Maria Lugones
Maria Lugones
Maria Lugones
MARÍA LUGONES
Universidad de Nueva York, Binghamton
I will begin in English and from the kitchen. Two uses of the verb separate. Dos
usos del verbo separar. The first one. I will separate the yolk from the white,
separate an egg. Parto la cáscara y después deslizo la clara dentro de una de
sus mitades y la coloco en un cuenco. Repito la operación hasta conseguir
separar toda la clara de la yema. Si la operación no se ha llevado a cabo con
éxito, la clara queda un poco manchada de yema. If the operation has not been
successful, a bit of the yolk stains the white. Me gustaría repetir la operación
con otro huevo pero me han dicho que será inútil. Tengo que intentar
desprender toda la yema de la clara con la ayuda de una cuchara, un proceso
arduo y que no asegura el éxito. La intención es separar, primero netamente y
después, si no ha habido suerte, de manera menos limpia, la clara de la yema,
dividir el huevo en dos partes tan limpiamente como pueda. Se trata de un
ejercicio de pureza.
∗
Título original: “Purity, Impurity and Separation”, publicado en Signs,19 (1994): 458-474.
Traducción de Marta Marín Domine. Texto traducido y reproducido con autorización de la
autora y del editor.
1
Agradezco a Marilyn Frye su crítica en la elección de interlocking oppresions. Estoy de
acuerdo con su observación respecto al hecho de que la imagen del engranaje (interlocking) se
refiere a dos cosas separadas, como si fueran dos piezas de un rompecabezas que están
si algo o alguien no es ni esto/ni lo otro, sino un poco de los dos,
pero no del todo,
si algo está en medio de esto/o lo otro,
si es ambiguo con relación a la clasificación convencional de las
cosas,
si es mestiza,
si amenaza con su misma ambigüedad la ordenación del sistema, de
la realidad esquemática,
si dada su ambigüedad dentro del orden unívoco, es anómalo,
desviado,
¿Puede esto domesticarse mediante la separación?
¿Tendría que separarse para evitar la domesticación?
¿Tendría que resistirse a la separación?
¿Tendría que resistir mediante la separación?
¿Separarse como en la separación de la clara de la yema?
articuladas entre ellas. No estoy dispuesta a abandonar este término porque lo utilizan también
otras teóricas de color que escriben en términos liberadores sobre las opresiones mezcladas.
Creo que interwowen (entrelazadas) o intermeshed o enmeshed (intermezcladas, mezcladas)
producen imágenes más acertadas.
2
Se trata de la misma forma que se encuentra en el uso que yo hago de los términos operation
(operación), apparatus (aparato) e individual (individuo). Ofrecer rompecabezas lingüísticos
forma parte del arte de cortar.
3
Para el uso de emulsion (emulsión) véase Pharmaceutica Acta Helvetica, 1991.
¿no es separarla parte central del mestizaje, de la ambigüedad, de la
resistencia? ¿No es la parte central tanto de su necesidad como de
su posibilidad? ¿Separar como en la separación de la clara de la
yema o la separación que se produce cuando algo se corta?
En cada uno de estos ejemplos hay algo que se ha cortado, mestizaje, carencia
de homogeneidad. Hay tensión. Las intenciones están cortadas, el lenguaje, la
conducta, las personas son mestizas.
5
Para esta descripción me he basado en la conexión entre la necesidad imperiosa por
controlar y la teoría política y ética modernas que aparece en el trabajo de Iris Marion Young
.Impartiality and the Civic Public' (en Young 1990b). Gran parte de lo que digo en la sec. I es
una reelaboración de las seccs. 1 y 2 del artículo de Young. También he tomado los conceptos
de Mangabeira Unger 1975 y Pateman 1988 para llegar hasta esta elaboración.
múltiple en lo unitario, así como la supervivencia de lo múltiple. La formación de
lo múltiple en unidades fragmentadas sólo puede ser vista desde una inmersión
histórica en lo concreto, es decir, puede ser vista desde una lógica distinta que
rechaza la creencia de la unidad. La ahistoricidad de la lógica de la pureza
esconde la construcción de la unidad.
6
El observador ideal y sujeto unificado es hombre. Este sujeto ficticio no está marcado
genéricamente por las razones que se explican más adelante.
Si el sujeto moderno tiene que ir más allá de la conceptualización de la
reducción para ejercer el control sobre las personas y las cosas, entonces
estas ficciones tienen que tener algún grado de realidad. El sujeto moderno
tiene que vestirse, disfrazarse, ocultarse para poder aparecer como alguien
capaz de ejercer esta reducción de la heterogeneidad a la homogeneidad, de la
multiplicidad a la unidad. El sujeto moderno tiene que ocultarse para aparecer
separado de su propia multiplicidad y de lo que le compromete a la
multiplicidad. De manera que su propia purificación en alguien que puede
situarse directamente en la posición privilegiada de la unidad requiere que su
resto no tenga ninguna consecuencia para el sentido de sí mismo como alguien
que de manera justificada ejerce el control sobre la multiplicidad. Así, sus
necesidades tienen que ser asistidas por otros que se esconden en espacios
relegados fuera de la vista del público, donde él se muestra como puro. Y es
importante para su propio sentido de las cosas y de sí mismo que preste poca
atención a la satisfacción de sus necesidades sensuales, afectivas y carnales.
7
Para obtener argumentos que apoyan esta teoría véase: Dorothy Smith, “Women's
Perspective as a Radical Critique of Sociology”, Sociological Enquiry 44 (1): 7-14, 1974; y
Nancy Hartsock, “The Feminist Standpoint: Developing the Ground for a Specifically Feminist
Historical Materialism”, en Dicovering Reality: Feminist perspectives on Epistemology,
Metaphysics, Methodology, and Philosophy of Science, ed. Sandra Harding & Merrill Hintikka.
Boston: Reidel, 1988.
8
Véase Rosaldo 1989, 200 y 203, para el uso que hace de postcultural (postcultural), y
culturally transparent (culturalmente transparente). Uso el término postculturalde la misma
manera que él. Su uso de culturally transparent me fue muy sugerente a la hora de elaborar mi
teoría.
puede pensarse como «inscripciones» sino como marcas no coincidentes,
asimbólicas. Ya que su raza y género no le identifican a sus propios ojos es,
además, transparente en cuanto a la raza y al género.
Si las mujeres, los pobres, los no-blancos, los queer, las personas con culturas
(cuyas culturas son negadas e invisibilizadas en tanto que contempladas como
marcas nuestras) son considerados impropios de lo público, es porque estamos
manchados por la necesidad, la emoción, el cuerpo. Esta mancha está
relacionada con la necesidad del sujeto moderno por controlar a través de la
unidad, la producción y el mantenimiento de sí mismo como unificado. Dado
que él es ficticio, la mancha es ficticia: que se nos vea como manchados
depende de la necesidad de pureza que pide que seamos «partes»,
«apéndices» de los cuerpos de los sujetos modernos (hombres blancos
burgueses y cristianos) que hagamos posible su pureza. Nos volvemos partes
de dicotomías ficticias. Dado que somos ambiguos (no dicotómicos),
amenazamos la ficción y nos convertimos en impropios sólo por censurar la
ambigüedad como no existente, esto es, partiéndonos, dividiéndonos. Por
tanto, existimos sólo como seres incompletos, impropios, y ellos existen como
completos sólo silo que nosotros somos, y lo que es absolutamente necesario
para ellos, se declara sin valor.
INTERRUPCIÓN
La personalidad dual
11
Sonia Saldivar-Hull utilizó la expresión “living on the hyphen” (vivir en el guión) en el debate
organizado a partir de la conferencia “Cultural Identity and the Academy”, en el Décimo Foro
Interdisciplinario de la “Western Humanities Conference on Cultures and Nationalisms” que se
celebra anualmente en la Universidad de California, Los Angeles.
y mujeres de mentes simples, prontas a la violencia, al alcohol y al trabajo duro,
y sobre todo acostumbrados a las penalidades y a la pobreza.
De manera que, a menos que uno entienda a los grupos como explícitamente
rechazantes de la lógica de la fragmentación adoptando una multiplicidad no
fragmentada que requiere un entendimiento de las opresiones como engranaje,
la representación grupal hace poco bien a los miembros del grupo. Fracasa a la
hora de salvaguardar la «inclusión y la participación de todos» en la formación
de la vida pública. La lógica de la impureza, del mestizaje, nos ofrece un mejor
entendimiento de la multiplicidad adecuada a la concepción de las opresiones
como engranaje. Quiero ofrecer una exposición sobre la política de la
heterogeneidad que no está enfrentada con la de Young, pero que tiene una
lógica diferente. La de Young, aunque formulada a partir del rechazo de la
lógica de la pureza, es extrañamente consistente con ello aunque no
necesariamente ligada a ello. La mía es inconsistente con esta lógica. La
comunicación entre las diferencias en el modelo de Young puede fracasar a la
hora de reconocer que uno está escuchando las voces que representan sólo a
los transparentes, voces que encarnan la niarginalización de los miembros
opacos y que contiene su fragmentación.
12
Dos ejemplos que me vienen a la mente de manera muy vívida son las posturas sugeridas
por Butler 1990 y Haraway 1990.
INTERRUPCIÓN: LA SEPARACIÓN LESBIANA
No creo que podamos considerar como a «nuestra propia» gente sólo a las
personas que rechazan las mismas dicotomías que rechazamos nosotros. El
impulso por rechazar dicotomías y por vivir y encarnar este rechazo nos
proporciona un poco de esperanza en el hecho de permanecer unidos como
personas que se reconocen unas a otras en su complejidad. La esperanza se
basa en las posibilidades que se manifiestan en nuestra sociedad por el hecho
de ser extranjeros desplazados, las posibilidades que nos ofrece la purificación
producida en medio de la tensión. Creo que esta es la cuestión que Anzaldúa
plantea cuando habla de una frontera: «Es un estado constante de transición.
Sus habitantes son los prohibidos y los olvidados. las personas que cruzan,
atraviesan o pasan a través de los confines de lo considerado «normal»... La
ambivalencia y la inquietud residen aquí y la muerte no es ajena a ello.»
(1987,3-4). Para Arizaldúa, «vivir en las fronteras significa que no eres ni
hispana india negra española, ni gabacha, eres mestiza, multa, medio-raza...
(eres) mitad y mitad -medio mujer medio hombre, ni lo uno ni lo otro- un nuevo
género... En las Fronteras eres el campo de batalla donde los enemigos están
emparentados».(1987, 194).
Pero, claro, esto es muy débil para poder pensar en los demás como en
«nuestra propia gente»: que nos mostremos como posibles mediante el
rechazo y las tortuosidades de nuestra ambigüedad. Una base más sólida, ya
que más positiva, es la que afirma la falta de límite de nuestra creatividad que
se halla en el centro de lo cortado, que se aferra a nuestra falta de guión, a
nuestro ser seres en el proceso de hacerse, que puede contenemos a cada
uno en el camino de la creatividad, que no descarta sino que en su horizonte
está esta posibilidad.
Ambiguamente, ni esto ni lo otro, sin los límites impuestos por la lógica de esto
o lo de más allá, y por tanto sin una dirección trazada, sino hecha con
movimientos, palabras, relaciones, estructuras, instituciones, sin tener que
ensayar una y otra vez en la sumisión, la limitación, la subordinación, el
ascetismo. Es así como podemos afirmar la parte positiva de nuestra amenaza
de ser ambiguos. Si es ambiguo es amenazador porque es creativo, cambiante,
desafiante a las normas que lo quieren sojuzgado. Así es como encontramos a
nuestra gente, haciendo de la amenaza algo bueno, día a día, estando atentos
a nuestra compañía en nuestros grupos, entre los grupos. El modelo del corte
como modelo de la separación es un modelo para la separación mundial, la
separación de los habitantes de la frontera, de gente que vive en los cruces,
gente que niega la pureza y que se contemplan los unos a los otros con la
posibilidad de ir más allá de la resistencia.
El corte-separación no es algo que nos ocurra sino algo que hacemos nosotros.
Tal como he dicho, es algo que hacemos resistiendo a la lógica del control, a la
lógica de 1a pureza. Que cortemos, aunque los transparentes frc5en en verle el
sentido y por consiguiente lo mantengan 1ejado de la estructuración de nuestra
vida social, testim,nia el hecho de ser sujetos activos que no están consun1j0s
por la lógica del control. Cortar puede ser una técnica frtuita para sobrevivir
como sujeto activo, o bien puedt llegar a ser un arte de la resistencia, una
metamorfosis, una transformación.