Tipos de Artes
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Pintura griega
Por causa del vandalismo y a la erosión natural, han sobrevivido
pocas pinturas griegas originales o copias de las mismas y debido
a la falta de obras de calidad para el estudio directo de la pintura
griega se suele recurrir a la pintura sobre cerámica, en la
decoración de las ánforas, de las vasijas y de los platos, de los
cuales sí que existen numerosas piezas, para extrapolar
características y conclusiones sobre la estética de la pintura
griega. También se recurre a otras fuentes de estudio de la pintura
griega como las obras literarias de historiadores de la Antigüedad
como Plinio el Viejo o Pausanias de Lidia, que gracias a estos
textos sabemos que la pintura era tan apreciada como la escultura
griega y los nombres de los pintores griegos más importantes y los
temas preferidos.
Los principales diseños que tenía la pintura griega eran las formas
geométricas que no destacaban con la superficie, pero con el
tiempo estas formas fueron evolucionando y se fueron
representando con volumen además aparecieron dibujos de
plantas y animales. Poco tiempo después, en el periodo arcaico,
se introduce la figura humana y poco después se le dio importancia
a las escenas mitológicas.
Escultura griega
La escultura tuvo como protagonista al ser humano. Los
escultores griegos trataron de plasmar la belleza física del
cuerpo humano, por tanto, a los hombres y mujeres se tendió a
representarlos desnudos o usando técnicas que insinuaban la
anatomía humana, reflejando la belleza idealizada mente, sin
defectos.
La belleza se entendía como la armonía entre medidas, de
proporción entre las partes del cuerpo, pero no se limitaron al
exterior de las figuras sino que trataron de exteriorizar estados
de ánimo, desde la impasibilidad de las esculturas de la época
arcaica, a la serenidad de la estatuaria de la época clásica,
hasta llegar a gestos de dramatismo, de dolor y desesperación
de ciertas obras de la época clásica pero sobre todo helenística.
En el siglo IX aparecieron las primeras esculturas que eran
unas figuras humanas pequeñas que estaban realizadas con
materiales como el marfil, la arcilla o la cera, aunque no fue
hasta la etapa arcaica cuando los artistas griegos empiezan a
trabajar en piedra.
Arquitectura griega
Se caracteriza por la armoniosa simplicidad de las formas y alta
calidad técnica y en que los edificios griegos están hechos a
escala humana, no siendo tan colosal como la egipcia.
En la arquitectura griega se busca la armonía visual, no
presenta una decoración escultórica recargada, sino que está
distribuida en relación con las formas estructurales del edificio.
Una de los edificios más destacados en el arte griego fueron los
templos. Estos templos tenían una forma simple y con la
evolución y el perfeccionamiento esta forma esencial se fue
configurando los templos griegos hasta llegar a lo que hoy en
día se puede ver.
Los primeros materiales que utilizaron en la arquitectura eran
sobre todo adobe en los muros y maderas para crear las
columnas, pero tiempo después (sobre el siglo VII a. C) estos
materiales se vieron sustituidos por la piedra.
Roma
La civilización romana es sin duda alguna una de las más
importantes e influyentes en toda la historia. Roma se
fundó el 753 a.C. y el Imperio Romano de Occidente cayó
más de mil años más tarde en el 476 d.C. Durante este
periodo Roma creció enormemente tanto territorial como
culturalmente, se desarrolló el arte romano con base
principalmente en el arte griego pero que con el tiempo se
desmarcó de este y se generó un estilo propio. Vamos a
analizar el arte romano. Hasta cierto punto puede pensarse
que el arte de Roma es una imitación y ampliación del arte
griego, y por supuesto del arte etrusco, pero el espíritu que
animó a los artistas romanos es totalmente diferente de
aquellos. La Roma conquistadora y urbanista trató de unir
al sentido estético griego, el carácter utilitario y funcional
que sus obras requerían.
Características del arte romano
Como se ha comentado en la introducción, el arte romano proviene del arte griego, cuando la República
conquistó Grecia, se adquirieron numerosos conocimientos de la civilización helenística tanto en el terreno
sociopolítico como en el artístico. Los griegos centraban su arte en la exaltación de la belleza esculpiendo o
pintando en la mayoría de los casos motivos religiosos o mitológicos. Los romanos se desmarcaron de esta
temática y exaltaron a los propios hombres. Bustos, esculturas de gobernadores y políticos, retratos de
emperadores, batallas y arcos triunfales conmemorativos con relieves que narran las batallas. El arte
romano alcanzó su periodo de mayor esplendor durante el siglo de oro del Imperio Romano. Fue más variado
e incluso moderno que el arte griego y es por ello que tuvo mayor influencia en el arte del Renacimiento y
la Edad Media. El arte de Roma se caracteriza por su practicidad, no tanto por su fin estético.
Debido a este carácter práctico los romanos desarrollaron enormemente la arquitectura, llevaban a cabo
verdaderas obras de arte arquitectónicas que sin embargo tenían siempre una utilidad. A continuación
vamos a desglosar el arte romano en tres ramas principales, la arquitectura, la pintura y la escultura.
Arquitectura romana
Las edificaciones sirvieron a los romanos para dos cosas. La primera
de ellas es la utilidad que le daban a los edificios para mejorar las
condiciones de vida de los ciudadanos y el ocio de los mismos, por
ello construían acueductos, puentes, coliseos, circos, teatros… La
segunda de ellas busca representar la majestuosidad y el poder del
vasto Imperio Romano, grandes bloques de piedra y elementos
artísticos que sirven para recordar grandes hazañas en tiempos de
guerra. Se trata de obras de arte que se busca que sean claramente
visibles y que perduren en el tiempo.
La arquitectura romana emplea dos sistemas o grupos de elementos
arquitectónicos distintos:
Los circos. Las carreras de carros eran el deporte por excelencia de los
romanos, los ciudadanos llenaban las gradas de los circos que eran pistas
ovaladas donde se realizaban las carreras. El Circo Máximo tenía una capacidad
de 350.000 personas, como podemos leer en esta interesante descripción.
Escultura romana
Del mismo modo que la arquitectura, la escultura romana se ve
influenciada por la rama etrusca y por el arte griego, es por ello que
se mueva entre los dos estilos, realista e idealista respectivamente. La
temática central en ambos estilos es el retrato.
En sus comienzos, la influencia etrusca se hace evidente con la
presencia de algunos bronces realistas, aunque con la conquista de
Grecia, la influencia griega comienza a dominar en el terreno de la
escultura impulsando el idealismo.
Principales características
Pintura romana
Se distinguen dos corrientes pictóricas o estilos bien
diferenciados:
Estilo Neoático. Preocupado por la forma humana,
resalta temáticas mitológicas y epopeyas.
Estilo helenístico-Alejandrino. Preocupación por la
pintura rural, paisajes y marinas.
En ciertos periodos de la historia de Roma se hizo una
pintura arquitectónica que retrataba los elementos
constructivos. Lo que se conoce de la pintura romana en
nuestros días es gracias a los frescos hallados en
Pompeya.
Por lo general, las obras pictóricas romanas son
imitaciones o variaciones de las griegas. Un elemento
distintivo de la pintura romana es la técnica de manchas
de color al temple. Con un estilo casi impresionista ya en
esa época. La temática predominante es siempre
realista, paisajes, personas o escenas bélicas.
Arte del Renacimiento
ARQUITECTURA
Los elementos constructivos más característicos del
estilo renacentista fueron: el arco de medio punto,
columnas, cúpula semiesférica, bóveda de cañón y
cubierta plana con casetones.
Decorativos: Pilastras, frontones, pórticos, motivos
heráldicos, almohadillados, volutas, grutescos,
guirnaldas, motivos de candelabros o pebeteros y
tondos o medallones. En cuanto a la decoración el
Renacimiento preconiza el despojamiento, la
austeridad, el orden. Por etapas, la arquitectura se diferenció en sus dos etapas. Una de las obras más
imponentes del renacimiento fue sin duda, la Basílica de San Pedro, obra de Bramante y Miguel Ángel
en su mayor parte; la cúpula fue terminada por Giacomo della Porta. En general, la arquitectura
cuatrocentista da la impresión de orden, sencillez, ligereza y simetría, predominando en el interior de
los edificios la luminosidad y la desnudez. Los arquitectos más destacados de este período son
Brunelleschi, Michelozzo, Leon Battista Alberti, y la principal obra será la Catedral de Santa María del
Flore, de Florencia, y su famosa cúpula. Miguel Ángel introduce el orden gigante en su proyecto para
la basílica, lo que rompe con el concepto de arquitectura hecha a la medida del hombre. Los palacios
se adornan con elaborados bajorrelieves o de esculturas exentas.
PINTURA
Una búsqueda constante de los pintores de esta época
será la perspectiva, objeto de estudio y reflexión para
muchos artistas: se trató de llegar a la ilusión de
espacio tridimensional de una forma científica y
reglada. La pintura cuatrocentista fue una época de
experimentación. Los pintores más destacados de esta
época fueron: en Florencia, Fra Angélico, Masaccio,
Benozzo Gozzoli, Piero della Francesca, Filippo Lippi,
Paolo Uccello. En Umbría, Perugino. En Padua,
Mantegna, y en Venecia Giovanni Bellini. Por encima
de todos ellos destaca Sandro Botticelli, autor de
alegorías, delicadas Madonnas y asuntos mitológicos. Otros autores del Quattrocento italiano son
Andrea del Castagno, Antonio Pollaiuolo, il Pinturicchio, Domenico Ghirlandaio, Cima da Conegliano,
Luca Signorelli, Cosme Tura, Vincenzo Foppa, Alessio Baldovinetti, Vittore Carpaccio. Los autores
estudiaban cuidadosamente la composición de sus obras.
ESCULTURA
Como en las demás manifestaciones artísticas, los ideales de
vuelta a la Antigüedad, inspiración en la naturaleza, humanismo
antropocéntrico e idealismo fueron los que caracterizaron la
escultura de este período.
Durante el Renacimiento decae en cierta manera la tradicional
talla en madera policromada en favor de la escultura en piedra
(mármol preferentemente) y se recupera la escultura monumental
en bronce, caída en desuso durante la Edad Media. Los talleres
de Florencia serán los más reputados de Europa en esta técnica,
y surtirán a toda Europa de estatuas de este material. Lorenzo el
Magnífico era aficionado a las esculturas griegas y romanas y
había formado una interesante colección de las mismas, poniendo
de moda el gusto clásico. Los autores más destacados de la
época serán Lorenzo Ghiberti, Andrea Verrocchio, Donatello, el
taller de los hermanos Della Robbia, que introducen la cerámica
vidriada, utilizándola en decoraciones de edificios, Jacopo della
Quercia, Desiderio da Settignano y Bernardo Rossellino.
Arte africano
El arte africano es un conjunto de manifestaciones artísticas
producidas por los pueblos del África negra a lo largo de la historia.
El continente africano acoge una gran variedad de culturas,
caracterizadas cada una de ellas por un idioma propio, unas
tradiciones y unas formas artísticas características. Aunque la gran
extensión del desierto del Sahara actúa como barrera divisoria
natural entre el norte de África y el resto del continente, hay
considerables evidencias que confirman toda una serie de
influencias entre ambas zonas a través de las rutas comerciales que
atravesaron África desde tiempos remotos.
ARTE LATINOAMERICANO COLONIAL:
Se refiere al desarrollado en los países de América Latina durante el
período histórico correspondiente al proceso de colonización por parte de
la corona española, entre los siglos XVI y XVIII. Se caracterizó
básicamente por la imposición violenta de los elementos de catequización
y adoctrinamiento en los asuntos religiosos relacionados con el poder
ideológico derivado de la Iglesia Católica y que se expresó, en términos del
arte, en influencias de los estilos románico, barroco, manierista, rococó y
algo de gótico, tanto en la arquitectura como en la pintura y la
ornamentación de iglesias y catedrales. Sin embargo estos estilos
europeos fueron adoptados o transformados por los pueblos aborígenes
colonizados, que en muchos casos agregaron o yuxtapusieron elementos
propios de sus culturas en un proceso de sincretismo cultural, es decir, que
de alguna u otra forma seguían expresando, a través de formas artísticas
foráneas contenidos camuflados de sus creencias ancestrales, siendo de
particular importancia artística y estética las obras que en este sentido se
desarrollaron en países como México y Perú, dando paso a un nuevo estilo,
que en la historia del arte se conoce como barroquismo latinoamericano.
A finales del siglo XVIII y a inicios y hasta mediados del siglo XIX, en
general, se llevan a cabo los procesos de emancipación e independencia de los pueblos
latinoamericanos respecto a la dominación española. Las ideas de la ilustración y de los
enciclopedistas franceses, así como los elementos de modernización e industrialización que se
consolidaban en Inglaterra y Norteamérica, influyeron en forma significativa en la concientización de
que los pueblos latinoamericanos tenían derecho a la autodeterminación e independencia, lo cual hizo
posible que surgieran una serie de líderes o caudillos que supieron interpretar esta nueva realidad y
supieron ganarse el apoyo de gran parte de la población
mestiza, indígena y negra, así como de los criollos
acaudalados e inconformes con el seguir pagando tributo a
la corona española.
Pintura de América Latina
El arte latinoamericano es la combinación de las
expresiones artísticas propias
de Suramérica, Centroamérica, El Caribe, y México, así
como también de latinoamericanos viviendo en otras
regiones.
El arte latinoamericano comienza propiamente con la
llegada a América de los pueblos latinos procedentes de
Europa (españoles, portugueses, italianos, franceses). Si
bien había previo a la llegada de los latinos un amplio
desarrollo artístico de parte de las distintas culturas
indígenas que habitaron el continente antes de la invasión española en el siglo XVI, y éstas
influenciarían los desarrollos artísticos regionales, no se les puede catalogar como 'latinoamericanas'
ya que estos pueblos no hablaban una lengua latina, sino una lengua propia. El arte de estos pueblos
se cataloga, más bien, como precolombino.
Siglo XIX
El eurocentrismo artístico, basado en el clasicismo y el realismo enseñado en
las varias academias fundadas por los nuevos estados (ver Academicismo),
continuó su predominio tras la independencia. Entre los artistas de este
período se puede mencionar a los argentinos Eduardo Sívori, Prilidiano
Pueyrredón, Ernesto de la Cárcova, los chilenos Pedro Lira y Alfredo
Valenzuela Puelma, los brasileños Victor Meirelles y Manuel de Arauújo
Porto-Alegre o los mexicanos Santiago Rebull y José María Velasco, entre
otros.
Siglo XX
La Escultura
Dos corrientes pueden apreciarse en la escultura latinoamericana del siglo
XIX, la popular de los imagineros, íntimamente ligada a la tradición
hispánica y la erudita de la Academia, que fueron creándose en las
distintas repúblicas a lo largo del siglo.
La primera se deja sentir sobre todo, hasta mediada la centuria, para
finalmente quedar desplazada ante la nueva tendencia escultórica, que
con eclectismo impersonal trata de asimilar las enseñanzas europeas.
En Quito, uno de los principales centros productores de escultura religiosa
del período colonial, prolongan la tradición de los imagineros durante la
primera mitad del XIX.
En México, la labor del arquitecto y escultor Manuel Tolsa, se concretó, en
el dominio de la plástica en algunas encomiables obras como; la estatua
ecuestre de Carlos IV, el Ciprés de Puebla y los grupos que decoran la
Catedral, como director de la Escuela de Bellas Artes formó a una serie
de discípulos, que se encargarían de mantener la tradición de los
imagineros coloniales durante el primer tercio del siglo.