Ciclo de Agua

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CICLO DE AGUA

El ciclo del agua no se inicia en un lugar específico, pero para esta explicación
asumimos que comienza en los océanos. El sol, que dirige el ciclo del agua,
calienta el agua de los océanos, la cual se evapora hacia el aire como vapor de
agua. Corrientes ascendentes de aire llevan el vapor a las capas superiores de la
atmósfera, donde la menor temperatura causa que el vapor de agua se condense
y forme las nubes. Las corrientes de aire mueven las nubes sobre el globo, las
partículas de nube colisionan, crecen y caen en forma de precipitación. Parte de
esta precipitación cae en forma de nieve, y se acumula en capas de hielo y en los
glaciares, los cuales pueden almacenar agua congelada por millones de años. En
los climas más cálidos, la nieve acumulada se funde y derrite cuando llega la
primavera. La nieve derretida corre sobre la superficie del terreno como agua de
deshielo y a veces provoca inundaciones. La mayor parte de la precipitación cae
en los océanos o sobre la tierra, donde, debido a la gravedad, corre sobre la
superficie como escorrentía superficial.

Una parte de esta escorrentía alcanza los ríos en las depresiones del terreno; en
la corriente de los ríos el agua se transporta de vuelta a los océanos. El agua de
escorrentía y el agua subterránea que brota hacia la superficie, se acumula y
almacena en los lagos de agua dulce. No toda el agua de lluvia fluye hacia los
ríos, una gran parte es absorbida por el suelo como infiltración. Parte de esta agua
permanece en las capas superiores del suelo, y vuelve a los cuerpos de agua y a
los océanos como descarga de agua subterránea. Otra parte del agua subterránea
encuentra aperturas en la superficie terrestre y emerge como manantiales de agua
dulce.
CICLO DE CARBONO

El ciclo del carbono es un ciclo biogeoquímico por el cual el carbono se


intercambia entre la biosfera, la litosfera, la hidrosfera y la atmósfera de la Tierra.
Los conocimientos sobre esta circulación de carbono posibilitan apreciar
la intervención humana en el clima y sus efectos sobre el cambio climático.

El carbono (C) es el cuarto elemento más abundante en el Universo, después del


hidrógeno, el helio y el oxígeno (O). Es el pilar de la vida que conocemos. Existen
básicamente dos formas de carbono: orgánica (presente en los organismos vivos y
muertos, y en los descompuestos) y otra inorgánica (presente en las rocas).

En el planeta Tierra, el carbono circula a través de los océanos, de la atmósfera y


de la superficie y el interior terrestre, en un gran ciclo biogeoquímico. Este ciclo
puede ser dividido en dos: el ciclo lento o geológico y el ciclo rápido o biológico.

Suele considerarse que este ciclo está constituido por cuatro reservorios
principales de carbono interconectados por rutas de intercambio. Los reservorios
son la atmósfera, la biosfera terrestre (que, por lo general, incluye sistemas de
agua dulce y material orgánico no vivo, como el carbono del suelo), los océanos
(que incluyen el carbono inorgánico disuelto, los organismos marítimos y la
materia no viva), y los sedimentos (que incluyen los combustibles fósiles). Los
movimientos anuales de carbono entre reservorios ocurren debido a varios
procesos químicos, físicos, geológicos y biológicos. El océano contiene el fondo
activo más grande de carbono cerca de la superficie de la Tierra, pero la parte del
océano profundo no se intercambia rápidamente con la atmósfera.
CICLO DEL FOSFORO

El ciclo del fósforo es un ciclo biogeoquímico que describe el movimiento de


este elemento químico en un ecosistema.
Los seres vivos toman el fósforo en forma de fosfatos a partir de
las rocas fosfatadas, que mediante meteorizaciónse descomponen y liberan los
fosfatos. Estos pasan a los vegetales por el suelo y, seguidamente, pasan a
los animales. Cuando éstos excretan, los descomponedores actúan volviendo a
producir fosfatos.
Una parte de estos fosfatos son arrastrados por las aguas al mar, en el cual lo
toman las algas, peces y avesmarinas, las cuales producen guano, el cual se usa
como abono en la agricultura ya que libera grandes cantidades de fosfatos. Los
restos de los animales marinos dan lugar en el fondo del mar a rocas fosfatadas,
que afloran por movimientos orogénicos.
De las rocas se libera fósforo y en el suelo, donde es utilizado por las plantas para
realizar sus funciones vitales. Los animales obtienen fósforo al alimentarse de las
plantas o de otros animales que hayan ingerido. En la descomposición bacteriana
de los cadáveres, el fósforo se libera en forma de ortofosfatos (H3PO4) que pueden
ser utilizados directamente por los vegetales verdes, formando fosfato orgánico
(biomasa vegetal), la lluvia puede transportar este fosfato a los mantos acuíferos o
a los océanos. El ciclo del fósforo difiere con respecto al del carbono, nitrógeno y
azufre en un aspecto principal. El fósforo no forma compuestos volátiles que le
permitan pasar de los océanos a la atmósfera y desde allí retornar a tierra firme.
Una vez en el mar, solo existen dos mecanismos para el reciclaje del fósforo
desde el océano hacia los ecosistemas terrestres. Uno es mediante las aves
marinas que recogen el fósforo que pasa a través de las cadenas alimentarias
marinas y que pueden devolverlo a la tierra firme en sus excrementos. Además de
la actividad de estos animales, hay la posibilidad del levantamiento geológico de
los sedimentos del océano hacia tierra firme, un proceso medido en miles de años.
CICLO DE ALITROGENO

Los organismos emplean el nitrógeno en la síntesis de proteínas, ácidos


nucleicos (ADN y ARN) y otras moléculas fundamentales del metabolismo.

Su reserva fundamental es la atmósfera, en donde se encuentra en forma de N 2,


pero esta molécula no puede ser utilizada directamente por la mayoría de los
seres vivos (exceptuando algunas bacterias).

Esas bacterias y algas cianofíceas que pueden usar el N 2 del aire juegan un papel
muy importante en el ciclo de este elemento al hacer la fijación del nitrógeno. De
esta forma convierten el N2 en otras formas químicas (nitratos y amonio)
asimilables por las plantas.

El amonio (NH4+) y el nitrato (NO3-) lo pueden tomar las plantas por las raíces y
usarlo en su metabolismo. Usan esos átomos de N para la síntesis de las
proteínas y ácidos nucleicos. Los animales obtienen su nitrógeno al comer a las
plantas o a otros animales.

En el metabolismo de los compuestos nitrogenados en los animales acaba


formándose ión amonio que es muy tóxico y debe ser eliminado.
Esta eliminación se hace en forma de amoniaco (algunos peces y organismos
acuáticos), o en forma de urea (el hombre y otros mamíferos) o en forma de ácido
úrico (aves y otros animales de zonas secas). Estos compuestos van a la tierra o
al agua de donde pueden tomarlos de nuevo las plantas o ser usados por algunas
bacterias.

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