Este documento discute la perspectiva antropológica y cómo se basa en la experiencia del extrañamiento. El extrañamiento ocurre porque los antropólogos no participan como nativos en las sociedades que estudian y experimentan la tensión entre aproximación y distanciamiento. Esto les permite percibir aspectos de la "conciencia práctica" de los actores sociales que de otra forma pasarían desapercibidos. El extrañamiento del antropólogo también lo convierte en un elemento disruptivo que puede revelar aspectos de la conciencia prá
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Este documento discute la perspectiva antropológica y cómo se basa en la experiencia del extrañamiento. El extrañamiento ocurre porque los antropólogos no participan como nativos en las sociedades que estudian y experimentan la tensión entre aproximación y distanciamiento. Esto les permite percibir aspectos de la "conciencia práctica" de los actores sociales que de otra forma pasarían desapercibidos. El extrañamiento del antropólogo también lo convierte en un elemento disruptivo que puede revelar aspectos de la conciencia prá
Este documento discute la perspectiva antropológica y cómo se basa en la experiencia del extrañamiento. El extrañamiento ocurre porque los antropólogos no participan como nativos en las sociedades que estudian y experimentan la tensión entre aproximación y distanciamiento. Esto les permite percibir aspectos de la "conciencia práctica" de los actores sociales que de otra forma pasarían desapercibidos. El extrañamiento del antropólogo también lo convierte en un elemento disruptivo que puede revelar aspectos de la conciencia prá
Este documento discute la perspectiva antropológica y cómo se basa en la experiencia del extrañamiento. El extrañamiento ocurre porque los antropólogos no participan como nativos en las sociedades que estudian y experimentan la tensión entre aproximación y distanciamiento. Esto les permite percibir aspectos de la "conciencia práctica" de los actores sociales que de otra forma pasarían desapercibidos. El extrañamiento del antropólogo también lo convierte en un elemento disruptivo que puede revelar aspectos de la conciencia prá
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Descotidianizar.
Extrañamiento y conciencia práctica,
un ensayo sobre la perspectiva antropológica Gustavo Lins Ribeiro
Extrañamiento y conciencia práctica
El extrañamiento de la realidad es uno de los puntos que fundamenta la
perspectiva del antropólogo desde que a partir de Malinowski la investigación de campo se impuso como una marca de nuestra identidad académica. Trátase de un elemento cualitativo que diferenciaría la “mirada” del antropólogo. Al no participar como nativo en las prácticas sociales de las poblaciones que estudia, en las imposiciones cognitivas de una determinada realidad social, el antropólogo experimenta, existencialmente, el extrañamiento como una unidad contradictoria: al ser, al mismo tiempo, aproximación y distanciamiento. Es como estar delante de un sistema de signos (vivirlo relacionándose primeramente con sus significantes pero sin comprender del todo sus significados). Esta sería una característica depositada en las normas de reproducción del saber antropológico por los estudios de sociedades no occidentales, fundamento tradicional de la disciplina. Así, la perspectiva antropológica se basaría en una tensión existente entre el antropólogo como miembro (aunque especial) de un sistema social y cognitivo intentando transformar lo exótico en familiar.
Esta tensión ha sido resumida en la tensión nosotros/otros, donde “nosotros”
significa el antropólogo y todo lo que es familiar como miembro de una sociedad: y “otros”, los actores sociales que estudia, lo exótico. Al estudiar “su” propia sociedad el antropólogo busca realizar la operación inversa, convertir lo familiar en exótico, usando (por principio y por racionalización metodológica) una posición de extrañamiento.
Es importante, a efectos de nuestra discusión, destacar que cuando el
antropólogo se dirige a una investigación de campo se desplaza físicamente de sus parámetros cotidianos, insertándose en parámetros que, aun cuando no le son totalmente exóticos, le son desconocidos por no ser un actor social significante ya que no posee una historia e identidad vivida y preestablecida en aquella red social en la que va a trabajar.
El extrañamiento es una experiencia socialmente vivida, básica en la
perspectiva antropológica, que puede ser relacionada con la noción de “conciencia práctica” de Giddens. La noción de conciencia práctica implica que los agentes sociales, en su contexto cotidiano, dejan de monitorear activamente distintas fuentes de información. Estas entran en el desarrollo de las acciones de los actores como supuestos, como “lo dado”. Esta fijación, de los elementos constitutivos de los contextos significantes para las interacciones, está dada por la rutinización de los encuentros sociales en el cotidiano de los agentes sociales. Las fuentes de información no monitoreadas discursivamente son parte significante de los elementos que son considerados y entran como parte constitutiva de las características de las interacciones pero no necesitan estar explicitadas como elementos discursivos conscientes. Están ahí, como datos del escenario concreto del desarrollo de las acciones. La “conciencia práctica” se diferencia del inconsciente en que no existe ninguna barrera entre ella y la conciencia. Ella es fuente básica de la reproducción de la vida social, ya que crea la confianza en que los parámetros de monitoreo mutuo de las acciones están presentes creando el contexto compartido y no problematizado. La rutina y la previsibilidad son fuentes de seguridad. Así, la noción de conciencia práctica también apuntaría a la alineación de los individuos de fuentes que históricamente crean parámetros objetivos de sus interacciones. Tales fuentes pueden ser tanto objetos, relaciones, organizaciones espaciales, informadores de significado y definidores de contexto físico de interacción como relaciones económicas, sociales y cognitivas/simbólicas que son heredadas y que marcan los límites de las lecturas posibles de los encuentros.
Desconocimiento, desfasajes y asimetrías: explicitando la conciencia práctica
De este modo, al no participar de la “conciencia práctica” de los actores
sociales que estudia, el extrañamiento se produce objetivamente para el investigador (ya que los “supuestos” del cotidiano no lo son para él) y, al mismo tiempo, subjetivamente, ya que puede ver como sujeto lo que los otros no pueden. Se da de nuevo el distanciamiento (la no participación en un código) y la aproximación (presencia física en los contextos y el interesarse de elementos centrales de la realidad social analizada). Así, la práctica de investigación antropológica, basada en el extrañamiento, es una dinámica objetiva y subjetiva fundamentándose fuertemente en la percepción/explicitación de la conciencia práctica de los agentes sociales estudiados. Gran parte de la producción antropológica es, entonces, investigación sobre la conciencia práctica. De aquí proviene, muchas veces, la sensación de que lo que el antropólogo hace es organizar y sistematizar lo que ya se “sabe”. De hecho, “lo hacen pero no lo saben”.
El extrañamiento se revela una vez más como una experiencia subjetiva y
objetiva del antropólogo. Por desconocer subjetivamente la conciencia práctica de los actores sociales sobre los cuales desarrolla la investigación, puede (con sus filtros subjetivos) percibirla objetivamente. Al mismo tiempo, se transforma objetivamente en el espacio social, ruptura del cotidiano, en contra del cual los actores trazan posibles descubrimientos sobre sus conciencias prácticas, posibilitados por la presencia del antropólogo como actor social que desconoce las reglas de la rutinización, de la reproducción de los parámetros cotidianos. La fuerza de la rutina como elemento central de la vida social genera, por otro lado, la necesidad de socializar al antropólogo, de domesticarlo, de darle un lugar en las redes sociales locales, ubicándolo en el aparente flujo de prácticas eternizadas y naturalizadas a través, frecuentemente, de rituales de nominación, atribuciones de roles de parentesco ficticio u ofrendas rituales. Hay que subrayar que este proceso cuenta con la participación activa del antropólogo quien establece complejas relaciones de seducción con sus informantes. En esta dialéctica de aproximación/distanciamiento está subsumida una paradoja central de la experiencia existencial de la práctica del antropólogo y definida –anecdóticamente– en la antropología norteamericana con la expresión: “you can nevergonative” (uno nunca se transforma en nativo).
Selección de fragmentos de “Constructores de otredad”