Apuntes de Bateo de Oro
Apuntes de Bateo de Oro
Apuntes de Bateo de Oro
El oro, huésped casi invisible de placeres, vetas y rocas, es extraído en cada caso con
técnicas especializadas. De estos yacimientos destacan los placeres por lo sencillo y
económico que resulta la obtención del metal, mediante el uso del método tradicional
de minado por bateo que se practicó en la época prehispánica y sigue vigente entre los
gambusinos.
El oro tiene propiedades físicas extraordinarias, que permiten que se puedan obtener hilos
delgadísimos, por estiramiento excesivo, o láminas extremadamente finas al aplanarlo
mediante percusión. También se puede cortar con una navaja, sin que se pulverice, y doblar
sin que se rompa, y mantiene su posición al cesar la fuerza deformante. Asimismo, se funde
a temperaturas relativamente bajas y es muy pesado (casi el doble que la plata), cualidad
que favorece su acumulación y facilita su explotación en los placeres, pero sobre todo es
inoxidable. Estas propiedades han hecho del oro un mineral altamente apreciado desde la
antigüedad por hombres y mujeres, e idóneo para manufacturar artículos diversos,
principalmente de joyería; también se le aprovecha para acuñar monedas, elaborar objetos
religiosos, piezas dentales y en las industrias electrónica y aereoespacial, entre otros usos.
Origen y yacimientos
Además de alojarse en vetas y rocas, el oro suele presentarse entre las arenas y gravas de
origen aluvial, depósitos que se conocen como placeres. En éstos, el oro se presenta en
estado nativo en forma de granos minúsculos (polvo), y en agregados compactos
redondeados por el desgaste que sufren al ser transportados; a estas partículas redondeadas
se les llama popularmente pepitas. Polvo y pepitas son liberadas por la erosión de vetas y
rocas, para luego ser conducidas y concentradas por el agua, junto con arenas y gravas en
los cauces fluviales. Durante el siglo XIX , el descubrimiento de placeres auríferos en los
Estados Unidos de América (California, Alaska) dio lugar a las célebres “fiebres del oro”,
que provocaron el traslado de miles de personas a esos sitios, en la búsqueda del preciado
metal.
En la actualidad, la minería a cielo abierto de rocas auríferas ha cobrado relevancia por las
nuevas tecnologías que hacen rentable su extracción. En estas rocas, especialmente ígneas,
el metal aparece disperso en su matriz, casi siempre como partículas irregulares, pocas
veces perceptibles a simple vista y en cantidades mínimas, apenas algunos gramos, o su
fracción, por tonelada de roca. Los yacimientos de oro son comunes en todo el mundo,
aunque su metal generalmente es escaso. En nuestro país, la mayoría de los diferentes tipos
de depósitos auríferos se localiza principalmente a lo largo del Pacífico, desde Sonora hasta
Oaxaca, en las sierras Madre Occidental y Madre del Sur. Los placeres más importantes
están distribuidos en el estado de Sonora, en especial en la región de Altar; otros
yacimientos sobresalientes son los de Baja California, Baja California Sur, Sinaloa,
Michoacán y Guerrero (Terrones Langone, 1986).
Minería
Con estos antecedentes, se puede decir que el método de explotación del oro depende, entre
otros factores, de la forma, tamaño y características (dureza, composición, etc.) de los
materiales en donde se encuentra –placeres, vetas o rocas–, pero sobre todo de su
exposición o no en la superficie, circunstancias que definen que el minado se realice a cielo
abierto o subterráneamente.
La mayoría de las vetas y rocas auríferas –a diferencia de los placeres– son duras y
compactas y el oro que contienen está inmerso en otros minerales, por lo cual su
explotación necesita del uso de explosivos y de una planta de beneficio, para moler el
material y recuperar el oro de entre elementos sin valor económico, lo cual requiere de la
aplicación de distintos procesos metalúrgicos (amalgamación, cianuración, etc.). Por
ejemplo, gran parte del oro que se obtiene en México es producto secundario del beneficio
de sulfuros de cobre, plomo, plata y zinc (Sánchez Nava, 2009, p. 31).
Al respecto conviene señalar que México es un país con una tradición minera desde la
época prehispánica, según lo muestran, por ejemplo, las obras subterráneas y herramientas
dedicadas a la obtención de cinabrio en la Sierra de Querétaro. Después de la conquista
española, esta actividad se convirtió en una industria muy importante, por la riqueza de las
vetas auro-argentíferas, y se transformó en uno de los pilares de la economía de la Nueva
España. Desde entonces y hasta la fecha, la minería ha contribuido a que México fuera uno
de los primeros productores de plata en el mundo, aunque la producción de oro, por su
escasez en los yacimientos, se ha mantenido a la saga.
Jaime Torres Trejo. Ingeniero geólogo por el Instituto Politécnico Nacional. Investigador
de la Escuela Nacional de Conservación, Restauración y Museografía, INAH, especializado
en el estudio petrográfico de rocas y minerales de contextos arqueológicos.
Torres Trejo, Jaime, “Explotación del oro en placeres, vetas y rocas”, Arqueología
Mexicana núm. 144, pp. 19-23.
El bateo de oro era un sistema de explotación del mineral de forma artesanal, que en la
actualidad, debido a su baja rentabilidad, ha pasado a ser un atractivo turístico y deportivo,
recomendado como relax frente al estrés de nuestra época.
Los ríos de la zona del Valle del Oro o "Cuarto de los Valles": Ríos Navelgas, Yerbo y
Bárcena, en la zona noroccidental del municipio, son los que reúnen las mejores
condiciones para la búsqueda de pepitas de oro con batea.
Este territorio donde se encuentra ubicado el pueblo de Navelgas es conocido como el Valle
del Oro, dada la abundancia de yacimientos auríferos.
Los romanos construyeron varias minas para extraer de ellas oro, y para ello se movieron
millones de toneladas de roca y tierra que eran lavadas con las aguas de los arroyos y de los
ríos que desviaban expresamente para este fin.
Muchas son las referencias que ha llegado hasta nuestros días gracias a cronistas como
Plinius y Strabón procedentes de la ocupación romana, pero lo cierto es que nuestros ríos
aún mantienen una gran riqueza en cuarzos auríferos, que hoy como ayer los ribereños
siguen encontrando en sus aguas por el primitivo procedimiento de la batea.
A finales del siglo XIX, principios del XX, las minas de Navelgas fueron explotadas por un
grupo de ingleses creándose posteriormente la Sociedad Aurífera Asturiana que entre 1950
y 1956 volvió a explotar estas minas que habían sido utilizadas por los romanos para
extraer a la madre tierra, el preciado metal.
Enrique Sanfiz Fernández es quizás el vecino más popular de Navelgas y su paso por esta
sociedad despertó su gran afición a la búsqueda de oro, afición que con el paso de los
tiempos se ha convertido en tradición y que han sabido mantener sus hijos y la Asociación
de Bateadores de Oro "Barciaecus", organizadora de los Campeonatos de Bateo de Oro que
ha permitido incorporarse al movimiento mundial del bateo de oro adaptado a fines lúdicos
y turísticos, habiendo recorrido desde entonces los cinco continentes por los lugares en
donde han existido las mayores explotaciones auríferas del mundo.
Los campeonatos de bateo de oro son la mejor forma de introducirse en este deporte y
aprender las técnicas de bateo. Estos eventos deportivos cuentan con una gran asistencia de
aficionados que intercambian conocimientos y noticias. En el caso del campeonato
Nacional que se celebra en Navelgas, como de otros muchos, contradiciendo su nombre,
suelen acudir también bateadores de otros países. Tanto estos campeonatos como el
Campeonato Mundial de Bateo de Oro están regidos por las normas de la Federación
Mundial de Bateo.
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<img src="https://www.escapadarural.com/blog/wp-content/uploads/2016/09/Batea-
680x513.jpg" alt="Batea" width="680" height="513" class="size-large wp-image-54108" />
Fuente: Wikipedia
El oro lleva disolviéndose en el núcleo original de los Pirineos desde el Paleozoico: hace
unos 300 millones de años. La erosión fue diluyendo esas rocas con sus minerales sobre el
río Segre, por eso hay oro en este río. Y han vuelto las actividades para buscar pepitas de
oro en el Segre, especialmente a la altura de Balaguer (Lleida). Vuelve la fiebre del oro,
pero sin prisas, sólo para pasarlo bien y enriquecerse con la experiencia.
<img src="https://www.escapadarural.com/blog/wp-content/uploads/2016/09/Or-Segre-
680x335.jpg" alt="Or Segre" width="680" height="335" class="size-large wp-image-54109" />
El río Segre se considera un río aurífero. El Centro de Interpretación del Oro del Segre
divulga la historia y las características del río. Uno de los pasajes más intensos de su
historia tiene que ver con la presencia de oro.
Los árabes que conquistaron este territorio no fueron expulsados hasta el siglo XII, bien
entrada la Edad Media. Los cristianos no conseguían apropiarse de esta tierra porque los
árabes pagaban a las tropas con el oro que se extraía del Segre. Era un núcleo con recursos
naturales.
Hoy la extracción de oro del Segre es una de las actividades más divertidas y
enriquecedoras del Centro de Interpretación del Oro del Segre. Durante la actividad se
aprenden las técnicas de localización y extracción de oro. Y si consigues encontrarlo, te lo
llevas para casa. El gramo de oro de 18 Quilates se paga a 28.95 €
Cómo se extrae oro de los ríos
<img src="https://www.escapadarural.com/blog/wp-content/uploads/2016/09/Rio-680x510.jpg"
alt="Rio" width="680" height="510" class="size-large wp-image-54110" />
Fuente: Pixabay
El oro es un metal pesado: el oro permanece mientras otros metales se los lleva el río. No es
una cuestión de peso, sino de densidad. La densidad expresa la relación entre masa y
volumen. Es la cantidad de materia que hay en un volumen. Una pequeña pepita de oro es
más densa que cualquier otro metal.
¿Y?
Una vez localizada una zona de sedimentación, tal y como enseñan desde el Museu
d’Interpretació, toca ponerse las botas y coger la batea. Con la batea se recoge un puñado
de tierra y piedras. Una vez en el río, dipuestos a favor de la corriente, se acaricia con agua
el contenido de la batea.
Es una labor que requiere paciencia y cierta precisión. Unas vueltas a la batea y un pequeño
impulso hacia fuera: el objetivo es expulsar las piedras, la tierra y los minerales más
ligeros. El oro es uno de los elementos más densos del universo, por eso, si está,
permanecerá en el recipiente.
Después de cada ejercicio, bastará mirar el contenido filtrado de la batea. Hay que estar
atentos: las pepitas de oro pueden ser minúsculas. Si escogéis un día de sol, podréis
identificarlas más fácilmente por el brillo.
<img src="https://www.escapadarural.com/blog/wp-content/uploads/2016/09/Oro_alluvionale_-
_Fiume_Ticino_Italia-680x510.jpg" alt="Pepitas de oro" width="680" height="510" class="size-
large wp-image-54114" />
Fuente: Wikipedia
Los griegos han pasado a la historia por ser los inventores de los mitos, la democracia y la
filosofía. Con tantos y tan grandes atributos, ha pasado desapercibido su contribución a la
joyería.
Hoy en día el “quilate” del oro indica la pureza, no el peso. Es decir: la aleación de oro con
cobre o plata. Una pieza de 18 quilates contiene 3/4 de oro y 1/4 de otro mineral. Pero en
otras joyas, como el diamente, el quilate expresa su peso. Lo mires por donde lo mires, el
oro siempre es especial.
La mayor pepita en
posesión de Luis Sanfiz es de 14 gramos, «y se la voy a dar a la princesa Letizia», afirma.
En cualquier caso, como no deja de repetir Luis, «el verdadero oro es pasar una tarde
disfrutando de la naturaleza con tu familia, amigos y unos bocadillos». Por cierto, que
en California, los que más ganaron fueron los visionarios que montaron tiendas de
suministros para los aventureros, que muchas veces regresaban a casa con las manos
vacías.
Para participar: Para hacer bateo de río se puede contactar con la Asociación Enrique
Sanfiz. Tel. 625767784
Fuente: El Diario Vasco y La Verdad.es
Texto: Nacho Bartolomé
Imagenes: Pedro Touceda y Ana Paredes.
Composición : Picapiedra