Literatura Prehispánica
Literatura Prehispánica
Literatura Prehispánica
CONCEPTO:
Es el conjunto de manifestaciones de las grandes culturas que existieron en nuestro continente antes de la llegada de los
españoles.
La literatura prehispánica es el conjunto de expresiones literarias propias de las culturas autóctonas de nuestro
continente. Han llegado hasta nosotros, gracias a la tradición oral y a las traducciones dé los cronistas.
Las mejores muestras de la literatura aborigen o prehispánica son de aquellas culturas más desarrolladas como la azteca,
maya e inca, Esto no
significa que las demás culturas autóctonas (chibcha, guaraní, amazónicas, etc.) no poseyeran expresiones literarias, sino
que su precariedad las hizo más endebles, llegando sólo el testimonio oral hasta nosotros.
CARACTERISTICAS:
• Anónima y colectiva- Sus creaciones literarias (poesías,
mitos, dramas), carecen de un autor, porque-no les interesa dejar constancia de sí mismos, sino de la comunidad
• Agraria.- Consideran a la tierra, y en general a la naturaleza, corno su “gran madre”, de la cual recogían los frutos
necesarios para vivir,
• Oral.- Fue creada en los diferentes idiomas de los pueblos conquistados: el quiche, el nathual, el quechua o ninasími.
Gracias a esto las tradiciones han sido trasmitidas de padres a hijos a través de generaciones, conservándose en la
memoria de los pueblos. Aunque, se debe mencionar que los mayas utilizaron cierto tipo de escritura ideo gráfica y
pictográfica, del cual sobreviven ciertos “códices.”
• Panteísta.- Tenía relación directa con los elementos de la naturaleza (sol, luna, rayo, jaguar, etc.) convirtiendo a todos
ellos en seres animados a los que se rendía culto y adoración,
• Impresionista y nostálgica – Debido a que las emociones y sentimientos más disímiles (alegría, dolor, animosidad, etc.),
son expresados de forma subjetiva y armoniosa.
PERIODO:
La literatura prehispánica comprende el periodo desde que se originaron las primeras culturas en nuestro continente
hasta la llegada de los españoles (siglo XVI d.C.). En esta se reconoce la superioridad de tres grandes civilizaciones: la
Inca, la maya y la azteca.
REPRESENTANTES Y OBRAS:
El poema de Quetzalcóatl, autor: anónimo náhuatl del ciclo Tenochca, poema épico-religioso.
El poema de Netzahualcóyotl, autor: Netzahualcóyotl, el rey poeta.
Los Libros de Chilam Balam que comprenden 18 libros. De estos se han estudiado el Chilam Balam de
Chumayel, el Chilam Balam de Tizimín y el Chilam Balam del Maní.
Fueron escritos por los chilamoob--sacerdotes mayas de alta jerarquía en la zona de Yucatán. Tratan de hechos
mitológicos, proféticos e históricos. Uno de los textos históricos es el de los azules que significa extranjeros con
referencia a los españoles.
Son de gran contenido simbólico. Es por ello que todavía no se conocen muy bien.
El Libro del Consejo del Popol Vuh es uno de los textos más conocidos de la región maya.
Se escribió después de la matanza en Guatemala ordenada por Pedro de Alvarado, conocido por su crueldad
con los indígenas.
-Al presenciar tanta destrucción, los indígenas decidieron transcribir sus relatos orales a la escritura alfabética para que
no se perdiera su contenido.
El Popol Vuh se divide en tres partes.
A) La creación del mundo y el intento de crear a los hombres
B) La guerra de los verdaderos dioses en contra de los falsos
C) Las peregrinaciones y genealogías del pueblo quiché.
3. La obra de teatro conocida como Rabinal Achí narra la lucha entre dos guerreros: Rabinal Achí y Quiché Achí en la que
el primero gana matando a Quiché. Es una obra que debe leerse completamente por el discurso entre los personajes.
Todavía hay mucho por hacer en la literatura maya. Su complejo sistema de escritura, que no ha sido descifrada
completamente, hace difícil su estudio. Demetrio Soldi y otros investigadores han indicado que es sólo en el área de las
matemáticas en que sí se ha hecho mucho progreso.
Aun siendo tan limitado el número de obras mayas conocidas, su influencia ha sido patente en la literatura del siglo XX,
como se puede apreciar en la narrativa del escritor guatemalteco Miguel Asturias, premio nobel de literatura en 1967.
A diferencia de lo que se suele creer la literatura maya no está solamente constituida por la de la época prehispánica o la
que se escribió poco después de la Conquista. En la actualidad existen varios escritores mayas que escriben en su propia
lengua, pese a no ser ampliamente reconocidos en grandes círculos.
Entre los escritores mayas contemporáneos podríamos citar a Ermilo Abreu Gómez, maya de origen, y escritor en
español que reflejó en sus escritos la cultura maya, por ejemplo en Canek.
Otro de los escritores mayas de la actualidad es el poeta Jorge Miguel Cocom Pech, cuya obra más difundida es Los
secretos del abuelo, la cual está escrita en maya yucateco y ha sido traducida al español en una edición bilingüe, el cual
también ha sido traducido al inglés, rumano, catalán, serbio, árabe y ruso.4
Aunque puede considerarse polémica también es posible considerar al Subcomandante Marcos como un escritor de
lengua indígena, debido principalmente a su libro Los relatos del Viejo Antonio escrito en maya.
La escritora Marisol Ceh Moo ya su obra X-Teya, u puksi’ik’al ko’olel (Teya, un corazón de mujer), una novela escrita en
maya ha sido una de las obras escritas en esta lengua más importantes en la actualidad.
Época colonial: siglos XVI-XVIII
Los primeros escritores naturales de Guatemala que emplearon el idioma español en sus creaciones datan del siglo XVII.
Entre ellos cabe mencionar a sor Juana de Maldonado (1598-1666), a quien se considera la primera poetisa y dramaturga
colonial de Centroamérica, o el historiador Francisco Antonio de Fuentes y Guzmán que escribió la Recordación Florida.
En el campo de la poesía es de suma importancia el cultivo de formas poéticas tradicionales escritas para ser cantadas.
Entre estas destaca especialmente el villancico destinado a los oficios de vísperas de las principales fiestas del año
litúrgico. Esta era la única ocasión litúrgica en la que era permitido cantar en idiomas vernáculos, mientras todas las
demás celebraciones eran exclusivamente en latín. En Guatemala como en todo el imperio español se compusieron
sainetes, jácaras, tonadas, cantatas y villancicos sobre letras en castellano. Entre los autores de estos poemas, que
fueron puestas en música por ellos mismos, sobresalen Manuel José de Quirós (ca. 1765-1790), Pedro Nolasco Estrada
Aristondo, Pedro Antonio Rojas y Rafael Antonio Castellanos (ca. 1725-1791). Este último es uno de los más importantes
en el mundo hispano y en la música de Guatemala.
Durante el siglo XVIII la literatura guatemalteca recibió la influencia del Neoclasicismo francés, como demuestran las
obras didácticas y filosóficas de autores como Rafael García Goyena130 o Fray Matías de Córdova.
Poetas
«Por mandato de los reyes de España, se prohibió,
las penas más severas, que los colonos de América
leyesen lo que se dio en llamar libros de ficción,
poesías, novelas, dramas, etc. No había medio entre
nosotros de deleitarse con la lectura de la obra
maestra del genio de Cervantes; no se podía leer ni
a Lope de Vega, ni a Quevedo, ni a Moreto, etc.»
Rafael Landívar (1731-1793): poeta y sacerdote jesuita guatemalteco que describió a la Guatemala colonial del
siglo XVIII en sus versos en latín de «Rusticatio Mexicana». El jesuita Landívar es considerado como el primer
gran poeta de Guatemala. Obligado a exiliarse por la orden de la expulsión dictada por Carlos III, viajó
a México primero, y a Italia después, donde falleció. Escribió originalmente en latín su Rusticatio mexicana, de gran
éxito, así como sus poesías de elogio al obispo Figueredo y Victoria.
Rafael García Goyena (1766-1823): escritor, poeta y jurista guatemalteco. Una de sus obras más conocidas
es Los animales congregados en Cortes.14 Su obra poética tiene carácter didáctico y satírico, y está contenida en el
volumen Fábulas y poesías varias.15 Su estilo es sencillo, a la vez que agudo, y la estructura de los poemas
ingeniosa.14
Siglo XIX
Guatemala logró la independencia de España en el año 1821, en su deseo por establecer relaciones políticas y
comerciales con otros países además de España. La literatura durante esta época está muy marcada por las luchas
políticas, por lo que predominan el ensayo y el discurso como géneros literarios. Además, esta época ve el nacimiento
del periodismo en Guatemala, con figuras como Antonio José de Irisarri.16
Durante el siglo XIX comienza a desarrollarse la literatura guatemalteca independiente de la española, aunque siguieron
recibiéndose importantes influencias europeas. Entre los escritores de esta época cabe mencionar a María Josefa García
Granados y José Batres Montúfar -conocido simplemente como «Pepe Batres»-, quienes escribieron conjuntamente
el Sermón para José María Castilla, una obra que resultó escandalosa para la época. El segundo es además autor del
poema Yo pienso en ti, uno de los más conocidos de la literatura guatemalteca.
En la segunda mitad del siglo XIX triunfa el género novelesco, merced en especial a José Milla y Vidaurre, considerado
como el "padre de la novela guatemalteca", que firmó algunas de sus obras con el seudónimo de "Salomé
Jil", anagrama de su nombre. Entre sus obras destacan La hija del Adelantado (1866), Los Nazarenos (1867), El
visitador (1867) y El libro sin nombre.
El modernismo hispanoamericano, heredero del simbolismo y del parnasianismo franceses e impulsado por
el nicaragüense Rubén Darío, también tuvo sus representantes en Guatemala a finales del siglo XIX. En el campo de
la poesía, cabe mencionar a Domingo Estrada, Máximo Soto Hall o María Cruz. Enrique Gómez Carrillo, escritor
polifacético y conocido en Europa como el príncipe de los cronistas, representa el modernismo en la prosa.
Cronistas
Enrique Gómez Carrillo (1873- 1927): escribió alrededor de 80 libros, de géneros variados, aunque destacan
principalmente sus crónicas internacionales, en las que ejercitó una prosa realmente modernista. Es famoso
también por su vida bohemia y viajera; fue conocido en su tiempo alrededor del mundo de habla francesa y
castellana como el «príncipe de los cronistas».917
Gómez Carrillo colaboró en numerosas publicaciones de España, Francia e Hispanoamérica, y fue director de «El
Nuevo Mercurio» (1907) y «Cosmópolis» (1919-1922). Residió principalmente en Madrid y en París. Viajero
infatigable, escribió numerosos libros de crónicas que recogen sus impresiones sobre los lugares que visitó: El alma
encantadora de París (1902), La Rusia actual (1906),18 La Grecia eterna(1908),19 El Japón heroico y
galante(1912),20 La sonrisa de la esfinge (1913), Jerusalén y la Tierra Santa (1914), Vistas de Europa (1919)21 y El
encanto de Buenos Aires22 Fue autor también de varios ensayos, entre lo autobiográfico y la crítica
literaria: Sensaciones de arte (1893), Literatura extranjera (1895), El modernismo (1905), Literaturas
exóticas (1920), Safo, Friné y otras seductoras (1921), El misterio de la vida y de la muerte de Mata-Hari (1923), Las
cien obras maestras de la literatura universal (1924) y La nueva literatura francesa (1927). En cuanto a su obra
narrativa, destacan Tres novelas inmorales: Del amor, del dolor y del vicio (1898), Bohemia
sentimental (1899), Maravillas (1906)23 y El evangelio del amor (1922);24 en todas ellas predomina el tema erótico,
dentro de una estética próxima al decadentismo.
Historiadores
Agustín Gómez Carrillo (1838-1908): jurisconsulto e historiador, hijo del diplomático, jurista, escritor y
periodista Ignacio Gómez y padre del escritor Enrique Gómez Carrillo. Fue rector de la Universidad
Nacional,c Alcalde de la Ciudad de Guatemala en 1899 y miembro de la Real Academia Española.25
Novelistas
José Milla y Vidaurre (1822-1882): fue un escritor, periodista e historiador del siglo XIX, considerado uno de los
fundadores de la novela en la literatura guatemalteca; en especial, él destacó en la narrativa histórica. También fue
Ministro de Relaciones Exteriores y embajador de Guatemala ante los Estados Unidos durante el gobierno del
general Rafael Carrera (1851-1865), siendo uno de los firmantes en 1859 del decreto en donde se cede Belice a
la Gran Bretaña para explotar madera, a cambio de la construcción de una vía de comunicación entre la capital de
Belice y la de Guatemala (carretera que Inglaterra jamás construyó). Estuvo entre el grupo de periodistas que
fundaron el Diario de Centro América en 1890.2627
Periodistas
Antonio José de Irisarri (1786-1868): fue un militar, diplomático y periodista del siglo XIX, considerado uno de los
creadores del género periodístico en Guatemala y en Chile. Radicó en muchos países de América y estuvo un tiempo en
Europa, razón por la que publicó El cristiano errante mientras se encontraba en Colombia; participó activamente en
la Independencia de Chile y en la guerra entre este país y la Confederación Perú-Boliviana; también fue Ministro de la
Guerra del Estado de Guatemala durante el gobierno de Mariano de Aycinena y Piñol y en medio de la Guerra Civil
Centroamericana entre 1828 y 1829, pero fue hecho prisionero por las fuerzas del general liberal hondureño Francisco
Morazán y enviado a prisión en San Salvador, de donde huyó en 1830.28 Murió siendo el embajador de Guatemala y de El
Salvador ante el gobierno de los Estados Unidos en 1868.29
Sus periódicos más conocidos fueron:
El Semanario Republicado ( Chile, 1814)
El Monitor Americano ( Chile, 1814)30
El Guatemalteco ( Guatemala, 1828)31
La balanza ( Ecuador, 1840)32
El Cristiano Errante ( Colombia, 1846): obra en que publicó una versión novelada de su vida, con el
sobrenombre de Romualdo Villapedrosa; el apellido del protagonista era una versión alterna del apellido
Irisarri, pues en lengua vasca, Iris significa «ciudad» y Sarri significa «piedra». 32 Originalmente iba a estar
constituida por siete volúmenes, pero por el derrocamiento del presidente Mosquera en Colombia
solamente se publicó parte del primero32
El Revisor ( Estados Unidos, 1849)33
Poetas
José Batres Montúfar (1809-1844): escritor, político, ingeniero y militar que nació en la ciudad de San Salvador; hijo de
José Mariano Batres y Asturias y de Mercedes Montúfar y Coronado. Provenía de la vieja alcurnia de familias coloniales.
Se le ha llamado el mejor poeta guatemalteco del siglo XIX, por su obra intelectual sin parangón en las letras de ese
tiempo en Guatemala, sólo comparable a lo que consiguió en la prosa el novelista José Milla y Vidaurre, promotor de la
difusión de las composiciones de Batres Montúfar, prontamente olvidadas incluso en las décadas siguientes a su deceso.
Entre muchos de los escritores que lo mencionaron, como Menéndez y Pelayo y José Martí, el célebre erudito de la
literatura hispanoamericana Pedro Henríquez Ureña dijo de él: «El mejor de los poetas dotados del don del humor».
Siglo XX
En el siglo XX, la literatura de Guatemala alcanza un nivel comparable al de las demás literaturas de Hispanoamérica,
gracias a la aparición de varias generaciones de escritores, y en especial a cuatro escritores fundamentales: el
novelista Miguel Ángel Asturias (Premio Nobel de Literatura en 1967), autor de novelas como El Señor
Presidente u Hombres de Maíz; el poeta Luis Cardoza y Aragón; el cuentista y novelistaAugusto Monterroso (Premio
Príncipe de Asturias de las Letras en 2000) y el dramaturgo Carlos Solórzano. En general, la literatura guatemalteca del
siglo XX tiene una fuerte influencia de la vida política, como prueba el hecho de que sus principales autores debieran
exiliarse durante las sucesivas dictaduras y guerras civiles que sufrió Guatemala.
Suele dividirse la literatura guatemalteca del siglo XX por generaciones o décadas. Las más importantes
son:
La generación de 1910 o "del Cometa"
La generación de 1920353637
La generación de 1930 o "Grupo Tepeus"
La generación de 1940 o "Grupo Acento"
El Grupo Saker-ti (1944-1954)
La "Generación comprometida" (después de 1954)
Dramaturgos
Manuel Francisco Galich López (1913-1984): escritor, dramaturgo y político. Participó en la Revolución de
Octubre de 1944 que terminó con el gobierno del general Federico Ponce Vaides y luego ocupó varios puestos
en los gobiernos de Juan José Arévalo y de Jacobo Arbenz Guzmán entre 1944 y 1954, entre ellos Ministro de
Educación y embajador de Guatemala en varios países de América del Sur. En 1977 recibió el
premio Ollantay de Bogotá, por parte de la Federación de Festivales de Teatro de América. 38
Hugo Carrillo (artista) (Cobán - Guatemala, 1929) - Ciudad de Guatemala - Guatemala, 19 de octubre 1994)
artista guatemalteco, Dramaturgo y Director Teatral, autor homenajeado con en el XVI Festival de Teatro
Guatemalteco.1 2 Realizó estudios en la Facultad de Humanidades e Historia en la Universidad de San Carlos de
Guatemala de 1952 a 1953; Filosofía y letras en la Universidad de México; un año de estudios en el
Departamento de Teatro en 1954, en la Universidad de Bridgeport, Conn. U.S.A. The Shakespeare Instituto
1969, UNAM, México, Departamento de Letras Inglesas. Realizó estudios teatrales en la Escuela Dramática de
Charles Dullín T.N.P. París Francia.
Victor Hugo Cruz (Ciudad de Guatemala, 1938) El dramaturgo Víctor Hugo Cruz comenzó su carrera como actor
en 1958, en el Teatro de Arte Universitario (TAU). Es declamador, director teatral y técnico. Ha escrito obras de
teatro con las cuales ha ganado tres premios en los Juegos Florales Centroamericanos de Quezaltenango:1 Dos
y dos son cinco (1971);2 De frente, March (1973), y Smog (1974). También escribió El benemérito pueblo de
Villabuena (1973), con la que ganó el VI Festival de Cultura en Antigua Guatemala, en 1974.
Claudio Valerio Gaetani (Ciudad de Guatemala, 25 de octubre de 1967) Inicia alrededor de 1982 su carrera
como escritor con un pequeño volumen literario "Brandix". Dramaturgo Guatemalteco con más de 1500 obras
escritas en varios géneros.
Novelistas
Luis Cardoza y Aragón
Elisa Hall de Asturias (1900-1982): escritora e intelectual autodidacta. Proveniente de una familia de
intelectuales, tras su matrimonio con José Luis Asturias, Elisa Hall se familiarizó con el trabajo monumental que
su suegro, Antonio Asturias, realizaba con el afán de mantener al día la genealogía de la familia Asturias, desde
el arribo del primer antepasado, Sancho Álvarez de Asturias, a Guatemala en la segunda mitad del siglo XVII.
Fue así cómo Hall concibió la idea de escribir «Semilla de Mostaza», obra monumental para la que se
documentó profundamente sobre la época de Sancho Álvarez de Asturias para escribir unas memorias que,
narradas en primera persona y con un lenguaje arcaico, cuentan la vida en España de don Sancho de Asturias, y
el porqué de su emigración al Nuevo Mundo en 1666. La obra, publicada en 1938, publicó una de las mayores
polémicas literarias en Guatemala, pues hubo algunos eruditos que argumentaron que Hall de Asturias no
podría haber escrito un documento tan magnífico. 50 En 2011, la filóloga española Gabriela Quirante Amores,
tras un análisis detallado de la obra, concluyó que Hall de Asturias era la auténtica autora. 51
Flavio Herrera (1895-1968): escritor, poeta y periodistas. Estudió en el Colegio de Infantes y en el Instituto
Nacional Central para Varones. Con 13 años escribía artículos para la revista Juan Chapín. En 1918 se graduó
de Abogado y Notario en la Universidad Manuel Estrada Cabrera.d Durante el gobierno de Juan José Arévalo,
fue embajador de Guatemala en Brasil y Argentina, y dirigió la Escuela Centroamericana de Periodismo.
Cuando murió, el 31 de enero de 1968, donó su finca en San Antonio Suchitepéquez a la Universidad de San
Carlos de Guatemalae al igual que los derechos de autor de toda su obra. Sus novelas «El Tigre», «Caos» y «La
Tempestad», conocidas en conjunto como «La Trilogía del Trópico», son lectura oficial en las escuelas públicas y
colegios privados de Guatemala. Como poeta cultivó principalmente el género del Haikai (Hai-Kai).53
Virgilio Rodríguez Macal (1916-1964): periodista, novelista y diplomático que logró varios premios tanto
internacionales como nacionales, como el Primer Premio en Prosa, en la rama de novela, o los Juegos Florales
de Quetzaltenango de 1950 gracias a sus novelas. Es uno de los novelistas más populares en la
cultura centroamericana por sus publicaciones de estilo criollista. La mayoría de sus obras se ambientan en las
selvas del Departamento de El Petén.54
Periodistas
Rigoberto Bran Azmitia: fundador de la Hemeroteca Nacional
César Brañas (1899-1976): periodista, ensayista, crítico literario y poeta. Como periodista, colaboró
durante años en el periódico El Imparcialdel que fue fundador, estaba a cargo de la sección cultura y
escribía una columna para compartir sus pareceres sobre cuestiones literarias y artísticas. 55
Miembro de la generación del 20, murió tras sufrir serias heridas durante el terremoto de 1976, que
destruyó parcialmente a Guatemala y heredó su biblioteca y residencia a la Universidad de San
Carlos de Guatemala.
Héctor Gaitán
Enrique Gómez Carrillo: Como cronista periodístico en Europa había pocos que le igualaran y
ninguno que le superara, haciéndose acreedor al sobrenombre «El Príncipe de los Cronistas». Su
vasta producción no es conocida en su totalidad, pues colaboró con muchas publicaciones, en las
que sobresalen El Liberal de Madrid con dos mil seiscientas sesenta y siete crónicas de 1899 a 1920
y el ABC con quinientas setenta crónicas de 1921 a 1927. Entre sus principales contribuciones se
encuentran:
1. Reportaje sobre la situación de la Rusia Zarista en 1905. Durante su viaje a San
Petersburgo junto al director de El Liberal Alfredo Vincenti, conoció la tremenda realidad
del gobierno del zar Nicolás II, el clero ortodoxo, los movimientos de los obreros y
estudiantes y la represión de los oficiales y nobles. Luego de aparecer en El Liberal, sus
reportajes aparecieron en su libro La Rusia Actual, con prólogo del propio Antonio
Vincenti.18 Esta obra fue la denuncia más vehemente de la injusticia en Rusia hecha en
español. Como no era obra de un político o de un gobierno en específico, quedó como un
documento irrefutable por su objetividad e imparcialidad. 56
2. Egipto, Japón y China: también en 1905. Con motivo de la victoria del Imperio Japonés
sobre los rusos, Gómez Carrillo convenció a los directores de los periódicos para los que
trabajaba para visitar el Lejano Oriente. El objetivo periodístico del viaje era informar a
los lectores de El Liberal y La Nación sobre la situación de Japón como país vencedor, las
consecuencias que produjo la guerra y el rumbo que tomaba el poderoso imperio, pero
sus reportajes no sólo dan cuenta de las costumbres políticas, sociales de los países que
visitó sino que, como corresponde a un experimentado seductor, también da cuenta de
las costumbres y tradiciones eróticas de dichos países. De sus apuntes publicó dos libros:
3. Tierra Santa: Tras un viaje por Tierra Santa en 1913, escribió su libro Jerusalén y la Tierra
Santa, el cual fue bien recibido por la crítica literaria, pero atacado por los religiosos. A
pesar de la crítica religiosa, el libro tuvo gran circulación en España y América. Fue
excomulgado por varios obispos en ambos continentes, pero Rubén Darío resume mejor
quien resultó airoso al final: «es lo más firme, lo más sentido, lo más meditado de toda su
obra... Si este diablo de hombre quisiera, aún después de la excomunión, lo prologaría
ahora un cardenal.
4. La Primera Guerra Mundial: durante los primeros tres años de la Gran Guerra, ejerció
como corresponsal de «El Liberal», y gracias a sus detalladas crónicas, producto de su
valor al acercarse a pocos metros de las líneas alemanas, el público español conoció los
horrores del frente. Un compendio de sus artículos se encuentra en sus obras: Crónica de
la Guerra (1915), Reflejos de la Tragedia (1915), En las Trincheras (1916), En el Corazón de
la Tragedia (1916)58 y La Gesta de la Legión (1918).
Por sus contribuciones como cronista de guerra, el gobierno francés le otorgó la alta dignidad de Comendador
de la Legión de Honor. También fue un hábil entrevistador, siendo una de sus más famosas entrevistas la que le
hizo al papa Benedicto XV durante la guerra; el Papa lo recibió a pesar de ser Gómez Carrillo un reconocido
casanova y escritor herético.59 En 1916 empezó a dirigir el periódico El Liberal de Madrid, pero sólo pudo
dirigirlo durante un año, debido a sus múltiples viajes como corresponsal.
Clemente Marroquín Rojas
Francisco Méndez Escobar (1934-1962): Como periodista aficionado se inició en su pueblo
-Joyabaj, Quiché y en la ciudad de Quetzaltenango, a donde llegó cuando tenía 20 años de
edad; pero su profesión como tal se desarrolló a partir de 1934, cuando el director de El
Imparcial, Alejandro Córdova, lo contrató como redactor para ese diario. Pronto ascendió a
jefe de redacción y ocupó ese puesto hasta su muerte. Fue contemporáneo de Mario
Monteforte Toledo, Manuel Galich y Carlos Samayoa Chinchilla, con quienes formó parte de la
generación del 30 o grupo Tepeus y escribió una poesía que trasciende por su universalidad y
—en el caso de sus relatos— por su aporte al criollismo. Sus poemas fueron bien acogidos,
elogiados e incluso apadrinados por César Brañas.60
David Vela Salvatierra (1901-1992): Perteneció a la «Generación de 1920»f3736 y fue coautor del
himno universitario La Chalana; fungió como primer presidente de la Asociación de
Estudiantes «El Derecho» (1920) y fue uno de los iniciadores del deporte universitario en
1922. También estuvo entre los fundadores de la Universidad Popular en 1922. Sus actividades
periodísticas quedaron plasmadas en órganos divulgativos como redactor de El Estudiante,
editor y redactor de las revistas Electra (1922) y Studium (1920). En junio de 1944 fue parte de
los 311 ciudadanos que firmaron un memorial solicitando al presidente Jorge Ubico
Castañeda la reinstauración de las garantías constitucionales en Guatemala. Perteneció a
la Academia Guatemalteca de la Lengua y a la Sociedad de Geográfica e Historia de
Guatemala. Sus estudios sobre literatura e historia son fundamentales para analizar la cultura
de Guatemala.62 Fue director de El Imparcial hasta la desaparición de éste.
Poetas
Ramón Aceña Durán (1895-1945): farmacéutico, poeta, dramaturgo y periodista. Perteneció a la «Generación
de 1920»37 y escribía bajo el seudónimo El Príncipe Feliz. Fue director en jefe del periódico Excélsior en México,
y Secretario de la Universidad Nacional de Guatemala. Publicó diversos libros y obras.
Humberto Akabal (1952- ): poeta de la etnia maya k'iche'. Piensa y escribe sus poemas en idioma k'iche' y se
autotraduce al español. En la actualidad es uno de los poetas guatemaltecos más conocidos
en Europa y Sudamérica. Sus obras han sido traducidas al francés, inglés, alemán, italiano, portugués, hebreo,
árabe, escocés, húngaro y estonio.
Otto René Castillo (1936–1967): poeta, activista y combatiente guerrillero guatemalteco. Es conocido por su
poema Vamos patria, a caminar.
Alaíde Foppa (1914-1980): poetisa, escritora, feminista, crítica de arte, profesora y traductora.67 de
ascendencia guatemalteca por parte de madre y argentina por la vía paterna. Vivió como exiliada en México,
país donde se casó con Alfonso Solorzano, también guatemalteco, en donde nacieron tres de sus cinco hijos, y
en donde escribió gran parte de su obra poética. Tuvo un hijo con el presidente Juan José Arévalo en la década
de 1940. Durante la década de 1970 algunos de sus hijos se involucraron con la guerrilla guatemalteca,
específicamente con el Ejército Guerrillero de los Pobres (EGP). El año 1980 sería trágico para la familia de
Alaíde Foppa: su hijo Juan Pablo, quien militaba en el Ejército Guerrillero de los Pobres (EGP) de la guerrilla
guatemalteca murió en Nebaj, El Quiché, su esposo Alfonso Solórzano murió atropellado en la ciudad de
México y ella misma fue secuestrada y desaparecida en Guatemala.
Otros escritores guatemaltecos del siglo XX
Adolfo Méndez Vides
Ana María Rodas
Arqueles Vela
Augusto Monterroso
Carlos Navarrete Cáceres(1931-)
Carlos Solórzano
Claudio Valerio Gaetani
Dante Liano
Franz Galich
Isabel de los Ángeles Ruano
Lucrecia Méndez de Penedo
Luis de Lion
Luz Méndez de la Vega (1919-2012)
Manuel José Arce Leal.
Margarita Carrera
Mario Monteforte Toledo
Rodrigo Rey Rosa
Siglo XXI
Es en cierta medida una continuación de la literatura del siglo XX. Los escritores de este siglo siguen abordando temas de
todo tipo. Destacan poetas como Julio Serrano Echeverría y Allan Mills y escritores de narrativa, como Maurice
Echeverría, Juan Pablo Dardón, Javier Payeras, Mardo Escobar y Ronald Flores y escritores poliédricos como Claudio
Valerio Gaetani el cual abarca desde la poesía, la narrativa y el teatro y Georgina Palacios poetisa y narradora.
Narradores
Francisco Alejandro Méndez (1964 - ): Se graduó de periodista por la Universidad de San Carlos de Guatemala y
egresó del doctorado en Letras por la Universidad Nacional de Costa Rica.68 Trabajó de periodista de medios escritos
y televisivos guatemaltecos.69 Ha entrevistado a ilustres escritores guatemaltecos e internacionales, como Augusto
Monterroso y Luis Cardoza y Aragón entre otros. En 2010 publicó «Diccionario de Autores y Críticos de Guatemala»,
una obra que recopila los datos de todos los escritores y críticos del país. 70 Sus propias obras han sido publicadas
en antologías en español, inglés, francés, polaco.
Modernistas Guatemaltecos
A finales del siglo XIX América Hispana se adelanta en su literatura. En el Nuevo Mundo surge el Modernismo,
movimiento al que se une gran parte de la juventud escritora americana. Guatemala tiene la fortuna de
albergar a tres de los más destacados autores de la nueva forma.
Martí, José
Darío, Rubén
Santos Chocano, José
El joven guatemalteco Enrique Gómez Carrillo absorbió todo aquel influjo de tal forma que se convirtió en una
de las plumas más activas de la nueva era. Desde París, a donde su intranquilidad lo envió, redactó muchas de
las mejores obras que tenemos de aquel entusiasmo americano. El resto de la juventud también fue afectada y
aunque el carácter conservador guatemalteco limitó y retrasó la exposición, se reconocen varios autores
alineados al Modernismo.
Arévalo Martínez, Rafael
Calderón Ávila, Félix
Calderón Pardo, Rodolfo
Cruz, María
Estrada, Domingo
Gómez Carrillo, Enrique
Lainfiesta, Francisco
Rodríguez Cerna, José
Soto Hall, Máximo