El documento discute cómo el principio físico de la inercia también se aplica a los procesos psicológicos y emocionales. Un estado afectivo tiende a resistir el cambio a uno opuesto, de manera similar a como un cuerpo en movimiento o reposo resiste cambiar su estado. En psicoterapia, aprender a disfrutar mejora el estado de ánimo y aumenta la resistencia a sentimientos negativos, lo que permite construir afectos más funcionales.
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El documento discute cómo el principio físico de la inercia también se aplica a los procesos psicológicos y emocionales. Un estado afectivo tiende a resistir el cambio a uno opuesto, de manera similar a como un cuerpo en movimiento o reposo resiste cambiar su estado. En psicoterapia, aprender a disfrutar mejora el estado de ánimo y aumenta la resistencia a sentimientos negativos, lo que permite construir afectos más funcionales.
El documento discute cómo el principio físico de la inercia también se aplica a los procesos psicológicos y emocionales. Un estado afectivo tiende a resistir el cambio a uno opuesto, de manera similar a como un cuerpo en movimiento o reposo resiste cambiar su estado. En psicoterapia, aprender a disfrutar mejora el estado de ánimo y aumenta la resistencia a sentimientos negativos, lo que permite construir afectos más funcionales.
El documento discute cómo el principio físico de la inercia también se aplica a los procesos psicológicos y emocionales. Un estado afectivo tiende a resistir el cambio a uno opuesto, de manera similar a como un cuerpo en movimiento o reposo resiste cambiar su estado. En psicoterapia, aprender a disfrutar mejora el estado de ánimo y aumenta la resistencia a sentimientos negativos, lo que permite construir afectos más funcionales.
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INERCIA AFECTIVA EN EL PROCESO
DE PSICOTERAPIA INTEGRATIVA
Según el principio de la inercia, un cuerpo tiende a mantener su estado de reposo o de
movimiento, a menos que sea obligado por una fuerza impuesta sobre él. A su vez el cambio en el reposo o en el movimiento, será proporcional a la fuerza impuesta sobre el cuerpo en cuestión. Y la resistencia al cambio será mayor a mayor masa ya mayor velocidad. La resistencia será muy fuerte si se pretende que el cuerpo se movilice en dirección opuesta. ¿Qué nos puede aportar el principio de la inercia al ámbito de la psicología y de la psicoterapia? Una primera diferencia entre la física y la psicología se refiere al mundo interno en el procesamiento de la causa externa; mientras el rol del mundo interno es crucial en la dinámica psicológica, en el ámbito de la física pasa a ser menos relevante. Para salir del “reposo” o para modificar su movimiento la dinámica psicológica no requiere necesariamente de fuerzas externas, Desde sí misma la dinámica psicológica puede generar, vía cogniciones y/o nuevos afectos, energías capaces de modificar su propio estado. La inicia afectiva implica que un estado afectivo tenderá a ofrecer resistencia a la génesis de un afecto de valencia opuesta. El éxito generara más fácilmente afectos positivos si la persona esta afectivamente más “neutra” que si está triste. Una persona irritable puede no poder enojarse cuando en una pelea está inundada por el temor; lo que los adolescentes llaman “arrugar” cuando la persona inundada por el temor se deja humillar sin poder enojarse. Se trata de casos de “afecto contra afecto”, en los que se muestra claramente l resistencia que opone un afecto al surgimiento de otro afecto, vía inercia afectiva. En el ámbito de la psicoterapia integrativa es posible aplicar los derivados psicológicos del principio de la inercia. Una forma se relaciona con el enriquecimiento del disfrutar. Podemos asumir que, si el paciente aprende a disfrutar más, fortalecerá su ánimo positivo, lo que a su vez aumentará su resistencia a generar sentimientos de ansiedad, tristeza, rabia o baja autoestima. El disfrutar “intrínseco exige más de la persona”, compromete más su mundo interno. Ayuda a construir un estado afectivo que no se apaga tan fácilmente cuando la situación se va. Es por esta vía por la que se construyen afectos más funcionales para la inercia afectiva. PREMISAS BÁSICAS El disfrutar mejora el estado de animo y aumenta la RESISTENCIA al surgimiento de afectos negativos. El disfrutar es un proceso ACTIVO Los procesos ATENCIONALES influyen en el disfrutar. EXIGENCIAS desmedidas rígidas empobrecen el disfrutar.
