¿Qué Es "Filosofía Contemporánea"? (La Unidad de La Filosofía Contemporánea Desde El Punto de Vista de La Historia de La Filosofía)
¿Qué Es "Filosofía Contemporánea"? (La Unidad de La Filosofía Contemporánea Desde El Punto de Vista de La Historia de La Filosofía)
¿Qué Es "Filosofía Contemporánea"? (La Unidad de La Filosofía Contemporánea Desde El Punto de Vista de La Historia de La Filosofía)
Introducción
2 El entender la filosofía como discurso “argumentativo” (algo usual en círculos analíticos) presupone
el entenderla como “solución de problemas”. Sobre éste punto véase más adelante.
3 Justamente porque considero la filosofía del modo mencionado, dada la facticidad de su sujeto,
también la considero como esencialmente histórica. No me parece haber aquí contradicción alguna.
Período metafísico
4 Esta “evolución” no debe ser entendida como “progreso” en el sentido de acúmulo de conocimientos
o aproximación a una cierta verdad, sino como clarificación creciente de aquello que pensamos.
Véase adelante.
5 Concedo, primero, que haya otras formas ordenadores posibles; mas ya el hecho de disponer de una,
no arbitraria, es importante. Segundo, el criterio propuesto no agota todas las cuestiones: siempre se
pueden marcar excepciones o casos dudosos. Finalmente, el puede ser mejorable respetando los
principios básicos enunciados.
6 Para evitar un grosero equívoco, conviene una precisión. En ningún momento pretendo decir que en
el período metafísico no se tematizen también cuestiones epistemológicas o semánticas. Un rápido
vistazo a las obras de Platón, Aristóteles o Sto. Tomás, proporcionaría claros ejemplos en tal
sentido. De la misma forma, en el período epistemológico también se abordan cuestiones
ontológicas y semánticas y, en el contemporáneo, ontológicas y epistémicas. No obstante, no se
trata de esto. De lo que se trata es del modo de concebir la filosofía, de la fijación de aquello que es
esencial para que un discurso sea llamado de “filosófico” y, con ello, de la perspectiva unitaria a
partir de la cual la diversidad de las cuestiones son abordadas. Así, por ejemplo, la riquísima
elaboración de la semántica entre los filósofos medievales no altera el hecho de que ellos no
entendieron la filosofía como semántica, sino básicamente como ontología, preocupada en primera
línea en pensar un ser extremamente especial: Dios. Sin apelar a la idea de un ser supremo no se
puede entender lo que para un medieval era “filosofía”.
Período trascendental
La filosofía contemporánea
9 Dado que las tendencias referidas experimentan una intensa evolución, he optado por situar en
primer plano lo que podríamos llamar “momento fundacional” de las mismas, haciendo breve
mención a algún desarrollo decisivo que no sea sin más comprensible a partir de él.
18 Está fuera de discusión la capacidad del lenguaje de producir nuevas significaciones, así como la del
sujeto lingüístico de decirlas y entenderlas.
La hermenéutica
19 Para ser precisos, tendríamos que distinguir la “virada lingüística” (linguistic turn) de la “virada
semántica” (semantic turn), situando el orígen de la primera en Mill, el de la segunda en Bolzano. La
diferencia entre ambas es que ésta última, no casualmente surgida del ámbito cultural germánico,
trabaja en base al concepto de “entidades intensionales”. Constatar lo anterior no implica
desconocer que de la preocupación con el significado no se sigue de modo necesario un compromiso
“realista”, debiéndose admitir la posibilidad de teorías puramente referenciales del mismo.
20 Claro está que ese “entender” no siempre es captación del significado de “proposiciones”.
21 La hermenéutica posterior a Dilthey experimentará una significativa evolución en torno de esta idea
fundamental.
La fenomenología
23 El uso del término “paradigma” no supone suscribir la tesis de Thomas Kuhn con respecto a la
evolución de la ciencia ni pretende extender la misma a la filosofía.
24 Siguiendo el desconforto husserliano, evito llamar a la misma de “semántica”.
25 En una otra variante, históricamente no ajena a la anterior, el mismo orden de cosas se encuentra en
la hermenéutica.
Sentido
26 Empleo la fórmula “teoría de la significación” sólo por no disponer de otra más adecuada que fuese
absolutamente neutra y no sugiriese una de las tradiciones específicas. Por otra parte, surge
claramente de lo ya expuesto, que la propia idea de “teoria” no es libre de toda insuficiencia y
merece precisiones.
27 El desenvolvimiento que constatamos en la filosofía, tiene una contraparte en la propia evolución
de la ciencia. La fisica, más concretamente, la mecánica newtoniana, es el producto paradigmático
de la ciencia del siglo XVIII. En el siglo XIX, claro está, las Naturwissenschaften continúan su
desarrollo e, incluso, se apartan del modelo newtoniano. Ahora, si atendemos al surgimiento de
nuevas ciencias en el siglo XIX, veremos que buena parte de ellas están vinculadas al concepto de
significación, como es el caso de la semiótica, la lingüística, el psicoanálisis, la propia lógica y, en
algunas concepciones, incluso la historia y la sociología. La cultura contemporánea como un todo, y
no sólo la filosofía, tiene en la idea de sentido un eje temático.
Subjetivo-objetivo
28 Sería interesante comparar las tesis semánticas y hermenéuticas con respecto al sentido lógico,
dejando metódicamente de lado la inserción sistémica de las mismas.
32 Lógicamente que esta perspectiva subjetiva presenta variaciones en las diferentes fases de la
fenomenología, tendiendo a ser reformulada a partir de la confluencia con la hermenéutica. La
temática del “mundo vital” (Lebenswelt) llevará a una posterior aproximación en este punto.
33 Ryle sigue atentamente el desenvolvimiento de la fenomenología a través de Merleau-Ponty.
34 Obviamente que esta colocación, la cual tiene sus buenas razones en cuanto referida a la
fenomenología, no es sin más válida para la hermenéutica, aún cuando pueda ser reformulada de
manera tal que la atinja.
35 Entendemos aquí por “pensamiento” lo pensado por contraposición al pensar, el contenido por
contraposición al acto, sea cual sea el status otorgado al mismo, con tal que él posea estructura
proposicional.
36 Mas allá de lo expuesto, levanto la hipótesis (que en modo alguno pretende ser elemento fundamen-
tal en el argumento desenvolvido) de que, así como en los últimos años há habido una aproximación
entre las tres líneas principales de la filosofia contemporánea, también há habido una cierta
confluencia metódica. Tres puntos merecen atención en tal sentido:
a) remplazo de lo privado por lo público;
b) substitución de la “teoría” por la actividad;
c) explicitación de sentido como condición de todo proceder.
37 Esta idea del significado no es aún teoría del significado.
Consideración final
38 También aquí la situación ha experimentado grandes cambios en los últimos veinte años.
Referencias bibliográficas