Justo Gonzalez - Historia General de Las Misiones PDF
Justo Gonzalez - Historia General de Las Misiones PDF
Justo Gonzalez - Historia General de Las Misiones PDF
HISTORIA GENERAL DE
LAS MISIONES
A nuestros padres,
cuya misión
tanto nos ha enriquecido:
ardo Granada
2 ThL 745 94 80
Armaia QundIo
editorial die
COLECCION HI STOR IA
EDITORIAL CUE
M.C.E. Horeb, E.R. n.° 2.9 10 SE-A
Cl Ferrocarril, 8
08232 VILADECAVALLS (Barcelona) ESPAJIA
E-mail: [email protected]
Internet: http:Il www.clie.es
COLECCION HISTORIA
-
Copyright © 2008 Justo L. Gonzalez Carlos E Cardoza
Copyright © 2008 Editorial CUE
Todos los derechos reservados
ISBN: 978-84-8267-520-6
Printedin Spain
ClasifIquese:
0306 HISTORIA DE LAS MISIONES
CTC: 01-03-0306-01
Referencia: 22.46.44
4-
Prefacio ) 9orr
-- rrj/0
casi cuarenta aflos que recibI una A partir de entonces he recibido repetidas
Hace invitación inesperada a escribir una his- invitaciones a reeditar aquella obra. Empero
toria de las misiones. La invitación venfa de siempre me he resistido a ello, porque no soy
una comisión, con sede en Buenos Aires, cuyo misiólogo, y siempre he estado bien cons-
propósito era producir una serie de textos que ciente de que aquel libro dejaba bastante que
pudiesen servir de introducción a las diversas desear.
disciplinas del currIculo teológico. Fue hace unos pocos aflos que, en conversa-
Debo confesar que la invitación no fue de ciones con mi colega y amigo el misiologo
mi agrado inmediato. Por aflos me habIa dedi- Carlos F. Cardoza Orlandi, se me ocurrió la
cado a estudiar la historia de la iglesia, y sobre idea de invitarle a colaborar conmigo en una
todo de sus doctrinas, y ahora se me pedIa historia de las misiones que, aunque hiciera
que enfocase mi atención sobre la historia de uso de aquel viejo material, tomara en cuenta
las misiones! Luego, no fue con mucho entu- el estado actual de la misiologIa y de sus dis-
siasmo que emprendi la tarea asignada. ciplinas afines.
Sin embargo, segi.iIn fui adentrándome en el Tal es la historia y la prehistoria de este
tema, más me fascinó. Se trataba de todo un libro que mi colega Cardoza Orlandi y yo nos
aspecto de la historia eclesiástica que pocos de atrevemos ahora a lanzar al mundo, con la
mis profesores apenas mencionaban, pero que esperanza de que enriquezca la reflexión
un muchos modos podia yo reconocer como misiológica de la iglesia contemporánea, y
parte de mi historia. Guiado por los impresio- que de algdn modo nos liame a todos a una
nantes siete tomos de la <<Historia de la expan- obediencia cada vez más fiel.
sión del cristianismo>>, por Kenneth Scott Justo L. Gonzalez
Latourette, quien en Yale habIa sido mi veci- Decatur, Georgia, EE.UU.
no y frecuente interlocutor (pero no mi profe- Pascua de Resurrección, 2005
sor), me lance a la tarea.
De todo ello resultaron dos cosas. Resultó
en primer lugar una nueva vision del alcance
de la historia eclesiástica, de tal modo que a
partir de entonces hice todo lo posible, en
todos mis cursos y escritos sobre la historia
eclesiástica, por incluir la vision mundial que
aquel estudio me proporcionó. Y resultó en
segundo lugar una <<Historia de las misiones>>
que fue mucho mejor recibida de lo que yo
habia esperado, y que pronto se agotó.'
5
Contenido
CapItulo 1: Introducción .12
A. La misiologIa, la misión y la historia de las misiones 14
B. La historia de la iglesia y la historia de las misiones 15
C. La teologIa pastoral, la historia de las misiones y el pueblo de Dios 17
D. Organización de esta historia de las misiones 18
k. Factores sociológicos 42
1. Resumen: La actitud de los cristianos hacia el paganismo 42
B. El imperio cristiano y la supresión del paganismo 43
1. La conversion de Constantino 43
2. Los hijos de Constantino y la reacción pagana 46
3. El Imperio cristiano 46
4. El fin de la Had Antigua 47
5. La obra misionera después de la conversion de Constantino 48
a. Ulfilas 48
b. MartIn de Tours 49
C. La expansion del cristianismo fuera del Imperlo Romano 50
1. El cristianismo en Edesa 50
2. El cristianismo en Armenia 50
3. El cristianismo en Georgia 52
4. El cristianismo en Mesopotamia y Persia 52
5. El cristianismo en la India 53
6. El cristianismo en Arabia 54
7. El cristianismo en Abisinia (hoy EtiopIa) 54
D. Consideraciones generales 54
7
Contenido
9
Contenido
CapItulo 9:
Las misiones en Africa Ecuatorial y Meridional 215
A. La Iglesia Ortodoxa Tawahedo de EtiopIa 215
B. Las misiones protestantes en el Africa al sur del Sahara 215
1. La fundación de Liberia y Sierra Leona y las misiones en Africa Occidental y Ecuatorial ..217
2. La colonización europea y las misiones en el Africa del Sur 221
3. Un ejemplo de las misiones, la colonización y el legado misionero en el sur de Africa:
El caso de David Livingstone 223
C. Las misiones católicas en Africa 226
D. El cristianismo en Madagascar 229
E. Consideraciones generales 231
10
HIsT0RIA GENERAL DE LAS MISIONES
CapItulo 11:
Desde todas las naciones 309
A. Una historia compleja con lecciones para el futuro 309
B. El cristianismo en el siglo XXI y algunas proyecciones misioneras 311
11
capItulo i
Introduccion
or tanto, id y haced discIpulos a todas regImenes despóticos, han acudido a las armas
<< las naciones...>> Hay pocos textos bibli- para forzar a los más ddbiles a creer, y hanjus-
cos rnás conocidos y citados que este, frecuen- tificado lo injustificable.
temente denominado la <<Gran Comisión>>. A Tales desmanes no siempre han sido come-
travds de los siglos, estas palabras de Jesds han tidos por hipócritas que sencillamente desea-
inspirado a miles de creyentes a lievar el Evan- ban aprovecharse de la fe cristiana. Tambidn
gelio a los lugares más remotos de la tierra. han sido cornetidos por cristianos sinceros,
Unos sencillamente han cruzado la calle; otros convencidos de que la expansion de su fe jus-
han cruzado rIos, mares y fronteras. Unos han tificaba sus acciones, y que con ello servIan a
dado dinero; otros ban dado la vida. Unos fue- Dios. Convencidos de la verdad de su fe, mu-
ron bien recibidos; otros murieron como mar- chos han crefdo que esto era también fndice de
tires a manos de aquellos a quienes esperaban la superioridad de su cultura, y con ese senti-
evangelizar. En obediencia a esas palabras se do de superioridad ban destruido civilizacio-
ban establecido iglesias, se han construido es- nes, violado identidades y oprimido a los inde-
cuelas y hospitales, se han deshecho injusti- fensos.
cias, se ha liberado a mujeres oprimidas por Todo esto es lo que le da al estudio de la his-
tradiciones ancestrales, se ha enseflado a millo- toria de las misiones su importancia y su urgen-
nes a mejorar sus crIas, a cuidar de su salud, y cia. La histona de la expansion del cristianismo
a leer. Cientos de idiomas que solo existIan en es a Ia vez inspiradora y aterradora. Nos sirve
forma oral han sido reducidos a la escritura .... de llamado y de advertencia. Nos llama a se-
Si esa fuera toda la historia, tendrIamos so- guir la lInea esplendorosa de quienes antes de
bradas razones para gloriarnos y enorgullecer- nosotros dieron testimonio de su fe. Y nos ad-
nos. Pero hay tarnbidn el otro lado de la mone- vierte del peligro de imaginar que, porque so-
da. A travds de los siglos, y hasta el dIa de hoy, mos cristianos fieles, no hemos de preocupar-
ha habido cristianos que ban tornado las pala- nos por las consecuencias de nuestras acciones
bras de Jesus para sus propios propósitos impe- y nuestras actitudes.
rialistas o de lucro. Ha habido cristianos que En este punto, conviene que volvamos sobre
han tornado el rnandato rnisionero como Indi- la tan citada <<Gran Coniisión>>. Ta! corno fre-
ce de su propia superioridad, y que con ese cuentemente se le cita, el pasaje empieza con las
sentido de superioridad han destruido culturas palabras <<Por tanto, id .... >>. Empero la frase <<por
y civilizaciones, han establecido y defendido tanto>> implica siempre un antecedente, una ra-
12
HISTORLk GENERAL DE LAS MIsIoNEs
zon para lo que sigue. En este caso, ese antece- mo se habIa vuelto verdaderamente universal,
dente son ]as palabras del propio Jesds: <<Toda pues se encontraba presente en todas las regio-
potestad me es dada en ci cielo y en la tierra. Por nes del globo. Hoy, medio siglo despuds, pode-
tanto, id.... >> En dltima instancia, la razón por la mos decir mucho más. La fe cristiana no solo
cual los creyentes ban de ir a todas las naciones se encuentra presente en los rincones más apar-
lbs es que les tengamos lástima a quienes se tados de la Tierra, sino que es en varios de esos
pierden, o que nuestra cultura sea superior, o rincones que muestra más vitalidad y creci-
que tengamos algo que enseñarles. La razóri dl- miento numdrico. En vida de Latourette, el
tima de nuestro ir es el señorio universal de Je- cristianismo, aunque presente por doquier, se-
sucristo. Jesus dice que ya dl es Señor de toda la guIa siendo la religion del Occidente, repre-
tierra. No hay lugar donde dl no estd. No hay lu- sentada en buena parte del resto del mundo por
gar donde sea necesario que los creyentes vayan pequeños grupos, muchos de ellos el resuitado
a lievarle. El Señor que era en el principio con de la empresa misionera occidental, y todavIa
Dios, por quien todas las cosas fueron hechas, y dependientes de esa empresa. Hoy, al tiempo
que es la luz que alumbra a todo ser humano, ya que la fe cristiana parece estar perdiendo terre-
está allI. Está actuando en los mdividuos y en las no en sus antiguos centros en Europa y Norte-
culturas, aunque no se le conozca, aunque su america, crece a pasos agigantados en Africa y
presencia sea anónima. En ese sentido, lo que Asia. Y en America Latina, donde en tiempos
los creyentes hacen al dar su testimonio e invi- de Latourette lo que habIa era principalmente
tar a otros a creer es lievar el conocimiento del un catolicismo romano estancado y un protes-
nombre de Jesus, de sus ensefianzas, de sus pro- tantismo bastante minoritario, hoy existe un
mesas. Pero no llevar a Jestis! catolicismo en vIas de renovación y un protes-
Si el Señor está ya allI al llegar nosotros, tantismo puj ante que en varios paIses alcanza
esto quiere decir que en la empresa misionera más de la cuarta parte de la población.
vamos al encuentro, no solo de quienes no Estos cambios demográficos son una mues-
creen, sino tambidn del JesOs en quien ya cre- tra del movimiento de la fe cristiana, del carác-
emos. Yendo a esos lugares donde dl nos dice ter contextual de las comunidades de fe, de la
que su seflorIo, con todo y ser desconocido, es vitalidad que la fe descubre en ci margen o en
real, conocemos algo más de di y de sus propó- la frontera entre culturas y pueblos, de la diver-
sitos. AsI, por ejemplo, Pedro aprendió algo sidad de prácticas y teologIas misioneras y de
del Evangelio al predicarle al pagano Cornelio; las diversas respuestas al evangelio. Por ello
y la iglesia antigua aprendió algo al penetrar la esperamos que nuestro trabajo ayude a elimi-
cultura grecorromana. nar la vision del cristianismo como una religion
Todo esto significa que la historia de las mi- occidental y a redescubrir su carácter mundial,
siones, bien entendida, no es solamente la his- fronterizo y transcultural. En otras palabras,
toria de la expansión del cristianismo, sino la vitalidad de le fe cristiana en los continen-
tambidn la historia de sus muchas conversiones tes del sur y del este a principios de este siglo
-de lo que la iglesia ha ido aprendiendo y se convierte en un prisma para releer las teo-
descubriendo segOn se encarna en diversos logias y prácticas misioneras de antaño. Inclu-
tiempos, lugares y civilizaciones. sive, ei hecho de ser observadores y partici-
Cuando el gran historiador de las misiones pantes del carácter transcultural del movimien-
Kenneth Scott Latourette completO los siete to misional cristiano nos provee un iente parti-
voldmenes de su magna obra, podia señalar cular para descubrir nuevos agentes, nuevas
que el gran acontecimiento del siglo anterior teologIas y nuevas prácticas misioneras que
(el XIX) fue que por primera vez el cristianis- quiebran una concepción del movimiento ens-
13
Introducción
14
HIsT0RIA GENERAL DE LAS MisloNEs
4q
tintas areas de la misiologia. Por ejemplo, en el otro lado, esta historia también ilustra cómo
capItulo dos proveemos unos modelos que nos prácticas y teologlas que no dieron fruto en un
ayudan a entender el uso de la Biblia en el cam- contexto silo dieron en otro. AsI, por ejemplo,
p0 misionero. Estos modelos no agotan ni pre-
los postulados que se desarrollaron y no dieron
tenden agotar los asuntos, complejidades y re- resultado en la China tomaron otro giro y si die-
tos a que se enfrentan la misiologIa y la iglesia ron resultado en el suelo coreano.
en cuanto a ese tema. No obstante, ese capItu-
lo se inserta en una conversación teológica y B. La historia de la iglesia
misional para animar, reflexionar y ubicar el te- y la historia de las misiones
ma de la Biblia y la misión en nuestros dIas. La historia de la iglesia y la historia de las
Otro ejemplo de la contribución de esta his- misiones no deberIan separarse. La reflexiOn
toria de las misiones a la misiologla está en pro- crItica sobre la vida de la iglesia, sea en la litur-
veer una <<cartografIa> de las teologIas de la ml- gia, la teologla, o las prácticas pastorales, no
sión en distintas épocas y regiones. Las prácticas debe aislarse de la reflexión crItica sobre la ex-
y mdtodos misionales, junto a las teologIas que tension de la fe cristiana por parte del pueblo
se desarrollaron antes, durante, y después de la de Dios en lugares donde la iglesia ilega por
gestion misionera, revelan que la relación entre primera vez o donde se inserta como agente de
la teologIa de la misión y la práctica misionera renovación. Desafortunadamente, la definición
no es unidireccional. Las teologIas de la niisión misma de las disciplinas-historia de la iglesia
se fueron desarrollando segiin la práctica misio- e historia de las misiones-muestra una dico-
nera enfrentaba conflictos, triunfos, derrotas y tomfa, una estructura bipolar, que parece negar
hasta expulsion. Esta historia ilustra cOmo las la unidad entre iglesia y misión, y parece dar a
prácticas y teologlas cambian a través del tiem- entender que hay ciertos capItulos en la vida de
p0 en la medida que las circunstancias históricas
la iglesia que son parte de su verdadera <<histo-
modifican la cultura y la tarea misionera. Por na>>, y otros que son sOlo parte de su <<misión>>.
15
IntroducciOn
Tal concepción bipolar de la historia y la En ese capItulo ilustramos cómo las misiones
misión de la iglesia manifiesta el carácter euro- hacia los <<bárbaros>> y grupos celtas transfor-
céntrico de ambas disciplinas segUn se han des- man las prácticas misioneras aceptadas que el
arrollado tradicionalmente. AsI, por ejemplo, centro habIa dado por normativas. Es importan-
los conflictos de los primeros cristianos con el te destacar, no obstante, que el énfasis no está en
Imperio Romano se estudian en Ia historia de la las condiciones y procesos que contnibuyen a la
iglesia, pero los conflictos entre los cristianos transformación de la polftica misional del cen-
y el Impeno Persa se estudian-si es que se es- tro-si tal fuera el caso, este libro serla más bien
tudian-en otra disciplina. Lo que ocurrió en sobre la historia del pensamiento misiológico-
Alemania en el siglo XVI es parte de la histo- sino en la actividad, protagonistas y condiciones
na de la iglesia, pero lo que ocurrió en Mexico en el margen de los territorios cristianos, o sea,
a! mismo tiempo no lo es. El <<Gran despertar>> una historia de las misiones.
en Norteamérica a fines del siglo XVIII-el Esperamos que llegue el dIa en que no sea
Great Awakening-es parte de la historia de la necesario estudiar ni escnbir la historia de las
iglesia, pero el avivamiento pentecostal en Chi- misiones separadamente de la historia de la
le a principios del XX no lo es. Ciertamente, es iglesia. Lo que es más, en el ültimo capItulo de
hora de corregir tales perspectivas, o al menos esta historia señalaremos por qué creemos que
de comenzar a intentarlo. ese dIa ha ilegado, y que si algunos no se per-
Esta obra no espera romper esa estructura catan de ello se debe a cierta miopIa de que los
bipolar de las disciplinas históricas. Empero si <<centros>> siempre adolecen. Por lo pronto, em-
deseamos contribuir a un quehacer histórico pero, los currIculos y programas de estudio de
que tenga en cuenta la compleja relación de in- la mayorIa de las instituciones de educación
terdependencia y de mutuo impacto que existe teologica, asI como la formación misma de
entre el centro y la periferia-entre lo que tra- buena parte del profesorado, tienden a estudiar
dicionalmente ha estudiado la historia de la la histona de la iglesia <<desde el centro>>, como
iglesia y lo que se incluye en esta histona de las si solamente lo que ocurre en el centro tuviese
misiones. Esto ciertamente es tarea de toda una importancia. Mientras no se supere esa postu-
generación de historiadores-y de historiado- ra, será necesario insistir en el estudio de la
res que representen una variedad de perspecti- historia de las misiones, para al menos recor-
vas y de contextos. Por tanto, ofrecemos este Ii- darnos constantemente que el <<centro>>-o los
bro como remedio provisional, como recorda- centros-existe en virtud de la periferia, y que
tonio acerca de la inmensa tarea que todavIa buena parte de la realidad cristiana queda ex-
queda por hacer. cluida cuando solamente nos ocupamos de lo
Puesto que estamos convencidos que la tarea que ocurre en los centros-centros de recursos
histórica necesita integrar la <<historia de la igle- económicos, de estudios teológicos, etc.
sia>> con la <<historia de las misiones>>, haciendo Un segundo efecto que tiene esta bipolari-
de ambas una <<historia de la iglesia en misión>>, dad histOnica es una interpretación exponen-
en varios casos aludimos a esta relación y la cial del crecimiento de la fe cnistiana. Se da por
compleja interacción que existe entre la activi- sentado que la fe cristiana crece, crece y crece
dad misionera en el margen y la vida de la igle- tal como un globo crece y se expande a! soplar
sia en el centro de donde se inicia la actividad aire. Esto presupone un movimiento unidirec-
misionera. Un ejemplo que ilustra nuestro inte- cional y homogéneo segiin el <<centro>> va am-
rés en enfrentar este problema metodológico, pliando su territono sin cambio alguno.
esta bipolanidad histónica, se encontrará en el Esta historia del movimiento cristiano se
capItulo sobre las misiones en la dpoca antigua. aparta de tal vision del crecimiento cristiano, y
16
HISTORIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
se une a las crecientes y novedosas voces de gloriosa variedad del pueblo de Dios, que al-
historiadores en todas partes del mundo, para canza a toda tribu, lengua y nación.
junto a ellas proponer lo siguiente: (1) El mo-
vimiento del cristianismo es en serie. La fe se C. La teologIa pastoral, la historia
mueve del centro a la periferia, transformando de las misiones y el pueblo de Dios
tanto la periferia como el centro y creando nue- La teologla pastoral integra muchas otras
vos centros que reanudan su movimierito hacia disciplinas a la tarea pastoral. La misiologIa,
la periferia (que muy bien puede ser un viejo junto a la historia de la iglesia y la historia de
centro). (2) Este movimiento afecta el quehacer las misiones, en ocasiones necesita situarse en
teologico y la vida de las comunidades de fe el contexto de la pastoral. Cuando hablamos
tanto en el centro como en la periferia. (3) La de <<la pastoral>> no queremos limitarla al mi-
actividad misional de la periferia muestra gran nisterio ordenado. Más bien nos referimos a
vitalidad por razón de las intersecciones de di- toda gestion y reflexiOn que busque descubrir e
cha actividad con culturas no occidentales ricas integrar los conocimientos y contribuciones de
en diversidad religiosa, étnica y teológica, y diversas disciplinas a la vida de la comunidad
también por su contexto de luchas de clases y de fe. En relación a este proyecto de la historia
en pro de la justicia hacia grupos oprimidos ta- de las misiones, la teologIa pastoral busca res-
les como las mujeres y la niflez. (4) El cristia- puestas a la pregunta: j,COmo contnbuye la his-
nismo está adquiriendo una configuración toria de las misiones a la vida de la iglesia en su
mundial, transcultural y contextual que requie- lucha por ser fiel al Evangelio de Jesucristo y
re nuevos lentes para observar, y plumas flue- ser signo del Reino de Dios en el mundo? Al-
vas para escribir, la historia de la iglesia. gunas posibles respuestas a esta pregunta son
Ahora bien, 5 por algdn tiempo todavIa se- las siguientes:
rd necesario estudiar por separado la historia de Primero, la historia de las misiones ayuda
las misiones para no olvidar el carácter global al pueblo de Dios a descubrir y aceptarque las
de la iglesia, hay una razón muy práctica para <<misiones han extendido la fe cristiana más
revisar y escribir esta historia de las misiones: allá de lasfronteras de la cristiandad y de los
en nuestra opinion no hay disponible una his- centros donde lafe tiene arraigo desde tiempos
toria de la misiones que sea abarcadora y gene- antiguos. En esta historia encontramos creyen-
ral. Hay una escasez de material que provea, tes-unos con el tItulo de <<misioneros>> y otros
particularmente a estudiantes y lIderes en las sin 61-que hallaron en su fe una urgencia e
iglesias e instituciones misioneras, un panora- imperativo por compartir su experiencia de
ma general que sirva para ilustrar el mosaico Dios. Veremos algo de los retos, ambigueda-
que comprende la historia de la transmisión del des, luchas, triunfos, frustraciones y esperanzas
evangelio. No pretendemos aquI describir en que tal vocación engendró. Seremos testigos
detalle todas las partes de mosaico. Pero 51 es- de muchos triunfos, pero también de muchas
peramos que la comunidad lectora (1) reconoz- derrotas; de muchas visiones profeticas, pero
ca la variedad de ese mosaico que es la iglesia también de muchas visiones torcidas; de mu-
universal y la historia de sus orIgenes; (2) se in- chos beneficios, pero también-confesémos-
forme y reflexione sobre esa variedad; (3) lo-de muchos daños.
acepte el reto a ir más allá de lo que aquI se di- Segundo, la historia de las misiones ilustra
ce, ampliando sus horizontes mediante expe- la diversidad y riqueza que existe en las <mi-
riencias de contactos con otros sectores del sionesx Esta historia da evidencia de que las
cristianismo mundial; y (4) descubra otros an- misiones no han sido, ni son, ni serán una acti-
gulos para observar, estudiar y disfrutar de la vidad homogénea, unidireccional y con un so-
17
Introducción
lo patron. Al contrario, esta historia testifica turas o regiones geográficas, sino que se ex-
de la libertad soberana del EspIritu Santo y la tiende en todo el mundo como testimonio vivo
capacidad-o la incapacidad-de discerni- de la vitalidadde la fe del pueblo de Dios. Las
miento de miles de creyentes que, estando a! misiones son el testirnonio de la actividad de
margen de los centros de la teologla y del orden Dios en el mundo con todo tipo de personas y
eclesial, han tratado y tratan de comunicar el en toda clase de circunstancias. Son testirnonio
Evangelio y establecer el orden de la iglesia del riesgo que ha tornado Dios en compartir
cristiana donde no existIa o donde habIa <<defi- con su pueblo la tarea de salvaciOn y reconci-
ciencias>> en ese orden. liación, nunca agotando los nuevos caminos
Tercero, la historia de la misiones nos re- para dar a conocer el Evangelio. Son tarnbidn
cue rda que la actividad misionera por parte testimonio de la diversidad del pueblo de Dios
del pueblo de Dios no siempre cumple con las y, al mismo tiempo, de la lucha por discernir la
niás altas exigencias y entendimiento del evan- actividad de Dios en el rnundo-y de hacerlo
gelio de Cristo. Como aqul se leerá, no son po- con humildad y confianza en Dios. Son testi-
cas las ocasiones en que la historia de las mi- monio de la interdependencia de la comunidad
siones es también una historia de atropello, de de fe alrededor del mundo y de la dependencia
genocidio, de abuso de poder, y de pecado. Es- de la comunidad en Dios, protagonista princi-
ta dimension en la historia de ]as misiones in- pal de toda actividad misionera.
tenta, por un lado, relativizar la actitud triunfa-
lista que en ocasiones ha anirnado y hasta abru- D. Organización de esta historia
mado las gestiones misionales de la iglesia y de las misiones
que le ha permitido continuar cometiendo mu- Las páginas que siguen ban sido organiza-
chos de los errores del pasado y, por otro lado, das a la vez cronológica y geográficamente.
alertar a la iglesia a una reflexiOn crItica y cau- AsI, los capItulos del dos al cinco se ocupan ca-
telosa sobre nuestra actividad misionera. da uno de un perIodo diferente en la historia de
En cuarto lugar, y al otro extremo, la histo- la iglesia y su misiOn. La Biblia y las rnisiones
na de las misiones celebra el acervo de las durante el perIodo neotestamentario son el te-
gestiones inisioneras, sin perder una actitud ma del segundo capItulo. El tercero, cuarto y
crItica hacia la recuperación de los estilos, es- quinto se ocupan respectivamente de las mi-
trategias y teologIas que caracterizaron a las siones durante la Edad Antigua, la Edad Media
misiones saludables y que pueden ayudar a y la Edad Moderna. Puesto que la Edad Con-
formar una nueva generación de creyentes temporánea es el gran siglo de la expansion
compmmetidos como misioneras y misioneros. cristiana-y sobre todo, protestante-le dedi-
AsI como es importante cuestionar y rechazar camos cuatro capItulos: uno introductorio (ca-
las prácticas misioneras que ponen en peligro pItulo seis), otros sobre las misiones en Asia
la integridad del Evangelio, asI también es im- (capItulo siete), en Africa y el mundo musul-
portante celebrar las misiones que continOan man (capItulo ocho) y finalmente en America
desarrollando una conciencia histórica, una ac- Latina (capItulo nueve).
titud crItica, una voz profética y una btisqueda Por illtimo el libro concluye con un capItu-
de fidelidad al Evangelio en la actividad misio- lo sobre las misiones en la Era Posmoderna o
nera cotidiana. Poscolonial y el modo en que la nueva configu-
Finalmente, la histonia de las misiones ilus- raciOn mundial y los enormes cambios demo-
tra la diversidad del pueblo de Dios, su exten- gráficos en la iglesia la obligan a repensar to-
sión sobre la faz de la tierra y la promesa de da su historia general, y en concreto su propio
que estafe no quedara circunscrita a unas cul- entendimiento de la misión.
18
cap Itulo 2
de las misiones
la historia de las misiones brevemente la expansiOn del cristianismo du-
cristianas, como todo aspecto de la historia
Paradójicamente, rante ci perfodo neotestamentario (sección D).
de la iglesia, comienza precisamente con lo
que en cierto sentido es ci fin de la historia, es A. El uso e interpretación de la Biblia
decir, con ci momento en que, con el adveni- en la historia de las misiones
miento de Jesucristo, se cumplieron los tiem- El propósito de esta sección es presentar, de
pos. Este cumplimiento de los tiempos es el forma general, cuatro modeios de interpreta-
punto de partida y la esencia del mensaje mi- ción bfbiica usados en ci campo misionero. Es-
sionero de la iglesia. Es por esta razón que el tos modelos no agotan ni inciuyen todas las
testimonio biblico ha de ser, no solo el punto de sutilezas y detailes en la interpretaciOn de la
partida de toda la historia de las misiones, sino Biblia en la historia de las misiones. No obs-
también una regla importante por la que ha de tante, proveen un marco de referencia que nos
medirse todo momento en esa historia. Porque ayuda a comprender ci papel de la Biblia en esa
dan testimonio de Jesucristo, las Escrituras tie- historia.
nen para nosotros ci carácter dobie de primero 1. El primer modelo es la interpretaciOn bIbli-
y ditimo capItulos, de punto de partida y de ca desde el centro. Este modelo de interpre-
juicio final. tación bIblica limita ci testimonio bIblico a
For otra parte, es ci testimonio bIblico, espe- dos dimensiones: primero, la Biblia es clii-
cialmente ci Nuevo Testamento, ci que presen- bro que justifica la labor misioncra; y se-
ta la cuiminaciOn del proposito inicial de Dios gundo, es un tipo de <<recetario>> con pres-
en la creación misma, y de la promesa dada re- cripciones fijas a seguir para cumpiir con la
petidamente a los seres humanos. A fin de co- misión. La interpretación bthiica desde ci
locar ci tcstimonio bIblico en su propia pers- centro asume que la Biblia lc pertenece dni-
pectiva, este capItulo comienza discutiendo el ca y exciusivamente a la igiesia y, en las co-
uso de las Escrituras en la historia de las misio- munidades recidn fundadas, particularmen-
nes (sección A); en segundo lugar, presenta la te a los misioneros y misioneras.
importancia y vigencia del Antiguo Testamen- Un ejemplo del uso de este modelo desde ci
to en ci quehacer misioncro (sección B); terce- centro ha sido ci modo en que Mateo 28: 16-
ro, expone criterios importantes para la misión 20, <<La Gran Comisión>>, se intcrpreta y usa
que surgen de una lectura misional del Nuevo como ancla para estableccr un mdtodo mi-
Testamento (sección C); y finalmente, traza sioncro, cs decir, <<haccr discIpulos>>, <<bau-
19
Biblia, misión e historia de las misiones
tizar>> y <<enseflar>> sin ninguna otra conside- ción de documentos oficiales por parte de
ración teológica o contextual. cuerpos denominacionales. Normalmente,
Esta interpretación bIblica desde el centro estos documentos oficiales comienzan por
tiene limitaciones que afectan el quehacer describir el contexto donde se lieva a cabo la
misional del pueblo de Dios. Primero, tien- misión. Luego, mediante el uso de textos bI-
de a limitar el uso y la interpretación de la blicos, se establece el enlace teologico entre
Biblia a los misioneros y misioneras, y a las el contexto y la misión y sejustifica la prác-
iglesias que los envIan. Se conoce de ante- tica misionera en un contexto particular.
mano lo que la misión es, y luego se buscan El modelo de interpretación bIblica desde
referencias en la Biblia. La accesibilidad, el margen enfoca sus esfuerzos en el análi-
autoridad e interpretación de las Escrituras sis del contexto y su relación con el texto bi-
quedan reservadas y limitadas a la cultura y blico. Aunque supera una de las limitacio-
experiencia de fe de donde procede la mi- nes del modelo desde el centro, no deja de
sión. Segundo, la interpretación bfblica se tener serios defectos:
puede transformar en la justificación de un Primero, frecuentemente la incorpora-
modelo de misión tinico. Como consecuen- ción del contexto en la interpretación bf-
cia, se confunde el testimonio biblico con el blica es superficial, ya que carece del
dogma, la vitalidad de la interpretación de uso de las ciencias sociales para propo-
las Escrituras en el EspIritu de Cristo con los ner un análisis detallado. Consecuente-
prejuicios, prescripciones y direcciones hu- mente, no existe dialogo entre el texto
manas e institucionales. Por ditimo, la inter- biblico y el contexto. Lo que existe es
pretación bIblica desde el centro no conside- una correlación entre el contexto y algUn
ra el contexto de la misión. No existe inter- texto biblico.
cambio entre el texto bIblico y el contexto Segundo, el análisis del contexto se usa
donde hay misión-la cultura, los asuntos como criterio absoluto para escudriñar y
politicos, económicos y sociales, etc. seleccionar el texto biblico para la mi-
El segundo modelo es la interpretación bI- sión. Este criterio de interpretación deja
blica desde el margen. Mientras que en la al texto bIblico en silencio ya que no per-
interpretación bIblica desde el centro el con- mite otra interpretación del texto o del
texto de misión queda relegado, la interpre- contexto. Es una via de una sola direc-
tación biblica desde el margen le otorga un ción. El texto bIblico solo ilumina el con-
lugar prominente. El personal misionero texto y justifica una acción, una gestión
describe y analiza las condiciones cultura- misional.
les, ecoriómicas, poifticas y sociales dándo- " Tercero, normalmente el análisis del con-
les prioridad, en la mayorIa de los casos, a texto es una tarea realizada por personas
situaciones de opresión, pobreza y margi- que (1) no son parte del contexto o, en el
nalidad. Luego se busca en las Escrituras mejor de los casos, (2) son agentes de
ejemplos que (1) scan análogos a las situa- misión y solidaridad con el pueblo mar-
ciones descritas y analizadas y (2) justifi- ginado. La participación del pueblo que
quen acciones y proyectos que alivien di- experimenta la marginalidad en su coti-
chas condiciones. El propósito principal de dianidad es minima. Realmente, el pue-
este modelo de interpretación bthlica es per- blo se usa como ejemplo para justificar el
mitir que las situaciones fuera del texto de uso del texto bfblico. El pueblo, aunque
la Biblia seleccionen los textos bIblicos. con participacion pasiva en la gestión de
El uso de este modelo es comUn en la redac- interpretación biblica y reflexión misio-
20
HIsT0RR GENERAL DE LAS MIsI0NES
nal, sigue siendo objeto de una misión Una de las contribuciones más importantes
definida por una interpretación ajena a su de este modelo en el campo de la misiologIa
propia marginalidad. es la conciencia del acompañamiento de
3. El tercer modelo de interpretación bIblica, el Dios. La misión y la reflexión bIblica sobre
cIrculo hermenéutico (o cIrculo de interpre- ella cobran una naturaleza dinámica y flui-
tación), es caracterIstico de la teologIa con- da que exige discernimiento y crecimiento
temporanea, y particularmente la teologla en la fe. Los dos primeros modelos limitan
latinoamericana de la liberación. Propuesto la acción de Dios a! pasado. El cIrculo her-
por el teólogo latinoamericano Juan Luis mendutico quiebra este entendimiento está-
Segundo, el cfrculo hermenéutico supera al- tico de la gracia de Dios y pone de manifies-
gunas de las limitaciones de los modelos to la continua y renovadora presencia de
arriba mencionados. Por ejemplo, el cIrculo Dios en su creación. El Dios misionero nos
hermendutico toma muy en serio el contex- invita a acompafiarle en su misión, a discer-
to pero este no es el ünico criterio que deter- nir su gestión salvadora en el mundo.
mina la interpretación del texto bIblico. El Otra contribución importante del cIrculo
estudio del contexto va ligado a la interpre- hermendutico es la participación activa en la
tación del texto, que a su vez va ligada a la reflexión y acción misionera del pueblo que
acción por la liberación, todo dentro de la experimenta opresión y marginación. El
vida del pueblo, protagonista principal en la pueblo participa con Dios en la acción libe-
interpretación del texto. radora y reconciliadora; el pueblo es sujeto,
Básicamente, el cfrculo hermendutico tiene en reflexión y acción, en el quehacer de
cinco fases. La primera es el análisis de la Dios en el mundo.
realidad. Usando las ciencias sociales se in- Sin embargo, este modelo de interpretación
terpretan y formulan causas para explicar la biblicatambién tiene sus limitaciones. Prin-
situación de opresión que vive el pueblo. cipalmente, el cIrculo hermenéutico reduce
Hay una <sospecha ideologica>> que indica la interpretación bIblica en el contexto de
que la situación de pobreza y opresión no es misión a situaciones sociopolIticas o de lu-
voluntad de Dios. En la segunda fase la Bi- cha de clases. Esta reducción, en muchas
blia se lee en relación a este análisis de la re- ocasiones, no permite la inclusion de temas
alidad. Se hace una lectura polItica del tex- y realidades que, además de contenido poli-
to bIblico. El texto bIblico y la realidad se tico, tienen contenido cultural, religioso, fa-
interpelan mutuamente en un diálogo del miliar y de otra Indole. Cualquier reducción
cual surge un imperativo, una práctica libe- en el modo en que entendemos la presencia,
radora, transformadora. Esta praxis libera- misión y acompafiamiento de Dios limita
dora es la tercera fase y es la gestión misio- nuestra vision del encuentro de Dios con los
nera que la comunidad pondrá en obra. La seres humanos en sus contextos.
cuarta fase es la experiencia de transforma- 4. El cuarto modelo de interpretación bIblica
ción que nace y se desarrolla de la praxis Ii- surge del diálogo teolOgico y bIblico entre
beradora. La acción misionera y liberadora biblistas y misiólogos. Este modelo refleja
gesta una nueva realidad. Finalmente, esta una etapa de madurez, ya que los biblistas
nueva realidad necesita ser evaluada y estu- toman en serio el testimonio bIblico en rela-
diada; el cIrculo hermenéutico se cierra a! ción a la misión y los misiOlogos superan las
comenzar de nuevo, y las Escrituras toman limitaciones de los modelos anteriores des-
su lugar de continua conversación con el cubriendo en las Escrituras, con la ayuda de
contexto y la praxis liberadora. los biblistas, gran riqueza misiolOgica. Am-
21
Biblia, misión e historia de las misiones
bas disciplinas muestran interés en el cam- a que aferrarse, sino que se despo-
p0 bIblico identificando criterios y pregun- jó a sí mismo, tomó la forma de
tas que arrojen luz y perspectivas para el siervo, y se hizo semejante a los
desarrollo de una teologIa bIblica de la mi- hombres. Más aün, hallándose en
sion. la condición de hombre, se humilló
Este modelo guIa a! lector bIblico a encon- a sí mismo, haciéndose obediente
trar en todas las Escrituras ejes temáticos en hasta la muerte, y muerte de cruz.
relación a la misión de Dios. Por tanto, se El cómo de la misión de la iglesia debe
supera la selección de textos, la dependencia reflejar el cómo de la misión del trino
exciusiva del contexto y la reducción de te- Dios.
mas misioneros a categorfas sociológicas. c) La tercera pregunta, <<Qué es la ml-
Consecuentemente, se descubre la amplitud sion?>>, evalüa el contenido de nuestra
y densidad de la misión de Dios en todo el gestión misional. Continuando con los
testimonio biblico. Sin descartar el contex- textos de Juan y Filipenses, nos pregun-
to y categorIas sociológicas, el texto bIblico tamos ahora: Qué contenidos, qué pra-
comienza, como indica el misiólogo católi- xis testifican que Jesus, dando a conocer
co Robert Schreiter, una conversación aire- a Dios, se <<despojó a sí mismo>>; que <<to-
dedor de las siguientes preguntas guIas: (a) mó forma de siervo>>; que <<Se humilló a
,Por qué la misión? (b) Cómo es la mi- Si mismo haciéndose obediente hasta la
sion? (c) Qud es misión? muerte ....>>? Esta tercera pregunta subra-
a) La primera pregunta explora el carácter ya el carácter histórico de la misión de
misionero de Dios. Schreiter llama a es- Dios, la contextuahzación de esa misión
ta reflexión biblica <<la Bibliapara la mi- por el pueblo de Dios y la importancia
sión>>. En otras palabras, la iglesia busca del EspIritu Santo en el discernimiento
en el testimonio bIblico la naturaleza mi- de la misión.
sionera de Dios, el liamado a la misión, el Ahora bien, estas tres preguntas no están
carácter del mandato divino y el origen aisladas entre si. No es contestar una y pasar
de la relación entre el Dios de la misión a la otra. Todo lo contrario. Estas tres pre-
y el pueblo misionero. La iglesia exami- guntas se entrelazan en una reflexión bibli-
na y estudia el espIritu del conocido tex- ca que permite creatividad a la luz de las di-
to: <<Como me envió el Padre, asI también versas circunstancias y realidades de cada
Os envIo>> (Juan 20:21). comunidad en misión. Es una gestión espi-
b) La segunda pregunta explora el <<cómo>> ritual de descubrir a Dios en misión y de
de la misión. Centrando todavIa su aten- discernir la tarea de la iglesia para testificar
ción sobre el texto, sirve de puente entre del Dios de la misión responsablemente y en
el porqué de la misión y Ia gestion misio- la libertad del EspIritu.
nera. Luego de estudiar en Juan 20:21 la La interpretación biblica misional está en
naturaleza del <<enviar>, la pregunta desarrollo. Confronta grandes retos en la me-
<<Cómo es la misión?>> encuentra una dida en que las comunidades de fe se enfren-
contestación importante, por ejemplo, en tan, por ejemplo, a la dinámica misional
Filipenses 2:5-8: transcultural, la presencia y vitalidad de otras
Haya, pues, en vosotros este sentir religiones, la creciente distancia entre ricos y
que bubo también en Cristo Jesiis: pobres, el cambio demografico de la fe cris-
El, siendo en forma de Dios, no es- tiana donde los continentes del sur tienen la
timó el ser igual a Dios como cosa fuerza espiritual mientras que la fe en el con-
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HISTORIA GENERAL DE LAS MIsI0NES
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Biblia, misi6n e historia de las misiones
se enfrenta al reto de discernir la voluntad de reconocimiento del seflorIo de Yahvd más
Dios. Es en esta continua dinámica donde el allá de las limitaciones geograficas y étnicas
pueblo percibe el significado de su elección y, de Israel obliga al pueblo de Dios a abrir
por tanto, de su misión. sus fronteras y reconocer la gracia de Dios
en la vida de los pueblos que aceptan la in-
2. La misión universal de Israel vitación a! arrepentimiento.
a) Lafuerza centrIpeta de la misi6n de Israel. Segundo, esta apertura por parte de Israel,
En el Antiguo Testamento la misi6n de Is- personificada en la tarea de Jonas, indica
rael se entiende de una manera <<centrIpeta>> cómo la misi6n transforma la fe y el pensa-
más bien que <<centrIfuga>>. No se trata de miento sobre la voluntad de Dios. El con-
que Israel vaya por todas las naciones del flicto fundamental de Jonas era aceptar el al-
mundo predicando el mensaje de salvación, cance de la misericordia de Dios. Hacer mi-
sino que se trata más bien de que todas la sión en Ninive implicaba confiar exclusiva-
naciones del mundo encuentren en Israel su mente en Dios y no en los prejuicios que
salvación. Por tanto, la misi6n de Israel es tergiversaban el concepto de la elección en
testificar y anunciar la salvación de Dios so- Israel. En otras palabras, hacer misi6n en
bre toda la creación. El Salmo 2 confirma el NInive requerla de Israel modificar su senti-
carácter <<centrIpeto>> de la misi6n de Israel: do de elección, reconociendo su lugar espe-
Ahora, pues, reyes, sed prudentes; cial y responsabilidad en la historia de la
adrnitid amonestación, jueces de la salvación (una gestión de compasión), pero
tierra. Servid a Jehová con temor y sin confundirlo con la exclusividad y el pri-
alegraos con temblor. Honrad al hi- vilegio.
jo (al ungido de Dios), para que no c) Acuérdate de que fuiste esciavo en la tie-
se enoje y perezcáis en el camino; rra de Egipto, per eso yo te mando que ha-
pues se inflama de pronto su ira. gas esto .... >. La fe de Israel está centrada en
;Bienaventurados todos los que en la experiencia de la liberación de Egipto.
él conflan! (Salmo 2:10-12). Todo el Pentateuco hace continua referen-
b) De la exclusividad a la inclusividad: El cia a la experiencia de esclavitud en Egipto
ejemplo de Jonas. El carácter misionero del y de liberación como criterio dtico y misio-
libro de Jonas es muy conocido y poldmico. nal de la vida del pueblo. La memoria de la
No son pocas las ocasiones en que perde- liberaciOn del yugo de esclavitud de Egip-
mos el mensaje central del libro a rafz de en- to es el anuncio del Reino de justicia y Paz
frascarnos en discusiones estériles sobre la de Dios.
autenticidad del documento. Sin embargo, el Lajusticia y la Paz son temas de importan-
libro de Jonas es uno de los textos más elo- cia en la historia de Israel y en su misión.
cuentes en relación a la misi6n de Israel y de Los profetas les recuerdan, tanto al pueblo
la iglesia. como a sus lIderes, la centralidad del shalom
Una lectura cuidadosa del libro proveera la de Dios, de la Paz y la justicia de Dios. El
reflexión fundamental sobre lo anterionnen- profeta Miqueas es elocuente en anunciar lo
te dicho: el proposito de Dios y la misi6n
que Dios espera de su pueblo:
universal de Israel. Primeramente, el propó- Hombre, él te ha declarado lo que es
sito no es llamar a Israel a salir al mundo a bueno, lo que pide Jehová de ti: so-
predicar el señorIo de Yahvé, sino que es lamente hacerjusticia, amar miseri-
más bien un liamamiento al propio Israel a cordia y humillarte ante tu Dios
reconocer que ese seflorIo es universal. El (6:8).
24
HISTORIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
La misión de Israel, como la misión de la igle- epIstolas paulinas el tema de la inclusion de los
sia, está ligada al Dios de justicia y paz para gentiles, y su relación con el viejo Israel, es cen-
los pueblos. El carácter de la misión de Dios tral. Otros temas misioneros aparecen también en
hacia su pueblo Israel en Egipto, la otorgación los Evangelios, Hechos, etc.
de la vida ante la muerte de la esciavitud, es Lo que determina silos textos tienen un ma-
Un criterio teológico y misional que anuncia tiz misionero no es la lectura literal o la inter-
quién es Dios, cuál es su misión y cómo debe pretación tradicional del pasaje, sino la pers-
vivir la iglesia frente a la injusticia. pectiva misional y de interpretación con que
d) El carácter escatológico de la misión. Hay se lee el texto. Por tanto, el pasaje de la mujer
ciertos textos en el Antiguo Testamento, y extranjera de Mateo 15: 21-28 y Marcos 7: 24-
sobre todo en la segunda parte de IsaIas, que 30 se transforma en un <paradigma misional>>
tienen Un carácter claramente misionero, es con distintas variantes: ci encuentro de JesOs
decir, que se refieren a la salvación de las (hombre) con una mujer (paradigma de gene-
naciones. Pero lo más acertado parece ser ro); el encuentro de Jesus con una persona que
interpretar estos textos en un sentido escato- no pertenece a la fe judIa (paradigma interreli-
lógico. gioso); el encuentro de JesOs con una extranje-
Estos textos apuntan hacia dIa en que la sal- ra (paradigma intercultural); y otros.
vación alcanzará a todos los rincones de la En esta sección nos interesa presentar tres
tierra. Dentro del contexto del Antiguo Tes- criterios misionales que surgen del Nuevo Tes-
tamento no hay lugar para el concepto de tamento y que sirven de ejes temáticos para re-
una <<evangelización>> del mundo que ha de flexionar sobre la misión de la iglesia y la Bi-
tener lugar por los esfuerzos de Israel; sino blia. Dc ninguna manera estos criterios agotan
que esa <<evangelización>>, en la cual ci pue- la contribución del Nuevo Testamento. Pero si
blo elegido ha de ser utilizado como instru- representan grandes retos misioneros para la
mento de Dios, es de carácter escatologico, iglesia de Jesucristo en el prOximo milenio.
de los tiltimos tiempos, y ocurre solo por la
decision soberana del AltIsimo. 1. Jesás y su ministerio
En el Antiguo Testamento, la misión o las Cualquier reflexión misional sobre ci Nue-
misiones no son una obligación que le es vo Testamento necesita tomar muy en serio el
impuesta a Israel a través de toda su historia ministerio de Jesus tal como se presenta en los
como parte de su tarea de pueblo escogido, Evangelios. La muerte y la resurrección de Je-
sino que son una de las seflales de los tiem- sOs estOn ligadas al ministerio del Maestro, a
pos escatologicos. sus relaciones con hombres, mujeres y nifios;
con las autoridades judlas y romanas; con los
C.El Nuevo Testamento pecadores de su tiempo; con las instituciones
y criterios teológicos para la misión de su sociedad; con personas de otras culturas;
El Nuevo Testamento proporciona abundantes con sus discIpulos; y con ci Padre.
criterios para la misiOn de la iglesia. Todos los 11- En la historia del cristianismo el evento de
bros del Nuevo Testamento ofrecen ejes temáti- Jesus frecuentemente ha quedado reducido a
cos de misiOn. Lo que es más, cuando reflexio- la cruz y los beneficios de salvación que vienen
namos sobre la materia nos percatamos de que de su muerte. Esta perspectiva necesita cnn-
prácticamente todo el Nuevo Testamento fue es- quecerse con la vida y ministerio del Maestro,
crito en un contexto misionero, y en buena me- ampliando para el pueblo cristiano no solo la
dida para responder a cuestiones y dilemas que salvación, sino ci significado de vivir esta sal-
ese contexto planteaba. AsI, por ejemplo, en las vaciOn en la historia.
25
Biblia, misión e historia de Las misiones
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HIsT0RIA GENERAL DE LAS MisloNEs
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nos hace pensar que fue él el principal de entre numbra de la historia. Hechos afirma que fue-
los primeros misioneros cristianos. Sin embar- ron los discIpulos dispersos por causa de la
go, conviene recordar que no hay garantIa algu- persecuciOn que surgió a la muerte de Este-
na de esto, y que no cabe duda alguna de que al ban quienes lievaron el Evangelio a Chipre y
mismo tiempo que el apóstol Pablo realizaba Antioqula (Hechos 11:19), aunque se afirma
sus viajes misioneros habla muchos otros ens- tambidn que fueron chipriotas y cirenaicos
tianos que iban lievando su nueva fe de uno a quienes llevaron el Evangelio a los gentiles
otro lugar. en la gran ciudad del Orontes (Hechos
En el libro de Hechos se nos habla acerca 11:20). En todo caso, la iglesia de Jerusalén
del origen de la iglesia cristiana en Jerusaldn. recibió noticias de la naciente comunidad de
Pero tambidn se hace referencia a la existencia Antioqufa y envió a Bernabd para que traba-
de cristianos en Galilea, Samaria y Damasco. jase en ella. Fue en Antioqufa que los cristia-
El propio libro de los Hechos afirma que Feli- nos por primera vez recibieron ese nombre, y
pe bautizó a un eunuco de EtiopIa, pero no sa- fue también la iglesia de Antioqula la que en-
bemos si el eunuco en cuestión regresó a su vió en sus viajes misioneros a Pablo y sus
pals de origen, ni tampoco si el propio Felipe acompañantes (y aquf es necesario seflalar
sirvió de instrumento para otras converSioneS que el llamamiento misionero a Pablo y Ben-
semejantes. nab no les llegó directamente, sino por el
Es acerca de la iglesia de Antioqula y de Espiritu a travds de la iglesia).
SUS labores misioneras que tenemos datos Los viajes del apóstol Pablo son de todos
más exactos. El origen de la iglesia antioque- conocidos, y no hay razón alguna para ofrecer
ña, al igual que el de otras de las principales aqul una resefla de ellos. Basta decir que el
iglesias cristianas, queda sumido en la pe- apóstol Pablo llevó el Evangelio a Chipre, a
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Biblia, misión e historia de las misiones
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trataba de encontrar puntos de contacto entre su
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HISTORIA GENERAL DE LAS MisloNEs
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judIo alejandrino Apolos, quien laboraba en ción le atribuye. De hecho, esta tradición es
Corinto. Además, antes de que Pablo liegase a tan antigua que aparece reflejada ya en el Nue-
Roma, ya existla una igiesia cristiana en esa vo Testamento, y la mayor parte de los antiguos
ciudad. Aun más, en el pequefio puerto italia- escritores eclesiásticos se hace eco de ella. Co-
no de Puteoli habIa ya cristianos que acudieron mo parte de la misma tradición, el martirio de
a recibir a Pablo cuando llegó de camino hacia Pedro en Roma debe darse por cierto. Esto no
Roma. Todo esto ha de recordamos que el quiere decir, sin embargo, que Pedro haya fun-
apóstol Pablo es solo uno -aunque quizá el dado la iglesia de Roma, pues la EpIstola de
más importante- de los muchos cristianos que Pablo a los Romanos parece implicar que hubo
durante el siglo I contribuyeron a hacer ilegar en Roma una iglesia cristiana aun antes de las
su fe a distintas regiones del mundo. visitas de Pedro y Pablo.
Por ditimo, debemos mencionar que exis- En todo caso, el hecho es que a fines del si-
ten leyendas segdn las cuales los apóstoles se gb I habla cristianos en todas las principales
dedicaron a predicar el Evangelio por distintas regiones del nordeste del Mediterráneo, y que
regiones de la tierra. La mayor parte de estas esta expansion se habIa llevado a cabo sin un
ieyendas resultan compietamente fantásticas, plan o estrategia misionera prefijada. Además
y aun en los casos en los cuales se podria supo- era claro que esa tarea misionera era transcul-
ner su veracidad no existen pruebas fidedignas tural, no identificando el Evangelio con un so-
que nos ileven a afirmarla. lo grupo étnico o una raza en particular. AsI, la
Solamente en el caso del apóstol Pedro po- iglesia cruzaba las fronteras culturales y echa-
demos decir que existen razones para creer en ba raIces en diversos contextos y de diversas
la veracidad de in visita a Roma que la tradi- formas.
29
capItulo 3
Las misiones
en la Edad Antigua
A. Desde el fin del perIodo neotestamenta- legendaria que resulta difIcil separar de la ver-
rio hasta la conversion de Constantino dad histórica.
Si bien es poco lo que sabemos acerca de la Por otra parte, en base a los documentos
expansion misionera del cristianismo durante existentes y a otros indicios arqueolOgicos, es
el perIodo apostólico, es mucho menos lo que posible descubrir dimensiones sociologicas
sabemos acerca de ella en el perlodo que sigue que nos ayudan a interpretar el crecimiento del
inmediatamente después. Esto era de esperarse, cristianismo durante esta época. AsI, por ejem-
pues ste es precisamente el perlodo de las plo, los datos existentes llevan a dos afirmacio-
grandes persecuciones, y a una iglesia perse- nes significativas: La primera es que la mayo-
guida se le hace dificil conservar y transmitir la na de los conversos al cristianismo venIa de los
historia de sus orIgenes. Además, buena parte trasfondos religiosos más aceptados en la so-
de la expansion del cristianismo durante este ciedad de la epoca (es decir, lo que recibe hoy
perlodo tuvo lugar, no solo a través de la obra el nombre genérico de <<paganismo>>), y no de
de misioneros dedicados exciusivamente a la sectas o movimientos marginados. La segunda
tarea de la evangelización, sino sobre todo a afirmaciOn es que muchas de las conversiories
través del testimonio de comerciantes, solda- tenfan lugar a través de los contactos familiares
dos y esciavos que viajaban por una u otra ra- e Intimos de los ya creyentes. Estas dos afirma-
zón. El cristianismo hacIa su entrada en una ciones deben mantenerse en tension dialéctica:
nueva provincia de manera humilde y oscura, y Por una parte, el cristianismo era atractivo pre-
cuando la iglesia en esa provincia lograba su- cisamente porque señalaba un camino, una fe y
ficiente madurez para producir literatura o al- un estilo de vida diferentes a los del comdn de
gdn otro monumento que pudiese quedar para la sociedad. Por otra, esa fe se comunicaba me-
la posteridad, ya sus orIgenes habIan sido olvi- diante los contactos directos de los cristianos
dados. Además, la investigacion de los orfge- con esa sociedad. Optimamente, entonces, el
nes del cristianismo se dificulta frecuentemen- mayor crecimiento se produce cuando la igle-
te debido al modo en que las generaciones pos- sia, al tiempo que muestra el contraste entre
teriores, siguiendo la tendencia de la dpoca a ella y el resto de la sociedad, mantiene sus con-
hacer de los apóstoles personajes ideales, bus- tactos humanos con esa sociedad circundante.
caban el medio de atribuir los orIgenes del ens- Además, para entender la expansion del
tianismo en su ciudad a algtmn varOn apostólico, cristianismo en el Imperio Romano es bueno
lo cual sirvió de genesis a mds de una tradición recordar algunas de las caracterIsticas de ese
30
HI5T0RIA GENERAL DE LAS MisloNEs
Imperio, y de la vida en él. En este sentido, lo quienes tuvieran cierto conocimiento (gnosis)
primero que debemos recordar es que Ia civili- secreto. Y, como lazo de uniOn de todo esto, se
zación grecorromana era esencialmente urba- fomentaba y en algunas circunstancias se re-
na. Naturalmente, la vida rural continuaba, queria el culto al Emperador, corno señal de
pues sin los productos del campo es imposible lealtad a tan diverso imperio.
subsistir. Pero tanto los griegos como los roma-
nos pensaban que la más importante invención 1. Expansion geografica del cristianisino
humana era la ciudad -de hecho, la palabra Aunque las razones arriba expuestas hacen
<<civilización>> originalmente querIa decir <<cm- imposible una narración detallada de los nom-
dadificación>>. Tanto Alejandro en sus conquis- bres y métodos de los misioneros que llevaron
tas como más tarde los romanos en las suyas, el cristianismo a cada region, si es posible lo-
se propusieron <<ciudadificar>> el mundo. Por grar una idea aproximada de la extension geo-
ello la mayorfa de los recursos económicos y gráfica que logrO el cristianismo en los aflos
humanos se concentraba en las ciudades. Los que van del final de la era apostólica a la con-
caminos, más que modos de abrir el interior, version de Constantino. Esta extension es tan
eran vIas de comunicación entre ciudades. Por sorprendente que resulta doblemente desafor-
ello no ha de sorprendernos el que el cristianis- tunado carecer de datos exactos acerca de có-
mo, forjado en ese ambiente, fuese por largo mo la nueva fe fue liegando a cada region del
tiempo una religion mayormente urbana. Imperio.
Este imperio que se veIa a sí mismo como Al terminar el perIodo neotestamentario, la
un conglomerado de ciudades subsistIa en ba- iglesia cristiana se extendla allende Palestina y
se al comercio y la interrelación entre esas ciu- Siria hacia el Asia Menor y hasta Grecia y Ro-
dades. Fue por eso que Roma construyó sus ma. Más allá de la capital imperial no llegan
famosos caminos. Por ellos, y sobre todo por nuestros datos pues, aunque hay noticias de un
vIas marItimas y fluviales, transitaban merca- viaje de Pablo a Espafla, nada se sabe acerca de
deres, artesanos en busca de empleo, estudian- sus resultados, y es posible que tal viaje nunca
tes en busca de sabidurfa, peregrinos inspirados se haya realizado. Sin embargo, a fines del si-
por su religion, y muchas otras personas. Fue gb 11 -y sobre todo a mediados del III- apa-
mayormente a través de ese tráfico que el cris- recen en la historia repetidas pruebas de que la
tianismo se extendió de un lugar a otro. nueva fe se habIa extendido por todo el Medi-
En lo religioso, el Imperio Romano se fun- terráneo, y que lograba adeptos sobre todo en
damentaba en una amalgama de las religiones las grandes ciudades, donde pronto surgieron
de los pueblos conquistados. Siempre que fue- comunidades cristianas de importancia.
ra posible, se establecIan vInculos y supuestas a) El Egipto. En el Egipto, y sobre todo en la
identidades entre los diversos dioses. AsI, por ciudad de AlejandrIa, pronto apareció una
ejemplo, se llegO a decir que el Neptuno de los iglesia floreciente que algunos dicen fue
romanos era el Poseidon de los griegos, y que fundada por San Marcos, aunque este dato
la Artemisa griega no era otra que la famosa y carece de confirmación histórica. En todo
antiquIsima diosa de los efesios, y también la caso, a mediados del siglo 11 la comunidad
Diana de los romanos. A esto se afladIan anti- cristiana de esa ciudad contaba ya con pen-
sadores de la importancia de Panteno y, p0-
guos <<misterios>> -religiones cuyos adeptos
celebraban ritos secretos mediante los cuales se co después, de Clemente y OrIgenes. Ade-
unIan a sus dioses-además de toda una pléya- más -y esto es señal de la pujanza del cris-
de de doctrinas que reciben el nombre comün tianismo- fue en AlejandrIa que el gnosti-
de <<gnosticismo>>, que ofrecIan salvación a cismo hizo algunos de sus más serios es-
31
Las misiones en la Edad Antigua
fuerzos por asimilar en su seno al cristia- que fue del Oriente -y quizá de Frigia. Al
nismo. parecer, fue más tarde que las circunstan-
b) El forte de Africa. En la parte occidental cias politicas y culturales llevaron a la igle-
del forte de Africa -to que los romanos sia africana a establecer relaciones más es-
llamaban Africa- y sobre todo en la ciudad trechas con Roma, y a olvidar sus antiguos
de Cartago, aparece tambin el cristianismo lazos con el mundo griego.
a fines del siglo II. Cuando este cristianismo c) España. Los orIgenes del cristianismo en
cartaginés asoma a la historia, tiene ya tal Espafla, asI como la historia de la iglesia es-
madurez que resulta necesario suponer que pañola en los primeros siglos, nos son total-
habfa sido fundado varias décadas antes. Es mente desconocidos. Aparte de la posibili-
en Cartago, y no en Roma, que surge la pn- dad de que Pablo haya visitado la Peninsu-
mera literatura cristiana en lengua latina - la Ibérica, existen leyendas que afirman que
con Tertuliano- y esa region fue también, el apóstol Santiago laboró en tierras de Es-
con Tertuliano y Cipriano, el centro del pen- pafia, y que Pedro enviO siete obispos a la
samiento teologico occidental durante todo misma region. El hecho es que la iglesia es-
el perfodo que nos ocupa -y aflos despues pañola, si bien parece haber sido fundada
con San AgustIn. por lo menos a fines del siglo II, no produ-
j,Cómo llego el cristianismo al norte de jo durante todo este perIodo monumento al-
Africa? ,Quiénes 10 ilevaron? LDe dónde guno -ya sea literario, artIsticoo de otra in-
venIan? No lo sabemos. Tradicionalmente dole- que nos permita afirmar que haya
se ha pensado que fue de Roma que el cris- existido en la Peninsula Ibérica, y antes de la
tianismo fue llevado a Cartago. Sin embar- segunda mitad del siglo III. un cristianismo
go, un estudio más detenido parece indicar puj ante. Sin embargo, el sinodo de Elvira,
32
HISTORIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
airededor del aho 300, muestra que el cris- unos cien obispos. En Grecia el progreso del
tianismo se habla extendido tan al norte co- cnstianismo parece haber sido más lento, yb
mo Asturias y tan al este como Zaragoza, mismo puede decirse de la pobiación semiti-
aunque su fuerza mayor parece haberse con- ca de Siria y Palestina. En Asia Menor, sin
centrado en lo que hoy es AndalucIa. embargo, ci progreso fue sorprendente, y
d) Las Galias. Desde la segunda mitad del si- pronto hubo, no solo comunidades en sitios
gb II -y quizá desde antes- el cristianis- bastante apartados, sino tambidn gran nOme-
mo penetró en las Galias. En el aho 177 se ro de miembros en esas comunidades. Testi-
desató una persecución en las ciudades de monio de ello es la correspondencia en la que
Lyon y Vienne, lo cual prueba que ya en esa Plinio le informa a Trajano que en Bitinia -
fecha existIan allI comunidades cristianas. adonde nunca llegó apóstoi abguno- los
Poco despuds, el obispo Ireneo de Lyon, templos paganos estaban <<casi desiertos>>.
quizá el más grande teólogo de este perIodo, Afortunadamente, sabemos algo más acerca
es testimonio de la fuerza del cristianismo de la labor misionera en Asia Menor debido
en esta region, no solo numérica, sino tam- a los datos y obras que se conservan de Gre-
bién intelectualmente. Parece que el cristia- gorio de Neocesarea.
nismo llego a esa region traIdo por inmi-
grantes cristianos procedentes del Asia Me- 2. Un gran misionero de este perIodo:
nor o al menos del Oriente, y que durante a!- Gregorio de Neocesarea
gdn tiempo su fuerza mayor estuvo entre los Si bien es poco lo que sabemos acerca de la
habitantes de lengua griega. Sin embargo, el multitud de creyentes que deben haber contri-
propio Ireneo da a entender que los cristia- buido a esa sorprendente expansion del cristia-
nos de Lyon -o al menos él mismo- se nismo, hay algunos cuyas labores nos son más
ocupaban tambidn de evangelizar a los habi- conocidas. Tales misioneros nos ofrecen atisbos
tantes de origen celta. En uno de sus princi- de la teologla y métodos misioneros en ese tiem-
pales libros, escrito en griego, se excusa de po. Uno de elbos fue Gregorio de Neocesarea,
no escribir esa lengua con toda elegancia, más conocido como Gregorio ci Taumaturgo.
pues pasa buena parte de su tiempo evange- Gregorio era natural del Ponto, y sus padres
lizando a los celtas. Cuando en ci aho 314 se eran paganos. Su verdadero nombre era Teodo-
reuniO un sInodo en Arlés, al sur de Francia, ro, y vino a ilamarse Gregorio solo después de
acudieron a l obispos, no solo de toda la su bautismo. Contaba catorce aflos al morir su
Galia, sino hasta de las Islas Británicas. padre, aunque esto no le impidió estudiar en las
Luego, antes de comenzar ci siglo IV ya ci mej ores escuelas de la dpoca, pues su familia
cristianismo habIa rodeado la cuenca del era acomodada. Por diversas razones Gregorio
Mediterráneo, y se encontraba representado y su hermano Atenodoro visitaron la ciudad de
en todas las regiones principales del Imperio. Cesarea en Palestina. AllI conocieron a OrIge-
e) Los territorios en que habIan laborado los nes, quien, segOn cuenta un biógrafo de Grego-
apóstoles. Además, en las zonas a que los rio, les cautivO de tab modo que quedaron <<co-
apóstoles y sus contemporaneos habIan ya mo inmóviles>> a sus pies. Entonces el maestro
llevado ci cristianismo, la iglesia continuó su alejandrino les enseñó, además de lOgica, fIsi-
labor misionera, dingiendose ahora sobre to- ca, geometrIa y astronomIa, la .xverdadera fib-
do a ciudades y pueblos de menor importan- sofIa>> del cristianismo. En esta historia, es im-
cia adonde el cristianismo no parece haber portante recordar que tanto OrIgenes como su
ilegado antes. AsI, por ejemplo, a mediados maestro Clemente de Aiejandria se dedicaron a
del siglo III parece haber habido en Italia presentar el Evangelio en tdrminos de las elites
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Las misiones en la Edad Antigua
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HISTORIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
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Las misiones en la Edad Antigua
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HIsT0RIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
Viendo a sus dioses aserrados por piña y al robo y yacen con varones,
sus artifices, y desbastados, y acor- con todas sus otras hazaflas; que si
tados, y cortados, y quemados, y fi- sus dioses han hecho bien estas co-
gurados, y por ellos transformados sas, tal como lo escriben, son per-
en toda figura, y ora que envejecen versas las leyes de los griegos, por-
consumidos por el largo tiempo, que no han sido establecidas segün
ora que se funden o se hacen peda- la voluntad de los dioses. Y en es-
zos, cómo no comprendieron que to, todo el mundo ha errado. (Apol.
no son dioses? Y aquellos que no 13.7; trad. D. Ruiz Bueno, B.A.C.,
han podido proveer a la salvación 96:144)
de si mismos, ,cómo pueden tener c) El encuentro con la filosofIa pagana. En
cuidado de los hombres? (Apol. cuanto a su posicion frente a la filosofIa pa-
13.1; trad. D. Ruiz Bueno, B.A.C., gana, los cristianos de este perIodo -como
96:143) los de todas las épocas- no estaban de
Y, señalando la inmoralidad de los dioses acuerdo entre si. Todos vefan en el cristia-
griegos, dice: nismo una verdad superior, revelada por
Mas he aqul que, habiendo los grie- Dios, y a la que ningün filósofo, por muy
gos establecido leyes, no han caIdo acertado que fuese su pensamiento, hubiera
en la cuenta de que con sus ]eyes podido llegar. El punto de desacuerdo esta-
condenan a sus dioses. Si, en efec- ba en el valor que debIa atribuirse a la fib-
to, sus leyes son justas, son perver- sofia, pues unos veIan en ella el ayo que
sos sus dioses, los cuales han trans- conducIa a Cristo (Justino, Clemente, Orige-
gredido las leyes, porque se matan nes) y otros veIan solo una oposición radical
unos a otros, y practican la magia, y entre el pensamiento filosófico y la verdad
cometen adulterio, y se dan a la ra- cristiana (Taciano, Hermias, Tertuliano).
El Areópago.
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- - 4;
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Las misiones en la Edad Antigua
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HIsT0RIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
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La a iguedad sentla gran aprecio per as letras. Fachada de a Biblioteca de Ce] o a Pdrga o
e) Las escuelas cristianas. Las más de las ye- bros la responsabilidad de predicar y exten-
ces tales encuentros no se dejaban simple- der el conocimiento del Evangelio -de los
mente a! azar, sino que los cristianos funda- cuales Gregorio de Neocesarea es un mag-
ban escuelas que tenlan funciones catequé- nIfico ejemplo. Además, la literatura que se
ticas, pero a las que podlan dirigirse los pa- producla en estas escuelas servfa de fuente
ganos cultos que querIan saber más acerca de conocimientos a cristianos menos ilus-
del cristianismo, o que simplemente querl- trados que deblan enfrentarse con paganos
an atacarlo disputando con sus más destaca- que de otro modo hubieran podido vencer-
dos portavoces. Como ejemplo de este tipo les en la controversia.
de escuela, que segula el molde de la anti- f) El testimonio de la base de la iglesia. Este
gua Academia de Atenas, tenemos la que tipo de testimonio directo y personal, en
fundO Justino en Roma y que luego dirigió que la polmica se mezclaba con el fervien-
su discIpulo Taciano, y la famosIsima de te deseo de ver la conversion del interlocu-
AlejandrIa, relacionada con los nombres de tor, no siempre tenIa lugar en el five! eleva-
Panteno, Clemente, Orfgenes, Heraclas y do de los filósofos y los retOricos, sino que
otros, y a la que acudla a veces lo más Se- con mayor frecuencia tenIa lugar entre es-
lecto de la nobleza y la intelectualidad pa- clavos, artesanos y mujeres (en una cultura
ganas. Tales escuelas jugaron un papel im- en la que se pensaba que estas Oltimas no
portantIsimo en la expansion del cristianis- eran capaces de pensamientos profundos).
mo, pues muchos paganos que acudIan a Prueba de ello es el siguiente texto de Ce!-
ellas se convertIan, además de que pronto se so, quien veIa en la pobreza e ignorancia de
volvieron centros de donde salIan cristia- los cristianos un argumento contra la vera-
nos preparados para ilevar sobre sus horn- cidad de su fe:
39
Las misiones en la Edad Antigua
j,Qud hacen los feriantes, los Sal- arreglan para ganar adeptos. No
timbanquis? Se dingen a los horn- exagero y en mis acusaciones no
bres sensatos para espetarles sus salgo un ápice de la verdad. (Cita-
soflamas? No. Pero si divisan en do por OrIgenes, Contra Celso,
alguna parte a un grupo de niños, 3.55; G. Bardy, La conversion al
de cargadores, de gentes groseras, cristianismo en los primeros si-
allI es donde plantan sus tablados, glos, Pamplona, 1961, pp. 307-8)
exponen su industria y se hacen ad- Es una verdadera desventura el que, dado su
mirar. Lo mismo ocurre en el seno propio carácter, el trabajo de tales cristia-
de las farnilias. Se yen pelaires, za- nos no nos sea mejor conocido, pues sin du-
pateros, bataneros, gentes de extre- da descubrirIamos que su contribución a la
ma ignorancia y desprovistas de to- expansion del cristianismo fue mucho ma-
da educación que, en presencia de yor que lo que los textos parecen indicar, y
los maestros, se guardan muy bien hasta mayor que la de las escuelas y de los
de abrir la boca; pero si pillan pri- cristianos cultos.
vadamente a los hijos de la casa o En este contexto, es importante destacar tres
a mujeres que no tienen más inteli- elementos que hasta fecha relativamente re-
gencia que ellos mismos, se ponen ciente no han recibido la atención de los his-
a decirles maravillas. Solo a ellos toriadores. El primero de ellos es el papel de
hay que creer; los padres, los pre- las mujeres en la expansion del cristianismo
ceptores son unos locos que igno- antiguo. No cabe duda de que en la iglesia
ran el verdadero bien y son incapa- de los pnimeros siglos las mujeres eran mu-
ces de enseflar. Solo ellos saben cho más numerosas que los varones. Esto
cómo hay que vivir; a los niños les parece haberse debido en parte a las ense-
ira bien si les siguen, y por su me- ñanzas de la iglesia respecto al sexo. Aun-
dio la felicidad visitará a toda la que a veces indirectamente, tales enseflan-
familia. Si mientras están peroran- zas fomentaban hacia la mujer un respeto
do, sobreviene alguna persona se- que contrastaba con las prácticas de la socie-
na, uno de los preceptores o el pa- dad circundante. En consecuencia, eran mu-
dre rnismo, los mds tImidos se ca- cho más frecuentes los casos de mujeres
llan; los descarados no dejan de ex- convertidas al cristianismo que luego traIan
hortar a los niños a que sacudan el a sus esposos y al resto de su familia a la
yugo, insinuándoles calladamente iglesia, que los casos en que el Evangelio
que no quieren enseflarles nada an- penetraba en una familia a travds de los Va-
te el padre de ellos o ante el pre- rones -y rnucho menos del padre de farni-
ceptor, para no exponerse a la bru- ha. Las redes de intercomunicación de las
talidad de esas gentes corrompidas mujeres en sus faenas diarias fueron enton-
que los harlan castigar. Los que tie- ces uno de los pnincipales canales por los
nen interds en saber la verdad, que se divulgo la palabra del Evangelio.
abandonen a esos preceptores y a El segundo factor digno de mención es el
sus padres y vengan con las muje- impacto de las epidemias sobre la pobla-
res y la chiquillerIa al gineceo o al ciOn, y el modo en que la iglesia respondió
puesto del zapatero o a la tienda a ellas. Hacia mediados del siglo II, comen-
del batanero, para aprender aIlI ha zO una serie de epidemias que repetidamen-
vida perfecta. Ved ahI cómo se las to diezmaron la población. Esto contribuyo
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HISTORIA GENERAL DE LAS MIsloNEs
al crecimiento del cristianismo al menos de milagroso como si esto fuera una de las
dos modos. En primer lugar, porque los principales garantIas de la veracidad del
cristianos cuidaban mejor unos de otros, los cristianismo.
Indices de sobrevivencia entre ellos eran h) El martirio. De todos los milagros, ninguno
mayores que entre el resto de la población. tan notable y tan fructifero en conversiones
En segundo lugar, en esos tiempos difIciles como el del martirio, tan frecuente durante
se vio un marcado contraste entre el grueso los siglos segundo y tercero. Niños y muje-
de la población, que hula de los enfermos y res, ancianos cargados de años, y esclavos
solo buscaba su propia salud, y los cristia- acostumbrados a doblegarse ante la volun-
nos, que se dedicaban a cuidar no solo a tad de sus amos, ofrecian gozosos la vida
sus enfermos, sino a los de toda la comuni- enfrentándose a las autoridades y regociján-
dad. Por ello, abundan los testimonios de dose en la oportunidad de proclamar con sus
personas cuya primera atracción al cristia- actos su fe. Para un mundo en busca de rea-
nismo se debió a ver la obra de caridad de lidades que diesen sentido a la vida y la
los creyentes, aun a riesgo de sus propias muerte, tales actos eran una prueba de
vidas. heroIsmo -o de locura- que no podia ex-
El tercer factor digno de mención es el cre- plicarse fácilmente. Para aquellos antiguos
cimiento demografico de los cristianos, de- mártires, lo que podrla parecer locura para el
bido a su oposición al aborto y el infantici- extraflo no era sino una decision muy racio-
dio -prácticas comunes y perfectamente nat, de sacrificar la vida y unos instantes de
aceptables dentro de la sociedad pagana. dolor a cambio de la vida inmortal y de una
Aunque las actitudes de los primeros cristia- eternidad de gozo y de paz. Tanto era asI,
nos hacia otros mtodos de control de la na- que la iglesia tuvo que prohibir la práctica
talidad no son del todo claras, la sola prohi- de los <<espontáneos>> -personas que se
bición del aborto y el infanticidio -y su in- ofrecian voluntariamente para el martirio-
sistencia en limitar las relaciones sexuales a e insistir en que el martirio era una corona
las que tenlan lugar dentro del matrimo- para la cual era necesaria la elección divina.
nio- llevó a un Indice de natalidad positi- Muchos son los textos antiguos que dan fe
vo aun en medio de una sociedad en que el del sacudimiento de una conciencia pagana
Indice era negativo -es decir, nacIan menos ante los sufrimientos de algiin mártir cristia-
personas que las que morlan. no, y es por ello que Tertuliano podia decir
g) Los milagros. Entre estas personas -y tam- que <<mientras máS se nos destruye más cre-
bién entre muchas de las personas más cul- cemos; la sangre de los cristianos es semi-
tas del Imperio- los milagros eran un fac- lla>>.
tor importante. Si bien no sabemos cuántos i) El culto. Otro factor que es necesario men-
de los hechos prodigiosos que se cuentan de cionar, aunque por razón de su escasa im-
Gregorio de Neocesarea son acontecimien- portancia como instrumento directo para la
tos históricos, resulta claro que todos cuan- expansion del cristianismo, es el culto divi-
tos se dedicaron a narrar su vida veIan en no. Los cultos orientales que invadian el Im-
sus milagros uno de los instrumentos más perio a principios de nuestra era -el de Atis
poderosos para lograr la conversion de los y Cibele, el de Isis y Osiris, el de Dionisio,
paganos. Durante los dltimos años de este etc.- ofrecian una liturgia fascinante y con-
periodo aparecen en la literatura cristiana movedora. Frente a esto, la liturgia cristiana
numerosos evangelios y libros de hechos de -a la que en todo caso no se permitia asis-
uno u otro apóstol, y casi todos subrayan lo tir a los no bautizados- era en extremo sell-
41
Las misiones en la Edad Antigua
cilia. Resulta ciaro que, a diferencia de lo ban la comunidad para predicarie unos p0-
que ha ilegado a ser costumbre en muchas cos dIas, sino el de quienes, como Gregorio
iglesias, en la igiesia primitiva el culto no te- de Neocesarea, vivian junto a su pueblo y se
nIa ei más mInimo propósito de servir de sentIan responsables, no solo de su peque-
ocasiOn para la conversion de los no cristia- ña grey, sino también de toda la comunidad
nos. El trabajo que boy liamamos <<evange- no cristiana.
lIstico>> se realizaba fuera del culto, en los k) Factores sociológicos. Repetidamente en
sitios donde la vida comün proveIa contac- las páginas anteriores hemos mencionado
to a los cristianos con los no creyentes. varios de los factores sociológicos y demo-
j) Los misioneros. Algo semejante sucede graficos que contribuyeron a la expansion
con la práctica de enviar misioneros, aun- del cristianismo: las redes de interacción
que en este caso si es cierto que la iglesia en la sociedad urbana, el papel de la mujer,
de los primeros sigios tenIa por costumbre las epidemias y su impacto demográfico,
enviar misioneros a otros sitios. Ya hemos el sistema de apoyo de los creyentes entre
mencionado el caso de la iglesia de Antio- si, la práctica de la caridad hacia los de
quIa, que envió a Pablo y sus acompafian- fuera del grupo, etc. AquI los menciona-
tes. En el perIodo que estamos estudiando, mos juntos, porque son factores que fre-
merece la pena citarse el caso de Panteno, cuentemente se olvidan, como si no hu-
quien hizo un viaje hacia el Oriente (has- biesen marcado entonces, y no continuaran
ta Arabia, o hasta la India?) como <<heraldo impactando hasta hoy, la expansion del
del Evangelio de Cristo>>. Además obras cristianismo.
tales como la Didajé y el Contra Celso de 1) Resumen: La actitud de los cristianos hacia
OrIgenes dan a entender que habIa un buen el paganismo. Podemos decir que el cristia-
nümero de personas dedicadas exclusiva o nismo avanzó a pasos agigantados por la
casi exciusivamente a ir de lugar en lugar cuenca del Mediterráneo gracias a los fac-
predicando el Evangelio, como antes lo ha- tores y métodos misioneros que acabamos
bIa hecho Pablo. Sin embargo, al parecer de discutir. Pero todo esto de nada hubiera
una buena parte del trabajo de estas perso- servido de no ser por el modo en que la
nas consistIa en visitar sitios en que ya igiesia y los cristianos combinaban una fle-
existIan iglesias, y ayudarlas y fortalecerlas xibilidad sorprendente con una firme inte-
en su fe. gridad y lealtad a la tradición en formación.
La mayor parte de la expansion del cristia- Si ci cristianismo se hubiese mostrado radi-
nismo en los siglos que anteceden a Cons- calmente inflexible, como si solo la iglesia
tantino tuvo lugar, no gracias a la obra de y la tradiciOn veterotestamentaria poseye-
personas dedicadas exciusivamente a esa sen la verdad, y como si toda verdad paga-
tarea, sino gracias al testimonio constante na tuviese que ser faisa, se le hubiera hecho
de cientos y miles de comerciantes, de es- imposible a un pagano helenista hacerse
ciavos y de cristianos condenados al exilio cristiano sin al mismo tiempo abandonar
que iban dando testimonio de Jesucristo do- todo rasgo de heleniSmo y aprender a pen-
quiera la vida les ilevaba, y que iban crean- sar como un hebreo. Fue SU propia flexibi-
do asi nuevas comunidades en sitios donde lidad, nacida del deseo de alcanzar a otros
los misioneros <<profesionales> no habIan para su fe, lo que hizo de la iglesia antigua
liegado aün. Y, una vez sembrada la semi- una fuerza arrolladora. Pero, por otra parte,
ila, el trabajo más digno de notarse no fue tal flexibiiidad tenIa sus lImites. Si bien era
tampoco el de los predicadores que visita- aceptabie ver cierta medida de verdad en la
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HIsT0RIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
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Las misiones en la Edad Antigua
mom
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muy especialmente de lo que sucedIa en aque- toria sobre sus enemigos. A cambio de esto,
ha poca cuando alguien se convertfa. En po- Constantino debla honrarle y contribuir al cre-
ca de Constantino, era la iglesia, o al menos al- cimiento de su iglesia.
gun cristiano estrechamente relacionado con la Cuáles fueron las consecuencias de todo
iglesia, quien servIa de agente para la conver- esto para la expansion del cristianismo? No ca-
sión de un pagano; luego ci converso se ponla be duda de que el prestigio que le prestaba la
a la disposición de la iglesia, a fin de ser ins- persona del Emperador debe haber despertado
truido en las cosas de la fe; por ültimo, median- interds hacia el cristianismo. Los lugares de
te el bautismo se unfa a la iglesia, que debla di- adoración se hacIan cada vez más pequeflos
rigir su vida cristiana. El caso de Constantino ante el influjo de los conversos. Al principio, la
es distinto. Segiin Eusebio, dl mismo decIa que iglesia mantuvo su antigua costumbre de pre-
su conversion se debIa, no tanto a una conver- parar a los conversos para el bautismo a travds
sación 0 poldmica con algOn cristiano, como a de un largo perIodo de prueba y de instrucción
una visiOn directa que Dios le habla proporcio- catequdtica. Con el coffer de los años tal perIo-
nado. SegOn esa visiOn, Constantino tenIa una do se hizo cada vez más breve, y la instrucción
misión dada por el Dios de la iglesia y que por más superficial, hasta llegar a las conversiones
ello se relacionaba con la misión de dsta Olti- en masa de principios de la Edad Media. Como
ma; pero dada directamente, por lo que no de- ha de suponerse, esto resultó en menoscabo de
pendIa de, ni se sometIa a, la organización de la la dedicación personal de los cristianos, sobre
iglesia. Por otra parte, Constantino veIa al Cris- todo en lo que a la vida dtica se refiere, pues en
to a quien ahora servIa, no tanto como un Sal- el campo doctrinal la iglesia desarro]16 medics
vador del poder del pecado y la muerte, sino para mantener la adhesion casi absoluta de sus
más bien como el Vencedor que le darIa la vic- fieles.
44
HIsT0RIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
Esto no quiere decir que el resultado de la bIa el Emperador utilizar su poder en pro de los
conversion de Constantino haya sido puramen- principios cristianos? COmo se entendIa la
te negativo. Por el contrario, el siglo que sigue responsabilidad del Emperador para con sus
a tal acontecimiento es el Siglo de Oro de la sObditos paganos? DebIa la iglesia utilizar su
historia de la iglesia. Personajes tales como influencia sobre el Emperador para lograr un
Atanasio, Basilio el Grande, Ambrosio, Jeróni- orden social más justo? ,PodIan los cristianos
mo y Agustin son testimonio de la pujanza ii- aceptar privilegios de parte del estado? j,Im-
teraria e intelectual de la iglesia liberada del plicarla una traición a los principios evangdli-
azote de las persecuciones. Las grandes basuli- cos el dejar de ser la iglesia perseguida para
cas y obras de arte son ejemplo del modo en convertirse en la iglesia apoyada en el poder
que los cristianos tomaron lo mejor de la cultu- imperial? Todos dstos son problemas a que la
ra conquistada y lo pusieron al servicio de su iglesia de los siglos cuarto y siguientes tuvo
Señor. La organización eclesiástica que logró que enfrentarse. Son también problemas harto
desarrollarse gracias a la protección imperial difIciles, pues en cada caso existen fuertes ar-
resultó ser el tinico poder capaz de rescatar la gumentos en pro de soluciones contradictorias.
cultura grecorromana tras las invasiones de los Si el Emperador utilizaba su poder a favor de
bárbaros. Por dltimo, el siglo que siguió a la sus principios cristianos, se corrIa el peligro de
conversion de Constantino vio misioneros tales que la iglesia Ilegase a fundamentar su esperan-
como Ulfilas y MartIn de Tours. za, no en Dios, sino en su poder politico y eco-
La conversion del Emperador planteaba pro- nómico. Si, por el contrario, el Emperador Se-
blemas que hasta entonces habIan sido desco- paraba su fe de su oficio de gobierno, esto im-
nocidos para la iglesia. ,Debia el Emperador plicaba que su fe quedaba reducida a un aspec-
estar supeditado a la iglesia, o viceversa? ,De- to de su vida, que era una fe parcial que podia
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Las misiones en la Edad Antigua
ser restringida a alguna fase de la vida humana, organizar el viejo culto pagano siguiendo el
excluyéndola de las demás. Luego, ni una ni ejemplo de la iglesia. Todos los privilegios que
otra solución era adecuada, y se hacIa difIcil Constantino y sus hijos habIan concedido a los
determinar qué deblan hacer la iglesia y el es- cristianos, y especialmente al clero, fueron re-
tado ante la conversion del Emperador. Empe- vocados. Se prohibió a los cristianos enseñar
ro unacosa resultaba clara e indudable: la con- literatura y filosofIa clásicas. Aunque no se or-
version del Emperador, como la conversion de denó persecución alguna, en varios lugares se
todo ser humano, debIa ser recibida con rego- cometieron atrocidades contra los cristianos.
cijo por los cristianos, a pesar de los problemas Por otra parte, Juliano reorganizó el paganismo
-a menudo insospechados- que tal conver- y le dio un nuevo impulso. El mismo tomó de
siOn podrIa plantear. nuevo el viejo tItulo imperial de Pontifex maxi-
mus, y colocó en cada provincia un Sumo Sa-
2. Los hjos de Constantino y la reacción cerdote bajo cuya dirección estaba todo el cul-
pagana to pagano. Bajo dl, todos los demás sacerdotes
Si bien Constantino nunca se volvió intole- deblan ilevar vidas intachables y, además de ce-
rante para con el paganismo, sus tres hijos y su- lebrar el culto, deblan dedicarse a enseñar al
cesores -Constantino II, Constancio y Cons- pueblo el amor entre los seres humanos. Por ül-
tante- siguieron frente a los viejos cultos una timo, el propio Juliano se dedicó a escribir con-
polItica cada vez más rIgida. En el aflo 341 se tra los cristianos, a quienes liamaba <<galileos>>.
prohibieron los sacrificios, y en el 354 Cons- El proyecto de Juliano estaba destinado al
tancio ordenó que todos los templos paganos fracaso. Si bien era cierto que el cristianismo
fuesen clausurados. Aunque estas leyes no se no habIa arraigado adn en las conciencias del
cumplieron a cabalidad en todo el Imperio, si pueblo, no era menos cierto que el viejo paga-
sirvieron para estimular acciones violentas nismo estaba en franca decadencia. En Antio-
contra los paganos por parte de algunos funcio- qula el populacho se burlaba no solo de la rebi-
narios. Además, bajo el amparo de tales leyes gión de Juliano, sino tambidn de su moral es-
algunos cnstianos se dedicaron a destruir tern- toica. El ideal religioso de la dpoca no era ya el
pbs paganos y construir iglesias sobre sus rui- hombre templado de Marco Aurelio y los estoi-
nas. Ante tab situaciOn, era de esperarse una cos, sino el asceta sufrido del monaquismo
reacción pagana. cristiano. En el campo de la liturgia el culto
Esa reacción se hizo sentir con el adveni- cristiano tenIa más atracción que los sacrifi-
miento al trono del emperador Juliano. Aunque cios que en todas partes se celebraban por or-
la historia, llevada por el excesivo celo de algu- den de Juliano. Por Oltimo, la iglesia produjo
nos cristianos, le conoce como <<el Apóstata>>, pensadores, escritores y predicadores muy su-
lo cierto es que Juliano nunca parece haber si- periores a los que Juliano pudo reclutar de en-
do cristiano de convicción. El Onico cristianis- tre los paganos.
mo que Juliano conoció fue el intelectualismo Cuando en el aflo 363 Juliano cayó herido
arriano, cargado de silogismos y manchado de muerte por una lanza persa, lo inevitable si-
además por el hecho de que su principal defen- guió su curso: a la breve reacción pagana siguió
sor, Constancio, habIa hecho asesinar a cuantos un perfodo de ininterrumpido avance por parte
Juliano pudo haber amado. de los cristianos frente al paganismo.
Llevado por la convicción de que habla sido
elegido por los dioses para restaurar su culto, 3. El Imperio cristiano
Juliano promulgo toda una serie de leyes en Joviano y Valentiniano I, sucesores de Ju-
contra del cristianismo, y se dedicó además a liano, volvieron a la vieja polItica de apoyar a
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la iglesia, aunque tolerando siempre la exis- los paganos a una lucha desigual cuyo resulta-
tencia y practica de los cultos paganos. Su su- do fue la destrucción del antiqulsimo y monu-
cesor Graciano, debido en parte a la influen- mental templo de Serapis. En otras regiones
cia de Ambrosio de Milan, le dio nuevo Impe- del Imperio, acontecimientos semejantes priva-
tu a la polItica de colocar al paganismo bajo ron al paganismo de algunos de sus más vene-
condiciones cada vez más difIciles. Pero fue rados templos.
con el advenimiento de Teodosio al trono im-
perial que' el paganismo clásico recibió un 4. Elfin de la EdadAntigua
golpe de muerte. DespuOs de la muerte de Teodosio en el año
Teodosio se creIa liamado a defender la or- 395, es necesario distinguir entre el Occidente
todoxia frente a las herejIas, y el cristianismo y el Onente en lo que a! avance del cristianis-
frente al paganismo. Por ello, en el año 391 mo y la supresión del paganismo se refiere. En
prohibió los sacrificios a los dioses paganos, y el Oriente, el Impeno Romano subsistiO mil
ordenó que los antiguos templos fuesen clausu- afios más, y en él se estableció una union estre-
rados o dedicados a usos seculares. Al aflo si- cha entre iglesia y estado en la que aqulla que-
guiente, otro edicto prohibió no ya el culto p0- daba sometida a éste. En lo que aquI nos con-
blico, sino hasta la práctica privada de la reli- cierne, podemos decir que en el Oriente el pa-
gion pagana. Pero lo que más daño hizo al pa- ganismo siguió decayendo por razones de su
ganismo fue la tendencia de las autoridades a propia debilidad interna combinadas con la
ver con complacencia, o al menos con indife- presión del estado y la iglesia. El tiltimo re-
rencia, los excesos que los cristianos cometIan ducto importante del viejo paganismo fue la
contra los paganos. En AlejandrIa el obispo Academia de Atenas, clausurada en el año 529
Teófilo, conocido por su falta de escrOpulos y por orden de Justiniano. A partir de esa fecha,
de caridad para con sus adversarios, provocó a el antiguo culto no parece haber subsistido si-
47
Las misiones en la Edad Antigua
48
HISTORIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
b) Martin de Tours. De MartIn de Tours se con- iglesias, a fin de que los demonios que antes
servan numerosas biografIas que, como es de habitaban tales lugares no pudiesen volver.
suponerse, se hacen más legendarias a medi- En ocasiones Martin lograba que los pro-
da que se hacen más tardIas. Ya la más anti- pios paganos accediesen a la destrucción de
gua, escrita por Sulpicio Severo, parece mez- sus templos. Tal fue el caso de la comunidad
clar la leyenda con la historia. Todo esto, sin que tenIa por costumbre venerar un viejo ár-
embargo, es testimonio de la importancia de bol. A fin de mostrar el poder de su Dios,
Martin y del impacto que su vida hizo sobre MartIn se hizo atar en el sitio preciso en que
sus contemporáneos y sus sucesores. el árbol caerIa si se le cortaba, y retó a los
Nacido en Panonia (probablemente en lo propios paganos a hacer caer el árbol sobre
que hoy es Hungria) por el aflo 316, MartIn él. Aguijoneados por tal osadIa, los paganos
siguió una larga carrera cuyas vicisitudes le echaron abajo su árbol sagrado, esperando
ilevaron primero a! ejército, luego a Poitiers, que aplastara a MartIn. De un modo inexpli-
de regreso a Panonia, y por fin a Tours, en lo cable el árbol cayó en la dirección opuesta.
que hoy es Francia. Fue durante sus andan- Ante tal milagro, varios paganos se convir-
zas en el ejército que se convirtió al cristia- tieron, y aun los que no lo hicieron no opu-
nismo. Luego, al ilegar a Tours, donde fue sieron resistencia alguna cuando Martin
hecho obispo, ya ilevaba una larga experien- echo abajo su templo y construyó una igle-
cia de testimonio cristiano. sia sobre sus ruinas.
En Tours, MartIn se hizo rodear de un gru- Segi:in sus biografos, no siempre los méto-
p0 de monjes a quienes dirigió en una labor dos de Martin eran violentos. A menudo so
incesante de predicación y de destrucción arma principal fue un valor inquebrantable,
de antiguos templos paganos. Sobre las rui- como en la ocasión en que un grupo de pa-
nas de esos templos se construIan entonces ganos le atacó y el propio MartIn ofreció su
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Las misiones en la Had Antigua
50
HISTORIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
A raIz de las matanzas del s gb XX, mucdos armenios emgraron delurqu(a. Monurnen-
to a los caldos en esa matanza, erigido par la comunidad armenia de Montevideo.
ta que ahos más tarde ci j oven Tiridates, con el nador>> o <<Lusarovicha. Gregorio se convirtió
apoyo de los romanos y tras muchas altas y ba- al cristianismo en Cesarea de Capadocia, y
jas, recuperó su trono. cuando las condiciones polfticas se lo permitie-
Toda esta contienda en pos de un trono y de ron regresó a su pals de origen, donde se dedi-
la independencia de una nación tiene enorme cd a propagar su fe cristiana. Al principio, Ti-
importancia para nuestra historia, pues a travds ridates se opuso a su predicación, y hasta le
de ella ocurrió la primera conversion al cristia- encarceló por espacio de quince años -quizá
nismo de todo un estado -aparte, claro está, no tanto por razones religiosas como por razo-
de la ciudad de Edesa. En efecto, durante los nes polIticas. Pero a la larga acepto la fe de su
dos exilios de Tiridates fueron muchos los no- pariente, y tanto dl como su familia y sus no-
bles y militares de Armenia que le acompafia- bles fueron bautizados airededor del ano 302.
ron y que, en las regiones de Siria y Asia Me- A esto siguió una conversion en masa. Los an-
nor, establecieron contacto con un cnstianismo tiguos templos paganos se convirtieron en igle-
pujante. Muchos de ellos se convirtieron a la fe sias cristianas. Muchos sacerdotes, a par lo me-
cristiana, y al regresar a su pals de origen la lie- nos sus hijos, se hicieron sacerdotes cristianos,
varon consigo. Otros, aunque no se convirtie- con lo cual el carácter hereditario del sacerdo-
ron de inmediato, lievaron por lo menos cierto cio pagano paso al cristianismo de Armenia, a
conocimiento de lo que eran las doctrinas y la tal punto que a travds de los siglos fueron los
vida cristianas. descendientes de Gregorio el Iluminador quie-
Entre los nobles de Armenia que se vieron nes gobernaron la iglesia de Armenia.
obligados a acudir al asilo romano, habla un Jo- Los primeros ahos del cristianismo en Ar-
yen pariente de Tiridates, de nombre Gregorio menia fueron harto dificiles. Pero ya a la muer-
y a quien la posteridad conoce como <<El Ilumi- te del rey Tiridates la nueva fe habla logrado tal
51
Las misiones en la Edad Antigua
arraigo en el pueblo de Armenia que, aunque el Si esta historia es correcta, podemos supo-
pals quedO sujeto de nuevo al poderlo persa, y ner que, como en muchos otros casos, varios
aunque ste hizo todo lo posible por implantar factores contribuyeron a la conversion del pa-
el zoroastrismo, el cristianismo siguió siendo la ls: la fe sincera y sencilla de una cautiva cristia-
religion de Armenia. Además, lo que habla co- na, la creencia comdn en lo milagroso, el deseo
menzado como una conversion en masa pron- del rey de establecer contactos culturales y po-
to se hizo un movimiento profundo, sobre todo lIticos con el Imperio Romano (quizá porque
despuds que, gracias a la labor de los cristianos, crela que ste era menos de temer que Persia),
el idioma de Armenia fue dotado de un alfabe- el apoyo activo a la religion del Imperio Roma-
to, y se comenzó a traducir literatura cristiana no por parte del rey, y el asentimiento de las
del griego y del siriaco. masas.
Debido a una guerra que Armenia libraba
contra Persia, la Iglesia de Armenia no estu- 4. El cristianismo en Mesopotamia y Persia
vo representada en el Concilio de Calcedonia. Fue sobre todo a través de la cultura y len-
Eran tiempos difIciles para el pals que se vio gua sirlacas que el cristianismo logró su mayor
invadido por los persas y quedó esperando de expansion hacia el oriente durante este perlodo.
Roma una ayuda que nunca ilegó. A la postre, Primero en Antioqula, y luego en Edesa, se ha-
la iglesia de Armenia aceptO el valor dogma- bla ido forjando toda una literatura cristianaen
tico del Henoticon de Zenón y rompió su co- lengua sirlaca. Puesto que esta lengua era am-
munión con las iglesias ortodoxas, que le pa- pliamente utilizada para fines del comercio in-
reclan ser instrumentos del Imperio Romano. ternacional en ci Medio Oriente, el cristianis-
mo encontró en ella un canal para su expan-
3. El cristianismo en Georgia siOn. A través de mercaderes e inmigrantes de
A partir de Armenia, el cristianismo se cx- cultura sirlaca, el cristianismo penetró en regio-
tendió hacia Georgia y toda la region del nes tales como Mesopotamia. Pronto los cris-
Cáucaso. Aunque es posible que haya habido tianos de lengua sirlaca en Mesopotamia lo-
cristianos en Georgia antes, la primera noticia graron cierta madurez teológica, y se estable-
que tenemos acerca de la llegada del cristia- cieron escuelas como la de Nisibis, junto al
nismo a esa region se encuentra en la Histo- Eufrates.
na eclesiástica de Rufino, quien afirma que Durante los primeros aflos de vida de la igle-
la conversion de Georgia tuvo lugar cuando el sia, gobernaba en Persia la dinastla de los par-
rey Miriam y su esposa se convirtieron al tos, que no se ocupó de perseguir al cristianis-
cristianismo, aproximadamente en la misma mo. Hay indicios de que ya para ci aflo 225 ha-
fecha en que Constantino dio un paso seme- bla iglesias en varias regiones del Imperio Per-
jante. SegOn Rufino, la reina Nana se convir- sa. Entre los misioneros que laboraron en esos
tió cuando las oraciones de una esclava cris- territorios, las crónicas antiguas mencionan Fe-
tiana lograron sanar, primero a su hijo, y des- petidamente a Tadeo, Hageo y Man, quienes al
pués a la Reina misma. Poco después, y debi- parecer llevaron la fe cristiana hasta las fronte-
do a otro milagro, su esposo el rey Miriam ras mismas de la India. Empero en el aflo 226
también se convirtió. A esto siguió una con- ese vasto imperio paso a manos de los Sasáni-
version en masa semejante a la que hemos das, que se opusieron tenazmente al cristianis-
visto ya en el caso de Armenia. La nueva mo. Tras la conversion de Constantino esa si-
iglesia estableció relaciones con la iglesia tuación empeoró, pues los gobernantes persas,
constantinopolitana, de la que dependió por enemigos tradicionales del Imperio Romano,
algdn tiempo. velan en los cristianos posibles aliados de éste
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HIsT0RIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
ditimo -de hecho, en más de una ocasión los te recibe el nombre de <<nestorianismo>>. Pues-
emperadores rornanos se proclamaron defenso- to que esta doctrina tenIa buen ntImero de ad-
res de los cristianos que vivian dentro del Im- herentes en Antioquia y Edesa, era de esperar-
perio Persa, con lo que solo lograron hacer más se que, al ser rechazada por el concilio reuni-
difIcil su situación. Debido a estas razones, y do en Efeso en el año 431, buena parte de esos
tambidn a otras menos obvias, la iglesia dentro adherentes buscara refugio entre los cristianos
del Imperio Persa tendla a subrayar su indeperi- de lengua sirIaca allende las fronteras del Tm-
dencia frente a su congénere dentro del Impe- perio Romano, con quienes siempre habIan te-
rio Romano. Esta independencia se hizo per- nido relaciones estrechas. Fue asI que un buen
manente cuando las iglesias de Mesopotamia y nUmero de nestorianos se estableció en la ciu-
Persia adoptaron el nestorianismo -sobre lo dad de Nisibis, y fundó alhi una escuela teolO-
cual volveremos más adelante. gica que pronto hizo sentir su influencia. Al-
En toda esta region, el cristianismo se ex- gunos años despuds, esta iglesia se declaró en
tendió siguiendo los canales de la cultura sin- favor del nestorianismo y en contra de la cnis-
aca. Entre los inmigrantes y comerciantes de tologIa de la iglesia cristiana dentro del Impe-
origen sirIaco en Seleucia-CtesifOn parece ha- rio Romano.
ber habido una fuerte iglesia en la que se uti-
lizaba el sirIaco. Esta iglesia logro hacer con- 5. El cristianismo en la India
versos entre las personas de lengua persa, y se Existe una tradiciOn que afirma que el cris-
establecieron pequenas comunidades cristia- tianismo fue Ihevado a la India por el Apóstol
nas en las principales ciudades del imperio Tomás. Esto no es totalmente imposible, pero
persa y hasta en el Turquestán. Se tradujeron la tendencia de las iglesias de siglos posterio-
obras cristianas del sirIaco al pahlavi, y hasta res a atribuir sus orIgenes a algOn apóstoh des-
se escribieron algunas obras en ese idioma. pierta dudas acerca de la veracidad de esta tra-
Como hemos dicho, los cristianos se vieron dición. Además, otra tradición afirma qué fue
perseguidos por la dinastIa de los Sasánidas, San Bartolomd quien hhevó el cristianismo a ha
que pretendlan utilizar el zoroastrismo para India.
dar unidad a su imperio, de igual modo que los En todo caso, no cabe duda de que ha nueva
emperadores romanos utilizaban el cristianis- fe llegó al sur de ha India desde muy temprano
mo. Los cristianos eran vistos como aliados de -quizá desde el siglo primero. Debido al he-
Roma y estaban por tanto sujetos a persecu- cho de que los más antiguos monumentos ens-
ción cada vez que las relaciones entre ambos tianos están escritos en pahlavi, es dable supo-
imperios se hacIan tensas. Esta situación me- ner que el cristianismo del sur de ha India tuvo
joró cuando la iglesia persa se separó del res- desde sus orIgenes relaciones estrechas con el
to de la iglesia, primero en su organizaciOn y cristianismo persa, y que algunos de sus prime-
luego en su teologia. ros adherentes eran inmigrantes de origen per-
La iglesia persa se organizó como iglesia sa -quizá refugiados que hufan de las perse-
independiente en el aflo 410, cuando un conci- cuciones de los Sasánidas. Además, sabemos
ho reunido en Seleucia-Ctesifón dio al obispo de inmigrantes cristianos de onigen sirIaco.
de esa ciudad el titulo de Patriarca, y le hizo Nada sabemos acerca de los mdtodos mi-
cabeza de toda la iglesia dentro del Imperio sioneros de los primeros cnistianos que lhegaron
Persa. a ha India. El hecho de que muchos de los con-
En su teologia, la iglesia persa se separó de versos pertenecIan a una casta alta hace supo-
la iglesia dentro del Imperio Romano al adop- ner que se dingieron especialmente a los five-
tar la doctrina cristologica que corrientemen- hes más elevados de ha sociedad.
53
Las misiones en la Edad Antigua
54
HISToRIi GENERAL DE LAS MisloNEs
el culto cristianos en la conversion de los pa- Por tIltimo, este perlodo es interesante por el
ganos. Quizá estas dos caracterIsticas se de- modo en que en l se plantea el problema de las
ban a que la iglesia genuinamente misioncra relaciones entre la iglesia y la sociedad civil,
no trata de descargar esa responsabilidad con- que es uno de los problemas cruciales que se
centrándola sobre unos pocos misioneros o plantean en nuestros dias. La iglesia no es una
sobre un momento particular de su vida, sino agencia de poder politico o de presión social.
que se hace toda ella instrumento de su voca- Pero, si la iglesia cree en el seflorlo de Jesucris-
ción misionera. to por sobre la totalidad del mundo, ha de espe-
Tercero, el encuentro del cristianismo con rar que ese señorIo sea servido aun por las agen-
las culturas circundantes se manifesto sobre to- cias del poder politico y de la presión social.
do en la necesidad de traducir la Biblia, asI co- Estos dos polos en la vida de la iglesia plantean
mo toda la predicación y ci culto, a nuevos una paradoja que se hace especialmente notable
idiomas. Tales traducciones, que han sido señal en periodos como el nuestro, cuando los cam-
de los mejores perlodos en la historia de las nii- bios sociales y politicos se suceden con descon-
siones, son Indice de la apertura de la nueva fe certante rapidez. Tal paradoja requiere discernir
y de sus portavoces a las tradiciones y valores cuándo el poder politico sirve alos propósitos de
culturales de sus nuevas audiencias. Jesucristo y cuándo no. Ese discernimiento nun-
En cuarto lugar, es de notarse la importancia ca es absoluto e infalible, y por tanto la tarea mi-
que tuvo la conversion de gobernantes y otros sionera es siempre compleja y arriesgada. Qui-
miembros de las elites sociales y politicas en zá el estudio y la reflexión acerca de la conver-
varios paIses y regiones -conversion que fre- sión de Constantino y de sus implicaciones pa-
cuentemente fue seguida por la del resto de la ra la iglesia puedan servirnos para enfrentarnos
población. a nuestra responsabilidad misionera hoy.
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55
capItulo 4
Las misiones
medievales
ahora al estudio de un perfodo que rales, se construyeron fortificaciones para im-
Pasamos
muchos historiadores ban caracterizado en pedir la invasion del territorio romano por par-
términos negativos, como tiempo de oscuridad te de los escotos y pictos. En Africa del Norte
y de superstición. No obstante, esta época está y Egipto se repetfan los encuentros bdlicos con
Ilena de intercambios ricos y novedosos entre la los moros y nubios. En el Oriente, el gran ene-
fe cristiana, las distintas culturas germánicas y migo de Roma era el Imperio Persa, al parecer
el islam. Tales intercambios y situaciones histó- més temible que los bárbaros, pero que en rea-
ricas obligan a la iglesia a reflexionar sobre su lidad lo era menos. Persia podia muy bien in-
misión y sobre la evangelización. Aunque la vadir el Imperio y arrebatarle tres o cuatro pro-
iglesia se vio en situación ambigua y frágil, las vincias, como lo hizo en repetidas ocasiones,
polIticas misioneras reflejan nuevos mdtodos, y pero no se trasladarIa en masa hacia el ternito-
una novedosa reflexión misional que bien pue- rio romano dejando detrás su lugar de origen,
de marcar pauta para los retos a que se enfren- como tendIan a hacerlo los bárbaros. Por estas
ta la iglesia de boy en sus encuentros con diver- razones, la porción oriental del Imperio Roma-
sas culturas, tradiciones y religiones. Lo que no no se verIa seriamente amenazada en tanto
otros consideran <<edad oscura>> bien puede ver- no apareciesen otros nómadas, los árabes, ca-
se como un perIodo de transformaciOn creado- paces de invadir y conquistar tanto el Imperio
ra en la vida de la iglesia y en su misiologla. Persa como buena parte del Imperio Romano.
El Occidente, por el contrario, se veIa amena-
A. Desde la irrupción germánica zado por un enemigo harto volátil cuyo objeti-
hasta el avance del islam vo final era establecerse dentro del Imperio.
1. La reconquista de lo que habla sido Si bien desde tiempos de Marco Aurelio co-
el Imperio Romano menzó una serie de pequeflas guerras de fron-
Desde sus orIgenes el Imperio Romano se teras que debilitaban el Imperio, no fue sino en
vio constantemente amenazado por la presen- el siglo IV -y sobre todo despuds de la muer-
cia en sus fronteras de los pueblos, en su mayo- te de Teodosio- que las legiones romanas se
na germánicos, que los romanos llamaban mostraron incapaces de contener las olas suce-
<<bárbaros>>. En Europa, el Danubio y el Rin sivas de bárbaros que penetraron el Imperio
servIan de lImites naturales que contenlan el occidental a través de todas sus fronteras. Du-
Impetu de los germanos y eslavos. En las Islas rante siglos de prosperidad y relativa seguridad,
Británicas, donde no habIa tales fronteras natu- el Imperio y sus habitantes se habIan acostum-
56
HIsT0RIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
brado a la vida muelle y libre de peligros. Pues- tinguir entre la religion de uno y la de otro.
to que los antiguos habitantes del Imperio no Además, nuestras principales fuentes litera-
querlan ir al campo de batalla, se acudió a la rias para conocer esas religiones datan de
soluciOn fácil -pero suicida- de colmar las varios siglos después de las primeras inva-
legiones de bárbaros dispuestos a luchar por el siones, y por tanto pueden reflejar influen-
Imperio. Pronto la defensa de Roma contra los cias e interpretaciones posteriores. Empero
bárbaros estuvo en manos de los propios bárba- en trminos generales 51 es posible señalar
ros. Unos como defensores de Roma y otros que todos estos pueblos creIan en la vida
como sus invasores -y muchos alternadamen- después de la muerte, al menos para los gue-
te a tItulo de ambas cosas- los pueblos bárba- rreros valerosos, que participarlan de fiestas
ros fueron instalándose y estableciendo reinos y banquetes en el salon del Dios de la gue-
propios dentro del Imperio. Este proceso fue rra -Dios que recibIa un nombre entre los
lento y -aunque hubo momentos de gran sig- godos, otro entre los celtas, y otro entre los
nificaciOn histórica, como el saqueo de Roma escandinavos. Tanto a este dios como a otros
por Alarico en el aflo 410, o la deposición del de sus muchos dioses, estos pueblos ofre-
emperador Rómulo AugOstulo por Odoacro en clan sacrificios de animales, cosechas, y
el 476-la mayorparte de las personas a quie- hasta de seres humanos. En algunos casos
nes tocó vivir en esa poca probablemente no seguIan una polItica semej ante a la de Israel
se percató de su importancia. al tomar a JericO, sacrificándoles a sus dio-
a) El reto de los bárbaros a la romanitas cris- ses todo el botin de alguna conquista -in-
tiana. Desde el punto de vista de la historia cluso los cautivos. Por otra parte, un ele-
de la civilización, las invasiones de los bar- mento importante de su religion eran los lu-
baros presentaban un gran reto. A través de gares sagrados, y especialmente los bosques
siglos de desarrollo cultural, habIa apareci- y árboles sagrados.
do en el mundo lo que los contemporáneos La inmensa mayorla de los pueblos que se
llamaban romanitas, o <<romanidad> -la establecieron en los antiguos territorios im-
herencia grecorromana que crelan ser la ci- periales era pagana, y seguIa la religiOn que
vilización más elevada que Europa habIa co- acabamos de describir. Los que eran cristia-
nocido. Era la romanitas la que habIa hecho nos habIan sido convertidos a través de su
posible la riqueza que los bárbaros ambi- contacto con los arrianos y segulan Ia doctri-
cionaban, y uno de los motivos que les im- na arriana, que lo demás cristianos conside-
pulsaban hacia el territorio romano era ha- raban herdtica. Algunas de las regiones en
cerse partIcipes de ella. Sin embargo, esos las que el cristianismo habla logrado propa-
mismos bárbaros, con sus costumbres dis- garse con más efectividad -las Galias, Ita-
tintas de las romanas y su falta de compren- ha, Espafla, el Africa del Norte- se vieron
sión de los verdaderos fundamentos de la ahora pobladas por nuevas gentes entre las
romanitas, amenazaban de muerte aquello que era necesario emprender de nuevo la
de que deseaban adueflarse. obra misionera.
Desde el punto de vista de las misiones, las Para los cnstianos de la época que se hablan
invasiones de los bárbaros presentaban tam- formado bajo la romanitas, el reto a la civi-
bién un reto. Los invasores traIan consigo lización y el reto al cristianismo eran una y
sus tradiciones y sus dioses. Puesto que los la misma cosa. Para ellos, el Imperio Roma-
diversos pueblos nórdicos que invadieron el no era obra de Dios mismo, que en su pro-
Imperio Romano tenlan orIgenes y tradicio- videncia lo habla establecido como trasfon-
nes comunes, frecuentemente es difIcil dis- do y vehiculo para la transmisión del Evan-
57
medievales
gelio. Si ahora Dios permitIa que ese impe- tablecIan en territorio romano pronto comen-
rio fuese amenazado por la barbarie, ello era zaban a adaptarse a las costumbres y creen-
también parte del plan divino para la reden- cias de sus vecinos conquistados. Al mismo
ción del mundo, pues asI los bárbaros po- tiempo, los nuevos métodos de misión y la
dian encontrar acceso a la fe. Pero era tam- configuraciOn del encuentro entre estas cultu-
bién parte del plan de Dios el que esos bar- ras transformaban la fe cristiana, hacindola
baros encontraran acceso a la fe haciéndose más germánicay menos latina. Algo más len-
partIcipes de la romanitas. Es por esta razón ta fue la conversiOn al catolicismo de los bar-
que a través de todo este perlodo la obra mi- baros que eran arrianos antes de atravesar las
sionera de la iglesia se une a su obra civili- frontera del Impeno -godos, lombardos y
zadora, y a la par que se busca convertir a vándalos. Pero también dsta era de esperarse
los bárbaros se busca romanizarlos. Lo que debido a la tendencia de los barbaros a acep-
es más, algunos escritores cristianos, como tar las costumbres de los romanos.
Paulino de Nola, argumentan que se debe b) La conversion de los paganos. El proceso de
hacer un esfuerzo por convertir a los paga- conversion de los invasores germanos es
nos, pues de ese modo dejarán de ser una ejemplo de cómo una mayorIa no cristiana,
amenaza al Imperio y su civilización. impresionada por la cultura y civilización
Empero esto no quiere decir que todos los <<cristianas>> de una minorla, poco a poco
cristianos viesen en su religion un modo de acepta la fe de la minorla. En el proceso,
salvar la romanitas, sino que por el contra- naturalmente, se entremezclan elementos de
rio al menos algunos estaban dispuestos a ambas culturas, de modo que el cristianismo
que la propia estructura de la civilización resultante lieva el sello tanto de la tradición
fuese destruida si Dios decidIa utilizar ese cnstiana anterior como de las tradiciones de
medio para Ia evangelización de los bárba- los pueblos recién convertidos.
ros. AsI, Orosio, el espaflol discipulo de Los lfderes mismos de la iglesia se veIan en-
AgustIn, decia: tonces en medio de una tension que será Ca-
Si sOlo para eSto los bárbaros fue- racterIstica de la historia del cristianismo a
ron enviados dentro de las fronte- través de las edades. Por una parte, les pare-
ras romanas, para que por todo el cia necesario deshacerse de tantos elementos
Oriente y el Occidente la iglesia de de la antigua religion de los conversos como
Cristo se lienase de hunos y sue- fuese posible. Por otro, se percataban de que
vos, de vándalos y borgonones, de esa religion tenha raIces profundas en las tra-
diversos e innumerables pueblos diciones y costumbres de los pueblos. Esa
de creyentes, loada y exaltada ha ambivalencia puede verse en las cartas del
de ser la misericordia de Dios por- obispo de Roma (o papa) Gregorio el Gran-
que ban liegado al conocimiento de de, quien tras recibir noticias de que el rey
la verdad tantas naciones que no Etelberto de Kent se habIa convertido le en-
hubieran podido hacerlo sin esta vió instrucciones en el sentido de que todos
ocasión, aunque esto sea mediante los templos paganos debhan ser destruidos.
nueStra propia destrucción. (Histo- Pero poco después le escribiO a un misione-
na, vii:41) ro que se dirigIa a ese mismo reino de Kent:
La reconquista por parte de la Iglesia del tern- Llevo largo tiempo debatiendo con-
torio perdido a causa de las invasiones de los migo mismo acerca del caso de los
bárbaros comenzó el mismo dIa en que se hi- anglos, y he liegado a la conclusiOn
zo necesaria. Los pueblos paganos que se es- de que los templos de los Idolos de
58
HIsT0RIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
ese pueblo no deben ser destruidos, que siguió la conversion en masa del pueblo.
aunque sIlos Idolos que en ellos En este sentido, el acontecimiento princi-
hay. Que se prepare y rode agua pal, tanto por su importancia inmediata co-
bendita en estos templos, y se cons- mo por sus consecuencias a travds de los si-
truyan altares [cristianos] y se depo- glos, fue la conversion de los francos, cuyo
siten reliquias [de santos]. Puesto punto culminante fue el bautismo del rey
que estos templos están bien cons- Clodoveo en el año 496.
truidos, es bueno que pasen del ser- Fue en el 481 que Clodoveo llegó a ser rey
vicio de los Idolos a! servicio del de los francos salios. Este no era un reino de
Dios verdadero. AsI, cuando las gran extension o poderIo, y durante cinco
gentes vean que sus templos no son aflos el joven rey pareció contentarse con
destruidos, aparten el error de sus él. Pero en el aflo 486 Clodoveo emprendió
corazones y, conociendo y adoran- una serie de campafias militares que rápida-
do a! verdadero Dios, vayan ahora a mente extendieron las fronteras de su reino.
esos mismos lugares donde antes En el 493 tomO por esposa a una princesa
acostumbraban ir. Y, puesto que católica, Clotilde, hija de Chilperico, rey de
acostumbran sacrificarles mucho las borgonones. Aunque hacla ya aflos que
ganado a los demonios, deben con- el rey de los francos se habla mostrado res-
tinuar teniendo alguna celebración petuoso hacia el cristianismo y sus obispos,
parecida pero transformada, de mo- a! parecer fue Clotilde quien más influyó en
do que a! tiempo de la dedicación, o su conversion. Primero Clodoveo consintió
en los aniversarios de los santos en que sus hijos fuesen bautizados, y fue s6-
mártires cuyas reliquias estdn en los lo algiin tiempo más tarde que dl mismo re-
templos, se construyan enramadas cibiO el bautismo. La ceremonia tuvo lugar
en tomb a esos antiguos templos en Rheims el dIa de Navidad del aflo 496, y
que ahora son iglesias, y celebren la varios nobles -y a la larga todo el pueblo-
ocasión con fiestas religiosas. Que siguieron al Rey a la pita bautismal.
ya no sacrifiquen animales al dia- Al parecer, los motivos que impulsaron a Clo-
blo, sino que ahora los sacrifiquen doveo a aceptar el bautismo fueron más poli-
en alabanzas a Dios, y los coman, ticos que religiosos -aunque no debemos ol-
alabando a! Dios que les da ese go- vidar la influencia de Clotilde. En efecto, la
zo, de modo que mientras sus cuer- iglesia podia ser una gran aliada en las con-
pos disfrutan de estos placeres ex- quistas que Clodoveo se proponla, y sobre to-
ternos, sus mentes puedan ser lleva- do en la organizaciOn del naciente imperio
das a! disfrute de los placeres inter- franco. Para ello era necesario que el Rey fue-
nos. Porque sin duda es imposible se cristiano y que sus acciones pudiesen inter-
quitarles todo eso de los corazones pretarse como inspiradas por su fe. Al aceptar
de una vez. (Beda, Historia, 1.30) el bautismo, y at instar a sus sdbditos a seguir
Si bien la conversion de los bárbaros paga- su ejemplo -aunque no por medios violen-
nos comenzO tan pronto como se estable- tos- Clodoveo aceptaba e invitaba el apoyo
cieron en territorios del Imperio Romano, y que la iglesia, y sobre todo sus obispos, podI-
pueblos como los suevos y borgoflones an prestar a sus propósitos politicos.
pronto contaron con gran ndmero de cristia- Es necesario seflalar que, aun sin el aconte-
nos, el paso decisivo fue frecuentemente la cimiento notable del bautismo de Clodoveo,
conversion de un rey y de sus nobles, a lo los francos, como los demás pueblos bérba-
59
Las misiones medievales
ros que habIan invadido el Imperio, hubie- ducir a los ortodoxos a hacerse arrianos. Sin
ran acabado por aceptar el cristianismo co- embargo, todo esto terminó cuando, en el
mo parte de la cultura romana a que tendlan aflo 589, el rey Recaredo -cuyo difunto pa-
a conformarse. dre habIa perseguido a los ortodoxos-
Por otra parte, sin embargo, el bautismo de abrazó la fe nicena. Aun entonces el arria-
Clodoveo es importante porque seflala el co- nismo no desapareció en Espana, sino que
mienzo del gran Reino Franco, que liegarla perduró hasta que la invasion musulmana le
a constituir un nuevo imperio. En ese impe- puso fin al reino godo en la Peninsula.
rio el siglo IX creyó ver un nuevo despertar Este proceso de conversion de los arrianos,
del desaparecido Imperio Romano de Occi- que ya se consideraban cristianos, plantea
dente, y fue a través de su influencia que el una problemática que veremos repetirse en
cristianismo logró algunos de sus más gran- el curso de esta historia: la evangelización
des avances geográficos. La historia de ese que se lleva a cabo entre quienes ya se lla-
Imperio Franco y de su importancia para la man cristianos. Los católicos creIan que los
expansion del cristianismo pertenece a otra arrianos, para ser verdaderos cnstianos, de-
sección de este capItulo. Wan abandonar el arrianismo, y por eso bus-
c) L conversion de los arrianos. Aunque esta- caron su conversion. Siglos más tarde, en el
ba destinado a desaparecer, el arrianismo se Medio Oriente, los católicos romanos trata-
mostró más resistente ante la fe ortodoxa nan de convertir a los ortodoxos orientales,
que los viejos cultos paganos. Aparte de los y en America Latina los protestantes se de-
vándalos, que pronto atravesaron el estre- dicarlan a la conversiOn de los católicos ro-
cho de Gibraltar y se establecieron en el nor- manos.
te de Africa, y cuya persuasion arriana con-
tinuó hasta las conquistas musulmanas, los 2. Las misiones en la Islas Británicas
principales pueblos arrianos que se estable- El Imperio Romano habIa alcanzado sola-
cieron en los antiguos territorios del Imperio mente a la porción sur de la Gran Bretafla- lo
Occidental fueron los ostrogodos, los lom- que hoy ilamamos Inglaterra. Ahora, sin em-
bardos y los visigodos. Los ostrogodos de- bargo, ese territorio estaba en posesión de Va-
jaron de ser un reto para los cristianos orto- rios reyes anglos. Y más al norte y al oeste, lo
doxos cuando cedieron la hegemonla de Ita- que boy es Escocia, Gales e Irlanda estaba to-
ha a los lombardos. Estos, por su parte, davIa habitado por antiguos pueblos celtas, cu-
pronto comenzaron a recibir la influencia ya religion era muy parecida a la que hemos
de sus vecinos católicos y de las princesas descrito al hablar de los germanos. Empero las
católicas que se casaban con sus reyes, y misiones en las Islas Británicas durante este
acabaron aceptando la fe nicena. Esto nos perlodo merecen discusión aparte, pues en esas
recuerda una vez más que a través de toda la islas se fundó una iglesia puj ante que pronto
historia los vInculos familiares, con los in- servirIa de punto de partida para empresas mi-
tercambios culturales y religiosas que a ye- sioneras al Continente. Además, en las Islas
ces acarrean, han sido un importante méto- Británicas se dan cuatro fenómenos dignos de
do de evangelizacion. En cuanto a los visi- menciOn: (1) La conquista para el cristianismo
godos que se establecieron en Espana, al de territorios ahlende las fronteras del viejo Tm-
principio fueron tolerantes con los catOli- perio, con la obra de Patricio y otros. (2) La ex-
cos. Los ostrogodos también lo habIan sido, pansión del cristianismo a partir de Irlanda a
aunque no pot ello dejó de haber persecu- través de instituciones monásticas como la de
ciones y presión de diversas formas para in- lona. (3) La primera misión organizada por la
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HIsT0RIA GENERAL DE LAS MIsloNEs
sede romana de que tenemos noticias -la mi- una sola boca: <<Te rogamos, santo
sion de AgustIn a Inglaterra. (4) El desarrollo joven, que vengas y de nuevo andes
de una metodologIa misionera sancionada por entre nosotros>>. Y mi corazón se
Roma que toma muy en serio el contexto reli- conmovió; y no pude leer más; y
gioso y cultural de las personas evangelizadas desperté.
-pues fue en este contexto que Gregorio escri- En Irlanda, Patricio parece haber empleado
bió la carta sobre los templos paganos que he- diversos medios para lograr conversiones.
mos citado anteriormente. For lo general, se acercaba primero a los di-
a) Patricio. Este misionero, a quien la posteri- rigentes de las comunidades y luego, a tra-
dad conoce como San Patricio, y quien es yes de la influencia de éstos, lograba la con-
hasta el dIa de boy el santo patron de Irlan- version, o al menos el bautismo, de las ma-
da, nació a fines del siglo IV en lo que es sas. En esto Patricio tomaba en cuenta la
boy Inglaterra. Su padre, un decurión roma- tradición celta, donde habla un profundo
no, era de fe cristiana, come, lo habIa sido sentido de unidad en la comunidad, de mo-
también su abuelo. Para el joven Patricio, do que las decisiones importantes, una vez
sin embargo, su fe no era cosa de gran im- tomadas por los jefes, eran decision de todo
portancia hasta que su propio infortunio le el grupo. En el campo de la religion, esto
hizo volverse a ella. querla decir que, silos jefes decidlan abra-
Siendo todavIa adolescente, Patricio fue zar el cristianismo, el resto de la población
arrebatado de su hogar y ilevado a Irlanda les seguirla. Por tanto, fue a esos jefes que
por un grupo de asaltantes de esa isla. En Ir- Patricio se dirigio principalmente. A fin de
landa, y como esciavo, paso varios aflos pas- ilegar a los reyes y demás personas de in-
toreando ganado. Haciendo arreglos con el fluencia, no vacilaba en hacerles presentes.
capitán de un barco, logró escapar hacia el En ocasiones, ni siquiera eSto le valia para
Continente. Pero aun allá tuvo dificultades ser bien recibido, y entonces Patricio vela
para librarse, no ya de sus antiguos amos, si- peligrar su vida con el gozo de quien ye en
no ahora de quienes le habIan ayudado a es- el martirio la corona de su fe.
capar. Por fin, y tras largos viajes que le lie- Por estos medios Patricio bautizó a milla-
varon hasta el Meditenáneo, Patricio regre- res de personas, y es de suponerse que la
so a su hogar, lievando en el ardor de su fe fe de tales conversos debe haber sido bar-
el resultado de sus muchos infortunios. to superficial. Sin embargo, es notable que
De regreso en la Gran Bretafla, Patricio re- fue precisamente la Irlanda recién conver-
cibió en suefios el ilamamiento a ir como tida la que sirvió de centro a un gran mo-
misionero a la tiena de su cautiverio: vimiento misionero que habria de exten-
Vi, en una visiOn nocturna, un hom- derse por casi todo el norte de Europa.
bre que venIa como de Irlanda, cu- Quizá esto se deba a que, al mismo tiem-
yo nombre era Victórico, con mu- P0 que se dedicaba a bautizar las multitu-
chas cartas. Y me dio una. Y lel el des, Patricio ordenaba sacerdotes irlande-
principio de una carta que decla ser ses que se ocupasen en nutrirlas en la fe.
la <<voz de los irlandeses>>, y mien- Al principio estos pastores deben haber si-
tras leIa el principio de la carta me do casi tan ignorantes como su grey, pero
pareció que ola las voces de quie- pronto se hizo sentir la influencia de los
nes vivian junto a ml en el bosque monasterios que iban resultando de la obra
de Focluth, que está junto al mar de Patricio y que eran verdaderos centros
occidental; y clamaban, como con de estudio y devoción. Esto nos señala el
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Las misiones medievales
62
HIsT0RIA GENERAL DE LAS MIsloNEs
Sin embargo, la influencia de lona y de Co- ban a cultivar su fe cristiana. Ahora, en Jo-
lumba no se limitó a Escocia y a su genera- na, vemos una union fructIfera del ideal
ción, sino que se extendió mucho más allá. monástico con la tarea misionera. La co-
Fue a partir de lona que el cristianismo echo munidad de lona es de carácter monástico,
sus más profundas raIces en Northumbria. si; pero es tambidn una comunidad misio-
Cuando el rey Osvaldo, que durante su exi- nera. A través del estudio, la disciplina y ha
ho habIa recibido el bautismo, pidió a lona oración, los residentes de monasterios co-
que le enviase un obispo que pudiera instruir mU lona y Lindisfarne no procuran solo
a sus sñbditos en la fe cristiana, comenzó un fortalecer su propia vida espiritual, sino
movimiento de grandes consecuencias para que además llevan a cabo tarea misionera.
toda Inglaterra. El segundo obispo que lona A partir de este momento la misión de la
envió fue Aidán, digno representante del es- iglesia cobra una dimension nueva: lo me-
pIritu de Columba. Siguiendo el ejemplo del jor del ideal monástico y su bdsqueda de
fundador de Jona, Aidán estableció un mo- fortalecer la fe se vuelven parte de ha tarea
nasterio en la isla de Lindisfarne. A partir de misionera. Más adehante veremos diversos
aill, el propio Aidán y sus acompafiantes ha- modos en que los cristianos medievales in-
clan viajes en los que predicaban, enseflaban tentaron poner lo mejor del ideal monásti-
y administraban los sacramentos. Debido a co al servicio de ha obra misionera. Y bas-
esta obra, cuando Osvaldo murió y siguió tante después, al llegar al siglo XVI, vere-
una reacción pagana, ésta no logró desarrai- mos que al rechazar el monaquismo el pro-
gar el cristianismo del corazón de los nuevos testantismo se deshizo de un importante
creyentes. Aidán murió nueve años después, instrumento misionero, y que ésa fue una
pero su sucesor Finán continuó su obra, de de las principales razones por las que tardó
modo que a partir de Lindisfarne el cristia- siglos en equipararse al catolicismo en su
nismo se extendió a los reinos de Mercia, labor misionera.
Essex y Wessex. c) AgustIn de Canterbury. Cuenta ha leyenda
En la obra de Columba y de sus sucesores que, aproximadamente en ha misma época
-tanto en lona como en Lindisfarne y mu- en que Columba trabajaba entre los pictos
chos otros lugares semejantes- tenemos de Escocia y echaba las bases de ho que hhe-
un tipo de obra misionera que no hablamos garla a ser Un gran movimiento misionero,
encontrado antes en nuestra historia. En los un joven a quien más tarde la historia dana
siglos anteriores hemos visto cómo el ens- el nombre de Gregorio el Grande se pasea-
tianismo se propagaba de diversas mane- ba por el mercado de eschavos de Roma
ras. Algunas veces las iglesias enviaban cuando unos mancebos rubios que estaban a
misioneros; otras, el propio obispo se ocu- ha yenta atrajeron su atención. <<,A qué na-
paba de visitar las comarcas cercanas a su ción pertenecen estos jóvenes?>> preguntó
ciudad; otras, la nueva Ic se propagaba a Gregorio, y cuando oyó que eran anglos co-
travds de personas que viajaban por las más mentó: <<Anglos han de sen en verdad, pues
variadas razones, tales como comerciantes, tienen rostro de angeles. j,De qué provincia
esclavos, etc.; y otras el intercambio cultu- son?>> -<<Son de ha provincia llamada Dci-
ral entre naciones y los nuevos vinculos fa- ri>>, le contestaron. -<<De ira son en verdad,
miliares que se formaban produclan con- pues han sido hlamados de la ira a la miseri-
versos. Por otra parte, en el siglo cuarto cordia de Dios. ,Quién es su rey? -<<Aella>>
habian aparecido centros de vida comunita- -<<jAleluya! Es necesario que en su tierra
na y monástica cuyos miembros se dedica- se ahabe a Dios el Creador.>>
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L.
Las misiones medievales
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HIsT0RIA GENERAL DE LAS MIsI0NES
ticas de los celtas, que en esa noche se en- grupos más extendidos fuera de las fronte-
cerraban en sus casas pensando que los de- ras del Imperio Romano eran los nestoria-
monios estaban sueltos. Y en esos mismos nos y los monofisitas -dos grupos surgi-
paIses, y entre cristianos, se conservan to- dos de las controversias cristolOgicas del
davIa ancestrales costumbres de celebrar siglo IV.
los fiestas de primavera con conejos y hue- Los nestorianos derivaban ese nombre de
vos, y las de invierno con ramas de mudrda- Nestorio, el patriarca de Constantinopla que
go, planta sagrada a los antiguos cultos cel- fue condenado por el Concilio de Efeso en
tas. el aflo 431. InsistIan en la distinción entre la
naturaleza divina de Jesucristo y su natura-
3. Las misiones orientales leza humana, pues temIan que de otro modo
a) El cristianismo ortodoxo. Durante el perlodo la humanidad del Salvador quedara eclipsa-
que va desde la caIda de Roma hasta el avan- da. Por eso, en lugar de la fOrmula ortodoxa,
ce del islam, el Imperio Romano de Oriente, que declaraba que Jesucristo existe <<en dos
conocido ahora como el Imperio Bizantino, naturalezas -la divina y la humana- y una
es una de las grandes potencias del mundo, persona>>, los monofisitas preferIan hablar
sin más rival verdaderamente temible que la de <<dos naturalezas y dos personas>>. Desde
vecina Persia. Este imperio incluye buena la perspectiva ortodoxa, esto parecIa dividir
parte del norte de Africa, el Mediterráneo a Jesus en dos, y por tanto negar la verdade-
oriental y la porcion sudoriental del conti- ra encarnación de Dios. Tras la condenación
nente europeo, y es el principal foco de acti- de Nestorio, sus seguidores marcharon hacia
vidad misionera en el Medio Onente. el Imperio Persa, donde pronto se hicieron
Fue durante el reinado de Justiniano que el numerosos. En el dIa de hoy son un grupo
Imperio recobró los territorios del norte de relativamente pequefio cuya principal con-
Africa que habIan sido conquistados por los centración se encuentra en Irak e Iran.
vándalos. Inmediatamente comenzó la tarea Los monofisitas, por su parte, rechazaban la
de reconstruir la comunidad ortodoxa de esa formula <<dos naturalezas y una persona>>,
region que habfa quedado sofocada debido a establecida por el Concilio de Calcedonia
la fe arriana de los invasores vándalos. Tam- en el 451, y preferIan decir <<una naturaleza
bidn durante el reinado de Justiniano, el cris- y una persona>>. De ese modo subrayaban la
tianismo se extendiO hacia el sur de Egipto, unidad de la divinidad y la humanidad en
en la region de Nubia, donde laboraron va- Jesucristo. Empero desde el punto de vista
rios misioneros tanto ortodoxos como mono- de los ortodoxos esto parecIa negar la ver-
fisitas. En sus fronteras hacia el norte, Justi- dadera humanidad de Jesds, que quedaba
niano logrO la conversion de algunos pue- absorbida y eclipsada por su divinidad. Los
blos del Cáucaso y de numerosos hdrulos. monofisitas eran particularmente numero-
Por Oltimo, y siguiendo en ello la politica SOS -y siguen sidndolo- en Egipto, Etio-
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L
Wi
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HIsT0RIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
Alopdn fue bien recibido por la casa reman- En el año 622 se produjo la Hegira o co-
te y se dedicó a traducir las Escrituras y a mienzo de la era musulmana. A la muerte de
fundar monasterios. Aunque el cristianismo Mahoma en el auio 632, sus seguidores ocupa-
introducido por Alopén pronto constituyó un ban una zona limitada en la costa occidental de
grupo notable, es casi seguro que la mayor Arabia, y no habIan logrado extender su in-
parte de los miembros de ese grupo haya si- fluencia allende los lImites de dicha peninsula.
do extranjera -posiblemente comerciantes Su sucesor Omar (634-644), con la ayuda de su
nestorianos- y que la influencia cristiana habilIsimo general Calid y de la debilidad de
haya penetrado solo muy superficialmente los imperios bizantino y persa, guió la conquis-
en algunos de lo cIrculos intelectuales de la ta de Siria, Mesopotamia, Egipto y buena par-
China. Si bien esto pertenece a otro perlodo te de Media y Persia.
de la historia, debemos señalar aquI que el La conquista de Siria fue facilitada por las
cristianismo nestoriano de China no logró disensiones producidas por la division teológi-
resistir la persecuciOn resultante de un cam- ca entre monofisitas y ortodoxos. Además, el
bio de dinastIa, y por tanto desapareció. pueblo sirfaco era de ongen semita y por tanto
no vio con demasiado disgusto la llegada de los
4. El avance del islam árabes. En el aho 634 dstos invadieron a Siria,
Los siglos VI y VIII marcan uno de los pe- y en el 636 toda la regiOn estaba en sus manos
rIodos más tristes en la historia del cristianismo -excepto las ciudades de Jerusalén y Cesa-
en el Oriente Medio y el norte de Africa. Du- rea, que capitularon en los aflos 638 y 640, res-
rante ellos se produjeron grandes pérdidas te- pectivamente. Como consecuencia de la con-
rritoriales, y muchas de las más antiguas e im- quista de Siria, la porción romana de Mesopo-
portantes iglesias cristianas desaparecieron o tamia, separada de la capital bizantina, no tar-
quedaron enquistadas. do en caer. En el aho 634 los árabes invadieron
Los árabes conquistaron buena parte del lmperio Romano y del Imperio
Persa. Las espadas de los primeros califas, palacio deTopkapi, Estambul.
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Las misiones medievales
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Los moros invaderon y conquista o casi toda EspanaTapiz en e Alcázar de Sevilla.
la Mesopotamia persa y, aunque sufrieron algu- Tras el asesinato de Otman le sucedió All,
nas derrotas iniciales, en el año 637 Ctesifón pero dste no pudo retener el poder y pronto es-
capituló ante ellos. De allI continuaron hacia el talló la guerra civil. Se sucedieron numerosos
oriente e invadieron primero a Media y des- pretendientes a! califato hasta que en el año
pus a Persia, pero la conquista de estos tern- 692 se estableció el califato de Damasco en la
torios no se completó sino en el año 649, des- persona de Abd-al-Malil.
pués de la muerte de Omar. Aun entonces, la A pesar de la disensión interna, el islam
vieja cultura irania continuó existiendo y logró continuó avanzando, y en el aflo 698 todo el
imprimir sobre la religion islámica de la regiOn none de Africa estaba en su poder. La conquis-
su sello particular. En el aflo 640 las tropas de ta de esta region fue dificil debido a la resisten-
Omar, bajo el mando del general Anir, invadie- cia de los bereberes. Sin embargo, pronto stos
ron el Egipto. La resistencia fue leve, pues el adoptaron la religiOn de los conquistadores, de
patriarca Ciro, a quien el Emperador de Cons- modo que en el aflo 711 la fuerza musulmana
tantinopla habIa hecho patriarca y gobernador, que invadió a Espana estaba formada mayor-
mostró carecer de firmeza de carácter y de vo- mente por moros. La conquista de Espafla fue
luntad de resistir. En el año 642, al rendirse fácil. Toda la Peninsula Ibérica, excepto Astu-
AlejandrIa, todo Egipto quedó en manos mu- rias, quedO en poder de los musulmanes. En el
sulmanas. aflo 720, y luego en el 725, las fuerzas islámi-
El califa Otman (644-655) no resultó ser cas invadieron el reino franco, avanzando por
buen sucesor de Oman. Su nepotismo y sus ci oeste hasta cerca de la ciudad de Tours, y por
polfticas fiscales pronto sembraron el descon- el Ródano hasta más al norte de Lyon.
tento, y las Onicas conquistas notables de su La batalla de Tours en el aflo 732, cuando
califato fueron la del este de Persia y la de Carlos Martel logró una victoria sobre los mu-
Chipre. sulmanes, detuvo el avance del islam en el oc-
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HISTORIA GENERAL DE LAS MIsloNEs
cidente de Europa. Mientras que algunos histo- culmina el perfodo del primer impulso expan-
riadores cristianos presentan esta victoria como sionista del islam.
el fin del avance del islam y el comienzo de la En los paIses conquistados por los musul-
ideologla de las cruzadas, otros historiadores manes el cristianismo continuó existiendo. Du-
musulmanes le restan importancia a la derrota. rante el liderato de Mahoma, los cristianos pa-
Ambas perspectivas apuntan a lo crItico de la gaban un tributo y podian seguir profesando la
batalla en relación a las dos religiones. fe cristiana, pero algunos abrazaron la musul-
Aunque en el Oriente los musulmanes ata- mana. El Corán concedia cierta categorIa espe-
caron repetidamente diversas provincias de cial al cristianismo como uno de los <<pueblos
Anatolia, y hasta ilegaron a amenazar la ciudad del Libro>> -junto al judaismo. Esto evitó que
de Constantinopla en los años 716 y 717, la los musulmanes pretendiesen obligar a lo cris-
frontera entre el islam y los diversos reinos tianos a convertirse, y hasta bubo cristianos
cristianos quedó fijada alrededor del año 720. que participaron en asuntos del gobierno mu-
En esa fecha los musulmanes dominaban todo sulmán. De hecho, muchos de los cristianos no
el antiguo Imperio Persa, Armenia, Mesopota- calcedonences -es decir, nestorianos y mo-
mia, Siria, Arabia, todo el norte de Africa y la nofisitas- aceptaron el orden de sus nuevos
casi totalidad de la Peninsula Ibdrica. conquistadores proclamando el fin de la injus-
El aflo 650 marca el advenimiento del cali- ticia y la corrupción anteriores. No pocos escri-
fato Abasida, cuya capital luego fue Bagdad, tores monofisitas en el siglo siete vieron en la
fundada en el aflo 762. El califato Abasida no fuerza del islam señal del juicio de Dios sobre
realizó grandes conquistas militares, pero silo- las iglesias ortodoxas. Por regla general, aun-
gró desarrollar una civilización heredera al que con serias excepciones, no hubo persecu-
mismo tiempo de la ciencia y la filosofIa occi- ción contra los cristianos en los territorios mu-
dentales y de la religion musulmana. Con esto sulmanes.
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Las misiones medievales
Por otra parte, si se colocaba al cristianismo cando obispados en el Tibet, India, China, y
y sus seguidores en condiciones desventajosas. otras regiones del centro y sudeste de Asia.
Aunque existIa la tolerancia religiosa, los cris- Con la conquista de Egipto, las regiones de
tianos eran considerados ciudadanos de segun- Nubia y Etiopia quedaron separadas del resto
da clase. Inclusive, aun los conversos a! islam del cristianismo, y por esta razón la igiesia en
eran considerados inferiores a los conquista- dicha zona tendió tambidn a volverse conserva-
dores rabes. Tambin habIa obligaciones y dora y a perder su empuje misionero.
restricciones tales como vestir ciertas ropas Ca- En el norte de Africa el cristianismo conti-
racteristicas y evitar toda señal externa que pu- nuó existiendo durante algün tiempo, pero unos
diese servir de propaganda para el cristianismo pocos siglos después de la conquista musul-
-desde tocar las campanas de la iglesia hasta mana habIa desaparecido por completo. Quizá
criar cerdos a la vista de los musulmanes. Si esto se deba a que el cristianismo nunca logro
bien no se perseguIa de muerte a quienes ha- conquistar el corazón de los más antiguos ha-
Wan sido cristianos en tiempos de la conquista bitantes de la zona, y tambin a que buena par-
musulmana, ni tampoco a sus descendientes, si te de los cristianos emigraron hacia Italia y
existIan penas severas -hasta la de muerte- Francia.
para los musulmanes que se convirtiesen a! En la Peninsula Ibérica el cristianismo con-
cristianismo. tinuó existiendo, no solo en Asturias, sino tam-
Un caso en extremo interesante es el de Juan bién en los territorios dominados por los mu-
de Damasco, el hijo de Mansur ibn Sarjur, un sulmanes. Como es bien sabido, ésta fue la más
cristiano siriaco (jacobita) que sirvió como ad- importante regiOn que el cristianismo logró re-
ministrador bajo la dinastIa Umayyad en el pri- cobrar de manos del islam, y ello por fuerza de
mer centro musulmán fuera de Meca en 661. armas. Empero la historia de esta reconquista
Juan de Damasco se hizo cristiano ortodoxo, y pertenece a otra porción del presente capItulo.
es famoso por su gran obra De lafe ortodoxa.
Pero no menos importante es su Dialogo entre B. Desde ci impuiso misionero británico
un sarraceno y un cristiano. En este tratado hasta las cruzadas
Juan de Damasco escribe una apologia que Ca- El avance del islam y la conversion de las Is-
racteriza la misiologia cristiana del siglo ocho las Británicas, que hemos narrado en una sec-
en el contexto musulmán. Al mismo tiempo cion anterior, cambiaron totalmente el cuadro
que considera que la fe musulmana es una he- de la distribución y expansion geográficas del
rejia, Juan de Damasco provee un modelo pa- cristianismo. Hasta entonces, éste habia encon-
ra comprender los mdtodos y entendimiento de trado su eje central en la cuenca del Mediterrá-
los musulmanes y capacitar a los cristianos a neo, en una ancha faja que se extendIa desde
argumentar con ellos sobre la fe. Los asuntos Constantinopla, Antioquia y Alejandria al este
que plantea en este tratado reflejan las preocu- hasta Roma y Cartago en el oeste. Con las con-
paciones y confrontaciones entre cristianos y quistas musulmanas, Antioqula, Alejandria y
musulmanes que perduran aün después de do- Cartago perdieron su preponderancia como
ce siglos. centros misioneros, y Constantinopla quedo li-
En Persia, Siria y Egipto el cristianismo si- mitada a extender sus esfuerzos hacia el forte,
guió existiendo, tanto en su rama ortodoxa co- pues al sur y al este la flanqueaba el islam. Por
mo en la nestoriana y la monofisita. Sin embar- otra parte, la conversion de las Islas Británicas
go, ninguna de estas iglesias mostró una vitali- fue tan completa que pronto éstas se volvieron
dad capaz de reconquistar el terreno perdido, un centro de misiones. Con el advenimiento a!
aunque si continuaron su labor misionera cob- poder de los carolingios y el consiguiente fib-
70
HI5T0RIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
recimiento del reino franco, quedó establecido diente pasión por la conversion de los paga-
un nuevo eje de vitalidad cristiana en el Occi- nos. Su primera visita a los PaIses Bajos tu-
dente, que iba desde Inglaterra al forte hasta vo poco éxito debido a que coincidió con el
Roma a! sur, incluyendo en su centro el reino perIodo de inestabilidad que siguiO a la
franco. Por otra parte, Constantinopla conti- muerte de Pipino de Heristal; pero Bonifa-
nuó existiendo como otro centro de misiones cio no cejó en sus empefios misioneros, y
cristianas. Este eje europeo y el nUcleo cons- pronto regresO a! continente europeo. En es-
tantinopolitano serán los focos del impulso mi- ta ocasión fue directamente a Roma donde,
sionero durante el resto de la Edad Media. tras algunas vacilaciones, el papa Gregorio
TIle dio su bendición y lo dotó de reliquias
1. Las misiones en el norte de Europa que habrian de acompaflarle en su misión y
a) Las primeras misiones en los Palses Bajos fortalecerle al realizarla. Esta misión, sin
y Alemania. Aunque los primeros intentos embargo, no consistIa tanto en la predica-
de ilevar el Evangelio a los Paises Bajos ción a los paganos como en la organización
partieron del reino franco, fueron los misio- y reforma de iglesias ya existentes -tarea
neros ingleses quienes lograron establecer dsta que no se ajustaba del todo a los intere-
firmemente el cristianismo en dichos pal- ses de Bonifacio. De Roma, Bonifacio paso
ses. El primero de estos misioneros fue Wil- a Turingia, donde se dedicó a la tarea que le
frido, que visitó la region en dos ocasiones habla sido encomendada por el Papa. Pero al
y bautizó a numerosos paganos converti- saber de la muerte de Radbod, decidió re-
dos. Poco después, en el aflo 690, le siguió gresar a Frisia, y allI trabajó durante algunos
Wilibrordo, también ingls, quien llegó a años bajo la dirección de Wilibrordo. Luego
Frisia con once compañeros a la manera de paso de nuevo a Alemania, pals en que
los viejos grupos irlandeses. Al tener difi- transcurrirfa la mayor parte de su vida. En
cultades con el rey frisón Radbod, Wilibror- ese pals, al igual que en Frisia, habla habi-
do se dirigió a Pipino de Heristal, quien le do antes misioneros francos e irlandeses, pe-
presto su apoyo. De allI siguió a Roma, ro parece ser que Bonifacio fue quien más
donde obtuvo la bendición del Papa. Debi- hizo por la conversion de la region. Tras la-
do a los avances de Pipino frente a Radbod, borar por algdn tiempo en Baviera, paso a
Wilibrordo logrO llegar a los PaIses Bajos y Hesse, y luego regresó a Roma para ser con-
establecerse en la ciudad de Utrecht, desde sagrado obispo antes de volver a Turingia.
donde dirigió la expansion del cristianismo En esta region los antiguos misioneros irlan-
por todo el sur de los Palses Bajos. Aunque deses hablan establecido el mismo tipo de
a la muerte de Pipino de Heristal se siguie- cristianismo distinto del romano que hemos
ron desórdenes en el reino franco que le visto ya al tratar de la conversion de las Is-
permitieron a Radbod reconquistar algo del las Bntánicas. La obra principal de Bonifa-
terreno perdido, pronto Carlos Martel lo- cio entonces fue establecer la uniformidad
gró unificar el poderlo franco y obligar a entre la iglesia de esa region y el resto de las
Radbod a retirase. iglesias relacionadas con Roma. Tras un ter-
El más importante de los misioneros ingle- cer viaje a Roma, Bonifacio se dedicó a re-
ses que se dedicaron a la conversion de los formar la iglesia en el reino franco, con el
frisones fue Bonifacio, cuyo verdadero apoyo de las autoridades. Por Oltimo, para
nombre era Winfrido, y en quien se conjuga- coronar una vida de largas y fructiferas la-
ban el espIritu aventurero caracterIstico de bores, regresó a su primer amor en Frisia,
los monjes británicos de su época y una as- donde en el año 754, teniendo unos ochen-
71
Las misiones medievales
( 'y
mas contribuyeron a completar la conver- .;
sión de los frisones despuds de la muerte de
Bonifacio. Pero fue sobre todo en el caso de
los sajones que Carlomagno utilizó el poder
de la espada despiadadamente. Las luchas
de Carlomagno con los saj ones ocupan todo
el perlodo que va desde su accesión al trono
en el año 771 hasta su muerte en el 814.
Mediante repetidas campañas, Carlomagno
L
logró establecer su poderIo y su religion en
el territorio de los sajones. Las rebeliones
fueron muchas, frecuentes y sangrientas, y
Carlomagno las aplastó violentamente. Tras
cada campafia entre los saj ones, Carlomag-
no obligaba a los rendidos a aceptar el bau-
tismo, con lo cual hacIa de la fe cristiana un Estatua ecues:re de Cadomagno.
Catedral de San Pedro, Roma
instrumento de sus propOsitos politicos, y
de su politica un instrumento para la expan-
sión del cristianismo. A cada victoria de
Carlomagno seguIan los misioneros, que se repetidamente en la historia de la expansiOn
establecIan en la region con el apoyo de las del cristianismo. Los sajones, aun siendo
autoridades francas y allI se dedicaban a ins- paganos, creian que habIa cierto poder en el
truir en la fe a los recién bautizados. bautismo, de tal modo que una vez que eran
Si bien los sajones aceptaron el bautismo a bautizados quedaban abandonados por sus
la fuerza y no puede decirse que haya habi- dioses y no les quedaba otra alternativa que
do en ellos una genuina conversion antes de ser fieles seguidores de Jesucristo, tal como
bautizarse, es interesante notar que pronto ellos entendlan lo que esto significaba. En
se contaron entre los más decididos adalides todo caso, tenemos aqui una prueba sorpren-
de la fe cristiana. Algunos de los sajones dente del hecho de que no siempre el uso de
que aceptaron el bautismo bajo la amenaza las armas lleva a una aceptación efImera del
de las armas llegaron a ser cristianos decidi- cristianismo. Y tenemos también un ejem-
dos, y contribuyeron después a la expansion p1o del modo en que ese mismo cristianis-
de su nueva fe entre sus compaheros de ra- mo, adaptado a culturas y tiempos violentos,
za. Posiblemente esto se deba, en parte al es capaz de adoptar la violencia como méto-
menos, a un fenómeno que encontraremos do misionero.
72
HIsT0RIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
Por otra parte, hay que recalcar que los me- tralan la ruina de las iglesias que aili exis-
todos empleados en la misión impactan ci tian, pero a la larga aceptaban la fe del pue-
contenido mismo del mensaje que se comu- blo conquistado y recibian ci bautismo.
nica. En el caso de los sajones, los mdtodos Puesto que las invasiones de los normandos
violentos de Carlomagno y sus ejércitos coincidieron con el ocaso del poderlo caro-
francos se combinaron con las tradiciones lingio, no fue posible realizar entre elios una
Micas de los sajones mismos para producir misión semej ante a la que antes habla ileva-
una version del mensaje cristiano cargada do a cabo Bonifacio entre los frisones. Al
de imágenes violentas. Esto puede verse en principio, los ilnicos cristianos que liegaban
ci poema anónimo Heliand, una larga poesIa a Escandinavia eran los cautivos de los vi-
de casi seis mil lIneas, escrita por un bardo kingos -aventureros y saiteadores norman-
sajón pocos años despuds de la conversion dos- o aiguno u otro normando que habIa
del pals por la fuerza de las armas francas. aceptado la fe cristiana en uno de sus viajes.
En ese poema, Jesus es el guerrero por exce- A principios del siglo IX aparece en escena
lencia, jefe de una banda de doce valientes la figura de Ansgar o Askar, monje sajón
aventureros. En la historia de su nacimiento, que dedicó toda su vida al trabajo misione-
en lugar de ovejas y pastores, hay caballos ro entre los escandinavos. Debido a circuns-
de bataila y sus guardias. Dada tal lectura tancias polIticas, un rey danés y luego uno
del mensaje cristiano, no ha de extrañarnos sueco pidieron misioneros a la corte del rey
ci que bien pronto los mismos sajones se franco Ludovico Plo. Tras aigunos esfuerzos
lanzaran a la tarea de convertir a sus vecinos infructuosos para conseguir personas intere-
por fuerza de las armas. sadas en esa labor, Ludovico decidió enviar
c) La ,nisión a los escandinavos: Ansgar. Po- a Ansgar, monje que pertenecla a un mo-
co despuCs de la muerte de Carlomagno, nasterio de la vieja tradición de lona. Ansgar
aparece en la historia europea el fenómeno estabieció su centro de operaciones en la
de una nueva serie de invasiones que otra ciudad de Hamburgo, y de alll viajó repeti-
vez amenazaban la civilización existente. Se damente a Dinamarca y Suecia. A travds de
trataba de las invasiones de los normandos o la influencia de Ludovico Plo, Roma esta-
escandinavos, un pueblo guerrero de raza bieciO un arzobispado en Hamburgo y cob-
germánica que acostumbraba atacar las cos- có a Ansgar en dicha sede. Además de via-
tas de los palses vecinos a fin de apoderarse jar personaimente a los territorios de su mi-
de sus riquezas. Su cosmovisión religiosa, sión, Ansgar envió sacerdotes a que predica-
por ser Un grupo germánico, era muy simi- sen entre los escandinavos, y al ver nifios
lar a la que hemos explicado arriba pam daneses expuestos a la yenta como escla-
otros pueblos de semejante tradición. Al vos, los compró para adiestrarios en el traba-
principio, estos normandos se limitaban a jo misionero. Al presentar ci evangeiio,
ataques momentáneos en los que saqueaban Ansgar predicaba a Cristo como un dios po-
ci territorio invadido, y especialmente sus deroso capaz de dar a sus seguidores Ia Vic-
iglesias y monasterios, para retirarse inme- toria en la batalla. Puesto que este tipo de
diatamente. Más tarde comenzaron a esta- mensaje era afin con la cosmovisión reii-
blecer colonias en algunos de los palses que giosa y cultural de los escandinavos, no fue-
acostumbraban invadir, y asi liegaron a esta- ron pocos los que lo aceptaron. Aunque no
se en paises cristianos, los normandos yos en los palses escandinavos hayan conti-
73
Las misiones medievales
74
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
sus territorios fueron Olaf Tryggvason y uega, la conversion de Suecia tuvo lugar me-
Olaf Haraldson. diante la adhesion de ciertos reyes a la fe
Olaf Tryggvason, quien habla nacido en el cristiana. El primer rey cristiano acerca del
exilio y cuya juventud transcurrió en Rusia cual tenemos noticias fidedignas es Olov
e Inglaterra, trató de implantar el cristianis- Skotkonung, quien gobernó a principios del
mo cuando, a fines del siglo décimo, logró siglo XI. Por otra parte, no debemos olvidar
hacerse dueflo del reino noruego, que habIa que mucho antes Ansgar habIa realizado sus
sido fundado por su bisabuelo, Harald Haar- viajes misioneros a la region y que alll ha-
Wan quedado comunidades cristianas de las
fager. Sus mdtodos fueron violentos, y no
vacilO en hacer uso del destierro y aun del cuales no tenemos más noticias, pero cuya
influencia debe haber persistido. En todo ca-
castigo fIsico. En otras ocasiones, median-
te diversas clases de concesiones, compra- so, los sucesores de Olov fueron en su mayo-
ha el favor de la asamblea de dirigentes de na cristianos quienes trataron de llevar a sus
una region y hacIa que éstos decidiesen que slbditos a aceptar su fe. Rara vez se utilizó
la region se hiciera cristiana. Fue por sus es- la fuerza fisica para lograr este propósito.
fuerzos que el cristianismo se extendió a la Puesto que la conversion de Suecia fue unos
colonia escandinava de Islandia y luego a la den aflos más tarde que la de Dinamarca y
de Groenlandia, para por fin ilegar con Leif Noruega, se vio favorecida por un movi-
Ericson a las costas de Amrica del Norte miento de despertar religioso que existIa en
-a la region que Leif llamO Vinland o tie- todo el cristianismo occidental y cuyos prin-
rra del vino. Sin embargo, no tardó en sur- cipales exponentes fueron, primero, el mon-
gir un fuerte movimiento de oposición a la je Hildebrando, que llegó a ocupar el trono
polItica de Olaf. Este movimiento contaba papal bajo el nombre de Gregorio VII, y lue-
con el apoyo de Svend I de Dinamarca, y go el monaquismo cisterciense. Debido a es-
culminó en una batalla en la que Olaf per- to, la conversion de Suecia fue en cierto sen-
dió la vida y el reino. Noruega paso a ma- tido más rápida y más profunda.
nos de Svend y de la reacción pagana. Es importante señalar que en la conversion
Diecinueve afios más tarde, Olaf Haraldson de los palses escandinavos se siguió un m&
todo que se ajustaba a las estructuras socio-
logró reconquistar la independencia de Nor-
uega y se dedicó a continuar la obra de con- logicas, culturales y polIticas de dichos pa-
version iniciada por Olaf Tryggvason. Sus Ises. Era costumbre de los escandinavos lie-
métodos no eran tan violentos como los de var todas las decisiones de importancia a
su homónimo, aunque no vacilaba en usar la una asamblea de los principales personajes
fuerza cuando le parecIa necesario. Sus es- de una region. En esta asamblea, que lleva-
fuerzos cesaron cuando de nuevo apareció ba el nombre de Thing, se tomaban decisio-
un movimiento de oposición y Olaf perdió nes que luego serIan adoptadas por todos.
su trono y la independencia de su pals, esta En repetidas ocasiones -y sobre todo en el
vez en provecho del rey Knud de Dinamar- caso de la conversion de Islandia, que no
ca. Pero ya la obra de Olaf estaba hecha y, hemos discutido aqul, pero que tuvo lugar
además del hecho de que el propio Knud mediante una decision de la asamblea gene-
era tambidn cristiano, la conversion de los ral o Aithing- los reyes o los misioneros
paganos que quedaban en Noruega conti- que pretendlan lograr la conversion de una
nuarla sin detenerse. comunidad planteaban la cuestión ante el
75
Las misiones medievales
tenemos un ejemplo de un método misione- mos algo acerca de los más importantes mi-
ro que se ha seguido en muchas partes del sioneros que fueron a la regiOn.
mundo y en distintos momentos de la histo- Las primeras misiones cristianas a los pue-
na, y en el que no se buscan conversiones blos establecidos en Europa central tienen lugar
individuales entre quienes no piensan en tér- aproximadamente durante el gran florecimien-
minos individualistas, sino que se acepta la to del poderlo carolingio. Más tarde, el crecien-
estructura sociológica, cultural y poiltica co- te poder de Sajonia y de su vástago, el Sacro
lectivista del pueblo cuya conversion se bus- Imperio Romano Germánico, vino a ocupar el
Ca, y se plantea el Evangelio, no a indivi- vacIo politico que habla dejado el desmem-
duos particulares, sino a la comunidad como bramiento del Impenio Carolingio. Por otra
un todo. parte, debido a su posición entre Roma y
Constantinopla, esta zona fue centro de ten-
2. Las misiones en Europa Central sión entre ambas sedes, que se disputaban la
Al aceptar los escandinavos la fe cristiana, autonidad sobre los nuevos campos misione-
quedaba prácticamente completada la conver- ros. Por esta razón, al estudiar la expansion
sión de los pueblos germánicos que desde fi- del cristianismo en el centro de Europa, es ne-
nes de la Edad Antigua invadieron el occiden- cesanio tener en cuenta tres factores: la presión
te de Europa. Sin embargo, habia en Europa polftica e imperialista, primero carolingia y
central otros grupos no germánicos que habf- luego del Sacro Impenio Romano Germánico;
an Ilegado allI como pante de la gnan migra- la sede romana y su rival en Constantinopla; y
ción que empujó a los germánicos hacia ]as los intereses imperialistas pero limitados del
frontenas romanas. Casi todos estos grupos Imperio Bizantino.
eran eslavos, aunque habIa otros de importan- De todos los pueblos establecidos en el cen-
cia tales como los ávaros y los magiares o tro de Europa el más importante era el de los
hüngaros. Dunante el penIodo que estamos es- eslavos. Los primeros cnistianos entre los esla-
tudiando el cristianismo occidental comienza vos aparecieron por razOn del contacto con sus
a extenderse hacia los territonios ocupados por vecinos cristianos -los sajones al occidente y
estos pueblos. Como era de esperarse, esta ex- el Imperio Bizantino al sur. Empero, el más
pansion geográfica fue algo posterior y más notable esfuerzo misionero es el que lievaron a
lenta que Ia expansion en los territorios ocu- cabo dos hermanos, de nombre Constantino y
pados por los germanos, que estaban más cer- Metodio, en el siglo IX. Estos hermanos fueron
ca de la Europa occidental cristiana, tanto ge- originalmente misioneros del cristianismo bi-
ográfica como culturalmente. Luego la con- zantino, aunque su trabajo culminO bajo los
version de estos pueblos no llegó, durante el auspicios de Roma. Debido a su importancia, y
perlodo que estamos estudiando, al nivel a debido también al hecho de que en ella se des-
que llego la conversion de los pueblos germá- cubren los diversos factores que hemos apunta-
nicos. Por otra pante, las fronteras en la Euro- do más arniba, narraremos la historia de estos
pa central enan mucho más fluidas que las de dos hermanos. Antes de partir para Moravia,
Europa occidental, y esto dificulta el que ha- donde comenzarIan su misión entre los eslavos,
gamos un estudio detenido de la expansion de Constantino -a quien la histonia conoce como
la fe cristiana en esos palses. Además, el pro- Cirilo- y Metodio tenfan ya cierta experiencia
ceso de conversion en ]as distintas regiones de como misioneros. Constantino habIa sostenido
Europa central repite de tal manera las mis- disputas con los musulmanes, y tanto él como
mas caracterIsticas que basta con que haga- Metodio habIan participado de una misión en
mos algunos comentanios generales y diga- Crimea. Por otra parte, es posible que ambos
76
HI5T0RIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
conociesen algo del idioma eslavo antes de par- Occidente, por el contrario, se habia acostum-
tir para Moravia, pues se criaron en Tesalónica, brado celebrar la liturgia solamente en griego y
donde habla un fuerte nümero de habitantes de más tarde en latin. Por esta razón, además de
origen eslavo. por celos politicos, los obispos germánicos que
La misión de Constantino y Metodio co- ya comenzaban a trabajar entre los eslavos se
menzó cuando el prIncipe moravo Ratislao pi- opusieron decididamente a la obra de Cirilo y
dió al emperador de Bizancio, Miguel III, que Metodio -y esto a pesar de que la propia Ro-
le enviase misioneros cristianos. Es difIcil sa- ma autorizó el uso de la liturgia traducida. De-
ber las verdaderas razones de esta peticion. bido a esta tension siguió una serie de vicisitu-
Quizá Ratislao querIa contrarrestar la influen- des que no es necesario relatar aquI, pero que
cia occidental que se hacIa sentir a través de la muestran cómo la vida toda de Cirilo y Meto-
union entre el cristianismo y el imperialismo dio transcurre en medio de un torbellino de ce-
politico que era caracterIstica de sus vecinos los entre Roma y Constantinopla, y entre los
occidentales. Quizá se dejó ilevar sencillamen- poderes politicos de Bizancio y del Imperio
te por el prestigio del patriarca Focio, uno de Romano Germánico. En cuanto a los hermanos
los hombres más sabios que hayajamás ocupa- en cuestión, hicieron todo lo posible por resol-
do la sede constantinopolitana. En todo caso, el ver esta tension viajando repetidamente a Ro-
Emperador Miguel III decidió enviar a los dos ma y logrando el apoyo papal para una misión
hermanos, Constantino y Metodio, en respues- que en sus orIgenes era oriental. Sin embargo,
ta a la petición de Ratislao. esto sirvió de poco y los obispos germánicos
Aunque estos dos misioneros se dedicaron continuaron oponiéndose a la misión de Cirilo
arduamente a la conversion e instrucción del y Metodio, no solo abiertamente, sino tambidn
pueblo al que habian sido enviados, el aspecto con intrigas polIticas.
más importante de su obra está en la confec- Como era de esperarse debido no solo a la
ción de un alfabeto mediante el cual fue posi- division entre los propios misioneros, sino tam-
ble reducir el idioma eslavo a la escritura y tra- bién a la magnitud de la obra, Cirilo primero y
ducir los primeros libros cristianos a ese idio- Metodio despuds murieron sin ver completada
ma. Al parecer, ya antes de partir en su misión, la tarea de la conversion de los eslavos. Sin
Constantino habia comenzado su version de la embargo, sus traducciones, y sobre todo el al-
Biblia al eslavo. Una vez en Moravia, tanto fabeto eslavo que habian preparado, fueron a la
Constantino como Metodio se dedicaron a esa postre el gran instrumento que sirvió para lle-
labor. Este es un ejemplo más de los muchos var el cristianismo a los pueblos que hablaban
casos en que el interds misionero llevó a os esa lengua -y es todavia el alfabeto que utili-
cristianos a crear los medios necesarios para re- zan varias lenguas de origen eslavo, como el
ducir un idioma a la escritura y a establecer ruso.
una dinámica intercultural cuyos efectos sobre Tras la muerte de Cinlo y Metodio, el cam-
la contextualización de la fe cristiana estamos p0 misionero entre los eslavos siguió dividido
apenas comenzando a entender mejor. entre la iglesia bizantina y la occidental. Fue
Además de la Biblia, Cirilo y Metodio tra- sobre todo en Rusia que la iglesia oriental ile-
dujeron al eslavo la liturgia de la Iglesia, y es- vó a cabo su labor misionera -pero esa histo-
to es importante por el modo en que ilustra la na corresponde a otra sección del presente ca-
tensiOn existente entre las fuerzas misioneras pitulo. En la parte occidental del territorio es-
occidentales y las que provenIan del Oriente. lavo -lo que es boy Polonia, Estonia, Lituania
En Oriente era costumbre celebrar la liturgia en y Latvia- fue el Occidente, mediante el poder
el idioma vernáculo de cada población. En el de ]as armas del Imperio Romano Germánico,
77
Las misiones medievales
el que llevó a cabo la conversion formal de la que se encontraba en la frontera entre am-
población. bos. Cuando en cierta ocasiOn las tropas
Es interesante notar que los sajones, quienes bülgaras se encontraban luchando junto a
un siglo antes hablan sido ilevados al cristianis- las germánicas, los bizantinos aprovecha-
mo por la fuerza de las armas de Carlomagno, ron para invadir a Bulgaria y exigir que el
ahora aplicaban el mismo mtodo para ilevar el rey Boris aceptase el bautismo y se decla-
cristianismo a sus vecinos orientales los esla- rase siibdito del emperador bizantino Mi-
vos. Ya desde tiempos de Enrique el Halcone- guel III. Boris aceptó y desde entonces se
ro, y sobre todo con el gran floreciniiento del dedicó a propagar la fe cristiana en sus te-
poderfo sajón bajo Otón I, los distintos pueblos rritorios. Quiza lo que le llevó a esto fue el
eslavos se vieron uno tras otro impelidos a interés de utilizar el cristianismo como un
aceptar el cristianismo por la fuerza superior de medio para quebrantar el poder de los no-
las armas germánicas. En diversas regiones, y bles, que se oponfan a la centralizaciOn
especialmente en las costas del Báltico, la con- monárquica y que al mismo tiempo defen-
version se llevó a cabo de una manera que era dian las viejas costumbres paganas. Como
una simple repetición de la conversion de los era de esperarse, surgió una reacción entre
sajones bajo Carlomagno. los nobles paganos, pero Boris la aplastó
Hubo, sin embargo, otro factor que contri- definitivamente. A partir de entonces, los
buyó a la conversion de los eslavos. Este fue bautismos se multiplicaron, al mismo tiem-
la uniOn del sentimiento nacionalista con el P0 que Bizancio y Roma se disputaban la
cristianismo. Un caso tIpico de esto es el de hegemonia sobre el nuevo territorio cris-
Polonia, en cuya unificaciOn el cristianismo tiano. Tras largas idas y venidas, Boris se
jugó un papel preponderante. Lo mismo pue- decidió por el cristianismo oriental y éste
de decirse acerca de los hOngaros, aunque s- correspondió a sus favores consagrando un
tos no son un pueblo eslavo. En la cristaliza- arzobispo bOlgaro, con lo cual quedó fija-
ción del sentimiento nacional hOngaro, y so- da una relación estrecha entre Bulgaria y
bre todo en la obra de sus reyes Geisa y Este- Constantinopla.
ban, el cristianismo jugO un papel de primera Cuando Boris renunció al trono para retirar-
magnitud. se a un monasterio, le sucedió su hijo Sime-
on. Aunque éste tuvo al principio algunas
3. La Expansion del cristianismo bizantino dificultades con una guerra civil, logró con-
Debido al avance del islam, el cristianismo tinuar la obra de la conversion de Bulgaria.
bizantino se vio limitado a extenderse hacia Debido a que SimeOn habIa sido monje y
el noroeste, en la Peninsula Balcánica, y ha- tenIa una profunda comprensión del carác-
cia el norte, es decir, lo que es hoy Rusia. ter del cristianismo, la conversion de Bulga-
a) La conversiOn de Bulgaria. El primer epi- ria fue más profunda que la de otros pue-
sodio notable en la expansion del cristia- blos en los que hubo también una conver-
nismo bizantino en el perIodo que nos ocu- sión en masa. SimeOn se ocupó de que se
pa fue la conversion de Bulgaria. Aunque tradujesen al bOlgaro libros cristianos, y uti-
antes habia habido en ese pais misioneros lizó a algunos de los discIpulos de Cirilo y
tanto latinos como bizantinos, el cristianis- Metodio para ayudar en la obra de conver-
mo en Bulgaria recibió su mayor impulso sión e instrucciOn de sus stibditos eslavos.
cuando el rey Boris acepto el bautismo. Además, Simeón se ocupó de establecer y
Tanto el cristianismo occidental como el defender la independencia de Bulgaria to-
bizantino buscaban la alianza de Bulgaria, mando para si el titulo de Emperador y ha-
78
HISTORIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
ciendo nombrar un patriarca bdlgaro, de mir, al igual que los reyes escandinavos de
modo que la iglesia en ese pals fuese auto- Noruega, hizo uso de la fuerza para obligar
cefálica -es decir, que tuviera su propia a sus stibditos a aceptar el bautismo. Segdn
cabeza. otras versiones, su obra fue más pacIfica, y
b) La conversion de Rusia. La más notable consistió sobre todo en fundar monasterios,
expansion bizantina durante el perIodo que establecer cortes eclesiásticas, importar reli-
nos ocupa fue la que tuvo lugar hacia el quias e iconos y estimular la obra misione-
norte, en lo que boy es Rusia. Esta zona es- ra. Se narra que Vladimir bizo que la estatua
taba habitada por eslavos, pero sobre ellos del Dios Penin en el tope de la montana más
dominaban invasores escandinavos que se alta de Kiev, con su cabeza de plata y bigo-
hablan establecido primero en la ciudad de tes de oro, fuera destruida. Más tarde su hi-
Novgorod y luego en la de Kiev. Al mismo jo Yaroslav continuO su obra, tomando espe-
tiempo que sus parientes en Escandinavia cial interds en la producción de literatura
aceptaban la fe cristiana, los señores de cristiana en lengua eslava. Desde entonces
Kiev aceptaban esa misma fe, aunque en su la tradición ortodoxa se convirtiO en la reli-
forma bizantina. giOn de Rusia, y gozó del apoyo del estado
No sabemos cómo llegó el cristianismo por hastael 1917.
primera vez a! reino de Kiev. Flabia en Los <<monjes colonos>> también participaron
Constantinopla soldados rusos que servIan en la evangelizaciOn de las tribus finlandesas
bajo el Emperador, y es probale que algunos en Rusia. Una vez más, el monaquismo se
de éstos hayan aceptado el cristianismo en convierte en un vehIculo de evangelización
dicha ciudad y hayan regresado a su pals y simultáneamente comunica la civi!ización
natal llevando consigo su nuevafe. Tambidn rusa de su época. A!gunos historiadores or-
el patriarca Focio y más tarde el emperador todoxos señalan que en estos <<monjes cob-
Basilo I enviaron misioneros a! reino escan- nos>> se manifiesta una espiritualidad en la
dinavo que se extendIa hacia el forte. que se abandonan los placeres el mundo pa-
En todo caso, sabemos que a mediados del ra luego volver a ese mismo mundo a lievar
siglo X la reina Olga se convirtió a! cristia- el Evangelio.
nismo e hizo todo cuanto estuvo a su alcan- Finalmente, merece menciOn la obra de un
ce por extender su fe entre sus sdbditos. Re- laico, TrIfono, quien trabajó y llevó en evan-
alizó la mayor parte de sus contactos con el gelio a los lapones en la regiones norteñas
Occidente, especialmente a través del em- de Rusia.
perador Otón I, y no parece que sus esfuer- Aunque la conversiOn de Rusia parece haber
zos hayan tenido mayores consecuencias sido muy superficial, es notable que el ens-
directas. tianismo en ese pals resistió las invasiones
Fue un nieto de Olga, Vladimir, quien ver- de los mongoles en el siglo XIII, pues ya pa-
daderamente hizo del reino de Kiev un rei- ra esa fecha era uno de los pilares de la cre-
no cristiano. Esto fue a fines del siglo X, ciente identidad naciona! rusa, y que salió
pero no sabemos qué razones lievaron a de esas dificultades aun más pujante de lo
Vladimir a aceptar la fe cristiana y mucho que antes habla sido.
menos qué le hizo inclinarse hacia Bizancio Con el correr del tiempo, el cristianismo ru-
ms bien que hacia Roma. Tampoco sabe- so llegarIa a tener tanta o más importancia
mos a ciencia cierta qué hizo Vladimir en que su iglesia madre en Bizancio, a tal extre-
favor de la conversion de sus sübditos a! mo que MoscU ha sido considerada la <<ter-
cristianismo. Segiin algunas fuentes, Vladi- cera Roma del cristianismo.>>
79
Las misiones medievales
'
Pronto surgió a Ieyenda de que Santiago descendla del cielo a combatir en pro de
Ids crstianos Representación de <Santlago Matamoros> en la catedral de Granada.
80
HIsT0RIA GENERAL DE LAS MISI0NES
todo a la influencia del cercano reino franco. Es a partir del siglo XI que comienzan las
De las montañas asturianas, los cristianos más importantes batallas de la Reconquista.
descendieron a Leon, donde establecieron En el año 1085 los cristianos tomaron la vie-
un nuevo centro de resistencia. Más tarde, al ja capital de Toledo. Tras este desastre, los
separarse Castilla de la monarquIa leonesa, musulmanes fueron reforzados por los al-
aparecerIa ci más importante estado espa- moravides, procedentes de Africa, que de-
no!. En las laderas de los Pirineos, el origen rrotaron repetidamente a los ejércitos cris-
de Navarra, Aragon y Cataluña muestra la tianos. Pero sus propias disensiones internas
influencia franca. les impidieron detener definitivamente la
Las primeras batallas de la Reconquista tuvie- Reconquista de Espafla. Cuando, a fines del
ron lugar al norte del rIo Duero. Al parecer, siglo XII, la nueva invasiOn africana de los
todas estas batallas fueron de mucha menor almohades puso en peligro la independencia
importancia de to que podrIan hacemos supo- de los reinos cristianos, el rey Alfonso VII
ner los cronistas cristianos. La primera fue la de Castilla respondió organizando una gran
batalta de Covadonga, que tuvo lugar a prin- cruzada contra el poderIo musulmán. Aun-
cipios del siglo Vifi y de la que los cronistas que fueron pocos los caballeros extranjeros
árabes hacen caso omiso. Poco después co- que acudieron al llamado de Alfonso, dste
menzaron las disensiones entre los musulma- logrO la alianza de los reinos de Castilla,
nes, y los cristianos aprovecharon esta coyun- Navarra y Aragón para enfrentarse a la ame-
tura para avanzar hacia el sur. Por su parte, naza musuimana. El 16 de julio de 1212, en
impulsados por razones poilticas comptejas, la batalla de las Navas de Tolosa, los musul-
los francos atravesaron los Pirineos en la cam- manes fueron completamente derrotados.
pana que la historia recuerda a causa de la te- De entonces en adelante las victorias se Se-
rrible matanza de Roncesvalles, en que los guirIan una a otra, interrumpidas solo por
franceses cayeron en una emboscada vasca. las desavenencias interiores entre los cristia-
(
41
81
Las misiones medievales
82
r HIsT0RIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
83
Las misiones medievales
de los lugares santos. La devoción se inch- vIctima de su propio desorden y de las difi-
naba hacia la contemplación de la humani- cultades del terreno que deblan atravesar. El
dad de Cristo, humanidad que habIa vivido residuo de este primer impulso se unió a la
en Tierra Santa. Constantinopla, el viejo ba- Primera Cruzada, que partio algo despuds y
luarte cristiano en el Oriente, se haliaba que contaba con la dirección de varios no-
amenazada por los turcos selyticidas. En el bles europeos.
Occidente, los jóvenes desahogaban su espI- No es necesario repetir aquf la historia de las
ritu guerrero en pequeñas guenas intestinas. Cruzadas. Baste decir que la Primera Cruza-
,Por qué no voicar ese impulso y esa mIsti- da reunió sus fuerzas en Constantinopla,
ca hacia el Oriente? En todo esto, el verda- donde atravesó ci Bósforo para tomar la ye-
dero impulso misionero estaba totalmente cina ciudad de Nicea, que se rindió tras un
ausente. sitio de seis semanas. Durante ci largo cami-
El liamamiento de Urbano pareció confir- no a través de Asia Menor, las diversas am-
mado por una multitud de seflaies maravillo- biciones de los nobles que dirigIan las Cm-
sas, y pronto ci fuego de las Cruzadas incen- zadas se hicieron cada vez más patentes,
dió a Europa. Hubo primero una serie de hasta que por fin Balduino se separó del
cruzadas populares en ]as que multitudes sin grueso de la expedición y marchó sobre
organización ni otro propósito que el de lie- Edesa, donde fundó un estado cristiano en ci
gar a Jerusaldn partieron hacia el Oriente. aflo 1098. En ese mismo año, tras un difIcil
De camino, cometieron tropelIas contra la sitio y mediante la traición de un armenio
población local, y en particular contra los ju- residente de la ciudad, AntioquIa cayó en
dIos. La mayor parte de estos grupos des- manos de los cruzados. Un aflo despuds lie-
apareció antes de llegar a Constantinopla, garon a Jerusaldn, que cayó tras un sitio de
84
HIsT0RIA GENERAL DE LAS MisloNEs
poco más de un mes. Con la toma de esta lugar de luchar contra los musulmanes (su
ciudad y el consiguiente establecimiento del propósito inicial habIa sido atacar a Saladi-
Reino Cristiano de Jerusalén bajo ci gobier- no en sus cuarteles generales en Egipto) se
no de Godofredo de Bouillon, la Primera dedicó a la conquista y el saqueo de la ciu-
Cruzada lograba su proposito. En el camino dad cristiana de Constantinopla.
que habIa seguido, quedaron establecidos Puesto que la Cuarta Cruzada implantó un
estaclos cristianos como los de Edesa, Antio- emperador y un patriarca occidentales en
quIa y Tripoli. Constantinopla, con esto pareció haber que-
El éxito de la Primera Cruzada se debió en dado subsanado ci cisma entre Roma y
parte a la debilidad interna de los turcos sd- Constantinopla. Pero en realidad solo se lo-
yticidas y en parte a la rivalidad que existIa gró debilitar aun más al Imperio Bizantino,
entre éstos y los árabes fatimitas. Sin embar- baluarte de Europa frente a las invasiones
go, la cristiandad quedó convencida de que onentales. Cuando Constantinopla logró re-
era posible conquistar el territorio perdido al conquistar su independencia de Roma, la
poderio musulmán mediante la fuerza de las distancia que la separaba de la sede papal se
armas. Esta fue la razón por la que el con- habIa hecho aun mayor, y su poderio politi-
cepto de la cruzada ejerció gran poder sobre co, econOmico y militar habia sufrido una
la mentalidad medieval. Y también por esta pdrdida irreparable cuya consecuencia final
razón Europa continuó enviando nuevas ex- seria la desaparición del Imperio Bizantino.
pediciones hacia el Oriente, aunque ninguna Aunque el ideal de las Cruzadas continuó
de ellas tuvo el éxito de la primera. La cal- ejerciendo una fuerte atracción sobre la
da de Edesa en ci aflo 1144 fue la ocasiOn mente medieval, solo la Primera Cruzada, y
del inicio de las Cruzadas Segunda y Terce- en cierta medida la Tercera, lograron sus ob-
ra. La Segunda terminó en un desastre total. jetivos. Por otra paste, como medios para la
La Tercera solo logró reconquistar a Acre. expansion del cristianismo en territorio mu-
La Cuarta Cruzada fue desastrosa, pries en sulmán, las Cruzadas fracasaron rotunda-
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Las misiones medievales
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mente. Todos los estados establecidos en el de las Cruzadas abrieron nuevos horizontes a
Oriente por las Cruzadas sucumbieron ante los cristianos occidentales. El comercio au-
el poderIo del islam. Tampoco se logró la mentó, y con ei
las grandes ciudades y la mo-
conversion de los musulmanes sino que, por vilidad de la población. Nuevas corrientes de
el contrario, el odio de éstos hacia el cristia- pensamiento penetraban en el mundo cristiano
nismo se hizo más violento. Hasta el dIa de -sobre todo la filosofIa de Aristóteles, al
hoy la memoria de las Cruzadas continda principio a través de traducciones hechas en
enconando las relaciones entre musulmanes España. Era la época del florecimiento de la
y cristianos. arquitectura gótica y de los primeros escolás-
Sin embargo, en otras regiones del globo el ticos. El poderIo del Papa iba en aumento. Y a
ideal de las Cruzadas contribuyó en buena esto se unIa la piedad profunda que encontra-
medida a la cristianización de territorios an- mos en una persona como San Bernardo de
tes paganos. Tales fueron los casos de Fin- Caraval.
landia, España y, en cierta medida, nuestra La culminación de todo esto Ilego en el si-
America. Pero estos acontecimientos perte- gb XIII, el siglo de oro de la Edad Media. Es
necen a otras secciones de nuestra historia. la época de los grandes escolásticos y de mo-
cencio III. Es Ia época del florecimiento de las
C.Desde el renacimiento del siglo XII universidades de Paris, Oxford y Bolonia. Pe-
hasta fines de [a Edad Media ro sobre todo es la época de las Ordenes Men-
1. La Europa occidental dicantes de San Francisco de AsIs y de Santo
Por razones que no es necesario ni posible Domingo de Guzmán.
discutir aquI, el siglo XII vio un renacimiento a) San Francisco y la Orden de los Hermanos
en la cultura y la vida toda de la Europa occi- Menores. San Francisco, cuyo verdadero
dental. Irónicamente, los contactos con los nombre era Juan, nació a fines del siglo XII
musulmanes de España y del Oriente a través en la población italiana de AsIs. Desde su
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HI5T0RIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
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Las misiones medievales
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HIsT0RR GENERAL DE LAS MIsIoNEs
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Las misiones medievales
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La lnquaicidn se utilizd en ocasión para asegurarse de
que los
conversos del judaIsmo abandonasen todo vestigio de esa fe.
manes. Como es de suponerse, este tipo de papa, le llevó consigo en un recorrido por la
trabajo requerIa una preparación intelectual Peninsula. Desde entonces se dedicó San
mucho más amplia que la que requerla el Vicente a una obra de predicación en la que
que se llevaba a cabo entre paganos. En la logro la conversion de miles de judIos, in-
obra de conversion de los musulmanes, se cluso un rabino que más tarde llegó a ser
distinguio Guillermo de TrIpoli, quien en obispo.
esa ciudad, e indudablemente ayudado por La vida toda de San Vicente estuvo llena de
la presencia de los cruzados, logró la con- visiones que le hacIan sentir nuevos llama-
version de gran nOmero de musulmanes. mientos de Dios. Por el aflo 1398 tuvo una
Fue entre los judIos, y particularmente en vision en la cual Jesucristo le ordenaba que
España, que los dominicos lograron sus más se dedicase a predicar la proximidad del jui-
espectaculares conversiones. Dentro de este cio final. Esta visiOn le llevO por toda Euro-
contexto debemos mencionar a Raimundo pa hasta su muerte, en el afio 1419. Fue Ca-
de Pefiaforte, y sobre todo a San Vicente Fe- nonizado poco después, y por su labor entre
rrer. Vicente nació en Valencia en el año los judIos se le conoce como <<el Apóstol de
1350, y se unió a la Orden de Predicadores los JudIos>>.
cuando tenIa apenas dieciocho años. Pronto c) Las mujeres como agentes de misión. La im-
se destacó por sus dotes de predicador y de portante contribución de las mujeres a la mi-
estudioso, yen el aflo 1385 llegó a ocuparla siOn de la iglesia durante este perlodo mere-
cátedra del Cabildo Central de Valencia. Su ce reconocimiento particular. Frecuente-
gran trabajo de predicación a los judlos co- mente se desconoce tal contribución, por-
menzó en el aflo 1390 cuando el cardenal que se entiende la misiOn en tdrminos de ir
Pedro de Luna, que más tarde ilegarfa a ser a lugares lejanos, cosa que les estaba gene-
90
HISTORIA GENERAL DE LAS MisloNEs
91
Las misiones medievales
guerra de reconquista, aunque ésta era ante- ra los rusos. Puesto que los mongoles eran to-
rior a las expediciones a Tierra Santa. Tam- lerantes con el cristianismo, dste pudo exten-
bién en Francia se promulgó una cruzada, derse bajo el ala de la relativa calma que los
no ya contra los musulmanes, sino contra nuevos conquistadores habIan impuesto en la
los cátaros o albigenses del sur del pals. Du- region circundante. Hacia el oriente, el cristia-
rante el perlodo que estamos estudiando, el nismo ruso se extendió hasta la ciudad de Sa-
método de las cruzadas se usó especialmen- rai, capital de los mongoles. Además, hacia el
te para extender el cristianismo hacia la re- norte se extendió entre los finlandeses y lapo-
gión del centro de Europa, sobre todo en las nes. Al principio esta expansion no fue el resul-
costas del Báltico y en lo que hoy es Finlan- tado de un impulso misionero. Se trataba sen-
dia. Mediante cruzadas fueron conquistadas cillamente de algunos cristianos rusos que, por
Livonia y luego Prusia, Lituania y parte de no vivir bajo el dominio de los mongoles, emi-
Estonia. Para estas cruzadas se utilizó la or- graban hacia el norte y allI establecfan ermitas
den monástica y militar de los Caballeros que luego se convertlan en monasterios y por
Teutónicos. Aunque esta orden tenla ciertas Oltimo daban lugar a pequefias poblaciones.
caracterIsticas monásticas, estaba formada Esto puso a los rusos en contacto con pueblos
por soldados que invadIan una region, la no cristianos, y por esta razón les dio un nuevo
conquistaban en el nombre de Cristo y lue- impulso misionero.
go la gobernaban y explotaban en su propio El más importante de los misioneros entre
provecho y sin prestar gran atención a los los finlandeses fue San Esteban de Pema. Este-
intereses de los habitantes. Hacia Finlandia, ban era un erudito que abandonó sus libros con
el rey Eric el Bueno de Suecia llevó otra el propósito de ir a Ilevar las nuevas del Evan-
cruzada que subyugo la regiOn. Además, hu- gelio a los finlandeses que vivian al norte de
bo cruzadas que fueron dirigidas contra Rusia. Al igual que tantos otros antes y des-
otros cristianos, unas sin premeditación, co- puds, Esteban redujo a la escritura el idioma de
mo en el caso de la que tomó a Constantino- aquéllos entre quienes trabajaba. Además se
pla, y otras con toda intención, como la que dedicó a la obra social entre su rebaflo, defen-
fue dirigida contra Federico II. didndole frente a los invasores extranjeros y
ayudándole a obtener el alimento en tiempo de
2. La expansion del cristianismo oriental escasez. Su prestigio aumentO a travds de algu-
Como era de esperarse, la toma de Cons- nos milagros, y pronto logró bautizar a buen
tantinopla por los cruzados, y despuds la cons- nOmero de finlandeses, entre quienes fundO
tante presión de los turcos, no le permitieron a monastenos y se dedicó a adiestrar y establecer
esa antigua metrOpoli cristiana hacer una am- un clero nativo. A su muerte, sus discfpulos
plia tarea misionera. Además, Constantinopla San JerOnimo y San Pitirim continuaron su
habla quedado rodeada por los musulmanes a obra, que sellaron con el martirio. Pero el cris-
un lado y por otros cristianos al otro. Por lo tan- tianismo siguió extendidndose en la region gra-
to, correspondió a la Iglesia Rusa la tarea de cias al recuerdo y al impulso de Ia obra de Es-
continuar extendiendo el cristianismo orto- teban.
doxo. Aunque al principio la conversion de Ru- También entre los lapones y hacia el Mar
sia fue bastante superficial, poco a poco fue Blanco se extendió la obra misionera del cris-
hacidndose más profunda y liegando a penetrar tianismo ruso, mas no tenemos noticias exactas
en la vida del pueblo. Cuando en el siglo XIII y fidedignas acerca de esta obra. En Lituania se
los mongoles invadieron la regiOn, el cristianis- estableció el cristianismo ortodoxo a travds de
mo vino a ser slmbolo de unidad nacional pa- las conquistas rusas de los siglos XIII y XIV,
92
HIsT0RIA GENERAL DE LAS MISI0NES
pero cuando los lituanos vinieron a formar par- En segundo lugar, estas conversiones en ma-
te del Reino de Polonia la iglesia ortodoxa que sa ocurrfan a menudo mediante la acción de
allI existIa se unió al cristianismo romano. un rey, que bien podia serb de Ia propia nación
-como en el caso de los reyes de Inglaterra-
0. Consideraciones generales o bien podia ser un invasor que veIa en el cris-
Al terminar nuestro estudio de la expansion tianismo un apoyo para su politica expansionis-
del cristianismo durante la Edad Media, debe- ta -como en el caso de Carlomagno y los sa-
mos detenernos a hacer algunas consideracio- jones. Las más de las veces la función del rey
nes generales acerca de esa expansion. Fue du- en la conversion se limitaba a prestar el patro-
rante la Edad Media que el cristianismo logro cinio de su prestigio a la nueva fe, pero fueron
arraigarse en el norte de Europa, y que se ex- frecuentes los casos en que el rey apeló a la
tendió además hacia la China y Rusia. Por otra fuerza para llevar a sus stibditos a las aguas
parte, fue también durante este perIodo que el bautismales. Además hubo ocasiones en ]as
cristianismo sufrió ante el islam algunas de sus que, con el fin de proteger sus fronteras, un go-
pérdidas territoriales más notables. Todo esto bernante envió misioneros a los paIses vecinos
da testimonio del carácter complejo de los mil -como en el caso de la protección prestada a
aflos que reciben el nombre de Medioevo, y Bonifacio por parte de Carlos Martel.
que no conviene simplificar como si se tratase En tercer lugar, ha de señalarse la impor-
de una realidad monolItica, sin variaciones y tancia del monaquismo en la expansion de la fe
vacilaciones de ninguna clase. cristiana. Son frecuentes los casos de monies
Sin embargo, es posible extraer de las pági- que abandonaban sus antiguos lares en busca
nas que anteceden ciertas generalidades que de soledad y resultaban ser, sin ellos proponér-
pueden ayudarnos a comprender el carácter de selo, precursores y fundadores del cristianismo
la expansion del cristianismo durante la Had en regiones a donde éste no habla llegado aim.
Media. En otros casos, como en el de muchos monjes
En primer lugar, resulta interesante notar irlandeses, quienes se lanzaban a tierras de pa-
que la conversion en masa de todo un pueblo o ganos lo haclan conscientes de su responsabi-
una nación, lejos de ser un fenómeno fuera de lidad misionera, pero con el propósito primor-
lo comdn, fue durante toda la Had Media el dial de hacer de su obra entre los paganos un
modo de conversion más frecuente. Natural- acto más de renunciación. Por otra parte, aun
mente, esto redundaba casi siempre en perjui- en casos como el de los franciscanos y domini-
cio de la comprensión del Evangelio por parte cos, para quienes la tarea misionera constituIa
de los nuevos conversos, y para hacerles corn- el primer interims, la disciplina monástica fue
prender algo del carácter de su nueva fe era ne- uno de los pilares de su obra.
cesario un largo proceso de educación que a En cuarto lugar, conviene notar que los pa-
menudo no se siguió. La mente moderna, acos- pas y la jerarquIa romana no tuvieron en la
tumbrada como está a pensar en términos mdi- expansion del cristianismo medieval la pre-
vidualistas, siente cierta repugnancia hacia ta- ponderancia que podrIa suponerse. De hecho,
les conversiones en las que no se le permitfa a! antes de la misión de AgustIn a Inglaterra,
individuo decidir acerca de su propia religion. no tenemos noticias fidedignas de caso algu-
Pero es necesario recordar que en la sociedad no en que el Papa se haya ocupado de enviar
medieval se acostumbraba hacer las decisiones misioneros, y luego de dirigirles en su labor.
colectivamente y que hubiera sido poco realis- Más tarde Bonifacio y Wilibrordo establecie-
ta esperar la conversion de personas individua- ron relaciones con Roma, pero no fue ésta la
les aparte de sus comunidades. que los enviim en primera instancia. Si bien las
93
Las misiones medievales
Cruzadas recibieron de Roma parte de su im- los illtimos años de la Edad Media, y que pre-
pulso inicial, no puede decirse que su propó- pararfan el camino para la Reforma del siglo
sito haya sido misionero en el sentido estric- XVI.
to. Las órdenes de San Francisco y Santo Do- Sexto, la presencia del islam, mucho más
mingo tampoco surgieron por iniciativa pa- que antes la presencia de otras religiones y tra-
pal, aunque si se colocaron a las órdenes de la diciones, comenzó a obligar a los cristianos a
sede romana, y consideraron que un aspecto enfrentarse a la variedad de contextos en los
fundamental de su misión consistIa en traer a que la misiOn tiene lugar. Como resultado de
toda la humanidad a la obediencia de esa se- ello, comenzaron a aparecer diversos modos
de. Esto no quiere decir que Roma no haya de entender y de estructurar la misión.
gozado de gran prestigio, influencia y autori- Por Oltimo, debemos decir algo acerca del
dad, especialmente durante los mejores Si- mensaje de los misioneros medievales. El pun-
glos de la Edad Media; pero Si señala al he- to de partida de la mayorIa de los sermones
cho de que, a pesar de esa preponderancia, su misioneros de la Edad Media que se conservan
papel en la expansion del cristianismo no fue es un ataque a los dioses paganos. Unas veces
tan central como lo serla más tarde. De he- se les acusa de impotencia y otras se dice que
cho, no fue sino en la Had Moderna que se en ellos habita el diablo o alguno de sus repre-
comenzO a organizar el trabajo misionero ca- sentantes. Pero siempre se invita a los oyentes
tólico de tal modo que todo fuese supervisa- a abandonarles e ir en pos del solo Dios verda-
do y dirigido desde Roma. dero. Este ha enviado a su Hijo Jesucristo para
En quinto lugar, aunque es imposible me- salvar al mundo, y quien no le siga sufnrá los
dir tales cosas, no cabe duda de que las acti- tormentos del fuego eterno. Por otra parte, al-
tudes de los cristianos y de lajerarquIa ecle- gunos misioneros apuntaban a la prosperidad
siástica ante las necesidades fIsicas de la p0- de los paIses cristianos, y les prometlan a sus
blación influyeron notablemente sobre las oyentes bendiciones semejantes. Si el rey ha de
conversiones y sobre el prestigio de la iglesia. presentar batalla al enemigo, o si hay peligro
Ya hemos mencionado las beguinas y otras de que la cosecha se pierda, el misionero pro-
mujeres cuyo servicio a los necesitados hicie- mete que su Dios ha de ayudar a sus seguido-
ron mucho por mostrar el carácter práctico res. En Oltima instancia, si esto no basta, algu-
del amor cristiano. Uno de los elementos del nos misioneros recurren a las amenazas y has-
cristianismo que más habIan impactado a los ta a la fuerza.
paganos en la antigUedad era su atención a Tal era el mensaje y tales los mdtodos de los
los enfermos durante tiempos de epidemia. misioneros cristianos de la Had Media. Por
AsI lo hicieron constatar en la antiguedad muy errados que puedan parecer en el dIa de
tanto Constantino, quien declaró que antes de boy, nadie puede negar que tuvieron buen dxi-
hacerse cristiano esto le impresionó profun- to, y que los pueblos que a travds de ellos acep-
damente, como el emperador pagano Julia- taron el cristianismo fueron fieles a su fe du-
no, quien declaró que el contraste entre cris- rante siglos. En más de una ocasión los pueblos
tianos y paganos en este sentido era una ver- convertidos por los mdtodos menos adecuados
guenza para el paganismo. Empero lo con- dieron origen a fuertes movimientos misione-
trario sucedió hacia fines de la Edad Media, ros, si bien es necesario notar que algunos de
cuando se desató la peste bubónica y muchos ellos -como las sajones- pronto comenzaron
de los prelados y sacerdotes huyeron del con- a utilizar mdtodos tan poco cristianos como los
tagio. Esto fue una de las muchas causas que que habIan sido empleados para su propia con-
contribuyeron al desprestigio de la iglesia en version.
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Las misiones
en la Edad Moderna
segunda mitad del siglo XV y la prime- En la propia Europa, aparecen en este perlo-
Lara del XVI se caracterizan por una serie do y en los siglos inmediatamente anteriores
de cambios que venIan gestándose desde si- movimientos y situaciones que pudieran haber
glos antes, pero que culminan todos en este hecho suponer que el cnistianismo no estarla en
perlodo de tal manera que puede decirse que condiciones de emprender la vasta labor misio-
comienza entonces una nueva etapa en la his- nera que estos nuevos territorios colocaban
toria de Europa. En el aflo 1453 los turcos frente a él. La antigua unidad polItica se iba
otomanos tomaron la ciudad de Constantino- perdiendo debido al creciente nacionalismo.
pla y con ello dieron fin a la larga historia del La unidad filosófica de la alta escolástica habIa
Imperio Bizantino. Aunque desde algunos si- desaparecido ante los embates del nominalis-
glos antes Constantinopla habIa ido perdiendo mo. La propia unidad eclesiástica habIa sufri-
su importancia como centro misionero, a par- do las consecuencias de una serie de hechos
tir de esta fecha esa importancia será casi nu- que tendlan a debilitar la autoridad del Papa.
la. Al mismo tiempo, los exploradores de Eu- Primero fue el perlodo del papado en Avignon,
ropa occidental, sobre todo de España y Por- luego el Gran Cisma de Occidente y por Oltimo
tugal, comienzan a descubrir nuevas tierras y el movimiento conciliarista. La moral de los
nuevos caminos a territorios ya conocidos. En altos dirigentes de la Iglesia era dudosa, como
el aflo 1492 Cristóbal Colon llega a la Amen- lo hacIan entender las muchas voces que en el
Ca. En 1497 y 1498 Vasco da Gama rodea el siglo XV se alzaron para protestar contra ella.
Africa y liega hasta la India. Solo veinticuatro Además habIa quienes en las universidades y
años más tarde Magallanes y su sucesor El demás centros de estudio se preguntaban si la
Cano le dan la vuelta a! mundo. Estos viajes iglesia estaba siento verdaderamente fiel al
abren nuevos horizontes al cnistianismo euro- Evangelio, 0 Si su teologIa lo habla pervertido.
peo, y muy especialmente al de España y Por- Todo esto culminó en la Reforma del siglo
tugal. Estos nuevos horizontes y la caIda de XVI, cuando personajes como Lutero y mu-
Constantinopla se conjugan para cambiar to- chos otros protestaron endrgicamente contra la
talmente el cuadro geográfico de la expansiOn teologIa y las prácticas de la Iglesia Romaria.
del cristianismo, que ahora partirá principal- La division que se siguiO es de todos conocida,
mente del extremo occidental de Europa hacia y podemos preguntamos Si no debilitó el im-
la AmOrica por una parte, y hacia el Oriente pulso misionero del cristianismo europeo hacia
por otra. los nuevos horizontes geográficos.
95
ii
Las misiones en la Edad Moderna
Era la época del Renacimiento en Italia y del fueron lievadas a cabo por católicos romanos.
desarrollo del humanismo en el forte de Euro- Más tarde aparecen en escena las misiones pro-
pa. El Renacimiento italiano, muy especial- testanteS. Pero no es inexacto decir que el pe-
mente, tendIa a centrar su interés en la anti- riodo que va del siglo XVI al XVIII se carac-
gtiedad clásica, de tal modo que el penlodo cris- teriza por la expansion geografica y la riqueza
tiano de la historia de Europa era visto con en la reflexión teologica misional católica. En
cierto desprecio. Por su parte, el humanismo cuanto al cnistianismo oriental, éste continuó
mostraba cómo a travds de la historia los anti- existiendo en los mismos lugares donde antes
guos documentos cristianos, y muy especial- habla estado representado, y fue solo el cristia-
mente las Escrituras, habIan sido tergiversados nismo ruso el que logro extenderse hacia flue-
y mal interpretados. Con la invención de la im- vas regiones.
prenta de tipos movibles, era fácil hacer llegar
estas ideas a cIrculos donde antes no hubiesen A.Las misiones católicas
penetrado. 1. Las Razones de la preponderancia
Todos estos cambios en la condición euro- de las misiones católicas y las limitaciones
pea planteaban un gran reto para el cristianis- en las misiones protestantes
mo. Desde el punto de vista de nuestra histo-
La tarea misionera se realiza dentro de la
na, planteaban la pregunta de si éste serla Ca- realidad histórica de los pueblos. Las situacio-
paz de enfrentarse a las oportunidades que los nes geopolIticas, económicas, culturales y reli-
nuevos descubnimientos y horizontes geografi- giosas en un determinado contexto condicio-
cos abrIan 0 S sencillamente quedarIa estanca- nan las oportunidades y limitaciones en esa la-
do en el viejo continente europeo. bor. En el caso de las misiones católicas, pode-
Durante la primera parte del perlodo que mos seflalar las siguientes razones que hicieron
nos ocupa, casi todas las misiones cristianas que el catolicismo romano se extendiera más
96
HIsT0RIA GENERAL DE LAS MisloNEs
que el cristianismo protestante durante el perlo- nacional y que se disputaba con Espafla la
do que nos ocupa: hegemonIa sobre el continente era Francia,
a) La ventaja geográfica del catolicismo. El también católica.
catolicismo romano logró conquistar para si En contraste, durante sus primeros años el
a Espafla y Portugal, que eran por ese enton- protestantismo se vio amenazado de muerte
ces las dos grandes potencias marItimas. por la presión militar y polItica que ejercIan
Cuando estos paIses comenzaron a perder sobre l las grandes potencias de Europa.
importancia, su lugar en el avance misione- Alemania y Suiza, que fueron los dos focos
ro católico fue ocupado por Francia. Como iniciales del movimiento protestante, no
era de esperarse, en los paIses que tenIan eran adn naciones unificadas, y al principio
comercio constante con las distantes regio- de la Reforma el emperador que gobernaba
nes de America y del Lejano Oriente serla los territorios donde el nuevo movimiento
mucho más vivo el interés misionero, ade- nació era Su Majestad Católica Carlos I de
más de que esos paIses contribuirIan a ex- Espafla, Carlos V de Alemania. Holanda
tender el cristianismo romano mediante sus pertenecla a la corona espaflola. Los paIses
conquistas militates y económicas. El pro- escandinavos estaban demasiado lejos para
testantismo, por el contrario, naciO en el intervenir activamente en la contienda, y só-
centro de Europa, en regiones carentes de lo Suecia, bajo el rey Gustavo Vasa, logró
costas o al menos de gran poderfo marItimo. hacer sentir su poderfo militar de una mane-
Cuando logró conquistar naciones como ra decisiva. En cuanto a Inglaterra, la super-
Holanda, Inglaterra y los paIses escandina- vivencia del protestantismo en ella estuvo en
vos, éstas no eran potencias navales. La gran duda durante algtmn tiempo, y en todo caso,
época de expansion marItima de los escan- durante los primeros años del perIodo que
dinavos habIa pasado, y la de los ingleses y nos ocupa, no era adn una de las grandes po-
holandeses no habIa llegado adn. tencias europeas. Debido a estas razones, el
b) La ventaja militar y politica. El siglo XVI protestantismo se vio repetidamente ame-
fue el comienzo de la gran expansion colo- nazado por las guerras de religion, mientras
nial de Espana y Portugal, que se enrique- que el catolicismo siempre tuvo fuerzas que
cieron con el oro y otros productos proce- utilizar para el trabajo misionero y las con-
dentes de sus nuevas colonias, y que en ba- quistas en tierras lejanas.
se a esa riqueza lograron cierta hegemonIa c) La unidad católica. No cabe duda de que
en Europa. Luego, aunque la empresa colo- otra de las ventajas de que gozó la Iglesia
nial ciertamente requirió grandes recursos Romana frente al protestantismo en lo que a
humanos, estas dos potencias católicas las misiones concierne fue su propia unidad
siempre tuvieron suficientes recursos para interna. El catolicismo, aunque no erala ma-
enfrentarse a las guerras de religion sin que sa monolItica que a menudo algunos pro-
su propia existencia se viese amenazada. Pa- testantes suponerl, si tenIa cierta capacidad
ra España y Portugal, tales guerras nunca de coordinar su acción. AsI, por ejemplo,
fueron cuestiOn de supervivencia. Además, en diversas ocasiones Roma sirvió de árbitro
en el caso de Espana, la unidad nacional re- entre distintas potencias católicas que pre-
cidn alcanzada tenla una fuerte dosis de sen- tendIan establecerse en algunos de los nue-
tido de misión, de destino histórico unido a vos territorios. Además, aunque la expan-
la empresa de la Reconquista y Ia defensa y sión misionera se llevO a cabo a través de las
expansion de la fe católica. La otra gran po- diversas órdenes religiosas y de las conquis-
tencia europea que habla alcanzado unidad tas de los palses católicos, Roma pudo ofre-
97
Las misiones en la Edad Moderna
98
HI5T0RIA GENERAL DE LAS MisloNEs
Alemania se fue solidificando polIticamen- zo de uno de los mds Otiles y antiguos ins-
te, Lutero desarrolló una inquietud misio- trumentos misioneros. A través de toda la
nal por los no cristianos en su region geo- historia de la iglesia, y sobre todo en la Edad
gráfica, es decir, los turcos y algunos ju- Media, los monjes eran quienes más se ha-
dIos). Por tanto, segdn Lutero, no era nece- bIan distinguido en la expansion del Evan-
sario que los cristianos continuasen toman- gelio. Aun cuando el cristianismo se impo-
do la Gran Comisión como una obligación. nIa en alguna zona por la fuerza de las ar-
Como es de suponerse, esto detuvo en gran mas, siempre eran los monjes quienes se-
manera el avance misionero del protestantis- guIan a los soldados, y con su labor de ins-
mo, hasta que la situación polItica y religio- trucción y predicación hacIan sincera la con-
sa de los protestantes comenzó a cambiar, y version que antes habIa sido forzada. Al des-
se percataron del error de esta interpreta- hacerse del monaquismo, el protestantismo
ción. quedó obligado a descubrir y crear nuevos
e) Las órdenes monásticas. Lutero y la inmen- instrumentos misioneros, algunos de los
sa mayorIa de los protestantes rechazaron cuales tendrian afinidades con el monaquis-
el monaquismo como una perversion del mo, y era de esperarse que esto tomarIa si-
Evangelio. Naturalmente, les llevaban a ello glos.
los muchos abusos y tergiversaciones que
del ideal monástico se habIan hecho, ade- 2. Las misiones españolas
más de los conceptos errados de lajustifica- a) La unificación religiosa de España. Si bien
ción que habIan cristalizado en el ideal mo- el dltimo foco que escapaba a la domina-
nástico mismo. Sin embargo, al rechazar de ción polItica por parte de los cristianos en
plano el monaquismo, la Reforma se deshi- Espaila desapareció en el año 1492 con la
- -- -"
i. :
.
.,
99
Las misiones en la Edad Moderna
rendición de Granada, esto no quiere decir cristianos>> a aquellos que en realidad conti-
que a partir de esa fecha toda la población nuaban siendo judlos. El odio del pueblo es-
española haya sido cristiana. Al contrario, pañol a los <<marranos>> -que asI ilamaban
quedaban fuertes minorIas judlas y musul- a los judIos conversos en señal de despre-
manas. En el mismo aflo de 1492 los Reyes cio- se hizo cada vez mayor, y fueron mu-
CatOlicos ordenaron que todo judIo que re- chos los que emigraron hacia otros palses de
chazase el bautismo tendrIa que abandonar Europa o hacia el norte de Africa.
España. Aunque fueron muchos los que Los musulmanes se encontraban sobre todo
aceptaron el bautismo, se planteaba la cues- en el sur del pals. Segdn los términos de la
tión de la sinceridad de su conversion. Esto capitulación de Granada en el aflo 1492, se
a su vez hacIa necesarios los oficios de la In- tolerarla la religion de los musulmanes. Du-
quisición, fundada por un proceso gradual rante algdn tiempo este principio se aplicó,
que culminó en el siglo XIII, y cuya función pero el cardenal Jiménez de Cisneros, pen-
en España y en la época que nos ocupa era sando que esto reflejaba una debilidad im-
en parte la de descubrir entre los <<nuevos perdonable, trató de exigir la conversion de
los musulmanes. Hubo rebeliones que fue-
ron aplastadas sin misericordia. Por fin, en
Memorial a la empresa colombina en La Rbida el año 1524, Carlos V expulsó de Espafla a
todo musulmán que no estuviese dispuesto a
aceptar el bautismo. Aun asI, los <<moris-
cos>> -como se llamaba a los musulmanes
convertidos- plantearon el mismo proble-
ma que los judIos conversos, y pronto la In-
quisición comenzó a vérselas con ellos. En
el ano 1567 Felipe II prohibió que los moris-
cos conservasen sus costumbres, vestimen-
tas y lengua peculiares y les ordenó que se
adaptasen a las costumbres españolas. Ade-
más, la Corona Española estableció leyes
que les prohiblan viajar a America a los con-
versos que hablan sido judlos o musulma-
nes. Tras las consiguientes rebeliones y ma-
tanzas, en el aflo 1609 los moriscos que aUn
conservaban sus costumbres fueron expulsa-
dos de Espafla. De este modo quedaba uni-
ficado el reino, aunque la influencia tanto
judla como musulmana continuarIa sintién-
dose en las expresiones culturales, arquitec-
tónicas y religiosas del pueblo espafiol y Se-
ra razón de sospecha y persecución por par-
te de la Inquisicion.
100
HIsT0RIA GENERAL DE LAS MIsIoNEs
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Las misiones en la Edad Moderna
102
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
dores. El principal propósito de éstos no era hubo siempre sacerdotes en las expediciones
descubrir nuevas tierras, sino establecerse de exploración y de conquista, así como en
en centros de población donde pudieran lo- las nuevas colonias. Algunos de estos sacer-
grar ciertas ganancias con el comercio, la dotes -especialmente los seculares- con-
agricultura y sobre todo la explotación de sideraban que su misión se limitaba a minis-
las minas. Fue la colonización española lo trar a las necesidades espirituales de los co-
que le dio permanencia a las grandes con- lonizadores. Algunos hasta llegaban a pre-
quistas del siglo XVI. Si a Hernán Cortés o guntarse si era posible convertir a los indios.
Francisco Pizarro no hubiesen seguidos nu- Pero bien temprano aparecieron otros que
merosos hombres -y más tarde por muje- contestaban a esta pregunta diciendo que no
res- que estaban dispuestos a establecerse sólo era posible, sino que era la obligación
permanentemente en las tierras conquista- de la iglesia y la corona españolas, y que el
das, es de suponerse que bien pronto los in- principal propósito de la conquista y coloni-
dígenas, sobre todo los de alta civilización zación del Nuevo Mundo era precisamente
como los aztecas, los mayas y los quechuas, la conversión de los indígenas.
hubieran logrado arrojar el yugo español. Para llevar a cabo su tarea, España contaba
La colonización del Nuevo Mundo por par- ante todo con un profundo espíritu religioso
te de los españoles fue uno de los aconteci- mesiánico surgido de la Reconquista y que,
mientos de mayor importancia en toda la combinado con el afán de conquista y aven-
historia de la expansión del cristianismo. tura de la época, se prestaba para la obra
Ya en el segundo viaje de Colón la Iglesia misionera. A principios del siglo XVI, flore-
estaba representada. Desde entonces -co- cían en España las órdenes mendicantes, so-
mo era de esperarse dado el carácter reli- bre todo la de los franciscanos y la de los
gioso de la corona y el pueblo españoles- dominicos. Ademas, España era la cuna de
103
Las misiones en la Edad Moderna
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Ignacio de Loyola y, por esa razón y muchas sino que era ademas una obligación misio-
otras, la Sociedad de Jesús había logrado nera junto a una gestión y responsabilidad
gran arraigo y alcance en el país. Estas órde- de conquista que se colocaba sobre ellos.
nes -y los mercedarios- serían el princi- De hecho, era el modo fácil mediante el cual
pal instrumento del trabajo misionero en el los papas del Renacimiento, más interesados
Nuevo Mundo. en la política y en las artes que en la reli-
Por otra parte, desde los comienzos mismos gión, descargaban su responsabilidad sobre
de la conquista la corona española contó con los reyes de España y Portugal.
el poder de dominio casi absoluto sobre la A partir del 1501, esta nueva configuración
iglesia en los nuevos territorios que se cono- política y religiosa le permitía a la corona re-
ce como el Patronato Real. En una serie de cibir el beneficio de los diezmos de las nue-
cinco bulas, Inter caetera, la primera y la se- vas iglesias, pero al mismo tiempo le daba la
gunda, Eximiae devotionis, Pus fidelium y responsabilidad de sufragar todos los gastos
Duum siquidem, todas del año 1493, Alejan- de la empresa misionera. Cuando se estable-
dro VI concedió a los reyes de España auto- cieron las primeras sedes episcopales, el pa-
ridad política y religiosa sobre todas las tie- pa Julio II concedió a los reyes de España el
rras descubiertas o por descubrir más allá de derecho de proponer los nombres de las per-
una línea de demarcación cien lenguas al sonas que a su juicio debían ocupar esos y
oeste de las Azores, y siempre que se nave- otros cargos eclesiásticos. Aunque las bulas
gara hacia el occidente y que los territorios pontificias limitaban a un patronato la fun-
en cuestión no perteneciesen a algún otro ción de la corona española, pronto se des-
príncipe cristiano. Esto no era solo un privi- arrolló entre los teólogos españoles, tanto en
legio que se concedía a los Reyes Católicos América como en la Península, la teoría del
-y, naturalmente, a los reyes de Portugal, Vicariato Regio, según la cual el Rey era el
siempre que se navegara hacia el oriente- vicario del Papa en el Nuevo Mundo.
104
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
105
Las misiones en la Edad Moderna
Algunos de los más grandes abusos fueron velada de esclavitud, con el agravante de
cometidos contra los indígenas de cultura que los «encomenderos» no tenían siquiera
primitiva que habitaban las Antillas Mayo- una inversión económica que les estimulase
res. Los españoles no venían a estas tierra a cuidar de quienes les eran «encomenda-
con el propósito de cultivarlas o explotarlas dos». Naturalmente, lo que de hecho suce-
con sus propias manos, y por ello era nece- día era que los encomenderos ni siquiera se
sario hacer uso del trabajo de los indígenas. ocupaban de aprender los dialectos indíge-
Esto se hacía difícil por medios pacíficos, nas, y sí se dedicaban con denuedo a obligar
pues los indígenas de las Antillas Mayores a los indios a producir el máximo.
no estaban acostumbrados al trabajo conti- Aunque las encomiendas se hacían con el
nuo y organizado que los españoles exigían beneplácito de la corte española, no dejaron
de ellos. Luego, el nuevo régimen resultó de crear grandes debates y dilemas sobre el
para ellos una esclavitud. Todo esto se cu- carácter de la evangelización, sobre la hu-
bría con el manto del propósito misionero, y manidad de los indígenas, y sobre la libertad
los indígenas se «encomendaban» a los co- de estos pueblos. Desgraciadamente, la co-
lonizadores con el propósito de que, al tiem- rona no siempre estaba al tanto del uso que
po que trabajaban para ellos, se les instruye- de las encomiendas se hacía. Hasta donde
se en la fe cristiana. La institución resultan- sabenos, el primero en protestar contra ellas
te, llamada «encomienda», era una forma fue el Padre Antonio Montesinos, de la Or-
den de Santo Domingo. Al ver que su predi-
cación en el Nuevo Mundo no hacía efecto,
Montesinos hizo llegar sus quejas a la corte
Francisco de Vitoria se destacó por sus traba- misma. El resultado fue que en el año 1512
jos sobre el «derecho de las Indias». Estatua se proclamó la llamada Ley de Burgos, que
frente a la Iglesia de San Esteban, Salamanca.
pretendía garantizar el justo trato de los in-
dígenas. Según esta ley, no se permitía es-
clavizar a los indígenas, los que quedaban
encomendados a un colono español no po-
dían ser vendidos ni traspasados, y su traba-
jo debía serles pagado a un precio justo.
Como era de esperarse, la Ley de Burgos
nunca se aplicó fielmente en América. Con
todo y eso, sirve de testimonio del apoyo
que la corona prestaba a los esfuerzos de los
frailes por la humanización del régimen co-
lonial, y no dejó de tener algún efecto en el
Nuevo Mundo. Por otro lado, todo esto nos
recuerda la compleja relación que existía en-
tre la evangelización y la conquista, donde
los intereses de los conquistadores, los colo-
nizadores y algunos en la metrópoli españo-
la sobrepujaban el intento de una evangeli-
zación justa. Esto nos advierte que la tarea
misionera puede estar impregnada de ideo-
logías destructivas.
106
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
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Otro defensor de los indios, mucho mas co- te, no carece de conflictos, particularmente
nocido que el Padre Montesinos, fue Fray cuando Las Casas, en un momento dado,
Bartolomé de Las Casas. Tras renunciar a su sugirió que se trajesen como esclavos ne-
encomienda, vendió sus propiedades en gros africanos para así poder darles libertad
América y regresó a España con el propósi- a los indígenas. Tras ser consagrado Obispo
to de lograr leyes más justas en favor de los de Chiapas, donde llevó a cabo un ministe-
indígenas. En España se le dio el título de rio ejemplar, Las Casas regresó a España,
Protector General de los Indios, y con él re- donde se retractó de su sugerencia en rela-
gresó a las Antillas. Allí se le trató como un ción a los esclavos africanos y escribió su
iluso que creía que los indígenas eran perso- testamento con reflexiones críticas y teoló-
nas como las demás y que podían ser paci- gicas acerca de la evangelización y coloni-
ficados con solo el amor. Debido a la impo- zación de América, para morir en su tierra
sibilidad de hacer cumplir las leyes en favor natal en el año 1576.
de los indios, Las Casas regresó a España, y El caso de Las Casas no es único en la his-
con ello comenzó una vida de idas y venidas toria de América, sino que es más bien típi-
con breves paréntesis en el Nuevo Mundo co. En la ciudad de México, el obispo Zu-
durante los cuales trataba de hacer más lle- márraga, hombre de una extensa cultura hu-
vadera la condición de los indígenas. Sus manista, se distinguió por su trabajo en pro
viajes en América le llevaron desde México de la educación e instrucción religiosa de
al Perú, siempre interviniendo en favor de los indígenas. Gracias a su interés, se esta-
los pueblos nativos. Por fin, en el año 1542, bleció la primera imprenta en el Nuevo
sus esfuerzos se vieron recompensados con Mundo. Además, los nombres de Bartolomé
las «Nuevas Leyes», con las que el Consejo de Olmedo, de Eusebio Kino, de Luis Can-
de las Indias otorgó y garantizó algunos de- cer, de Luis Beltrán y de Francisco Solano
rechos a los indígenas. Su labor, no obstan- no son sino unos pocos que nos han llega-
107
Las misiones en la Edad Moderna
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Algunas de las misiones de los jesuitas en la provincia del Paraguay eran verdaderas ciudades.
do de entre los cientos y cientos de hom- ella había. El trabajo cotidiano estaba su-
bres que se dedicaron a hacer más llevade- pervisado por los frailes, que enseñaban a
ra la condición de los pueblos nativos. los indígenas nuevos métodos de cultivo y
Además, es necesario señalar que hubo artesanía. Al mismo tiempo, se les instruía
también autoridades civiles que tomaron en la fe cristiana y se supervisaba sus cos-
muy a pecho el bienestar de los indígenas tumbres para hacerlas más acordes a las que
-entre ellos, el célebre Cabeza de Vaca. los fraile tenían por cristianas. Estas misio-
Aunque las encomiendas continuaron sien- nes eran indudablemente mejores que las
do utilizadas en el Nuevo Mundo, el princi- encomiendas, cuyo único resultado verdade-
pal método para la expansión del cristianis- ro era la explotación. Pero las misiones tam-
mo entre los indígenas de tradiciones menos bién tenían sus defectos, especialmente el
urbanas fue el de las llamadas «reduccio- de su excesivo paternalismo y el proceso de
nes». En algunas regiones la población indí- civilización o españolización que, tras arran-
gena vivía esparcida por los campos y las car a las gentes de sus viejos medios de vi-
selvas en pequeñas comunidades que pocas da, no les preparaba verdaderamente para
veces pasaban de ser una extensa familia. valerse por sí mismos en la nueva civiliza-
Tal condición hacía difícil evangelizarles, y ción y costumbres que habían adoptado. Es-
mucho más difícil regular y supervisar sus to les dejaba en un vacío cultural, religioso
costumbres. Por estas razones, y con el apo- y existencial que progresivamente también
yo de la corona, los frailes tendían a reunir fue una forma de genocidio para los indíge-
a estas familias dispersas en una comuni- nas. Por esta razón, muchas de las misiones
dad algo mayor, a la que daban el nombre de desaparecieron cuando por uno u otro moti-
«reducción» o «misión ». vo los frailes tuvieron que abandonarlas. Es-
La reduccion era una pequeña aldea cuyo to sucedió sobre todo en el Paraguay, donde
centro era la iglesia y la plaza que junto a los jesuitas habían establecido una red ex-
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HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
tensísima de misiones que alcanzaba desde ños. Para los propósitos políticos y econó-
el norte de Argentina hasta algunos estados micos, este tipo de conquista tenía la inmen-
del sur de Brasil. Cuando en el año 1567 los sa ventaja de no perturbar los medios de
jesuitas fueron expulsados de todos los terri- producción y administración que los pro-
torios españoles -una vez más ilustrando la pios indígenas habían establecido. Para los
compleja relación entre la monarquía, las propósitos misioneros, tenía también la ven-
colonias y la iglesia romana- y los francis- taja -quizás superficial y engañosa- de
canos, dominicos y demás frailes resultaron que los pueblos conquistados, acostumbra-
insuficientes para ocupar el vacío que los dos como estaban a seguir las órdenes de
jesuitas dejaron, la inmensa mayoría de las sus superiores, se mostraban dispuestos a
misiones del Paraguay desapareció. recibir el bautismo sin grandes dificultades.
Además de hacerlo en el Paraguay, los frai- Primero en México, y luego en el Perú, fue-
les de diversas órdenes -franciscanos, do- ron cientos de miles los indígenas que reci-
minicos y jesuitas- establecieron misiones bieron el bautismo sin tener una noción, si-
en todos los territorios donde había indíge- quiera ligera, del sentido de ese rito. Al prin-
nas cuya cultura no era sedentaria. En oca- cipio pocos españoles se interesaron por
siones, los misioneros iban escoltados por aprender los idiomas de estos pueblos. Pero
pequeños núcleos de soldados que protegían a partir de la obra del obispo Zumárraga en
sus vidas. Pero en muchas otras ocasiones México y del obispo Toribio Alfonso de
iban allende las fronteras del poderío militar Mogrovejo en Lima, el cristianismo comen-
español, al que servían de avanzada. Muchos zó a echar raíces más profundas entre los
de tales misioneros murieron como márti- viejos habitantes de estos dos grandes impe-
res, por mano bien de los propios indígenas rios. En la imprenta de Zumánaga se publi-
a quienes trataban de servir, o bien de otros caron libros en las lenguas maternas de los
que invadían y tomaban sus misiones. indígenas para de este modo hacerles cono-
En teoría, una vez que las misiones queda- cer algo más del sentido del cristianismo.
sen debidamente establecidas, el clero re- También se fundaron universidades en Lima
gular las pasaría a manos del clero secular, y México, además de varios seminarios pa-
y seguiría más adelante, a fin de fundar nue- ra preparar obreros entre los nativos.
vas misiones. En la práctica esto sucedió só- Pero todo esto no pudo hacer que desapare-
lo en raras ocasiones, pues los regulares no cieran del todo los vestigios de las antiguas
estaban dispuestos a abandonar sus misio- religiones, que subsistirían y se revitaliza-
nes, y los seculares no se sentían inclinados rían en nuestro siglo. De hecho, como discu-
a ocupar parroquias cuyos beneficios mate- tiremos en el último capítulo de esta histo-
riales eran pequeñísimos. ria, hoy resulta evidente la riqueza y com-
Al conquistar países de alta civilización co- plejidad de la interacción entre las religiones
mo México y el Perú, los españoles seguían indígenas y la fe cristiana, tanto en su expre-
una política misionera algo diferente. La sión católica como en la protestante y pen-
conquista consistía en suplantar a los viejos tecostal. Esta riqueza y complejidad ha obli-
amos del territorio -quienes, al igual que gado a historiadores y misiólogos a revaluar
los españoles, eran conquistadores que opri- la historia de la evangelización de los pue-
mían y explotaban a otras poblaciones y blos nativos en América Latina. En esta re-
hasta a sus mismos pueblos- y seguir ad- valuación se descubre que el proceso de
ministrando el imperio de manera semejan- evangelización y civilización fue también
te a la que habían seguido sus antiguos due- un proceso de intercambio religioso y cultu-
109
-11
ral. Esto incluye actos de resistencia que han particularmente en su labor catequética y
resultado, por un lado, en la creación de otros trabajos de evangelización a los ne-
nuevos símbolos tanto cristianos como indí- gros, el hecho de que su trabajo no partía de
genas; y por otro, en una reflexión crítica so- un sentimiento de condescendencia hacia
bre el sincretismo religioso y la identidad seres inferiores, sino que estaba convencido
cristiana indígena. de que los negros debían ser considerados
Además de los indígenas pronto hubo en como personas en todo sentido iguales a los
América negros procedentes del Africa. Es- blancos, y capaces de ocupar en la Iglesia el
tos eran traídos al Nuevo Mundo como es- mismo lugar que los blancos ocupaban. No
clavos a fin de proveer la mano de obra que cabe duda de que su obra mitigó muchos
los propios españoles no estaban dispuestos sufrimientos. Pero tampoco cabe duda de
a prestar. No es necesario señalar aquí la que él y el puñado de hombres que se inte-
tragedia que implicaba esta vida en esclavi- resaron en la suerte de los esclavos africanos
tud para hombres y mujeres que habían sido se encontraban aislados en un mar de falta
arrancados de sus propias tierras y llevados de interés y comprensión por un lado, y de
allende los mares a condiciones que les eran conflictos políticos y económicos relacio-
totalmente extrañas, para allí trabajar según nados a la labor y beneficio que producían
el capricho de sus nuevos amos. Es notable los esclavos, por otro. Si a la larga los des-
el hecho de que, a pesar del creciente núme- cendientes de los esclavos aceptaron la fe
ro de esclavos africanos traídos al Nuevo cristiana, esto se debió, no a un interés mi-
Mundo, la iglesia no parece haberse perca- sionero marcado, sino a la tendencia de los
tado de la importancia del trabajo misione- esclavos a adoptar las costumbres y la fe de
ro entre ellos. Rara vez hubo quien se dedi- sus amos. No obstante, tal como menciona-
có a predicarles el Evangelio. Quizá esto se mos arriba en relación a los indígenas, hoy
deba al concepto puramente geográfico de en día la fe cristiana en muchas comunida-
las misiones que se tenía entonces y que ha- des negras tiene vestigios de los viejos y
cía que se pensara en el trabajo misionero en nuevos cultos africanos, demostrando el in-
términos de ir a tierras aún no evangeliza- tercambio religioso y cultural entre el cris-
das. En todo caso, hubo algunos cristianos tianismo y las religiones africanas y crean-
que por motivo de su fe trabajaron especial- do un nuevo contexto donde la fe cristiana
mente entre los esclavos negros. En este busca su identidad en las culturas afrolatino-
sentido merecen citarse Alfonso de Sando- americanas.
val, quien escribiera un extenso libro sobre Si bien ya hemos resumido lo principal de
los métodos, problemas y retos de la evan- los métodos misioneros que los españoles
gelización de los negros titulado Instauran- aplicaron en el Nuevo Mundo, parece acon-
da Aethiopium Salute y, muy especialmente, sejable hacer ahora un breve recuento del
Pedro Claver. desarrollo del cristianismo en cada una de
Este último era un jesuita de origen catalán las principales regiones de América Latina
que en la ciudad de Cartagena de Indias se y el Caribe en el período que nos ocupa.
dedicó a visitar a los esclavos que llegaban Esto nos obligará sin duda a repetir mucho
del Africa. Su trabajo, además de la predica- de lo que acabamos de decir, pero por razo-
ción e instrucción, incluía el cuidado físico nes de claridad de exposición nos parece
y la alimentación de los esclavos recién lle- necesario incluir en esta historia, además
gados, que a menudo venían enfermos por de la discusión general de los métodos mi-
razón del viaje y las angustias. Es notable, sioneros que se aplicaron en nuestra Amé-
110
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
rica, un breve bosquejo dividido en zonas rida, «descubierta» por Ponce de León en el
geográficas. año 1513. Los primeros intentos de conquis-
Las Antillas fueron las primeras tierras ame- ta resultaron infructuosos, y no fue sino ya
ricanas descubiertas por Colón, y por tanto bien avanzado el siglo, cuando la presencia
fue también en ellas que comenzó la coloni- de los franceses en la Florida llevó a los es-
zación y la evangelización de nuestro he- pañoles de México a actuar, que se comen-
misferio. La consecuencia natural de tales zó la conquista efectiva de la región. En el
circunstancias fue que los indígenas de las entretanto, y aún después, fueron muchos
Antillas sufrieron los desmanes de los con- los frailes, tanto dominicos como jesuitas y
quistadores en mayor grado que los del res- franciscanos, que intentaron penetrar en la
to del Continente, y que fue en las Antillas región por medios pacíficos y cuya osadía
que primero y más crudamente se implantó culminó en el martirio. A partir de la Flori-
el régimen de encomiendas. Puesto que los da, y como parte de la misma misión, los
pueblos nativos de las Antillas no estaban frailes penetraron en lo que hoy es Georgia
acostumbrados a tal vida, y puesto que los y Virginia. En todos estos territorios el tra-
colonizadores hicieron poco por hacérsela bajo misionero fue difícil, y terminó cuando
más llevadera, el resultado fue la casi total en el año 1763 la Florida pasó a manos de
extinción de la raza indígena, que sobrevivió los ingleses.
de manera casi exclusiva en los hijos mesti- También a través de las Antillas llegó el
zos de los españoles y las indias con que se cristianismo a México. Cortés, el conquista-
amancebaban. Por estas razones, la obra de dor de México, era un hombre de profunda
los españoles en las Antillas, más que en convicción cristiana -como entendían el
cualquiera otra parte de América, fue de co- cristianismo los españoles de su tiempo. En
lonización más bien que de evangelización y su expedición le acompañaban varios cléri-
enculturación. En términos generales, los gos y religiosos que tan pronto se logró la
esclavos africanos que comenzaron a llegar victoria militar se dedicaron a bautizar a los
tan pronto comenzó a disminuir la pobla- indios por millares.
ción indígena plantearon un problema mu- Los primeros misioneros activos en Nueva
cho mayor que el de la conversión de los in- España fueron los franciscanos, que desde el
dios. Pero ya para entonces el dominio de año 1524 se establecieron en México y Pue-
las islas por parte de los españoles era tal bla. A partir de estos dos centros, y durante
que los métodos de evangelización cambia- los próximos cuarenta años, las misiones
ron y los esclavos se convirtieron a través de franciscanas se extendieron hacia el oeste y
un proceso de adaptación a la fe cristiana al luego hacia el norte, llegando hasta Durango.
tiempo que conservaban muchos elementos Los dominicos llegaron en el año 1526 y se
de las religiones africanas. establecieron también en México y Puebla,
En un territorio tan totalmente colonizado pero de allí tendieron a extenderse hacia el
como lo fueron las Antillas Mayores, la je- sur, alrededor de Oaxaca.
rarquía eclesiástica pudo establecerse bien Los agustinos llegaron siete años después
pronto. En el año 1508 se fundaron las pri- que los dominicos (1533), y se establecieron
meras tres diócesis en La Española. En el en México, a partir de donde se extendieron
1511 se estableció la jerarquía de Puerto Ri- hacia el norte y el oeste, emplazándose so-
co, yenel 1517 lade Cuba. bre todo en los enormes espacios vacíos que
Desde las Antillas, los conquistadores -y quedaban entre los distintos establecimien-
con ellos los misioneros- pasaron a la Flo- tos franciscanos y dominicos.
111
Las misiones en la Edad Moderna
Los jesuitas, que fueron la otra gran orden caragua, Comayagua, San Salvador y Vera-
que estableció trabajo misionero en México, paz. En la América Central, la Inquisición
no llegaron hasta el año 1572. Entonces se funcionó bajo la jurisdicción del Santo Ofi-
distinguieron por la fundación de institucio- cio de México, bajo el cual existían numero-
nes educativas y por sus misiones en el nor- sos comisarios en los principales poblados
te del país. Al igual que en otras partes del de Centroamérica. En términos generales,
mundo, los jesuitas fueron expulsados en el la conversión de los indígenas marchó muy
siglo XVIII. lentamente, y aún hoy un antropólogo pue-
La jerarquía mejicana se constituyó cuando, de encontrar en Guatemala comunidades en
en el año 1530, Fray Juan de Zumárraga fue las que se continúa practicando la antigua
nombrado primer obispo de México. En el religión y se sigue el calendario maya.
1534 se fundó la sede de Antequera (Oaxa- Las primeras regiones conquistadas de lo
ca), y poco después las de Michoacán, Chia- que después llegó a ser el Virreinato de Nue-
pas, Guadalajara y Cozumel. va Granada fueron Darién -hoy Panamá-
Para completar el trasplante de la iglesia es- y Urabá. Ya las expediciones de Ojeda y Ni-
pañola a la Nueva España, en el año 1569, y cuesa llevaban consigo frailes franciscanos.
por Real Cédula, se estableció en México y La primera colonia fue la de San Sebastián
Perú el Santo Oficio de la Inquisición. Aun- de Urabá, que luego se trasladó al Darién,
que desde antes había habido procesos inqui- donde en el año 1513 se fundó la sede epis-
sitoriales, el establecimiento del Santo Ofi- copal de Santa María del Darién. A partir de
cio trajo consigo una nueva época de repre- allí, se procedió a la labor misionera entre los
sión, tanto para los indígenas como para los indígenas, que a veces consistía sencillamen-
españoles, y muy especialmente para los ex- te en que los soldados conquistadores, sin
tranjeros. Tres años después de su estableci- esperar siquiera la llegada de los sacerdotes,
miento, el Santo Oficio tenía bajo proceso a bautizaran a los «conversos». A través de to-
más de cuatrocientas personas. Pero a pesar do el período colonial trabajaron en el Da-
de la Inquisición, y a veces con la anuencia rién y Urabá los misioneros católicos, tanto
de las autoridades eclesiásticas, los viejos franciscanos, como dominicos, recoletos, ca-
cultos indígenas subsistieron bajo el manto puchinos, y jesuitas. Sin embargo, aun en el
del cristianismo. El caso más notable de es- siglo XXI quedaba por hacer un extenso tra-
to es el culto de la Virgen de Guadalupe, cu- bajo misionero en Urabá.
yos orígenes se confunden con el culto a la Colombia fue el centro del Virreinato de
antigua diosa de la fertilidad Tonantzin. Nueva Granada. Además de Urabá, los es-
A partir de México, y sólo dos años después pañoles se establecieron en la zona de Car-
de la conquista del imperio de Moctezuma, tagena, conquistada por el Adelantado Don
los españoles, bajo el mando de Don Pedro Pedro de Heredia en el 1533. En el año
de Alvarado, emprendieron la conquista de 1534, llegó a Cartagena el dominico Fray
la América Central. Esta se organizó en una Tomás del Toro, primer obispo de la ciudad.
Capitanía General con sede en Guatemala y A partir de entonces, y con el apoyo del
de la que dependían las provincias de Chia- obispo Don Tomás y sus sucesores, se co-
pas, Salvador, Honduras, Nicaragua y Cos- menzó una intensa actividad misionera en la
ta Rica, además de la propia Guatemala. En que se destacaron los dominicos y los fran-
esta región laboraron los franciscanos, do- ciscanos. Los jesuitas no llegaron hasta el
minicos, mercedarios y jesuitas. Los prime- año 1598, pero entonces comenzaron un ex-
ros obispados fueron los de Guatemala, Ni- tenso trabajo misionero.
112
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
A partir de Cartagena, los españoles se diri- Inca, el trabajo misionero se vio obstaculi-
gieron hacia el sur, donde fundaron la ciu- zado por la conducta de los conquistadores
dad de Santa Fe de Bogotá, ciudad que en el en más alto grado que en el resto de Améri-
año 1562 vino a ser sede episcopal, y cabe- ca. La destrucción del Imperio Inca median-
cera de arquidiócesis en el 1564. Desde muy te la mentira y la traición, seguida de las
temprano, la iglesia colombiana comenzó a guerras civiles entre españoles, sembró en
producir su propio clero, con lo cual daba fe los indios un profundo odio y desprecio ha-
de la profundidad de su arraigo en la región. cia todo lo que se relacionase con los inva-
Sin embargo, este clero se reclutaba sólo en- sores. Este sentimiento existía especialmen-
tre los criollos y mestizos, y pasaron largos te en la nobleza del viejo Imperio, pues los
años antes de que fuese ordenado el primer súbditos eran en su mayoría pueblos con-
indígena. quistados por los incas antes de la llegada de
También Venezuela formaba parte de Nue- los españoles, y para los cuales este último
va Granada. En esta región, los primeros in- acontecimiento era poco más que un nuevo
tentos de establecer misiones culminaron en cambio de amos. En esta situación, las órde-
martirios. Fue en el siglo XVII, gracias a la nes mendicantes hicieron mucho por llevar
osadía de Francisco de Pamplona, que los el cristianismo a los indígenas del interior
capuchinos lograron establecerse en Vene- del país. Uno de los mas notables de estos
zuela. Seis años más tarde se establecieron esfuerzos misioneros fue el de los jesuitas
los observantes, al tiempo que por la región en la región de Mamas, que perduró a través
adyacente a Colombia penetraban los jesui- de siglos. En cuanto a su organización ecle-
tas. Estos últimos tuvieron gran éxito, pero siástica, Quito dependió originalmente del
cuando fueron expulsados de la región los Perú, hasta que en el año 1545 se estableció
demás religiosos no tuvieron los recursos el Obispado de Quito. Al igual que en el
necesarios para continuar su obra. En el resto de las colonias españolas, la Iglesia
1530 se erigió la sede episcopal de Caracas. erigió hospitales y escuelas que, si bien eran
Aunque el Ecuador formaba también parte insuficientes, eran el único intento de asis-
de Nueva Granada, su conquista fue em- tencia social que existía.
prendida a partir de Guatemala por Pedro de La conquista del Pera es una de las páginas
Alvarado, y del Perú por Diego de Almagro. más nefastas en la historia de la coloniza-
Aunque al principio hubo rivalidades entre ción de América. La destrucción por parte
ambos grupos por ver quién se posesionaba de España del viejo Imperio Inca y de su
de los soñados tesoros de Quito, a la postre elevadísima civilización no tiene justifica-
se reconciliaron y entre ambos tomaron la ción posible. Francisco Pizarro, el extreme-
ciudad. Desde ese momento se estableció ño criador de cerdos convertido en caballe-
en Quito un convento franciscano, y en el ro y conquistador, ha de llevar buena parte
año 1537 otro mercedario. Cuatro años más de la responsabilidad. Pero no poca corres-
tarde se establecieron también los domini- ponde también a la iglesia, y muy especial-
cos. Como en toda la América hispana, los mente a su representante Valverde, cuya fa-
sacerdotes seculares acompañaron también mosa lectura del «Requerimiento» a Ata-
a los conquistadores y desde muy temprano hualpa en Cajamarca ha quedado en la his-
establecieron parroquias, pero estos cléri- toria como un ejemplo notable, si no de trai-
gos no se ocupaban del trabajo misionero ción, al menos de fanatismo religioso. Y a la
como lo hacían lo mendicantes. En el Reino traición de Cajamarca se añade aquella otra
de Quito, como en todo el antiguo Imperio por la que Pizarro, tras haber prometido la
113
Las misiones en la Edad Moderna
libertad de Atahualpa, le hizo matar. ¡Aun- pués de los dominicos llegaron los francis-
que por razón de haber aceptado el bautismo canos y mercedarios; y en el año 1567, los
le concedió la gracia de estrangularle en vez jesuitas. Al principio estos misioneros se li-
de quemarle vivo! A la muerte de Atahual- mitaron a la evangelización de los antiguos
pa siguió la guerra civil entre los españoles, territorios del Imperio Inca, pero ya a prin-
que no se contentaban con los tesoros roba- cipios del siglo XVII los misioneros españo-
dos a los indígenas y querían ahora despo- les comenzaron a cruzar las fronteras de
jarse mutuamente de su poder y sus rique- aquel antiguo imperio. Entre los misioneros
zas. Por tanto, no ha de sorprendemos que que en los siglos XVII y XVIII contribuye-
en medio de todo esto, y hasta en el siglo ron a esta expansión del cristianismo hacia
XVIII -bajo Túpac Amaru- los indígenas las selvas orientales, son dignos de mención
se rebelaran contra los españoles, y por en- Fray Francisco de San José, Fray Pedro
de contra el cristianismo que representaban. González de Agüero, Fray Manuel de So-
A pesar de las dificultades surgidas a causa breviela y Fray Narciso Girbal y Barceló.
de la conducta de los conquistadores, y a La primera sede episcopal establecida en el
pesar también de la actuación del primer do- Perú fue la de Túmbez, cuya erección esta-
minico en el Perú -Fray Vicente Valver- ba estipulada en la Capitulaciones de Tole-
de- las órdenes mendicantes hicieron en do, y poco después se estableció la de Cuz-
el Perú un trabajo misionero sorprendente. co. No fue hasta el año 1543 que Lima reci-
La primera orden en establecerse en el Perú bió su primer obispo, y tres años más tarde
fue la de Santo Domingo, que llegó con los se hacía de ella sede metropolitana. El más
conquistadores y que en el año 1539 se ilustre arzobispo de Lima en el siglo XVI
constituía ya en una provincia independien- fue Toribio de Mogrovejo.
te de la de México bajo el título de Provin- La Inquisición fue introducida en el Perú en
cia de San Juan Bautista del Perú. Poco des- el año 1529, y continuó operando hasta
114
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
±4
del Perú, tendría lugar la conquista del res-
to del futuro virreinato. Durante la segunda
mitad del siglo XVI fuerzas procedentes del
Perú y de Asunción fundaron las ciudades
de Santiago del Estero, Tucumán, Córdoba
y Buenos Aires, esta última por segunda
vez.
Aunque hubo otras órdenes que laboraron
en la región, quienes más se distinguieron en
el trabajo misionero en el Paraguay fueron
los jesuitas. Estos se constituyeron en Pro-
vincia del Paraguay en el año 1607, y en esa
115
Las misiones en la Edad Moderna
fecha estaban presentes, además de en otros «cristianos» hacían objeto a los indíge-
Asunción, en Santiago del Estero, en Tucu- nas- fue el intento más serio y duradero
mán y Córdoba. Su obra consistió princi- por parte de los misioneros católicos en
palmente -además del trabajo de escuelas América de organizar a los indígenas en co-
que siempre les ha caracterizado- en el es- munidades cristianas.
tablecimiento de «reducciones» de indíge- En Bolivia se establecieron conventos en las
nas, y muy especialmente de guaraníes. Es- principales ciudades casi al tiempo de su
tas reducciones eran semejantes a las que se fundación, y se organizaron reducciones, no
organizaron en otras regiones del continen- sólo por los jesuitas del Paraguay, sino tam-
te, con la salvedad de que no se encontraban bién por los franciscanos. La diócesis de
en ellas guarniciones de soldados españoles, Charcas -hoy Sucre- se estableció en el
sino que los propios indígenas, y hasta los año 1551.
sacerdotes, se armaban para defenderlas. Su El cristianismo penetró en el Río de la Pla-
número se estima en 57 reducciones, en las ta tanto por mar como por el norte. Los pri-
que había alrededor de 113,000 indígenas. meros intentos de establecerse directamen-
Por su número y por su grado de indepen- te en las orillas del estuario fracasaron, y
dencia, estas misiones resultaban ser motivo los colonizadores que habían venido por
de recelos por parte de los funcionarios civi- mar para fundar a Buenos Aires se vieron
les, cuya suspicacia era alentada por los co- obligados a unirse a los de Asunción. A par-
lonizadores que veían en los jesuitas un obs- tir del Perú, llegaron a Tucumán los prime-
táculo a sus intereses económicos y de ex- ros misioneros franciscanos, entre los cuales
pansión. Esta oposición llegó a su punto se cuentan Fray Juan de Rivadeneyra y San
máximo cuando, tras la firma del Tratado Francisco Solano, a quien ya nos hemos re-
de Límites entre España y Portugal en el ferido, y que fue el primer gran misionero
año 1750, los indígenas se sublevaron en entre los indígenas del norte de Argentina.
oposición al desplazamiento a que dicho tra- Los mercedarios contribuyeron también en
tado les obligaba. Hubo quien, culpando a lo la obra misionera, llevando a cabo un traba-
jesuitas de la rebelión, le llamó la «guerra de jo de tal índole que varios de ellos fueron
los jesuitas», contribuyendo así a la campa- muertos por los indígenas. El trabajo de los
ña que desde hacía años se libraba en Euro- dominicos dependía de Chile, y su progreso
pa contra la Sociedad de Jesús. En el año no parece haber sido tan rápido como el de
1761 se anuló el Tratado de Límites y los in- los franciscanos. Los jesuitas llegaron en el
dígenas pudieron regresar a sus antiguas re- año 1585, y en el 1587 otro contingente lle-
ducciones. Pero el mal ya estaba hecho. To- gó a Buenos Aires procedente del Brasil,
davía estaban los indígenas tratando de re- pero su trabajo más permanente tuvo lugar
parar los males causados en las reducciones en el norte del país, en las misiones que ya
durante su ausencia cuando llegó la orden de hemos estudiado y cuyo centro estaba en el
expulsión de los misioneros jesuitas -año Paraguay. En el año 1570 se estableció la se-
1767. Aunque religiosos de otras órdenes de de Tucumán, y en 1620 la de Buenos Ai-
trataron de llenar el vacío dejado por los je- res.
suitas, la obra era demasiado grande para En resumen, podemos decir que la conquis-
sus fuerzas, y la decadencia no pudo dete- ta de la América Latina por parte del catoli-
nerse. Así desapareció aquel experimento cismo romano se debió a una combinación
misionero que, a pesar de su paternalismo de factores y circunstancias. Debido a la
-que no fue peor que el tratamiento de que multiplicidad de tales factores, la evangeli-
116
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
zación de América fue a la vez una historia muchas las personas que, procedentes de
de abusos, injusticias, envidias y ambiciones México, llegaban a estas islas. La mayor
desmedidas y una historia de grandes aven- parte no venía con los mismos propósitos
turas y retos de fe que no pocas veces resul- con que los conquistadores y colonizadores
taron en el martirio. La presencia de los co- habían llegado a América. Las Filipinas es-
lonizadores fue siempre una amenaza para taban demasiado lejos de España -a la que
el bienestar de los indígenas. Junto a los co- se viajaba siguiendo la ruta del Pacífico,
lonizadores, y a veces antes que ellos, vinie- México y el Atlántico- para llamar la
ron los misioneros, quienes en muchas oca- atención como centro de comercio. Para los
siones combatieron los abusos por parte de españoles en las Filipinas, éstas fueron du-
los colonizadores. Por otro lado, en algunos rante mucho tiempo punto de partida para el
casos la fuerza de las armas se empleó para establecimiento de colonias y misiones en
proteger a los misioneros y hasta para obli- el Oriente. Por esa razón los misioneros ju-
gar a los indígenas a aceptar el bautismo. garon allí un papel mucho más preponde-
Pero en la mayoría de los casos la distinción rante que en América. Y también por ello
entre el misionero y el soldado se mantuvo no se dieron los mismos abusos, ni en el
más claramente que en los últimos siglos de mismo grado, que se habían dado en dicho
la Edad Media europea. continente. Puesto que los habitantes de es-
También es necesario señalar que la cristiani- tas islas estaban poco urbanizados, se siguió
zación de la América Latina y el Caribe que- en ellas el viejo procedimiento de las enco-
dó incompleta, no sólo en lo que a su exten- miendas, que no parecen haber sido tan abu-
sión geográfica se refiere, sino también y so- sivas como en el continente americano. A fi-
bre todo en cuanto a la penetración y profun- nes del siglo XVI los agustinos, francisca-
dización por parte del cristianismo en la tota- nos, dominicos, jesuitas y recoletos llegaron
lidad de las costumbres y las creencias del en grandes números. Al igual que en la
pueblo. Aquí también hay que reconocer que América, estos frailes se dedicaron sobre to-
esto es lo mismo que sucedió desde los pri- do a establecer «misiones» o centros comu-
meros siglos de la historia de la iglesia, cuan- nitarios en los cuales se enseñaba la fe cris-
do las estructuras y teologías de misión y tiana y algunas de las costumbres europeas.
evangelización esperaban de los nuevos con- Estas misiones alcanzaron cierto éxito, y a
versos un abandono total de las antiguas reli- fines del período que estudiamos la inmen-
giones y una discontinuidad radical con sus sa mayoría de la población filipina se consi-
culturas. Quizá en el caso de la América La- deraba cristiana.
tina y el Caribe esto sucedió con más fre- El trabajo misionero en las Filipinas trope-
cuencia y alcance que en otros países, pero no zó con varios inconvenientes. El primero de
se trata en modo alguno de un fenómeno nue- ellos fue la presencia de los musulmanes en
vo en la historia de las misiones cristianas. la región del sur. Entre ellos los misioneros
c) Las Islas Filipinas. Estas islas, que reciben españoles sólo pudieron lograr unos pocos
su nombre en honor de Felipe II de España, conversos. Había además japoneses y chinos
fueron visitadas por Magallanes en el año que habían llegado antes que los españoles,
1521. Como es sabido, el gran navegante y aunque no parecen haber opuesto gran re-
portugués, que viajaba bajo órdenes de Es- sistencia a la predicación de los frailes y
paña, perdió la vida en ellas. Fue medio si- muchos hasta la aceptaron gustosos, los es-
glo más tarde que se comenzó la conquista pañoles temían su número creciente, lo cual
de las Filipinas. A partir de entonces fueron dio lugar a tristes episodios de matanzas de
117
Las misiones en la Edad Moderna
118
]¡¡l
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
cluían el extremo oriental de la América del religiones más primitivas de los pueblos colo-
Sur, todo el continente africano, y el Oriente. nizados por los españoles. Por otra parte, en las
A España le correspondía el resto de América regiones de América y Africa que tocaron en
y la casi totalidad del Océano Pacífico. Aun- suerte a los portugueses y donde había pobla-
que las Filipinas quedaban en territorio portu- ciones cuya cultura y religión primitivas les
gués, más tarde se llegó a un acuerdo por el hacía susceptibles a una colonización semejan-
cual pasaron a manos de España. te a la que llevaba a cabo España, las dificulta-
Tras los viajes de exploración, y a veces jun- des del clima, la vegetación y las comunicacio-
to a ellos, surgió el intento de colonizar los nes eran mayores que en buena parte de la
nuevos territorios. La base de la colonización América hispana.
del Oriente fue establecida por Alfonso de Al- a) La colonización portuguesa en América. Si
buquerque en los años que van del 1510 al bien las bulas papales, y luego el Tratado de
1516. A fin de dominar el comercio con la In- Tordesillas, conferían a Portugal una peque-
dias, Albuquerque se adueñó de puntos estraté- ña porción del extremo oriental de la costa
gicos en las rutas marítimas. En el Mar de Ara- sudamericana, pronto la expansión de los
bia, los portugueses ocuparon Socotra, Ormuz colonos que allí se establecieron conquistó
y Adén, con lo cual se hacían dueños de las ru- para la civilización portuguesa un área mu-
tas hacia el noroeste. En la India tomaron y cho más extensa que la que legalmente le
fortificaron la plaza de Goa, y en Ceilán la de correspondía. A esta zona se le dio el nom-
Colombo. Haciéndose dueños de Malaca, ce- bre de «Brasil» por razón de un árbol de ese
rraron el paso hacia el Lejano Oriente a todas nombre que allí crecía y que era codiciado
las demás naciones, al tiempo que ellos mis- como fuente para un tinte que se utilizaba en
mos se establecían en Macao y otros puntos de la industria textil.
China. Puesto que en esos países existían vas- La colonización definitiva del Brasil fue em-
tas poblaciones que no era posible someter to- prendida sin gran prisa, pues la monarquía
talmente, los portugueses se contentaron con portuguesa estaba mucho más interesada en
tomar esos puntos estratégicos que les permi- sus territorios en el Oriente. En todo caso, se
tían obtener el beneficio del comercio del establecieron en el Brasil «capitanías» que
Oriente sin la necesidad de conquistar todo el no eran más que un trasplante al Nuevo
territorio. Mundo del viejo sistema feudal. Dichas ca-
En la América del Sur y Africa, por el con- pitanías eran puestas en manos de algún hi- 4
trario, la población aborigen era escasa y su dalgo pobre de Portugal que buscaba tierras
civilización rudimentaria; de modo que les fue que colonizar. Por lo general, comprendían
posible a los portugueses seguir una política unas cincuenta o cien leguas de costas, y su
semejante a la que adoptaron los españoles en posesión era hereditaria. De las doce capita-
la colonización de América y las Filipinas. nías que fueron establecidas originalmente,
A pesar de que las bulas papales le conferían sólo dos tuvieron buen éxito. Por esta razón
un territorio tan extenso como el que conferían en el año 1549, sólo quince años después del
a España, Portugal nunca logró el éxito coloni- establecimiento de la primera capitanía, el
zador que tuvo esa otra nación. Esto se debió, Rey de Portugal decidió establecer una «ca-
por una parte, a que muchos de los territorios pitanía general» en la ciudad de Bahía.
que debían ser colonizados y evangelizados por Las poblaciones indígenas que los portu-
Portugal estaban ocupados por poblaciones de gueses encontraron en las costas de Brasil
un alto desarrollo cultural cuyas religiones fueron sometidas a la esclavitud, a veces
ofrecían más resistencia al cristianismo que las bajo un subterfugio semejante al de las en-
119
Las misiones en la Edad Moderna
120
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
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Las misiones en la Edad Moderna
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HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
Haciéndose fuertes en la costa occidental de Uno de los primeros en emprender esta obra
la India (especialmente en Goa), en Ceilán y fue el propio Francisco Javier, quien partió
en el estrecho de Malaca, los portugueses te- en el año 1541 rumbo a la India, llevando
nían en sus manos las principales rutas de consigo cartas de recomendación del rey de
acceso al comercio del Oriente. En China, la Portugal Juan II, así como el título de Nun-
pequeña factoría de Macao les permitía co- cio de la India Oriental. Comenzaba así una
merciar con ese inmenso país. vida de idas y venidas por el Oriente, predi-
Naturalmente, las primeras iglesias cristia- cando el Evangelio, organizando y fortale-
nas establecidas por los portugueses en el ciendo iglesias e instruyendo a portugueses
Oriente coincidían con estas pequeñas colo- e indígenas.
nias que allí habían fundado. Su ministerio Tras pasar unos cuatro meses en Goa, San
se ocupaba principalmente de los portugue- Francisco Javier se dirigió al sur de la India,
ses mismos, aunque se buscaba también la a la zona corrientemente llamada Pesque-
conversión de los nativos del lugar que que- ría, donde unos seis o siete años antes se ha-
daban bajo el dominio o la influencia de los bían bautizado más de veinte mil personas.
colonizadores. En tales casos, se confundía Allí centró su esfuerzo misionero hasta el
el cristianismo con la cultura de Portugal, y año 1545, aunque esto no le impidió hacer
se obligaba al converso a aceptar, junto con otros viajes a Goa y Cochín. Fue en el año
el bautismo, todos los modos de vida y has- 1544 que, mediante su intervención en una
ta el nombre de un portugués. Como es de pequeña guerra local, Javier logró que diez
suponerse, este método no lograba sino en- mil personas aceptasen el bautismo. Su tra-
ajenar a aquellos asiáticos que amaban su bajo misionero fue principalmente con ni-
cultura y que creían que era necesario aban- ños, enseñándoles oraciones y catecismos
donarla para aceptar la fe cristiana. (en latín) para proveer un fundamento de fe
Debido a limitaciones de espacio, no pode- entre aquellos que a temprana edad eran par-
mos narrar aquí la manera en que el cristianis- te de la comunidad cristiana.
mo fue extendiéndose en los distintos países En el año 1545 Francisco Javier emprendió
del Oriente. Nos limitaremos por tanto a na- viaje haciaMalaca, donde permaneció unos
rrar la obra del más grande de los misioneros pocos meses antes de pasar a la ciudad de
portugueses del siglo XVI, San Francisco Ja- Amboina, en las Molucas. En esas islas en-
vier, y a mostrarcómo los misioneros de la se- contró siete aldeas que habían recibido el
gunda generación, tales como Roberto de No- bautismo algún tiempo antes, pero en las
bili y Mateo Ricci, intentaron métodos más que ningún sacerdote trabajaba. Allí tam-
atrevidos que los de sus antecesores. bién se dedicó a dar a estos cristianos la ins-
San Francisco Javier nació en Navarra en el trucción y el cuidado de que carecían. Cua-
año 1506. Cuando aún no tenía veinte años tro meses después siguió hacia la capital de
pasó a la Universidad de París, donde estu- las Molucas, Temate, donde continuó su la-
dió hasta el año 1530. Poco después estable- bor de evangelismo y catequesis, y donde
ció amistad con Ignacio de Loyola. Francis- además escribió cartas pidiendo que vinie-
co, Ignacio y un grupo de cinco compañeros sen a trabajar en las Molucas otros miem-
más fueron el núcleo que dio origen a la bros de la Compañía de Jesús.
Compañía de Jesús, que fue aprobada por el En el año 1547 Javier partió de las islas Mo-
papa Paulo III en el año 1539. lucas con el propósito de regresar a la India,
Desde sus orígenes, la Compañía de Jesús donde su presencia era necesaria para su-
estuvo interesada en el trabajo misionero. pervisar y organizar el trabajo de los jesui-
123
Las misiones en la Edad Moderna
tas en la región. Al detenerse en Malaca, co- Los métodos misioneros de San Francisco
noció a tres japoneses, y comenzó así a so- Javier dejan mucho que desear. Su costum-
ñar con la posibilidad de emprender trabajo bre -que fue también la de muchos otros je-
misionero en el Japón. Sin embargo, conti- suitas- de bautizar en masa a los adultos
nuó su viaje a la India, donde visitó de nue- convertidos sin apenas darles instrucción
vo las zonas de Cochín, Pesquería y la pro- cristiana, excepto alos pequeños, se opone a
pia Goa. En todos estos lugares se dedicó a las prácticas y reglas establecidas en todas
reorganizar el trabajo de los jesuitas, que es- las iglesias. Su interés en viajar siempre ha-
taba a su cargo. En el año 1549 los misione- cia nuevos territorios le impidió establecer
ros que trabajaban bajo la dirección de Fran- verdaderos contactos con las culturas en las
cisco Javier eran ya más de treinta. cuales trabajaba, de modo que casi siempre
Por fin Javier se sintió libre para emprender se veía obligado a depender de intérpretes
la misión que había soñado en el Japón. para su trabajo misionero. Este método,
Acompañado de los tres japoneses que había aceptable quizá cuando se aplica entre quie-
conocido en Malaca y de dos jesuitas, em- nes tienen una afinidad y disposición a adap-
prendió la misión al Japón, y estuvo en ese tarse a la cultura europea, es del todo erróneo
país durante más de dos años. Al retirarse, to- cuanto se aplica en medio de culturas cuyo
do parecía indicar que la naciente iglesia lle- desarrollo es por lo menos tan elevado como
garía a ser una de las más notables en todo el el de la europea. Sin embargo, a fin de hacer-
Oriente. No podía suponer Javier que poco le justicia a Francisco Javier, debemos decir
tiempo después de su muerte, por razones que esto no era una característica suya sino
que no son del todo claras, habría de desatar- que era lo corriente en su tiempo. Para los
se en ese país una persecución tal que el cris- misioneros portugueses, la conversión de un
tianismo desaparecería casi por completo. pagano cualquiera quería decir que se hacía
Al regresar a Malaca, Javier recibió noticias súbdito de la corona portuguesa; se le daba
de que había sido fundada una nueva provin- un nombre portugués y se esperaba que se
cia de la Compañía de Jesús, que esta pro- vistiese y se comportase de igual manera que
vincia comprendía todo cuanto se encontra- sus nuevos conciudadanos.
ba al este del Cabo de Buena Esperanza ex- Fueron los misioneros jesuitas de fines del
cepto Etiopía, y que él había sido nombrado siglo XVI y principios del XVII quienes pri-
su Superior. Esto interrumpió por algún mero comenzaron a tomar en serio las cultu-
tiempo el sueño de Javier de emprender la ras dentro de las que trabajaban, y a intentar
evangelización de la China, pues tuvo que hacer surgir un cristianismo que no fuese
dedicarse a la reorganización y supervisión ajeno a su propio medio ambiente usando un
del trabajo misionero en todos los lugares proceso de adaptación cultural. Entre estos
donde éste estaba en manos de los jesuitas. misioneros se destacan, en la India, Rober-
De nuevo sus viajes le llevaron a Cochín y a to de Nobili y, en China, Mateo Ricci.
Goa, de donde partió rumbo a China en el El caso de de Nobili y de Ricci, junto a aque-
año 1552. Pero el gobierno chino se oponía llos que de alguna manera tuvieron que ver
a la entrada de elementos foráneos, y por con este trabajo misionero, señala la impor-
esa razón Javier tuvo que permanecer en la tancia que tienen en el trabajo misionero la
isla de Sanchón esperando la ocasión opor- formación cultural y social y el contexto de
tuna para trasladarse al continente. Fue allí, los misioneros. Ambos de Nobili y Rice¡, de
soñando aún con la misión a la China, que le origen italiano, viven en un tiempo y un con-
encontró la muerte en el año 1552. texto donde hay una efervescencia por la cul-
124
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
tura. Estos misioneros se educan con un apre- método semejante, y que esto también pro-
cio y reconocimiento de la belleza y función vocó una controversia aun más acalorada
de la cultura de una comunidad. Además, su que la que giraba alrededor de de Nobili. En
contexto no estaba ligado a los proyectos im- el año 1704, tras largas vacilaciones, Roma
perialistas que comúnmente van unidos a ac- se declaró en contra de las prácticas de los
titudes paternalistas y de superioridad cultu- jesuitas. Al parecer, esta decisión fue toma-
ral que, como hemos visto, no son los mejo- da en base a información poco exacta. En
res aliados en el trabajo misionero. todo caso, la disputa continuó durante cua-
Aunque de origen italiano, Roberto de No- renta años más, hasta que una bula papal
bili fue enviado a la India por la Compañía prohibió la continuación de los métodos in-
de Jesús con la aprobación de la corona por- troducidos por de Nobili. Como es de supo-
tuguesa. Tras algunas experiencias en Pes- nerse, toda esta controversia le hizo mucho
quería, pasó a Madura, donde emprendió su daño a la labor misionera en la India.
experimento en el trabajo misionero. De Aun más notable que Roberto de Nobili es
Nobili hizo todo lo posible por adaptarse a Mateo Ricci. Como hemos dicho anterior-
las costumbres de la India. Se dedicó a estu- mente, San Francisco Javier murió buscando
diar los idiomas de la región, y también el acceso a la China. Algunos años después un
sánscrito, en el que pensó que debía cele- español afirmaba que «con o sin soldados,
brarse la liturgia cristiana. Adoptó la dieta querer entrar en la China es querer alcanzar
vegetariana de los hindúes,' y tomó para sí la Luna», Alessandro Valignano, quien a
el título de «Maestro». Su adaptación a la partir del ano 1573 fue Superior de las misio-
cultura de la India llegó a tal punto que nes jesuíticas en las Indias Orientales, pare-
aceptó la práctica de la separación de castas ce haber sido el primero en percatarse de la
como un fenómeno de carácter sociológico necesidad de un nuevo método misionero a
más bien que religioso, y que por tanto po- fin de poder penetrar en la China. Fue Valig-
día ser aceptado por los cristianos. En su nano quien le ordenó a Michele Ruggieri que
propia iglesia sólo podían entrar las perso- se dedicase al estudio del chino a fin de al-
nas de las castas superiores. Para las demás, gún día poder llevar a cabo el trabajo misio-
creía de Nobili que debían establecerse igle- nero en ese país. Comprendiendo exacta-
sias especiales. En base a sus consejos, los mente la intención de Valignano, Ruggieri se
jesuitas siguieron la práctica de utilizar mi- dedicó a estudiar, no sólo el idioma, sino
sioneros distintos para trabajar entre las di- también las costumbres de la China. Su co-
versas castas. Junto a la aceptación de las nocimiento de tales costumbres hizo que los
castas como fenómeno sociológico, de No- chinos de Cantón, y luego los de la capital
bili también aceptó la práctica del sahti, la provincial de Chaochín, le tuviesen en alta
incineración de la viuda de un hindú de cas- estima. Tras un primer intento que quedó
ta alta junto al cadáver de su esposo. trunco debido a un cambio político, Ruggie-
Como era de esperarse, los métodos de de ri logró establecerse en la ciudad de Chao-
Nobili fueron duramente criticados. De es- chIn, donde le fue asignado para acompa-
tas criticas surgió la llamada «Controversia ñarle el sacerdote jesuita Mateo Ricci.
de los ritos malabares». Más adelante vere- Al igual que de Nobili, Valignano y Ruggie-
mos que en la China, Mateo Rice¡ siguió un ri, Ricci era de origen italiano. En el año
Usamos el término «indio» para referimos a quien es natural de la India, e «hindú» para quien profesa la
125
Las misiones en la Edad Moderna
91v
aprobación de la corona portuguesa, en
1578. Sus primeras experiencias en Goa hi-
cieron que Valignano pensase en él como el
acompañante adecuado para Ruggieri. Una
vez dedicado a las misiones en la China, IZ.
Ricci hizo todo lo posible por comprender y
apreciar la civilización en la cual debería E] trabajo de tos jesuitas en la China se carac-
terizó por compartir el conocimiento cientí-
trabajar.
fico con los intelectuales de la China. (Foto
A la sazón la China estaba gobernada por
de los instrumentos para estudiar el univer-
una casta de eruditos. Convencido de que le
so que los jesuitas trajeron a la China).
sería imposible llevar a cabo un trabajo per-
manente entre las clases bajas, Ricci se de-
dicó a hacer todo lo posible por penetrar las que otras personas también se acercasen a él
filas de estos eruditos. Para esto le fueron y a su mensaje con el mismo respeto e inte-
utilísimos los conocimientos de matemáti- rés. Ricci se dedicó a estudiar los clásicos
cas, astronomía y geografía que había obte- chinos, y escribió en chino un Tratado acer-
nido en Europa. Los relojes europeos eran ca de la amistad que pronto circuló entre
motivo de admiración por parte de los visi- los filósofos del país, probándoles que tam-
tantes que Ricci recibía en su casa. Su ma- bién en el Occidente y entre cristianos se
pa del mundo pronto logró gran renombre admiraba esta virtud que ocupaba un lugar
en toda China, con mucho provecho para su tan especial en el pensamiento chino. No
autor y para la causa que representaba. Ade- obstante, es importante destacar que Ricci,
más, el respeto e interés con que Ricci se con todo y su aprecio por la cultura confu-
acercaba a la cultura china le sirvieron para cionista de la China, tuvo un gran desprecio
por las tradiciones religiosas del país, tales
como el budismo y el taoísmo. Así como
El mapa del mundo presentado por las élites chinas de su época tenían conflic-
Nlatteo Ricci al Emperador chino. tos con estas expresiones religiosas, Ricci
también desarrolló la misma sospecha de
sus aliados chinos hacia esas expresiones
culturales.
Ricci nunca estableció iglesias abiertas en
territorio chino. Esto se debió en parte a la
cautela que era necesario tener para no des-
pertar la sospecha de las autoridades, y tam-
bién en parte al temor que tenía Ricci de
que el populacho siguiera la costumbre que
se aplicaba a los templos budistas tomán-
dolos como centros de diversiones y de ban-
quetes públicos. Tampoco intentó Rice¡ lo-
t »'
1 grar un gran número de conversiones, sino
que se limitó a un trabajo personal entre los
126
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
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eruditos que gobernaban el país. Él mismo gracias a la ayuda que les prestaron en la fun-
no pretendía ser otra cosa que un sabio del dición de cánones para la guerra contra la di-
Occidente y por tanto colega de los sabios nastía Ming -de modo que trabajaron como
con quienes trataba. aliados de ambos bandos en la contienda.
El éxito de Ricci estuvo en la manera en que Poco menos de un siglo después de la muer-
logró introducirse en un país totalmente ce- te de Ricci los cristianos en la China se con-
nado como la China. De Chaochín, Ricci taban por cientos de miles.
pasó a Nankín, y de allí a Pekín, donde labo- Al igual que en el caso de de Nobili en la In-
ró durante nueve años, hasta su muerte en el dia, la obra de Ricci y sus sucesores en la
1615. China se vio debilitada por la oposición de
Aunque Rice¡ no logró un gran número de otros misioneros católicos -especialmente
conversos, en cada lugar donde estuvo esta- franciscanos y dominicos- que se oponían
blecido dejó a otros misioneros jesuitas que a las prácticas acomodaticias de Ricci y los
continuaron su labor, y en la ciudad de Pe- suyos. Los jesuitas decían que la veneración
kín logró tal respeto para los miembros de de Confucio y de los antepasados no era de
su orden que se les colocó a cargo de las in- carácter religioso, sino social, y que por tan-
vestigación astronómicas. to podría continuarse aun después del bau-
Cuando, a mediados del siglo XVII, la di- tismo. Además, los términos chinos que uti-
nastía Ming se vio obligada a replegarse ha- lizaban para referirse a Dios tenían ciertas
cia el sur debido al creciente poderío manchú, connotaciones que podían hacer pensar que
los jesuitas gozaban de tal prestigio que les se trataba de un ser impersonal y no del Dios
fue posible continuar su trabajo misionero bíblico. La controversia con respecto a estas
tanto en la corte Ming como en la manchú. prácticas fue mucho más acalorada que la
También entonces sus conocimientos cientí- controversia semejante que ya hemos dis-
ficos les resultaron útiles, pues los jesuitas cutido con relación a la India. A la larga,
lograron gran influencia entre los manchúes Roma tomó la misma posición que en el ca-
127
Las misiones en la Edad Moderna
128
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
francesa siguió haciéndose sentir cerca de la años más tarde se unió el propio Pallu. Des-
desembocadura de este río, especialmente en de allí se dedicaron a la preparación de un
la ciudad de Nueva Orleáns. En las Antillas y clero secular indígena para la Cochinchina y
en la Guayana Francesa se añadió a la pobla- otras regiones del Asia sudoriental. Más tar-
ción de origen europeo un fuerte contingen- de este centro de preparación de sacerdotes
te de esclavos traídos del Africa. Puesto que se trasladó a la India.
la iglesia francesa, especialmente el clero re- La participación de la Société des Missions
gular, estaba profundamente interesada en la Étrangères en el trabajo misionero del
conversión de estas personas, se logró esta- Oriente trajo ciertas fricciones con las auto-
blecer comunidades permanentes de cristia- ridades portuguesas y españolas, que creían
nos católicos romanos. que las bulas papales les concedían el mono-
b) La Sociétédes Missions Étrangères de Paris. polio del trabajo misionero en esas regio-
Esta sociedad tenía el propósito de hacer sur- nes. Además, los representantes de los im-
gir en tierras misioneras un clero nativo. Se- perios portugués y español temían que los
gún los fundadores de esta sociedad, mien- misioneros franceses sirviesen de punto de
tras las iglesias fundadas en tierras de paga- apoyo para la expansión colonial francesa.
nos tuviesen que continuar recibiendo la to- De hecho, esto fue lo que sucedió, aunque
talidad de su clero de Europa carecerían de también es necesario señalar que, de no ha-
vida propia, y no podrían ellas mismas em- ber sido por los misioneros franceses, el tra-
prender nuevo trabajo misionero. Por esta bajo católico romano en buena parte del
razón la Société des Missions Étrangères se Oriente habría desaparecido juntamente con
interesaba sobre todo en el envío de clérigos el poderío portugués y español.
seculares a tierras de misiones para allí con-
tribuir a la preparación de un clero secular 5. Los comienzos de la misiología católica
nativo. Entre sus dirigentes y fundadores se El gran auge de las misiones del catolicismo
contaban misioneros y clérigos distingui- romano durante la Edad Moderna provocó en
dos, tales como François Pallu y François los círculos teológicos de esa confesión un nue-
Xavier de Laval-Montmorency, quien fue vo interés misiológico. Este interés se reflejó
obispo de Quebec y en el año 1668 fundó en tanto entre los teólogos que permanecían en
dicha ciudad un seminario para la prepara- Europa como entre los misioneros. El domini-
ción del clero secular según los principios co español Francisco de Vitoria, que estableció
de la Société. las bases del derecho internacional moderno, se
Buena parte del trabajo de esta sociedad de dedicó al estudio del Derecho de Indias, y cri-
misiones extranjeras tuvo lugar en el Orien- ticó fuertemente las políticas de sus compa-
te, especialmente en la India, el Asia sud- triotas en América. El carmelita Tomás de Je-
oriental y China. En esos territorios, la pre- sús, también español, que al principio se opu-
sencia de la Société resultó en extremo va- so a la participación de su orden en el trabajo
liosa, especialmente después de la expul- misionero, a la postre escribió su De procu-
sion de los jesuitas de todos los territorios randa salute omnium gentium, que intentaba
portugueses en el año 1759. El desastre que reunir en una obra lo principal de la ciencia
esto significó para el trabajo misionero pu- misiológica de su época. Pero, a pesar de que
do haber sido mayor de no haber interveni- muchos colocan a Tomás de Jesús por encima
do el clero secular enviado por la Société de de él, lo cierto parece ser que el gran teólogo de
París. En el año 1662 se estableció en Siam las misiones durante el período que estudia-
el francés La Motte Lambert, a quien dos mos es el jesuita español José de Acosta.
129
L.
1
Las misiones en la Edad Moderna
130
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
contacto con las tierras recién descubiertas, b) Melanchthon. Felipe Melanchthon toma
no sintiesen el mismo interés misionero que frente a las misiones una posición semejan-
sentían los cristianos de España y Portugal. te a la de Lutero. Para él, la Gran Comisión
Además, los reformadores de las primeras fue dada solamente a los apóstoles, que ya la
generaciones justificaron con argumentos han cumplido. Por esta razón la iglesia no ha
teológicos su falta de interés misionero, y por de ocuparse del trabajo misionero. Por otra
esta razón muchos de sus sucesores se sintie- parte, Melanchthon sí piensa que las autori-
ron obligados a tomar la misma posición. dades civiles han de ocuparse de la propaga-
a) Martín Lutero. El interés de Lutero en las ción del mensaje cristiano.
misiones fue siempre marginal. Esto no se e) Zwinglio, Calvino y Bucero. Estos tres refor-
debía a una oposición al trabajo misionero, madores toman una posición semejante a la
sino más bien al hecho de que la tarea de re- de Lutero y Melanchthon, aunque están dis-
formar la Iglesia y convertir a los «paganos» puestos a aceptar el hecho de que la propa-
que seguían las viejas costumbres y doctri- gación del Evangelio no se ha cumplido
nas ocupaba todo su tiempo y atención. Lle- aún. Calvino piensa que el apostolado fue
vado por el impulso de la controversia, Lute- un oficio extraordinario confiado solamente
ro llegó a afirmar que la comisión de ir por a los primeros discípulos del Señor, y que la
todo el mundo predicando el Evangelio fue expansión del Evangelio ha de llevarse a ca-
dada solamente a los apóstoles, y que los bo ahora mediante la intervención de las au-
cristianos de hoy no tienen semejante man- toridades civiles. Bucero y Zwinglio, por
damiento, sino más bien el de permanecer otra parte, sí piensan que el oficio apostóli-
cada uno en el lugar donde ha sido colocado co continúa a través de la historia de la igle-
para trabajar por la causa del Evangelio. En sia. Dios llama a personas a las que envía a
todo caso, sostiene el Reformador, siempre distintas partes del mundo a fin de que el
hay cristianos que son llevados a tierras de Evangelio sea predicado. Pero este llama-
paganos en cautiverio u otra condición seme- miento es dado sólo a un escasísimo núme-
jante, y tales personas son utilizadas por ro de personas, y quien pretenda cumplir el
Dios para allí dar testimonio de su fe. oficio apostólico debe primeramente asegu-
Esto no quiere decir, sin embargo, que Lute- rarse de que ha sido llamado por Dios para
ro rechazase de plano el trabajo misionero. ello. En cuanto a la responsabilidad de la
Por el contrario, hay entre sus obras abun- iglesia y la necesidad de proyectar y organi-
dantes textos que se refieren a la esperanza zar un programa misionero, ninguno de es-
de la conversión de los paganos y los musul- tos reformadores tiene palabra alguna que
manes. Además, en algunos de estos textos decir.
Lutero da indicios de una actitud relativa- d) Adrián Saravia y la respuesta de Teodoro
mente positiva hacia los judíos y musulma- Beza. De entre los teólogos protestantes del
nes, aunque con el correr del tiempo sus siglo XVI, sólo Adrián Saravia hizo una de-
posturas manifiestan, por un lado, la espe- fensa abierta y decisiva del esfuerzo misio-
ranza de la conversión de éstos y, por otro, nero. Aunque de origen holandés, Saravia
un sentido de desprecio. Además, debemos pasó buena parte de su vida en Inglaterra,
señalar que ciertos aspectos de la teología de donde en el año 1590 publicó una obra en la
Lutero, especialmente la doctrina del sacer- que, entre otras cosas, trataba acerca de las
docio de todos los creyentes, posteriormen- misiones y el ministerio apostólico: De di-
te darían un gran empuje misionero al pro- versis ministro rum gradibus, sic ut a Domi-
testantismo. nofuerunt instituti.
131
Las misiones en la Edad Moderna
En esta obra Saravia afirma que, de igual e) Johan Gerhard. Este famoso teólogo de Jena
manera que la promesa «He aquí yo estoy publicó a principios del siglo XVII sus Loci
con vosotros todos los días hasta el fin del theologici, en los que desarrolla toda una
mundo» fue dada no sólo a los apóstoles, si- dogmática evangélica. Su posición ante la ta-
no a toda la iglesia, así también el mandato rea misionera es la misma de los reformado-
de ir por todo el mundo y predicar el Evan- res. Según Gerhard, los apóstoles predicaron
gelio ha sido dado a todos los cristianos. a todas las naciones, aunque algunas no reci-
Además, los propios apóstoles, al nombrar bieron el mensaje que se les predicó. De las
compañeros y sucesores, dieron a entender naciones a que predicaron los apóstoles des-
que su obra debía ser continuada después cienden todas las demás naciones de la tierra,
de su muerte, y así lo ha hecho la iglesia a y por tanto el hecho de que algunos no conoz-
través de toda su historia. Finalmente, sería can el Evangelio en el día de hoy se debe, no
absurdo pensar que la gran obra de evange- a la negligencia de la iglesia ni a una injusti-
lización del mundo pudiera ser realizada por cia por parte de Dios, sino al hecho de que en
el pequeño número de apóstoles durante los tiempos antiguos los antecesores de quienes
pocos años de su ministerio. Por estas razo- viven hoy no aceptaron la predicación apos-
nes es necesario que la iglesia se ocupe de la tólica. Esto es cierto, según Gerhard, no sólo
proclamación del Evangelio en todo el mun- de las naciones de la cuenca del Mediterrá-
do, pues es para esto que le ha sido dado el neo, sino aun de los indígenas de América,
poder de las llaves del Reino. puesto que tanto en México como en Brasil y
A esto respondió en el año 1592 Teodoro Perú los colonizadores europeos han encon-
Beza, el sucesor de Calvino en Ginebra, con trado vestigios de un cristianismo desapareci-
el tratado Ad tractationem de ministrorum do. Lo mismo afirma este ilustre teólogo con
evangelii gradibus ab Hadriano Saravia. En respecto a las viejas culturas orientales.
esta obra, Beza refuta las diversas doctrinas En cuanto al ministerio apostólico, afirma
de Saravia, especialmente en lo que se refie- Gerhard que los ministros de la iglesia tie-
re a las órdenes eclesiásticas. En lo que con- nen autoridad para la predicación del Evan-
cierne a las misiones, toma una posición se- gelio y la administración de los sacramen-
mejante a la de Calvino, aunque establece tos, pero que su ministerio difiere del apos-
una distinción entre dos aspectos del manda- tólico porque no tienen un llamamiento di-
to «Id por todo el mundo y predicad el recto, porque no pueden hacer milagros,
Evangelio». Según Beza, la primera parte porque no son infalibles, porque no han vis-
de este mandato -la que se refiere a ir por to a Cristo en la carne y porque su ministe-
todo el mundo- se aplica únicamente a los rio está restringido a un lugar determinado.
apóstoles, mientras que la segunda parte - A esto sigue una refutación detallada de to-
la obligación de predicar el Evangelio- ha das las razones que parecen militar en favor
de tomarse como referente a toda la iglesia de la tesis según la cual la iglesia tiene siem-
a través de todos los tiempos. Sin embargo, pre una obligación misionera. Estas seccio-
es necesario decir en toda justicia que Beza nes están dedicadas especialmente a refutar
acepta el principio de Saravia según el cual la obra de Saravia.
las iglesias tienen la obligación de laborar t) Justiniano von Weltz. En la segunda mitad
por la expansión del Reino de Dios, aunque del siglo XVII este notable noble austriaco
no ofrece proyecto alguno al respecto y el tomó sobre sí la tarea de hacerle ver a la
lector recibe la impresión de que no se trata Iglesia Luterana su obligación misionera.
de enviar misioneros a tierras de paganos. En el año 1664 publicó su primer tratado en
132
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
defensa de las misiones, y a éste pronto si- fuesen feroces y trágicos, personas
guieron otros dos. En estos tratados von que no permiten que viva entre
Weltz es el primero en tomar seriamente la ellos extranjero alguno. En tercer
acusación de que los católicos romanos ha- lugar sería necesario que no fuesen
cían objeto al protestantismo al argüir que la blasfemos obstinados, persecutores
falta de interés en las misiones por parte de de los cristianos, destructores de la
éste probaba que no se trataba de una igle- religión cristiana que sus anteceso-
sia católica y apostólica. Los teólogos pro- res perdieron por razón de su odio-
testantes anteriores a von Weltz acostum- sa ingratitud... Las cosas santas de
braban responder a esta acusación refutando Dios no han de echarse a tales pe-
la idea de que las misiones fuesen parte de nos y cerdos.
la tarea de la iglesia. Von Weltz, por su par-
te, ve la justicia de la acusación que se hace 2. La expansión del protestantismo a través de
al protestantismo y se propone responder a la expansión política de las naciones protes-
ella, no mediante simples argumentos en tantes
contra de la necesidad de las misiones, sino Como hemos visto, la mayor parte de los pri-
llamando a «todos los cristianos de recta fe meros teólogos protestantes afirmaba que la ta-
de la Confesión de Augsburgo» a formar rea misionera debía quedar en manos de la auto-
una sociedad para llevar a cabo la obra mi- ridad civil. Sin embargo, es de consignar el he-
sionera. Esta sociedad estaría formada por cho de que, salvo notables excepciones, la ma-
un grupo de personas cuya tarea sería reco- yor parte de los gobiernos protestantes tomó me-
lectar los fondos necesarios para el trabajo nos interés en la expansión del Evangelio que
misionero, otras que se dedicarían a la direc- los gobiernos católicos. En todo caso, los co-
ción de la sociedad, y otras finalmente que mienzos de la expansión de las naciones protes-
irían a los no creyentes para predicarles el tantes fueron una de las causas principales de
Evangelio. Para preparar a estas últimas de- que surgiesen dentro de las iglesias de la Refor-
bería instituirse un Collegium de propagan- ma movimientos que tenían en cuenta la exis-
da fide, puesto que, según von Weltz, era tencia de pueblos fuera del ámbito de la cris-
necesario que los misioneros conociesen de- tiandad a los cuales era necesario llevar el Evan-
bidamente el lenguaje y las costumbres de gelio. Aparte el intento fallido por parte de los
los países adonde irían a trabajar. hugonotes de establecer una colonia en el Bra-
El llamado de von Weltz no fue bien recibi- sil bajo la dirección de Villegaignon, y de la
do por las autoridades eclesiásticas. Pero él obra del rey de Suecia Gustavo Vasa en pro del
mismo selló sus enseñanzas con su vida establecimiento y la reforma de la iglesia entre
dando esta última como misionero en la los lapones, la expansión colonial protestante
Guayana Holandesa (Surinam). tuvo lugar a través del poderío de Inglaterra,
Como ejemplo de la reacción del protestan- Holanda y Dinamarca. Esto sucedió especial-
tismo ortodoxo a las propuestas de von mente en los siglos XVII y XVIII, al mismo
Weltz, podemos citar las siguientes palabras tiempo que decaía el poderío español y portu-
del teólogo de Ratisbona Ursinus, según el gués. En el año 1588, con la destrucción de la
cual, para realizar el proyecto de von Weltz, Armada Invencible de Felipe II por los elemen-
Sería necesario que los paganos no tos y por Inglaterra, ésta, juntamente con las
fuesen positivamente salvajes, ca- otras potencias protestantes, comenzó a dispu-
rentes de toda característica huma- tar seriamente el poderío marítimo que hasta
na. Además, sería necesario que no entonces había pertenecido sólo a España y Por-
133
Las misiones en la Edad Moderna
tugal. De esta manera se iba gestando la gran algunos de los menos escrupulosos tendían a
expansión protestante de los siglos XIX y XX. administrar el bautismo sin preparar en mo-
a) La expansión holandesa. Tan pronto como do alguno a quienes lo recibían. Es impor-
logró independizarse de la corona española, tante tener en cuenta este hecho para perca-
Holanda apareció en la escena europea como tarse de que, en sus orígenes, las misiones
una pujante potencia marítima. Sus marinos protestantes no buscaban siempre la conver-
comenzaron a surcar los mares compitiendo sion de individuos, ni insistían en la instruc-
por el comercio que antes habíaestado exclu- ción catequética antes del bautismo.
sivamente en manos portuguesas y españolas. Los holandeses también se establecieron en
Esto dio origen a la Compañía de las Indias la América del Sur. Además de una breve in-
Orientales. La Compañía de las Indias Orien- cursión a Bahía, establecieron en el año
tales tuvo desde el principio un propósito mi- 1630 una colonia en Pernambuco que duró
sionero. Siguiendo las antiguas teorías de los poco más de treinta años. En ninguno de es-
reformadores, las misiones debían estar a car- tos dos casos hubo resultados permanentes
go del poder civil, y por esta razón fue la en lo que a misiones se refiere. En cuanto a
Compañía y no la iglesia la que se ocupó de la colonia holandesa de Surinam, los pro-
organizar el trabajo misionero. Aunque era la pios holandeses no parecen haberle prestado
iglesia quien ordenaba a los misioneros, su gran importancia al trabajo misionero entre
trabajo era dirigido y contratado por la Com- los indígenas y los esclavos negros, y fue
pañía de las Indias. Debido a la escasez de necesario el impulso moravo para que se co-
personas preparadas para este tipo de trabajo, menzaran misiones vigorosas entre ellos. La
se fundó en la ciudad de Leiden, en el año obra de Justiniano von Weltz en la región no
1622, un Seminarium Indicum que se dedicó parece haber tenido gran éxito.
a la preparación de misioneros para las In- En la América del Norte, las colonias holan-
dias; pero esta institución no tuvo más de una desas tuvieron repercusiones mucho más
docena de años de vida. La mayoría de los amplias. Fueron los holandeses quienes fun-
misioneros contratados por la Compañía de daron Nueva Holanda, que vino después a
Indias no se dedicaba tanto a la predicación a ser la colonia inglesa de Nueva York. El pro-
los no creyentes como a la edificación y el pósito de la misma fue más bien comercial
cuidado espiritual de los colonos holandeses. que religioso, y por esta razón no se hizo en
Pero aun así hubo lugares en los que los mi- ella un trabajo misionero amplio. El más
sioneros holandeses lograron gran número de destacado misionero en esta colonia holan-
conversos. desa fue Johannes Megapolensis, quien en el
La zona del globo donde las misiones holan- año 1643 comenzó a trabajar entre los mo-
desas tuvieron mayor permanencia fue el hawks, cuyo idioma aprendió a fin de poder
Oriente. En Java, Ceilán, las Molucas y For- predicarles. Aunque la mayoría de los colo-
mosa los misioneros holandeses lograron es- nos de Nueva Holanda pertenecía a la Iglesia
tablecer fuertes comunidades evangélicas. Reformada Holandesa, hubo casi siempre un
En estos lugares se siguió el procedimiento alto grado de tolerancia religiosa que permi-
de conversiones en masa que hemos encon- tió que se estableciesen allí protestantes de
trado repetidamente en nuestra historia. Se diversas confesiones. Cuando Nueva Holan-
cuenta, por ejemplo, que un rey de Timor se da pasó a manos inglesas, la influencia de los
unió a la iglesia con todos sus súbditos. Ade- holandeses comenzó a declinar.
más, se pagaba a los misioneros una cantidad Quizá lo más importante en esta expansión
por cada baptismo realizado, y por esa razón colonial por parte de Holanda fue el hecho
134
HISTORIA. GENERAL DE LAS MISIONES
de que comenzó a aparecer en ese país un ellos la famosa Pocahontas. Su trabajo que-
verdadero interés misionero, tal como se ve dó deshecho cuando en el ano 1622 se pro-
en la obra de Justus Heurnius De legatione dujo una matanza de indígenas. Más tarde se
evangelica ad Indos capessenda admonitio. continuó el esfuerzo de evangelizar y educar
Esta obra pronto fue seguida por otras de a los habitantes de Virginia con la fundación
diversos escritores holandeses en las que se del William and Mary College, cuyo propó-
ve la influencia del contacto con el Lejano sito era educar tanto a indígenas como a
Oriente y América. Este nuevo interés daría blancos. Sin embargo, fueron pocos los indí-
frutos en el siglo XIX, con el gran despertar genas que estudiaron en dicha institución.
misionero protestante. Entre los peregrinos de Nueva Inglaterra hu-
b) La expansión inglesa. Al mismo tiempo que bo también un vivo interés misionero. Estos
Holanda, y también a expensas de España y peregrinos habían abandonado Inglaterra y
Portugal, Inglaterra comenzó a desarrollar habían marchado a Holanda en busca de ali-
su poderío marítimo y a fundar colonias, es- vio a la persecución de que eran objeto por
pecialmente en la América del Norte. A fi- no someterse a las normas eclesiásticas que
nes del siglo XVI se dieron los primeros in- regían en Inglaterra. Más tarde, las mismas
tentos por parte de los ingleses de estable- razones los llevaron a abandonar Holanda e
cerse en dicho continente, y desde el princi- ir a establecerse en el Nuevo Mundo. El pro-
pio uno de los propósitos explícitos de tales pósito misionero de convertir a los habitan-
intentos fue la propagación de la fe cristia- tes en sus nuevas tierras no jugaba un papel
na, aunque en realidad otros motivos econó- predominante en su pensamiento, pero sí es-
micos y políticos jugaron un papel mucho taba presente. Entre estos peregrinos se dis-
más importante que el interés misionero. En tinguió Roger Williams, uno se los primeros
todo caso, cuanto Sir Walter Raleigh esta- protestantes en predicar el Evangelio a los
bleció la colonia de Virginia, se comenzó nativos. Además, los sucesivos pastores de
en ella la predicación del Evangelio a los la congregación de Plymouth se ocuparon
naturales de la comarca, y se dice que en el de predicar a los indígenas y de fundar con-
año 1587 recibió el bautismo quien fue con gregaciones entre ellos.
toda probabilidad el primer nativo america- El más conocido de entre los misioneros de
no convertido al protestantismo. El propio Nueva Inglaterra fue John Eliot, quien en el
Sir Walter Raleigh proveyó fondos para que año 1646 y bajo los auspicios de la Massa-
la organización comercial conocida como chusetts Bay Company comenzó a trabajar
«Compañía de Virginia» se ocupase de la entre los mohicanos. Su labor misionera se
predicación del Evangelio a los nativos. extendió durante un período de casi medio si-
En el año 1607 la Compañía de Virginia fun- glo, durante el cual Eliot se dedicó, no sólo a
dó la ciudad de Jamestown, en cuya carta predicar el Evangelio a lo mohicanos, sino
patente aparece como uno de los principales también a traducir la Biblia a su idioma y a
propósitos de la Compañía la propagación enseñarles a leer. Su motivación teológica te-
de la religión cristiana a quienes «todavía vi- nía una dimensión escatológica, pues Eliot
ven en la oscuridad y en una ignorancia mi- pensaba que quizá los nativos de América
serable del verdadero conocimiento y adora- fuesen las diez tribus perdidas de Israel, y su
ción de Dios». El más importante misionero conversión sería entonces un cumplimiento
en esta colonia fue Alexander Whitaker, de las antiguas profecías. Quizá fue también
quien se dedicó a predicar el Evangelio y a esta conjetura lo que le llevó a aplicar la ley
instruir a los naturales de la región -entre mosaica entre quienes recibían el Evangelio.
135
Las misiones en la Edad Moderna
Sus conversos vivían en catorce aldeas en las 1698 se fundó la Society for Promoting
que se seguía esa ley, y en cuyo centro había Christian Knowledge; en el 1701 la Society
un edificio común que servía tanto de escue- for the Propagation of the Gospel in Foreign
la como de iglesia. Además de la enseñanza Parts; y en el 1723 la agrupación de «Socios
religiosa, se impartían conocimientos de agri- del Dr. Bray». Todos estos grupos, especial-
cultura y otros medios de subsistencia. mente el segundo, se dedicaron a apoyar las
Aunque los esfuerzos de Eliot resultaron fú- misiones entre los indígenas y entre los ne-
tiles debido a los estragos de la guerra, die- gros de América. Sin embargo, por razón
ron fruto en el modo en que despertaron en de que muchos de los colonizadores blancos
Inglaterra un nuevo interés hacia las misio- en el Nuevo Mundo temían que el trabajo de
nes. Las noticias que llegaban a Inglaterra los misioneros enviados o apoyados por es-
acerca del trabajo de Eliot fueron una de las tas sociedades anglicanas sirviese para for-
principales razones que llevaron al Parla- talecer a la iglesia oficial de Inglaterra en
mento a crear en el año 1649 la Societyfor América, el trabajo de tales misioneros re-
the Propagation of the Gospel in New En- sultó ser en extremo difícil y a menudo po-
gland. Esta sociedad tuvo una larga historia co fructífero.
de servicio misionero, y fue precursora de Fue en el año 1709 que se fundó la Society
otras instituciones semejantes, a las que he- in Scotlandfor Propagating Christian Kno-
mos de referirnos más adelante. wledge. Esta sociedad era semejante a las
Otro experimento interesante fue el de los que en Inglaterra habían fundado los angli-
Mayhew, en la isla de Nueva Inglaterra co- canos, pero tenía la ventaja de que la iglesia
nocida como Martha's Vineyard. A partir escocesa gozaba de más simpatía entre los
del año 1642 estas tierras fueron concedidas colonos del Nuevo Mundo. La sociedad es-
a la familia Mayhew, que tomó especial in- cocesa organizó juntas de corresponsales en
terés en la evangelización y educación de la América, entre ellas una en la ciudad de
los indígenas que vivían en sus territorios. Nueva York que fue de gran importancia pa-
Este trabajo pasó de padres a hijos durante ra el desarrollo misionero en las colonias de
cinco generaciones, hasta que en el año Nueva York, Nueva Jersey y Pennsylvania.
1806 murió Zacarías Mayhew, el último de El más notable de los misioneros que traba-
esta ilustre familia. jaron bajo la dirección de la sociedad esco-
Como señal del interés misionero de los pri- cesa fue David Brainerd, quien trabajó entre
meros colonizadores, podemos señalar el los indígenas en diversas colonias. Brainerd
hecho de que la Universidad de Harvard, contó con muy pocos años de servicio mi-
fundada en el año 1650, contaba entre sus sionero, pues murió a la edad de 29 años a
propósitos «la educación de los jóvenes in- causa de su incesante trabajo por la expan-
gleses e indios del país en el conocimiento y sión del Evangelio. Su método consistía so-
la piedad». bre todo en fundar escuelas y en agrupar a
A través de las noticias que iban llegando los indígenas en lugares donde era posible
del Nuevo Mundo, y muy especialmente de darles instrucción religiosa. La principal ra-
la obra del Dr. Thomas Bray, comisario zón de la importancia de Brainerd está en
eclesiástico de Maryland a partir del año que en el año 1749 Jonathan Edwards publi-
1696, surgió entre los anglicanos de Inglate- có una «Vida de Brainerdx', que se basaba en
rra un nuevo interés misionero. Esto se re- el diario del fallecido misionero. El impac-
flejó en la fundación de varias sociedades to de esta obra fue enorme, y es posible des-
para apoyar el trabajo misionero. En el año cubrirlo en personas de tanta importancia
136
4ii
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
137
L
Las misiones en la Edad Moderna
como misioneros a las colonias danesas, és- alemán. El padre del mismo es Philipp Ja-
te no pudo encontrar en toda Dinamarca al- kob Spener, quien en el año 1675 expuso en
guien a quien recomendar y por tanto se vio su obra Pia desideria los principios del pie-
obligado a recurrir al naciente movimiento tismo alemán. Spener se oponía especial-
pietista de Alemania. Este fue el origen de la mente a la fría y rígida ortodoxia de la Igle-
famosa misión de Tranquebar, en la India. sia Luterana de su tiempo. El motivo de es-
Esta misión, aunque sostenida económica- ta oposición no era tanto doctrinal como
mente por la corona danesa, fue llevada a práctico, pues Spener no se oponía a las
cabo por misioneros pietistas alemanes, y doctrinas mismas de su iglesia, sino al mo-
por ello la discutiremos al estudiar ese mo- do en que la insistencia en esas doctrinas
vimiento. Además, es necesario señalar que, tendía a oscurecer la necesidad de una vida
a pesar de la falta de interés de los primeros cristiana personal. Tras largos años de labo-
colonos daneses en la obra misionera, sus res tanto pastorales como docentes, Spener
establecimientos fueron más tarde utiliza- fundó en el año 1694 la Universidad de Ha-
dos por misioneros moravos y pietistas para lle, que tendría gran importancia para la his-
la expansión del Evangelio. toria futura de las misiones. Su obra no ca-
reció de la oposición de los teólogos más
3. Nuevos movimientos dentro del protestan- distinguidos de su época, que a menudo le
tismo y su importancia para las misiones acusaron -a él y sus compañeros- de
A fines del siglo XVII y a través de todo el errores dogmáticos.
XVIII aparece en la historia del protestantismo El compañero y después sucesor de Spener
un despertar de la religiosidad individual que en la dirección del naciente movimiento pie-
va apareado a un nuevo interés en las misiones. tista fue August Hermann Francke, quien
Los dirigentes de este nuevo despertar protes- fue profesor de teología en la Universidad
taban contra la rigidez de la vieja ortodoxia de Halle y además fundó en esa misma ciu-
protestante, y aunque ellos mismos eran por lo dad un asilo para huérfanos en el que estu-
general teólogos debidamente adiestrados, ten- diaban niños necesitados. Al igual que Spe-
dían a subrayar por encima de las fórmulas te- ner, Francke se interesó en la obra misione-
ológicas la importancia de la vida cristiana ra, e hizo de la Universidad de Halle un cen-
práctica. Esta vida cristiana se entendía por lo tro de misiones.
general en términos individualistas, de modo Fue a esta Universidad que se dirigió la corte
que se subrayaba la experiencia personal del danesa cuando su rey Federico IV decidió co-
cristiano y su obediencia como individuo ante menzar trabajo misionero en el Oriente y no
los mandatos divinos. En términos generales, encontró en todo su reino personas capaces y
estos movimientos no pretendían constituirse dispuestas a llevar a cabo esa obra. Fue así
en nuevas sectas o iglesias, sino que su propó- que comenzó la Misión Danesa de Tranque-
sito era más bien servir de levadura dentro de bar, en la que trabajaron en un principio Bar-
las iglesias ya existentes. Si en algunas ocasio- tholomaeus Ziegenbaig y Heinrich Plütschau.
nes éste no fue el resultado de tales movimien- Ziegenbalg y Plütschau tuvieron dificulta-
tos, ello no se debió tanto al espíritu cismático des en los inicios de su trabajo misionero,
de sus fundadores como a la rigidez de las igle- pues primero las autoridades eclesiásticas
sias dentro de las cuales surgieron. en Dinamarca y luego las autoridades colo-
a) El pietismo y la Universidad de Halle. El niales en la India se opusieron a ellos por
primero de estos movimientos, que a veces ser pietistas. Esto no detuvo su obra, y a
da su nombre a los demás, es el pietismo parir del año 1706 se establecieron en
138
~lig,ti
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
139
Las misiones en la Edad Moderna
pero este interés fue despertado cuando, en damente impresionado por la fe inconmo-
el año 1731, en una visita a Copenhague, vible que mostraban los moravos que le
conoció a dos esquimales oriundos de Gro- acompañaban. Esta experiencia lo llevó a
enlandia que habían sido bautizados por el interesarse en el movimiento moravo y a
misionero Hans Egede. Esto animó en él el establecer contacto con Zinzendorf. Por lo
interés misionero, y al regresar a sus esta- general, se señala la experiencia de la calle
dos se dedicó a hacer de la comunidad de de Aldersgate, cuando Wesley sintió en su
Herrnhut un centro de misiones. Debido al corazón «un ardor extraño», como el pun-
contagio de su entusiasmo y a la profundi- to de partida del metodismo. Pero no cabe
dad de su sentimiento religioso, Zinzen- duda de que Zinzendorf y sus compañeros
dorf no tuvo dificultades en hacerse seguir contribuyeron grandemente a determinar el
por los Hermanos Moravos, que pronto se carácter del nuevo movimiento.
esparcieron por buena parte del mundo lle- En sus orígenes, el metodismo no pretendía
vando el Evangelio. constituirse en una nueva iglesia, sino que
Como era de esperarse, las primeras misio- era sólo un despertar de la religiosidad in-
nes moravas se dirigieron hacia Groenlania, dividual dentro de la Iglesia Anglicana y
pero en el mismo año de 1732 penetraron en entre el resto de la población protestante de
el mar Caribe, estableciéndose en la isla de Inglaterra. A través de toda su vida tanto
Saint Thomas, y tres años después en la Wesley como sus primeros seguidores con-
Guayana Holandesa (Surinam). Poco más tinuaron siendo miembros de la Iglesia An-
tarde se dirigieron hacia el Oriente, donde glicana y participando de su culto. Fueron
trabajaron en la India y Ceilán, y hacia el sólo los acontecimientos posteriores los
Africa, donde se establecieron en el Cabo de que llevaron a la fundación de la Iglesia
Buena Esperanza. Metodista.
La expansión misionera de los moravos no En todo caso, el metodismo fue un nuevo
fue de larga duración. Su número limitado despertar religioso tanto en las Islas Britá-
les impidió establecer muchas misiones nicas como en la América del Norte, y es-
amplias y duraderas. Pero su impulso no to tendría amplias consecuencias para el
había de perderse, sino que, con su llama- movimiento misionero. La primera socie-
do hacia una nueva responsabilidad misio- dad metodista fue fundada en Londres en el
nera, influyó en buena parte de la iglesia año 1739, y ya en el año 1766 existía una
europea. en América. Es en el año 1771, con la lle-
c) Los hermanos Wesley y el metodismo. En- gada de Francisco Asbury, que comienza la
tre las muchas personas y movimientos so- gran expansión del metodismo en América.
bre los cuales se hizo sentir la influencia de Pronto el movimiento sería mucho más nu-
Zinzendorf y los moravos, ninguno es de meroso en el Nuevo Mundo que en el Vie-
tanta importancia para la historia de las mi- jo. Aunque fueron muchos los predicado-
siones como Juan Wesley y el movimiento res metodistas que contribuyeron al enor-
metodista que surgió de su obra. Juan Wes- me crecimiento de ese movimiento en
ley era un ministro de la Iglesia Anglicana América, el más distinguido de todos ellos
que se sentía decepcionado con su propia fue sin lugar a dudas Asbury, quien predi-
fe y con su labor como misionero en Geor- có más de 16,500 sermones, ordenó a por
gia. Durante su viaje hacia América, cuan- lo menos 4,000 predicadores y viajó medio
do el barco en que viajaba estuvo a punto millón de kilómetros. La mayor parte de
de zozobrar, Wesley se había sentido hon- este trabajo tuvo lugar en la frontera occi-
140
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
dental de las colonias británicas en Norte- nocido como el Second Great Awakening,
américa, que se movía hacia el oeste más también en él pudo notarse la influencia
rápidamente de lo que las viejas iglesias metodista, especialmente a través de la
podían hacerlo. De esta manera los meto- obra de Asbury en la zona de Nueva Ingla-
distas -juntamente con los bautistas, que terra.
en este período experimentaron también un Aunque estos movimientos no cristaliza-
despertar- contribuyeron grandemente al ron en instituciones religiosas, y por tanto
mantenimiento de la fe cristiana entre los es difícil seguir su historia, no cabe duda de
colonos. que la profundización de la vida religiosa
Los métodos del metodismo consistían en que fue su resultado contribuyó al gran mo-
la predicación pública y sencilla y en la or- vimiento misionero que comenzaría a prin-
ganización de pequeños grupos o «clases» cipios del siglo XIX.
para la alimentación de la vida espiritual de Es notable cómo la influencia del pietismo
sus miembros. Con el correr de los años, el alemán, y especialmente de Spener y
metodismo fue haciéndose una iglesia esta- Francke, puede seguirse a través de Zin-
blecida, y el sistema de clases, y en cierta zerdorf, Wesley y el Gran Despertar en la
medida la predicación pública al aire libre, América del Norte. Puesto que es a través
fueron perdiendo la preponderancia que de estos movimientos que comenzó la gran
habían tenido al principio. expansión misionera protestante del siglo
Aunque al principio el metodismo trabajó XIX, no ha de sorprendernos el que esa ex-
especialmente en la Gran Bretaña y sus co- pansión haya tenido algunas de las caracte-
lonias, su expansión en esos territorios fue rísticas del pietismo y los demás movi-
tal que en el siglo XIX llegó a ser una de mientos que de él surgieron. Así, por ejem-
las principales fuentes del movimiento mi- plo, los misioneros protestantes del siglo
sionero protestante. XIX tendían a subrayar la necesidad de una
d) El «Great Awakening» en la América del decisión individual por parte de los con-
Norte. A mediados del siglo XVIII, y des- versos mucho más de lo que antes lo habí-
pués a fines del mismo siglo y principios an hecho los misioneros católicos y aun los
del siguiente, se produjeron en la América primeros misioneros protestantes. No cabe
británica una serie de movimientos de ca- duda de que esto se debe en buena medida
rácter religioso que es difícil clasificar o al énfasis del pietismo en la necesidad de
explicar. una religión personal.
Se trata de un despertar general en la reli- Por otra parte, es necesario señalar que, a
giosidad de los colonos que era paralelo al pesar de lo mucho que se ha dicho acerca
pietismo europeo. Las figuras principales de la tendencia del pietismo a apartarse de
de la primera etapa de este despertar fueron las realidades del mundo, fue este movi-
Jonathan Edwards y George Whitefield. A miento el que dio origen al interés de la
través de las relaciones de este último con iglesia en la totalidad geográfica del mun-
Juan Wesley es posible descubrir la in- do. Si en ocasiones las misiones que surgí-
fluencia del metodismo en este movimien- an del movimiento pietista tendían a sepa-
to, que también se caracterizó por la predi- rar a sus conversos del mundo y la cultura
cación al aire libre y por la profundización en que vivían, también es cierto que el pie-
de la vida cristiana individual. Cuando, a tismo en general sirvió para hacer ver a los
fines del siglo XVIII y principios del XIX, protestantes que el mundo era mucho más
se produjo un nuevo despertar religioso co- amplio que la vieja Europa.
141
Las misiones en la Edad Moderna
142
capítulo 6
Las misiones en la
Epoca Contemporánea
Introducción general cho ante las nuevas teorías astronómicas. La
siglo XIX presentó para las misiones cris- propia existencia de Jesús pronto sería dudada,
Eltianas el más grande reto y la más amplia o al menos se intentaría reconstruir la realidad
oportunidad. Las nuevas condiciones del mun- histórica que se encontraba detrás del Nuevo
do eran tales que podría suponerse que el im- Testamento. En las principales universidades
pulso misionero del cristianismo, unido como de Europa, y aun en las cátedras teológicas, se
estaba a algunas de las viejas condiciones, no daba la impresión de que el cristianismo esta-
lograría sobrevivir. A fines del siglo XVIII y ba a punto de llegar a ser sólo un recuerdo his-
principios del XIX aparece en la historia de Oc- tórico, dejado detrás por los nuevos descubri-
cidente una serie de movimientos que tendían a mientos.
debilitar el apoyo que desde la época de Cons- Por otro lado, algunos teólogos reinterpreta-
tantino el estado le había prestado a la iglesia. ban los principios de la fe a la luz de los gran-
La Revolución Francesa se caracterizó por su des cambios en las ciencias naturales y socia-
anticlericalismo, y todo indicaba que uno de les. Algunos de estas reinterpretaciones mante-
sus resultados sería la pérdida de vitalidad por nían a la iglesia en conversación con la época,
parte de toda la iglesia europea, especialmente pero no sin crear disturbios y contiendas sobre
la Católica Romana. Las guerras napoleónicas el significado de la fe en un contexto de tanto
desangraron a Europa y debilitaron grandemen- cambio.
te a las dos naciones que hasta entonces habían En buena parte del mundo, las iglesias, y
sido la principal fuente del impulso misionero: especialmente la Católica Romana, se habían
España y Portugal. En Norteamérica, los forja- aliado a la fuerzas que se oponían a los movi-
dores de la nueva nación abogaban por la sepa- mientos revolucionarios que buscaban un nue-
ración entre la iglesia y el estado. vo orden. Con el triunfo de las revoluciones en
En el campo del intelecto, las señales tam- Francia y en Norte y Sur América, era de supo-
poco parecían ser favorables para la iglesia nerse que el cristianismo perdería buena parte
cristiana. Los nuevos descubrimientos históri- de su fuerza.
cos, biológicos y astronómicos hacían surgir Por último, dentro de la misma iglesia cris-
dudas acerca de la veracidad de la Biblia. La tiana había divisiones y contiendas que debili-
historia de la creación del Génesis parecía que- taban la eficacia de su testimonio. Estas con-
dar desmentida por la teoría de la evolución. tiendas, como indicamos antes, existían no só-
Toda la cosmología bíblica quedaba en entredi- lo entre las diversas confesiones, sino aun den-
143
L.
Las misiones en la Época Contemporánea
tro de cada denominación, y giraban a menudo dentro de esos países mostró una capacidad
alrededor de la manera en que los cristianos mayor para adaptarse a las nuevas circunstan-
debían ver los nuevos descubrimientos y las cias y también más vitalidad para penetrar en
nuevas teorías científicas. tierras hasta entonces vírgenes de predicación
La expansión del cristianismo en el siglo misionera. En todo caso, discutiremos primera-
XIX es compleja. Si tal expansión del cristia- mente las misiones católicas romanas, para lue-
nismo hubiese dependido únicamente de la go pasar a la ortodoxas y por último llegar al
unidad interna de la iglesia, el siglo XIX hubie- movimiento misionero protestante.
ra visto el fin del avance misionero. No obstan- Antes de seguir adelante, sin embargo, con-
te, el siglo XIX, con su impulso imperialista viene señalar que el presente capítulo es sólo
desde Europa occidental y posteriormente des- una introducción general a la historia del avan-
de los Estados Unidos, incide de manera com- ce misionero durante los siglos XIX y XX. En
pleja en la tarea misional. Veremos que en oca- efecto, la expansión del cristianismo durante
siones el imperialismo europeo sirve de aliado este período es tal que sería fútil tratar de dis-
para la tarea misionera, en otras los misioneros cutirla en un solo capítulo. Por esta razón, tras
se convierten en fuertes enemigos de la políti- la introducción presente, pasaremos a discutir
ca imperialista, y en otras los misioneros tienen por separado las distintas regiones del globo.
un papel ambiguo y confuso entre los naciona- Puesto que la historia del cristianismo en Euro-
les y la política imperialista. pa y los Estados Unidos durante este período se
Contra lo que podría esperarse, el siglo XIX estudia usualmente en los cursos generales de
es uno de los puntos culminantes en la historia historia eclesiástica, sólo la discutiremos aquí
de las misiones cristianas euroatlánticas. Dada en cuanto se relaciona con la obra misionera en
la ambigüedad de las misiones en relación a las otras regiones.
autoridades civiles, la iglesia descubrió en la
falta de apoyo por parte de los gobiernos un re- A. La Iglesia Católica Romana
to cuyo resultado final fue la divulgación del Para las misiones católicas romanas, el si-
interés misionero entre una proporción mayor glo XIX no representa un nuevo punto de par-
del pueblo cristiano. Las preguntas que el siglo tida en el mismo sentido en que lo es para las
XIX planteó acerca de la veracidad de la Biblia misiones protestantes. Los católicos -a dife-
y del cristianismo sirvieron para que los pro- rencia de los protestantes- habían tenido
pios cristianos se plantearan de nuevo pregun- desde siglos antes un profundo interés misio-
tas fundamentales acerca del carácter de su fe, nero. Sin embargo, el siglo XIX presentaba
y así se lanzaran por nuevos caminos de obe- para ellos, y en ocasiones en mayor grado que
diencia a Dios. Además, los movimientos de para el protestantismo, los mismos retos que
carácter pietista que hemos mencionado en el para el resto de la iglesia. Diversos aconteci-
capítulo anterior continuaron creciendo y juga- mientos históricos, culminando en la Revolu-
ron un papel de suma importancia. ción Francesa, las guerras napoleónicas y las
En términos generales podemos decir que el guerras de la independencia de América, ha-
siglo XIX es el siglo de la expansión protestan- bían hecho declinar el poderío colonial y po-
te euroatlántica. Tanto la Iglesia Católica Ro- lítico de España y Portugal, que durante siglos
mana como la Ortodoxa Rusa continuaron su habían sido los centros de las misiones cató-
trabajo misionero. Pero el protestantismo, por licas. El otro gran país de fe católica, Francia,
su relación directa con los países europeos que no había prestado gran atención a la obra mi-
se levantaban como nuevas potencias mundia- sionera aun en tiempos de su auge político, y
les y por los cambios políticos y económicos no era de suponerse que tras la revolución ese
144
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
país fuese capaz de servir de centro a un gran sionero católico, hasta que en el 1938 cambia-
movimiento misionero. ron sus funciones legislativas y la Congrega-
A pesar de tales circunstancias, el siglo XIX tio tomó responsabilidades administrativas
vio el desarrollo de diversos aspectos del cato- para fomentar el desarrollo de un clero autóc-
licismo romano que a la larga fortalecerían su tono y la contextualización de la fe católica en
obra misionera. distintas partes del mundo.
El primer hecho notable en la historia del La tercera característica de la Iglesia Ro-
catolicismo romano del siglo XIX es la unifi- mana durante este período está en el desarro-
cación de la iglesia bajo un poder papal con- llo de nuevos medios para sufragar los gastos
solidado. Los diversos estados europeos y misioneros que antes corrían por cuenta de
americanos, al insistir en la separación entre los estados coloniales. Cuando las potencias
la iglesia y el estado, pretendían evitar la in- coloniales católicas se mostraron incapaces o
gerencia de aquélla en éste último, pero tam- poco deseosas de sostener económicamente
bién renunciaban a la autoridad que algunos el trabajo misionero en sus colonias, la iglesia
estados habían ejercido sobre la iglesia en se vio en la necesidad de buscar nuevas fuen-
sus dominios. Aun en el caso de los países en tes de apoyo económico. Estas fuentes fueron
que siguió existiendo una unión estrecha en- principalmente las numerosas sociedades pa-
tre la iglesia y el estado, éste último estaba ra el apoyo a las misiones que aparecieron en
por lo general tan debilitado que no podía toda Europa, muy especialmente en Francia.
oponerse al dominio directo de la iglesia por Algunas de ellas, como la Asociación de la
parte de la sede romana. Este movimiento fue Propagación de la Fe, reunían dinero para el
apareado. a otro de carácter muy opuesto den- trabajo misionero. Otras reunían ropa u otros
tro de la Iglesia Romana pero cuya conse- medios físicos necesarios en las misiones. El
cuencia práctica era la misma: el ultramonta- resultado neto de todo esto fue que el interés
nismo, que abogaba por el acrecentamiento misionero dentro del catolicismo romano se
de la autoridad pontificia. La culminación de hizo cada vez más amplio, extendiéndose en-
todo esto fue el Primer Concilio Vaticano tre los laicos.
(1869-1870), que promulgó oficialmente la Sin embargo, en términos generales el siglo
doctrina de la infalibilidad papal. XIX no es para las misiones católicas un nuevo
Otro aspecto importante de la vida de la comienzo del mismo modo en que lo es para las
Iglesia Católica Romana en el siglo XIX que protestantes. La mayor parte de los instrumen-
habría de afectar su trabajo misionero fue la tos católicos que se emplearon en el siglo XIX
revitalización de algunos de los viejos instru- era sólo continuación de los que se habían em-
mentos de las misiones católicas, y muy espe- pleado anteriormente. Si bien las guerras napo-
cialmente de la Compañía de Jesús y de la Sa- leónicas y la independencia de las naciones de
cra Congregatio de Propaganda Fide. La pri- América fueron para el catolicismo un parénte-
mera había sido disuelta por el Papa en el año sis durante el cual su empresa misionera perdió
1773, y a partir de 1801 se comenzó a autori- mucho de su ímpetu, una vez cerrado ese parén-
zar su existencia hasta que en 1814 se le con- tesis la teología y los métodos misioneros de la
cedieron de nuevo sus antiguos derechos. La Iglesia Católica Romana siguieron siendo los
Congregatio de Propaganda Fide fue usada mismos que anteriormente se habían empleado.
De hecho, en el caso de la Iglesia Católica Ro-
por Napoleón como un instrumento de su po-
lítica, pero después volvió a comenzar su obra mana, los primeros años del siglo XX marcan
con nuevos bríos. Cada vez más esta organiza- un punto de partida mucho más significativo
ción vino a ser el foco de todo el trabajo mi- que el principio del siglo XIX.
145
Las misiones en la Época Contemporánea
146
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
to misionero cobró vigor con el espíritu del tra- sus habitantes. Todo esto fue dándole una vi-
bajo voluntario o el voluntarismo, un aspecto sión mundial que más tarde sería importante
importante de la ideología del individualismo para su carrera misionera. Al mismo tiempo se
que marcó tanto a Europa como a Estados Uni- dedicó a estudiar latín, griego, hebreo, holan-
dos durante el final del siglo XIX y principios dés e italiano, con lo cual dio muestras de una
del XX. habilidad lingüística que luego le sería muy
útil.
1. El precursor: Guillermo Carey Mediante el estudio de la Biblia y bajo lain-
Uno de los más grandes misioneros de los fluencia de sus conocimientos de geografía,
tiempos, y el principal precursor del movi- Carey llegó a la conclusión de que la tarea mi-
miento misionero moderno, es Guillermo Ca- sionera era obligación de los cristianos, no só-
rey. Carey nació en Inglaterra en el año 1761, lo del período apostólico, sino de todas las épo-
de una familia de baja clase media íntimamen- cas. Fue esta convicción la que le llevó a publi-
te relacionada con la Iglesia de Inglaterra. car su tratado An Enquiry into the Obligations
Cuando tenía seis años de edad su padre vino a of Christians to Use Means for the Convension
ser maestro de escuela, y esto colocó al joven of the Heathens (Un estudio acerca de las obli-
Guillermo en una posición que le permitió lo- gaciones de los cristianos de emplear medios
grar cierto grado de educación a pesar de los para la conversión de los paganos). En el mes
recursos limitados de su familia. de mayo del año 1792 predicó ante la Asocia-
Leyendo un periódico que su padre recibía ción de Ministros Bautistas su famoso sermón
como maestro de escuela, Carey supo por pri- sobre Isaías 54:2-3, cuyos dos puntos principa-
mera vez de los viajes del capitán Cook, que les eran: «Esperad grandes cosas de Dios» y
despertaron su interés en las tierras lejanas y «Emprended grandes cosas por Dios». En el
todo lo que se relacionase con la geografía. mes de octubre del mismo año, y como conse-
También desde su niñez Guillermo Carey ma- cuencia de los esfuerzos de Carey, quedaba
nifestó hacia las ciencias naturales un vivo in- constituida la Particular Baptist Society for
terés que continuaría a través de toda su vida. Propagating the Gospel among the Heathen
Cuando apenas contaba dieciséis años, su (Sociedad Bautista Particular para Propagar el
padre le envió a un poblado cercano a aprender Evangelio entre los Paganos). Al principio, es-
el oficio de zapatero. Allí, a través de su con- ta sociedad estaba formada por un número re-
tacto con otro aprendiz que era algo mayor que ducidísimo de ministros y amigos de Carey, y
él, Carey descubrió en la vida cristiana profun- su presupuesto anual era insignificante -me-
didades que antes no había conocido, y decidió nos de catorce libras esterlinas. A pesar de lo li-
hacerse bautista. mitado de esa suma, Carey comenzó a prepa-
Cuando su matrimonio le obligó a buscar rarse para partir hacia la India con el médico
una base económica más amplia, emprendió John Thomas, quien había estado antes en ese
nuevas actividades y se dedicó a la enseñanza país.
y al ministerio, aunque sin abandonar su oficio Al principio las dificultades parecieron in-
de zapatero. Durante este período, con el fin de salvables. La esposa de Carey se negó a se-
enseñar geografía a sus discípulos, preparó un guirle a la India, y sólo accedió a permitir que
globo terráqueo hecho de cuero en el cual seña- partiera con él el hijo mayor de ambos. La res-
ló las distintas tierras conocidas. Además hizo puesta de Carey fue que, si él poseyese todo el
para su estudio personal un mapa más detalla- mundo, gustoso lo daría para estar con ella y
do en el que aparecían los nombres de diversas con sus hijos, pero que no podía abandonar su
regiones, así como el carácter y la religión de obligación misionera por esta razón. Otra difi-
147
Las misiones en la Época Contemporánea
cultad apareció cuando se descubrió que el rey, por tanto, intentó establecerse en distintos
doctor Thomas tenía deudas que impedían su lugares, trabajando en cuanta ocupación pare-
partida de Inglaterra. Por último, era de todos ció ofrecer la posibilidad de un ingreso mo-
sabido que la Compañía Británica de las In- desto. Al mismo tiempo, se ocupaba de estu-
dias Orientales no miraba con simpatía la llega- diar el bengalí y de predicar a los indios.' Pues-
da de misioneros a sus colonias, y que haría to- to que este período duró varios años, lo aprove-
do lo posible por evitarla. chó para aprender también el sánscrito y para
A pesar de todas estas dificultades, Carey comenzar a traducir la Biblia al bengalí. Cuan-
continuó firme en su propósito. Su esposa ac- do todas las circunstancias parecían estar con-
cedió por fin a acompañarle y, tras largas ges- tra su empresa, Carey escribió a Inglaterra las
tiones, se hicieron los arreglos necesarios para siguientes líneas memorables: «Mi posición re-
que el Dr. Thomas y su esposa hicieran lo pro- sulta ya insostenible.., hay dificultades por to-
pio. das partes, y muchas más por delante. Por lo
A fines del año 1793 Guillermo Carey y sus tanto, tenemos que seguir adelante».
acompañantes desembarcaron en la ciudad de Su espíritu indomable le llevó a pedir que
Calcuta, aunque sin notificar a las autoridades fuesen enviados de Inglaterra otros misioneros
de su llegada, pues de hacerlo así hubieran co- que pudieran participar de la gran tarea que ha-
rrido el riesgo de ser enviados de regreso a In- bía que realizar en la India. El plan de Carey
glaterra. El plan de Carey consistía esencial- consistía en reunir un número de familias en
mente en ganar su propio sustento y el de su fa- una pequeña comunidad en la cual todos com-
milia, para de ese modo no tener que depender partieran los gastos, y tanto hombres como mu-
económicamente de la sociedad que había que- jeres participaran de diversos aspectos de la
dado en Inglaterra y que había costeado su via- obra misionera. En respuesta a sus peticiones,
je. Para esto contaba con la ayuda del Dr. Tho- llegaron a la India otros misioneros a colaborar
mas. Pero pronto quedó demostrado que éste, con él.
si bien era un cristiano sincero y un buen mé- La llegada de este contingente de refuerzos
dico, resultaba totalmente incapaz de manejar fue la ocasión que llevó a Carey a establecerse
sus propios asuntos económicos. El dinero que en Serampore, territorio que pertenecía a los
habían traído con ellos de Inglaterra pronto re- daneses. Cuando sus nuevos compañeros llega-
sultó ser insuficiente, y el Dr. Thomas contra- ron, las autoridades británicas no les permitie-
ía deudas sobre deudas, que ponían en entredi- ron desembarcar en Calcuta, y por esa razón
cho el carácter de los misioneros. A todo esto pasaron a Serampore, que se encontraba al otro
se añadía la dificultad de que Carey y sus lado de la bahía, frente a la colonia británica.
acompañantes no podían tomar el título oficial Tras largas gestiones, y viendo que el goberna-
de misioneros, lo cual les hubiera valido la ex- dor danés de Serampore se mostraba favorable
pulsión de la India por parte de las autoridades al trabajo misionero, Carey decidió trasladar
de la Compañía. Dicha dificultad ilustra la si- su cuartel general a ese lugar. Allí tuvieron lu-
tuación compleja de muchos misioneros de la gar las más grandes empresas de Carey y sus
época, pues tienen que vivir disfrutando de acompañantes.
ciertos beneficios y legitimación por parte del El trabajo que realizaron los misioneros bri-
imperio y reteniendo a la vez cierta autonomía tánicos en Serampore fue sorprendente. Uno
para realizar el trabajo misionero deseado. Ca- de los recién llegados, Ward, era impresor de
1. De aquí en adelante usaremos el término «indio» para referirnos a una persona nativa de la India, y el tér-
mino «hindú» para referirnos a una persona cuya fe es el hinduismo.
148
Ii
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
oficio, y se dedicó a imprimir las Biblias que vos. A esta conversión se siguieron motines
Carey traducía. Otro, Marshman, mostró ser públicos, y una nueva ola de animadversión
hombre de tanto temple como el propio Carey, por parte de las autoridades coloniales, que te-
y se dedicó a la obra docente. El propio Carey mían que la labor de los misioneros despertara
continuó ampliando cada vez más sus activida- rebeldías entre la población del país, no sólo
des lingüísticas, de manera que pronto llegó a contra el trabajo misionero, sino contra todo el
dominar varios idiomas de la India, para los régimen colonial. A pesar de esto, los misione-
cuales escribió gramáticas y diccionarios. A su ros continuaron su obra, y tres años más tarde
muerte, Carey había traducido la Biblia o por- bautizaron al primer brahmín2 convertido al
ciones de ella a por lo menos treinta y cinco cristianismo. Su política de oposición a la dis-
idiomas y dialectos de la India. Hoy sabemos tinción de castas que era tradicional en la cul-
que algunos de sus trabajos carecen del rigor tura de la India les trajo serias dificultades, pe-
lingüístico necesario para producir traduccio- ro se mantuvieron firmes en ella, hasta tal pun-
nes aceptables y comprensibles. Sin embargo, to que en el mismo año de 1803 un brahmín
lo que sí queda marcado para la historia es la converso se casó con la hija de un carpintero.
pasión de Carey por traducir la Biblia y hacer- La oposición al trabajo misionero continuó
la accesible a las comunidades de la India en haciéndose sentir, y en repetidas ocasiones la
sus propios idiomas. llegada de un nuevo gobernador que prestaba
Un cambio en el gobierno británico local co- oídos a los enemigos de las misiones puso en
loco en el poder a un nuevo gobernador que ve- peligro la empresa toda. Esta situación conti-
ía con simpatía la obra de Carey. Con el propó- nuó hasta que, en el año 1813, y muy especial-
sito de preparar adecuadamente a los emplea- mente debido a las gestiones de Lord Wilber-
dos de la Compañía de las Indias, este goberna- force y de la sociedad que en Inglaterra apoya-
dor estableció un colegio en el cual se enseña- ba a Carey, el Parlamento exigió que en la car-
ban, entre otras cosas, los idiomas de la región. ta patente de la Compañía de Indias se introdu-
Carey fue invitado a la cátedra de bengalí. Tras jese una cláusula en la que se establecía que las
consultar con sus colegas, decidió aceptar di- colonias británicas debían quedar abiertas al
cha invitación, aunque siempre entregó al fon- trabajo misionero. Esta decisión, por un lado,
do común de la misión el dinero que recibía en trajo beneficio para la obra misionera. Por otro,
pago de sus labores docentes. Esta actividad le no obstante, servirá de estorbo, en ocasiones le-
facilitó los contactos con indios de diversas re- gitimando la imposición de la fe cristiana a los
giones del país que por tanto podían ayudarle a hindúes. Más adelante, esta carta patente sería
traducir porciones bíblicas y otra literatura a interpretada por algunos hindúes como una
sus respectivos idiomas y dialectos. De esta versión religiosa del imperialismo inglés.
manera, la imprenta de Serampore llegó a pro- Desde el comienzo de su obra, Carey y sus
ducir literatura cristiana en 42 idiomas. compañeros habían estado convencidos de que
El trabajo misionero de Carey en la India era en última instancia el trabajo de la predicación
complejo. Al principio no parecía que la mi- del Evangelio en la India debía ser llevado a
sión de Serampore lograría gran número de cabo por los mismos indios. Por esta razón,
conversos. Pero en el año 1800 bautizaron al pronto comenzaron a establecer avanzadas de
primer converso, un carpintero que antes había la misión de Serampore en otros puntos cerca-
escuchado el Evangelio de labios de los mora- nos, donde colocaban a un grupo de conversos
2. Un «brahmín» es un hombre que pertenece a la casta alta en la sociedad India y que practica el hin-
duismo.
149
Las misiones en la Época Contemporánea
que vivían con sus familias en una comunidad sionera de Carey refleja lo difícil que es desa-
semejante a la que tenían los misioneros de Se- rrollar una comunidad de fe en un contexto que
rampore -aunque con la supervisión, por al- tiene elementos culturales y religiosos tan com-
gún tiempo al menos, de un misionero. El pro- plejos como los de la India.
pósito de este plan de acción era que a la larga Además de estas actividades, los misioneros
se estableciese en toda la comarca una red de de Serampore se dedicaron a atacar algunos de
centros de evangelización que estuviese en ma- los males más serios de la sociedad india. Los
nos de los indios cristianos. que más atrajeron su atención y su esfuerzo fue-
Para llevar a cabo este proyecto, así como ron dos: la costumbre de sacrificar niños y la de
también para contribuir a hacer a la India par- quemar las viudas en las piras fúnebres de sus
tícipe de los beneficios técnicos de la cultura esposos -el sahti, práctica que Roberto de No-
occidental, Carey y Marshman proyectaron e bili había aceptado en su trabajo misionero.
hicieron realidad un centro de estudios superio- Cuando el gobernador Wellesley supo acerca
res que sería modelo de muchos centros seme- de la práctica de sacrificar niños en el río Gan-
jantes establecidos en otros campos misione- ges, comisionó a Carey para que estudiara los
ros. Esta escuela tenía estudiantes de diversas antiguos libros sagrados de la India con el pro-
religiones. Su propósito era llevar a todos sus pósito de ver si tales prácticas se basaban en
discípulos un conocimiento amplio, no sólo de ellos. Carey llegó a la conclusión de que en los
algunos de los adelantos técnicos occidentales, libros sagrados de la India no se ordenaba el sa-
sino también de su propia cultura. En el caso de crificio de niños. Fortalecido por este argumen-
los discípulos cristianos, el propósito era darles to, Lord Wellesley ordenó que dicha práctica
un conocimiento tal del cristianismo por una cesase inmediatamente y estableció medios de
parte y de los libros sagrados y las religiones de vigilancia para evitar que se continuase. A los
la India por otra, que les fuese posible presen- pocos años, y con la contribución de Carey jun-
tar el Evangelio a sus compatriotas pertene- to a otros hindúes que también estaban en des-
cientes a esas religiones, y discutir, no como acuerdo con los sacrificios de niños, los hindú-
extranjeros, sino como cristianos indios. Con es de la región habían dejado de sacrificar niños.
respecto a los discípulos no cristianos, el cole- Algo semejante sucedió en el caso de las viudas
gio de Serampore buscaba naturalmente su -aunque la costumbre de ofrecerlas en sacrifi-
conversión, pero aun si ésta no tenía lugar se cio en la pira fúnebre de sus esposos estaba tan
consideraba satisfecho por haber mejorado su arraigada que fue mucho más difícil hacerla
educación. Para poder levar a cabo su labor desaparecer. También en este caso, Carey de-
educativa, el colegio comenzó a reunir una vas- mostró que la costumbre que se decía ser reli-
ta biblioteca de libros tanto impresos como ma- giosa no se basaba en mandamiento alguno de
nuscritos, y tanto occidentales como indios. los libros sagrados. Tras un largo período de
Como parte fundamental de la política del co- vacilación, las autoridades inglesas decidieron
legio, la educación se impartía en sánscrito y en prohibir que se quemase a las viudas junto con
árabe, y el inglés se reservaba para los alumnos los cadáveres de sus esposos. Cuando Carey re-
más aventajados. Desgraciadamente, lo que pa- cibió el edicto, corrió a traducirlo al bengalí, pa-
recía ser un esfuerzo por dar a la fe cristiana en ra asegurarse de que ni una sola viuda perecie-
India un carácter nacional, provocó en muchos ra por causa de su negligencia.
casos un aislamiento cultural y actitudes apolo- La obra de Carey y de sus acompañantes tu-
géticas de superioridad en algunos cristianos vo amplias repercusiones. Los hijos del propio
indios que se instruyeron y eran parte de estas Carey fueron también misioneros, el uno en
comunidades cristianas. Sin duda, la tarea mi- Birmania, donde no tuvo la perseverancia de su
150
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
padre, y el otro en Java. En Inglaterra, las no- ros de distintas partes del mundo con los re-
ticias de la obra que se realizaba en Serampo- presentantes de las sociedades que les envia-
re hicieron despertar un nuevo interés en cien- ban. Con este sueño, Carey se anticipaba a la
tos de cristianos. La Sociedad Bautista Particu- historia, que mostraba que el espíritu ecumé-
lar para Propagar el Evangelio envió a Seram- nico, necesario en todas las fases de la vida de
pore otros misioneros más jóvenes -lo cual no la iglesia, resulta imprescindible en el trabajo
dejó de crear conflictos y hasta un cisma. En misionero.
Inglaterra surgieron numerosas sociedades mi-
sioneras, además de la British and Foreign Bi- 2. Los centros misioneros durante este período
blical Society (Sociedad Bíblica Británica y En gran medida como consecuencia de la
Extranjera) en cuyo origen fue grande la in- obra de Carey y sus compañeros, los últimos
fluencia de las noticias que llegaban desde Se- años del siglo XVIII y los primeros del XIX
rampore, y que desde el principio le pidió al vieron un despertar del interés misionero en la
grupo que allí trabajaba que colaborase con Gran Bretaña. Ya hemos mencionado algunas
ella en la traducción y distribución de la Biblia. de las sociedades que surgieron como resulta-
Pronto el entusiasmo misionero alcanzaría a do directo de la obra de Carey. Sus cartas y las
todos los rincones de la Iglesia en Inglaterra y demás noticias que llegaban de la India hacían
hasta en los Estados Unidos. que muchas personas para quienes la fe cristia-
Debemos señalar que la motivación teológi- na era el centro de sus vidas comenzaran a pre-
ca del trabajo de Carey no se encontraba en un guntarse si no debían participar de una manera
sentido de lástima o compasión hacia los paga- o de otra en el esfuerzo misionero. En el año
nos que se estaban perdiendo, como sucedía 1795 se fundó la London Missionary Society, y
en el caso de los moravos. Carey sí creía que cuatro años mas tarde la Church Missionary
los paganos que no conocían a Jesucristo esta- Society. La primera reunía a personas de distin-
ban perdidos, pero el motivo que le impulsaba tas denominaciones -especialmente congre-
no era tanto un sentido de compasión hacia gacionales y presbiterianos- mientras que la
esas personas como la obligación en que sentía segunda comprendía sólo a anglicanos del ala
le colocaba el mandamiento de Jesucristo de ir evangélica. Como consecuencia de este des-
por todo el mundo y predicar el Evangelio. Pa- pertar, y también a causa de un viejo interés
ra Carey, las misiones son un acto de obedien- que ya hemos mencionado, los metodistas or-
cia más que de compasión. La compasión jue- ganizaron una sociedad misionera, y lo mismo
ga un papel importante, pero es sólo el resulta- sucedió con otros grupos menos numerosos.
do de la obediencia. Es de notarse que estas sociedades tenían un al-
Por último, es interesante notar que, a pe- cance mundial, y no limitaban su acción a las
sar de que las circunstancias de la época no le posesiones británicas, como lo hacían las so-
permitieron realizar ese sueño, Carey pensó ciedades que habían aparecido antes de Carey.
siempre que la obra misionera debía ser em- No cabe duda de que buena parte de esta visión
prendida sin espíritu sectario, y que las divi- mundial se debe a la obra del misionero de Se-
siones de la iglesia en los países de origen de rampore.
la misión no deberían llevarse al campo mi- Con la fundación de estas sociedades apare-
sionero. Más de cien años antes de que tuvie- ce en la historia de las misiones protestantes un
se lugar la histórica Conferencia Misionera fenómeno que no había existido anteriormente,
Mundial de Edimburgo de 1910, Carey soña- y en el que se amplía el alcance de esas misio-
ba con una gran asamblea mundial en que se nes, no sólo en su sentido geográfico, sino tam-
reunirían en la Ciudad del Cabo los misione- bién en la amplitud del apoyo financiero, que
151
L
Las misiones en la Época Contemporánea
viene de un número de personas cada vez ma- glo XIX estuvieron en Alemania y Suiza, don-
yor. Además, estas sociedades son el primer de la influencia del movimiento misionero
intento protestante de organizar el trabajo mi- británico se conjugaba con la antigua tradi-
sionero de tal manera que tenga, además de la ción pietista para dar origen a un genuino in-
misión propiamente dicha, una organización terés misionero. Una característica notable del
que sirva para mantener vivo el interés en el trabajo de las misiones en estos países es que,
país de origen. siguiendo el ejemplo de la antigua Universi-
La existencia de tales sociedades misione- dad de Halle, se organizaron escuelas que se
ras, no como parte oficial de las denominacio- dedicaban especialmente a la preparación de
nes, sino como eclesiolas dentro de la iglesia, misioneros. De éstas las más notables fueron
creó una distancia entre «iglesia» y «misión» las de Berlín y Basilea. Además se fundaron
que más tarde sería necesario salvar. varias sociedades misioneras, muchas de las
Por otra parte, la distancia entre estas orga- cuales más tarde se fundieron para poder rea-
nizaciones misioneras y las denominaciones lizar un trabajo más efectivo. En Holanda se
proveyó cierto espacio para una reflexión mi- organizó la Sociedad Misionera Holandesa,
siológica que contribuyó a la contextualización estrechamente relacionada con la London
de las nuevas iglesias en el suelo misionero. Missionary Society, y que trabajó especial-
Por ejemplo, la misiología de Henry Venn (de mente en el sur de Africa. También en los pa-
la Church Missionary Society) y luego la de íses escandinavos se organizaron sociedades
Rufus Anderson (American Board of Commis- misioneras durante el siglo XIX. La Sociedad
sioners for Foreign Missions), fueron posibles Danesa se distinguió por su trabajo en Groen-
en parte porque tales misiólogos no tenían que landia y la India, mientras que la de Suecia
sujetarse por completo a los intereses de sus dedicó más atención a las misiones en Lapo-
iglesias de origen. La principal contribución nia.
de Anderson en este sentido es el principio de Durante el siglo XIX, y aun más en el XX,
las tres autogestiones (three-selfprinciple) se- los Estados Unidos fueron uno de los principa-
gún el cual las iglesias fundadas por las socie- les centros de misiones protestantes. Ya hemos
dades misioneras debían llegar al punto de au- visto cómo desde muy temprano se comenza-
togobernarse, autosostenerse y autopropagarse. ron en las Trece Colonias de Norteamérica mi-
Esto en sí es una contribución importante a las siones entre los indios. A fines del siglo XVIII
eclesiologías más tradicionales. los moravos organizaron una sociedad misio-
Durante todo el siglo XIX, y a consecuencia nera y un grupo de cristianos de Nueva Ingla-
tanto de su creciente poderío marítimo y colo- terra fundó otra cuyo propósito era preparar y
nial como de la obra de Guillermo Carey y los enviar negros norteamericanos como misione-
muchos que después de él hicieron trabajos se- ros al Africa. Pero fue durante el siglo XIX
mejantes, la Gran Bretaña fue la principal fuen- que se fundaron la grandes sociedades misio-
te de misiones protestantes. Sin embargo, los neras norteamericanas. Uno de los principales
antiguos países protestantes de Europa, así co- impulsos que contribuyeron al despertar mi-
mo los Estados Unidos, lanzaban también sus sionero del siglo XIX en los Estados Unidos
empresas misioneras. A la larga, el trabajo mi- fue el gran movimiento religioso que se cono-
sionero del protestantismo norteamericano se- ce como el Second Great Awakening y que co-
ría mucho más amplio que el de los demás cen- menzó a principios del siglo XIX. Además de
tros protestantes. esto, naturalmente, las noticias que llegaban de
En el continente europeo los principales la obra evangelizadora de Inglaterra en la India,
centros de misiones protestantes durante el si- y muy especialmente de la de Carey y sus
152
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
153
Las misiones en la Época Contemporánea
154
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
municación coherente del trabajo misionero la América Latina, salvo raras excepciones co-
en los países de origen. La ausencia de un mo la de México en 1888, no se celebraron
trabajo coordinado entre las diferentes socie- conferencias misioneras interdenominaciona-
dades misioneras también produjo informes les sino en el siglo XX. Lo mismo puede decir-
con diferentes interpretaciones de la tarea mi- se acerca de Africa, donde la primera tuvo lu-
sionera que potencialmente podían afectar de gar en el año 1904.
forma negativa el apoyo misionero. Por tanto, Al mismo tiempo que se celebraban en el
se va desarrollando entre las sociedades mi- campo misionero las conferencias que hemos
sioneras una red de apoyo y coherencia en la señalado, tenían lugar en Europa y Estados
comunicación que influirá de forma marcada Unidos otras en que participaban las personas
en la unidad de las misiones desde los países y organizaciones interesadas en el trabajo mi-
de origen. sionero. Ya en el año 1837 se reunieron en
Todo esto hizo que en el campo misionero Basilea representantes de varias sociedades
surgiera un espíritu de cooperación entre cris- misioneras europeas. En 1846 se organizó en
tianos de diversas denominaciones. Este espíri- la Gran Bretaña la Alianza Evangélica, cuyo
tu les llevó a dejar a un lado viejas discusiones propósito era fomentar la comprensión y coo-
y prejuicios que aún reinaban en las iglesias de peración entre evangélicos de diversas deno-
Europa y los Estados Unidos. minaciones, y que desde su fundación tuvo
Por otra parte, muchas de las sociedades mi- un marcado interés misionero. Debido en par-
sioneras que se organizaron en Estados Unidos te a esta Alianza, se celebraron varias confe-
y Europa incluían en su seno miembros de di- rencias misioneras en el mundo anglosajón:
versas iglesias, y esto contribuyó al acerca- en Nueva York y Londres en 1854, en Liver-
miento entre los cristianos. pool en 1860, en Londres en 1878 y 1888, y
Luego, puede decirse que el movimiento otra vez en Nueva York en 1900. Además,
ecuménico es hijo de las misiones. Aunque es- tanto en el mundo anglosajón como en el con-
te movimiento logró mucho mayor desarrollo tinente europeo, los dirigentes de la obra mi-
en el siglo XX, ya desde el siglo anterior po- sionera comenzaron a reunirse y a tomar
dían verse sus primeras señales. Estas señales acuerdos para cooperar entre sí y para evitar
aparecieron primero en la India, donde a partir conflictos en el campo misionero. Consecuen-
del año 1825 se comenzó a celebrar conferen- temente, estas conferencias buscaban discutir
cias regionales a las que asistían misioneros de los problemas y retos en el campo misionero,
diversas denominaciones. Las primeras -co- Pero aún no se había desarrollado una teolo-
mo la de Bombay en el año 1825 y la de Ma- gía que buscara integrar la tarea misionera con
drás en el 1830- se limitaban a una ciudad y la vida de la iglesia, y por ello en gran medi-
sus alrededores. Pero ya en el año 1855 co- da estos congresos reflejan una tensión entre
menzó una serie de asambleas con más alcan- la misión -tarea de las sociedades misione-
ce geográfico, tanto en el norte de la India co- ras- y la iglesia como se conoce en los paí-
mo, tres años más tarde, en el sur. En el año ses de origen.
1872 se reunió en Alajabad la primera confe- Sin embargo, es triste notar que estos prime-
rencia misionera de toda la India, y luego con- ros pasos hacia la unidad, muy especialmente
tinuaron celebrándose reuniones semejantes los del mundo anglosajón, no tomaban en
cada diez anos. En Japón y China también se cuenta la totalidad del trabajo que se estaba re-
celebraron conferencias misioneras, pero éstas alizando, sino sólo el de los grupos y movi-
comenzaron más tarde que en la India: en el mientos representados en cada conferencia o
año 1872 en Japón y en el 1877 en China. En reunión.
155
1
Por último, entre los precursores del movi- vó al gran Congreso de Panamá de 1916, don-
miento ecuménico del siglo XX debernos men- de el Comité de Cooperación en la América
cionar el Movimiento Estudiantil Cristiano. No Latina fue ratificado.
podemos relatar aquí la historia de este movi- Aun cuando la Conferencia de Edimburgo
miento hasta la fundación de la Federación abrió el camino al movimiento ecuménico del
Mundial de Estudiantes Cristianos. Baste decir siglo XX, es necesario señalar en ella una limi-
que desde sus orígenes todo el movimiento es- tación teológica que afectó todos sus estudios.
tudiantil -y muy especialmente el Student Vo- Ya hemos dicho que sólo haba diecisiete re-
lunteer Movement- fue animado por un pro- presentantes de las «iglesias jóvenes». Esto se
fundo interés misionero. Además, fue de él que debía, no sólo a cierto prejuicio o falta de inte-
surgieron las principales figuras que durante la rés, sino también y muy especialmente a una
primera mitad del siglo XX dirigieron el movi- falsa perspectiva teológica, mencionada arri-
miento ecuménico. ba, en la que no se había llegado aún a la inte-
Si bien durante todo el siglo XIX puede ver- gración entre iglesia y misión. Se pensaba que
se un creciente espíritu de unidad, es en el siglo el trabajo misionero correspondía a las igle-
XX que ese espíritu cobra ímpetu de fuerza uni- sias, y sobre todo a las sociedades misioneras
versal en lo que se ha dado en llamar «el movi- occidentales; pero no se tomaba en cuenta el
miento ecuménico». Pero también entonces la hecho de que, si las nuevas iglesias lo eran de
obra y el interés misioneros se encuentran en la veras, tenían que ser también misioneras, pues
raíz misma del espíritu de unidad, ya que el la misión pertenece a la esencia misma de la
principal precursor del Consejo Internacional Iglesia. Luego, la Conferencia trató acerca de
Misionero y del Consejo Mundial de Iglesias la responsabilidad y los problemas misioneros
fue la Conferencia Mundial Misionera celebra- de las iglesias occidentales, pero omitió esa
da en Edimburgo, Escocia, en el año 1910. misma responsabilidad y esos problemas en lo
En la Conferencia de Edimburgo estaban re- que se refiere a las iglesias surgidas de la obra
presentados los principales cuerpos protestan- misionera reciente.
tes. Sin embargo, de más de mil delegados, só- A pesar de las limitaciones que eran de es-
lo diecisiete pertenecían a las iglesias nacidas perarse en una conferencia como la de Edim-
del trabajo misionero de Occidente. Los demás burgo, a partir de aquella gran asamblea el
eran todos europeos o norteamericanos. Por movimiento ecuménico alcanzó un ímpetu in-
otra parte, a fin de incluir a los anglicanos, fue esperado. La propia Conferencia de Edim-
necesario excluir de la agenda todo lo que se burgo nombró un Comité de Continuación
refiriese a cuestiones de fe y constitución, así cuya obra culminó en la formación del Con-
como la cuestión de las misiones protestantes sejo Internacional Misionero en el año 1921.
en la América Latina. Estas fueron las dos Ya para esta fecha habían surgido organis-
grandes omisiones, pero aun en esto la Confe- mos de cooperación misionera en Europa, Es-
rencia tuvo resultados positivos, pues la omi- tados Unidos, Canadá y Australia, y éstos
sión de estos dos temas de primera importancia formaron el núcleo de la membresía del Con-
llevó a la fundación, por parte de personas que sejo. Además, se estableció que las «iglesias
habían estado presentes en Edimburgo, de mo- jóvenes» de Africa, el Oriente y la América
vimientos dedicados especialmente a estos dos Latina tendrían su representación en el Con-
asuntos. Fue así que de Edimburgo surgieron el sejo. El propósito de éste -al igual que el de
movimiento de Fe y Constitución (o de Fe y las diversas conferencias regionales celebra-
Orden) y, en el año 1912, el Comité de Coope- das anteriormente, así como de la Conferen-
ración en la América Latina. Este a su vez lle- cia de Edimburgo- no era establecer nor-
156
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
mas para la obra misionera de las iglesias, si- punto de vista teológico, la existencia de dos
no servir de lugar de encuentro entre los di- organismos diversos. A partir de entonces la
versos intereses misioneros. mayor parte de los antiguos intereses y preocu-
El Consejo Internacional Misionero celebró paciones del Consejo Internacional Misionero
conferencias en Jerusalén (1928), Madrás pasaron a la División de Misión Mundial y
(1938), Whitby, Canadá (1947), Willingen, Evangelismo del Consejo Mundial de Iglesias.
Alemania (1952) y Ghana (1957-1958). En el Esta división continuó celebrando asambleas
año 1961, en Nueva Delhi, se fundió con el que pueden llamarse herederas de a tradición
Consejo Mundial de Iglesias, que habíasido de Edimburgo, tales como la que tuvo lugar en
fundado en Amsterdam en 1948 y que había México en el año 1963 -y luego otras en
venido a ser el principal exponente del movi- Bangkok, 1973; Melbourne, 1980; San Anto-
miento ecuménico. nio, EE.UU., 1989; Salvador, Bahía, 1996; y
La Asamblea de Jerusalén del año 1928 se Atenas, 2005.
reunió en el Monte de los Olivos. Casi la cuar- El impacto de esta reuniones también tuvo
ta parte de sus miembros pertenecía a las «igle- un efecto importante en América Latina, deján-
sias jóvenes», y ya esto era un paso de avance dose sentir primordialmente en las Conferen-
con respecto a la Conferencia de Edimburgo. cias Evangélicas Latinoamericanas, el desarro-
En el entretanto, en el año 1927, el movimien- llo de agencias ecuménicas tales como Iglesia
to de Fe y Constitución, nacido también de y Sociedad en América Latina (ISAL), la Co-
Edimburgo, había celebrado en Lausana su pri- misión Evangélica Latinoamericana de Educa-
mera conferencia. Muchos de los delegados a ción Cristiana (CELADEC) y en posteriormen-
Jerusalén habían estado presentes en Lausana, te la creación del Consejo Latinoamericano de
y la influencia de ésta última se hizo sentir en Iglesias en el 1979. Esta historia será discutida
el modo en que los delegados a Jerusalén se en- en el capítulo nueve.
frentaron a la cuestión teológica fundamental Ninguno de los organismos ecuménicos que
de la naturaleza y el contenido del mensaje hemos mencionado -y hay muchos otros-
cristiano. tiene poderes sobre sus miembros, que siempre
A partir de Jerusalén, y cada vez más, el conservan su autonomía y derecho a tomar de-
Consejo Internacional Misionero comenzó a cisiones propias. Pero la oportunidad de discu-
percatarse de la unión indisoluble entre iglesia tir y plantearse juntamente problemas tanto de
y misión. En Madrás, la iglesia vino a ocupar un teología como de estrategia ha fortalecido
lugar céntrico en la discusión, pero el impacto grandemente la obra misionera protestante.
de esta asamblea se vio debilitado por la Segun- No todas las sociedades misioneras y líderes
da Guerra Mundial. Buena parte de la obra de la misioneros abrazaron el ímpetu de las confe-
asamblea de Whitby, en el año 1947, consistió rencias mundiales misioneras y del Consejo In-
en restablecer los vínculos que habían sido in- ternacional Misionero. Algunas, en gran medi-
terrumpidos por el conflicto bélico, y en reco- da informadas por una urgencia misionera da-
brar los logros que se habían alcanzado antes da su expectativa de la inminente segunda ve-
de la catástrofe. En Willingen en el año 1952 y nida de Cristo y por las controversias entre fun-
en Ghana, cinco años más tarde, continuó des- damentalistas y modernistas, formaron sus pro-
arrollándose la conciencia de la unión entre pias organizaciones «interdenominacionales»
iglesia y misión. El resultado de esto fue la fu- (pues muchos rechazaban el término «ecumé-
sión del Consejo Internacional Misionero con nico») para discutir y planificar el trabajo mi-
el Consejo Mundial de Iglesias (Nueva Delhi, sionero. La organización más importante entre
1961), pues no parecía justificarse, desde el estos grupos misioneros lo fue la Interdenomi-
157
Las misiones en la Época Contemporánea
national Foreign Mission Association, fundada Norteamérica. Pero los misioneros del siglo
en 1917. Esta asociación misionera agrupó a XIX y del XX fueron más independientes de
sociedades misioneras evangélicas, muchas de los intereses políticos y económicos de sus na-
ellas conocidas como faith missions o misiones ciones que los de cualquier otra época desde
de fe. Un ejemplo de estas sociedades lo fue la los inicios de la Edad Media. No faltaron mi-
Misión Centroamericana fundada por Cyrus I. sioneros que se sirvieron del poder y prestigio
Scofield a mediados del siglo XIX. de las naciones de su procedencia para llevar su
Muchas de estas sociedades criticaban las mensaje a quienes estaban bajo el influjo de ese
estrategias, ideas y propuestas que los congre- poder o ese prestigio. Pero aun entre ellos la
sos misioneros mundiales producían. No obs- mayoría no lo hacía con un espíritu pragmáti-
tante, el carácter ecuménico y el espíritu de co, queriendo aprovecharse de su posición pri-
unidad en la misión, tal como la había propues- vilegiada, sino que lo hacía con la sincera con-
to Carey, era evidente aun entre estas socieda- vicción de que los intereses occidentales, aun
des y misiones de fe. en manos de políticos algo corruptos o de co-
Estas organizaciones de tono más conserva- merciantes con el solo interés del dinero, eran
dor y a veces fundamentalista también han con- una fuerza civilizadora.
tribuido a la creación de organismos «ecuméni- Lo que caracteriza al movimiento misione-
cos» en América Latina -aunque en tales cír- ro de esta época no es tanto el que haya sido
culos se prefiere decir «interdenominaciona- instrumento de la expansión de Occidente -
les» más bien que «ecuménicos»- tales como pues esa expansión tenía que venir debido al
la Fraternidad Teológica Latinoamericana desarrollo tecnológico que el Occidente había
(1969) y la Confraternidad Evangélica de Igle- alcanzado- como el espíritu de superioridad y
sias Latinoamericanas (CONELA) a finales de de condescendencia por parte de las culturas
la década de los 70. Esta historia también será occidentales hacia sus congéneres de otra raza,
discutida en el capítulo nueve. cultura y religión. En círculos misioneros occi-
Puesto que este libro trata acerca de la his- dentales se hablaba del white man's burden -
toria de las misiones, y no de la historia del mo- la responsabilidad por parte de las culturas oc-
vimiento ecuménico, no podemos relatar aquí cidentales, encamadas en el hombre blanco, de
cómo en la segunda mitad del siglo XX dicho llevar a los demás su civilización y, junto con
movimiento, nacido entre protestantes, se ex- ella, su fe. Esta actitud no fue del todo univer-
tendió a las iglesias ortodoxas y al catolicismo sal, y en los capítulos que siguen encontrare-
romano. Baste aquí señalar el hecho, que en el mos repetidos ejemplos de misioneros que to-
futuro ha de influir sin duda en la obra misio- maron otra actitud. Pero sí fue bastante general,
nera, aun cuando hasta el presente no sea posi- y se reflejó en el modo en que se concebían las
ble decir cómo. misiones, no como un aspecto fundamental de
la vida de la Iglesia del que todas las iglesias
D. Consideraciones generales debían participar, sino como la responsabili-
El siglo XIX ha sido llamado 'El Gran Si- dad exclusiva de las iglesias occidentales.
glo" de la historia de las misiones. En él se Debido a su relación estrecha con la expan-
combina la más grande expansión que civiliza- sión de Occidente, la obra misionera de los siglos
ción alguna haya conocido con el más genuino XIX y XX ha estado sujeta a las vicisitudes de
interés misionero. El gran avance geográfico esa expansión. Durante casi todo el siglo XIX,
del cristianismo durante ese siglo se debió sin las potencias occidentales penetraron cada vez
lugar a dudas, en parte al menos, al auge polí- más en el resto del mundo. Aunque hubo países
tico y económico de Europa -y más tarde, de que, como China y Japón, durante algún tiempo
158
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
se negaron a permitir esa influencia, sus esfuer- blanco. Esto puede verse, por ejemplo, en el
zos fueron vanos. Por ello, el siglo XIX trajo una mundo en que ha ido aumentando la participa-
expansión misionera casi ininterrumpida. ción de las antes llamadas «iglesias jóvenes»
En el siglo XX, por el contrario, comenzó a -hoy llamadas preferentemente «iglesias del
hacerse sentir una reacción nacionalista en la Hemisferio Sur»- en el movimiento ecuméni-
que las viejas culturas, religiones y tradiciones co internacional.
servían de instrumento y símbolo de oposición Por ultimo, conviene señalar que, debido a
a las culturas occidentales. Aun cuando repu- que la mayoría de los misioneros protestantes
diaba toda influencia occidental, esta reacción del siglo XIX pertenecía a la tradición pietista,
se veía obligada a hacer uso de la tecnología su mensaje en el campo misionero fue de ca-
que le había sido legada por los poderes colo- rácter individualista. Esto no quiere decir que
niales y los misioneros. Se intentaba, sin em- no se ocupasen del bienestar físico de las per-
bargo, separar los adelantos técnicos del resto sonas (que sí lo hicieron), sino sólo que no in-
de la civilización occidental, y hacer uso de tentaron descubrir la implicaciones del Evan-
ellos sin dejarse envolver por el resto de la cul- gelio para la totalidad de la sociedad en que tra-
tura en que tuvieron su origen. Esto hizo más bajaban. Aun esto no ha de exagerarse, pues
difícil el trabajo misionero, pues pronto las hubo algunos casos, como el de Carey en la In-
nuevas naciones comenzaron a hacer uso por sí dia, en que los misioneros hicieron todo lo po-
mismas de algunos de los adelantos técnicos - sible por lograr leyes más justas. Pero aun en-
por ejemplo, en la medicina, la educación y la tonces no comunicaron a las iglesias por ellos
agricultura- que antes habían servido a los fundadas el sentido de su propia responsabili-
misioneros para hacerse escuchar. dad dentro de la situación en que estaban colo-
Por otra parte, en el siglo XX comenzaron cadas. En el siglo XX, con los nuevos estudios
los cristianos a pensar en términos, no de una bíblicos y la renovación teológica que de ellos
iglesia occidental con misiones en el resto del surgió, las «iglesias jóvenes» comenzaron a
mundo, sino más bien de una iglesia represen- pensar más en términos de su propia responsa-
tada en todas las naciones de la tierra y con bilidad social, aunque daban a veces la impre-
una misión en cada una de ellas. De este modo, sión de no estar del todo preparadas para des-
el cristianismo comenzó a ser verdaderamente cubrir por sí mismas lo que esa responsabilidad
una fe universal, y no la posesión del hombre implicaba en su situación concreta.
159
capítulo 7
Las misiones en el Lejano
Oriente y el Sur del Pacífico
160
1:
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
A fin de hacer justicia a los distintos grupos uno de los misioneros fue hecho director del
cristianos que existían en la India, comenzare- seminario en que se preparaban los sacerdotes
mos haciendo referencia a ellos en orden de jacobitas.
antigüedad, comenzando por los llamados En el año 1825 comenzaron las dificulta-
«cristianos de Santo Tomás» y de allí pasando des. Aunque éstas se relacionaban con cuestio-
al catolicismo romano, para terminar con el nes circunstanciales, en realidad el problema
protestantismo. tenía varias dimensiones. Una de ellas era la
tensión entre la «tradición», a que los jacobitas
1. Los Cristianos de Santo Tomás estaban tan apegados, y las «innovaciones» de
durante los Siglos XIX y XX los anglicanos. Otra era la actitud de superiori-
Los últimos años del siglo XVIII y los pri- dad por parte de aquellos misioneros para quie-
meros del XIX vieron el establecimiento del nes los jacobitas indios representaban una tra-
poderío británico en las regiones donde eran dición deficiente. Cuando en el año 1827 los
más numerosos los «cristianos de Santo To- primeros misioneros anglicanos fueron susti-
más» es decir, en Travancore y Cochín. Los tuidos por hombres más jóvenes, que no com-
dos primeros representantes del gobierno britá- prendían las sutilezas de la situación, las rela-
nico en esta zona, los coroneles Macaulay y ciones empeoraron rápidamente, y en el 1836
Munro, eran personas de profunda convicción se produjo la ruptura definitiva.
cristiana que se interesaron sinceramente en Aún después de esta ruptura los misioneros
los jacobitas. A través de sus esfuerzos y con la continuaron su trabajo, aunque dirigiéndose
presencia de la Sociedad Misionera de la Igle- ahora principalmente a los no cristianos. Esto
sia (Church Missionary Society, CMS, órgano no fue obstáculo para que un número de con-
misionero de la Iglesia Anglicana) y los servi- gregaciones abandonase la antigua Iglesia Si-
cios de varios misioneros, se comenzó a esta- ríaca y se hiciesen anglicanas. Estas iglesias
blecer relaciones entre las antiguas iglesias de forman ahora parte de la Iglesia del Sur de la
la India y la Iglesia de Inglaterra. En las ins- India (Church of South India), de que tratare-
trucciones que se daban a estos misioneros se mos más adelante.
estipulaba claramente que su trabajo no era ha- Por otra parte, dentro de la propia iglesia
cer anglicanos de los cristianos jacobitas. Su jacobita persistió algo de la semilla sembra-
función consistía en servir a la Iglesia Jacobi- da por los misioneros británicos, pues la ma-
ta de la manera como ésta lo solicitase, y en de- yoría de los jacobitas que habían favorecido
dicarse a enseñar y, de ser posible, predicar la las reformas por las que los anglicanos labo-
verdad bíblica entre ellos. El propósito de estos raban no abandonó su vieja iglesia. Durante
misioneros era que sus enseñanzas sirviesen algún tiempo pareció que el partido reforma-
como «levadura que leuda toda la masa», una dor lograría llevar consigo a la mayoría de la
acción misionera que ayudaría a la Iglesia Ja- iglesia, especialmente puesto que el gobierno
cobita a profundizar en la verdad del evangelio. lo apoyaba, pero una visita del patriarca de
Este trabajo comenzó en el año 1816, y al prin- Antioquía tuvo por resultado la debilitación
cipio tuvo gran éxito. La jerarquía jacobita se del partido reformador. Esto no fue suficien-
mostró dispuesta a recibir la ayuda de los mi- te para evitar el cisma, surgido a raíz de lo
sioneros anglicanos -aunque no sin ciertas re- que se conoce como «el caso del Seminario».
servas- y éstos comenzaron un amplio traba- De ese cisma surgió en el 1889, con al apoyo
jo de traducción y de impresión de libros, de de la CMS, la Iglesia de Mar Thoma, prime-
organización de escuelas en las parroquias ro bajo el liderato de Tomás Mar Atanasio y
siríacas y hasta de educación teológica, pues luego bajo Tito II.
161
Las misiones en el Lejano Oriente y el Sur del Pacífico
La Iglesia de Mar Thoma era al principio los que procedían directamente de Roma co-
una pequeña minoría de los cristianos jacobitas, menzó cuando en el año 1831 el papa Gregorio
pero su celo evangelizador pronto le ganó un si- XVI, que antes había sido prefecto de De Pro-
tio entre las principales iglesias de la India. En paganda Fide, llegó al trono pontificio. En
el año 1889 se fundó la Asociación Evangelis- 1833 el gobierno portugués, deseoso de afirmar
ta de Mar Thoma, que ha logrado numerosas su autoridad frente al Papa, rompió con Roma.
conversiones y cuyo trabajo misionero se ex- La respuesta de esta última fue abolir algunas
tiende hoy hasta muchos grupos inmigrantes en de las antiguas sedes que quedaban bajo la ju-
el Occidente. A partir de 1895, la Iglesia de risdicción portuguesa e intensificar su trabajo
Mar Thoma ha patrocinado reuniones anuales misionero directo en la India. Puesto que ya
en las que se congregan miles de cristianos pa- en esa fecha había sido reorganizada la Socie-
ra escuchar a predicadores de diversas denomi- dad de Jesús, numerosos jesuitas de todos los
naciones cristianas. Actualmente su membre- países católicos de Europa llegaron a la India.
sía en la India es de más de 900.000 personas, La disputa se hizo cada vez más agria, y los mi-
con once diócesis; y en otras partes del mundo, sioneros que venían enviados directamente por
unas 200.000 personas. Su teología se acerca a Roma acusaban de cismáticos a los que soste-
la del protestantismo occidental, pero su liturgia nían el padroado portugués, mientras que estos
guarda aún el sello oriental. últimos afirmaban que no lo eran, puesto que el
La otra rama de la iglesia jacobita también Papa había cedido anteriormente al Rey de Por-
sufrió un cisma en el año 1910, aunque no tan- tugal su autoridad en la India. Tras largas con-
to por cuestiones teológicas como por proble- troversias, se hizo una serie de concordatos -
mas de autoridad en la jerarquía. A mediados el primero en el año 1857- que fueron resol-
del siglo XX, diversas circunstancias parecían viendo la cuestión. Pero aún después de la in-
indicar que este cisma sería subsanado -lo dependencia de la India, en los años 1950 -
cual aún no ha ocurrido. 1953, Roma y Portugal continuaban tratando
Hay además un pequeño número de nesto- de resolver su vieja disputa. Como es de supo-
rianos en la región de Cochin. nerse, todo esto debilitó el trabajo misionero
católico romano.
2. El catolicismo romano A pesar de la profunda y prolongada dispu-
En la India, al igual que en otras parte del ta entre Roma y Portugal acerca de su jurisdic-
globo, los primeros años del período que esta- ción sobre la India, las misiones católicas en
mos estudiando constituyen un momento tris- esta región lograron cierto progreso. De hecho,
te en la historia de la Iglesia Católica Romana. fue el avance de las misiones no portuguesas lo
Allí también la decadencia del poderío portu- que inspiró el conflicto con quienes defendían
gués, las guerras napoleónicas y la disolución la permanencia del viejo padroado portugués.
de la Sociedad de Jesús habían afectado el tra- Uno de los más notables misioneros católicos
bajo misionero. Además, la decadencia portu- durante este período fue el jesuita flamenco
guesa complicó la situación de la Iglesia Cató- Constant Lievens, que por razones de salud só-
lica Romana en la India con una prolongada lo pudo permanecer en la India unos seis años,
disputa entre los vicarios apostólicos que eran pero que a pesar de ello logró comenzar un
enviados directamente por Roma, y las autori- movimiento de conversión en masa. Lievens
dades eclesiásticas que aún dependían del pa- se estableció en la zona de Ranchi, donde se hi-
droado portugués. zo campeón de los oprimidos frente a los terra-
La disputa entre los católicos romanos que tenientes y a los usureros. Frecuentemente, lle-
se consideraban bajo el padroado portugués y vando los casos a las cortes, logró que se respe-
162
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
A
De esta manera comenzó un movimiento de
numerosas conversiones, primero entre los
cristianos protestantes de la región y luego
también entre los hindúes. Treinta y cinco años
después de que la tuberculosis obligó a Lie-
vens a partir para América, se estableció la dió-
cesis de Ranchi, que contaba a la sazón con
190.000 miembros y que ahora sobrepasa un
millón.
Si bien no podemos señalar aquí todos los
trabajos misioneros que la Iglesia Católica ha
llevado a cabo en la India durante los últimos
doscientos años, sí podemos decir algo acerca
de su trabajo en la educación, en la medicina,
en el diálogo interreligioso y con respecto a
las castas. La Iglesia Católica en la India se ha
distinguido por su labor educativa, establecien-
do escuelas en todos los niveles. Estas escuelas
reciben apoyo del gobierno, de igual manera
que todos los centros educativos del país. Ade-
más, existen las universidades católicas de San
José en Trichinopoly, de Loyola en Madrás y
de San Francisco Javier en Bombay y Calcuta.
En el campo de la medicina, lo más notable
del trabajo católico ha sido la obra de las mon-
jas, que en una época en que sus antiguas tra-
diciones impedían a las mujeres hindúes dedi-
carse a enfermeras, sirvieron como tales no só- El encuentro y diálogo interreiigioso con
lo en hospitales católicos, sino también en los
antiguas tradiciones religiosas en Asia y en
del gobierno. El trabajo misionero católico el norte de Africa cabrá gran importancia.
también se destaca por el desarrollo temprano
del diálogo inteneligioso y de grupos monásti-
cos cuya misión es la continua intercesión por ca a través de todo el siglo XIX, aunque se ha-
personas de otras tradiciones religiosas. cía todo lo posible por que dentro de la iglesia
Con respecto a las castas, la Iglesia Católi- se evitasen las distinciones de castas. Al prin-
ca no ha tomado una actitud tan firme como la cipio existían divisiones dentro de los templos
mayoría de los cuerpos protestantes. El lector para separar a los creyentes de distintas castas.
recordará que desde tiempos de Nobili había Poco a poco, estas divisiones han ido disipán-
misioneros católicos romanos que considera- dose, aunque tienden a resurgir en medio del
ban que las castas eran un aspecto de la cultu- fervor religioso de este siglo. Últimamente se
ra de la India y que por tanto no eran algo que ha comenzado a preparar para el sacerdocio a
los conversos debían abandonar antes de reci- indios de las castas inferiores, cosa que anti-
bir el bautismo. En términos generales, ésta guamente resultaba imposible. Aun así, en mu-
continuó siendo la política de la Iglesia Católi- chas regiones las personas que se encuentran
163
Las misiones en el Lejano Oriente y el Sur del Pacífico
164
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
tipo de misión «civilizadora». El gobierno de- cia de las misiones médicas. Aunque las empre-
cretó en el año 1835 que la mayor parte de los sas anteriores, tanto la de Tranquebar como la
fondos gubernamentales destinados a la educa- de Carey, habían incluido médicos en su traba-
ción debía utilizarse para dar a los discípulos jo, no fue sino ya avanzado el siglo XIX que se
un conocimiento de la lengua, cultura y ciencia comenzó a organizar adecuadamente el trabajo
inglesas. En cuanto al trabajo misionero, a par- médico misionero en la India. A partir del año
tir de 1832 se fundaron numerosas escuelas 1836, la American Board comenzó a enviar a la
que seguían la misma política de la establecida India médicos ordenados que servían a la vez en
por Duff. En esa fecha se fundó la escuela de el campo de la medicina y en el de la evange-
Bombay, y pocos años más tarde la de Madrás lización. En la segunda mitad del siglo XIX
y la de Nagpur, además de otras en Agra y las sociedades misioneras comenzaron a intere-
otros lugares. sarse más en el trabajo médico, y casi todas
Todas estas escuelas lograron conversos de ellas enviaron doctores a la India. Es notable el
entre las clases más elevadas de la India. Estos hecho de que en el año 1858 había sólo siete
eran pocos, y cada conversión se seguía de un misioneros médicos en la India y Pakistán, y
tumulto popular y de amenazas por parte de la que en el año 1905 había 280.
población hindú contra la escuela. Los conver- Los médicos misioneros se dedicaron sobre
sos sufrían persecución por parte de sus vecinos todo al trabajo con los niños y las mujeres, así
y casi siempre sus propias familias les echaban como al establecimiento de sanatorios para tu-
fuera, además de que existían leyes que les co- berculosos y de lazaretos para leprosos. Ade-
locaban en desventaja, como la que impedía más se fundaron centros cristianos para el
que un converso al cristianismo recibiese heren- adiestramiento de enfermeras y de otras perso-
cia alguna. A pesar de todo esto, durante todo el nas necesarias para llevar a cabo el trabajo mé-
siglo XIX continuó habiendo un número limita- dico. Esta labor continuó a través de todo el si-
do de conversiones al cristianismo de entre las glo XIX y la primera mitad del XX, cuando el
clases más elevadas y las personas educadas. creciente trabajo médico por parte del estado
Eran años en los que el hinduismo no parecía hacía que algunos cristianos se preguntasen
responder a las necesidades de las personas más acerca de la verdadera función de las misiones
cultas. Esto se combinaba con la presencia bri- médicas. Sin embargo, todavía los recursos del
tánica, que mostraba el poderío superior de la estado resultaban insuficientes para llenar las
civilización occidental. Como era de suponerse necesidades de la nación y por ello la pregun-
estas conversiones entre las personas de clase ta acerca de la justificación de las misiones mé-
más elevada disminuyeron con el florecimien- dicas no se planteaba con toda urgencia.
to del sentimiento nacionalista que culminó en Otra de las características del trabajo misio-
la independencia de la India, y con el renaci- nero en la India es la conversión en masa de al-
miento del hinduismo, que se mostró capaz de gunas aldeas y hasta tribus, sobre todo entre
reaccionar y cobrar nueva vitalidad por el im- las antiguas tribus aborígenes que habitaban la
pacto del cristianismo. La segunda mitad del península antes de la llegada de los arios. Tam-
siglo XIX y los primeros años del XX vieron el bién en varios casos se han dado conversiones
florecimiento de numerosos movimientos den- en masa de algunas de las castas inferiores de
tro del hinduismo que hacían más fácil a las la sociedad hindú. La primera conversión en
personas cultas continuar viviendo dentro del masa comenzó cuando, en el año 1846, una
marco de su religión ancestral. sociedad misionera luterana alemana comenzó
Otro aspecto notable de las misiones en la a trabajar entre las tribus aborígenes de la re-
India durante los siglos XIX y XX es la presen- gión de Nagpur que se conocen bajo el nombre
165
L,
Las misiones en el Lejano Oriente y el Sur del Pacífico
de Kols. Tras diez años de trabajo, esta mi- masa de algunas castas hindúes. Por lo general,
Sión había logrado poco menos de un millar de se trataba de castas inferiores que veían en el
conversos, pero este número fue creciendo rá- cristianismo la emancipación de su condición.
pidamente de tal manera que a principios del Es imposible criticar la conversión en grupos
siglo XX los cristianos de la región eran apro- de personas acostumbradas a pensar en térmi-
ximadamente 60.000. Aunque algunos de los nos colectivos. Exigir una decisión individual
conversos de la región han pasado a la Iglesia por parte de tales personas prácticamente equi-
Anglicana y otros a la Iglesia Católica Roma- valdría a exigir un desajuste social antes de
na, la inmensa mayoría ha continuado en la aceptarlas en la iglesia cristiana.
tradición luterana, y se ha organizado en una Otro aspecto notable de las misiones protes-
iglesia autónoma. Este es sólo uno de los mu- tantes en la India en el siglo XIX fue su contri-
chos casos que pueden citarse en distintas re- bución a la emancipación de las mujeres. En la
giones de la India, sobre todo en el sur del pa- antigua India, se consideraba a las mujeres in-
ís. Estos movimientos de conversión en masa dignas de recibir educación, y el infanticidio
se vieron facilitados cuando en el año 1876 femenino y la costumbre de quemar a las viu-
comenzó un período de escasez durante el cual das juntamente con los cadáveres de sus espo-
los misioneros cristianos hicieron mucho por sos persistían aún. Dentro de este contexto, no
aliviar la difícil situación de las clases más po- cabe duda de que el trabajo de las primeras es-
bres. Por esta razón fueron muchos los hindú- posas de misioneros que se dedicaron a la edu-
es que se acercaron a los misioneros pidiendo cación de niñas era revolucionario. Al principio
ser bautizados. En algunas ocasiones los mi- este trabajo tuvo lugar en los hogares, pero en
sioneros vacilaron ante tal petición, pero a la el año 1857 Alexander Duff fundó la primera
larga juzgaron sabio administrar el bautismo a escuela diaria para niñas. A ésta siguieron nu-
quienes así lo pedían. Un ejemplo de esto lo merosas escuelas fundadas por las diversas so-
tenemos en la persona del misionero bautista J. ciedades misioneras.
E. Clough, quien, debido a ciertos contratos Fue la india cristiana Ramabai la mujer más
con el gobierno, tenía posibilidades de emple- notable en la obra de emancipación de su sexo.
ar a numerosos trabajadores, y por ello pronto Su madre -cosa rara entre los hindúes de la
comenzó a recibir pedidos de personas que época- le había enseñado el sánscrito. Tras
creían que solicitando el bautismo obtendrían muchas y largas vicisitudes que incluyeron la
trabajo con más facilidad. Al principio Clough muerte de buena parte de su familia, Ramabai
se negó a bautizar a tales personas, pero acce- decidió dedicar su vida a ayudar a las niñas y
dió a ello cuando supo que los católicos roma- jóvenes que quedaban viudas a muy temprana
nos habrían de hacerlo si él persistía en su opo- edad debido a la costumbre de prometerlas y
sición. Como es de suponerse, muchas de es- casarlas desde la infancia. Por fin estableció
tas «conversiones» eran en extremo superfi- contacto con algunos misioneros cristianos,
ciales y hasta fingidas, pero es necesario notar que la enviaron a Inglaterra para que allí se
que continuaron aún después de pasados los preparase para la tarea a que había decidido
tiempos de escasez, y que cuatro años más tar- dedicarse. En Inglaterra se convirtió al cristia-
de la comunidad cristiana en la región donde nismo. Luego pasó a los Estados Unidos, don-
trabajaba Clough alcanzó la cifra de 20.000 de logró apoyo para el trabajo que pensaba rea-
miembros. lizar en la India. De regreso a su tierra nativa,
Además de estas conversiones en masa de Ramabai fundó un hogar para viudas y, aunque
ciertas aldeas o tribus aborígenes, se dieron ése no era su propósito inicial, pronto hubo al-
también durante el siglo XIX conversiones en gunas conversiones entre sus protegidas. Esto
166
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
I
Las mujeres en el mundo asiático han apoyado proyectos locales de desarrollo económico.
le costó el apoyo de algunos hindúes que antes to al trabajo agrícola, los misioneros cristianos
habían visto el hogar con simpatía, pero Rama- han establecido tantos centros en los que se
ha¡ llevó adelante su trabajo. En el año 1896, trabaja directamente con la ganadería o la avi-
tras una larga escasez que sacudió todo el cen- cultura como escuelas de ingeniería agronómi-
tro de la India, Ramabai recogió gran número ca tales como la que se halla relacionada con la
de huérfanas a las que estableció en hogares Universidad de Alajabad.
misioneros en distintos sitios. Pero cuando des- La obra misionera de grupos pentecostales y
cubrió que no había suficientes hogares donde carismáticos, particularmente a finales del siglo
establecer a las niñas que había recogido, fun- XX, es de gran importancia. Esta se caracteri-
dó un hogar para huérfanas que llegó a tener za por el trabajo misionero de los nacionales, lo
más de mil niñas y que continúa existiendo que hace difícil identificar los nombres de mu-
hasta el día de hoy. chos líderes que comienzan pequeños grupos
Es necesario mencionar el trabajo que las de oración y estudio bíblico en el centro de las
misiones han realizado en el campo de la in- grandes ciudades de la India. Por otro lado, y
dustria y la agricultura. Tanto con el propósito en la medida que el proyecto político de la In-
de mejorar la condición económica de algunas dia preserva la libertad de religión, grupos ca-
comunidades como con el de servir de medio rismáticos de las castas bajas, sobre todo de
para el desarrollo del carácter, los misioneros los dalits, celebran grandes campañas de evan-
protestantes de los siglos XIX y XX establecie- gelización y sanidad que continúan promovien-
ron en la India industrias diversas y varios pro- do la conversión en masa. No hay la menor du-
yectos agrícolas. La mayor parte de las indus- da que el cristianismo está logrando una inser-
trias establecidas por las misiones ha sido de ción novedosa entre las castas bajas, tales como
carácter manual, a fin de poder emplear a gran los dalits, por medio de la experiencia carismá-
número de personas con poco capital. En cuan- tica pentecostal.
167
láá
Las misiones en el Lejano Oriente y el Sur del Pacífico
. k
.-
168
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
.
I
A principios del siglo XXI el trabajo misicnero recalca la evangehzacián en grupos pequeños o casas-cultos.
169
L
Las misiones en el Lejano Oriente y el Sur del Pacífico
gas. El resultado de todo esto fue el desarrollo congregacionales- a los anglicanos, los meto-
de un sentido de unidad cristiana más profun- distas, tanto de origen americano como de ori-
do que el que existía en Europa o en los Esta- gen británico, los bautistas, los hermanos y los
dos Unidos. Así tenemos un ejemplo más de un Discípulos de Cristo.
hecho que ya hemos señalado y que nuestra Por todo esto, además de por el modo en
historia probará repetidamente: el movimiento que ha logrado enfrentarse a la nueva situación
ecuménico es hijo de las misiones y de las cir- que ha surgido tras la independencia de su pa-
cunstancias misioneras. ís, la iglesia de la India es un ejemplo de lo que
Tras la Conferencia Misionera Mundial que está sucediendo y puede suceder en algunos de
se celebró en Edimburgo en el año 1910, las los más antiguos campos misioneros del cris-
iglesias y misiones de la India se organizaron tianismo. Además, este proyecto ecuménico no
en el Consejo Nacional Misionero de la India, solo ha contribuido a la unidad de la iglesia, si-
que a partir del año 1923 se conoce como el no que también ha fomentado y creado espa-
Consejo Nacional Cristiano. Este consejo in- cios para el diálogo interreligioso y para asun-
cluye a la mayor parte de los cristianos no ca- tos de iglesia y sociedad, de formación y edu-
tólicos de la India. cación teológica y de desarrollo económico.
Además, en la India, como en otras partes Actualmente, este histórico movimiento ecu-
del mundo, el siglo XX fue testigo de numero- ménico en la India enfrenta los retos de la pre-
sas uniones orgánicas entre distintas iglesias. sencia pentecostal, grupos carismáticos y tra-
Al principio se trató de uniones entre iglesias bajo misionero del extranjero desde el tercer
pertenecientes a la misma tradición, como la de mundo, indicando que la vida de la iglesia con-
los diversos grupos presbiterianos del sur de la tinúa con gran vitalidad. Es por esta razón que
India en el año 1901, y su fusión con los pres- le hemos dedicado más espacio del que podría
biterianos del norte del país en el año 1904. parecer justo al lector que desde fuera exami-
Pronto se extendió el alcance de estos acuer- ne la historia de las misiones.
dos, de tal manera que trascendieron las barre-
ras confesionales. Así se fundó en el año 1908 B.El cristianismo en Ceilán
la Iglesia Unida del Sur de la India, formada A fines del siglo XVIII los ingleses tomaron
por presbiterianos y congregacionales. En el las posesiones holandesas en Ceilán y en 1815
año 1924, y también mediante la unión de pres- se adueñaron de la totalidad de la isla (hoy Sri
biterianos y congregacionales, se fundó la Igle- Lanka). Los primeros años de gobierno británi-
sia Unida del Norte de la India. Pero la más no- co mostraron la superficialidad de las conver-
table de todas las uniones entre iglesias fue la siones al protestantismo que habían tenido lu-
que se propuso en Tranquebar en el año 1919 y gar bajo los holandeses. Muchos de los supues-
que veintiocho años más tarde, en el 1947, dio tos conversos habían aceptado la fe de sus
como resultado la Iglesia del Sur de la India. amos sólo por las ventajas que esto implicaba,
Esta unión comprendía a la Iglesia Unida del y no habían abandonado sus antiguas religio-
Sur de la India -formada, como ya hemos di- nes y costumbres. Un testigo ocular nana la
cho, por presbiterianos y congregacionales- a siguiente entrevista entre un gobernador inglés
la Iglesia Anglicana y a la Iglesia Metodista. El y uno de los habitantes de la isla:
éxito de este plan de unión fue tal que pronto -,Cuál es tu religión?- preguntó el go-
sirvió de ejemplo y norma para otros planes bernador.
semejantes, especialmente para el de la Iglesia -Soy cristiano.
del Norte de la India, que incluye a la Iglesia -Cristiano, sí, pero ¿de qué secta?
Unida del Norte de la India -presbiterianos y -Soy cristiano holandés.
170
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
171
Las misiones en el Lejano Oriente y el Sur del Pacífico
te cristiano. El resultado de estas persecuciones halla concentrada en el norte del país. Eso no
fue que los católicos pidieron a Francia que quiere decir, por otra parte, que los presbiteria-
actuase en su defensa, y esta nación, tras largas nos hayan abandonado la capital, ya que conti-
guerras, se adueñó de la Cochinchina. Al pare- nuaron trabajando allí, y su influencia fue tal
cer, en toda la Indochina Francesa no hubo mi- que llegaron a ocupar altas posiciones en el go-
sionero protestante alguno antes de los comien- bierno. En el año 1934, mediante la unión de
zos del siglo XX. presbiterianos y bautistas, se instituyó la Igle-
En Siam el gobierno local se mostró abier- sia de Cristo en Siam -hoy Iglesia de Cristo
to hacia el trabajo misionero. Fue sobre todo en Tailandia.
bajo el gobierno del rey Monghut, quien ocupó En cuanto a los territorios británicos, la zo-
el trono a partir del año 1851 y se mostró ávi- na donde mas se extendió el cristianismo fue
do de introducir en su país los adelantos técni- Birmania (hoy Mianmar). Durante todo el siglo
cos de Occidente, que el cristianismo, tanto ca- XIX, y especialmente en su primera mitad, la
tólico como protestante, logró sus primeros Iglesia Católica Romana no se extendió tanto
triunfos. Desde mucho antes el catolicismo ro- en esta región como el protestantismo. Esto se
mano había estado representado en el país, pe- debió especialmente a las razones que ya he-
ro bajo el reinado de Monghut llegaron nume- mos visto en otros contextos: la Revolución
rosos misioneros y se establecieron escuelas, Francesa, la guerras napoleónicas y la contro-
hospitales y seminarios. A menudo los conver- versia acerca del padroado portugués. Fue so-
sos cristianos se agrupaban en aldeas en las lo después que en el año 1856 la Sociedad de
que todos eran católicos, bajo la conducción di- Misiones Extranjeras de París fue hecha res-
recta de la jerarquía eclesiástica, y que frecuen- ponsable del trabajo en Birmania que la iglesia
temente resultaban ser más prósperas que las Católica Romana comenzó a crecer en dicha
otras aldeas, debido sobre todo a las innovacio- región. A fines del siglo XIX contaba con dos
nes introducidas por los misioneros. Como es seminarios, varias escuelas y una imprenta pa-
de suponerse, esto contribuyó a la conversión ra el trabajo misionero.
de muchas personas, pero también hizo aumen- Aunque los primeros misioneros protestan-
tar la animadversión que algunos sentían hacia tes que llegaron a Birmania procedían del im-
el cristianismo. Lo mismo sucedió en la Indo- pulso de Carey y sus compañeros, el más nota-
china Francesa, a pesar de que las repetidas ble y el primero cuya obra tuvo resultados per-
persecuciones en esa región dificultaron el tra- manentes fue Adinoram Judson. Desde muy
bajo de los misioneros. joven, cuando estudiaba en la Universidad de
Los primeros protestantes en interesarse en Brown en los Estados Unidos, Judson se había
el trabajo misionero en Siam fueron Adinoram interesado en el trabajo misionero en el Orien-
Judson y su señora, cuya vida estudiaremos te. Fue por razón de su interés que los congre-
más adelante. Pero su interés no pasó de la tra- gacionales de Massachusetts decidieron orga-
ducción de algunas pequeñas porciones bíbli- nizar la American Board of Commissioners for
cas al idioma del país. Fueron los presbiteria- Foreign Missions. Esta junta le envió a Inglate-
nos de los Estados Unidos quienes tuvieron rra a establecer contacto con la London Missio-
mayor éxito en el trabajo misionero en Siam. nary Society para proyectar trabajo conjunto.
Al principio su trabajo se centró en la ciudad de El proyecto no agradó a la sociedad de Lon-
Bangkok pero pronto se dirigieron hacia el nor- dres, y por ello Judson, ante la perspectiva de
te donde encontraron campos más fructíferos no poder llevar a cabo su trabajo, decidió po-
en la región de Laos. Como consecuencia de nerse al servicio de los británicos y no conti-
esto, la población protestante de Tailandia se nuar trabajando con la junta norteamericana.
172
s1
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
Comenzó entonces una larga serie de vicisitu- través de unos prisioneros de Tailandia que ha-
des que le llevaron de regreso a los Estados bían sido llevados a Birmania. Pocos años des-
Unidos y luego a Inglaterra tras haber sido he- pués de su llegada al país, se organizó en los
cho prisionero de un corsario francés, para por Estados Unidos la American Baptist Mission,
fin llegar a la India, donde estableció contacto en gran medida debido al interés que Judson y
con Guillermo Carey y sus compañeros. En la sus compañeros habían despertado en Nortea-
travesía, Judson y su esposa se habían dedica- mérica. Esta organización envió a Birmania a
do a estudiar el Nuevo Testamento y habían un impresor que trabajó junto a los Judson, de
llegado a la conclusión de que el bautismo de manera que pronto comenzaron a aparecer los
niños se oponía a las enseñanzas neotestamen- primeros libros impresos en birmano. En el año
tarjas, lo cual les llevó a hacerse bautistas a su 1817 se publicó la traducción del Evangelio
llegada a Calcuta. Comenzó entonces una nue- según San Mateo hecha por Judson. Al mismo
va serie de dificultades, pues las autoridades tiempo se reunían en la casa de los misioneros
británicas del lugar deseaban deshacerse de algunos budistas que venían a discutir asuntos
Judson y sus acompañantes norteamericanos, religiosos. Pero las conversiones que Judson
mientras que no se veían posibilidades claras había esperado lograr no aparecían en el hori-
de emprender trabajo en sitio alguno. Por fin, zonte. Fue en el ano 1819 que Judson bautizó
más por razón de las circunstancias que por al primer birmano convertido al cristianismo
una decisión pensada, Judson y su esposa em- protestante. En el año 1834 terminó la traduc-
barcaron hacia Birmania. De nuevo el viaje se ción de la Biblia al birmano. Quizá debido a las
mostró lleno de dificultades que culminaron dificultades de la vida en Birmania, enviudó
con el nacimiento prematuro y sin vida del pri- dos veces y por esta razón tuvo tres compañe-
mero de sus hijos. Los misioneros esperaban ras distintas en su trabajo misionero. Al pare-
que en Rangún tendrían el apoyo del Dr. Félix cer, en las tres ocasiones supo escoger sabia-
Carey, hijo del famoso misionero, y que se ha- mente a la compañera ideal para el trabajo que
bía establecido años antes en Birmania. Pero el había emprendido. Cuando Judson murió en el
joven Carey estaba demasiado ocupado sir- año 1850 dejó tras sí una naciente literatura
viendo al gobierno con sus habilidades médi- cristiana en birmano y el comienzo de la obra
cas para poder prestar apoyo al trabajo misio- misionera entre la tribu de los karens, entre los
nero. Además, cuando su esposa murió ahoga- cuales los años venideros traerían más fruto
da en un naufragio, Félix Carey decidió aban- que entre los birmanos propiamente dichos.
donar Birmania. En tal situación podría decir- Fue a través de la obra de Judson y de su
se que la misión de Judson y su esposa no te- compañero George D. Boardman que se convir-
nía futuro alguno. tió el karen Ko Tha Byu. Ko Tha Byu trabajó
Los Judson no eran personas capaces de ardientemente entre sus compañeros de raza y
rendirse ante las dificultades. Mientras servían logró numerosas conversiones, hasta tal punto
a la pequeña congregación de habla inglesa en que a su muerte, en el año 1840, había comen-
la que antes había trabajado Félix Carey, se de- zado una conversión en masa entre los karens.
dicaron a estudiar el birmano, idioma que lo- A través de ellos, se abrió luego trabajo entre
graron dominar a pesar de sus inmensas difi- los chins y otras de las tribus de Birmania.
cultades. Mientras Judson trabajaba en dicha Al igual que en todo el resto de Asia, el si-
lengua y en el antiguo idioma pali, en que es- glo XX trajo un despertar religioso unido al
taban escritos los libros sagrados de los budis- crecimiento del sentimiento nacionalista. Toda
tas, su señora estudiaba, además del birmano, el Asia sudoriental se vio sacudida por los mo-
el idioma tai, que había llamado su atención a vimientos independentistas, que veían en el bu-
173
L
r Las misiones en el Lejano Oriente y el Sur del Pacífico
174
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
$\
Aunque la guerra obligó a muchos misioneros a hur, el desastre fue mucho mayor para
las poblaciones nativas. Aquí una misionera protestante provee asilo a cientos de refu-
175
Las misiones en el Lejano Oriente y el Sur del Pacífico
un número de conversos del islam que, aunque buyó a las relaciones entre España y las Filipi-
reducido, era mayor que el alcanzado en todo nas. Pero España estaba ya en su ocaso y se
el resto del mundo musulmán. mostraba incapaz de hacer llegar a las Filipinas
Al igual que en todo el resto del Asia, el si- las ventajas técnicas y políticas del siglo XIX.
glo XX trajo a las Indias Orientales un renova- Por otros caminos fueron llegando las ideas
do sentimiento nacionalista, que iba unido a la que se asocian generalmente con la Revolu-
vieja religión islámica. A fin de poder compe- ción Francesa. Al mismo tiempo la administra-
tir con el cristianismo, el islam adoptó algunos ción española, que al principio había servido
de los instrumentos y medios introducidos por para hacer a los filipinos partícipes de algunos
los misioneros cristianos. Por su parte, la igle- de los adelantos de Occidente, se volvía cada
sia, penetrada por el mismo sentimiento nacio- vez más una estructura recia que evitaba que
nalista, tendió a depender más de sí misma y a las Filipinas entraran en el concierto de las na-
desarrollar un ministerio nativo, creando un es- ciones modernas. Cada vez más se escuchaban
pacio legítimo para el cristianismo en el suelo en las Filipinas críticas hacia la administración
malayo. La mayor parte de los misioneros se española y muy especialmente hacia la Igle-
vio obligada a retirarse ante las conquistas ja- sia. Los frailes, tanto por patriotismo como por
ponesas de la Segunda Guerra Mundial. Des- fidelidad a su iglesia, tendían a oponerse a es-
pués, la constitución de la República Indepen- tas críticas y a pretender que carecían de funda-
diente de Indonesia, que incluía buena parte mento. Cuando comenzaron las conspiracio-
del archipiélago y cuya política se hizo marca- nes y las revueltas en contra de España, los
damente anti-occidental, colocó el trabajo mi- frailes, creyendo que con ello cumplían con su
sionero extranjero (y en ocasiones el nacional) deber, se opusieron a los conspiradores y revo-
en situaciones difíciles. A pesar de todo esto, el lucionarios. Prueba de esta actitud son las si-
cristianismo, protestante, católico, pentecostal guientes líneas de un autor anónimo que pocos
y carismático, sigue creciendo durante el siglo años después pretendía defenderlos:
XX y hasta el presente, viniendo la mayoría Viviendo el párroco en trato conti-
de sus conversos de entre las tribus de religión nuo con sus feligreses, sabía, más
animista. pronto o más tarde, cómo opinaban
En la isla de Nueva Guinea, que no forma- en política y si había alguno que hi-
ba parte de la República de Indonesia, aunque ciera propaganda en sentido separa-
sí era objeto de la ambición de los gobernantes tista. Si tal sucedía, hechas las ave-
del nuevo estado, continuaba una sorprenden- riguaciones oportunas, y convenci-
te conversión en masa que había comenzado en do del peligro que a España amena-
el siglo XIX y que se debía principalmente a la zaba, se avistaba con la autoridad
obra de misioneros británicos y australianos. española y denunciaba al revoltoso
para que hiciera con él lo que fuera
E. El cristianismo en las Filipinas procedente. Pues bien, esta conduc-
Durante los primeros años del sigo XIX las ta o proceder del párroco, que nin-
Filipinas no experimentaron las mismas sacu- gún patriota se atreverá a reprobar,
didas que sufrió buena parte del mundo a cau- ha sido la verdadera y única causa
sa de las guerras napoleónicas. Como era de es- de la animosidad de los filipinos
perarse, la independencia de México, a través contra sus curas párrocos.
del cual se mantenían los contactos entre Espa- Por descuido unas veces, por im-
ña y Filipinas, hizo más difícil el comercio con prudencia otras y por malicia en
la metrópoli. Más tarde el canal de Suez contri- ocasiones de las autoridades a quie-
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HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
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Las misiones en el Lejano Oriente y el Sur del Pacífico
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HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
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jir ~l
Las misiones en el Lejano Oriente y el Sur del Pacífico
católicas romanas, luego las ortodoxas y por mo, especialmente porque la mayoría de sus
último las protestantes y pentecostales. misioneros venía de países que no estaban
a) Las misiones católicas. Como era de espe- en guerra con el Japón, mientras que los más
rarse debido al hecho de que las misiones de los misioneros protestantes procedan de
católicas comenzaron a través de un tratado los Estados Unidos e Inglaterra. Pero aun
entre Japón y Francia, estas misiones fueron así, durante la primera mitad del siglo XX el
colocadas bajo la supervisión de la Socie- número de católicos no alcanzó al de los
dad de Misiones Extranjeras de París. En el protestantes.
año 1859 llegaron los primeros misioneros, Luego del Segundo Concilio Vaticano los
que se establecieron en lo que hoy es la ciu- católicos en el Japón, ya siendo una iglesia
dad de Tokio. Pocos años después descubrie- con obispos y estructura japonesa, y sufrien-
ron que aún quedaban más de 100.000 cris- do los embates de falta de clérigos y de lide-
tianos en la región de Nagasaki que parecen rato misional nacional, se preguntan si nece-
haber sido el resultado de las antiguas misio- sitan de misioneros del extranjero para con-
nes católicas en tiempos de Francisco Javier. tinuar su trabajo de propagación del evange-
Los misioneros franceses establecieron con- lio. La Conferencia de Obispos Japoneses
tacto con ellos y lograron que aproximada- afirma la necesidad del trabajo misionero
mente la décima parte pudiera establecer re- extranjero dado el contexto de la iglesia en
laciones con la Iglesia Católica. El resto con- un país predominantemente no cristiano y
tinuó apartado de toda conexión con las igle- con una población de quizás medio millón
sias occidentales hasta que más tarde se fue de católicos en medio de 108 millones de
uniendo a las diversas iglesias que entraban habitantes.
en la región, algunas de ellas protestantes. b) La misión ortodoxa rusa. En el año 1861 la
El catolicismo, al igual que todas las ramas Iglesia Ortodoxa Rusa estableció una mi-
del cristianismo en el Japón, logró su mayor Sión en el Japón a través del padre Nicolai.
avance en la alta clase media. Esto parece Este llegó al Japón como capellán del con-
haberse debido a la inseguridad en que se sulado ruso, pero se dedicó a enseñar su fe
encontraba esta clase por razón de los cam- a los japoneses que entraban en contacto con
bios internos del país, y también a la consi- él. Siguiendo la misma tradición de las mi-
guiente avidez con que las personas de la al- siones ortodoxas, Nicolai hizo todo lo posi-
ta clase media trataban de absorber la cultu- ble para que surgiera en el Japón una iglesia
ra occidental. En todo caso, fue la Iglesia verdaderamente japonesa. Su trabajo con-
Católica Romana la que más pronto tuvo sistió sobre todo en preparar personas capa-
misiones extensas entre las clases más bajas ces de contribuir a la difusión del cristianis-
de la población. mo, y en la supervisión general de la iglesia.
En el año 1891 se organizó la jerarquía ca- Cuando en el año 1904 estalló la guerra ru-
tólica del Japón, con una sede arzobispal en sojaponesa, Nicolai, fiel a los principios or-
Tokio. Esta sede estuvo ocupada desde el todoxos, insistió en que los cristianos japo-
principio por misioneros extranjeros, y no neses debían ser leales a su patria. Nicolai
fue sino en el año 1937 que el primer japo- estableció su centro de trabajo misionero en
nés fue nombrado arzobispo de Tokío, debi- lo que hoy es la Catedral de la Santa Resu-
do a la presión del creciente nacionalismo rrección. Su trabajo consistió de traduccio-
que tuvo por consecuencia la Segunda Gue- nes de la Biblia y de liturgia y el estableci-
rra Mundial. Durante este conflicto el cato- miento de seminarios para la formación del
licismo no sufrió tanto como el protestantis- clero nacional. A su muerte, en el año 1912,
180
HISTORIA GENERAL DE LS MISIONES
siendo arzobispo de Tokio, Nicolai dejó tras médica occidental. A pesar de todo esto,
de sí una comunidad de más de 30.000 cris- hasta el año 1872 sólo doce japoneses ha-
tianos ortodoxos. Su sucesor, Sergio, tam- bían sido bautizados por los protestantes.
bién ruso, gobernó la Iglesia Ortodoxa del Después del año 1870 la tendencia del Japón
país hasta que en 1941 el primer arzobispo a adoptar la cultura occidental con una avidez
japonés fue consagrado. Pero esta iglesia sorprendente se reflejó en el trabajo misione-
nunca volvió a crecer con la misma rapidez ro. Si bien el Japón había demorado más que
que bajo la dirección de Nicolai. cualquiera otro de los países orientales en
No fue hasta el 1970 que esta iglesia recibió abrir sus puertas a la influencia occidental,
lo que se conoce como la autonomía dentro cuando lo hizo esa influencia penetró mucho
de la comunión ortodoxa, y el metropolita- más rápidamente que en las naciones veci-
no Teodosio tomó responsabilidades que nas. Los japoneses se mostraban ávidos de
trajeron a la iglesia ortodoxa un nuevo espí- aprender la técnica occidental, y muchos de
ritu de renovación. entre ellos creían que la misma estaba indiso-
e) Las misiones protestantes. Las primeras mi- lublemente unida a la fe cristiana. Poresta ra-
siones protestantes en el Japón procedían de zón, y porque los protestantes se caracteriza-
los Estados Unidos. En el año 1854 esa na- ron por la introducción en el Japón de muchos
ción firmó su primer tratado comercial con de los adelantos occidentales, el protestantis-
el Japón, y cuatro años más tarde se firmó mo experimentó un gran crecimiento en la
otro convenio, por el que se permitía a los penúltima década del siglo XIX. Este creci-
norteamericanos ejercer libremente su reli- miento llegó a tal punto que no fueron pocos
gión y construir iglesias. Este nuevo tratado, los que pensaron que el Japón llegaría a ser un
aunque no constituía un permiso para el tra- país totalmente cristiano, y hasta hubo japone-
bajo misionero, sirvió sin embargo para des- ses que, sin ser ellos mismos cristianos, abo-
pertar en los Estados Unidos un gran interés garon por que el Japón adoptase oficialmente
en el envío de misioneros al Japón. Ade- esa fe. Durante este período muchas socieda-
más, reflejaba una nueva actitud por parte des misioneras y muchas denominaciones,
del gobierno japonés que, aunque no estaba tanto norteamericanas como inglesas, atraí-
dispuesto a apoyar las misiones, por lo me- das por las circunstancias favorables, comen-
nos las permitiría. zaron a trabajar en el Japón. Pronto hubo do-
Los primeros protestantes en llegar al Japón cenas de denominaciones representadas en el
como misioneros procedían de la Iglesia archipiélago, lo cual contribuyó al crecimien-
Episcopal, la Iglesia Presbiteriana y la Igle- to numérico inmediato del cristianismo, pero
sia Reformada Holandesa de los Estados comenzó a sembrar dudas en las mentes japo-
Unidos. Poco más tarde llegaron los bautis- nesas acerca de la validez de un cristianismo
tas libres. Como en otros casos en la histo- de tal manera dividido.
ria de las misiones, buena parte del trabajo Puesto que la mayor parte de los conversos
de estos primeros misioneros consistió en protestantes se allegaba al cristianismo por
traducir la Biblia y alguna literatura cristia- razones de inquietud intelectual, el protes-
na fundamental. Los presbiterianos estable- tantismo logró en los círculos académicos e
cieron trabajo médico y educativo, y muy intelectuales del Japón una influencia mu-
especialmente una escuela para niñas, que cho mayor que la que el número de sus ad-
era una novedad en el Japón, y una escuela herentes llevaría a suponer.
de medicina en la que se educaron los pri- En la última década del siglo comenzó una
meros japoneses conocedores de la técnica reacción nacionalista. Según se iban intro-
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Las misiones en el Lejano Oriente y el Sur del Pacífico
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HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
pastores del país, Kagawa se dedicó a traba- duró dos años y en el curso de la cual nume-
jar entre las personas necesitadas. Se insta- rosas personas abrazaron el cristianismo.
ló en uno de los barrios bajos, y allí hizo to- Por sus libros, por su obra social, por su ce-
do lo posible por llevar el mensaje cristiano lo en el testimonio cristiano y sobre todo
y cierto bienestar social a las personas con por su amor para su prójimo, Kagawa ha
quienes vivía. Por hospedar en su casa a un llegado a ser tenido por uno de los principa-
enfermo de tracoma contrajo esa enferme- les exponentes en el siglo XX de lo que el
dad, que más tarde le costó la vista. Ade- Evangelio es capaz de hacer en una persona.
más, su trabajo fue más allá de los límites Desde los comienzos mismos del trabajo
del barrio en que vivía, y se dedicó a orga- misionero en el Japón, hubo cristianos japo-
nizar cooperativas de consumo y sindicatos neses que insistieron en la necesidad de un
obreros, lo que le hizo perder la simpatía de testimonio unido, por lo menos entre los
las autoridades y hasta su propia libertad. protestantes. En el año 1911 un grupo de ja-
Por otra parte, su profunda conciencia social poneses se organizó con el propósito de tra-
no le impidió sentirse responsable por la bajar en pro de la unión de las iglesias cris-
continua evangelización en el Japón. Kaga- tianas. En el 1923 se organizó el Consejo
wa fue uno de los principales dirigentes del Nacional Cristiano del Japón, que al princi-
llamado «movimiento del Reino de Dios», pio sólo incluía a los protestantes, pero del
cuyo propósito era la evangelización del Ja- que los católicos romanos entraron a formar
pón unida a la aplicación de los principios parte en el año 1943. La presión guberna-
cristianos a la vida social. En el año 1938, mental hizo que durante la Segunda Guerra
en vísperas de la entrada de su país en la Se- Mundial todas las iglesias cristianas se unie-
gunda Guerra Mundial, emprendió una sen en una, formando la Nipon Kirisuto
campaña nacional de evangelización que Kyôdan o la Iglesia Unida de Cristo en Ja-
183
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Fif
pón, organizada en junio del 1941. Algunas pa, la Unión Misionera Pentecostal, tienen
denominaciones se apartaron de esta iglesia presencia en Japón temprano en el siglo XX.
unida una vez que terminó el conflicto béli- Nombres tales como M.L. Ryan, C.F. Juer-
co, pero a pesar de ello esta iglesia sigue gensuen, Estella Bernauer, Tanimoto Yos-
siendo el cuerpo protestante más grande en hio -un japonés que se convierte en misio-
el Japón. Debemos cuidarnos, sin embargo, nero en su país natal- y William y Mary
de pensar que la unión de las iglesias en el Taylor resuenan en esta historia que se re-
Japón es sólo consecuencia de la presión construye con mucha dificultad.
gubernamental, ya que aparte de esa presión Los pentecostales, junto a los nuevos grupos
había numerosos dirigentes cristianos japo- carismáticos, tienen cierto crecimiento en
neses que desde mucho antes estaban traba- Japón. En relación a los grupos carismáticos
jando en pro de una unión semejante. e independientes, parece que la relación en-
La iglesia japonesa, tras surgir del movi- tre la globalización y el desarrollo sofistica-
miento misionero, vino a ser ella misma do del capitalismo en Japón, junto a algunos
punto de partida para una extensión misio- de estos movimientos que promueven una
nera. A partir del año 1931 se fundaron di- religiosidad cristiana de prosperidad, tocan
versas sociedades cuyo propósito era sobre de cerca al japonés, creando un crecimiento
todo la evangelización de las islas del Pací- lento pero estable en estos grupos.
fico y de la China y Manchuria. Además, las
iglesias japonesas comenzaron trabajo mi- 2. El cristianismo en la Península de Corea
sionero en las comunidades niponas de las Durante los siglos XIX y XX el cristianismo
Filipinas, el Brasil y el Perú. Tenemos aquí se enfrentó en Corea a dificultades mucho ma-
otro ejemplo del fenómeno que hemos vis- yores que las que tuvo que vencer en el Japón.
to repetidamente en la historia del movi- Durante casi todo el siglo XIX el gobierno de
miento cristiano, en el que un país que pocas Corea tuvo prohibida la entrada de extranje-
décadas antes apenas conocía la existencia ros, muy especialmente de occidentales, en la
del cristianismo, ahora contribuye a su ex- Península. En el año 1876 el Japón forzó a Co-
pansión en otras regiones del globo. rea a firmar un tratado comercial. A partir de
Por último, en el siglo XX y principios de esa fecha se firmaron tratados comerciales con
nuestro siglo el trabajo misionero pentecos- los Estados Unidos y con las principales poten-
tal comenzó en el Japón. Muchos eruditos cias europeas, y éstos abrieron camino a la pe-
afirman lo difícil que es relatar el trabajo netración de la península por parte de misione-
misionero pentecostal debido al carácter no ros cristianos.
institucional de la obra misionera pentecos- Aun antes de que el gobierno coreano per-
tal. Recientemente, la Iglesia Asamblea de mitiese la entrada de misioneros extranjeros, ya
Dios en Japón publicó una historia de los existía allí una comunidad cristiana. A fines
primeros 50 años de trabajo misionero. Es- del siglo XVIII hubo varios coreanos que me-
te recurso señala que las raíces pentecosta- diante la lectura de libros cristianos escritos en
les en el Japón se remontan al 1913. chino llegaron a la convicción de que debían
La historia de misiones pentecostales en Ja- abrazar esa fe. Aunque con grandes dificulta-
pón se caracteriza por un trabajo misionero des, algunos de ellos lograron establecer con-
voluntario y por una profunda convicción y tacto con el obispo católico de Pekín, quien les
vocación misioneras. Movimientos e igle- dio algunas instrucciones. Durante un tiempo
sias tales como el Movimiento Apostólico, se organizaron como iglesia, con un obispo
la Iglesia Asamblea de Dios y, desde Euro- propio y varios sacerdotes, pero cuando el obis-
184
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
po de Pekín les informó que no podían hacer tal vieron esta misión en Corea como una agencia
cosa sin un obispo debidamente consagrado, del gobierno ruso. En el año 1910 el Japón se
limitaron sus actividades a las que la Iglesia anexó oficialmente la Península de Corea, y la
Católica consideraba legítimas por parte de los misión ortodoxa rusa comenzó a pasar por se-
cristianos laicos. Tanto la Iglesia Católica des- rias dificultades. Estas se hicieron aun mayores
de fuera como los cristianos que existían den- cuando en 1917 la Revolución Rusa hizo que
tro de la Península trataron repetidamente de se suspendieran los subsidios que antes habían
lograr que hubiese misioneros católicos en Co- apoyado la misión en Corea. Además, el go-
rea. Algunos lograron penetrar la península, bierno comunista hizo cerrar las iglesias que se
pero casi todos fueron descubiertos y ejecuta- habían establecido entre los coreanos que ha-
dos. Durante toda la primera mitad del siglo bían emigrado hacia territorio ruso.
XIX los misioneros católicos en Corea, así co- Las misiones que más éxito tuvieron en Co-
mo los propios coreanos, escribieron con rea fueron las protestantes, y especialmente las
heroísmo y con su propia sangre una de las pá- de los presbiterianos y las de los metodistas.
ginas más notables en la historia de la iglesia Estas dos denominaciones llegaron en el año
cristiana. En ocasiones había breves períodos 1884. Tanto los primeros misioneros presbite-
de relativa tolerancia, pero eran seguidos de rianos como los metodistas procedían de las
violentas persecuciones en las que moría gran iglesias del norte de los Estados Unidos y pres-
número de cristianos. En los dos años que van taron especial interés al trabajo médico. Tanto
del 1866 al 1868 murieron como mártires dos fue así que el primer misionero presbiteriano
mil cristianos. fue hecho médico de la corte de Corea y direc-
En la penúltima década del siglo XIX Corea tor del primer hospital del gobierno coreano.
comenzó a abrir sus puertas a las potencias oc- Otro notable misionero presbiteriano en Corea
cidentales, y la Iglesia Católica creció rápida- fue Underwood, cuyo hermano se interesó en
mente. Llegaron nuevos contingentes de mi- el cristianismo de la península a través de él y
sioneros, sobre todo de Francia. Cuando los ja- contribuyó a la obra misionera buena parte de
poneses se anexaron a Corea en el año 1910, ya la fortuna que comenzaba a amasar mediante la
los católicos romanos en la Península eran más fabricación y venta de máquinas de escribir.
de 77.000. Puesto que en el Japón la Iglesia Ca- Tras los primeros presbiterianos procedentes
tólica seguía la política de permitir a sus miem- del norte de los Estados Unidos, siguieron
bros participar en las ceremonias que se cele- otros miembros de la misma tradición, no sólo
braban en los santuarios del sintoísmo, expli- del sur de los Estados Unidos, sino también
cando que no se trataba de ceremonias religio- del Canadá y de Australia. Algo semejante su-
sas, sino sólo de gestos de afirmación y dedica- cedió con la Iglesia Metodista, que pronto se
ción patriótica, en Corea se siguió la misma vio acompañada por su hermana iglesia del sur
política, y esto evitó que el régimen japonés de los Estados Unidos.
tratara a los católicos romanos con la misma No obstante, algunos historiadores coreanos
dureza con que trataba a los protestantes. afirman que el cristianismo llega a Corea con la
También la Iglesia Ortodoxa Rusa comenzó conversión del primer protestante coreano, Yi
trabajo misionero en Corea a fines del siglo Ungchan, quien fue bautizado por el misione-
XIX y principios del XX, aunque este trabajo ro John Maclntyre, en 1876. Es entonces que
parece haber sido más bien un intento de abrir comienza la traducción de la Biblia al coreano,
el camino a la dominación rusa. Como es de siendo Lee Su-jong, un coreano refugiado en el
suponerse, tras la guerra i-usojaponesa de los Japón, quien contribuye de manera significati-
años 1904 y 1905, las autoridades japonesas va a la traducción del Evangelio de Marcos.
185
Las misiones en el Lejano Oriente y el Sur del Pacífico
Por ello, los primeros misioneros ordenados ríodo que culminó con la derrota del Japón en
que llegan a Corea vía Japón tienen ya el Evan- la Segunda Guerra Mundial. Era claro que el
gelio de Marcos en coreano. protestantismo coreano desarrollaba un espíri-
En el 1893 los misioneros adoptan los que tu revolucionario ante la ocupación japonesa y,
se conoce como el «método Nevius», del fisió- posteriormente, una afinidad con el protestan-
logo John L. Nevius, el cual promueve, entre tismo estadounidense.
otros, los siguientes principios: (1) concentrar Como la expansión protestante había sido
los esfuerzos evangelizadores entre la clase tra- mucho más amplia en el norte de Corea que en
bajadora; (2) la conversión de las mujeres y la el sur, el establecimiento del régimen comunis-
educación y formación de niñas y señoritas es ta en el norte de la Península afectó grande-
de vital importancia; (3) el sostenimiento de mente al protestantismo el país. Es necesario
escuelas primarias en las áreas rurales; (4) la recordar que tras la Segunda Guerra Mundial
traducción de la Biblia y literatura cristiana al Corea se vio sacudida por otra guerra prolonga-
idioma del lugar; y (5) el rápido desarrollo de da que también hizo sufrir, no sólo a las igle-
líderes nacionales y del autosostén económico sias, sino a toda la región. Muchos de los co-
de las iglesias. reanos del norte que durante el conflicto busca-
A principios del siglo XX, las diversas ra- ron refugio en el sur eran cristianos.
mas presbiterianas se unieron en una Iglesia Entre el 1960 y el presente la obra misione-
Presbiteriana de Corea, y lo propio hicieron al- ra en Corea tiene ciertos distintivos que mere-
go más tarde las diversas ramas metodistas. cen nuestra atención. Entre la obra misionera
Como sucedió en casi todos los demás cam- metodista se destaca la Misión Industrial Urba-
pos misioneros, tras las primeras tres denomi- na cuyo propósito, durante la dictadura corea-
naciones vinieron otras en gran número, aun- na, era apoyar a los trabajadores en busca de
que la multiplicidad de agencias misioneras se sus derechos y protegerles de la explotación
vio limitada debido a la dominación japonesa. por parte del gobierno. Para este entonces, el
Por otra parte, la dominación japonesa trajo Consejo Nacional de Iglesias Coreanas tam-
al protestantismo dificultades mayores que al bién había redactado un documento a favor de
catolicismo. Muchos de los protestantes se ne- los derechos humanos y la emancipación polí-
gaban a participar de las ceremonias que se ce- tica que nos recuerda la resistencia de los cris-
lebraban en los santuarios del sintoísmo, afir- tianos coreanos a la dominación japonesa. Es
mando que se trataba de ritos religiosos y no de decir, la labor tanto de los misioneros extranje-
simples actos de afirmación patriótica. Ya que ros como de los coreanos refleja un espíritu de
el gobierno nipón veía en estas ceremonias el dedicación, nacionalismo, e identidad cultural
fundamento de su expansión imperialista, era que no es típico en muchos movimientos cris-
de esperarse que las iglesias protestantes su- tianos en la región. Muchas de las prácticas
frieran las consecuencias. Además, el senti- misionales van formando lo que en los años
miento de aversión hacia la dominación japo- 1970 y 1980 se llamará la teología Minjung, o
nesa se hacía más notable entre los coreanos la teología de los que sufren y buscan libera-
0 protestantes que entre los católicos. Por último,
la inmensa mayoría de los misioneros protes-
ción.
Finalmente, durante las últimas décadas del
tantes procedía de los Estados Unidos y Gran siglo XX ha habido un despertar carismático y
Bretaña, países con los que Japón pronto estu- contemplativo en las iglesias coreanas. La in-
vo en guerra. Puesto que esto no sucedía con fluencia de los grupos misioneros pentecosta-
los católicos romanos, las iglesias protestantes les y carismáticos ha sido de gran influencia en
sufrieron más que las católicas durante el pe- el carácter del cristianismo coreano en su espí-
186
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
ritu misionero. En los próximos capítulos hare- La política de China durante buena parte del
mos referencia al trabajo misionero desde Co- siglo XIX fue mantener sus puertas cerradas a
rea, reconociendo que esta península, y particu- todo influjo extranjero. Ya hemos visto que és-
larmente Corea del Sur, se ha transformado en ta fue también la política de otras naciones en
las últimas décadas, de modo que ya no es «te- la periferia del gran Imperio Chino, y no cabe
rritorio misionero», sino «iglesia misionera». duda de que esas otras naciones tomaban como
punto de partida el ejemplo chino. El sistema
G.El cristianismo en China de vida chino era de una unidad y coherencia
El curso del cristianismo en China es uno de tal que cualquier ingerencia extranjera, o cual-
los capítulos más trágicos y complejos en toda quier idea occidental, podría parecer una ame-
la historia misionera cristiana. Los primeros en naza al sistema establecido. El Imperio Chino,
llevar el nombre de Jesucristo a la gran nación que existía desde tiempos anteriores a Jesucris-
oriental fueron los nestorianos, cuyos vestigios to, veía en todo cuanto provenía del Occidente
desaparecen de la historia en el siglo noveno. una innovación que no le era necesaria y sí qui-
Más tarde, en el apogeo de la Edad Media, los zá perjudicial.
franciscanos reintrodujeron la fe cristiana en Frente a esta actitud, las naciones europeas,
la China; pero desapareció de nuevo, víctima así como el Japón, veían en la China amplias
de las circunstancias políticas y de la enorme oportunidades comerciales. Esto llevó a una se-
distancia que la separaba de su centro geográ- rie de guerras entre la China y diversas potencias
fico en Europa. A principios de la Edad Moder- extranjeras, que concluyeron en tratados me-
na, fueron Matteo Ricci y sus acompañantes diante los cuales se permitía el establecimiento
quienes lograron sembrar firmemente la semi- de comerciantes y misioneros extranjeros en al-
lla cristiana en la China, pero aun su empresa gunos puertos específicos en la costa china. La
tardó siglos en dar frutos. La historia del cris- primera de estas guerras fue la que sostuvieron
tianismo en China durante el siglo XIX es se- poco antes de mediados de siglo Inglaterra y
mejante a su historia en el viejo Imperio Roma- China, y que se conoce como la Guerra del
no, cuando los prejuicios populares y la actitud Opio. Su resultado fue un tratado con la Gran
del gobierno, indiferente cuando no hostil, pro- Bretaña, al que siguieron otros con los Estados
dujeron repetidas persecuciones locales. A ve- Unidos, Francia y otras potencias extranjeras.
ces éstas alcanzaron inmensas proporciones, y Tras una nueva guerra entre Inglaterra y Francia
los mártires cristianos se contaron por decenas por una parte y China por la otra, esta última se
de millares. En el siglo XX, el curso del cristia- vio obligada a firmar tratados (1858 y 1860) en
nismo en la China se vio interrumpido por las los que se permitía a los extranjeros viajar por el
dos guerras mundiales, y sobre todo por la se- interior del país y además se toleraba el cristia-
gunda cuando el Japón invadió buena parte del nismo. Fue a base de estos tratados que el cris-
territorio del país. Como consecuencia de esa tianismo se extendió en la China durante la se-
invasión japonesa, no bien había terminado la gunda mitad del siglo XIX.
guerra mundial cuando el comunismo chino A fines del siglo XIX, la guerra entre China
tomó control del país, estableciendo un régi- y Japón, en la que éste último utilizó los recur-
men que se caracterizó por su antipatía hacia el sos de la técnica occidental para lograr la vic-
cristianismo. Aún en el siglo XXI cuando ese toria, convenció a las potencias europeas de la
gobierno comunista en orden político pero ne- posibilidad de conquistar la China y repartirse
ocapitalista en el desarrollo económico tiende los despojos. Esto trajo un período de crecien-
a ser ambiguo e inconsistente en relación a la fe te ingerencia extranjera en la China, que culmi-
cristiana. nó con la rebelión de los «boxers» en el último
187
Las misiones en el Lejano Oriente y el Sur del Pacífico
año del siglo. Esta rebelión se extendió por rra. El resultado de todo esto fue que, con el
buena parte del norte de China, y aunque su apoyo de Rusia y en medio de la vacilación de
propósito era expulsar a los extranjeros del pa- los aliados occidentales que no sabían si debí-
ís, su consecuencia directa fue que las poten- an apoyar o no a Chiang Kai-Shek, los comu-
cias extranjeras, cuyos ejércitos la aplastaron, nistas se adueñaron de todo el antiguo imperio
aumentaran su influencia en la China. chino excepto Formosa. Como era de esperarse,
El resultado de todo esto fue un creciente esto comenzó un nuevo período en la historia
sentimiento entre los chinos de que la vieja cul- del cristianismo en la China.
tura, asícomo la estructura política que iba uni-
da a ella, carecía de dinamismo para enfrentar- 1. Las misiones católicas romanas
se a las situaciones modernas. A principios del Durante el período que estarnos estudian-
siglo XX comenzó a crecer el sentimiento re- do, las misiones católicas romanas guardan re-
publicano, que llevó en el año 1911 al estable- lación de continuidad con las que hemos estu-
cimiento de la República de la China. Sin em- diado anteriormente. La antigua misión jesuita
bargo, esta república no logró la estabilidad -continuada luego por los lazaristas- y la
política del país, que se encontraba dividido en obra de los portugueses en Macao habían teni-
diversos territorios cuyos gobiernos abogaban do por resultado el inicio de una comunidad ca-
por soluciones distintas y contradictorias. Por tólica que a principios del siglo XIX contaba
último, y tras largas batallas y penosos esfuer- con varios millares de miembros. Aunque en
zos, el Kuomintang, de Chiang-Kai-Shek, lo- China, como en la India, Ceilán y otras regio-
gró establecer su autoridad en la casi totalidad nes del Oriente, los portugueses pretendieron
del territorio nacional. El principal foco de re- hacer valer su derecho de padroado aun cuan-
sistencia entonces, y el que resultaría ser el do habían perdido su poderío político, en la
destructor del régimen nacionalista, era el go- China la disputa que surgió de esto no fue tan
bierno comunista de Chensi. Pero el partido de seria como la que tuvo lugar en otras regiones.
Chiang-Kai-Shek parecía en aquel entonces Quizá esto se deba a que Portugal nunca tuvo
cristalizar las aspiraciones de la inmensa mayo- un dominio efectivo sobre la China, ni tampo-
ría del pueblo chino, y el régimen comunista no co misiones dentro de ella.
parecía por tanto ser verdaderamente temible. Durante toda la segunda mitad del siglo XIX
Fue la invasión de los japoneses, primero en Francia se erigió en protectora de las misiones
Manchuria en el año 1931, y luego en la propia católicas en China. Esta protección sirvió a los
China en el año 1937, lo que destruyó la posi- misioneros católicos romanos para lograr gran
ción política de Chiang-Kai-Shek. Su gobierno número de conversos, sobre todo por cuanto la
se vio obligado a replegarse hacia el occidente protección francesa en cierto modo se extendía
ante la invasión nipona, y a pesar de su valien- a los cristianos chinos. Esto sucedía especial-
te resistencia, la impresión del pueblo chino y mente con respecto a los tribunales, en los que
de buena parte del mundo fue que el Kuomin- era fácil hacer de un caso civil un caso de per-
tang había mostrado ser incapaz de gobernar. Al secución religiosa e invocar el apoyo de las au-
mismo tiempo, el otro foco de resistencia a los toridades francesas. Tal situación legal hizo que
japoneses, el gobierno comunista de Chensi, muchos se quisieran bautizar por las ventajas
compartió con el gobierno de Chiang-Kai-Shek que esto implicaba, e hizo también que se des-
la gloria de la resistencia, pero no se vio culpa- pertara una profunda animadversión hacia los
do por la invasión. Además, la corrupción admi- cristianos en ciertos círculos de la China.
nistrativa minaba el gobierno nacionalista, y le Junto a los franceses, laboraban en la China
impedía reconstruir el país, asolado por la gue- misioneros dé Italia, Alemania, España y otros
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HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
países de Europa, además de -durante el siglo construcción rural, y sobre todo en Mongolia
XX- norteamericanos y canadienses. La ma- hicieron mucho por resolver los problemas que
yor parte de estos misioneros pertenecía a órde- planteaban los largos períodos de sequía.
nes religiosas tales como los jesuitas, lazaris- En el campo de la educación la Iglesia Ca-
tas, franciscanos y dominicos. Pero muchos tólica no hizo tanto como los protestantes. Su
eran seculares que llegaban a la China bajo los interés estuvo principalmente en la preparación
auspicios de la Société des Missions Etrangè- de católicos chinos que pudieran dirigir la Igle-
res de Paris, que estaba a cargo de amplios te- sia en el futuro, y no tanto en influir en la tota-
rritorios en la China y además del Tibet y Man- lidad de la futura clase gobernante de la China.
churia. Por esta razón buena parte del sistema educa-
Los métodos misioneros de los católicos en tivo de las misiones católicas iba dirigido hacia
la China fueron a veces cuestionables, y ya he- el sacerdocio, o por lo menos hacia el cargo de
mos visto cómo eran muchos los conversos que catequista o de hermano laico. De esta manera
se acercaban al catolicismo buscando sólo ven- la Iglesia Católica Romana en la China llegó a
tajas legales. Además de esto, en algunas mi- tener gran número de sacerdotes del país, pero
siones se acostumbraba pagar a las personas pocos laicos en posiciones de importancia den-
que asistían a las lecciones catequéticas, y en tro de la comunidad. A principios del siglo XX,
ocasión se hacían préstamos a personas necesi- con la fundación de tres importantes universi-
tadas a condición de que diesen a los misione- dades, la Iglesia Católica Romana pareció co-
ros la oportunidad de enseñarles la religión menzar a prestar mas interés a la educación ge-
cristiana. neral del país.
Hubo, sin embargo, otros métodos menos A pesar del interés de los misioneros en el
dudosos. Así, por ejemplo, las misiones católi- adiestramiento de un clero nacional, durante
cas se distinguieron por la fundación de gran todo el siglo XIX ni un solo chino fue consa-
número de hogares para huérfanos en un país grado obispo. Esto es tanto mas notable por
en el que la muerte de gran número de niños cuanto dos siglos antes un chino había ocupa-
desamparados era ocurrencia frecuente. Ade- do el episcopado. Lo que sucedía era que se re-
más de esto los misioneros establecieron es- flejaba en la Iglesia Católica la actitud de toda
cuelas, dispensarios y centros para la rehabili- la Europa del siglo XIX, que tendía a ver los
tación de los adictos al uso del opio. En térmi- países en que se establecían colonias y misio-
nos generales, la vida de los misioneros en la nes como poblados por seres inferiores e inca-
China estuvo llena de sacrificios y de ardua la- paces de llevar las mismas responsabilidades
bor, sobre todo viajando de un lugar a otro. A que los europeos. No fue hasta el año 1926, en
menudo los misioneros hacían todo lo posible la catedral de San Pedro, en Roma, que fueron
por que los cristianos se estableciesen en co- consagrados los primeros seis obispos chinos.
munidades o aldeas separadas en las que les La Iglesia Católica en China continuó cre-
fuera más fácil vivir según los principios cató- ciendo durante todo el siglo XIX y la primera
licos. Casi siempre trataban de buscar la con- mitad del XX. Sin embargo, la situación bajo el
versión de familias o de grupos más bien que gobierno comunista complicó la vida de la igle-
de individuos, pues la experiencia les decía que sia. Porun lado, hubo obispos y sacerdotes que
era mucho más difícil para un individuo aisla- apoyaron el régimen comunista, incluso des-
do enfrentarse a los obstáculos que la sociedad pués de grandes persecuciones durante la «Re-
colocaba frente a los conversos que para una volución Cultural» de Mao Tse Dung. Ya para
familia o toda una comunidad. Durante el siglo la década del 1970 la Iglesia Católica estaba di-
XX hubo misioneros que se dedicaron a la re- vidida-tal como la protestante. De una parte
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Las misiones en el Lejano Oriente y el Sur del Pacífico
estaba la Iglesia oficial -el catolicismo iden- dero intento de alcanzar a los habitantes del pa-
tificado y tolerado por el gobierno comunista ís. Entonces la comunidad ortodoxa comenzó a
como una religión. Frente a ella estaban las crecer, y a principios de la Primera Guerra
iglesias «subterráneas» o «subversivas», no re- Mundial contaba con poco más de cinco mil
conocidas por el gobierno comunista. Roma miembros chinos. La Revolución Rusa en el
tuvo que ejercer una diplomacia cuidadosa pa- año 1917 la privó de su sostén económico, pe-
ra equilibrar su discurso y actitudes en rela- ro el influjo de los refugiados rusos que venían
ción a estas dos iglesias, cuando las dos se de- huyendo del régimen comunista le dio nuevas
claraban católicas. fuerzas. Antes del establecimiento del régimen
En medio de grandes debates y complejida- comunista en la China la Iglesia Ortodoxa Ru-
des políticas, las iglesias católicas romanas en sa contaba con un arzobispo en Pekín y buen
la China llevaron y continúan llevando a cabo número de parroquias en Manchuria, donde se
un ministerio misional hermoso protegiendo y refugió la mayoría de los exiliados rusos. Du-
nutriendo al laicado y nunca descansando fren- rante el régimen comunista en la China, la pe-
te a la lucha por crear un espacio -con o sin queña iglesia ortodoxa fue casi destruida y eli-
apoyo gubernamental- para que la iglesia vi- minada. No obstante, en la década de 1980 la
va su fidelidad. Por otro lado, la situación po- iglesia «La Protección de Nuestra Señora» fue
lítica a la cual estas iglesias se enfrentaron fo- abierta para oración, y un pequeño grupo de re-
mentó la creación de líderes chinos que hoy fugiados rusos junto a algunos chinos oraron.
dan dirección y guía pastoral a millones de ca- Recientemente, la visita del Patriarca de la Igle-
tólicos romanos en la China. sia Ortodoxa y los planes de remodelar esta
Finalmente, con los cambios en el gobierno iglesia en Harbin son signos pequeños de un
de la China en la última década del siglo XX y renacer de la Iglesia Ortodoxa en la China.
el principio del XXI, se ha hecho posible cier-
to intercambio de misioneros. Esto ha ayudado, 3. Las misiones protestantes
particularmente a la iglesia católica oficial, a El principal centro de interés de las misiones
tener mejores contactos con la Iglesia Católica protestantes durante la segunda mitad del siglo
Romana en el mundo. En consecuencia, esa XIX y la primera del XX fue China. Al princi-
iglesia experimenta cierta revitalización misio- pio del período que estamos estudiando, había
nal en la liturgia, la teología, la formación mi- en China un número reducidísimo de protes-
nisterial y el apoyo económico a proyectos de tantes, y su interés estaba en el comercio y no
desarrollo en las área rurales. en la propagación de su fe. Además, las leyes
del país eran tales que cualquier intento de pro-
2. Las misiones ortodoxas pagar el Evangelio hubiera sido perseguido te-
Desde el siglo XVII había existido en Pekín nazmente. Sin embargo, a partir del año 1806,
una pequeña comunidad ortodoxa rusa. Duran- en que Marshman, el misionero que en Seram-
te todo el siglo XIX esta comunidad siguió sien- pore trabajó junto a Carey, comenzó a traducir
do pequeñísima, pues no hizo esfuerzo misione- la Biblia al chino, el trabajo misionero protes-
ro alguno hasta que en el año 1858 un tratado tante dirigido hacia la China fue creciendo has-
entre Rusia y China garantizó la tolerancia re- ta llegar a tener proporciones sorprendentes.
ligiosa para los cristianos. A partir de esa fecha Aparte de Marshman, que realizó sus es-
comenzaron algunos débiles esfuerzos misione- fuerzos desde la India y cuyo trabajo se limi-
ros, pero no fue sino hasta que la rebelión de los tó a la traducción de la Biblia, el iniciador del
«boxers» dio muerte a casi la mitad de los orto- trabajo misionero protestante en China fue
doxos rusos en la China que comenzó un verda- Robert Morrison, natural de Escocia y perte-
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HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
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Reunión de misioneros, misioneras y líderes y pastorales na-
cionales en China. (Foto cortesía de C.Thompson Brown).
neciente a la Iglesia Presbiteriana. Tras dedi- Una obra semejante fue emprendida por el
carse al estudio de la medicina, la astronomía alemán Gützlaff, aunque la de éste era más am-
y el chino, Morrison persuadió a la London biciosa. Consistía en preparar chinos cristia-
Missionary Society a que le enviase a la Chi- nos que debían luego adentrarse en el país y de-
na. Puesto que los intereses comerciales ingle- dicarse a la distribución de literatura y a orga-
ses no estaban dispuestos a llevarle a su des- nizar comunidades cristianas. El plan de Gütz-
tino, Morrison partió para los Estados Unidos laff no dio resultado debido a que muchos de
y de allí hizo el viaje a Cantón, donde se es- los chinos que se suponía que estuviesen en el
tableció. Ya que en aquel tiempo las leyes chi- interior del país realizando obra cristiana sen-
nas no le permitían adentrarse en el país, Mo- cillamente utilizaban los recursos que Gützlaff
rrison se dedicó al estudio del chino y a la ponía en sus manos para vivir cómodamente
producción de literatura en ese idioma. Su tra- sin hacer trabajo misionero alguno. Pero esto
bajo incluyó la traducción de la Biblia y de no fue cierto de la totalidad de ellos, y en todo
varios de los principales libros protestantes caso el intento de Gützlaff y los informes que
de Inglaterra y Escocia. Aunque sus esfuerzos enviaba a Europa contribuyeron a fomentar el
no produjeron inmediatamente gran número espíritu misionero entre las iglesias protestan-
de conversos -el primero no fue bautizado tes. Debido a los ejemplos de Morrison y de
sino siete años después de la llegada de Mo- Gützlaff otros misioneros fueron establecién-
rrison- sí sirvieron para despertar interés por dose en Cantón y en otros lugares donde había
la China en Europa, y para así asegurarse de gran número de residentes chinos, especial-
que el día que las puertas de China se abrieran mente en Malaca.
al trabajo misionero habría un número sufi- La primera apertura de la China al trabajo
ciente de misioneros preparados para aprove- misionero europeo fue consecuencia de la lla-
char tal circunstancia. mada Guerra del Opio, un episodio bochornoso
191
Las misiones en el Lejano Oriente y el Sur del Pacífico
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04 en el que la Gran Bretaña fue a la guerra contra cialmente los bautistas americanos, la Iglesia
China para proteger el comercio en esa mercan- Protestante Episcopal y los presbiterianos.
cía. Como ya hemos señalado, esa guerra abrió Entre los misioneros protestantes más dis-
al comercio internacional cinco importantes tinguidos durante la segunda mitad del siglo
puertos chinos. A partir de entonces, y median- XIX debemos mencionar a Timothy Richard,
te una serie de tratados ulteriores, las potencias Samuel I. Schereschewsky y J. Hudson Taylor.
occidentales fueron obteniendo mayores dere- Timothy Richard pertenecía a los bautistas de
chos de penetración para sus ciudadanos, con lo Inglaterra, y sus métodos de trabajo misionero
cual se hacia cada vez más amplio el territorio nos recuerdan en algo los de Ricci tres siglos
en que podían establecerse los misioneros. antes. Richard se interesó especialmente en el
Durante los primeros años la principal socie- trabajo entre los eruditos y los dirigentes de la
dad misionera que trabajó en la China fue la sociedad china. Sentía hacia la vieja religión de
London Missionary Socieiy, que tras enviar a Confucio más simpatía que los demás misione-
Morrison le reforzó con varios colegas. El pri- ros cristianos de la época. Durante toda su vi-
mero de los misioneros norteamericanos fue en- da abogó por la fundación de universidades
viado por la American Board of Commissioners cristianas en las principales ciudades de la Chi-
for Foreign Missions, en el año 1829. Pocos na como un medio para que el cristianismo pe-
años después otros misioneros norteamericanos netrase toda la vida del país. Sus obras, con las
fueron enviados por la misma junta, entre ellos que buscaba introducir la totalidad de la cultu-
el primer misionero médico protestante que tra- ra occidental en la China, fueron muy leídas en
bajó en la China. Además de estas sociedades, ciertos círculos.
las principales denominaciones y sociedades in- Shereschewsky era de origen lituano, pero
glesas y norteamericanas pronto comenzaron a en los Estados Unidos dejó su judaísmo nativo
enviar misioneros. Entre ella se destacaron espe- para abrazar el cristianismo como miembro de
192
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
la Iglesia Protestante Episcopal. Esta le envió a de los dialectos chinos. Sin embargo, cinco
China como misionero, y allí se dedicó a la años después, tras largas angustias espirituales,
traducción de la Biblia y del Libro de Oración se dedicó a emprender de nuevo el trabajo ac-
Común. En el año 1887 fue consagrado obispo, tivo en la China, y a organizar la sociedad que
cargo al que renunció cuando, seis años más recibió el nombre de China Inland Mission.
tarde, quedó inválido. A pesar de las dificulta- Taylor no creía en la organización excesiva, y
des físicas, continuó su trabajo de traducción, el propósito de su sociedad no era tanto fundar
y su producción literaria durante los últimos iglesias como predicar el Evangelio por toda la
años de su vida, cuando su enfermedad le im- China. Su sueño no consistía en establecer co-
pidió continuar la vida activa, fue extensísima. munidades cristianas en las distintas provin-
Sin lugar a dudas, el más notable de los mi- cias, ni siquiera en lograr gran número de con-
sioneros protestantes en China durante el siglo versos, sino sólo en asegurarse de que todos los
XIX fue J. Hudson Taylor. Aunque era de ori- chinos tuviesen la oportunidad de oír la predi-
gen metodista, partió para la China en el año cación del Evangelio. Este modelo de misión
1853 bajo los auspicios de la Chinese Evange- se conocerá posteriormente como misiones de
lization Society. Pronto rompió con esa organi- fe o faith missions. En teoría, la China Inland
zación debido a diferencias en cuanto a la es- Mission incluía a misioneros de todas las ten-
trategia misionera, y continuó su trabajo por dencias teológicas, pero de hecho sólo a aque-
su propia cuenta. Cuando algunos años más llas personas que por su teología se inclinaban
tarde se vio obligado a regresar a Inglaterra por a emprender un trabajo del tipo que Taylor pro-
razones de salud su trabajo misionero en la ponía. Los misioneros no recibían sueldo fijo
China parecía haber terminado. En Inglaterra alguno, y se sostenían según las circunstancias,
se dedicó a tratar de despertar interés en la Chi- pero siempre de manera frugal. Aun más, el
na y a contribuir a la literatura cristiana en uno propio Taylor y la China Inland Mission no
Comité a cargo de la traducción y revisión de la Biblia al mandarín. (Foto cortesía de G.Thompson Brown).
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Las misiones en el Lejano Oriente y el Sur del Pacífico
pedían directamente fondos a persona alguna, Durante toda la segunda mitad del siglo
sino que sólo oraban y pedían que otros orasen XIX, los métodos misioneros de la mayoría de
para que los fondos llegaran. Debido a los los protestantes consistieron en la distribución
grandes movimientos de despertar de la reli- de literatura -especialmente de la Biblia- en
gión individual que habían tenido y estaban te- la predicación, y en el establecimiento de orga-
niendo lugar en Inglaterra y los Estados Unidos nizaciones de carácter benéfico, tales como es-
el proyecto de Taylor recibió amplia acogida, y cuelas y hospitales. Al principio la mayor par-
pronto la China Inland Mission llegó a ser la te de estas escuelas era de nivel primario y se-
mayor empresa misionera en el país. Aunque cundario, pero lentamente se fueron creando
en teoría su propósito no consistía en fundar centros de enseñanza superior así como de ins-
iglesias, lo que quedaría a cargo de quienes vi- trucción teológica. Paralelamente a los hospita-
niesen después, de hecho se tendió a reunir a les de carácter general, había otros centros es-
los misioneros en diversas áreas según sus orí- pecializados, tales como asilos para enfermos
genes denominacionales, y aparecieron allí mentales y refugios y sanatorios para los adic-
iglesias cuyas características correspondían a tos al opio. En este último campo las iglesias
las de las denominaciones de origen de los mi- protestantes hicieron una amplísima labor, y
sioneros de cada lugar. muchos de sus conversos, y aun algunos de sus
mejores pastores, surgieron de los centros de
rehabilitación para quienes habían sufrido las
consecuencias de su uso del opio. Algunas uni-
Primera Escuela de Medicina de la Universi-
versidades británicas y norteamericanas esta-
dad Cristiana Shandong donde por primera
blecieron avanzadas en la China -sobre todo
vez se enseño medicina occidental en manda-
rin. (Foto cortesía de C.Thompson Brown).
la de Yale, que construyó un hospital alrededor
del cual se instituyeron una escuela de medici-
na y otra de enfermería.
En términos generales, toda la segunda mitad
del siglo XIX fue empleada por el cristianismo
protestante en la China más en su extensión tern-
tonal que en el desarrollo de los medios institu-
cionales para la continuación de su obra. Esto fue
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HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
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r Las misiones en el Lejano Oriente y el Sur del Pacífico
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nismo, el budismo y otras expresiones reli- tas trajo un nuevo período para el cristianismo
giosas del contexto. Muchos de estos cristia- chino, tanto protestante como católico.
nos de vocación misionera comenzaron a for- La primera consecuencia de la victoria co-
jar un modelo mucho más apto para la misión munista en China fue la retirada o expulsión de
cuando conlleva el encuentro con personas de la casi totalidad de los misioneros extranjeros.
otras culturas y de otras religiones. Fueron muchísimos los chinos que abandona-
La suerte de las misiones protestantes en la ron el cristianismo en pos del marxismo, espe-
China estaba estrechamente unida a la del go- cialmente entre los intelectuales y estudiantes
bierno nacionalista. Sun-Yat-Sen, cuyo here- que seguían la teología de tendencia liberal.
dero espiritual Chiang-Kai-Shek decía ser, ha- Algunos dirigentes cristianos pensaron que la
bía sido protestante. El propio Chiang-Kai- única manera de salvar la iglesia era colocarla
Shek era miembro de una iglesia protestante, en manos del Estado. En el año 1950 el «Ma-
y no cabe duda de que su esposa procedía de nifiesto Cristiano» fue presentado a un grupo
un hogar de profundas convicciones evangéli- de dirigentes cristianos en Shanghai para que lo
cas. Muchos misioneros veían en esto una aprobaran. Cuando estos se negaron se les dijo
oportunidad semejante a la que el Imperio Ro- que, puesto que el «Manifiesto» ya tenía la
mano había presentado en la época de Cons- aprobación del premier Chou En-La¡, no era
tantino. Otros no se mostraban tan optimistas, posible rechazarlo. Poco después comenzó la
y señalaban lo muchos casos de corrupción «campaña de denuncias», en la que algunos di-
política que se daban en el Kuomintang. En rigentes cristianos se prestaron a difamar a sus
todo caso, no nos corresponde aquí juzgar el hermanos mediante la prensa y la radio. Luego
carácter de Chiang-Kai Shek, sino que sólo vino la «consolidación» de las iglesias, de tal
nos interesa el hecho de que su expulsión de modo que en Pekín (Bejing), donde antes de la
la China continental por las fuerzas comunis- revolución había sesenta y cinco iglesias, sólo
196
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
quedaron cuatro -las demás fueron donadas al vas. Una vez más, el gobierno comunista reco-
Estado en un «gesto de patriotismo». noció como otra religión a las iglesias protes-
Durante algún tiempo, los cristianos de la tantes, y comenzó una historia muy compleja
China guardaron contacto con el resto de la de relaciones entre la iglesia oficial, con sus or-
iglesia a través de sus hermanos de Rusia. Pero ganismos ecuménicos y educativos, y las igle-
cuando las relaciones entre China y Rusia se hi- sias clandestinas.
cieron difíciles se rompió el último hilo de co- Por otro lado, reflexiones de misioneros, crí-
municación con el exterior. En el año 1961 era ticos del proyecto occidental protestante en la
imposible saber a ciencia cierta cuántos cristia- China, escribieron positivamente sobre la revo-
nos había en la China, y mucho más difícil sa- lución marxista en la China. No obstante, lue-
ber el número exacto de los que pertenecían a go de la Revolución Cultural de los años 1960,
las iglesias «clandestinas» o subterráneas, que era claro que el cristianismo-oficial o no ofi-
habían surgido como reacción a la actitud de las cial-sufrió persecución y el intento de su to-
iglesias reconocidas por el gobierno. tal eliminación del suelo chino.
El trabajo misionero en la China continuó Sin embargo, para finales de la década del
bajo condiciones muy complejas. Cómo indi- 1970 y principios de la próxima, comienza a
camos arriba, los protestantes también se divi- aparecer un espacio de parte del gobierno para
dieron entre las iglesias oficiales, reconocidas permitir el libre culto. Para sorpresa de mu-
por el gobierno y que posteriormente serían chos, las iglesias abren y la feligresía llega pa-
conocidas como el Concilio de Iglesias de la ra adorar y alabar a Dios. Ya no existen la di-
China y el Three-SelfMovement Church, y las visiones denominacionales, sino que ahora se
iglesias clandestinas, subterráneas o subversi- habla de la Iglesia Cristiana en la China, con
El cristianismo en la China crece con fuerza a tal extremo que no hay suficiente es-
Brown).
pacio en los santuarios para los feligreses. (Foto cortesía de G.Thompson
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Las misiones en el Lejano Oriente y el Sur del Pacífico
198
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
más de un cuarto de millón de aborígenes. Es- tos a tomar sobre sus hombros mayores res-
tos vivían en un grado de civilización rudi- ponsabilidades. En el año 1965 quedaban en
mentario, correspondiente al de la Edad de Australia sólo unos pocos cientos de nómadas,
Piedra, y se alimentaban de la caza y la reco- y el resto de los descendientes de los primitivos
lección de frutas y raíces. La llegada de los co- habitantes del país se había adaptado, de una
lonos británicos les colocó en situación des- forma u otra, a la vida moderna.
ventajosa, pues eran empujados cada vez más Australia vino a ser muy pronto un centro
hacia las regiones desérticas del interior y del desde donde se dirigió el trabajo misionero ha-
norte del continente. Muchos de los colonos cia Nueva Zelandia y las demás islas del Pací-
los maltrataban y aun los mataban como si fico. Algunos de sus primeros pastores y cape-
fuesen animales. En tales condiciones, las llanes, especialmente los anglicanos y los me-
iglesias comenzaron trabajo misionero entre todistas, estuvieron muy interesados en el tra-
ellos. Debido a la costumbres nómadas de los bajo entre los maoríes de Nueva Zelandia, y
aborígenes, tales misiones eran en extremo di- después entre los habitantes de las demás islas.
fíciles. Ante todo parecía necesario lograr que Antes de pasar a Nueva Zelandia, debemos
se estableciesen en un lugar, al estilo de las an- señalar que en Australia, al igual que en tantas
tiguas «reducciones» que los españoles habían otras regiones del globo, el siglo XX se carac-
establecido en América, para allí llevar a cabo terizó por los movimientos de unidad entre los
el trabajo misionero. El propósito de tales mi- cristianos y la inserción del movimiento pente-
siones era no sólo la conversión de los aborí- costal y carismático. Hubo varios casos de
genes al cristianismo, sino también su adapta- uniones orgánicas entre iglesias protestantes
ción a las condiciones de la vida moderna. A pertenecientes a la misma tradición. En el año
menudo abandonaban la vida sedentaria y se 1927 se fundó el National Missionary Council
dedicaban de nuevo a vagar por el desierto. of Australia. Desde la fundación del Consejo
Durante todo el siglo XIX la mayoría de las Mundial de Iglesias, dos iglesias australianas
misiones, tanto católicas como protestantes pertenecían a él. En el año 1965 existía un pro-
y éstas últimas eran la mayoría- fracasaron. yecto en vías de realización para la unión de
La población aborigen continuó disminuyen- varias de las principales iglesias protestantes.
do, y todo hacía suponer que pronto desapare- El listado de iglesias y tradiciones de corte
cería. Además, quienes se adaptaban a la vida pentecostal en Australia es impresionante. Gru-
sedentaria de las misiones no estaban dispues- pos tales como la Iglesia Apostólica, las Asam-
tos a tomar sobre sus hombros responsabilidad bleas de Dios, La Iglesia del Evangelio Cuadran-
alguna, sino que deseaban más bien que los gular, la Iglesia de Dios (Cleveland) y otros gru-
misioneros les proveyesen todas las cosas ne- pos carismáticos han hecho un aporte al trabajo
cesarias para la vida. misionero en Australia, particularmente entre los
Durante el siglo XX estas misiones marcha- migrantes, los inmigrantes y en los centros urba-
ron algo mejor. Mediante los adelantos médi- nos. Hay un número creciente de iglesias pente-
cos se logró reducir la mortandad infantil, de costales australianas que surgen del movimiento
modo que la población comenzó a aumentar misionero pentecostal, pero que ahora son de ca-
de nuevo. Se establecieron escuelas a las que rácter nacional tal como la United Pentecostal
en el año 1965 asistía el 80% de los niños, y se Church of Australia. Muchas de estas iglesias y
logró legislación que concedía a los aborígenes denominaciones pentecostales y carismáticas no
todos los derechos que tenían los habitantes sólo tienen trabajo misionero en su país, sino que
blancos del país. Algunos aborígenes y mesti- están desarrollando estructuras para trabajo mi-
zos comenzaron a dar señales de estar dispues- sionero en el extranjero.
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Las misiones en el Lejano Oriente y el Sur del Pacífico
2. Nueva Zelandia glo XX. Esta fue fundada por el maorí Ratana,
El cristianismo llegó a Nueva Zelandia pro- y se caracterizaba por su carácter emotivo, su
cedente de Australia. Antes de que llegasen las énfasis en la sanidad divina y su carácter polí-
grandes olas de inmigrantes británicos, algunos tico y económico, pues prometía justicia so-
cristianos en Australia se habían ocupado de cial para los maoríes mediante una dedicación
comenzar misiones entre los maoríes. Estos total a Dios.
eran los habitantes de las islas neozelandesas A mediados y finales del siglo XX, la in-
antes de la llegada de los blancos. Su cultura mensa mayoría del país era protestante, y esta-
era bastante superior a la de los aborígenes aus- ba constituida por anglicanos, presbiterianos y
tralianos, pero sus costumbres de canibalismo metodistas. La Iglesia Católica apenas pasaba
y sus continuas guerras limitaban el aumento de la octava parte de la población. Es de notar-
de la población. Las primeras misiones cristia- se el hecho de que durante el siglo XX los mao-
nas a Nueva Zelandia surgieron bajo la inspira- ríes anglicanos insistieron en la conveniencia
ción de Samuel Marsden, el segundo capellán de que se estableciese una diócesis aparte para
anglicano en Australia, que en el año 1814, tras ellos. Esto se hizo, y un obispo maorí fue colo-
haber trabajado entre los aborígenes australia- cado a la cabeza de la diócesis.
nos, estableció obra misionera entre los maorí- Al igual que Australia, Nueva Zelandia fue
es. Pocos años más tarde, y debido en parte a la fuente de misioneros hacia el resto de las islas
inspiración de Marsden, el metodista Samuel del Pacífico.
Leigh comenzó trabajo misionero en la misma
región. El catolicismo romano llegó más de 3. Las islas del Pacífico
veinte años después del anglicanismo, y aún Ningún episodio en la historia de las misio-
entonces su primer trabajo fue entre los colo- nes cristianas es tan interesante e inspirador co-
nos irlandeses. Las misiones anglicanas y me- mo el de la expansión del cristianismo en las is-
todistas contribuyeron a reducir el canibalis- las de Polinesia, Melanesia y Micronesia. Se
mo entre los maoríes, y al parecer ya a media- trataba de millares de islas, la mayoría de ellas
dos del siglo la mayoría de ellos se inclinaba pequeñísimas y separadas a veces por enormes
hacia el cristianismo. distancias. Los distintos idiomas y dialectos ha-
Entonces llegó la ola invasora de los colonos cían la tarea aun mucho más escabrosa. Casi
británicos. Aunque algunos de los propugnado- siempre los comerciantes y aventureros que lle-
res de la colonización de Nueva Zelandia lo gaban antes o juntamente con los misioneros
habían hecho por motivos religiosos, el resulta- cristianos constituían, con su ejemplo y hasta a
do fue funesto para los maoríes. Los colonos veces con su oposición activa, un serio obstácu-
introdujeron armas de fuego, que hicieron mu- lo para las misiones. Muchos de los habitantes
cho más mortíferas las guerras de los maoríes de las islas eran caníbales, y otros eran cazado-
entre sí. La continua explotación de los habi- res de cabezas. Las guerras entre las diversas
tantes del país tuvo por resultado la subleva- tribus eran endémicas, y se hicieron mucho más
ción de éstos, seguida por sangrientas guerras temibles cuando los blancos introdujeron las
en que los maoríes fueron diezmados. armas de fuego. Las enfermedades que acompa-
A pesar de todo, el cristianismo, especial- ñaron a los blancos, y para las cuales los habi-
mente la Iglesia Anglicana, logró echar raíces tantes de las islas no habían desarrollado inmu-
entre los maoríes. Estos se mostraron inclina- nidad alguna, diezmaban la población. A menu-
dos a crear sectas y movimientos religiosos de do se acusaba a los blancos, especialmente a los
su propia creación, tales como el de los Jau-Jau misioneros, de haber provocado la ira de los dio-
en el siglo XIX y la Iglesia de Ratana en el si- ses, cuya consecuencia era la epidemia.
200
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
A pesar de todas estas dificultades, la evan- Al igual que en el caso de los protestantes, hu-
gelización de las islas del Pacífico avanzó con- bo entre ellos frecuentes ejemplos de heroísmo
sistentemente. Con una frecuencia y en núme- y de gran dedicación -el más conocido es el
ro sorprendente, sobre todo en el caso de las del padre Damián, que dedicó su vida al traba-
misiones protestantes, los recién convertidos jo entre leprosos en Hawaii. Sin embargo, a
se dedicaban a llevar su nueva fe a otras perso- menudo los misioneros franceses recurrieron
nas y hasta a otras islas. En muchas de las is- al poderío militar de Francia para apoyar su
las en las que el cristianismo había sido esta- trabajo. En más de una ocasión, cuando algún
blecido recientemente se crearon centros para rey o jefe convertido al protestantismo se ne-
la preparación de misioneros a otras islas. En gaba a permitir el trabajo de los católicos en su
este tipo de actividad se distinguieron espe- isla, Francia le obligó a hacerlo mediante la
cialmente los cristianos de las islas de Samoa, presencia de sus buques de guerra. Fue así,
Tonga y Fiji. Frecuentemente tales misione- por ejemplo, que Tahití, que había sido el pri-
ros eran muertos y devorados por los habitan- mer lugar donde los misioneros protestantes
tes de alguna otra isla a la que pretendían con- trabajaron, llegó a ser francesa y católica. En
vertir, y en tales ocasiones el resultado era que tales casos, puesto que las autoridades france-
inmediatamente surgían otros voluntarios pa- sas impedían la presencia de misioneros de
ra ocupar su lugar. otros países, los protestantes recurrieron al en-
La mayor parte del trabajo misionero en las vío de misioneros de la Société des Missions
islas del Pacífico fue llevado a cabo por protes- Evangéliques. Empero esto no logró detener el
tantes, y a mediados del siglo XX éstos cons- progreso del catolicismo romano por encima
titulan la mayoría de la población, aunque los del protestantismo.
católicos constituían poco menos de la mitad. En términos generales, la historia de la pe-
En sus orígenes, las misiones protestantes de netración del cristianismo se repitió de isla en
las islas del sur del Pacífico procedieron prin- isla. En algunos lugares, los misioneros llega-
cipalmente de Australia y Nueva Zelandia, ron antes que los demás blancos, mientras que
además de la London Missionary Society, di- en otros llegaban cuando ya los comerciantes
rectamente de Gran Bretaña. Al norte del Pa- y colonos habían introducido los gérmenes de
cífico, el trabajo fue llevado a cabo principal- la destrucción física y moral. En el primero
mente por la American Board of Commissio- de los casos se logró una adaptación más rápi-
ners. Por estas razones, las denominaciones da y completa de los habitantes originales de
más extensamente representadas en las islas las islas a las nuevas condiciones que llegaron
fueron la congregacionalista y la metodista. con sus contactos con el resto del mundo. Por
Además había fuertes contingentes de anglica- lo general, el cristianismo llegaba a las diver-
nos y algunos bautistas, discípulos de Cristo y sas islas llevado por misioneros oriundos de
otros. Naturalmente, en las islas que estaban alguna de las islas vecinas y recientemente
bajo el dominio de Holanda y de Alemania la convertidos. En otros casos era llevado por al-
mayoría de los misioneros procedía de esos gún nativo de la isla en cuestión que había
países y de las iglesias que allí eran numero- naufragado cerca de un sitio en que el cristia-
sas. Pero la influencia misionera de Holanda y nismo se había establecido, y que así había
de Alemania nunca llegó al nivel de la de Gran llegado a conocer la nueva fe. En otros casos
Bretaña, Australia, Nueva Zelandia y los Esta- -los menos- era llevado por primera vez
dos Unidos. por misioneros blancos. Frecuentemente los
La mayor parte de la obra misionera católi- primeros misioneros, tanto nativos como blan-
ca fue llevada a cabo por sacerdotes franceses. cos, eran muertos y devorados por la población
201
L
Las misiones en el Lejano Oriente y el Sur del Pacífico
de alguna isla a la que esperaban convertir. A religiones estaban en las regiones montañosas
la larga, sin embargo, se llegaba a establecer del centro de algunas islas, especialmente de
pequeños centros misioneros que poco a poco Nueva Guinea, donde continuaba producién-
iban logrando algunos conversos individuales. dose el fenómeno de la conversión en masa de
Debido al hecho de que la mayoría de los mi- alguna que otra tribu. La invasión de las islas
sioneros protestantes procedía de tradiciones por parte del Japón durante la Segunda Guerra
que subrayaban la necesidad de una experien- Mundial no parecía haber afectado de manera
cia individual, tales conversiones eran acom- decisiva el avance del cristianismo. La exten-
pañadas de profundas experiencias emociona- sión del protectorado de Nueva Zelandia y
les y de un cambio de vida a menudo radical. Australia a algunas de las islas del sur del Pa-
En ocasiones los conversos recaían en su anti- cífico contribuyó a despertar nuevo interés mi-
guo modo de vida y su vieja religión. Por fin sionero en esos países. Hawaii pasó a ser un
se lograba constituir un pequeño grupo de cre- estado de los Estados Unidos.
yentes que incluía frecuentemente a algunos Debido a la influencia del cristianismo, y a
de los más distinguidos miembros de la co- través de la obra incesante de numerosísimos
munidad. Luego, tras largos años de trabajo al misioneros, los diversos idiomas de las islas
parecer escasos en frutos, comenzaban las del Pacífico se redujeron a la escritura, y se
conversiones en masa. tradujo a ellos la Biblia y otra literatura cristia-
Estas tenían lugar mediante «avivamien- na. El canibalismo y la costumbre de cazar ca-
tos» en los que se experimentaban grandes sa- bezas desaparecieron, así como -en las islas
cudidas emocionales, con una profunda con- Fiji- la costumbre de estrangular a las viudas.
vicción de pecado y confesiones generales. En sus prácticas sexuales, los habitantes de las
En pocos años la casi totalidad de la pobla- islas del Pacifico tendían a ajustarse a las que
ción de la isla en cuestión era cristiana. Enton- propugnaban los misioneros cristianos. En el
ces se procedía a tratar de producir una legis- campo de la educación, desde un principio los
lación y una vida comunitaria que reflejasen misioneros se habían dedicado a establecer es-
los principios cristianos. A menudo la isla en cuelas, y luego se esforzaron por preparar ade-
que se producía la conversión, debido en par- cuadamente a los conversos que debían servir
te a su conocimiento más estrecho de la técni- de misioneros a otras islas. Se desarrolló un
ca occidental, lograba cierta hegemonía so- amplio clero nativo. Sin embargo, durante to-
bre otras islas, y entonces el cristianismo se do el siglo XIX y buena parte del XX los mi-
extendía hacia ellas. Un ejemplo notable de sioneros vacilaban en colocar sobre los hom-
esto fue el caso del rey de Tonga que al bau- bros de los pastores oriundos de las islas gran-
tizarse adoptó el nombre de Jorge. A través de des responsabilidades. Durante el siglo XX es-
las gestiones militares y diplomáticas del rey ta actitud tendía a desaparecer, y las iglesias de
Jorge, su poderío se extendió a varias islas, y Samoa, Fiji y Tonga habían obtenido cierto
el cristianismo alcanzó aun allende los límites grado de autonomía.
de su poderío.
A fines del siglo XIX la casi totalidad de los I. Consideraciones generales
polinesios era cristiana, y existían misiones en Durante todo el período que estamos estu-
la mayor parte de las islas de Melanesia y Mi- diando, Asia y el sur del Pacífico fueron el
cronesia. Durante todo el siglo XX continuó la punto focal del interés misionero por parte
conversión de los habitantes de estas islas, y en de Europa y los Estados Unidos. Fue hacia
el año 1965 casi todos ellos se llamaban cris- esta porción del globo que Guillermo Carey
tianos. Los principales reductos de las viejas dirigió la vista desde su pequeño taller de za-
202
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
patero, y fue también en ella que pasó los me- tales uniones orgánicas, se instituyeron conse-
jores años de su vida. A partir de entonces, los jos de iglesias, centros unidos de educación
principales esfuerzos misioneros europeos se teológica, y otros instrumentos de coopera-
dirigieron hacia el Oriente y, en menor escala, ción.
hacia el sur del Pacífico. En los Estados Uni- También es de suma importancia destacar
dos, la American Board of Commissioners for cómo las tradiciones pentecostales y carismá-
Foreign Missions surgió también del interés ticas también contribuyeron y continúan con-
de algunos por el Oriente, y desde sus inicios tribuyendo al desarrollo de liderato nacional.
dedicó a esa región sus mejores esfuerzos. La presencia misionera de estas tradiciones se
Por otra parte, la enorme distancia que se- convierte en otro reto a las iglesias de origen
paraba a esta región de los países de proceden- misionero histórico y ecuménico, ya que mu-
cia de los misioneros -excepto, naturalmen- chas de estas iglesias pentecostales y carismá-
te, de Australia y Nueva Zelandia- produjo ticas encarnan una contextualización y una afi-
cierta selección natural que fue muy prove- nidad con el pueblo que es única y particular
chosa para las misiones. Sólo las iglesias e ins- en la presente coyuntura social, económica y
tituciones con cierta firmeza de propósito po- cultural del Oriente.
dían enviar misioneros al Asia o al sur del Pa- Por último, debemos señalar que, en la vie-
cífico. ja cuestión del grado y el modo en que la obra
La combinación de esos dos factores -la misionera ha de adaptarse a la cultura, hubo
concentración del esfuerzo misionero y la se- diversas soluciones. En términos generales,
lección de su personal- ha dado por resulta- los católicos se adaptaron más que los protes-
do el establecimiento de iglesias de notable tantes -como en lo que se refiere a las castas
madurez. Fue en la India, y después en el res- hindúes- pero mantuvieron su organización
to de la región que estamos estudiando, que traída de Europa. Los protestantes por su par-
primero aparecieron nacionales capaces de te se adaptaron en diversos grados, y algunos
tomar las riendas de las nuevas iglesias -y sencillamente no lo hicieron, de modo que en
de hacerlo, no en un espíritu de venganza o algunas regiones aparecieron iglesias protes-
de emancipación de la tutela de los misione- tantes que en realidad eran pequeños trasplan-
ros, sino como la consecuencia natural de la tes culturales. Los pentecostales y grupos ca-
obra cristiana. Ya a principios del siglo XX rismáticos representan un fenómeno comple-
las iglesias del Oriente contaban con personas jo. Por un lado muchos de ellos incorporan
capaces de dirigirlas, a veces en tiempos ex- buena parte de las culturas ancestrales de
tremadamente difíciles y sin el apoyo de Oc- Asia, expresando una afinidad que algunos
cidente. Así comenzaba a desaparecer la dis- consideran ser sincretista. Pero al mismo
tinción -tan errada y dañina, pero tan fre- tiempo presentan un testimonio cristiano in-
cuente- entre (<iglesia» y «misión». amovible, centrado en la persona de Jesucris-
Desde muy temprano algunas de las iglesias to. Al mismo tiempo, todavía continúa el tra-
del sur de Asia ocuparon un lugar de impor- bajo de evangelización al estilo de Hudson, en
tancia en el movimiento ecuménico. Los diri- el que no se promueve una iglesia, pero sí se
gentes nacionales a que ya nos hemos referido busca compartir el Evangelio en todos los es-
se lanzaron en busca de estructuras y modos de pacios de la vida, aunque sea sin arraigo ecle-
testimonio más efectivos, y dieron en la forma- sial.
ción de varias iglesias unidas que a su vez sir- En todo caso, al comenzar el siglo XXI re-
vieron de ejemplo para otras uniones seme- sulta claro el Oriente se ha vuelto un gran cen-
jantes en otras partes del globo. Además de tro de vitalidad para la fe cristiana.
203
capítulo 8
Las misiones
en el mundo musulmán
campo más difícil para las misiones cris- toridad de la Biblia. Las Cruzadas y la larga
Eltianas ha sido siempre el mundo musul- historia de conflictos y de tensión entre el mun-
mán. Durante siglos, la ley en algunos países do cristiano y el musulmán han contribuido a
musulmanes castigaba con la muerte la con- crear y fomentar una actitud no sólo sospecho-
versión al cristianismo. En otros países ha exis- sa, sino hostil hacia el cristianismo, pues se
tido algún nivel de tolerancia y hasta protec- piensa que la conversión al cristianismo tiene
ción de los derechos religiosos de los cristia- como consecuencia el abandono de los intere-
nos. El movimiento de conversiones entre el ses de la comunidad.
cristianismo y el islam siempre ha sido contro- Las relaciones entre cristianos y musulma-
versial, pues no existe ningún patrón o fórmu- nes en el Medio Oriente también están enmar-
la que lo explique. Usualmente, las relaciones cadas dentro de la historia del colonialismo y
entre ambas religiones se han caracterizado por de la expansión de los intereses políticos y eco-
tensiones y ambigüedades. nómicos del Occidente. Tanto el colonialismo
Esto tendió a hacer de las iglesias cristianas como lo que podemos llamar la «occidentaliza-
que allí había pequeños núcleos compuestos ción» del mundo musulmán han dejado una
mayormente por los descendientes de los cris- huella antagónica que en las últimas décadas ha
tianos de generaciones anteriores, arraigados a resultado en expresiones violentas en contra de
tradiciones cristianas antiguas. Por otra parte, todo lo que parezca influencia del cristianismo
en muchos de los países del Medio Oriente, el occidental. Sin duda todas estas fuerzas histó-
islam de tal manera involucra la vida y la cul- ricas actúan y forman una matriz tan compleja
tura toda de las sociedades donde es la religión que es difícil escribir esta historia con una pers-
dominante, que cualquier persona que se apar- pectiva equilibrada.
te de él tiene que romper necesariamente con la El mundo musulmán comprende dentro de
sociedad en que vive, a menos que se ubique sus confines los más antiguos lugares de la his-
dentro de una de las tradiciones cristianas an- toria del cristianismo, así como algunas de las
tiguas o dentro del marco ecuménico del cris- más antiguas iglesias cristianas: la región de
tianismo más reciente. La existencia de un li- Siria y Palestina, donde el cristianismo creció
bro sagrado, el Corán, que se acerca a la Biblia y se extendió por primera vez; Egipto, donde
en muchos puntos pero que en otros difiere ra- floreció la escuela de Alejandría; el norte de
dicalmente de ella, hace imposible la presenta- Africa, que fue la cuna del cristianismo de len-
ción del mensaje cristiano a base sólo de la au- gua latina; y las regiones de Mesopotamia y
204
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
205
Las misiones en el mundo musulmán
tos grupos misioneros representan una tenden- alto riesgo. Estas nuevas tendencias misioneras
cia a apoyar la política extranjera de países oc- están creciendo en tiempos recientes y han
cidentales -particularmente los Estados Uni- creado sentimientos tanto positivos como nega-
dos- que protegen los intereses del estado de tivos.
Israel. Por otro lado, se han levantado organi-
zaciones evangélicas que intentan contrarrestar A. Las antiguas iglesias orientales
un estereotipo según el cual «todo evangélico 1. La Iglesia Ortodoxa
es pro-Israel», recalcando y analizando las En el mundo musulmán, la Iglesia Orto-
fuerzas sociales, históricas, religiosas y econó- doxa es una pequeñísima minoría. Aunque fue
micas que informan la política de las naciones, allí que en los primeros siglos del cristianismo
y creando conciencia de la presencia y senti- hubo fuertes comunidades cristianas, los largos
mientos de millones de cristianos árabes y de años de dominación musulmana han dado por
otros grupos étnicos que viven su fe en esa re- resultado el enquistamiento de las iglesias en
gión del mundo. esa región, de modo que hoy las principales
Por otro lado, y dadas las tensiones entre el iglesias ortodoxas se encuentran fuera de ella,
Occidente y el mundo musulmán, surgen nue- especialmente en Grecia, Rusia, la antigua Yu-
vos movimientos misioneros, muchos de ellos goslavia, Rumania y Bulgaria. Esta iglesia tie-
auspiciados con dinero occidental pero con ne dentro del mundo musulmán cuatro patriar-
personal del tercer mundo, particularmente de cas: el de Constantinopla -que recibe el títu-
América Latina, el Caribe y algunos países del lo de «Patriarca Ecuménico»- el de Alejan-
Asia. Bajo cubierta de visas de negocio y de tu- dría, el de Antioquía y el de Jerusalén. A pesar
rismo, se lleva a cabo trabajo en situaciones de de que el Patriarca de Constantinopla tiene
206
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
cierta primacía de honor, su verdadera autori- del pueblo -en este caso, el árabe. A raíz de la
dad se extiende sólo a los cristianos ortodoxos Primera Guerra Mundial, comenzó un éxodo
de Turquía, una reducida minoría. Su adminis- hacia el Nuevo Mundo cuyo resultado fue una
tración se ejerce a través de un Santo Sínodo, comunidad ortodoxa de origen siríaco en Nor-
compuesto por un pequeño número de obispos teamérica, Brasil y Argentina. Por tanto, la au-
que llevan a cabo la administración de la igle- toridad de este patriarca se extiende a estas re-
sia. Además, este patriarca tiene autoridad so- giones en las Américas.
bre las iglesias ortodoxas griegas de Norte y Por ultimo, el Patriarca de Jerusalén tiene
Sur América, Europa Occidental, Australia y autoridad sobre los cristianos ortodoxos ára-
Nueva Zelandia. bes de Palestina y Jordania, y una de sus prin-
El Patriarca de Alejandría ejerce su autori- cipales funciones es la de dirigir la Hermandad
dad sobre los fieles ortodoxos de Egipto y del del Santo Sepulcro, que se ocupa del cuidado
norte de Africa -poco más de 100.000 creyen- de los Santos Lugares. Este patriarcado tiene
tes. Aunque casi todos los ortodoxos de Africa una fuerte influencia griega, y por ello su litur-
están en Egipto, los hay también en Kenya, gia y oraciones son bilingües, en árabe y grie-
Zaire, Zimbabwe, y Sudáfrica. go. En los países del mundo musulmán que an-
El Patriarca de Antioquía, cuya residencia tes pertenecieron al Imperio Persa son escasí-
está en Damasco, tiene a su cuidado la comu- simos los cristianos ortodoxos. Esto se debe a
nidad más grande de ortodoxos en la región, que antes de la invasión musulmana los gober-
con aproximadamente 1,6 millones de miem- nantes persas persiguieron al cristianismo orto-
bros, la mayoría de ellos en Siria, donde son el doxo porque sospechaban que fuese un instru-
grupo cristiano más grande. Como es costum- mento del Imperio Romano. Por esta razón, los
bre entre las iglesias ortodoxas, la liturgia y las cristianos monofisitas y nestorianos son más
oraciones de este patriarcado son en el idioma numerosos en esas regiones.
1it!t .1 77
41,
207
L
Las misiones en el mundo musulmán
208
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
República de Armenia y la otra en Antelias por el odio de sus vecinos musulmanes, los
(Beirut), en el Líbano. Sus jerarcas se titulan nestorianos se encuentran actualmente en
Patriarca y Católicos. Durante el siglo XX, Irak, Siria, además de Irán y otros países del
esta iglesia recibió fuertes embates. Entre el Cercano Oriente. A raíz de las matanzas de
1915 y 1923, miles de armenios sufrieron principios del siglo XX, un fuerte contingen-
te de nestorianos emigró hacia Norteamérica,
persecución y genocidio en Turquía, lo cual
ha creado una inmensa población en la diás- pero allí han tenido poca vida eclesiástica.
pora. El siglo XX fue un siglo de desastres y Aunque se les conoce generalmente por el ti-
persecuciones para los armenios y para esta tulo poco encomiable de «nestorianos», el he-
antigua iglesia cuya fidelidad se remonta cho es que la mayor parte de ellos no se inte-
resa en las sutilezas teológicas que a princi-
temprano en la historia del cristianismo.
No obstante, bajo el liderato del patriarca pios del siglo V produjeron la controversia
en Beirut, esta iglesia ha sido una de las más nestoriana. Hasta el día de hoy se niegan a
activas en el movimiento ecuménico en el dar a María el título de «Madre de Dios», pe-
Medio Oriente y en el mundo. El Católicos ro su cristología no parece diferir de la de las
Kerekin II sirvió durante las dos últimas dé- iglesias ortodoxas. A fin de quitar de sobre
cadas del siglo XX como uno de los presiden- ellos el estigma de «nestorianos», algunos an-
tes del Consejo Mundial de Iglesias y del glicanos que trabajaban entre ellos comenza-
Consejo de Iglesias del Medio Oriente. Hay ron a darles el nombre de «asirios», por el
fuertes comunidades armenias en Siria y el que se les conoce en algunos libros. Ellos
Líbano, además del Irán e Irak. Durante la mismos se dan el nombre de «sirios».
Como era de esperarse dadas las circuns-
primera guerra en el Golfo entre los Estados
Unidos e Irak, el obispado armenio en Irak tancias, esta iglesia tampoco ha realizado una
manejó la ayuda humanitaria a miles de per- amplia labor misionera. Las dificultades en
sonas afectadas. Aún después de la guerra, el Irak llevaron al Católicos Mar Simon XXI a re-
obispado continuó sirviendo a las comunida- fugiarse en Chipre, de donde partió en el año
des iraquíes y extranjeras en el reajuste a la 1941 para los Estados Unidos, con el propósi-
vida normal. En la próxima guerra en Irak, a to de organizar allí la vida eclesiástica de los
muchos nestorianos exiliados en ese país. A
principios del siglo XXI, esta iglesia continuó
sirviendo a los necesitados y damnificados mediados del siglo XX había tenido cierto éxi-
de la guerra. to en Chicago.
209
Las misiones en el mundo musulmán
210
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
otros funcionarios eclesiásticos con el propósi- propósito principal de esta organización era la
to de ministrar a sus necesidades religiosas. conversión de los musulmanes, pero un testi-
Como testimonio y consecuencia de esta ex- monio notable de la dificultad de esta obra es
pansión a través del Mediterráneo, en el año el hecho de que sus más grandes logros misio-
1884 el Papa restauró el extinto episcopado de neros han tenido lugar en el Africa ecuatorial,
Cartago, al que habrían pertenecido algunos de y no entre los musulmanes. Otro esfuerzo no-
los más ilustres cristianos de la antigüedad. table de la Iglesia Católica fue la fundación de
El aumento de la población católica en el la Universidad de San José, en Beirut.
Levante despertó entre sus correligionarios en Durante las últimas décadas del siglo XX y
Europa un nuevo interés en el mundo musul- principios del siglo XXI, la Iglesia Católica se
mán. Este interés se manifestó en el estableci- ha destacado en proyectos misioneros en dos
miento por el papa Pío IX, en el año 1862, de niveles. El primero ha sido la promoción del
la Con gregatio pro Negotiis Ritus Orientalis, a diálogo interreligioso, un aspecto misionero de
cuyo cargo quedaban las relaciones de la Igle- suma importancia a partir del Concilio Vatica-
sia de Roma con las antiguas iglesias orienta- no Segundo. La influencia de sacerdotes de la
les, y cuyo propósito principal era la sujeción región -misioneros en sus propias tierras-
de las iglesias arriba mencionadas a la autori- ha generado esta actividad misionera en distin-
dad del Papa. De esta manera, la mayor parte tos niveles: la teología de las religiones, cues-
de las misiones romanas al mundo musulmán tiones de justicia y paz, el trabajo con refugia-
buscaba no tanto la conversión de los no cris- dos, la reconstrucción de comunidades destrui-
tianos como el paso de los cristianos disidentes das o desoladas, la búsqueda de una espiritua-
a la autoridad de Roma. A veces se trataba de lidad en común, la promoción de los derechos
unir a tales cristianos conversos a las iglesias humanos, y la protección de la vida y de la
del rito latino que se habrían establecido en sus creación.
países, pero la mayor parte de las veces se crea- La Iglesia Católica también ha participado
ban cuerpos eclesiásticos que seguían las anti- del diálogo ecuménico tratando de aliviar las
guas tradiciones orientales pero que al mismo heridas creadas por largos años de tensiones y
tiempo se ajustaban a la autoridad de Roma. desacuerdos teológicos que hoy en día pare-
Cada uno de estos cuerpos eclesiásticos tenía, cen no tener la misma virulencia de antaño.
como hemos visto, su propio patriarca y su pro- También se ha unido con otros cuerpos ecle-
pia liturgia. Es evidente, entonces, por lo arri- siásticos, especialmente con el Concilio de
ba mencionado, que la labor de unidad genera- Iglesias del Medio Oriente, en proyectos a fa-
da por las misiones católicas tuvo un grado de vor de los refugiados de guerra y de los recla-
éxito y continúan generando un diálogo ecu- mos de justicia,
ménico importante.
Las misiones católicas entre los musulma- C.Las misiones protestantes
nes han tenido pocos resultados. Su trabajo ha Los dos principales precursores de las mi-
consistido sobre todo en la institución de hoga- siones protestantes en el mundo musulmán fue-
res para huérfanos y escuelas, pero la oposi- ron Henry Martyn y Karl Gottlieb Pfander. La
ción de la sociedad y frecuentemente de los labor de Martyn como misionero comenzó en
gobiernos ha impedido que se imparta la ense- la India, y cuatro años después se trasladó al
ñanza cristiana con toda libertad. El esfuerzo mundo musulmán, donde tradujo la Biblia y se
más notable es el de la fundación de los «Pa- dedicó a disputas teológicas con los sabios mu-
dres Blancos», mediante la inspiración del sulmanes. Su vida de total dedicación se sinte-
obispo de Argel, Charles M. A. Lavigerie. El tiza en las palabras que escribió en su diario al
211
Las misiones en el mundo musulmán
comienzo de su trabajo misionero: «Now let cesario instituir una iglesia anglicana, se esta-
me burn out for God». Este ruego fue satisfe- bleció un obispo en Jerusalén. Pero aun enton-
cho, y murió en Armenia en el año 1812 a cau- ces éste se dedicaba sobre todo a trabajar entre
sa de sus repetidos esfuerzos en pro de la obra los musulmanes y los judíos, y es notable el he-
misionera. cho de que el primero en ocupar esta sede fue
Pfander fue enviado al Medio Oriente por la un judío convertido. Este episcopado fue criti-
Church Missionary Society. Su facilidad en el cado severamente por los partidarios del an-
aprendizaje de idiomas era sorprendente, y glocatolicismo, mientras que los anglicanos de
pronto conocía el árabe, el persa, el turco y el tendencias más protestantes afirmaban que era
armenio. Su trabajo consistió en adentrarse en un paso necesario. Más tarde el obispado en Je-
los secretos del Corán y discutir con las perso- rusalén fue elevado al rango de arzobispado.
nas cultas entre los musulmanes. Unido a las Aparte del anglicanismo, la iglesia protestan-
caravanas de comerciantes, iba viajando de un te que mas ha trabajado y que mejores resulta-
lugar a otro. Cuando las autoridades hicieron dos ha logrado entre los musulmanes es la pres-
imposible la continuación de su obra, Pfander biteriana. Su trabajo comenzó en el Egipto, a
se dirigió al norte de la India -alo que es hoy mediados del siglo XIX. Aunque su propósito
Pakistán- para continuar trabajando entre los al principio era renovar la Iglesia Copta, el re-
musulmanes de la región. No cabe duda de que sultado fue la aparición de un cisma dentro de
a veces su método era algo hiriente, pues sus esa iglesia, y la consiguiente fundación de una
argumentos aplastantes contra el islamismo iglesia evangélica. Esto trajo dificultades con la
eran irrespetuosos ante los ojos musulmanes. Iglesia Copta, con la cual fue difícil cooperar
Pero a pesar de ello la vida de Pfander y su de- durante muchos años. En el Egipto, la Iglesia
dicación a la evangelización de los musulma- Presbiteriana organizó numerosos hospitales y
nes contribuyeron a despertar interés en esa escuelas, y se dedicó al adiestramiento de un
obra entre los cristianos de Inglaterra. pastorado egipcio. Aunque la mayoría de los
Las primeras misiones protestantes estable- miembros de la Iglesia Presbiteriana venían de
cidas en el mundo musulmán -aparte, claro la Iglesia Copta, había algunos conversos del is-
esta, de las que se establecieron anteriormente lam. Posteriormente, muchos de los trabajos
en las Indias Orientales y que hemos discutido misioneros enfocados en la salud y la educación
en otro capítulo- fueron las anglicanas. El entraron en crisis en la medida que los estados
propósito inicial de tales misiones era tanto la islámicos comenzaron a ocuparse cada vez más
conversión de los musulmanes como la intro- de estas cuestiones.
ducción de nuevas comentes de pensamiento y Además de en Egipto, las misiones presbite-
de actividad en las antiguas iglesias orientales, rianas han sido fuertes en Siria y el Líbano, así
para que estas a su vez se sintieran llamadas a como en Pakistán. La iglesia que surgió de la
una labor misionera. El primer aspecto de esta obra presbiteriana en Siria y Líbano recibe el
obra era en extremo arduo; y el segundo, a pe- nombre de Sínodo Nacional Evangélico de la
sar de sus buenas intenciones, tendía a crear Provincia de Siria y el Líbano. Además, los
dentro de las iglesias orientales tensiones que presbiterianos tienen obra en Irak y Sudán,
no podían sino culminar en cismas. Para llevar aunque esta ha tenido resultados menos am-
a cabo esta obra se estableció un centro en la is- plios que las anteriores.
la de Malta, donde se producía literatura que Las demás denominaciones protestantes
era enviada a los países musulmanes. En el año tienen en el mundo musulmán trabajo menos
1840, y dando con ello prueba palpable de que extenso que el anglicanismo y el presbiteria-
se había llegado a la conclusión de que era ne- nismo.
212
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
Como en otros tantos campos misioneros, nicación, pero aún existen profundos conflictos
aparecieron en el mundo musulmán diversos entre algunos grupos evangélicos y las iglesias
grupos que no se relacionan directamente con antiguas.
una iglesia determinada. Uno de estos es la Por otro lado, desde el 1986 hay grupos
North Africa Mission, cuyo carácter es seme- evangélicos, agrupados bajo la organización
jante al de la China Inland Mission, y que tra- Evangelicals for Middle East Understanding,
baja especialmente en Marruecos. Hay además que buscan ver y desarrollar una perspectiva y
numerosos grupos pentecostales que parecen una acción más justas en lo que se refiere a las
florecer, aunque es difícil determinar si su in- relaciones de las iglesias en el Medio Oriente
cremento se debe a la conversión de musulma- con los grupos evangélicos del Occidente, par-
nes al cristianismo o a la atracción que tales ticularmente de los Estados Unidos. La organi-
grupos ejercen sobre personas ya cristianas. zación internacional «Visión Mundial» tam-
Otra fuente importante de obra misionera bién ha desarrollado un trabajo misionero entre
entre los musulmanes son las sociedades bíbli- los pobres de esta región que refleja una teolo-
cas, especialmente la británica, aunque hasta gía y práctica misionera más intercultural e in-
mediados del siglo XX su labor pasó a manos terreligiosa. También ha publicado trabajos que
de las sociedades bíblicas americanas y poste- comienzan a informar a los cristianos de Occi-
riormente a manos de las sociedades bíblicas dente sobre las dificultades ideológicas y polí-
internacionales. ticas del área y la respuesta cristiana en busca
Hubo a mediados del siglo XX una potente de la paz. Según Charles A. Kimball, en su li-
estación de radio en Etiopía cuyo propósito fue bro Angle of Vision, las iglesias en el Medio
trasmitir programas cristianos hacia el mundo Oriente sugieren y reclaman de los grupos
musulmán sin encontrarse sujeta a las vicisitu- evangélicos ....
des y restricciones de la política y los gobier- .que los cristianos en el Medio
nos de los países musulmanes. También es in- Oriente necesitan y aprecian la
teresante notar que cuando en España no se asistencia material provista por
permitían programas de radio protestantes Ma- cristianos de Norteamérica. Esto
rruecos fue utilizado como base desde la cual es crucial para la continuidad de
transmitir hacia España. ministerios en medio de los con-
Desde las últimas décadas del siglo XX has- flictos políticos y religiosos. Sin
ta el presente, y en parte como resultado de la embargo, el problema primario
guerra entre los Estados Unidos e Irak, la pre- que enfrentan tiene lugar en el
sencia de misiones de fe evangélicas y pente- campo de la política. La preocu-
costales en el Medio Oriente ha creado una si- pación más importante es la paz y
tuación muy difícil y compleja. Por un lado, la estabilidad en estas sociedades.
muchas agencias misioneras evangélicas llegan Si la paz con justicia se puede al-
a la región con una expectativa escatológica canzar, muchos de los otros pro-
donde el conflicto entre palestinos e israelíes blemas de la sociedad serán me-
marca la trayectoria histórica de la segunda ve- nos severos. Más que cualquier co-
nida de Cristo. Por ello, muchas de estas agen- sa, los cristianos en el Medio
cias han apoyado la política exterior de los Es- Oriente deseamos que los nortea-
tados Unidos. Además, muchos de estos gru- mericanos estén bien informados
pos no toman en consideración, o critican fe- sobre la región y motiven a sus go-
rozmente, a las iglesias antiguas de la región. biernos a trabajar sin vacilar por
Recientemente ha habido un proceso de comu- una paz justa y duradera.
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L- am
r
Las misiones en el mundo musulmán
214
capítulo
Barría Gi-anada
Tel. 745 94 0
Armcna Qjndío
ial
215
L
Las misiones en Africa Ecuatorial y Meridional
216
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
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Las misiones en Africa Ecuatorial y Meridional
cas misioneras que surgieron de estas condi- país durante toda la primera mitad del siglo
ciones comenzaron a dar forma a lo que hoy XIX y cuya culminación fue la emancipación
se conoce como la triple fórmula del «auto- de los esclavos y una sangrienta guerra civil.
crecimiento, autosostén, autogobierno» (self- En el año 1822, antes de que se aboliera la es-
growing, self-sustaining, self-governing). clavitud y al igual que en Sierra Leona, bajo
Con esta nueva política, la Sociedad clara- el apoyo de la American Colonization So-
mente afirmó que para que esta misión tuvie- ciety, llegó a Liberia el primer contingente
ra éxito, era necesario que estuviera en las de esclavos libertos, enviado allí por un gru-
manos de los africanos tan pronto como fue- po de personas inspiradas por su fe cristiana.
se posible, y que desde el principio los africa- Más tarde vinieron otros, hasta llegar a for-
nos fueran protagonistas en el trabajo misio- mar un fuerte núcleo de población. Tras vein-
nero. ticinco años de dependencia de Norteaméri-
Uno de los primeros africanos en partici- ca, esta última concedió la independencia a
par de una formación misionera fue Samuel Liberia en el año 1847. Puesto que muchos de
Crowther, quien fue ordenado en 1843 en In- los antiguos esclavos norteamericanos que se
glaterra. Luego siguieron Tomás Maxwell y establecieron en Liberia eran bautistas, era
Jorge Nicol, hijos de africanos liberados, de esperarse que buena parte de la población
quienes progresivamente lucharían por alcan- de la nueva nación perteneciera al mismo
zar un nivel de igualdad frente a los misione- grupo religioso. Además, las diversas socie-
ros europeos. dades misioneras bautistas de los Estados
El origen de Liberia fue semejante, aunque Unidos se ocuparon desde muy temprano de
posterior, al de Sierra Leona. Liberia fue uno enviar misioneros, tanto blancos como ne-
de los resultados de la fuerte campaña anties- gros, a Liberia. También los diversos grupos
clavista en los Estados Unidos que sacudió al metodistas, así como la Iglesia Episcopal, lo-
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HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
graron gran número de adherentes entre los desarrolló por los propios líderes nativos afri-
colonos negros de Liberia. Así se formó una canos.
comunidad cristiana de esclavos libertos, la Por otra parte, al llegar a la región los es-
gran mayoría de ellos apoyados por la Iglesia clavos libertos, ya había allí habitantes que se
Metodista Episcopal Africana en los Estados replegaron hacia el interior del continente.
Unidos, que se establecieron en las costas de Desde muy temprano se realizaron esfuerzos
Liberia, Sierra Leona y otras regiones de Afri- por alcanzar a esas personas. Tanto las socie-
ca Occidental, y de caribeños que se unieron dades misioneras británicas y norteamerica-
al trabajo misionero y fueron enviados por so- nas como los cristianos africanos de la región
ciedades misioneras europeas y norteameri- tales como William Wade Harris, Garrick
canas. Braide y otros se dedicaron a esta labor mi-
Es interesante notar que el experimento de sionera.
Liberia sirvió para despertar un vivo interés Los esfuerzos misioneros en Africa ecua-
misionero en los Estados Unidos. Prueba de torial no tuvieron mayor éxito hasta luego de
ello es el hecho de que los primeros misione- la década del 1950. Por ejemplo, en Buganda
ros, tanto de la Iglesia Metodista Episcopal y Madagascar (país que será discutido más
como de la agencia presbiteriana Western Fo- abajo), para el año 1900 los cristianos eran
reign Missionary Society, fueron a Liberia. una minoría significativa. En el 1938, los
Por otro lado, en las palabras de un obispo in- cristianos representaban el 8% de la pobla-
glés refiriéndose al trabajo misionero de los ción en Kenya, el 10% en Tanganykia y el
europeos en Africa, «como evangelistas fui- 25% en Uganda. En contraste, en el siglo
mos un fracaso. No conozco a un misionero XXI, el 60% de la población en Uganda y
europeo con éxito en tal labor.» Era evidente Kenya son cristianos y una tercera parte de la
que el trabajo misionero de éxito nació y se población de Tanzania es cristiana.
En Africa, el cristianismo toma una nueva vitalidad arraigada al contexto del pueblo.
219
Las misiones en Africa Ecuatorial y Meridional
Ghana es otro país que recibió un número nero estadounidense James McKeown. Estas
significativo de misioneros procedentes de iglesias hoy ocupan un lugar prominente en el
Europa y de los Estados Unidos. Las misio- mapa del cristianismo en Ghana.
nes moravas enviaron a un mulato, Jocabus No todos los misioneros y evangelistas es-
Elisa Capitein. Este fue el primer ministro taban asociados a las sociedades misioneras.
ordenado africano de esa tradición desde Por ejemplo, Anna Peters, quien trabajó co-
tiempos de la Reforma. La Sociedad Misio- mo mercader en Ondo desde el 1880 hasta su
nera Evangélica de Basilea, de la que partici- muerte en 1892, dirigió un grupo de mujeres
paban reformados suizos y luteranos alema- en campañas de predicación en la comarca.
nes y daneses, envió misioneros cuyo trabajo Bribrina, una mujer afroeuropea que había
resultó en la Iglesia Presbiteriana de la Cos- sido expulsada de su pueblo por dar a luz ge-
ta de Oro y en la Iglesia Evangélica Presbite- melos, luego se casó con un comerciante iso-
riana. Esta última se dividió para formar la ko, y fue la pionera en el trabajo misionero
Iglesia Evangélica Presbiteriana de Ghana y entre esa población.
La Iglesia Presbiteriana Evangélica, Ghana. El resultado fue que en el siglo XX Libe-
Más entrado en el siglo XX encontramos tra- ria era uno de los países del Africa en que ha-
bajo misionero por las tradiciones pentecos- bía mayor proporción de cristianos, y del cual
tales tales como la Iglesia Apostólica de la Fe partieron misioneros -tanto europeos como
-de tradición pentecostal y británica- y la africanos- hacia otros países del Africa. Al-
Iglesia del Pentecostés, iniciada por el misio- gunos de los misioneros africanos que exten-
dieron la fe protestante a los países del Afri-
ca ecuatorial fueron Simon Kimbangu (quien
luego se convirtiera en el fundador del movi-
miento Kimbanguista, de donde surge la Igle-
En Africa se hizo común la práctica del
sia de Jesucristo en la tierra a través del Pro-
ministerio cristiano por parte de parejas.
feta Kimbangu, con sede en Zaire), Lewis
Bandawe, David Kaunda y Harry Matecheta
en Malawi, Apolo Kivebulaya y Victor Mu-
kasa en Uganda. Más recientemente, misio-
neros africanos realizan trabajo misionero en-
tre los inmigrantes en Europa, los Estados
Unidos, Canadá y el Caribe. La expansión
del protestantismo africano ha crecido signi-
ficativamente aun fuera del continente.
En el siglo XX, cobró fuerza un nuevo fe-
nómeno misionero que señala hasta qué pun-
to el trabajo misionero en Africa es de los
africanos. Llamándolos «profetas» más bien
que «misioneros», las iglesias indígenas afri-
canas, cuyo origen se remonta a principios
del siglo XX en Africa del Sur, tienen contin-
gentes de misioneros en toda la región. Aun-
que el surgimiento de estas iglesias se discu-
tirá más adelante, es importante señalar que
tanto ellas como las iglesias surgidas del tra-
220
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
bajo realizado por los pentecostales desde diversos grupos produjo tensiones que en
principios del siglo XX marcan un crecimien- ocasiones dieron en el conflicto armado.
to enorme en el cristianismo del continente y Además, como sucedía en Australia, los colo-
en el mundo entero. Además, como resultado nos blancos veían a los aborígenes del conti-
del trabajo de misión, muchos de los grupos nente como obstáculos a sus intereses eco-
pentecostales y espiritualistas en esta región nómicos, y a menudo no parecían tener otro
trabajan unidos bajo distintas organizaciones interés hacia ellos que el de exterminarlos.
nacionales, como por ejemplo, el Concilio Al igual que en la colonización de América
Pentecostal de Ghana y la Asociación de por parte de España, la iglesia y las distintas
Iglesias Espirituales en Ghana. organizaciones cristianas hicieron mucho por
En relación a los pentecostales, dos ejem- aliviar la situación de los habitantes origina-
plos merecen nuestra atención: el trabajo mi- les del país. Sin embargo, en el siglo XX los
sionero de la Iglesia Redimida Cristiana de habitantes blancos de la Unión de Africa del
Dios y la Iglesia de la Vida Profunda. Aunque Sur eran conocidos en todo el mundo por su
el pentecostalismo en Africa se remonta a política inhumana ante la presencia de sus
principios del siglo XX, no es sino hasta me- hermanos negros, y varias organizaciones
diados de ese siglo, y con expresiones mucho eclesiásticas apoyaban esa política -mien-
más autóctonas, que el pentecostalismo cobra tras otras no se oponían a ella.
un auge espectacular en Africa Occidental. Al principio, los colonos blancos del sur
Es imposible mencionar los cientos de cris- de Africa se limitaron a conservar su antigua
tianos africanos que se han destacado en el fe. El resultado de esto fue el establecimien-
trabajo misionero, mas no hay la menor duda to en esa región de la Iglesia Anglicana y de
de que el crecimiento del cristianismo en la Iglesia Reformada Holandesa. Aunque la
Africa se debe al trabajo misionero de feli- mayoría de sus miembros no se preocupaba
greses de esas iglesias. Todavía más, estas por su responsabilidad misionera, pronto apa-
iglesias no sólo hacen trabajo misionero en su recieron en estas iglesias quienes tomaron en
continente, sino que, como se verá en otro serio tal responsabilidad y emprendieron el
capitulo, realizan trabajo misionero en el nue- trabajo de la predicación a los habitantes de
vo «continente oscuro» de Europa, sirviendo raza negra. En esta obra participaron también
a las comunidades de inmigrantes africanos y misioneros de otras iglesias, procedentes so-
de afroeuropeos. bre todo de la Gran Bretaña y de los Estados
Unidos.
2. La colonización europea y las misiones Muchas iglesias en Africa del Sur llevan la
en el Africa del Sur palabra «Sión» en su nombre. Esta tradición
Aunque sus motivos propulsores no fueron nace de la Iglesia Católica Apostólica Cristia-
esencialmente religiosos, debemos señalar na con sede en «Zion City», cerca de Chica-
aquí la presencia de un fuerte contingente de go y fundada por Juan Alexander a finales
inmigrantes europeos protestantes en el sur del siglo XIX. Un misionero holandés de
del continente africano. Durante el siglo nombre Petrus Louis Le Roux trajo esa tradi-
XVIII la mayor parte de estos inmigrantes ción a Sudáfrica. Hoy estas iglesias «sionis-
procedía de Holanda, pero cuando en el año tas» representan el nacimiento del enorme
1795 el territorio pasó a manos británicas, contingente de iglesias indígenas africanas,
comenzaron a llegar inmigrantes ingleses y cuya expansión alcanza toda Africa al sur del
escoceses. Había además cierto número de Sahara. En muchos círculos académicos estas
hugonotes franceses. La presencia de estos iglesias son consideradas las primeras expre-
221
1 iU
Las misiones en Africa Ecuatorial y Meridional
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HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
nero entre los africanos. Tal trabajo tiene co- voción y amor sincero hacia los africanos.
mo característica el hacer evangelización en- Roberto Moffat fue el instrumento que Dios
tre quienes ya son cristianos, más que hacer utilizó para llamar a David Livingstone al tra-
trabajo misionero entre personas de otras re- bajo misionero en Africa. Más tarde este con-
ligiones o no seculares. trajo matrimonio con una hija de Moffat.
David Livingstone fue sin lugar a dudas el
3. Un ejemplo de las misiones, más notable misionero en el Africa. Nació en
la colonización y el legado misionero un humilde hogar de Escocia en el año 1813.
en el sur de Africa: Los escasos recursos económicos de su fa-
El caso de David Livingstone milia no le permitieron gozar durante su ni-
Los colonos holandeses en el Africa del ñez de una educación formal, y tuvo que co-
Sur no se ocuparon de la propagación de su fe menzar a trabajar en un telar a los diez años
más allá de las fronteras de sus propias colo- de edad. Su interés en la lectura era tal que, al
nias. Muchos de ellos se ocuparon de la evan- tiempo que trabajaba, colocaba un libro fren-
gelización de sus propios esclavos, pero fue- te a sí. Por las noches, tras una larga jornada
ron pocos los que intentaron cristianizar a los de trabajo, asistía a la escuela durante dos
africanos que aún conservaban su libertad. horas. De este modo logró una educación
Lentamente, y en parte debido al ejemplo de fundamental que le permitió emprender estu-
otros cristianos, las iglesias holandesas de dios médicos y teológicos cuando se sintió
Sudáfrica comenzaron a interesarse en la llamado al trabajo misionero. Al principio su
obra misionera, y llegaron a establecer traba- propósito era partir hacia la China, pero cier-
jo en Rodesia (hoy Zambia y Zimbabwe), tas dificultades en la realización de ese pro-
Niasalandia y Nigeria. yecto, y la influencia de Roberto Moffat du-
Sin embargo, Johannes Theodorus van der rante una de las visitas de este a la Gran Bre-
Kemp, el más notable de los misioneros ho- taña, le llamaron al Africa.
landeses, no trabajó bajo los auspicios de la David Livingstone llegó a la Ciudad del
Iglesia Reformada Holandesa, sino de la Lon- Cabo a principios del año 1841, y pasó los
don Missionary Society. Van der Kemp fue el primeros años de su trabajo misionero bajo la
primer misionero de esa sociedad en el Afri- dirección de Roberto Moffat, quien había es-
ca, y debido a su ejemplo la London Missio- tablecido un centro misionero en Kurumán.
nary Society pudo contar con un crecido nú- Sus primeros años en Africa fueron los más
mero de misioneros distinguidos, entre ellos sedentarios de toda su vida en ese continen-
David Livingstone. Van der Kemp sentía un te. Tras trabajar algún tiempo con Moffat,
gran aprecio por la vida y las costumbres de contrajo matrimonio con María Moffat, hija
los africanos, hasta el punto de pensar que de su mentor, de la que tuvo cuatro hijos. In-
las mismas tenían grandes ventajas sobre las cluso durante ese período mostró su interés
que seguían los europeos. Su ejemplo fue en ir siempre allende las fronteras del mundo
imitado por varios misioneros que, al igual conocido. Realizó varios viajes de cientos de
que él, adoptaron en su casi totalidad las cos- kilómetros a partir de Kurumán, casi siempre
tumbres africanas y contrajeron matrimonio sobre el lomo de un buey, pero a menudo su
con mujeres oriundas del continente. Otros energía era tal que los bueyes se cansaban y
misioneros destacados de la London Missio- tenía que continuar su camino a pie. En estos
nary Society fueron John Philip y Roberto viajes Livingstone llevaba el impulso de una
Moffat. Ambos se hicieron conocer por su profunda curiosidad hacia lo desconocido,
oposición al tráfico de esclavos y por su de- pero también y sobre todo el deseo de predi-
223
i.
car el Evangelio a los cientos de tribus que en una leyenda que se extendía aun a lugares
aún no lo habían escuchado. Una de las cosas que él nunca visitó.
que más le desalentaban era la tendencia de Cuando Livingstone regresó por primera
muchos misioneros a permanecer cerca de los vez a la Gran Bretaña tras dieciséis años de
centros de civilización, sin tratar de penetrar ausencia, las noticias de sus viajes le habían
el Africa con el mensaje cristiano. precedido, y se le trató como a un héroe na-
Tras pasar unos once años con su suegro cional. Sus narraciones acerca de las maravi-
Moffat, Livingstone decidió emprender viajes llas y oportunidades del Africa y su reto a la
más ambiciosos. Ya había atravesado repeti- conciencia cristiana hicieron que pronto se
damente el desierto de Kalajari, y descubier- ofrecieran numerosos jóvenes para continuar
to el lago Ngami -que más tarde se secaría el trabajo misionero.
y daría lugar a amplias llanuras aptas para el Debido a la influencia de Livingstone du-
pastoreo. En uno de sus viajes a través del rante este viaje se organizaron también varios
Kalajari, Livingstone perdió uno de sus hijos, grupos de interés misionero, especialmente
y en otro toda su familia estuvo en grave pe- el de las Misiones Universitarias, que surgió
ligro. Esto le hizo tomar la decisión de en- de un discurso suyo en la Universidad de
viarles a la Gran Bretaña antes de emprender Cambridge y que más tarde tendría gran im-
su gran viaje a través del Africa. Comenzó portancia en la proclamación del mensaje
entonces sobre el lomo de su buey Simbad, y cristiano en el Africa.
a menudo en canoas por los grandes ríos afri- Por otra parte, las vívidas descripciones de
canos, un viaje que le llevó a través de todo el Livingstone acerca del tráfico de esclavos y los
continente. En este viaje descubrió las catara- sufrimientos que acarreaba en el interior del
tas que llamó «de Victoria» en honor de la continente contribuyeron a avivar la llama del
reina de Inglaterra. Repetidamente -un total movimiento antiesclavista, aunque por lo pron-
de 27 veces- fue atacado por fiebres capaces to sus resultados no fueron visibles.
de matar a un hombre de menos resistencia Al regresar al Africa, Livingstone lo hizo
que la suya. En cada aldea donde llegaba es- bajo los auspicios del gobierno británico, y
tablecía magníficas relaciones con las habi- no de la London Missionary Society. Se trata-
tantes del país, en parte debido a su conoci- ba de dirigir una expedición que debía nave-
miento médico, pero sobre todo por razón de gar por el río Zambeze con el propósito de
su carácter dulce, afable y respetuoso. A tra- abrir rutas comerciales hacia el interior del
vés de Africa, Livingstone fue dejando una continente. Livingstone estaba convencido de
estela de admiradores. Un ejemplo notable que la mejor manera de detener el tráfico de
del carácter de Livingstone y de su respeto esclavos era establecer un tipo de comercio
hacia los africanos fue el hecho de que, cuan- que, al mismo tiempo que más humano, fue-
do llegó por fin a la costa y se encontró allí un se también más lucrativo. Por otra parte, Li-
barco dispuesto a llevarle a la Gran Bretaña, vingstone no compartía totalmente el senti-
se negó a embarcar en él porque había prome- miento de van der Kemp según el cual la vi-
tido al jefe de los africanos que le acompaña- da primitiva de los africanos era superior a la
ban que les llevaría de regreso a sus hogares. de los europeos. Había visto demasiado sufri-
A pesar de las dificultades del viaje, Livings- miento que podría ser aliviado con sus pro-
tone resistió la tentación que se le ofrecía y pios conocimientos médicos para dejarse lle-
regresó con sus cargadores. Gestos como es- var por tal romanticismo. Creía por tanto en
te crearon entre los africanos un sentimiento la necesidad de llevar al Africa los adelantos
de confianza hacia él que llegó a convertirse técnicos y médicos del mundo occidental, pe-
224
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
225
Las misiones en Africa Ecuatorial y Meridional
226
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
dente, del oriente y del norte. Esto marca un su vida Comboni se dedicó a este trabajo,
contraste claro con las misiones protestantes, aunque sus resultados no fueron tantos como
que partieron principalmente desde el sur, los que él esperaba, ya que nunca recibió ayu-
aunque hubo también fuertes núcleos protes- da de Roma.
tantes en Liberia y Sierra Leona. En el occi- Fue cuando llegaron a Roma y a otras ca-
dente, la Iglesia Católica estableció en el año pitales católicas del continente europeo las
1842 el Vicariato Apostólico de las Dos Gui- noticias de las expediciones de Livingstone y
neas, que trabajó principalmente en el Ga- de la obra de otros protestantes, que los cató-
bón, Angola y el Congo. De estas primeras licos comenzaron a preocuparse activa y se-
misiones la que más penetró hacia el interior riamente por el trabajo misionero en el Afri-
del continente fue la de Landana, en el Con- ca. Aun entonces, la Sacra Congregatio de
go, y aun esta no muy profundamente. Propaganda Fide trabajaba independiente-
En el oriente, la Iglesia Católica estableció mente del rey Leopoldo II de Bélgica, quien
en el año 1860 la Prefectura Apostólica de tenía verdadero interés en el desarrollo de las
Zanzíbar, cuyo propósito era usar esa isla co- misiones católicas en el centro de Africa, pe-
mo punto de partida para la penetración del ro carecía de la confianza de la Propaganda.
continente africano. Inspirado por los descubrimientos de Li-
El proyecto de evangelización del Africa vingstone Stanley y otros, Leopoldo II convo-
central a través de misiones que debían re- có en el año 1876 una Conferencia Internacio-
montar el Nilo se halla íntimamente ligado nal de Geografía, que se reunió en Bruselas. El
con el nombre y la vida del Padre Daniel resultado de esta conferencia fue la organiza-
Comboni. Este sentía una profunda pasión ción de una Asociación Internacional Africa-
por la evangelización del Africa central. na, cuyo propósito era la penetración del con-
Puesto que varios intentos anteriores habían tinente, llevando a él las supuestas ventajas de
fracasado debido a que muchos misioneros la civilización occidental. Aunque la Asocia-
morían víctimas de las fiebres y de las incle- ción creía que la predicación del Evangelio
mencias del clima, se había optado por llevar era una de las bases necesarias para su tarea,
africanos a Europa y allí prepararlos. Este afirmó su carácter laico, y declaró que el traba-
plan fracasó también, pues los africanos jo misionero quedaba propiamente en manos
adaptados a la vida en Europa tuvieron difi- de las iglesias, y que la Asociación misma no
cultades en volver a adaptarse a su tierra. Por debía ocuparse de él. Con gran realismo, y
esta razón Comboni concibió el plan de esta- dándose cuenta de que la mayor parte del tra-
blecer varios centros alrededor del continen- bajo de exploración africana estaba siendo lle-
te, en sitios en que las condiciones no fuesen vada a cabo por protestantes, el rey Leopoldo,
demasiado inhóspitas para los europeos, pero aunque personalmente favorecía el trabajo mi-
que tampoco arrancasen a los africanos del sionero de los católicos, accedió a la creación
contacto con los suyos. En tales centros de- de esta asociación de carácter laico, y aceptó
bían prepararse africanos que luego trabaja- su presidencia. La Sacra Congregatio de Pro-
rían entre sus hermanos de raza. Aunque paganda Fide, en lugar de cooperar con los
Comboni recibió el apoyo moral de Roma y propósitos de la Asociación Internacional
de la Sacra Con gregatio de Propaganda Fide, Africana, se mostró suspicaz de ella, especial-
no logró el apoyo material necesario para la mente después que el obispo Lavigerie -a
fundación de los diversos centros que pro- quien ya hemos visto en el capítulo anterior
yectaba, y debió contentarse con solo uno, como el fundador de los Padres Blancos-
bajo su dirección personal. A través de toda presentó un informe en el cual declaraba que
227
11
la Asociación no era sino un frente mediante el establecerse en lo que antes había sido, al
cual los protestantes trataban de lograr el apo- menos nominalmente, territorio bajo la juris-
yo de católicos confiados -entre ellos el Rey dicción del vicariato de Comboni, éste califi-
de Bélgica. có esa decisión como «un fuerte dolor de
Durante todo el siglo XIX las misiones ca- muelas», que no desapareció hasta su muerte.
tólicas en el Congo se caracterizaban por el También los Padres del Santo Espíritu tuvie-
modo en que la presencia de misioneros protes- ron varios conflictos de jurisdicción con los
tantes, o el temor a esa presencia, las aguijo- Padres Blancos.
neaba. Lavigerie se mostraba suspicaz hacia la Todo esto se complicó porque las diversas
Asociación Internacional Africana porque esta- potencias de Europa trataban de establecerse
ba dispuesta a permitir la entrada de misione- en el Africa y temían que la presencia de mi-
ros protestantes en el Africa. Sus Padres Blan- sioneros procedentes de potencias rivales sir-
cos fueron una de las principales fuerzas misio- vieran de avanzada a sus intereses políticos.
neras católicas en el Africa, pero en más de Portugal reclamaba aún los antiguos derechos
una ocasión parecían estar más interesados en del padroado que le habían sido concedidos a
competir con los misioneros protestantes que raíz de sus descubrimientos y conquistas, pe-
en la evangelización de las muchas tribus ani- ro que en el siglo XIX, debido a la decaden-
mistas del continente. Algo semejante puede cia del poderío portugués, eran un impedi-
decirse acerca de los Padres del Espíritu Santo, mento más bien que una ayuda a las misiones
que fueron otra de las principales ordenes que católicas. Francia y Bélgica se disputaban el
trabajaron activamente en las misiones africa- dominio del valle del Congo (hoy Zaire). El
nas. Aunque estos misioneros se habían esta- propio Portugal, a pesar de su debilidad p011-
blecido en Landana antes de la penetración de tica, militar y económica, hacia demandas te-
la región por parte de los protestantes, cuando rritoriales. Inglaterra estuvo dispuesta a ceder
en el año 1877 Stanley abrió el camino hacia el sus pretensiones coloniales en el Africa ecua-
interior del Africa a través del río Congo, la torial a favor de Portugal, siempre que este se
principal motivación misionera de esta orden comprometiese a prohibir el tráfico de escla-
parece haber sido la de detener la virulenta vos -actitud en la que podía verse la influen-
doctrina de los protestantes, considerada una cia de la obra de Livingstone. Por fin, en el
infección para las misiones en esta región. An- año 1884 se reunieron en Berlín los repre-
tes de que estos misioneros católicos siguieran sentantes de las distintas potencias que se dis-
la ruta de Stanley, se habían establecido en ella putaban los territorios africanos. Allí quedó
los bautistas británicos y la Livingstone Inland básicamente resuelto el problema político, y
Mission (una organización que había surgido al rey Leopoldo II de Bélgica se le concedió
debido a la inspiración de Livingstone y de la la autoridad sobre el «Estado Independiente
China Inland Mission). Cuando los católicos del Congo». Leopoldo II insistió en la nece-
siguieron en sus pasos, buena parte de su traba- sidad de que se enviasen a sus territorios mi-
jo fue de competencia más bien que de simple sioneros belgas, pues temía -al parecer con
evangelización. razón- que los misioneros franceses servi-
Durante la segunda mitad del siglo XIX rían de avanzada a los intereses de Francia.
las misiones católicas en el Africa se vieron Puesto que la iglesia católica belga estaba
obstaculizadas y debilitadas por repetidos profundamente involucrada en misiones en
conflictos de jurisdicción. Cuando la Sacra Mongolia y en otras regiones del Oriente, du-
Con gregatio de Propaganda Fide decidió rante años fue imposible lograr un número
conceder a los Padres Blancos el derecho a suficiente de misioneros belgas para trabajar
228
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
229
Las misiones en Africa Ecuatorial y Meridional
más habitantes a su dominio político. Más tar- ron que se propagara. Pero más tarde, apoya-
de los ingleses, llevados por su celo antiescla- do por el poderío francés, logró crecer más
vista, consintieron en firmar con el rey de Ma- que el protestantismo. Tras largas tensiones
dagascar un tratado según el cual este se com- con la Gran Bretaña, Francia logró que aque-
prometía a prohibir el tráfico de esclavos a lla reconociera su protectorado sobre Mada-
cambio de ciertas cantidades anuales en armas gascar. Cinco años después, en 1897, los
y otros productos occidentales. franceses derrocaron a la casa reinante de
Anteriormente los franceses habían intentado Madagascar e hicieron de la isla una colonia
establecerse en la isla, pero el primer misionero francesa. Como era de esperarse, esto tendió
cristiano llegó a Tananarive -la capital- en el a dar más fuerza a las misiones católicas y a
año 1820. Su nombre era David Jones, y fue en- dificultar el trabajo protestante. Puesto que
viado por la London Missionary Society, a la los católicos acusaban a los protestantes de
que nos hemos referido repetidamente. Jones y oponerse al régimen francés, estos optaron
quienes le siguieron lograron fundar una iglesia por pasar buena parte de su obra a la Société
que mostró ser lo suficientemente fuerte como des Missions Evangéliques de Paris, que por
para poder resistir los embates de veinticinco su carácter francés no podía ser acusada de
años de persecuciones, durante los cuales una favorecer los intereses británicos. Aunque al
reina opuesta al cristianismo infligió a los adhe- principio los misioneros católicos apoyaron
rentes de la fe extranjera graves castigos, inclu- las acciones de Francia en Madagascar, a la
sive la muerte y el ser vendidos como esclavos. larga sus propias misiones sufrieron, pues el
Cuando un cambio en la situación política gobierno francés, reflejando el creciente an-
de la isla facilitó las condiciones del trabajo ticlericalismo de Francia, comenzó a dificul-
misionero, la London Missionary Society envió tar la obra de todos los misioneros. Además,
nuevos representantes, especialmente después cuando se fue plasmando un sentimiento na-
que la reina Ranavalona II y su esposo fueron cionalista en Madagascar frente al dominio
bautizados. A partir de entonces, el trabajo pro- colonial, buena parte de ese sentimiento fue
testante en Madagascar continuó un progreso dirigido contra las misiones, especialmente
ininterrumpido. las católicas. En la rebelión que tuvo lugar a
A instancias de la London Missionary So- fines del siglo XIX se manifestó la ira del
ciety, que veía en las oportunidades que Mada- pueblo contra el trabajo cristiano y contra to-
gascar ofrecía un reto mucho mayor que el que da influencia extranjera.
ella podía aceptar, penetraron en la isla otras Durante el siglo XX tanto el protestantis-
agencias misioneras, entre ellas la organiza- mo como el catolicismo continuaron crecien-
ción anglicana conocida como la Church Mis- do, aunque a mediados de siglo la mayoría de
sionary Society, la Society for the Propagation los habitantes de la isla no había aceptado el
of the Gospel in Foreign Parts, los cuáqueros y cristianismo. La Iglesia Católica contaba
un fuerte contingente de luteranos procedentes aproximadamente con dos veces el numero
de Noruega. Todas estas organizaciones traba- de adherentes que el protestantismo. Al igual
jaron en estrecha cooperación y establecieron que en otros campos misioneros, las iglesias
escuelas, dispensarios y otros centros de servi- protestantes habían sentido en Madagascar la
cio social. necesidad de trabajar juntas. En el año 1934
El catolicismo romano penetró en Mada- casi todos los cuerpos protestantes adoptaron
gascar durante el período de persecuciones el nombre conjunto de «Iglesia Protestante
que ya hemos señalado. Durante los primeros Unida de Madagascar», aunque sin llegar a
años las adversas condiciones políticas evita- una unión total. Había además conversacio-
230
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
nes de unión orgánica entre diversas ramas En la antigua cultura africana existían prác-
del protestantismo. ticas que los cristianos han considerado tradi-
Por último, la Iglesia Ortodoxa ha comenza- cionalmente como incompatibles con su fe.
do una misión en esa nación. En 1997, con la Dos de estas prácticas son el culto a los antepa-
aprobación del Patriarca de Alejandría, un obis- sados y la poligamia. Los primeros misioneros
po fue nombrado en Madagascar. Actualmente, cristianos y la casi la totalidad de sus sucesores
la labor misionera ha resultado en doce parro- insistían en la necesidad de abandonar tales
quias, siete escuelas y doce sacerdotes nativos. costumbres antes de abrazar el cristianismo.
El gobierno ha reconocido a la Iglesia Ortodo- Livingstone se negaba a ofrecer la comunión a
xa como una iglesia legítima en la nación. quienes practicasen la poligamia. Pero el pro-
blema es harto complejo, pues la abolición de
E. Consideraciones generales la poligamia implicaría que muchas mujeres y
En el año 1850 Africa era un continente des- niños quedarían desamparados al ser repudia-
conocido, carente todo contacto con el mundo dos por sus esposos y padres. Lo mismo suce-
exterior, así como de las ventajas y desventajas de con el culto a los antepasados, que se halla
de la tecnología moderna. Cien años más tarde, estrechamente ligado con el sentimiento de le-
el continente africano se incorporaba al mundo altad social a la tradición, y es al mismo tiem-
de las naciones, y surgían en él numerosos pa- po una práctica religiosa y una costumbre so-
íses independientes. Esto iba unido a un pro- cial y política. Hay en el Africa varios grupos
fundo sentimiento nacionalista que se rebelaba cristianos que permiten la poligamia y que se
con razón contra los abusos y el paternalismo rebelan contra el intento por parte de las igle-
de los blancos occidentales, pero que a menu- sias históricas y de los misioneros extranjeros
do tendía a olvidar el espíritu de sacrificio con- de imponer en el Africa lo que ellos dicen ser
que muchos blancos, especialmente misione- meras costumbres europeas.
ros, llevaron al Africa lo que creían ser las ven- Todo esto presta auge al islam, que permite
tajas de su civilización y de su fe. Hoy el cris- la poligamia y que al mismo tiempo, debido en
tianismo en Africa celebra el resultado del tra- parte a su larga tradición, parece adaptarse me-
bajo misionero, aunque en su desarrollo inter- jor a las condiciones sociales y al nacionalismo
no aún continúa la lucha con el legado del co- africano. El islam lleva el apoyo decidido del
lonialismo. Hay en el Africa numerosas igle- gobierno del Egipto, que trata de extender su
sias que surgieron de la obra misionera, y que influencia hacia el sur. Entrado el siglo XXI el
pasan actualmente por la difícil prueba de par- islam es un factor clave para las iglesias cristia-
ticipar en el despertar de sus naciones sin por nas en el continente.
ello abandonar «el depósito de la fe». Por otro Junto a los retos culturales y religiosos que
lado, hay numerosas iglesias y movimientos el cristianismo enfrenta en Africa, resalta de
cristianos que, nacidos de suelo africano, lu- forma sorprendente el problema del SIDA.
chan por ser fieles al Evangelio en medio de un Anualmente mueren millones de personas a
complejo y tenebroso futuro. causa esa enfermedad. El contagio, debido a
Además del nacionalismo, las luchas y con- falta de educación, a viejos mitos y al subdesa-
flictos étnicos y religiosos y el efecto de la glo- rrollo que vive el continente, es alarmante. Por
balización, las iglesias cristianas en el Africa se otra parte, como veremos más adelante, el cre-
enfrentan a dos problemas estrechamente rela- cimiento y la vitalidad del cristianismo en Afri-
cionados: el del grado en el cual el cristianismo ca son igualmente sorprendentes. Por todo ello,
puede adaptarse a la cultura africana y el de la el futuro de Africa, particularmente al sur del
expansión del islam. Sahara, sigue siendo incierto.
231
L 11 3111 J
capítulo 10
Las misiones
en América Latina
igual que en el resto del mundo, el siglo carga pesada de la administración y del co-
AlXIX se caracterizó en la América Latina mercio, pero se les excluía de los más altos ho-
por una serie de cambios profundos que ha- nores en las propias tierras en que habían na-
brían de afectar nuestra historia. En el campo cido. Los peninsulares, privilegiados con di-
de la vida civil y política, el principal de estos chos honores y con las cargas más fáciles, eran
cambios fue la independencia de las nuevas los únicos verdaderamente interesados en la
naciones americanas. En el campo propio de la permanencia del statu quo, y en la obediencia
historia de las misiones, el más notable acon- incondicional al gobierno de España -pero
tecimiento fue la introducción del cristianismo eran solo una fracción pequeñísima de la po-
protestante, que se hizo posible gracias a las blación. Por último, las ideas que llegaban de
nuevas condiciones políticas e intelectuales. Francia y las noticias procedentes de los Esta-
dos Unidos producían un estado de desasosie-
A. Las nuevas condiciones go general y de insatisfacción con la condición
Durante todo el siglo XVIII el poderío y el reinante.
prestigio españoles en América Latina habían Aparte de la rebelión de Túpac Amaru, en
ido decayendo. Excepción hecha del reinado el siglo XVIII, y de las gestiones infructuosas
de Carlos III, el trono español había estado de Francisco de Miranda en la Europa prerevo-
ocupado por una sucesión casi ininterrumpida lucionaria, los grandes movimientos en pro de
de gobernantes débiles e incapaces. La frágil la independencia de las colonias españolas en
corte de España requería cada día más ingre- América comenzaron en ocasión de las gue-
sos de colonias que, debido en buena parte a su rras napoleónicas. Al principio se trató, no de
mala administración, eran incapaces de suplir un movimiento de oposición a la corona espa-
las demandas de la Península. Los indios, ex- ñola, sino del establecimiento de gobiernos
cluidos como estaban del goce de los benefi- que no reconocían la autoridad del usurpador
cios de una sociedad en la que ellos eran la José Bonaparte. Pero a la larga, y debido en
principal fuente de riqueza, no sentían apego buena parte a la falta de habilidad de Fernan-
alguno a la dominación europea. Los mestizos do VII, el resultado fue la declaración de inde-
estaban en condiciones poco mejores. Los ne- pendencia por parte de los gobiernos así cons-
gros, en su inmensa mayoría sometidos a la es- tituidos, o por parte de rebeldes criollos y mes-
clavitud, apenas contaban en la urdimbre de la tizos frente a esos gobiernos. En quince años,
sociedad. Los criollos eran quienes llevaban la entre 1810 y 1825, España perdió la casi tota-
232
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
lidad de sus colonias en América. En estas se Moreno y San Martín -todos líderes revolu-
establecieron gobiernos más o menos estables, cionarios- estaban a favor de la continuación
y se hizo sentir en mayor o menor grado el in- de los antiguos privilegios de la Iglesia, y Bolí-
flujo de las ideas revolucionarias procedentes var fue el único de entre los principales dirigen-
de Francia. Aunque la larga tradición de unión tes de la lucha por la independencia que abogó
entre Iglesia y Estado evitó que se produjesen por la separación entre la Iglesia y el Estado. Lo
inmediatamente grandes cambios en ese senti- que sucedió fue más bien que el propio clero
do, la América Latina se dirigía hacia la sepa- católico se dividió entre criollos y peninsulares
ración entre ambas instituciones que caracteri- y que, ya que los altos cargos eclesiásticos es-
zaba a la Revolución Francesa y a la Repúbli- taban en manos de los últimos, la mayoría de
ca Norteamericana. la alta jerarquía católica se declaró en contra
El proceso de independencia comenzó en el de la independencia. Puesto que dicha jerar-
Brasil antes que en el resto de la América La- quía y la casa de Borbón tenían mucho más pe-
tina, cuando en el alío 1807 la corte de los Bra- so en Roma que el bajo clero, la actitud de los
ganza se vio obligada a abandonar Lisboa an- papas fue opuesta a la independencia de Amé-
te la invasión bonapartista. Quince años más rica. La consecuencia natural de esto fue que
tarde uno de sus descendientes proclamaba la pronto apareció una fuerte minoría anticlerical
independencia del país y constituía el Imperio que se oponía no tanto a los dogmas de la Igle-
del Brasil. Sin embargo, esto no trajo los cam- sia como a la excesiva influencia que esta pare-
bios políticos y sociales que la población cía y pretendía tener en los destinos políticos de
deseaba, y fueron necesarios varios años antes América.
de que se produjesen. En todo caso, con la Por otra parte, el logro final de la indepen-
proclamación de la independencia del Brasil, dencia hizo que regresase a España la mayoría
el gobierno de Lisboa perdía su más importan- de los sacerdotes peninsulares, quienes, a pe-
te colonia. sar de su carácter conservador, eran los más
La propia Francia sufrió pérdidas territoria- preparados. Esto colocó a la Iglesia Romana
les en América a consecuencia de las guerras en nuevas estrecheces. Si antes no había logra-
napoleónicas, pues, aunque la aventura de do erradicar los vestigios de las antiguas reli-
Toussaint L'Ouverture culminó en la muerte giones entre los indios y negros del continen-
de este, al año siguiente (1804) Haití se con- te, ni tampoco regular las costumbres y elimi-
virtió en la primera nación de ascendencia nar los abusos de los colonos blancos, mucho
africana independiente en el Nuevo Mundo. menos lo lograría ahora que, escasa de recur-
La división política de la América Latina en sos humanos y sujeta agobiemos inestables -
el año 1825 era muy distinta de lo que llegaría aunque dueña de inmensas fortunas- tenía
a ser en el siglo XX, pero ya desde aquella fe- que enfrentarse a situaciones radicalmente
cha resultaba claro que España, Portugal y nuevas.
Francia se verían obligadas a renunciar a sus La Iglesia Católica en la América Latina
amplias pretensiones territoriales en América. tardaría más de un siglo en reponerse de lo
Esta realidad histórica se vio reforzada en que para ella fueron los desastres de principios
1823 con la «Doctrina de Monroe». del siglo XIX. No obstante, para el 1955, con
Aunque en ciertos círculos se ha creado la le- la creación del Consejo Episcopal Latinoame-
yenda de que las revoluciones latinoamerica- ricano, la Iglesia Católica iría tomando nuevos
nas iban dirigidas contra los abusos de la Igle- derroteros en relación a su misión interna, cre-
sia Católica, los hechos no parecen corroborar ando varios departamentos tales como el de
tal interpretación. Miranda, Hidalgo, Morelos, misión y espiritualidad, el de justicia social y
233
Las misiones en América Latina
234
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
arzobispo de Buenos Aires recibió el titulo de levisión y de revistas religiosas que buscaban
cardenal. la continua evangelización de las masas. Ade-
En el año 2000, la Iglesia Católica contaba más, ante la migración a las ciudades, distintas
en la Argentina con cuarenta y seis diócesis. organizaciones misionales, compuestas por
Como en todo el resto de la América Latina, misioneros y misioneras nacionales y extranje-
uno de sus más graves problemas era la falta de ros, trabajaban para proveer recursos de salud,
sacerdotes. educación y vivienda en los focos de pobreza
Durante la Guerra Sucia en Argentina, y de privación social.
1976-1986, la Iglesia Católica enfrentó lu-
chas internas de gran magnitud. Grupos de 2. El protestantismo
base directamente afectados por la guerra to- Los primeros protestantes en suelo argenti-
maron acción en defensa de los derechos hu- no fueron inmigrantes procedentes de los paí-
manos y de grupos opuestos al régimen mili- ses europeos en que el protestantismo era fuer-
tar. En no pocas ocasiones la postura oficial te. Ya antes de la independencia, había en Ar-
de la Iglesia fue de silencio ante las políticas gentina algunos ingleses y escoceses. Pero fue
opresoras del gobierno. Por otro lado, el apo- Rivadavia quien primero se interesó oficial y
yo internacional de organizaciones católicas activamente en la introducción de gran nume-
misioneras en Europa, y más adelante de or- ro de inmigrantes. A fin de facilitar la venida
ganizaciones ecuménicas, ayudó a la promo- de colonos escoceses, se les garantizó la liber-
ción de los derechos humanos y a la deposi- tad de culto, y en el año 1825, bajo contrato
ción del gobierno, con lo que el país retornó con el gobierno, llegó el primer contingente
a la democracia. numeroso de inmigrantes. Sin embargo, en el
El 30 de abril de 1977 en la Plaza de Mayo año 1820, aún antes de que se garantizase la li-
en Buenos Aires, y como reacción a la desapa- bertad de culto a los extranjeros, se había ce-
rición de miles desde el comienzo de la Gue- lebrado el primer servicio protestante en sue-
rra Sucia, un grupo de mujeres se reunió para lo argentino. Quienes participaron de él fueron
reclamar a los desaparecidos. El apoyo de gru- nueve inmigrantes británicos, y quien lo diri-
pos católicos extranjeros y nacionales logró gió fue Diego Thomson, el precursor de las
que lo que hoy se conoce como el movimien- misiones protestantes en la América Latina.
to de «Las Mujeres de la Plaza de Mayo» con- Diego Thomson, bautista, hizo sus estudios
tinuase siendo una voz y acción simbólica con- de teología en la Universidad de Glasgow, en
tra los atropellos de esa guerra. su Escocia nativa. Tras un pastorado en Esco-
El movimiento de base católica en Argenti- cia se dedicó a estudiar el español y los méto-
na dio lugar -como en otros lugares de Amé- dos de educación de Lancaster -cuáquero
rica Latina- a la reflexión crítica y teológica que había desarrollado un método pedagógico
sobre la situación política de los pobres y mar- que por aquel entonces parecía revoluciona-
ginados. Argentina fue un espacio vital para el rio. Con su fe, sus estudios teológicos, su co-
desarrollo de la teología latinoamericana de la nocimiento del español y la técnica pedagógi-
liberación -contribución teológica de carác- ca lancasteriana, Thomson pidió a la British
ter misional y ecuménico. and Foreign Bible Society que le nombrase su
Finalmente, para principios del siglo XXI y agente en América Latina. Así se hizo, y el 6
como tarea misionera ante el auge de las reli- de octubre del año 1818, provisto de cartas de
giones de la «nueva era» y de religiones orien- referencia de Su Majestad Británica, desem-
tales, la Iglesia Católica en Argentina desarro- barcó en Buenos Aires como propagandista de
lló toda una red de programas de radio, de te- un nuevo método educativo y de un viejo libro.
235
-11
Entre ambas funciones había una estrecha re- En la segunda mitad del siglo XIX la Socie-
lación, pues la Biblia era precisamente el tex- dad Bíblica Americana continuó el trabajo co-
to del sistema lancasteriano, además de que menzado por su colega británica, y su más des-
tanto ese sistema como la libre lectura del Li- tacado agente en América fue el escocés An-
bro Sagrado eran temas que interesaban a los drés M. Milne.
elementos más progresistas del continente. Durante más de cincuenta años no se predi-
En la Argentina, Diego Thomson realizó có sino a los inmigrantes y en su lengua, pues
una labor tan notable que, cuando decidió par- las autoridades se oponían a la predicación
tir hacia otras tierras del continente, fue hecho protestante en castellano. Esta se comenzó en
ciudadano honorario del país. el año 1867, y fue no tanto resultado de la obra
En 1821, tras una breve visita al Uruguay, misionera del exterior como la consecuencia
partió para Chile. Allí su éxito no fue menor de la fe profunda de algunos de los inmigran-
que en la Argentina, y lo mismo puede decir- tes escoceses, sostenida por la labor de minis-
se de su obra en el Perú, Ecuador, Colombia, tros extranjeros que trabajaban entre ellos.
México y Cuba. En esos países contó con el Quien predicó el primer sermón protestante
apoyo y la simpatía de personajes tan distin- en lengua española fue John Francis Thomson,
guidos como Bernardo O'Higgins, José de San más conocido como Juan F. Thomson, quien
Martín y Simón Bolívar. Su obra en Cuba es bajo la influencia del misionero Goodfellow
especialmente notable por cuanto, a pesar de decidió dedicarse a la predicación del Evange-
que ese país no era aún independiente y exis- lio. Thomson hizo sus estudios teológicos en la
tían en él todas las dificultades para la obra Ohio Wesleyan University, en los Estados Uni-
evangélica inherentes a su condición de colo- dos, y regresó a la Argentina en el año 1866.
nia española, Thomson recorrió la isla de un Allí, en el hogar de doña Fermina León de Al-
extremo al otro vendiendo biblias y dando tes- deber, predicó el primer sermón protestante en
timonio de su fe. En Colombia fundó la prime- español de que tenemos noticias. El día 25 de
ra sociedad bíblica en nuestro continente, en la mayo de 1867, y en el templo de habla inglesa
que participaban varios clérigos progresistas. de la calle Cangallo, en Buenos Aires, Thom-
Thomson murió en Londres a la edad de son celebró el primer culto público en español.
sesenta y dos años, tras haber laborado, no so- Su éxito fue inmenso, y pronto se le pidió que
lo en la América Latina, sino también en Espa- predicara también en Montevideo. Así lo hizo,
ña, Portugal y Canadá. Su obra había sido la y comenzó a dividir su tiempo entre las dos ca-
del sembrador que regó la semilla donde fue pitales. A menudo su predicación era apologé-
posible, esperando que alguna diera fruto. tica y polémica, y en más de una ocasión sos-
Aunque no fundó comunidades protestantes tuvo debates con clérigos católicos. Tras un
en la América Latina, es de suponerse que al- ministerio fructífero tanto en Uruguay como
gunas de las muchas personas que establecie- en la Argentina, Thomson se jubiló. Murió, ca-
ron relaciones con él llegaron más tarde a for- si a los noventa anos de edad, en 1933.
mar parte de tales comunidades. La obra metodista continuó creciendo en la
Aun antes de la muerte de Thomson, la Socie- Argentina. En el ano 1871 se predicó el primer
dad Bíblica había enviado otro representante a la sermón en Rosario. Poco después las damas
América Latina: Lucas Matthews, quien duran- metodistas de los Estados Unidos comenzaron
te los años 1826 y 1827 recorrió la Argentina y una escuela en esa ciudad. En el 1913 se fun-
visitó además Chile, Bolivia, Perú y Colombia. dó en Buenos Aires el Colegio Ward, en el cual
En este último país desapareció sin que hayan cooperan los metodistas y los discípulos de
podido saberse las circunstancias de tal hecho. Cristo.
236
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
237
Las misiones en América Latina
Argentina fue la sede de dos importantes ciones protestantes, y que bajo la dirección del
reuniones sobre el cristianismo y la misión Dr. B. Foster Stockwell vino a ser una de las
protestante en América Latina. La primera fue instituciones de más prestigio académico en
la I Conferencia Evangélica Latinoamericana, la región del Río de la Plata. Más tarde otras
1949; y la otra fue la III Conferencia Evangé- organizaciones de formación y otras publica-
lica Latinoamericana, en 1969. De ambas con- ciones teológicas, como las de «Libros Kai-
ferencias se destaca la última por el testimonio rós», se unirían a ese legado.
al desarrollo y carácter del liderato evangélico No podemos siquiera mencionar aquí todas
en el continente. Aunque ésta no tuvo el mis- las denominaciones y agencias misioneras que
mo impacto que la conferencia católica de Me- trabajan o han trabajado en la Argentina. Bas-
dellín -la segunda conferencia auspiciada por te decir que hay cientos de grupos en toda la
el Consejo Episcopal Latinoamericano- con- nación, incluso algunos procedentes de Corea
siderada la semilla de la teología católica lati- del Sur y de otras regiones de Asia. Por largo
noamericana de la liberación, sí señaló una to- tiempo las iglesias pentecostales continuaron
ma de conciencia hacia una identidad evangé- creciendo, mientras que muchas de las igle-
lica ecuménica y latinoamericana. sias de inmigrantes protestantes y de las deno-
De igual modo que en todo el mundo cristia- minaciones históricas experimentaban, en el
no, el siglo XX se caracterizó en la Argentina mejor de los casos, estancamiento numérico.
por un fuerte movimiento ecuménico. La Fede- Excepción a esta tendencia eran algunas igle-
ración Argentina de Iglesias Evangélicas, fun- sias que experimentaron la «pentecostaliza-
dada en el 1958, comprendió varias de las prin- ción del protestantismo», desarrollando una
cipales iglesias, así como organismos tales co- vida eclesial en la que se conjugaban la tradi-
mo las Sociedades Bíblicas Unidas, la librería ción de origen y el espíritu carismático. Las
La Aurora, y la Facultad Evangélica. Esta Fede- iglesias pentecostales, la mayoría de ellas al
ración a su vez formó parte de la Confederación margen del movimiento ecuménico en el con-
de las Iglesias Evangélicas del Río de la Plata. tinente cuando empezaron su obra en el siglo
Hubo conversaciones y hasta uniones orgánicas XX, a principios del XXI mantenían vínculos
entre varias denominaciones. Hacia fines del eclesiales mediante organizaciones de pastores
siglo XX, el protestantismo argentino -parti- y redes de iglesias. Algunas se unieron al Con-
cularmente la Iglesia Metodista en Argentina sejo Latinoamericano de Iglesias y, bajo el li-
-contribuyó marcadamente al desarrollo del derato de personas como el obispo Gabriel
Consejo Latinoamericano de Iglesias. Bajo la Vaccaro, participaban activamente en la es-
dirección del obispo Federico Pagura y otros tructuración de la Conferencia Ecuménica
líderes evangélicos, el ecumenismo en el conti- Pentecostal en América Latina, un organismo
nente fue un agente de paz, justicia y reconcilia- que agrupaba a las iglesias pentecostales de
ción en muchas de las regiones afectadas por la corte ecuménico en el continente.
guerra o la persecución ideológica.
También a través de su obra de publicacio- 3. El cristianismo ortodoxo
nes y de educación teológica, el protestantis- Entre los muchos inmigrantes que llegaron
mo argentino ha influido grandemente en el a la Argentina a finales del siglo XIX y prin-
resto del continente. Una institución que en cipios del XX, había gran número de ortodo-
este sentido es digna de mención es la Facul- xos, especialmente de rusos y sirios. Tras la
tad Evangélica de Teología de Buenos Aires Revolución Rusa, llegó a la Argentina un fuer-
(hoy Instituto Superior de Estudios Teológi- te contingente de exiliados. Más tarde, a medi-
cos, ISEDET), en la que cooperan denomina- da que el comunismo conquistaba los países
238
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
de Europa oriental, fueron llegando otros gru- Uruguay era conocido en toda la América La-
pos semejantes. Quien más se destaco en la tina como uno de los países más secularizados
organización de parroquias para estos inmi- del continente, aunque la mayoría de la pobla-
grantes fue el sacerdote Constantino Israstzov. ción aún decía ser católica.
En el año 1934 el Sínodo Ruso en el Exilio Puesto que la inmensa mayoría de la po-
creó la diócesis de la Argentina y colocó a su blación uruguaya descendía de razas tradicio-
cabeza al padre Israstzov, aunque dándole el nalmente cristianas, el gran reto misionero que
título de protopresbítero en lugar del de obis- el siglo XX presentaba a ese país era el testi-
po, ya que era casado. También hay en la Ar- monio cristiano en los «ámbitos descristiani-
gentina iglesias ortodoxas griegas y sirias. zados». A mediados del siglo XX, y bajo enor-
mes cambios políticos y eclesiales, la Iglesia
C.El cristianismo en el Uruguay apenas comenzaba a responder a este reto.
1. El catolicismo romano
En el año 1830, cuando la República Orien- 2. El protestantismo
tal del Uruguay logró su independencia, su pri- El precursor de la obra protestante en el
mera constitución afirmó la libertad de cultos, Uruguay fue Diego Thomson, quien visitó
pero al mismo tiempo continuó haciendo del Montevideo cuando estaba establecido en
catolicismo la religión oficial del Estado y re- Buenos Aires. Aunque no tenemos noticias ex-
clamó para el presidente el derecho del patro- tensas acerca de su obra en el Uruguay, donde
nato nacional. En ese mismo año se pidió a la se dedicó especialmente a establecer el siste-
Santa Sede que proveyera una jerarquía ecle- ma lancasteriano de educación, es de suponer-
siástica para el Uruguay estableciendo un epis- se que Thomson también aprovechó la oportu-
copado de Montevideo, pues la dependencia nidad para vender algunas Biblias y abrir así el
eclesiástica de Buenos Aires no era del agrado camino al trabajo evangélico.
de los uruguayos. Esta petición no tuvo res- Más tarde la obra de Thomson fue conti-
puesta afirmativa hasta que, cuarenta años des- nuada por la Sociedad Bíblica Americana, que
pués, se creó la diócesis de Montevideo. en el año 1864 nombró a Andrés M. Milne su
En las largas luchas entre «blancos» y «co- agente en Montevideo. Milne se mostró digno
lorados», estos últimos tendían a ser más libe- sucesor de Thomson y se dedicó asiduamente
rales que sus opositores. Puesto que los «colo- a la distribución de las Escrituras en el Uru-
rados» tuvieron el poder más frecuentemente guay y en algunas regiones de la Argentina.
que los «blancos», el país se dirigió lentamen- Como veremos más adelante, en la casa de
te hacia la concesión de mayores libertades re- Milne se celebraron los primeros cultos en es-
ligiosas, y a la postre llegó a la expulsión de pañol en el Uruguay. Pero además su obra fue
los franciscanos y jesuitas. Por último, la cons- notable también porque a través de ella Fran-
titución de 1919 cortó definitivamente toda cisco Penzotti tuvo sus primeros contactos con
unión entre Iglesia y Estado, y se puso térmi- la Sociedad Bíblica Americana, cuyo más des-
no a la instrucción religiosa en las escuelas tacado agente en la América Latina llegó a ser.
públicas. Por otra parte, hubo comunidades de inmi-
Como era de esperarse, estas medidas reci- grantes protestantes antes de que se comenza-
bían el apoyo de las ideas positivistas que pro- ra a predicar en castellano o se establecieran
cedían de Francia, y muchos fueron los que en comunidades protestantes de habla hispana.
el Uruguay confundieron el liberalismo políti- En el Uruguay, como en la Argentina, le
co con el positivismo de Compte. El resultado cupo a Juan F. Thomson el honor de predicar
fue que en la primera mitad del siglo XX el el primer sermón en castellano. Esto tuvo lu-
239
Las misiones en América Latina
gar cuando, en 1867, algunos inmigrantes cris- A partir de aquel día, el metodismo ha con-
tianos que habían comenzado a reunirse con el tinuado trabajando en el Uruguay. Un aspecto
apoyo de los metodistas, y que contaban aho- notable de su obra ha sido el Instituto Cran-
ra con la ayuda y la dirección de Mime, pidie- don, fundado en el año 1878 y en el cual coo-
ron que Thomson comenzara a predicar en peran metodistas y discípulos de Cristo. Este
Montevideo. A propósito de esa primera reu- Instituto fue el primero en toda la América del
nión, la propia esposa de Thomson cuenta: Sur en ofrecer un curso de economía domésti-
La primera reunión se celebró cierta noche ca, lo que se hizo en 1923.
en una piecita a la calle que tenía el señor Montevideo fue la sede del Segundo Congre-
Milne en la casa que habitaba en la Calle so sobre la Obra Cristiana en América Latina, en
Convención, a media cuadra de la calle 18 1925 -el primero tuvo lugar en Panamá, en
de Julio. Después de algún tiempo pasado 1916. Su trabajo se concentró en discutir las es-
en oración, salieron todos en diversas di- trategias de misiones y las regiones donde el
recciones, y cada uno de ellos atajaba a los cristianismo evangélico aún no había llegado.
transeúntes y les preguntaba si no querían ir Con una fuerte presencia de líderes misionales
a escuchar un sermón evangélico. Con la de los Estados Unidos, y con un número más al-
cortesía que distingue a la gente castellana, to de protestantes latinoamericanos, el Congre-
los interpelados contestaban: «Cómo no! so ilustró una mayor y más activa participación
Sí, señor» y entonces eran guiados a la pie- por parte de protestantes de la región.
cita de Milne y se celebraba el culto. Así se Los valdenses, llegados como inmigrantes
comenzó la obra en Montevideo, saliendo a en 1856, pronto comenzaron a predicar en es-
la calle a invitar a todo transeúnte, hasta pañol, y en 1967 tenían unos 16.000 miem-
que se logró formar un núcleo de oyentes. bros, aunque más tarde fueron decreciendo.
240
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
A mediados del siglo XX, ninguno de los di- mo está concentrado en las iglesias pentecos-
versos grupos no católicos había logrado atraer tales y en grupos pseudocristianos como La
un fuerte número de creyentes. Esto parece ha- Iglesia de Jesucristo de los Santos de los últi-
berse debido, en parte al menos, a que algunas mos Días -los mormones. Uruguay sigue
de las tendencias de pensamiento anticlerical siendo un país predominantemente secular.
que al principio parecieron favorecer al protes-
tantismo frente al catolicismo resultaron ser ala D. El cristianismo en el Paraguay
larga opuestas a toda forma de cristianismo. 1. El catolicismo romano
Varias de las principales iglesias protestan- Durante todo el siglo XIX, la Iglesia Cató-
tes del Uruguay se unieron en el año 1956 en lica en el Paraguay se caracterizó por su suje-
un organismo ecuménico que recibió el nom- ción al Estado. Primero fue la dictadura de Jo-
bre de Federación de Iglesias Evangélicas en sé Gaspar Rodríguez Francia, que se daba a sí
el Uruguay. La Federación generó proyectos mismo el titulo de «El Supremo». Luego fue la
ecuménicos de corte educativo y de salud, tal de Carlos Antonio López y de su hijo Francis-
como el proyecto Obra Ecuménica en el Ba- co Solano López. Bajo estas dictaduras la Igle-
rrio Borro a las afueras de Montevideo. La sia vino a ser un instrumento en manos del Es-
Iglesia Metodista en Uruguay ha contribuido tado. El confesonario era un medio de espiona-
al movimiento ecuménico en el mundo. Ejem- je universal, pues los dictadores reclamaban
plo de esto son Emilio Castro, quien fuera Se- para sí el derecho de patronato sobre la Iglesia,
cretario Ejecutivo del Consejo Mundial de y aunque Roma nunca reconoció oficialmente
Iglesias, y Mortimer Arias, teólogo de la evan- ese derecho, sí lo reconoció en la práctica
gelización y persona destacada en el movi- nombrando obispos que eran simples instru-
miento ecuménico en América Latina y en el mentos de los dictadores. Las propiedades de
mundo. Además se organizó un concilio inter- la Iglesia fueron confiscadas por Francia, y
religioso que agrupaba a cristianos y judíos nunca le fueron totalmente restituidas. Con la
para diálogo sobre asuntos de interés nacional ayuda del clero, los dictadores -especialmen-
y comunitarios. te Francisco Solano López- crearon entre la
Durante los años de la dictadura militar a fi- población indígena el fanatismo aguerrido que
nales del siglo XX, las iglesias evangélicas la caracterizó en la guerra de la Triple Alian-
ecuménicas dieron un testimonio elocuente de za, cuyo resultado final fue la caída de López
solidaridad y apoyo a personas perseguidas y e inmensas pérdidas territoriales, económicas
atropelladas por la política de seguridad del y humanas para el Paraguay.
estado. Aunque con poca presencia numérica, La constitución de 1870 era semejante a la
estas iglesias afirmaron la protección de los de Argentina en lo que a la religión se refiere.
derechos humanos y de la vida. Al igual que Si bien el catolicismo era la religión del Esta-
en Argentina, distintos movimientos de corte do, se garantizaba también la libertad de cul-
civil y ecuménico le pidieron cuentas al esta- tos. El derecho de patronato seguía estando en
do por los desaparecidos durante esa época tan manos del presidente.
violenta. Esta «iglesia que acompaña a los Tradicionalmente se ha culpado a los jesui-
oprimidos», con el apoyo de grupos e iglesias tas por las dificultades que ha tenido el Para-
en Europa y Estados Unidos coordinaba pro- guay en su desarrollo político. Se dice que el
yectos actividades en pro de la justicia. excesivo paternalismo de sus misiones no pre-
El protestantismo en el Uruguay no ha teni- paró a los indios para la vida democrática. Es-
do el mismo «éxito» que en otros países. Es in- to es así solo si se entiende como un error de
teresante que el crecimiento del protestantis- omisión y se le ve dentro del contexto de la
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enorme obra que los jesuitas realizaron en el Pa- traspasaron su obra a principios de siglo-, el
raguay. Es cierto que sus misiones eran en ex- Ejército de Salvación y los bautistas del sur.
tremo paternalistas, pero también es cierto que, El principal grupo de inmigrantes al Para-
de no haber habido tales misiones en el Para- guay fue el de los menonitas, en su mayoría
guay, la situación hubiera sido mucho peor. procedentes de Canadá, que decidieron buscar
Durante todo el siglo XX la Iglesia Católica un nuevo lugar donde establecerse cuando el
en el Paraguay no logró reponerse de sus pér- gobierno canadiense se negó a continuar con-
didas del siglo XIX, y a principios del siglo cediéndoles los antiguos privilegios y liberta-
XXI carecía todavía de un clero en su mayoría des que habían sido una de las principales con-
nacional. diciones de su establecimiento en ese país. En
el año 1926, casi 2.000 personas partieron de
2. El protestantismo Manitoba. Tras dos años de vicisitudes, epide-
Las condiciones políticas del Paraguay antes mias y desengaños, casi la mitad de ellas se
de la guerra de la Triple Alianza impidieron la establecieron en el Chaco paraguayo, donde
penetración del protestantismo en el país. Has- fundaron la colonia de Menno. Poco después se
ta donde sabemos, sólo la Sociedad Bíblica fundaron otras colonias menonitas, aunque
Americana pudo establecer obra en el Para- siempre en lugares apartados de los centros de
guay antes de esa terrible guerra. población. A raíz de la toma del poder en Ale-
En el año 1871, a raíz de la guerra de la Tri- mania por el partido nacional-socialista, un
pie Alianza, un grupo de paraguayos pidió a los grupo de refugiados huteritas, siguiendo el
metodistas que comenzaran obra en su país. ejemplo de los menonitas, se estableció tam-
Debido a diversas circunstancias, esto no fue bién en el Paraguay.
posible hasta el año 1886, cuando dos pastores Puesto que las razones que les llevaron al
metodistas comenzaron a trabajar en Asunción. Paraguay se relacionaban más con la conserva-
Estos pastores se dedicaron al trabajo tanto re- ción de su fe que con la comunicación de la
ligioso como de educación, y pronto tenían dos misma, al principio estos grupos no se distin-
escuelas, además de iglesias en Asunción y guieron por su actividad misionera, aunque
otros lugares del país. después participaron en los movimientos ecu-
Dos años más tarde la South American Mis- ménicos de la región. Como es de suponerse,
sionary Society se estableció en el Paraguay. su presencia e influencia contribuyeron a la pe-
En 1893, y entre inmigrantes, se fundó en netración del protestantismo en el Paraguay, y
Asunción una iglesia luterana. algunos de entre ellos se dedicaron a la labor
Durante la primera mitad del siglo XX el misionera, aunque esta no haya sido uno de los
protestantismo en el Paraguay logró nuevo ím- principales intereses de la mayoría. A princi-
petu debido a la penetración del país por nue- pios del siglo XXI estas colonias, cuyo ingre-
vas agencias misioneras y al establecimiento de so provenía principalmente de productos lác-
colonias de inmigrantes protestantes. teos, se distinguían también por sus clínicas,
Aunque ninguna de las primeras empresas hospitales y proyectos agrícolas en beneficio
misioneras protestantes logró gran numero de de la población toda.
conversos en el Paraguay, la obra que más se En términos generales, el protestantismo tu-
destacó en este sentido fue la de la Unión Mi- vo en el Paraguay un impacto mucho menos
sionera del Nuevo Testamento, que en 1957 notable que en la mayoría de los demás países
llegó a contar con 1.500 miembros. También de la América Latina, aunque allí también el
trabajaban en el Paraguay, entre otros, los dis- pentecostalismo se abría paso a principios del
cípulos de Cristo -a quienes los metodistas siglo XXI.
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Bolivia es uno de los países de Sur Amé- tólica se percataba de la novedad de los tiem-
rica con más alto índice de pobreza. En me- pos y estaba dispuesta a trabajar dentro del
dio de esta pobreza es evidente que las igle- nuevo contexto. A partir de entonces, y cada
sias pentecostales, tanto las que pertenecen a vez más, hubo un fuerte sector entre los diri-
los cuerpos globales clásicos como las Asam- gentes católicos que abogaba por que la Igle-
bleas de Dios o la Iglesia del Evangelio Cua- sia tomase más en cuenta las necesidades re-
drangular como las que pertenecen a grupos ales del país. En el 1952 se constituyó la Ac-
nacionales o ecuménicos, son claves para en- ción Católica Rural, que fue uno de los prin-
tender el futuro de la misión cristiana en Bo- cipales agentes en la reconstrucción y refor-
livia. Además, el trabajo misionero cobra en ma rural en Chile. Además se organizó un
Bolivia una dimensión interesante dado el al- Movimiento de Democracia Cristiana, que
to grado de movimiento de una expresión re- era uno de los partidos más progresistas del
ligiosa a otra -evangélicos ecuménicos, pen- país y que en la segunda mitad del siglo XX
tecostales, católicos, religiones indígenas y llegó al poder.
religiones de la nueva era. Esta dinámica, co- A mediados del siglo XX la Iglesia Cató-
mún en muchos países de América Latina, lica en Chile realizaba obra misionera en dos
nos invita a un análisis crítico de la misión en vicariatos apostólicos y una prelatura nullius.
toda la región. Quizá el más notable esfuerzo de esta índole
sea el de los capuchinos bávaros en la Arau-
F. El cristianismo en Chile cania, que comenzó en el 1898. Además, se
1. El catolicismo romano comenzó a promover, ya antes del Segundo
Al igual que en el resto de la América La- Concilio del Vaticano, la renovación litúrgi-
tina, la historia de la Iglesia Católica Roma- ca, la promoción y apoyo a organizaciones
na en Chile durante el siglo XIX estuvo estre- de mujeres, la evangelización en grupos pe-
chamente ligada a las vicisitudes políticas del queños, el apoyo a las «Comunidades Ecle-
país. Los primeros años fueron difíciles, pues siales de Base» y la donación de tierras de la
las luchas independentistas le habían hecho Iglesia Católica de Chile a campesinos po-
perder mucho de su prestigio y poder. Desde bres. Durante el Concilio, la Iglesia de Chile
el principio, el gobierno nacional reclamó pa- se dio a conocer como una de las más progre-
ra sí el derecho de patronato sobre la Iglesia. sistas y de más apertura. Durante los años
Aunque no oficialmente, Roma reconoció ese 1966-1969, la arquidiócesis de Santiago cele-
derecho en la práctica. No fue sino hasta el bró sínodos posconciliares con representantes
año 1925 que se declaró oficialmente la sepa- de la base popular para discutir asuntos tales
ración entre la Iglesia y el Estado, así como la como el ecumenismo, el diálogo judío-cris-
libertad de cultos. Pero ya en la segunda mi- tiano, la eclesiología, y la renovación y parti-
tad del siglo XIX, bajo la dirección de José cipación del laicado en la iglesia.
Manuel Balmaceda, el gobierno había pro- La últimas tres décadas del siglo XX fue-
mulgado leyes que garantizaban la libertad ron en extremo conflictivas. En el 1970, con
de cultos y eliminaban los privilegios de la un margen mínimo electoral y teniendo de
Iglesia Católica. oposición a un sector conservador del catoli-
Durante toda la segunda mitad del siglo cismo chileno que incluía una representación
XIX la Iglesia Católica perdió mucha energía significativa del Opus Dei, triunfó el candida-
en el intento vano de retener sus antiguos pri- to socialista Salvador Allende. Para el 1971,
vilegios; pero ya a comienzos del siglo XX se por un fuerte movimiento popular entre sa-
veían señales de que la nueva generación ca- cerdotes y líderes católicos entre obreros
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se obrera y con los nuevos migrantes en las tarios para mantener al pueblo informado y
ciudades, aunque posteriormente comenzaron protegido, y alzaron una voz profética solida-
a extenderse también hacia la clase media. ria con los grupos religiosos y civiles de opo-
Una de sus características más notables era el sición a la dictadura. Por otro lado, siempre
hecho de que se sostenían a sí mismas, con hubo iglesias -tradicionales y pentecosta-
poca o ninguna ayuda del extranjero. Buena les- que dieron apoyo a la dictadura. La iro-
parte de su expansión era llevada a cabo, no nía es que la mayoría de las iglesias pentecos-
por pastores remunerados, sino por personas tales se ocupaban de la reconstrucción social
que tenían otra ocupación o que, a lo menos, de pequeñas comunidades, pero no tenían pro-
dividían su tiempo entre el pastorado y algún gramas de alcance a la totalidad del país. Sin
trabajo secular. Esto era especialmente cierto embargo, es de notarse que los grupos pente-
de las congregaciones pequeñas. costales, por el solo hecho de su enorme feli-
El impulso que le dio origen y progreso al gresía, llegaron a ser un factor político en la
movimiento pentecostal de Chile sirvió tam- nación y contribuyeron a devolver a Chile un
bién para hacer aparecer un sinnúmero de pe- sistema político democrático.
queñas agrupaciones por desmembramiento de Los acontecimientos del protestantismo en
las iglesias pentecostales o de algunas de las Chile representan un hito más en la historia de
iglesias históricas -la «pentecostalización de las misiones en América Latina. En 1995 el
las iglesias históricas»- y que, al igual que Consejo Latinoamericano de Iglesias celebró
las iglesias pentecostales, son de carácter na- su cuarta asamblea continental demostrando
cional. un apoyo solidario al proceso de justicia y paz
Uno de los aspectos negativos que se seña- que todo el continente anhelaba y dando un
laban acerca del avance protestante en Chile paso importante al reconocimiento de las tra-
era su carencia de doctrina social que pudiese diciones pentecostales en el Consejo. Por otro
ayudar a la reconstrucción del país, así como lado, con la influencia de la Cooperación Mi-
su falta de presencia en los círculos en los que sionera Iberoaméricana (COMIBAM) -y
se forjaba el pensamiento constructivo de la puesto que en Chile había más de 20 organiza-
nación. A fines del siglo XX, de las iglesias ciones misioneras ligadas a esta organiza-
protestantes, sólo la metodista tenía un Credo ción- había un número creciente de misione-
Social, y el número de sus miembros era tan ras y misioneros chilenos trabajando en Euro-
pequeño que no podía ejercer una verdadera pa, el norte de Africa, Asia y otros países en la
influencia en el país. América Latina.
Los años bajo la dictadura de Pinochet fue-
ron tremendamente conflictivos para los pro- G.El cristianismo en el Perú
testantes. Grupos protestantes y pentecostales 1. El catolicismo romano
se dividieron en medio de las luchas políticas. La alta jerarquía eclesiástica del Perú se
Sin embargo, hay que destacar que tanto igle- opuso a la independencia del país, mientras
sias protestantes tradicionales como iglesias que la mayoría de los clérigos rurales tendía a
pentecostales se ocuparon de proteger los de- ver con simpatía la causa de los insurgentes.
rechos humanos y fomentaron una resistencia Tras la independencia, sólo quedaba en el pa-
a la opresión creada por la estructura política ís un obispo, y éste era realista. Tanto José de
dictatorial. Arraigadas a la base del pueblo y San Martín como Simón Bolívar abogaron por
apoyadas por organismos ecuménicos regio- una unión entre Iglesia y Estado en la que se
nales e internacionales, muchas de estas igle- estableciera, sin embargo, la libertad de cultos.
sias proveían proyectos educativos y comuni- Pero el país no estaba listo para tales liberta-
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Re
des, y ni uno ni otro de los dos libertadores pu- culturas amerindias, y denunciaban el capita-
do evitar que se estableciera una estrecha lismo ausente y destructor de los pueblos. Pa-
unión entre Iglesia y Estado que continuaría ra esta misma época se publicó el famoso libro
hasta bien entrado el siglo XX. El gobierno de Gustavo Gutiérrez, Teología de la libera-
reclamó para sí el derecho de patronato, que el ción, dando un fuerte impulso al quehacer cris-
papa Pío IX reconoció con ciertas limitacio- tiano revolucionario.
nes. No fue sino en el año 1915 que se garan- El trabajo misionero en el Perú, aun en medio
tizó la libertad de cultos. de la precariedad de sacerdotes y líderes nacio-
La Iglesia Católica del Perú no parece haber nales, se concentraba en dos áreas. La primera
reaccionado ante las nuevas circunstancias de era el acompañamiento a los pueblos amerindios
igual modo que la de Chile, pues lo que pare- en medio de sus luchas por la tierra, por la pre-
ce haber sucedido es que la jerarquía se hizo servación de sus culturas y por sus derechos hu-
cada vez más conservadora y el clero más es- manos. La segunda fue la contextualización del
caso y menos preparado y selecto. evangelio en las culturas amerindias.
En el campo estrictamente misionero, se A principios del siglo XXI, había 22.5 mi-
destacan las misiones dominicas en la región llones de afiliados y unas 4,000 parroquias en
de Urubamba, llenas de episodios de abnega- la Iglesia Católica del Perú.
ción y sacrificio, y las de los redentoristas
franceses de Huanta y Caracora. No obstante, 2. El protestantismo
la situación del catolicismo en Perú era muy Ya en la segunda mitad del siglo XVI la
precaria. Por ejemplo, algunas estadísticas in- Inquisición había condenado a varios protes-
dicaban que había un sacerdote para cada 6 tantes en el Perú, pero todos éstos eran ex-
habitantes y una gran desproporción entre sa- tranjeros.
cerdotes extranjeros y nacionales. Según datos Como en tantos otros países de la América
de la World Christian Enciclopedia para el Latina, el precursor del protestantismo en el
1901 el 82 por ciento del clero era nacional en Perú fue Diego Thomson, quien llegó al país en
comparación con sólo 39 por ciento para fina- 1822 por invitación de José de San Martín. Es-
les del 1970. Esto afectaba el trabajo pastoral te hizo desalojar un convento para que Thom-
en comunidades y parroquias. Otros datos se- son estableciera en él una escuela lancasteria-
ñalaban que la mayoría de los feligreses cató- na. Con la ayuda de un sacerdote, Thomson
licos eran mujeres. organizó dos escuelas en el país y distribuyó
Irónicamente para el 1971, el episcopado cientos de Biblias. En términos generales, su
peruano hace pública la declaración «Justicia trabajo fue bien recibido por la población y por
en el mundo». Basada en gran parte en la en- la casi totalidad del clero, que no se opuso a la
cíclica Populorum Progressio (1967) de Pablo venta pública de las Escrituras. De hecho, el
VI y en la segunda asamblea de la Conferen- principal obstáculo con que tropezó parece ha-
cia Episcopal Latinoamericana (CELAM) en ber sido la lentitud con que llegaban las Bi-
Medellín, y en respuesta a la grave situación blias desde la Gran Bretaña. Debido a su inspi-
política y económica en el continente acompa- ración, se tradujo al quechua el Evangelio de
ñada por una lectura marxista-cristiana por San Lucas. Por fin, en septiembre del año
parte de misioneros y misioneras católicos, 1829, debido a la ocupación española y a su de-
«Justicia en el mundo» fue una declaración ra- seo de visitar el Ecuador y Colombia, Thomson
dical en contraste con los episcopados de la re- partió del Perú, dejando tras sí personas encar-
gión. En ella los obispos pedían la elimina- gadas de la distribución de la Biblia. El sistema
ción de una evangelización que destruía las lancasteriano de educación perduró hasta 1850.
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má y Venezuela- fue el de las relaciones en- un profundo carácter popular, ligado a creen-
tre la sede romana y el nuevo gobierno. Pues- cias cósmicas de tiempos ancestrales. En las
to que Roma no podía reconocer a éste último ciudades tendía a ser más formal y de carácter
sin incurrir en la enemistad de España, y pues- conservador, con algunas expresiones caris-
to que el gobierno de la Gran Colombia recla- máticas.
maba para sí el derecho de patronato de que La diócesis de Riobamba produjo un gran
antes España había gozado, las dificultades en despertar en los estudios misionales católicos
la elección de los obispos eran inmensas, y en América Latina. El obispo Leonidas Proa-
hubo diócesis que estuvieron vacantes por lar- ño recalcó el derecho a la tierra de los amerin-
go tiempo. dios y fomentó cambios profundos en la pas-
El Ecuador se separó de la Gran Colombia toral entre los indígenas. El trabajo misionero
en 1830, y no fue sino un tercio de siglo más constaba de proyectos de educación agrícola y
tarde, durante el gobierno férreo y ultracon- rural, programas radiales educativos para los
servador de Gabriel García Moreno, que se campesinos, comunidades de base para la con-
llegó al Concordato de 1862. En dicho Con- cientización de los pueblos indígenas, y cam-
cordato se le daba a Roma más autoridad so- bios en la liturgia para hacerla más afín con las
bre la Iglesia Católica en el Ecuador que la culturas indígenas.
que había tenido durante el régimen español.
Este estado de cosas continuó hasta la revolu- 2. El protestantismo
ción liberal de 1895, cuando se comenzó toda La historia de los primeros pasos del protes-
una serie de medidas que iban contra lo que la tantismo en el Ecuador es semejante a la de
Iglesia Católica consideraba sus derechos. En otros países que ya hemos estudiado, y en ella
el año 1899 el gobierno.volvió a reclamar pa- encontramos los mismos nombres que ya he-
ra sí el derecho de patronato; en el 1900 se es- mos conocido en la Argentina, Uruguay, Chi-
tableció el registro civil; en el 1902, el matri- le y Peru. Diego Thomson visitó el país en el
monio civil; finalmente, en el año 1907 se año 1824; y en el 1828 le siguió Lucas Ma-
proclamó la separación entre la Iglesia y el thews. William Taylor visitó Guayaquil y lo-
Estado y se garantizaba además la libertad de gró instalar allí al pastor J.G. Price, cuya obra
cultos. Las relaciones diplomáticas entre el duró sólo unos pocos meses. Penzotti y Milne
Ecuador y la Santa Sede fueron interrumpidas intentaron en vano introducir Biblias en el
hasta que, en 1937, se llegó a un modus viven- Ecuador.
di. La constitución de 1946 garantizó la liber- A raíz de la revolución liberal, el presiden-
tad de conciencia. te Eloy Alfaro -que antes había leído una Bi-
Tras el Concordato de 1862, muchas de las blia que le había obsequiado un pastor presbi-
antiguas misiones católicas entre los amerin- teriano a bordo de un buque ecuatoriano- hi-
dios fueron abandonadas. Pero desde la época zo arreglos para que los metodistas comenza-
de García Moreno se continuó el avance hacia ran trabajo de educación en el país. Empero
las selvas orientales. En este avance se distin- esta obra fue suspendida a los pocos años.
guieron los franciscanos, salesianos, jesuitas y Con el visto bueno del propio Alfaro, el mi-
dominicos. En general, el trabajo misionero sionero norteamericano W.E. Reed llegó al
en Ecuador seguía todavía en desarrollo a fines país en el año 1896 como representante de la
del siglo XX. Unión Misionera del Evangelio. Después pasó
En esa fecha, la Iglesia Católica en Ecuador al servicio de la Alianza Cristiana y Misionera.
contaba con 4 arquidiócesis, 10 diócesis y 9 Hasta el siglo XXI la Iglesia Unión Misionera
apostolados. El catolicismo de los Andes tenía Evangélica y la Iglesia Internacional del Evan-
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El
gelio Cuadrangular (1953) eran todavía las Más tarde surgieron varias estaciones de
iglesias protestantes más grandes en el país. radio que transmitían programas en distintos
En 1945 la Iglesia Presbiteriana en los Esta- idiomas y producían materiales educativos.
dos Unidos, la Iglesia Reformada Evangélica, Además trabajaban en el Ecuador los lutera-
la Iglesia Presbiteriana Unida y la Iglesia Los nos, los bautistas del sur y otros grupos pro-
Hermanos Unidos se unieron para crear la Uni- testantes y pentecostales que llegaron des-
ted Andean Indian Mission. Esta organización pués de la Segunda Guerra Mundial. Alrede-
se concentró en proyectos de educación, de sa- dor del año 2000, algunos estimaban que el
lud y de desarrollo agrícola, con poco éxito en 16,8 por ciento de la población estaba afilia-
la evangelización. da al protestantismo.
En el 1956 cinco misioneros fueron asesi-
nados por indígenas aucas. Este evento puso I. El cristianismo en Colombia
de manifiesto el problema de misioneros y y Panamá
misioneras que representan una amenaza a Puesto que durante todo el siglo XIX Pana-
las culturas amerindias. No obstante, el traba- má perteneció a Colombia tanto política como
jo misionero entre indígenas ha continuado, eclesiásticamente, conviene discutir ambos pa-
con éxito particular entre los pentecostales y íses bajo el mismo encabezamiento.
movimientos carismáticos nacionales.
Quito ha sido sede para otras reuniones 1. El catolicismo romano
misioneras en el continente. El tercer y cuar- La constitución de la Gran Colombia del
to Congresos Latinoamericanos de Evangeli- año 1830 declaraba que el catolicismo romano
zación (CLADE III, 1992, y IV, 2000) fueron era la religión del Estado, y prohibía todo otro
ejemplo del despertar evangélico respecto a culto. Cuando se desmembró la Gran Colom-
la relación entre el evangelio y las culturas in- bia y se organizó el estado de Nueva Granada,
dígenas. Ambos congresos buscaban descu- se mantuvieron vigentes los mismos regla-
brir nuevos modelos y estrategias de misión y mentos en lo que a la religión se refiere. Por
evangelización en distintos contextos de esta razón la gran cuestión religiosa durante
América Latina. Quito fue también la sede toda la primera mitad del siglo XIX fue la del
para las oficinas del Consejo Latinoamerica- patronato nacional, y aun ésta no fue tan gra-
no de Iglesias y otras organizaciones ecumé- ve como en otros países de la América Latina.
nicas, como la Confraternidad Evangélica Durante la segunda mitad del siglo XIX y la
Ecuatoriana. primera del XX, la cuestión religiosa continuó
Las Iglesias de la Asambleas de Dios, jun- siendo uno de los principales problemas polí-
to a otras denominaciones pentecostales y ticos de Colombia, pues los liberales y los con-
grupos independientes, crecían a principios servadores se distinguían principalmente por
del siglo XXI. Desde Corea llegaban misio- sus respectivas posiciones en cuanto a las rela-
neros para trabajar entre inmigrantes corea- ciones entre la Iglesia y el Estado.
nos y asiáticos y entre grupos indígenas en En el siglo XIX Panamá siguió la política
las ciudades. Paralelamente, indígenas evan- religiosa de Colombia, pero desde su indepen-
gélicos quechuas ampliaban su trabajo de dencia, en el año 1904, se garantizó la libertad
evangelización en Perú y Bolivia. de cultos.
Merecen citarse también los esfuerzos de De todos los países de la América Latina, es
«La Voz de los Andes», pionera en transmitir Colombia el que más sujeto ha estado al cato-
programas educativos y cristianos en varios licismo organizado, y el país en que el clero ha
idiomas. tenido mayor influencia en los asuntos políti-
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dando a conocer la Biblia. Por fin se establecie- centraba entre grupos marginados en los arra-
ron en Cali, y de allí su obra se extendió hacia bales de las grandes ciudades del país. La Igle-
Palmira, de donde a su vez pasó a los indios del sia Pentecostal Unida de Colombia, una divi-
interior. Chapman murió en Palmira en 1952, sion en 1969 de la Iglesia Presbiteriana de Co-
pero ya entonces se habían organizado varias lombia -por diferencias acerca del control por
congregaciones, escuelas y una imprenta, ade- parte de los misioneros norteamericanos-
más de la clínica «Maranatha». Debido a su si- contaba en el 2004 con 230.000 feligreses y
tuación geográfica en una de las regiones don- más de 1.000 congregaciones. Los bautistas
de se desató la violencia a partir de 1948, la del sur llegaron en 1941 y su trabajo se concen-
Unión Misionera Evangélica fue una de las tró en las ciudades, especialmente en Barran-
principales víctimas de esa situación, y sus quilla, donde tenían un hospital y un pequeño
miembros fueron testigos de algunas de las pe- seminario. Fundado por ellos, el Seminario
ores atrocidades cometidas durante ese tiempo. Bautista Teológico Internacional de Cali a la
A pesar de ello, el movimiento siguió crecien- postre se independizó de la misión en los Esta-
do, aunque a un paso moderado. Al escribirse do Unidos, y contribuyó activamente a la edu-
estas líneas, contaba con unas 207 congrega- cación teológica, no sólo de los bautistas, sino
ciones y una feligresía de más de 15.000. de varias otras denominaciones, tanto en Co-
Además de estas dos denominaciones, me- lombia como fuera de ella. Líderes de esta igle-
recen mencionarse la Alianza Cristiana y Mi- sia levantaban una voz profética en medio de la
sionera, las Asambleas de Dios de Colombia, violencia en el país y participaban en los movi-
la Iglesia Adventista del Séptimo Día, la Igle- mientos ecuménicos del continente, incluyen-
sia del Evangelio Cuadrangular, la Iglesia Pen- do el Consejo Latinoamericano de Iglesias.
tecostal Unida de Colombia y los bautistas. La Aunque en tiempos más recientes hubo un
Alianza Cristiana y Misionera comenzó a tra- crecimiento en las iglesias protestantes de Co-
bajar en Colombia en la tercera década del si- lombia, la verdad es que su crecimiento hasta
glo XX. Es una de las denominaciones que ha el último tercio del siglo XX fue lento. Los
crecido más rápidamente, pues en 1957 conta- efectos de la violencia de mediados del siglo
ba con 1.145 miembros y 71 lugares de culto y XX sobre las comunidades protestantes se des-
menos de medio siglo después tenía sobre criben en el siguiente informe del 1953 de la
24.000 feligreses y más de 341 congregacio- Confederación Evangélica de Colombia, pri-
nes. Las Asambleas de Dios llegan a Colombia mer organismo ecuménico, que fue organiza-
en el 1930 y para fines de ese siglo tienen una do en 1950 y que agrupaba la mayoría de los
feligresía de más de 140.000. Su librería pro- grupos protestantes en ese período:
veía recursos educativos para la mayoría de los Destrucción de iglesias: 92 iglesias han si-
grupos evangélicos en el país. La Iglesia Ad- do completamente destruidas por incendios
ventista llega a Colombia en el 1921 y concen- y dinamita y 31 edificios usados por evan-
tra su feligresía entre los negros de las islas de gélicos han sido averiados durante el mis-
San Andrés y Providencia, aunque posterior- mo período de cinco años; 10 propiedades
mente logró crecimiento en tierra firme. Para el de las iglesias evangélicas fueron decomisa-
1970 se estimaba una feligresía de 60.000 das por oficiales del Gobierno o por civiles
mientras que para finales del siglo XX había respaldados por la policía nacional.
" Cierre de escuelas evangélicas desde 1948:
sobrepasado los 200.000 feligreses. La Iglesia
del Evangelio Cuadrangular llega a Colombia 100 escuelas evangélicas de enseñanza pri-
en 1942 y sesenta años más tarde tenía unos maria han sido cerradas, 54 de ellas por or-
95.000 feligreses. Su trabajo misionero se con- den del Gobierno, las otras por causas di-
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dos mil miembros, tenía sólo un pastor pana- cias a los grupos de católicos carismáticos y
meño. En el 2000, sólo tenía unos 10.000 fe- el trabajo misionero con los indígenas y en
ligreses, y esto luego de unir las distintas ver- las ciudades.
tientes del metodismo que llegaron a Panamá
desde mediados del siglo XIX hasta mediados 2. El protestantismo
del siglo XX. Venezuela es, junto al Ecuador, uno de los
Además de los metodistas, se distinguen por países latinoamericanos en que menos se ha
su obra en Panamá los episcopales, los bautis- difundido el protestantismo. Los primeros es-
tas -especialmente los del sur- el Ejército de fuerzos protestantes parecen haberse debido a
Salvación, la Iglesia Internacional del Evange- las Sociedades Bíblicas. La primera se fundó
lio Cuadrangular, y las Asambleas de Dios. Co- en 1826, y fue de escasa duración. Unos trein-
mo en muchos países de América Latina, algu- ta años después el exfraile Montsalvatge -a
nas denominaciones no han crecido mientras quien ya hemos encontrado en Colombia-
que hay un crecimiento notable en los grupos distribuyó algunos ejemplares de las Escritu-
pentecostales y carismáticos, cuyos afiliados ras. En 1886 llegaron Milne y Penzotti, y des-
de entonces hubo en el país una sucesión ca-
sobrepasan el medio millón de personas.
si ininterrumpida de agentes bíblicos.
J. El cristianismo en Venezuela En la última década del siglo XIX comenza-
1. El catolicismo romano ron a establecerse en Venezuela algunos mi-
sioneros. De éstos los primeros parecen haber
Después de su separación de la Gran Co-
lombia, Venezuela siguió una política de unión sido los metodistas del sur, que llegaron en
entre la Iglesia y el Estado, reclamando para 1890 y que pasaron su obra a los presbiterianos
este último el derecho de patronato sobre aqué- en 1900. A partir de entonces los presbiterianos
lla. Debido a la escasez de obispos y sacerdo- han continuado trabajando en Venezuela, pero
tes, así corno a su sujeción al gobierno, la igle- su crecimiento numérico no ha sido espectacu-
sia fue perdiendo prestigio y poder hasta que en lar. También a fines del siglo XIX vinieron los
la penúltima década del siglo XIX, bajo la dic- hermanos, procedentes de Canadá. Más tarde
tadura de Antonio Guzmán Blanco, se intentó llegaron la Misión Alianza Evangélica, los her-
nacionalizarla. Naturalmente, durante todo es- manos de Plymouth, los Bautistas del Sur, las
te período se hicieron pocos esfuerzos misione- Asambleas de Dios, la New Tribes Mission y la
ros, y aun éstos muy débiles. Orinoco River Mission.
Puede decirse que el trabajo misionero en- La obra de los hermanos, cuya fuerza de
tre los habitantes originales de Venezuela - trabajo misionero se remonta al 1910, poco
es decir, hacia el sur del país- comenzó de menos de un siglo después contaba con unas
nuevo en 1891, cuando el gobierno invitó a 80 congregaciones y poco más de 20.000 fe-
los capuchinos a hacerse cargo de las misio- ligreses. Su trabajo misionero se concentraba
nes entre los indios. Este trabajo ha sido muy en la evangelización con métodos tradiciona-
fructífero, y ya bien entrado el siglo XX con- les, trabajo educativo y proyectos de coopera-
tinuaba penetrando regiones donde antes no ción y desarrollo económico. Esta denomi-
se había oído la predicación cristiana. En es- nación era una de las principales del país.
ta obra les ayudaban religiosos de otras órde- Otro grupo numeroso de protestantes en el
nes. Al comenzar el siglo XXI existían 8 ar- país es la Iglesia Adventista del Séptimo Día.
Su obra misionera comenzó en el 1910, y para
quidiócesis, con 21 diócesis y 5 vicariatos
misioneros con más de 2.400 parroquias y el 1995 contaba con una feligresía de más de
una feligresía creciente, especialmente gra- 47.000 adultos y unas 175 congregaciones.
261
Las misiones en América Latina
Empero la iglesia protestante más grande es El segundo es la tradición baja¡, una expre-
la Iglesia Asambleas de Dios cuyo trabajo mi- sión religiosa moderna que promueve la con-
sionero comenzó en 1916. Por su labor con ins- vivencia entre todas las religiones, insistien-
titutos bíblicos para la formación de un pasto- do en el pluralismo religioso, y declarando
rado nacional y laico, y su trabajo de evangeli- que todas las religiones son caminos parale-
zación entre grupos Guajiros (indígenas) ésta los para acercase a Dios, y que por ello la fe
contaba con una feligresía de más de 90,000 y baja¡, que las incluye a todas, es la mejor.
sobre 720 congregaciones.
Venezuela, como otros países de América K.El cristianismo en el Brasil
Latina, tiene algunas iglesias que surgieron 1. El catolicismo romano
del suelo nacional con liderato nacional. La En el Brasil, la obra de la Iglesia Católica
más antigua se remonta a finales del siglo nunca había tenido el alcance que tuvo en los
XIX, y es la Iglesia Aleluya. Otra es la Igle- países colonizados por España. Como hemos
sia Nativa Venezolana, también conocida co- visto en otro capítulo, esto se debió principal-
mo la Iglesia Bethel. Estas son denominacio- mente a que Portugal tenía otros territorios, al
nes pequeñas y con poco impacto social en el parecer más prometedores, que colonizar. Por
país. La Iglesia Unión Evangélica Pentecos- otra parte, la continuidad política entre el perío-
tal, cuyo origen se remonta a la década del do colonial y el del imperio facilitó la continui-
1950 representa un movimiento pentecostal, dad religiosa, y no hubo en el Brasil conflictos
chavista y profundamente ecuménico. Sus entre la Iglesia y el Estado como los que tu-
proyectos misioneros -también entre los in- vieron lugar en otros países de la América La-
dígenas guajiros- buscan una identidad pen- tina. Si la Iglesia fue débil después de la inde-
tecostal arraigada en la historia de Venezue- pendencia, esto no se debió a luchas acerca
la. Con una variedad de proyectos -evange- del patronato o la libertad de las órdenes mo-
lización, cooperativas de desarrollo económi- násticas, sino a la debilidad de la misma Igle-
co, formación de líderes nacionales, trabajo sia durante el período colonial. Como ejemplo
entre las comunidades pobres en la ciudades de esto, podemos señalar la lentitud con que
y otros- la Unión Evangélica Pentecostal se estableció la jerarquía eclesiástica, tanto
experimentó un crecimiento de 10.000 en antes como después de la independencia. A
1970 a 14.000 feligreses en 1995. Dando tes- los cien años de colonizado, el Brasil contaba
timonio a su compromiso ecuménico, esta sólo con un obispado, el de San Salvador; cien
iglesia también participaba activamente en el años después tenía siete; al fin del otro siglo,
Consejo Evangélico de Venezuela -creado diez; y a los cuatrocientos años de su funda-
en 1967-, el Consejo Latinoamericano de ción, doce. Si se tienen en cuenta la inmensi-
Iglesias y la Conferencia Ecuménica Pente- dad geográfica del país y el aumento de la po-
costal en América Latina. blación durante esos cuatrocientos años, se
Finalmente, hay dos movimientos religio- verá que el desarrollo de la jerarquía fue ex-
sos que representan un reto para las iglesias tremadamente lento.
cristianas en el país. Durante el período del imperio -procla-
El primero son los grupos religiosos espiri- mado en 1822- el Estado fue limitando y to-
tistas y afroantillanos. Estos grupos experimen- mando para sí varios de los antiguos derechos
tan un crecimiento progresivo. Por su carácter de la Iglesia. Pero la buena disposición del cle-
fluido hay una doble participación por parte de ro -en su mayoría liberal- hacia tales medi-
creyentes que asisten a iglesias cristianas y son das evitó mayores conflictos, aun cuando, en
también parte de estos grupos religiosos. 1827, el imperio declaró que el patronato ecle-
262
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
siástico correspondía al gobierno por derecho ta militar. Grupos conservadores como el Opus
propio, y no por una concesión del Papa. Po- Dei, la Cruzada del Rosario Familiar y el Gru-
co después, Pedro II proscribió las órdenes re- po para la Restauración del Rosario contribu-
ligiosas dirigidas desde el extranjero. Ya en yeron a la caída del gobierno democrático y
esa época, las pocas misiones que antes se pu- apoyaron el régimen militar hasta que cayó en
dieron fundar habían caído en un estado de 1985. No obstante, para el 1969 y dada la per-
abandono casi total. En los últimos veinte años secución del régimen militar a la Iglesia, ésta
del gobierno de don Pedro II, hubo algunas rompe relaciones con el gobierno militar y se
misiones franciscanas en el interior, capuchi- generan una serie de confrontaciones y con-
nas en la costa, y dominicas en el Alto Ara- flictos entre la jerarquía de la Iglesia y el go-
guay, aunque siempre bajo la supervisión del bierno. Por ello, la jerarquía también enfrentó
Estado. En 1883 los salesianos se establecie- conflictos internos con organizaciones católi-
ron en el país, especialmente en el Matto Gros- cas conservadoras que apoyaban el gobierno
so, y en 1894 llegaron los redentoristas, cuyo militar.
principal trabajo misionero tuvo lugar en Mi- Los movimientos progresistas como Acción
nas y Goiás. Católica y los movimientos de educación casi
En 1889 se proclamó la república, y dos desaparecen dada la persecución del régimen
meses después -ya en 1890- se decretó la militar. Muchos sacerdotes, monjas y obispos
separación entre la Iglesia y el Estado, la liber- que sirvieron a estos grupos y otras organiza-
tad de culto y de asociación religiosa, y el de- ciones católicas fueron muertos por su oposi-
recho de todas las confesiones e iglesias a la ción a la dictadura militar. Para el 1980 el con-
personalidad jurídica. flicto entre la Iglesia y el gobierno llega a un
Aunque los católicos conservadores espera- punto de saturación cuando el último expulsa
ban que la proclamación de la república, con del país a misioneros y misioneras envueltos
su nueva política religiosa, sería un serio revés en el reforma agraria y la protección de los
para la Iglesia, lo que sucedió fue todo lo con- derechos de los campesinos. Es en este contex-
trario. La Iglesia, privada de una tutela que le to donde la Iglesia genera una obra misionera
daba cierta seguridad, pero que le quitaba to- impresionante que contribuirá al derrocamien-
da iniciativa, quedó libre para lanzarse a nue- to del gobierno militar.
vas empresas misioneras. Durante la última Durante la segunda parte del siglo XX el
década del siglo XIX y la primera del XX, mi- catolicismo en Brasil experimentó una gran
sioneros procedentes de varios países de Euro- renovación por las «Comunidades Eclesiales
pa emprendieron de nuevo la evangelización de Base». El pueblo mismo tomó las Escritu-
de los indígenas. ras y las interpretaba desde un ángulo políti-
Durante todo el siglo XX continuó la labor co y en busca de justicia para los millones de
misionera en el interior del país, pero en 1956 pobres en el país. La pedagogía de Pablo
había 32 territorios que la Iglesia todavía lla- Freire despertó en el pueblo un nuevo senti-
maba «misionales». Y aún entonces, el proble- do de protagonismo en la historia del Brasil,
ma misionero no estaba tanto entre las tribus y la iglesia no estuvo ausente en este desper-
del interior como en las grandes masas «des- tar. El trabajo misionero tomó un giro de libe-
cristianizadas» de las ciudades. ración, justicia y resistencia, señalando que el
La segunda mitad de la década del 1960, y evangelio tenía algo que decir sobre el pro-
hasta mediados de la del 1980 fue una época blema de la dictadura militar, la lucha de cla-
muy triste y penosa para la Iglesia Católica. En ses, el derecho de los campesinos a la tierra,
1964 hay un golpe de estado y se crea una jun- el derecho al trabajo, la injusticia en la distri-
263
HIIiI1
bución de los bienes, y la falta de educación Para finales del siglo XX y principios del
y de recursos básicos. siglo XXI, y a tono con el tema misiológico
La vitalidad misionera de la iglesia en el del Consejo Mundial de Iglesias, «Justicia, Paz
Brasil no sólo se hizo sentir en su acción po- e Integridad de la Creación» y con los recien-
lítica y solidaria con el pueblo. También hu- tes acontecimientos en la teología ecológica
bo cambios en las estructuras de la Iglesia feminista católica, el trabajo misionero toma
misma. Centros de formación pastoral se cre- una nueva vertiente: la ecología. Misioneros y
aron para la educación de un laicado com- misioneras nacionales y extranjeros trabajan
prometido con la Iglesia. La participación de junto a grupos de campesinos e indígenas en la
las mujeres -tanto laicas como miembros de protección de la Amazonia. Esta misión tiene
órdenes misioneras- en las comunidades dos componentes: por un lado, es una obra mi-
eclesiales de base creó nuevos espacios que sionera que recalca la integridad de la crea-
empujaron a la reflexión sobre el lugar de la ción, y por tanto el derecho y la justicia que
mujer en la Iglesia. La Iglesia comenzó a re- necesita la creación frente a la explotación de
conocer el papel de los indígenas y los negros sus recursos; y por otro, protege los derechos
en la contextualización del evangelio, promo- de poblaciones antiguas que aún viven en las
viendo y apoyando nuevas liturgias que en- selvas amazónicas.
carnaran la cultura de éstos que por tanto Junto a esta actividad de finales de siglo XX
tiempo había sido atropellada. y principios del XXI, también hay que destacar
Un ejemplo elocuente de este trabajo fue el los movimientos de carácter más conservador.
que realizó el obispo Dom Hélder Camara, El Opus Dei, los movimientos carismáticos, los
paladin por la justicia de los pobres y los mar- programas para la familia y el trabajo misione-
ginados. Este obispo de Recife, líder clave en ro en las ciudades y a través de los medios de
la creación del Consejo Episcopal Latinoa- comunicación realizan una evangelización inte-
mericano (CELAM), de otras organizaciones gral -una evangelización con estilo protestan-
católicas en el continente, y de la organiza- te- evitando la superficialidad religiosa nomi-
ción nacional e internacional que contribuyó nal. Parte de este trabajo misionero -en cohe-
al derrocamiento de la dictadura, no sólo pro- rencia y simultáneamente en tensión con la pro-
movió la teología latinoamericana de la libe- puesta de la «nueva evangelización»- es depu-
ración sino que fomentó lo que posteriormen- rar la fe católica de las influencias del espiritis-
te se llamará -en la reunión del Consejo mo cardesiano, de las tradiciones afrobrasileñas
Episcopal en Santo Domingo en 1992- la tales como el Candomblé y el Umbanda, y un
«nueva evangelización». Esta nueva evangeli- secularismo e individualismo desbocados, re-
zación une el reconocimiento de la historia sultados del capitalismo voraz en el país.
violenta de la evangelización en América La- Debemos notar que la comunidad japonesa
tina y del desarraigo que esta evangelización del Brasil -casi unos 1,3 millones- eran en
promueve para los pueblos pobres con un apo- su mayoría cristianos católicos y que éstos re-
yo y afirmación de la contextualización del presentaban doble número de los cristianos ca-
evangelio en las culturas marginadas. Bajo el tólicos que había en Japón.
obispado de Dom Hélder Camara se da a co- A comienzos del siglo XXI, la Iglesia tenía
nocer «la misa de los quilombos», una liturgia unas 255 jurisdicciones -arquidiócesis, dió-
con raíces en la experiencia de los negros bra- cesis, vicariatos, etc.- con más de 35.598 pa-
sileños de Recife y Bahía y en su historia de rroquias. En contraste con muchos países de
esclavitud y de prácticas religiosas afrobrasi- América Latina, no se esperaba un decreci-
leñas. miento significativo en la Iglesia.
264
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
265
- 1
Las misiones en América Latina
de «padre protestante» y «padre loco». Cuan- quería que su mensaje consistiera principal-
do contaba con 40 años de edad sufrió una mente en la negación de todo cuanto fuese ca-
profunda crisis espiritual semejante a la de Lu- tólico. Al contrario, trataba de presentar un
tero, precisamente acerca de la cuestión de la mensaje que fuese la purificación y culmina-
justificación por la fe y la relación que esto tie- ción de lo que sus oyentes habían recibido de
ne con las indulgencias y las obras meritorias. sus antepasados.
Por razón de esa crisis, abandonó el sacerdocio A partir de la época de Conceiçño y los pri-
y se retiró al campo. Allí lo visitó el misione- meros misioneros, el presbiterianismo brasile-
ro protestante Blackford, quien había oído ha- ño ha continuado desarrollándose. En 1957
blar de este «padre protestante». En 1864 fue contaba con mas de 76.000 miembros, organi-
bautizado en la Iglesia Presbiteriana de Río de zados en seis sínodos diferentes. Para entonces
Janeiro. contaba con varios institutos bíblicos y tres se-
Tras su bautismo, el «padre protestante» se minarios -el de Campinas, el Seminario Pres-
sentía apesadumbrado por haber enseñado lo biteriano do Norte y el Seminario Presbiteria-
que ahora consideraba el error católico ro- no do Centenario. Tenía además varias publi-
mano. Por esta razón escribió una «profesión caciones periódicas, una casa editora y varios
de fe evangélica», en la que exponía su crisis programas radiales.
espiritual y las razones que le habían llevado Todo este desarrollo no se ha logrado sin
a abrazar el protestantismo. Luego se dirigió dolores de crecimiento. El principal problema
a Brotas, la última parroquia donde había fue el de las relaciones entre la Iglesia brasile-
ejercido el sacerdocio católico. Allí comenzó ña y las de los Estados Unidos -tanto del
a predicar su nuevo mensaje, y fundó una Norte como del Sur- que con sus misioneros
iglesia presbiteriana que creció rápidamente y sus fondos contribuían a la obra en el Brasil.
y que fue también un centro misionero a par- Desde los inicios de su trabajo, los misioneros
tir del cual se fundaron otras iglesias. Des- norteamericanos habían afirmado su intención
pués de fundar la Iglesia Presbiteriana de de entregar la dirección y sostenimiento de la
Brotas, Conceição comenzó una vida de pre- iglesia a los brasileños tan pronto como fuese
dicador itinerante, visitando especialmente posible. Pero este principio, que resulta tan
los lugares en que había sido sacerdote. Du- claro en la teoría, fue muy difícil de llevar a la
rante cuatro años su predicación esparció y práctica.
sembró la fe evangélica, al tiempo que sus Los conflictos entre los brasileños y los mi-
viajes y privaciones iban minando su salud. sioneros comenzaron a fines del siglo XIX. La
Pronto los misioneros comenzaron a oponer- figura principal entre los propugnadores de
se a la estrategia de Conceiçáo, que no pare- una iglesia autónoma era Eduardo Carlos Pe-
cía capaz de pasar de la evangelización a la reira, hábilmente secundado por su amigo Re-
organización de la iglesia. Pero el «padre lo- migio de Cerqueira Leite. Aunque los pastores
co» continuó sus viajes evangelizadores has- brasileños constituían todavía una minoría, Pe-
ta que cayó desplomado en el camino en el reira pudo aumentar su influencia aprovechan-
año 1873. Sus últimos instantes fueron tales do la división que existía entre los misioneros
que quien le acompañó en el lecho de muer- procedentes del Norte de los Estados Unidos y
te, que ni siquiera le conocía, se sintió impul- los que venían del Sur. Colocándose entre am-
sado a estudiar y aceptar la fe protestante y a bos grupos, y sirviendo de balanza, el peque-
escribir una biografía de Conceição. ño núcleo brasileño constituía un poder que
Acerca de los métodos y la actitud misione- tenía que ser tomado en cuenta. Era también
ra de Conceiçño, es importante señalar que no una época de gran auge del sentimiento nacio-
266
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
nalista, lo cual contribuía a despertar el interés los demás protestantes del país. En el Brasil,
en la formación de una iglesia presbiteriana con una fuerte tradición positivista, y donde un
autónoma. humanismo racionalista podía muy bien cons-
Al principio, Pereira y los suyos se limita- tituirse en religión, la cuestión masónica tenía
ron a la fundación de una «Sociedad Brasile- indudablemente gran importancia.
ña de Tratados Evangélicos» que publicaba fo- Cuando el sínodo de 1903 se negó a decla-
lletos escritos casi exclusivamente por pastores rar la masonería incompatible con el cristianis-
nacionales. A esto siguió un «plan de misiones mo, Eduardo Carlos Pereira se retiró de él jun-
nacionales». to a un grupo de sus partidarios. Ya en ese mo-
Pero el verdadero punto de conflicto estuvo mento se trataba más de un sentimiento contra
en la cuestión de las escuelas y seminarios, y los misioneros que de otra cuestión, y se dice
especialmente el Instituto Mackenzie. La ma- que algunos de los partidarios de Pereira se
yoría de los misioneros procedentes del Norte retiraron del Concilio gritando «abajo el ame-
de los Estados Unidos pensaba que el mejor ricanismo».
medio para la evangelización del Brasil era el Pereira y los suyos constituyeron la Iglesia
establecimiento de escuelas que sirvieran pa- Presbiteriana Independiente, que perdura has-
ra poner a los brasileños en contacto con la ta el día de hoy. En 1957 contaba con poco
cultura y el protestantismo de los Estados Uni- más de 22.000 miembros, y en el 1995 con
dos. Pereira y los suyos abogaban por que se unos 90.000. lo cual hace de ella la segunda
dedicasen los fondos misioneros a una obra iglesia presbiteriana más numerosa en el país.
de evangelización más directa, y especialmen- En cuanto a Pereira, continuó luchando por el
te a la preparación de ministros nacionales. Su crecimiento de esta nueva iglesia y por la
principal opositor en este proyecto era el doc- evangelización del Brasil, aunque lentamente
tor Horace Lane, director del Instituto Mac- fue haciendo más moderada su posición nacio-
kenzie. Aunque Pereira logró que se enviase nalista. En los últimos años de su vida se en-
una solicitud a los Estados Unidos en el senti- tregó a un misticismo profético según el cual
do de que los fondos se empleasen para méto- Jesucristo habría de volver en breve.
dos más directos de evangelización, su campa- Aunque la Iglesia Episcopal de los Estados
ña no dio resultados por razón de la oposición Unidos había intentado establecerse en el Bra-
de los misioneros del Norte. sil desde 1853, su obra permanente comenzó
Relegada a un segundo plano la cuestión de en 1888. Esta misión se estableció con la venia
los colegios, Pereira comenzó una nueva cam- y cooperación de los presbiterianos, que die-
paña que dio lugar a lo que se conoce como ron a los episcopales la responsabilidad de tra-
«la cuestión masónica». Muchos de los misio- bajar en el estado de Rio Grande do Sul, de
neros norteamericanos eran masones, y lo mis- donde retiraron al misionero que allí trabajaba
mo sucedía con algunos pastores nacionales y a fin de dejar el campo libre a los episcopales.
con buen número de los miembros de las igle- Estos celebraron su primer servicio en 1890 en
sias. Pereira afirmaba que, puesto que la maso- Porto Alegre. Poco después llegó otro contin-
nería parte de presuposiciones que dan excesi- gente de misioneros, y ya en el año 1899 había
vo valor al ser humano, y puesto que el Gran un obispo residente de la Iglesia Episcopal en
Arquitecto del Universo no es en modo algu- el Brasil.
no el Dios Trino de la iglesia cristiana, un ver- La segunda mitad del siglo XIX vio el co-
dadero creyente en Jesucristo no podía ser ma- mienzo de varias empresas misioneras en el
són. Esto dio lugar a una amarga controversia, Brasil. Después de la guerra civil en los Esta-
primero entre los presbiterianos, y luego entre dos Unidos, muchos sureños de ese país emi-
267
Las misiones en América Latina
graron hacia el Brasil, y las iglesias de donde ta independiente. Pero este cisma perdió gran
procedían comenzaron a tener conciencia de la parte de su impulso cuando su dirigente regre-
necesidad de enviar misioneros. Así, la Iglesia só a la Iglesia Católica. Poco tiempo después
Metodista Episcopal se estableció en el Brasil surgió en el norte, y bajo la dirección de
en 1870 -pues la obra que antes habían co- Adriáo Bernardes, otro movimiento de inde-
menzado los metodistas no duró más que unos pendencia eclesiástica que dio origen a un cis-
pocos años. Lo mismo sucedió con los presbi- ma mucho mayor que el de Pereira. Entre los
terianos del sur, que penetraron en el país en bautistas, sin embargo, el problema de la crea-
1871, y con los los bautistas, cuya obra data de ción de una iglesia autónoma tomó un giro di-
1881. Casi a fin de siglo, en 1893, los congre- ferente del que había tomado entre los presbi-
gacionalistas norteamericanos organizaron una terianos, pues la organización congregaciona-
misión a la que dieron el título de Help for lista de las iglesias bautistas hacía que se pro-
Brazil. dujese una situación mucho más fluida que la
A partir de la obra de los primeros misione- que existía en otras denominaciones. Así, en-
ros, el protestantismo ha continuado desarro- tre los bautistas, la solución que se halló al
llandose de manera sorprendente. Este desa- problema fue el desarrollo de un sistema ultra-
rrollo se ha logrado con un número limitado de congregacionalista. A esto contribuyó el pro-
misioneros, y se ha debido en buena medida a pio Adrião Bernardes, que veía en ese sistema
las conversiones espontáneas mediante la lec- la ocasión para destruir la centralización del
tura de la Biblia, y a la obra de brasileños con- poder en manos de agentes extranjeros.
vertidos al protestantismo. También los portu- Las demás iglesias han tenido problemas
gueses han tenido una importancia grande en semejantes a los de la presbiteriana y la bautis-
la expansión del protestantismo desde que el ta, aunque en menor grado. Paulatinamente to-
doctor Kalley llegó al Brasil con su contin- das colocaron en posiciones de mayor respon-
gente de conversos de esa nacionalidad. Ade- sabilidad a los dirigentes nacionales, aunque a
más, la amplia inmigración procedente de pa- principios del siglo XXI había todavía algunas
íses protestantes ha contribuido al aumento nu- que dependían en exceso de fondos proceden-
mérico del protestantismo en el Brasil. Aun- tes de los Estados Unidos.
que tal inmigración no se debió a intereses mi- Otro modo de establecer una iglesia autó-
sioneros, algunas de las iglesias surgidas de noma fue el seguido por los pentecostales.
ella, al entrar en contacto con la población y Este movimiento penetró en el Brasil cuando
cultura del país, comenzaron a sentir una obli- en 1911 algunos misioneros pentecostales
gación misionera. suecos comenzaron a trabajar en Belém. En
Al igual que la Iglesia Presbiteriana, pero el 2005, los dos grupos más fuertes eran las
en menor grado, las demás denominaciones Asambleas de Dios y las Congregaciones
del Brasil tuvieron dificultades de crecimien- Cristianas del Brasil. Las primeras eran espe-
to en lo que se refiere a las relaciones entre los cialmente numerosas en el norte del país,
misioneros extranjeros y los dirigentes nacio- mientras que lo contrario ocurría con las ul-
nales. Aparte de la Iglesia Presbiteriana, la de- timas, que eran más numerosas en el estado
nominación que más sufrió por causa de esta de São Paulo y los alrededores. Para esa fe-
tensión fue la Bautista. En ella, el principal cha la primera tenía un feligresía de más de
dirigente de los nacionales fue Antonio Perei- 23 millones y la segunda de poco menos de 4
ra, quien, al igual que Eduardo Carlos Pereira millones.
en la Iglesia Presbiteriana, se separó de su de- Un tercer grupo de iglesias surgió con la
nominación, creando una organización bautis- llegada de misioneros y misioneras de socieda-
268
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
La Universidad Metodista de São Paulo es una de las más prestigiosas del Brasil.
des conservadoras de los Estados Unidos des- un tiempo de profunda incertidumbre, diva-
pués de la Segunda Guerra Mundial. Muchas gando entre un evangelio arraigado en la jus-
de estas iglesias, aunque tuvieron un creci- ticia y otro que se ocupaba sólo de la promesa
miento progresivo, no mostraban el mismo de vida eterna, con poco interés en la vida ac-
crecimiento que las tradiciones pentecostales y tual del pueblo.
carismáticas. No obstante, muchas iglesias protestantes
La proliferación de iglesias protestantes y dieron un testimonio de solidaridad y justicia
pentecostales en el Brasil se debió a las mu- ante la dictadura militar. Tal fue el testimonio
chas divisiones que éstas han experimentado. de la tercera asamblea del Consejo Latinoame-
Por ejemplo, la tradición presbiteriana ha ex- ricano de Iglesias, que se celebró en Brasil en
perimentado más de tres divisiones principales 1988. Además, teólogos y teólogas brasileños
-tanto por razones teológicas como ideológi- han contribuido de forma significativa a orga-
cas. La Iglesia Evangélica Luterana también nizaciones ecuménicas y evangélicas tales co-
sufrió una división, creando la Iglesia Evangé- mo Iglesia y Sociedad, la Comisión Evangéli-
lica Luterana del Brasil con relaciones frater- ca Latinoamericana de Educación Cristiana, el
nales con los luteranos de Missouri. Muchas Consejo Mundial de Iglesias, la Fraternidad
de las pequeñas iglesias pentecostales son el Teológica Latinoamericana, el Movimiento de
resultado de divisiones a causa de asuntos doc- Lausana, y la Cooperación Misionera Iberoa-
trinales y eclesiales. mericana.
Al igual que la Iglesia Católica, las iglesias Un ejemplo de tal contribución desde el
protestantes y algunas iglesias pentecostales contexto misional fue el trabajo teológico del
sufrieron durante el régimen militar. Además misionero presbiteriano Richard Schaull. Hay
de divisiones de carácter ideológico, vivieron dos contribuciones importantes de Schaull al
269
Las misiones en América Latina
quehacer misional latinoamericano: primero, Finalmente, desde fines del siglo XX mu-
la teología de Schaull es un antecedente im- chas iglesias protestantes, tanto de corte más
portante a la perspectiva protestante de la teo- tradicional como pentecostales, enviaban mi-
logía latinoamericana de la liberación; y se- sioneros y misioneras a distintas partes del
gundo, Schaull descubre en el pentecostalismo mundo. Brasileños protestantes también emi-
«una nueva reforma» para las iglesias históri- graban a los Estados Unidos y a Europa, en-
cas y un modelo de misión que encarna la op- contrando en las iglesias que trabajaron antes
ción preferencial de los pobres. en su país un nuevo refugio personal y un es-
Las iglesias protestantes del Brasil también pacio para una vocación misionera hacia otros
se destacaron por su trabajo en el campo edu- inmigrantes en el nuevo país.
cativo. La Iglesia Metodista, la Iglesia Presbi-
teriana y otras han desarrollado algunos de los 3. El cristianismo oriental
más prestigiosos centros de educación secular Hay en el Brasil un reducido número de
y religiosa en la nación. cristianos orientales. A principios del siglo
El peritecostalismo en Brasil ha crecido de XXI tenían representación cinco familias de
una forma sorprendente. Hay cientos de igle- las iglesias orientales, con la mayor feligresía
sias de carácter pentecostal y carismático tan- en la Iglesia Ortodoxa Rusa. Las estadísticas
to en las ciudades como en la ruralía. Como indican que aunque eran un número reducido
resultado del pentecostalismo, hay nuevos -no más de 180.000 cristianos orientales-
movimientos que han incorporado los estilos todas estas comunidades experimentaban un
del pentecostalismo clásico, la cosmovisión crecimiento lento debido mayormente de la
espiritista, y una teología de la prosperidad. inmigración.
La Iglesia Universal del Reino de Dios, la
iglesia nacional más grande en el Brasil, es un L. El cristianismo en la América Central
claro ejemplo de este nuevo fenómeno neo- 1. El catolicismo romano
pentecostal. Mientras perteneció al Imperio Mexicano
Con todo y el crecimiento del protestantis- de Iturbide, la América Central siguió la poli-
mo nacional, hay misioneros y misioneras ex- tica religiosa de éste, que consistía en proteger
tranjeros trabajando en todo el país. La mayo- los privilegios de la Iglesia. Esta política con-
ría de este trabajo toma una de las siguientes tinuó cuando la América Central proclamó su
formas: (1) misioneros y misioneras que independencia. Con la constitución de los Es-
«acompañan» a las iglesias en su desarrollo; tados Federados de Centroamérica, y debido a
(2) un número de agentes de misión que tra- la lucha entre liberales y conservadores, las
ducen las Escrituras a lenguajes de los indí- relaciones entre la Iglesia y el Estado comen-
genas y que trabajan en la selva no sólo en la zaron a sufrir. La cuestión más delicada era la
traducción, sino en la protección de los dere- del patronato nacional, que se complicaba to-
chos de los pueblos indígenas; (3) misioneros davía más que en los otros países de la Amé-
y misioneras que trabajan con sociedades mi- rica española por cuanto se discutía si pertene-
sioneras en proyectos específicos tales como cía al gobierno federal o a los diversos gobier-
el trabajo con los niños y niñas de la calle, la nos estatales. Esta situación salió a la superfi-
violencia doméstica y otros proyectos en las cie con la cuestión de la diócesis de San Salva-
ciudades o en comunidades rurales; y (4) mi- dor, erigida por el gobierno local contra la vo-
sioneros y misioneras que son parte de la fa- luntad de las autoridades federales y aun de
cultad de institutos, seminarios o universida- Roma. Algo semejante sucedió en San José,
des. aunque el conflicto se evitó cuando el fraile
270
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
que había sido nombrado obispo se negó a en el país, aunque cabía preguntarse si esta
aceptar esa dignidad. mejoría sería permanente, ya que se debía a sa-
La lucha entre liberales y conservadores dio cerdotes extranjeros recién llegados al país.
en el predominio de aquéllos durante los últi- Las últimas décadas del siglo XX marcaron
mos diez años de la Federación (1829-1839). el trabajo misionero en el país. Bajo la inspi-
Durante ese período se promulgó la tolerancia ración del Concilio Vaticano Segundo y la se-
religiosa, y los registros civiles se colocaron en gunda conferencia del Episcopado Latinoame-
manos del Estado. El gobierno abolió las órde- ricano en Medellín (1968), la liturgia se cam-
nes monásticas y confiscó su propiedad. El re- bió al español. No obstante, tal cambio sirvió
sultado de todo esto fue la violenta reacción de muy poco en la vida de los amerindios. Por
conservadora que, con el apoyo de la mayoría otro lado, los agentes de misión ya habían no-
del clero, puso término a la Federación, divi- tado la grave crisis de pobreza entre los cam-
diéndola en las actuales repúblicas centroame- pesinos mestizos e indígenas de la región y
ricanas. habían comenzado a desarrollar cooperativas
A partir de la disolución de la Federación, comunitarias. Esta iniciativa vino por parte de
las diversas repúblicas centroamericanas han los Padres Maryknoll y los sacerdotes del Sa-
seguido diversos caminos políticos, aunque la grado Corazón en Quiché, de sacerdotes cana-
tendencia general ha sido hacia la separación dienses en Oriente y Sololá, y de los benedic-
entre la Iglesia y el Estado. tinos en Sololá.
En Guatemala, los conservadores perdie- Desafortunadamente -y caso común para
ron el poder con la revolución de Manuel Gar- toda América Central en este período- el tra-
cía Granados. El gobierno liberal que entonces bajo de las cooperativas fue visto por el go-
se estableció promulgó leyes con respecto a la bierno como proyectos comunistas, y tanto los
Iglesia que continuaron vigentes hasta bien agentes de misión como el campesinado fue-
avanzado el siglo XX -aunque algo modifi- ron duramente perseguidos durante los años
cadas por el concordato de 1888, en el cual el de las dictaduras de Arana, Lucas y Ríos
gobierno renunció al derecho de patronato na- Montt. Los proyectos populares, que mantení-
cional, mientras que el papado abandonó toda an una relación estrecha con las «comunidades
pretensión de privilegios especiales para la eclesiales de base», se veían como auxiliares
Iglesia en Guatemala. Esta situación ha sido de los grupos guerrilleros y movimientos co-
desfavorable para la Iglesia Católica en Guate- munistas, y por ello sufrieron la violencia des-
mala, así como para lo que concierne a su la- bocada de un gobierno dedicado a la ideología
bor misionera. Aunque los más de los sacerdo- de la «seguridad nacional». Esto continuó cre-
tes diocesanos eran guatemaltecos, casi todos ando una grave tensión entre el trabajo misio-
los regulares eran extranjeros. La labor misio- nero de base y la jerarquía de la iglesia.
nera se centraba en una administración apostó- Además de las cooperativas y proyectos po-
lica y en una prelatura nullius, y en ella se des- pulares, hubo proyectos pastorales tales como
tacó la labor de los Padres Maryknoll y de los el «Centro para el Desarrollo Integral» en
franciscanos. Sin embargo, la situación misio- Huehuetenango, centros de retiros y progra-
nera de Guatemala era bastante triste por razón mas de espiritualidad, y estaciones radiales pa-
de la inmensa proporción de la población que ra la formación educativa del pueblo. No obs-
vivía lejos de toda ministración eclesiástica. A tante, los agentes misionales confrontaron pro-
principios del siglo XXI esta situación mejora- blemas tales como la falta de comunicación
ba gracias al considerable aumento en el nú- entre los líderes de los programas, la continua
mero de sacerdotes regulares que trabajaban presencia de personal extranjero y las tensio-
271
Las misiones en América Latina
nes con la jerarquía. La postura ambigua de es- Al despuntar el siglo XXI, la Iglesia Cató-
ta última ante la represión y opresión del pue- lica continuaba teniendo serios problemas mi-
blo quebró el trabajo misionero. Aunque hubo sionales y eclesiales. La distancia cultural en-
intentos de desarrollar una pastoral de conjun- tre los obispos y el clero nacional, por una par-
to, algunos obispos no apoyaron las gestiones te, y los misioneros y misioneras extranjeras,
y el ya difícil trabajo misionero continuó ais- por otra, dificultaba el desarrollo de una pasto-
lado y falto de coordinación. ral contextual. Mientras los primeros se incli-
Las últimas décadas del siglo XX fueron vio- naban hacia la población «ladina» -es decir,
lentas. Los agentes de misión se vieron bajo de habla española- los últimos trabajaban
continuo ataque de parte de los gobiernos y las principalmente entre los indígenas y otras per-
dictaduras. Esto fue parte de una persecución sonas marginadas. Por otro lado, después del
de los elementos populares y amerindios que lu- proceso de paz la mayoría de los agentes de
chaban por el respeto a la vida, los derechos hu- misión extranjeros fueron colocados en pro-
manos, y el derecho a la tierra. En consecuencia, yectos no relacionados a la pastoral y al minis-
los proyectos educativos y de concientización terio eclesial. Sí había fuera de la diócesis de
eran mal vistos y hasta perseguidos. El episco- Ciudad Guatemala algunos proyectos de desa-
pado de Guatemala se vio dividido ante esta si- rrollo económico y social, aunque las relacio-
tuación política, aunque periódicamente se escu- nes de éstos con la diócesis eran tensas. Es-
chaba la voz profética que demandaba al go- tructuralmente, la iglesia tenía 10 diócesis con
bierno transparencia e integridad. Esta crisis po- 3 vicariatos, y una feligresía de aproximada-
lítica y religiosa -a la cual también se unieron mente 8 millones.
los terremotos del 1976- produjo más de un La historia eclesiástica en El Salvador es
millón de refugiados en el norte del país, la ma- semejante a la de Guatemala. En 1842, el Pa-
yoría de ellos amerindios, así como miles de pa accedió a una petición de la nueva repúbli-
muertos. Por tanto, el trabajo misionero tam- ca e instituyó la diócesis de San Salvador. Du-
bién incluyó la protección y el cuidado de los in- rante los primeros años, el gobierno fue con-
dígenas refugiados, la provisión de recursos pa- servador y protegió los privilegios de la Igle-
ra personas indigentes en la ciudad, y posterior- sia y del clero. Pero en 1871 se produjo una
mente la reubicación de los amerindios a sus reacción liberal semejante a la de Guatemala.
comunidades. Es en medio de este caos político, Dicha revolución, y la constitución que en
religioso, y cultural que se escuchó la voz pro- 1886 surgió de ella, se caracterizaron por su
fética de la poetisa Julia Esquivel, reclamando interés en la separación entre la Iglesia y el Es-
justicia y paz para los indígenas y para el pueblo tado. A partir de entonces, la constitución de
pobre oprimido y desplazado. El Salvador ha garantizado la libertad de cul-
Aún luego de la propuesta de paz a finales tos, el carácter laico de la educación y la lega-
del siglo XX y de la influencia política y cultu- lidad del matrimonio civil.
ral que dio el premio Nobel de la Paz a Rigober- Al igual que en Guatemala, las últimas dé-
ta Menchú -indígena guatemalteca que defen- cadas del siglo XX fueron violentas. Para fi-
día los derechos de los amerindios- la Iglesia nales de la década de 1960 llegó a El Salva-
Católica en Guatemala experimentó violencia dor un contingente de misioneros y misione-
dirigida hacia sus líderes eclesiales que investi- ras formados por la teología del Segundo
gaban la violación de derechos humanos du- Concilio Vaticano y, posteriormente, de Me-
rante las últimas cuatro décadas del siglo XX - dellín. Su trabajo misionero se concentró en
entre ellos el caso de un obispo quien fue ase- los grupos populares y tenía como propósito
sinado. contribuir al desarrollo económico de comu-
272
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
nidades pobres y marginadas. Junto a este tra- El catolicismo parecía dividido entre un ca-
bajo desarrollista, se vuelca la iglesia en el tolicismo tradicional de clase media alta y al-
estudio de la Biblia y las «comunidades ecle- ta, otro popular arraigado a la base y oscilan-
siales de base» se convierten en un espacio de te entre la memoria de su militancia política y
reflexión y trabajo comunitario de liberación. el vacío político del momento, y un tercer ca-
Para finales de la década del 1960 y mediados tolicismo sincretista con tradiciones antiguas
la próxima, las «comunidades eclesiales de indígenas. Todavía la mayoría del clero reli-
base» se han formado en muchas parroquias gioso era extranjera, mientras que lo contrario
de la arquidiócesis de San Salvador -la pri- sucedía con el clero diocesano, lo cual agrava-
mera en Suchitoto. En este período también ba las tensiones en el trabajo misionero.
comienza un diálogo informal entre algunos En Honduras, el partido conservador no lo-
sacerdotes y líderes de la guerrilla. Esto trae- gró retener el poder mucho más tiempo que en
ría como consecuencia una persecución y Guatemala y El Salvador. En 1880, los libera-
violencia que llegarían hasta la más alta jerar- les revocaron el concordato que había sido fir-
quía de la iglesia. mado en 1852, y promulgaron una constitu-
En El Salvador, como en Guatemala, misio- ción que separaba la Iglesia del Estado y ga-
neros y misioneras fueron asesinados por su rantizaba la libertad religiosa. A partir de en-
trabajo con las comunidades. Entre estos muer- tonces, a pesar de algunas dificultades surgidas
tos se contaban cuatro monjas asesinadas en del sentimiento católico de la población, las le-
1984. La pastoral de acompañamiento del arzo- yes han garantizado esta libertad.
bispo Oscar Arnulfo Romero fue una valiosa La situación de la iglesia en Honduras es
contribución de la iglesia salvadoreña a la refle- una de las más deprimentes en toda América
xión teológica en torno a la violencia y la justi- Latina En el año 1962 había en el país sólo
cia. En medio de las luchas de la guerrilla y de 154 sacerdotes. Aunque los cargos de adminis-
la política militar del gobierno, la iglesia optó tración estaban en manos de sacerdotes hondu-
por la protección de los pobres y la lucha por la reños, todos los religiosos que se ocupaban en
justicia, y por esto sufrió gran violencia. Junto parroquias eran extranjeros, y casi la mitad de
a muchos mártires anónimos, el arzobispo Ro- los sacerdotes diocesanos también lo eran. Es-
mero fue asesinado en 1980 mientras celebraba te dato es tanto más desalentador por cuanto el
la misa. Todavía, cuando ya estaba comenzan- número de sacerdotes diocesanos se encontra-
do el proceso de paz en 1989, cuatro sacerdotes ba en vías de disminución, al tiempo que la po-
jesuitas y su doméstica e hija fueron asesinados. blación aumentaba con una rapidez sorpren-
Aunque a finales del siglo XX se llega a dente. Aunque la situación había mejorado al-
una tregua en El Salvador, la situación de la go cuarenta años más tarde, esencialmente era
iglesia sigue siendo una de profunda ambigüe- la misma.
dad. Las tensiones entre los grupos populares En lo que se refiere a las misiones, éstas se
de base y la jerarquía de la iglesia persistían. llevaron a cabo en el vicariato apostólico de
La violencia en el país era de carácter social San Pedro Sula y en la prelatura nullius de la
más bien que militar, pues resultaba de la po- Inmaculada Concepción de Olancho. La tota-
breza que el pueblo sufría al tiempo que la res- lidad de los sacerdotes que trabajaban en las
puesta de la iglesia conservaba cierta ambi- parroquias de estas dos circunscripciones era
güedad. Algunos trabajos de base continua- extranjera.
ban, pero su enfoque era de sobrevivencia y re- Por otro lado, después de los años 1960 la
sistencia, más que de transformación de la rea- iglesia tomó un poco más de acción misione-
lidad social. ra. Esta ha tomado la forma de proyectos co-
273
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munitarios sociales, apostolados del laicado, rácter marcadamente extranjero refleja la fal-
proyectos de desarrollo económico y educati- ta de vitalidad de la iglesia nicaragüense.
vo, la integración de la liturgia a la vida de las Al igual que en Guatemala y El Salvador,
parroquias y de las comunidades y una preocu- las últimas décadas del siglo XX fueron vio-
pación por una pastoral contextual. No obs- lentas. Bajo la dictadura de Anastasio Somo-
tante, la mayoría de este trabajo continuaba en za la iglesia recibió ciertos privilegios y be-
manos de misioneros y misioneras extranje- neficios, y por otro lado sufrió persecución,
ros. Para fines del siglo XX, la Iglesia Católi- confiscación de propiedad, represión de ór-
ca en Honduras tenía 6 diócesis y un poco más denes misioneras y el exilio de algunos sa-
de 2,5 millones de adultos. cerdotes.
En Nicaragua, la historia de las relaciones Para finales de los 1960 y principios de los
entre la Iglesia y el Estado ha sido algo dife- 1970, los capuchinos habían desarrollado «co-
rente. Los conservadores dominaron el país munidades eclesiales de base» formando líde-
durante casi todo el siglo XIX, y en 1862 se res laicos en la concientización de la realidad
firmó un concordato con el Vaticano. No fue de la pobreza y en proyectos comunitarios en
sino en 1894, bajo la dictadura de Zelaya, que el interior del país. En este período se da a co-
se promulgaron leyes contra los privilegios de nocer el trabajo de Ernesto Cardenal en Solen-
la Iglesia y el clero. A Zelaya le sucedió una tiname, otro ejemplo del carácter político reli-
reacción conservadora que determinó las rela- gioso de las «comunidades eclesiales de base»
ciones entre la Iglesia Católica y el Estado du- y de su progresiva participación en los proce-
rante las primeras décadas del siglo XX. Cuan- sos revolucionarios. Con la lectura de la Biblia
do los liberales volvieron a hacerse dueños del y la concientización política, la base de la igle-
poder, se siguió una serie de medidas que ten- sia católica va insertándose en los procesos de
dían a separar la Iglesia del Estado. De ellas, la lucha que anteceden a la revolución sandinis-
que más se discutió fue la ley de «prelación del ta, no sin sufrir persecuciones y asesinatos.
matrimonio civil al religioso», que exigía que En medio de los conflictos armados de la
se celebrase un matrimonio civil como requi- lucha por el derrocamiento de Somoza, el
sito previo al religioso. Esto causó violentas obispo Obando participa en procesos de nego-
protestas por parte de la jerarquía eclesiástica, ciación ante el secuestro de líderes nacionales.
y en algunos lugares se produjeron disturbios Obando y la jerarquía de la iglesia toman una
y motines. Pero Nicaragua, como el resto del actitud antisomocista -manifiesta en la carta
mundo, se dirigía hacia la separación entre del 1980 donde los obispos de Nicaragua de-
Iglesia y Estado, y todo esfuerzo por evitarla mandan cambios políticos y sociales en la es-
sería en vano. tructura del gobierno- pero mantiene su rela-
A pesar de los privilegios legales de que ha ción con los grupos de la burguesía alta.
gozado, la Iglesia no ha mostrado una vitali- En 1979 la Revolución Sandinista triunfa y
dad propia. Para mediados del siglo XX el nú- se crea una Junta de Gobierno con una fuerte
mero de parroquias y sacerdotes diocesanos presencia de líderes del Frente Sandinista de
había disminuido y tal tendencia no había Liberación Nacional. En 1983 el papa Juan
cambiado para principios del siglo XXI. Pablo II visita América Central -incluyendo
En lo que se refiere a las misiones, éstas a Nicaragua- y allí amonesta a los sacerdotes
tienen lugar especialmente en el aún vicariato que están participando en la nueva Junta de
apostólico de Bluefields, donde laboran distin- Gobierno a que dejen estos puestos y vuelvan
tas órdenes católicas. Aunque esta obra ha si- a la vocación sacerdotal. La imagen del Papa
do de mucho provecho para la región, su ca- en una tribuna con el rostro de Sandino como
274
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
escenario es símbolo elocuente de las tensio- cuyas publicaciones y talleres populares han
nes entre la revolución nicaragüense y la jerar- dado formación religiosa y política a cientos de
quía de la iglesia. La algarabía del pueblo era líderes católicos -y algunos protestantes- du-
desconcertante al expresar su cariño por el Pa- rante las últimas décadas del siglo XX. Misio-
pa y su esperanza de que la revolución logra- neros y misioneras también trabajaban con gru-
ra sus objetivos. pos populares en «comunidades eclesiales de
Durante la guerra entre la revolución sandi- base», en proyectos de desarrollo económico y
nista y los «contra», la iglesia también tuvo agrícola y con algunos grupos indígenas. Ade-
momentos de ambigüedad e incertidumbre. más, a finales del siglo XX la iglesia, tanto en
No obstante, los grupos de base continuaban su expresión jerárquica como desde la base, fue
trabajando en los proyectos comunitarios y la muy solidaria en los procesos de paz, de consul-
jerarquía caminaba la cuerda floja de la políti- ta sobre los derechos humanos y de ayuda a los
ca. Cuando, en el año 1989, los nicaragüenses refugiados por causa de la violencia en la región
eligieron una nueva presidenta, la jerarquía la Al comenzar el nuevo siglo, la iglesia en-
apoyó. De este modo, hacia fines del siglo XX, frentaba un gran reto ya que aumentaba una
la jerarquía católica recobraba su posición en población secular con profundas sospechas ha-
la sociedad. cia la iglesia y con una gran influencia de la
Para entonces, la iglesia católica tenía tres masonería. Todo esto creaba un espíritu anti-
expresiones principales: la primera era el cato- clerical. También llegaban al país las nuevas
licismo tradicional típico de las clases media y influencias de las religiones «de la nueva era»
media alta de América Central, la segunda era y tradiciones del Oriente. Como en el resto de
el catolicismo popular, y la tercera eran algu- la América Central, el catolicismo tenía la ver-
nas expresiones del catolicismo carismático tiente tradicional y la popular, pero ambas su-
producto de la influencia de las iglesias pente- frían un decrecimiento paulatino.
costales y carismáticas. En resumen, la Iglesia Católica de la Amé-
En Costa Rica, las relaciones entre la Igle- rica Central se mostraba carente de vitalidad
sia y el Estado fueron más cordiales que en el propia en más alto grado que en la mayoría de
resto de la América Central. Empero la condi- los países de la América Latina. Esto resulta-
ción de la Iglesia en Costa Rica ha sido poco ba especialmente obvio en lo que se refería al
mejor que la de otros países de la América trabajo misionero, que quedaba en manos ca-
Central. En 1962 había en el país 247 sacerdo- si exclusivamente extranjeras.
tes, de los cuales sólo 107 eran nacionales. Re-
firiéndose a la relación entre la población y el 2. El protestantismo
número de sacerdotes, los observadores cató- Aunque valiéndose de la influencia británi-
licos se mostraban pesimistas, ya que las cifras ca el protestantismo penetró en Belice mucho
de 1912 eran mejores que las de cincuenta antes, el primer intento de realizar obra protes-
años más tarde. tante en las repúblicas de la América Central
La actividad misionera católica en el país se tuvo lugar en 1824, cuando un bautista inglés
centraba en el vicariato apostólico de Limón, hizo una breve visita a Guatemala. Esta visita,
donde trabajaban, además de dos sacerdotes y otras que le siguieron, no tuvieron resultados
diocesanos, los religiosos lazaristas y otras ór- permanentes. Lo mismo puede decirse de la
denes. obra de Frederick Crowe, quien pasó varios
Por su historia política, Costa Rica ha sido la años en Guatemala distribuyendo la Biblia y
sede de organismos ecuménicos tales como el predicando el Evangelio, hasta que fue arresta-
Departamento Ecuménico de Investigaciones, do y expulsado del país.
275
Las misiones en América Latina
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En el siglo ><)<l las mujeres pobres se destacan como agente misionero.
276
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
277
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Quedan en el anonimato, por la fragilidad mentos del país. Tienen colegios notables en
del trabajo misionero, muchas iglesias -con- San Salvador y Santa Ana, además de trabajo
servadoras, liberales, pentecostales e indepen- misionero entre los indios pipil de la costa. En
dientes- que ofrecieron un ministerio de so- 1934 se organizó la Asociación Bautista de El
lidaridad en los momentos tan difíciles de los Salvador, y setenta años más tarde contaba con
años de las dictaduras en Guatemala. unas 58 congregaciones y una feligresía de
Desde una perspectiva ecuménica hay que más de 15.000.
mencionar que los protestantes en Guatemala Las Asambleas de Dios eran la denomina-
han contribuido a la educación en el país. La ción de más crecimiento en el país. Descono-
Universidad Mariano Gálvez, la primera de es- cemos cómo llegaron al país, pero sabemos
te género en América Latina, fue establecida en que fue entre el 1920 y el 1922. Tienen unas
1966. El Consejo Latinoamericano de Iglesias 3.000 congregaciones con muchos centros de
y la Coordinadora Pastoral Aborigen (COPA) predicación. Su trabajo misionero se concentra
han creado espacios importantes para el diálo- en la evangelización y el establecimiento de
go entre los indígenas de distintas tradiciones nuevas congregaciones. Junto a las Asamble-
protestantes -aunque Guatemala, teniendo la as de Dios hay otras dos denominaciones pen-
población más grande de indígenas en la re- tecostales de crecimiento significativo, la Igle-
gión, no ha participado consistentemente de las sia del Príncipe de Paz, ya mencionada arriba,
reuniones de estas agencias. Organizaciones y la Misión Cristiana Elim.
evangélicas conservadoras, como «Amanecer» Durante los años de la guerra civil y los terre-
y las campañas de evangelización de Luis Pa- motos del 1986, el movimiento ecuménico en El
lau, han celebrado distintos eventos enfocando Salvador jugó un papel misional importantísi-
su trabajo en la evangelización. mo. La Asociación Bautista de El Salvador, la
Según las estadísticas de principios del si- Iglesia Luterana del Salvador, y la Iglesia Epis-
glo XXI, el protestantismo en Guatemala com- copal de El Salvador, junto al Consejo Latinoa-
prendía entre el 12 y el 15 por ciento de la po- mericano de Iglesias, realizaron un trabajo mi-
blación. sionero con refugiados y desplazados por la gue-
La obra protestante en El Salvador fue co- rra y el desastre natural. Su voz profética, muy
menzada en 1896 por la Misión Centroameri- similar a la del arzobispo Oscar Arnulfo Rome-
cana. Esta recibió el apoyo de Francisco Pen- ro, fue a favor de los pobres. Los mártires de es-
zotti, quien había visitado el país anteriormen- tas iglesias son testimonio elocuente a un traba-
te. A pesar de que muchos misioneros se han jo misionero profético, arriesgado y de solidari-
visto obligados a abandonar el país por causas dad en momentos muy difíciles en el país.
de salud, la obra de la Misión Centroamerica- Otras organizaciones ecuménicas de desa-
na ha continuado progresando, y en 1957 con- rrollo, tales como DIAKONIA, contribuyen al
taba con 2.300 miembros y trabajaba en varias bienestar económico de comunidades pobres
regiones del país, incluyendo algunas pobla- en el país. Desafortunadamente, a principios
ciones indígenas. Actualmente, la Misión Cen- del siglo XXI, el trabajo misionero ecuménico
troamericana, ahora la Iglesia Centroamerica- estaba en crisis.
na, cuenta con 250 congregaciones y más de El protestantismo penetró en Honduras en
30.000 feligreses. 1859, por razón del tratado según el cual la
Los bautistas del norte de los Estados Uni- Gran Bretaña cedió a Honduras las Islas de la
dos -«American Baptists»- comenzaron a Bahía. Puesto que la población de estas islas
trabajar en El Salvador en 1911. A partir de era protestante, podemos decir que desde en-
entonces, se han extendido a catorce departa- tonces hubo hondureños de esa fe. Sin embar-
278
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
go, estas personas eran de habla inglesa, y no siendo una de las principales denominaciones
puede decirse que su traspaso a la soberanía protestantes.
hondureña haya representado un verdadero co- En 1898 llegaron los hermanos, que se es-
mienzo del protestantismo en el resto del país. tablecieron en San Pedro Sula. Debemos men-
Los primeros en establecer verdadero traba- cionar su misión entre los caribes en el pueblo
jo misionero entre los hondureños fueron los de Trujillo. Actualmente cuentan con unas 225
representantes de la Misión Centroamericana. congregaciones y una feligresía de más de
Estos comenzaron su obra en 1896, y encon- 62.000 miembros.
traron un apoyo inesperado en la aldea de El La Iglesia Evangélica y Reformada tiene
Paraíso. Años antes, alguien había intentado en San Pedro Sula una obra que data de 1920
establecer una iglesia no católica en la región y que incluye una magnífica escuela y un dis-
vecina. Al parecer, logró buen número de se- pensario. A partir de San Pedro Sula, se ex-
guidores antes de que las autoridades se pose- tendió a la región vecina y ha tenido un cre-
sionaran de él y le dieran muerte. Ante estos cimiento lento. Aunque sus miembros no son
acontecimientos, sus seguidores se refugiaron tan numerosos como los de otras denomina-
en un lugar casi inaccesible al que dieron el ciones, la presencia eclesial de esta denomi-
nombre de El Paraíso. Cuando llegaron los mi- nación es marcada. Actualmente lleva el
sioneros centroamericanos, estas personas les nombre de la Iglesia Unida de Cristo.
prestaron su apoyo, y El Paraíso vino a ser un A partir de su obra entre los indígenas mis-
centro del que partieron muchos hondureños quitos de la costa de Nicaragua -obra a que
para la evangelización del resto del país. A hemos de referirnos en breve- los moravos se
partir de entonces, los centroamericanos con- han establecido en Honduras, donde cuentan
tinuaron trabajando en el país, y continuaron con casi 6.000 miembros.
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279
Las misiones en América Latina
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280
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
además de traducir a él el Nuevo Testamento. apoyo. Durante los años antes y durante la re-
En cuanto al idioma sumu, la actividad de los volución, el Comité Evangélico medió las gra-
misioneros ha sido menos amplia, pero exis- ves tensiones entre protestantes ecuménicos,
te a lo menos una gramática producto de sus conservadores y pentecostales, manteniendo
labores. una unidad frágil en tiempos de tanta polariza-
Junto a los moravos, operan en la región de ción. El Centro Inter-Eclesial de Estudios Teo-
Miskitia los anglicanos. Los bautistas están lógicos y Sociales en Managua (CIETS) ha
también presentes, aunque sólo son numerosos contribuido a la formación teológica de laicos.
en las Islas del Maíz. En fecha relativamente Sus programas de formación están arraigados
reciente, la Iglesia Católica ha establecido el en las iglesias y grupos de base y tienen el
vicariato apostólico de Bluefields, penetrando propósito de preparar ministros para América
así en una región que tenía abandonada. Central. Recientemente, y con el empuje de la
En 1900, la Misión Centroamericana se es- Iglesia Bautista, se ha creado la primera uni-
tableció en Nicaragua, donde su trabajo no ha versidad protestante en Managua, la Universi-
sido tan constante como sería deseable. Actúa dad Martin Luther King.
especialmente en Managua, Granada, y las in- La situación de Costa Rica es bien distinta
mediaciones de ambas. Además de la obra de de la de Guatemala y Nicaragua. Para los años
evangelización, ofrece servicios médicos en alrededor del 1970, menos del 1 por ciento de
clínicas ambulantes Actualmente la iglesia lle- la población de Costa Rica era protestante,
va el nombre de Iglesia Centroamericana - aunque más recientemente ese número ha ex-
como en otros países de la región- y cuenta perimentado un crecimiento significativo. Es-
con unos 5.000 miembros. to es tanto más notable por cuanto fue en ese
Los bautistas comenzaron a trabajar en Ni- país que primero comenzó a trabajar la Mi-
caragua en 1917. El centro de su trabajo está sión Centroamericana, y es también allí que
en Managua, donde tienen varias iglesias, ade- existen algunas de las más conocidas institu-
más de un hospital, algunas escuelas y un se- ciones misioneras de la América Central. Es-
minario. A partir de Managua, los bautistas se to parece deberse a varios factores: la recia
han extendido por el país. Su número crece y tradición española del país; la importancia ex-
no cabe duda de que, aparte del catolicismo ro- cesiva que se la ha dado a la evangelización en
mano y quizá de los moravos en el oriente, és- masa por encima de la organización de igle-
ta es una de las denominaciones que ejerce sias; la práctica de algunas denominaciones
mayor influencia en el país. de dar a cada congregación, por pequeña que
Además de las denominaciones ya mencio- sea, un pastor de tiempo completo; la falta de
nadas, merecen citarse los nazarenos -en Ma- cooperación entre las diversas denominacio-
nagua, León y Granada- las Asambleas de nes, etc.
Dios -especialmente fuertes en León y Gra- La Misión Centroamericana fue organizada
nada y actualmente con más de 180.000 feli- en Texas en respuesta a un llamado proceden-
greses. te de Costa Rica, y fue a esa república que, en
Los protestantes en Nicaragua tienen una 1891, se dirigieron sus primeros misioneros.
presencia ecuménica fuerte. El Comité Evan- Sin embargo, la actividad de esta organización
gélico para Ayuda al Desarrollo (CEPAD), en Costa Rica ha fluctuado mucho, pues en
creado como resultado del terremoto, ha traba- 1957 contaba sólo con 529 miembros, y ac-
jado en proyectos de cooperativas agrícolas y tualmente cuenta con unos 8.000. Hoy la Mi-
económicas, programas de salud y educación, sión Centroamericana lleva el nombre de Igle-
y programas de concientización, mediación y sia Centroamericana.
281
L
Las misiones en América Latina
La Misión Latinoamericana fue organizada Costa Rica ha sido sede de grupos ecumé-
en 1921, y se estableció en San José. Desde nicos tales como la Asociación de Familiares
sus comienzos, su interés primordial estaba de Detenidos-Desaparecidos, el Comité Ecu-
en la evangelización del continente más que ménico Pro Derechos Humanos en Costa Rica,
en el establecimiento y la organización de y la Comisión para los Derechos Humanos en
iglesias. En 1922 esta «misión» fundó el Ins- Centro América. Estas organizaciones han ser-
tituto Bíblico, en el que durante los primeros vido bien a la región, especialmente durante
años cooperaron los metodistas y los centro- los años de guerra civil y revoluciones.
americanos. Este Instituto, que se conoció Finalmente, las iglesias protestantes ecu-
después como el Seminario Bíblico Latinoa- ménicas de la región produjeron documentos
mericano y hoy es la Universidad Bíblica, es muy importantes durante las últimas décadas
la institución de más prestigio en la región. del siglo XX. Frente a las guerras civiles y las
Sus graduados se encuentran esparcidos por luchas revolucionarias, estas iglesias produje-
todo el continente, sirviendo a distintas deno- ron el documento KAIROS en 1988, donde se
minaciones. plasmaba la urgencia de que actuasen las igle-
Los metodistas trabajan en Costa Rica des- sias cristianas en coherencia a favor de las lu-
de 1918. Sus principales iglesias están en San chas de justicia, el llamado a la voz profética
José y Alajuela. En Villa Quesada existe tam- y el compromiso con el pueblo pobre y opri-
bién una iglesia fuerte, además de un centro mido. La crisis durante esta época llegó a tal
rural. Su principal obra de educación es la Es- extremo que el Consejo Latinoamericano de
cuela Metodista de San José. En la zona bana- Iglesias escribió una declaración sobre la mi-
nera existen numerosas iglesias, aunque mu- sión de las iglesias en Centro América, dando
chas de éstas con escaso número de miembros. apoyo al surgimiento de una nueva eclesiolo-
Para la educación teológica, se estableció en gía solidaria con el pueblo. En 1988, en Son-
Alajuela la Escuela de Preparación de Obreros sonete, El Salvador, se escribe un documento
Metodistas. Actualmente la Iglesia Metodista sobre «Prácticas Pastorales al Servicio de la
cuenta con unos 4.000 miembros. Paz: Compromisos y Retos para la Mesoamé-
Además de las denominaciones ya mencio- flea de Hoy», donde se discute el tema del sha-
nadas, merecen citarse en Costa Rica las lom bíblico y sus implicaciones pastorales.
Asambleas de Dios, el grupo protestante y En resumen, las iglesias protestantes y pen-
pentecostal más grande del país, y los Bautis- tecostales en América Central tienen una histo-
tas del Sur. ria frágil transcurrida en medio de grandes lu-
En la ciudad de Alajuela tiene su centro Al- chas y ambigüedades políticas y económicas.
falit, organización interdenominacional que En medio de éstas, las iglesias han luchado por
trabaja en toda la América hispana -y que se ser fieles. Aunque hoy se recuperan de unos
ha extendido también a Brasil, Haití, Europa y años de profunda polarización, enfrentan los
Africa- cuyos propósitos son la alfabetiza- retos de reconstruir sus comunidades en medio
ción, la preparación y distribución de literatu- de la pobreza y que tanto aqueja a la región.
ra cristiana sencilla, y la evangelización. Su
obra se realiza a través de iglesias y concilios M. El cristianismo en México
de iglesias en los distintos países. 1. El catolicismo romano
Hay también en San José una escuela que De toda la América Latina, es México el
enseña el español a los misioneros de diversas país en que la historia de la Iglesia Católica ha
denominaciones que han de trabajar en la sido más turbulenta. Esto se ha debido a la fre-
América Latina. cuente fluctuación de las relaciones entre la
282
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
Iglesia y el Estado, unas veces cordiales, otras vieron privadas de la mayoría de sus miem-
prácticamente inexistentes, y otras francamen- bros. Algún tiempo después, las misiones en
te hostiles. Baja California fueron nacionalizadas, y a los
La independencia mexicana recibió el apo- pocos años sólo quedaban en ellas seis sacer-
yo decidido del clero, que veía en la constitu- dotes.
ción española de 1812, con su sello liberal, Durante toda la primera mitad del siglo
un ataque a los derechos y privilegios de la XIX, la oposición entre liberales por una par-
Iglesia. te, y clérigos y conservadores por otra, se limi-
Sin embargo, junto a los elementos conser- tó al conflicto de intereses e ideales de dos
vadores que veían en la independencia un mo- grupos minoritarios dentro de la nación mexi-
do de evitar que se extendiese a México la si- cana. Pero a partir de la revolución de Ayutla
tuación española, había otros elementos repu- la situación comenzó a plantearse de otra ma-
blicanos para los cuales la independencia era nera, y el partido liberal y anticlerical comen-
un paso previo al establecimiento de un go- zó a tener en cuenta las verdaderas necesida-
bierno liberal. Por esta razón, y también por- des de los desposeídos, en su mayoría indíge-
que la Santa Sede no quería reconocer la legi- nas y mestizos, que constituían la inmensa ma-
timidad de una nación cuya supervivencia era yoría de la población. Frente a estas necesida-
aún dudosa, se dieron en México los mismos des se alzaba el poder económico de los con-
problemas referentes al patronato nacional y a servadores, y especialmente de la Iglesia, que
las sedes que iban quedando vacantes que he- unía al poder que le daban sus posesiones tem-
mos visto en otros países de la América Lati- porales la autoridad adquirida a través de los
na. Desde los inicios de la independencia, los siglos en que había tenido en sus manos la di-
diversos gobiernos mexicanos trataron de esta- rección espiritual del pueblo. Por estas razo-
blecer relaciones con la Santa Sede, pero no nes, el sentimiento anticlerical fue haciéndose
tuvieron buen éxito, y en 1829 no quedaba un cada vez más común, al tiempo que dejaba de
solo obispo en el país. Por fin, en 1831, Gre- ser la posición de unos pocos idealistas con
gorio XVI designó seis obispos, no en virtud una educación privilegiada para volverse la
del patronato nacional, sino motu propio. Pe- pasión de gran número de otras personas me-
ro en 1883, con la reforma de Gómez Farías, nos afortunadas. En tales circunstancias, la po-
volvieron a surgir las tensiones entre la Iglesia sición de las autoridades eclesiásticas se hizo
y el Estado, hasta que la reacción del año si- cada vez más insostenible, aunque el clero se
guiente volvió a conceder a la Iglesia sus anti- negara a percatarse de ello.
guos fueros. Estas fluctuaciones en las relacio- Con la revolución de Ayutla, y especial-
nes entre la Iglesia y el Estado continuaron a mente a partir de la presidencia de Benito Juá-
través de toda la primera mitad del siglo XIX, rez, quedó demostrado que el pueblo mexica-
hasta que la revolución de Ayutla depuso al no, católico fiel en lo que a su fe se refería, no
dictador Antonio López de Santa Ana. estaba dispuesto a continuar aceptando las
Estas vicisitudes políticas durante la pri- condiciones que la organización eclesiástica
mera mitad del siglo XIX tuvieron por conse- le imponía.
cuencia la casi total desaparición del trabajo Durante toda la turbulenta historia política
misionero en suelo mexicano. Buena parte de de México en la segunda mitad del siglo XIX
esta decadencia de las misiones se debió a le- y las primeras décadas del XX, las autorida-
yes y decretos del gobierno. Así, por ejemplo, des eclesiásticas se asieron, como a una tabla
en 1827, cuando los españoles fueron expul- de salvación, a cuanto gobierno impopular y
sados de México, las órdenes religiosas se conservador apareció. Primero fue el efímero
283
Las misiones en América Latina
imperio de Maximiliano, y luego la larga dic- piedad del Estado. Sin embargo, ni Carranza
tadura de Porfirio Díaz. Cuando el presiden- ni Obregón aplicaron las leyes religiosas en
te Maderos fue asesinado y le sucedió Victo- todo su rigor, pues deseaban evitar un con-
riano Huerta, se celebraron misas de acción flicto prolongado con el clero, y sabían tam-
de gracias porque el país había sido librado bién que éste cumplía ciertas funciones, espe-
providencialmente de su presidente constitu- cialmente en el campo de la educación, que el
cional. La campaña de Venustiano Carranza gobierno no estaba todavía capacitado para
contra el usurpador Huerta y en pro de un go- llenar.
bierno constitucional recibió la más decidida En 1925 se intentó crear una «Iglesia Orto-
oposición del clero, lo que a su vez hizo que doxa Católica Apostólica Mexicana». Esta con-
un movimiento cuyo propósito esencial era la taba con el apoyo del gobierno, y su cabeza era
restauración del orden político se dejase lle- un «Patriarca de México». Pero este intento de
var por violentos sentimientos anticlericales. establecer una iglesia nacional frente a la roma-
Resultado de esta actitud de la Iglesia fueron na no tuvo gran éxito. Medio siglo antes -co-
los muchos actos de violencia que contra ella mo veremos más adelante- Benito Juárez ha-
se cometieron por parte de los seguidores de bía intentado crear un rival para el catolicismo
Carranza, y muy especialmente por Pancho con la introducción del cristianismo protestante.
Villa y los suyos. Cuando Carranza propuso Si bien Carranza y Obregón no aplicaron a
una constitución en la que se prohibía que la iglesia todo el rigor de la Constitución de
instituciones religiosas tuvieran propiedades 1917, ésta siempre fue un peligro para la Igle-
destinadas al lucro y no al culto, los constitu- sia Católica. En 1926, bajo la presidencia de
yentes dieron un paso más lejos declarando Plutarco Elías Calles, el peligro se hizo reali-
que aun los edificios de la Iglesia eran pro- dad. En respuesta a declaraciones por parte de
284
A
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
285
Las misiones en América Latina
tierra de los indígenas. Frente a serias con- hizo partir hacia las Antillas. De allí regresó a
frontaciones con el gobierno, la iglesia ha ser- México al poco tiempo, aunque en esta se-
vido de mediadora tratando de evitar un em- gunda ocasión encontró que las circunstan-
peoramiento de los conflictos y al mismo cias eran aun menos propicias que anterior-
tiempo manteniendo su postura solidaria con mente. Cercado por todas partes por los obs-
los grupos amerindios. táculos que el gobierno y el clero ponían a su
La iglesia también ha experimentado cierta paso, decidió abandonar el país.
renovación en algunos sectores a través de los La penetración de la Biblia en México con-
grupos carismáticos y de programas de la fa- tinuó aún después de la partida de Thomson.
milia de corte conservador. Hay un número Especialmente durante la guerra de México
creciente de misioneros y misioneras mexica- con los Estados Unidos, en los años 1846-
nos sirviendo en distintas partes del mundo, 1848, los contactos de los mexicanos con los
particularmente en otros países de América norteamericanos, a pesar de sus aspectos trági-
Latina, en el mundo musulmán y en Asia. cos, sirvieron para dar a conocer la Biblia. Se
dice que algunos mexicanos afirmaban que los
2. El protestantismo triunfos de los ejércitos del norte se debían al
Aparte de un breve y heróico servicio fúne- libro misterioso que algunos de sus soldados
bre celebrado en 1824, y de algunos esfuerzos llevaban. Finalmente, en 1873, la Sociedad Bí-
de la Sociedad Bíblica Americana a través J. blica Americana estableció una agencia en
C. Brigham, el precursor del protestantismo México.
en México -como en tantos otros países de La primera denominación protestante en
la América Latina- fue Diego Thomson. comenzar obra permanente en México fue la
Thomson desembarcó en el puerto de Vera- Iglesia Protestante Episcopal de los Estados
cruz en 1827, e inmediatamente se dirigió a la Unidos. Los orígenes de esta obra se remon-
capital federal. Allí tuvo la buena fortuna de tan al año 1853; es decir, cuatro años antes de
descubrir en el almacén de una librería un car- que Benito Juárez proclamara la libertad de
gamento de Biblias que había quedado sin cultos. El misionero E. C. Nicholson organi-
vender debido a una prohibición del Cabildo zó en Chihuahua la Sociedad Apostólica
Metropolitano. Sin mayores dificultades, lo- Mexicana. En 1861 Ramón Lozano estableció
gró comprar el cargamento en cuestión y, me- la «Iglesia mexicana» junto a otro exsacerdo-
diante una propaganda osada, venderlo en su te de nombre Aguilar Bermúdez. Ante la
totalidad. Lo mismo hizo con otro cargamen- muerte de sus líderes, este grupo pidió apoyo
to enviado de Veracruz en una recua de mulas, a la Iglesia Episcopal de los Estados Unidos.
aunque en este caso salió de los confines de la Su primer pastor fue Enrique C. Riley, nacido
capital hacia Guanajuato, Guadalajara, en Chile de padres norteamericanos, quien
Aguascalientes y Zacatecas. De regreso a Mé- confrontó mucha resistencia de parte del clé-
xico, el Cabildo Metropolitano le prohibió rigo católico. Posteriormente esta iglesia vino
continuar vendiendo Biblias, pero Thomson a ser parte de la Iglesia Protestante Episcopal
supo abrirse paso a través de sus relaciones en México.
con las personas más ilustradas de la ciudad y Algunos años más tarde, don Manuel
de su carácter de representante del método Aguas fue electo obispo de esta nueva «Igle-
lancasteriano de educación, en cuya capaci- sia de Jesús». Aunque Aguas murió antes de
dad contaba con el apoyo del gobierno. Sin ser consagrado, otro obispo fue electo y con-
embargo, la pasión que le impulsaba siempre sagrado en 1879. A partir de entonces, los
a dar a conocer la Biblia en nuevas tierras le episcopales han continuado trabajando en el
286
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
país, aunque en 1906 vinieron a formar parte en Monterrey y sus alrededores, los congrega-
integrante de la Iglesia Protestante Episcopal cionalistas vieron abierta una nueva puerta.
de los Estados Unidos. Buena parte de sus es- Con la división territorial que tuvo lugar en
fuerzos se ha dedicado a la obra de educa- los años 1914 y 1919, les correspondieron los
ción, y su membresía a esta fecha es de más territorios de la costa del pacífico al norte de
de 160.000 personas. Michoacán. Al parecer, su crecimiento numé-
Los amigos o cuáqueros comenzaron obra rico fue satisfactorio antes de la Revolución,
en México en 1871. Al inicio tuvieron difi- pero a partir de entonces han decrecido, pues
cultades, pero luego lograron cierto creci- sólo tienen unos 1.600 feligreses. Junto a los
miento. El período de la revolución vio una metodistas fundaron el Centro Teológico Uni-
rápida disminución en el número de sus do de la ciudad de México.
miembros. Al parecer, esta disminución ha La obra de los presbiterianos en México co-
continuado, y actualmente cuentan con me- menzó cuando en 1871, y en el estado de Zaca-
nos de 500 feligreses. tecas, una congregación organizada por el im-
La misma década que vio el comienzo del pulso misionero de Rankin pidió que se le en-
trabajo de los amigos vio también los inicios viase un pastor. Puesto que quienes apoyaban a
de la obra misionera de los presbiterianos y Rankin no podían hacerlo, pidieron ayuda a la
congregacionalistas, quienes construyeron so- Iglesia Presbiteriana de los Estados Unidos a
bre el fundamento de la obra de la misionera través de su junta en la ciudad de Nueva York.
independiente Melinda Rankin, y de los meto- Esta les envió siete misioneros que se estable-
distas, quienes tuvieron por punto de partida el cieron en la capital; pero pronto su obra se ex-
trabajo de Sóstenes Juárez. tendió a los estados vecinos. En 1883 fueron
Melinda Rankin se sintió impulsada a traba- ordenados diez ministros mexicanos y se orga-
jar en México por los informes que de ese pa- nizó el primer presbiterio del país. En el entre-
ís recibió de labios de los soldados que regre- tanto, los presbiterianos del sur de los Estados
saban a los Estados Unidos después de la gue- Unidos también habían comenzado obra en
rra con México. Puesto que no contaba con el México, y en 1888 constituyeron su primer
apoyo de junta alguna, trabajó independiente- presbiterio. Como en el caso de las denomina-
mente. Al principio se estableció junto a la ciones que ya hemos estudiado, la membresía
frontera mexicana, del lado de los Estados de los presbiterianos creció rápidamente hasta
Unidos; pero a partir de 1866 se radicó en el año 1910, y luego decreció durante el perío-
Monterrey. Cuando, unos seis años más tarde, do de la revolución -aunque no tan marcada-
se vio obligada a regresar a su patria por razo- mente como la de los congregacionalistas y los
nes de salud, traspasó su. obra a los congrega- amigos. Actualmente tienen unos 20.000 feli-
cionalistas y presbiterianos del norte. Al pare- greses. Buena parte de este crecimiento numé-
cer tuvo gran éxito, y éste se debió en buena rico ha tenido lugar en Tabasco, donde parece
parte al modo en que supo organizar y movili- estarse operando una conversión en masa de la
zar a los propios mexicanos para la evangeli- población mestiza. También han crecido rápi-
zación de su país. damente los presbiterios de Chiapas y Yucatán.
Los comienzos de la obra congregacionalis- Tienen gran número de institutos bíblicos y es-
ta en México fueron arduos. Sus primeros in- cuelas para diaconisas, además de varios se-
tentos tuvieron lugar en Guadalajara, donde la minarios, entre los que se destacan el Semina-
oposición fue tan violenta que uno de sus mi- rio Teológico Presbiteriano en la ciudad de Co-
sioneros vino a ser el primer mártir protestan- yoacán y el Seminario Teológico San Pablo,
te del país. Cuando Rankin les traspasó su obra en Mérida.
287
L.
Las misiones en América Latina
288
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
de descubrir y mucho más difícil de describir. míes. Para ello, comenzó por dedicar todo un
Varios de estos movimientos echaron sus raí- año a mostrar interés en sus compañeros de ra-
ces en México durante el período revoluciona- za, y sólo después de ese período comenzó a
rio. Esto es tanto más notable puesto que du- predicarles el Evangelio. La respuesta de sus
rante ese período todas las iglesias históricas compañeros fue casi instantánea, y debido a
estaban perdiendo miembros. Al parecer, esto ello se les expulsó de la hacienda en que traba-
se debió principalmente al modo en que di- jaban. Esto sirvió de ocasión a Hernández para
chos nuevos grupos trabajaban, sin depender mostrar el poder del Evangelio para redimir la
de pastores especializados, sino más bien co- totalidad de la vida. Con su pequeño núcleo de
locándose bajo el pastorado de algún miembro conversos, se estableció en un terreno árido, y
sobresaliente de la propia comunidad. Ade- mediante el esfuerzo continuo logró hacerlo
más, el concepto fundamental de estos grupos producir. Repitiendo este proceso, y mediante el
que hace de cada miembro un misionero de testimonio constante de todos los conversos, el
Cristo ha contribuido a su rápido crecimiento movimiento fue creciendo entre los otomíes.
numérico, tanto en épocas de adversidad como De sus muchas consecuencias sociales y econó-
en períodos más propicios. micas, merecen citarse la construcción de cami-
Ya que es imposible narrar los orígenes de nos y carreteras uniendo los diferentes centros
todos estos movimientos, daremos a manera de de población, y la organización de un seguro de
ejemplo el caso de Venancio Hernández y su salud que hace accesible los servicios médicos
pueblo otomí. Hernández se convirtió en una a las personas más pobres de la comunidad.
congregación pentecostal mientras trabajaba en Ya para finales del siglo XX y principios
los Estados Unidos. Al regresar a México, se del siglo XXI muchos de estos movimientos
propuso buscar la conversión de los indios oto- -y los de las iglesias pentecostales- son mu-
289
Las misiones en América Latina
cho más visibles. La Iglesia La Luz del Mun- ces, a pesar de todos los esfuerzos de parte del
do tiene una feligresía de casi 400.000 y las clero, no ha sido posible crear en Haití un ca-
Asambleas de Dios llegan al medio millón. El tolicismo pujante. El voudun, un sincretismo
impulso misionero de éstas es el de la evange- de religiones africanas con un barniz de cato-
lización, que recientemente se extiende a la licismo, continúa siendo la principal influencia
frontera y a los Estados Unidos. Con todo y es- religiosa del país, lo cual hace de todo él un
te avance, el protestantismo sigue siendo una vasto territorio misionero. La inmensa mayo-
marcada minoría en el país. ría del clero es extranjera, y los sacerdotes na-
cionales no ocupan los puestos de mayor res-
3. La Iglesia Ortodoxa ponsabilidad. Al parecer, sólo en los campos
Hay un número pequeño de comunidades de la educación y las instituciones benéficas ha
ortodoxas en México. La Iglesia Ortodoxa logrado el catolicismo hacer una verdadera
Griega sirve principalmente a inmigrantes contribución a la vida de Haití, pues el sistema
griegos que llegaron a finales del siglo XVIII público de escuelas y hospitales es deficiente
y principios del siglo XIX. La Iglesia Orto- e inadecuado, lo que hace de las escuelas e
doxa de México y América Central sirve a in- instituciones benéficas de la Iglesia importan-
migrantes libaneses y árabes. tes instrumentos de educación y servicio.
A finales de 1990, el pueblo haitiano puso
N. El cristianismo en las Antillas en la presidencia del país a Jean Bertrand Aris-
1. El catolicismo romano tide, sacerdote católico de pensamiento pro-
El primer país antillano en independizarse gresista. Con una victoria abrumadora, Aristi-
del dominio europeo fue Haiti; que en 1803 de se dio a la tarea de desarrollar un proyecto
echó de su suelo a los colonos franceses. Este político que reconociese la pobreza del país
movimiento independentista tomó un carácter pero que la viviera con dignidad. Su refrán fue
racial, y la casi totalidad de los blancos fue «pobreza con dignidad». Su proyecto dio un
expulsada -con la excepción de algunos sa- ímpetu refrescante a la Iglesia Católica, espe-
cerdotes a quienes se permitió permanecer en cialmente en la base y entre los misioneros y
la isla a fin de que administrasen los sacra- misioneras nacionales y extranjeros, aunque
mentos. El nuevo estado se caracterizó por su algunos de los obispos no estaban del todo sa-
adhesión al catolicismo. Todas sus constitu- tisfechos con la dirección política del país ni
ciones hacían de él la religión oficial. Pero es- con la manera en que Aristide usaba la fe cris-
to iba unido a un espíritu de tolerancia hacia tiana.
las demás religiones -pues esas mismas A los pocos años el gobierno de Aristide su-
constituciones garantizaban la libertad de con- frió un golpe de estado, y el país se volcó en
ciencia. Sin embargo, la Iglesia Católica pron- una sangrienta violencia al azar. Desafortuna-
to cayó en un estado de abandono casi total, damente, la Iglesia Católica tomó alianza con
pues el gobierno reclamaba para sí un derecho los poderes del golpe de estado y los cambios
de patronato que la Santa Sede no estaba dis- que tanto necesitaba y buscaba el pueblo hai-
puesta a concederle. En tales circunstancias, la tiano se desvanecieron en medio de la violen-
escasez de sacerdotes fue cada vez mayor, y cia y la intervención extranjera.
cuando se firmó un concordato en 1860, ya el Según datos generales, la Iglesia Católica
mal estaba hecho: la población, que siempre en Haití tiene arraigo sobre el 90 por ciento de
había conservado buena harte de sus ritos y la población, aunque se tiene por conocimien-
religiones africanas, había vuelto a encontrar to general que la mayoría de la feligresía cató-
en ellos el centro de su fe. A partir de enton- lica también practica el voudun.
290
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
291
Las misiones en América Latina
Estado, así como la libertad de cultos, y que no educación religiosa, luego sobre las propieda-
se produjesen en esa república los conflictos des eclesiásticas, y por último sobre cuestiones
que caracterizaron los primeros años de la in- de carácter ideológico. Un año después de la
dependencia de otros países latinoamericanos. toma del poder por parte de Fidel Castro, co-
Desde los últimos tiempos del dominio es- menzó el éxodo de sacerdotes. Los primeros
pañol, la Iglesia Católica en Cuba había proba- en partir -en exilio voluntario- fueron dos
do estar en franca decadencia, y esta situación clérigos que se habían distinguido por su par-
continuó durante los primeros años de la nue- ticipación en la lucha contra Batista. Estos fue-
va república. Sin embargo en la tercera déca- ron seguidos por otros en número cada vez
da del siglo XX, y en buena medida debido a mayor, hasta que el propio gobierno comenzó
la influencia de Acción Católica, comenzaron a expulsar por centenares a sacerdotes y prela-
a aparecer señales de nueva vida: el número de dos -tanto nacionales como extranjeros. De-
sacerdotes nacionales aumentó, se empezó a bido a estas circunstancias, a fines de 1965
colocar en sus manos más responsabilidad, se quedaban muy pocos sacerdotes en el país
introdujeron nuevos movimientos religiosos aunque debemos señalar que en esa misma fe-
católicos, y se fundaron escuelas e institucio- cha se rumoraba que existían negociaciones
nes benéficas. Mediante este proceso de creci- secretas entre las autoridades eclesiásticas y
miento, en 1956 llegó a haber en el país casi civiles para permitir la entrada de un número
300 escuelas católicas, además de muchas ins- de sacerdotes extranjeros con el visto bueno
tituciones de servicio al pueblo. En la misma del gobierno.
fecha los más altos cargos de la jerarquía esta- Posteriormente, algunos de los sacerdotes
ban en manos de nacionales y el arzobispo de expulsados pudieron volver a Cuba, aunque
La Habana, también cubano, gozaba del rango luego otros fueron expulsados. En el 1971 se
de cardenal. Al parecer, el futuro del catolicis- celebraron las primeras ordenaciones de 15 sa-
mo era brillante. cerdotes cubanos, todos habiendo recibido su
Por otra parte, es necesario señalar que ha- formación teológica en Cuba. Aunque la Igle-
bía ciertas prácticas de la Iglesia que -aunque sia continuó teniendo ciertas libertades, su tra-
corrientes en otros países de la América Lati- bajo misionero de redujo a ofrecer la misa y
na- más tarde servirían de base -algunos los sacramentos. Para el 1995 había un sacer-
dirían que de excusa- para los ataques a la dote por cada 50.000 cubanos. En el 1998 el
Iglesia por parte del régimen de Fidel Castro. papa Juan Pablo II visitó a Cuba y esto, junto
Entre estas prácticas merecen citarse la de su- a la crisis del país después de la caída del blo-
plir la falta de sacerdotes nacionales con sacer- que soviético, trajo un fervor religioso y cier-
dotes españoles cuyo carácter conservador les to sentido de aceptación hacia la religión -
restaba simpatía entre el pueblo, la de partici- también compartido por muchos protestantes.
par en demasía del boato de gobiernos impo- Actualmente, la Iglesia Católica cuenta con
pulares como el de Batista, y la de servirse de unos 2,7 millones de afiliados, aunque algunas
la lotería y de los cementerios para llenar algu- estadísticas sugieren hasta 3 millones. Los
nas de sus necesidades económicas. asuntos entre la Iglesia y el Estado son atendi-
Con la revolución de 1959 las circunstan- dos por la Oficina de Asuntos Religiosos del
cias cambiaron para la Iglesia Católica. Al Partido Comunista Cubano.
principio pareció que las relaciones entre la En cuanto al desarrollo mismo de la Iglesia
Iglesia y el Estado continuarían siendo lo que a partir de la revolución, los informes dan a
hasta entonces habían sido. Pero pronto co- entender que ha habido un aumento notable en
menzaron los conflictos -primero acerca de la asistencia a la iglesia y en el número de ca-
292
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
tólicos practicantes, mientras que el número de aunque a un ritmo muy lento. A partir de 1950
católicos nominales ha disminuido. Esto resul- este proceso se aceleró, y ya en 1955 había en
ta comprensible debido a la polarización de los Puerto Rico el mismo número de sacerdotes
sentimientos, que hace que muchos que antes diocesanos que en 1910. Pero aun este des-
eran católicos sólo de nombre ahora encuen- arrollo más reciente no ha logrado recuperar el
tren en su participación en la vida religiosa un terreno perdido. A fin de solucionar esta situa-
apoyo y un modo de protesta silente contra el ción, se han enviado a Puerto Rico grandes
gobierno, al tiempo que otros que también eran contingentes de religiosos extranjeros, a tal
-
anteriormente católicos sólo de nombre han punto que en 1960 los sacerdotes regulares
optado ahora por abandonar esa fe para evitar en su casi totalidad extranjeros- constituían
dificultades y al mismo tiempo poder participar el 80 por ciento del clero. Para finales del siglo
más plenamente de las nuevas circunstancias. XX y principios del siglo XXI la iglesia en
Entre los retos misionales que enfrenta la Puerto Rico continúa teniendo un clero extran-
Iglesia Católica en Cuba está su relación con jero, aunque la mayoría de las posiciones de li-
aspectos de la cultura y religiosidad afrocuba- derato están ocupadas por puertorriqueños que
na. En la medida que la cultura y religiosidad fomentan el desarrollo de un «catolicismo jí-
afrocubana fueron afirmadas por la revolu- baro», es decir, arraigado en la cultura puerto-
ción y, como consecuencia, se hicieron públi- rriqueña.
cas, la Iglesia Católica -y otras, como la Además de las actividades parroquiales, la
Iglesia Episcopal- luchan con un sincretis- Iglesia Católica en Puerto Rico se ha distingui-
mo abierto que confunde la identidad católica do por su trabajo en la educación. En este cam-
tradicional. po cuenta con gran número escuelas y centros
Puerto Rico pasó a manos norteamericanas de educación y con la Universidad Católica de
en 1898 como resultado de la Guerra Hispano- Ponce y la Universidad Católica en Bayamón.
americana. Las primeras consecuencias que A principios del siglo XXI, Puerto Rico en-
esto tuvo para la Iglesia fueron la separación frentó al gobierno de los Estados Unidos, de-
entre ella y el Estado y el establecimiento de la mandando la salida de la Marina del munici-
libertad de cultos. En cuanto a las cuestiones pio-isla de Vieques. La Iglesia Católica, junto
del patronato y de las propiedades eclesiásti- a muchas de las iglesias protestantes y pente-
cas, la primera desapareció con la separación costales del país, se unió en un frente ecumé-
entre los poderes civiles y eclesiásticos, y la nico para apoyar los derechos del pueblo de
segunda se resolvió mediante un acuerdo que Vieques en su deseo de vivir sin la presencia
resultó aceptable para ambas partes militar. Tal labor ecuménica y solidaria resul-
Sin embargo, la separación de España afee- tó en la salida pacífica de la Marina.
tó grandemente a la Iglesia en Puerto Rico. Ya No hay en Puerto Rico territorios misiona-
desde principios del siglo XIX se veía cierta les en el sentido estricto, sino que toda la isla
decadencia en el nivel de la vida eclesiástica, está bajo la jurisdicción de la jerarquía dioce-
pero esta decadencia se había detenido en al- sana local.
go por el influjo de sacerdotes leales a España
procedentes de las nuevas repúblicas hispano- 2. El protestantismo
americanas. Con el cese del dominio español La obra misionera protestante en Haití co-
sobre Puerto Rico, comenzó a disminuir el nú- menzó en 1807, cuando los metodistas británi-
mero de sacerdotes en la Isla. Esta disminu- cos enviaron pastores para ocuparse de los in-
ción continuó hasta 1930, cuando de nuevo migrantes protestantes que llegaban al país
comenzó a aumentar el número de sacerdotes, procedentes de las colonias británicas en el
293
91
Caribe. Esta obra ha continuado a través de dos que se relacionan con las iglesias aunque
los años, aunque con un crecimiento numérico no se han bautizado, y representan una fuerza
escaso, y en 1962 contaba con 2.149 miem- mayor del protestantismo en el país.
bros. Sin embargo, a pesar de su escaso núme- Los orígenes de la Iglesia Episcopal de Hai-
ro, esta iglesia ha tenido gran importancia en tí se remontan al año 1861, cuando 110 negros
el desarrollo intelectual de Haití, pues fue uno norteamericanos, en la esperanza de encontrar
de sus misioneros -con la ayuda de un profe- mejores condiciones de vida que las que impe-
sor universitario- quien primero redujo a la raban en los Estados Unidos, emigraron hacia
escritura el idioma creole, hablado por la ma- la república antillana. Entre ellos iba el pastor
James Theodore Holly quien seis años antes
yoría de los haitianos. En 1943 se emprendió
una campaña de alfabetización que seis años había visitado el país con el fin de explorar las
después había logrado enseñar a leer a 10.000 posibilidades de establecer en él obra misione-
ra. Los primeros años fueron de grandes difi-
personas. En vista del éxito de esta obra, el go-
bierno comenzó a interesarse por la educación cultades. Unos murieron, otros partieron a Ja-
del pueblo en el idioma vernáculo, lo cual pro- maica, otros retomaron a los Estados Unidos, y
un puñado se quedó en el país.
dujo una verdadera revolución en todo el sis-
tema educativo de la nación. Para el 1990, es- En 1862 Holly hizo una breve visita a los
ta iglesia había experimentado un crecimiento Estados Unidas con el propósito de interesar a
significativo con una feligresía de 6.000 la Iglesia Episcopal de ese país en la obra de
miembros, pero en la última década y media Haití. Como resultado de sus gestiones, en oc-
ha ido perdiendo feligreses. tubre del año siguiente la iglesia norteamerica-
Los bautistas penetraron en Haití en 1823, na comenzó a tomar responsabilidad por el tra-
fecha en que la Baptist Missionary Society de bajo iniciado por Holly, y decidió colocar a la
Massachusetts envió al país su primer misio- naciente iglesia bajo la jurisdicción provisio-
nero -el pastor Thomas Paul, de Boston. Pe- nal del obispo de Delaware. Cuando éste visi-
ro esta obra no continuó. Poco después, se in- tó a Haití un mes después, pudo confirmar a 36
teresaron en Haití los bautistas libres y la Bap- personas. Había además un número de candi-
tist Missionary Society de Londres, que más datos a órdenes que el pastor Holly había esta-
tarde traspasó sus intereses en ese territorio a do preparando.
su hermana sociedad de Jamaica. Por último, En 1874, la Convención General de la Igle-
en 1923 -un siglo después de la llegada de sia Episcopal decidió independizar a la nueva
Paul- la American Baptist Home Missionary iglesia bajo el título de Iglesia Apostólica Or-
Society emprendió obra en esta república. todoxa Haitiana. Dos años después, en la ciu-
Aunque esta sociedad fue de las últimas en dad de Nueva York, Holly fue consagrado
llegar, su trabajo ha sido el más fructífero, y ya obispo de Haití, cargo que ocupó con distin-
en 1962 contaba con más de 30.000 miem- ción hasta su muerte en 1911. En el entretan-
bros. El crecimiento de esta obra tiene algunas to, la iglesia había continuado creciendo, y
de las características de una conversión en ma- contaba con poco menos de 2.000 miembros y
sa, y es uno de los aspectos más notables del una docena de pastores.
A la muerte del obispo Holly, el clero haitia-
protestantismo en Haití. Además, existen en
Haití otros grupos bautistas, entre los cuales no pidió que se hiciera de Haití un distrito mi-
merece citarse la Iglesia Bautista de Jacmel, sionero de la Iglesia Protestante Episcopal de
producto de la antigua misión bautista británi- los Estados Unidos. Esta petición fue aceptada
ca. Actualmente, los bautistas en Haití tienen por la Convención General de 1913, pero ene!
más de 125.000 feligreses con miles de afilia- entretanto la iglesia haitiana había caído en un
294
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
caos del que no comenzaría a salir hasta 1923. ese mismo año de 1834, y procedente de Ingla-
A principios de ese año fue consagrado el pri- terra, llegó el primer pastor metodista. Poco
mer obispo misionero de Haití, Harry Roberts después le siguió un colega norteamericano de
Carson. Trabajador infatigable, Carson comen- la Iglesia Metodista Episcopal Africana. A
zó a reorganizar la iglesia, e introdujo la orden partir de entonces han continuado celebrándo-
de las Hermanas de Santa Margarita, que des- se servicios metodistas en la región, y se han
de entonces se han distinguido en la labor edu- organizado nuevas iglesias. A principios del
cativa. Además reconstruyó la iglesia de la siglo XX, se comenzó a celebrar servicios en
Santa Trinidad en Port-au-Prince. Cuando Car- español, aunque durante largo tiempo se con-
son se retiró en 1943, dejó una iglesia debida- tinuó celebrándolos también en inglés.
mente organizada y en franca vía de crecimien- El trabajo estrictamente misionero en la Re-
to. Le sucedió el obispo Voegeli, quien ocupó pública Dominicana surgió por iniciativa de
el episcopado hasta bien avanzada la segunda los protestantes de Puerto Rico y de los misio-
mitad del siglo. Tras él, el obispo Luc Gamier, neros que allí trabajaban. En 1911, la Iglesia
de nacionalidad haitiana, mostró que esa igle- Presbiteriana de la ciudad de Mayagüez, en
sia había alcanzado mayor madurez. Durante Puerto Rico, ofreció una contribución para la
ese mismo tiempo, la Iglesia Episcopal fue uno obra misionera en la República Dominicana.
de los pocos centros de resistencia a la dictadu- Poco después, la Unión Evangélica de Puerto
ra de los Duvalier. Rico envió al vecino país dos representantes a
En 1964 la Iglesia Episcopal de Haití con- fin de investigar las posibilidades misioneras
taba con poco menos de 14.000 miembros que allí había. Esta visita fue seguida por otra
confirmados. Medio siglo más tarde tenía po- de tres colportores puertorriqueños. En 1916 el
co más de 25.000 miembros. comité ejecutivo de la Unión Evangélica deci-
Además de las denominaciones ya mencio- dió pedir la ayuda de las juntas misioneras
nadas, merecen citarse en Haití la Iglesia de norteamericanas para la evangelización de
Dios (de Cleveland), la Iglesia Adventista del Santo Domingo. También se nombró un comi-
Séptimo Día -el grupo protestante más gran- té local que organizaría en Puerto Rico una
de en el país-, la Iglesia Metodista Episcopal junta misionera para Santo Domingo en la que
Africana, cuyo trabajo misionero comenzó en cooperarían los congregacionalistas, discípu-
el 1823 y grupos de iglesias nacionales cuyo los de Cristo, metodistas, presbiterianos y her-
feligresía unida se estima en más de 80.000. manos unidos. El resultado de todo esto fue
El protestantismo penetró en el territorio de que en el año 1920 se constituyó la Junta de
lo que es hoy la República Dominicana du- Servicio Cristiano en Santo Domingo, en la
rante el período de la dominación haitiana. En que participaban los metodistas, presbiteria-
1824 el presidente de Haití, Jean Pierre Boyer, nos y hermanos unidos. Al momento de su
decidió que sería sabio estimular la inmigra- fundación esta Junta constituía un experimen-
ción por parte de negros norteamericanos que to misionero sin precedente en toda la historia
pudieran ayudar a poblar la isla y a mejorar los de la iglesia. Nunca antes se habían concerta-
métodos de agricultura. do varias juntas misioneras denominacionales
Los primeros contingentes de inmigrantes con el propósito de establecer en un país ex-
se establecieron en Samaná y Puerto Plata en tranjero una sola iglesia unida. El resultado de
1824. A partir de allí se extendieron por toda este esfuerzo es la Iglesia Evangélica Domini-
la península de Samaná y llevaron consigo su cana.
fe. Diez años después de su llegada, solicitaron Durante sus primeros años, la nueva obra
pastores a los Estados Unidos e Inglaterra. En en la República Dominicana estuvo a cargo
295
I
del doctor Nathan Huffman, quien antes había sultado de una obra emprendida en 1907. Ac-
sido misionero en Puerto Rico. Sus primeros tualmente, la iglesia es relativamente peque-
colaboradores fueron tres puertorriqueños - ña, con unas 146 congregaciones y una feli-
Alberto Martínez, José Espada Manero y Ra- gresía de 14.000.
fael Rodríguez- y trabajaron en la capital, Entre los inmigrantes que llegaron a la Re-
San Pedro de Macorís y La Romana. Además pública Dominicana en el siglo XIX, había un
del trabajo de evangelización y del estableci- buen número que pertenecía a la Iglesia Epis-
miento de iglesias, la Junta de Servicio Cristia- copal. Estos tenían gran interés en conservar
no en Santo Domingo se interesó en los servi- su fe, y en 1898 lograron que el obispo Holly,
cios médicos, la obra de reconstrucción rural y de Haití, ordenara a su primer pastor -el re-
la educación. En 1932, se fundó en Santo Do- verendo Benjamín I. Wilson. Wilson estaba
mingo el Hospital Internacional, que sirvió interesado en el trabajo misionero en español,
también de escuela de enfermeras por un cuar- y desde los inicios de su ministerio celebró
to de siglo. Cuando el desarrollo de los servi- servicios en ese idioma. Sin embargo, la Igle-
cios médicos ofrecidos por el gobierno hizo sia Protestante Episcopal de los Estados Uni-
pensar a la junta que debía cerrar su hospital y dos no tomó gran interés en la República Do-
escuela de enfermeras en la capital, se estable- minicana hasta después de comenzada la ocu-
cieron clínicas en Barahona y en dos zonas pación de ese país por parte de las tropas
pobres de la capital. En el campo de la educa- norteamericanas, y entonces se dedicó casi ex-
ción, la Iglesia Evangélica Dominicana se dis- clusivamente a los extranjeros que residían
tinguió por sus escuelas y muy especialmente allí. El trabajo entre los inmigrantes antilla-
por la Librería Dominicana, que durante mu- nos quedó relegado a segundo término, y la
chos años sirvió en la producción y distribu- obra en español fue abandonada. La supervi-
ción de literatura cristiana, y que fue además sión episcopal -primero bajo el obispo de
un lugar de encuentro de los más distinguidos Puerto Rico y, a partir de 1928, del de Haití-
intelectuales del país en épocas de opresión y casi no existía, y cada misionero establecía su
de estancamiento intelectual. propia política.
En 1955, la Iglesia Evangélica Dominica- El trabajo en español fue comenzado de
na recibió su autonomía. A partir de entonces nuevo en 1952, gracias a la iniciativa del reve-
los representantes de la Junta de Servicio rendo Basden, oriundo de las Antillas británi-
Cristiano no serían ya superintendentes de to- cas, quien fue el único pastor local ordenado
da la Iglesia sino que su función consistiría en treinta y cinco años. A pesar de que su len-
sólo en mantener relaciones entre la iglesia gua materna era la inglesa, Basden comenzó a
nacional y las juntas en Nueva York. Ante- predicar en español en Puerto Plata, y a partir
riormente, y de manera paulatina, se habían de entonces la Iglesia Episcopal ha continua-
tomado pasos para preparar la iglesia para la do creciendo en la República Dominicana, al
autonomía -especialmente la preparación de tiempo que pierde su carácter marcadamente
un pastorado y dirigentes laicos capaces de extranjero. A pesar de los grandes pasos de
tomar sobre sí más responsabilidades. En avance que se han dado últimamente, esta igle-
1963, la Iglesia Evangélica Dominicana tenía sia no ha podido recuperar el tiempo perdido,
27 iglesias organizadas, 19 pastores ordena- especialmente en lo que se refiere al ministe-
dos, otros 155 obreros y una membresía de rio nacional. En 1957, contaba con nueve luga-
3.300. Poco antes, los moravos habían decidi- res de culto, poco más de 1.000 miembros, y
do incorporar a la Iglesia Evangélica Domini- sólo un pastor nacional. Actualmente tiene
cana las dos congregaciones que habían re- menos de 1.600 feligreses.
296
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
Los iglesia pentecostal más grande en el zar obra. Pronto surgieron pastores cubanos que
país es las Asambleas de Dios, con un poco recibieron su preparación teológica en los Esta-
más de 75.000 afiliados. La Iglesia Adventis- dos Unidos y se dedicaron a pastorear las colo-
ta del Séptimo Día cuenta con unos 70.000 fe- nias de expatriados. Fue entre tales colonias que
ligreses. Al igual que en toda América Latina, primero surgió el interés por la evangelización
los grupos pentecostales -tanto misioneros de Cuba, de tal modo que a partir de 1882 se co-
como nacionales- tenían un crecimiento sig- menzó a enviar de regreso a algunos expatriados
nificativo a principios del siglo XXI. cubanos con el propósito de distribuir las Escri-
Los primeros servicios protestantes celebra- turas y explorar las posibilidades de establecer
dos en Cuba de que tenemos noticias tuvieron obra evangélica. Quienes más se distinguieron
lugar en 1741, cuando los ingleses se apodera- en este sentido fueron los episcopales, y muy es-
ron del valle de Guantánamo en una breve in- pecialmente entre ellos Pedro Duarte, quien no
cursión bélica. Algo semejante sucedió en La se contentó con la distribución de la Biblia, sino
Habana en 1762, cuando las tropas inglesas que en 1884 reunió en la ciudad de Matanzas
que ocupaban la ciudad tomaron el convento de una congregación a la que dio el nombre de
San Francisco para en él celebrar sus oficios re- «Fieles a Jesús». El éxito de Duarte llevó a otras
ligiosos. Pero en ambos casos se trató sólo de personas en los Estados Unidos a interesarse en
una situación pasajera, y no se intentó comuni- el trabajo episcopal en Cuba. Una de estas per-
car a los habitantes de la isla la fe de los inva- sonas fue el reverendo Juan B. Báez, pastor de la
sores ingleses. Durante la segunda mitad del congregación cubana en Cayo Hueso, quien fue
siglo XIX, ante el creciente número de nortea- repetidamente a Matanzas, y por fin logró inte-
mericanos e ingleses establecidos en Cuba, la resar al obispo de la Florida en la obra cubana.
Iglesia Protestante Episcopal de los Estados Por su parte, Duarte regresó a los Estados Uni-
Unidos comenzó a interesarse en la posibilidad dos para hacer estudios teológicos y recibir las
de enviar allí un pastor que se hiciera cargo de órdenes, tras lo cual volvió a hacerse cargo de su
sus necesidades religiosas. Por fin, en 1871, iglesia en Matanzas. En pocos años, había con-
llegó a La Habana Edward Kenney, quien fue gregaciones episcopales, no sólo en Matanzas,
el primer pastor protestante en establecerse en sino también en La Habana y en las ciudades ve-
Cuba. Durante nueve años, Kenney trabajó in- cinas. De todas las principales ciudades llegaban
cesantemente en La Habana y las ciudades ve- solicitudes para que se estableciera en ellas obra
cinas. Aunque su labor fue casi exclusivamen- episcopal. Todo esto no se hizo sin la oposición
te entre personas de habla inglesa, logró reunir de las autoridades civiles y eclesiásticas, y el
un pequeño número de creyentes cubanos. propio Duarte se vio obligado a sufrir cárcel por
Cuando se vio obligado a regresar a su patria razón de su fe.
tras haber contraído la fiebre amarilla, otro pas- Los últimos años del dominio español en
tor fue enviado a continuar su obra, pero sólo Cuba fueron harto difíciles tanto para el pue-
permaneció en el país por espacio de dos años. blo en general como para el naciente protes-
Los verdaderos orígenes del protestantismo tantismo en particular. Duarte se vio envuelto
cubano han de encontrarse en los centenares de en sospechas por parte de las autoridades es-
personas que partieron hacia el exilio en los Es- pañolas, y tuvo que expatriarse. Por razón de
tados Unidos durante las luchas que en pro de la su partida y de los estragos de la guerra, se
independencia tuvieron lugar a partir de 1868. perdió mucho del terreno ganado. La única
En Cayo Hueso, Tampa, Filadelfia y Nueva congregación que continuó reuniéndose regu-
York existían grandes comunidades cubanas en- larmente fue un pequeño grupo de fieles en La
tre las que los protestantes comenzaron a reali- Habana.
297
Las misiones en América Latina
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F1
298
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
participando activamente en el Consejo Ecu- tenían en Cuba -el Rdo. Julio Fuentes, quien
ménico Cubano, en el Consejo Latinoamerica- llegó a ser el primer superintendente cubano de
no de Iglesias, y en la Conferencia Caribeña de la misión presbiteriana. Puesto que ese mismo
Iglesias. año los presbiterianos del sur también traspasa-
Los orígenes de la Iglesia Presbiteriana en ron su obra a sus hermanos del norte, la obra
Cuba son semejantes a los de la Iglesia Episco- presbiteriana en Cuba quedó enteramente bajo
pal. También surgió, no de la obra de misione- la responsabilidad de los del norte.
ros extranjeros, sino del interés y la dedicación Durante las primeras décadas del siglo XX
de cubanos que habían conocido el protestantis- los presbiterianos cubanos recibían su educa-
mo durante su exilio en los Estados Unidos. El ción teológica en México. Más tarde comenzó
primero y más notable fue Evaristo Collazo, a utilizarse para ese propósito el Seminario
quien en 1890 escribió a los presbiterianos del Evangélico de Puerto Rico. Por último, en
sur de los Estados Unidos informándoles acer- 1947, se fundó en la ciudad de Matanzas, Cu-
ca de la existencia de tres congregaciones y una ba, el Seminario Evangélico de Teología. En él
escuela para jovencitas que él mismo, con la cooperaban al principio los presbiterianos y
ayuda de su señora, había creado y sostenido metodistas, y más tarde los episcopales.
hasta entonces. En respuesta a la carta de Colla- De todas las iglesias de Cuba, la presbite-
zo, un misionero presbiteriano que trabajaba en riana parece ser la que menos ha sufrido tras
México fue enviado a Cuba, donde constituyó la revolución de 1959. Esto es tanto más no-
en iglesias presbiterianas las congregaciones table por cuanto antes de la revolución esta
fundadas por aquél. Poco después le siguieron denominación trabajó casi exclusivamente en
otros dos misioneros, y además se destinaron las ciudades y entre la alta clase media. La
fondos en los Estados Unidos para que Collazo Iglesia Presbiteriana Reformada en Cuba -
pudiese dedicar todo su tiempo a la tarea pasto- nombre oficial de la iglesia presbiteriana-
ral. Pero todo esto quedó interrumpido durante ha estado en la vanguardia del movimiento
la Guerra de Independencia, cuando los misio- ecuménico cubano, caribeño, latinoamericano
neros norteamericanos regresaron a su país y e internacional, como parte de la familia de
Collazo se unió al ejército libertador. iglesias reformadas en el mundo. Esta iglesia
Tras la guerra, los misioneros presbiteria- ha producido un liderato pastoral nacional de
nos del sur volvieron a Cuba, y a ellos se su- muy buena calidad teológica, y continúa sir-
maron los del norte. Estos últimos laboraron viendo a una población altamente educada de
especialmente en La Habana, con la colabora- Cuba.
ción de Collazo y de Pedro Rioseco, también La Iglesia Presbiteriana de los Estados Uni-
cubano. Los presbiterianos del sur hicieron dos de América mantiene relaciones fraterna-
una gran contribución en el campo de la edu- les con esta iglesia cubana. Tales relaciones
cación a través de sus misioneros Margaret E. han contribuido a que las iglesias en los Esta-
Craig y Robert L. Wharton, quienes comenza- dos Unidos tengan una exposición a la dinámi-
ron en Cárdenas la escuela que luego recibió el ca entre el protestantismo y la revolución cu-
nombre de «La Progresiva». bana. Al igual que otras iglesias protestantes,
En 1909 los congregacionalistas traspasa- desde la última década del siglo XX hasta
ron a los presbiterianos del norte la obra que principios del siglo XXI esta iglesia ha expe-
habían comenzado en Cuba poco antes, pero rimentado un crecimiento progresivo con cer-
que ya contaba con cinco centros de trabajo. En ca de unos 10.000 feligreses.
1918 los discípulos de Cristo hicieron lo mis- También el metodismo penetró en Cuba a
mo con las tres congregaciones y un pastor que través de los expatriados en los Estados Unidos.
299
Las misiones en América Latina
En 1873 el pastor Charles Fuiwood, de la Igle- ron el Seminario de Teología en Matanzas des-
sia Metodista Episcopal del Sur, comenzó una de su fundación en el 1947 hasta que se retira-
obra entre los cubanos residentes en Cayo Hue- ron de él en el 2007 -al tiempo que continua-
so. En 1883, la Conferencia de la Florida envió ron participando activamente en el Consejo
dos misioneros cubanos a su país de origen: Ecuménico Cubano. Esta iglesia tiene unos
Enrique B. Someillán y Aurelio Silvera. Des- 11.000 feligreses, lo que demuestra que se ha
pués de reunir una pequeña congregación que ido recuperando del revés sufrido durante los
celebraba sus servicios en un hotel de la capital, primeros años de la revolución.
Someillán regresó a los Estados Unidos y dejó Entre las iglesias de más crecimiento en Cu-
a Silvera a cargo de la obra. En 1888 Silvera or- ba se encuentran iglesias pentecostales, tanto
ganizó una iglesia que contaba con 194 miem- de origen misionero como movimientos nacio-
bros. Ese mismo año llegó al país el primer mi- nales. Las Asambleas de Dios, con una feligre-
sionero norteamericano, J. J. Ransom. Poco sía de 50.000 tiene un trabajo de evangelización
después le siguieron otros pastores cubanos agresivo. La Iglesia Cristiana Pentecostal de
procedentes de la Florida, entre ellos Clemente Cuba -cuyo origen se remonta a la obra misio-
Moya, Miguel Pérez Arnaldo e Isidoro E. Ba- nera de la Iglesia del Movimiento Misionero
rredo. Mundial en Puerto Rico en 1956- con una fe-
La Guerra de Independencia, que comenzó ligresía de 20.000, participa activamente en el
en 1895, interrumpió la floreciente obra meto- movimiento ecuménico cubano y en el Conse-
dista, pues el gobierno español tomó medidas jo Latinoamericano de Iglesias. La Iglesia
que hacían difícil la continuación de la obra, y Evangélica Pentecostal Cubana, con más de
algunos de los dirigentes de ésta se sumaron al 50.000 miembros, es la iglesia de corte pente-
ejército libertador. costal, nacional e independiente más grande en
En 1898, tras la Guerra Hispanoamericana, el país.
comenzaron a hacerse preparativos para em- Además de las tres denominaciones que ya
prender de nuevo la obra interrumpida en Cuba. hemos discutido, se distinguen en Cuba los bau-
La Guerra Hispanoamericana había creado en tistas, tanto del norte como del sur. La obra bau-
los Estados Unidos gran interés hacia el país ve- tista en Cuba comenzó en 1883, cuando Alber-
cino, y en ella participaron muchos soldados, to J. Díaz, cubano convertido al protestantismo
capellanes y médicos que regresaron a los Esta- en Nueva York, regresó a su país como colpor-
dos Unidos solicitando que se emprendiera obra tor bíblico. Dos años más tarde, Díaz organizó
en Cuba. En diciembre de 1898, luego de haber un pequeño núcleo de creyentes que tomó el
enviado dos representantes que exploraran las nombre de «Iglesia Reformada de Cuba», y que
posibilidades que la isla ofrecía, la Conferencia más tarde estableció relaciones con los bautis-
de la Florida organizó un distrito misionero que tas norteamericanos. Actualmente hay tres gru-
incluía siete puntos de trabajo en Cuba. Además pos bautistas en Cuba: la Convención Bautista
de esto, pronto se organizó una red de escuelas de Cuba Oriental, la Asociación de la Conven-
que llegaron a tener gran prestigio, así como ción Bautista de Cuba Occidental, y la Conven-
varios dispensarios en zonas rurales. ción Bautista Libre de Cuba. Las primeras dos
Durante la revolución los metodistas, al igual tienen una feligresía de unos 13.000.
que todas las iglesias protestantes, sufrieron El pastorado en las iglesias protestantes y
grandes reveses en la obra. No obstante, des- pentecostales es nacional. Las relaciones con
pués de la caída del bloque soviético, el meto- iglesias extranjeras se limita a intercambios de
dismo en Cuba tiene un despertar carismático. profesores en el Seminario de Matanzas, pro-
Como indicamos arriba, los metodistas apoya- yectos particulares de construcción o apoyo al
300
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
trabajo de las iglesias, e invitaciones a eventos so de formación cristiana que tiene muchas se-
ecuménicos. mejanzas con la iglesia primitiva -por ejem-
El Consejo Ecuménico Cubano ha realizado plo, el concepto de casas-cultos dada la limita-
una labor mediadora entre las iglesias y el Es- ción de recursos y permisos para adquirir edi-
tado. En el 1990, con la invitación del gobierno, ficios para nuevas congregaciones, y el proce-
se celebró una reunión con Fidel Castro donde so de preparación para el bautismo, que en al-
se discutió el papel de las iglesias protestantes gunas iglesias toma más de un año.
-incluso algunas pentecostales- en la histo- Los primeros servicios protestantes que se
ria y coyuntura actual de la revolución. Bajo el celebraron en Puerto Rico tuvieron lugar en
título «Con Dios y con la patria» esta reunión el año 1598, cuando los ingleses tomaron la
de líderes fue una combinación de agradeci- ciudad de San Juan y la retuvieron por espa-
mientos y reconocimientos a los logros de la re- cio de cinco meses. En 1625, cuando los ho-
volución y demandas diplomáticas de las igle- landeses desembarcaron en la isla y bombar-
sias por tener más libertad y acceso a recursos dearon la capital durante cuatro días, es de
materiales. suponerse que se celebraron también servi-
El Consejo también ha auspiciado simposios cios religiosos protestantes. Pero éstos fueron
y consultas sobre la historia y la teología cuba- sólo breves incidentes en una larga historia en
na usando, por ejemplo, los escritos del prócer la que el Santo Oficio, la restricción del co-
cubano José Martí. El Consejo no sólo está mercio y la prohibición de inmigración ex-
compuesto por iglesias cristianas, sino que tam- tranjera evitaron que Puerto Rico tuviera ver-
bién incluye ala comunidad cubana judía como daderos contactos con el protestantismo.
miembro afiliado. Además, ha sido un enlace Cuando en 1846 la Junta de Comercio y Fo-
importante entre las iglesias del exterior y las mento dirigió al gobierno en la metrópoli una
cubanas. La relación que tiene con el gobierno petición para que se autorizase la admisión de
facilita procesos altamente complejos, burocrá- extranjeros en Puerto Rico sin exigirles que
ticos y políticos. fuesen católicos, el gobierno de Madrid, a
Parte de la crisis de las iglesias fue perder un instancias del obispo de San Juan, no accedió
espacio misional ante la agencia del gobierno a dicha petición. Sin embargo, esto no impi-
cubano. En este sentido, al igual que la Iglesia dió que se estableciesen algunos protestantes
Católica, las iglesias protestantes y pentecosta- en la isla, pues en el año 1866 el general Mar-
les quedaron limitadas a una gestión evangeli- ches¡ juzgó conveniente que se designase un
zadora aislada de los asuntos sociales y cultu- lugar en los cementerios para sepultar a los
rales. Luego de la caída del bloque soviético y protestantes. También tenemos noticias de
dada la crisis económica que enfrenta la revo- que en 1853 un capitán de navío danés intro-
lución cubana, las iglesias han redescubierto dujo en la ciudad de Humacao una «Cartilla
distintas tareas misioneras de carácter social, para Niños» que abundaba en los principios
económico y de apoyo a la vida cotidiana de un del protestantismo.
pueblo que vive en una coyuntura histórica Los verdaderos orígenes del protestantismo
muy compleja. En medio de este redescubri- en Puerto Rico datan de la segunda mitad del
miento, las iglesias parecen crecer sin mucho siglo XIX. En 1869 se celebra el primer servi-
esfuerzo en la tarea evangelizadora. Por otro la- cio protestante en Ponce, en la casa de un Oti-
do, dado que muchos de los nuevos feligreses ho Salomons, donde predica el reverendo
han vivido más de una generación bajo un ré- Allen, ministro protestante en Saint Thomas.
gimen comunista con muy poca exposición al En 1870 se autoriza al misionero holandés Jo-
cristianismo, las iglesias comienzan un proce- hannes Waldemar Zechune a fundar una es-
301
Las misiones en América Latina
cuela protestante en Vieques. Y en 1882 que- mer obispo puertorriqueño. Alrededor de esa
da organizada la primera Iglesia Anglicana en fecha, dicha iglesia contaba con poco más de
Vieques. 3.000 miembros.
Aquella primera congregación anglicana Un episodio notable en el crecimiento de la
estaba constituida principalmente por personas Iglesia Episcopal en Puerto Rico fue la
de origen anglosajón, y sus servicios se cele- anexión a ese cuerpo de la Iglesia de Jesús,
braban en inglés. Aun más, su primer templo fundada en 1902 por Manuel Feriando. Este
fue construido en Inglaterra y enviado en sec- era de origen español, y había llegado a Puer-
ciones a la ciudad de Ponce, donde fue inaugu- to Rico por primera vez como capellán del
rado en 1873. Cuando, un año más tarde, fue ejército norteamericano. Después de la gue-
restaurada la monarquía española, se ordenó la rra, se estableció en Quebrada Limón, cerca de
clausura de este templo; pero poco después, Ponce, y allí se dedicó a reunir una congrega-
por intercesión de la reina Victoria de Inglate- ción y a preparar pastores y diaconisas, ade-
rra, fue abierto de nuevo, aunque con ciertas li- más de organizar un orfanato. Cuando, veinte
mitaciones para impedir la propagación de la años más tarde, la Iglesia de Jesús se unió a la
fe protestante. A pesar de ello, cuando en 1876 Episcopal, ésta ganó un obispo -el propio
se hizo cargo de la parroquia el padre Z. Vall Manuel Ferrando- cuatro sacerdotes y más
Espinosa, español educado en Inglaterra, co- de dos mil miembros.
menzaron a celebrarse servicios en castellano. En 1961 se fundó en Carolina, a pocos ki-
Como ya hemos visto más arriba, al mismo lómetros al este de San Juan, el Seminario
tiempo que comenzaba su obra en Ponce, la Episcopal del Caribe, cuyo propósito era edu-
Iglesia Anglicana trabajaba también en Vie- car pastores, no sólo para Puerto Rico, sino
ques, donde Johannes Waldemar Zechune es- también para todo el Caribe. Este fue clausu-
tableció una «Escuela Inglesa». En 1883 se rado en la década del 1970. Actualmente la
celebraron los primeros servicios, aunque en Iglesia Episcopal en Puerto Rico tiene unos
idioma inglés. 10.000 miembros.
La Guerra Hispanoamericana de 1898, con Aunque cuando los presbiterianos llegaron a
el consiguiente cambio de soberanías en Puer- Puerto Rico, en el año 1899, ya estaban en la is-
to Rico, hizo aconsejable el traspaso de la na- la otras tres denominaciones, el hecho de que a
ciente obra de la jurisdicción de la Iglesia de ellos se sumara la obra fundada por Antonio
Inglaterra a la de la Iglesia Protestante Episco- Badillo Hernández nos lleva a considerarles an-
pal de los Estados Unidos. Esta se hizo res- tes que a esas otras denominaciones. En 1868,
ponsable de la obra en Puerto Rico, y nombró durante una visita a la vecina isla de Saint Tho-
al primer misionero en la ciudad de San Juan, mas, Badillo Hernández adquirió un ejemplar
así como a otro que se haría cargo de la iglesia de la Biblia, en versión inglesa. De regreso a su
de Ponce, que había quedado prácticamente tierra, se dedicó al estudio de su nueva adquisi-
abandonada al retirarse el padre Vali Espinosa. ción, y a través de ella llegó a abrazar las doc-
En 1902 fue electo el primer obispo misio- trinas propias del protestantismo, que luego co-
nero de Puerto Rico, y la elección cayó sobre municó a sus familiares y amigos. A su muer-
James Heartt Van Buren, hasta entonces rector te, sus enseñanzas no desaparecieron, sino que
de la parroquia de San Juan. A partir de ese continuaron a través de su viuda e hijos, de mo-
momento la obra episcopal continuó creciendo do que en 1900, cuando llegó a Aguadilla el
misionero presbiteriano Underwood, encontró
y echando raíces en el país, hasta que en 1964,
en la persona del muy reverendo Francisco allí un grupo de «creyentes en la Palabra» cuyas
Reus Froilán, la Iglesia Episcopal tuvo su pri- doctrinas eran las mismas del protestantismo.
302
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
Este fue el primer núcleo de la naciente Iglesia luteranos contaban con sólo 2.265 miembros
Presbiteriana en Puerto Rico. en Puerto Rico y en la actualidad con 26 con-
Si no se toma en cuenta el trabajo precursor gregaciones y una feligresía de 8.000. Esta
de Antonio Badillo Hernández, la obra presbi- iglesia sirve primordialmente a la clase media
teriana en Puerto Rico se remonta al año 1899, y media alta del país.
cuando llegaron los primeros misioneros. An- Los bautistas de la American Home Mis-
tes de esta fecha, la Junta de Misiones Presbi- sion Society llegaron a Puerto Rico a princi-
teriana había hecho convenios con otras juntas pios de 1899. Su primer misionero fue Hugo P.
misioneras para distribuir su obra en el territo- McCormick, quien hizo de la ciudad de Río
rio de Puerto Rico de tal modo que los misio- Piedras su centro de operaciones. Allí celebró
neros de diversas denominaciones no compi- el primer servicio el 28 de febrero de 1899, y
tiesen entre sí -el llamado «Acuerdo de Ca- el éxito de su obra fue tal que en Río Piedras
balleros». En ese convenio había tocado a los surgió una de las mayores iglesias evangélicas
presbiterianos la porción occidental de la isla. de la isla. Otro misionero notable fue A. B.
Por esta razón, el centro de la obra presbiteria- Rudd, más conocido como «don Bartolo». Es
na ha estado siempre en la ciudad de Maya- de notarse que ya en 1928 partía hacia El Sal-
güez, en el extremo oeste de Puerto Rico, don- vador el primer misionero bautista puertorri-
de fundaron un instituto de formación ministe- queño. Como la mayoría de las otras denomi-
rial que hoy es la Universidad Interamericana naciones protestantes, los bautistas fundaron
de Puerto Rico. Pero también han trabajado varias instituciones de carácter benéfico y edu-
intensamente en la capital, donde fundaron el cativo, de las que la más notable fue quizá la
Hospital Presbiteriano -que más tarde quedó Academia Bautista de Barranquitas.
en manos de una corporación privada. En 1957, la Convención Bautista de Puerto
En 1919, junto a varias otras denominacio- Rico contaba con poco más de 6.000 miem-
nes, constituyeron el Seminario Evangélico de bros, y actualmente es una de las iglesias pro-
Puerto Rico, donde actualmente se preparan testantes de más feligresía en el país.
sus pastores, y cuyo primer presidente fue el La Iglesia Evangélica Unida de Puerto Ri-
misionero presbiteriano James A. McAllister. co surgió de la unión, en 1931, de las denomi-
En 1964 había en Puerto Rico 52 iglesias naciones Hermanos Unidos en Cristo, Cristia-
presbiterianas, con poco más de 6.000 miem- na y Congregacional.
bros, y actualmente hay 69 congregaciones La Iglesia de los Hermanos Unidos en Cris-
con unos 10.000 miembros. La iglesia presbi- to comenzó su obra en Puerto Rico en el año
teriana en Puerto Rico es parte de la iglesia de 1899, cuando Nathan H. Huffman se estable-
los Estados Unidos, y se conoce como el Síno- ció en Ponce. Un año más tarde quedó consti-
do Boriquén de esa denominación. tuida en esa ciudad la primera congregación de
El pionero de la obra luterana en Puerto Ri- los Hermanos Unidos. En 1901 vino a apoyar
co fue el joven seminarista G. S. Swensson, la obra de Huffman el misionero Philo W.
quien en 1898, y por cuenta propia, emprendió Drury. A partir de entonces esta denominación
una misión a Puerto Rico. El resultado de sus comenzó una amplia expansión por la región
esfuerzos fue tal que el Concilio General Lu- sur de la isla, hasta tal punto que en la segun-
terano envió otros misioneros a la isla, con lo da década de su existencia comenzó a enviar
cual se dio comienzo al trabajo misionero or- misioneros puertorriqueños a la República Do-
ganizado. minicana. En el entretanto, los pastores Drury
A pesar de haber comenzado su predica- y Huffman no habían perdido de vista la nece-
ción en una fecha tan temprana, en 1957 los sidad de coordinar su trabajo con el de otras
303
L
Las misiones en América Latina
denominaciones, y de llegar quizá hasta la 1930 las tres denominaciones que se unieron
unión orgánica con ellas. contaban con 3.518 miembros, en 1957 su nú-
La Iglesia Cristiana comenzó su obra en mero era de sólo 4.931, y en el 2004 de menos
Puerto Rico en el año 1901, también en la ciu- de 10.000. La lentitud de ese crecimiento pue-
dad de Ponce. De allí se extendió a Santa Isa- de deberse a las dificultades internas que sur-
bel y Salinas, otras dos ciudades al sur de la gieron en la Iglesia Evangélica Unida porque
isla. En 1911 fundaron un dispensario, y un los principales problemas y conflictos que la
año después se construía en Ponce su primer unión acarrearía no se resolvieron de antema-
templo. no, sino que se pospuso su solución para des-
La Iglesia Congregacional Cristiana tam- pués de efectuada la unión. Quizá ésta sea
bién emprendió obra en Puerto Rico a princi- también la razón por la que la Iglesia Evangé-
pios de siglo, y se estableció en el extremo lica Unida, que en sus comienzos aspiraba a
oriental de la isla, donde logró crear fuertes continuar el movimiento hacia la unión orgá-
congregaciones en Humacao, Yabucoa y Fa- nica entre las diversas denominaciones en
jardo. Además, esta misma denominación creó Puerto Rico, pronto abandonó esa aspiración y
y sostuvo en Santurce, cerca de San Juan, el se contentó con trabajar paralelamente a las
Instituto Blanche Kellogg, fundado en 1907, demás denominaciones.
que fue durante muchos años una de las insti- La Iglesia Metodista comenzó a trabajar
tuciones más prestigiosas de Puerto Rico. en Puerto Rico en marzo del año 1900, cuan-
En 1931 estas tres denominaciones se unie- do llegó a la isla el misionero Charles W.
ron para dar origen a la Iglesia Evangélica Drees. Este se estableció en la capital, y a
Unida de Puerto Rico. Según declararon... partir de ella el metodismo se extendió hacia
Movidos por la firme y profunda convic- Arecibo al oeste y Guayama al sur. Desde sus
ción de que es la voluntad de Cristo que los inicios la obra metodista se ocupó de la edu-
creyentes en El estén unidos eficazmente cación del pueblo. En el primer año del siglo
en amor y en sus esfuerzos por el extendi- se comenzó una escuela en San Juan, y poco
miento de su reino, y que una reunión real después se estableció cerca de ella el orfana-
y verdadera de las fuerzas denominaciona- to para niñas que luego vino a ser la presti-
les redundará en mayor gloria para nuestro giosa Escuela Robinson. Además, los prime-
Señor y reportará mayores beneficios en la ros pastores metodistas se ocuparon de ense-
salvación de almas y en el establecimiento ñar a los adultos a leer, así como de proveer-
de un orden social cristiano en nuestra isla, les una educación fundamental. Con el co-
las denominaciones Congregacional, Cris- rrer de los años, y según fue mejorando la
tiana y Hermanos Unidos en Cristo en Puer- instrucción pública, muchas de las escuelas
to Rico se unen solemnemente para formar parroquiales metodistas fueron clausuradas, y
la Iglesia Evangélica Unida de Puerto Rico. el trabajo educativo de esta denominación se
Esta unión era el resultado de los esfuerzos concentró en unos pocos centros urbanos. En
de varios dirigentes nacionales y extranjeros, cuanto a su desarrollo numérico, esta deno-
entre los cuales se destacó el pastor Drury. Se minación deja mucho que desear, pues en
esperaba que el resultado de la unión sería un 1957, a pesar de contar con magníficos tem-
crecimiento más rápido en todos los aspectos plos y otras facilidades físicas y con mayor
de la vida de la nueva iglesia. Sin embargo, las número de pastores nacionales y extranjeros
estadísticas muestran que, al menos en lo que que cualquier otra denominación -excepto
al número de sus miembros se refiere, ese cre- quizá las Asambleas de Dios- sólo tenía
cimiento no llegó a producirse. En efecto, en 4.675 miembros. Tras un largo proceso que
304
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
culminó en el 1992, esta iglesia se hizo autó- sidía en la ciudad de San Francisco, Lugo tu-
noma (no es ya parte integrante de la iglesia vo una visión en la que se sintió llevado a una
norteamericana) y diez años más tarde conta- alta colina desde la que podía ver la ciudad de
ba con una feligresía de unos 10.000. Ade- Ponce. Tomando esto como un llamamiento
más, trabajó arduamente con organizaciones del Señor, decidió aprestarse para ir a predicar
ecuménicas en la salida de la Marina nortea- el Evangelio a su tierra nativa. Allí trabajó jun-
mericana de Vieques. to a Salomón Feliciano, quien había sido
Los primeros misioneros de la Iglesia Cris- miembro de la Iglesia Metodista, y más tarde
tiana (Discípulos de Cristo) a Puerto Rico fue- había tenido en San Francisco experiencias
ron J. A. Erwin y su esposa, quienes llegaron pentecostales que le hicieron sentirse llamado
a la isla en 1899. Dos años más tarde Erwin a predicar el Evangelio en la República Domi-
fue nombrado juez de distrito para Puerto Ri- nicana. Mientras se aprestaba a ir a Santo Do-
co, y la sociedad misionera de los Discípulos mingo, Feliciano colaboró con la obra de Lu-
envió para sustituirle a W. M. Taylor y su se- go en Ponce. Esta obra creció rápidamente, no
ñora. En siete años, Taylor, con la ayuda de al- sólo por razón de sus nuevos conversos del ca-
tolicismo, sino también porque apareció una
gunos colaboradores que llegaron tras él, logró
organizar dos iglesias y cinco misiones. división en la Iglesia Metodista de Ponce, y un
A partir de entonces los Discípulos han grupo de descontentos se unió al movimiento
continuado creciendo en Puerto Rico y en pentecostal. Algo semejante sucedió en Areci-
1957 contaban con más de 6.000 miembros. bo, donde una pequeña denominación surgida
En 1933 esta denominación experimentó un de una querella interna dentro de un grupo
avivamiento que le ha llevado a ser la iglesia evangélico, y que se llamaba «Iglesia Puerto-
protestante no pentecostal más grande en el rriqueña», se unió a las Asambleas de Dios.
país, con más de 19.000 miembros afiliados. Sin embargo, debemos cuidarnos de no pensar
Además, los discípulos de Cristo tienen traba- que el gran crecimiento de esta denominación
se debe a que haya logrado reunir grupos de
jo misionero en otras naciones de América La-
tina y muchos de sus líderes han ocupado car- descontentos procedentes de otras iglesias.
Más bien deberíamos decir que el gran auge de
gos importantes en el movimiento ecuménico
latinoamericano y en instituciones de educa- las Asambleas de Dios -así como de otros
ción teológica en América Latina y los Esta- grupos pentecostales- se debe al espíritu de
dos Unidos. testimonio constante que existe en la mayoría
Las Asambleas de Dios son la mayor deno- de sus miembros. Tal espíritu hace que no se
minación protestante en Puerto Rico, ya que espere que el pastor sea la persona que comu-
en 1957 tenían casi 10.000 miembros. Los orí- nique el Evangelio a los no creyentes, sino que
se vea en él más bien al maestro y director que
genes de esta denominación se encuentran en
un grupo de puertorriqueños que, a principios organiza la tarea evangelizadora de toda la co-
del siglo XX, se dirigieron a Hawai en busca munidad cristiana.
de mejores condiciones de vida. Casi todos De la obra de Lugo surgió buena parte del
eran católicos, pero muchos de ellos se rela- movimiento pentecostal puertorriqueño. Esto
cionaron en Hawai con iglesias protestantes. incluye, en particular, la Iglesia de Dios Pen-
Fue allí que Juan L. Lugo y Salomón Felicia- tecostal -nombre que las Asambleas adopta-
no tuvieron sus primeras experiencias pente- ron- y la Iglesia de Dios «Mission Board»,
costales -aunque Feliciano había sido bauti- que es parte de la Iglesia de Dios en los Esta-
zado anteriormente en la Iglesia Metodista de dos Unidos, con sede en Cleveland, Tennes-
Ponce, en Puerto Rico. En 1916, mientras re- see.
305
Las misiones en América Latina
Un dato notable y muy interesante de este políticas y académicas. Hasta qué punto esto
punto de nuestra historia es que a principios se deba a la cercanía geográfica, política y eco-
del siglo XXI varias de estas iglesias, y en par- nómica de los Estados Unidos, y hasta qué
ticular la Iglesia de Dios Pentecostal, tenían punto se deba al interés que muchas denomi-
misioneros puertorriqueños en más de nueve naciones han puesto siempre en la labor edu-
países latinoamericanos, además de España y cativa, es una cuestión a la que no podemos
Portugal. responder aquí.
La mayor parte de las denominaciones que La segunda observación es que las iglesias
hemos discutido se mostró interesada en la de Puerto Rico, que en otro tiempo señalaron el
coordinación de su trabajo. Este interés dio camino del protestantismo mundial creando
origen en 1905 a la Federación de Iglesias una misión unida para la República Dominica-
Evangélicas en Puerto Rico, de la que forma- na, y que llegaron a formar uniones tales como
ban parte los bautistas, congregacionalistas, la Iglesia Evangélica Unida, a partir de la déca-
la Iglesia Cristiana, los discípulos de Cristo, da de 1930 comenzaron a perder ese ímpetu re-
metodistas, presbiterianos y los Hermanos novador y misionero. Durante las últimas déca-
Unidos. Fue en gran medida a través de la das del siglo XX el protestantismo vivió una
obra de la Federación que se estableció la re- profunda polarización ideológica, pastoral y
vista «Puerto Rico Evangélico», en la que co- generacional que quebró a muchos líderes na-
operaban las mismas denominaciones que cionales.
constituían la Federación. En 1916, y con el La tercera observación es que, al mismo
propósito de aplicar las resoluciones del Con- tiempo que las denominaciones «históricas»
greso de Panamá (1916), la Federación se perdían ese ímpetu, lo cobraba el movimiento
convirtió en la Unión Evangélica de Puerto pentecostal, en forma tal que ya a mediados
Rico. De igual modo que la Federación había del siglo XX Puerto Rico era un centro de mi-
servido para la creación de «Puerto Rico siones pentecostales.
Evangélico», la Unión contribuyó al estable- La cuarta observación es que Puerto Rico ha
cimiento del Seminario Evangélico de Puerto sido un recurso para las iglesias hispanas o lati-
Rico, en el año 1919. En 1934, la Unión nas en los Estados Unidos y en América Latina.
Evangélica fue sustituida por la Asociación
de Iglesias Evangélicas de Puerto Rico, que O. Consideraciones generales
en 1954 vino a ser el Concilio Evangélico. La historia del desarrollo del cristianismo
Recientemente, esta organización se transfor- en la América Latina, que acabamos de narrar,
mó para llamarse el Concilio de Iglesias de nos permite hacer algunas consideraciones ge-
Puerto Rico, ampliando la base eclesial tanto nerales que pueden servir al lector para com-
a las iglesias luterana y episcopal como a las prender mejor la situación religiosa de nuestro
pentecostales e independientes. continente.
Al terminar de estudiar el protestantismo En lo que respecta a la Iglesia Católica, es
en Puerto Rico, podemos hacer cuatro obser- de notarse que la independencia de los diver-
vaciones de interés para nuestra historia: sos países latinoamericanos casi siempre trajo
La primera observación es que en Puerto un período de dificultades. Estas se debieron
Rico, más que en ningún otro país de la Amé- en ocasiones al carácter extremadamente con-
rica Latina, el protestantismo ha logrado pene- servador del alto clero, constituido casi siem-
trar todas las esferas económicas, políticas y pre por españoles que se sentían obligados a
sociales. Hay protestantes tanto entre el pueblo defender los reclamos patria. Pero este factor
humilde y rural como en las más altas esferas no habría tenido consecuencias tan funestas
306
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
de no haber sido por la cuestión del Patronato enteras- los inmigrantes protestantes no se
Nacional, que colocaba al Papa en la alterna- ocuparon de comunicar su fe a los latinoame-
tiva poco deseable de reconocer la soberanía ricanos con quienes convivían. Pero a la larga,
insegura de las nuevas naciones, aun a costa debido al creciente contacto, algunos miem-
del disgusto de la corona española, o permitir bros de esas comunidades de inmigrantes se
que las iglesias latinoamericanas quedaran pri- sintieron impulsados a dar testimonio de su fe.
vadas de obispos. Durante un largo período, la En la segunda mitad del siglo XX todavía que-
actitud de Roma siguió este último camino, lo daban en la América Latina grandes contin-
cual resultó en perjuicio del catolicismo gentes de protestantes de habla extranjera, aun-
latinoamericano. que también podía verse el modo en que sus
Según se fue resolviendo en cada país la descendientes trataban de establecer contacto
cuestión del Patronato Nacional, comenzó un más estrecho con la cultura que les rodeaba.
lento despertar del catolicismo romano, que Otro factor que contribuyó al desarrollo del
tuvo lugar en buena medida mediante la im- protestantismo en sus primeros años fue el li-
portación de sacerdotes de diversos países eu- beralismo político y filosófico que acompañó
ropeos y norteamericanos. Pero ya en el siglo a las gestas independentistas. Adalides políti-
XX podía verse claramente el progreso del ca- cos tales como O'Higgins, Sarmiento y Juárez
tolicismo romano en nuestro continente hacia vieron en el protestantismo un aliado contra la
el desarrollo de un clero nativo, y de manera ignorancia de sus pueblos y contra el excesivo
muy particular hacia la constitución de una je- poder del clero. Esta actitud por parte de los li-
rarquía nacional. berales permitió al protestantismo fácil acceso
El Segundo Concilio Vaticano y el espíritu a los círculos más elevados de varios países.
de renovación que le acompañó no podían de- Sin embargo, a la larga, el mismo espíritu libe-
jar de hacer sentir su influencia en la Iglesia ral que había contribuido a su impulso inicial
Católica latinoamericana. Aunque en diversos vino a ser un obstáculo para las misiones pro-
grados, inmediatamente después de la clausu- testantes. En efecto, el liberalismo, con su
ra de dicho Concilio podían verse sus conse- oposición a todo principio de autoridad reli-
cuencias en la América Latina. Las conferen- giosa y su énfasis en la dignidad humana, en-
cias del Episcopado Latinoamericano-Mede- tró en tensión con los principios protestantes
llín, Puebla, Santo Domingo-ilustran no só- de la autoridad de las Escrituras y de la nece-
lo la vitalidad sino la complejidad y conflictos sidad que el ser humano tiene de salvación.
que nacen como consecuencia de los esfuerzos Un ejemplo claro de esta oposición fue la
de una iglesia que busca arraigarse en la vida cuestión masónica en el Brasil.
del pueblo. En términos generales, puede decirse que el
Con respecto al protestantismo, la primera protestantismo que ha logrado mayor arraigo y
consideración general que debemos hacer es extensión en nuestra América es el de carácter
que buena parte de su desarrollo tuvo lugar al pentecostal e independiente. No es necesario ir
principio a través de inmigrantes procedentes muy lejos para encontrar las causas de este he-
de países protestantes. Así hemos visto repeti- cho. Basta decir que la convicción por parte de
damente en nuestra historia cómo los primeros los pentecostales de que su vida y acción son
protestantes en los diversos países latinoameri- dirigidas por el Espíritu Santo les lleva a una
canos fueron inmigrantes llegados allí, no tan- actitud de testimonio constante. Hasta qué
to por razones de orden religioso, como en bus- punto este ímpetu continuará según las sucesi-
ca de mejores condiciones de vida. Durante al- vas generaciones pentecostales vayan ascen-
gún tiempo -en ocasiones por generaciones diendo en la escala social e intelectual, es una
307
9
I
cuestión aún no resuelta. Pero por lo pronto es uno de los puntos débiles de la obra protestan-
necesario que las iglesias «históricas» se plan- te en la América Latina. Fue esta falta de co-
teen seriamente la cuestión del carácter de su ordinación la que impulsó a un buen número
propia misión en vista del hecho de ser ellas de dirigentes cristianos a convocar el Congre-
una minoría dentro del movimiento protestan- so sobre la Obra Cristiana en la América La-
te latinoamericano. tina, que se reunió en Panamá en 1916 y que
El protestantismo latinoamericano vivió fue el inicio de la cooperación evangélica con-
momentos de profunda polarización durante tinental. Sin embargo, a principios del siglo
la época de la Guerra Fría entre Estados Uni- XXI se había hecho muy poco por llevar a la
dos y la Unión Soviética. Todavía hay heridas realidad una de sus más importantes recomen-
que dividen el trabajo de las iglesias protestan- daciones:
tes, tanto «tradicionales» como pentecostales, Nos parece de urgente necesidad a muchos
y que producen competencia en lugar de un es- de nosotros que, a pesar de las enormes di-
píritu de cooperación y solidaridad. La lucha ficultades, se haga un esfuerzo para que, en
por descubrir un espíritu de hermandad y soli- la medida de lo posible, se unan las seccio-
daridad sigue siendo tarea urgente en el futu- nes divididas de la iglesia de Cristo en Sud-
ro del protestantismo en el continente. américa.
Quien haya leído el capítulo a que ahora Lo que era «urgente necesidad» en 1916 si-
ponemos fin se habrá percatado de que la his- gue siéndolo casi 100 años más tarde. Por ello,
toria del protestantismo en la América Latina debernos terminar este capítulo haciendo
es en realidad la historia de ese movimiento nuestras las palabras del mensaje de la Segun-
en los diversos países de nuestro continente. da Conferencia Evangélica Latinoamericana,
Hay algunos casos -como el de Diego celebrada en Lima en 1961:
Thomson o el de las misiones puertorriqueñas Es nuestro firme propósito continuar mani-
en Santo Domingo- en que la historia del festando en el futuro, cada vez de modo más
protestantismo en un país se enlaza a la de claro y evidente, esta unidad que en Jesu-
otro. Pero tales casos son una minoría dentro cristo ya tenemos. Para ello llamamos al
de toda una historia de empresas discordes y pueblo evangélico a una más estrecha coope-
a veces hasta contradictorias Esta falta de co- ración, un acercamiento más íntimo y, sobre
ordinación, que puede haber hecho nuestro todas las cosas, una oración ferviente y per-
propio capítulo difícil de leer, ha sido siempre severante por la unidad del pueblo de Dios.
308
j
capítulo 11
Desde todas
las naciones
A. Una historia compleja con lecciones pio o un patrón de movimiento lineal, cumu-
para el futuro lativo y progresivo. De todo ello resulta un
La historia del movimiento misionero es movimiento libre pero frágil, con éxitos y fra-
compleja. Hemos de notar que la transmisión de casos, con entusiasmo, frustraciones, ambi-
la fe cristiana no se limita a unas naciones o igle- güedades e incertidumbres. Comenzamos, en-
sias que envían y otras que reciben. Tampoco se tonces, por nombrar algunas de las lecciones
limita a unas iglesias que envían y otras que re- que podemos aprender de esta historia del
ciben. Tales distinciones eran comunes en los movimiento misionero.
círculos académicos de la misiología hasta bien Primero, el movimiento misionero cristiano
avanzado el siglo XX, y perduran todavía en el nos enseña que el evangelio se traduce de una
lenguaje y el pensamiento de muchos cristianos. cultura a otra en el proceso de la evangelización
Empero esa interpretación de los hechos neutra- y la misión. El evangelio no se puede transmi-
liza a los nacionales y los proyecta como recep- tir sin tener en cuenta la cultura -el lenguaje,
tores pasivos, mansos y transformados por el tra- la religión, los símbolos, el sistema de ritos, las
bajo de los misioneros extranjeros. prácticas éticas, etc.- de los grupos receptores.
Por el contrario, la historia muestra que el Dependiendo de cuán distintas sean las cultu-
movimiento y la actividad misionera son mul- ras, el nivel de traducción puede ser sencillo o
tidireccionales, multinacionales, multiétnicos, complejo. No obstante, este principio de la tra-
interculturales e interreligiosos. Ciertamente ducción del evangelio está basado en la expe-
muchas historias de las misiones escritas du- riencia cristiana de la encarnación, donde Dios
rante el siglo XIX y principios del XX dan la en Jesucristo se traduce a nuestra realidad hu-
impresión de que la misión es tarea realizada mana para que la humanidad le reciba no como
por misioneros y misioneras de Europa y Nor- a un extraño, sino como a un conocido.
teamérica. Empero, como hemos visto, la ma- Segundo, en el caso del trabajo misionero
yor parte del trabajo misionero cristianismo intercultural, la gran mayoría de los misioneros
ha sido realizado por nacionales. Recalcamos, y misioneras lucharon para vivir y convivir ba-
por tanto, que el movimiento misionero no es jo los términos y demandas de las culturas en
de una sola vía, sino que parece ser una red los países donde se hacía misión. En esta his-
con múltiples intersecciones y confluencias toria se destacan dos tendencias: la una es la-
que no permiten adjudicar un centro para la mentar y cuestionar la labor misionera desa-
expansión, ni tampoco un determinado princi- rraigada, distante y hasta explotadora; y la otra
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mi
u
310
HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
Finalmente, las misiones han contribuido co) y Europa Occidental. Tal cambio demográ-
de forma significativa a la disolución de la fico se hará todavía más patente en los próxi-
cristiandad. La cristiandad es la fusión del mos cincuenta años. Para el 2050 se proyecta
cristianismo con un orden político y territo- que el 68% de la población cristiana estará en
rial. Las misiones, recalcando la transmisión el Hemisferio Sur. Además, del restante 32%
del evangelio sin la inmediata supervisión o una cuarta parte serán inmigrantes de países
imposición del orden de cristiandad, comien- del sur donde el cristianismo tiene gran vitali-
zan a fomentar y nutrir un cristianismo que dad y desarrollo. Parafraseando al historiador
fluye y crece por su continua interacción con norteamericano Philip Jenkins, «pronto la fra-
culturas ajenas a la cristiandad y sin sus res- se 'un cristiano blanco' será tan extraña como
tricciones. Este cristianismo arraigado a distin- 'un budista sueco'».
tas culturales, no restringido por el legado de Es evidente, entonces, que el cristianismo
las estructuras de la cristiandad, lleno de vita- vive un proceso de transición que nos obliga a
lidad y difícil de controlar y de predecir, es el entender su historia de un nuevo modo. Este
resultado directo del trabajo misionero a través cambio demográfico trae consigo el reto de
de la historia. Este cristianismo, sin fronteras reevaluar y reorientar nuestro entendimiento
territoriales, fluido, diverso, profético, caris- de la misión cristiana. Ese reto conlleva varios
mático, tercermundista, es el que se proyecta factores o facetas. Primero, mientras que esta
como la levadura del movimiento misionero historia del movimiento cristiano recalca la
del siglo XXI. actividad de la transmisión de la fe, toca a fu-
turos historiadores recalcar el proceso de re-
B. El cristianismo a principios cepción. El nuevo orden demográfico obliga,
del siglo XXI y algunas proyecciones en las palabras del historiador africano Lamin
misioneras Sanneh, «no a estudiar cómo el cristianismo
Veamos algunas estadísticas que ilustran el descubre a los pueblos autóctonos, sino más
movimiento del cristianismo en el siglo XX. bien a estudiar cómo los pueblos autóctonos
Para principios de ese siglo, había alrededor de descubren el cristianismo». El descubrir está
381 millones de cristianos en Europa, 79 mi- en los pueblos. La agencia y la actividad de
llones en Norteamérica, 62 millones en Amé- misión está en el pueblo que va descubriendo
rica Latina, 10 millones en Africa y 22 millo- el cristianismo. Y esto es necesario narrarlo,
nes en Asia. Para el 1950, los países con ma- registrarlo, celebrarlo y evaluarlo.
yor población cristiana eran Gran Bretaña, Segundo, hay que afirmar y estudiar la mu-
Francia, España e Italia. Es evidente que des- tualidad del proceso de transmisión y recep-
de principios hasta mediados del siglo XX la ción del cristianismo. Esta mutualidad, que es
mayoría de la población cristiana se encuentra como las dos caras de la misma moneda, inte-
en el hemisferio norte del planeta. gra la historia de las misiones con la historia
Para el año 2000, hay 481 millones de cris- de la iglesia. Si las misiones y la vida de la
tianos en América Latina, 360 millones en iglesia están entrelazadas, entonces es necesa-
Africa y 313 millones en Asia. De los dos mil rio darnos a la tarea de integrar nuestra inter-
millones de cristianos en el mundo, 820 millo- pretación de lo que como fenómeno histórico
nes están en la región noratlántica, y mil dos- y religioso ya está integrado.
cientos millones en el resto del planeta. Más Tercero, en este cambio demográfico las
claramente, el 58% de los cristianos del mun- mujeres pobres no blancas y de culturas tradi-
do están en el Tercer Mundo, mientras que el cionales son el agente transmisor y receptor
42% está en Norteamérica (sin contar a Méxi- del cristianismo en el siglo XXI. Si el protago-
311
1
Desde todas las naciones
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1
A principios del siglo XXI florecían as doctrinas esotéricas, algunas de ellas pretendiendo
retornar a los secretos de la antigüedad. Foto tonada en Villahermosa,Tabasco, México.
nista del drama cambia, usualmente tenemos tales), sino que se ha convertido en una opción
otro drama. Hasta hace muy poco, el protago- legítima en la diversidad de alternativas reli-
nista principal del cristianismo ha sido el hom- giosas en muchas regiones del Hemisferio Sur,
bre blanco. De hoy en adelante basta con indi- las dinámicas entre el cristianismo y las reli-
car que hay una nueva protagonista principal y giones no cristianas se transformarán. De ello
lo que sabemos del drama es que no será el surgirán conversaciones semejantes a las de
mismo y que la presencia y acompañamiento los cristianos de los primeros siglos en rela-
del Espíritu de Cristo se manifestará en este ción con las filosofías helenistas. A esto se
nuevo drama. añadirían las tendencias de regresar a antiguas
Cuarto, este cambio demográfico requiere religiones esotéricas -la llamada «nueva
una sensibilidad histórica hacia otras religio- era».
nes, hacia la historia del encuentro de esas re- Quinto, este cambio demográfico genera un
ligiones con la fe cristiana y hacia las comple- movimiento misionero que no es ya tarea ex-
jidades culturales y sociales de la conversión clusiva del Occidente hacia el sur, sino que va
de una religión no cristiana al cristianismo. tanto de sur a sur como de sur a norte. Así, hay
Por muchos años el trabajo misionero en sue- misioneros coreanos trabajando en Africa,
lo no cristiano proveyó recursos para que los América Latina y el Caribe. Cientos de misio-
nuevos conversos pudieran enfrentar las lu- neros y misioneras brasileños están trabajan-
chas y conflictos que acarreaba una conver- do, aunque con falta de preparación adecuada,
sión a «la religión de los occidentales». En la en los países musulmanes. Misioneros y mi-
medida que los pueblos del sur descubren que sioneras africanos laboran en Europa y en los
el cristianismo no es ya una religión del Occi- Estados Unidos tanto con grupos de inmigran-
dente (como hoy en día tampoco podemos de- tes como con personas de ascendencia africa-
cir que la tecnología pertenece a los occiden- na. Familias misioneras coreanas levantan
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HISTORIA GENERAL DE LAS MISIONES
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-II I
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