Las Tres Leyendas Célticas de Macha:: Reflejos de La Transición Hacia Una Sociedad Patriarcal
Las Tres Leyendas Célticas de Macha:: Reflejos de La Transición Hacia Una Sociedad Patriarcal
Las Tres Leyendas Célticas de Macha:: Reflejos de La Transición Hacia Una Sociedad Patriarcal
Sumario
En la arcaica literatura oral y mitología de los antiguos celtas que fue recogida en Irlanda en
forma manuscrita en los primeros siglos de nuestra era, aparecen tres leyendas diferentes y
consecutivas de Macha, una de las más importantes diosas célticas. Estas tres leyendas son
analizadas aquí tratando de demostrar a través de ellas el cambio producido en esos pueblos desde
una sociedad matricéntrica a otra patriarchal
Abstract
The archaic oral literature and mythology of the old Celts, collected in manuscript form in
Ireland during the first centuries AD, contains three legends of Macha, one of the most important
Celtic goddesses. These legends are analyzed herewith trying to show the change which took place
in the Celtic communities from a matri-centered society to a pathriarcal one.
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LAS TRES LEYENDAS CÉLTICAS DE MACHA...
Fig. 1-2.- Triple espiral grabada en una roca exterior de la entrada del túmulo megalítico de
Newgrange, Condado de Meath, Irlanda.
Anuario Brigantino 2000, nº 23
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LAS TRES LEYENDAS CÉLTICAS DE MACHA...
MACHA
En las arcaicas leyendas y tradiciones de
Irlanda aparecen varias Machas, epónimas de
Los Llanos de Macha, la Ciudadela de Macha
(Emain Macha, capital de Ulster en la época
pagana), la Colina de Macha (Ard Macha, que
es hoy la metrópolis de la Iglesia Católica de
Irlanda), y patrona de la Asamblea o
Festividad de Lugnasad, el 1 de agosto. Estas
divinidades forman una serie que va desde la
época pre-histórica mítica y pagana hasta los
primeros tiempos de la era cristiana; desde
Macha, esposa de Nemed, caudillo de uno de los primeros pueblos que invadieron la isla,
hasta Macha, esposa del campesino Crunnchu, que era contemporario del rey Conchobar.
Macha es una divinidad muy compleja, con tres manifestaciones diferentes pero inter-
relacionadas, que abarcan conceptos de guerra, liderazgo y fecundidad. El conocido erudito
céltico Bo Almqvist cree ver en una de las historias de Macha, ”La Debilidad de los
Hombres de Ulster” (reproducida más adelante), una variedad de la leyenda de Mélusine,
donde una mujer supernatural toma a un mortal por esposo, le impone ciertas condiciones
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MANUEL ALBERRO
que él más tarde no cumple, con el resultado de que ella lo deja para retornar a su propio
mundo del ”más Allá”.14
En un verso del Leahbar Gabhála o “Libro de las Invasiones de Irlanda”,15 Macha es
descrita como una diosa del trío formado por ella junto con Badbh y la Morrígan, las
llamadas Morrígna, que eran simultáneamente una y tres, y combinaban atributos de
destrucción, sexualidad y profecía. A menudo predecían muertes, fatalidades o fracasos,
y su imagen está poderosamente reflejada en el mito de “La lavandera del vado”: cuando
un héroe-guerrero estaba a punto de hallar la muerte, una de estas “tres furias” aparecía en
la corriente de un riachuelo convertida en una bella doncella, lavando su armadura y sus
armas entre grandes y sonoros alaridos y lamentos, en un acto que precede a su
desaparición del mundo de los mortales y su viaje hacia “El Otro Mundo”.16
Estas tres diosas bélicas no participaban físicamente en los combates, ya que sus
métodos eran psicológicos: sus horribles alaridos, insultos y amenazas helaban la sangre
de los soldados más valientes, que abandonaban las armas y huían despavoridos. Su
presencia en un campo de batalla podía llenar de coraje a los que ellas protegían y causar
la muerte y derrota de los que destestaban. Cambiaban frecuentemente su figura,
presentándose de repente en forma de cuervo, ave que en el simbolismo céltico representa
guerra y destrucción. También cambiaban de imagen corporal desde una vieja harpía
eróticamente agresiva, fea y repelente- representando a menudo soberanía- hasta una
adorable y hermosa doncella, y viceversa.17 Las tres Matres de los primeros tiempos de la
cultura céltica, que representaban a la Diosa-Madre o Madre-Tierra y sus atributos
acuáticos (en fuentes, manantiales, arroyos, ríos, lagos), como se ha indicado arriba, eran
especialmente reverenciadas por los celtíberos.18
El nombre de Macha puede significar “campo” o “llanura”, lo que la conecta
directamente con el campo y lo rural. En el gran poema épico Táin Bó Cualnge citado más
adelante, Macha profetizó la destrucción y mortandad que iba a causar esa guerra que casi
aniquila toda Irlanda; ella estuvo además dedicada al talado de bosques y limpieza de
llanuras para ser utilizadas como cultivo o pasto del ganado. Estos dos atributos, profecía
y creación de nuevos terrenos, la definen como una diosa de soberanía.
Macha aparece en dos de los cuatro grandes tratados céltico-irlandeses, el “Ciclo de
Ulster” y el “Ciclo Mitológico”.19 En el Leahbar Gabhála aparece como esposa de
Nemed, líder de la tercera invasión de Irlanda según la mitología céltico-irlandesa. El rol de
Macha es complejo y variado: guerrera, gobernante, profetisa, matriarca, guardiana y
benefactora del bienestar de Irlanda; pero también vengativa cuando algún humano le
hacía algún mal. En algunas historias aparece como una gran reina humana poseedora de
cualidades sobrenaturales, aunque mortal. Un cierto número de autores creen ver en la
14 Almqvist, p. 15.
15 Leahbar Gabhála, tr. R.A.S. Macalister and J. Mac Neill, 1916; Lebor Gabála Érenn, tr. R.A.S.
Macalister, 1938-56; Hennessey p. 37; Green pp. 41-42.
16 Green, p. 42.
17 Ross 1974, p. 131.
18 Fernández Castro, p.360.
19 Los cuatro ciclos son el Mitológico, el Ulster, el Fenian y el Histórico. Ver: A. and B. Rees, p.26.
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caída paulatina de Macha en las tres historias que se han logrado conservar el derrocamiento
realizado por los hombres del período de dominación femenino.20
En Ulster había una vez tres reyes, quienes se pusieron de acuerdo en que cada uno de
ellos reinaría sucesivamente durante un período de siete años. Como responsables de
garantizar y mantener el acuerdo designaron a siete druidas, siete poetas y siete capitanes.
Y como prueba de la calidad de justicia ejercida en cada reinado se establecieron tres
condiciones: en el momento en que dejara de cumplirse una de ellas, el rey de turno sería
depuesto de inmediato. Estas eran: buenas cosechas habrían de presentarse regularmente
cada año, no debería haber nunca falta o escasez de tinte (el arte de teñir las telas estaba
a cargo de las mujeres), y ninguna mujer habría de perder la vida durante el parto. Esta
20 Hennessey, pp.32-55; de Vries, pp. 136-7; Killeen, pp.81-6; Ross 1967, pp. 219-29; Mac Cana, pp.
86-9; Condren, pp.23-43; Clark, pp.114-15; Herbert, passim.
21 Stokes (1895), p. 45.
22 The Ancient Irish Epic Tale Táin Bó Cúalnge, (1914); The Tain, tr. T. Kinsella, (1969); M-L.
Sjoestedt, p. 29.
23 El original gaélico se halla en el Leabhar Laignech (Book of Leinster). Además de la traducción y
edición de Stokes en 1895, las más recientes ediciones son: Best and Brien 1956; Hull 1968, pp. 1-42;
Sjoestedt 1994, pp. 28-29). Del Book of Leinster existe una edición facsimil: Leabhar Laignech
(1880), London. (Recopilación y trad. del autor).
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prueba de la existencia de justicia en el reino significaba así que deberían prosperar aquellas
áreas tradicionales de la actividad y creatividad femenina.
Las cosas marcharon bien hasta que murió uno de los reyes, Aed el Rojo. Aed dejó
solamente un heredero, una hija llamada Macha la Pelirroja, quién exigió entonces ocupar
ella misma el puesto de heredero de su padre en el turno de sucesión que habían establecido.
Los otros dos reyes rechazaron esta demanda aduciendo que no podían entregar el reino
a una mujer. Macha luchó entonces contra ellos, los venció, y ocupó el trono. Al pasar los
siete años de su turno, Macha rehusó entregar el reino al próximo rey en turno
argumentando que ella lo había ganado en una batalla y no a través del acuerdo original.
Y como ellos habían violado el acuerdo, razonó, éste había perdido ya su validez. Los hijos
del segundo rey, Dithorba, quién había perecido en la primera batalla, entablaron de nuevo
la lucha contra ella. Y ella los venció de nuevo y los desterró a los descampados de
Connaught. Macha tomó entonces al tercer rey, Cimbaeth, como marido y como general de
sus ejércitos.
Pero Macha no estaba aún satisfecha. Tras la boda, se dirigió en busca de los hijos de
Dithorba disfrazada de leprosa, habiéndose frotado todo el cuerpo con masa de centeno y
polvo de musgo rojo. Encontró a los hombres en un claro del bosque, donde uno de ellos,
el primero que la vió, dijo: “!Bellos son los ojos de la bruja! !A fornicar con ella!” Macha
dejó que la llevara a un lugar apartado del bosque, y allí lo atacó, lo venció y lo dejó bien
amarrado. Regresó entonces adonde estaban los otros alrededor de una hoguera, y ellos
le preguntaron por su hermano. “Está avergonzado de regresar ante vosotros después de
haber fornicado con una leprosa”, les contestó Macha. Los hombres exclamaron entonces
que eso no era motivo alguno de vergüenza, y que estaban dispuestos a hacer lo mismo;
y uno por uno se fueron con Macha al interior del bosque, donde ella los fue sucesivamente
aprisionando y amarrando. Al final se los llevó prisioneros a Ulster.
Al llegar a Ulster y enterarse de lo ocurrido, los guerreros quisieron matar de inmediato
a los cautivos. Pero Macha tenía mejores ideas: “!No!” -les dijo- “ya que ello representaría
para mi una violación de la palabra real. Pero pongámolos a trabajar en condición de
esclavos, para edificar un rath (un castro) alrededor de mi, para que sea para siempre la
capital de Ulster”.
La tercera historia de Macha; ”La aflicción de los hombres de Ulster”, o ”La Maldición
de Macha”24
Un día, el viudo Crunnchu (o Crund) Mac Agnomen, un rico campesino, estaba solo
en su casa cuando sin aviso alguno, una bella y majestuosa doncella entró de repente en
su morada. Sin pronunciar palabra alguna, la joven se afanó de inmediato en atender las
tareas del hogar. Cortó leña, atizó el fuego, ordeñó la vaca, amasó y horneó el pan, cocinó,
sirvió, lavó la vajilla de madera… todo ello bajo el silencio más absoluto. Cuando acabó,
circuló alrededor del cuarto tres veces en la manera ritual, esto es, hacia la derecha, en el
sentido del curso solar, y se metió seguidamente en la cama de Crunnchu y le hizo el amor
carnal. Quedó embarazada de él, y desde aquél mismo día todo prosperó sobremanera en
24 El original está también en el Leahbar Laignech, Book of Leinster; aparece también en un alto
número de publicaciones: Stokes, (1894), pp. 273-336; Sjoestedt, p. 27; Cross, T.P. and C.H. Slover,
pp. 208-10; The Tain, tr. T. Kinsella, pp. 6-8. (Recopilación y traducción del autor).
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esta asamblea. Yo soy Macha, hija de Sainreth mac in Botha (El Extraño Hijo del Océano).”
Cuando trajeron de nuevo los caballos para comenzar la prueba, ella se suelta los
cabellos, inicia la carrera y alcanza la meta mucho antes que los caballos. Y en ese momento
da un gran grito y muere, dando al mismo tiempo a luz a dos gemelos, un varón y una
hembra, “Los Mellizos de Macha”, que más tarde darían nombre a la capital del Ulster.
Justo antes de morir, ella maldice a los hombres de Ulster, que quedan semi-paralizados
con fuertes dolores. Y predice que:
“Desde este momento, la ignominia que me habéis inflingido va a llenar de vergüenza
a cada uno de vosotros. Durante el momento crítico de una batalla, o en cualquier hora de
opresión o peligro, cada uno de vosotros, hombres, sera abatido por una gran debilidad y
postración, y sufrirá los mismos dolores que sufre una mujer al dar a luz, y esos dolores
durarán cinco días y cuatro noches. Y esta maldición persistirá por nueve veces nueve
generaciones”.
Este es el origen de ”La Aflicción de los hombres de Ulster”, un maleficio que afligió
a todos los varones de esa provincia durante el tiempo dictado por Macha.
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LAS TRES LEYENDAS CÉLTICAS DE MACHA...
26 Una lista muy completa de las divinidades célticas aparece en: Mac Culloch, pp. 27-28 y Nota 5. Ver
también Miranda Green, Celtic Goddesses, y A. Ross, Pagan Celtic Britain.
27 Chadwick, N., p. 154; Ross 1974, pp. 204-33; Sjoestedt, pp. 24-31.
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”esposa de…”, o ”hija de…”. Esto a medida que la sociedad céltica iba pasando de un
estado en que la mujer ocupaba un alto rango hacia una sociedad de corte ”heroico”, de
guerreros, netamente patriarcal, donde aquélla era dependiente y vulnerable. Este era el
final de una religión y una sociedad matricéntrica.
En el curso de las tres historias se halla reflejado todo el proceso del cambio de una
sociedad matricéntrica a una patriarcal. En la historia de los tres reyes, vemos como Macha
no tolera en absoluto la discriminación contra la mujer en el aspecto del liderazgo político,
y como tomó la iniciativa en el de las relaciones sexuales, al escoger ella misma a Cimbaeth
como esposo. Este último hecho muestra también una gran madurez política: al situar a
Cimbaeth como su esposo y general de sus ejércitos (bajo su mando real) neutralizaba al
mismo tiempo a un potencial enemigo y aspirante al poder. Además, Macha rechazó el
matar simplemente por matar, o por venganza, prefiriendo una forma no violenta y más
pragmática como método de castigo.
En “La Maldición de Macha”, ésta irradia un aire de paz, calma y tranquilidad, contenta
con su destino. Ella es la guardiana del fuego del hogar, y como tal, la patrona y protectora
de la vida doméstica y la estabilidad social. Macha posee aquí los inconfundibles atributos
de una diosa asociada con la tierra y la fertilidad: se casa con un campesino, asume control
de sus asuntos domésticos, y produce un aumento de bienes en sus propiedades; es
también personalmente fecunda y fructífera, dando a luz a dos gemelos. Y al igual que en
la leyenda anterior, es ella misma quien toma sus propias decisiones acerca de su sexualidad,
al ir directamente a casa de Crunnchu y hacerlo su marido.
En esta última historia se puede ver también como la maldición de Macha es una
maldición a la era patriarcal que triunfaba a grandes pasos sobre la antigua sociedad. El
hecho de que los hombres hubieran de padecer dolores semejantes a los de una mujer
durante las labores del parto es interpretado por algunos eruditos como una representación
de couvade, una práctica común en muchos pueblos de la antigüedad en la que el padre se
acuesta en una cama para imitar el dolor y prostración de la madre que está dando a luz, y
permanence en ese estado durante dos o tres días. Esta costumbre ha sido descrita en
muchos pueblos de todos los continentes, y en ciertas regiones remotas se sigue
practicando aún en nuestros días. Macha ofrece en esto un paralelo con la diosa Artemis
de los antiguos griegos, quién murió al dar a luz, y en cuyos festivales un joven imitaba
sus labores de parto.28 Otra interpretación del significado del couvade es el que en este
ritual de iniciación del hombre, éste, imitando los dolores del parto, esperaba conseguir la
ayuda de la Diosa-Madre en sus futuras aventuras bélicas. El hombre creía que si imitaba
los movimientos de una mujer al parir, la Diosa podría ser persuadida con ello a que le
ayudara, lo mismo que ayudaba a las mujeres durante sus labores de parto.
Al igual que ocurre en muchos otros ritos paganos patriarcales, esta historia de Macha
apunta hacia el drama de la muerte de la mujer y el hecho de que ésta es desposeída de sus
anteriores poderes y alta posición en la sociedad. De hecho, un alto número de eruditos
28 Este tema y otros similares (gestaciones histéricas, rituales al tiempo del nacimiento y otras formas
de imitación por parte del hombre de los poderes femeninos de fertilidad, gestación y procreación) es
tratado con detalle en: Eliade, M. (1975). La práctica del couvade es descrita en los tratados de
Antropología y Sociología, y en especial en varias obras de Claude Levi-Strauss.
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29 Hennessey, pp. 32-35; de Vries, pp. 136-37; Ross (1967) pp.219-29; Killeen, pp- 81-86; Mac Cana,
pp. 86-89; Clark (1991); Herbert (1993); Green, p.77.
30 Neumann, E. (1949); Irigaray, L., citada por D. Stanton, p. 160.
31 En esto difieren los celtas de otros pueblos indoeuropeos de la antigüedad que conmemoraban con
grandes fogatas y fiestas el solsticio de verano (Midsummer, que aún se sigue celebrando en los países del
Norte de Europa) y el de invierno el 21 de diciembre. El primero de estos dos acontecimientos fue
gradualmente transformado por los primeros cristianos en el Día de San Juan, y el segundo en el Día
de Navidad.
32 Sjoestedt, p. 52.
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Pues bien, esa festividad céltica de Samain que había sido originalmente una fiesta
agrícola y ganadera donde se celebraba la recogida de las cosechas y el encierro del
ganado ante el próximo invierno, probablemente se fue convirtiendo con el tiempo en una
fiesta más bien guerrera donde el culto al héroe y al guerrero reemplazaron al de la
creatividad femenina.
Durante el proceso de derrocamiento de la religión y sociedad matricéntrica, la creciente
suspicacia hacia las mujeres y sus misterios contribuyó a que éstas no volvieran nunca
más a ejercer posiciones vitales de poder religioso y político. Ahora reinaba el culto al
héroe masculino. El grito de Macha “!Una madre ha criado a cada uno de vosotros!” fue
probablemente el último intento simbólico de apelación a la maternidad como base de la
ética pública y social. Llegaban los tiempos de la sociedad “heroica” dirigida por guerreros
masculinos. Y el cambio se habría de acentuar con la conquista de los países célticos (con
excepción de Irlanda) por las legiones romanas y la imposición de sus códigos griego y
romano, y un recorte más profundo aún en el rol de la mujer en la sociedad; y estos
recortes se habrían de incrementar más aún con la llegada de los francos, anglos, sajones
y normandos.
La Triple Diosa, cuya imagen en espiral representaba vida, muerte y renacimiento, el
ciclo del eterno retorno, había sido destituída de una vez por todas. Con el tiempo, apenas
unos siglos más tarde, la Triple Espiral habría de ser reemplazada por el signo cristiano de
la Cruz y esa Triple Espiral indoeuropea y céltica sería a su vez sustituída por la Trinidad
de Padre, Hijo y Espíritu Santo: la Iglesia Cristiana habría de convertirse históricamente en
el portador de los valores y símbolos patriarcales en el mundo occidental.
APENDICE A:
El poema-conjuro de Amergin 33
33 Esta versión es producto de una traducción realizada por el autor de este artículo con base en el
Leahbar Gabhála, tr. Macalister and Mac Neill, pp. 265-267. Aparece también en las siguientes
fuentes: Sharp, E.A and J. Matthay, p.3; Cross, T.P. and C.H. Slover, pp.2-7; Lebor Gabála Érenn,
R.A.S. Macalister, Vol.V, pp. 110-13.
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LAS TRES LEYENDAS CÉLTICAS DE MACHA...
Este poema o recitación fue compuesto por el druida y poeta de los celtas goidélicos
o milesianos Amergin o Amairgen. Según el Leahbar Gabhála, estos grupos celtas residían
en Galicia, con su aldea principal en Brigantia (famosa por su altísimo faro, o Torre de
Breogham); desde allí navegaron hacia Irlanda, la que colonizaron. El poema de Amergin
está considerado como el más antiguo de ese último país; y estas son las líneas más
antiguas que aún se conservan de una lengua vernacular de Europa, exceptuando la
griega.
Este extraño fragmento poético panteista, al igual que el resto de la invasion milesiana
de Irlanda, se halla envuelto en el peculiar misterio que caracteriza a la arcaica mitología
céltica. El poema provée a la llegada de los milesianos a Irlanda con un significado que va
más allá de la de una simple invasión: 34
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Bhagavad-Gita, declara ser “la divina semilla que anima todo lo existente”. Es el principio,
el curso y el fin de la vida: ”Soy el sol radiante entre los proveedores de luz… entre las
estrellas de la noche; yo soy la Luna”. ”Soy el océano entre las aguas… Soy el viento…
Soy la fortaleza del castro… Soy el silencio de las cosas secretas… Soy el conocimiento
del conocedor”. Vishna exclama una serie de Soy…, y se declara como ”el juglar cósmico
y el mago”. Él es todas esas apariencias a través de las que la verdadera esencia de la
existencia se manifiesta a si misma: “los ciclos del año, la luz, el viento, la tierra, el agua, los
cuatro cuartos del espacio…”.35
Amairgen, en forma similar, incorpora la unidad primitiva de todas las cosas. Como tal,
posée el poder de crear nuevas tierras, nuevos mundos; y sus poemas poseen la naturaleza
de conjuros de creación. Con uno de ellos conjura bancos de peces hacia las ensenadas,
con otro recrea los atributos de la tierra de Irlanda al recitarlos de nuevo. Su fuerza y su
prestigio es tal, que los antiguos habitantes de Irlanda confían en él, a pesar de llegar allí
con los invasores, para resolver su disputa bélica con los milesianos.
Un resumen de la historia de la invasión es presentado a continuación en el Apéndice
B.
APENDICE B:
La invasión de Irlanda por los celtas milesianos procedentes de Galicia36
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LAS TRES LEYENDAS CÉLTICAS DE MACHA...
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