Celdas electrolíticas (EW)
Para realizar el proceso de electroobtención se requiere de instalaciones especializadas llamadas celdas
electrolíticas equipadas con sistema de circuitos eléctricos para hacer circular una corriente
eléctrica continua de baja intensidad.
Para que el proceso se realice eficientemente se requiere considerar
los siguientes aspectos:
Configuración de circuitos
Para proveer de la corriente continua que requiere el proceso de
electrólisis, se utilizan equipos rectificadores de corriente que
mantienen constantes las características del flujo eléctrico. La
tecnología de los rectificadores ha evolucionado siendo actualmente
la norma el uso de transfo-rectificadores tristorizados, lo que ha
hecho a estos equipos más accesibles y económicos. Los
requerimientos de filtros para el control de corrientes armónicas Celdas Electrolíticas.
constituyen en la actualidad los mayores factores del aumento de Faena Radomiro Tomic.
costos de estos rectificadores. Los filtros se utilizan para lograr un
mejor efecto con dos unidades (celdas de electroobtención), en vez
de una sola.
Características de las conexiones eléctricas
Normalmente, las conexiones eléctricas de las celdas de electroobtención son muy sencillas, ya
que se intenta disminuir los trayectos, en corriente continua y alta tensión, desde los
rectificadores de corriente hasta los bancos de celdas electrolíticas.
Barras conductoras de cobre de sección rectangular: En general, la conexión se hace con
paquetes de estas barras, apernadas y con distanciadores que permitan la circulación interna
de aire para la mejor refrigeración. Estas son conocidas con su nombre en inglés: bus-bars
Al poner las celdas en serie, se requiere sólo una conexión en los extremos del banco de
celdas. Si al término del primer banco, éstas se conectan con un solo conductor a otro banco
paralelo a su lado, el recorrido desde el rectificador disminuye aún más.
Este tipo de conexiones es la más usada en la mayoría de las instalaciones recientes para
electroobtención de cobre.
De esta forma, varias unidades similares constituyen las diversas secciones de una operación
más grande, por ejemplo:
Dos secciones separadas por un patio central de trabajo, como es el caso en las plantas de
EW de Quebrada Blanca, Mantoverde, Lince y Santa Bárbara (con una capacidad de
producción entre 45.000 y 8.0000 ton de cátodos de cobre al año).
Sólo una sección, como en las operaciones de EW de Lo Aguirre, Dos Amigos, Biocobre y El
Teniente, diseñadas para menos de 25.000 ton/año de cobre fino.
Cuatro secciones, como en las plantas de operación de El Abra y Radomiro Tomic, diseñadas
para hacer EW de más de 200.000 ton/año de cátodos de cobre.
Barra triangular: En este caso la conexión eléctrica es en serie, con una barra triangular (de 2
a 2,5 cm de arista) que sirve de apoyo y contacto en su eje afilado, para los ánodos de una
celda y los cátodos de la celda contigua. Este es el sistema más utilizado.
Otros perfiles: Recientemente, se han incorporado otros perfiles para la barra de contacto, tipo
"hueso para perro" o dogbone, pero la más usada sigue siendo la de perfil triangular. Los
aisladores interceldas, que separan y apoyan los ánodos y cátodos, se conocen como
camping-boards.
Recomendaciones de uso
Como los cátodos de un lado y los ánodos de la celda contigua, están todos conectados en
paralelo a través de esta barra de contacto, es importante un buen y constante aseo de los
contactos.
También, se debe comprobar uno a uno los respectivos apoyos, ya que los electrodos deben
recibir la misma corriente. Cuando unos reciben más corriente que otros, se producen
densidades de corriente muy diferentes, que inducen el crecimiento de dendritas, que pueden
provocar cortocircuitos y calentar las barras y contactos hasta incluso llegar a derretir los apoyos
de los aisladores de plástico. Para detectar estos puntos anómalos se pueden usar un
gaussmetro, detectores de temperatura con visores infrarrojos, o bien el monitoreo de voltaje de
cada celda. Lo importante es corregir rápidamente la anomalía para maximizar la eficiencia de
corriente. Mediante estas observaciones se puede determinar las características de la conexión
de los electrodos de dos celdas contiguas.
Por su parte, la circulación de la corriente de ánodo a cátodo a través del electrolito, se puede
determinar mediante el movimiento de los cationes en la solución, y por medio de las barras y
los contactos de apoyo, a través de la circulación de los electrones en el sólido conductor.
Diseño y materiales para celdas electrolíticas
Industrialmente, hay una gran variedad de celdas electrolíticas. La fabricación y selección de
ellas depende de factores tales como:
Tipo de electrolito, si es acuoso o de sales fundidas.
Tipo de cátodo, si es líquido o sólido, o bien si es compacto, esponjoso o particulado.
Tipo de proceso, si es electroobtención (EW) o electrorrefinación (ER).
En soluciones acuosas, las celdas de EW y de ER convencionales varían muy poco entre sí, lo
que no sucede en otros casos como los que veremos a continuación.
Celdas para procesamiento de sales fundidas
Para las sales fundidas, la situación es muy diferente de un caso a otro, considerando si el
metal se puede depositar en un liquido mas pesado o mas liviano que el electrolito mismo. Es
así que para cada situación se requiere un diseño específico.
Por ejemplo, la producción del aluminio es diferente a otros casos de sales fundidas, ya que los
ánodos son consumibles.
Celdas para lecho particulado fluidizado
Desde hace años, los lechos de material particulado como concentrados de sulfuros, cementos
agranallados, mata agranallada y recortes de recuperación secundaria de metales, son un desafío
interesante para la electrólisis directa, que evite los pasos intermedios, ya sea por vía pirometalúrgica o
por lixiviación y purificación.
En estos casos se logran altas densidades de corriente, de 10 a 100 veces las alcanzadas en
los sistemas convencionales, debido al permanente movimiento y fricción de las partículas, lo
que ayuda a despolarizarlas, y desprende los eventuales residuos de la disolución del ánodo
de partida. Por ejemplo, el azufre elemental de un sulfuro.
En este caso, los tamaños de las instalaciones son menores, lo que incide en disminuir
significativamente los costos de capital de inversión. Sin embargo, aún las aplicaciones son
escasas, a nivel piloto y sin divulgación masiva.
Existe también un sistema de circulación independiente de un electrolito anódico (anolito) y de
un electrolito catódico (catolito), ambos separados por una membrana conductora o diafragma.
Celda para producción directa de láminas de metal
Mediante este tipo de celdas se puede lograr en forma directa y continua la preparación de una
lámina de cobre electrolítico. Esta celda contiene un cátodo en forma de tambor, parcialmente
sumergido en el electrolito de la celda, y que gira con velocidad variable de acuerdo al espesor
de la lámina que se desea obtener.
Celda cilíndrica para electroobtención de oro
El procesamiento de concentración de oro por carbón activado, termina con la recuperación
electrolítica del oro, usando como electrolito la solución de elución de carbón. En estos casos ,
se usa un ánodo inerte de acero y un cátodo, compuesto de un conductor inserto con lana de
acero colocada en un contenedor apropiado.
Celda convencional para electrólisis en medio acuoso
El diseño de celdas electrolíticas para medios acuosos varía muy poco, ya que en general se
trata de ánodos y cátodos suspendidos verticalmente, frente a frente unos de otros.
Las diferencias tienen que ver con el uso final, según se trate de electroobtención (EW) o de
electrorrefinación (ER). En EW es más necesario renovar y agitar el electrolito frente a las
placas, ya que con la nueva solución se renueva el metal para la depositación.
Recomendaciones generales
En la EW es necesaria la permanente renovación y agitación del electrolito frente a las placas,
ya que con la nueva solución cada vez se renueva el metal para la depositación.
En cambio, en la electrorrefinación, el metal se renueva y recorre sólo el espacio entre placa y
placa, por lo que la agitación requerida en el baño es bastante menor: basta con movimiento
convectivo y de agitación suave en la renovación normal del electrolito.
En el caso de la EW de cobre, cerca del fondo de las celdas electrolíticas existe un anillo de
distribución de soluciones, que consiste en una cañería perimetral con una perforación frente a
cada espacio interplaca ánodo-cátodo.
En ambos casos debe cuidarse de reservar un cierto espacio en el fondo de la celda para la
acumulación y evacuación de los residuos de ánodos en el caso del EW, y de barros anódicos,
en la ER.
En ambos casos (EW y ER), y tanto para cobre como níquel, se debe cuidar el ingreso y
distribución del electrolito en las celdas para evitar la contaminación de los cátodos con la
remoción accidental de las impurezas acumuladas en el fondo de la celda.
En la EW de oro y plata, cuando se escoge un diseño rectangular convencional, se suele usar
como cátodo un canastillo (paralelepípedo rectangular) relleno con esponja o virutilla de acero.
En esencia, este cátodo no difiere de otros cátodos verticales.
Materiales
Se ha desarrollado con el tiempo un progreso significativo en los materiales de construcción de
celdas convencionales, así como de las cañerías y bombas.
A principios del siglo XX, las celdas eran de concreto revestidas de una protección estanca
(lámina de plomo soldado). En la década de los '70 se introdujeron los revestimientos de
membrana de plástico resistente al calor y a los productos químicos del electrolito (entre ellas, el
paraliner). A fines de los años ‘80 se consolidó el uso de un nuevo producto: el hormigón
polimérico, que es un hormigón formado por resina de poliéster -que actúa como ligante-, y arena
de cuarzo -que actúa como carga-, que permitió eliminar los revestimientos de membranas y
hacer celdas monolíticas prefabricadas, de una sola pieza.