Historia Del Baloncesto
Historia Del Baloncesto
Historia Del Baloncesto
Los orígenes del baloncesto se remontan muchos años atrás. En la época de los
mayas se practicaba el pok-a-pok, un juego en el que se utilizaba una pelota
maciza de caucho que debía golpearse con los muslos y las caderas, y los
perdedores eran sacrificados para ofrecerlos a los dioses.
Naismith diseñó trece reglas alrededor de este nuevo deporte. Como tenía 18
alumnos, los equipos de baloncesto estaban compuestos por nueve jugadores
cada equipo. Después pasaron a ser siete miembros, para acabar siendo cinco.
Así es como poco a poco este deporte fue haciéndose un hueco a nivel mundial y,
actualmente, el baloncesto cuenta con gran difusión en diferentes países, siendo
uno de los deportes con más participantes y competiciones regulares en distintas
zonas del mundo.
El contacto con la pelota se realiza con las manos. Los jugadores, también
llamados baloncestistas, no pueden trasladarse sujetando la pelota, sino
botándola contra el suelo. El equipo en posesión del balón o atacante, intenta
anotar puntos mediante tiros, entradas a canasta o mates, mientras que el equipo
defensor busca impedirlo robando la pelota o efectuando tapones. Cuando un tiro
hacia la canasta fracasa, los jugadores de ambos equipos intentan atrapar el
rebote.
El baloncesto es uno de los deportes más practicados del mundo, con más de 450
millones de jugadores en 2013. Se juegan numerosas ligas y campeonatos en el
mundo entero, sobre todo en Europa y más recientemente en Asia, donde el
deporte ha despuntado en el siglo XXI. Las mujeres representan una buena parte
de los practicantes, a pesar de una exposición menor en los medios del
baloncesto femenino. Se han desarrollado algunas variantes, como el baloncesto
en silla de ruedas para deportistas discapacitados, el streetball y el baloncesto
3x3. Existe una cultura específica surgida a partir del deporte que se expresa en la
música, la literatura, el cine y los videojuegos
En 1891, James Naismith intentaba idear un deporte que sus alumnos pudieran
practicar bajo techo, pues los duros inviernos en Nueva Inglaterra dificultaban la
realización de ejercicio al aire libre. Las actividades de educación física que se
practicaban en la época se basaban en los métodos alemanes, monótonos y poco
indicados para un grupo de jóvenes llenos de energía. Naismith se inclinaba por
un juego de pelota, para motivar mejor a sus alumnos, pero los deportes populares
por entonces se caracterizaban predominantemente por el uso de la fuerza o el
contacto físico y eran inadecuados para practicarlos en un gimnasio. Aunque a
veces se mencionan los antiguos juegos pok-ta-pok y tlachtli —de origen maya y
azteca respectivamente— como antecedentes del baloncesto moderno, según su
inventor la idea de utilizar los tiros a una canasta como objetivo del juego provino
de un antiguo juego de su infancia denominado duck on a rock —o 'pato sobre una
roca'— que consistía en alcanzar un objeto colocado sobre una roca lanzándole
una piedra. Naismith encargó cajas de unos 45 cm2 para utilizar como blanco,
pero el bedel del colegio solo pudo conseguirle unas cestas de melocotones, que
mandó colgar en las barandillas de la galería superior que rodeaba el gimnasio, a
una determinada altura.7
Como Naismith tenía 18 alumnos, decidió que los equipos estuviesen formados
por nueve jugadores cada uno. Pronto el número de jugadores se redujo a siete, y,
en 1896, al actual de cinco jugadores.89
El tablero surgió para evitar que los seguidores situados en la galería donde
colgaban las cestas, pudieran entorpecer la entrada del balón. La introducción del
tablero, a comienzos del siglo XX, dio lugar a la jugada llamada rebote, que ha
pasado a ser fundamental en el juego. Las cestas de melocotones dieron paso a
aros metálicos con una red sin agujeros hasta evolucionar a la malla actual.10
No se puede correr con el balón en las manos. El jugador debe lanzarlo desde el
lugar donde lo toma.
El balón solo puede sujetarse con las manos, ni con los brazos ni con el cuerpo.
Si un equipo hace tres faltas consecutivas sin que el oponente haya realizado
ninguna en ese intervalo, el equipo contrincante se anotará un punto.
El árbitro auxiliar vigila a los jugadores y anota las faltas, avisando además al
árbitro principal cuando un equipo cometa tres faltas consecutivas. Puede eliminar
a los jugadores conforme a la regla 5.
El árbitro principal vigila el balón y decide cuando está en juego, cuando ha salido
de la pista y a quién le pertenece. Decide cuándo se consigue un punto, lleva la
cuenta del marcador y controla el tiempo junto con otras tareas propias de un
árbitro.
El partido consiste en dos partes de quince minutos cada una, con un descanso de
cinco minutos entre ambas.