobre el que se construye, no tenga gravámenes, etc.,
solo entonces, se aportará la inversión.

De aquí que en nuestra realidad, se dé un porcentaje inmensamente mayoritario de


inversiones en tierras de propiedad privada y un mínimum minimorum de tales
inversiones de tierras de propiedad social encontrándonos de nuevo con el mismo
problema original, la mera tenencia de la tierra en posesión, de la propiedad social,
no es garantía de recuperación de la inversión que sobre ellas se realice.

126
19.4 EFECTOS DE LA DUALIDAD EN LA TENENCIA DE LA TIERRA EN LOS
VALORES DE LA MISMA

En primer término, el predio en propiedad privada. Se encuentra sujeto, en lo


jurídico, la legislación civil, y, en lo aplicable, a la mercantil. El predio se encuentra
en el mercado y sujeto a las leyes del mismo. Puede ofrecerse y enajenarse
libremente y, su valor o precio, está sujeto precisamente al mercado de tierras del
lugar, y, también, sujeto a la ley de la oferta y la demanda.

Otra cosa muy distinta resulta para el predio ejidal o comunal, aunque sean vecinos
o colindantes.

En primer lugar, estos bienes se encuentran en el mercado. Su enajenación o venta,


se encuentran expresamente prohibidas en nuestra legislación. En consecuencia,
si se enajenan, tal operación es ilegal y nula. Y, además, para ejercer sobre tal
operación la acción de la nulidad, la Ley Agraria no marca término alguno, por lo
que esa acción, viene siendo eterna. Y el riego igual.
En consecuencia, no se puede vender en el mercado este predio, por lo que siendo
su operación de venta, por así llamarla, ilegal, prohibida expresamente por la ley
aplicable, el comprador sabrá que está comprando un enorme riesgo; que no es
válido el contrato correspondiente, que es eminentemente nulo.

En consecuencia nos encontramos como siempre con la gran injusticia jurídica y


económica estructural, de que más de la mitad del territorio nacional, se encuentra
enormemente subvaluado, además de que también cualquier operación de
enajenación sobre la misma y es ilegal y nula.

Esos son algunos efectos de la dualidad de la tenencia de la tierra en cuanto hace


a sus valores. Las tierras de los que menos tienen en el campo mexicano, son las
que menos valen, en un gran círculo vicioso que afectan, injustamente, a millones
de titulares de las tierras de propiedad social.

19.5 EFECTOS DE LA DUALIDAD DE LA TENENCIA DE LA TIERRA EN LA


PRODUCCIÓN AGROPECUARIA.

Tenemos producción agropecuaria y específicamente agrícola, en los dos sistemas


de tenencia de la tierra; y aquí también tenemos grandes diferencias a las que
sustancialmente me quiero referir.

127
Por una parte, en la propiedad privada, tenemos tanto las tierras, como los recursos
económicos, financieros, técnicos, de maquinaria agrícola, de fertilizantes, de
insumos, etc., necesarios de acuerdo a los diferentes tipos de tierra, e igualmente
se cuenta con criterios de tipo empresarial de los propietarios, en donde se advierte
la relación inversión-retorno, necesidad de alta producción, la propiedad, la siembra
de productos con mejor mercado, la exportación de productos de calidad, etc. En
algunas zonas del país y en cuanto hace a la producción, a la productividad, al
retorno de capitales, a la calidad de productos, a la exportación, a la búsqueda y
retención de los mejores mercados, etc., no tenemos nada que envidiar a los
mejores productores agrícolas a nivel mundial.

Encontramos por tanto una diferencia a veces abismal, entre la producción del
campo de propiedad privada en nuestro país, muchas de ellas a los mejores niveles
del mundo, con la producción de los ejidos y comunidades, sumamente atrasada y
sus recursos ni económicos, ni técnicos y sin criterio empresarial, muy baja, de no
buena calidad sin concurrir al mercado y básicamente de autoconsumo.
Y en ese tenor de producción, México tiene más de la mitad de su territorio, en sus
tierras que explotables agrícola, pecuaria y forestalmente.

Tenemos que ir a fondo para corregir esos enormes desniveles que afectan
estructuralmente alrededor de 5, 700,000 ejidatarios y comuneros en el país, para
modernizar las estructuras jurídicas, económicas, sociales, de los titulares de la
propiedad social.

19.6 LA DUALIDAD EN LA TENENCIA DE LA TIERRA Y SUS EFECTOS EN EL


PATRIMONIO DE LOS TITULARES DE LA PROPIEDAD SOCIAL

Si analizamos someramente las dos realidades que conviven en nuestro país, la


propiedad privada y la propiedad social en relación con el patrimonio que una y otra
generan para sus titulares, nos llevaremos una ingrata sorpresa.

Los propietarios privados, siempre cuentan con un patrimonio: mayor o menor,


apoyado en créditos o libre de gravámenes pero cuentan, siempre, repito, con un
patrimonio para ellos y para sus familiares.

En el caso de los ejidatarios y de los comuneros, nos encontramos con que más del
60% de ellos, simplemente carecen de patrimonio, ni para ellos ni para sus
familiares. Y el porcentaje que si cuenta con el patrimonio, se da porque tienen en
propiedad u otras tierras, o vehículos, o una tiendita o cualquier otro bien susceptible
de ser propiedad privada.

128
Podemos decir, por tanto, que la propiedad social en sí, no otorga un patrimonio a
sus titulares; y que cuando un porcentaje menor de éstos obtiene un patrimonio, es
que de alguna manera pudo tener acceso a la propiedad privada de bienes muebles
o inmuebles, ajenos, siempre, a sus parcelas ejidales o comunales.

19.7 LA ORGANIZACIÓN DE LOS PRODUCTORES SOCIALES EN EL SISTEMA


DUAL DE TENECIA

A mi juicio, al tener un sistema dual de tenencia de la tierra se impone una barrera


a la organización de los productores, pues es muy difícil la asociación entre un
ejidatario y un pequeño propietario, o con un inversionista externo al medio
agropecuario porque la asociación se da entre semejantes, entre pares y aquí en
México, las condiciones de uno y otro, son esencial y legalmente diferentes; por
ejemplo: en su capacidad de obligarse frente a terceros y de tomar decisiones en
forma ágil y con seguridad económica y jurídica para todas las partes.

129
Al día de hoy, no sabemos a ciencia cierta si el ejido es una forma de tenencia o una
figura asociativa. En el primer caso, sus facultades de dominio están restringidas y,
en el otro, sus mecanismos de gobernabilidad y toma de decisiones son poco
prácticos para desempeñarse con eficiencia en la parte productiva o comercial.

19.8 LA DUALIDAD EN LA TENENCIA DE LA TIERRA Y SUS EFECTOS EN LA


CONSERVACIÓN DEL MEDIO AMBIENTE

Dada la dificultad para obtener financiamiento y para tomar decisiones en el largo


plazo, es difícil que un ejidatario en lo individual, o un ejido como unidad jurídica,
comprometa recursos en mejoras territoriales, ya que no tiene manera de
capitalizarlas en el futuro, reflejándolas en el valor de venta de los inmuebles. Por
ser tan limitada su capacidad de ahorro, es tan común que este universo de
productores este continuamente recurriendo al gobierno para la construcción,
operación y mantenimiento de su infraestructura física, como nivelaciones,
canalizaciones, drenajes, caminos, obras de mantenimiento de suelo, control de
avenidas, control de erosión, etc.

Tanto en este caso como los anteriores, estoy partiendo de un principio indeclinable
y aplicable universalmente: el del absoluto respeto a la libertad a la libertad y a la
dignidad individual de toda persona en nuestro territorio patrio, mismo principio que
no autoriza a nadie tampoco a restringir o a limitar los derechos de más de cinco
millones de ejidatarios y de comuneros y que nos mueve a velar con un verdadero
acto de justicia social, económica , histórica y política, por nivelar la situación de
esos millones y millones de mexicanos, a fin de que encuentren en su camino y en
su destino las posibilidades reales de salir de su pobreza y de su postración, a las
que hasta hoy injustamente a mi entender, se le ha relegado, accediendo a la
hoguera y a la prosperidad de las que ahora carecen.

19.9 LA DUALIDAD EN LA TENENCIA DE LA TIERRA Y EL EMPLEO

En caso de la propiedad social con la estructura del minifundio, con baja


productividad, sin rentabilidad real, sin financiamiento, sin patrimonio, sin ahorro, sin
criterio empresarial, con producción básicamente de auto-consumo, nos
encontramos con que en la gran mayoría de los casos es el titular de la parcela
ejidal, con la ayuda de los miembros de su familia, quien ejecuta todas las labores
de explotación de su parcela
Por otra parte, nos encontramos con aquellos predios rústicos de propiedad privada,
cuando sus tamaños son suficientemente grandes para que se requiera una mano
de obra más allá de la del propietario y su familia, cuando, como en tantos casos
cuentan con financiamiento, técnica, insumos, fertilizantes, etc. Y el manejo de esas

130
propiedades se da con criterio empresarial, si requieren de ayuda y mano de obra
ajena, creándose fuentes de trabajo y empleos, que mucho ayudan en sus
respectivas zonas y, en ocasiones, incluso provocan que campesinos de zonas
lejanas, vayan a trabajar en las épocas de cosecha a sus predios.

19.10 LA DUALIDAD DE LOS SITEMAS DE TENENCIA DE LA TIERRA Y LA VIDA


INSTITUCIONAL DEL PAIS

Con frecuencia, las autoridades ejidales se muestran ignorantes e incapaces de


hacer cumplir reglamentos de construcción, vocación o uso de suelo, con el
consiguiente efecto en la planeación y desarrollo armonioso del territorio.

Tema ancestral es también la dependencia de estados y municipios con respecto a


la federación en materia económica. El proceso impositivo en México está
fuertemente centralizado a nivel federal y, de éste, se desprenden recursos
económicos hacia abajo, a través de las participaciones a las órdenes inferiores de
gobierno.

En la práctica los ayuntamientos acaban gobernando los centros urbanos y dejando


a la federación la parte no urbana de sus jurisdicciones. Además, de la mencionada
escases de recursos materiales, la legislación que regula la tierra, el agua, los
bosques, los recursos naturales, el medio ambiente es de índole federal (Ley
Agraria, Federal de Aguas, Forestal, Minería, hidrocarburos, etc.), originándose en
ocasiones conflictos entre las jurisdicciones federales, estatales y municipales y
también con la realidad práctica.

Por ello, decir que más de la mitad del territorio nacional, que es de propiedad social
es la que se encuentra inmovilizada no corresponde plenamente a la realidad, pues
un elevado porcentaje de predios privados, rústicos o urbanos, también enfrenta
serios limitantes en su ordenamiento, por los elevados costos de transacción que
impone el estado a sus propietarios y poseedores.

19.11 LA LEY AGRARIA VIGENTE DESDE 1992

“El 26 de febrero de 1992 se publicó, en el Diario Oficial de la Federación, una nueva


Ley Agraria que vino a substituir casi totalmente a la anterior Ley Federal de
Reforma Agraria.
Este nuevo cuerpo normativo reconoce que los núcleos de población tienen
personalidad jurídica y patrimonios propios, así como el de que son los propietarios
absolutos de las tierras que le han sido dotadas.

Como se puede inferir de lo señalado arriba, una cuestión medular, es la


clasificación de las tierras ejidales las que, por su destino, se dividen en las de

131
asentamiento humano son inalienables, imprescriptible e inembargables, sin
embargo, una vez que la asamblea asigne solares individuales en presencia de un
representante de la Procuraduría Agraria, e inscriba el acta respectiva en el registro
Agrario nacional, constituirán títulos oficiales y serán de propiedad plena de sus
titulares, los que se regularán entonces por el Derecho Común.

En cuanto a los derechos parcelarios que tienen los titulares agrarios, una vez que
hayan sido asignadas las parcelas por la asamblea, consiste únicamente en el uso
y usufructo personal por parte de sus titulares, o su explotación a través de terceras
personas sean del núcleo o ajenos a él, mediante contratos de asociación o
aprovechamiento o en plazos no mayores a treinta años. En cuanto a lo que se
refiere a la propiedad de las parcelas, como ya se había señalado, se puede adquirir
por los titulares, siempre y cuando se tome la resolución por la asamblea
extraordinaria de características especiales y, que de conformidad con el actual
contexto legal, trámite que puede llegarse a tardar un tiempo aproximado de cuatro
años y medio.

En cuanto a las tierras de uso común son aquellas que no son de asentamientos
humanos ni parceladas, mismas que, la ley no deja lugar a dudas, son inalienables,
imprescriptibles e inembargables salvo que se aporten a sociedades mercantiles en
proyectos productivos por parte de la asamblea ejidal.

19.12 LA POBREZA COMO CAUSA DE DISCRIMINACIÓN SOCIAL

19.12.1 LA POBREZA EN MEXICO

Hay temas de profunda injusticia e inequidad, como son las desequilibradas leyes
fiscales, la economía informal, el contrabando y otras cuestiones similares que son
reflejo de nuestro atraso en el mundo jurídico. Por otra parte, existe un tema de gran
urgencia, que es el de la seguridad pública, tema que se entila por todos a todas
horas; basta ver los noticieros, oír a políticos y organizaciones sociales de todo tipo,
reuniones y charlas de café, todas éstas señalan diariamente lo urgente de su
atención, así como la gravedad de su desatención. Muertos, secuestros, delitos
contra la integridad física de los habitantes con todos los grados de crueldad que es
imaginable y no imaginable. Por estos temas, podrían no ser de la mayor
trascendencia (aunque sean de la mayor urgencia), pues resolviéndolos no
necesariamente mejorarán sustancialmente el nivel jurídico y/o económico de éste
país. Sin querer ahondar en estas materias, se podría señalar que su carácter se
limita exclusivamente a cuestiones operativas de políticas públicas.

132
Una de las principales formas en que se patentiza la pobreza en México, sobre todo
en las zonas rurales, es la miseria de la gente del campo. Sus padecimientos
económicos son indescriptibles y solamente viendo tales carencias se puede
entender que hay algo que no está bien en el país. Sus padecimientos económicos
son indescriptibles y solamente viendo tales carencias se puede entender que hay
algo que no está bien en el país. Basta con salir a cualquier población pequeña en
cualquier lado del territorio nacional para poder constatar esta circunstancia (…)
niños con hambre, sin bañar, probablemente, en años, pésimamente alimentados,
sin casa, durmiendo bajo árboles, mezquites, o jacales que pocamente cubren del
calor, frío, lluvias o tempestades, (…) todas estas carencias y la falta de todos los
factores que permiten tener algo de dignidad son los principales lastres del país.

Debido a la pobreza no es difícil entender por qué las más de las gentes que habitan
en México buscan irse a los Estados Unidos de Norteamérica, siendo éste otro de
los efectos más vergonzosos e indignos que se tiene de la miseria. La emigración
que los estudiosos no quieren analizar ni las autoridades relacionar con la pobreza,
principalmente en el medio rural, es algo similar al “ dont´t ask, dont’t tell”
norteamericano- que hoy por hoy está muy en boga en aquel país por la política
militar respecto de las preferencias sexuales de los militares _ pero que, en el caso
de México respecto de la miseria de la población, es una de las peores
consecuencias de nuestras defectuosas leyes tanto agrarias como económicas,
pues refleja las más sorda y ciega dela injusticias sociales y económicas que impera
en este país, como es la expulsión del país de millones de connacionales por causa
de hambre y falta de oportunidades. El caminar cientos kilómetros por desiertos y
zonas áridas agrestes, arriesgando la vida por razones naturales y policiacas o
militares, con motivo de leyes antiinmigrantes de los Estados Unidos, además del
ahora riesgo que tienen los migrantes con los grupos de delincuencia organizada a
lo largo de toda la frontera, son cuestiones que son absolutamente indígenas y que
no hay nada que pueda justificarlas en el Sistema Jurídico Mexicano pues el mismo
lo ha propiciado sin paliativo alguno.

La pobreza en México, causa de muchos males nacionales, esta medida por un


organismo especializado que se denomina Consejo Nacional de Evaluación de la
Política de Desarrollo Social, mismo que nos indica que el 46.2% de la población
mexicana se encuentra en pobreza, siendo de este el porcentaje 10.4% en pobreza
extrema y el 35.8% en pobreza moderada, así como el de la clasificación de
vulnerables por carencias sociales que es del 28.7% y un5.8% de vulnerables por
ingreso, las cifras de pobres y que se encuentran en circunstancias de pobreza y
debilidad económica es de aproximadamente el 80.7% de mexicanos.

No sobra señalar que el CONEVAL es un organismo público descentralizado creado


por la Ley General de Desarrollo Social y regulada por decreto de fecha del 27 de

133
julio de 2005, que tiene por objetivo estratégico el mejorar la eficacia y eficiencia,
así como la rendición de cuentas de la política de desarrollo social, mediante la
evaluación y el monitoreo de programas y políticas sociales y la medición de la
pobreza.

En cuanto a la población que reside en las zonas rurales, de conformidad con el


censo practicado en el año 2010, es un23.2% de la población que vive en las
localidades de menos de 2,500 habitantes por lo que se puede considerar que 25
millones de personas habitan en las poblaciones ubicadas fuera de las zonas
urbanas.

Pareciera que esto ya no requiere mayor explicación: Es indispensable dar solución


jurídica para generar riqueza y mejorar a este país pues, de no hacerlo, se
continuará con las abismales diferencias económicas, la injusticia y las inequidades
sociales que tanto duelen a la Nación, a pesar de políticas públicas que tanto se
encaminan contra los efectos que produce la pobreza, así como el multimillonario
dispendio de recursos económicos o el supuesto debate de iniciativas de reformas
legales que solo van dirigidas a combatir las consecuencias de un país con
diferencias abismales en su sociedad.

19.13 LA PROPIEDAD SOCIAL EN MEXICO

Como se desprende de lo señalado en los apartados arriba mencionados, la


Constitución Política de los Estados Unidos mexicanos vigente reconoce
actualmente, como una rama del derecho aplicable al campo Mexicano, al Derecho
Agrario, específicamente por lo que se refiere a la tenencia de la tierra en el medio
rural, siendo su principal aspecto a destacar el de la propiedad social. Como
contrapartida podría señalarse que es el derecho común el que contempla a la
propiedad privada individual.

Por lo que se refiere a tierras parceladas, éstas son delimitadas y asignadas a los
titulares de derechos agrarios del núcleo de población que corresponda y gozan
exclusivamente del uso y usufructo de las mismas. La vigente Ley Agraria permite
la adquisición de propiedad (nuda-propiedad) siempre y cuando la asamblea
general de ejidatarios así lo decida, conforme a las formalidades espaciales que
también establece el mismo cuerpo legal.
En lo relativo a las tierras de uso común, en tanto éstas no sean divididas por un
parcelamiento, la ley es tajante al señalar que, de acuerdo a las cifras del INEGI,
según el IX censo Ejidal, la superficie que corresponde a tierras de uso común es
de 69´29,522 hectáreas, o sea aproximadamente el 65.4% de las tierras de los
ejidos no tienen asignación individual de las mismas, en comparación la tierra
parcelada y asignada es de 33´631,739 hectáreas lo que significa un 31.7% del
total de la propiedad social.
134
19.14 LOS DERECHOS HUMANOS Y/O FUNDAMENTALES

Como es de conocimiento generalizado, actualmente en México se ha hecho la


regulación de los Derechos y/o Humanos, tanto por las reformas constitucionales
que han perfeccionado últimamente como por la fuerza e importancia que se han
perfeccionado últimamente tanto como por la fuerza e importancia que han
adquirido en los derechos individuales a proteger.

Los derechos humanos de primera generación son aquellos que se refieren


esencialmente a derechos individuales frente al Estado y los derechos políticos de
participación en el Estado, abarcando su reconocimiento desde el modelo
norteamericano y las constituciones liberales de Europa y América Latina hasta las
Primera Guerra Mundial de 1914.

Nuestro Sistema Jurídico Nacional, como ya se señaló, ha reconocido estos


derechos humanos y/o fundamentales en la Carta Magna y, es en el año de 2011
que ha establecido los de tercera generación expresamente, así como su defensa
ampliando su protección a los señalados en los tratados internacionales de los que
México es parte.

19.15 UNIVERSO SOCIAL RURAL

Aunque tantos mexicanos lo ignoren, de manera culpable o no, más allá de las
banquetadas de nuestras grandes ciudades, existe todo un universo de millones de
hombres y mujeres, de ancianos y niños, que tiene derecho natural y jurídico a un
destino feliz; al menos, a un destino digno de personas humanas, tan humanas y
tan personas como cualquiera de nosotros, a los que poco volteamos a ver, a los
que poco o nada conocemos y de quienes somos, en tanto, tan poco solidarios.

También existe más de la mitad del territorio nacional, que de alguna manera les
debiera pertenecer y no es suyo; tierras en las que han nacido, de las que mal viven
y en las que probablemente han de morir, de las que son meros poseedores sin ser
propietarios; que les sirven para mal darles de comer en una producción de mala
calidad, bajísima y que para ellos es su único patrimonio, frutos pendientes como
se les llama en Derecho, al no tener un patrimonio real propio y que, en la inmensa
mayoría de los casos es sólo producción de auto-subsistencia: el maíz que utilizan
para sus tortillas y el frijol que consumen para sus tacos. Normalmente no les
alcanza su producción para concurrir con ella al mercado.

Estos son unos breves datos que nos actualizan y nos recuerdan la existencia real,
aquí y ahora, en nuestro México del 2012, de esas decenas de millones de
compatriotas, mas sus familias, mas su pobreza, mas su hambre, mas su

135
insalubridad, mas su ignorancia, en el vastísimo territorio nacional, llamado por
vocación a ser grande, con un destino tantas veces frustrado:

• Ejidos y comunidades: 31,518


• (más de 28,000, ejidos, más del 90%; menos del 10%, comunidades;
problemática muy similar)
• Superficie: 105´900,000 Hectáreas. (INEGI, Censo Ejidal 2007).
• 54% del Territorio Nacional
• Más del 60% de la superficie agropecuaria y silvícola explotable.

Habitantes totales del sector rural:


• Según los parámetros del INEGI: 24´300,000
• Según los parámetros de la OCDE: 38´400,000”1

1 Pampillo Baliño, Juan Pablo, Munive Paez, Manuel Alexandro, Derecho Agraria y Desarrollo rural, Editorial Porrúa,
México, 2013 p. 3

136
DERECHOS AGRARIOS
FUNDAMENTALES Y PRINCIPIOS
GENERALES DE DERECHO
APLICABLES AL CAMPO MEXICANO

DUALIDAD DE
SISTEMAS DE
PROPIEDAD,
PRIVADA Y
COMUNITARIA

EFECTOS DE LA
DUALIDAD DE LA
TENECIA D ELA
TIERRA EN EL
FINANCIAMIENTO

EFECTOS DE LA
DUALIDAD EN LA
TENENCIA D ELA
TIERRA EN LOS
VALORES D ELA
MISMA
CAPITULO XX

LOS HABITANTES DEL CAMPO MEXICANO. UN


EFECTOS DE LA GRAVE ERROR DE
DUALIDAD DE LA
TENENCIA DE LA DIAGNÓSTICO, DE NUMEROS Y DE REALIDADES
TIERRA EN LA
PRODUCCIÓN
AGROPECUARIA INTRODUCCIÓN

México por desgracia y por la mala administración y mal


LA DUALIDAD EN LA
reparto de las tierras, sufre de pobreza y de pobreza
TENENCIA DE LA TIERRA
Y SUS EFECTOS EN EL
extrema, pues generalmente en el mundo se tiene esa
PATRIMONIO D LOS
TITULARES DE LA
idea, pero México es un país muy rico en cuestiones de
PROPIEDAD SOCIAL
recursos naturales. Aquí el problema es el más manejo
de esos recursos donde están o mal distribuidos o mal
manejados, asegurados en monopolios de unos cuantos
LA DUALIDAD EN LA gobernantes, y es difícil así poder crecer en materia
TENENCIA D ELA
TIERRA Y SUS
agraria, también a mi punto de vista se debe a gobiernos
EFECTOS EN LA
CONSERVACIÓN DEL
paternalistas que todo o por lo menos “obsequian” a los
MEDIO AMBIENTE ejidatarios dineros públicos que no alcanzan para poder
realizar siembras y cosechas dignas, no es posible
avanzar de tal manera esperando que gobierno de todo
LA DUALIDAD DE lo necesario para cubrir necesidades básicas mínimas.
LOS SISTEMAS DE
TENENCIA DE LA En México no hay pobreza, hay miseria.
TIERRA Y LA VIDA
INSTITUCIONAL DEL
PAÍS
137
“La mayoría, acepta sin ningún análisis que los habitantes del campo mexicano
suman 24´300,000 personas. Estudiando esta situación, caemos en la cuenta de la
existencia de dos pesas y dos medidas: por una parte, los parámetros y los números
del INEGI, que arrojan en total 24´300,000 habitantes rurales. Por la otra, los
parámetros y resultados de la OCDE, a la que pertenece México y que nos dan un
total de 38´400,000 personas en el medio rural. Con estos últimos parámetros se
mide la población rural de naciones avanzadas como Francia, Alemania, España,
Brasil, Canadá, Australia y los demás países avanzados.

Existe un breve estudio del Dr. Marco Antonio Galindo, destacado economista,
investigador y estudioso del campo mexicano, que nos demuestra que los
parámetros de la OCDE, que sigue casi todo el mundo occidental, son los
verdaderos y aplicables a nuestro país:

¿Qué es lo rural?:

Lo rural, como una comunidad de análisis, no se define precisamente como un


concepto y mucho menos, como un territorio específico, dado que la frontera entre
lo rural y lo urbano, en la mayoría de los países, no se identifica fácilmente.

Se utilizarán dos distintas definiciones de lo rural, aunque complementarias entre sí.


La primera, basada en el tamaño de la población, coincide estrechamente(o se
acerca mucho) con las categorías más frecuentemente utilizadas entre los
hacedores de políticas y los académicos en México: rural disperso (poblados con
menos de 2,500 habitantes), rural semiurbano (entre 2,500 y 15,000), urbano
intermedio (entre 15,000 y 100,000) y urbano o urbano metropolitano (más de
100,000).

La definición de la OCDE de lo rural, se basa en la evaluación de que las regiones


rurales cuentan con densidad poblacional baja y no tienen un centro urbano
importante.

Las regiones no clasificadas como rurales o urbanas, pero dependiendo de la


fracción de población que vive en comunidades rurales, están clasificadas como
predominantemente rural (PR), intermedio (IN) y Predominantemente Urbano (PU).

Parte de la dificultad de definir lo rural yace en el hecho de que la definición depende


del niel territorial del análisis. La definición proporcionada a nivel territorial más bajo
es el que informa el INEGI, Instituto Nacional de Estadística, Geografía e
Informática, instituto que hace una distinción entre localidades rurales y urbanas
utilizando un umbral de nivel poblacional, 2,500 habitantes. De las próximamente

138
199 mil localidades, 196 mil tiene menos de 2,500 habitantes, lo que constituye casi
90% del territorio nacional.

La definición de la OCDE de lo rural, se basa en la evaluación de que las regiones


rurales cuentan con densidad poblacional baja y no tienen un centro urbano
importante.

Las regiones no se clasifican como rurales o urbanas, pero dependiendo de la


fracción de población que vive en comunidades rurales, están clasificadas como
predominantemente urbanas, predominantemente rurales e intermedias usando los
3 criterios siguientes:

1. Densidad de población. Una comunidad se define como rural si su densidad


poblacional es menor a 150 habitantes por km2 (500 habitantes para Japón,
tomando en cuenta el hecho de que su densidad poblacional nacional excede
los 300 habitantes por km2).
2. Regiones por porcentaje de población en comunidades rurales. Una región
se clasifica como predominantemente urbana si menos de 15% de la
población vive en comunidades rurales; e intermedias si la parte de población
que vive en comunidades rurales está entre 15% y 50%.
3. Centros urbanos. Una región que podría clasificarse como rural con base en
la regla general, se clasifica como intermedia si cuenta con un centro urbano
con más de 200,000 habitantes (500,000 para Japón), representando no
menos del 25% de la población regional. Una región que

139
pudiera clasificarse como intermedia con base a la regla general, se clasifica
como predominantemente urbana si cuenta con un centro urbano de más de
500,000 habitantes (1´000,000 para Japón), representando no menos de
25% de la población regional.

Criterio en México para definir “rural”

CONCEPTO UNIDADES

Rural disperso Menos de 2,500 habitantes


Rural semiurbano Entre 2,500 y 15,000 habitantes
Urbano intermedio Entre 15,000 y 100,000 habitantes
Urbano Más de 100,000 habitantes

Criterio de la OCDE para definir “rural”

CONCEPTO UNIDADES
Predominantemente Rural Más del 50% de la población vive en
comunidades rurales
Intermedias Del 15%-50% de la población vive en
comunidades rurales
Predominantemente Urbanas Menos del 15% vive en comunidades
rurales

Es común agrupar estas dos categorías, dado que las condiciones de vida de la
población en asentamientos de menos de 15,000 habitantes cuentan con
características más parecidas al ambiente “rural” que al “urbano”. Utilizando este
umbral, la población rural actual de México, asciende a los 38.4 millones de personas
o 37% de la población total.

20.1 LOS MAS POBRES ENTRE LOS POBRES

Según los datos estadísticos más confiables, desgraciadamente la pobreza en


México ronda alrededor del 50% de la población o más.

Y de todos los grupos humanos que conforman a los habitantes de nuestro país, el
campesino es el más pobre entre los pobres., en frase de la M. Teresa de Calcuta,
como se demuestra aquí:

140
En el campo mexicano viven poco más de 38 millones de mexicanos en condiciones
de pobreza: alimentaria 32.3%, de capacidades 39.8%, y patrimonial
61.8%, con el riesgo de que se vaya incrementando del 2009 en adelante por efectos
de la crisis laboral.

Este es el resultado de raquíticos ingresos, ya que el 84% de sus habitantes percibe


menos de dos salarios mínimos; el 65% percibe menos de un salario mínimo y el
51% percibe menos de medio salario mínimo. ($28.75 diario).

Las actividades agropecuarias son la principal fuente de empleo e ingreso en el


medio rural; en 2009 dieron trabajo al 13.3% de la población ocupada en el país,
mientras que sólo generó el 3.8% del Producto Interno Bruto Nacional.

En esas condiciones, el campo mexicano no es atractivo a nuevas inversiones; sólo


el 0.9% de la formación de capital se destina a las actividades agropecuarias y
pesqueras; las asociaciones con ejidatarios y comuneros, es casi inexistente por
falta de seguridad jurídica en la recuperación de la inversión.

Esta situación se agudiza por:

Falta de crédito: sólo el L8% de los recursos crediticios disponibles se canaliza al


campo y lo más grave, de la banca de desarrollo sólo el 0.5% y este financiamiento
es esencialmente para la propiedad privada.

El financiamiento institucional a ejidos y comunidades es prácticamente nulo, en


cifras, se puede decir que no existente.

Inseguridad en la tenencia de la tierra.

Muy baja productividad del trabajo en ejidos y comunidades, insuficiente


simplemente para que los titulares de esas tierras, obtengan el sustento
indispensable para tener una vida digna.

Baja rentabilidad por falta de e financiamiento, carencia de maquinaria y de técnica,


mala calidad y bajos precios de sus productos y altos precios de los insumos.

A pesar de que lo anterior es tan grave, no se menciona mucho en la prensa ni en


los medios masivos de comunicación y menos aún por parte de instancias
gubernamentales, pero ésta es nuestra triste, vergonzosa pero inocultable realidad:
un sector paupérrimo dentro de un pueblo pobre.

Nuestra pregunta, necesaria conclusión de lo anterior: ¿qué hacen nuestros


diputados y senadores, (ganando cientos de miles de pesos mensuales cada uno

141
de ellos), para aliviar, de fondo y en verdad, esta situación tan injusta y delicada, tan
grave y riesgosa y cuyo alivio está en sus manos como legisladores? Nada.
Los miembros del IFE, ganan, de nuestros impuestos, más de diez mil pesos diarios,
equivalentes a 350 veces lo que obtiene el 51% de la población campesina del país,
¡cerca de veinte millones de personas! Y algún Ministro de la Suprema Corte de
"Justicia", casi mil veces lo que ingresa ese paupérrimo 51% de la población en el
campo mexicano, todos ellos con un rostro humano, con un nombre, con una familia,
con una inmensa necesidad, con el estómago vacío, sin pan en su mesa, sin saber
leer ni escribir tantos, sin ningún auxilio de asistencia sanitaria, faltos de fe y
huérfanos de esperanza, ¡francamente indignante! Recordemos de los romanos:
"Venter non patitur dilationem".

Lo que hoy es nuestro país, inició la modernidad siendo la Nueva España y en


muchos datos, a contrapelo de la modernidad europea.

La modernidad en Europa, en general, se distinguió por sus conceptos de libertad,


de tolerancia, de apertura. Hija fue en mucho del cisma de Occidente. Díganlo si no
los holandeses y los pobladores ingleses de los actuales territorios de los Estados
Unidos.

Políticamente hablando, en Europa sobresalen como primer dato, el nacimiento y el


crecimiento de los Estados Centrales fuertes, a expensas del poder de provincias,
de los poderes periféricos de lo que anteriormente fueron los señoríos feudales de
la nobleza, la Iglesia, los gremios, las armadas, que cada día se sujetan más al poder
central.

La propiedad privada, ha demostrado hoy a nivel universal, díganlo las actuales


economías de la Europa del este, las de Asia, la economía china en lo particular y
que los señores economistas den rumbo, contenido y cifras a mi dicho, en el tiempo
y en el espacio, que es el sistema más propicio para la creación y la distribución de
la riqueza, sin que el Estado se abstenga nunca de su esencial responsabilidad de
promover la auténtica justicia social, conmutativa, distributiva y legal; y aún más
lejos, la equidad, como aplicación de la justicia al caso concreto, según decía
Aristóteles.

Me preocupa ante la fría cripticidad de los números de tantos sabios economistas,


el hambre en el estómago de millones de mexicanos en el campo sea tan palpable,
sensible. Terrible. Y, repito, el dicho de los viejos romanos que de Derecho sabían
tanto y de Historia también, que “Venter non patitur dilationem”. “el vientre no admite
espera, en resumen. Y los mexicanos decimos que el “hambre es mala consejera”,
pero hacemos poco o nada en la historia y en nuestra realidad, para remediarla.
Tenemos miedo, tenemos miedo al cambio.

142
Aquí de manera esencial, se requiere de la organización social, institucional,
económica, productiva, comercializadora. De poco servirá el régimen de propiedad,
si no se completa con figuras asociativas voluntarias que den a las parcelas ejidales
reunidas, privadas, la posibilidad de conformarse en unidades de producción
jurídica, económica, social, ecológica y técnicamente rentables.
Después de más de 40 años conociendo, viviendo y estudiando el derecho, la
conflictividad y la problemática agraria en México, no encuentro mejor forma de
aliviar el hambre, la ignorancia, el desamparo y la miseria de millones de familias
mexicanas, proveyendo una autentica justicia social que la adopción de la propiedad
plena; de la “plena propiedad”, como querían el decreto de Venustiano Carranza el
6 de enero 1915 y el artículo 27 de la Constitución del 5 de febrero de 1917.

20.2 ALGUNOS APUNTES SOBRE LA PROPIEDAD “SOCIAL”, EJIDOS Y


COMUNIDADES

La producción agropecuaria está sujeta a riesgos climatológicos, biológicos y de


mercado, que en caso extremo puede significar la pérdida total de los activos,
especialmente cuando no se encuentran con un seguro que ampare la
infraestructura y el capital de la unidad productiva.

Además, se enfrenta una competencia desleal ante los subsidios de otros países;
en México un productor recibe en promedio un 13% de ingreso bruto en
subsidio(ESP); mientras el promedio de los productores de los países de la OCDE
es del 23%, los de la Unión Europea 27%, y los de Suiza, Corea del Sur y Noruega
más del 60%.

La rentabilidad de las actividades agropecuarias se ha venido reduciendo en los


últimos años debido a que:

• Un menor crecimiento de los precios de los productores primarios, en relación


con los del resto de la economía, debido que se han utilizado como
instrumento en el control de la inflación; de 1993 a la fecha ha sido menor el
22% respecto al crecimiento de los precios y,
• Un aumento mayor de los precios de los insumos agropecuarios y pesqueros,
que los de sus productores finales, las materias primas han aumentado un
19% más que los precios recibidos por los productores agropecuarios.

143
La inversión en el campo es marginal lo que no permite aumentar los niveles de
productividad y competitividad. En el periodo 2000-2004 en promedio solo el .09%
de la inversión (formación bruta de capital fijo) fue el sector agropecuario y pesquero
y representa el 3.4% del PIB sectorial, mientras que los países de la OCDE el
promedio es del 32% y el total de la economía fue del 21.5%.

Características de la propiedad social.


En México existen 31,514 ejidos y comunidades agrarias que ocupan una superficie
de 105.9 millones de hectáreas, 54.1% del territorio nacional; las tierras de uso
común abarcan 69.3 millones de hectáreas y la superficie parcelada tiene 33.6%
millones de hectáreas, 65.4% y 31.7% de la propiedad social respectivamente.

Podría decirse que los actuales campesinos pobres, son tan pobres casi como lo
eran los indígenas del mundo rural mesoamericano de antes de la conquista. Ni
unos, ni otros, tienen ni tenían propiedad sobre las tierras que trabajaban, de las que
viven y de las que probablemente morirán.

Antes de la Conquista Española, las tierras eran del barrio, de los reyes, nobles,
dioses, etc., no de los campesinos; hoy las tierras son del ejido o de la comunidad,
no son tampoco de los campesinos, de los ejidatarios, de los comuneros.

Ni unos ni otros cuentan con un patrimonio propio. Antes, eran macehuales; hoy,
peones y campesinos sin tierra. Ni unos ni otros pueden heredar tierras que trabajan.

20.3 SITUACIONES REALES ACTUALES: NECESIDAD URGENTE DE LOS


CAMBIOS PARA OTORGAR EL DOMINIO PLENO SIN TRABAS A LOS
EJIDATARIOS QUE ASI LO DESEEN, CUMPLIENDO CON LA CONSTITUCIÓN

Dependemos de la importación de productos agrícolas del exterior en un creciente


porcentaje mayor hoy al 50%.

Anteriormente existían excedentes productivos en el exterior y los bienes agrícolas


eran relativamente baratos; hoy, por la demanda excedente de China, India y otros
países, así como por la extraordinaria demanda industrial para producir bio-
energeticos entre otras razones, se da una escasez de productos agrícolas a nivel
mundial y los precios han escalado en más del 60% en ocasiones en un solo año
los “stocks” o existencias físicas de esos productos en los Estados Unidos, se
encuentran en niveles del 15% de sus existencias anteriores. Estamos llegando a la
disyuntiva cada vez más cercana de la necesidad de producir lo que os comemos,
o no lo encontraremos en los mercados internacionales, o lo habrá precios y con

144
condiciones imposibles de acceder. Esto es conocido por todos los que conocen del
tema.

Es por ello que requerimos de los políticos, los diputados y senadores y la


administración pública, se responsabilicen de modernizar la estructura jurídica,
social y económica de la propiedad social en México, para no quedarnos, pronto, sin
alimentos, además, debemos comprender que las parcelas ejidales no sean de
dominio pleno o propiedad plena de sus titulares, conlleva, entre otros, los siguientes
efectos que se están, ya hoy, viviendo y padeciendo:
a) Creación de un patrimonio propio. El que los ejidatarios solo sean poseedores
y no propietarios de sus parcelas, implica necesariamente una falta de
patrimonio real propio en ellos. Si se facilita al máximo su acceso a adoptar
el dominio pleno de sus tierras, automáticamente y sin costo alguno por su
parte, adquirían millones de ellos, un patrimonio del que hoy carecen.
b) Posibilitarles un financiamiento que hoy no tienen: No teniendo en la
actualidad los ejidatarios el dominio pleno sobre sus parcelas, les impide
ofrecerlas como garantía real en los créditos institucionales que les son
completamente indispensables y por tanto el financiamiento institucional a
ejidos y comunidades, es en la práctica totalmente nulo. Si se facilita al
máximo su acceso a adoptar el dominio pleno de sus tierras,
automáticamente millones de ellos, tendrán acceso al financiamiento del que
hoy carecen.
c) Revaloración automática y multiplicadora de sus tierras. El valor de las tierras
de una parcela ejidal, por no ser de dominio pleno, propiedad privada, es de
entre un 10 y un 20% del valor de las tierras campesinas de pequeña
propiedad.
d) Seguridad para la asociación con otros propietarios o con inversionistas.
Actualmente y como los ejidatarios no son propietarios de sus tierras, no hay
seguridad para ningún inversionista para asociarse con ejidatarios, pues no
tienen ninguna seguridad en recuperar su inversión. Si se facilita al máximo
el acceso del ejidatario a adoptar el dominio pleno de sus tierras,
automáticamente y sin costo alguno por su parte, serán sujetos plenos de
coinversión, por la seguridad que ofrecerían, como cualquier propietario
privado de bienes inmuebles en cualquier país.
e) Idoneidad y posibilidad real e conformar, con otros propietarios, grandes o
pequeños, unidades de producción económicamente rentables. Hoy,
dependientes en tanto como los ejidatarios de sus comisariados ejidales y de
la asamblea ejidal no tienen seguridad real en la tenencia de su tierra. Esa es
una razón principalísima, para no poder conformar en la realidad, libremente,
unidades de producción, eficientes y económicamente rentables. Además

145
aun si las formasen, no tendrían ni valor económico, ni acceso al crédito, pues
esa unidad no seria de propiedad, si no solo de posesiones.
f) Liberación del ejidatario que adopte la propiedad o dominio pleno de su
parcela, de la ominosa tutela del comisariado ejidal, de la asamblea y , en
ocasiones, de las organizaciones que dicen representarlo: en la experiencia
histórica y personal de los ejidatarios mexicanos, ha pesado siempre el
depender de una o de otra manera, sea el comisariado ejidal, de la asamblea
y , en ocasiones, de las organizaciones agrarias a alas que pertenece y que,
también en ocasiones, medra a su costa y hasta lo exima y se queda con su
tierra. Entiendo también que por ello mismo, la situación planteada tendrá
enemigos, dentro y fuera del gobierno; pero la aposte, tendrá que vencer la
mejoría económica de millones de ejidatarios, su desarrollo social, el adquirir
su propio patrimonio y su independencia de os órganos internos del ejido: su
plena libertad personal y el respeto que se le debe en verdad, como mayor
de edad y no como el trato a un discapacitado.
g) Falta de circulación de las tierras y de ejidos y comunidades: En el año 2010,
hoy 150 años después, 105.9 millones de hectáreas no tienen por ley el
movimiento o libre circulación de una gran parte de la propiedad raíz, base
fundamental de la riqueza publica, se repite, el 54% del territorio nacional 106
millones de hectáreas, que se encuentran distribuidas entre ejidos y
comunidades vienen siendo, casi bienes de manos muertas.” 1

146
1 Pampillo Baliño, Juan Pablo, Munive Paez, Manuel Alexandro, Derecho Agraria y Desarrollo rural, Editorial Porrúa, México,
2013 p. 3-120

CUESTIONARIO

1.- ¿Qué es lo rural?

2.- ¿En qué se basa la OCDE en México para definir lo rural?

3.- ¿Cuál es el porcentaje de pobres en México, según estadísticas?

4.- ¿Por qué no les dan cerdito o financiamiento a los ejidatarios en las
instituciones crediticias?

5.- ¿Cuántos ejidos hay en México, según la OCDE?

CAPITULO XXI

TEMAS AGRARIOS

PROPUESTA DE ADICION A LA LEY AGRARIA QUE REGULE EL RÉGIMEN


DE
PROPIEDAD DE LAS COLONIAS AGRÍCOLAS Y GANADERAS

INTRODUCCIÓN

La colonización en México inició después de la Independencia y continuó hasta


después de la revolución, ésta no tuvo un fin propiamente agrario, es decir; no
respondía a una política orientada a resolver necesidades agrarias de grupos
campesinos sin tierra o de restituir a los pueblos indígenas los terrenos de que fueron
despojados durante la Colonia. El propósito de esa acción colonizadora consistió en
una política deliberada de redistribución de la población hacia zonas deshabitadas
principalmente en el norte y zonas fronterizas del país, ordenada por el gobierno a
favor de grupos sociales para establecer comunidades locales, fijando en dichos
147
terrenos las moradas de sus cultivadores, con intención de permanencia, en una
clara expansión de la población y del comercio.

Las colonias que se encuentran vigentes, fueron creadas formalmente a partir de la


Ley
General de Colonización de 1926 y a partir de 1962, fecha en que es abrogada la
Ley Federal de 1947(que sustituyó a la Ley de 1926), la normatividad del régimen
de colonias se plasma en Reglamentos Generales en los que se establecen
principalmente, facultades, y atribuciones para la administración de las colonias, así
como las normas para la organización interna de las mismas.

En especial el Reglamento General de Colonias Agrícolas y Ganaderas de 1980,


abrogado el 4 de enero de 1996, contemplaba como sujetos de derecho, tanto
colectiva como individualmente, además de las colonias a los distritos de riego,
mismos que siguen prevaleciendo sin que la actual normatividad haga mención de
ellos.

21.1 CONCEPTOS GENERALES DE LAS COLONIAS AGRICOLAS Y


GANADERAS

“Para entender la Colonización, debemos comenzar por establecer el significado del


término colono, el cual tiene su raíz en las voces latinas “colunus, colonis, colonii”,
que quiere decir agricultor, granjero, aparcero. Entendiendo entonces que es aquel
labrador que cultiva una heredad por arrendamiento y vive en ella.

Durante la época del México Independiente Implicaba dos aspectos:

1. Humano. Motivaba a los nacionales o a ciudadanos extranjeros a través de


estímulos económicos para que participaran en la política gubernamental
emprendida; y
2. Territorial. Respondía a la mala distribución de la población en el territorio
nacional, lo que trajo como consecuencia, centros de población que
aglomeraban a la mayoría de habitantes y zonas totalmente deshabitadas y
ociosas.

La colonización en México se inició en 1824, persiguió diversos propósitos como


son: a) poblar al territorio nacional; b) fortalecer los límites o zonas fronterizas de un
país; c) retribuir a los militares o a quienes prestaron servicio a la patria; y d)
fomentar la producción agrícola y el ingreso nacional.

148
21.2 LA COLONIA

CONCEPTO DE COLONIAS

Es el conjunto de lotes y el grupo humano que los trabaja organizados en comunidad


o en explotaciones de tipo familiar.

Las Colonias como tales no constituyen entes Jurídicos, aunque sean un grupo
social y se consideran como al grupo de personas, principalmente campesinos que
emigran a un territorio en el cual es propicia la producción de la tierra, organizándose
en su interior y cumpliendo con las formalidades que exige la ley para su creación.

Las Colonias Agrícolas y ganaderas no fueron consideradas originalmente como


formas de tenencia de la tierra y no existen estudios jurídicos minuciosos de las
mismas, lo cual hace difíciles profundizar en cuanto a su naturaleza jurídica, misma
que trataremos de desentrañar de las disposiciones legales que las han regido.

21.3 ORGANIZACIÓN COLECTIVA

El régimen de Propiedad de las Colonias Agrícolas y ganaderas, combina la


propiedad privada y a la Organización Colectiva para la toma de decisiones en
común.

Actualmente los lotes rústicos que conforman el territorio de una colonia representan
una modalidad de tenencia que corresponde a la propiedad privada, y que a su vez
se encuentra limitada, ya que mientras se mantenga en el régimen de colonias,
deberá notificar a la Secretaria de la Reforma Agraria de todos los traslados de
dominio a fin de mantener vigente el padrón de colonos. Se rigen por su Reglamento
Interno y el Reglamento de la Ley Agraria en Materia de Ordenamiento de la
propiedad Rural el cual establece los lineamientos que deben seguir los integrantes
de una colonia, así como las que se ubiquen en los asentamientos humanos, es de
concluirse, que se rigen por el Derecho Civil de la Entidad Federativa de que se
trate; aplicando diversas disposiciones

149
jurídicas de dicha rama en cuanto a lo que concierne en materia de contratos,
propiedad, accesión, servidumbre, fianza, hipoteca, responsabilidad civil entre otras;
puesto que hacen uso del derecho real que poseen.

21.4 FEDERALES

Se derivan de la colonización promovida por el Estado a través del otorgamiento de


concesiones, creadas mediante Acuerdos, Decretos o Declaratorias emitidos por el
Ejecutivo Federal, los cuales determinaban la colonización en terrenos nacionales
y/o particulares, previamente expropiados, los cuales en su gran parte eran tierras
susceptibles de cultivo y de cría de ganado; fomentando el movimiento de un grupo
de población a diversos lugares , mediante los recursos y medios implementados
por el mismo.

21.5 VOLUNTARIAS

La colonización promovida por el Gobierno Federal se podía dar también en tierras


de propiedad privada, de conformidad con lo dispuesto por la Ley Federal de
Colonización de 1946, que estableció la modalidad de que los propietarios de
latifundios podían ampararse en la colonización voluntaria de sus propiedades cuya
petición tenía en el efecto inmediato de que la entonces Secretaría de Agricultura y
Ganadería, decretara la inafectabilidad definitiva del predio por un periodo de cinco
años, para darle la oportunidad de colonizarlo, con derecho a obtener la
inafectabilidad definitiva de las superficies que comprendieran la colonización
proporcionada que se hubiere realizado, (artículo 6º).

Por lo que las colonias voluntarias son aquellas propiedades privadas que por un
acto de la administración pública federal quedaban afectadas al régimen de
colonización a petición de los mismos propietarios.

21.6 PREDIOS INDIVIDUALES

Lotes inmersos en un Distrito de Colonización, los cuales no cuentan con una


organización interna o colectiva pero que se les considera dentro del Régimen de
Colonias Agrícolas y Ganaderas por su ubicación, regularizándose de manera
individual y no colectivamente.

150
En la Secretaría de la Reforma Agraria, actualmente se tienen localizados Distritos
de Colonización solo en los estados de Baja California, Baja California Sur y Sonora.

21.7 PROGRAMA DE REGULARIZACIÓN DE COLONIAS AGRÍCOLAS Y


BGANADERAS

Según lo dispuesto por la Ley de Planeación, el Presidente de la República debe


expedir dentro de los primeros seis meses de su periodo el Plan Nacional de
Desarrollo, el cual será eje sobre el cual girarán las acciones gubernamentales
tendientes a respetar las garantías individuales y a defender los principios políticos
de la nación.

El programa Sectorial Agrario 1995-2000 parte del afán de preservar el estado de


derecho y de mejorar las condiciones de vida de los hombres y mujeres del campo,
constituyendo la regularización y ordenamiento.

Por lo antes señalado y derivado de lo establecido en el Artículo Octavo Transitorio


de la Ley Agraria se implementó el Programa de Regularización de Colonias
Agrícolas y Ganaderas, resultando lo siguiente:

21.8 SOLUCIÓN DEL PROBLEMA

De lo antes expuesto y una vez realizado un breve estudio relacionado con la figura
jurídica denominada Colonia Agraria y Ganadera, se propone como parte medular
del presente ensayo la adición a la Ley Agraria del tema de las Colonias Agrarias y
Ganaderas, principalmente debido a que forman parte de la Política de
Ordenamiento y Regularización de Colonias Agrícolas y Ganaderas, principalmente
debido a que forman parte de la política de Ordenamiento y Regularización de la
Propiedad Rural del Programa Sectorial Agrario.

Al formar parte de la política de ordenamiento y regularización desde el año de 1996,


se implementó el Programa la regularización de las colonias, y dentro de él se
consideró el Procedimiento operativo para la regularización de las colonias agrícolas
y ganaderas cuyo objetivo principal era identificar a los sujetos de derechos, la
superficie real que conformaba a las colonias y a los lotes, así como, el número de
lotes que la integraba, otorgando certidumbre jurídica y documental a los sujetos de
derecho en posesión de tierras en su interior.

Una ley y su correspondiente Reglamento tienen como fin regular una determinada
situación jurídica, estableciendo en ellas los principios de equidad y justicia. En el
caso de las leyes agrarias pugnan por el derecho de la tierra la cual se considera
151
una garantía individual de todo mexicano en este caso de los colonos. Por lo que de
lo anterior el Gobierno Federal debe instrumentar leyes que lo protejan de cualquier
afectación hecha por terceros o por el mismo Estado, en su derecho de propiedad;
en las Colonias nos encontramos que los conflictos se han presentado por diversas
causas, básicamente por la falta de legislación específica, muchos de ellos ni
siquiera saben a qué ley sujetarse.
Todas las cuestiones antes mencionadas nos hacen llegar a la conclusión de que
es conveniente seguir con la regularización de las Colonias, las cuales hasta el
momento continúan con el problema de carácter legal en su interior, los cuales han
tenido que ventilar ante los Tribunales Agrarios y las autoridades civiles en los
Estados.

En otras palabras, toda ley, reglamento y demás ordenamientos legales de


aplicación general, deberán apegarse a lo establecido en la Constitución, no
contraviniéndola y sin ir más allá de lo que establece.

Es importante mencionar que la Ley Agraria no contempla a las Colonias, sólo en lo


que respecta al artículo octavo transitorio, y derivado de este artículo el Reglamento
de la Ley Agraria en Materia de Ordenamiento de la Propiedad Rural; el cual es muy
escueto en cuanto a las generalidades de las Colonias”.1

1 Pampillo Baliño, Juan Pablo, Munive Paez, Manuel Alexandro, Derecho Agraria y Desarrollo rural, Editorial Porrúa,
México, 2013 p. 253

CUESTIONARIO

1. ¿Qué es una colonia agrícola o ganadera?


2. ¿Cuál es su régimen legal de una colonia agrícola o ganadera?
3. ¿A través de que decretos fueron creadas las colonias agrícolas y
ganaderas?
4. La ley Agraria contempla a las colonias agrícolas. ¿sí o no?
5. ¿Qué artículos constitucionales fundamentan y regulan a las colonias
agrícolas y ganaderas?
6. ¿Cuándo nacen las colonias agrícolas y ganaderas?

152
7. Menciona los tipos de colonias agrícolas y ganaderas que existen en nuestro
país CAPITULO XXII

LAS EXCEDENCIAS A LA PROPIEDAD EN EL DERECHO AGRARIO


MEXICANO

INTRODUCCIÓN

El ejido y la comunidad agraria en México, son dos modalidades ya tradicionales de


propiedad de la tierra y mecanismos idóneos implementados por el Gobierno
Mexicano, para procurar el acceso a la titularidad agraria al mayor número posible
de campesinos, así como a su aprovechamiento productivo. A esta capa de la
población el Constituyente de Querétaro no sólo reconoció el derecho a la propiedad
de la tierra, sino también el de participar de los beneficios de cultivos y de sus frutos
según su vocación, en su condición de usufructuarios directos y primarios, y no
únicamente como mano de obra, como sucedió con el Virreinato y en los años
decimonónicos de nuestra Independencia, cuyo trabajo esforzado y sacrificado, sólo
estaba orientado a incrementar la riqueza de poderosos hacendados y propietarios
particulares de considerables extensiones territoriales.

“Como exigencia inflexible de los diputados constituyentes radicales, pero de


pensamiento social muy avanzado para su época, la Constitución de 1917
estableció en la parte inicial del texto primitivo del Artículo 27, que la propiedad de
las tierras y aguas comprendidas dentro de los límites del territorio nacional,
corresponde originariamente a la nación, la cual ha tenido y tiene el derecho de
transmitir el dominio de ellas a los particulares, constituyendo la propiedad privada.
Luego entonces, las tierras de nuestra geografía completa son propiedad de la
Nación, esto es, del pueblo de México, sin distinción alguna para que todos vivamos
en armonía y para que las tierras rurales obtengamos cultivos, productos de
insumos para atender nuestras necesidades materiales, y, por qué no, también
recreativas, culturales y espirituales.

22.1EQUIDAD EN LOS EJIDOS Y SOCIEDADES:

22.1.1 FINALIDAD DE EVITAR LAS EXCEDENCIAS

Sobre el tema específico que nos ocupa, debemos decir que en las fracciones IV y
VII, párrafo quinto del mismo artículo constitucional, se prevé la situación de posibles
“excedencias”, expediente este que, por cierto, fue una novedad su instauración en
la última modificación que se le hizo al citado numeral, ya que desde la gestación,
nacimiento y desarrollo modificatorio que ha tenido nuestra actual y nonagenaria
Súper Ley, no se había contemplado esta figura agraria.
153
En efecto, conforme a la disposición, al interior de los ejidos ningún ejidatario puede
ser titular de una superficie mayor de la equivalente al 5% del total de las tierras del
ejido. Si, bajo cualquier título, el ejidatario posee una parcela mayor a ese
porcentaje, se dice que tiene una excedencia de tierras, y, por lo tanto, al sobrepasar
el máximo autorizado por la Constitución, ya sea por decisión propia, o a instancia
a parte interesada y de la Secretaría de la Reforma Agraria , debe proceder a la
enajenación de la porción excedida en su parcela, habida cuenta de que para llegar
a este supuesto, el Reglamento de la Ley Agraria en Materia de Ordenamiento de
la Propiedad Rural, establece los lineamientos para la instauración del
procedimiento de denuncia, investigación, integración y resolución de los casos de
excedentes de la propiedad al interior de ejidos, así como de las sociedades civiles
y mercantiles propietarias de acciones serie T y los de la pequeña propiedades.

22.1.2 TIPOLOGIA DE EXCEDENCIAS AGRARIAS

Según la categoría de las excedencias agrarias, se dan o se contemplan tres tipos


de excedentes a los límites de la propiedad rural, y se determina el área
competencial a la que cada uno queda sujeto, a saber:

• Ejidatarios que excedan el límite de la propiedad social de su respectivo


núcleo agrario la cual equivale al 5% de la superficie total de la tierra con que
fue beneficiado
• Socios y sociedades civiles y mercantiles que detenten más acciones o
partes sociales de la serie (T), que equivalen a la extensión de la pequeña
propiedad individual (100 hectáreas de riego o humedad de primera, una
hectárea de riego por dos de temporal, por cuatro de agostadero de buena
calidad y por ocho de bosque, monte o agostadero en terrenos áridos, o sus
equivalentes) y, por lo que se refiere a las sociedades, consideradas como
entes colectivos, no deberán rebasar 25 veces la propiedad privada.
• Propietarios de predios rústicos de propiedad privada que rebasen los miles
de tierra establecidos en la Constitución y en la Ley Agraria.

Cabe puntualizar o enfatizar que en los dos primeros casos, la Secretaria de la


Reforma Agraria, tiene la responsabilidad de vigilar que no se excedan os límites
permitidos por la constitución general del país, por la ley agraria y por su reglamento,
mientras que, en el tercero de los supuestos dicha obligación recae en la
Procuraduría Agraria.

Como se podrá advertir por todo lo expuesto, no se trata de despojar de sus tierras
a todos los ejidatarios, ni de actos de injusticia; si no de cumplir con la finalidad del
154
ejido: Constituir núcleo de población rural dotados de tierra, distribuida
equitativamente entre sus miembros en parcelas que, al procurar cultivos
agropecuarios, forestales, de producción minera, de explotación turista o de
cualquier otra vocación productiva que tenga la tierra, contribuya al proceso y
bienestar de las familias del propio núcleo de población, elevando su calidad de vida
y , con ello, coadyuvar al desarrollo del municipio al que pertenecen, al de su estado
y al de su país en general.

Evitar las excedencias de tierra en los núcleos agrarios, es una forma de evitar la
inequidad entre ejidatarios y mediante la protección, a estos núcleo de población
agraria y el respeto a la propiedad ejidal, al de las sociedades mencionadas, y ala
pequeña propiedad, se procura evitar la concentración de tierra, por lo tanto, el
resurgimiento de latifundios que, por sus nefastas e injustas consecuencias
registradas en la memoria histórica de México, prohíbe tajantemente la ley suprema
del país.

Regularizar la tenencia de la tierra, atender las solicitudes de campesinos para


constatar la posible existencia de excedentes y resolver conforme a la ley, es un
postulado de la constitución y de la legislación agraria; un imperativo del gobierno
federal; una preocupación, ocupación y vocación de las autoridades agrarias; una
forma de brindad y blindar la seguridad y certeza jurídica al campo y, por
consiguiente, de contribuir a realizar nuestro anhelo político: el pleno estado de
derecho y, en este caso particular , el completo estado de derecho agrario.” 1

155
1 Pampillo Baliño, Juan Pablo, Munive Paez, Manuel Alexandro, Derecho Agraria y Desarrollo rural, Editorial Porrúa,
México, 2013 p. 383

CAPITULO XXIII

LA JUSTICIA AGRARIA EN MEXICO, IMPORTANCIA Y PERSPECTIVAS

INTRODUCCIÓN

El asunto de la tierra en México, forma parte de la historia y de su desarrollo; de ello,


se realizaran en forma enunciativa mas no limitativa algunos comentarios sobre el
surgimiento y evolución de la tenencia de la tierra y, particularmente, de la
impartición de justicia agraria; principalmente, a partir del surgimiento constitucional
y legal de los tribunales agrarios, instancia jurisdiccional que forma parte de la nueva
institucionalidad agraria, así como de sus atribuciones, lo que les permite conocer y
resolver la muy diversa problemática agraria que es sometida a su consideración a
lo largo y ancho del país.

No menos significativo, es referir la importancia de la revolución mexicana, en el


establecimiento de un nuevo México rural, ha sido considerada con justicia, como la
primera de carácter social en el mundo del siglo XX; con ella además de iniciar la
democracia en México, se impulsaron las principales necesidades de la clase
campesina y de la trabajadora; de ahí su carácter social; consecuentemente,
haciendo suyos los asuntos más sentidos de la clase campesina y obrera, se
incorporaron en la constitución general de la república, los artículos 27 y 123.

23.1SURGIMIENTO Y EVOLUCION DE LA TENENCIA DE LA TIERRA

Han sido diversos momentos por los que ha pasado la tenencia de la tierra en el
medio rural; en principio, la sociedad azteca, antes de la llegada de los españoles,
no solamente tenía una verdadera estratificación social; más aún, contaba con una
ordenada y se han distribución de la tierra; por su importancia y trascendencia a lo
largo de más de 500 años, se hace referencia únicamente del Calpulli y del
Altepetlalli; como parte de sus formas de tenencia de la tierra; ambos, son el
antecedente más remoto del ejido y comunidad, respectivamente.

Los dos constituyen lo que se conoce como la propiedad social. Tanto el ejido, como
la comunidad, han tomado ese carácter, en razón de que a través del
establecimiento de una política de reparto agrario, sea creado y reconocido material

156
y jurídicamente. A diferencia de la propiedad en general, por más de siete décadas;
ambas formas de propiedad eran inalienables, inembargables, imprescriptibles e
indivisibles; es decir, tenía como principal objetivo en los distintos sujetos agrarios,
comuneros y ejidatarios, únicamente tenían el uso y disfrute, mas no la libre
disposición del bien.

Atendiendo a su antecedente y naturaleza jurídica, cabe mencionar que el artículo


52 de la derogada ley federal de reforma agraria, estableció las características de la
propiedad de los núcleos de población; a este respecto señalaba lo siguiente: Los
derechos que sobre bienes agrarios adquieren los núcleos de población serán
inalienables, imprescriptibles, inembargables y ´por tanto, no podrán en ningún caso
ni en forma legal alguna enajenarse, cedérseme transmitirse, arrendarse,
hipotecarse o grabarse, en todo o en parte.

23.2 EL DERECHO AGRARIO Y SU IMPORTANCIA

Con el objeto de contar con los elementos necesarios, antes de desahogar lo relativo
al tema que nos ocupa, se estima conveniente referir algunos aspectos a partir de
la definición de derecho agrario, para quien esto se escribe, se define en los
términos y explicación siguientes:

Como el conjunto de normas jurídicas, doctrina y jurisprudencia de caracteres


sociales tendentes a reguilar las diversas formas de propiedad en el medio rural así
como su producción, distribución y comercialización de sus productos.

Sin embargo hoy en día la ley agraria permite que se puedan combatir dificultades
del pasado, porque en la actualidad, los productores podrán participar con
propuestas para mejorar la producción e impulsar los canales de comercialización.
No se puede pasar por alto, que dicho desarrollo puede ser posible con acciones
comprometida de los sujetos agrarios, contando con el apoyo del poder ejecutivo
federal, todo ello, lo podemos señalar como aspectos necesarios para lograr un
verdadero desarrollo rural sustentable; cabe recordar, que a la fecha se cuenta con
la ley reglamentaria de la fracción XX, del artículo 27 constitucional, de nominada
ley de desarrollo rural sustentable.

Actualmente se han observado cambio de paradigmas en esta materia; en


consecuencia, la materia agraria es eminentemente jurisdiccional, a través del juicio
agrario particularmente, para la solución de la diversa problemática agraria.”1

157
1 Pampillo Baliño, Juan Pablo, Munive Paez, Manuel Alexandro, Derecho Agraria y Desarrollo rural, Editorial Porrúa,
México, 2013 p. 383

BIBLIOGRAFIA

Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, Editorial Porrúa, México,


D.F. 2012

González Navarro, Gerardo N., Derecho Agrario, Editorial Oxford, México, D.F.
Junio2013

Rivera Rodríguez, Isaías, El Nuevo Derecho Agrario Mexicano, Editorial McGraw-


Hill, 2013

Pampillo Baliño, Juan Pablo; Munive Páez, Manuel Alexandro, Derecho Agrario y
Desarrollo Rural, Editorial Porrúa, México, D.F. 2013.

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