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20 HOLE IN ONE
21 Hole in OneSe cubre la indemnización del premio al primer “Hole in One” de un torneo de
Golf, según las condiciones pactadas con Chubb de Mexico.
23 CANCELACION DE EVENTOS
Cintas y negativos
Un rodaje no está exento de siniestros. Los productores son conscientes del perjuicio que supone la
pérdida de los actores principales antes de finalizar la película.
Lo demuestran casos como los de Brandon Lee (El Cuervo), Heath Ledger (El imaginario del doctor
Parnassus), Paul Walker (A todo gas) o el más reciente de Carrie Fisher (Star Wars), que han supuesto
para las productoras imprevistos serios que les ha obligado a llevar a cabo diferentes soluciones para
solventarlos, como la sustitución de un actor por otro, o el empleo de la tecnología CGI (Computer
Generated Imaginery).
No obstante, los contratos de seguros para el cine que cubren a las grandes compañías por el fallecimiento
inesperado no son, ni mucho menos, algo nuevo en la industria. Los seguros “raros” son una constante
en el mundo del espectáculo, en el que los profesionales tienden a asegurar partes del cuerpo que
consideran ‘herramientas’ vitales para su trabajo. Desde los seguros de piernas de Heidi Klum, pasando
por los seguros de voz de cantantes como Tina Turner o Bono, hasta los del trasero (Jennifer López), y
el pelo (Aniston).
Además de la posibilidad de perder a uno de los actores, existen numerosos riesgos que prevenir en un
rodaje. Por este motivo, la póliza que no debe faltar es el seguro de Responsabilidad Civil que ofrecen
las compañías aseguradoras, que garantiza la indemnización por daños causados a terceras personas
durante el transcurso del rodaje.
Las garantías incluyen daños derivados de la producción, responsabilidad civil por daños producidos
durante la grabación, pérdida o deterioro de los negativos de la película, daños que puedan acarrear
accesorios cinematográficos o incluso el retraso o suspensión por motivos meteorológicos o de
desplazamiento.
Además de los riesgos de producción, en las pólizas se suelen incluir los decorados, el vestuario o el
material de equipamiento, que puede ser objeto de robo. Incluso también derechos de la propiedad
intelectual o derecho de confidencialidad.
El diseño de vestuario es sin duda una de los elementos más caros del rodaje. Así lo demuestran ejemplos
como el de la recordada película Cleopatra (1963), que invirtió en el vestuario un presupuesto de 194.800
dólares, una inversión muy elevada en los años 60 (y que le valió para ganar el Óscar a mejor diseño de
vestuario). Asegurar tanto la vestimenta como los decorados que se van a utilizar en el rodaje se antoja
fundamental para prevenir cualquier imprevisto. Los precios lo merecen.
La función del seguro, fundamental para cualquier inversión en la que, si ocurre algo que trastoque los
planes originales, pueda resolverse y el asegurado continúe con su proyecto. Por tanto, en las producciones
cinematográficas se antoja como un servicio vital para llevar a cabo un rodaje y evitar que algún
imprevisto ponga en peligro finalizar la película.
Lo cierto es que no es necesario que ocurra alguno de estos percances para darnos cuenta de la utilidad
que tienen estas pólizas, que son un añadido en seguridad y confianza para esos inversores que han
puesto toda la ‘carne en el asador’ para llevar el proyecto a buen puerto. La existencia de estos seguros
son por tanto un factor indispensable para cumplir los pronósticos.
Aquellos profesionales que levanten el Óscar serán conscientes de haber conseguido algo al alcance de
muy pocos. El premio más importante en la industria del cine, que no podrían haber logrado sin el apoyo
y la confianza del seguro, que otorga una red de seguridad financiera gracias a la cual producción y
rodaje pueden seguir su camino, y nosotros, como amantes de este arte, podamos disfrutar quizás, de otra
nueva obra maestra. Así que cada vez que escuchemos eso de “And the Oscar goes to…“, el seguro, aunque
no se mencione, estará presente. ¡Un Óscar para el seguro!
Te has preguntado alguna vez,¿cuáles son las coberturas del seguro cinematográfico? Hace
tiempo os hablamos del seguro de buen fin, una póliza especial (la más conocida en el
sector) que garantiza a las productoras el cumplimento del rodaje en los tiempo establecidos
comprometiéndose a la financiación y la sustitución de materiales y personal en el caso de
siniestros.
Las producciones audiovisuales para cine y televisión requieren una inversión económica muy
importante, por lo tanto es fundamental prevenir y protegerse de cualquier clase de siniestro
que pueda afectar al éxito de la grabación.
Son muchas las cosas que se pueden asegurar para un rodaje, por ejemplo:
El vestuario de cine resulta ser uno de los elementos más caros de un rodaje: el vestuario de
la protagonista de la famosa película Cleopatra (1950), protagonizada por Elizabeth Taylor y
Richard Burton, costó en los años 50 unos 194.800 dólares. Me atrevo a decir que tal
inversión debió de estar respaldada por una buena póliza de seguro.
Además los actores, cantantes y en general todas las profesionales del
espectáculo tienen particular interés en asegurar partes del cuerpo que consideran
“herramientas” para su trabajo: la voz de Madonna o Tina Turner, los dedos del guitarrista de
Rolling Stones Keith Richards o las piernas de Taylor Swift y Marlene Dietrich.
Más allá del campo cinematográfico, la póliza que no puede faltar en ningún lugar de trabajo
es el Seguro de Responsabilidad Civil que, como ya hemos hablado otras veces para
perros o espectáculos, nos garantiza la indemnización por daños causados a terceras
personas durante el tiempo de rodaje. Junto a esta cobertura es posible contratar
la Responsabilidad Civil Patronal. Este tipo de Responsabilidad Civil es lo que contratan los
empresarios para protegerse de reclamaciones por daños laborales.
Los seguros dedicados al cine y la televisión son varios y algunos muy peculiares, y tú
¿Conoces algunas póliza curiosa?
Seguros directos
Los seguros directos suelen cubrir los daños típicos sufridos en un rodaje, además de los
riesgos de producción del filme. Dentro del condicionado de la póliza se suelen incluir los
decorados, vestuario, equipamiento, material defectuoso, derechos de la propiedad intelectual
e incluso el incumplimiento de la confidencialidad. Este último siniestro puede darse cuando
un actor o trabajador implicado en la producción de la película filtra un guión y acaba
publicado por la prensa. Este siniestro se ha dado más de una vez en el mundo del cine. El
año pasado se filtró en Internet el guión de The Hateful Eight, un filme que en principio iba a
ser dirigido por Tarantino, pero que finalmente acabó por cancelarse tras la filtración en varios
medios de comunicación.
La suspensión de un rodaje puede producirse por muchas causas como enfermedad del actor
principal o el director, el robo del equipo técnico, un incendio del decorado. La Productora
incurre en pérdidas económicas por cada día de paralización y estos seguros indemnizan
esas pérdidas garantizando la reanudación y finalización del rodaje.
Este seguro también se comercializa para Spot Publicitarios y para Pequeñas Producciones
otorgando las coberturas necesarias en base al perfil de la empresa y de sus proyectos. El
Seguro puede ser contratado por cada producción o mediante una póliza anual que
englobe todas las producciones que la Productora realizará durante el año.
Cast o reparto.
Material Cinematográfico.
Gastos adicionales.
Contenido de oficina.
Dinero
Seguros para Centros de producción audiovisual (cadenas de TV, Platós, escuelas audiovisuales,
etc)
Límites básicos:
Largometrajes
Cortometrajes
Animación
Series y Programas de TV
Documentales
Spots publicitarios
Lo imposible (2012)
Una película estremecedora, y no solo por la calidad de las imágenes y escenas, sino por estar
basada en una catástrofe natural real, la que sucedió en Tailandia, durante el tsunami del 26 de
diciembre de 2004. La película narra las vicisitudes de una familia española de vacaciones en el
lugar, que se ven atrapados en una tragedia sin precedentes que dejó atrás más de 220.000
vidas humanas e incontables daños materiales.
Esta película destacó sobre todo por el realismo que se pudo impregnar en cada una de las
escenas, fotografías y situaciones representadas. Nos muestra cómo en unos pocos segundos
pasamos de estar disfrutando de un paraíso a la mayor desolación, y nos hace evidente la
fragilidad más absoluta de la vida humana frente al poder desatado de la naturaleza. Naomi Watts
ganó el premio Óscar a la mejor actriz en 2013 por esta película.
La relación con el mundo del seguro es breve y sutil, pero conecta inmediatamente con
nosotros, ya que hacia el final aparece el representante de la compañía, para asegurarles que a
partir de ese momento, ¡no se van a tener que preocupar por nada más!
Convención en Cedar Rapids (2011)
Una película mucho más ligera que “Lo imposible” es esta “Convención en Cedar Rapids”, un film
que versa sobre la inocencia, la inexperiencia y el descubrimiento del mundo real desde los ojos de
un personaje que jamás ha salido de su pequeño pueblo y que, además, es cándido y, podríamos
decir, “puro de espíritu”. La película defiende el valor de la amistad y la lealtad por encima de todo.
El joven (34 años) e inexperto Tim Lippe conserva su ingenuidad en su trabajo como vendedor de
seguros a los vecinos de su pueblo, un pequeño lugar llamado Brown Valley, en Wisconsin.
Cuando ha de acudir a una convención de seguros, su visión de la vida e incluso de su profesión
cambiará por completo.
Carancho (2010)
Esta es una película argentina (2010) del director Pablo Trapero, y protagonizada por Ricardo
Darín y Martina Gusman. Carancho significa buitre, y en este fil la relación está clara: el
protagonista es un buitre que busca desesperadamente su sustento en las desgracias ajenas.
Cuando hay un accidente o una víctima, allí está el carancho para sacar tajada mediante el fraude
a las aseguradoras.
Es una película desgarradora película sobre ese fraude (más común de lo que parece) a las
aseguradoras, en la que los protagonistas luchan por quedarse con la mayor parte de las
indemnizaciones de los accidentados, o incluso organizando brutales accidentes para el cobro de
las indemnizaciones. No hay personajes buenos en esta película…
Periódico La Jornada
Domingo 22 de marzo de 2015, p. 7
Hasta hace unos años nadie imaginaba la contratación de un seguro fílmico en México, y
fue ahí donde la visión de Luis Carrillo e Izaguirre, especialista en este tipo de riesgos, lo
llevó a desarrollar los primeros seguros fílmicos para los legendarios Estudios Churubusco,
con los que trabajó de manera estrecha.
Han transcurrido 50 años de la creación de LCI Seguros (1965) y Eduardo Carrillo, quien
actualmente está al frente de la empresa, relata: “Un seguro contra riesgos es indispensable,
no sólo durante el rodaje, sino también en la preproducción y la posproducción. Este tipo de
polizas nacieron de la necesidad que había en la industria de protegerse contra los imprevistos
no sólo del clima, sino también de las fallas humanas.
El objetivo, llegar a las salas
“Un seguro es la garantía que se tiene de que la producción concluirá sus objetivos y llegará
a las salas... A lo largo de este año han muerto cada mes un miembro del crew en diferentes
producciones y en estos casos hay que apoyar con los funerales e indemnizar a la familia,
porque siempre hay que actuar con responsabilidad ante estos infortunios. Recientemente, en
Taiwán, dos hombres se accidentaron en la cinta Silencio, del director Martin Scorsese, y
nuevamente el seguro entró al rescate del filme”, dijo.
Hoy en día, agregó, la compañía tiene la facultad de poder extender seguros en más de
45 países, entre ellos, India y China, que son los mayores productores de cine. En los últimos
años, subrayó, México ha sobresalido en la producción al realizar entre 100 y 125 películas,
mientras que Colombia produce de 25 a 30 cintas al año, éste último país se ha vuelto un
punto de referencia para las filmaciones, debido al incentivo que ofrece el denominado Cash
back, que regresa un 40 por ciento de lo que se invierte en la producción.
En los últimos años, señaló, también se ha explorado la Garantía de buen fin, cuya
cobertura garantiza a inversionistas, bancos y al mismo productor, la conclusión del producto.
Anteriormente, estas coberturas sólo se programaban en Estados Unidos, hoy México las
ofrece, por ello podemos decir que estamos al nivel de brindar protección a cualquier
compañía extranjera, porque ofrecemos un servicio integral, explicó Carrillo, a quien le
asignaron la póliza para la cinta Spectre de James Bond –que se filma en el Centro Histórico
de la ciudad de México–, una de las más de 130 mil producciones que LCI ha asegurado a lo
largo de su historia.
Guzmán, con alrededor de 30 años de experiencia en el ramo, sabe que en el ámbito del
cine todo es una completa aventura, donde los minutos cuentan, pues una cancelación
provoca pérdidas que suelen ser millonarias.
En el caso de Seprocor, esta compañía no trabaja con una sola aseguradora, tienen
facultades para llevar el proyecto con diferentes empresas que cubran la necesidad de
producción, y los costos van en función del tamaño de la grabación, siempre analizando cada
detalle.
Nosotros somos los encargados de ver el lado trágico, vemos más allá de lo tangible y
nos planteamos todo tipo de variables que pueden suscitarse, comentó Guzmán.
Hace algunos años un volcán hizo erupción en Europa y uno dice, eso qué tiene que ver con
una producción mexicana en Iztapalapa, pues un actor no pudo llegar al llamado porque se
interrumpieron los vuelos; la producción tuvo que parar, causando pérdidas que el seguro
contratado cubrió, comentó.
Cuando una producción se detiene o sucede algún accidente, de inmediato la póliza entra
en acción para cubrir gastos de nómina, técnicos o humanos, añadió el agente de seguros.
Ejemplificó, suponiendo que una película mexicana oscile entre los 17 y 25 millones de
pesos, la aseguranza de un día de rodaje podría costar un millón de pesos aproximadamente.
Es en ese tipo de situaciones que nosotros entramos en acción, porque el productor debe
de seguir pagando todo, independientemente de lo que pase.
Precisó el especialista que los seguros de interrupción fílmica son de los más socorridos,
ya que aplazamientos siempre suceden por causas fortuitas.
Por ello, la mayor parte de los productores contratan los seguros desde la preproducción,
porque ya hay un riesgo mínimo.
En estas coberturas, explicó Guzmán, se puede asegurar el dinero que hay en la caja chica,
el mobiliario, algo de equipo de rodaje, tramoya, escenografías, plomería y pintura, así como
los accidentes que pueda sufrir el personal contratado de manera eventual o fijo.
Accidentes se dan a cada rato, desde aquellos simples como que alguien se engrapó un
dedo, que se cayó de cabeza, que se dio un toque eléctrico, siendo éstos últimos los más
frecuentes, explicó el ejecutivo, quien reiteró que parecen absurdos, pero son muy comunes.
Si bien en México hay muchos oficios que se desarrollan sin seguro, en el caso de la
cinematografía es diferente, ya que desde hace unos años está marcado por la ley, por ello,
los productores se han dado a la tarea también de exigir condiciones superiores a las que
marca las autoridades al contratar este tipo de pólizas.
Nunca me he topado con gente de cine que pida menos en aras de bajar costos del seguro,
para ellos, proteger todo lo que involucra su producción es primordial, puntualizó Guzmán.
El seguro tiene que afrontar y cubrir cualquier tipo de riesgo, por millonarias que sean las
perdidas, dijo Guzmán, al reiterar que todo se analiza desde un punto de vista casi
catastrófico.
“Ahora mismo vamos asegurar la cinta de Belcebú, del director Emilio Portes Castro, por
lo que es de suma importancia analizar el guión, para saber si es una historia urbana, si
utilizarán niños o animales, pirotecnia, deslaves o choques, ello con el fin de asesorarlo lo
mejor posible”, comentó.
Cuando se estaba revisando el reclamo no había lógica que fuera tanto dinero por pocos
días, sin embargo, la nómina de los actores extranjeros era la más alta, además de que había
elenco mexicano de alto nivel, así que el seguro pagó y para ese tipo de cosas te sirve tenerlo,
explicó.