Articulo Sindrome de Moebius
Articulo Sindrome de Moebius
Articulo Sindrome de Moebius
TERAPIA MIOFUNCIONAL.
RESUMEN
La rehabilitación del síndrome de Moebius implica la intervención de un amplio equipo multidisciplinar.
Este artículo tiene como objetivo presentar el importante papel que tiene la logopedia en su
recuperación, y cómo a través de la terapia miofuncional se pueden mitigar las dificultades que presenta
dicho síndrome en el área del lenguaje.
ABSTRACT
The rehabilitation of The Moebius's syndrome implies the intervention of a wide multidisciplinary
equipment. This article aims to present the important role that the speech therapy has in his recovery,
and how miofuncional therapy can improve the difficulties that the above mentioned syndrome
presents in the area of the language.
INTRODUCCIÓN
Según Bartulli, Cabrera y Periñán (2010, 11), el término terapia miofuncional (TM) procede
etimológicamente de terapia (curación) y mio (músculo), por lo que se define como una terapia
orientada a la curación de alteraciones relacionadas con la funcionalidad de los músculos. Actualmente
esta terapia se utiliza para intervenir sobre la musculatura orofacial. La misma con la que hablará el niño
y desarrollará funciones orales no verbales, como la respiración, succión, masticación y deglución y que
serán las que definan su configuración facial.
La intervención puede ser, o bien una intervención activa, donde exista participación voluntaria por
parte del paciente, o una intervención pasiva, es decir sin participación del paciente al que estemos
tratando.
Tiene por finalidad, conseguir un equilibrio muscular orofacial que permita realizar patrones
neuromotores de comportamiento del sistema orofacial adecuados y desarrollar un rostro armónico.
El síndrome de Moebius, también conocido como Secuencia de Moebius, ó Diplejia Facial congénita, fue
descrito inicialmente por Von Graete y Saemisch en 1880, sin embargo, Paul Julius Moebius describió
un estudio completo de la enfermedad en 1892 al comunicar 43 casos de parálisis facial congénita y
adquirida. (Villafranca et al, 2003)
ETIOLOGIA
Villafranca et al. (2003), expone que existen teorías etiológicas que atribuyen el origen a una alteración
a nivel mesodérmico y ectodérmico durante el desarrollo embrionario y probablemente por la falta de
riego sanguíneo se destruyen.
En la teoría mesodérmica habría una alteración primaria de la musculatura derivada de los arcos
branquiales y las alteraciones del sistema nervioso serían secundarias a dicha aplasia muscular.
La teoría ectodérmica, postula un compromiso central localizado en los músculos motores de los nervios
motores, en los nervios periféricos o en la placa mioneural; en este caso las anomalías musculares
asociadas serían secundarias.
SÍNTOMAS
Según Milet y Alegría (2006), el síndrome de Moebius constituye un cuadro poco frecuente. Se
caracteriza por la parálisis del VI par craneal (oculomotor externo o abducens) y VII par craneal (facial).
En algunos casos, se afectan pares craneales como XII (hipogloso), X (vago), VIII (estato-acústico) y IX
(glosofaríngeo). Esto se traduce en una parálisis facial que puede ser, parcial o completa, unilateral o
bilateral congénita (Cammarata- Scalisi, 2007). El resultando es un rostro inexpresivo y estrabismo
convergente.
Pueden darse otras anomalías como sordera, micrognatia, pies zambos y malformaciones de las manos.
Existen signos de afectación del sistema nervioso central y signos piramidales bilaterales.
Los niños que presentan esta minusvalía tienen dificultades para la succión, la deglución, la fonación,
parálisis en de los músculos masticadores tanto de los elevadores de la mandíbula: temporal,
maseteros y pterigoideo medial, como los que la bajan: pterigoideo lateral y toda la musculatura
suprahiodea. La movilidad de la lengua y del velo del paladar, así como alteraciones visuales también
son comunes. (Lyon y Evrard, 1990)
Dentro de las alteraciones encontradas, se describe la presencia de hendiduras palatinas, paladar ojival,
sindáctila, agenesia de músculo pectoral o glándula mamaria y retraso mental en el 10% de los
pacientes.
Dadas las características de esta enfermedad, el diagnóstico clínico es fácil de realizar al momento de
nacer. Generalmente la madre o el pediatra advierten que el recién nacido no tiene una expresión
normal. Cuando el niño llora produce sonidos y lágrimas, con la ausencia de la mímica facial propia del
llanto y de otras expresiones faciales.
Existe dificultad en la succión, por lo que debe recibir alimentación asistida. Durante el sueño se aprecia
un cierre palpebral incompleto, los ojos se desplazan hacia arriba (fenómeno de Bell), sin
desplazamiento lateral. Esto último permite el diagnóstico diferencial con una parálisis periférica del
nervio facial.
Como expone Sordi-Ichikawa (2006), a consecuencia de las alteraciones anatómicas buco faciales
referidas, se pueden observar las siguientes alteraciones en el habla:
- Voz con resonancia hipernasalizada, pastosa, monótona, con ronquidos, baja intensidad y
posibles nódulos en las cuerdas vocales.
- Por la dificultad en la movilidad de la lengua y por la alteración en conseguir una presión
intraoral fuerte, alteración en la producción de fonemas linguodentales.
-La dificultad en la movilidad de los labios dificultan la producción de los fonemas /p/ /b/ y /f/ y
junto con el resto de alteraciones en los músculos faciales, un retraso en el desarrollo fonológico.
A causa de sus alteraciones en la comunicación gestual, presentan dificultades para mostrar aprobación
a lo que el interlocutor le está comunicando con una sonrisa, o desaprobación frunciendo el ceño,
pueden tener problemas para relacionarse con otros niños y ser rechazados por el grupo por lo difícil o
incómodo que resulte relacionarse con ellos. (Tabaquim y Lima, 2005)
EVALUACIÓN
- Anamnesis.
Antes de iniciar la rehabilitación, debemos pautarnos unos objetivos, tanto generales, como
específicos, que nos servirán de guía en el proceso de intervención.
Objetivos generales
INTERVENCIÓN PRECOZ
Es fundamental un diagnóstico precoz, por lo que los pediatras y los padres han de estar atentos a los
síntomas comentados, especialmente la combinación de inexpresividad facial, estrabismo
convergente, babeo constante y dificultades para la succión.
El tratamiento es fundamentalmente quirúrgico. Sin embargo, existen una serie de medidas necesarias
al momento de nacer, orientadas a prevenir complicaciones derivadas de estas alteraciones, tales como
el uso de lágrimas artificiales, instrucciones para la alimentación, sello ocular nocturno etc.
Succión: Es común encontrar que la succión de leche es pobre o insuficiente, es decir, no vacía el pecho.
Debido a la hipotonía que tienen que les produce una disminución o ausencia del reflejo de succión.
Debemos estar alerta y observar la lenta progresión de aumento de peso que tienen. (Quiles, 1999)
En este caso, para conseguir que el bebe esté bien nutrido, debemos seguir las siguientes pautas:
En casos extremos en los que esto no cumpla el objetivo que buscamos, es decir, la nutrición del bebé,
se recurrirá a la alimentación nasogástrica o gastrostomía.
Según Queiroz, (2002), en el caso de que el bebe tenga una sonda orogástrica, se solicita el cambio de la
sonda orogástrica por una nasogástrica o PEG. Para poder estimular y trabajar en la zona peri e intra
oral.
Se introduce el dedo enguantado, mojado en leche, en la boca del bebé, y cada tres o cuatro succiones
se lo retiran para la pausa respiratoria. Establecemos el mínimo de succión para que posteriormente el
bebé llegue a un patrón de ocho a diez succiones y una pausa respiratoria espontánea.
Para estimular el reflejo de succión: colocamos el dedo índice o meñique, sobre la lengua con la yema
contra el paladar, introducimos y por último colocamos la tetina del biberón.
Estimulación: Según Bigenzahn (2004), Hahn (1991), ha desarrollado un modelo de estimulación de la
sensibilidad de la cavidad oral, que puede usarse antes de la terapia miofuncional o de forma
simultánea, y que se basa en los métodos de Dahan, Wauters y Mahaux.
Utiliza ejercicios para explorar y reconocer la cavidad bucal y las estructuras orales, ejercicios del gusto y
el olfato, y ejercicios para mejorar la estereognosia oral y la movilidad de la lengua, labios, mejillas y
mandíbula.
Técnicas de masaje:
- Pinzamiento rodado: tomando una porción de tejido celular subcutáneo, o vamos rodando.
- Amasamiento: se realiza con la mano abierta sobre el tejido muscular. Efecto relajante.
- Presión: realizada con los nudillos o los pulgares, sobre rebordes óseos o zonas de inserción
muscular. Destensa.
- Estiramiento: suave y mantenido de la articulación con el fin de relajar los músculos acortados.
Es aconsejable que después del primer año el chupete, biberón y succión digital desaparezcan, porque
esto provocara alteraciones miofuncionales que pueden empeorar las características anatómicas de
nuestro paciente.
INTERVENCIÓN
Es imprescindible tener presente que cada paciente requiere una intervención individualizada y
adaptada a sus características y necesidades. Por lo tanto, la intervención que vamos a presentar a
continuación, servirá de guía y ayuda para elaborar la intervención de cada uno de los pacientes a los
que vayamos a tratar. Siempre teniendo en cuenta; la edad del paciente, el CI, las características físicas y
las dificultades que el paciente presente.
Como Bartulli et al. (2010) expone, aunque la evaluación individualizada de cada caso será la que
marque las pautas de intervención, debemos tener en cuenta que el tratamiento tendrá como finalidad
regular y normalizar en la medida de lo posible las alteraciones anatomofuncionales del sistema
orofacial.
- Musculatura orofacial. Se llevará a cabo de una forma sistemática, con pocos ejercicios pero de
manera constante, en series cortas, para evitar tanto la fatiga muscular como el cansancio y la
falta de motivación del paciente.
El paciente debe pintarse los labios con un pintalabios, los tiene que
MOVILIDAD
tener cerrados y de esta manera tendrá que plasmar sus labios pintados
Y FORMA en un folio colocados a una ligera distancia para que realice el
movimiento de dar un beso. Al principio, el folio se le colocara más cerca
Ejercicio contraresistencia:
El paciente debe inflar las mejillas todo lo que pueda y el logopeda hará
TONO
contra-resistencia sin que se le escape nada de aíre. Para evitar el
cansancio se harán series de tres, cinco veces en cada serie. (Bartulli,
2010)
BUCCIONADORES Praxias:
El paciente deberá aguantar el globo inflado en la boca sin tocarlo con las
manos. Este ejercicio trabaja el tono muscular del bucinador y también se
TONO ejercita el tono muscular, la movilidad y la acción esfinteriana del velo del
paladar. (Bartulli, 2010)
VELO PALATINO
Ejercicio de cosquillitas:
A nivel intrabucal, una falta de sensibilidad puede dar lugar a equivocaciones a la hora de
identificar el punto de deglución correcto o el punto de articulación de un determinado
fonema. A nivel extrabucal, una falta de sensibilidad puede causar que el paciente no perciba
la saliva que pueda caer a través de la comisura labial, conllevando una sialorrea intensa.
SENSIBILIDAD
Uno de los ejercicios que podemos llevar a cabo es el ejercicio de estimulación vibratoria:
con una torunda de algodón unida a un vibrador, a un cepillo eléctrico o de manera manual
estimulamos con presiones y movimientos circulares la zona peribucal. (Bartulli, 2010)
- Intervención en las funciones del sistema orofacial: Respiración, succión, masticación y deglución.
- Expresión facial. Principal área a intervenir en el síndrome de Moebius, puesto que su principal
alteración radica en la parálisis facial que padecen.
Se comienza con una cinesiterapia pasiva, hasta que el paciente pueda hacerla de forma activa. En
la cinesiterapia pasiva utilizaremos elementos como depresores linguales o guialenguas.
Por medio de uno o varios dedos, se realizan pasadas superficiales y rápidas o
presiones por el órgano a tratar. Esta técnica puede complementarse con el
Manual
empleo de utensilios (gasas, depresores…).
Con chorros de agua muy finos a alta presión con una jeringuilla se introduce en
la boca. Contraindicada para pacientes que corran riesgo de aspiración.
Hidroterapia
Siguiendo la figura 3 realizaremos un masaje facial a través de presión, vibración y deslizamiento, para
potenciar una mayor sensibilidad y movilidad de los músculos faciales. Siguiendo la direccionalidad de
las flechas indicadas, trabajaremos sobre los músculos afectados.
Figura 3
Finalmente, según Santiago, Jimeno y García (2005), deberán trabajarse específicamente las
gesticulaciones faciales voluntarias asociadas a diversos estados de ánimo (tristeza, sorpresa, alegría…)
CONCLUSIONES
La terapia miofuncional, a pesar de ser una terapia un tanto desconocida y poco masificada, salvo en los
ámbitos profesionales en los que se lleva a cabo, se puede observar que es una terapia en la que
engloba una parte fundamental en el ámbito logopédico, y es una pieza imprescindible en la
rehabilitación tanto orgánica como funcional del sistema orofacial.
- Las dificultades del paciente. Debemos tener presente que vamos a intervenir con niños que
tienen un síndrome, y que a pesar de las malformaciones orofaciales tienen otras patologías
asociadas, las cuales debemos tener en cuenta a la hora de proponer la intervención que se va
a llevar a cabo con ellos.
- La motivación del niño y la familia. En muchos de los ejercicios que proponemos el niño debe
asistir a las sesiones y colaborar, puesto que si no es así, la rehabilitación no tendrá el mismo
resultado. Respecto a los padres, tienen que favorecer que la terapia se lleve a cabo y deben
colaborar en todo lo que se les pida, puesto que se llevará un control diario de muchas
funciones cotidianas y en casa tendrán que trabajar con algunos ejercicios que les
recomendemos.
En la actualidad, están surgiendo corrientes que apoyan el vendaje neuromuscular para la rehabilitación
de alteraciones en las funciones y órganos del sistema orofacial. Esta técnica, se está usando en
fisioterapia desde 1998 en España y es ahora cuando se está empezando a utilizar en logopedia.
Con este trabajo proponemos la utilización de esta técnica innovadora en la intervención logopédica en
el síndrome de Moebius, puesto que facilitaría mejorar las funciones en menos tiempo.
REFERENCIAS
Bartulli. M.; Cabrera. P. y Periñán. M. (2010). Guía técnica de intervención logopédica. Terapia
miofuncional. Madrid: Síntesis.
Cammarata- Scalisi F. (2007). Espectro clínico y etiológico del síndrome de Moebius. Archivo
Argentina pediatría. 105 (5). 444-446
Eagwa, K., Hara, M., Álvarez, J.A y Arija, E (1999).Técnicas de alimentación de bebés con SPW.
En El síndrome de Prader Willi: guías para familias y profesionales (pp 295-303).
Madrid: Ministerio de trabajo y asuntos sociales secretaría general de asuntos sociales.
Instituto de Migraciones y Servicios sociales
Milet B. y Alegría X. (2006). Caso clínico síndrome de Moebius. Revista Obsetet. Ginecología. 1
(3). 215-216
Quiles Izquierdo, J (1999). Alimentación. En El síndrome de Prader Willi: guías para familias y
profesionales (pp 63-76). Madrid: Ministerio de trabajo y asuntos sociales secretaría
general de asuntos sociales. Instituto de Migraciones y Servicios sociales
Santiago Pardo, J., Jimeno bulnes, N. y García Atarés, N. (2005). Los logopedas hablan.
Valencia: Nau llibres.
Villafranca J., Castillo P., Garcés M., Villalón E., Grez E. y Diaz A. (2003). Síndrome de Moebius.
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