El Jardín Secreto, Literatura Infantil de Calidad GARRALON ANA PDF

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 5

La semilla Decur

de los cuentos

Ana
Garralón

16

Letras Libres
DICIEMBRE 2013

La literatura de calidad apuesta no por enseñar


valores sino por revelar a los niños las tensiones
de un mundo que es todo menos cándido y
simple. Ana Garralón detalla el proceso que va
de los primeros juegos verbales a la subversión
que late en las grandes historias infantiles.

016-020-Dossier-Uno.indd 16 14/11/13 20:48


17

na de las sorpresas que De hecho, los editores que finalmente publicaron la nove-
ofreció la apertura de la estaban alejados de etiquetas como “infantil” o “esco-
los Juegos Olímpicos lar”. La locura que, con el paso de los años, se desató entre
de Londres 2012 fue el los niños es conocida por todos: lectores ávidos de nuevos
homenaje que se le libros, multitudes esperando a las puertas de las librerías, 17
rindió a la literatura colas para tener un ejemplar firmado por la autora y, lo más
infantil británica. J. K. importante, niños creciendo mientras lo hacían los prota-
Rowling leyó un frag- gonistas de sus libros.
mento de Peter Pan Con Harry Potter el deseo de leer, de compartir y tener
y personajes conoci- libros se convirtió en un acontecimiento que contagió Letras Libres
DICIEMBRE 2013
dos como la Reina de incluso a muchos adultos que hacía años no leían nada. El
Corazones, de Alicia fenómeno Harry Potter, sin embargo, no nos sorprendió a
en el País de las Maravillas, o el Capitán Garfio, entre otros, quienes nos dedicamos al estudio y la creación de literatu-
hicieron acto de presencia ante un público aparentemen- ra infantil: en todos los tiempos y lugares, los niños se han
te alejado de los libros que representaban. Al mismo tiem- apropiado de los libros que les interesaban, de las historias
po decenas de Mary Poppins descendían de los aires con que los cautivaban. Estos libros, estas historias, no son las
sus paraguas abiertos mientras se escuchaba la música de moralizantes ni llenas de valores que históricamente han
Mike Oldfield. surgido de la mano de la pedagogía y su conocido “ins-
No es extraño que Reino Unido recordara en un evento truir deleitando”. Son historias en las que se perciben con-
que iba a ver medio planeta algo importante para su cultu- flictos políticos o sociales, referencias a la realidad trágica
ra: es el país que más y mejores creadores de historias para y a menudo cruel de las relaciones humanas. No impor-
niños ha producido, y donde muchos de los autores que ta si se presentan bajo la forma de un cuento de hadas a la
escriben para niños lo hacen desde una perspectiva litera- lumbre del hogar, de las aventuras de un náufrago como
ria y con una empatía hacia el mundo infantil singulares. Robinson Crusoe o de las historias debidas a Swift, Verne
Resultó inmejorable que fuera J. K. Rowling la encarga- o Dickens, entre otros, que habían escrito sus libros origi-
da de representar a los autores más populares de la litera- nalmente para un público adulto. Lo que los niños valo-
tura para niños. No está de más recordar que la saga Harry raban y valoran aún hoy es la capacidad de los escritores
Potter fue escrita en condiciones de penuria personal y, lo para crear personajes, situaciones y aventuras en las que
más interesante, rechazada por más de quince editoriales. está presente un imaginario siempre inesperado y dispues-
Ella había mandado su manuscrito a editoriales dedicadas to a responder muchas preguntas, incluso las que no han
a publicar libros para niños, y a ninguna le había interesado. formulado todavía.

016-020-Dossier-Uno.indd 17 14/11/13 20:48


Sobre la importancia de la literatura infantil debo decir Ese galope, una vez comenzado, es imparable. Pronto los
que lo más significativo es encontrar en la literatura un espa- niños desean escuchar cuentos antes de dormir. Historias
Ana cio de liberación y hasta de subversión. El placer de encon- que abran las puertas del imaginario. Buscan, con sus pro-
Garralón trar en un libro deseos que no se pueden desarrollar en la pios medios y a través de la palabra, salir del pequeño
realidad es uno de los descubrimientos más reveladores en mundo de rutinas y frustración que es su cotidiano. Han
la vida de un niño. Y esto comienza incluso antes de apren- encontrado la llave. La misma llave que tenía la protagonista
der a leer. Descubrir el sonido de su nombre, reconocerlo de El jardín secreto –la novela de Frances H. Burnett– y que
posteriormente en un conjunto de letras. Y que esas letras abre la puerta a un espacio lleno de símbolos acerca de la
18 sean portadoras de un mundo inimaginado. Para el niño, vida y la naturaleza. El lenguaje aparece como una mane-
pasar del código escrito al ficticio o simbólico es un proce- ra de intervenir en lo real mediante el imaginario. A veces
so que marca un antes y un después. La realidad se extien- basta una simple adivinanza para descubrirle a un niño el
de y se multiplica: el mundo aparece de diversas formas con humor, el disparate, la trasgresión.
la palabra escrita. Eudora Welty, la gran novelista estadou-
nidense, recuerda en sus memorias la decepción que sintió –¿Qué cosa tiene cuatro patas y no puede andar?
Letras Libres cuando descubrió que los libros estaban escritos por perso- –Una mesa.
DICIEMBRE 2013
nas y que no eran “maravillas de la naturaleza que brotaban
como la hierba”. Luego llega el “había una vez”, esa sencilla manera de
El lenguaje comienza a ser una herramienta que ayuda contar la complejidad del mundo, y los niños rápidamen-
a los niños a organizar su propia experiencia y a compartir- te aprenden a distinguir el lenguaje coloquial del lenguaje
la con los adultos que les rodean. Enseguida aparecen los literario. El libro es una realidad física, un delicado objeto
juegos de palabras, las rimas sencillas, los trabalenguas, la lleno de promesas en cuyas páginas hay un jardín secreto.
formulita elemental. El adulto que ofrezca a los niños esta Y la llave es la palabra que pronto desean descifrar. Cada
experiencia única y temprana se verá recompensado con relato les ayuda a renovar la facultad de imaginar mundos.
un vínculo afectivo especial. El gusto por la repetición, el Y el libro les brinda el sentimiento de que lo que nace de los
momento compartido y la carga imaginaria de la palabra textos, de los libros, no nace solo una vez para luego desapa-
inauguran un espacio lleno de promesas, como cuando un recer, sino que puede renacer en cualquier momento, por-
adulto le canta al bebé que tiene en las piernas: que basta con abrir sus páginas. Bien lo ha señalado Félix
de Azúa: “imaginar mundos quiere decir habitarlos y, por
Al paso, al paso, al paso. lo tanto, imaginar posibles modos de habitar el mundo”.
Al trote, al trote, al trote. Al poco tiempo, estas maneras de entrar en otros imagi-
¡Galope, galope, galope! narios crean una conexión con preguntas propias de la vida

016-020-Dossier-Uno.indd 18 14/11/13 20:48


y configuran un íntimo diálogo entre lectores y libros. Basta verosímiles que la realidad cotidiana. Para el adulto es tam-
leer Psicoanálisis de los cuentos de hadas, de Bruno Bettelheim, bién un momento de calma y asombro. Al pasar las pági-
para darse cuenta de qué manera la psique de los niños se nas con los niños, al escuchar sus comentarios y dialogar,
ve influida por estos mundos maravillosos. Las emociones los adultos están también advirtiendo un mundo de emo- 19
humanas están interpretadas en cada historia. Es fácil para ciones transmitido de una generación a otra.
los niños reconocer e identificarse con los buenos, con el El catedrático de literatura inglesa Derek Attridge afir-
héroe mil veces repetido que les da las primeras metáfo- ma “que experimentamos las obras literarias no tanto como
ras de la vida, como nos lo recuerda Joseph Campbell: los objetos sino como acontecimientos, y como acontecimientos
que se aventuran al viaje y regresan transformados en que pueden ser repetidos una y otra vez y que, sin embargo, Letras Libres
DICIEMBRE 2013
lo que podrían ser; los que fracasan y perecen; los que recha- nunca parecen ser exactamente iguales”. La infancia es una
zan el viaje y se quedan sin cambios. Luego están los alia- época en la que lo real y lo ficticio no colisionan sino que
dos en el camino, el retorno, la crisis después del viaje, la se alimentan mutuamente. En la reciente Feria del Libro
alegría de la vida, el triunfo del más débil, el amor, la feli- de Frankfurt el escritor brasileño Luiz Ruffato presentó un
cidad. Aparecen en este mundo maravilloso las cuestiones conmovedor discurso de apertura donde destacó el poder
fundamentales del ser humano: la soledad, la duda, el amor, transformador de la literatura. Se puso como ejemplo a sí
la confianza, la nostalgia, el abandono, la tragedia, la amis- mismo: hijo de una lavandera y de un vendedor de palomi-
tad. Como dice Gustavo Martín Garzo en Una casa de pala- tas de maíz semianalfabeto, la literatura cambió de mane-
bras: “Lo maravilloso, al contrario de lo que suele decirse, ra radical su vida.
no nos aparta del mundo, sino que hace de ese mundo el La literatura es muchas veces una forma de organizar y
reino de la posibilidad.” reunir fragmentos de un cierto caos. Las historias de calidad
A través del mundo simbólico, los niños comienzan a permiten a los niños salirse de lo real cotidiano para com-
establecer un diálogo con la cultura, y en ese diálogo plan- prenderlo mejor, para controlarlo y superarlo. Las historias
tean preguntas, se muestran activos y creativos. Las veladas les despiertan el ansia de descifrar e inventar el mundo. Y
con libros pasan a ser momentos para desbloquear el ima- aparece un pacto mayor: el del escritor con el lector. Con ese
ginario. De repente un libro es especialmente amado, un pacto, ambos arman y desarman el mundo, para aceptar y
hallazgo que deja una huella: desean escuchar la historia, disentir. Se trata de un vínculo, de una relación comunicati-
leerla una y otra vez. Una singular y tranquilizadora afición va de gran complejidad, pues es un adulto el que escribe y se
que los adultos que les leen en voz alta no siempre com- dirige a los niños. El escritor, el buen escritor, siempre agita
prenden, pero aceptan como prueba de amor. Porque intu- al lector y lo modifica. No importa el lugar, el momento y
yen, al igual que fue para ellos, un espacio donde organizar el estilo. La escritora brasileña Marina Colasanti nos con-
el caos de la vida con relatos que, narrativamente, son más firma que “los seres humanos, en su esencia más profunda,

016-020-Dossier-Uno.indd 19 14/11/13 20:48


cambian muy poco. Para alcanzarlos en cualquier época, e páginas, el olor del libro, el momento de calma para el cual
independientemente de la edad que tengan, basta que el no importaba si el día había sido agitado, la capacidad de
escritor alcance su esencia”. transportarse por el tiempo y el espacio, el calor de la ocasión.
Los niños reconocen de inmediato esa esencia –da igual No es extraño que muchos de los libros que ahora lla-
si el libro lleva o no la etiqueta “infantil”– y se apropian de mamos “infantiles” fueran prohibidos en las escuelas.
los autores que ponen en entredicho el mundo real, inclu- La “madrastra pedagógica” –como muy bien la definió
sive si se sirven del ridículo para lograr su cometido. Los Felicidad Orquín, en un artículo del mismo nombre, y
libros sugieren que hay otras formas de ver la vida, y se bur- como ridiculizó Daniel Pennac, en Como una novela– es
lan de ideas vigentes apelando al niño imaginativo y rebel- el principal obstáculo de una literatura de calidad para
de. La literatura infantil de calidad lucha contra la idea de niños. De una literatura libre y franca. Los escritos des-
que el mundo del niño es cándido y simple, y da cabida a tinados a los niños, esos que ya solo se encuentran en
temores, angustias, deseos insatisfechos, pulsiones íntimas los libros de historia de la literatura infantil, debían ins-
como celos, sueños de hacerse mayor o volver a ser peque- truir y preparar moralmente a los pequeños. Todavía hoy
ño. Pulsiones que ni son aceptadas por el mundo adulto ni, muchos mediadores, escritores y editores buscan “valores”
en la mayoría de los casos, los niños son capaces de anali- sin darse cuenta de que esas obras pasarán rápidamente al
zar y mucho menos exteriorizar. olvido. Libros que no darán ningún “apetito” a los niños
Este “paraíso” que es la infancia, como en alguna ocasión por seguir leyendo. Sin embargo, quienes en el siglo xxi
ha sido denominado, se caracterizaría por una constante ten- leen Tom Sawyer siguen encontrando diversión en ese niño
sión entre lo permitido y lo prohibido, entre el mundo del “malo” cuyas aventuras fueron prohibidas en su tiempo.
deseo y el de la realidad. Y aparece entonces la literatura, en Alicia en el País de las Maravillas tampoco fue entendida por
un momento particularmente importante en la formación un buen número de adultos que se toparon con la histo-
de la personalidad del niño. Le enseña un mundo de senti- ria de una niña activa, valiente, impaciente y, no en pocos
mientos encontrados que comparten todos los niños mien- momentos, crítica. Todavía en la actualidad, muchos dis-
tras crecen y abandonan, paulatinamente, el papel de niño cursos sobre Alicia se dirigen a la figura de Lewis Carroll
salvaje. Frente a un modelo de literatura didáctica o mora- en lugar de centrarse en su maravillosa obra. Pero no olvi-
lizante, que propone ejemplaridad, determinados autores demos que fueron los niños los únicos que le dijeron al
toman partido por los niños y no temen ridiculizar el mundo emperador que iba desnudo, y ellos siempre han elegi-
adulto. Recordemos que en la novela de Peter Pan los padres do sus propias lecturas. Sin duda prefieren libros que les
no salen muy bien parados. En Mary Poppins los papás no llevan a la ensoñación, la desobediencia, la réplica, o a
pueden hacerse cargo de la casa sin ayuda de la niñera. Pippi identificar sentimientos íntimos que los mayores no com-
Calzaslargas vive de forma independiente. En los libros de prenden. Les fascina la capacidad de los escritores para
Ana Tolkien y en muchos cuentos de hadas, niños corrientes crear situaciones, personajes y aventuras donde lo imagi-
Garralón pueden representar un papel heroico contra el mal. Lo que nario se perfila como una manera de responder a las dudas
le importa a Roald Dahl es siempre el niño, generalmente e inquietudes, y donde situaciones complejas son conta-
hábil, inteligente y atrevido, y no tanto los adultos, quienes das de manera simple.
en variadas ocasiones terminan mal: “vivimos en un mundo De no menor importancia es el diálogo que cada obra
cruel. Los niños deben luchar para llegar a sus fines. Las tías establece con sus predecesoras en la tradición literaria.
20 aplastadas son una fantástica compensación”, dice el autor de Siempre, lo sabemos, un texto dialoga con otros y ese diálo-
James y el melocotón gigante. Escritores como Maurice Sendak o go es lo que hace reencontrarnos con la esencia de lo huma-
Dr. Seuss tienen en cuenta los impulsos violentos típicos de no en cada uno de nosotros. Roald Dahl dialoga con Lewis
la infancia y los presentan de una forma que los niños reco- Carroll, Harry Potter con los cuentos fantásticos y los rela-
nocen e identifican. tos mitológicos, Max y Moritz con Struwwelpeter, Edward
La literatura puede servir también de puente entre los Gorey con Edward Lear, Tomi Ungerer con los cuentos de
Letras Libres adultos –padres y maestros– y el niño para hablar de las hadas. Los niños participan de una herencia cultural que
DICIEMBRE 2013
cosas que no se pueden decir, que no se deben hacer y per- les conecta con la literatura sin adjetivos. Y es el adulto el
mitiendo un distanciamiento, en ocasiones lúdico. El joven que interviene en este diálogo. Leyendo antes de ir a dor-
lector puede identificarse con historias que le aportan una mir, proponiendo lecturas que, aparentemente, ponen a un
cierta tranquilidad que los adultos no pueden transmitir- lado cierto tipo de aburrimiento, pero están brindando una
le, pues en ocasiones son estos mismos adultos el origen de temprana experiencia cultural y ofreciendo un tipo de acti-
los conflictos. Las historias invitan a la conversación entre tud y de comportamiento que acompañará a los niños a lo
generaciones, a la duda, a la pregunta, incluso a la compli- largo de su vida. Muchos de los libros que hoy día leen los
cidad. Es raro que los adultos olviden sus primeras lecturas, niños fueron escritos hace muchos años: la carga imaginaria
ese momento de encuentro con el imaginario. No impor- de la palabra, su poder para evocar placer y el descubrimien-
ta si la realidad exterior fue inconstante, feliz o injusta, las to siguen intactos a pesar del tiempo, el espacio, el género, la
primeras lecturas habrán de permanecer como un recuerdo clase social y la edad.
singular. En su libro Inside picture books, Ellen Handler Spitz Tuvo razón el escritor y pedagogo Gianni Rodari, que
recuerda conversaciones con adultos y sus lecturas de infan- tanto hizo por la literatura infantil, cuando dijo: “ponga-
cia. Ella misma habla de esa experiencia al recordar la voz de mos libros al servicio de los niños, no niños al servicio de
su madre, extrañamente amable y melodiosa, el pasar de las los libros”. ~

016-020-Dossier-Uno.indd 20 14/11/13 20:48

También podría gustarte