Manual de Seguridad Dinámica e Inteligencia Penitenciaria
Manual de Seguridad Dinámica e Inteligencia Penitenciaria
Manual de Seguridad Dinámica e Inteligencia Penitenciaria
Seguridad Dinámica e
Inteligencia Penitenciaria
Manual de
SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
NACIONES UNIDAS
Nueva York, 2015
© Naciones Unidas, Diciembre de 2015. Todos los derechos reservados. Esta publicación
no ha sido editada oficialmente. Producción editorial: Inglés, Publicaciones y Sección
bibliotecaria, Oficina de las Naciones Unidas en Viena.
© Naciones Unidas, Agosto de 2016 para la publicación en español. Todos los derechos
reservados. La impresión de la presente publicación ha sido elaborada a través del
Proyecto PANZ59 “Consolidando los avances de la reforma penitenciaria en Panamá”
de la Oficina Regional de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito para
Centroamérica y el Caribe en Panamá (UNODC ROPAN). Traducción no oficial.
La traducción para el español de la presente publicación fue elaborada por el Servicio
Penitenciario Federal de la República Argentina. Las denominaciones empleadas y
la presentación del material en esta publicación no implican la expresión de ninguna
opinión por parte de la Secretaría de las Naciones Unidas sobre la condición jurídica de
países, territorios, ciudades o zonas, o de sus autoridades, ni respecto la delimitación de
sus fronteras o límites.
Reconocimientos
Este Manual fue preparado para la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el
Delito (UNODC) por el Prof. Dr. Shane Bryan, consultor en reforma penitenciaria y
justicia penal. Wayne Bastin (Regional Fusion and Law Enforcement Centre for Safety
and Security at Sea) y John Wilcox (UNODC) hicieron una importante contribución
al desarrollo del Manual, redactando materiales para su inclusión en los capítulos sobre
inteligencia penitenciaria y proporcionando valiosos comentarios sobre los borradores
del Manual.
Contribuyeron a lo largo del desarrollo del Manual las siguientes personas: Piera
Barzano, Shanaka Jayasekara, Joanne Jousif y Philipp Meissner (UNODC). Algunos
de los materiales incluidos en el Manual se basan en un trabajo anterior producido por
Tomris Atabay y Danny McAllister. El Manual ha sido revisado por Loraine Rossati.
iii
Contenido
Reconocimientos..............................................................................................................iii
Introducción.....................................................................................................................1
Para quiénes fue hecho este manual................................................................................ 1
Lo que cubre el manual.................................................................................................. 1
¿Por qué un manual?...................................................................................................... 3
Tratar a todos los reclusos de manera humana................................................................ 4
Medidas menos restrictivas necesarias............................................................................. 6
Cómo equilibrar los tipos de medidas de seguridad......................................................... 7
Medidas especiales de máxima seguridad........................................................................ 8
La importancia de la inteligencia penitenciaria................................................................ 9
Cómo aplicar el manual................................................................................................. 9
v
Gestión de unidades dentro de establecimientos penitenciarios y supervisión directa........ 39
Recopilación de información.......................................................................................... 41
Prevención de actos de corrupción del personal penitenciario y de actos de manipulación.41
Actividades constructivas para los reclusos...................................................................... 43
Anexos
1. Documento de Información de Seguridad: plantilla y guía para completarlo................. 77
2. Informe de Inteligencia: plantilla y guía para completarlo............................................ 85
vi
Introducción
Para quiénes fue hecho este manual
Este manual integra un conjunto de herramientas que elaboró la Oficina de las Naciones
Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) para colaborar con los diferentes países
en la implementación de la ley y el desarrollo de la reforma de la justicia penal. Está
diseñado para su utilización por parte de todos los actores involucrados en el sistema
penitenciario, incluidos quienes formulan políticas, los legisladores, los administradores
penitenciarios, los funcionarios de inteligencia penitenciaria y el personal penitenciario.
También puede resultar útil para integrantes de otros organismos encargados de hacer
cumplir la ley, organizaciones no gubernamentales y otras personas que tengan interés
o participen activamente en el campo de la justicia penal y la reforma penitenciaria. Se
puede utilizar en una gran variedad de contextos, tanto como documento de referencia
o como herramienta de capacitación.
1
Si bien el término “inteligencia” puede tener connotaciones negativas en algunas jurisdicciones, en la
actualidad, las administraciones penitenciarias y los organismos encargados de hacer cumplir la ley de la mayoría de
los Estados Miembros suelen utilizarlo de manera habitual.
1
2 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
En el capítulo 3, se define qué se entiende por inteligencia, antes de pasar a explicar los
fundamentos de la recopilación de información de inteligencia en los establecimientos
penitenciarios. Así, se describen los tipos de información de inteligencia y se brindan
definiciones de los términos claves que utilizan quienes practican actividades de
inteligencia. Del mismo modo, se analizan la organización y las políticas que se
requieren para que la aplicación de las actividades de inteligencia en los establecimientos
penitenciarios resulte efectiva. A continuación, se detalla el rol y la función de la Unidad
de Inteligencia Penitenciaria. Se destaca, además, la necesidad de contar con mecanismos
de salvaguardia efectivos. Se analizan cuestiones de coordinación interna y externa y se
subraya la importancia del trabajo conjunto entre diversos organismos. Por otra parte,
se examinan el rol y los beneficios de contar con funcionarios de inteligencia policial
en los establecimientos penitenciarios. El uso de reclusos informantes y de medidas de
vigilancia encubierta implica encontrar un cauto equilibrio entre los derechos de los
reclusos y la necesidad de investigar la criminalidad, lo cual se considera al final del
capítulo.
En el manual, se tienen en cuenta los desafíos a los que se enfrentan los directores de
los establecimientos penitenciarios para poder administrar establecimientos seguros,
así como la importancia de la información de inteligencia de buena calidad para
garantizar la seguridad y el ordenamiento adecuado de un establecimiento, y para que
los reclusos no tengan la posibilidad de dirigir actividades delictivas que se concreten
fuera de prisión. El objetivo de este manual es complementar las demás publicaciones
de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), el
Departamento de Operaciones de Mantenimiento de la Paz de las Naciones Unidas
(DOMP) y la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos
INTRODUCCIÓN 3
Humanos (ACNUDH) que describen con mayor detalle temas específicos y grupos de
reclusos2. Se debe destacar que este manual no cubre específicamente las operaciones y
la gestión de la seguridad penitenciaria y que, en tal sentido, no procura ser un manual
de seguridad.
La seguridad penitenciaria se refiere no solo a los medios por los cuales se pueden
prevenir las fugas, sino también a las medidas necesarias para evitar que los reclusos
de alto riesgo dirijan actividades delictivas desde prisión para que se concreten en el
medio libre. Entre ellas, pueden mencionarse actividades relacionadas con el crimen
organizado, el liderazgo de bandas o grupos terroristas, la dirección de acciones
vinculadas con el narcotráfico, y el intento de intimidar o corromper a testigos, jueces,
abogados o miembros del jurado.
2
UNODC: Manual para administradores penitenciarios; Manual para la gestión de archivos de prisioneros;
Manual sobre reclusos con necesidades especiales; Manual sobre mujeres y encarcelamiento. DOMP: Manual de la
gestión de los incidentes en la prisión. ACNUDH: Los derechos humanos y las prisiones (Manual de capacitación en
derechos humanos para funcionarios de prisiones; Recopilación de instrumentos internacionales de derechos humanos
relacionados con la administración de justicia; Guía para el instructor en derechos humanos para funcionarios de
prisiones; Manual de bolsillo de normas internacionales de derechos humanos para funcionarios de prisiones). Véase
también en el Centro Internacional de Estudios Penitenciarios (ICPS): La administración penitenciaria en el contexto
de los derechos humanos (segunda edición).
4 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
“Es imprescindible contar con cárceles seguras para lograr que nuestro sistema de justicia se constituya en
un arma efectiva contra el delito. Cuando los reclusos, ya sea que estén condenados o procesados, quedan
bajo nuestra custodia, deben saber, al igual que el público, que no saldrán de ese lugar hasta que se los libere
legalmente…
La contribución directa que pueden hacer nuestras cárceles para la reducción permanente de la tasa delictiva
en el país también reside en la forma en que allí se trata a los reclusos. Sin embargo, no podemos destacar
como corresponde la importancia del profesionalismo y del respeto de los derechos humanos”.
- Nelson R. Mandela (En diálogo con el Departamento de Servicios Correccionales de Sudáfrica, 1998)
Artículo 10
Toda persona privada de libertad será tratada humanamente y con el respeto debido a la dignidad inherente
al ser humano.
3
Artículo 10 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos; Reglas 1 y 5(1) de las Reglas Mínimas
de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos (Reglas Mandela); Principios 1 y 6 del Conjunto de
Principios para la protección de todas las personas sometidas a cualquier forma de detención o prisión; Reglas 1 y
72.1 de las Reglas Penitenciarias Europeas; Principio I de los Principios y Buenas Prácticas sobre la Protección de
las Personas Privadas de Libertad en las Américas; Recomendaciones 1 a 3 de la Declaración de Kampala sobre las
condiciones penitenciarias en África; párr. 3 de la Recomendación CM/Rec(2014)3 del Comité de Ministros a los
Estados miembros relativa a los delincuentes peligrosos, Adoptada por el Comité de Ministros el 19 de febrero de 2014
en la 1192ª sesión de los Delegados de Ministros.
4
Artículos 2 y 16 de la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o
Degradantes (CAT); Artículo 7 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos; Artículo 5 de la Declaración
Universal de Derechos Humanos; Regla 1 de las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los
Reclusos (Reglas Mandela).
INTRODUCCIÓN 5
Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos (Reglas Mandela)
Regla 1
Todos los reclusos serán tratados con el respeto que merecen su dignidad y valor intrínsecos en cuanto seres
humanos. Ningún recluso será sometido a tortura ni a otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradan
tes, contra los cuales se habrá de proteger a todos los reclusos, y no podrá invocarse ninguna circunstancia
como justificación en contrario. Se velará en todo momento por la seguridad de los reclusos, el personal, los
proveedores de servicios y los visitantes.
Regla 36
La disciplina y el orden se mantendrán sin imponer más restricciones de las necesarias para garantizar la
custodia segura, el funcionamiento seguro del establecimiento penitenciario y la buena organización de la
vida en común.
Artículo 2
En el desempeño de sus tareas, los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley respetarán y protegerán
la dignidad humana y mantendrán y defenderán los derechos humanos de todas las personas.
Regla 49
Se mantendrá el orden en la prisión teniendo en cuenta los requisitos de seguridad y de disciplina, pero
al mismo tiempo asegurando a los detenidos unas condiciones de vida que respeten la dignidad humana y
ofreciéndoles un programa completo de actividades, de acuerdo con la regla 25.
Principios y Buenas Prácticas sobre la Protección de las Personas Privadas de Libertad en las Américas
Principio I
Toda persona privada de libertad que esté sujeta a la jurisdicción de cualquiera de los Estados Miembros de
la Organización de los Estados Americanos será tratada humanamente, con irrestricto respeto a su dignidad
inherente, a sus derechos y garantías fundamentales, y con estricto apego a los instrumentos internacionales
sobre derechos humanos.
En particular, y tomando en cuenta la posición especial de garante de los Estados frente a las personas
privadas de libertad, se les respetará y garantizará su vida e integridad personal, y se asegurarán condiciones
mínimas que sean compatibles con su dignidad.
Se les protegerá contra todo tipo de amenazas y actos de tortura, ejecución, desaparición forzada, tratos o
penas crueles, inhumanos o degradantes, violencia sexual, castigos corporales, castigos colectivos,
intervención forzada o tratamiento coercitivo, métodos que tengan como finalidad anular la personalidad o
disminuir la capacidad física o mental de la persona.
Sin embargo, puede resultar necesario y legítimo limitar ciertos derechos para mantener
la seguridad. También es posible que se requieran medidas de seguridad adicionales
para garantizar que los reclusos no se darán a la fuga y que no provocarán autolesiones
6 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
5
Regla 36 de las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos (Reglas
Mandela); Reglas 3 y 18.10 de las Reglas Penitenciarias Europeas; párr. 4 de la Recomendación CM/Rec(2014)3
del Comité de Ministros a los Estados miembros relativa a los delincuentes peligrosos (Adoptada por el Comité de
Ministros el 19 de febrero de 2014).
6
Para obtener información sobre el debate de la prueba de la aplicación de los principios de proporcionalidad,
legalidad, rendición de cuentas, necesidad y no discriminación (PLANN, por sus siglas en inglés) en relación con
las decisiones relativas al régimen de aislamiento, véase el párr. 55 de los Estándares del Comité Europeo para la
Prevención de la Tortura y de las Penas o Tratos Inhumanos o Degradantes (CPT) de 2002 (Rev. 2013). Véanse
también los párrs. 52 a 54 del Memorando Explicativo de la Recomendación CM/Rec(2014)3 del Comité de Ministros
a los Estados miembros relativa a los delincuentes peligrosos, Adoptada por el Comité de Ministros el 19 de febrero
de 2014 en la 1192ª sesión de los Delegados de Ministros.
INTRODUCCIÓN 7
“El concepto de la seguridad dinámica implica que el personal penitenciario subalterno debe que estar
capacitado y motivado para desarrollar buenas relaciones personales con los reclusos, para entenderlos y
comprenderlos como individuos, para ofrecerles ayuda en sus problemas personales con empatía y para
involucrarse con ellos mediante un diálogo con un sentido particular.
Los reclusos se contactan con mayor frecuencia y de manera continua con el personal subalterno. La naturaleza
de las interacciones diarias con estos integrantes del personal ejerce una gran influencia en las conductas
y las actitudes de los reclusos. Las interacciones positivas tienden a reducir las actitudes y las conductas
destructivas y favorecen el trabajo constructivo con los detenidos. Asimismo, la seguridad dinámica permite
que el personal se dé cuenta con mayor facilidad de las conductas alarmantes por parte de un recluso, como
tentativas de fuga, episodios de violencia entre reclusos o contra el personal, el contrabando de artículos
prohibidos, etc.
La seguridad dinámica (…) ofrece la posibilidad de proporcionar información de advertencia antes de que
se produzcan ciertos incidentes no deseados. Esto permite que el personal penitenciario tome medidas
preventivas para desalentar que se produzcan potenciales incidentes peligrosos”.
Párr. 73 de la Recomendación REC (2003)23 (Adoptada por el Comité de Ministros del Consejo de Europa el
9 de octubre de 2003), relativa a la Gestión de las administraciones penitenciarias de condenados a cadena
perpetua y a otras penas de larga duración.
8 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
7
Reglas 43(1), 44 y 45 de las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos
(Reglas Mandela); véanse también el Principio 7 de los Principios básicos para el tratamiento de los reclusos de
las Naciones Unidas; la Declaración de Estambul sobre la utilización y los efectos de la reclusión en régimen de
aislamiento, adoptada el 9 de diciembre de 2007 en el Simposio internacional sobre el trauma psicológico en Estambul;
y los párrs. 75, 76, 80, 81 y 84 del Informe del Relator Especial sobre la tortura, del 5 de agosto de 2011, A/66/268.
8
Párr. 6 del Artículo 7 de la Observación General 20 del Comité de Derechos Humanos (1992).
INTRODUCCIÓN 9
9
Regla 76(1)(c) de las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos (Reglas
Mandela); párr. 32 de los Estándares del Comité Europeo para la Prevención de la Tortura y de las Penas o Tratos
Inhumanos o Degradantes (CPT) de 2002 (Rev. 2013).
10 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
PRINCIPIOS CLAVES
• Todos los reclusos serán tratados con el respeto que merecen su dignidad y valor intrínsecos en cuanto
seres humanos. Ningún recluso será sometido a tortura ni a otros malos tratos. No se los deberá
humillar y tendrán acceso a condiciones materiales apropiadas, a alimentación nutritiva, adecuadas
instalaciones sanitarias, así como acceso al agua, atención médica y contacto con sus familias.
• La cantidad de reclusos que se encuentran alojados en condiciones de alta seguridad deberá se la
mínima indispensable, y deberá estar basada en evaluaciones de riesgo y necesidades individuales.
• Todos los reclusos, incluidos los de alto riesgo, deben estar sujetos a las medidas menos restrictivas
necesarias para la protección del público, de otros reclusos y del personal. Toda restricción que se
aplique a los reclusos de alto riesgo debe respetar los principios de necesidad, proporcionalidad,
rendición de cuentas y no discriminación.
• Se debe mantener un equilibrio entre el uso legítimo de las medidas de seguridad y el respeto de
los derechos humanos fundamentales de los reclusos. La limitación de ciertos derechos jamás debe
socavar su dignidad y valor intrínsecos en cuanto seres humanos.
• En el caso de todos los reclusos, se debe mantener un equilibrio entre los aspectos físico, procedimental
y dinámico de la seguridad.
• La inteligencia penitenciaria constituye un elemento fundamental de la seguridad dinámica efectiva,
y puede ayudar a prevenir fugas, disturbios y criminalidad en los establecimientos penitenciarios.
Capítulo 1
Marco y funciones de la seguridad
penitenciaria
Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos (Reglas Mandela)
Regla 5
(1) El régimen penitenciario procurará reducir al mínimo las diferencias entre la vida en prisión y la vida en
libertad que tiendan a debilitar el sentido de responsabilidad del recluso o el respeto a su dignidad como ser
humano.
Regla 89
(2) Convendrá establecer diversos grados de seguridad conforme a lo que sea necesario para cada grupo.
Reglas Penitenciarias Europeas
Regla 51
(1) Las medidas de seguridad aplicadas a los detenidos serán las mínimas necesarias para asegurar la seguridad
de su detención.
Regla 53
(1) Sólo en circunstancias excepcionales se recurrirá al empleo de medidas de seguridad o de alta seguridad.
(2) Se establecerán procedimientos claros a seguir, cuando se apliquen dichas medidas a los detenidos.
(3) La legislación nacional determinará la naturaleza de estas medidas, su duración y los motivos de su
aplicación.
(4) La autoridad competente aprobará, en cada caso y para un periodo determinado, la aplicación de dichas
medidas.
Seguridad física
Uno de los aspectos fundamentales de la seguridad penitenciaria es la seguridad física
de la institución. Entre los diferentes aspectos de la seguridad física, se incluyen la
arquitectura de los edificios donde funcionan los establecimientos penitenciarios la
solidez de los muros de esos edificios, las rejas de las ventanas, las puertas y las paredes
de las unidades de alojamiento, así como las especificaciones de los cercos y las murallas
perimetrales y las torres de vigilancia. Asimismo, se puede mencionar la disponibilidad
de dispositivos de soporte para la coerción física, como cerraduras, cámaras y sistemas
de alarma (internos y externos), escáneres de rayos X, detectores de metal, radios,
esposas y similares.
11
12 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos (Reglas Mandela)
Regla 47
(1) Se prohibirá el empleo de cadenas, grilletes y otros instrumentos de coerción física que por su naturaleza
sean degradantes o causen dolor.
(2) Otros instrumentos de coerción física solo podrán ser utilizados cuando la ley los autorice y en los
siguientes casos:
(a) como medida de precaución contra la evasión durante un traslado, siempre que sean retirados en el
momento en que el recluso comparezca ante una autoridad judicial o administrativa;
(b) por orden del director del establecimiento penitenciario, si han fracasado los demás métodos de
control, a fin de impedir que el recluso se lesione a sí mismo o lesione a terceros, o que produzca
daños materiales, en cuyos casos el director deberá alertar inmediatamente al médico u otros
profesionales de la salud competentes e informar a la autoridad administrativa superior.
Regla 48
(1) Cuando la utilización de instrumentos de coerción física esté autorizada de conformidad con el párrafo 2
de la regla 47 habrán de aplicarse los siguientes principios:
(a) emplear instrumentos de coerción física únicamente cuando ninguna otra forma menor de control
CAPÍTULO 1 MARCO Y FUNCIONES DE LA SEGURIDAD PENITENCIARIA 13
(2) No se utilizarán instrumentos de coerción física en el caso de las mujeres que estén por dar a luz, ni
durante el parto ni en el período inmediatamente posterior.
Regla 49
La administración penitenciaria tratará de utilizar técnicas de control para evitar la necesidad de imponer
instrumentos de coerción física o reducir el carácter invasivo de esos instrumentos, y ofrecerá capacitación
en esas técnicas.
Reglas Penitenciarias Europeas
Regla 68
(1) Estará prohibido el uso de cadenas y de grilletes.
(2) Estará prohibido el uso de esposas, camisas de fuerza y otros tipos de instrumentos de inmovilización
corporal, excepto que:
(a) sean necesarios para prevenir fugas durante un traslado, y siempre que se retiren cuando el detenido
comparezca ante una autoridad judicial o administrativa, salvo que dicha autoridad decida lo
contrario; o
(b) por orden del director, cuando hayan fracasado otros métodos de control, a fin de impedir que un
detenido se lesione, lesione a terceros o provoque serios daños materiales, y siempre que en dichas
circunstancias el director informe de inmediato al médico y mande un informe a una autoridad
penitenciaria superior.
(3) No se usarán los instrumentos de inmovilización más tiempo del que sea estrictamente necesario.
(4) El modo en el que se usarán los instrumentos de inmovilización quedará recogido en la legislación nacional.
Estas medidas ayudan a garantizar que los vehículos que contienen explosivos no
lleguen al perímetro. Asimismo, la zona que rodea el perímetro debe estar libre de
vegetación y construcciones, a fin de posibilitar líneas claras de visión y un espacio
susceptible de defensa.
Seguridad procedimental
En muchas jurisdicciones, el patrimonio carcelario abarca un diverso conjunto de
edificios, muchos de los cuales datan de siglos anteriores; otros constituyen antiguos
campamentos militares y muy pocos de ellos son establecimientos penitenciarios
modernos construidos para el fin perseguido. A menudo se descuida la estructura física
de estas viejas cárceles, entre cuyas características se destacan la visibilidad deficiente y
el bloqueo de las líneas de visión. El refuerzo de las estructuras internas no suele ser de
los estándares más recientes. Por lo tanto, resulta imprescindible que la seguridad física
se complemente con otras formas de seguridad.
Los procedimientos establecen el mejor modo en se debe realizar una tarea y garantizan
la aplicación coherente dentro de cada establecimiento penitenciario y a lo largo de
cada uno de ellos. Los procedimientos son tan importantes como las políticas. Las
políticas definen lo que se debe hacer. Los procedimientos (a) detallan cómo llevar a
cabo las políticas; (b) constituyen una serie de medidas que se toman para llegar a una
meta final; (c) definen los mecanismos para exigir el cumplimiento de una política y (d)
sirven como guía de referencia rápida en tiempos de crisis. Constituyen la base de la
capacitación del personal y ayudan a eliminar el problema de un único punto de fallo.
Los procedimientos de buena calidad cuentan con las siguientes características: son
escritos y se presentan en un estilo y formato claro y accesible; se formulan de manera
oportuna para su adecuada implementación, tan pronto como sea posible y sin excluir
material relevante; son accesibles y están disponibles; se pueden reproducir y pueden
estar sujetos a actualizaciones o ser eliminados.
El tercer elemento clave de una seguridad efectiva está dado por la seguridad dinámica,
la cual se describe detalladamente en el capítulo 3.
Evaluación y categorización
Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos (Reglas Mandela)
Regla 89
(2) Convendrá establecer diversos grados de seguridad conforme a lo que sea necesario para cada grupo.
Reglas Penitenciarias Europeas
Regla 51
(3) Se evaluará, tan pronto como sea posible después de su ingreso, al detenido para determinar:
(a) el riesgo que supondría para la sociedad en caso de fuga;
(b) la probabilidad de que intente fugarse solo o con la ayuda de cómplices externos.
(4) Se someterá a los detenidos a un régimen de seguridad acorde con el nivel de riesgo identificado.
Regla 52
(1) Tan pronto como sea posible después de su ingreso, se evaluará al detenido para determinar si supone
un riesgo para la seguridad de los demás detenidos, del personal penitenciario o de las personas que
trabajan en la prisión o la visitan regularmente, así como para establecer si supone un riesgo para sí
mismo.
16 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
Regla 53
(5) Toda decisión de ampliación del periodo de aplicación deberá ser aprobada nuevamente por la autoridad
competente.
A los reclusos no les gusta estar en prisión, pero la mayoría de ellos acepta la situación.
Mientras se los someta a las medidas de seguridad adecuadas y se les brinde un
trato justo, no procurarán darse a la fuga o alterar seriamente la rutina habitual del
establecimiento penitenciario. Por otro lado, habrá una pequeña cantidad de reclusos
que bien podrá hacer todo lo que esté a su alcance para intentar una fuga. Esto significa
que las autoridades penitenciarias deben poder acceder al riesgo que presenta cada
recluso en particular a fin de garantizar que cada uno de ellos cuente con las condiciones
adecuadas de seguridad, para que ellas no resulten ni excesivas ni insuficientes. Los
diferentes niveles de riesgo requieren diferentes niveles de seguridad.
Existen diversos motivos por los cuales las medidas de seguridad a las que se somete
a los reclusos deberían ser las mínimas necesarias para lograr un entorno de encierro
seguro. Según investigaciones, se ha llegado a la conclusión de que cuanto menor sea la
cantidad de reclusos de alta seguridad, mayor será la conciencia del personal respecto de
tales reclusos y las posibilidades de concentrar la atención en ellos. Asimismo, los niveles
bajos de seguridad suelen ir acompañados de un trato más humano, en comparación
con los niveles de mayor seguridad. Es por ello que mantener la menor cantidad posible
de reclusos en condiciones de alta seguridad sería una buena práctica para respetar los
derechos humanos. En realidad, la seguridad es costosa, por lo que a mayor cantidad de
reclusos alojados en condiciones de alta seguridad, mayor será el costo para el Estado.
Evaluación de riesgos
La administración penitenciaria debe realizar una atenta evaluación de riesgos. Es
imprescindible que la evaluación de riesgos distinga entre los cuatro tipos de riesgo
predominantes:
• Riesgo de fuga.
• Riesgo de violencia hacia el personal, otros reclusos y visitas.
• Riesgo al orden debido.
• Riesgo de que los reclusos dirijan actividades delictivas desde dentro de los
establecimientos penitenciarios para que se concreten fuera de prisión (por
ejemplo, participar de actividades relacionadas con el crimen organizado,
actividades de bandas o grupos terroristas, el narcotráfico, y la intimidación o
corrupción de testigos, jueces, abogados o miembros del jurado).
satisfacción de que el riesgo de los reclusos se está reduciendo, a fin de sugerir el traslado
progresivo hacia instituciones de menor seguridad y de que el riesgo se redujo a un nivel
aceptable, compatible con la protección de la seguridad pública, para recomendar la
liberación.
Se han identificado una gran cantidad de criterios para evaluar el riesgo de fuga, los
cuales normalmente incluyen los siguientes:
En relación con los infractores condenados por delitos vinculados con el terrorismo o
con aquellos que son excesivamente violentos, es muy importante comprender que no
todas las personas son iguales. Las motivaciones, las circunstancias y los motivos por los
18 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
cuales los individuos cometen el mismo tipo de delitos suelen ser variados y complejos.
La evaluación de riesgos en este tipo de infractores se debe informar mediante la
compleja comprensión de las características de la organización a las que pertenecen y
de sus motivaciones10.
Categorización y distribución
Luego de una evaluación de riesgos pormenorizada, los reclusos serán categorizados
según el nivel de seguridad adecuado en el que deberán estar alojados. La categorización
de reclusos también es imprescindible para decidir su distribución a un establecimiento
penitenciario apropiado y, junto con los hallazgos relativos a la evaluación de riesgos y
necesidades, constituye la base para el desarrollo de planes de condena individualizados.
Por otra parte, deberían aplicarse consideraciones especiales para los reclusos con
10
Centro Internacional para el Estudio de la Radicalización y la Violencia Política (ICSR): págs. 13 y 22 en
Establecimientos penitenciarios y terrorismo, radicalización y desradicalización en 15 países (2010).
11
En el caso de las mujeres, véase la Regla 41(a) de las Reglas de las Naciones Unidas para el tratamiento de
las reclusas y medidas no privativas de la libertad para las mujeres delincuentes (Reglas de Bangkok). En el caso de
los niños, véanse el art. 37 de la Convención sobre los Derechos del Niño y las Reglas 12, 28 y 30 de las Reglas de las
Naciones Unidas para la Protección de los menores privados de libertad.
CAPÍTULO 1 MARCO Y FUNCIONES DE LA SEGURIDAD PENITENCIARIA 19
Los procesados también pueden estar sujetos a condiciones de alta seguridad, como
reclusos de potencial alto riesgo. Este sería el caso si hubiera una alta probabilidad de
que fueran evaluados como de alto riesgo en caso de ser condenados. La evaluación de
riesgos preliminar se puede hacer sobre la base del delito del cual se los acusa y de los
informes adicionales de los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley en cuanto
a sus antecedentes, asociación a alguna banda criminal u organización terrorista y las
circunstancias de los delitos, entre otras cuestiones.
Recuento y control
Recuento de reclusos
El sistema y los procedimientos para el recuento de reclusos resultan cruciales para
la seguridad de los establecimientos penitenciarios, así como para la seguridad del
personal y de los internos. Un recuento es la confirmación física de la cantidad de
internos que se encuentran en determinadas ubicaciones. La cantidad de internos de
cada área se compara con la cantidad asignada al mismo lugar. Los procedimientos
deberían establecer:
Por ejemplo, el personal penitenciario debería estar ejerciendo su función, al estar a cargo
de un grupo de reclusos, de contar la cantidad de detenidos y asumir la responsabilidad
de estar a cargo y supervisar a cada uno de los detenidos del grupo hasta que el relevo
lo reemplace para hacerse cargo y supervisar a estos reclusos.
20 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
Control de desplazamientos
“La gestión efectiva del desplazamiento de reclusos dentro de un establecimiento penitenciario depende de
los siguientes factores:
• Niveles de personal proporcionales a la cantidad de reclusos.
• El nivel de aptitudes y competencia del personal.
• La disposición o la configuración del establecimiento.
• La efectividad de la infraestructura de la seguridad estática.
• La capacidad de clasificar y separar las categorías de reclusos eficazmente”.
• DOMP de las Naciones Unidas: Manual de la gestión de los incidentes en la prisión, 2013, pág. 26.
Registro
Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos (Reglas Mandela)
Regla 50
Los registros se realizarán de un modo que respete la dignidad intrínseca del ser humano y la intimidad de las
personas, así como los principios de proporcionalidad, legalidad y necesidad.
Regla 51
Los registros no se utilizarán para acosar ni intimidar al recluso ni para inmiscuirse innecesariamente en
su intimidad. A efectos de rendir cuentas, la administración penitenciaria dejará debida constancia de los
registros que se lleven a cabo, en particular de los registros personales sin ropa, los registros de los orificios
corporales y los registros de las celdas, así como de los motivos de esos registros, la identidad de quienes los
llevaron a cabo y los resultados obtenidos.
Regla 52
(1) Los registros invasivos, como los registros personales sin ropa y los registros de los orificios corporales,
solo se efectuarán cuando sean absolutamente necesarios. Se alentará a las administraciones penitenciarias
a idear y poner en práctica alternativas adecuadas a los registros invasivos. Los registros invasivos se harán en
privado y por personal calificado del mismo sexo que el recluso.
(2) Los registros de los orificios corporales solo los podrán hacer profesionales médicos calificados que no
sean los principales responsables de la atención del recluso o, como mínimo, miembros del personal que
hayan sido adecuadamente capacitados por profesionales médicos en cuanto a las normas de higiene, salud
y seguridad.
Regla 60
(2) Los procedimientos de registro y entrada no podrán ser degradantes para los visitantes y se regirán por
principios cuando menos tan protectores como los que figuran en las reglas 50 a 52. Se evitarán los registros
de los orificios corporales y no se emplearán con niños.
Principios y Buenas Prácticas sobre la Protección de las Personas Privadas de Libertad en las Américas
Principio XXI
Los registros corporales, la inspección de instalaciones y las medidas de organización de los lugares de
privación de libertad, cuando sean procedentes de conformidad con la ley, deberán obedecer a los criterios
de necesidad, razonabilidad y proporcionalidad.
Los registros corporales a las personas privadas de libertad y a los visitantes de los lugares de privación
de libertad se practicarán en condiciones sanitarias adecuadas, por personal calificado del mismo sexo, y
deberán ser compatibles con la dignidad humana y con el respeto a los derechos fundamentales. Para ello,
los Estados Miembros utilizarán medios alternativos que tomen en consideración procedimientos y equipo
tecnológico u otros métodos apropiados.
de libertad, deberán realizarse por autoridad competente, conforme a un debido procedimiento y con respeto
a los derechos de las personas privadas de libertad.
Reglas Penitenciarias Europeas
Regla 54
(1) El personal se ceñirá a un procedimiento detallado cuando realice inspecciones de:
(a) los lugares donde viven, trabajan y se reúnen los detenidos;
(b) los detenidos;
(c) los visitantes y sus bienes, y
(d) el personal penitenciario.
(2) La legislación nacional establecerá las situaciones en las que se pueden llevar a cabo inspecciones y
registros, así como su naturaleza.
(3) Se formará al personal para que lleve a cabo estas inspecciones con objeto de detectar y prevenir cualquier
intento de fuga o de ocultamiento de artículos de contrabando, pero respetando al mismo tiempo la dignidad
de las personas y sus bienes personales.
(5) El personal encargado de registrar será del mismo sexo que la persona registrada.
(7) Un examen íntimo en el marco de un registro sólo podrá ser realizado por un médico.
(8) El detenido estará presente cuando se registren sus efectos personales, a menos que las técnicas del
registro o el daño potencial al personal lo impida.
12
Otros medios de ingreso de artículos prohibidos en un establecimiento penitenciario incluyen la corrupción
del personal, los reclusos que regresan a prisión (de grupos de trabajo, comparecencia a tribunales o salidas transitorias)
y artículos arrojados al interior del establecimiento.
CAPÍTULO 1 MARCO Y FUNCIONES DE LA SEGURIDAD PENITENCIARIA 23
Los reclusos pueden violar la seguridad física de la celda mediante la alteración de las
rejas, las cerraduras u otras medidas de seguridad física, incluidos los muros, los techos
y los pisos. Los establecimientos penitenciarios deberían contar con procedimientos
implementados para efectuar verificaciones de las estructuras en los lugares de
alojamiento con una frecuencia compatible con sus necesidades individuales.
Los reclusos deben estar presentes cuando se registran sus bienes personales, salvo
que las técnicas de investigación o una potencial amenaza al personal lo impidan. El
personal también debería asegurarse de que el registro se complete de conformidad con
los procedimientos en cuanto a que no deben permitir que los reclusos los intimiden o
los distraigan.
Comunicaciones y vigilancia
Los reclusos conservan, dentro de ciertos límites, sus derechos humanos y libertades,
incluyendo su derecho a la vida familiar y a no permanecer totalmente aislados de la
13
Reglas 19 y 20 de las Reglas de Bangkok.
24 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
sociedad. En algunas circunstancias y por razones de seguridad, se les puede negar, a los
reclusos el contacto físico con amigos y familiares. La obligación de la administración
penitenciaria en cuanto a fomentarla comunicación con el mundo exterior debe ser
equilibrada y a su vez considerar los riesgos asociados con la posibilidad que tienen
los reclusos de comunicarse con personas del medio libre. La administración de la
comunicación se debe efectuar con el objetivo de prevenir el delito, inhibir el tráfico
de artículos prohibidos, asegurar la protección de la población para que no reciba
comunicaciones no deseadas y asimismo evitar fugas.
Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos (Reglas Mandela)
Regla 58
(1) Los reclusos estarán autorizados a comunicarse periódicamente, bajo la debida vigilancia, con su familia
y amigos:
(a) por correspondencia escrita y por los medios de telecomunicaciones, electrónicos, digitales o de otra
índole que haya disponibles; y
(b) recibiendo visitas.
Regla 43
(3) Entre las sanciones disciplinarias o medidas restrictivas no podrá figurar la prohibición del contacto con
la familia. Solo se podrán restringir los medios de contacto familiar por un período limitado y en la estricta
medida en que lo exija el mantenimiento de la seguridad y el orden.
Regla 63
Los reclusos tendrán oportunidad de informarse periódicamente de las noticias de actualidad más importantes,
sea mediante la lectura de diarios o revistas o de publicaciones especiales del establecimiento penitenciario,
sea mediante emisiones de radio, conferencias o cualquier otro medio similar, autorizado o controlado por la
administración del establecimiento penitenciario.
Regla 88
(1)En el tratamiento de los reclusos no se recalcará el hecho de su exclusión de la sociedad, sino, por el
contrario, el hecho de que continúan formando parte de ella. Con ese fin se buscará, en lo posible, la
cooperación de organismos de la comunidad que ayuden al personal del establecimiento penitenciario en la
tarea de reinsertar a los reclusos en la sociedad.
Regla 106
Se velará particularmente por el mantenimiento y mejoramiento de las relaciones entre el recluso y su familia
que redunden en beneficio de ambas partes.
Regla 107
Se tendrá debidamente en cuenta, desde el comienzo de la ejecución de la pena, el porvenir del recluso
después de su liberación, y se alentará y ayudará al recluso a que mantenga o establezca relaciones con
personas u organismos externos que puedan favorecer su reinserción social y el interés superior de su familia.
Véanse también las Reglas 24.1 a 24.12 de las Reglas Penitenciarias Europeas y el Principio XVIII de los
Principios y Buenas Prácticas sobre la Protección de las Personas Privadas de Libertad en las Américas.
Los contactos externos de los reclusos deben ser considerados como derechos y no
como privilegios. Por lo tanto, no deben ser utilizados ni como recompensa ni como
sanciones. De este modo, no resulta aceptable privar a los reclusos de sus contactos
como método de sanción disciplinaria, excepto cuando el delito tenga que ver con el
CAPÍTULO 1 MARCO Y FUNCIONES DE LA SEGURIDAD PENITENCIARIA 25
Existen cinco formas básicas de contacto con el exterior: cartas, visitas, llamadas
telefónicas, salidas del establecimiento penitenciario, y libros, diarios e internet.
Cualquier contacto con el mundo exterior puede generar algunas preocupaciones
relacionadas con la seguridad, particularmente en el caso de los reclusos de máxima
seguridad. Por lo tanto, es importante encontrar formas en que se puedan mantener
niveles adecuados de contacto, sin poner en riesgo la seguridad del establecimiento. En
general, esto resultará posible siempre que el personal comprenda que tanto la seguridad
como el contacto con el mundo exterior son elementos igualmente importantes en el
desempeño de su difícil tarea.
Asimismo, se debe disponer de acuerdos para controlar el acceso de los reclusos a las
tecnologías de la información y a internet.
Todos los establecimientos penitenciarios deben contar con sistemas que permitan,
dentro de un ámbito seguro, la recopilación y la evaluación de información relacionada
con la seguridad y temas afines, que guarden conformidad con la legislación nacional,
con el fin de cumplir los objetivos de seguridad e inteligencia. Todo el personal
debería tener la responsabilidad de recabar información de seguridad de manera activa
para luego informarla al Departamento de Seguridad. El tema de la recopilación de
información de inteligencia penitenciaria, en forma manifiesta y encubierta, así como
su respectivo análisis está desarrollado en detalle en los capítulos 3 y 4.
26 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
• Evaluación y categorización.
• Recuento y control.
• Registro.
• Comunicaciones y vigilancia.
La estrategia de seguridad local debería establecer los arreglos necesarios para cumplir
con los requisitos de cada una de las cuatro o más funciones comprendidas en el marco
de la seguridad nacional.
Este documento, elaborado por la dirección del establecimiento local, debería especificar
los procedimientos que puedan cumplir con el marco nacional y, a su vez, reflejar las
necesidades de seguridad particulares de cada establecimiento penitenciario.
En el ámbito penitenciario, resulta crucial para la gestión asegurar que todo el personal
sea consciente de los conceptos de seguridad física, procedimental y dinámica, así como
crear las estructuras necesarias para que el personal se sienta respaldado en el ejercicio
de la autoridad. La buena práctica indica que deberían existir cuatro componentes a
ser tenidos en cuenta para la estructura de gestión de la seguridad local: el director
del establecimiento penitenciario, quien tiene la responsabilidad operacional total de
la seguridad del establecimiento; un comité de seguridad, para asesorar al director de
todos los aspectos relacionados a la seguridad; una persona encargada de la seguridad y
un departamento de seguridad responsable; y el personal penitenciario que es colectiva
e individualmente responsable de mantener niveles de seguridad apropiados de forma
constante. Con frecuencia y de manera acertada, se suele leer en carteles dispuestos
dentro de los establecimientos que la “seguridad es responsabilidad de todos”.
Auditoría de la seguridad
Las investigaciones llevadas a cabo con referencia a fugas de establecimientos
penitenciarios revelaron que solo en pocas ocasiones, el mal funcionamiento de los
sistemas de cierre o de detección electrónica, alambres de púa insuficientes, u otras
deficiencias en las estructuras físicas o tecnológicas, resultaron ser la razón de dichas
fugas. Las fallas más serias en cuanto a seguridad resultaron estar relacionadas con un
miembro del personal o con varios de ellos, quienes habían “simplificado” su trabajo, no
sabían que se esperaba de ellos, o simplemente no cumplieron con los procedimientos
de seguridad establecidos. Aunque las deficiencias en las estructuras físicas pudieron
haber contribuido con el problema, el hecho de que el personal no cumpliera con
actividades relacionadas a temas de seguridad resulto ser la raíz del problema. En
otras palabras, las causas de los mayores fracasos del sistema de seguridad fueron las
deficiencias resultantes de la relación “personal-sistema”, y no aquellas de la relación
“estructura física-sistema”.
Las auditorías externas tienden a ser más objetivas y exhaustivas. Pueden ser
comunicadas previamente o no. La ventaja de no ser comunicadas reside en que la
institución es observada en una condición operativa más aproximada a la condición
normal. La ventaja de las auditorías comunicadas con anterioridad reside en que la
institución cuenta con la oportunidad de preparar y corregir las condiciones que
presentan deficiencias antes de llevarse a cabo la auditoría. Algunas jurisdicciones han
observado que resulta efectiva la combinación de ambos tipos de auditorías, con un
cronograma aleatorio para realizar auditorías sin comunicación previa.
Evaluación encubierta
La evaluación encubierta es una prueba planeada, organizada, realista, pero no
comunicada, de los procesos, procedimientos y equipamiento de seguridad. El objetivo
principal de la política de la evaluación encubierta es:
necesitaran pasar un número de medidas de seguridad para llevar a cabo una fuga. El
hecho de contar con varias barreras disminuye la posibilidad de que el recluso pueda
escaparse o que una persona no autorizada pueda ingresar al establecimiento.
Las barreras de seguridad pueden tener diferentes formas. Las barreras físicas (paredes,
alambrados, puertas, rejas) y los sistemas de detección y vigilancia (cámaras CCTV,
sistemas de detección de movimiento, puntos de vigilancia, puestos de guardia, sistemas
de rastreo) pueden suministrar barreras primarias de seguridad. Los procedimientos
simples pueden ofrecer barreras de seguridad adicionales a bajo costo o sin costo
alguno. El hecho de que el personal tome consciencia de la seguridad también puede
crear una barrera de seguridad invisible, pero muy efectiva. Se puede considerar que
los mecanismos de intervención son una barrera de seguridad, ya que la intervención
rápida y efectiva del personal puede impedir intento de fuga.
PRINCIPIOS CLAVES
• Todo recluso debería ser alojado con mecanismos de seguridad acordes a los niveles de riesgo de fuga
que presenta.
• Se deberían implementar mecanismos de seguridad apropiados con el fin de asegurar que los internos
de alto riesgo no puedan perpetrar una fuga y, al mismo tiempo, los derechos humanos deben ser
siempre tenidos en cuenta y respetados.
• Se deberá disponer de la suficiente seguridad física con el fin de disuadir y evitar la fuga de reclusos.
• Se debería implementar un sistema sólido de procedimientos de seguridad, los cuales se deberían
aplicar de manera coherente.
• Se debería alentar al personal para que construya relaciones profesionales efectivas con los reclusos
como parte de los mecanismos de seguridad dinámica.
• Se debería alojar y considerar a los reclusos de forma apropiada a lo largo de su detención y también se
debería contar con un manejo eficiente del ingreso y los desplazamientos dentro del establecimiento,
así como de los elementos que pudieran representar un riesgo para la seguridad.
• Se deberían llevar a cabo procedimientos de registro para detectar y desalentar amenazas que afecten
la seguridad o el control del establecimiento penitenciario.
• Se deberían utilizar los círculos concéntricos de protección a fin de reducir los riesgos de fuga, dado
que estos contribuyen a detectar, desalentar, demorar y responder ante posibles tentativas de fuga.
• Se debería implementar un marco de seguridad nacional como documento fuente para suministrar
a los establecimientos la información y los lineamientos necesarios a fin de mantener altos niveles de
seguridad y de cumplir con el objetivo de evitar fugas.
• Se debería implementar una estrategia de seguridad local en cada establecimiento penitenciario
que tenga en cuenta el análisis de riesgos local, refleje la seguridad física y procedimental local,
considere las categorías de los reclusos alojados en el establecimiento, e identifique al personal,
el equipamiento y los recursos necesarios para llevar a cabo cada una de las principales tareas de
seguridad (categorización y evaluación, recuento y control, registro, y comunicaciones y vigilancia).
• Se debería establecer un programa integral de auditoría de seguridad a nivel local y nacional para
evaluar los sistemas de seguridad y su implementación operativa.
• Se deberían gestionar mecanismos para evaluar el equipamiento, los procedimientos y los procesos
de seguridad.
Capítulo 2
Seguridad Dinámica
Reglas Penitenciarias Europeas
Regla 51
(2) Se complementará el uso de barreras físicas y otros medios técnicos con una seguridad dinámica ejercida
por miembros del personal de vigilancia que conozcan bien a los detenidos a su cargo.
Recomendación Rec (2003) 23 del Comité de Ministros del Consejo de Europa, 18. a.
Se debería utilizar la seguridad dinámica para mantener el control del establecimiento penitenciario, lo cual
implica el desarrollo por parte del personal de relaciones positivas con los reclusos, basadas en la firmeza y la
ecuanimidad, en combinación con el entendimiento de la situación personal y de cualquier riesgo planteado
por los reclusos en particular.
El enfoque amplio es un elemento importante de las actividades relacionadas con la seguridad, esto significa
que no solamente se basa en varias clases de medios físicos y técnicos (seguridad estática), sino que también
se basa en el contacto personal y el conocimiento general de lo que sucede en la institución (seguridad
dinámica).
33
34 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
Administración del Servicio Penitenciario, Ministerio de Justicia, República de Croacia, La seguridad dinámica
en los establecimientos penitenciarios, Presentación en la 7ª Conferencia de las Academias de Capacitación
Penitenciaria Europea, 25 al 27 de junio de 2014, Barcelona, España.
El concepto de seguridad implica mucho más que barreras físicas para evitar una evasión. La seguridad
también depende de que el personal que tiene relación con los reclusos esté alerta, esté al tanto de lo que
sucede en la prisión y vele para que los reclusos se mantengan activos de forma positiva. Esto a menudo se
describe como “seguridad dinámica”.
Los oficiales que se encuentran en las torres de vigilancia del perímetro de la prisión probablemente sólo se
darán cuenta de un intento de evasión cuando éste ya haya comenzado. Un oficial que trabaje cerca de los
reclusos y sepa lo que están haciendo estará mucho más al tanto de posibles amenazas para la seguridad
antes de que se produzcan. La seguridad dinámica no consiste simplemente en impedir que los reclusos
escapen. Consiste también en mantener buenas relaciones con los reclusos y conocer su estado de ánimo y
su temperamento.
Los derechos humanos y las prisiones: Manual en Derechos Humanos para la Capacitación de Funcionarios
de Prisiones, vol. I, Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, 2005,
pág. 98.
“En varios contextos, luego de que se produce un conflicto, los establecimientos penitenciarios, generalmente
no cuentan con elementos de seguridad estática esenciales y el personal penitenciario compensa la situación
mediante la restricción de los desplazamientos de los reclusos, encerrándolos en sus celdas durante extensos
períodos. La implementación de los elementos efectivos de la seguridad dinámica, tales como el aumento
del contacto e interacción entre el personal y los reclusos, puede contrarrestar la cantidad limitada de
componentes de seguridad estáticos en un establecimiento penitenciario”.
DOMP: Manual de la gestión de los incidentes en la prisión, 2013, pág. 21.
La seguridad dinámica tiene lugar cuando el personal penitenciario interactúa y se relaciona con los reclusos
durante el desempeño de sus tareas mediante las siguientes actividades:
Territorio de la Capital de Australia, Política de Gestión Penitenciaria (Gestión de la Población Penal), 2011.
La naturaleza del vínculo establecido entre el personal y los reclusos también representa
un punto clave dentro de la seguridad dinámica. La manera en que el personal se
dirige a los reclusos, cómo se llevan a cabo los registros y su frecuencia, si se respeta la
privacidad de los reclusos cuando se les solicita que se quiten la ropa, si las medidas de
sujeción son utilizadas de manera innecesaria y humillante, si se respeta la privacidad
36 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
en los baños y en las duchas, si se requiere a los detenidos que usen uniformes, por
ejemplo, son todas formas que pueden llevar a que no se respete la humanidad y la
dignidad de los reclusos. La utilización de lenguaje irrespetuoso o el hecho de someter
a los reclusos a rutinas humillantes o prácticas sin ninguna justificación de seguridad
constituye una violación del derecho fundamental de ser tratado de forma humanitaria
y con respeto a su dignidad intrínseca.
Capacidades interpersonales
Las capacidades interpersonales representan un elemento importante para la aplicación
efectiva de la seguridad dinámica. Resulta necesario que el personal que trabaje con
reclusos tenga un alto nivel de capacidades interpersonales: su trabajo puede resultar
demandante e intenso, pero al mismo tiempo gratificante. El personal debe ser capaz
de mantener el profesionalismo y la ecuanimidad en todo momento. Si el personal se
muestra confiado y firme en su accionar, verá que el conflicto es limitado y que es capaz
de abordar las situaciones de inestabilidad que pudieran surgir.
El personal debe familiarizarse con los diferentes grupos (incluidos los religiosos,
étnicos, culturales) que se pueden encontrar el establecimiento penitenciario en el
que trabajan y comprenderlos. Los miembros del personal deben ser sensibles a las
necesidades de quienes se encuentran a su alrededor, pero no por ello comprometer
la seguridad del establecimiento. El personal debería saber y entender de qué manera
el comportamiento, la comunicación y las habilidades interpersonales afectan las
expectativas individuales. Del mismo modo, debería ser consciente de las barreras que
pueden interferir en la comunicación y de la manera en que los reclusos interpretan las
conductas no verbales durante las comunicaciones.
pruebas teóricas y prácticas al término de la capacitación recibirán autorización para ingresar en el servicio
penitenciario.
(3) La administración penitenciaria impartirá de manera continua cursos de formación en el empleo con miras
a mantener y mejorar los conocimientos y la capacidad profesional del personal después de su incorporación
al servicio y durante su carrera profesional.
Regla 76
(1) La formación mencionada en el párrafo 2 de la regla 75 comprenderá, como mínimo, los ámbitos
siguientes:
(a) la legislación, los reglamentos y las políticas nacionales pertinentes, así como los instrumentos
internacionales y regionales aplicables, cuyas disposiciones deberán regir la labor del personal penitenciario
y su interacción con los reclusos;
(b) los derechos y deberes del personal penitenciario en el ejercicio de sus funciones, incluido el respeto de
la dignidad humana de todos los reclusos y la prohibición de determinadas conductas, en particular de la
tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes;
(c) la seguridad, incluido el concepto de seguridad dinámica, el empleo de la fuerza y de instrumentos
de coerción física, y el control de delincuentes violentos, con la debida consideración al uso de técnicas
preventivas y de distensión, como la negociación y la mediación;
(d) primeros auxilios, las necesidades psicosociales de los reclusos y la dinámica correspondiente en los
entornos penitenciarios, así como servicios de asistencia y atención sociales, incluida la detección temprana
de problemas de salud mental.
(2) El personal penitenciario encargado de ciertas categorías de reclusos, o el que sea asignado a otras
funciones especializadas, recibirá la capacitación especializada que corresponda.
Código de Conducta para Funcionarios Encargados de hacer Cumplir la Ley
Artículo 18
Los gobiernos e instituciones encargadas de hacer cumplir la ley garantizarán que todos los funcionarios
encargados de hacer cumplir la ley sean elegidos a través de procedimientos apropiados de selección, posean
atributos de moral, psicológicas y físicas apropiadas para el ejercicio efectivo de sus funciones y recibir
capacitación continua y profesional. La continuidad de la aptitud para desarrollar estas funciones debería
estar sujeta a revisiones periódicas.
La capacitación debería permitir que el personal sea capaz de comprender las diferentes
categorías de reclusos. Dicha capacitación tendría como objetivo la comprensión
de los componentes que conforman la seguridad y la aplicación de medidas de
seguridad requeridas por los principios procedimentales y de seguridad dinámica.
Deberían ser capaces de hacer un balance de los requerimientos de seguridad con las
necesidades de respetar la dignidad de todos los reclusos e implementar regímenes
positivos y constructivos. A su vez, deberían recibir capacitación para hacer frente a
condicionamientos y actos de manipulación, como así también resistir a los intentos
sutiles de los reclusos que pueden poner en peligro la seguridad del establecimiento.
Deberían responder apropiada y profesionalmente frente a actos de violencia y
comportamiento conflictivo, utilizando la mínima cantidad de fuerza necesaria.
El personal penitenciario que desarrolle sus tareas de manera efectiva, debería ser capaz
de desarrollar, gestionar y mantener relaciones complejas y variables con los reclusos.
En muchos casos cuando el trabajo del personal penitenciario es llevado a cabo de
manera eficiente, se utiliza exitosamente sus capacidades y criterios sutiles y sofisticados
en el trato con los reclusos. La capacitación brindada al personal debería permitirles
desarrollar y perfeccionar estas capacidades y a su vez ejercitar sus criterios de manera
apropiada.
La seguridad dinámica necesita contar con el sustento del desarrollo de políticas y procedimientos
apropiados, una contratación efectiva de personal, selección y capacitación por parte de la gestión del
sistema penitenciario. El personal debería ser consciente de las ventajas de la implementación de la seguridad
dinámica en la prisión y de cómo ello mejoraría la seguridad más allá de la estricta aplicación de las normas
y reglamentaciones propias del establecimiento penitenciario.
Una disposición central de la política radica en promover el rol del personal penitenciario
a fin de desarrollar y mantener relaciones constructivas con los reclusos, establecer
criterios y abordar de manera efectiva situaciones simples y complejas. Esto debería
resultar particularmente evidente al momento de brindar cuidados al recluso y abordar
comportamientos delictivos (por ejemplo, al prevenir auto-lesiones y muertes auto-
CAPÍTULO 2 SEGURIDAD DINÁMICA 39
infringidas).
• Información de buena calidad recibida por parte de los reclusos, y la relacionada con éstos, para
prevenir fugas y controlar problemas.
• Desarrollo de las capacidades correccionales y de gestión por parte del personal.
• La participación de un equipo multidisciplinario mejora la cooperación entre las varias disciplinas
desarrolladas por el personal.
• Un mejor abordaje y una mayor coordinación de los programas de rehabilitación y desarrollo.
Los servicios correccionales en Sudáfrica han sido administrados de acuerdo a directrices de una organización
que le presta poca atención a la condición de ser humano del recluso. En muchos casos, la gestión de unidad
puede ser utilizada para facilitar un abordaje más personalizado y descentralizado. El Departamento confía
que el enfoque de la gestión de unidad integrará de forma adecuada los programas de rehabilitación y de
seguridad, lo que a su vez representa una manera de ofrecer un servicio, que se espera esté a la altura de los
Servicios Correccionales modernos.
“Las unidades de gestión: Un abordaje para la gestión penitenciaria aplicada a los reclusos”, Departamento
de Servicios Correccionales de Sudáfrica, Conferencia para Directores de Servicios Correccionales de África
del Este, Sur y Central (Conference for Eastern, Southern and Central African Heads of Correctional Services,
CESCA) durante septiembre 2001.
Los miembros del personal afectados a una gestión de unidad llevan a cabo roles duales
e importantes, relacionados a la seguridad y a los programas. Ellos “caminan y hablan”
con los reclusos y se familiarizan con personalidades e identifican determinados temas.
Pueden ofrecer una mejor vigilancia, interviniendo activamente en la prevención de
incidentes. De esta manera, una gestión de unidad suministra a cada unidad, el sentido
de la identificación con el grupo e incrementa los contactos del personal con los internos
y enfrenta a los problemas menores antes que se conviertan en mayores.
son aquellos que se involucran de forma activa con sus hijos. La comunicación con
sus hijos es más un intercambio de expectativas, que el hecho de impartir órdenes o
instrucciones, sin sustento ni significado alguno.
Recopilación de información
Un aspecto fundamental de la seguridad dinámica es que coopera con el sistema de
inteligencia del establecimiento penitenciario. El personal penitenciario que se mezcla
con los reclusos observa y escucha lo que está sucediendo y a su vez obtiene información
de los reclusos. Son capaces de volcar esta información al sistema de seguridad y de esta
manera se desarrolla un importante trabajo de inteligencia. A través del uso efectivo
de la seguridad dinámica y la recopilación de información se han prevenido un gran
número de fugas, desordenes y actividades delictivas dentro del establecimiento y en la
comunidad.
El personal penitenciario experimentado puede desarrollar un sexto sentido de lo que se “percibe” en ciertos
contextos carcelarios. Saben cuándo algo no está bien o no es normal. La recopilación de información
de inteligencia es justamente mejorar esos atributos, a través de informes y documentación de tales
observaciones, conversaciones, asociaciones, cambios de las acciones y conductas de los reclusos, etc.
Sin embargo, un problema en particular se suscita al considerar el grado de distancia que el personal
penitenciario debe mantener con los internos. Por un lado, las exigencias en las rutinas de seguridad hacen
que el personal ejerza un alto grado de control formal sobre los reclusos, manteniendo una distancia excesiva
con ellos. No obstante, lo opuesto a esta situación resulta igualmente perjudicial. Con el paso del tiempo,
y luego de intentos bien intencionados de mantener una buena relación entre el personal y los reclusos, el
personal penitenciario puede tener un acercamiento muy marcado con los reclusos, con el resultado que
estos últimos manipulan a los primeros con propósitos inadecuados…
Es responsabilidad del personal superior de supervisión asistir al personal subalterno para mantener un
equilibrio adecuado.
Párr. 77 de la Recomendación REC (2003)23 (Adoptada por el Comité de Ministros del Consejo de Europa el
9 de octubre de 2003), relativa a la Gestión de las administraciones penitenciarias de condenados a cadena
perpetua y a otras penas de larga duración, e Informe.
Además de accionar para perpetrar una fuga, los reclusos pueden intentar manipular al
personal con el propósito de conseguir objetos ilegales, por ejemplo drogas o teléfonos
celulares desde el exterior de la prisión u obtener privilegios especiales y poderes dentro
de la prisión. Pueden surgir dificultades en el caso de internos condenados por crimen
organizado o terrorismo. Tales reclusos pueden buscar manipular al personal para
llevar a cabo actos delictivos serios.
La apropiada capacitación del personal puede contrarrestar tales riesgos. También existe
la necesidad de asegurar posibilidades de traslado y rotación del personal para evitar la
exposición a este tipo de internos por largos períodos de tiempo. Los procedimientos
para disuadir y detectar actos de corrupción del personal, inclusive el control de rutina
y aleatorio de todo el personal que ingrese al establecimiento penitenciario y un sistema
de medidas disciplinarias para el personal, que se involucre en actos de corrupción u
otras actividades ilícitas, resultan ser componentes claves de las estrategias a seguir para
la prevención de la corrupción y manipulación de personal.
Asimismo, se debe tener en cuenta que el trabajo con los reclusos siempre se verá
debilitado, cuando éstos puedan sacar ventaja de los conflictos que pueda tener el
personal, los que surgen comúnmente por los diferentes abordajes y acciones con relación
al tratamiento de los internos. Lo ideal es prevenir conflictos que puedan surgir entre
miembros del personal antes de que ellos causen un desequilibrio perjudicial entre las
diferentes estrategias para abordar los tratamientos de los internos, generalmente se
dan entre las relaciones empáticas y otras de mayor firmeza y control. Se deberían
articular encuentros y debates regulares entre las diferentes categorías de personal con
el fin de adquirir y mantener un equilibrio adecuado entre estas dos formas de abordar
la prevención de conflictos visibles.
Otra medida importante para prevenir actos de corrupción tal como el soborno del
personal penitenciario, es asegurarse que el personal penitenciario que este en contacto
con los reclusos reciba un nivel de sueldo satisfactorio y buenas condiciones laborales.
Un buen sueldo también asegura que el personal se encuentre satisfecho y cumpla sus
tareas y obligaciones de una forma más efectiva, dentro de dichas tareas se podrían
incluir la prevención de fugas, el mantenimiento del orden y la disciplina dentro del
establecimiento penitenciario.
CAPÍTULO 2 SEGURIDAD DINÁMICA 43
El personal penitenciario que tenga razones suficientes para creer que se ha producido
una violación del código de ética o que sospecha que podría producirse, informará el
hecho a sus superiores y, cuando resulte necesario, a otras autoridades correspondientes14.
Frecuentemente, esta acción se la denomina “denuncia”. Al hacerlo, el personal puede
quedar en una posición vulnerable, donde puede ser intimidado o marginado por sus
pares o por sus propios jefes. Se debería implementar medidas apropiadas, con el fin
de alentar las denuncias de conductas indebidas por parte del personal. Esto puede
incluir garantía de confidencialidad, apoyo del director, seguridad para “denunciantes”
potenciales, considerando que su información será valorada y que no serán tratados
de forma adversa en el caso que tengan la valentía de presentar la denuncia. Todo
documento de información de seguridad (SIR, según sus siglas en inglés)15presentado
con relación a actos de corrupción por parte del personal o casos de manipulación
deberán ser tratados como un “documento de información de seguridad cerrado”
(“SIR cerrado”) con circulación restringida.
El hecho de suministrar una amplia gama de actividades constructivas a los reclusos juega un importante
rol en… la “seguridad dinámica” de la prisión. Esto significa que, si los reclusos se encuentran participando
productivamente en actividades constructivas, es muy probable que el establecimiento penitenciario sea más
seguro y se encuentre más protegido.
14
Véase, por ejemplo, Consejo de Europa – Recomendación CM/Rec(2012)5 del Comité de Ministros a los
Estados miembros del Código Europeo de Ética del Personal Penitenciario, artículo 35.
15
Los documentos de información de seguridad (SIR) son tratados en el capítulo 4
44 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
Principios y Buenas Prácticas sobre la Protección de las Personas Privadas de Libertad en las Américas
Principio XIII
Educación y actividades culturales
Las personas privadas de libertad tendrán derecho a la educación, la cual será accesible para todas las
personas, sin discriminación alguna, y tomará en cuenta la diversidad cultural y sus necesidades especiales.
…
Los lugares de privación de libertad dispondrán de bibliotecas, con suficientes libros, periódicos y revistas
educativas, con equipos y tecnología apropiada, según los recursos disponibles.
Las personas privadas de libertad tendrán derecho a participar en actividades culturales, deportivas, sociales, y
a tener oportunidades de esparcimiento sano y constructivo. Los Estados Miembros alentarán la participación
de la familia, de la comunidad y de las organizaciones no gubernamentales, en dichas actividades, a fin de
promover la reforma, la readaptación social y la rehabilitación de las personas privadas de libertad.
Principio XIV
Trabajo
Toda persona privada de libertad tendrá derecho a trabajar, a tener oportunidades efectivas de trabajo, y a
recibir una remuneración adecuada y equitativa por ello, de acuerdo con sus capacidades físicas y mentales,
a fin de promover la reforma, rehabilitación y readaptación social de los condenados, estimular e incentivar
CAPÍTULO 2 SEGURIDAD DINÁMICA 45
la cultura del trabajo, y combatir el ocio en los lugares de privación de libertad. En ningún caso el trabajo
tendrá carácter aflictivo.
…
Los Estados Miembros promoverán en los lugares de privación de libertad, de manera progresiva y según la
máxima disponibilidad de sus recursos, la orientación vocacional y el desarrollo de proyectos de capacitación
técnico-profesional; y garantizarán el establecimiento de talleres laborales permanentes, suficientes y
adecuados, para lo cual fomentarán la participación y cooperación de la sociedad y de la empresa privada.
Las actividades ofrecidas deberían ser interesantes y exigentes. Las tareas poco
exigentes y aburridas incrementarán y no reducirán la sensación del paso del tiempo sin
sentido. Las actividades desarrolladas con un propósito ofrecen un estímulo intelectual
y emocional, resultando ser prácticas para que los reclusos se sientan cansados y con
una menor posibilidad/inclinación de perpetrar una fuga.
Muchos reclusos pudieron haber cometido delitos debido a sus bajos ingresos, la falta
de un trabajo estable, y por falta de educación. La prisión les puede ofrecer la primera
oportunidad de adquirir nuevas capacidades laborales y acostumbrarse a la disciplina
de un trabajo regular, lo que contribuirá de manera significativa al desarrollo de una
vida en libertad sin involucrarse en hechos delictivos.
Véanse también las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos (Reglas
Mandela), desde la Regla 96 a la 103; las Reglas Penitenciarias Europeas (2006), desde la Regla 26 a la 28, y
los Principios XIII y IIV de los Principios y buenas prácticas sobre la protección de las personas privadas de la
libertad en las Américas.
46 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos (Reglas Mandela)
Regla 23
(1) Todo recluso que no desempeñe un trabajo al aire libre dispondrá, si las condiciones meteorológicas lo
permiten, de al menos una hora al día de ejercicio físico adecuado al aire libre.
Véanse también las Reglas Penitenciarias Europeas (2006), Regla 27, y los Principios y buenas prácticas sobre
la protección de las personas privadas de la libertad en las Américas, Principio XIII.
Las normas internacionales establecen claramente que todos los reclusos deben
disponer de al menos una hora al día de ejercicio físico al aire libre, en un lugar con
espacio suficiente para llevar a cabo esta actividad. Los deportes y el ejercicio físico
son muy importantes para el mantenimiento de la salud física y mental, especialmente
para aquellos reclusos que están alojados en ámbitos de encierro restringidos. Si bien
dicho lugar debe ser seguro y de fácil observación por parte del personal, debe ser
lo suficientemente amplio y al aire libre. A su vez, debe tener lugares para descansar
y para protegerse de las condiciones adversas del clima. Idealmente, debería contar
con un baño y con acceso a agua potable. Los reclusos deberían tener la posibilidad
de ejercitarse en grupo con otros reclusos de la misma unidad, o con otros reclusos
seleccionados según su clasificación de riesgo. Se les debe suministrar el equipamiento
deportivo y, si los recursos lo permitieren, un gimnasio y las instalaciones para llevar a
cabo diferentes actividades deportivas. Al igual que se toman precauciones de seguridad
en el caso del trabajo, se debe registrar y supervisar a los reclusos, y se debe describir
detalladamente el equipamiento deportivo una vez finalizada cada sesión.
Las administraciones penitenciarias van a tener que tomar las precauciones de seguridad
adecuadas, lo que puede implicar que algunos de los reclusos de alto riesgo deban ser
excluidos de determinados tipos de actividades debido a en su clasificación de riesgo. Sin
embargo, se les debe ofrecer a todos los recursos alguna actividad que pueda realizarse
en un entorno seguro. Los riesgos se pueden reducir si se toman medidas tales como el
registro de los reclusos, aun mediante el uso de detectores de metales; la contabilización
de las herramientas; la supervisión por parte del personal y de las cámaras CCTV;
y la organización de la actividad en grupos pequeños en unidades seguras, que va a
depender de la naturaleza y del nivel de riesgo. El principio que debe imperar es que se
obtenga un equilibrio adecuado entre el nivel deseado de participación en la actividad
y la seguridad.
PRINCIPIOS CLAVES
• La seguridad también depende de contar con miembros del personal que estén alertas, quienes
conozcan a los reclusos e interactúen con ellos; miembros del personal que desarrollen relaciones
positivas entre los reclusos y ellos; miembros del personal que sean conscientes de lo que ocurre en
el establecimiento penitenciario; y miembros del personal que se aseguren de que los reclusos se
mantengan ocupados realizando actividades que tengan una finalidad y que sean constructivas.
• El personal penitenciario debe desarrollar y mantener relaciones productivas y de apoyo con los
reclusos.
• Las disposiciones de la política central deben promover el rol del agente penitenciario como
encargado de desarrollar y mantener relaciones constructivas con los reclusos, emitir juicios y manejar
eficientemente las situaciones dinámicas y complejas.
• Es muy importante que el personal que trabaje con los reclusos posea un nivel alto de habilidades
interpersonales.
• La seguridad dinámica resulta más efectiva cuando el personal está integrado por un grupo de
profesionales que están bien preparados.
• La supervisión directa y la gestión de la unidad mejora las operaciones, crea un ámbito más seguro,
y ofrece oportunidades de desarrollo del liderazgo.
• Un aspecto fundamental de la seguridad dinámica es que contribuye al sistema de inteligencia
penitenciaria. El personal penitenciario que convive con los reclusos observa, escucha lo que ocurre y
obtiene información de ellos.
• La posibilidad del riesgo de manipulación del personal por parte de los reclusos aumenta cuando
existe un contacto frecuente entre dichos grupos. Por lo tanto, se deben tomar las medidas adecuadas
para evitar la corrupción y la manipulación del personal.
• Un elemento esencial de los principios de seguridad dinámica se basa en canalizar la energía de
los reclusos en actividades positivas. Por lo tanto, se les deben ofrecer programas y actividades
constructivas a todos los reclusos.
Capítulo 3
Inteligencia penitenciaria: definiciones,
administración y organización
Importancia de la inteligencia penitenciaria
La información de inteligencia es un elemento fundamental en todas las organizaciones.
Dentro de los organismos encargados de hacer cumplir la ley, los directores superiores
utilizan la actividad comercial y militar, la información de inteligencia y el análisis en
el proceso de toma de decisiones. La información de inteligencia ayuda a reducir la
incertidumbre y a concentrar los recursos en las áreas adecuadas16.
Las tendencias internacionales muestran que las redes criminales continúan existiendo
dentro de los establecimientos penitenciarios. Los detenidos obtienen contactos
mientras están en prisión y, en algunos casos, extienden su delincuencia más allá del
sistema penitenciario. A su vez, algunos reclusos planean fugas e inician actividades
que tienen la finalidad de socavar el orden de la prisión, mientras que otros buscan
corromper o manipular al personal e intentan contrabandear cosas dentro de ella.
16
Por ejemplo, para sostener un debate sobre lo importante que es la información de inteligencia dentro de las
actividades policiales, véase el Manual de Instrucciones sobre los Sistemas Policiales de Información y de Inteligencia
de UNODC.
49
50 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
Los sistemas de inteligencia penitenciaria existen desde hace muchos años. De hecho,
si bien el concepto se ha formalizado recientemente en varias jurisdicciones, muchos
de los enfoques básicos (e intuitivos) de la labor de inteligencia son los mismos. Por
ejemplo, el personal penitenciario siempre ha tratado de descubrir el hilo conductor
que une las ideas de lo que está ocurriendo en la prisión, ha tomado nota mental de las
costumbres de los reclusos, o ha cultivado relaciones especiales con ciertos detenidos
que podrían proporcionar información privilegiada. Siempre se ha considerado que
todos estos elementos son simplemente parte de la buena labor penitenciaria.
Definiciones
Si bien la palabra “inteligencia” tiene varias acepciones, la mejor definición es la
siguiente:
Por otro lado, se puede utilizar la inteligencia penitenciaria para asistir durante el hecho
52 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
y luego de este, que es cuando más interactúan los funcionarios y los investigadores
encargados de la inteligencia. Por ejemplo, la inteligencia táctica puede exigir una
respuesta inmediata para hechos tales como disturbios o un ataque grave dentro del
establecimiento. De acuerdo con el tipo de hecho, la información de inteligencia puede
tomar varias formas. En el caso de un incidente con toma de rehenes, la estructura de
la inteligencia podría incluir:
(b) Información táctica – toda la información relacionada con el incidente que sea
necesaria para los grupos tácticos (tales como el grupo de intervención ante la
toma de rehenes) y para que los mediadores planifiquen sus opciones y estrategias.
Para poder entender adecuadamente las diferencias que existen entre los términos
relacionados con la inteligencia, es importante entender cómo interactúan entre ellos
(ver los términos y definiciones en el cuadro que sigue a continuación).
Inteligencia penitenciaria Toda información con valor adicional que puede utilizar el personal
penitenciario o el personal encargado de hacer cumplir la ley.
Inteligencia táctica Asiste al personal para que determine una actividad en forma
directa en una situación local. La inteligencia que se procesa
posibilita la distribución de recursos para enfrentar el riesgo
detectado y localizado.
CAPÍTULO 3 INTELIGENCIA PENITENCIARIA: DEFINICIONES, ADMINISTRACIÓN Y ORGANIZACIÓN 53
Evaluación Los medios por los cuales los datos se transforman en inteligencia,
que incluyen un proceso estructurado donde se considera la
información teniendo en cuenta su contexto a través de su fuente
y de su confiabilidad.
A nivel nacional, deben existir normativas claras para la gestión, la recopilación y el uso
de información e inteligencia penitenciaria, junto con los mecanismos de salvaguardia
correspondientes. Deben estar respaldadas por los lineamientos y los manuales
pertinentes. Para que la inteligencia penitenciaria se desarrolle y sea eficaz, se debe
aceptar que la recopilación de información de inteligencia constituye un elemento
esencial del funcionamiento de una prisión segura.
A pesar de que casi todas las prisiones tienen fuentes de información y archivos con
información recopilada de un tipo o de otro, existe la necesidad de contar con una
normativa estructurada y uniforme que establezca cómo combinarlos. Todo marco
integrado de información e inteligencia penitenciaria es esencial para que los marcos de
inteligencia penitenciaria puedan ser operados eficazmente.
Existe la posibilidad de que haya leyes que impidan completamente que los terceros
conozcan el contenido de las bases de datos del gobierno, incluso aquellas que pertenecen
al sistema penitenciario. Por otro lado, puede haber leyes de libertad de información
mediante las que, contrariamente, se permita un acceso importante a las bases de datos.
Sin embargo, siempre va a haber una parte de la información que no se podrá difundir
fuera de quienes están particularmente involucrados en ella, ya sea por las preferencias
culturales para controlar la información o por razones operativas (por ejemplo, no
hacerle saber a una persona que está bajo sospecha).
Véanse también las Reglas 61(1) y 84(1)(c) de las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento
de los Reclusos (Reglas Mandela), acerca del derecho de los reclusos a entrevistarse con carácter privado
y plenamente confidencial con determinadas partes, tales como los asesores jurídicos y los inspectores
penitenciarios.
CAPÍTULO 3 INTELIGENCIA PENITENCIARIA: DEFINICIONES, ADMINISTRACIÓN Y ORGANIZACIÓN 57
En todos los países existe algo que se llama “información clasificada”, que se considera
delicada o secreta. Esta información se suele “marcar con rótulos protectores”, por
ejemplo, “confidencial” o “secreta”. En los casos en que la información esté clasificada
según alguno de estos rótulos, se van a establecer restricciones específicas sobre el
manejo de la información, y solo se dará acceso a ella a las personas que tengan el nivel
de autorización adecuado.
Las restricciones específicas sobre el manejo van a establecer quiénes pueden ver la
información clasificada, y también las condiciones mediante las cuales pueden tener
acceso a ella, el formato en el que se puede archivar, cómo se puede transmitir y cómo
debe destruirse.
Tipos de uso de la inteligencia penitenciaria por parte de otros organismos encargados de hace
cumplir la ley
• La inteligencia penitenciaria oportuna y susceptible de dar pie para la acción puede lograr un impacto
significativo para la prevención, la reducción y la investigación del crimen organizado y los delitos
graves, especialmente cuando son de carácter transnacional. (“Oportuna” significa que llega a
manos del investigador en tiempo y forma, y “susceptible de dar pie para la acción” significa que por
su nivel de detalle y fiabilidad permite proceder a la acción).
• La inteligencia penitenciaria puede ser de gran utilidad en la tarea de encauzar los recursos destinados
a la prevención, la reducción y la identificación de todas las formas de delito, y asignarles prioridades.
• La inteligencia penitenciaria puede contribuir a la creación de un modelo de policía eficaz, con
frecuencia denominado “policía guiada por la inteligencia”, donde la inteligencia es un elemento
esencial para proporcionar una dirección estratégica y para determinar el despliegue de personal para
todas las formas de actividad policial táctica, incluso la policía comunitaria y las patrullas de rutina.
Los funcionarios de enlace policial que trabajan en los establecimientos penitenciarios pueden
aportar:
• Información sobre la planificación de la condena de los reclusos, sobre los desplazamientos y la
liberación.
• Actualizaciones sobre las redes del crimen organizado actuales y nuevas, así como sobre sus
integrantes, con inclusión de las alianzas, las tensiones, las actividades continuas y las intenciones a
futuro.
• Recopilación de información de inteligencia para apoyar el desarrollo de los perfiles de los sujetos.
• Apoyo logístico y en cuestiones de planificación para realizar sesiones informativas dentro de los
establecimientos.
• Pautas para el uso de los productos de inteligencia penitenciaria.
• Asesoramiento y apoyo táctico manifiesto o encubierto para el traslado de los reclusos a los tribunales
o a otros establecimientos penitenciarios.
• Acceso a información sobre grupos de reclusos de interés especial, tales como los reclusos extremistas
violentos, los testigos protegidos, los reclusos con alto riesgo de fuga y los reclusos que necesitan de
acuerdos de protección pública de varios organismos.
Vigilancia encubierta
Vigilancia encubierta
En aquellas sociedades donde las autoridades ejercen un control estricto sobre la población, el uso de estas
técnicas puede resultar indiscriminado. En otros sistemas, se exige la observancia de varios mecanismos
de salvaguardias estrictas para prevenir el abuso, incluso la exigencia de que el delito sea grave, que el
uso de la técnica sea vital para el caso, y que pruebas esenciales no puedan obtenerse por medios menos
intrusivos. Las normas internacionales de derechos humanos establecen como requisito la supervisión judicial
o independiente.
UNODC – Policía: Investigación criminal, Manual de instrucciones para la evaluación de la justicia penal,
2006, página 13.
Las disposiciones relativas a la vigilancia encubierta deben tener en cuenta los derechos
de los reclusos de forma integral. Existen diversas decisiones adoptadas por tribunales y
órganos internacionales de derechos humanos sobre el permiso para utilizar la vigilancia
encubierta y los parámetros de estas medidas. Deben existir varios mecanismos de
salvaguardias estrictos para prevenir el abuso. Es común, que las normas internacionales
de derechos humanos establezcan como requisito la supervisión y aprobación judicial o
independiente.
60 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
El caso de Inglaterra
La Ley de Regulación de las Facultades de Investigación (RIPA, según sus siglas en inglés), que entró en vigencia
en el año 2000, confiere a los establecimientos penitenciarios la facultad de usar la vigilancia encubierta. La
legislación y los Códigos de Práctica relacionados establecen el marco para el uso de la vigilancia encubierta
y la aplicación dentro de los establecimientos penitenciarios.
• Todos los establecimientos penitenciarios pueden solicitar el uso de la vigilancia encubierta cuando
sea necesario y adecuado para la prevención y detección de delitos/delitos graves, prevención del
desorden, o para la seguridad del público en general.
• Todos los establecimientos penitenciarios van a contar con personal capacitado en las funciones clave
para asegurarse de que la vigilancia encubierta se lleva a cabo de acuerdo con la ley.
• El uso de la vigilancia encubierta va a ser una parte fundamental del sistema de recopilación de
inteligencia dentro de los establecimientos penitenciarios.
• La vigilancia encubierta va a contribuir con el mantenimiento del control en los establecimientos
penitenciarios, y va a permitir que los directores tomen decisiones fundadas.
• Se debe cumplir con la Ley RIPA en todas las instalaciones penitenciarias y, a su vez, se debe tener la
confirmación anual de la Oficina de Comisionados de Vigilancia (OSC, según sus siglas en inglés).
Existen enormes probabilidades de abuso, debido al secreto que rodea las operaciones
con informantes, y a los privilegios o a las sumas de dinero que éstos pueden recibir. En
términos generales, la confiabilidad y la fuente de cualquier información proporcionada
por un informante deben ser cuidadosamente evaluadas y, de ser posible, corroboradas,
con el propósito de asignarle una clasificación según su precisión y validez. Cada vez que
un informante ofrece información, el funcionario debe cuestionar sus motivos y registrar
la misma. Una serie de pautas para evaluar la confiabilidad de los informantes ayuda
a facilitar la buena gestión. Al mismo tiempo, se debe reconocer que las autoridades
penitenciarias tienen la responsabilidad de cuidar a sus informantes y deben protegerlos
de represalias.
PRINCIPIOS CLAVES
Es importante recordar que, cuando se trata de información analizada como parte del
proceso de inteligencia, la carga de la prueba es diferente de la que se exige en los
tribunales penales de muchas jurisdicciones. Toda persona que utiliza la inteligencia
debe tener en mente que las conclusiones a las que se llega a través del proceso de
inteligencia son presunciones por parte del autor hasta que se prueben fehacientemente
mediante más hechos.
63
64 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
1. Asignación
de Tareas
7. 2.
Reevaluación Recopilación
6. Difusión 3. Evaluación
5. Análisis 4. Cotejo
La administración penitenciaria también debe dejar en claro que toda persona que
entre en contacto con un recluso y con la prisión “tiene la tarea” de informar y expresar
cualquier preocupación que esté relacionada con la seguridad.
• Planes de fuga.
• Actividades relacionadas con bandas organizadas.
• Narcotráfico.
• Planes de ataque al personal o a otros reclusos.
• Comunicaciones prohibidas por teléfono móvil e Internet.
• Radicalización y actividad excesivamente violenta.
• Intimidación a reclusos vulnerables.
• Riesgos para la seguridad, el orden y el control del establecimiento penitenciario.
Recopilación
Para considerar a un proceso de inteligencia como bueno se debe evaluar la información
recolectada. Se considera recolección de información al proceso direccionado y
centrado en la recopilación de información de todas las fuentes posibles, mediante
medios abiertos y encubiertos. Entre las fuentes se incluyen las bases de datos de los
establecimientos penitenciarios; los documentos judiciales; información que brinda el
personal, los reclusos o terceros (por ejemplo: organismos encargados de hacer cumplir
la ley); otras unidades penitenciarias (por ejemplo: unidades de seguridad o unidades
de investigaciones o traslados); imágenes de videocámaras; el resultado de los registros;
66 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
las redes sociales y medios de comunicación; y cualquier otra fuente a la que la unidad
de inteligencia pueda acceder legalmente.
El personal penitenciario recopila información estando atento en todo momento, informando cualquier
hecho fuera de lo común y a través de las relaciones profesionales con el recluso, basadas en la confianza y
el respeto. Por ejemplo:
Información de las visitas—la mayoría de los reclusos recibirá visitas de sus familiares,
amigos y asociados. Algunos visitantes pueden representar una amenaza potencial al
buen orden y la seguridad del establecimiento penitenciario ya que pueden introducir
contrabando, asistir a los detenidos en fugas o remitir mensajes para intimidar testigos;
destruir evidencia o entorpecer el normal desenvolvimiento de la justicia; por este
motivo, los visitantes deben ser tratados cuidadosamente e investigados antes de
permitirle visitar al detenido. Cuando la infraestructura jurisdiccional lo permita, es
visto como una buena práctica que todos los visitantes presenten una solicitud en la
cual establezcan cual es la relación que tienen con el detenido y que también presenten
documentación de identidad original y un domicilio que pueda ser verificado antes de
que se les permita la visita. También se deberá registrar la fecha y horario de todas las
visitas.
17
Véase el Manual sobre la Gestión de los Expedientes de los Reclusos (2008) de UNODC para una detallada
descripción de la información que debe ser recopilada cuando un recluso es admitido en un establecimiento
penitenciario.
68 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
Canales de investigación
Los canales potenciales de investigación disponibles para cualquier profesional del área
de inteligencia, son prácticamente ilimitados. Algunas investigaciones son reguladas
a través de políticas, mientras otras dependen de las redes que han sido establecidas y
mantenidas a lo largo del tiempo. La cantidad de fuentes de información disponibles
dependerá, en gran medida, del ingenio personal del profesional de inteligencia.
información o, lo que es peor aún, que esta quede expuesta a futuros peligros. A los fines
de evaluar la información, el departamento de seguridad deberá contar con la identidad
de la fuente (salvo que sea una fuente encubierta de información-ver la sección sobre
el uso de reclusos informantes en la página 54) pero se deberá poner especial cuidado
en no revelar la identidad del recluso que está brindando información, a miembros del
personal que no necesiten saberlo.
Toda información tiene un uso investigativo o de inteligencia potencial, pero solo luego
de que el departamento de seguridad junta las diferentes piezas del rompecabezas de
información es que ésta cobra sentido y se aprecia su valor real. Cualquier cosa que
un individuo sienta que no es usual o que se encuentra fuera de lo normal deberá ser
informarlo y el personal de seguridad deberá registrarlo y decidir si esta información
es valiosa.
Evaluación
La evaluación supone la valoración de confiabilidad de la fuente y de la calidad de
la información. Toda información deberá ser examinada a los fines de evaluar la
confiabilidad de la fuente y la exactitud de la información. Un miembro del personal
penitenciario especialmente capacitado deberá evaluar la información tal cual como
es recibida. Se deberá establecer un proceso para supervisar y asegurar la calidad de
la información luego de que ésta sea presentada. Es importante brindar el feedback al
miembro del personal que recopiló la información y al evaluador si se desea mejorar
futuras evaluaciones.
Las buenas prácticas han evolucionado motivo por el cual la información o inteligencia
presentada debe ser evaluada de acuerdo con (a) el historial previo de confiabilidad de la
fuente, y (b) el grado de conocimiento directo que tiene la fuente sobre la información
que está suministrando (por ejemplo: ¿la fuente adquirió la información en forma
directa o la escuchó de un tercero?).
CODIGO DE ALMIRANTAZGO
Junto con esta evaluación, se puede añadir un código de “manejo” o “difusión” que
limite el alcance de la autorización para ampliar la distribución. Su propósito es proteger
la información o inteligencia de una divulgación no autorizada.
Cotejo
Luego de la evaluación, todos los registros y documentos recibidos, tanto en papel como
en forma electrónica, deben ser cotejados, archivados, cruzados y ordenados para estar
listos para el análisis. El cotejo involucra la organización de los datos recolectados en un
formato que pueda ser recuperado y analizado.
Análisis
El análisis tiene que ver con la examinación minuciosa de la información a los fines de
descubrir su significado y sus características esenciales. La etapa de análisis del proceso
de inteligencia es vital. Podemos describir el análisis como una examinación exhaustiva
del significado y de las características esenciales de la información disponible El análisis
deja en evidencia la brecha de información, las fortalezas, debilidades y sugiere el
camino a seguir.
Los resultados del análisis pueden ser presentados en diferentes formatos dependiendo
de los requerimientos de la persona que solicite el trabajo. Estos pueden variar entre
informes exhaustivos sobre asuntos estratégicos complejos (como el tráfico de drogas) a
pequeñas presentaciones orales sobre un asunto en particular (intento de fuga, detenido
utilizando un teléfono móvil).
Los buenos productos de inteligencia penitenciaria son convincentes, concisos y accesibles, con
recomendaciones claras e inequívocas que deberán estar justificadas por evidencia de peso. En los casos en
que la información fluya y las fuentes sean débiles, el producto analítico también será débil.
La información puede ser comparada con un rompecabezas cuyas piezas son pequeños
datos de información. Cuando se los une de manera correcta, surge una imagen; pero
para que esta imagen esté completa, todas las piezas deben estar en el lugar correcto.
No importa cuán insignificante pueda parecer una pieza, sin esta no habrá imagen. Lo
mismo sucede con la información: cada fragmento que se une forma el proceso por el
cual se recopila la información de inteligencia.
Elementos de la hipótesis
• Quién-individuos clave o individuo.
• Qué-actividades delictivas.
• Cómo-método de operación.
• Cuándo-locación geográfica.
• Porqué-móvil.
• Cuando-pasado, presente o futuro.
Difusión
La etapa de difusión involucra la comunicación del resultado del análisis al cliente,
por ejemplo: autoridades penitenciarias. El proceso de difusión puede tomar diferentes
formas, como, por ejemplo:
Informes de Inteligencia
Los informes de inteligencia presentan los resultados del análisis. El producto debe ser
breve y debe contener solo los resultados que sean relevantes para un asunto específico
o tendencia. Los profesionales de inteligencia deben evaluar en forma crítica su propio
análisis a los fines de asegurarse que el producto final articule de manera clara toda la
información crucial de inteligencia que les permita a las autoridades tomar decisiones
fundadas.
Informes de Inteligencia
El propósito del informe de inteligencia es brindar un resumen sobre algún hecho y así permitir la asignación
de recursos a tiempo. También puede ser utilizado para informar actualizaciones sobre productos existentes.
El informe de inteligencia facilita el reporte eficiente y a tiempo de los asuntos emergentes debido a que
reduce la carga de trabajo ya que es un resumen y no una evaluación exhaustiva del hecho.
Una de las cosas a tener en cuenta es que el informe real no representará necesariamente
el tiempo y esfuerzo invertido en su producción. Es difícil convencer a un cliente que
CAPÍTULO 4 INTELIGENCIA PENITENCIARIA: CICLO, PROCESO Y ELEMENTOS 75
las dos o tres hojas del documento de inteligencia pueden haber llevado días, semanas o
hasta (en algunos casos) meses de trabajo para su elaboración. El analista deberá evitar
equiparar el esfuerzo realizado con la longitud del documento.
Se adjunta en el anexo 2 un modelo de informe de inteligencia junto con una guía para
completarlo.
Intercambio de Inteligencia
Se deberá decidir hasta qué punto se intercambiará la información de inteligencia.
En algunos casos, quedará en el departamento de seguridad; en otros, se remitirá al
director del establecimiento penitenciario o a la administración central de prisiones.
En algunas ocasiones, la información de inteligencia será relevante y útil para otros
organismos encargados de hacer cumplir la ley. El producto de inteligencia deberá ser
marcado claramente con el código de manejo apropiado. La información de inteligencia
penitenciaria nunca se compartirá con los reclusos.
Acciones de Inteligencia
Dentro de las posibles acciones se pueden incluir las siguientes:
• No hacer nada.
• No hacer nada, pero solicitar al personal que continúe recopilando información
sobre el tema (como parte de los objetivos estratégicos u operacionales).
• Trasladar a un recluso o reclusos.
• Registrar a un recluso o un edificio.
• Registrar a un visitante o a un miembro del personal.
• Informar a la administración regional o nacional si este fuera un asunto estratégico.
• Informar al organismo local encargado de hacer cumplir la ley (según los
protocolos establecidos).
76 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
Reevaluación
La reevaluación implica la revisión continua del ciclo de inteligencia a los fines de
identificar de qué manera se puede mejorar cada etapa del ciclo. Para que sea más
valiosa, la reevaluación se deberá llevar a cabo durante el proceso y no dejarla para la
última etapa del ciclo. Muchas veces, la reevaluación implica volver a ejecutar todo el
ciclo.
Anexo 1
Documento de Información de
Seguridad: plantilla y guía para
completarlo
Se pueden encontrar más detalles sobre el propósito y la función de los Documentos
de Información de Seguridad (SIR, según sus siglas en inglés) en el capítulo 4, páginas
66-67
Observaciones Generales
• Cualquier actividad o situación inusual, fuera de lo común o sospechosa puede
tener un valor potencial investigativo o de inteligencia tanto para la administración
penitenciaria como para otros organismos encargados de hacer cumplir la ley y
por este motivo se necesita recabar información.
77
78 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
Sección 1
Para ser completada por el miembro del personal encargado de confeccionar el informe
quien deberá consignar:
El lector deberá tener en cuenta que la información fue concebida por el autor del
documento u otra persona o fuente, dichas fuentes pueden ser una agencia, organización
o departamento de Estado. Puede haber varias razones por las cuales se podrá querer o
no divulgar información sobre la fuente.
La persona que complete el informe también deberá indicar su punto de vista sobre
la confiabilidad de la fuenteb y la exactitud de la informaciónc basándose en sus
conocimientos personales y las investigaciones realizadas. Un SIR le otorga a su autor
la oportunidad de expresar su opinión (o sospecha) sobre la exactitud de la información
como así también sobre las motivaciones de la fuente o sobre cualquier otro dato que
pueda incidir en la utilidad de la información. El autor deberá evitar las conclusiones
engañosas y asegurarse que todas las conclusiones a las que se haya llegado estén
debidamente respaldadas.
Esta sección solo tratará información relevante que deberá ser concisa y directa al
punto. De ser necesario, se podrán usar hojas de papel adicional (ver abajo).
El miembro del personal que presente el SIR deberá incluir la siguiente información al
final de la primera hoja:
• Firma.
a
La clasificación de seguridad permite a aquellas personas que utilizan el documento entender el grado de
sensibilidad y de este modo aplicar los controles de seguridad apropiados a los fines de proteger la confidencialidad,
integridad y disponibilidad del documento. Si bien las personas encargadas de registrar la información deberán
asignar la clasificación de seguridad a cada documento los profesionales de inteligencia deberán re-evaluar, de
forma independiente, la sensibilidad de la información. El nivel de clasificación de seguridad adecuado debe ser
asignado para identificar el riesgo, la naturaleza y gravedad de las consecuencias adversas que podría traer el acceso
o divulgación no autorizada de dicha información. La naturaleza de la clasificación de seguridad dependerá de las
regulaciones nacionales.
ANEXO 1 DOCUMENTO DE INFORMACIÓN DE SEGURIDAD: PLANTILLA Y GUÍA PARA COMPLETARLO 79
De existir una demora significativa entre la recepción de la información por parte del
autor y la elaboración del informe, esta diferencia deberá ser remarcada y se deberá
incluir una explicación sobre la demora al comienzo de la sección de información del
documento a los fines de asegurarse que el lector no suponga que la fecha del documento
es la misma fecha en que la información fue recibida.
Sección 2
El funcionario de seguridad/inteligencia que reciba el SIR deberá incluir lo siguiente:
• Firma.
Toda la información deberá ser evaluada por separado y también se deberá evaluar la
confiabilidad de la fuente y la exactitud de la información. La confiabilidad de la fuente
y de la información deberá ser examinada y evaluada de forma independiente a los fines
de asegurarse que cada una sea examinada con exactitud.
Sección 3
El oficial superior del área de seguridad/inteligencia deberá revisar el SIR como así
también la evaluación y recomendación (es) realizada(s) y:
b
Confiabilidad de la Fuente- este es un examen de las características de la fuente a los fines de evaluar cuál es
el grado de confianza que se le puede otorgar a la información suministrada.
Exactitud de la información- la primera decisión es determinar si la información se basa en un hecho, opinión,
de oídas o rumor antes de llevar a cabo las investigaciones sobre su exactitud. Cuando sea posible, las afirmaciones
deberán estar seguidas por investigaciones a los fines de determinar su veracidad o no.
80 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
24 o 72 horas).
Sección 4
El jefe de la oficina de seguridad/inteligencia (de encontrarse, si no el oficial más antiguo
que se encuentre cumpliendo tareas en la oficina de inteligencia) deberá revisar el SIR,
su evaluación y acciones recomendadas y:
Sección 5
El director de la cárcel (oficial a cargo) o subdirector, deberá:
PLANTILLA MODELO
[XXXX] Servicio Penitenciario
DOCUMENTO DE INFORMACIÓN DE SEGURIDAD
Clasificación de Seguridad:
Cárcel: Número/año SIR
Firma:
82 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
Fecha: Hora:
Firma:
B 2 2
D 4 4
E 5 5
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1) ................
2) ................
3) ................
4) ................
(Marque)
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84 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
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Anexo 2
Informe de Inteligencia: plantilla
y guía para completarlo
Se pueden encontrar más detalles sobre el propósito y la función de los informes de
inteligencia en el capítulo 4, página 67.
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86 MANUAL DE SEGURIDAD DINÁMICA E INTELIGENCIA PENITENCIARIA
Asunto—La línea del asunto deberá reflejar el contenido del documento y el enfoque
inicial establecido durante la etapa de definición del trabajo.
Cada párrafo del análisis deberá comenzar con una afirmación principal-el punto más
importante a tratar en el párrafo. La afirmación principal deberá ir más allá de los datos
del resto del párrafo, deberá emitir un juicio sobre el futuro o brindar una percepción
analítica basada o derivada de los datos existentes. El resto de la información en el
párrafo deberá probar, apoyar o explicar el punto establecido en la afirmación principal.
El lector deberá poder extraer las afirmaciones principales de los informes y entender el
sentido, flujo y lógica de lo que se está diciendo.
Muchos informes de seguridad son demasiado largos. En general, esto suele ocurrir
cuando el profesional de inteligencia incluye demasiados antecedentes innecesarios. El
informe de inteligencia debe dar una respuesta sucinta a la pregunta “¿entonces qué?”
sobre un asunto en particular.
PLANTILLA MODELO
[XXXX] Servicio Penitenciario
INFORME DE INTELIGENCIA
Las interpretaciones y conclusiones de este informe son realizadas sobre el balance de
probabilidades, sobre información existene al momento de su elaboración.
La información aquí contenida NO ES EVIDENCIA y su intención en brindar una base
para futuras investigaciones.
ASUNTO:
INTRODUCCIÓN
HALLAZGOS PRINCIPALES
ANÁLISIS
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
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